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Diamante DementeCOLECCIÓN PRIMIGENIA
Tatiana Mejía Escalante
DIAMANTE DEMENTE
Tatiana Mejía Escalante ©
Prólogo: Yenny León
Obra de portada: Clytie / Artista: Evelyn de Morgan
Editor: Andrés Pascuas Cano
Cuidado de textos: Andrea Vergara G.
Diseño y maquetación: Nueve Editores
Primera edición digital, abril 2020
www.nueveeditores.com
Quedan prohibidos, dentro de los límites establecidos en la ley, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, ya sea electrónico o mecánico, el tratamiento informático, el alquiler o cualquier otra forma de cesión de la obra sin la autorización previa y por escrito de la titular del copyright.
“Soy la que soy.Casualidad inconcebible
como todas las casualidades.”
“Pude haber sido yo misma, pero sin que me sorprendiera,lo que habría significado
ser alguien completamente diferente.”
“Una del montón”Wislawa Szymborska
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DIAMANTE DEMENTE
PRÓLOGO
Atravesado por una fiebre ósea, Diamante Demente es un poemario que explora diversas formas que el espíritu adopta en la palabra para dejar de mentir. Hay en sus versos un cataclismo interior insostenible, una náusea constante.
La autora crea imágenes diversas que indagan por un horizonte que permanece en llamas, santidades perdidas inexorablemente y la eternidad en el sueño contaminado del arcángel. La lectura de estos poemas esclarece que en la muerte hay un hambre de amor inextinguible que nos entrelaza con la certeza de que sol y sombra se pertenecen.
En el Arco y la Lira (1956), Octavio Paz afirma que “el poema no solo proclama la coexistencia dinámica y necesaria de los contrarios, sino su final identidad”. Y es así como Tatiana Mejía Escalante parte de un desarraigo primordial, un “viaje a la puerta de las palabras”, para establecer fuertes contrastes en lo aparentemente contradictorio, e indagar por el sonido de lo mortal en un Edén ardiente.
La idea que sustenta esta obra es que no se puede estar en el mundo con palabras represadas, pues “hay algo allí donde la sensatez pierde los estribos / el canto de los miedos que has cultivado desde la niñez / la certidumbre de la sombra creada por el sol / el hambre de amor en el abismo de la muerte”.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Pero también hay una promesa de transmutación constante, esa que indica que el oleaje que inunda la piel cambia constantemente, pues: “Un día seré otra y otra / y la que soy hoy observará el mundo desde lo más profundo de mí misma”. Y es en este cambio en el que se da una pérdida continua que requiere de una fuerza tremenda de autoadaptación: “He perdido carne / desnuda soy un esqueleto / huesos que narran una historia”.
Antes que proclamar certezas, este poemario deja al lector suspendido en grandes preguntas (“¿Quién sobrevive en este segundo místico?”) y lo llena con la plenitud de la incertidumbre que estas proponen, la cual se dibuja en imágenes poéticas de corto y largo aliento. Finalmente, puede decirse que estos poemas proveen una sensación de renacimiento difícil, arduo, de fracasos inconclusos en medio de una arena desértica que brilla en la sangre.
Yenny León
Diamante Demente
Tatiana Mejía Escalante
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Mi espíritu está vacío
Enséñame a encender el cigarro en la orilla del crepúsculoLa marea sube y la fiebre arremete contra mis huesos
Nadie percibe el baile de las sombras, la mano que robaArranco tus miradas, las que jamás comprenden mis ruegos
Paso a paso el barro toma su formaEl cincel es pesado, fatigante, la estructura se fragmenta
Las luces nocturnas enceguecen a los murciélagosTú pierdes el equilibrio en el desolador cruce de caminos
Basta ya de seguirmeOcultaré mis voces si es necesario
Mi espíritu está vacío y miente a la luz de una vela.
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DIAMANTE DEMENTE
Evitar la náusea
El cataclismo interior es imparable
La ruleta del tiempo implacable con los sueños
Intentas resguardarte sin hallar la manera
Cotejar el número de arrugas en tus ojos con las horas de felicidad
Pero alguien abre la puerta y se burla de tus pesquisas
Estruendosa carcajada que congela las entrañas
Sientes el crujir bajo tus pies, la tierra que se agrieta
Espejismo o realidad te sientes nerviosa, colapsada
Cerrar los ojos a veces es lo mejor para evitar la náusea.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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En un segundo
La miseria nos rodeaAltisonante como un preludio de lo que vendrá mañanaEl oleaje rápido cubre el horizonte humedeciendo el campanario
Te regocija saber que todo acabaráAún no cantes victoria
Es temprano, el gallo canta y mis ojos se niegan a abrirseEl gotear de mi sudor tiene un ritmo diferente
Los relojes han retrasado su marcha La vida y la muerte en un segundo.
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DIAMANTE DEMENTE
Postigos del averno
Nace la tempestad en los ojos de mujeres y hombresEl oleaje arreciaLa lujuria alimenta las mañanasLlegan con sus alas maltrechasSu inexorable olor a santidad perdidaEsconden la cabeza entre las piernas, gimiendoHan de despertar en los postigos del avernoDulce pesadilla.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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El sueño de un arcángel
Los demonios duermen en mi cabezaDebo mecerme en el columpio para hallar serenidad
El meridiano arrecia con su exaltación acostumbradaLas canicas de los niños ruedan como miradas vigilantes
Piel adentroFuria afuera
El agua de la ciénaga suele aliviar las heridasTurbulenta sensación de locura
Si pudiera extirpar esta espesura de mi menteRobaría el sueño de un arcángel para masturbarme con él.
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DIAMANTE DEMENTE
Pequeño gorrión
El frenético reflejo en el espejo Destroza la realidad que he conocido
Hambre enraizada bajo el brazoCiudad desierta hija de la muerte
Una estampida de huesos salta de mi extravíoIncompletos seres sin nombre y sin futuro
Leo libros sin parar hasta que me duelen los ojosPalpitantes segundos donde un error es un suspiro
Si el cálido amanecer viviera en mi pechoUn pequeño gorrión anidaría conmigo.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Bendiciones
El manantial busca a la sedMi cuerpo encuentra el hastío que sucede al hambre
Los grillos han cesado su cantoMis ojos se cierran cansados
En la mañana el anciano tocará a mi puertaLe brindaré un bocado de pan y algunas monedas
Las bendiciones no siempre son sacrasEl amor, pocas veces correspondido.
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DIAMANTE DEMENTE
Una mosca
Una mosca penetra por mis fosas nasalesBuscando la idea que tuve y nunca compartí
El arado precede a la erosión
Con alborozo interior observo el autobús que arriba Zumbido interminable me golpea los ojos
Llegarás con la próxima tormenta, goteante
El amor antecede al hastío.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Certezas suspendidas
Existes más allá de tus afligidos ojos mirando el horizonteTantas certezas suspendidas en las noches de la ciudadComo péndulos atravesando el alma ignominiosa
Al ritmo del corazón el mar susurra tus secretosAminora el paso y acaricia tu vida en pensamientos
Hay algo allí donde la sensatez pierde los estribosEl canto de los miedos que has cultivado desde la niñezLa certidumbre de la sombra creada por el solEl hambre de amor en el abismo de la muerteLa mordaz caricia de tus demonios.
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DIAMANTE DEMENTE
Cicatrizante
Se insinúa falaz la felicidadAl morder una manzana bajo el eclipse
Percibes el misterio Huyes cantando por lo bajo plegarias lastimeras
Envuelta en la bruma Me encuentras con hastío ante las súplicas
Te inyectas mi pensamiento cicatrizante
Eres el largo beso de la ignorancia.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Agua primigenia
El agua primigenia acude por su cauceLava las culpas que no siento y me atribuyen
Siento sed y nadie me ofrece de beber
Hay un arpón habitado por recuerdosObsérvame en la vieja fotografía porque ya no volveré.
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DIAMANTE DEMENTE
Renace tu piel
Apacigua el demonio habitante de tu pecho marchito
Adelante te esperan las puertas abiertasCaminos de luz para tus fangosos pies
La odisea no acaba con tus ojos cerradosNecesitas bombear tu corazónCruzar el puente coralino
Nada como un animal salvaje atravesando el ríoVerás cómo renace tu piel de diamantes.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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El difunto
Es el tiempo de lavar el cuerpo del difunto
Los bedeles están listos con la cabeza en alto
Las plañideras rocían con sus cantos el cielo estival
La muerte sonríe a quien recién la besa
Como una canción de cuna llegando a su final.
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DIAMANTE DEMENTE
Seres oscuros
La magna calma esperando respuestasLa multitud
El candelabro partiendo la cabeza asesinaGotas de lluvia borrando huellasResonante silencio tras la fiesta de seres oscurosLas fauces exhalando para tragarnos
Yo, suspirando.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Sangrar cristales
Viajo a la puerta de tus palabrasSe abre el infinito
El firmamento es claro y las aves vuelan
Un grito atraviesa mis sentidosSe cierra el universo
El éter es un cúmulo de miedo
Resbalo escalón tras escalón Golpeándome la cabeza hasta sangrar cristalesTodos están aquí y observan el estentóreo silencio
Hilvano recuerdos sin sentir el tiempoYazgo a mitad de la nada para incorporarme imperfectaIntacta sensación de abandono
Imploro para que no desaparezcas.
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DIAMANTE DEMENTE
Grito herido
Afilo la navaja en mi mejilla Sobre el escritorio, libros
Sonajas en la copa de un árbolEl sol despertó jugando en el asfalto
El silencio de la música ha llegadoCon el tren cargado de miseria
La naturaleza es un grito herido de la belleza.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Mundo paralelo
Interrogantes sobre la ciudad La multitud hiberna con sus tribulaciones a cuestas
El profeta anuncia la caída de hojas secasLa victima apunta su arma
Lenguas que no comprendo siguen mis huellasMi máscara hoy es más fuerteMi máscara evita que me encuentres
El templo conserva su atmósferaOraciones lanzadas como monedas al pozo
Repetimos el mantra La palabra viciadaEl antídoto perdido
Dejo mis ojos en la mesa junto a la camaObservaré tu despertar en un mundo paralelo.
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DIAMANTE DEMENTE
Salvaje
Inmenso es lo que mis sentidos desconocenSalvaje hazme el amor sobre la mesa
Arranqué una a una mis uñas de un tirónSalvaje me apuñalas por la espalda
Palpitante me esperas, pero yo nunca regresoSalvaje me ahogo en tus preguntas
Los pedazos de cordero asoman de la mochilaSalvaje se me corta la respiración
Golpéate el torso con la cadencia del jazzSalvaje es la realidad cuando estás despierta
Nauseabunda atmósfera invade la habitaciónSalvaje es el aguijón que guía la conciencia.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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He asesinado a mi Dios
Ellos llegarán pronto persiguiendo mi olor a orín secoTantas veces quise huir destruyendo el reflejo en la laguna
Alterada escudriño en mis bolsillos Estampillas Monedas Número telefónico equivocadoVacío corazónAtraviésenlo con sus lanzas en medio del cultivo Blanca conciencia¿A dónde irán mis súplicas ahora que no creo en ti?
He asesinado a mi Dios Vuelve, dulce fe.
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DIAMANTE DEMENTE
La lupa del poder
No quiero confundirteDigo, nombro, explico, lanzo palabras anodinas adornadas con esmeroPretendo ser interesante bajo la lupa del poderEvitando que acribillen mi atribulado pensamientoÉl quiere vivir, fluir, explorar, encenderteSer fragmentos sueltos de ideas circundantesViajando a través del tiempo para asirse de las pieles.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Las ruinas de mi ciudad
Observo las ruinas de mi ciudadDespojo humano
Un hilo de sangre rueda por mi oídoAnunciando la lejanía de la verdad
Nos rodea el deseo de estar Como los discursos aprisionados en el pecho
Siniestras almas en penaLa marea mengua con su llegada
Cada pétalo tiene un aroma diferente
Abarrotada estoy tras el espejo sin reflejoLúgubre sensación de perder los colores del amanecer.
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DIAMANTE DEMENTE
El transcurrir
El transcurrir fantasea con lo imposible
Descansa en mi rebujado cabello
El mar baña las miradas ofreciéndoles un viaje
El pájaro de la mañana canta
Anunciando la llegada de lo desconocido.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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El sonido de la muerte
Entreveo un jardínMe conduce hacia el espectro de los secretos
Suelo pedir al universo bienaventuranzaDirigir mi mirada al firmamento y suplicar
En la soledad se escuchan pasosPalabras suaves pronunciando mi nombre
Bordeo la línea que divide la luz de la sombraEncuentro el sonido de la muerte tras la puerta de mi cuarto
De mis manos nacen floresDe mis pies nacen ausencias
Diviértete jugando con mi cabelloTe lo regalo para acariciar tu sonrisa.
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DIAMANTE DEMENTE
Baila conmigo
ConfesiónEdén ardiendo en llamas
Seres furtivos en el bosquePiedras destilando tristeza
Un rumor en el firmamento ahuyenta a los gorrionesVoces predicando la verdad
El cuchillo despedaza la carneBondad desperdiciada en una bala
Dormida soy un ángel que tiene pesadillasEn la enfermedad o en el éxtasis, ya no despertaré
Despedirse para siempre es morir un pocoBaila conmigo en las nebulosas
Soy gota náufraga en el océanoInmensa soledad confundida en el bullicio.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Un soplo de secretos
Deseo hallarte en la noche más níveaAdornar tu cuerpo con estrellas de mar
Un nenúfar será el nido para nuestros besosEl horizonte un soplo de secretos
Si existes sentiré tu frío aliento en mi cuelloUna turba de alcaravanes posándose en mi balcón
Hay un recipiente donde se ocultan las mentirasEs el velo que cubre el universo
Me alimentaré de agua y tierraVerás qué hermoso crece mi cabello.
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DIAMANTE DEMENTE
Mi primer llanto
En la periferia hay autos circulando a ninguna parteCon rapidez atraviesan la calidez del arcano
Hojas secas son ahora mi lechoPantano alimento de los dioses
Observo el suceder de las horas a través del cerrojoLa mirada asesina saboreando la dulce madrugadaAtribuyo a nadie el miedo guardado en la memoriaAvanzo a ciegas por la aristaAl final me esperan con sus fauces abiertasQuienes no conozco, pero recuerdan mi primer llanto al nacer.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Mordiendo estrellas
Mordiendo estrellas me asfixié con los silenciosEl piano en la antigua casaPiedras en mis zapatos
Mordiendo estrellas sentí la mano que subió por mis piernasY de un tirón arrancó mi esperanza
Mordiendo estrellas Te esperéDulce futuro.
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DIAMANTE DEMENTE
De agujas adorné mi cuerpo
Colecciono semillas, las guardo en mi bolsilloPalpito en la noche más sombría
De barro construí la barca para navegarte
Cubro mi cabello de bálsamo sacro, maquillo mis defectosCada árbol tiene un nombre; sus frutos, una señal
De hierro hice el martillo para acariciarte
Remiendo mis enaguas con el hilo rojo del destinoSin compasión las huellas siempre vienen tras de mí
De espadas erigí el lecho para tu sueño
Medito en la explanada, la distancia entre la emoción y la razónHay segundos suaves cuando te encuentras cara a cara con el viento
De lluvia inundé mis ojos para observarte
Esculpo mi lápida, escribo cartas que nunca nadie leeráGolpea profundo la felicidad por mi espalda
De agujas adorné mi cuerpo para tu llegada.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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El frío hace caer los dientes
Si me hallas en mitad del bosqueSusúrrame al oído palabras misteriosasNecesito explorar los caminos del espírituArrebatar a las tinieblas mis últimos sueñosEnvuélvete con mi fragancia antes de la media nocheMe desvanezco a cada instante y no recupero mis certezasEs tan sencillo perder el equilibrio de la respiraciónAtenazando íntimamente los sonidos del vientoQue el frío hace caer los dientes como gotas congeladas.
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DIAMANTE DEMENTE
He perdido
He perdido carne Desnuda soy un esqueleto
Huesos que narran una historiaMe nutro del aire, la esperanza, el silencioMis rodillas no resisten los golpes contra el sueloLos perros me lamen
Se alimentan de mi sangreCada lunar se desvanece
Cada poro se cierraHe perdido mi esencia
Sin mis versos soy cadáver Partícula en el aire sin destino.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Las cortinas de mis ojos
Si vienes a verme a través de la ventanaCerraré las cortinas de mis ojos
ExtraviadaIlustro tu cuerpo desnudo en la memoriaGuardo tu arrugado retrato bajo la almohada
Ayúdame a impedir este martilleo en la concienciaAlada furia que resbala por mi espalda
Reconocerás mi olor en el pañuelo que cubre el pensamiento.
· 39 ·
DIAMANTE DEMENTE
Dientes amarillos
Cortaron mis párpadosDelicados dedos que arrancaron mi inocencia
Supuse que vendrías corriendo Con flores marchitas en las manos y dientes amarillos
Temí que desaparecieras en la espesura del tiempoAgazapado para siempre.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Aroma natural
Con ojos cerrados extiendo las manos hacia la montañaAmorfas nubes se burlan de mis sospechasCada ocho días cambio mis vestiduras por ropas nuevas Conservando la mugrienta imagen de mí mismaEstoy bebiendo leche humeante mientras me rechazoNadando en ella advierto una larga pestañaArcadas suben por mi tracto digestivo, culminan en la aceraLa pestilencia es mi aroma natural, acércate a mi abrazo¿La conciencia acaso duerme cuando la ignoras?
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DIAMANTE DEMENTE
Arrancarte la piel
Para caer solo necesito extender los brazos al horizonte
Sofocarme en el ocasoBatiendo los párpados como mariposasMurmurar en secreto mis deseos
Hay tantos como yo, ausentesTodos codician descender
Es dolorosoComo arrancarte la piel en medio del fuego.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Señal de la Cruz
Mis rodillas duelen como un lamentoEl cielo se oscurece como el pensamiento de un niño
No podré avanzar, inmóviles piernas me lo impidenTodo lo que he escrito, ¿son falacias o verdades?Confesaré ahora frente al oratorio improvisado
Oraciones lapidadas en la infanciaCombates marcados en mi frente para siempre.
Dolorosa expropiación de mis batallas.
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DIAMANTE DEMENTE
Nunca supiste quién fui
Peces resbalan por mi cabelloMi cuerpo aturdido desvaneceDesconozco a dónde irHay tantas puertas Y no encuentro la salida
El viento gélido zumba en mis oídos
Has venido a verme a través del féretroNo reconoces quién soy pues nunca supiste quién fui
Mantente allí donde el recuerdo empieza a desdibujarseTal vez algún día me descubras.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Duermevela
Un ave asiste cada nocheAl ritual de mi cuerpo abandonadoCaricias entre las piernasUn beso a la derivaY una puñalada en la conciencia.
El signo de la cruz marco en mi frente
Recíbeme en tus arcas que desciendoDescompuesta y amarga duermevela.
· 45 ·
DIAMANTE DEMENTE
Sírveme más letras
Ruborizada permito a mis pupilas susurrar Lamer la imagen que tengo en la memoriaEscarbar con mis uñas el pozo séptico del amorMenear mi cintura tropezando con tus ojosSírveme más letras para articular lo que sientoTarde se hace en el bosque, frondosa esenciaHelando, mis dedos acompasan el temblor.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Tejiendo las horas
A la espera de tu presenciaEstuve tejiendo las horas con esperanza y tedioHilos de colores adornaron mis pensamientosDieron calor a las mañanas
Los pájaros acariciaron las semillasAbandonándolas en mis hombros
Las horas se hicieron díasLos días profundos años
Mi cuerpo se hizo viejoEl papel de las cartas ambarino
Mis ojos se cerraron para siempre una tarde de frío.
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DIAMANTE DEMENTE
Mi pasado
Necesito regalarme al arroyoAcariciar mis curvas al ritmo del díaDespojarme de las telarañas que tejen mi cabelloDarte la mano, corazón vagabundoNecesito mirarme a los ojos En el espejo roto de mi pasado.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Tu mirada
Una mañana brumosaAcordoné mis sentimientos con rosas
Me dije a mí misma que había alguien dentro de míSupuse habitáculos y despedí olor a hierbabuena
Era la hora del adiós y del abrazoEl instante previo a tu mirada.
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DIAMANTE DEMENTE
Ellas viven conmigo
Ven, acércateRevisa bajo mi piel el oleaje que me inundaEl repiquetear de las ideas en mi cabeza
Ellas viven conmigo, las perciboQuieren apoderarse de mi cuerpo como vehículo de vida
Un día seré otra y otraY la que hoy soyObservará el mundo desde lo más profundo de mí misma.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
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Conoceré la libertad
Si retornasPermaneceré en el alféizar de la ventanaCon un libro abierto sobre mi vientre
El viento ululará entre mi cabello tejiendo historiasLos pétalos de las flores danzarán a mi alrededorBañando mi cuerpo con su olor, acariciándome
Mi mente conocerá la libertad.
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DIAMANTE DEMENTE
Ideas
Rebotan las ideas contra las paredesDesgranándose mis labios en la manchaAbriéndome como flor naciente en el invierno
Sírveme agua que tengo sed.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 52 ·
Néctar amargo
El combate inicia despacioAfuera la tarde cae sobre las efemérides
Sé que vienes deprisa sin dirección aparenteNo encuentras la puerta, todos los caminos son iguales
Bebo la botella, a tragos largos, para olvidar el mutismoNéctar amargo hacia una plácida alucinaciónVeneno incendiario viajando por mi cuerpo.
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DIAMANTE DEMENTE
Años
Si me preguntas cuántos años tengoTe pediré que cuentes cada lágrima vertidaA causa de las heridas en el almaMi cabello aún no es blanco pero la piel está ajadaY las palabras brotan cansadas del pecho
Se hace tarde y en la espalda reposa la experiencia
Enciende ahora las velas para darle calor a nuestro corazón.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 54 ·
Su espíritu giró en la letrina
El viento acarició su cabelloLa estremeció con palabras de amor Alguien la esperó a la vuelta de la esquinaOtro le regaló la llave y un golpe en las costillasTropezó en el desnivel del bañoY su espíritu giró en la letrina.
· 55 ·
DIAMANTE DEMENTE
Hambre
El hambre habita los díasSe apodera de las ideasAsesina los pensamientosCorroe los sueñosEl hambre habita los díasComo parásito ávido de tu existir.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 56 ·
El destino que desconozco
Permanecer en el día a pesar de fragmentarme El vaivén de los pensamientos atardece con las palabrasHay injusticia en el destino que desconozcoCruda realidad amañada en la mirada de los otros.
· 57 ·
DIAMANTE DEMENTE
Está en sí misma
Peregrina descalza por extensos caminosAterida en su desnudez tempranaEllos se mimetizan en las paredes, el asfaltoAbren sus fauces a su paso mordiendo sus lunares
No sabe a dónde huir, está en sí mismaNo logra escapar, está en sí misma
Arden las entrañas Obstruye la garganta
Suspende el latidoLas articulaciones se doblan y ya de rodillas
Perece a la intemperie de su compañía.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 58 ·
Tarde es ya para la culpa
Balbuceen al ritmo que marca el reloj de arena
Amantes que llegan a usurpar mi sensatezAcarícienme entre las llamas, tarde es ya para la culpa
El sonido del saxofón es mi voz perdidaEn la cima de los sentimientos.
· 59 ·
DIAMANTE DEMENTE
Sucumbir
Me extingo
Agotamiento en la piel, en los ojosDebo descansar, detenerme, respirarSentir el roce del viento en mis mejillasAbrazarme las piernas y dormirSucumbir a la caricia del vacío
Desaparecer.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 60 ·
Espejismos rotos
Viajo por la ciudad de los sueños
Espejismos rotos cortan mis dedos desnudosHe abandonado mis sandalias al borde del ríoPara buscar la saciedad de mi hambre
El agua se seca y el torrente no fluyeEl agua se seca y mi cuerpo con ella.
· 61 ·
DIAMANTE DEMENTE
Un lugar sin bruma
Descubro un punto en la paredEn el cual cada instante se hace enormeQuizás pueda entrar en él Disminuirme y desaparecerDespertaría en un lugar sin brumaDonde la respiración es limpia El pensamiento sin misteriosAcaso existe la distancia y la cercaníaEn el mismo territorio En medio de mi existencia.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 62 ·
Ausencias
Yo camino hacia la luzBuscando el olor de las flores
Llueve locura y miedoLa luna acompaña mi deseo
Quizás mañana me recuerdes másAunque mi presencia es ausencia hecha misterio.
· 63 ·
DIAMANTE DEMENTE
Duele ser
La brújula ha extraviado el NorteDesconozco el paisajeNadie espera mi regreso
Pende de mi cuello tu olor a viejoBajo mi cabello he escondido nuestro último beso
Al amanecer escucho el canto de los grillosLa turbación, el remolino, la creciente ansia
Pierdo el sentidoMi imagen fragmentada
Duele ser.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 64 ·
Horizonte
Fui yo la que agitó la mano despidiéndoteFui yo la que sepulté los últimos vestigios de la esperanzaFui yo quien a media noche descubrió la maldad de tu corazónFui yo quien escribió las cartas que nunca fueron enviadasSoy yo quien mira a través de la ventana el horizonte.
· 65 ·
DIAMANTE DEMENTE
Mujer anfibia
El fulgor del día trae como obsequio la mirada perdidaTu pánico traducido en cólera
A dónde irás mujer anfibia Que te sepultas al amanecer en el ojo del mundo
Espero aquí salvaguardada tras la puertaQue intentas derribar con tu martillo
Mi cabello de vidrio está entre tus manos
Lánzate, el delirio te espera.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 66 ·
Coronas de flores
Abrieron el sepulcro de las mujeresTejieron coronas de flores blancas para adornar sus cabezas
Las lágrimas de cristal se rompieron rasgando la pielLa sangre brilló
El espejo pronunció los nombres de la bellezaEl coro celestial entonó la plegaria para salvar nuestra legión.
· 67 ·
DIAMANTE DEMENTE
Una y otra vez
En las calles hay ojos vigilantesUñas largas que rasgan tu piel mientras avanzasPiedras para tropezar una y otra vez hasta morirUn hoyo que te espera como un abrazoMagia que solo tú percibes a la hora de dormir.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 68 ·
Como un árbol
Golpeé una, dos, muchas veces su féretro Un aroma a flores anegó la atmósfera
La sangre que corre por mis venas se fecunda en su recuerdo Viene y va como un árbol en medio del viento.
· 69 ·
DIAMANTE DEMENTE
Semilla que germina
Albergas en tu puño la historia del mundo Cabalgando al lomo del caballo blancoEn tu cuerpo la conciencia del futuroAgriétate, vierte tu dulce olor sobre los desahuciadosEres semilla que germina.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 70 ·
En la rivera
En la pradera existen colores sin sentido Que apuñalan la imaginación iniciando el díaLa boca busca el grito El grito acoge a la lágrimaCada árbol es una historia arcaica Cada hueso, un muerto sin nombreEn la rivera existe un olor inexacto Que ahoga los indelebles ideales de la humanidad.
· 71 ·
DIAMANTE DEMENTE
Flores
Es cálida la despedida del pájaro heridoAtraviesa mis sentidos con alas cansadas
Este olor que cargo desde mi nacimiento no me gustaEs dulce y amargo como las flores que nadan en el río
Los cantos despiden a quien murió ayerAbrazando el recuerdo en el nido.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 72 ·
Saltar la barda
Acerca tu mano a mi boca Palpa mis siseos casi imperceptibles
Hay una ventana aquí muy cerca de míMe llama con su inflamable brillo su destino es desconocido
El aleteo de un murciélago despierta mi letargo
Ven, ayúdame a saltar la barda.
· 73 ·
DIAMANTE DEMENTE
Exhalación
Suplicante yacía la mujer al costado del caminoIngrávida con sus manos atadas a la espaldaNadie quiso detenerse auxiliarlaEl polvo cubrió su rostro le despojó su nombreAhora es solo un silbido más en la exhalación de la noche.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 74 ·
Voces calladas
Ojos cerrados descubren el olor del diluvioCaen gotas victoriosas a lavar el territorio
Tanto dolor lleva el afluente entre sus piedrasTanta sangre lleva el viento con sus quejas
La cabeza duele como una tormentaDe voces calladas al final de este delirio.
· 75 ·
DIAMANTE DEMENTE
Pájaro de la vida
Amor y odio Trenzan el pájaro de la vida
Regálame el último canto de la nocheEl primer suspiro de la muerte
Tras de ti Llega el coro de infantes sin tierra cargando la esperanza.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 76 ·
Sepultando esperanzas
En la soledad de mi puebloSe encuentran mensajes colgando de los techosPálida arena, agua mustiaUn árbol milenario que se secaNiños ancianos que no saben jugarMujeres sepultando esperanzas.
· 77 ·
DIAMANTE DEMENTE
Saltar sobre el miedo
Florecen las estrellas Es el olor a campo abierto quien invita a las presenciasHan sido años de dolorPestilente guerraYa es el momento de saltar sobre el miedoPara habitar el presente y los parajes.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 78 ·
Señales
La constelación lleva su nombreCada dos noches lanza señales y se apaga
La corriente glacial envuelve los huesosEl secreto sonido de los violines llena la atmósfera
En el horizonte aún brillan las palabrasSuplicando misericordia al enemigo.
· 79 ·
DIAMANTE DEMENTE
Nadie recuerda
Nadie recuerda la puerta rojiza Los peces deslizándose por sus bordes
Mujeres cantando despedidasRopas tiradas por el camino
Nadie recuerda la belleza del puebloLa reemplazó el miedo con olor de ausencia
Ya no se escuchan las risas de los niñosLos besos de los enamorados
Es una historia que se acostumbraA donde mires en mi país
Nadie recuerda qué pasó aquí.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 80 ·
Lágrimas en los pies
Viento susurrantePálidos meses derraman lágrimas en los pies
Cantos de matronas anegan los caseríosContando historias de aquellos que aún esperan
Hombres y mujeres de mirada clara y gritos ahogadosCon espinas atravesadas en el alma.
· 81 ·
DIAMANTE DEMENTE
La puerta del futuro
¿Quién sobrevive en este segundo místico?
Antaño los pasos de la muerte se escuchaban como ráfagasHoy la voz de los ausentes nos recuerda lo que fuimos
Marchitas miradas en la puerta del futuro.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 82 ·
Mis lágrimas
Un hombreEl ritmo de los árboles cesaUna niñaEl olor a muerte me ahogaUn niñoArden las entrañasUna jovenFosas comunes… adiosesUn jovenFotografías en la memoriaUna ancianaTe imploro no nos olvidesUn ancianoEncuéntrame en tu recuerdoUna mujerMi país, mis sueños, mis lágrimas.
· 83 ·
DIAMANTE DEMENTE
Irreconocibles
Lapidar una serpiente, asesinarlaLlorar por ella o por ti es lo mismoAmbas han mudado de piel mil y una vez hasta ser irreconocibles.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 84 ·
No verte más
En el ir y venir de las olasLas caracolas despiden brillos y oloresLos temores se hacen mansosLas fantasías enjuagan sus imperfecciones
Con el paso de la cosechaMis pestañas abarrotan la visiónPara no verte más.
· 85 ·
DIAMANTE DEMENTE
El recuerdo
Dormida bajo el agua empuñaste el recuerdo Él intentó escapar braceando con fuerza
A veces el frenesí no es suficiente para vivir
Alcanzaste con tus manos su luzUn cuerpo desfallecidoY te lo marcaste con fuego Piel adentro entre las piernas.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 86 ·
Al fin desaparecer
Tierra brota de mi pechoPalpita, se mueve, atraviesa
Fuego, envuélveme catártico y mordaz Que el tiempo no da espera Y mis dientes están a punto de caer
Agua, lávame esta pesadilla De piedras preciosas en mi garganta
Aire, llévame donde nadie ha estadoPara al fin desaparecer.
· 87 ·
DIAMANTE DEMENTE
Postales
Rotas las postales de amor las palabras mueren
Golpeo mi cabeza contra el pavimentoEl pasado me increpa
Te entrego los minutos que me quedanVida imploro tu presencia
Devenir que se repite en las huellas dactilares del planeta.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 88 ·
Aleteo
Estabas tan cerca aspirando mi olorY con el suave aleteo de un demonio
Pálidamente abrazaste mi frío.
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DIAMANTE DEMENTE
Acaricias tus temores
Campanea la sonrisa de los niños bajo el solEl hambre crece en los cuerpos, en las mentes
Qué dirías si observaras mis costillas traspasando la pielTerminarías de corroer la poca carne que me quedaChupando tus dedos al acabar el manjar
Sé que sibilas escondido tras la puerta de mi cuartoY acaricias tus temores observándome desnuda.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 90 ·
Mi invierno
He fallecido incontables veces y renacido pocas
Este cáliz lleva tu nombreSi vuelves, ahogaré mi placer para que no lo puedas ver
Rabia arranca el deseo indomable de mi boca
Merezco quemar mi piel en tu hogueraFrente a la contemplación del tribunal inquisitorio
Lanza tus palabras lastimeras sobre mi pechoTe atraparé para siempre en mi sexo invernal.
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DIAMANTE DEMENTE
Custodiando tus quimeras
Dulce amor Bésame ahora que el torrente sanguíneo se desboca
Truena el alma en el límite con la demenciaToma mis huesos y envuélvelos
Lánzalos al océanoGuárdame así incorpórea en el entramado de tus recuerdos
Seré el pájaro de la noche custodiando tus quimeras.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 92 ·
Cuerpo hecho mar
Me acecha el deseo inversoConvengo en apartarme de ti
Soy una loba hambrientaRedímeme la voz que anhelo llamartePueril transcurrir del alma gimiente
Te palpito cada segundo del universo tiempoEsperando la hora cero salpicada por tu cuerpo hecho mar.
· 93 ·
DIAMANTE DEMENTE
Viaje al infinito
He besado tus colores hasta extraviarme en ellos
Se desatará la lluviaEl juego de los vientosEn mi pecho anidará la felicidad
Escucha con atención el sisear de mis pupilasHay secretos allí que aún no recibes
Has besado mis sombras hasta palidecer
Crece el oleaje de la certezaEntrégame despacio tu piel
Estoy despertando de un viaje al infinito.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 94 ·
Podrías…
Podrías nacer de míEnvolverte en mi vientre y atravesarme como un partoPodrías estirar tus brazos a través de mi boca y romperla en gritosPodrías albergar en mi pecho tus ciegos ojos amarillentos por los añosPodríasSi quisieras.
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DIAMANTE DEMENTE
Deseo galopante
Tardíamente he descubierto tu alma inerteSucio instante bañado de piel y lágrimasNecesito una noche más para entenderteDesbordar la corriente de emociones y besarteNo quiero temer tu deseo galopanteEs necesario amarnos esta noche habitada por soledadesEl azar nos protege del barullo de la calleDel crudo intercambio de cuerposEnvuélvete en mi olor y entrégate a los sueñosHombre naciente en el pentagrama del ensueño.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 96 ·
Desapareceríamos
Si posaras tus manos en mi sexoDesbocaría mi impulso para amarPero te das la vuelta con una carcajadaY mis cabellos arropan el deseo
Si me besaras desprevenidamenteYo arrebataría tus gemidos y los guardaría en mi regazoPara mecerlos cada amanecer con mis poemas
Si tu lengua bordeara mi espalda una nocheExpandiría mis alas sobre tu vueloY alcanzaríamos el resplandor de la luna
Si nos atreviéramos, desapareceríamos.
· 97 ·
DIAMANTE DEMENTE
Robaré tu pecho
Si me alcanzas al cerrar los ojos Cuando el ocaso llegue Robaré tu pecho para abrigarme con él.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 98 ·
Sabor a eternidad
Mi pluma mágica recorre las guaridas del devenirApresúrate
Apresa rápidamente estos lamentos
Mi razón renuncia para adoptar tu olorInminente explosión sabor a eternidad.
· 99 ·
DIAMANTE DEMENTE
Despojo
Llévame en tus brazos allí donde muere el cieloMis huesos estarán en tu mesa al final del día
Estoy lista para despojarme de todo lo que tu boca pueda roer.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 100 ·
Punzante
Este dolor de cabeza implacablePunzante, punzante
Son las visiones de ti cayendo desde lo altoEs la pálida fotografía que me dejaste
Punzante, punzanteEl último trago en la barra del barEl abandonado niño que siempre soñaste mecerMe duele en la madrugada y a la media noche
Punzante, punzanteEscucho tus pasos y la marea subiendoEscucho el incandescente movimiento del volcánLa nívea sonrisa que me has negado
Punzante, punzanteAdolezco de todo pues no me encuentro en el espejoConstruyo para no morir aún con la certeza de mi desvanecimiento
Punzante, punzante
· 101 ·
DIAMANTE DEMENTE
El flagelo me cobija con su manto¿Quién podría comprenderlo?La tarde es gris y los amantes van por caminos diferentes
Punzante, punzante
Un día verán mi desintegraciónComo en una escena de ciencia ficciónUn día mis ojos desorbitados perderán la orientación En mí país que se ahoga en sus creencias
Punzante, punzante.
TATIANA MEJÍA ESCALANTE
· 102 ·
Diamante Demente
El sibarita saluda el albor de la luna En mi cobertizo sombras juguetonas sacuden la nostalgiaConfinados están los seres sin sabiduríaAnhelando un rayo de sol para su espírituEs fácil ver el camino correcto con los ojos en las manosCantando frente al manzano surcos de hierba frescaDiamante Demente un corazón en la mitad del mundo.
Prólogo
Mi espíritu está vacíoEvitar la náuseaEn un segundo Postigos del averno El sueño de un arcángelPequeño gorrión BendicionesUna moscaCertezas suspendidasCicatrizanteAgua primigeniaRenace tu pielEl difuntoSeres oscurosSangrar cristalesGrito heridoMundo paraleloSalvajeHe asesinado a mi DiosLa lupa del poderLas ruinas de mi ciudadEl transcurrirEl sonido de la muerteBaila conmigoUn soplo de secretosMi primer llanto Mordiendo estrellasDe agujas adorné mi cuerpoEl frío hace caer los dientesHe perdidoLas cortinas de mis ojos
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Dientes amarillentosAroma naturalArrancarte la pielSeñal de la CruzNunca supiste quién fuiDuermevelaSírveme más letrasTejiendo las horasMi pasadoTu miradaEllas viven conmigoConoceré la libertadIdeasNéctar amargoAñosSu espíritu giró en la letrinaHambreEl destino que desconozcoEstá en sí mismaTarde es ya para la culpaSucumbirEspejismos rotosUn lugar sin brumaAusenciasDuele serHorizonteMujer anfibiaCoronas de floresUna y otra vezComo un árbolSemilla que germinaEn la rivera
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FloresSaltar la bardaExhalaciónVoces calladasPájaro de la vidaSepultando esperanzasSaltar sobre el miedoSeñalesNadie recuerdaLágrimas en los piesLa puerta del futuroMis lágrimasIrreconociblesNo verte másEl recuerdoAl fin desaparecerPostalesAleteoAcaricias tus temoresMi inviernoCustodiando tus quimerasCuerpo hecho marViaje al infinitoPodrías…Deseo galopanteDesapareceríamosRobaré tu pechoSabor a eternidadDespojoPunzanteDiamante Demente
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Este libro se terminó de editar enabril del año 2020.
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