chayanov y la teoría de la economía campesina ii

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ALEXANDR V. CHAYANOV SOB RE LA TEORÍA DE LOS SISTEMAS ECONÓMICOS NO CAPITALISTAS En la teoría moderna de la economía se ha hecho costumbre pensar todos los fenómenos económicos en relación exclusivamente con la economía capitalista. Todos los principios de nuestra teoría —renta, capital, precio y otras categorías— se han formado dentro del marco de una economía basada en el trabajo asalariado que trata de obte- ner los máximos beneficios (o sea la cantidad máxima de la parte de los ingresos brutos que queda después de deducir los costos ma- teriales de la producción y los salarios). Todos los demás tipos (no capitalistas) de vida económica se consideran insignificantes o en proceso de extinción; por lo menos se piensa que no tienen influen- cia en las cuestiones básicas de la economía moderna y por lo tanto no presentan interés teórico. Tendremos que aceptar esta última tesis en lo que toca al inne- gable predominio del capital financiero y comercial en el comercio mundial y al innegable papel que desempeña en la actual organi- zación de la economía mundial. Pero de ninguna manera debemos extender su aplicación a todos los fenómenos de nuestra vida econó- mica. En el pensamiento económico no podremos avanzar tan sólo con las categorías capitalistas, porque una región muy vasta de la vida económica (la parte más grande del área de la producción agraria) se basa no en una forma capitalista, sino en la forma com- pletamente diferente de una unidad económica familiar no asala- riada. 1 Esta unidad tiene motivos muy especiales para la actividad económica, así como una concepción muy específica de lo que es remunerativo. Sabemos que la mayoría de las explotaciones cam- pesinas de Rusia, China, la India y casi todos los estados no euro- peos, y aun muchos europeos, ignoran las categorías de trabajo asa- lariado y salario. Incluso un somero análisis teórico de sus fenómenos económicos específicos no siempre encaja dentro del marco de 1 Los términos de unidad económica familiar, unidad económica de trabajo, unidad económica de trabajo familiar y unidad económica familiar de trabajo significan en este artículo la explotación económica de una familia campesina o artesana que no ocupa obreros pagados sino que utiliza solamente el trabajo de sus propios miembros, aun allí donde esta caracte rística no se mencione explícitamente. [491

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  • ALEXANDR V. CHAYANOV

    SOBRE LA TEORA DE LOS SISTEMAS ECONMICOSNO CAPITALISTAS

    En la teora moderna de la economa se ha hecho costumbre pensartodos los fenmenos econmicos en relacin exclusivamente con laeconoma capitalista. Todos los principios de nuestra teora renta,capital, precio y otras categoras se han formado dentro del marcode una economa basada en el trabajo asalariado que trata de obte-ner los mximos beneficios (o sea la cantidad mxima de la partede los ingresos brutos que queda despus de deducir los costos ma-teriales de la produccin y los salarios). Todos los dems tipos (nocapitalistas) de vida econmica se consideran insignificantes o enproceso de extincin; por lo menos se piensa que no tienen influen-cia en las cuestiones bsicas de la economa moderna y por lo tantono presentan inters terico.

    Tendremos que aceptar esta ltima tesis en lo que toca al inne-gable predominio del capital financiero y comercial en el comerciomundial y al innegable papel que desempea en la actual organi-zacin de la economa mundial. Pero de ninguna manera debemosextender su aplicacin a todos los fenmenos de nuestra vida econ-mica. En el pensamiento econmico no podremos avanzar tan slocon las categoras capitalistas, porque una regin muy vasta de lavida econmica (la parte ms grande del rea de la produccinagraria) se basa no en una forma capitalista, sino en la forma com-pletamente diferente de una unidad econmica familiar no asala-riada. 1 Esta unidad tiene motivos muy especiales para la actividadeconmica, as como una concepcin muy especfica de lo que esremunerativo. Sabemos que la mayora de las explotaciones cam-pesinas de Rusia, China, la India y casi todos los estados no euro-peos, y aun muchos europeos, ignoran las categoras de trabajo asa-lariado y salario. Incluso un somero anlisis terico de sus fenmenoseconmicos especficos no siempre encaja dentro del marco de

    1 Los trminos de unidad econmica familiar, unidad econmica detrabajo, unidad econmica de trabajo familiar y unidad econmica familiarde trabajo significan en este artculo la explotacin econmica de unafamilia campesina o artesana que no ocupa obreros pagados sino que utilizasolamente el trabajo de sus propios miembros, aun all donde esta caracterstica no se mencione explcitamente.

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    la economa clsica ni en la teora moderna de la economa que deella se deriva. Tenemos que ir ms all de este marco conceptualde la economa si hemos de realizar un anlisis terico de nuestropasado econmico.

    Los sistemas recientes de servidumbre en Rusia y esclavitud enlos Estados Unidos plantean la cuestin de si son aplicables los con-ceptos del pensamiento econmico contemporneo (capital, inters,renta econmica, salarios) . Los salarios, categora econmica en elsentido moderno de la palabra, estn claramente ausentes de lossistemas arriba mencionados; y junto con esta categora, el conte-nido terico acostumbrado de otras categoras de nuestros sistemaseconmicos desaparece, porque renta e inters, en tanto que crea-ciones tericas, estn indisolublemente ligados a la categora de lossalarios. Por otra parte, esa observacin nos hace adquirir una nuevacategora, completamente desconocida para la teora moderna: elprecio de los esclavos.

    Nos hallamos en una posicin aun ms difcil en lo tocante a lossistemas econmicos de los pueblos primitivos. En estos sistemas, unacategora bsica como el precio de mercado (fundamental paranuestro pensamiento terico) a menudo no existe. En esto, la es-tructura econmica, del colonato romano, as como la de la eco-noma natural de los primitivos, quedan cabalmente fuera del mar-co de la actual teora econmica. Incluso en relacin con la EdadMedia, nos resultara difcil analizar la formacin de los precioscon nuestros conocimientos actuales. Por ejemplo, qu precio le po-nemos a los productos que el seor feudal impone como pago enespecie y que exporta para su venta en remotos mercados?

    La escuela histrica alemana sin duda tiene el gran mrito dehaber escrito respecto del pasado econmico (sobre todo el germano-romano y el de la Antigedad) y de haber revelado detalladamentesu morfologa; pero incluso una descripcin completa y precisa comosa no llega a proporcionarnos una teora de los hechos econmicosdescritos. Sin embargo, la economa necesita urgentemente un an-lisis terico de nuestro pasado econmico; para cada uno de lostipos econmicos que en parte ya bemol descrito debe crearse unsistema econmico que corresponda a sus rasgos peculiares. Se meantoja que la investigacin en este sentido, aunque tal vez parezcacoleccin de antigedades de un aficionado, podra lograr bastante.Tan slo como paleontologa de la economa no solamente fomen-tara el anlisis comparativo de las formaciones econmicas existen-tes sino que tambin sera muy til para los fines puramente prc-ticos de la poltica econmica. Pues no slo el tipo de unidad econ-mica de trabajo familiar (que ms adelante definiremos detallada-

    TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS 51mente), sino tambin otros tipos ms antiguos, abundan todava enlos pases no europeos en la actualidad. El anlisis terico con cate-goras verdaderamente adecuadas a sus caractersticas contribuirams a la poltica colonial que, por ejemplo, la entrada a la fuerzade la economa de Zambezia en el lecho de Procusto de las catego-ras econmicas de la moderna escuela de Manchester.

    Sentimos mucho que ni Aristteles ni otros escritores antiguosnos hayan dejado una teora econmica, tal como entenderamoshoy la palabra, de la realidad econmica que los rodeaba. Los Padresde la Iglesia, contemporneos del rgimen feudal, con frecuenciatocaban los problemas econmicos en sus tratados; pero como sa-bemos, dedicaron toda su atencin al aspecto tico de la vida econ-mica. La literatura econmica rusa de fines del siglo xvn y princi-pios del xviii, representada por Sylvester, Pososhkov y Volinski, tra-taba principalmente de los asuntos econmicos privados o de pro-blemas de la administracin estatal. Ni la economa de esclavitudde los Estados Unidos ni la economa del perodo de los siervos enRusia nos han dejado una doctrina econmica completa correspon-diente a sus estructuras especiales. Como tenemos muy poco cono-cimiento de la literatura japonesa y la china, no podemos juzgar desus intentos tericos por explicar formas pasadas de vida econmica.Y ya que las pocas pasadas no crearon teoras acerca de sus siste-mas econmicos, nos vemos obligados a tratar de hacerlo nosotrosretrospectivamente.

    CATEGORAS ECONMICAS Y ECONOMA NATURAL

    Sabemos que la clave para entender la vida econmica en la socie-dad capitalista es la siguiente frmula para calcular la rerrtune-mtividad econmica: se considera remunerativa una empresa si suingreso global, 1G, despus de deducido el capital circulante adelan-tado (o sea el gasto material anual, GM, y los gastos en los salarios,ow) arroja una suma, S, tan glande o mayor que todo el capital(constante y circulante), c, de la empresa a un inters calculadosegn la tasa predominante en ese pas en ese momento (a).

    IG (GM Gw) c a I too

    Todos los clculos de economa terica empiezan, explcita otcitamente, con esta frmula. Sus elementos --el valor de inter-cambio (precio de mercado) del ingreso global y del gasto material,

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    los salarios y los intereses sobre el capital no son en este caso mag-nitudes accidentales de una economa privada sino fenmenos b-sicos de un orden social y econmico. El contenido y la misin dela economa es la explicacin cientfica de estos fenmenos funda-mentales.

    La doctrina econmica de la sociedad capitalista moderna esun sistema complicado de categoras inseparablemente relacionadasentre s: el precio, el capital, los salarios, el inters, la renta que sedeterminan unos a otros, son funcionalmente interdependientes. Siun elemento de construccin de este sistema se cae, el edifico enterose hunde. En ausencia de cualquiera de estas categoras econmicas,todas las dems pierden su carcter especfico y su contenido con-ceptual y ni siquiera pueden definirse cuantitativamente.

    As, por ejemplo, no podemos aplicar en su significado habitualcualquiera de las categoras econmicas arriba mencionadas a unaestructura econmica que no tenga la categora del precio (todo unsistema de unidades sobre una base de economa natural y que sirveexclusivamente para satisfacer las necesidades de las familias o co-lectivos trabajadores). En una economa natural, a la actividad eco-nmica humana la domina la obligacin de satisfacer las necesida-des de cada unidad de produccin, que es al mismo tiempo una uni-dad de consumo. Por eso, el presupuesto es aqu en alto grado cua-litativo: para cada necesidad familiar ha de proveerse en cada uni-dad econmica el producto cualitativamente correspondiente innatura.

    Slo puede calcularse (medirse) aqu la cantidad considerandola cuanta de cada necesidad: es suficiente, es insuficiente, le faltatanto ms tanto; tal es el clculo a hacer aqu. Debido a la elastici-dad de las mismas necesidades, este clculo no necesita ser muy exac-to. De ah que no plantee la cuestin de la remuneratividad com-parada de diversas erogaciones: por ejemplo, si ser ms provechosoo ventajoso cultivar camo o pasto, pues estos productos vegetalesno son intercambiables y no pueden remplazarse el uno por el otro;no hay, entonces, norma comn que se les pueda aplicar.

    Segn esto, toda ciencia de la economa natural, su concepcinde lo que es econmico y remunerativo, as como las "leyes" extra-as que dominan su vida social, son, como demostraremos ms ade-lante, de ndole muy diferente de las ideas y principios bsicos denuestra ciencia econmica acostumbrada, tal y como suelen presen-tarse en los manuales de economa. Solamente con la aparicin delcambio y la economa monetaria pierde la administracin su ca-rcter cualitativo. Ahora, el inters por la mera cantidad ocupa elprimer plano; es la preocupacin por obtener la cantidad mxima

    que pueda adoptar una forma cualitativa mediante el cambio. Alaumentar el cambio y la circulacin de dinero (naturaleza mercan-til de la economa), la cantidad se va haciendo ms y ms indepen-diente de la calidad. Empieza a obtener el valor abstracto de serindependiente de la calidad y su significacin especfica para nece-sidades dadas. La categora del precio adquiere ms importancia y,junto con otras categoras, si estn presentes, forma el sistema eco-nmico que es el nico tomado en cuenta por la economa.

    Un destino semejante amenaza a la economa terica si cual-quier otra categora sale del sistema: por ejemplo, la de los salarios.Incluso si de entre todos los sistemas econmicos posibles que notienen esta categora escogemos uno en que el cambio y el crdito(y con ellos las categoras de precio y capital) estn presentes (porejemplo, el sistema de unidades de trabajo familiar, campesino yartesano unidas econmicamente por procesos monetarios y de in-tercambio) , todava hallaremos que la estructura de semejante eco-noma est fuera de los sistemas conceptuales de una economaadaptada a la sociedad capitalista.

    En la explotacin familiar, la familia, equipada con medios deproduccin, emplea su capacidad de trabajo en cultivar la tierray recibe como resultado del trabajo de un ao cierta cantidad debienes. Una sola ojeada a la estructura interna de la unidad de tra-bajo familiar basta para comprender que es imposible sin la cate-gora de los salarios imponer en esta otra el beneficio neto, la rentay el inters del capital como categoras econmicas reales en el sen-tido capitalista de la palabra.

    Por cierto, el campesino o artesano que lleva su empresa sinpagar mano de obra recibe como resultado de un ao de trabajouna cantidad de mercanca que, despus de cambiada en el mer-cado, forma el producto bruto de su unidad econmica. De esteproducto bruto debemos deducir una cantidad para el gasto mate-rial requerido en el transcurso del ao; nos queda entonces el in-cremento de valor de los bienes materiales que la familia ha adqui-rido con su trabajo durante el ao, o, para decirlo de otro modo, elproducto de su trabajo. Este producto del trabajo familiar es lanica categora posible de ingreso para una unidad de trabajo fa-miliar campesino o artesano, porque no hay manera de descompo-nerlo analtica u objetivamente. Dado que no hay fenmeno so-cial de salarios, el fenmeno social de beneficio neto tambin falta.Entonces resulta imposible aplicar el clculo capitalista de la ga-nancia.

    Debe aadirse, naturalmente, que este producto indivisible deltrabajo no siempre ser el mismo para todas las unidades econ-

  • 54micas familiares. Variar segn la situacin del mercado, la ubica-cin de la unidad en relacin con los mercados, la disponibilidadde los medios de produccin, el tamao y la composicin de la fa-milia, la cantidad de tierra y otras condiciones de produccin de launidad econmica. Pero, como veremos, el excedente que la unidadeconmica obtiene por la mejor ubicacin o por una disponibilidadrelativamente mejor de los medios de produccin no es por su ndoleni su cuanta idntico a la renta y el inters del capital de la econo-ma capitalista.

    La cuanta del producto del trabajo la determinan principal-mente el tamao y la composicin de la familia trabajadora, elnmero de sus miembros capaces de trabajar y, adems, la produc-tividad de la unidad de trabajo y esto es especialmente impor-tante el grado de esfuerzo de los trabajadores, el grado de autoex-plotacin mediante el cual los miembros laborantes efectan ciertacantidad de unidades de trabajo en el curso del ao.

    GRADO DE EXPLOTACIN Y EQUILIBRIO INTERNO

    Concienzudos estudios empricos de las explotaciones campesinas enRusia y otros pases nos han permitido establecer la siguiente tesis:el grado de explotacin lo determina un equilibrio peculiar entre sa-tisfaccin de la demanda familiar y fatiga del trabajo.

    Cada nuevo rublo del creciente producto del trabajo familiarpuede considerarse de dos modos: en primer lugar, desde el puntode vista de su importancia para el consumo, para saciar las necesi-dades de la familia; en segundo lugar, desde el punto de vista delcansancio o la fatiga con que se produjo. Es evidente que con el in-cremento de produccin obtenido por un trabajo arduo, la valora-cin subjetiva del significado que para el consumo tiene cada nuevorublo ganado decrece; pero la fatiga de trabajar para ganarlo, querequerir una cantidad cada vez mayor de autoexplotacin, aumen-tar. Mientras no se alcance el equilibrio entre los dos elementos quese estn evaluando (o sea que la fatiga debida al trabajo se estimasubjetivamente inferior a la importancia de las necesidades por cuyasatisfaccin se aguanta el trabajo) , la familia, que trabaja sin pagarmano de obra, tiene toda clase de motivos para proseguir su acti-vidad econmica. En cuanto se llegue a este punto de equilibrio, encambio, no tendr objeto seguir trabajando, ya que todo gasto ulte-rior de energa de trabajo es ms difcil de aguantar para el cam-pesino o artesano de lo que significa renunciar a sus efectos eco-nmicos.

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    Nuestra obra, as como los abundantes estudios de A. N. Che-lincev, N. P. Makarov y B. D. Bruckus, demostr que este puntode equilibrio es muy variable. Se alcanza del siguiente modo: poruna parte, por las condiciones especficas reales de la produccinde la unidad, su situacin de mercado, y, por la ubicacin de launidad en relacin con los mercados (que determinan el grado defatiga del trabajo) ; por otra parte, por el tamao y composicin dela familia y la urgencia de sus necesidades, que determinan la eva-luacin del consumo. As, por ejemplo, cada aumento de producti-vidad del trabajo tiene como consecuencia la obtencin de la mismacantidad de productos con menos trabajo. Esto permite a la unidadeconmica aumentar su produccin y satisfacer plenamente la de-manda familiar. Por otra parte, la importancia de cada rublo deingreso bruto para el consumo aumenta en una economa familiargravada con miembros incapaces de trabajar. Esto hace que aumen-te la autoexplotacin de la mano de obra familiar, de modo que elnivel de vida de la familia, amenazado por la mayor demanda, semantenga en cierto modo igual.

    Partiendo de la ndole de la consideracin fundamental arribadescrita, la explotacin familiar tiene que servirse de la situacin delmercado y las condiciones naturales de un, modo que le permitaproporcionar un equilibrio interno a la familia, junto con el nivelms alto posible de bienestar. Esto se logra introduciendo en la es-tructura orgnica de la granja una inversin de trabajo que prome-ta el pago de trabajo ms elevado posible por unidad de trabajo.

    As, pues, el clculo aritmtico objetivo del beneficio neto msalto posible en la situacin de mercado dada no determina si seaceptar o no una accin econmica, ni la actividad total de launidad econmica familiar; eso se realiza mediante la confronta-cin econmica interna de evaluaciones subjetivas. Es verdad quese concede cierta consideracin a las condiciones objetivas particu-lares de la unidad econmica.

    Una unidad econmica que labora con los principios arribaesbozados no es necesariamente extravagante en su conducta econ-mica, porque, por lo general, los objetivos que rinden el ms altopago de trabajo por unidad de trabajo invertida y los que garanti-zan el ms alto beneficio neto posible a una unidad capitalista sonms o menos los mismos .Pero algunos estudios empricos demues-tran que, en cierto nmero de casos, las peculiaridades estructura-les de la explotacin familiar campesina abandonan la conductadictada por la frmula acostumbrada en favor del clculo capita-lista de los beneficios.

    Estas diferencias se aprecian con mucha claridad, por ejemplo,

    ALEXANDR V. CHAYANOV

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    en las comarcas densamente pobladas donde la escasez de tierra nopermite a la familia campesina desarrollar toda su capacidad detrabajo con formas ptimas de organizacin, o sea aquellas que rin-dan el pago de trabajo ms elevado posible. Para la unidad econ-mica capitalista, estas formas ptimas de organizacin econmica(el estado ptimo de intensificacin comercial se expresa en ella)son una norma absoluta. Con cada intensificacin adicional, elefecto de la nueva aportacin de trabajo decrece continuamente,segn la ley del rendimiento decreciente de la tierra; por consiguien-te, el beneficio neto tambin baja. En las explotaciones agrcolasdonde escasea mucho la tierra, por otra parte, la preocupacin porsatisfacer las necesidades anuales obliga a la familia a una intensi-ficacin de remuneratividad inferior. Tienen que pagar el aumentodel producto total del trabajo anual con una baja en el ingreso porunidad de trabajo.

    El profesor E. Laur, por ejemplo, ha estudiado las explotacionessuizas de poca tierra. Estas granjas triplicaban su intensidad. Sufranuna gran prdida de ingreso por unidad de trabajo, pero ganabanla oportunidad de utilizar plenamente su capacidad de trabajo, in-cluso en las parcelas pequeas, y de sustentar a sus familias. Delmismo modo, las granjas pequeas del norte y el oeste de Rusia in-crementaban el cultivo de la papa y el camo, que suelen sermenos remunerativos que la avena pero son de trabajo ms inten-sivo y aumentan as el producto bruto de la familia explotante.

    Dicho de otro modo: el negocio de un capitalista slo puede in-crementar su intensidad por encima del lmite de su capacidad pti-ma si la propia situacin de mercado modificada fuerza al ptimoen direccin de la mayor intensidad. En la unidad laboral familiarla intensificacin puede tambin efectuarse sin este cambio en la si-tuacin de mercado, sencillamente por la presin de las fuerzas in-ternas de la unidad, casi siempre como consecuencia de ser el ta-mao de la familia desfavorablemente proporcionado a la extensinde tierra cultivada. Los rasgos peculiares de la unidad laboral fami-liar campesina, sealados arriba, inevitablemente se hacen sentir entodo el sistema econmico si ste est basado de modo exclusivo enla economa familiar y por lo tanto no tiene la categora de lossalarios.

    Esta peculiaridad se hace especialmente patente cuando analiza-mos el elemento de la renta econmica en las condiciones de launidad familiar de trabajo. La renta como categora objetiva deingreso econmico, obtenida despus de deducir los costos materia-les de produccin, los salarios, y el inters usual sobre el capital pro-cedente del ingreso bruto, no puede existir en la unidad econmica

    57familiar, porque estn ausentes los otros factores. No obstante, losfactores usuales de formacin de renta, como un sueldo mejor y unamejor ubicacin respecto del mercado, seguramente existen tambinpara las unidades econmicas de trabajo familiar que producenartculos de comercio. Su efecto tiene que ser el aumento de la pro-duccin y la cantidad de pago por unidad de trabajo.

    Un anlisis ms a fondo indica lo siguiente: el producto deltrabajo indivisible de una familia, y por consiguiente la prosperi-dad de la explotacin familiar, no aumentan tan marcadamentecomo el rendimiento de una unidad econmica capitalista en queinfluyan los mismos factores, porque el campesino trabajador aladvertir el aumento de productividad del trabajo inevitablementeequilibrar antes los factores econmicos internos de su explotacin,o sea con menos autoexplotacin de su capacidad de trabajo. Sa-tisface las necesidades de su familia ms cabalmente con menos gas-to de trabajo, y as reduce la intensidad tcnica del conjunto de suactividad econmica.

    , 11" Segn los profesores A. N. Chelincev y N. P. Makarov, este fac-tor de renta, que se expresa en un nivel de prosperidad ligeramentems elevado, no puede durar mucho, porque las regiones con talnivel elevado de prosperidad inevitablemente atraern poblacin delas regiones menos favorecidas. Esto reducir las tierras posedaspor las distintas explotaciones, a las que obligar a intensificar loscultivos, y rebajar la prosperidad al nivel tradicional acostumbrado.

    gil

    EL PRECIO DE LA TIERRA

    Si en estas circunstancias se desarrollan el arrendamiento de la tie-rra y un mercado libre de la tierra, los precios de la tierra natural-mente no los puede determinar la capitalizacin de la renta, ya quela misma categora de renta (tal y como la entendemos actualmen-te) no existe. No obstante, en un mercado de tierra monetario, laspropiedades no cambian de manos sin pago. As nos encontramosfrente al problema fundamental de la economa de la unidad de tra-bajo familiar: qu determina el precio de la tierra? Cunto pue-de pagar por la tierra la explotacin campesina? En cunto lavender?

    Podemos responder a estas preguntas si las enfocamos con lanocin del concepto especfico de remuneratividad que definimospara la unidad familiar de trabajo. Esto demuestra que la tenenciao las compras de tierra son claramente ventajosas para la familiacampesina slo si con su ayuda la familia puede alcanzar el equili-

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    brio de su unidad econmica, sea con un nivel superior de vida, seacon un gasto menor de energa de trabajo.

    Las explotaciones campesinas que tienen una cantidad consi-derable de tierra y por eso estn en condiciones de utilizar toda lacapacidad de trabajo familiar en un grado ptimo de intensidad decultivo no necesitan arrendar ni comprar tierra. Cualquier gastoen tierra les parece poco razonable, ya que no aumenta la prospe-ridad de la familia y disminuye sus recursos. Si una, familia slopuede disponer de una parcela pequea que slo le permite em-plear parte de la capacidad de trabajo dada, la adquisicin de unanueva porcin con vistas a utilizar la potencia de trabajo no em-pleada es en extremo importante, porque le permite acercar laintensidad de la unidad al ptimo y utilizar las horas de trabajoanteriormente perdidas en inactividad forzosa. En ambos casos, elaumento de pago por unidad de trabajo con la elevacin resultantedel nivel de prosperidad puede ser tan importante que permita ala unidad familiar pagar el arriendo o la compra de una buena par-te del producto bruto obtenido de la parcela adquirida.

    Podemos incluso afirmar, haciendo caso omiso de la aparenteparadoja, que cuanto ms est dispuesta a pagar la granja campe-sina por la tierra, menos posee ya y, por ende, ms pobre es. En con-clusin, debemos considerar que el precio de la tierra, como catego-ra objetiva, depende de la situacin dada en el mercado de latierra, o sea de la cuanta y la urgencia de la demanda de tierraentre los campesinos con poca tierra y del nmero de ofertas de tie-rra disponible por una u otra razn.

    En el sistema de explotacin familiar, el nivel del precio de latierra no depende solamente de la situacin de mercado para la pro-duccin agrcola y de la remuneratividad del cultivo de la tierra quede ah se deduce, sino que depende en mayor grado del aumento en ladensidad de poblacin rural local. Los estudios sobre movimiento enlos precios y arriendos de la tierra en Rusia llevados a cabo por elprofesor V. Kosinski y los datos correspondientes en los estudios delprofesor Laur sobre las granjas campesinas de Suiza han confirma-do que los campesinos con poca tierra pagan por la tierra preciosque exceden sustancialmente a la renta capitalizada. Por ello, esosdatos pueden servir de verificacin emprica de nuestra posicinterica.

    TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS 59

    LA TASA DE INTERS EN' LA UNIDAD DE TRABAJO FAMILIAR

    Es en extremo interesante que otras categoras econmicas mutua-mente dependientes, como la tasa de inters sobre el capital, se con-ducen en forma anloga en el sistema de la economa de trabajofamiliar. Es evidente que la unidad de trabajo familiar consideraprovechosa la inversin de capital solamente si proporciona la posi-bilidad de un nivel de bienestar ms elevado; de otro modo, resta-blece el equilibrio entre cansancio del trabajo y satisfaccin de lademanda.

    En todos los casos en que la nueva erogacin de capital prevista,sea por la mayor productividad del trabajo o por el ensanchamientode la superficie, promete realizar este aumento de prosperidad, lafamilia tal vez pague un inters desusadamente elevado por el capi-tal requerido. No obstante, el inters no debe ser tan elevado queanule todos los provechos por lograr con la nueva inversin de ca-pital. Por una parte, la demanda en el momento en que se da estasituacin, y por otra parte la aportacin de capital entonces dispo-nible determinan el precio de mercado en la forma del inters nor-mal del prstamo en ese momento.

    Es decir que de acuerdo con esto debemos suponer que la "cir-culacion del capital" en la unidad de trabajo familiar no tiene comoconsecuencia un ingreso procedente del capital en forma de, unafuente de ingresos especial objetivamente disponible, sino que ejerceuna influencia importante en el producto del trabajo y por ende enel nivel del producto del trabajo indivisible y en el momento crticode equilibrio econmico interno. El nivel normal de la tasa de inte-rs del mercado no lo determina la renovacin del capital produc-tivo de todo el pas (lo que evidentemente no concuerda con lafrmula clsica D M D') , sino solamente la situacin de mer-cado de la demanda y la oferta en aquella parte del capital de lanacin en el sistema de crdito.

    Su circulacin interna de capital es tambin muy peculiar parala unidad de trabajo familiar. Si la familia no solicita un prstamoa crdito a una persona del exterior, siempre tendr que considerarno slo que cada gasto de capital para la unidad econmica, pornueva formacin de capital v por renovacin de capital, es venta-joso, sino adems que la familia tendr que ser capaz de sacar lacantidad para ese gasto de sus ingresos de trabajo y esto, natural-mente, a costa del consumo inmediato. Claro est que eso slo serposible si el valor de consumo de la cantidad destinada a la produc-

  • ALEXANDR V. CHAYANOV60cin resulta a los ojos de la familia menor que su valor para la pro-duccin.2

    Evidentemente, cuanto mayor sea su producto anual, ms fciles para la familia sacar de l los medios para la formacin de capi-tal. En tiempos difciles, de cosechas malas o de desventajosas situa-ciones de mercado, a la familia le costar extraer de su pequeopago una parte destinada al consumo para emplearla en formarnuevo capital o simplemente para el remplazo ordinario del capitalcirculante.

    ESTRUCTURA ECONMICA DE LOS SISTEMAS CAPITALISTAS

    Pueden, pues, definirse las siguientes categoras para el sistema eco-nmico de la unidad familiar de trabajo o, dicho de otro modo,para la estructura econmica de una sociedad en que la produccintiene la forma de unidades campesinas y de artesana y donde noexiste la institucin del trabajo asalariado.

    El ingreso del trabajo, uno e indivisible, de la familia, quereacciona ante los factores formadores de renta.3

    Los precios de las mercancas.La reproduccin de los medios de produccin (formacin de

    capital en el sentido ms lato de la palabra).Los precios del capital en la circulacin de crdito.

    5] Los precios de la tierra.Obtenemos un cuadro aun ms peculiar si complicamos la

    forma de la unidad econmica familiar aqu examinada suponiendoque no existe la categora de precio de mercado, es decir que nohay factor de intercambio de mercancas. A primera vista parece-

    2 La comparacin de las evaluaciones subjetivas del valor de producciny consumo de la ensima unidad del producto de trabajo es uno de los mscomplicados problemas de la teora de la unidad de trabajo familiar; esttratada a fondo en el captulo IV de mi obra Die Lehre von der baterlichenWirtschaft (Berln, P. Parey, 1923). En nuestro anlisis tomamos comomedida del valor de produccin el grado de fatiga del trabajo que ha desoportarse si la ensima unidad de ingreso no se emplea para la renovacino formacin de capital.

    " Ponemos este ingreso nico e indivisible del trabajo de la familia entrelas categoras econmicas porque lo determinan no slo los factores tcnicossino adems toda una serie de factores sociales: el desarrollo de un niveltradicional habitual de demanda, la densidad de poblacin local y, filial-mente, los factores particulares de formacin de renta.

    TEORIA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS

    ra que la explotacin familiar plenamente normal no presentarafenmenos de tipo econmico. Pero una mirada ms atenta demues-tra que no es as. Parece posible hallar toda una serie de relacionessociales y econmicas en el bloque social y econmico compuestopor varias explotaciones integrales de trabajo que satisfacen sus ne-cesidades in natura. stas controlan la organizacin de cada una delas distintas unidades agrcolas naturales y normalizan su estructurade produccin.

    En realidad, la estructura econmica privada interna de las dis-tintas explotaciones familiares naturales es la misma que las de lasexplotaciones con intercambio de bienes, a excepcin de algunas pe-culiaridades en el clculo de la remuneratividad, que indicamos alcomienzo de este artculo. La misma nocin de remuneratividad esel factor determinante; aun resulta ms claro que es imposible apli-car la frmula de remuneratividad de una empresa capitalista. Elequilibrio econmico entre satisfaccin de la demanda y fatiga deltrabajo se determina tambin del mismo modo. Otro tanto puededecirse de la formacin y el remplazo de los medios de produccin.Aun cuando est ausente aqu el factor formador de renta debidoa la ubicacin del mercado, las diversas condiciones de la tierray el clima introducen sin duda en el sistema de la unidad econmicanatural algo semejante al factor de renta.

    Ms importante para la estructura de la explotacin natural esque la intensidad del cultivo y sus formas organizativas dependen engrandsima medida de la extensin de tierra a emplear, del tamaode la familia trabajadora y de la amplitud de su demanda, o sea defactores internos (tamao y composicin de la familia y su relacinen proporcin a la extensin de terreno cultivado). La densidad depoblacin y las formas de utilizacin de la tierra se convierten asen factores sociales extremadamente importantes que determinande modo fundamental el sistema econmico. Otro factor socialmenos importante, pero esencial, es el nivel de vida tradicional,impuesto por las costumbres y el hbito, que determina la amplitudde las pretensiones de consumo y, por ende, el empeo de la capa-cidad de trabajo.

    O sea que si pensamos en una regin de la economa natural Vanalizamos ese bloque social y econmico, vemos que a pesar de laausencia de interrelaciones y de la disociacin econmica de las dis-tintas unidades econmicas, en esa regin se desarrolla cierto n-mero de complicados procesos econmicos, cuyo factor principal esde tipo demogrfico (densidad de poblacin y migracin). stosdeterminan la utilizacin de la tierra, el nivel de prosperidad y, conello, la cantidad siempre variable de acumulacin de capital y gra-

    61

  • TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS62

    vabilidad de la poblacin; esta ltima forma la base para la orga-nizacin del estado y la cultura nacionales.

    Independientemente de los factores demogrficos, regiones muyprsperas destacarn all donde los factores de formacin de rentacalidad superior del suelo, etc. son especialmente eficaces. Es-tudios empricos de pases agrarios seminaturales muestran que lacoaccin no econmica a falta de una influencia reguladora de-bida a la situacin del mercado y su constreimiento econmicose hace muy importante en la forma de control administrativo de lautilizacin de la tierra y a veces en la forma de "patrn blico" demigracin de la poblacin.

    As, pues, incluso en un pas cuya economa tiene una estructu-ra absolutamente natural podemos hallar las siguientes categorassociales v econmicas, que determinan la estructura de las distintasunidades econmicas.

    El producto indivisible del trabajo de la familia, constituidosegn: a] la densidad de poblacin; b] el nivel habitual, tradicionalde la demanda; e] la capacidad de formacin de renta del suelomejor y de condiciones climticas ms favorables.

    La capacidad que de formar capital tiene la poblacin y sugravabilidad, que dependen del nivel de prosperidad.

    3] Las medidas econmicas y polticas del poder estatal, quemediante la coaccin no econmica controla el modo de utilizacinde la tierra y la migracin del pueblo.

    SISTEMA ESCLAVISTA

    En cabal contraste con el sistema econmico familiar hay otro tipode economa que tampoco tiene la categora de los salarios: el sis-tema de economa basado en la esclavitud. La diferencia resultabien clara cuando examinamos las estructuras de las dos unidadeseconmicas en relacin con su morfologa econmica privada. Elagricultor y el artesano se administran independientemente; contro-lan su produccin y las dems activdades econmicas bajo su propiaresponsabilidad. Tienen a su disposicin todo el resultado de laproduccin de su trabajo y los impulsan a lograr esta produccin detrabajo las ncesidades de la familia, cuya satisfaccin slo limita elcansancio del trabajo. Ninguno de estos factores existe en la econo-ma de la esclavitud.

    El esclavo trabaja en una produccin dominada por la voluntadde un extrao; es slo un instrumento ciego y no tiene derecho a

    63

    disponer del producto de su trabajo. Solamente lo mueve a produ-cir trabajo el miedo al castigo y satisface sus necesidades a discrecindel amo slo hasta donde es necesario para que conserve su capaci-dad de trabajo.

    Para el empresario dueo de esclavos, la esclavitud slo es ra-cional si le deja un producto excedente despus de deducir los gas-tos y el costo de los esclavos; despus de realizado en el mercado,este producto da un ingreso objetivo por la posesin de esclavos. Nie-buhr seala que la institucin de la esclavitud naci solamente en elmomento en que la capacidad productiva del trabajo humano sehaba desarrollado tanto que poda lograrse este producto exce-dente.

    El costo de mantener esclavos lo determinan normas fisiolgicasy las tareas de trabajo asignadas; no puede tomarse como una ca-tegora econmica sustentada por complicadas relaciones socialesy econmicas anlogas a las relacionadas con la categora de lossalarios. Por eso, el esclavo apenas difiere de las bestias de carga enlo tocante a la organizacin de la empresa, si hacemos caso omisode las normas ticas que configuran la vida patriarcal, de especialsignificado, por ejemplo, en la esclavitud musulmana.

    Los rasgos peculiares arriba sealados en la organizacin econ-mica privada de una empresa esclavista afectan a toda una seriede categoras econmicas fundamentales. El dueo de esclavos re-cibe cierta suma de dinero, en calidad de ingreso, despus de dedu-cir del producto bruto de su empresa los costos materiales de pro-duccin y los gastos que ocasiona el mantenimiento de los esclavos.Cuando se deduce el inters acostumbrado calculado sobre el capitalinvertido fijo y circulante, pero no sobre el valor de los esclavos, elresto puede atribuirse a la utilizacin de los esclavos.

    En la sociedad capitalista, este resto atribuido al trabajadorsera aquella parte de sus salarios que excede al valor de su alimen-tacin, vestido y alojamiento, proporcionados en especie por elempresario. En el sistema de la economa esclavista, la parte del pro-ducto atribuida en trminos econmicos al trabajo de los esclavosno la reciben stos sino su amo, por ser el propietario de ellos; re-sulta as un nuevo tipo de ingreso no devengado que es la razn deser de la esclavitud.

    Este ingreso, que no es ya una mera norma tcnica, como porejemplo el costo de mantener esclavos, lo determina una complica-da estructura de toda una serie de interrelaciones sociales v econ-micas. Es una categora econmica y constituye la renta de los es-clavos, que recibe el dueo en razn de su derecho de propiedad. Sila unidad econmica esclava es agraria, el ingreso no devengado

    ALEXANDR V. CHAYM\ OV a

  • 64 ALEXANDR V. CHAYANOV

    procedente de la posesin de esclavos aumentar junto con la pro-gresin de condiciones menos ventajosas de produccin y transpor-te a otras relativamente ms ventajosas. Como el esclavo y su pro-duccin de trabajo siguen siendo los mismos y el ingreso del amo nodecrecer por sustituir algunos esclavos por otros, el ingreso extraque estamos examinando aqu no puede estar relacionado con laposesin de esclavos como tal sino que ha de ser atribuido al terrenoy es consecuencia de su mejor calidad o la mejor situacin del mer-cado, y hay que considerarlo una renta diferencial ordinaria. En lamedida en que es posible lograr los mismos resultados tcnicos ba-sados en el trabajo de los esclavos que' los basados en el trabajopagado, esta renta econmica corresponder tambin cuantitativa-mente a la de la agricultura capitalista.

    As, pues, todas las categoras sociales y econmicas de la eco-noma capitalista pueden conservar su puesto en el sistema tericode la economa esclavista ; slo es necesario poner la categora derenta de los esclavos en lugar de la de trabajo pagado. La rentade los esclavos se la apropia el dueo de los esclavos, y su valor capi-talizado constituye el precio de los esclavos como fenmeno objetivode mercado.

    La cantidad cuantitativa de la renta de los esclavos la determinala productividad de su utilizacin, cosa anloga a la determinacinde los salarios por la productividad del trabajador marginal calcu-lada por los tericos anglosajones en sus sistemas. La determinacincuantitativa del precio de mercado de un esclavo es ms complicada.Ya hemos sealado que tiende a ser una cantidad semejante a larenta capitalizada del esclavo marginal. En cierto modo, ste es elprecio de la demanda, mientras que por otra parte el costo de pro-duccin de la "produccin esclavista" forma el precio de la oferta.Dentro de este contexto debemos distinguir entre dos sistemas deeconoma esclavista:

    Un sistema en que la oferta de material esclavo se realizacapturando en la guerra esclavos adultos de pueblos extraos. Laexplotacin de su trabajo es total y conduce a su rpido agotamien-to; esto evita el costo de criar los hijos (reproduccin) , as corno elmantenimiento prolongado de los adultos.

    Un sistema en que la oferta se da de un modo natural me-diante la reproduccin de material esclavo dentro de la misma fa-milia esclava; naturalmente, ste requiere gastos de crianza de lanueva generacin, as como los del reducido grado de explotacinde la capacidad de trabajo de los esclavos, sobre todo de las hem-bras.

    TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS 65En el primer caso, el costo de produccin de la produccin es-

    clavista es el costo de la captura; en el segundo, el costo de criar yeducar, que por lo general es mucho mayor. En los perodos hist-ricos que favorecan la captura de material humano en la guerra--como en la Roma antigua, en los estados del medio oriente en laAntigedad y aun, durante las primeras dcadas, en la Amrica his-pana, el costo de produccin el de la produccin de esclavosera muy bajo, y la renta capitalizada usual de los esclavos lo sobre-pasaba muchas veces. Buena prueba de ello es el alto precio demercado de las patentes de esclavitud de la corona espaola, quedaban licencia para la captura e importacin de esclavos durante elprimer perodo de importacin de negros a Amrica.

    El material humano era barato y esto permita aumentar la ex-tensin de la propiedad y haca que se emplearan esclavos en eltrabajo con una productividad cada vez menor hasta el punto, na-turalmente, en que la renta de los esclavos continuamente decre-ciente se haca idntica al costo inicial de su adquisicin. Este factordeterminaba el precio de mercado del esclavo y la extensin de unaeconoma basada en la esclavitud. Como las fuentes de captura deesclavos en la guerra se agotaban por los frecuentes ataques, el costoincial de la adquisicin de esclavos aument; su precio de mercadosubi rpidamente, y muchos empleos de esclavos que generabanuna pequea renta del esclavismo ya no eran remunerativos y sefueron abandonando. Como consecuencia disminuy la extensin dela economa basada en la esclavitud.

    Podemos sacar de esto la conclusin de que un factor importanteen el declinar del antiguo sistema de la esclavitud fue que para ga-rantizar la oferta de esclavos hubo que renunciar a la guerra y a lacaptura en favor de la produccin pacfica por medio de la repro-duccin natural. La unidad econmica antigua se enfrentaba aqua costos de produccin tan elevados que empezaban a dar alcancea la renta capitalizada del esclavismo.

    De cualquier modo, el precio de los esclavos, fenmeno sujetoa las leyes del mercado, es una categora objetiva que determina laproduccin de esclavos en un clculo econmico particular. Es evi-dente que la unidad econmica esclava, desde el punto de vistaeconmico privado, puede parecer provechosa slo mientras la pro-duccin de los esclavos rinda un producto neto no inferior a larenta de los esclavos existente en el momento en tanto que factoreconmico objetivo y que, por medio del mercado, se realiza en elprecio de los esclavos.

    Debemos tambin subrayar que la esclavitud, o para decirlo deun modo ms general, la servidumbre humana en tanto que fen-

  • 611

    obrok, mientras que la renta diferencial la determina en esas cir-cunstancias la diferencia entre la capacidad de pago del campesinomarginal y la de cualquier otra explotacin campesina. Consideran-do la gran diferencia cualitativa en el modo de formarse y pagarseel obrok y la renta de los esclavos, as como la diferencia en la orga-nizacin de la produccin en la unidad econmica esclava en granescala y la unidad sierva en pequea escala, no podemos esperarque la renta de los siervos y la renta de los esclavos sean cuantitati-vamente iguales.

    Aun son mayores las diferencias en el proceso de formacin delprecio de los siervos por una parte y de los esclavos por la otra.Hemos sealado ya que el costo inicial de la adquisicin de esclavosdesempea un gran papel en la formacin del precio de los escla-vos. Pero con la unidad econmica sierva de obrok, el dueo no tienecostos econmicos para la reproduccin del material humano. Poreso, el nmero de siervos no lo determina el equilibrio entre el pro-ducto marginal de los siervos y el costo inicial marginal, corno es elcaso en la unidad econmica esclava; el incremento de la procrea-cin, y con l el nmero de siervos, es problema de stos. Por con-siguiente, la capacidad de pagar y por tanto la renta del siervo mar-ginal las determina el nmero real de siervos existentes en determi-nado territorio y determinado momento.

    Lo que queda dicho es suficiente para una descripcin morfo-lgica de la explotacin de obrok. Comparando este sistema con eltipo econmico de la explotacin esclava podemos convencernos porilustracin de que ambos sistemas difieren totalmente y que en susrelaciones los determinan elementos objetivos muy distintos, a pesarde algunas semejanzas jurdicas exteriores.

    Esta comparacin hace ver claramente las diferencias funda-mentales en los dos tipos de economa. Ha de notarse que ambos sis-temas son tambin totalmente diferentes en su concepcin de laremuneratividad y el clculo econmico.

    El empresario, en la unidad econmica esclava, se aproxima auna frmula ligeramente modificada de clculo de la remunerativi-dad capitalista en lo que toca al concepto de remuneratividad parasu empresa. En la cuenta de egresos, en lugar de los salarios poneel costo tcnica y fisiolgicamente determinado del mantenimientode los esclavos. Y divide su producto neto en tres secciones: interssobre el capital, renta y renta de los esclavos.

    En la unidad econmica sierva que paga obrok es totalmentediferente. Un rasgo muy peculiar de esta unidad es cierta divisindel sujeto econmico en que el concepto de remuneratividad de lafamilia campesina est en la forma que hallamos en la unidad de

    TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS 69

    CATEGORAS ECONMICAS DEL SISTEMA E SCLAVISTA YEL DE "OIIROK"

    Sistema econmico esclavista Sistema econmico siervode "obrok"

    Precio de las mercancas.[Bienes de capital en pose-sin de los siervos (la pro-duccin se efecta en la ma-nera de la unidad econmicade familia trabajadora, noes categora econmica sinopuramente natural.]Producto indivisible del tra-bajo de la familia.

    Inters del capital prestado.

    Renta de los siervos (obrok).Precio de los siervos.Ingreso semejante a rentaque el seor recibe por efec-to de factores generadoresde renta sobre la cantidaddel obrok.Precio de la tierra.

    trabajo familiar; aparte de esto, el clculo del que posee siervos ytierra es el de un rentista tpico y expresa la bsqueda de una in-versin de capital lo ms remunerativa posible.

    La diferencia de naturaleza entre el obrok y las unidades econ-micas esclavas arriba sealada nos lleva a dos consecuencias eco-nmicas muy peculiares. El amo de campesinos que pagan obroktiene derechos de propiedad y de recibir la renta, pero al mismotiempo, a diferencia del empresario de la unidad econmica esclava,no tiene unidad de produccin propia. Este hecho se manifesta cla-ramente en el interesante y peculiar modo en que el obrok est engran parte sometido a la influencia de factores demogrficos, mien-tras que la renta de la unidad econmica esclava es independientede ellos.

    Adems, en la organizacin de la unidad econmica esclava, el

    ALEXANDR V. CHAYANOV

    Precios de las mercancas.Capital, adelantado por elamo y que circula en la for-ma capitalista del procesode produccin (D-M-D').Parte de este capital es elcosto de mantener esclavos.

    [Costo de mantenimientode los esclavos no es ca-tegora econmica sino pu-ramente natural.]Beneficio del capital (in-ters).Renta de los esclavos.Precio de los esclavos.

    7j Renta diferencial.

    8] Precio de la tierra,

  • 70 ALEXANDR V. CHAYANOV TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS 71nmero de esclavos puede adaptarse, y se adapta, a la necesidadptima de mano de obra de la unidad, o sea el grado ptimo de in-tensidad que promete la mxima renta de los esclavos. Pero en launidad econmica sierva, la relacin entre capacidad de trabajodisponible y cantidad de tierra cultivada no es tan fcil de llevar aun ptimo para el dueo de la tierra y el campesino porque, apartede raras excepciones, el movimiento demogrfico en este rgimenes de ndole puramente natural y elemental. Por eso tenemos aqula posibilidad de un exceso relativo de poblacin que, como ya se-alamos en nuestro anlisis de la unidad econmica de trabajofamiliar, hace que la intensificacin vaya ms all del ptimo yrebaje el nivel de vida de la poblacin as como su capacidad depagar impuestos.

    La consecuencia es que tenemos el fenmeno peculiar de la rentanegativa de la sobrepoblacin, que consume una buena parte delobrok. El nico modo de salir de este estado de cosas es trasladarparte de la poblacin sierva de la tierra sobrepoblada y llevarla acolonizar regiones escasamente pobladas. En este caso, naturalmente,obtenemos un acentuado incremento en la renta servil pagada porla poblacin trasladada, que ahora ha logrado una relacin ptimacon la tierra. Con la renta aumenta el precio de los siervos resultan-te de la capitalizacin de la renta. Esto hace muy beneficioso todomovimiento de poblacin y colonizacin, tanto para el dueo de unazona econmica de obrok como para los campesinos a quienes atae.

    Concluyendo nuestra comparacin de las unidades econmicasesclava y sierva, quisiramos hacer el mayor hincapi en que dadasla misma situacin de mercado y las mismas condiciones naturalese histricas, las rentas obtenidas en ambos casos (la de los esclavos yla de los siervos) no siempre son de la misma magnitud; antes bien,pueden diferir considerablemente en su cuanta. Entrar en todos losdetalles de este problema, en extremo interesante, requerira antetodo el anlisis emprico de un material extenso. Por lo tanto, noslimitaremos a mencionar de acuerdo con esa diferencia que en laRusia antigua de la poca de los siervos podemos reconocer regio-nes con una forTna de economa predominantemente de obrok y otrasdonde predominaba la renta del trabajo, que econmicamente sig-nificaba cierta tendencia a la organizacin esclavista de la economa.Con el tiempo, esas regiones cambiaron de configuracin geogrficadebido a la presin de diversos factores. Ac unas veces, all otras,la renta de los esclavos quedaba respectivamente por encima o pordebajo del obrok de los siervos; adaptndose a estos cambios, losterratenientes trasladaban a sus campesinos, de acuerdo con la "si-tuacin de mercado", de la renta del trabajo al obrok y viceversa.

    La imposicin de un sistema de feudos en una regin de econo-ma natural agraria, caso frecuente en la historia, es de gran interspara el anlisis terico. Es una forma especial de economa feudalen que el estrato bsico de los productores primarios los campe-sinos tributarios sigue en una economa totalmente natural y pagatributos al seor feudal en especie, mientras que los perceptores delos tributos duques, condes, monasterios, etc. "realizan" en mer-cados lejanos en forma de artculos de comercio la renta econmicay las rentas de los siervos sacadas en especies.

    En este sistema, con una estructura econmica general corres-pondiente al tipo de economa sierva de obrok que acabamos de ver,la formacin del precio para los productos recogidos por el seorfeudal en forma de pago en especie y realizados en mercados leja-nos es especialmente interesante. Evidentemente, el elemento costode produccin no puede desempear un papel en esto, a menos queconsideremos como costo de produccin el mantenimiento de unaparato de coercin (extraeconmica) para recoger los tributos yreprimir las rebeliones.

    Sabemos que el dueo de un siervo que paga obrok y de unatenencia feudal interviene muy poco en la organizacin real de laproduccin. La cantidad de producto que forma la renta feudal espara l una cantidad dada en especies, limitada por la capacidad detributacin de la poblacin dependiente del dominio, que no puedeforzarse impunemente. Pero el seor feudal puede, hasta cierto pun-to, iniciar cambios en la composicin de los productos entregadospor la poblacin tributaria como pago en especies y tratar de adap-tarla a la situacin del mercado. Mas considerando la limitadaflexibilidad de las explotaciones campesinas, hay tambin barrerasimportantes que se oponen a esta forma de las actividades econ-micas del seor feudal. Por lo tanto, las actividades econmicas delseor feudal y su intervencin en el mercado estn casi siempre con-denadas a ser pasivas. Los precios de sus mercancas no tienen rela-cin con su produccin y los determina cabalmente la receptividaddel mercado; son precios de realizacin de una cantidad dada deciertas mercancas.

    Dada esta orientacin particular de intercambio y monetaria, larenta que recibe el seor feudal en virtud de su tenencia feudal de-pende no slo de la cantidad del pago en especie sino tambin de lasituacin de mercado para la venta de los productos recibidos. Lasfluctuaciones en la situacin de mercado pueden, a pesar de la can-tidad constante de pago en especie, influir favorable o desfavorable-mente en la renta y, por ende, en el precio de la tenencia. La nicaactividad econmica posible del seor feudal tiene, pues, que limi-

  • 72 ALEXANDR V. CHAYANOV

    tarse a ciertas medidas de tipo econmico y poltico que le parecenapropiadas para aumentar la prosperidad de sus residentes y, conella, su capacidad de pagar impuestos.

    Aparte de estos cinco tipos de economa organizada de un modono capitalista hemos tenido en nuestro pasado econmico, y todavatenemos, toda una serie de otras formas, transitorias e independien-tes. En el vasto grupo de la agricultura campesina podemos porejemplo distinguir entre el tipo de explotacin familiar y la explo-tacin semifamiliar (explotacin agrcola), que utiliza mano deobra pagada adems del potencial de trabajo familiar, pero no hastael punto de que la explotacin adquiera un carcter capitalista. Elestudio terico de este caso demuestra que la presencia de la cate-gora de los salarios modifica algo el contenido de las categorasusuales de la explotacin familiar pero no llega a remplazarlas porlas categoras de una explotacin capitalista.

    Sin duda debe reconocerse tambin que el trabajo en la poca delos siervos en Rusia no significaba esclavitud en el sentido de la es-clavitud de los negros en Amrica, ni siquiera la de la Antigedad.aunque se le asemejara, y a pesar de que las leyes econmicas queregulan la renta del trabajo no coinciden ya con las que sealamospara la granja sierva de obrok. Y tampoco pdemos hacer entrarla economa domstica de la Antigedad [oikos] en el marco de nin-guno de los tipos econmicos puros que hemos estudiado.

    La trustificacin de la industria capitalista que ahora avanzay se desarrolla, as como las formas de capitalismo estatal y muni-cipal apreciables al empezar el siglo xx, es casi seguro que no en-cajan en el esquema de la teora clsica de la economa y que exi-girn una revisin de doctrinas. Complicaciones muy interesantesplantear para la teora econmica el sistema de cooperativas agr-colas que se est desenvolviendo rpidamente ante nuestros ojos.Pero preferimos limitarnos a lo que llevamos dicho; el anlisis de loscinco tipos econmicos es suficiente para esclarecer la inaplicabilidadde las categoras usuales de economa a todos los casos de la vidaeconmica. No puede ser misin de este breve artculo dar toda unateora de las formas econmicas no capitalistas.

    ECONOMA SOCIALISTA

    Tenemos que hacer una sola excepcin para un sistema econmicoque todava no ha tenido su cabal realizacin pero que ha atradoen gran medida la atencin de nuestros tericos contemporneos.Nos referimos al sistema de colectivismo estatal o comunismo en lo

    73tocante al modo en que han evolucionado sus bases en los tratadosde sus tericos y a los intentos de hacerlo realidad que se hanefectuado en diversas pocas en el curso de la historia de la huma-nidad.

    Por desgracia, en ninguna parte de su crtica de la sociedad ca-pitalista desarrollaron plenamente Marx y los ms importantes desus partidarios los fundamentos positivos de la estructura orgnicade una economa socialista. Por eso tendremos que intentar nos-otros la construccin de una teora de esa estructura tomando comopunto de partida algunas observaciones de Marx en Miseria de lafilosofa, as como algunos estudios de N. Bujarin y E. Varga y, so-bre todo, las ideas que resultaron eficaces en los intentos prcticosde creacin de una sociedad comunista en diversos estados europeosen 1918-1920.

    Segn estos intentos, el comunismo es un sistema econmico enel cual todos los fundamentos econmicos de la sociedad capitalistacapital, inters del capital, salarios, renta se eliminan por com-pleto mientras que se conserva y aun perfecciona todo el aparatotecnolgico actual de la economa.

    En el orden econmico comunista que debe realizar esta misin,se concibe la economa nacional corno una sola y enorme unidadeconmica de todo el pueblo. La voluntad del pueblo dirige pormedio de los rganos estatales sus instrumentos, y el estadoadministra la unidad econmica de acuerdo con un plan econmicounificado que utiliza plenamente todas las posibilidades tcnicas ytodas las condiciones naturales favorables. Al concebirse la econo-ma corno una sola unidad, el cambio y el precio quedan fuera delsistema como fenmenos sociales objetivos. 5

    Los productos manu-facturados dejan de ser valores con significado en un sentido dedinero o cambio y slo son bienes distribuidos de acuerdo con unplan estatal de consumo. Toda la peculiar economa de este rgimense reduce a trazar planes estatales para el consumo y la producciny a establecer un equilibrio entre ambos.

    La aplicacin de la capacidad social de trabajo se lleva aqu,evidentemente, como en la explotacin familiar, al punto en que selogra el equilibrio entre la fatiga del trabajo y la satisfaccin de lasnecesidades sociales. Claro est que ese punto lo fijan los rganosestatales que elaboran los planes de produccin y consumo del es-tado, mismos que deben equilibrar a ambos. Como el nivel de vidade cada obrero, determinado por el estado, no tiene relacin entre

    5 Los impuestos no son precios en el sentido de fenmeno econmico su-jeto a leyes propias.

    EORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS

  • TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS

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    O.a

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    s con el rendimiento de su trabajo (la cantidad de produccin quelogra) , tienen que moverlo a trabajar su conciencia social y las san-ciones del estado, y tal vez adems un sistema de premios o recom-pensas.

    En contraste con todos los sistemas econmicos hasta ahora exa-minados, que pueden existir en forma puramente automtica y ele-mental, un orden econmico comunista requiere para mantenersey continuar de acuerdo con el plan estatal un ejercicio social con-tinuo y, para impedir la aparicin de alguna actividad econmicano prevista en el plan estatal, cierto nmero de sanciones econmi-cas y no econmicas. Segn esto, no tenemos en el sistema del comu-nismo estatal ni una sola de las categoras econmicas expuestas enel anlisis de los sistemas econmicos que antes vimos. Constituyeuna excepcin el proceso puramente tcnico de produccin y repro-duccin de los medios de produccin.

    Nuestro modo de presentacin, que revela la morfologa del sis-tema, contribuye poco al entendimiento de su dinmica, pero pro-bablemente sea esto imposible antes de observar el rgimen y vercmo funciona, y antes de que sus idelogos y tericos hayan ex-puesto una teora de la organizacin cabalmente desarrollada.6

    Resumiendo los resultados de nuestro anlisis llegamos a la si-guiente tabla, que nos dice para cada uno de los diversos sistemaseconmicos estudiados qu categoras estn presentes y cules faltan.

    Luego de resumir en esta tabla los sistemas de categoras eco-nmicas que hemos presentado, estamos en condiciones de sacar denuestro anlisis ciertas conclusiones tericas.

    6 Me parece que debernos esperar a que la teora de la organizacin drespuesta a las tres cuestiones siguientes, cuyas soluciones podran hacerms especficas las nociones del mecanismo de la economa socialista:

    Con ayuda de qu mtodo y en virtud de qu principios se determi-narn el grado de aplicacin del trabajo social y la cantidad requerida desatisfaccin de la demanda, as como el necesario equilibrio entre ambos,cuando se tracen los planes estatales de produccin y consumo?

    Por qu medios se har trabajar al obrero para que no considereun pesado esfuerzo la aplicacin de energa que el plan de produccinespera de l y para que lo ponga en prctica verdaderamente?

    3] Qu medidas hacen posible en la sociedad socialista impedir, basn-dose en las nuevas relaciones de produccin, el peligro de que se forme unanueva estratificacin de clases que podra dar inicio a formas de distribuir elproducto nacional que privaran a todo el rgimen de sus altos ideales ori-ginales?

    Sin resolver estos problemas, el rgimen de economa socialista slo puedeesbozarse en su aspecto morfolgico ms general.

  • 76 ALEXANDR V. CHAYANOV

    HACIA UNA TEORA ECONMICA UNIVERSAL?

    Ante todo, debemos tomar como un hecho incuestionable el que laforma actual de nuestra economa capitalista representa slo un casode vida econmica y que la validez de la disciplina cientfica de laeconoma tal y como hoy la entendemos, basada en la forma capi-talista y destinada a la investigacin cientfica de la misma, no puedeni debe extenderse a otras formas de organizacin de la vida econ-mica. Semejante generalizacin de la teora econmica moderna,practicada por algunos autores contemporneos, crea ficciones y di-ficulta el entendimiento de la ndole de las formaciones no capita-listas y la vida econmica del pasado.

    Evidentemente, algunos crculos cientficos han comprendidoestos hechos, y ltimamente se ha dicho con frecuencia que es ne-cesario establecer una teora econmica universal, cuyos conceptosy leyes abarquen todas las formaciones posibles de la vida econmi-ca humana. Trataremos de aclarar la cuestin de si es posible edi-ficar tal teora universal y si es necesaria como instrumento para elentendimiento cientfico.

    Primeramente, compararemos los diversos tipos de formacineconmica que hemos investigado anteriormente y entresacaremoslos principios y fenmenos comunes a todos ellos. Obtenemos cinco:

    La necesidad de dotar a la fuerza de trabajo humana con di-versos medios de produccin con objeto de organizar la producciny de dedicar parte del producto realizado anualmente a la forma-cin y el remplazo de los medios de produccin.

    La posibilidad de aumentar considerablemente la producti-vidad de la mano de obra aplicando el principio de la divisin deltrabajo tanto en lo relativo a la tcnica de la produccin como enel sentido social de la palabra.

    La posibilidad de ejercer la agricultura con diferentes gradosde esfuerzo de la mano de obra y diferentes grados de concentracinen lo tocante a los medios de produccin por unidad de superficiedel terreno y de aumentar, intensificando la actividad agrcola, lacantidad de produccin por unidad de superficie del terreno y porunidad de trabajo. Debe tomarse en cuenta que el producto no au-menta tan rpidamente como los insumos en trabajo y en medios deproduccin.

    El incremento en la productividad del trabajo y en la canti-dad producida por unidad de superficie del terreno debidas a unamejor calidad del suelo, a una configuracin ms favorable de lasuperficie y a mejores condiciones climticas.

    TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTAS 77

    5] La oportunidad, que el nivel relativamente elevado de pro-ductividad del trabajo humano brinda al que trabaja, de produciren el ao agrcola una cantidad de productos mayor que la nece-saria para mantener su capacidad de trabajo y para asegurar a sufamilia la oportunidad de vivir y reproducirse. Esta circunstanciapresupone la posibilidad de todo desarrollo social y estatal.

    Considerando atentamente estos cinco principios universales dela actividad econmica humana advertimos sin dificultad que todosson fenmenos de orden natural y tcnico. Es la economa de lascosas en especie (in natura).

    Aunque los economistas suelen pasarlos por alto y considerarlosinteresantes solamente desde el punto de vista de la tcnica de laproduccin, estos fenmenos son en extremo importantes. Su cabalsignificado se observa ahora con especial claridad, en el caos de laposguerra, con la complicada estructura del aparato econmico des-truida y la moneda privada de su cualidad de expresin abstractay estable del valor:' . .

    Los cinco principios que hemos expuesto no contienen un ele-mento para tal avalo de las cosas. Si esta valuacin apareciera-yel fenmeno social y econmico del valor objetivo se creara sobresu base, todas las cosas adquiriran, por decirlo as, un segundomodo de existencia. Se convertiran en valores, y el proceso de pro-duccin, adems de la expresin in natura, tendra una nueva ex-presin: in valore.

    Solamente entonces apareceran todas las categoras econmicasarriba expuestas, que se uniran, de acuerdo con la estructura socialy legal de la sociedad, en uno de los diversos sistemas econmicosque hemos analizado. El sistema "valorstico" con sus categoras seapodera del anterior y natural proceso de produccin y lo sometetodo a su caracterstico clculo econmico en funcin del valor.

    Cada uno de estos sistemas es de ndole muy individual. Los in-tentos de abarcarlos todos con una teora universal generalizadora.slo pudieron producir doctrinas de tipo muy general, vacas decontenido, por ejemplo el tipo ideal, el modo "exagerado" de decirque en todos los sistemas la unidad econmica se afana por produ-cir el mayor efecto posible con la menor aplicacin de energa, yfrases por el estilo.

    Por eso parece mucho ms prctico para la economa tericacrear para cada rgimen econmico una teora econmica particu-lar. La nica dificultad para la aplicacin de estas ideas es que slomuy raramente en la vida econmica hallamos un orden econmicoen estado de cultivo puro, para emplear una expresin tomada de

  • 78 ALEXANDR V. CHAYANOV r TEORA DE LOS SISTEMAS NO CAPITALISTASla biologa. Por lo general, los sistemas econmicos coexisten unoscon otros y forman conglomerados muy complicados.

    Todava hoy, en la economa del mundo capitalista, existen im-portantes bloques de unidades de trabajo familiar campesino. Enlas colonias y los estados asiticos se hallan todava ac y all for-maciones econmicas semejantes a los tipos econmicos de la es-clavitud o el feudalismo. Analizando el pasado econmico nos to-pamos con mayor frecuencia, y yo dira que constantemente, conel hecho de esa coexistencia, a veces de los comienzos del capitalis-mo junto con el sistema feudal o la servidumbre, y a veces de la eco-noma de la esclavitud junto a la servidumbre y a la economa deltrabajo familiar libre, etctera.

    En estos casos, como cada sistema era cerrado, slo poda comu-'nicarse uno con los otros por aquellos elementos econmicos obje-tivos que tenan en comn, como los que se ven en nuestra tabla delos sistemas econmicos. Este contacto sola -ocurrir en el planode los precios de mercado de las mercancas y de la tierra. As, porejemplo, desde la emancipacin de los campesinos (1861) hasta larevolucin de 1917, la explotacin familiar campesina existi en laagricultura campesina junto con la empresa capitalista en gran es-cala. Esto condujo a la destruccin del capitalismo porque los cam-pesinos, relativamente escasos de tierra, pagaban ms por la tierraque la renta capitalizada en la agricultura capitalista. Esto, inevita-blemente, condujo a la venta de grandes predios a los campesinos.Y a la inversa, las altas rentas de la tierra alcanzadas por las gran-des granjas ovinas capitalistas en la Inglaterra del siglo xvm expo-li las tenencias campesinas, que no podan pagar la misma elevadarenta a los terratenientes.

    Igualmente caracterstica es la sustitucin de la renta del tra-bajo por el obrok y viceversa en algunos perodos del sistema deservidumbre en Rusia, que se deba a la elevacin de la renta delos esclavos respecto del obrok y viceversa. Y quiz la causa econ-mica de la abolicin de la esclavitud deba buscarse en el hecho deque la renta de la empresa econmica capitalista basada en el tra-bajo asalariado superaba tanto a la renta como a la renta de losesclavos. Estos y otros muchos ejemplos anlogos podran despejartoda duda acerca de la primordial importancia del problema de lacoexistencia entre diferentes sistemas econmicos. Actualmente,nuestro mundo est dejando de ser tan slo un mundo europeo. Amedida que Asia y Africa penetran en nuestras vidas y nuestra cul-tura ms y ms frecuentemente con sus formas econmicas especia-les, nos vemos obligados a dirigir nuestro inters una y otra vez alos problemas de los sistemas econmicos no capitalistas.

    79Por eso no dudamos de que el futuro de la doctrina

    econmicano est en crear una sola teora universal de la vida econmica sino

    en concebir cierto nmero de sistemas tericos que se adapten a losdistintos rdenes econmicos actuales o antiguos y revelen las

    for-mas de su coexistencia y evolucin.

  • 1r, CIIAYANOV Y LA TEORIA DE LA ECONOMIACAMPESINA

  • BASILE KERBLAY

    A. V. CHAYANOV: SU VIDA, CARRERA Y TRABAJOS 1

    Alexandr Vasilievich Chayanov es un nombre familiar para todauna generacin de agrnomos y de economistas, quienes, desde laReforma de Stolipin hasta la colectivizacin, tuvieron la fuerte res-ponsabilidad de orientar la economa campesina tradicional por nue-vos senderos y formar los cuadros tcnicos de esta agricultura mo-derna. Sin embargo, Chayanov es, actualmente, un nombre casi ol-vidado tanto en Rusia como en Occidente.2

    Si hemos credo til consagrar estas pginas a su memoria, no essolamente porque la obra de Chayanov representada por sesentaobras y folletos, sin contar un gran nmero de artculos de re-vistas constituye el resultado terico y prctico de varias decenasde investigaciones y discusiones sobre las cuestiones agrarias enRusia en la poca de la Revolucin, sino que, como lo ha mostradoDaniel Thorner, los problemas planteados hace ms de treinta arios

    1 El autor agradece al profesor Daniel Thorner la inspiracin de esteestudio y gracias a cuya colaboracin pudo ser llevado a cabo. El profesorSimon Kuznets y el doctor Schlhmer tuvieron la amabilidad de poner anuestra disposicin ciertas obras de Chayanov pertenecientes a sus bibliote-cas personales.

    .2 Entre los autores soviticos contemporneos, S. M. Dubrovski (enVoprosi istorii selskogo joziaistva krastianstva i revoliucionnogo dvizheniia

    Rossii, Mosc, 1961, p. 358) se limita a citar el nombre al mismo tiem-po que el artculo de Bolshevik (nms. 3-4, 1924) condenatorio de las teo-ras de Chayanov; N. A. Vainshtein (en Narodnoe bogatstvo i narodno-joziaistvennoe nakoplenie pedrevoliucionnoi rossii, Mosc, 1960, p. 469) yN. A. Svaviswii (en Zernskie podvornye perepisi, Mosc, 1961, redicin dela obra de 1926, p. 352), constituyen dos excepciones por sus referencias alas obras de Chayanov. En Occidente, C. von Dietze (en el artculo "Pca-santry", en Encyclopedia of social science, t. 12, p 52) ; N. Georgescu-

    lik Roegen (en Economic theory and agrarias economics, Oxford economicpapers, vol. x//, pp. 1-40, febrero de 1960) ; A. Gerschenkron (en Bread anddernocracy in Germany, Berkeley, 1943, p. 192) ; Naum Jasny (en Thesocialized agriculture of the URSS, Stanford, 1949, pp. 27-242-246, 429) ;M. M. Postan (en "The famulus, the estate labourer in the twelfth andthirteenth centuries", suplemento nm. 2 de The economic history review); L.Volin (en The Rztssian peasant from emancipation to kholkhoz, incorporado aThe transformaton of russian society, Harvard, 1960, pp. 292-310), handestacado la significacin de los trabajos de Chayanov.

    [83]

  • 84 BASILE KERBLAY

    por nuestro autor conservan ahora toda su actualidad en los pasesen vas de desarrollo donde la economa campesina es todava unsector predominante. 3 Incluso en la Unin Sovitica, como lo vere-mos en la conclusin, la discusin iniciada por l no ha concluido.As, el pensamiento de Chayanov es una encrucijada donde bienpueden coincidir los historiadores y los especialistas en la cuestineslava, interesados en la evolucin de las doctrinas agrarias en Rusiaa principios del siglo xx, as como los economistas y los socilogosdeseosos de encontrar en la experiencia rusa, al mismo tiempo quelos elementos de una teora de la economa campesina, una respuestaa preocupaciones ms concretas.

    I. EL HOMBRE

    La informacin disponible acerca de la vida de Chayanov es dema-siado fragmentaria y ambigua como para intentar reconstruir sucurriculum vitae. Sabemos que naci en 1888, pero se ignoran lascircunstancias y el ao de su muerte.'

    Sin embargo, la cuanta de los escritos que Chayanov nos ha le-gado es suficiente para permitirnos trazar la gnesis de las grandesorientaciones de su pensamiento y, a travs de l, percibir la perso-nalidad del autor. Como hombre culto se interesa no solamente enlos mltiples aspectos de la economa, la sociologa y la polticaagrarias; su curiosidad se extiende al arte, la literatura y la historia.Compondr, bajo varios seudnimos,' piezas teatrales y tres novelasde ficcin. Espritu abierto frente al mundo que lo rodea: sus escri-tos, enriquecidos por frecuentes estancias en el extranjero, 6 revelan

    Daniel Thorner, "L'conomie paysanne, concept pour l'histoire cono-migue?", Annales, Pars, nm. 3 (mayo-junio de 1964, pp. 417-432).

    En la ltima edicin de la Gran enciclopedia sovitica se deja enblanco la fecha de la muerte rogando a los lectores que tuvieran algunainformacin al respecto lo hicieran saber a la redaccin. El doctor Schl3mer,que ha sido el traductor alemn de varias obras de Chayanov, nos ha in-formado que la ltima carta que recibi del autor se remonta a 1932 y estfechada en Alma Ata (Kazajstan). El profesor Albert Vainshtein tuvo laamabilidad de informarnos por carta que Chayanov muri en 1939. 'k,r1

    H. Botanik, "Moskovskii Botanik X", Ivan A. K,emnev.6 Sus primeros viajes realizados en 1908 lo condujeron a Lombarda

    pala estudiar la irrigacin y a Blgica para familiarizarse con la organiza-cin de las cooperativas; su ltimo viaje al extranjero lo hizo en 1928 aBerln con motivo de la edicin alemana de su estudio sobre la dimensinde las empresas agrcolas (Die optimal ,'n Betriebsgriissen in der Lantlzoirts-chaft, Berln, 1930). La obra de B. Seebohm Rowntree, Land and labour:lessons from Belgium, Mr.cMillan, Londres, 1910, muestra la importancia

    ClIAYANOV: SU VIDA, CARRERA Y TRABAJOS 85una gran familiaridad con el pensamiento occidental. Estas caracte-rsticas son comunes a una gran parte de la intelligentsia de su ge-neracin, lo que permite pensar que su origen no es campesino. Contodo, a diferencia de los aristcratas diletantes o de los estetas quese evaden de la realidad rusa de la poca, Chayanov aplica toda suinteligencia y generosidad al servicio del campesinado. Ya no es elidealismo romntico del movimiento "vuelta al pueblo", sino unainquietud de anlisis objetivo, de eficacia inmediata lo que guiarsus investigaciones y su actividad.

    Espritu brillante y fecundo; cuando es nombrado en 1913 pro-fesor asistente en el Instituto de agricultura de Petrovskoei Razu-movskoe (actualmente la Academia agrcola Timiriazev) cerca deMosc, tiene solamente 25 aos y ya ha publicado 13 estudios. Des-de 1910 sus informes fueron discutidos en diversos congresos sobreagricultura y cooperativas. En 1919 ser nombrado para presidir elseminario sobre economa rural de la Academia Timiria.zev, quems tarde se convertir en el Instituto de economa rural.' Perma-necer en la direccin de dicho instituto hasta 1930. Dotado de unainteligencia penetrante, pasa con una facilidad poco comn de loshechos observados a la teora y de la teora a la verificacin em-prica.

    II. EL PAPEL DE LA ESCUELA "ORGANIZACIONAL" EN LA EVOLUCINDF. LAS DOCTRINAS AGRARIAS EN RUSIA

    Para alimentar este dilogo entre la realidad y la investigacin te-rica, la evolucin rpida y, en ciertos momentos, dramtica de laRusia de 1908 a 1930 va a ofrecer a Chayanov un campo de re-flexiones y de experiencias excepcionales. Los aos que precedena la Primera guerra mundial, el perodo de la guerra y de la Re-volucin, los aos de la NEP y, posteriormente, los comienzos de lacolectivizacin constituyen indicaciones preliminares convenientespara rastrear la formacin de la corriente de pensamiento a la quese adhiere Chayanov y particularmente su teora de la economacampesina.

    Mientras que a lo largo del siglo XVIII y hasta 1880, aproximada-mente, el agrnomo ruso estaba exclusivamente al servicio de las

    de las cooperativas en Blgica (pp. 225-254) en la poca en que Chayanovse interes por su desarrollo.

    ' En la actualidad separado de la Academia Timiriaev: Vsesoiuzniinauchnoissledovateliskii ekonomiki seslskogo joziaistva, dependiente del Mi-nisterio de agricultura de la URSS.

  • 86BASILE KERBLAY

    grandes propiedades mobiliarias, 5 a partir de principios de siglo suinters se remite a las explotaciones campesinas. La crisis de los aosde 1880 a 1890 asest un duro golpe a todas las haciendas que anpracticaban una agricultura extensiva basada en el empleo de unamano de obra barata e inici en Rusia el debate entre los populis-tas, marxistas legales y marxistas revolucionarios sobre las ventajascomparadas de la pequea y la gran explotacin.

    Por otra parte, el desarrollo de las escuelas superiores de agri-cultura haba aumentado el nmero de agrnomos. s Al no poderemplearse fcilmente en el pequeo nmero de haciendas, no tenanotras alternativas ms que las que les ofreca la administracin delos zemstvos. Esto explica por qu la atencin de los agrnomos sedirigi de buenas a primeras a la economa campesina, que consti-tua el motivo principal de las preocupaciones de los zemstvos. Des-pus de 1905 esta nueva generacin de agrnomos lleg a ser losuficientemente poderosa como para conquistar la mayora y la di-reccin de las principales sociedades agrnomas del pas. Las socie-dades agrcolas de Mosc, San Petersburgo y Jarkov y, en granparte, la Sociedad libre de economa ya no seran dirigidas por losnobles, sino por una intelligentsia de izquierda, cuyo papel ser deci-sivo en la orientacin del pensamiento agrario poco antes de laPrimera guerra mundial.

    Durante los aos que precedieron al desencadenamiento de lashostilidades en 1914, la Reforma de Stolipin no haba sido sufi-ciente para apaciguar a la intelligentsia dividida por la cuestinagraria, ni para satisfacer a las parcelas ms pobres del campesi-nado. La creacin de los hutors (explotaciones campesinas desliga-das de la comunidad rural) reforz la divisin en el seno de lospueblos. Mientras que los socialdemcratas y los socialrrevoluciona-rios consideraban que la cuestin agraria slo podra ser resuelta por

    8 Las primeras obras agronmicas rusas son los Domostroi, que debanservir de diario del jefe de la familia para la gestin de su hacienda. Uno delos ms antiguos fue traducido al francs: La Dornostroj, Mnagier russe, duXVIe sicle, Picard, 1901. Sobre las mentalidades econmicas de los seoresrusos a fines del siglo xvm, la obra de M. Confino. Domaines et Seigneursen Russie, Institut d'tudes slaves, Pars, 1963, aporta una contribucin ma-gistral.

    9 El nmero de establecimientos de enseanza superior agrcola crece dedos en 1895 con 75 estudiantes a ocho en 1912, con 3 922; el de los agr-nomos empleados por los zemstvos aumenta de 124 a 2 701 en el curso delmismo periodo, lo cual permite disponer de un agrnomo por uchastok (de-partamento) y no solamente por uezd (distrito) , y aproximar, por lo tanto,el agrnomo al campesino (cf. V. V. Morashevski, Agronornicheskaia po-rnoshch v Rossii, Ministerio de Agricultura, San Petersburgo, 1914).

    87una nacionalizacin o socializacin de las tierras, es decir medianteuna revolucin poltica, la corriente de pensamiento llamada "or-ganizacional".' s

    conformada principalmente por el personal de laadministracin de los zemstvos ----por los agrnomos y los docen-tes, sostenan que la distribucin de la tierra sera un paliativoinsuficiente para resolver la cuestin agraria y que, por otra parte,esta solucin implicara un trastorno social imprevisible a medianoplazo. Este grupo preconizaba un conjunto de medidas agronmi-cas y econmicas, con el fin de intensificar la produccin de las ex-plotaciones campesinas. Su meta era la de transformar antes que

    mi nada la organizacin de la economa campesina sin esperar cambiospolticos; de ah que el nombre de escuela "organizacional" sevincule a esta tendencia.

    Ya no se trata de saber, como en tiempos de Herzen y de Cher-nishevski, si Rusia puede adoptar el socialismo sin pasar por elcapitalismo. El problema que preocupa a estos administradores, en-tusiasmados por las innovaciones de la agricultura occidental (ga-nado de raza, mquinas, abono, cooperacin), es el de la aplicabi-iidad del progreso tcnico y econmico y no slo social o fiscal,como en la poca del ix Congreso de mdicos rusos en 1894,1centrado principalmente en el nivel de vida de la familia campe-sina. Cmo adaptar ciertas conquistas de la agricultura y la eco-noma occidental (teoras de la localizacin, clculo marginal) alas explotaciones campesinas an dbilmente monetarizadas y ba-sadas solamente en el trabajo familiar?

    El curso de A. 1. Chuprov, impartido en Pars en 1904 en laEscuela superior rusa de ciencias sociales, sobre las ventajas dela pequea explotacin y los mtodos que permitiran modernizarlaes probablemente una de las primeras manifestaciones de esta co-rriente de pensamiento.'' Pero V. A. Kosinski va mucho ms lejosal plantear el problema de las distinciones entre la economa cam-pesina y la economa capitalista en trminos que hicieron rechazar

    I En ruso, Organ izacionno-proizvodstvennoe napravlenie, o sea corrien-te "organizacional y productiva". Para una exposicin detallada de estatendencia, vase N. Makarov, Krestianskoe joziaistvo i ego evoliutsia, t. I,Mosc, 1920, primera parte, pp. 1-160. Para una exposicin sumaria. S. V.Utechin, Russian political thought, a concise history, Praeger, 1963, pp.138-139 [hay edicin en espaol].

    11 Este Congreso seala una fecha importante en la evolucin de la en-cuesta. social en Rusia, porque los problemas de metodologa fueron discu-tidos por una comisin formada por los mejores estadgrafos de la poca (A.I. Chuprov, Shcherbina, Kablukov, L. N. Maress).

    12 Melkoe zemletielle i ego osnovnya nuzhedy, San Petersburgo, 1907,reeditado en Berln en 1921.

    CHAYANOV: SU VIDA, CARRERA Y TRABAJOS

  • BASILE KERBLAY

    411

    CHAYANOV: SU VIDA, CARRERA Y TRABAJOS88el debate con los marxistas en el terreno de la teora econmica, yno slo en el plano poltico. Es por esta razn que Chayanov loconsidera como el padre espiritual de la escuela de la economacampesina.'3

    Para V. A. Kosinski "no puede haber cuestin de renta ni deganancia en la economa campesina[...] el campesino, representan-do a la vez la tierra, el capital y el trabajo, no divide los valorescreados en el proceso de produccin en costos necesarios y plusva-lor. Todo el valor creado regresa a l para ser utilizado de unaforma indivisible y es igual al plusvalor del capitalista y al salario.Es por eso que la idea del plusvalor y el inters sobre el capital leresulta extrao. PA considera la renta neta obtenida por medio derecursos materiales que le pertenecen como producto de su traba-jo' ? . 14 Esto explica, segn Kosinski, que la economa campesinapuede pagar alquileres elevados con respecto a la renta neta, yaque ella trata de emplear al mximo su potencial de trabajo in-tensificando la produccin, cuando est limitada por la insuficien-cia de las tierras. As se desprende, desde 1906, una nocin esencial,a saber: que los conceptos de renta y de plusvalor, que justificanpara los marxistas la asimilacin de la economa campesina al es-quema clsico, no son aplicables en los mismos trminos a sta.''

    Chayanov se une a esta escuela. Como algunos de sus colegas---Chelincev, Bruckus,16 Makarov, etc.--, tom conciencia rpida-mente de dos hechos fundamentales: 1] La esterilidad del inmensotrabajo estadstico reunido por la administracin de los zemstvos, afalta de un mtodo apropiado de anlisis econmico de la agricul-tura campesina; 2] La inaplicabilidad de los conceptos econmicosde la economa clsica basados en el modo de produccin capita-lista. Pero de estas dificultades Chayanov va a derivar, y aqu re-side su genio, por una parte un mtodo de encuesta adaptado a lasolucin de los problemas de organizacin que investiga; por otra

    13 Chayanov, "Cegenwiirtiger Stand der Landwirtschaeftlichen 6kono-mie in Russland". Schmollers Jahrbuch, 1929, p. 731.

    14 V. Kosinski, K agrarnomu voproszt, t. c, Odesa, 1906, pp 165-167.15 N. Kablukov. Ob usloviiah razvitiia krestianskago joziaistva y Rosii,

    1908 (pp. 377-384) analiza, en la misma lnea, las particularidades delempleo de capital y de la formacin de las ganancias en la economa cam-pesina.

    16 Bruckus, en los Ocherki krestianskago joziaistva v zapadnoi Europe,1913, opone la economa campesina y la economa capitalista (la primerabasada en los valores apreciados subjetivamente, la segunda basada sobrelos costos que son mensurables objetivamente) y seala en los mismos tr-minos que Chayanov el carcter arbitrario de los mtodos contables delsuizo E. Latir.

    89parte, una teora de la economa campesina capaz de explicar laespecificidad de ese modo de produccin sui generis, a fin de orien-tar el trabajo concreto del agrnomo en sus contactos cotidianoscon el campesinado.

    III. LOS PRIMEROS TRABAJOS DE CHAYANOV Y LA GNESIS DE SUTEORA DE LA ECONOMA CAMPESINA

    En esta toma de conciencia de las particularidades de la economacampesina, dos congresos jugaron el papel de catalizadores paralos agrnomos de esta generacin: El Congreso agronmico de 1901y el Congreso de cooperativas de 1908. 17

    Chayanov es demasiadojoven para hacerse notar en ese entonces, pero dos aos ms tarde,cuando se efecta en Mosc el primer congreso de la Unin pan-rusa de productores de lino, es a l a quien se decide confiar laencuesta sobre el papel del lino en las rentas de los campesinos dela provincia de Mosc (distrito de Volokolamsk).

    En el mismo ao de 1911, las ideas de la escuela organizacionalacaban por imponerse al congreso de los agrnomos de la provinciade Mosc. Pervushin se aboc al mtodo de encuesta de los presu-puestos campesinos hasta ese entonces utilizado por los zemstvos.Los cuestionarios peridicos contenan un nmero considerable depreguntas con frecuencia muy sofisticadas para ser comprendidasy que sobre todo se fiaban demasiado de la memoria del campesi-no." Si uno quiere que estas encuestas sean utilizadas para fineseconmicos se requiere, declara el orador, de contabilidades simpli-ficadas para que puedan ser llevadas por el mismo campesino. Cha-yanov participa con un informe sobre "el agrnomo de distrito y elplan de organizacin de la economa campesina" donde subraya lautilidad del anlisis del presupuesto de la explotacin campesina- y no slo del presupuesto de consumo de la familia bajo unaptica contable, susceptible de proveer al agrnomo de indicacionessobre la organizacin de las explotaciones de las que l es respon-

    17 Es preciso indicar el papel desempeado por ciertas revistas agron-micas como Zensskii agrononz (de Saratov), Moskovskii vestnik selskogojoziaistva, dirigida por A. G. Doiarcnko, y sobre todo Agronomicheskii jur-nal (de Jarkov), en cuyos comits de redaccin estuvieron incorporadoslos principales voceros del movimiento.

    18 El modelo tipo de Shcherbina adoptado en 1900 por la encuesta he-cha en la provincia de Vol onezh consista en 677 preguntas, que, para serllenadas, requera del encuestador de un da y medio a dos das de trabajopor familia.

  • 90 BASILE KERBLAY

    sable. Bruckus aprueba declarando que "Chayanov ha sabido for-mular lo que todos los agrcolas piensan"."

    Las primeras encuestas de Chayanov sobre la tierra vinieron aafianzar sus tesis en el congreso. La encuesta sobre las rentas delcultivo del lino que haba dirigido en el distrito de Volokolamsk2"(y con la ayuda de A. N. Grigoriev en la provincia de Smolensk, enjunio-julio de 1911, para extender el muestreo a una regin mspobre) lo llev a descubrir la imposibilidad de aplicar los mtodosde contabilidad utilizados en esa poca en Europa occidental. Elmtodo de E. Laur en particular, estudiado por Chayanov," tenapor objeto determinar una renta bruta de la explotacin; despus,al deducir los cargos de la explotacin y los de la familia, la remu-neracin del trabajo y del capital, se obtena una ganancia o unaprdida neta. En las economas poco monetarizadas, como la deRusia, destaca Chayanov, tales clculos econmicos seran arbitra-rios; las apreciaciones son aqu esencialmente cualitativas: un pro-ducto existe en cantidad suficiente o insuficiente con respecto a lasnecesidades; pero esos productos no son intercambiables como enuna economa de mercado."22

    Comprueba tambin que la teora marginalista que explica elcomportamiento del empresario capitalista segn sus elecciones noes transferible a la economa campesina de trabajo, porque en estetipo de explotacin el rendimiento decreciente del valor til deltrabajo marginal no bloquea la act