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A FONDO 1 “Detalle de los paneles solares de la Planta Fotovoltaica en la ciudad de Cobija, departamento de Pando, Bolivia

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A FONDO 1“Detalle de los paneles solares de la Planta Fotovoltaica en la ciudad de Cobija, departamento de Pando, Bolivia

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Programa País Dinamarca

En general, se puede evidenciar que en muchos países de América Latina se ha incorporado a la población indígena en la ciudadanía, reestructurando a sus socie-dades a través de reformas constitucio-

nales. Es el caso de Bolivia que a través de una reforma constitucional, en el año 2004, se reconoció a los pueblos indígenas el derecho de presentar candidatos de manera directa, reconociéndolos como actores políticos y sociales con derecho propio. Los pueblos indígenas demanda-ron la inclusión de las naciones originarias en el nuevo pacto de Estado, definiendo a Bolivia como un Estado Plurinacional y por esa vía, se ha planteado el reto de un desarrollo justo, procurando consolidar la igualdad de oportunidades en un marco democrático de un conjunto de derechos en el que presiona al sistema político.

Estas demandas y presiones tienen que ver con solución de antiguos y nuevos problemas relacionados con la provisión de los principales servicios públicos, oportu-nidades de empleo estable, acceso a la producción y la administración de justicia, medio ambiente y otros del presente siglo.

Bolivia cuenta con un socio estratégico que apoya las políticas de desarrollo nacionales con la firme voluntad de contribuir a la disminución de la pobreza, al desarrollo inclusivo así como al respeto, promoción y defensa de los derechos humanos, velando por la sostenibilidad del medioambiente.

El Estado Plurinacional de Bolivia, de forma conjunta con este socio: Dinamarca, ha delineado un programa estra-tégico (Programa País) que es un importante instrumento de trabajo conjunto para avanzar en la implementación de las principales políticas de desarrollo que se ha traza-do el país.

desarrollo sustentable

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Programa País Dinamarca

Programa Pais

Danida, la agencia de cooperación danesa en Bolivia, trabaja ya 20 años en el país, contribuyendo a la lucha contra la pobreza, a favor de un desarrollo sostenible, la mejora de los servicios públicos y la promoción de los derechos humanos. A lo largo de este tiempo, a través de programas sectoriales Danida ha aportado al desarrollo de distintas experticias en el manejo sustentable de sue-los y bosques, producción agropecuaria, consolidación de negocios inclusivos y administración de la justicia.

En 2013, la cooperación danesa, con el objeto de hacer mucho más eficiente su contribución al desarrollo, deci-dió formular, conjuntamente el Gobierno, un programa más integral concurrente con las políticas del Estado denominado “Programa País”.

”El conocimiento que hoy tiene la cooperación danesa sobre el contexto económico, político, social y cultural de Bolivia ahora es más profundo. El Programa País cuenta con una visión más global, hecho que permite adelantar una mayor eficacia del apoyo danés, acorde al dinamismo

En esa línea de trabajo, el Programa País tiene los siguien-tes objetivos estratégicos: (1) Promoción del crecimiento económico inclusivo y sustentable; (2) Promoción del ejercicio a los derechos y acceso a la justicia y; (3) Promo-ción de la gestión sostenible de los recursos naturales.

Para materializar estos objetivos cada componente del Programa País es gestionado por diferentes entidades o socios nacionales – ministerios, organizaciones e insti-tuciones nacionales – responsables de la implementa-ción de las actividades acordadas en el Documento del Programa.

del país,” afirma Christian Balslev-Olesen, miembro ex-terno del Danida Grant Committee, organismo encargado de aprobar los programas de cooperación de Danida en el mundo.

Para establecer un Programa País, Bolivia y la coopera-ción danesa lograron un nivel amplio en sus relaciones estratégicas basadas en una importante confianza, pun-tualiza Ole Thonke, embajador de Dinamarca en Bolivia: “El Programa País, como mecanismo de cooperación al desarrollo es nuevo para Dinamarca; Bolivia es el primer país donde Danida está implementando un programa de esta naturaleza. Basado en un diálogo constructivo con el gobierno, casi todas las actividades se implemen-tan de manera muy eficiente, además, en un marco de valores comunes que unen a Bolivia con la cooperación danesa, como la no discriminación, participación, trans-parencia e igualdad, que son valores muy fuertes en Dinamarca. Por citar un ejemplo, la equidad de género es un valor muy arraigado en Dinamarca y que valora en alto grado los esfuerzos que realiza Bolivia sobre este tema, al igual otras áreas de trabajo como el cambio climático, crecimiento inclusivo, medio ambiente y los derechos humanos.”

Otra razón para un programa de esta naturaleza, tiene que ver con la actual situación económica del país. Se-gún fuentes oficiales Bolivia pasó de un PIB por persona de aproximadamente $us 900 en 2003, a casi $us 2900 en 2013, posicionándose como un país de ingresos medios.

Dicha situación tiene consecuencias para la cooperación internacional. Christian Balslev-Olesen señala que “… hablamos de un país donde la cooperación de Dinamarca ha estado presente muchos años y es muy importante que se concentre todo el esfuerzo en la conformación de sinergias con los sectores priorizados de forma conjunta. Personalmente creo que el Programa País ayuda en este aspecto en comparación con los programas sectoriales.”

Por su parte, el Viceministro de Planificación, Harley Rodriguez Tellez, refiriéndose al papel del Estado en la transformación del país, indica: “Trajinamos sobre un proceso de cambio destinado a una planificación de largo plazo que es la Agenda Patriótica 2025. Desde el año pasado hemos ido levantando las demandas a nivel territorial para sistematizar programas destinados a articular la economía plural. Coincidimos con la visión de la cooperación danesa porque está priorizando lo que el país ha visto como acciones integrales del desarrollo.”

El Programa País está en marcha desde 2014 y concluye en 2018. Posee características administrativas pensa-das para una ejecución más ágil. “La idea es que sea un programa efectivo y flexible, en el que, el financiamiento se adapta y alía a las políticas públicas definidas por el gobierno,” subraya el embajador Ole Thonke.

Cooperación flexible e integral:Soluciones de largo alcance

Danida durante estos 20 años de cooperación ha trabaja-do conjuntamente con diferentes organismos del Estado, entre ellos: el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, INIAF (Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal), el SEGIP, (Servicio General de Identificación Per-sonal), la UIF (Unidad de Investigaciones Financieras), el SERECI (Servicio de Registro Cívico), la Autoridad Plurina-cional de la Madre Tierra, el Consejo de la Magistratura, el Ministerio Público, por mencionar algunos. El objeti-vo ha sido permanentemente, cooperar con el Estado Boliviano en lograr impactos relevantes en sectores como el productivo, agroforestal y de administración de justicia.

El Programa País, es un Programa de Desarrollo integral y a nivel nacional, gestionado por la cooperación danesa para el periodo de 2014-2018. Tiene como objetivo contribuir a los programas estratégicos de desarrollo liderados por el Estado Boliviano, en las áreas de crecimiento económico inclusivo y sustentable, promoción de los derechos civiles y gestión sostenible de los recursos naturales.

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del municipio de Guayaramerín en el departamento del Beni. Aquí un proyecto piloto con apoyo financiero de Dinamarca ha facilitado la entrada de DETI en la zona amazónica. Los pobladores de estas comunidades viven en peligro constante por la alta incidencia de incendios forestales producidos por el “sujo”, una hierba perenne que es propensa al fuego durante la temporada seca de junio a octubre. Este fenómeno acarrea daños permanen-tes al bosque, produciendo la acidificación de los suelos, que imposibilita el desarrollo de oportunidades económi-cas de los pobladores, sin contar con los peligros físicos que conlleva vivir en una zona asediada por incendios forestales, abundan los casos de familias que perdieron sus casas y posesiones, víctimas de incendios voraces.

Pero este no es un camino sin retorno, pues estas comuni-dades producen campos de jugosas naranjas, mandarinas y refrescantes piñas, libres de pesticidas y de abonos arti-ficiales ¿Cómo lo lograron? “Creamos una barrera natural para el fuego,” sostiene Robert Angelo, Ingeniero Supervi-sor de Proyectos del Corregimiento de Guayaramerín.

“Sembramos linealmente sandias, árboles de manga, cerebó y achachairú en franjas de 10 metros alrededor de las plantaciones de naranja”. Estos árboles son una barrera natural contra los incendios porque evitan que el

que los productores mismos decidan qué es lo que más necesitan. Además, para asegurar apropiación local, un elemento fundamental del funcionamiento de DETI es el sistema de “contrapartes”. Es decir que el apoyo financie-ro y la asistencia técnica que provee el DETI llega a 70% del costo total de un proyecto. Los productores partici-pan con una contraparte propia en recursos financieros del 30%,” enfatiza Rikke Zeuner, Primera Secretaria de la Embajada Real de Dinamarca en Bolivia.

De hecho, un gran desafío del Programa País junto al Estado Plurinacional de Bolivia, es lograr el desarrollo sustentable de las regiones respetando la biodiversidad y uso responsable de los recursos naturales.

Reducir riesgos con producción alternativa

Una pequeña muestra del futuro trabajo del programa EMPODERAR-DETI se encuentra en las comunidades de San Juan, San Francisco, 27 de Noviembre y Villa Unión

Crecimiento económico inclusivo y sustentable: Empoderar para ganar

“El tema de inclusión es vital pensando en el largo plazo, si no hay inclusión no hay sustentabilidad. Para que el apoyo sea fructífero en el tiempo es vital incluir a los ac-tores locales y que hagan suyos los proyectos,” sostiene Ana Virginia Heredia Deiters, Oficial de Programa.

El mayor baluarte que encarna esta filosofía de cre-cimiento inclusivo y sustentable es la experiencia del programa rural DETI (Desarrollo Económico Territorial con Inclusión), ejecutado por la institución desconcentra-da EMPODERAR bajo el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras.

“A través de EMPODERAR-DETI hemos llegado a apoyar a más de 14,000 familias rurales mediante inversio-nes productivas y asistencia técnica. Los productores y productoras son los que conocen mejor de sus proble-mas y necesidades, saben bien lo que quieren, y tienen visiones para sus propias familias. Sin embargo, muchas veces les hace falta el capital y el conocimiento técnico para realizar las inversiones necesarias que permiten un crecimiento económico sustentable a largo plazo. Por eso hemos facilitado un apoyo financiero a pequeños produc-tores asociados bajo procesos de concertación local, para

sujo crezca alrededor, reducen la acidificación del suelo y se encuentran verdes todo el año. “Además estamos implementando el cultivo de leguminosas para el fortale-cimiento de los suelos,” nos explica Angelo.

Gracias a este proyecto, las asociaciones de productores de estas comunidades están comercializando sus produc-tos en las ciudades de Guayaramerin y Riberalta, zonas donde el acceso a estos productos es limitado. “Yo vendo mis piñas en el pueblo a 5 bs, y tengo sembradas 5000

Atardecer tipico en las inmediaciones de las comunidades productoras de citricos y piñas ecologicas de guayaramerin

Tecnicos y pequeños productores de las comunidades aledañas a Guayaramerin trabajan unidos bajo fuertes lazos de amistad

Productor participe del proyecto muestra orgulloso una jugosa piña sembrada sin la intervencion de agentes quimicos

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plantas de piña,” dice doña Ruth de la comunidad de Villa Unión. Doña María, de la misma comunidad, dibujando una gran sonrisa, nos cuenta: “Yo vendí mis sandias en el mercado del pueblo y gané 850 bs.”

Gracias al éxito de este proyecto, los pequeños pro-ductores de éstas comunidades están ampliando sus parcelas con la producción de yuca, arroz, maíz, noni, copuazú, majo, romero e incluso árboles maderables como el cedro. Están creando bosques artificiales que impiden la propagación del sujo y por tanto la quema indiscriminada, con la perspectiva de generar ingresos a corto, mediano y largo plazo.

Robert Angelo, comentando sobre el sistema de contra-partes, afirma que “… el hecho de que los productores pongan sus recursos es un gran incentivo, porque entre ellos se animan a cultivar y a producir mejor.” Asimismo, Alfredo Asaida, pequeño productor de Villa Unión dice: “… lo que más me gusta de este proyecto es que estamos logrando un ingreso más estable para nuestras familias.”

El Programa País trabajará de manera más profunda para lograr una simbiosis entre la producción sustentable y el manejo responsable de los bosques. Peter Ormel, nuevo

Asesor Internacional del EMPODERAR-DETI, entre otros socios de Danida, es agrónomo con amplia experiencia de trabajo en proyectos productivos. Peter ha trabajado con pequeños productores en países como Sri Lanka, Perú y Mongolia, y afirma con convicción “… que la opor-tunidad está en usar fondos públicos para promover las inversiones de productores privados. Es una propuesta muy fuerte que ha funcionado bien en otros países, y en Bolivia, hay que seguir obteniendo experiencias en este tema. Aún queda mucho por hacer, porque el éxito no se da al mismo tiempo para todos.”

Las ciudades en camino al empoderamiento

El Programa País perdería impacto si no se atendiera a los sectores productivos de las ciudades, Rikke Zeuner nos da el justificativo: “Danida ha tenido que adaptarse a la rea-lidad de Bolivia. Hemos cambiado el enfoque de nuestro apoyo, no solo concentrándonos en el sector agropecua-rio y las zonas rurales, sino, incluyendo al sector produc-tivo de Pymes (Pequeñas Y Medianas Empresas) que se encuentra en las áreas urbanas y periurbanas. Una razón es que 70% de la población boliviana ahora vive en las ciudades y no en el campo. Esto ha significado un au-mento en la demanda de empleos en las zonas urbanas y

Detalle del crecimiento de plantaciones de piñas alternadas con productos maderables y citricos.

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sostenible el valor agregado debe quedarse aquí.”Como parte del Programa País, la cooperación danesa está ejecutando el programa Danida Business Partners-hips. Jorge Salinas, Oficial de este programa explica que “… se pretende traer empresas de Dinamarca dispuestas a trabajar con empresas locales. El impacto consiste en la transferencia de tecnología, en crear nuevos empleos y en aplicar acciones de responsabilidad social empresa-rial. La idea es que la empresa danesa entrene a su socio local en una relación de interdependencia: el empresario danés aporta con su conocimiento, tecnología e inversión y a su vez, el empresario local también invierte, aportan-do con recursos humanos y conocimiento local. Juntos realizarán un negocio que debe ser comercialmente viable y con perspectiva de largo plazo, lanzando a los mercados productos bolivianos con calidad danesa.”

“Buscamos empresas legalmente establecidas que estén trabajando al menos tres años. Nos interesan empresas saludables que tengan la capacidad de innovar junto a un socio danés. El programa co-financia actividades en fase de preparación en un 75% y en fase implementación con un 50%,” destaca Salinas.

Anteriormente, Danida impulsó alianzas empresariales en turismo, textiles, manufactura y otros rubros. Bajo el Programa País el enfoque está en agroindustria, manufac-turas y energía renovable.

Por esto, El Programa País está interesado de incentivar el dinámico mundo empresarial desde la innovación en las zonas industriales más pujantes de Bolivia.

periurbanas. Asimismo, el sector de Pymes constituye un 90% del sector productivo, convirtiéndose en un factor económico muy importante para el futuro desarrollo social de Bolivia.”

Gracias a las experiencias adquiridas en anteriores programas, el Programa País emprende este nuevo reto: “Estamos apoyando al programa piloto del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural dirigido a las Pymes. El programa se llama JIWASA* (*vocablo aymara que en español significa “todos nosotros”) y está diseña-do bajo la misma estructura y lógica del programa DETI.”

JIWASA asistirá con el 70% del financiamiento a las Pymes en los rubros de alimentos, textiles, metalmecánica, carpintería y cuero, con una contraparte local del 30%, focalizando su accionar en superar obstáculos comunes como la estandarización de los productos y la productivi-dad de las Pymes.

Negocios inclusivos, transformaciones permanentes

Cuando tocamos el tema de empresas, ineludiblemente hablamos de innovación, valor agregado y “know how”*. Al respecto, el embajador Ole Thonke es contundente en afirmar que “la filosofía del Programa País es trans-ferir conocimiento, porque solo así el valor agregado se quedará en Bolivia, no es posible que solo se exporte materias primas, más bien para alcanzar un desarrollo

Instalaciones de protena en Warnes, Santa Cruz.

Detalle de las imagenes de alta tecnologia utiladas para el procesamiento de sangre bovina.

* Conocimiento de técnicas necesarias para llevar a cabo eficazmente un proceso productivo

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El proyecto consiste en recolectar la sangre de los mataderos y aquí en la fábrica, hacemos un proceso de separación del plasma de la hemoglobina, la que se usará en la preparación de embutidos para consumo hu-mano”. Cabe recalcar, que Tusequis Ltda., es la empresa propietaria de las marcas Stege y Torito, por lo que este proyecto es de importancia estratégica para su negocio. Asimismo, “la hemoglobina se usará para la producción de alimentos para cerdos, aves y piscicultura, además estamos proyectando producir una galleta con alto contenido de hierro, para mitigar los altos índices de anemia en Bolivia.”

PROTENA, fue apoyada por la cooperación danesa por su sensible visión en el tema de impacto ambiental, Hans Peter nos cuenta que “… actualmente, la sangre proveniente de los frigoríficos de toda Bolivia se echa a las alcantarillas y como en todo el mundo, es la prin-cipal fuente de contaminación de las aguas, además, estamos usando un insumo que es considerado basura, para aportar con materia prima que tiene un alto valor en proteína y que aporta al mejoramiento de la alimen-tación humana.”

En el departamento de Santa Cruz, se encuentra el Mu-nicipio de Warnes, uno de los Municipios más prósperos de Bolivia, por sus industrias oleaginosas, de lácteos, textiles y materiales de construcción entre otras, ¿Qué “cosas nuevas” se están creando en esta zona industrial? La respuesta está en la biotecnología.

La empresa boliviana Tusequis Ltda., junto a la empresa danesa Sera Scandia, emprenden un Join Venture deno-minado PROTENA. Consiste en la producción de nutrien-tes y alimentos que tiene como materia prima fundamen-tal a la sangre de bovinos proveniente de los mataderos de la ciudad de Santa Cruz.

Hans Peter Elsner, representante legal de Tusequis Ltda., nos cuenta que “…el proyecto empezó hace cinco años, cuando la cooperación danesa nos invitó a participar del programa B2B* (*Programa de Danida anterior al Programa Danida Business Partnerships, que trabajó en pro de la asociatividad de empresas danesas con empre-sas bolivianas) y nos presentó con nuestro actual socio, el consorcio danés Sera Scandia.

PROTENA, acopiará y almacenará la sangre de los mataderos con tecnología de punta bajo estándares de refrigeración internacionales, además de realizarlo de forma gratuita, a diferencia de otros países, donde los frigoríficos deben pagar para deshacerse de este com-ponente. PROTENA, tiene una inversión aproximada de cuatro millones de dólares, en su primera etapa procesa-rá 10,000 litros de sangre al día, con la meta de procesar hasta 30,000 litros/día en su fase final.

El Programa País, trabajará el desarrollo económico inclusivo y sustentable en pro del empoderamiento de los pequeños productores del campo, y las Pymes de las zonas urbanas y periurbanas, además de fomentar la producción de valor agregado en Bolivia mediante la asociatividad de consorcios daneses con empresas bolivianas.

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Acceso a la justicia:La implementación de tecnología por el bien común

La administración de justicia es, institucionalmente, ámbito muy rezagado en la cadena de gestión estatal en Bolivia, cuyos efectos se expresan y evidencian en so-brecarga procesal, retardación, frecuentes denuncias de corrupción, sobrepoblación carcelaria y otros aspectos no menos preocupantes que presionan el sistema judicial.

El rezago institucional del ámbito judicial, le da la apariencia de un sistema cuyo diseño todavía intenta resolver problemas de hace algunas décadas. Este rezago económico y político no le ha permitido que se adapte a los nuevos contextos y problemáticas que se han “moder-nizado y evolucionado” hacia temas tan diversos como la trata y tráfico, delitos informáticos, delitos medioam-bientales, narcotráfico, violencia contra la mujer y otros, entregando finalmente un producto socialmente insatis-factorio, afirma Fernando Medina, Oficial de Programa. Apoyando este criterio, Cristina Mamani, actual Presi-denta del Consejo de la Magistratura, aclara que la situación económica de las instituciones judiciales pasa por serios problemas deficitarios: “Tenemos recur-sos limitados, contamos con un 0.15 % del Tesoro General de la Nación/TGN, que se constituye en 40% de nuestro presupuesto. El restante 60% proviene de la venta de valores de notarías, dere-chos reales, entre otras, además de las

alta sensibilidad social y demanda de una mejor adminis-tración de justicia como un eje estratégico del desarrollo del país.

Como antesala a la ejecución del Programa País, Danida conjuntamente con entidades del ámbito judicial imple-mentaron el Programa Pro-Justicia, con el objetivo de fortalecer institucionalmente al Consejo de la Magistratu-ra, Ministerio de Justicia, Defensa Pública, Defensoría del Pueblo y Ministerio Público.

Cristina Mamani, reconoce el valor de esta cooperación: “Implementamos Plataformas de Atención en Potosí, Beni y Oruro, equipándolas con tecnología informática y mobiliario para oficiales de diligencia especialmente.

donaciones de la cooperación internacional”.A estas manifestaciones, se suma el efecto de las po-sitivas políticas gubernamentales de mayor inclusión ciudadana, penalización del racismo, agresiones contra la mujer y otros, ante los que, la población antes marginada por el Estado y hoy mejor informada sobre sus derechos, exige la efectiva protección y cumplimiento de éstos, contribuyendo, considerablemente, con la saturación del sistema judicial.

En ese contexto de presión, baja eficiencia del sistema y difícil acceso es que se profundiza la desconfianza ciu-dadana en aquellos servicios, en sus operadores y en la propia seguridad jurídica del país.

El Estado Boliviano, tiene, por tanto, un gran desafío: transformar su sistema judicial, modernizarlo, procurar sea accesible, y democrático y transparente, y, lograr la confianza de sus ciudadanos en el sistema. El Programa País aborda esta temática en su programa temático “Ejer-cicio de Derechos y Acceso a la Justicia”, en virtud a su

Para contribuir a la trasformación del acceso a la justicia en Bolivia, El Programa País implementará tecnología informática de punta que articule al sistema judicial en pro de una atención rápida y transparente al ciudadano.

Cristina Mamani, actual Presidenta del Consejo de la Magistratura - Sucre, Bolivia.

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En 2011, se adquirieron dos movilidades, una para el régimen disciplinario La Paz - Oruro, y Potosí - Chuqui-saca, también los distritos de Santa Cruz y Cochabamba cuentan con movilidades propias.”

El Programa País espera modernizar el aparato judicial, dotarle de tecnología de punta para su interoperabilidad y conectividad interinstitucional, Fernando Medina se refiere a la estrategia del Programa País: “Ese es el ele-mento central del Programa, iniciar el salto tecnológico y de modernidad en el sistema judicial. Evitar, por citar un ejemplo, que tres jueces citen a un mismo fiscal para asistir a una audiencia a la misma hora y el mismo día, siendo que hoy, es tan sencillo resolver estos problemas con simple tecnología informática de sincronización de agendas electrónicas entre fiscales y jueces.” Se tiene cer-teza de que con la infraestructura y la tecnología prevista, además de vincular a todas las operadores del sistema judicial, se agilizará la administración de la justicia reco-brando la confianza ciudadana en la misma.

“Nuestra meta es poder trabajar con expedientes electró-nicos, procurando que los jueces hagan mejor su trabajo evitando la retardación y saturación del sistema judi-cial,” sostiene Cristina Mamani. Además, estos nuevos

sistemas de administración de justicia están pensados para coadyuvar con los nuevos métodos de ejecución de la justicia impulsados desde el Estado, como los juicios orales y procesos de conciliación.

ENERGIA SUSTENTABLE:Tecnología de punta amiga del medio ambiente

Como hemos analizado en este reportaje, el Programa País pretende apoyar al desarrollo de Bolivia de forma integral. Por esto la cooperación danesa apoya las políti-cas nacionales orientadas a la sostenibilidad ambiental, como por ejemplo la implementación de la nueva Ley de La Madre Tierra.

Se espera que la implementación de esta ley, permita el necesario equilibrio entre las necesidades de desarrollo económico del país y el uso sostenible de los recursos naturales, particularmente el bosque.

En este sentido Trond Norheim, Asesor Técnico a la Au-toridad Plurinacional de la Madre Tierra, que en pasados años trabajó en proyectos agroforestales de la coopera-ción sueca, junto a la Superintendencia Forestal, hoy denominada Autoridad de bosques y tierra – ABT, nos

explica la línea estratégica por la que se trabajará hasta 2018: “La única forma de conservar los bosques es asegu-rar que las actividades desarrolladas en torno a ellos sean eminentemente holísticas, así se garantizará un desarro-llo integral con productos no maderables, producción agroforestal y ganadería en menor escala, quiere decir que debemos trabajar esto desde la parte normativa, para que realmente funcione.”

Este apoyo se complementa con un soporte a la política nacional de energía alternativa. En este sentido, Carmen Barragán, Oficial de Programa de Medioambiente, nos revela el eslabón que completa el marco de acción del Pro-grama País: la energía sustentable. “A través del Programa País, se apoya tanto al Gobierno, a las empresas nacionali-zadas como a la sociedad civil en el desarrollo de proyectos de energía alternativa y de eficiencia energética.”

La ciudad de Cobija, en el departamento de Pando, cuenta con unos 100.000 habitantes, rodeada de exótica floresta amazónica y rojizos atardeceres, es uno de las ciudades de Bolivia que registra las mayores tempera-turas de la región. Con una máxima de hasta 45 grados centígrados, es la ciudad que registra las tarifas más altas por el consumo de luz, sus plantas de producción de electricidad están alimentadas por diesel, abastecien-do precariamente de este servicio a la ciudad con unos 12 megavatios de potencia. Este es un serio problema ambiental para Cobija, tomando en cuenta el obstáculo para el crecimiento de sus industrias, además el abaste-cimiento de diesel para la planta de energía representa un altísimo costo, considerando que el litro de diesel en

El Embajador de Dinamarca intercambia ideas sobre la Planta

Fotovoltaica con técnicos de ENDE

Efectivos de la Fuerza Naval Boliviana resguardando el área de la Planta Fotovoltaica de Cobija durante su inauguración.

OLE THONKE enfatizando el impacto social y medioambiental de la planta fotovoltaica de Cobija en su inauguración

Detalle de los paneles solares que componen la Planta Fotovoltaica, extendidos en una área aproximada de 10 hectareas.

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máxima de 15 megavatios, tres veces su capacidad actual.“Tengo la satisfacción de decir, que muchos no creían que esto se podía realizar pero nosotros lo hemos logrado, he soñado mucho con este tipo de proyectos, ahora este es el tope de lo que se puede hacer con ingeniería en Bolivia,” nos dice el ingeniero Valle, mientras respira profundamente y una expresión de satisfacción se dibuja en su rostro.

PROGRAMA PAIS HACIA 2018

Definitivamente, los gobiernos, las entidades de coopera-ción y sobre todo los países en su conjunto anhelan que los programas de desarrollo lleguen a la mejor culmina-ción posible, y en el caso del Programa País, se depositan muchas expectativas.

“Tenemos inmensas esperanzas en Bolivia porque real-mente es un país con mucho potencial. Además, es un hecho que Bolivia está en buen camino de convertirse en un país de ingresos medios. Sin embargo, sigue siendo un reto – como en cualquier otro país – asegurar la dismi-nución continua de la desigualdad al mismo tiempo de asegurar un crecimiento económico sustentable,” finaliza Rikke Zeuner. Por su parte, el embajador Ole Thonke, nos muestra la actitud que ayudará para que este Programa sea un éxito: “Este es un gran desafío, pero espero que la cooperación entre Dinamarca y Bolivia avance en pos del desarrollo porque tenemos valores comunes.”

Cobija cuesta un dólar.

Esta situación da un giro de tuerca a partir del 30 de sep-tiembre de 2014, fecha en la que el Gobierno Nacional, inauguró la primera planta de energía solar de Bolivia, implementada con el apoyo financiero de la cooperación danesa. Esta planta de 12 hectáreas se encuentra entre las más grandes y modernas de Sudamérica, instalada en una extensión de más de 39 hectáreas. En su primera fase proveerá hasta 5 megavatios de energía a la ciudad de Cobija y sus alrededores, permitiendo un ahorro de dos millones de dólares al año en la compra de diesel.

Frente a la envergadura del proyecto, el ingeniero Manuel Valle, Gerente de Proyectos de la empresa Guaracachi, filial ENDE, explica que “… este ha sido un proceso muy rápido. Hace solo un año se hizo el estudio de factibilidad y en un mes hemos instalado esta planta, nosotros siempre soñamos con la posibilidad de sustituir el uso del diesel con otras fuentes de energía. Frente a esta realidad, hoy tenemos otros proyectos en cartera, como la construcción de una planta de biomasa en Cobija que pueda reducir aún más el uso del diesel.”

En un mediano plazo, se prevé que Cobija sea la primera ciudad de Bolivia que se abastezca de energía sustentable, y abandone definitivamente el uso del diesel para la ge-neración de energía. Por cierto, la planta de biomasa que se construya en Cobija empleará recursos locales, como el pasto elefante o los desechos de la castaña. En efecto, la planta de energía solar será ampliada a una capacidad

El cuidado al medioambiente va de la mano con el uso apropiado del suelo y los bosques, articulando la economía con sistemas de energías sustentables.

CHARLOTTE BENNEKERASESORA TÉCNICA DE LA AUTORIDAD DE BOSQUE Y TIERRA (ABT)

INSPIRA: Cuéntanos ¿Cómo conoces Bolivia, qué es lo que más te llamó la atención del país?CHARLOTTE: Vine por primera vez a Bolivia en el año 1998, a la ciudad de Santa Cruz, donde estoy ahora. Casi de inmediato me mandaron a visitar y aprender de un proyecto de forestaría comunitaria en Potosí. Eso significaba viajar de las tierras bajas (planas y verdes) a la zona andina (alta, montañosa y seca). Me pareció increíble la variedad y la belleza de los paisajes, pero aún más me fascinó la gente, su riqueza cultural y sus costumbres. Desde entonces, he viajado mucho por todo el país y no me deja de fascinar hasta ahora.

I: ¿Qué satisfacciones encuentras al trabajar con la cooperación en el lugar donde te encuentras?CH: Para mí, lo más importante es que la cooperación Danesa facilita el trabajo de las instituciones y sus funcionarios. Pueden existir excelentes ideas pero si no hay el personal ni el dinero suficiente para su im-plementación es probable que nunca se las apliquen. Es necesario llevar las ideas a la práctica e ir apren-diendo de ellas. Veo aquí en la ABT muchos profesio-nales, la mayoría jóvenes, con ganas de hacer justo eso, lo cual me da mucho ánimo.

I: ¿Qué metas te has planteado para que el traba-jo que realizas tenga un fuerte impacto en el área donde trabajas?CH: La ABT está muy enfocada en tener resultados concretos. Para ir avanzando, sin embargo, es nece-sario que el proceso de aplicación vaya de la mano de la reflexión constante, que genere propuestas innovadoras. Yo espero poder contribuir a crear estos momentos de reflexión para ir aprendiendo y ajustan-do las prácticas institucionales para tener resultados concretos y beneficiosos para la población y el medio ambiente.

TROND NORHEIM ASESOR TÉCNICO A LA AUTORIDAD PLURINACIONAL DE LA MADRE TIERRA

INSPIRA: ¿Cómo conoce usted Boli-via?TROND: Conocí Bolivia por primera vez en 1983, cuando trabajaba en la Sociedad Real Noruega para el Desarrollo y tuve mi primera misión a Bolivia, Perú y Nicaragua. Después en los años 90 trabajé mucho con programas de la cooperación sueca, coordinando un programa forestal con el gobierno y otro con el sector privado. Yo soy ingeniero forestal con doctorado en ecología forestal, y la investigación de doctorado la hice en Bolivia sobre la erosión de suelos en áreas boscosas del año 90 al 94, al mismo tiempo que fui Representante de la empresa Swedforest International.

I: ¿Qué logros tuvo durante dicho periodo?T: En el principio de los 90, junto con el gobierno y la cooperación sueca, establecimos un sistema nacional de inventarios forestales que llegó bastante lejos, para asegurar que el gobierno tenga toda la información correspondiente. Después toda esa capacidad se transfirió a la Superintendencia Forestal que se convirtió en la ABT (Autoridad de Bosques y Tierras). Por otro lado, promovimos la certificación forestal y Bolivia llego a ser el país tropical con mayor cantidad de bosques certificados, con dos millones de hectáreas.

I: ¿Cómo visualiza el trabajo que realizará en la institución donde trabaja actualmente?T: La Autoridad Plurinacional de la Madre Tierra es una institución completamente nueva, y por eso mi trabajo como asesor consiste en apoyar el desarrollo de su institucionalidad, políticas y estra-tegias. Yo tengo la tarea de apoyar al Mecanismo Conjunto de Mitigación y Adaptación para el Manejo Integral y Sustentable de los Bosques y la Madre Tierra, donde el trabajo a nivel local incluye el desarrollo de plataformas donde todos los actores locales en conjunto planifican el desarrollo de sus bosques y se adscriben al Mecanismo Conjunto.

Yo tengo la esperanza que el gobierno vea el manejo sostenible de los bosques no como un costo, sino como una inversión y oportu-nidad de desarrollo, sólo de esa forma van a priorizar el manejo sostenible de bosques en competencia con la agricultura y la ganadería; no sólo con objetivos ambientales, sino con objetivos económicos y sociales. La única forma de conservar los bosques es asegurar su rentabilidad frente a otros usos de la tierra, aseguran-do la producción local y la cadena de valor hasta el mercado final.

Bolivia tiene actualmente un fuerte proceso de deforestación, y para revertir esta situación hay que analizar todas las potencialida-des del bosque que pueden dar ingresos a la población, como los recursos maderables y no maderables, y el eco turismo.

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Programa País Dinamarca

PETER ORMELASESOR TÉCNICO INTERNACIONAL PARA EL PROGRAMA EMPODERAR DETI, INIAF, MDRyT y el Fondo de Innovación.

INSPIRA: ¿Cómo conoce usted Bolivia?PETER: Llegué a Bolivia el año 1998 con un proyecto que se llamaba AUTAPO, actualmente ese proyecto se convirtió en FAUTAPO. Años después salí de Bolivia y trabajé en Sri Lanka, Mongolia y Perú, buscando que los fondos públicos promuevan el desarrollo económico y la reducción de la pobreza. Cuando me propusieron este proyecto (Empoderar DETI), me enamoré de él porque está adscrito a mi curriculum.

I: ¿En qué piensa que radica el éxito de los proyectos de desarrollo productivo?P: Yo creo que el éxito se da cuando el campesino después de un par de años dice “estoy mejor”. Perso-nalmente estoy contento cuando el productor dice: “me sirvió, tengo más ingresos, mis hijos pueden ir a la escuela y mi familia come mejor”. Ahí está el éxito.

I: ¿Qué metas se han planteado con el programa EMPODERAR-DETI para el período 2014-2018?P: El proyecto empoderar DETI continuará cinco años con el apoyo del gobierno danés, un proceso que hemos empezado es ampliar la cobertura al norte amazónico, en esta zona hay que tener un cuidado especial al medio ambiente porque es más frágil, el reto es trabajar con los productores del norte amazó-nico beneficiando al medio ambiente y al productor.

Yo estoy seguro que el programa cumplirá sus com-promisos con el gobierno, pero para mí lo funda-mental es cumplir nuestros compromisos con los productores, que ellos hayan mejorado su calidad de vida, que hayan logrado una mejora en sus ingresos, pero también continuar el camino del desarrollo, con menos apoyo externo y mayor capacidad de decisión e inversión del propio productor.

www.sociedadqueinspira.comN° 17, Marzo 2015, Año V

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