correo de las culturas 90

31
Mural de la iglesia de San Juan Bautista en el río Jordán que muestra el nacimiento de Jesucrist de las Culturas del Mundo CORREO Vol. IX, número 90, 1º de agosto de 2011 Centro de Estudios sobre la Diversidad Cultural En este número: • Identifican textos inéditos en lengua sumeria • Jan de Vos, la canoa que llegó al mar • Las grutas de Mogao en China, patrimonio de la humanidad • Formas expresivas en antropología • Vocación cultural de las geishas • Condecora España al Dr. José María Muriá • India o Pakistán

Upload: cedicult-mnc

Post on 22-Mar-2016

228 views

Category:

Documents


2 download

DESCRIPTION

Mural de la iglesia de San Juan Bautista en el río Jordán que muestra el nacimiento de Jesucrist de las Culturas del Mundo En este número: • Identifican textos inéditos en lengua sumeria • Jan de Vos, la canoa que llegó al mar • Las grutas de Mogao en China, patrimonio de la humanidad • Formas expresivas en antropología • Vocación cultural de las geishas • Condecora España al Dr. José María Muriá • India o Pakistán

TRANSCRIPT

Page 1: Correo de las Culturas 90

Mural de la iglesia de San Juan Bautista en el río Jordán que muestra el nacimiento de Jesucrist

d e l a s C u l t u r a s d e l M u n d o

CO

RR

EO

Vol. IX, número 90, 1º de agosto de 2011 Centro de Estudios sobre la Diversidad Cultural

En este número:

• Identifican textos inéditos en lengua sumeria

• Jan de Vos, la canoa que llegó al mar

• Las grutas de Mogao en China, patrimonio de la humanidad

• Formas expresivas en antropología

• Vocación cultural de las geishas

• Condecora España al Dr. José María Muriá

• India o Pakistán

Page 2: Correo de las Culturas 90

2

Correo de las Culturas del Mundo

DirectorLeonel Durán Solís

EditorMariano Flores Castro

[email protected]

“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos

y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse

fraternalmente los unos con los otros”.

art.1º de la Declaración Universal de Derechos Humanos

Page 3: Correo de las Culturas 90

3

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Dos tablillas de arcilla grabadas en lengua

sumeria, que datan de 2040 a. C., y que no

se tenían registradas en el corpus de objetos con

textos cuneiformes en los archivos del mundo,

fueron identificadas por especialistas mexicanos y

españoles, luego de su investigación y traducción

al español. Se trata de piezas del acervo del

Museo Nacional de las Culturas (MNC) que serán

exhibidas próximamente en una nueva sala que

estará dedicada al Medio Oriente Antiguo.

La antropóloga Alejandra Gómez Colorado, del MNC, informó que ambas

piezas se localizaron durante el proceso de revisión de objetos que integrarán

las colecciones del nuevo guión museográfico del MNC, como parte de su

reestructuración integral emprendida en 2007 por el Instituto Nacional de

Antropología e Historia (INAH-Conaculta).

La curadora de la Sala Medio Oriente Antiguo explicó que las tablillas se

encontraban guardadas en los acervos del museo, dentro de una colección

de 17 tablillas con escritura cuneiforme, de las cuales 14 son réplicas, varias

de ellas elaboradas en diversos museos y universidades del mundo; durante la

revisión de piezas la antropóloga del INAH se percató que tres de las tablillas

son originales y buscó los expedientes para identificarlas, hallando datos sólo

de una, y dos de ellas carecían de traducción.

Identifican textos inéditos en lengua sumeria

Las piezas pertenecen al acervo delMuseo Nacional de las Culturas

Arqueología

Page 4: Correo de las Culturas 90

4

A través de El Colegio de México, Gómez Colorado estableció relación

académica con los doctores Gregorio del Olmo, especialista en estudios del

Próximo Oriente Antiguo, y Manuel Molina, del Centro de Ciencias Humanas

y Sociales, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de Madrid,

quienes advirtieron que se trata de textos antiguos escritos en sumerio.

“La especialización de Molina en lengua sumeria, principalmente del

período 2100-2000 a.C., y su gentil colaboración con el Museo Nacional

de las Culturas, posibilitó la traducción de estos textos milenarios”, destacó

Gómez Colorado.

Explicó que existen catálogos internacionales de este tipo de documentos,

y sus contenidos integran un corpus que enriquece la interpretación histórica

del Medio Oriente Antiguo. En este sentido, dijo, los especialistas de

Barcelona investigaron en los catálogos de escritura cuneiforme del mundo, y

determinaron que ninguna de las dos tablillas estaba registrada en archivos.

El sistema cuneiforme es considerado la primera forma de expresión

escrita de la humanidad; en el mundo hay muchas tablillas con textos de este

tipo que fueron redactados en gran cantidad de lenguas, como el sumerio,

acadio, elamita, hitita, hurrita, entre otros.

Page 5: Correo de las Culturas 90

5

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Asimismo, hay de muchos periodos históricos, que van de 3000 a 500

a.C.; “son como un gran rompecabezas, porque cada vez que aparece una

y se traduce, los estudiosos tenemos más información para entender cómo

se vivía en la antigüedad. Con estas dos tablillas México pone su pieza en el

rompecabezas de la historia del tercer milenio antes de Cristo”.

La antropóloga Alejandra Gómez comentó que luego de la identificación

de las tablillas del Museo Nacional de las Culturas, se procedió a su estudio,

traducción y catalogación. El proceso de peritaje se trabajó con fotografías

de alta calidad tomadas a cada detalle de la grafía para que los expertos en

España pudieran ver hasta la más pequeña cuña; los sumerólogos fueron

comparando las imágenes proporcionadas por el MNC con las publicadas en

catálogos, sin haber encontrado piezas similares.

Las tablillas miden alrededor de cinco centímetros, están hechas en arcilla

y redactadas en lengua sumeria con escritura cuneiforme. Los textos son de

carácter administrativo y refieren al registro de los trabajadores de los primeros

campos agrícolas; describen cuál era la cosecha, cuánto se había obtenido

durante un día en un campo de cultivo y hacia dónde se llevaban los granos.

Alejandra Gómez especificó que la escritura cuneiforme fue un sistema

muy eficiente porque duró tres mil años. Se caracteriza por el trazo con cuñas

—de donde deriva el nombre.

Para elaborar estos documentos, dijo, se modelaba la tablilla de arcilla y

todavía fresca se ponía la escritura con unas cuñas, después se dejaba cocer al

sol. Explicó que también se elaboraban sellos cilíndricos, grabados con algún

motivo, que se rodaban sobre la arcilla fresca para marcar la tablilla con la

finalidad de darle al texto autenticidad o para constar quién fue su autor.

En este sentido, la antropóloga mencionó que una de las dos tablillas del

MNC tiene grabado un sello, el cual refiere el nombre del escriba que redactó

el texto, llamado Lugankuzu, hijo de un escudero y quien hace el recuento

administrativo de los cultivos.

Page 6: Correo de las Culturas 90

La curadora comentó que el Museo tiene una colección de 17 tablillas

con escritura cuneiforme: tres originales, las dos recientemente

identificadas, y una más escrita también en sumerio, aún más antigua

(2,700 a.C.) y que también hace referencia a la administración de

campos de cultivo.

Especificó que las tres tablillas originales ya habían sido exhibidas en

este recinto; las piezas llegaron en los años 70 por un intercambio

con la Universidad de Pensilvania (EEUU), institución académica que tiene un archivo

importante porque llevó a cabo trabajos de excavación en Iraq.

Gómez Colorado indicó que las colecciones de tablillas originales con escritura

cuneiforme, fuera de Irán, Siria e Iraq (la antigua Mesopotamia), se conservan en las

Universidad de Pensilvania, Filadelfia y en el Instituto Oriental de Chicago, en EU; así

como en los principales museos del mundo. “Aquí en México, salvo alguna colección

particular, hasta el momento el Museo Nacional de las Culturas es el único recinto que

tiene tablillas originales”.

Las otras 14 piezas de la colección del MNC son réplicas de piezas emblemáticas,

cuyos originales se exhiben en los principales museos del mundo, entre éstas, Gómez

Colorado destacó una que describe El Diluvio citado en la Biblia, pero según la versión

mesopotámica, “porque el mito de la gran inundación es mesopotámico, escrito en

cuneiforme y posteriormente retomado por los hebreos, por quienes lo conocemos”.

Finalmente, la especialista en cultura persa y también curadora de la muestra

Persia: fragmentos del paraíso, que se exhibió en el Museo Nacional de Antropología

(noviembre de 2006 a mayo de 2007), adelantó que la colección de tablillas se podrá

apreciar en la nueva Sala Culturas del Medio Oriente Antiguo, en la sección dedicada

a Mesopotamia; dentro de un panel que dará cuenta de la evolución de la escritura,

donde se presentarán con su traducción, resultado de esta investigación.

Fuente: Reforma/ editado por el Correo

Page 7: Correo de las Culturas 90

Jan de Vos: la canoa que llegó al mar

por Luis Hernández Navarro

Artesano comprometido con la elaboración de una

historia que sirva de herramienta para la recuperación

de la dignidad de los pueblos indios, historiador riguroso e

imaginativo, crítico del poder, Jan de Vos falleció el pasado

24 de julio.

El autor de de Nuestra raíz nació en 1936 en Amberes,

Bélgica, en el seno de una familia católica de nueve

hermanos. Su lengua materna fue el flamenco. Creció en

plena guerra mundial y vivió en una casa ocupada por el ejército alemán. Con el inicio

de los bombardeos se trasladó al campo.

Asistió a un colegio de jesuitas y a los 17 años entró a una universidad francófona.

Durante dos años estudió historia y derecho. A los 19, influido por un maestro al que

admiraba, entró a la vida religiosa. Terminó la carrera de historia y se siguió con las de

filosofía y teología.

Sus primeros años de vida profesional se desempeñó como profesor en colegios

jesuitas, hasta que se cuestionó dedicarse a educar a los hijos del príncipe y chocó con

una vida académica gris. En 1973 se trasladó a Colombia a realizar trabajo pastoral.

Vivió, primero, en un barrio pobre en la ciudad de Medellín, y luego en un pueblo

de campesinos y pescadores negros y mulatos, descendientes de esclavos, en la zona

selvática. Se enamoró de la población afrodescendiente, de la selva tropical, del océano

Pacífico y de las hamacas, que le recordaban con su movimiento el útero materno.

La experiencia colombiana lo marcó para siempre. En 1973 se fue a vivir a Chiapas,

donde colaboró con la diócesis de San Cristóbal, dirigida por don Samuel Ruiz. Un año

In memoriam

Page 8: Correo de las Culturas 90

8

antes se había publicado el libro de Gustavo Gutiérrez sobre la Teología de la

Liberación. En 1974 se realizó en la entidad el Congreso Indígena, momento

nodal en la reconstitución de los pueblos originarios en el estado.

Jan de Vos hizo trabajo pastoral en la entidad, vinculado al proyecto Los

indígenas merecen ser sujetos de su propia historia. Fue comisionado para

colaborar en la reconstrucción de la historia indígena regional. Atendió los

servicios religiosos de la parroquia de San José Obrero, una modesta ermita

en San Cristóbal. Como oficiaba cantando y tocando la guitarra, se corrió el

rumor de que era protestante.

Su primer escrito fue un ensayo sobre fray Lorenzo de la Nada, el dominico

que el siglo XVII chocó con la jerarquía religiosa y huyó a la selva para vivir con

los indios. Con paciencia y fortuna, De Vos siguió sus huellas y se identificó

con su actitud vital.

En 1981 y 1982 las autoridades gubernamentales lo quisieron detener y

expulsar del país por su compromiso con los indígenas, por lo que dejó el

convento de Chilón. Tuvo entonces que dedicarse al trabajo escolar en la

Universidad Iberoamericana. Su interés en ser historiador surgió así del fracaso

de su vocación inicial como agente de pastoral. Nunca fue un historiador

académico tradicional.

En 1986, a los 50 años de edad, tomó la difícil decisión de abandonar la

Compañía de Jesús, tanto por razones personales como institucionales. Un

factor central en su ruptura con la jerarquía religiosa fue su incomodidad

con la clericalización de la institución. Tuvo entonces que dejar su trabajo de

investigador del CIES.

Jan de Vos hablaba flamenco, francés, alemán, inglés y español. Leía, además,

griego y latín. En su formación influyó decisivamente la obra de Hegel,

especialmente el capítulo sobre La conciencia infeliz de La fenomenología del

espíritu y la dialéctica del amo y el esclavo. La temprana lectura de la novela

La vida sencilla, de Wiechert Ernst, lo marcó para siempre y lo inspiró para

alejarse del poder.

Page 9: Correo de las Culturas 90

9

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Grutas de Mogao en China

Las grutas de Mogao, Patrimonio de la Humanidad de la Ruta de la Seda,

están situadas cerca de la antigua ciudad de Dunhuang en el noroeste de

China. Datan del IV al siglo XIV, y constituye un antiguo sitio budista que

contiene 492 templos decorados en cuevas excavadas en 1.6 kilómetros

de acantilado. El sitio incluye más de 45,000 metros cuadrados de pinturas

murales y más de 2,400 esculturas policromadas que comprenden el cuerpo

más grande del arte budista en China.

Foto: Richard Ross

Arte

Page 10: Correo de las Culturas 90

10

En virtud de un acuerdo de colaboración con la Administración Estatal de

Patrimonio Cultural (SACH), el Getty Conservation Institute (GCI) ha estado

trabajando con la Academia de Dunhuang desde 1989 en la conservación

de las Grutas de Mogao. Los primeros cinco años de colaboración estuvieron

dirigidos a temas relacionados con el sitio , que culminó en una conferencia

internacional en 1993: Conservación de sitios antiguos a lo largo de la Ruta

de la Seda, cuando también se conmemoró el quincuagésimo aniversario

de la Academia de Dunhuang. Desde 1997, la colaboración se ha centrado

principalmente en la conservación de las pinturas murales de Mogao.

Durante un lapso de mil años, los templos de las grutas de Mogao fueron

excavados en un acantilado de roca de conglomerado suave. Las paredes del

templo estaban cubiertas con una mezcla de arcilla, arena y fibras vegetales, y

las pinturas fueron ejecutadas como dibujos en tinta roja y negro en una capa

de tierra que cubre el yeso de barro, luego se llena con pigmentos minerales

brillantes y lavados de colorantes orgánicos. Durante siglos, las pinturas han

sufrido un deterioro de diversos tipos, de descamación de la capa de pintura

a la pérdida progresiva de la adherencia entre el conglomerado y el yeso de

arcilla. Este último problema es el más grave, que resultó en el desprendimiento

o separación de yeso pintado —un problema común a Mogao y otros sitios de

la Ruta de la Seda. Grandes áreas de las pinturas se han perdido.

El deterioro de las pinturas murales en Mogao nunca ha sido estudiado

de una manera que permita el desarrollo de la conservación a largo plazo y

con soluciones de mantenimiento. Como resultado, el deterioro a menudo se

repite después de los trabajos de conservación, y con el tiempo puede escalar

en intensidad. Las causas del deterioro de las pinturas murales se identifican

tanto en el pasado como en el presente. Influyen inundaciones de las cuevas

y los terremotos, sin contar con los cambios graduales físico-químicos de

los materiales originales que componen las pinturas, el continuo deterioro

causado por fluctuaciones en las condiciones ambientales en relación con

la presencia de sales solubles. Teniendo en cuenta que ciertos problemas no

Page 11: Correo de las Culturas 90

11

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Page 12: Correo de las Culturas 90

12

pueden ser eliminados por completo, es importante entender estas causas y

procesos —en particular el papel de la humedad y las sales solubles — con el

fin de desarrollar intervenciones apropiadas de conservación y las medidas

preventivas que puedan reducir la tasa de deterioro en el largo plazo. La cueva

85, completada en el año 867, es una de las más grandes de Mogao y contiene

algunas de las pinturas murales de más alta calidad de la dinastía Tang tardía.

La cueva se compone de una antecámara, corredor y gran cámara principal

que contiene alrededor de 350 metros cuadrados de pintura y tres esculturas

policromadas en una base de gran altar. Dieciséis sutras grandes pintadas que

decoran las paredes de la cámara principal. La cueva tenía varios períodos de

actualización, incluyendo la adición de las cifras de los donantes en el corredor

de la entrada pintada en las Cinco Dinastías (907-960), redecoración de la

antecámara de la dinastía Yuan (1271-1368. La cueva 85 fue seleccionada

debido a que el deterioro de sus pinturas murales, en particular la exfoliación

generalizada de la pintura y el desprendimiento de yeso de la roca, la hacen

representativa de los problemas que se enfrentan en muchas otras de las

cuevas del lugar.

El proyecto, desarrollado con el apoyo de la Administración Estatal

de Patrimonio Cultural, se llevó a cabo en colaboración con la Academia

de Dunhuang como un componente del plan maestro para el sitio de las

Grutas de Mogao.

Page 13: Correo de las Culturas 90

13

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Colección de antiguas recetas de cocina babilónicas, © U. de Yale, EEUU.

Page 14: Correo de las Culturas 90

14

Formas Expresivas en Antropologíade Claudio Esteva Fabregat

por Leonel Durán Solís

Cuando recibí la invitación del Dr. Carlos Serrano

para participar como comentarista en un nuevo

libro del Dr. Claudio Esteva Fabregat Formas

Expresivas en Antropología, acepté de inmediato,

no obstante los pocos días para la presente

reunión. Carlos dijo una frase clave: fuiste alumno

de Claudio y por eso te convocamos. Recibí el

libro sin tener antecedentes del mismo. Ahora

puedo afirmar que es un libro extraordinario. El

prólogo de Andrés Fabregas Puig lo ubica a uno

rápidamente en las variables que aborda el autor y en una valoración de

la importancia del texto. Es un libro que seduce y que se puede abordar

desde diferentes lecturas: en una secuencia de página por página o

también abordar cada una de sus partes por separado.

El campo fundamental del análisis y reflexiones del Dr. Claudio Esteva

Fabregat gira en torno a la antropología desde su primer acercamiento

como estudiante y su continua reflexión hasta el presente sobre la

misma, caracterizada como la Escuela Mexicana de Antropología, en

su carácter holístico enriquecida por nuevas disciplinas de las que

él ha sido un estudioso y participante activo. Desarrolla con suma

claridad el conjunto de relaciones de las disciplinas que caracterizan a

esta Escuela Mexicana, aplicadas a la investigación y a la docencia en

formas constantes, de tal manera que le otorgaron una identidad por

Libros

Page 15: Correo de las Culturas 90

15

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

sus maneras características de enfoque y aplicación, que se expresaron

en formas que se manifestaron con claridad y fuerza.

Otra lectura conduce al reconocimiento en sí y de los valores

fundamentales a la Escuela Nacional de Antropología e Historia. Qué

impresionantes memoria y claridad de Claudio para referirse al ambiente

escolar y académico de la ENAH, así como de los que estudiábamos en

ella en su época. Y cómo lo forman a él

considerando que la antropología es una

sola, si bien se distinguen las cuatro ramas

básicas, posteriormente enriquecidas por

lo que él llama los encuentros laterales

con la geografía, antropogeografía y los

aledaños científicos, como la ecología.

En esa interacción de las cuatro ramas

principales permiten explicar múltiples

problemas buscando superar los enfoques

fragmentados.

Desconozco si en la ENAH actual se han

llevado a cabo esfuerzos para recobrar los

valores de su memoria, analizar sus procesos

de desarrollo y abordar el análisis de la antropología contemporánea

para la formación de nuevos cuadros profesionales y revisar en qué

medida los más de 70 años transcurridos desde su fundación, la ENAH

actual ha llegado a la construcción de una antropología que pueda

caracterizarse como la antropología mexicana para el siglo XXI, no

sólo para México, sino también para América Latina. Particularmente,

llama la atención cómo la sólida formación de Claudio lo lleva a España

a extender la Escuela Mexicana de Antropología y hacer la obra de

pionero y sembrador de una nueva antropología española.

Page 16: Correo de las Culturas 90

16

La otra lectura tiene un gran tema e hilo conductor: la vida de

Claudio Esteva Fabregat, que se relaciona con México en lo que él llama

las primeras circunstancias y primeras experiencias y su integración a

la cultura mexicana. Y las llama primeras circunstancias que no meros

antecedentes.

El libro no es autobiográfico, pero el autor extrae de su vida misma

aquello que lo relaciona con antropología: sus primeros estudios, su

formación profesional, los umbrales y orientaciones de la disciplina, sus

valoraciones de la antropología de la ENAH y su posterior reorientación

en la antropología española. En el libro que hoy comentamos, va a

plantear los nuevos retos analíticos a la antropología, a los cuales

Claudio Esteva Fabregat responde puntualmente en la parte tercera

que denomina “ Percepciones y Derivas” .

Retornemos al inicio. El joven Claudio Esteva Fabregat llegó a México

el 13 de junio de 1939 en plena época cardenista y él como muchos

otros trasterrados entra al proceso de elaborar una nueva identidad en

un país que a su vez estaba en la efervescencia de su formación.

Claudio se sumerge en una nueva vida de múltiples estímulos que

lo llevan a conocer la realidad mexicana. Venía de un drama enorme

de España y de las rebeldías catalanas, pero se sumergió en una crisis

de renacimiento, y para sortearla busca las soluciones por el camino

intelectual que lo acerca a la antropología y al conocimiento de su

nuevo país, sin que ello le evite vivir la nostalgia del país ausente

Claudio experimentó dos grandes nostalgias: la del país y su gente que

tuvo que abandonar por fuerza para salvar la vida. La otra llegó muchos

decenios después cuando ya había recobrado sus espacios de origen y

el desarrollo de una muy brillante carrera profesional y académica, no

pudo dejar de experimentar otra nostalgia diferente, la de México y sus

circunstancias, y que durante muchos años llevo consigo aún en sus

lares recobrados que lo impulsaron a regresar en distintos momentos a

Page 17: Correo de las Culturas 90

17

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

nuestro país y radicar actualmente en Zapopan como profesor émerito

del Colegio de Jalisco y ahora, felizmente, aquí lo tenemos en una

celebración académica que reconoce en él sus valores como antropólogo

formador de instituciones, acucioso investigador y prolífico autor.

En la lectura de su introducción y los “Umbrales y Orientaciones” en esas

etapas de su vida encuentra uno al antropólogo de gran talla y de una vida

totalmente entregada a la antropología, que va desde su formación inicial a su

enriquecimiento paulatino, explicaciones que enriquecen sus investigaciones

como antropólogo, pero, vale la pena reiterarlo, con la perspectiva de otras

disciplinas. Y con esa memoria privilegiada que lo caracteriza, menciona a sus

maestros, bajo nombres que nos son familiares, y los ubica en la coherencia

del ejercicio de la antropología y en la valoración de las cuatro ramas básicas

de la antropología y su enfoque holístico y cómo esta visión que él va

ampliando a partir de otros recursos explicativos (etnohistoria, antropología

social, la psicología, el psicoanálisis etc.) que le permiten entender y explicar

numerosos problemas y escribir los libros de los que él es autor.

Pero, no sólo menciona a quienes fueron sus compañeros menciona

también a los que fueron sus profesores, entre los cuales hay un

importante grupo de los exiliados que influyeron en el desarrollo de la

antropología mexicana y cuando va uno leyendo los nombres de esas

personas y de maestros algunos de los cuales fueron nuestros, sucede

un hecho interesante, su lectura no se queda sólo en los ojos y en la

mente sino comienzan a surgir las imágenes de la época en que nos

toco ser estudiantes de la misma escuela, los rostros de esas personas

mencionadas. Y leyendo a Claudio, acercarse uno de nueva cuenta a

nuestra querida ENAH y a interesarse profundamente en esa ENAH

que va describiendo el maestro y preguntarse finalmente ¿cuál es la

ENAH de ahora? en qué medida responde a un proyecto nacional e

institucional.

Page 18: Correo de las Culturas 90

18

Claudio Esteva Fabregat no propone que la estructura de su libro sea

un método para otros autores, pero uno no puede dejar de advertir que

la parte primera se aproxima a lo autobiográfico y que posteriormente

se aplica al análisis de las problemáticas de investigación y docencia y a

pensar en otros ejemplos: ¿por qué Alfonso Caso se hizo antropólogo

y desarrolló instituciones?, ¿por qué el Dr. Daniel Rubín de la Borbolla

recorrió toda America convocando a estudiantes de esos países para

que vinieran a México a estudiar antropología?, ¿por qué Jorge A. Vivó

después de recorrer el mundo buscando su transformación a una nueva

era se hace antropólogo y profesor distinguido muy distinguido de la

ENAH?, ¿por qué Eusebio Dávalos Hurtado el primer graduado de la

ENAH fue un excelente Secretario Académico de la ENAH, Director del

Museo Nacional, Director General del INAH, que impulsa la creación de

nuevos museos, y se niega a proporcionar los nombres de estudiantes

que participábamos en un movimiento nacional y en la primera huelga

reivindicativa para la ENAH? ¡Y cómo no tener en cuenta las imponentes

presencias de Pedro Bosch Gimpera, Paul Kirchoff, Pablo Martínez

del Río, Wilberto Jiménez Moreno, Alejando Dagoberto Marroquín

Arturo Monzón, Fernando Cámara Barbachano, Ricardo Pozas, Julio

de la Fuente, Gonzalo Aguirre Beltrán! Y de la misma manera que uno

podría entender mejor sus maestros y sus obras habría que incorporar

su método de conocimiento preguntarnos sobre las motivaciones de

sus vidas para convertirse en antropólogos en nombres de los que

están aquí presentes como son los de Guillermo Bonfil Batalla, Rodolfo

Stavenhagen, Carlos Navarrete, Mercedes Olivera, Margarita Nolasco,

Lina Odena Güemes, y muchos etcéteras más.

Tal como se construye el presente libro, hoy objeto de nuestros

comentarios, metodológicamente a partir del acercamiento biográfico

permitiría acercarse a la explicación de sus acciones de los antropólogos

mencionados: sus experiencias formativas, docentes, por qué sus temas

Page 19: Correo de las Culturas 90

19

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

de investigación y sus contribuciones a la antropología. Preguntarse

¿cual es la versión de uno mismo al mirar a los otros? Como dice el

Maestro Estava Fabregat: “viéndolo y observándolo, soy sujeto de

descripción de mí mismo, por lo menos en el hecho de que reacciono

por ser yo también una prueba de experiencia de una sensibilidad

personal”. “Soy pues, mis palabras, y soy en ellas una forma implícita

de construir mi propia realidad”. Y la construcción de la propia realidad

son las acciones más allá de los procesos de investigación, el desarrollo

de proyectos, de programas, gestión de instituciones, y sumándose

a otras causas de interés humano; es decir, aquellas praxis sociales,

como dice Claudio, “que más de ser específicas de pensamientos son

específicas de acción”. Hay una praxis, una intervención para diseñar,

modelar e impulsar acciones a partir de un enfoque antropológico

que no sólo es investigar sino también un actuar y ahí se ubican

antropólogos egresados de la ENAH con una participación muy activa

en instituciones del Estado mexicano en diferentes dependencias de

gobierno en Agricultura, en la Secretaria de Educación Pública, en

el INAH, Instituto Nacional Indigenista, CIESAS, Dirección General de

Culturas Populares, en las universidades, etc.

Presentación de Libro

Julio 29, 2011.

Page 20: Correo de las Culturas 90

20

Tradiciones

Cuando escuchamos la palabra “geisha”, se suceden una serie de

imágenes. Esas delgadas mujeres envueltas en hermosos kimonos,

caminando a pasitos rápidos y cortos por las estrechas calles de Kyoto, con la

cara pintada de blanco, semejando a un mimo o a un Pierrot, con la mirada

perdida, sumida en sus propios pensamientos.

Tras la desaparición de la figura del samurai, la geisha junto con los

luchadores del sumo, son el único exponente del pasado de Japón. La Geisha

aún permanece con el paso del tiempo, después de más de 400 años, y en el

presente sigue causando fascinación, y muchas preguntas en torno a ella. El

Festival más esperado cada año en Gion, es el de los cerezos en flor, para ver

salir en todo su esplendor a todas las Geishas y maikos de sus hanamachi.La

palabra GEISHA proviene de los fonemas chinos “Gei”, que quiere decir arte,

habilidad, y “Sha” que significa persona. Eso es lo que representa una Geisha,

una persona con la habilidad en distintas artes.

En la antigüedad, específicamente en la Era de Edo hasta la Era de Meiji,

esta palabra se utilizaba para referirse a cualquier persona que perteneciera a

las artes (poesía, teatro, pintura), pero se extendía a otros sectores (religioso,

deporte, maestros de lenguas extranjeras, e incluso para referirse a los cirujanos

de la época), también se designaba con este nombre a los que actuaban en

locales cerrados o privados, que quizás es lo que se acerca también a la idea

de la Geisha. La Geisha aparece en la era de Edo, conocida también como “la

Geisha machi”, la Geisha urbana.

La antecesora de la Geisha, son las odoriko, las bailarinas, pero si nos

remontamos años más atrás, podríamos sacar sus raíces del “kabuki odori”

Vocación cultural de las geishas

Page 21: Correo de las Culturas 90

21

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

(bailarines del teatro ambulantes).

Estas bailarinas, hermosamente

ataviadas en kimonos de seda,

realmente eran hombres en

su mayoría, y se encargaban

de bailar ante los samuráis,

de realizar la ceremonia del

té, servirles sake, y de tocar

el shamisen (instrumento de

cuerda parecido a la guitarra,

pero de tres cuerdas, y con

un sonido muy melódico).

Este baile era conocido como

okuni.

Estando sus raíces ligadas al

teatro kabuki, podemos inferir

que de allí también proviene la

tradición de pintar su cara de

blanco.

En la Era Edo, los que tenían

el poder económico eran los

comerciantes. Éstos buscaban formas de distracción, con lo cual los sitios

donde se representaba el kabuki fueron en crecimiento. No solamente las

artes fueron en ascenso sino también la prostitución, convirtiendo ciertos

sitios en perniciosos. El shogunato de Tokugawa no vio con buenos ojos

las representaciones del kabuki en el distrito de Yoshiwara, porque eran las

causantes de que se hubiesen iniciado “nuevas prácticas de placer”. Esto

motivó su prohibición, y todo tipo de actividad de distracción fue arrinconada

en lo que se denominó “distritos de placer”. Es decir, la prostitución no fue

prohibida sino confinada a estos sitios, y bajo el control del gobierno.

Page 22: Correo de las Culturas 90

22

En el año 1779, las geishas fueron reconocidas como artistas, y se adoptó

el sistema “Kenban” para supervisar a las geishas de la zona, y se restringió

su número por debajo de 100 artistas, protegiendo así a las geishas de que

cayeran en la prostitución. El kenban, permanece aún hoy en día funcionando

como una especie de sindicato de las geishas.

Las geishas y maikos vivían en “hanamachis” (ciudad de flores, hana=flor,

machi=ciudad), que eran las ciudades autorizadas a que fueran habitadas por

ellas. En la actualidad, son cinco comunidades en Kyoto: Ponto-cho, Gion-

Kobu, Gion-Higashi, Miyagawa-cho, y Kamishichiken. Las geishas de Kyoto

hablaban en dialecto “kiotense”, que se sigue usando en la actualidad. En

kiotense geisha es geiko.Muchas prostitutas trataban de imitar el estilo de las

geishas, pero no tenían la formación artística de éstas. Se vestían en kimonos,

con exceso de maquillaje y demasiados adornos en el peinado, por lo que

por nuevo edicto del shogun Tokugawa, y para protección de la imagen de

las geishas, se obligaba a las mismas a moderar su vestuario y maquillaje para

poder diferenciarlas de las simples prostitutas. Quizás sea por ello que durante

un tiempo se confundían a las geishas con éstas, porque vivían además en

las casas de “lámparas rojas”, pero el caso es que no podemos decir que las

geishas fueran prostitutas.

Ellas sólo se encargaban de distraer a los hombres, con amenas conversa-

ciones, con danza, o tocando el shamisen. Las geishas y maikos que bailaban

se denominaban Tachikata, y las que se dedicaban a tocar un instrumento,

Jikata.

El tiempo de la geisha y maiko con cada hombre, se media en varitas de

incienso, cuando ésta se consumía había finalizado su tiempo.

Las geishas y maikos contaban con un pacto de silencio, por lo que

cualquier hombre podía estar tranquilo con las conversaciones que se

mantuvieran delante de ella, o con ella.

Fuente: http://culturajaponesa.blogspot.com

Page 23: Correo de las Culturas 90

23

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Distingue España a José María Muriá con la Orden de “Isabel la Católica”

Sr. Embajador, señoras y señores:

Este servidor de ustedes no es más que un historiador

de una provincia mexicana —aunque no una provincia

cualquiera, eso sí—, quizá por ello le resulte aún

más satisfactorio recibir una distinción de tamaña

envergadura.

No sé —lo digo con sinceridad— si la merezco

o no, sin embargo prefiero no aclarar la duda. No

vaya siendo que se arrepientan y me priven de este

espléndido masaje al ego.

Muchas gracias, pues, Señor Embajador. Mucho,

también, le ruego que las haga extensivas a quienes

allá intervinieron para concederme este galardón, que a quienes tuvieron la iniciativa

aquí, en México, ya me he encargado de hacerlo personalmente.

Pero debo confesar que recibirlo contiene una fuerte carga agridulce, emanada

de la enorme complejidad de mis relaciones con España, lo mismo que lo son –

supongo- para la mayoría de los mexicanos.

Igual que si se tratara de conyuges, de vecinos o de parientes, hay de todo en

nuestro trato, máxime que es el suyo un país de muchos contrastes, igual que el mío.

Bien podríamos decir que hay en ambos, como si fueran tamales: de chile, de dulce

y de manteca.

Viajé a España por primera vez en 1964 y no he dejado de hacerlo con intervalos

Reconocimiento

Page 24: Correo de las Culturas 90

24

cada vez menores. Desde entonces mucho me ha sucedido, como aquel policía

vestido de gris que arremetió contra mí, cuando presenciaba una manifestación

pacífica a favor o en contra de no sé qué.

Era una España muy gris aquella, máxime si la comparamos con lo que se ha ido

convirtiendo después. Es por ello que, si de esos tiempos antiguos se trata, prefiero

en cambio recordar esa “España Peregrina” que a todos nos cautivó. Ahora, por

ejemplo, echo de menos a mi maestro José Gaos, a quien tanto debo. Él se definía a

sí mismo como un “profesor de filosofía”, pero en realidad fue un gran defensor de

principios fundamentales de la descolonización intelectual. No en vano se convirtió

en la insignia de la inmigración republicana en México.

Quiero hacer también memoria de nuestra querida ex cónsul en Guadalajara,

quien se metió en el corazón de los tapatíos que tuvimos el privilegio de tratarla.

Aguas Ocaña, merece gratitud por ser como es y por haberle dado nueva vida al

consulado de España.

Pienso por igual en los amigos que, hace unos diez años, frente al monumento

del patriota liberal Julián Sánchez, apodado “El Charro”, que se yergue en Ciudad

Rodrigo, me comprometieron etílicamente a desentrañar los orígenes de la charrería

mexicana. Ahí nació mi reciente libro sobre ese tema.

Pero permítanme contarles una pequeña historia —historia verdadera, como

diría el gran Bernal Díaz del Castillo— que simboliza mi relación con la España

contemporánea.

A mediados de 1983, otro de mis grandes y queridos maestros, Miguel León-

Portilla, fue nombrado Presidente de la Comisión Nacional que habría de encarar

el quinto centenario del año de 1492. A su vez, Miguel pidió que se me nombrara

Secretario y empezamos juntos una aventura que nos atrajo muchos coscorrones y

una que otra mentada, pero también muchas y grandes satisfacciones.

Nuestra presentación en el cónclave internacional, que ya había decidido

“celebrar” el quinto centenario del “descubrimiento de América”, no pudo ser

más desoladora. La reunión fue en Santo Domingo, en 1983, y ninguna delegación

Page 25: Correo de las Culturas 90

25

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

respaldó nuestra posición. Solamente Panamá no se declaró en contra… Lo que

pedíamos era no celebrar —esto es: no hacer una fiesta— sino “conmemorar”;

esto es, traer a la memoria, analizar y ponderar lo que con mayor visión preferíamos

denominar “encuentro de dos mundos” que no se habían conocido antes y, con

mucho de malo y de bueno, empezaron a desenvolverse juntos a partir de entonces.

Recuerdo cómo nos incomodó la postura del presidente de la Comisión española

—ginecólogo de oficio—, cuando procedió a explicarnos la misma tesis que había

esgrimido mucho tiempo atrás un profesor de nombre Manuel Ballesteros Gaibrois,

de que los mexicanos prehispánicos no habían sido capaces de construir ideas

abstractas.

El comentario de Miguel, fue el siguiente:

–¿Este señor representa a un gobierno socialista o a la España de Franco?

Había mucho de razón: el franquismo sobrevivía en algunos miembros de la Comisión

Española…

Entre 1984 y 1985 hubo varios cambios de gobierno en América, de manera que

la tendencia predominante se inclinó hacia la democracia y a nuestro favor.

Pero lo más relevante se produjo en Madrid, a fines de julio de 1985, con motivo

de la visita oficial del Canciller de México. Éste me pidió que lo “blindara”, eso dijo,

contra cualquier planteamiento de su homólogo español y procedí a prepararle

tarjetas que le permitieran sortear cualquier tipo de “ataque”.

¿Ataque? ¿Cuál ataque? El nuevo ministro español, Francisco Fernández

Ordóñez, había hecho suya la postura mexicana, por creerla más conveniente tanto

para la nueva política exterior española como para la idea que se estaba gestando

sobre la comunidad de países de la península y de América Latina. Así lo manifestó

oficial y públicamente y en la coraza de mi Secretario no había ninguna tarjeta

preparada para responderle. De esta manera hubo de improvisar –lo cual detestaba-

para dar las gracias.

Cuando regresó a México la regañada fue mayúscula.

Pocos años después el Canciller español escribiría: “Conmemorar ‘el encuentro

Page 26: Correo de las Culturas 90

26

de dos mundos’ es una realidad que contribuyó a que la idea de la historia se hiciera

más universal.” (América 92. Revista del Quinto Centenario. Mayo de 1989. p. 7).

He de decir también que, al final de la reprimenda, Sepúlveda me felicitó por

lo que consideró un éxito más de aquella diplomacia mexicana que entonces podía

correr por el mundo con la frente muy alta. Lo cierto es que la tortilla ya se había

volteado. En la siguiente Conferencia de Comisiones Nacionales, que tuvo lugar en

Buenos Aires, solamente dos representantes se aferraron al viejo molde: uno era el

de Pinochet y el otro del gobierno de Perú.

La zozobra nos la trajo después el deseo intenso que manifestó Estados Unidos

de incluirse con pleno derecho (voz y voto) en aquella Conferencia Iberoamericana

de Comisiones Nacionales que pretendía ser de condición latina.

Se respaldaban en la gran cantidad de llamados “hispanos” que ahí residen; el

problema era la percepción diferente de las cosas: mientras nosotros nos esforzábamos

por publicar libros, restaurar monumentos, acercar a nuestros hombres de letras y

artistas y gestar una mayor comunicación y un mejor entendimiento entre nuestros

países, la Comisión norteamericana, que era presidida por un cubano que vendía

llantas en Miami, presumía que su actividad principal del año había sido preparar una

“paella” para diez mil personas. Sólo el pensar en el sabor que debe haber tenido

aquello, supongo, hizo que muchos de los delegados se manifestaron en contra

de su incorporación con pleno derecho.

Lo cierto es que, dadas las ocultas intenciones de la Cancillería española, de las

que puso sobre aviso a la representación mexicana y se coludió con ella, la presencia

de Estados Unidos resultaba inconveniente, ya verán ustedes por qué, de manera

que este servidor, que quedó sólo al frente de las representaciones de México en las

siguientes reuniones, y el mero Ministro de España, codo con codo, llevamos a cabo

varias negociaciones, maquinaciones y operaciones de resistencia de las que yo, por

no ser diplomático de oficio, podía arriesgarme a ser agresivo portavoz, sin que haya

habido graves consecuencias porqué Fernández Ordóñez hizo las cosas muy bien.

Finalmente, a pesar de todas las presiones, la Comisión de Estados Unidos quedó

como observadora y punto.

Page 27: Correo de las Culturas 90

27

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

¡Cómo aprecié y admiré el valor y la calidad humana del Canciller Fernández

Ordóñez! Con qué sencillez y calidez pudimos entendernos y salirnos con la nuestra.

Bueno, aparte de vernos en muy diversos lugares, en Madrid, París, Lisboa, Puerto

Rico, Caracas, etc. para que nadie nos interrumpiera ni espiara, lo que hicimos en

varias ocasiones, hasta altas horas de la noche, fue encerrarnos en mi habitación de

hotel, planeando, escribiendo, leyendo y corrigiendo.

Mientras tanto el cáncer iba haciendo mella. ¡La batalla exterior la ganamos! De

aquella Conferencia de Comisiones Nacionales del V Centenario del Encuentro de

dos Mundos, a la postre, pudo emerger la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado

y de Gobierno, que se estrenó en el año de 1991, precisamente en Guadalajara.

La selección de esta plaza no fue casual: fue una deferencia de Francisco en la

sugerencia que le hizo al presidente Salinas.

Ya reintegrado yo, con todo y chivas, a la vida académica jalisciense lo ví por

última vez al salir del teatro Degollado, precisamente al término de aquella reunión

de 1991. Nos dimos un gran abrazo sabiendo que no habría más. Vicente Fernández

cantaba en plena calle: “Volver, volver, volver…”

La otra batalla la perdimos: el 2 de junio de 1992, Francisco dejó el cargo. Sólo

tardaría 65 días en morir. Una de las peores pérdidas de la diplomacia de nuestros

países. Un hombre íntegro del que me hice verdaderamente amigo durante aquellos

años. ¡Claro que me acuerdo de él ahora! Como siempre, lo hago con mucho cariño

y un chorro de admiración.

Señor Embajador. Señoras y señores: además de agradecer muy especialmente

a todos su fraternal presencia aquí, absolutamente a todos, espero que perdonen

mis emociones contradictorias. Pero me reafirmo en la idea de que, si bien es cierto

que hay elementos en España –igual que en México– de los que nos debemos cuidar

todos, también los hay, y muchos, que pueden reforzar la búsqueda conjunta de un

mejor futuro del que espero ver todavía los primeros pasos, antes de irme a reunir

con Fernández Ordóñez, con todo y la condecoración que hoy recibo, para seguir

conspirando juntos a favor de nuestras muchas coincidencias.

Page 28: Correo de las Culturas 90

28

Nota del editor. El pasado 20 de junio, en la residencia del

embajador de España en México tuvo lugar la condecoración

con la Encomienda de la Orden de “Isabel la Católica” al doctor

José M. Murià, investigador del INAH, miembro del Sistema

Nacional de Investigadores y miembro numerario de la Academia

Mexicana de la Historia.

Las razones que el embajador adujo fueron la brillante

trayectoria académica de Muriá, como historiador de Jalisco con

una proyección universal, y también el brillante desempeño que

demostró al servicio de las buenas relaciones de los países de

habla española cuando fue Secretario Ejecutivo de la Comisión

Nacional Conmemorativa del Quinto Centenario del Encuentro

de dos Mundos y la aterrizada defensa que hizo, junto con el

ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández

Ordóñez, de la postura de que en la Conferencia de comisiones

nacionales no fuese admitido ningún país que no fuese de origen

ibérico, lo cual permitió que aquella Conferencia derivara en la

Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de Iberoamérica que se

reunió por primera vez precisamente en la capital de Jalisco.

Page 29: Correo de las Culturas 90

29

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

India o Pakistán

Libros

Laura Carballido Coria

Centro de Estudios Asia Y África de El Colegio de México

Primera edición, 2011

¿India o Pakistán? Ésta fue la pregunta que tuvieron que

responder los habitantes de la India colonial en 1947. Tras una larga lucha,

el 3 de junio de 1947, finalmente se anunció que la independencia se

lograría pronto; pero la colonia no daría paso a un Estado-nación, sino a

dos. El resultado fue la partición de India. En esta obra se desentrañan las

circunstancias de ese complejo proceso, cuyas consecuencias están hoy más

presentes que nunca y afectan el escenario regional y global. En sus páginas

se delinean las diferentes fuerzas políticas anticoloniales, presentes desde

finales del siglo XIX, para luego centrarse en el final del periodo colonial en

una provincia, Bengala, y en la creación de la frontera entre los dos nuevos

países. Laura Carballido Coria analiza de manera detallada la composición

de la provincia en términos sociales, religiosos y étnicos que se expresó en

varias propuestas sobre la independencia. Esta aproximación le permite al

lector apreciar las tensiones entre las dirigencias centrales de los principales

partidos políticos y las ramas provinciales, entre los partidos políticos grandes

y las pequeñas organizaciones políticas, entre las mayorías y las minorías

religiosas, entre las castas altas y bajas, y entre los grupos privilegiados y

las clases pobres. Ésta es una obra fundamental para los estudiosos de los

procesos de descolonización, particularmente del sur de Asia, así como para

los interesados en las relaciones entre mayorías y minorías.

Fuente: www.colmex.mx

Page 30: Correo de las Culturas 90

30

Visite nuestra página web: http://correodelasculturas.wordpress.com

Page 31: Correo de las Culturas 90

31

Cultura ibérica. Finales S. III, inicios S. II a.C.

Directorio

INSTITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGÍA E HISTORIA

DIRECTOR GENERALALFONSO DE MARIA Y CAMPOS CASTELLÓ

SECRETARIO TÉCNICOMIGUEL ÁNGEL ECHEGARAY

SECRETARIO ADMINISTRATIVOEUGENIO REZA SOSA

COORDINADORA NACIONAL DE MUSEOS Y EXPOSICIONESLOURDES HERRASTI

DIRECTOR DEL MUSEO NACIONAL DE LAS CULTURASY DEL CORREO DE LAS CULTURAS DEL MUNDO

LEONEL DURÁN SOLÍS

EDITORMARIANO FLORES CASTRO

[email protected]

ÉSTA ES UNA PUBLICACIÓN DELCENTRO DE ESTUDIOS SOBRE LA DIVERSIDAD CULTURAL (CEDICULT)

DEL MUSEO NACIONAL DE LAS CULTURAS

©TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS POR LOS RESPECTIVOS AUTORES DE LOS ARTÍCULOS, NOTAS Y FOTOGRAFÍAS.

MÉXICO, D.F., 1º DE AGOSTO DE 2011.