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CAPITULO II

LA EDUCACION PATRIOTICA: UNPRO YECTO EXTREMISTA

Las instrucciones

Probablemente haya habido pocos trances tan amargos en Ia carrerade maestro de don Pablo Pizzumo como el nombramiento del Dr. JoséMaria Ramos Mejia como presidente del Consejo Nacional de Educación.Como consecuencia, se yb forzado a colaborar directamente con Iaimplementación de un proyecto extremista del que (por lo menos) descon-fiaba. El 20 de marzo de 1908 el inspector general técnico recibióuna ordendel presidente del Consejo, de proyectar un programa de "enseñanzapatriótica". Y en jun10 de ese año, el Monitor publicaba las instruccionesal personal docente que Pizzumo habia elaborado por expresa disposiciónde Ramos Mejia:'

"Lectura y escritura - En los grados inferiores, léanse y escrIbansecon frecuencia (...) palabras y frases de carácter patriótico (...)."

"Castellano - Es sabido que el conocimiento perfecto de Ia lengua

1. En el inlorme del Consejo correspondlente a los años 1909-1910, La EducadônComOn en Ia Republics Argentina, Buenos Aires 1913, Rarnos Mejia deja expllcltamentesentado €1 hecho de que Las instruccknes de Pizzumo del afio 1908 son el resultado desuya, y que Ia verdadera reforma de los programas se reallzó en 1908, con Emesto Bavlo enIs Inspeccion General TécnIca del Consejo. Por otra parte, el nClmero del 30 de junlo de 1908del Monitor dice expllcltamente que las instrucciones, firrnadas por Pizzurno, to sondlsposlclôn del presidente del Consejo Naclonal de Educaclon (...)".

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CAPITULO 11

LA EDUCACION PATRIOTICA: UNPROYECTO EXTREMISTA

Las instrucciones

Probablemente haya habido pocos trances tan amargos en la carrerade maestro de don Pablo Pizzumo como el nombramiento del Dr. José

Maria Ramos Mejía como presidente del Consejo Nacional de Educación.Como consecuencia, se vio forzado a colaborar directamente con laimplementación de un proyecto extremista del que (por lo menos) descon-fiaba. El20 de marzo de 1908 el inspector general técnico recibió una ordendel nuevo presidente del Consejo, de proyectar un programa de "enseñanzapatriótica". Y en junio de ese año, el Monitor publicaba las instruccionesal personal docente que Pizzumo había elaborado por expresa disposiciónde Ramos Mejía:l

"Lectura y escritura -En los grados inferiores, léanse y escríbansecon frecuencia(...) palabras y frases de carácter patriótico (...)."

"Castellano - Es sabidoque el conocimientoperfecto de la lengua

1. En el Informe del Consejo correspondiente a los años 1909-1910, La EducadónComún en la República Argentina, Buenos Aires 1913, Ramos MeJía deja explícitamentesen tado el hecho de que las instrucciones de Plzzumo del año 1908 son el resultado de "orden"suya, y que la "verdadera reforma" de los programas se realizó en 1908, con Ernesto Bavio enla Inspección General Técnica del Consejo. Por otra parte, el número del 30 de Junio de 1908del Monitor dice explícitamente que las instrucciones, firmadas por Plzzumo, lo son "pordisposición del presidente del Consejo Nacional de Educación (oo.)".

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que Se habla en un pueblo puede ser de por si un medio de hacer que este

sea amado y de vincular entre si a los hombres que to habitan. Tantaimportancia tiene el estudio del idioma, del punto de vista de Ia educaciónpatnótica, que no son pocos los sostenedores de que es acaso el ünico mediode cultivar el patriotismo (...). Dicho esto, véanse a continuación algunosmedios especiales que sin abusar de ellos deben emptearse oportunamente(...). En Ia conversación, en todos los grados, incluir con frecuenciaasuntos de carácter pafriótico: Ia bandera, el escudo, los monumentos, elhirnno nacional, los prohombres. Hacer lo mismo durante los ejercicios dereproducción oral de frases ytrozos leldos, asl como en Ia recitación demernoria de trozos selectos (...). La co mposición se presta particularmente(...) a multipticidad de ejercicios relacionados con Ia educación cIvica ypatriótica (...). Fórmense cuadernos de recortes de carácter patriótico."

"Ciendas naturales e higlene - En ciencias naturales ilusfrare-mos de preferencia las lecciones con ejemplos de Ia fauna, Ia flora y Ia geaargentinas; haremos resattar bien cuán rico es en todos estos ramos nuestropals, cómo se provee, gracias a ello, hasta a sus habitantes más pobres, dealimentos, comodidades, placeres, de que se hallan privados, o tienen quepagar muy caro, sinn(unero de otros pueblos de Ia tierra. Estableceremoscomparaciones respecto de Ia supenoridad de nuestra producción compara-da con los principales paises del mundo, en Ia ganaderia, en Ia agricultura(...). Hasta Ia higiene puede prestarse pam observaciones decarácter nacional y patriótico. Al referirse, por ejemplo, a las obras desalubridad de Buenos Aires, harlamos resaltar que figura por ellas nuestracapital entre las primeras del mundo."

"Geografia e historia - Estos dos ramos, es bien sabido, se prestanparticularmente para irifluir en Ia formación de sentimientos patrióticos,siendo casi innecesario insistir en los medios de que ha de valerse el maestro

(...). Asi ocurrira, en lo que se refiere a Ia geografla, at ocuparse de losdiversos lugares, de las bellezas naturales comparables a las mejores delmundo, superiores a veces; de las producciones m(iltiples y abundantes quenos ponen en situaciôn de ser tiles a los paises extranjeros tanto como anosotros mismos (...). Y de más está decir que al estudiar nuestra cordillera,por ejemplo, será oportuno hacer resaltar el honor que refleja sobrenuestros heroes el hecho de haber sido capaces de trasponer los Andes paraasegurar nuestra libertad y para ilevarla también a paises hermanos; y tomismo at referimos a cualquier lugar, costa, rio, valle, pueblo, etc., en queun hecho digno de recordación se haya producido. Huelga más decirque ha de ponerse en evidencia constantemente a! estudiar las diversas

26 CARLOS EsCUDE

que se habla en un pueblo puede ser de por sí un medio de hacer que estesea amado y de vincular entre sí a los hombres que lo habitan. Tantaimportancia tiene el estudio del idioma, del punto de vista de la educaciónpatriótica, que no son pocos los sostenedores de que es acaso el único mediode cultivar el patriotismo (...). Dicho esto, véimse a continuación algunosmedios especiales que sin abusar de ellos deben emplearse oportunamente(...). En la conversación, en todos los grados, incluir con frecuenciaasuntos de carácter patriótico: la bandera, el escudo, los monumentos, elhimno nacional, los prohombres. Hacer lo mismo durante los ejercicios de

reproducción oral de frases y trozos leídos, así como en la recitación dememoria detrozosselectos(...).La composición se presta particularmente(...) a multiplicidad de ejercicios relacionados con la educación cívica ypatriótica (...). Fórmense cuadernos de recortes de carácter patriótico."

"Ciencias naturales e higiene - En ciencias naturalesilustrare-mos de preferencia las lecciones con ejemplos de la fauna, la flora y la geaargentinas; haremos resaltar bien cuán rico es en todos estos ramos nuestropaís, cómo se provee, gracias a ello, hasta a sus habitantes más pobres, dealimentos, comodidades, placeres, de que se hallan privados, o tienen quepagar muy caro, sinnúmero de otros pueblos de la tierra. Estableceremoscomparaciones respecto de la superioridad de nuestra producción compara-da con los principales países del mundo, en la ganadería, en la agricultura(...). Hasta la higiene puede prestarse para provocar observaciones decarácter nacional y patriótico. Al referirse, por ejemplo, a las obras desalubridad de Buenos Aires, haríamos resaltar que figura por ellas nuestracapital entre las primeras del mundo."

"Geografía e historia -Estos dos ramos, es bien sabido, se prestanparticularmente para influir en la formación de sentimientos patrióticos,siendo casi innecesario insistir en los medios de que ha de valerse el maestro(...). Así ocurrirá, en lo que se refiere a la geografía, al ocuparse de losdiversos lugares, de las bellezas naturales comparables a las mejores delmundo, superiores a veces; de las producciones múltiples y abundantes quenos ponen en situación de ser útiles a los países extranjeros tanto como anosotros mismos (...). y de másestádecirque al estudiarnuestracordillera,por ejemplo, será oportuno hacer resaltar el honor que refleja sobrenuestros héroes el hecho de haber sido capaces de trasponer los Andes para

asegurar nuestra libertad y para llevarla también a paíseshermanos; y lomismo al referimos a cualquier lugar, costa, río, valle, pueblo, etc., en queun hecho digno de recordación se haya producido. Huelga más aún decirque ha de ponerse en evidencia constantemente al estudiar las diversas

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EL FRACASO DEL PROVECTO ARGENTINO 27

partes de nuestra historia, todos los acontecimientos de que se desprendeuna lecciOn o un ejemplo de perseverancia, de abnegacion, de valor, dealtivez, etc. (...)."

"Moral, instrucdón cIvica y economia social - En estos ramoscomo en los demás, en Ia parte en que La enseñanza reposa sobre ejemplos,el maestro presentará otra vez con frecuencia, para ilustrar las distintasvirtudes, los niodelos que en nuestro pals yen su historia se encuentran (...)."

"Aritmética - SinnCirnero de ejercicios puede hacerse relacionandoLa aritmética con La historia, Ia geograf ía, Ia industria nacional, etc., de modoque se avive el recuerdo de acontecimientos gloriosos, fechas memorables,grandezas naturaLes del pals, su riqueza, su porvenir industrial, comercial,politico ç...)."

"Dibujo - En el dibujo libre se exigirá que presentaran frecuente-mente temas de carácter nuestro, no solo en lo que representa lo visto porel niño, sino también en lo que significaria La expresiOn de sus sentimientosdesde el punto de vista de Ia historia nacional: el descubrimiento de America;La jura de La bandera; Ia muerte de CabraL; el ejército de San MartIn cruzandoLos Andes, etc. (...)."

"Müsica - Sin perjuicio de los diversos coros que son habituales,entre etlos los de carácter especiaLmente patnótico, Se entonaráperiOdicamente el canto a Ia bandera como ha sido resuelto por Lasuperioridad (,..)."2

Que a Pizzurno estas instrucciones no ban de haberle parecidodemasiado sensatas está claro pot el contenido de su primer informe aRarnos Mejia, publicado en el Monitor el mes anterior:

"El maestro que tenga Las cualidades, convicciones y sentimientosarriba expresados (amor a Ia patria, deseo de verla grande y prOspera comoIa que más, etc.), ha de transmitirlos a SUS discIpulos y no solamente en Iaclase de historia y geograf ía argentinas ni a horas fijas ni en dias determina-dos, sino en todos Los momentos, aprovechando todas Las oportunidades,unas veces dando Ia nota serena, tranquila, analizando hechos y cosas del

2. MonItor, 30 de )unlo de 1908, peg. 341-351. SI se comparan las instruccionessobre clenc3as naturales y geografia con los resultados de ml relevamlento del contenldonaclonalisla en los textos de geografla entre 1879 y 1986, se vera en qué medida las reformasde Ia educaclôn patriôtlca dejaron urn setlo hnperecedero en Ia enseñanza argentina. El rnétodode cantar lose al palsy compararlo favorablemente "con otros pueblos de Ia tierra", por ejemplo,as tipico del contenldo de los textos argentinos.

EL FRACASO DEL PROYECTO ARGENTINO 27

partes de nuestra historia, todos los acontecimientos de que se desprendeuna lección o un ejemplo de perseverancia, de abnegación, de valor, dealtivez, etc. (...)."

"Moral, instrucción cívica y economía social- En estos ramoscomo en los demás, en la parte en que la enseñanza reposa sobre ejemplos,el maestro presentará otra vez con frecuencia, para ilustrar las distintasvirtudes, los modelos que en nuestro país yen su historia se encuentran (...)."

"Aritmética - Sinnúmero de ejercicios puede hacerse relacionandola aritmética con la historia, la geografía, la industria nacional, etc., de modoque se avive el recuerdo de acontecimientos gloriosos, fechas memorables,grandezas naturales del país, su riqueza, su porvenir industrial, comercial,político (...)."

"Dibujo - En el dibujo libre se exigirá que presentaran frecuente-mente temas de carácter nuestro, no sólo en lo que representa lo visto porel niño, sino también en lo que significaría la expresión de sus sentimientosdesde el punto de vista de la historia nacional: el descubrimiento de América;la jura de la bandera; la muerte de Cabral; el ejército de San Martín cruzandolos Andes, etc. (...)."

"Música - Sin perjuicio de los diversos coros que son habituales,entre ellos los de carácter especialmente patriótico, se entonaráperiódicamente el canto a la bandera como ha sido resuelto por lasuperioridad (...)."2

Que a P'lZZUrI10estas instrucciones no han de haberle parecidodemasiado sensatas está claro por el contenido de su primer informe aRamos Mejía, publicado en el Monitor el mes anterior:

"El maestro que tenga las cualidades, convicciones y sentimientosarriba expresados (amor a la patria, deseo de verla grande y próspera comola que más, etc.), ha de transmitirlos a sus discípulos y no solamente en laclase de historia y geografía argentinas ni a horas fijas ni en días determina-dos, sino en todos los momentos, aprovechando todas las oportunidades,unas veces dando la nota serena, tranquila, analizando hechos y cosas del

2. Monitor, 30 de junio de 1908, pág. 341-351. Si se comparan las instrucciones

sobre denclas naturales y geografía con los resultados de mi relevamiento del contenido

nacionalista en los textos de geografía entre 1879 y 1986, se verá en qué medida las refonnasde la educación patriótica dejaron un sello imperecedero en la enseñanza argentina. El método

de cantar leas al pais y compararlo favorablemente "con otros pueblos de la tierra", por ejemplo,

es tiplco del contenido de los textos argentinos.



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pals para mostrar todo lo bueno que lo hace amable y también, con tacto,las imperfecciones que debemos tratar de corregir para aumentar sus bellascualidades; dando, otras veces, Ia nota entusiasta, sugestionadora, que hacevibrar eI alma del niño, que lo conmueve, y fijan en él sentimientos sanosy firmes que determinarán su conducta mañana llevándolo a cumplir sinvacilar sus deberes de ciudadano pensando que se sirve a si mismo y a supals. Pero mal puede comunicarse llama que no se tiene y eso es lo que, pordesgracia, ocurre a veces en las escuelas (...). Si Ia escuela es casi siempreun factor del ambiente, es también resultado del mismo. En una época defrialdad, de indiferencia por el cumplimiento de los deberes civicos -ésto(iltimo consecuencia a su vez de causas ajenas a Ia voluntad de losciudadanos, por ejemplo, del carácter cosmopolita de nuestra población, denuestras escasas condiciones para fundir en un molde nacional, que noexiste, al extranjero que incesantemente nos invade— inevitable es que losmaestros también experimenten los efectos del aire que respiran desde quenacen y que, a menudo, nose modifica ni en la escuela normal, donde suelenno hallar quién los retemple, les haga saber y sentir que ellos han deconvertirse mañana en factores del progreso de su pals, reaccionandoresueltamente contra el ambiente de indiferentismo que los rodea y prepa-rando generaciones con mejor conciencia de los deberes del ciudadano ycon sentimientos patrióticos más acentuados. Debe empezarse entoncespor ahi, por el maestro, estimularlo, recordarle esa parte de su misión y

(...). Entre tanto, y desde ya, interesa retemplar su fibra patrióticay esa es Ia tarea de las autoridades superiores, los inspectores

Pero Ranios Mejia estaba apurado, y crela ademAs que el maestroera una suerte de soldado que, más allá de sus sentimientos e incinaciones,debia ajustarse a una férrea disciplina y ;erarqula: el mismo procesoeducativo se consideraba regirnentable. La educación patriótica no podiaesperar a que se operara una necesariamente lenta reconversion auténticade los maestros. Para implementarla inmediatamente con hombres deprobado celo "patriótico", se nombró Inspector General Técnico, en reem-plazo de Pizzumo, a Ernesto A. Bavio, y se constituyó una comisiónintegrada por éste, el Prof. Normal Angel Graffigna y el mismisimopresidente del Consejo.

Emesto Bavio fue uno de Los pioneros de Ia educación patriótica. AlIgual que otros mencionados en el capltulo precedente (Raül Diaz, AndrésFerreira, etc.), era un hombre de origenes modestos que se adelantó a sus

3. Monitor, 31 de mayo de 1908, pag. 237-238.

28 CARLOS EsCUDE

país para mostrar todo lo bueno que lo hace amable y también, con tacto,las imperfecciones que debemos tratar de corregir para aumentar sus beUascualidades; dando, otras veces, la nota entusiasta, sugestionadora, que hacevibrar el alma del niño, que lo conmueve, y fijan en él sentimientos sanosy firmes que determinarán su conducta mañana Uevándolo a cumplir sinvacilar sus deberes de ciudadano pensando que se sirve a sí mismo y a supaís. Pero mal puede comunicarse Uamaque no se tiene y eso es lo que, pordesgracia, Ocurre a veces en las escuelas (...). Si la escuela es casi siempreun factor del ambiente, es también resultado del mismo. En una época defrialdad, de indiferencia por el cumplimiento de los deberes cívicos -éstoúltimo consecuencia a su vez de causas ajenas a la voluntad de losciudadanos, por ejemplo, del carácter cosmopolita de nuestra población, denuestras escasas condiciones para fundir en un molde nacional, que noexiste, al extranjero que incesantemente nos invade- inevitable es que losmaestros también experimenten los efectos del aire que respiran desde quenacen yque, a menudo, no se modifica ni en la escuela normal, donde suelenno haUar quién los retemple, les haga saber y sentir que eUos han deconvertirse mañana en factores del progreso de su país, reaccionandoresueltamente contra el ambiente de indiferentismo que los rodea y prepa-rando generaciones con mejor conciencia de los deberes del ciudadano ycon sentimientos patrióticos más acentuados. Debe empezarse entoncespor ahí, por el maestro, estimularlo, recordarle esa parte de su misión yfacilitársela (.. .).Entre tanto, y desde ya, interesa retemplar su fibra patrióticay esa es la tarea de las autoridades superiores, los inspectores (...)."3

Pero Ramos Mejía estaba apurado, y creía además que el maestroera una suerte de soldado que, más aUáde sus sentimientos e inclinaciones,debía ajustarse a una férrea disciplina y jerarquía: el mismo procesoeducativose consideraba regimentable. La educaciónpatriótica no podíaesperar a que se operara una necesariamente lenta reconversión auténticade los maestros. Para implementarla inmediatamente con hombres deprobado celo "patriótico",senombró InspectorGeneralTécnico,en reem-plazo de Pizzumo, a Ernesto A. Savio, y se constituyó una comisiónintegrada por éste, el Prof. Normal Angel Graffigna y el mismísimopresidente del Consejo.

Ernesto Savio fue uno de los pioneros de la educación patriótica. Aligual que otros mencionados en el capítulo precedente (Raúl Díaz, AndrésFerreira, etc.), era un hombre de orígenes modestos que se adelantó a sus

3. Monitor, 31 de mayo de 1908, pág. 237-238.




tiempos (aunque en ml opiniOn, de una manera perversa). Entrerriano, yadesde 1889 aplicaba conceptos de educaciOn patriótica desde sus cátedrasen Ia escuela Normal de Paraná. En La memoria que enviO al ministro deJusticia e Instrucción en 1891, dedicO 14 páginas a sus logros en

esta materia, que juzgaba profundamente moralizante. AscendiO rápida-mente en el escalafón, hasta Ilegar en 1909 al rnás alto cargo profesionaldel Consejo.4 Como lo reconociera el mismo Ramos Mejia, Bavio fue elautor de los planes de enseñanza primaria que se aprobaron en 1910 ypermanecieron vigentes hasta 1939. Estos programas agudizaron fuerte-mente el carácter "nacionalizante" de los programas anteriores, que comoya hemos visto, no estaban para nada desprovistos de esta dimensiOn. Elprograma de historia paso a set exclusivamente de "historia patria",enfatizándose sus "aspectos dramáticos". El programa de instrucciOn civicaestablecia que Ia formula "el primero y principal deber del hombre y delciudadano es amar, honrar y servir a su Patria, trabajando pot su prosperi-dad interior y por su grandeza y su gloria en el exterior' debla ser aprendidade memoria y "comentada inteligentemente por los alumnos"

4. MB. Plotktn, i'olitlca, EiucaclOn y Nacionalismo ci Centenavio, Todos.Historia, sepifembre de 1985, pig. 70-71.

5. Informe citado en not. (1), peg. 328, yMonitor, 31 de agosto i€ 1910. El programssintético de hlstorla astipulaba lo slguiente: Periodo preparativo (icr grado superior y20 grado) - Aspecto dramb.tlco. Lecctones sencillas y féciles sobre lossimbolos patrios, Ia bandera,ci escudo y ci himno. Lecciones por medlo de cuentos, narradones y Icyandas sabre los indios,sabre asuntos dcl periodo dci de

de Mayo, Independencia, etc. Mvertencla: Ia cnscñanz.a debera hacersecon el atodilo de reiratos, lemmas, pianos e pictoricas, y los tipos, cuadros y es.enasqua Sc elilan en este periodo deberCn ser draméticos y legendarios, a fin de que Ia scclón rewlteviva, concreta y personal.

'Tercer Grado - Aspecto biograuico: ESIUdIO de los dlversos perlodos de Iapains par medin de Ia blografia de Los grandes personajes que caractenizaron dichos perlodos.Aspecto dramético: Cuentos, Ieyendas, anécdotas y narractones draméticas.

Cuanto Grado - Aspecto narrativo: Narracion de los hechos principales y caractcnlsticos ocurridos en los diversos perlodos de is historia paint..

y Sexto Crados Aspecto cronologtco: Relaclôn cronologica de Is historispains, estudlando en este &lo los motivos y consecuencias de los hechos culminantes. Lonecesanio de Ia histonla general para La mejor comprensión de Ia hlstonla patnla.

A su vez, el programa de tnstrucclón cMos estipulaba, pars los tres primeros grados,elaborar los conceptos de familla, escuela, municiplo, autonldades y servlclos naclooales (puntasa, b, c, y d), y luego mandaba '(e) Explicar y amphar paulatinamente ci concepto de y(I) expilcar condiscipulos, convednos, comprovlnclanos, compatniotas, concludadanos, con-naclonales.

Para los tres grados supeniores, este programa establecia elaborar sabre: Patsta- Deftnldôn; (b)Patrlotl.mo - El pnimero y principal debar del hombre y del cludadano esansar,honrar y acMe a su patnia; (c) Pueblo - Argentinos y extranjeros, cluciadanos y habitantes; (d)Goblemo;(e) Expilcar, adarar y concretar los térmlnos pueblo argentlno, issclón argentina,oberanla, constltudón. Los puntos (I) a (p) trataban sabre los denechos, obligaclones,

seivicto de las contnibuclones, polida, justicia, regimen municipal, conslltucian, y I.Nadón Argentina, su origen. Pag. 205-206 del informe de a nota (1).

EL. FRACASO DÉL PROYECTO ARGENTINO 29

tiempos (aunque en mi opinión, de una manera perversa). Entrerriano, yadesde 1889 aplicaba conceptos de educación patriótica desde sus cátedrasen la escuela Normal de Paraná. En la memoria que envió al ministro deJusticia e Instrucción Pública en 1891, dedicó 14 páginas a sus logros enesta materia, que juzgaba profundamente moralizante. Ascendió rápida-mente en el escalafón, hasta llegar en 1909 al más alto cargo profesionaldel Consejo.4 Como lo reconociera el mismo Ramos Mejía, Bavio fue elautor de los planes de enseñanza primaria que se aprobaron en 1910 ypermanecieron vigentes hasta 1939. Estos programas agudizaron fuerte-mente el carácter "nacionalizante" de los programas anteriores, que comoya hemos visto, no estaban para nada desprovistos de esta dimensión. Elprograma de historia pasó a ser exclusivamente de "historia patria",enfatizándose sus "aspectos dramáticos". El programa de instrucción cívicaestablecía que la fórmula" el primero y principal deber del hombre y delciudadano es amar, honrar y servir a su Patria, trabajando por su prosperi-dad interior y por su grandeza y su gloria en el exterior" debía ser aprendidade memoria y "comentada inteligentemente por los alumnos".5

4. M.B. Plotkin, "Politlca, Educadón y Nacionalismo en el Centenario", Todo esHistoria, septiembre de 1985, pág. 70-71.

5. Informe citado en nota (1), pág. 328, YMonitor, 31 de agosto de 1910. El programasintético de "historia patria" estipulaba lo siguiente: "Periodo preparatlllO (ler grado superior y2Qgrado) -Aspecto dramático. Lecciones sencillas y fáciles sobre los simbolos patrlos,la bandera,el escudo y el himno. Lecciones por medio de cuentos, narraciones y leyendas sobre los Indios,sobre asuntos del periodo del descubrimiento y conquista y principalmente, de las invasionesInglesas, RcvoILJCl6nde Mayo, Independencia, etc. Advertenda; la enseñanza deberá hacersecon el auxilio de retratos,lámlnas, planos e ilustraciones pict6r1cas, y los tipos, cuadros y escenasque se elijan en este periodo deberán ser dramáticos y legendarios, a fin de que la Acci6n resulteviva, concreta y persona1.

"Tcreer Grado - Aspecto biográfico; Estudio de los diversos períodos de la historiapatria por medio de la biografia de los grandes personajes que caracterizaron dichos periodos.Aspecto dramático; Cuentos, leyendas, anécdotas y narraciones dramáticas.

"Cuarto Grado -Aspecto narratlllO: Narraci6n de los hechos principales y caracteristl-cos ocurridos en los diversos períodos de la historia patrIa.

"Quinto y Sexto Grados -Aspecto cronol6glco: Relación cronol6gica de la historiapatria, estudiando en este cIclo los motlllOs y consecuencias de los hechos culminantes. Lonecesario de la historia general para la mejor comprensión de la historia patrta. "

A su vez, el programa de instrucci6n clvica estipulaba, para los tres primeros grados,elaborar los conceptos de familia, escuela, municipio, autoñdades y servicios nacionales (puntosa, b, c, y d), y luego mandaba "(e) Explicar y ampliar paulatinamente el concepto de Patria; y(O explicar condiscípulos, convecinos, comprovlncianos, compatriotas, conciudadanos, con-nacionales. "

Para los tres grados superiores, este programa establecia elaborar sobre: "(a)La Patriao Definlcl6n; (b)Patriotismo -Elprimeroyprincipaldeberdelhombreydelciudadanoesamar,honrar y servir a su patria;(c)Pueblo -Argentinos y extranjeros, ciudadanos y habitantes; (d)Gobiemo;~) Explicar, aclarar yconcretarlos términos pueblo argentino, nadón argentina,soberanía, constitudón." Los puntos (O a (p) trataban sobre los derechos, obligaciones,servicio de las armas, contribuciones, pollda, Justicia, régimen municipal, constltuci6n, y laNadón Argentina, su origen. Pág. 205-206 del Informede la nota (1).



30 CARLOS ESCUDE

El programa sintético de esta materia establecia a Ia definición depatria y ala evaiuacion del pafriotismo como primer deber yvirtud suprema,como los dos primeros y prioritarios puntos en esta rama de Ia enseñanza.Además, en 1909 se estableciO Ia obiigaciOn de memorizar ci "catecismopatriOtico" de Bavio, posteriormente reemplazado por ci de Enrique deVedia, que habla ganado un concurso convocado en 1908 por el PoderEjecutivo. Mariano Piotkin rescata un elocuente párrafo de este catecismo,que rezaba:

"Maestro - son los deberes de un buen ciudadano?Alumno - El primero amar a Ia patria.Maestro - que a los padres?Alumno - que a todo!"

Naturalmente, se muitiplicaron y pautaron rigurosamente lasefemérides patrias. A principios de 1908 se instituyO Ia "Semana de Mayo".En julio de ese año se estableció el 2 de noviembre como "Dia de los muertospor Ia Patria". En rioviembre Sc estandarizo el Himno Nacional Argentinosegün ci arreglo dci inspector técnico de mt'lsica, Leopoldo Corret;er. Yenfebrero de 1909 se pautó rigurosamente Ia "Jura de in Bandera" aprobándoseen abril de ese año Ia "Formula de Juramento de Ia Bandera".

Por otra parte, en marzo de 1908 se estableciO que solo ci Consejopodia autorizar retratos de monarcas y prOceres extranjeros o ci uso denombres de personas para Ia designaciOn de auias. Una atmOsfera autori-taria comenzaba a cernirse lentamente sobre Ia enseñariza primaria argen-tina. Este autoritarismo se acentuO cuando, en marzo de 1909, "de acuerdoa las ideas expuestas (...) referente a Ia conveniencia de que el maestro deescuela fuese argentino, se resolviOque (...) entoda propuesta de candidatospara nombramiento de rnaestros deberia constar Ia nacionalidad de aquéiios".Y ese mismo mes se estableciO que los niños de 3er grado en adelantedeberian saber ci Himno de memoria para pasar de grado en grado.7

No sorprenden entonces las instrucciones de Bavio a los directoresy maestros en ocasiOn de Ia Semana de Mayo de 1909. Bajo ci rubro"cálculo y aritmética", por ejemplo, ordenaba:

"Problemas referentes a los años en que vMeron San Martin,

6. MB. Plotldn, op. dt., pág. 72.7. InIorme nota (1).

30 CARLOS EsCUDE

El programa sintético de esta materia establecía a la definición depatria y a la evaluación del patriotismo como primer deber y virtud suprema,como los dos primeros y prioritarios puntos en esta rama de la enseñanza.Además, en 1909 se estableció la obligación de memorizar el "catecismopatriótico" de Bavio, posteriormente reemplazado por el de Enrique deVedia, que había ganado un concurso convocado en 1908 por el PoderEjecutivo. Mariano Plotkin rescata un elocuente párrafo de este catecismo,que rezaba:

"Maestro- ¿Cuáles son los deberes de un buen ciudadano?Alumno -El primero amar a la patria.Maestro - ¿Antes que a los padres?Alumno- ¡Antes que a todo! "6

Naturalmente, se multiplicaron y pautaron rigurosamente lasefemérides patrias. A principios de 1908 se instituyó la "Semana de Mayo".En julio de ese año se estableció el2 de noviembre como "Día de los muertospor la Patria". En noviembre se estandarizó el Himno Nacional Argentinosegún el arreglo del inspector técnico de música, Leopoldo Corretjer. Yenfebrero de 1909 se pautó rigurosamente la "Jura de la Bandera" aprobándoseen abril de ese año la "Fórmula de Juramento de la Bandera".

Por otra parte, en marzo de 1908 se estableció que sólo el Consejopodía autorizar retratos de monarcas y próceres extranjeros o el uso denombres de personas para la designación de aulas. Una atmósfera autori-taria comenzaba a cernirse lentamente sobre la enseñanza primaria argen-tina. Este autoritarismo se acentuó cuando, en marzo de 1909, "de acuerdoa las ideas expuestas (...) referente a la conveniencia de que el maestro deescuela fuese argentino, se resolvió que (...) en toda propuesta de candidatospara nombramiento de maestros debería constar la nacionalidad de aquéllos" .y ese mismo mes se estableció que los niños de 3er grado en adelantedeberían saber el Himno de memoria para pasar de grado en grado?

No sorprenden entonces las instrucciones de Bavio a los directoresy maestros en ocasión de la Semana de Mayo de 1909. Bajo el rubro"cálculo y aritmética", por ejemplo, ordenaba:

"Problemas referentes a los años en que vivieron San Martín,

6. M.B. Plotkln, op. dt., pág. 72.7. Informe nota (1).

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EL FRACASO DEL PRO VECTO ARGENTtNO 31

Beigrano, Rivadavia, Moreno, Vicente Lopez y Planes, etc. Determinar Iafecha del nacimiento de esos prohombres y decir cuántos años tenian en1810. Tiempo que media entre el 25 de mayo de 1810 y Las principalesacciones de guerra de Ia RevoluciOn. Problemas concretos en Los que se hagamenciOn a fechas de batallas, al nCimero de patnotas antes y después deentrar en combate, al nacimiento y muerte de prohombre, a las fechasen que se reunieron las distintas Asambleas, a los recursos, a La renta, atcomercio, etc., de aquellos tiempos comparados con el presente. Es claroque el maestro, si Se prepara debidamente y no va a improvisar delante deLa clase, puede formar una serie graduada de interesantes problemasadaptados a La mentalidad de su clase."

Y agregaba:

"Pido a Los directores y maestros que, asi como han enseñado a Losniños que deben ponerse de pie y descubrirse cuando se toca el himnonacional, les enseñen también a descubrirse con igual respeto cuando pasaLa bandera en un desfile de nuestras tropas; porque cuando pasa La bandera,parece que nos va cantando sus glorias y sentimos corno si de sus plieguesbrotaran dianas o himnos triunfales. No se ha generalizado esta practicaentre nosotros, y corresponde a La escuela el honor de difundirla: esde inmenso poder educador (...)."

"Dentro de Las lineas que anteceden, Los directores y maestros tienenIa más amplia libertad para desenvolver sus propias y espontáneas iniciati-vas, a fin de hacer lo más fecunda posible esta ensefianza nacional y a fintambién de que todos rivalicen en noble emulaciOn y celo patriOtico."8

El resultado, por supuesto, fue que huestes enteras rivalizaron eninnoble emulación de hipocresia patriotera. Las páginas del Monitorpasaron a estar plagadas de notas, discursos y nmas de maestros, directorese inspectores que obsecuentemente se montaban sobre esta ola de en-volverse en La bandera. El rimador F. Julio Picarel, por ejemplo, que Ilenarla

enteros de versos hasta ver coronados sus esfuerzos con elnombramiento de inspector general técnico en La década de 1930, publi-caba en mayo de 1908 su "Canto a La Patria":

8. MonItor, 30 de mayo de 1909.


Belgrano, Rivadavia, Moreno, Vicente lópez y Planes, etc. Detenninar lafecha del nacimiento de esos prohombres y decir cuántos años tenían en1810. Tiempo que media entre el 25 de mayo de 1810 y las principalesaccionesde guerra de la Revolución. Problemas concretos en los que se hagamención a fechasde batallas,al número de patriotas antes y despuésdeentrar en combate, al nacimiento y muerte de algún prohombre, a las fechasen que se reunieron las distintas Asambleas, a los recursos, a la renta, alcomercio, etc., de aquellostiempos comparadoscon el presente. Es claroque el maestro, si se prepara debidamente y no va a improvisar delante dela clase, puede fonnar una serie graduada de interesantes problemasadaptadosa la mentalidadde su clase...

Y agregaba:

"Pid~ a los directores y maestros que, así como han enseñado a losniños que deben ponerse de pie y descubrirse cuando se toca el himnonacional, les enseñen también a descubrirse con igual respeto cuando pasala bandera en un desfile de nuestras tropas; porque cuando pasa la bandera,parece que nos va cantando sus glorias y sentimoscomo si de susplieguesbrotaran dianas o himnos triunfales. No se ha generalizado esta prácticaentre nosotros, y corresponde a la escuela pública el honor de difundirla: esde inmenso poder educador (oo.)."

"Dentro de las líneas que anteceden, los directores y maestros tienenla más amplia libertad para desenvolver sus propias y espontáneas iniciati-vas, a fin de hacer lo más fecunda posible esta enseñanza nacional y a fintambién de que todos rivalicen en noble emulación y celo patriótico. "8

Elresultado, por supuesto, fue que huestes enteras rivalizaron eninnoble emulación de hipocresía patriotera. Las páginas del Monitorpasaron a estar plagadas de notas, discursos y rimas de maestros, directorese inspectores que obsecuentemente se montaban sobre esta ola de en-volverse en la bandera. El rimador F. Julio Picarel, por ejemplo, que llenariavolúmenes enteros de versos hasta ver coronados sus esfuerzos con el

nombramiento de inspector general técnico en la década de 1930, publi-caba en mayo de 1908 su "Canto a la Patria":

8. Monitor, 30 de mayo de 1909.



32 CARLOS ESCUDE

"En ml férvida mente bullir sientoEl estro soberano del poeta,

La inspiración secretaQue agiganta y clarea el pensamiento;Dejad, que en este instante de ardimientoY de Ia patria en el grandioso diaTienda al vuelo ml ardiente fantasia

- Y que al pulsar con temblorosa manoDel arpa de oro las templadas cuerdas,Arranque un himno sacro, sobrehumano,

De nunca oldas notasDc cadencias ignotas

Rebosantes de acordes magistralesQue conmueva los patrios corazonesCon las nobles y santas emocionesDe las épicas gloiias nacionales!

8Dejad, dejad que cante de rodillasLas glorias de ml patria idolatradaY que sienta rodar por mis mejillasLas lAgrimas del alma transportada!S1, dejadme ilorar... es de entusiasmoEl ilanto que me nubla Ia mirada.Y si alguno jinfeliz! creyo sarcasmo

Con sin igual cinismoLa franca expresión del patriotismo

1Esa pasión sublimeQue eleva y nos redime!

Desatando las tunas de Ia IraHe de hacer que el villano Ia proclame,Cnizando el rostro del audaz infameCon las áunicas cucrdas de ml lira! (...)"

Cito estos pésinios versos corniendo el riesgo de alienar al lector,primero porque el Monitor contiene un notable muestrario de este tipo depoesia, y una descripción de su contenido ideologico no seria completa sinincluir por lo menos un ejemplo, y segundo porque su autor fue Picarel, unhombre que supo aprovechar las oportunidades de ascenso brindadas porel sistema y que posteriormente ejerció gran influencia, dócilmenteretroalimentando a Ia enseñanza con los contenidos sugeridos pot los

~ -po

32 CARLOS EsCUDE

"En mi férvida mente bullir sientoEl estro soberano del poeta,

La inspiración secretaQue agiganta y clarea el pensamiento;Dejad, que en este instante de ardimientoy de la patria en el grandioso díaTienda al vuelo mi ardiente fantasíay que al pulsar con temblorosa manoDel arpa de oro las templadas cuerdas,Arranque un himno sacro, sobrehumano,

De nunca oídas notasDe cadencias ignotas

Rebosantes de acordes magistralesQue conmueva los patrios corazonesCon las nobles y santas emocionesDe las épicas gloriasnacionales! .

¡Dejad, dejad que cante de rodíllasLas glorias de mi patria idolatraday que sienta rodar por mis mejillasLas lágrimas del alma transportada!¡Sí, dejadme llorar... es de entusiasmoEl llanto que me nubla la mirada.y si alguno ¡infeliz! creyó sarcasmo

Con sin igual cinismoLa franca expresión del patriotismo

¡Esa pasión sublimeQue eleva y nos redíme!

Desatando las furias de la ira

He de hacer que el villano la proclame,Cruzando el rostro del audaz infameCon las áuricas cuerdas de mi lira! (oo.)"

Cito estos pésimos versos corriendo el riesgo de alienar al lector,primero porque el Monitor contiene un notable muestrario de este tipo depoesía, y una descripción de su contenido ideológico no sería completa sinincluir por lo menos un ejemplo, y segundo porque su autor fue Picarel, unhombre que supo aprovechar las oportunidades de ascenso brindadas porel sistema y que posteriormente ejerció gran influencia, dócilmenteretroalimentando a la enseñanza con los contenidos sugeridos por los



a FRACASO DEL PROVECTO ARCENTINO 33

elencos politicos que eran sus superiores jerárquicos en La delConsejo. Picarel no fue excéntrico ni imbécil, sino un producto exitoso desu época.

En este contexto de aliento de La exaltaciOn, a La enseñanza de Lale fue asignado un papel especial. Ramos Mejia, en su informe de

1909-1910, sentaba doctrina respecto de Ia importante función de loscantos patriOticos, no solo en Ia generacion de un sentimiento nacional, sinotambién en La educación de Los aduttos por medio de Los nlños: "Lascanciones patriOticas, los aires nacionales, van de los labios infantiles a Losoidos de los adultos, de La escuela a! hogar, haciéndolos familiares a todose incorporándose al recuerdo y a los sentimientos populares"9. En estepunto, La irnpronta positivista de este proyecto de ingenieria cultural sepercibe claramente. El Consejo encargO encuestas con preguntas abiertaspara conocer el efecto producido en los ninos por el himno nacional y Lasmarchas militares. Segun Las respuestas, estas mCisicas generaban "orgullode ser patriota", "ganas de reir y ilorar al mismo tiempo", "una cosamandada de Dios; mucho respeto", "heroismo y entusiasmo". Los estudlosllegaban a La conclusiOn de que: "(...)En el soldado el niño ye La encamaciOnde La patria (...). Los sonidos ejecutados por una banda militar ilegan al oidodel niño como un lenguaje fantástico y fascinador (...)". El himno y lasrnarchas militares, estos sociOlogos ploneros, eran un "potentisimogenerador del amor patrio". Y asi, racionalmente, estos positivistas bus-caron alimentar La irracionalidad para ponerla al servicio de una causanacional que estaban inventand&°. Bien lo decia, alborozado, LeopoldoCorretjer: "El honorable Consejo Nacional de EducaciOn, al inaugurar Labien meditada serie de medidas tendientes a fortificar en el alma de Los niñosargentinos el sentimiento augusto de Ia Patria, y a convertir La escuela en elmás firme e indiscutible sostén del ideal nacionalista de nuestra tradición yespléndido pasado, asignO a La miisica, en esta magna tarea, el papelimportantisimo, y aun puede decirse de

de intenso emotismo, puede ampliamente desem-penar"1 Se estaba instrurnentando un adoctrinamiento para exaltar elsentimiento. Lo más curioso, lo más interesante, es que lo que estaconcepciOn del patriotismo buscaba no era enattecer La virtud civica y forjarun sentido del deber (como lo hubiera deseado un Plzzurno) sino generaremociones artificiales que en tin gran de casos serian fingidas (en

9. Informe nota (1), pág. 415.10. Monitor, 31 de de 1910.11. Monitor, 31 de )jIio de 1911, pág. 128.

-EL FRACASO DEL PROYECTO ARGENTINO 33

I

elencos políticos que eran sus superiores jerárquicos en la cúpula delConsejo. Picarel no fue excéntrico ni imbécil, sino un producto exitoso desu época.

En este contexto de alíento de la exaltación, a la enseñanza de lamúsica le fue asignado un papel especial. Ramos Mejía, en su informe de1909-1910, sentaba doctrina respecto de la importante función de loscantos patrióticos, no sólo en la generación de un sentimiento nacional, sinotambién en la educación de los adultos por medio de los niños: "lascanciones patrióticas, los aires nacionales, van de los labios infantiles a losoídos de los adultos, de la escuela al hogar, haciéndolos familiares a todose incorporándose al recuerdo y a los sentimientos populares"9. En estepunto, la ímpronta posítivista de este proyecto de ingeniería cultural sepercibe claramente. El Consejo encargó encuestas con preguntas abiertaspara conocer el efecto producido en los niños por el himno nacional y lasmarchas militares. Según las respuestas, estas músicas generaban "orgullode ser patriota", "ganas de reír y llorar al mismo tiempo", "una cosamandada de Dios; mucho respeto", "heroísmo y entusiasmo". Los estudiosllegaban a la conclusión de que: "(...) En el soldado el niño ve la encarnaciónde la patria (oo.).Los sonidos ejecutados por una banda militar llegan al oídodel niño como un lenguaje fantástico y fascinador (...)". B himno y lasmarchas militares, según estos sociólogos pioneros, eran un "potentísimogenerador del amor patrio". Y así, racionalmente, estos positivistas bus-caron alimentar la irracionalidad para ponerla al sérvicio de una causanacional que estaban inventandolO. Bien lo decía, alborozado, LeopoldoCorretjer: "El honorable Consejo Nacional de Educación, al inaugurar labien meditada serie de medidas tendientes a fortificar en el alma de los niñosargentinos el sentimiento augusto de la Patria, y a convertir la escuela en elmás firme e indiscutible sostén del ideal nacionalista de nuestra tradición yespléndido pasado, asignó a la música, en esta magna tarea, el papelimportantísimo, y aún puede decirse decisivo, que ella por su carácter depoética vaguedad y de intenso emotismo, puede ampliamente desem-peñar"ll. Se estaba instrumentando un adoctrinamiento para exaltar elsentimiento. Lo más curioso, lo más interesante, es que lo que estaconcepción del patriotismo buscaba no era enaltecer la virtud cívica y forjarun sentido del deber (como lo hubiera deseado un Pizzumo) sino generaremociones artificiales que en un gran número de casos serían fingidas (en

9. Infonne nota (1), pág. 415.10. Monitor, 31 de enero de 1910.11. Monitor, 31 de julio de 1911, pág. 128.



34 CARLOS ESCUDE

otras palabras, generar un vicio). Bavio lo explicaba bien:

"Por eso (.porque es natural) (...), no hay mérito alguno en amar atpals natal, pero si to hay, y grande, en ser patriota (...). Para amarconcientemente Ia patria, es necesario conocer su historia y apasionarse porella, par sus grandes benefactores, por sus instituciones y sus leyes (...). Pornatural que sea el sentimiento de amor at propio pals, dicho sentimientodebe ser dirigido e ilustrado desde los primeros años, si ha de conseguir atfin formar un fuerte y equilibrado patriotismo. La obra del maestro, en Iaescuela primaria, consiste, pues, en cultivar y robustecer tal sentimiento partodos los medios a su akance. Estos medios están en el lenguaje, en Ia poesianacional, en el dibujo, en Ia geografla, en Ia müsica patriótica, en Laeducación e instruccián moral y civica, y sobre todo, están en La historia,que es el rarno par excelencia para despertar y vigorizar el nacionalismo yel amor a Ia patria (...)."

Y más adelante en el mismo artIculo, citando a Alejandro Guaselaga,Bavio se explaya con mayor precision:

"La Alemania ha sacado gran partido de Ia enseflanza de La historiabajo el punto de vista nacional y patriOtico porque reconociO que el objetoprincipal de La historia era vivificar el sentimiento nacional y el amor a Lapatria a fin de obtener su unificaciOn por medio del cultivo del patriotismo.(...) El Estado alemán se apodera del niño apenas empieza a balbucear y yano le suelta; le manda que se eduque, que aprenda los hechos mâs notablesde su historia, los sacrificios que Ia patria impone, el respeto que se debe aLa ley y La obligacion en que está de defenderla con su sangre y con su vida."2

En el siguiente del Monitor, Bavio desarrolla can cada vezmayor claridad y candor sus ideas autoritarias y militaristas:

"Los heroes de Ia dvilización - No hay nada más respetable queel ejército y Ia marina de un pueblo (...). El sentimiento se exalta ante elrecuerdo de las proezas de los heroes que ilustran los fastos de Ia patria,cubriendo de gloria su bandera. 'Cuando paso Ia bandera —Se ha dicho—parece que pasa Ia patria, cuyo honor flamea en sus pliegues".

Más adelante en eL mismo texto, elaborando sabre Ia enseflanza de

12. Emesto Bavlo, La historla en las escuelas argentinas, parte 1, Monitor, 31 demarso de 1910, pig. 712-713.

,,-.

34 CARLOS EsCUDE

otras palabras, generar un vicio). Savio lo explicaba bien:

"Por eso (porque es natural) (.oo),no hay mérito alguno en amar alpaís natal, pero sí lo hay, y grande, en ser patriota (oo.). Para amarconcientemente la patria, es necesario conocer su historia y apasionarse porella, por sus grandes benefactores, por sus instituciones y sus leyes (...). Pornatural que sea el sentimiento de amor al propio país, dicho sentimientodebe ser dirigid¿ e ilustrado desde los primeros años, si ha de conseguir alfin formar un fuerte y equilibrado patriotismo. La obra del maestro, en laescuela primaria, consiste, pues, en cultivar y robustecer tal sentimiento portodos los medios a su alcance. Estos medios están en el lenguaje, en la poesíanacional, en el dibujo, en la geografía, en la música patriótica, en laeducación e instrucción moral y cívica, y sobre todo, están en la historia,

que es el ramo por excelencia para despertar y vigorizar el nacionalismo yel amor a la patria (...)."

y más adelante en el mismo artículo, citando a Alejandro Guaselaga,Savio se explaya con mayor precisión:

"La Alemania ha sacado gran partido de la enseñanza de la historiabajo el punto de vista nacional y patriótico porque reconoció que el objetoprincipal de la historia era vivificar el sentimiento nacional y el amor a lapatria a fin de obtener su unificación por medio del cultivo del patriotismo.(oo.)El Estado alemán se apodera del niño apenas empieza a balbucearyyano le suelta; le manda que se eduque, que aprenda los hechos más notablesde su historia, los sacrificios que la patria impone, el respeto que se debe ala ley y la obligación en que está de defenderla con su sangre y con su vida. "12

En el número siguiente del Monitor, Savio desarrolla con cada vezmayor claridad y candor SllSideas autoritarias y militaristas:

"Los héroes de la civilización -No hay nada más respetablequeel ejército y la marina de un pueblo (.oo). El sentimiento se exalta ante elrecuerdo de las proezas de los héroes que ilustran los fastos de la patria,cubriendo de gloria su bandera. 'Cuando pasa la bandera -se ha dicho-parece que pasa la patria, cuyo honor flamea en sus pliegues'".

Más adelante en el rhismotexto, elaborando sobre la enseñanza de

12. Ernesto Bavlo. "La historia en las escuelas argentinas, parte 1", Monitor, 31 demarzo de 1910, pág. 712-713.




Ia historia, Bavio sostiene que hay en ella tres "grandes ciclos": el de losheroes, ci de los Estados y el del mundo. Agrega:

"(...)En los tres primeros grados de Ia escuela comCin no debe tenercabida sino el primer ciclo, el de los heroes, y Ia enseflanza debe serdramática y legendaria, con ci deliberado proposito de herir vivamente Laimaginación impresionable del niño. (...) No creemos que La historiauniversal (tercer ciclo) sea Ia más apropiada para Ia escuela (...)"

Y todavia hay más:

"Los maestros y ci espiritu de Ia naclón - De Amicis, el iiustreescritor italiano, ha reflejado en una de sus magistrales correspondencias aldiario La Prensa, de esta Capital (abril de 1907), Las impresiones que Ictransrnitiera sobre el pueblo japonés un distinguido corresponsal de diariosque presenció algunos de los rnás tocantes episodios de Ia guerra entre estepalsy Rusia (...). No dudaba de modo que Rusia seria derrotada (...).'No podia suceder de otro modo'—agrego-- 'Por fuerza de espiritu nacionaly por organización militar, el Japon era tan superior, que no se podia dudardel éxito de Ia lucha. El pueblo Japonés no tiene ejército, es un ejército. Eljaponés entra en el ejército cuando entra en Ia escuela. El Estado, que le daIa enseñanza gratis, le pone al mismo tiempo en las manos el alfabeto y ellush. Toda Ia educación escolar es patriótica y belicosa. El maestro es elprimer educador militar del nino. Las paredes de las escuelas están cubiertasde inscripciones marciales, de frases heroicas, de recuerdos gloriosos de Iaepopeya guerrera de Ia patria (...). Al niño se le repite continuamente queél no pertenece ni al padre ni a La madre, y que, cuando tenga una familiapropia, nose deberá considerar nunca como perteneciente a su familia, sinoa su pals, que está par encima de todo y alcual todo se debe'. (...) Pals sesudodebe ser, en verdad, el que asi sabe honrar y enaltecer a los maestrosprimarios; porque se sirve adecuadamente de Ia escuela como de uninstrumento fecundo de gobiemo y campo fértil donde germinan y sedesarroilan todos los grandes sentimientos y las más grandes y sólidasdisciplinas. Par eso, alli se recompensa al general vencedor en Port Arthur,una vez concluida La guerra, nombrándoio.. .maestro de escuela!ejemplo ofrecido por La nación del so! levante a los demás pueblos de Iatlerra!"13

13. Emesto Bavlo, "La en las escuelas argentlnas, parte MonItor, 30 deabril de 1910, pág. 69-72.


la historia, Savio sostiene que hay en ella tres "grandes ciclos": el de loshéroes, el de los Estados y el del mundo. Agrega:

"(...)En los tres primeros grados de la escuela común no debe tenercabida sino el primer ciclo, el de los héroes, y la enseñanza debe serdramática y legendaria, con el deliberado propósito de herir vivamente laimaginación impresionable del niño. (oo.)No creemos que la historiauniversal (tercer ciclo) sea la más apropiada para la escuela común (...)"

y todavia hay más:

"Los maestros y el espíritu de la nación - De Amicis,el ilustreescritor italiano, ha reflejado en una de sus magistrales correspondencias aldiario La Prensa, de esta Capital (abril de 1907), las impresiones que letransmitiera sobre el pueblo japonés un distinguido corresponsal de diariosque presencióalgunosde los más tocantes episodiosde la guerra entre estepaís y Rusia (...). No dudaba de ningún modo que Rusia seria derrotada (...).'No podia suceder de otro modo'-agregó- 'Por fuerza de espiritu nacionaly por organización militar, el Japón era tan superior, que no se podía dudardel éxito de la lucha. El pueblo japonés no tiene ejército, es un ejército. Eljaponés entra en el ejército cuando entra en la escuela. El Estado, que le dala enseñanza gratis, le pone al mismo tiempo en las manos el alfabeto y elfusil.Toda la educación escolar es patriótica y belicosa.El maestro es elprimer educador militar del niño. Las paredes de las escuelas están cubiertasde inscripciones marciales, de frases heroicas, de recuerdosgloriososde laepopeya guerrera de la patria (oo.). Alniño se le repite continuamente queél no pertenece ni al padre ni a la madre, y que, cuando tenga una familiapropia, no se deberá considerar nunca como perteneciente a su familia, sinoa su país, que está por encima de todo y al cual todo se debe' . (...) País sesudodebe ser, en verdad, el que así sabe honrar y enaltecer a los maestrosprimarios; porque se sirve adecuadamente de la escuela como de uninstrumento fecundo de gobierno y campo fértil donde germinan y sedesarrollan todos los grandes sentimientos y las más grandes y sólidasdisciplinas. Por eso, allí se recompensa al general vencedor en Port Arthur,una vez concluida la guerra, nombrándolooo.maestro de escuela! ¡Hermosoejemplo ofrecido por la nación del sol levante a los demás pueblos de latierra,"13

13. Ernesto Bavio, "La historia en las escuelas argentinas, parte 11",Monitor, 30 de

abril de 1910, pág. 69-72.



36 CARLOS ESCUDE

No es, pues, extraño que en junio de 1910, Bavio haya publicadouna "lección patriótica" en Ia que hacia pronunciar a Los niños una "oraciônde Mayo", que comparaba explicitamente con el Padre Nuestro:

San MartIn, Moreno, Beigrano, Rivadavia, padres ilustres de LaRepObtica Argentina que morals en las regiones excelsas de Ia inmortabdaden La historia; fundadores de La Libertad y de La lndependencia de La Patria,

sea vuestra memoria por Las presentes y futuras generaciones!"(sigue)'4

Claramente, pues, el de Ia educación patriótica era un proyectopositivista de ingenieria cultural que buscaba generar una nación a través deun Estado artificial. Era tarnbién un proyecto extremista que, racionalmente,pretendia generar irracionalidad exaltando sentimientos fanáticos a travésde La enseñanza. La preocupación por una educación para el desarroHo, talcomo habia sido concebida por Sarmiento, habla desaparecido por corn-pleto. En su lugar, primaba un concepto adoctrinador, dogmatico, autori-tario y militarista, que encadenaba at individuo at Estado. Que ésto estuvieraen contradiccion con las instituciones argentinas es un hecho del que losmentores de esta perversion cultural no parecieron percatarse. Un sistemaeducativo centralizado y en expansiOn, con los abundantes recursos pre-supuestarios de un Estado cada vez rnás rico, estaba plasmando una culturanacional dogmática y estrecha que era Ia antltesis de Ia modemidadrequerida para dotar al pals de un desarrollo autosostenido: ésta era Iasegunda contradicciOn que afectaba a! sistema. La estabilidad politica severia afectada por Ia contradicciOn entre cultura (asi gestada) e instituciones(creadas en un momento ideolOgico previo y muy distinto). A su vez, losobjetivos nacionalistas de La educación patriOtica se verIan frustrados porLa contradicciOn entre una cultura chauvinista, dogmática y mitOmana, ylasnecesidades funcionales del desarrollo del poder en el siglo XX, queexige: alentar La duda sistemática para gestar un método de pensamientocientifico. Finalmente, no es de extrañar que, más de veinte años despuésde La instauraciOn de estas reformas, el ejército haya usurpado impunementeel gobiemo, por prirnera vez en Ia historia de Ia Argentina organizada.Veintipico de años de adoctrinamiento en el dogma de que "no hay nadamás respetabte que et ej&cito y La marina de un pueblo", que son los "heroes

14. MonItor, 30 de Jun10 de 1910.

36 CARLOS EsCUDE

No es, pues, extraño que en junio de 191O, Savio haya pubUcadouna "lección patriótica" en la que hacía pronunciar a los niños una" oraciónde Mayo", que comparaba explícitamente con el Padre Nuestro:

"San Martín, Moreno, Belgrano, Rivadavia, padres ilustres de laRepúbUca Argentina que morais en las regiones excelsas de la inmortaUdaden la historia;,Jundadores de la Libertad y de la Independencia de la Patria,¡glorificada sea vuestra memoria por las presentes y futuras generaciones!"(sigue)l4

Claramente, pues, el de la educación patriótica era un proyectopositivista de ingeniería cultural que buscaba generar una nación a través deun Estado artificial. Era también un proyecto extremista que, racionalmente,pretendía generar irracionalidad exaltando sentimientos fanáticos a travésde la enseñanza. La preocupación por una educación para el desarroUo, talcomo había sido concebida por Sarmiento, había desaparecido por com-pleto. En su lugar, primaba un concepto adoctrinador, dogmático, autori-tario y miUtarista, que encadenaba al individuo al Estado. Que ésto estuvieraen contradicción con las instituciones argentinas es un hecho del que losmentores de esta perversión cultural no parecieron percatarse. Un sistemaeducativo centraUzado y en expansión, con los abundantes recursos pre-supuestarios de un Estado cada vez más rico, estaba plasmando una culturanacional dogmática y estrecha que era la antítesis de la modernidadrequerida para dotar al país de un desarroUo autosostenido: ésta era lasegunda contradicción que afectaba al sistema. La estabiUdad política severía afectada por la contradicción entre cultura (así gestada) e instituciones(creadas en un momento ideológico previo y muy distinto). A su vez, losobjetivos nacionaUstas de la educación patriótica se verían frustrados porla contradicción entre una cultura chauvinista, dogmática y mitómana, y lasnecesidades funcionales del desarrollo del poder en el siglo XX, queexige: alentar la duda sistemática para gestar un método de pensamientocientífico. Pmalmente, no es de extrañar que, más de veinte años despuésde la instauración de estas reformas, el ejército haya usurpado impunementeel gobierno, por primera vez en la historia de la Argentina organizada.Veintipico de años de adoctrinamiento en el dogma de que "no hay nadamás respetable que el ejército y la marina de un pueblo" , que son los "héroes

14. Monitor, 30 de junio de 1910.




de Ia civilización", no pasan en vano. Al menos en parte, el militarismo deIa politica argentina fue una consecuencia de una cultura miitarista, y elmilitarismo de esa cultura fue una consecuencia de los contenidos educati-vos, desde los programas de educación patriótica en adelante. En losrestantes subtitulos de este capitulo profundizaremos en Las caracterIsticasde este proyecto y continuaremos documentándolo.

Carlos Octavio Bunge y las justificacionesideolôgicas de Ia educación patriótica

Hare escasas referencias en este estudio a La obra de Ricardo Rojas,básicamente porque este pensador conservo un perfil mucho más nitidopara Ia posteridad y pocos argentinos bien informados han olvidado a LaRestauraclón Nacionalista. Este no es eL caso, empero, de CarlosOctavio Bunge, cuya influencia intelectual en La gestación de La educaciónpatriótica fue por lo menos tan importante corno Ia de Rojas. Por cierto, Iaposteridad ha recordado a Rojas pero ha oMdado a su contexto, y La obrade Rojas, como La de Bunge, es importante gracias a un contexto politico-ideoLogico que, a través de un Ramos Mejia y un Bavio (entre muchos otros),le dio La proyección que necesitaba para dejar una impronta perdurable enLa cultura politica argentina.

Mucho antes de Ia publicacion de Ia obra principaL de Rojas, CarlosOctavio Bunge era un activista de La educación patriótica, y cuando RamosMejia se hizo cargo de La presidencia del Consejo, paso a ser un asIduocolaborador del Monitor. En agosto de 1908 publicO uno de sus primerosarticulos justificatorios de La empresa de Ramos Mejia:

"La violenta corriente dernocrático-individualista de La filosof Ia delsiglo XIX ha solido producir, en ciertos espiritus exaltados, un conflictoanárquico y disolvente de La colectividad social. Por su influjo llegase a vecesa considerar con indiferencia, cuando no con menosprecio, Los sentimientosgregarios sociales, yespeciaLmente el idealde La patria. El patriot ismo resultaentonces una idea anticuada, retrograda y de mal gusto (...). Y esta manerade pensar y de sentir de los pseudo-superhombres del individualismoanárquico, que es un peligro en todas Las sociedades modernas,como tal en Ia Argentina por La afluencia del extranjero inmi-grante. Contra semejante tesis antisocial, pienso yo que Ia sociologiamodema, lejos de demostrarLa, propende a consolidar, en cada comunidadsocial, Los naturales vInculos de Ia nacionalidad (...)."


de la civilización", no pasan en vano. Al menos en parte, el militarismo de

la política argentina fue una consecuencia de una cultura militarista, y elmilitarismo de esa cultura fue una consecuencia de los contenidos educati-

vos, desde los programas de educación patriótica en adelante. En losrestantes subtítulos de este capítulo profundizaremos en las característicasde esteproyecto y continuaremos documentándolo.

Carlos Octavio Bunge y las justificacionesideológicas de la educación patriótica

Haréescasas referencias en este estudio a la obra de Ricardo Rojas,básicamente porque este pensador conservó un perfil mucho más nítidopara la posteridad y pocos argentinos bien informados han olvidado a LaRestauración. Nacionalista. Este no es el caso, empero, de CarlosOctavio Bunge, cuya influencia intelectual en la gestación de la educaciónpatriótica fue por lo menos tan importante como la de Rojas. Por cierto, laposteridad ha recordado a Rojas pero ha olvidado a su contexto, y la obrade Rojas, como la de Bunge, es importante gracias a un contexto político-ideológico que, a través de un Ramos Mejía y un Bavio (entre muchos otros),le dio la proyección que necesitaba para dejar una impronta perdurable enla cultura política argentina.

Mucho antes de la publicación de la obra principal de Rojas, CarlosOctavio Bunge era un activista de la educación patriótica, y cuando RamosMejía se hizo cargo de la presidencia del Consejo, pasó a ser un asiduocolaborador del Monitor. En agosto de 1908 publicó uno de sus primerosartículos justificatorios de la empresa de Ramos Mejía:

"La violenta corriente democrático-individualista de la filosofía del

siglo XIX ha solido producir, en ciertos espíritus exaltados, un conflictoanárquico y disolvente de la colectividad social. Por su influjo llégase a vecesa considerar con indiferencia, cuando no con menosprecio, los sentimientosgregarios sociales, yespecialmente el ideal de la patria. El patriotismo resultaentonces una idea anticuada, retrógrada y de mal gusto (...). Y esta manerade pensar y de sentir de los pseudo-superhombres del individualismoanárquico, que es un peligro en todas las sociedades modernas, reagravosecomo tal en la República Argentina por la afluencia del extranjero inmi-grante. Contra semejante tesis antisocial, pienso yo que la sociologíamodema, lejos de demostrarla, propende a consolidar, en cada comunidadsocíal, los naturalesvinculos de la nacionalidadcomún (...)."



38 CARLOS ESCLJDE

En este articulo, Bunge observaba que con frecuencia no habla, enLas "sociedades actuates", unidad de origen étnico, ni de Iengua, ni dereligion. Dc ahi que aconsejara:

"Débese (...) buscar La unidad social en algo distinto y superior a Iaunidad étnica, linguistica, religiosa, geográfica. Este algo consiste, a mljuiclo, en La unidad de sentimiento y Ia idea de Ia patria comunes a todos oa una gran parte de Los hombres que constituyen La unidad social (..).Ahorabien, el Estado, como representante de La nacionalidad, debe encamar sustendencias y propOsitos. Y et primero de los propOsitos de Ia nacionalidades, seguramente, conservarse. SegOn La teorla psiquica apuntada (conanterioridad en el texto de Bunge), una nacionalidad no podrá conservarsemientras no cultivara los factores de su unidad, esto es, el senlimiento de Lapatria. Para cultivarlos, el Estado no posee un campo más ancho y fecundoque La escuela. De ahi que en todo pals que progresa, Ia educación ante todoy score todo debe ser patriótica."5

AsI sentada La necesidad de una educación patriOtica, Bunge abordOun tema rnás especlfico y espinosa en un influyente articulo, muchas vecescitado por entusiastas de este proyecto, titulado "La enseñanza de Iatradición y La Ieyenda", que publicó en 1911. All observa que nadiedesconoce La eficacia de La enseñanza de La historia para formar elsentimiento de La nacionalidad, pero que algunos dudan sobre La pertinenciade enseñar tambien La tradición y La leyenda. En su definición, Ia historia serefiere a "hechos reales y coinprobados"; Ia tradiciOn a "hechos en partereales y en parte ficticios, pero posibles y naturales, transmitidos de unageneración a otra"; y La Ieyenda, finalmente, a "hechos fantásticos, más omenos imposibles y maravillosos". Discurre entonces:

"Definidas asi La tradición y La leyenda, comprértdese que ellas seapartan de Ia historia propiamente dicha, para entrar antes bien en Losdominios de Ia poesla (...). excluirse en absoluto de (La enseñanzageneral al) estudio de La tradición y La leyenda? han de conocerse másque los hechos documental, cientificamente comprobados como verda-deros? Por Ia completa exclusiOn del estudio de toda tradición y Ieyenda,se dectararán inmediatamente los espiritus estrechos e incompletos; aque-

15. Canoe Octavio Bunge, "La educaclon patrlotlca ante Ia soclologla", MonItor, 31de agosto de 1908, pa9. 67-70.

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En este artículo, Bunge observaba que con frecuencia no había, enlas "sociedades actuales", unidad de origen étnico, ni de lengua, ni dereligión. De ahí que aconsejara:

"Débese(...) buscar la unidad social en algo distinto y superior a launidad étnica, linguística, religiosa, geográfica. Este algo consiste, a mijuicio, en la unidad de sentimiento y la idea de la patria comunes a todos oa una gran parte de los hombres que constituyen la unidad social (u). Ahorabien, el Estado, como representante de la nacionalidad, debe encamar sustendencias y propósitos. Y el primero de los propósitos de la nacionalidades, seguramente, conservarse. Según la teoria psíquica apuntada (conanterioridad en el texto de Bunge), una nacionalidad no podrá conservarsemientras no cultivara los factores de su unidad, esto es, el sentimiento de la

patria. Para cultivarlos, el Estado no posee un campo más ancho y fecundoque la escuela. De ahí que en todo país que progresa, la educación ante todoy sobre todo debe ser patriótica."15

Así sentadalanecesidaddeuna educaciónpatriótica, Bungeabordóun tema másespecificoy espinosoen un influyente artículo,muchasvecescitado por entusiastasde este proyecto, titulado "La enseñanzade latradición y la leyenda", que publicó en 1911. A1li observa que nadiedesconoce la eficacia de la enseñanza de la historia para formar elsentimiento de la nacionalidad, pero que algunos dudan sobre la pertinenciade enseñar también la tradición y la leyenda. En su definición, la historia serefiere a "hechos reales y comprobados"; la tradición a "hechos en partereales y en parte ficticios, pero posibles y naturales, transmitidos de unageneración a otra"; y la leyenda, finalmente, a "hechos fantásticos, más omenos imposibles y maravillosos". Discurre entonces:

"Definidas así la tradición y la leyenda, compréndese que ellas seapartan de la historia propiamente dicha, para entrar antes bien en losdominios de la poesía (...). ¿Debe excluirse en absoluto de (la enseñanzageneral al) estudio de la tradición y la leyenda? ¿No han de conocerse másque los hechos documental, científicamente comprobados como verda-deros? Por la completa exclusión del estudio de toda tradición y leyenda,sedeclararáninmediatamentelos espíritusestrechose incompletos; aque-

15. Carlos Octavlo Bunge, "La educación patriótica ante la soclologia", Monitor, 31de agosto de 1908, pág. 67-70.



EL FRACASO DEL FROVECTO 39

Uos que no comprenden, en sus vastas proporciones, Ia eficacia del ideal yIa realidad de Ia poesia (...). Aunque ferviente partidario del positivismocientifico, abornino yo de tales pedagogos: soy €1 rnás sincero convencidode Ia importancia de La ficción poética en La instrucción del niño (...). Comose vera, fundo ml creencia en razones subjetivas, esto es, en La naturalezao idiosincracia del sujeto educando, el niño, y también en bases objetivas,o sea en el valor y utilidad del objeto de tat enseñanza, en La trascendenciasocial de Ia tradición y Ia leyenda."

Bunge pasa entonces al anátisis de su "fundamento subjetivo":

Ia) justamente célebre teorla o ley de Augusto Cornte,apetlidada de los ties estadios', Ia humanidad ha pasado sucesivamente portres perlodos generales: et religioso, el metafisico y el positivo (...). En Iainteligencia del mientras se desenvuelve y robustece, reprocfucensetambién esas sucesivas modalidades de Ia historia. Su espiritu es religiosohasta La adolescencia, y después metafIsico hasta Ia pubertad. Solo cuandoVega a su completo desarrollo se hace, aunque no siempre, (...) verdadera-mente positivo. Esta ley sobre el desarrollo de La inteligencia en €1 niño viene,pues, a tener una base biolOgica, La ley de Fritz Muller ('Ia ontogénesisreproduce a Ia filogénesis'), y una base sociologica, La ley de La dinérnicasocial de Augusto Comte (...). Es el niño como un salvaje primero, y luegocomo un bárbaro, en todos sus instintos y sentimientos (...). Sentado estehecho, recordemos que Ia enseñanza no debe forzar, antes bien coadyuvara La naturaleza (...). (En no reconocer ésto) radica el defecto capital de queadolece Ia pedagogia inglesade Spenceryde 8am (...). De all Ia superiorldadde La moderna pedagogia alemana, singularmente La de Herbart. Esta noproscribe el ideal, antes bien le da su justo puesto y le reconoce su primordialimportancia (...)."

Como se ve, el "fundarnento subjetivo" es una tipica y deliciosa piezade época positivista, de carActer eminentemente "teórico". En cambio, el"fundamento objetivo" ya se reLaciona con las circunstancias especlficas queenfrentaba La Argentina de esos tiempos:

"Enfre nosotros, pot razones de polltica trascendental, no se daoficialmente enseñanza religiosa en Las escuelas del Estado. El estudio de lasficciones sociales queda circunscripto en el de La tradición y Ia leyenda. Elsentimiento poético y fantasista del alma nacionaly su aspiraciOn al más ala

-EL FRACASO DEL FROYECTO ARGENTINO 39

llos que no comprenden, en sus vastas proporciones, la eficacia del ideal yla realidad de la poesía (...). Aunque ferviente partidario del positivismocientífico, abomino yo de tales pedagogos; soy el más sincero convencidode la importancia de la ficción poética en la instrucción del niño (...). Como

se verá, fundo mi creencia en razones subjetivas, esto es, en la naturalezao idiosincracia del sujeto educando, el niño, y también en bases objetivas,o sea en el valor y utilidad del objeto de tal enseñanza, en la trascendenciasocial de la tradición y la leyenda."

Bunge pasa entonces al análisis de su "fundamento subjetivo":

"(Según la) justamente célebre teoría o ley de Augusto Comte,apellidada' de los tres estadios' , la humanidad ha pasado sucesivamente portres períodos generales: el religioso, el metafísico y el positivo (...). En lainteligenciadel niño, mientras sedesenvuelve y robustece, reprodúcensetambién esas sucesivas modalidades de la historia. Su espíritu es religiosohastala adolescencia,y después metafísico hasta la pubertad. Sólo cuandollega a su completo desarrollo se hace, aunque no siempre, (...) verdadera-mente positivo. Esta ley sobre el desarrollo de la inteligencia en el niño viene,pues, a tener una base biológica, la ley de Fritz Muller ('la ontogénesisreproduce a la filogénesis'), y una base sociológica, la ley de la dinámicasocial de Augusto Comte (...). Es el niño como un salvaje primero, y luegocomo un bárbaro, en todos sus instintos y sentimientos (...). Sentado estehecho, recordemos que la enseñanza no debe forzar, antes bien coadyuvara la naturaleza (...). (En no reconocer ésto) radica el defecto capital de queadolece la pedagogía inglesa de Spencer y de Bain (...). De allí la superioridadde la moderna pedagogía alemana, singularmente la de Herbart. Esta noproscribe el ideal, antes bien le da su justo puesto y le reconoce su primordialimportancia (oo.)."

Como seve, el "fundamento subjetivo" es una típica y deliciosa piezade época positivista, de carácter eminentemente "teórico". En cambio, el"fundamento objetivo" ya se relaciona con las circunstancias específicas queenfrentaba la Argentina de esos tiempos:

"Entre nosotros, por razones de política trascendental, no se daoficialmente enseñanza religiosa en las escuelas del Estado. El estudio de lasficciones sociales queda circunscripto en el de la tradición y la leyenda. Elsentimiento poético y fantasista del alma nacional y su aspiración al más allá



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tier.en ese Unico campo de acciOn. No existiendo una religion verdadera-mente nacional, esto es, propia y privativa de nuestra nacionalidad argen-tina, el relativo idealismo hereditario de La raza posee sOlo, como válvula deescape. por asi decirlo, el culto de La tradición y La leyenda locales. Quitadese culto a los niños, y ellos, no teniendo con qué poblar La respectivaprovincia de su alma, suplirán lo que Ia educaciOn no da con supersticionestan estüpidas y perversas corno Ia gettatura..."

En este parrafo se observan dos elementos interesantes. En primerlugar, Ia equiparaciOn del patriotismo con Ia religion, que era una Ca-racteristica reiterada en el movimiento de educaciOn patriOtica (ya ilustradacon Ia "QraciOn de Mayo" de Ernesto Bavio). Por cierto, es de notar Iaañoranza de una "religion verdaderamente naciorial", que varias décadasmás tarde habrIa de ser retomada por José LOpez Rega, con La frustradacreacion de una lglesia CatOlica Argentina y su también frustrado "altar deLa patria", que no fue sino una tardia evocaciOn de esa educaciOn patriOtica,intencionadamente cuasi-religiosa, que fue creación de conservadorespositivistas, autoritarios y militaristas, que se disfrazaron de liberales.

En segundo lugar, Ia menciOn de Ia gettatura nos recuerda Laparanoia cultural (y Ia xenofobia) que se mencionaron anteriormente, y quees el verdadero leit motiv en todas Las justificaciones de La educaciOnpatriOtica: me ref iero a los temores de La vieja dirigencia argentina frente auna inmigraciOn que ella misma habia alentado. Finalmente, en los párrafosque siguen están presentes una admiración por el extremismo "patriótico"de alemanes yjaponeses, que (ya lo hemos visto) era otra de las caracteristi-cas cruciales de este rnovimiento:

"No puede desconocerse el alto valor nacionalizante de leyendas ytradiciones. El ejemplo del JapOn actual es interesantisimo. Parece ser queall forman las más antiguas y arraigadas tradiciones y leyendas esa curiosareligion del Shinto, el Shintoismo. Su cosmogonia, de épocas salvajes, esobscura e infantil. Ninguna inteligencia modema puede ya aceptar tangroseras explicaciones... Sin embargo, los partidarios del 'Japon japoni-zante' bregan para que renazca y se vivifique, como verdad de convenciOn,el culto del Shinto. Lo consideran lo más intimo, decisivo y fecundo del almanacional. En Alemania, Ia poesia artistica y erudita es nquisima en baladasy Lieder de carácter tradicional y legendarlo. Suministra asia Ia enseñanza,para el culto de Ia tradiciOn y Ia leyenda, inagotable material. LosLeserbucher (libros de lectura escolar) abundan en composiciones de talcarácter (...). Pot ficticio e imaginativo que todo ello sea, siendo nacional y

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tienen ese único campo de acción. No existiendouna religiónverdadera-mente nacional, esto es, propia y privativa de nuestra nacionalidad argen-tina, el relativo idealismo hereditario de la raza posee sólo, como válvula deescape, por así decirlo, el culto de la tradición y la leyenda locales. Quitadese culto a los niños, y ellos, no teniendo con qué poblar la respectivaprovincia de su alma, suplirán lo que la educación no da con supersticionestan estúpidas y perversas como la gettatura..."

En este párrafo se observan dos elementos interesantes. En primerlugar, la equiparación del patriotismo con la religión, que era una ca-racterística reiterada .en el movimiento de educación patriótica (ya ilustradacon la "Oración de Mayo" de Ernesto Savio). Por cierto, es de notar laañoranza de una "religión verdaderamente nacional", que varias décadasmás tarde habria de ser retomada por José López Rega, con la frustradacreación de una Iglesia Católica Argentina y su 'también frustrado" altar dela patria", que no fue sino una tardía evocación de esa educación patriótica,intencionadamente cuasi-religiosa, que fue creación de conservadorespositivistas, autoritarios y militaristas, que se disfrazaron de liberales.

En segundo lugar, la mención de la gettatura nos recuerda laparanoia cultural (y la xenofobia) que se mencionaron anteriormente, yquees el verdadero leit motiven todas las justificaciones de la educaciónpatriótica: me refiero a los temores de la vieja dirigencia argentina frente auna inmigración que ella misma había alentado. Rnalmente, en los párrafosque siguen están presentes una admiración por el extremismo "patriótico"dealemanesyjaponeses, que (yalo hemosvisto)era otra de lascaracteristi-cas cruciales de este movimiento:

"No puede desconocerse el alto valornacionalizantede leyendasytradiciones. El ejemplo del Japón actual es interesantísimo. Parece ser queallí forman las más antiguas y arraigadas tradiciones y leyendas esa curiosareligión del Shinto, el Shintoísmo. Su cosmogorua, de épocas salvajes, esobscura e infantil. Ninguna inteligencia moderna puede ya aceptar tangroseras explicaciones... Sin embargo, los partidarios del 'Japón japoni-zante' bregan para que renazca y sevivifique, como verdad de convención,el culto del Shinto. Lo consideran lo más íntimo, decisivo y fecundo del almanacional. En Alemania, la poesía artística y erudita es riquísima en baladasy Ueder de carácter tradicional y legendario. Suministra así a la enseñanza,para el culto de la tradición y la leyenda, inagotable material. LosLeserbucher (libros de lectura escolar) abundan en composiciones de talcarácter (...). Por ficticio e imaginativo que todo ello sea, siendo nacional y



EL FRACASO DEL PRO VECTO ARGENTINO 41

nacionalizante, siendo poético y moral, se estudia, se aprende, se graba conlas letras de oro de Ia poesia en el corazón de La muchedumbre."

Está claro, pues, que lo que Bunge (quizás el mhs ltAcido abogado de

Ia educación patriótica) nos propone es un lavado de cerebro colectivo, una

hipnosis masiva, que por otra parte es absolutamente consistente con estavertiente del positivismo, y es complementaria de las instrucciones al

personal docente que hernos documentado, donde Ia intención hipnótica(especialmente en €1 caso de Ia Ilega a ser casi expilcita. Por otraparte, Bunge no propone, directamente, el falseamiento de Ia verdadhistórica, pero esta ideologia es perfectamente compatible con unapresentación absolutamente parcial de los hechos, modalidad que seconvirtió en Ia caracteristica central del contenido de Ia enseñanza argentinarespecto de temas tales como Malvinas, San Martin o (de más está decirlo)Ia "grandeza" nacional. Además, aunque Bunge no propone el falseamientodescaradode Ia verdad histôrica, lo que propone en materia de "ficcionessociales" está suficientemente cerca del falseamiento directo de los hechoscomo para que, puesta Ia idea en las manos (o el cerebro) de mediocrespedagogos y obsecuentes escribientes, conduzca facilmente a mentirasdescabelladas (como La que detecté en textos de geografla de 1984, quesostienen que uno de los motivos por los que La ilamada Antártida Argentinadebe ser argentina es que, antiguamente, La Antártida era.. .iespañola!).

Por otra parte, el mismo Bunge se encarga de sembrar y alentarexageraciones. En el mismo articulo citado anteriormente, nos dice:

"El gaucho mismo, todavia una realidad, pasará pronto, adomadopor Ia fantasia popular con exageradas cualidades, a ser una bella leyenda.iConservemos su recuerdo, puesto que fuera el primer tipo simbólico de Lanacionalidad argentina! "16

En un articulo anterior, Bunge elabora sobre el mismo tema:

"El gaucho Martin Flerro, más que un determinado hombre, es eltipo generico del gaucho a mediados del siglo XIX, y su ligura, real ofantâstica, ha de perpetuarse en Ia memoria del pueblo argentino como Lade un grande y bárbaro semidios de los tiempos heroicos."17

16. Carios Octavio Bunge, l.a enseñanza data tradiciôn y Ia leyenda, MonItor, 28de febrero de 1911, p5g. 263-280.

17. Canoe Octavto Bunge, l.a poesia popular argentIna", Monitor, 30 de septiembrede 1909, pàg. 535.


nacionalizante, siendo poético y moral, se estudia, se aprende, se graba conlas letras de oro de la poesía en el corazón de la muchedumbre."

Está claro, pues, que lo que Bunge (quizás el más lúcido abogado dela educación patriótica) nos propone es un lavado de cerebro colectivo, unahipnosis masiva, que por otra parte es absolutamente consistente con estavertiente del positivismo, y es complementaria de las instrucciones alpersonal docente que hemos documentado, donde la intención hipnótica(especialmente en"el caso de la música) llega a ser casi explícita. Por otraparte, Bunge no propone, directamente, el falseamiento de la verdadhistórica, pero esta ideología es perfectamente compatible con unapresentación absolutamente parcial de los hechos, modalidad que seconvirtió en la característica central del contenido de la enseñanza argentinarespecto de temas tales como Malvinas, San Martín o (de más está decirlo)la "grandeza" nacional. Además, aunque Bunge no propone el falseamientodescarado'de la verdad histórica, lo que propone en materia de "ficcionessociales" está suficientemente cerca del falseamiento directo de los hechoscomo para que, puesta la idea en las manos (o el cerebro) de mediocrespedagogos y obsecuentes escribientes, conduzca fácilmente a mentirasdescabelladas (como la que detecté en textos de geografía de 1984, quesostienen que uno de los motivos por los que la llamada Antártida Argentinadebe ser argentina es que, antiguamente, la Antártida era...jespañola!).

Por otra parte, el mismo Bunge se encarga de sembrar y alentarexageraciones. En el mismo artículo citado anteriormente, nos dice:

"El gaucho mismo, todavia una realidad, pasará pronto, adornadopor la fantasía popular con exageradas cualidades, a ser una bella leyenda.¡Conservemos su recuerdo, puesto que fuera el primer tipo simbólico de lanacionalidad argentina!" 16

En un artículoanterior, Bungeelabora sobre el mismo tema:

"Elgaucho Martín Rerro, más que un determinado hombre, es el

\tipo genérico del gaucho a mediados del siglo XIX, y su figura, real ofantástica,ha de perpetuarse en la memoria delpueblo argentino como lade un grande y bárbaro semidiósde los tiempos heroicos."17

16, Carlos Octavio Bunge, "La enseñanza de la tradlcl6n y la leyenda", Monitor, 28de febrero de 1911, pág. 263-280.

17. Carlos Octavio Bunge, "La poesia popular argentina'. Monitor, 30 de septiembrede 1909, pág. 535.



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V en thn otro articulo, Bunge cae en Ia tonteria chauvinista que,posteriormente, se convirtio en prototIpica del argentino, a! punto de

acuñarse chistes latinoamericanos que ya son clichés, como el famoso deque el "ego" es el pequeño argentino que todos lievamos adentro:

"Aparte de su falta de nacionalismo, parécenos que La enseñanzaargentina peca hoy de otro defecto: es toda ella demasiado elemental (...).Tan es asI que, si se comparan los libros que conienternente sirven delectura escolar en (50 y 6° grado de) nuestras escuelas y los que se usan,aprobados par los entendidos, en Alemania e Inglaterra, por ejemplo, losnuestros sorprenden par superficiales y fáciles. Esto es tanto más chocante,cuanto que, en realidad, el educando argentino es mis precoz y,puede decirse, mis inteligente que el europeo."8 (ml subrayado)

Por cierto, cualquier mentira se justifica si, como lo hace Bunge, sesenala aprobatoriamente cómo en Alemania "se enseña lo naciona! yregional coma si el resto del mundo girara cual satelite airededor del sallocal, para fomentar un patriotismo social y dinástico, sirviendo de base aLa conservación social actual"'9

El homo patrioticus, cultor de Ia obsecuencia,frente a si mismo y al extranjero

Como se ye, este era un cuadro ideologico en el que nada faltabapara gestar una cultura politica megalomana y autoritaria. Era, además, unproyecto de adoctrinamiento que no veIa mis alli de là hipnosis colectivaque proponia. No captaba el hecho elemental de que el dogmatismo era Iaantitesis de lo que en el siglo XX se necesitarla para favorecer el desarrollode là ciencia y La técnica, esa fuente fundamental de poder nacional quenacionalistas como Bunge, Rojas y Ramos Mejia priorizaban corno objetivosocial, aCm sin reconocerlo. Naturalmente, La ideologia hubiera sido relati-varnente inocua de no haber tenido el pleno respaldo del poder politico yde un Estado rico, que podia multiplicar escuelas, maestras, publicaciones

18. Carlos Octavio Bunge, Teorla de un Ubro de lecture escolar', MonItor, 31 dediciembre de 1910, peg. 582-583.

19. Carlos Octavto Bunge, ensefianza de Ia hlstorla, Monitor, 31 de enero de1911, 111. Este articulo está esc,ito a propóslto del libro de Emesto Quesada, Laensef,anza de Ia hlstoria en las universidades alemanas, Huenos AIres 1910, y el ptrraiocitado es una cite de Quesada que I3unge hace suva.

JII

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y en aún otro artículo, Bunge cae en la tontería chauvinistaque,posteriormente, se convirtió en prototípica del argentino, al punto deacuñarse chistes latinoamericanosque ya son clichés,como el famoso deque el "ego" es el pequeño argentino que todos llevamosadentro:

"Aparte de su falta de nacionalismo, parécenos que la enseñanzaargentina peca hoy de otro defecto: es toda ella demasiado elemental (...).Tan es así que;- si se comparan los libros que corrientemente sirven delectura escolar en (50 y 60 grado de) nuestras escuelas y los que se usan,aprobados por los entendidos, en Alemania e Inglaterra, por ejemplo, losnuestros sorprenden por superficiales y fáciles. Esto es tanto más chocante,cuanto que, en realidad, eleducando argentino esmás precozy,puede decirse, más inteligente que el europeo. "18 (mi subrayado)

Por cierto, cualquier mentira se justifica si, como lo hace Bunge, seseñala aprobatoriamente cómo en Alemania" se enseña lo nacional yregional como si el resto del mundo girara cual satélite alrededor del sollocal, para fomentar un patriotismo social y dinástico, sirviendo de base ala conservación social actuar' .19

El horno patrioticus, cultor de la obsecuencia,frente a sí mismo y al extranjero

Como se ve, este era un cuadro ideológico en el que nada faltabapara gestar una cultura política megalómana y autoritaria. Era, además, unproyecto de adoctrinamiento que no veía más allá de la hipnosis colectivaque proponía. No captaba el hecho elemental de que el dogmatismo era laantítesis de lo que en el siglo XX se necesitaría para favorecer el desarrollode la ciencia y la técnica, esa fuente fundamental de poder nacional quenacionalistas como Bunge, Rojas y Ramos Mejía priorizaban como objetivosocial, aún sin reconocerlo. Naturalmente, la ideología hubiera sido relati-vamente inocua de no haber tenido el pleno respaldo del poder político yde un Estado rico, que podía multiplicar escuelas, maestras, publicaciones

18. Carlos Octavio Bunge, "Teorla de un libro de lectura escolar", Monitor, 31 dediciembre de 1910, pago 582-583.

19. Carlos Octavio Bunge, "La enseñanza de la historia", Monitor, 31 de enero de1911, pág. 111. Este articulo está escrito a propósito del libro de Ernesto Quesada, Laenseñanza de la historia en las universidades alemanas, Buenos Aires 1910, y el párrafocitado es una cita de Quesada que Bunge hace suya.



EL FRACASO DEL PRO VECTO ARGENTINO 43

y estudios ymás estudios sobre La educación patriótica en otros paises (comoel mismisimo trabajo de Rojas, que fue financiado por el Ministerio delnstrucción Püblica). Como se ha dicho, este era un contexto en el que lasideas de pensadores minósculos podian tener una proyección culturalenorme, si eran respaldados por el Estado, a La vez que pensadores muchomás sofisticados podian pasar desapercibidos sin ese apoyo. Y este era,también, un contexto en el que huestes de pobres maestros (que no tenianmas remedio) y ambiciosos trepadores, se subian al carro de los poderososy repetian las letanias patriOticas que se les exigia, publicando absurdosarticulos en el Monitor que bien podian valerles un ascenso. Seguramentepor todos estos hacia 1911 Ia educación patriótica se considerabaya consolidada: un hecho consurnado que caracterizaba a Ia ensefianzaargentina, al menos en el nivel primario. Justamente en ese afjo, Juan G.Beltrán peroraba en La Sorbona sobre este tema. Aleccionaba a losfranceses:

"No hay mhs poderoso instrumento para Ia elaboraciOn de Lanacionalidad y para unificar Jos ideales y Los sentimientos del futurociudadano que La escuela primaria (...). La escuela en ml pals tieneactualmente, más que nunca, y dire, más puede seT que en el porvenir, eldeber de velar por el principio de Ia nacionalidad. El sentimiento depatriotismo, estimulado y cultivado por La escuela, realiza Ia visiOn delpasado y Las aspiraciones y necesidades del presente (...). La escuelaargentina tiene boy un carácter completamente definido; ella es el agentemás eficaz de nuestra formación nacional; es justo agregar que no siemprefue asI, y que Ia reacción en este sentido ha sido iniciada y fuertementeconsolidada por el doctor J05é Maria Ramos Mejia (...). El caráctereminentemente nacionai de Ia escuela argentina domina su espiritu y suorganlzaciOn, sus medios y sus fines."

Beltrán temia, sin embargo, las reacciones adversas que su des-cripciOn de Ia educaciOn patriOtica (que inclula una emotiva recitaciOn de Laformula de jura a Ia bandera) podIa tener entre franceses, y por eso abrIa elparaguas:

"Yo adivino el juicio anticipado de algunos de vosotros sobre estecuadro, para ml hermoso, de La educaciOn naciorializadora de ml pals.Chauvinismo sudamericano, direis acaso, exageraciOn inmoderada delsentimiento del patriotismo. No es asi, sin embargo: todo responde a tin


y estudios y más estudios sobre la educación patriótica en otros países (comoel mismisimo trabajo de Rojas, que fue financiado por el Ministerio deInstrucción Pública). Como se ha dicho, este era un contexto en el que lasideas de pensadores minúsculos podían tener una proyección culturalenorme, si eran respaldados por el Estado, a la vez que pensadores muchomás sofisticados podían pasar desapercibidos sin ese apoyo. V este era,también, un contexto en el que huestes de pobres maestros (que no teníanmás remedio) y ambiciosos t~epadores, se subían al carro de los poderososy repetían las letanías patrióticas que se les exigía, publicando absurdosartículos en el Monitor que bien podían valerles un ascenso. Seguramentepor todos estos motivos, hacia 1911la educación patriótica se considerabaya consolidada: un hecho consumado que caracterizaba a la enseñanzaargentina, al menos en el nivel primario. Justamente en ese año, Juan G.Beltrán peroraba en la Sorbona sobre este tema. Aleccionaba a losfranceses:

. "No hay más poderoso instrumento para la elaboración de lanacionalidad y para unificar Jos ideales y los sentimientos del futurociudadano que la escuela primaria (...). La escuela en mí país tieneactualmente, más que nunca, y diré, más puede ser que en el porvenir, eldeber de velar por el principio de la nacionalidad. El sentimiento depatriotismo, estimulado y cultivadopor la escuela, realiza la visión delpasado y las aspiraciones y necesidades del presente (...). La escuelaargentina tiene hoy un carácter completamente definido;ella es el agentemás eficazde nuestra formaciónnacional;es justoagregar que no siemprefue así, y que la reacción en este sentido ha sido iniciaday fuertementeconsolidada por el doctor José Maria Ramos Mejía (...). El caráctereminentemente nacional de la escuela argentina domina su espíritu y suorganización,sus medios y sus fines."

Beltrán temía, sin embargo, las reacciones adversas que su des-cripciónde la educaciónpatriótica (queincluíauna emotivarecitaciónde lafórmulade juraa la bandera)podía tener entre franceses,y por eso abríaelparaguas:

"Vo adivino el juício anticipado de algunos de vosotros sobre estecuadro, para mí hermoso, de la educación nacionalizadora de mí país.Chauvinismo sudamericano, direis acaso, exageración inmoderada delsentimiento del patriotismo. No es así, sin embargo: todo responde a un



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pensamiento fundamental y a una necesidad orgánica. Justifica estacaracterización, ante todo, una razón de indole general y humana: La escuelanecesita una base moral en Ia educación primaria; forzoso es reernplazar Iabase religiosa de La moral educativa por La base del patriotismo, cuando ésta,por otra parte, responde a exigencias evidentes. Suprimida La moralreligiosa, ninguna otra puede reemplazarla como Ia moral de un patriotismogeneroso y expansivo, pero nacionalizador. Mi pals es un pueblo nuevo, envIas de formación étnica; uno de os factores impor-tantes ae nuestrocrecimiento reposa en Ia inmigración. Los pueblos que emigran a IaArgentina van allá de todas las direcciones y ilevan Las más diversastendencias. Es, pues, un deber primano fundir todos esos factores encon-trados en un solo molde que asegure los verdaderos caracteres firmes de unanacionalidad y neutralice el poder y asimilativo que en su medidaposeen todas las razas, dejando solo subsistir, por razones de logica y deexistencia, el poder atractivo y asimilativo de nuestra propia raza."

Su larguisima conferencia culminaba, obsecuente, con un datorevelador de Ia fuerza adoctrinadora de aquel rico Estado argentino:

"Sarmiento y Ramos Mejia serán senalados como los artificeseficaces de Ia instrucción püblica argentina y tendrán derecho al recono-cimiento de las generaciones futuras. Un solo dato seth suficiente parademostrar Ia infatigable actividad del iiltimo de estos benefactores de Lacultura nacional: en el curso del presente año, el Consejo que él preside hafundado mil nuevas escuelas diseminadas en los puntos más lejanos deldesierto, en La vertiente de Las montañas, en el corazOn mismo de lasselvas."2°

Y por cierto, Ia obsecuencia cundia en ese contexto. Saul Escobar,por ejemplo, comenzaba su informe sabre Ia educaciOn patriOtica europeadiciendo:

"(...) No hay persona medianamente ilustrada que no mire consimpatia y entusiasmo La noble tarea emprendida (...) de precisar el carácterde La nacionalidad argentina."

Sus conclusiones no son menos obsecuentes, a Ia que poseen uninterés sustantivo en tanto evaluaciOn comparativa contemporánea a loshechos:

20. Juan G. BeltrSn, La educación primarla en Ia MonItor. 31de mayo de 1911. pág. 317-71 (Conferencia Ia Sorbona).

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pensamiento fundamental y a una necesidad orgánica. Justifica estacaracterización, ante todo, una razón de índole general y humana: la escuelanecesita una base moral en la educación primaria; forzoso es reemplazar labase religiosa de la moral educativa por la base del patriotismo, cuando ésta,por otra parte, responde a exigencias evidentes. Suprimida la moralreligiosa, ninguna otra puede reemplazarla como la moral de un patriotismogeneroso y expansivo, pero nacionalizador. Mi país es un pueblo nuevo, envias de formación étnica; uno de :os factores importantes de nuestrocrecimiento reposa en la inmigración. Los pueblos que emigran a laArgentina van allá de todas las direcciones y Uevan las más diversastendencias. Es, pues, un deber primario fundir todos esos factores encon-trados en un solo molde que asegure los verdaderos caracteres firmes de unanacionalidad y neutralice el poder atractivo y asimilativo que en su medidaposeen todas las razas, dejando sólo subsistir, por razones de lógica y deexistencia, el poder atractivo y asimilativo de nuestra propia raza."

Su larguísima conferencia culminaba, obsecuente, con un datoreveladorde la fuerza adoctrinadora de aquel rico Estado argentino:

"Sarmiento y Ramos Mejía serán señalados como los artíficeseficaces de la instrucción pública argentina y tendrán derecho al recono-cimiento de las generaciones futuras. Un solo dato será suficiente parademostrar la infatigable actividad del último de estos benefactores de lacultura nacional: en el curso del presente año, el Consejo que él preside hafundado mil nuevas escuelas diseminadas en los puntos más lejanos deldesierto, en la vertiente de las montañas, en el corazón mismo de lasselvas."2o .

y por cierto, la obsecuencia cundía en ese contexto. Saúl Escobar,por ejemplo, comenzaba su informe sobre la educación patriótica europeadiciendo: .

"(...) No hay persona medianamente ilustrada que no mire consimpatía y entusiasmo la noble tarea emprendida (...) de precisar el carácterde la nacionalidad argentina."

Sus conclusiones no son menos obsecuentes, a la vez que poseen uninterés sustantivo en tanto evaluación comparativa contemporánea a loshechos:

20. Juan G. Beltn\n, "La educaci6n primaria en la República Argentina", Monitor, 31de mayo de 1911, pág. 317-71 (Conferencia en la Sorbona).



EL FRACASO DEL PROYECTO 45

"(...) Examinando lo que (en Europa) se realiza (...) se ilega a Iaconclusion que las rnedidas adoptadas con el laudable propOsito de encon-trar r emedio a nuestros males no han sido en manera alguna superadas, siconsideramos lo que de un tiempo a esta parte se ha puesto en prácticadebido a las previsoras y nobilisimas iniciativas de quien, resueltamente seha puesto al servicio de una aspiración digna de su espIritu: el actualPresidente del Consejo Nacional de Educación."

Y algunas páginas más adelante, en el contexto de las mismasconclusiones, agrega:

"Dejando asi, Excelentisimo Señor, delineados los distintos sistemasseguidos en el viejo mundo, relacionados con las cuestiones motivo de esteinforme que termino, abrigo La seguridad perfecta que sus conclusionesnecesariamente resultarán gratas al espiritu patriOtico, que anima tanto alPoder Ejecutivo Nacional como al Sr. Presidente del Consejo Nacional deEducación."

Por otra parte, el rnilitarismo y el extremismo proplos de estaideologia se expresan claramente en el texto del informe:

"Donde verdaderamente se da una orientación patnOtica a Iaenseñanza primaria es, sin disputa alguna, en Alemania y, especializándoseaOn más, en Prusia. El formidable esfuerzo de Ia constitución de ese imperloalemán, que comienza a sembrar vivas inquietudes sobre Las nacioneseuropeas, par su fuerza militar y económica, constituye una evidentedemostraciOn de lo que es capaz el pensamiento y carácter de un pueblo,cuando con mano firme ysin hesitaciones es dirigido a cumplir Ia misión quele ha sido deparada pot su destino."

En camblo, el auténtico liberalismo merecla reprobación, tildado de"internacionalismo" o "cosmopolitismo":

"Francia es ta vez Ia (mica nación donde con pasmosa facilidad hacrecido más lozano y echado hondas raices el miserable arbusto delantipatriotismo. (...) Al darse cuenta de Ia gravedad de este estado de cosas,ciertas personalidades como Duruy, Bocquillon, Crosjean, Devinat, Poin-signot, Camille Adoiphe, Despartes, Barres, entre los civiles, y Langlols,Grange, Lair, Roland, entre los militates, han comenzado a agitar La opinion


"(...) Examinando lo que (en Europa) se realiza (...) se llega a laconclusión que las medidas adoptadas con el laudable propósito de encon-trar remedio a nuestros males no han sido en manera alguna superadas, siconsideramos lo que de un tiempo a esta parte se ha puesto en prácticadebido a las previsoras y nobilísimas iniciativas de quien, resueltamente seha puesto al servicio de una aspiración digna de su espíritu: el actualPresidente del Consejo Nacional de Educación."

y algunas páginas más adelante, en el contexto de las mismasconclusiones,agrega:

"Dejando así, Excelentísimo Señor, delineados los distintos sistemasseguidos en el viejo mundo, relacionados con las cuestiones motivo de esteinforme que termino, abrigo la seguridad perfecta que sus conclusionesnecesariamente resultarán gratas al espíritu patriótico, que anima tanto alPoder Ejecutivo Nacional como al Sr. Presidente del Consejo Nacional deEducación...

Por otra parte, el militarismoy el extremismo propios de estaideologíase expresan claramenteen el texto del informe:

"Donde verdaderamente se da una orientación patriótica a laenseñanza primaria es, sin disputa alguna, en Alemania y, especializándoseaún más, en Prusia. El formidable esfuerzo de la constitución de ese imperioalemán, que comienza a sembrar vivas inquietudes sobre las nacioneseuropeas, por su fuerza militar y económica, constituye una evidentedemostración de lo que es capaz el pensamiento y carácter de un pueblo,cuando con mano firme y sin hesitaciones es dirigido a cumplir la misión quele ha sido deparada por su destino."

En cambio, el auténtico liberalismo merecía reprobación, tildado de"intemacionalismo" o "cosmopolitismo":

"Francia es ta vez la única nación donde con pasmosa facilidad hacrecido más lozano y echado hondas raíces el miserable arbusto delantipatriotismo. (...) Al darse cuenta de la gravedad de este estado de cosas,ciertas personalidades como Duruy, 8ocquillon, Crosjean, Devinat, Poin-signot, CamiUe Adolphe, Despartes, Barrés, entre los civiles, y Langlois,Grange, Loir, Roland, entre los militares, han comenzado a agitar la opinión



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tratando de poner un dique a La invasion del antipatriotismo. Naturalmentesus vistas se han dingido a La escuela primaria como a un áncora desatvaciOn. Todo está aün por hacerse en el sentido de encarrilarla hacia LaonentaciOn patriOtica y se hace sentir con urgencia Ia falta de disposicionesque aseguren con todo vigor el imperio de tan imprescindible necesidad."21

En contraste, esta "imprescindible necesidad" estaba bien cubiertaen La Argentina. Enrique de Vedia, rector del Colegio Nacional de BuenosAires, autor de textos y vocal del Consejo, proclamaba entusiasrnado:

"Formemos (...) con cada niño de edad escolar un idOlatra frenéticopor Ia Argentina, ensenándole —porque es cierto—que ningCin palsde La tierra tiene en su historia timbres más altos, ni afanes más altruistas,ni instituciones más liberales, ni cultos más sanos, ni actuaciOn másgenerosa, ni porvenir mas esplendoroso. Ueguemos en este camino a todosLos excesos, sin temores ni pusilanimidades; establezcamos que el amora Ia Patria es €1 mejor titulo que un joven argentino puedepresentar y sabre todo propendarnos, todos por igual, en el empeño deque La obra argentinista de Ia escuela prirnaria entre nosotros, acent(ie elcarácter que 1€ ha dado el actual Presidente del Consejo Nacional deEducaciOn (mi subrayado)

Como se ye, Enrique de Vedia alentaba Ia gestaciOn de unameritocracia sui géneris. La Argentina no seria una tierra sin opor-tunidades y movilidad social, al menos en el terreno de Ia educaciOn. Por elcontrario, habria multitud de oportunidades para todos aquellos que seenvolviesen en Ia bandera y ninguna para quien no to hiciese. Y en otroartlculo, el rnismo de Vedia citaba, alborozado por las virtudes argentinas,a! "inolvidabte maestro" José Manuel Estrada:

"Nada hay más esplendido que nuestra estirpe latina; ni en venasde seres humanos corrió jamás sangre más ferviente y generosa que Lasangre espanola de Las nuestras; ni Los orlgenes de una nacionalidad irradian,en Los anales del mundo, con aureota más fülgida que Ia ceñida a La frente

21. Saái Escolar, "Ortentaclán patnotica las eswelas primarias", Monitor. 30 desepuembre de 1910, pag. 488-542.

22. Enrique de Vedia. "La escuela, Monitor, 31 de oclubre de 1910. pag. 21-30.

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tratando de poner un dique a la invasión del antipatriotismo. Naturalmentesus vistas se han dirigido a la escuela primaria como a un áncora desalvación. Todo está aún por hacerse en el sentido de encarrilarla hacia laorientación patriótica y se hace sentir con urgencia la falta de disposicionesque aseguren con todo vigor el imperio de tan imprescindible necesidad:21

En contraste, esta "imprescindible necesidad" estaba bien cubiertaen la Argentina. Enrique de Vedia, rector del Colegio Nacional de BuenosAires, autor de textos y vocal del Consejo, proclamaba entusiasmado:

"Formemos (...) con cada niño de edad escolar un idólatra frenéticopor la República Argentina, enseñándole -porque es cierto- que ningún paísde la tierra tiene en su historia timbres más ahos, ni afanes más altruistas,ni instituciones más liberales, ni cultos más sanos, ni actuación másgenerosa, ni porvenir más esplendoroso. Ueguemos en este camino a todoslos excesos, sin temores ni pusilanimidades; establezcamos que el amora la Patria es el mejor título que un joven argentino puedepresentar y sobre todo propendamos, todos por igual, en el empeño deque la obra argentinista de la escuela primaria entre nosotros, acentúe elcarácter que le ha dado el actual Presidente del Consejo Nacional deEducación (...)."22 (mi subrayado)

Como se ve, Enrique de Vedia alentaba la gestación de unameritocracia sui géneris. La Argentina no sería una tierra sin opor-tunidades y movilidad social, al menos en el terreno de la educación. Por elcontrario, habría muhitud de oportunidades para todos aquellos que seenvoMesen en la bandera y ninguna para quien no lo hiciese. Y en otroartículo, el mismo de Vedia citaba, alborozado por las virtudes argentinas,al "inoMdable maestro" José Manuel Estrada:

"Nada hay más espléndido que nuestra estirpe latina; ni en venasde seres humanos corrió jamás sangre más ferviente y generosa que lasangre española de las nuestras; ni los orígenes de una nacionalidad írradian,en los anales del mundo, con aureola más fúlgida que la ceñída a la frente

21. Saúl Escolar, .Orlentaclón pabi6t1ca en las escuelas prbnarlas., Monitor, 30 deseptiembre de 1910, pág. 488-542.

22. Enrique de Vedla, .La escuela., Monitor, 31 de octubre de 1910, pág. 21-30.




de Ia Argentina! Tengo orgullo de ml estirpe, de ini raza y de nilpatria!"23

Por cierto, para estos pedagogos, ser patriota era creersehombres o, por lo menos (y quizás fundamentalmente) prodamarse tal cosaY como el ejemplo cunde, particularmente si se trata del ejemplo de "gentedistinguida" en el contexto de un pals (entonces) oligarquico y de una carreramagisteril jerárquica y autoritaria (que podia proveer, no obstante, unmodus vivendi modesto pero digno), no es extraflo que haya surgido uncoro de directores y maestros de escuela, todos repitiendo La mismanecedad, que reducia a! patriotismo a Ia expresión, frecuentemente fingida,de sentimientos exaltados. Me limitaré a citar un par de casos para no cansara Los lectores, pero no debe olvidarse que, en Ciltima instancia, son éstas las"bases" que, debidamente adoctrinadas, forjaron Ia cultura argentina,trarismitiendo estas actitudes y contenidos ideologicos a sucesivas genera-ciones. Una directora, por ejemplo, sermoneaba:

"Hablar bien del pals en que se ha nacido, defenderlo con calor yentusiasmo, es patiiotisrno (...). Conocer bien un pals tan hermoso como elnuesfro es casi amarlo, es también poner al alumno en condiciones dediscutir su supremacia, cuando 1€ hablen de otros palses y no ponerlo en elcaso de dejarlo deprimir, por ignorar cuanto a él se refiere, o por carecerde razones en qué fundar una discusión (...)."

Y otra directora exhortaba desde el fondo de su sabidurIa:

"Brota el concepto de pafria a cada paso: el tino está en hacerlosurgir, en hacer ver que La Argentina vale mucho en La opinion del mundocivilizado; y a nosotros nos corresponde enseñar a que se Ia respete y se laadmire, para que comprendan que si el nombre de nuestra tierra fue siempresinOnimo de hidalgula y generosidad, no ha sido sino el resultado de Ladoctrina de nuestros mayores, a quienes nunca guió un sentimiento demezquindad ni egolsmo."24

En ambos casos se nota, cual sello, La influencia de Enrique de Vedia,

23. Enrlque de Vedla, Educaciôn Patrlotlca, Monitor, 30 de septienibre de 1908,pig. 175.

24. Helena Irigoin (directora de Is Escuela 5 del Consejo Escolar de Ia Capital),Enseñanza Patriotlca, Monitor, 31 de marzo de 1910, pàg. 855 y Victoria F. Ginesta

(dlrectora de Ia Escuela N5 7 del Consejo Escolar 1 de Ia Capital), "Concepto de Ia Patria enIa Monitor, 30 cIa novlembre de 1909, p5g. 452.


de la República Argentina! Tengo orgullo de mi estirpe, de mi raza y de mipatria! "23

Por cierto, para estos pedagogos, ser patriota era creerse super..hombres o, por lo menos (yquizás fundamentalmente) proclamarse tal cosa.y como el ejemplo cunde, particularmente si se trata del ejemplo de "gentedistinguida" en el contexto de un país (entonces) oligárquico y de una carreramagisteril jerárquica y autoritaria (que podía proveer, no obstante, unmodus vivendi modesto pero digno), no es extraño que haya surgido uncoro de directores y maestros de escuela, todos repitiendo la mismanecedad, que reducía al patriotismo a la expresión, frecuentemente fingida,de sentimientos exaltados. Me limitaré a citar un par de casos para no cansara los lectores, pero no debe olvidarse que, en última instancia, son éstas las"bases" que, debidamente adoctrinadas, forjaron la cultura argentina,transmitiendo estas actitudes y contenidos ideológicos a sucesivas genera-ciones. Una directora, por ejemplo, sermoneaba: '

"Hablar bien del país en que se ha nacido, defenderlo con calor yentusiasmo, es patriotismo (...).Conocer bien un país tan hermoso como elnuestro es casi amado, es también poner al alumno en condiciones dediscutir su supremacía, cuando le hablen de otros países y no ponerlo en elcaso de dejarlo deprimir, por ignorar cuanto a él se refiere, o por carecerde razones en qué fundar una discusión (...)."

y otra directora exhortaba desde el fondo de su sabiduría:

"Brota el concepto de patria a cada paso: el tino está en hacerlosurgir, en hacer ver que la Argentina vale mucho en la opinión del mundocivilizado; y a nosotros nos corresponde enseñar a que se la respete y se laadmire, para que comprendan que si el nombre de nuestra tierra fue siempresinónimo de hidalguia y generosidad, no ha sido sino el resultado de ladoctrina de nuestros mayores, a quienes nunca guió un sentimiento demezquindad ni egoísmo. "24

En ambos casos se nota, cual sello, la influencia de Enrique de Vedia, I

!il

23. Enrique de Vedla, "Educacl6n Patrl6t1ca", Monitor, 30 de septiembre de 1908,pág. 175.

24. Helena Irlgoln (directora de la Escuela N° 5 del Consejo Escolar 5° de la Capital),"Enseñanza PatriÓtica", Monitor, 31 de marzo de 1910, pág. 855 y Victoria F. Ginesta(directora de la Escuela N° 7 del Consejo Escolar 11° de la Capital), .Concepto de la Patria enla escuela", Monitor, 30 de noviembre de 1909, pág. 452.



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ese homo patrioticus por antonomasia. Ambas directoras demostraban,antes sus superiores, que habian aprendido bien su lecciOn. Al hablar de IaadmiraciOn que el mundo profesaba hacia Ia Argentina, les enseñaban a losargentinitos a autoadmirarse. De esta manera, daban pruebas de que, apesar de portar apellidos tan inmigratorios como Ginesta, habian asimiladoel dogma y eran "patriotas". Por otra parte, guay de quien, en lugar de unirseat coro de obsecuencias e hipocresias, osase adoptar una actitud pocorespetuosa hacia Ia educación patriótica. Ejernplo elocuente de este factores Ia carta publicada en 1912 en La Nación por Enrique de Vedia, con laanuencia de Ramos Mejia y en su ausencia. Mi defiende a! ConsejoNacional de EducaciOn de criticas difundidas a raiz de Ia exoneraciOn de unamaestra de Ia Escuela 5 del Distrito Escolar N° 4, que se habia burtado del"homenaje a los muertos por Ia patria" delante de sus alumnos. De Vediaescribia enfático:

"El Consejo Nacional (...) está (...) decidido a castigar toda falta derespeto a (sus) resoluciones (.. .) y especialmente, si cabe, a las que se ref lerena Ia 'educaciOn moral y patriótica' implementada para nuestros escolaresprimarios."25

Ante tales disuasivos, pues, €1 "patriotismo" se convirtiO en puerildeclamación: nada tenia que ver con Ia auténtica virtud civica, ni con elcoraje para disentir, ni con el trabajo perseverante, ni con la obra civili-zadora, sino con Ia retOrica, con las apariencias, con Ia obediencia, si, ytambién con Ia obsecuencia. Asi se gestO esta cultura politica, caricatura deIa alemana y Ia ;aponesa. Y al contrario de éstas, el autoritarismo de Iacultura argentina no fue decapitado por las grandes guerras del siglo, de lasque el pals estuvo ausente.

Autoritarismo y religion del patriotlsmo

Como ya se dijo, Ia concepciOn del patriotismo como religion no selimitO a! pensamiento de Bavio, Bunge y Beltrán, sino que fue comün a todoel movimiento de educaciOn patriOtica. Es sabido que en La RestauraciónNacionalista hay referencias a! culto de Ia patria, y Ricardo Rojas volcóexpresiones de ese tenor en el mismo Monitor cuando dijo, por ejemplo,

25. Notas de La redacdón, MonItor, 31 de enero de 1912. La carla fue publicada enLa Nadbn el 22 de enero.

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ese horno patrioticus por antonomasia. Ambas directoras demostraban,antes sus superiores, que habían aprendido bien su lección. Al hablar de laadmiración que el mundo profesaba hacia la Argentina, les enseñaban a losargentinitos a autoadmirarse. De esta manera, daban pruebas de que, apesar de portar apellidos tan inmigratorios como Ginesta, habían asimiladoeldogmayeran "patriotas" .Por otra parte, guay de quien, en lugar de unirseal coro de obsecuencias e hipocresías, osase adoptar una actitud pocorespetuosa hacia la educación patriótica. Ejemplo elocuente de este factores la carta public-ada en 1912 en La Nación por Enrique de Vedia, con laanuencia de Ramos Mejía y en su ausencia. Alli defiende al ConsejoNacional de Educación de críticas difundidas a raíz de la exoneración de una

maestra de la Escuela 5 del Distrito Escolar N° 4, que se había burlado del"homenaje a los muertos por la patria" delante de sus alumnos. De Vediaescribía enfático:

"El Consejo Nacional (...) está (...)decidido a castigar toda falta derespeto a (sus)resoluciones (...) y especialmente, si cabe, a las que se refierena la 'educación moral y patriótica' implementada para nuestros escolaresprimarios."25

Ante tales disuasivos, pues, el "patriotismo" se convirtió en puerildeclamación: nada tenía que ver con la auténtica virtud cívica, ni con elcoraje para disentir, ni con el trabajo perseverante, ni con la obra civili-zadora, sino con la retórica, con las apariencias, con la obediencia, sí, ytambién con la obsecuencia. Así se gestó esta cultura polltica, caricatura dela alemana y la japonesa. Y al contrario de éstas, el autoritarismo de lacultura argentina no fue decapitado por las grandes guerras del siglo, de lasque el país estuvo ausente.

Autoritarismo y religión del patriotismo

Como ya se dijo,la concepción del patriotismo como religiónno selimitóalpensamientode Bavio, Bunge y Beltrán, sino que fue común a todoel movimientode educaciónpatriótica. Essabidoque enLa RestauraciónNacionalista hay referenciasal culto de la patria, y Ricardo Rojasvolcóexpresiones de esetenor en el mismo Monitor cuando dijo, por ejemplo,

25. Notas de la redacción, Monitor, 31 de enero de 1912. La carta fue publicada enLa Nadón el 22 de enero.




que "en el estado actual de ml cultura y sentimiento, Ia Patria es una formavisible de Ia Divinidad; por tanto, Ia concibo en los mismos caracteres quea aquella"26.

Estas ideas tuvieron amplia divulgación entre pensadores menores,reflejada en expresiones culturalmente aceptadas y atin vigentes, como"culto sanmartiniano" y "culto a Ia bandera". En el Monitor. AlbertoLarroque bregaba por que, en el "templo familiar", el "culto de Ia Patria" seviera representado cIa Ia misma manera en que lo estaba el "culto de Dios"y el "culto de Ia familia". Proponia "confundir" el culto de Ia patria con elde Diosyelde los padres21.

Ernesto Leon D'odena iba más lejos, insinuando una propensiOncuasi-religiosa y expansionista a Ia vez: "Juremos, como los antiguos Efebosde Ia Grecia de los tiempos felices, no dejar a Ia Patria menor de lo que Iaenconframos, sino mAs grande!! Sea ella nuestro culto, y su gloria ilumineel camino de nuestra vida! !28 Las descripciones (positivas) de los actos civicosfrecuentemente hablaban de "manifestaciones de religioso respeto" a Iabandera29. Pero Ia asimilaclOn de los conceptos de Dios y patria, comoobjetos de culto, iba mucho más allá de Ia rnera analogia, y estaba basadaen el pensarniento, más orgánico, de un Bunge, un Rojas y un Bettrán.

La mismo puede decirse del autoritarismo implicito y explicito en elmovimiento de educaciOn patriOtica. Nuestroya conocido inspector generalde terntorios, RaCil B. DIaz, fue ala vez muy explIcito yconfuso en un articulodonde hizo una lista de los "principales ideales argentinos":

"La unidad de todos, indivlduos, familias, razas, sectas, partidos,provincias y territorios, en el sosten y avance de los bienes derivados. Lavlrtud del amor ala NaciOn, primero; Ia instituciOn yel individuo, cualesquieraque sean, despues (...). Las ideas ylos pensamientos liberales, Ia franqueza,Ia accesibilidad de Ia mente y el corazón a Ia verdad y Ia justicia."3°

26. Rlcardo Rojas, La escuela argentina, conferencla pronunclada en Ia EscuelaNormal de Maestras, MonItor, 28 de Febrero de 1911, pag. 305. En La ReatauraciónNadonallsta, Rojas habta admirativamente de Alemania. donde at (nos dice)alcanzb formas kJôlatTas y antmpomôrficas. i-toy as an aquet pals, grades a aeducaclon histortca, una poderosa reilgian (pág. 43, edlclan de Pane Ullo, BuenosAIres 1971).

27. PaglnasoMdadas - El cultos Ia bandera -Alas madres, Monitor, 31 de dlciernbreda 1910, p5g. 647-650.

28. "Apuntes pare tin libro de moral civics', Monitor, 30 de jun10 de 1909, p5g. 499.29. Cronlcas de La jura de is bandera, Monitor, 31 de Julio de 1909, p5g. 102-157.30 RaUl B. DIes, ¶os ideales', MonItor, 31 de agosto de 1910, p5g. 233-237.


qué'en el estado actual de mi cultura y sentimiento, la Patria es una formavisible de la Divinidad; por tanto, la concibo en los mismos caracteres quea aquella"26.

;e ~ Estas ideas tuvieronampliadivulgaciónentre pensadores menores,reflejada en expresiones culturalmente aceptadas y aún vigentes, como"culto sanmartiniano" y "culto a la bandera". En el Monitor, AlbertoLarroque bregaba por que, en el "templo familiar", el "culto de la Patria" seviera representado de la misma manera en que lo estaba el "culto de Dios"y el/'culto de la familia". Proponía "confundir" el culto de la patria con elde Dios y el de los padres21,

&nesío León D'odena iba más lejos, insinuando una propensióncuasi-religiosa y expansionista a la vez: "Juremos, como los antiguos Efebosde la Grecia de los tiempos felices, no dejar a la Patria menor de lo que laencontramos, sino más grande!!Sea ellanuestro culto,y su gloriailumineel camino de nuestra vida!!28Las descripciones (positivas)de los actos cívicosfrecuentemente hablaban de "manifestacionesde religiosorespeto" a labandera29, Pero la asimilación de los conceptos de Dios y patria, comoobjetos de culto, iba mucho más allá de la mera analogía, y estaba basadaen el pensamiento, más orgánico, de un Bunge, un Rojas y un Beltrán.

Lo mismo puede decirse del autoritarismo implícito y explícito en elmovimiento de educación patriótica. Nuestro ya conocido inspector generalde territorios, Raúl B. Díaz, fue a la vez muy explícito y confuso en un artículodonde hizo una lista de los "principales ideales argentinos":

"La unidad de todos, individuos, familias, razas, sectas, partidos,provinciasy territorios, en el sostén y avance de los bienes derivados. Lavirtud del amor a la Nación, primero; la institución yel individuo, cualesquieraque sean, después (...). Las ideasy los pensamientos liberales,la franqueza,la accesibilidad de la mente y el corazón a la verdad y la justicia. "30

26. Ricardo Rojas, "La escuela argentina", conferencia pronunciada en la EscuelaNormal de Maestras, Monitor, 28 de febrero de 1911, pág. 305. En La RestauraciónNacionalista, Rojas habla admiratlvamente de Alemania, donde el patriotismo (nos dice)alcanzó "formas idólatras y antropomórficas". Agrega: "Hoy es en aquel pais, gracias a laeducación histórica, una poderosa religión primitiva" (pág. 43, edición de Peña Ullo, BuenosAires 1971).

27. "Páginas olvidadas - El culto a labandera -A lasmadres", Monitor, 31 de diciembrede 1910, pág. 647-650.

28. "Apuntes para un libro de moral clvica", Monitor, 30 de Junio de 1909, pág. 499.29. Crónicas de la Jura de la bandera, Monitor, 31 de julio de 1909, pág. 102-157.30 Raúl B. Diaz, "Los Ideales", Monitor, 31 de agosto de 1910, pág. 233-237.



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Esta contradicción y confusion, que considera "liberal" a una escalade valores que subordina el individuo a Ia nación (y por consecuencia logica,lo subordina también a! Estado), en vez de definir Ia razón-de-ser del Estadocomo Ia defensa de los derechos del individuo (que es Ia escala valorativaautenticamente liberal), no solo contrasta notablemente con el Alberdi denuestra "lntroducción", sino que es prototipica de la Argentina de tiemposposteriores, donde los "liberales" se convirtieron en cómplices crónicos degobiemos militares o del fraude y Ia exclusion electoral, y donde elliberalismo politico paso a ser, por mucho tiempo, casi subversivo para 'in"liberal". Evidentemente, Ia palabra "liberal" tenia prestigio entre las clasesdirigentes, y no podia abandonarse, sino que se Ia rescataba, redefinida,para ponerla al servicio de una causa autoritaria. habrá querido decirDIaz con "pensamientos e ideas liberales"? generosos,quizás, o virtudes cristianas?

Mas coherente, yrnás siniestro, era Dardo Corvalán Mendilaharsu:

"Desde PlatOn, acá, los más eximios filOsofos han coincidido en queIa educaciOn del individuo pertenece a! estado, y está en Ia conveniencia deIa repthlica formar ciudadanos aptos y virtuosos, por medio de una cultura,integral y nacional, cuya distribuciOn a los fines de Ia uniformidad y deléxito mismo, debe repartir una mano, asesorada, naturalmente, por losconsejos y personal que Ia amplia tarea requiere. Ante el desenvolvimientoestupendo de Ia vitalidad del pais, donde intervienen tantos factores ajenosa los patriOticos, debe forrnarse un tipo nacional, plasmado en el rnoldede los patricios que pospusieron todo a! superior sentimiento de Ia patria,para detener si es posible esta avalancha cosmopolita que en su mareaavasalla pasado, presente y porvenir, suprimiendo recuerdos y jerarqulas,y haciendo el vaciO moral, que apaga los latidos viriles del corazOn."31

Y este autoritarismo podIa, en algunos casos como el del Joaquin V.Gonzalez de nuestra "IntroducciOn", tener desbordes militaristas y expan-sionistas. Tal el caso del poeta que, cual mistico, rezaba en el altar de Iapatria:

"V bandera celeste y blanca, que coronas las fortalezas, las navesy los puertos del pals más rico y feliz del universo (...), te pido con todo elcorazOn, con toda el alma, qué continOes siendo el simbolo de ml nacio-

31. Dardo Corvaltn Mendllaharsu, 'El regfrnen escolar propto- Las escueias de LaRioja', Monitor, 31 de agosto de 1910, p5g. 257-262.

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Estacontradicción y confusión, que considera "liberal" a una escalade valores que subordina el individuo a la nación (y por consecuencia lógica,lo subordina también al Estado), en vez de definir la razón-de-ser del Estadocomo la defensa de los derechos del individuo (que es la escala valorativaautenticamente liberal), no sólo contrasta notablemente con el Alberdi de

nuestra" Introducción", sino que es prototípica de la Argentina de tiemposposteriores, donde los "liberales" se convirtieron en cómplices crónicos degobiernos militares o del fraude y la exclusión electoral, y donde elliberalismo político pasó a ser, por mucho tiempo, casí subversivo para un"liberal". Evidentemente, la palabra "liberal" tenía prestigio entre las clasesdirigentes, y no podía abandonarse, sino que se la rescataba, redefinída,para ponerla al servicio de una causa autoritaria. ¿Qué habrá querido decirDíaz con "pensamientos e ideas liberales"? ¿Sentimientos generosos,quizás, o virtudes cristíanas?

Más coherente, y más siniestro, era Dardo Corvalán Mendilaharsu:

"Desde Platón, acá, los más eximios filósofos han coincidído en quela educación del individuo pertenece al estado, y está en la conveniencia dela república formar ciudadanos a'ptos y virtuosos, por medio de una cultura,integral y nacional, cuya distribución a los fines de la uniformidad y deléxito mismo, debe repartir una mano, asesorada, naturalmente, por losconsejos y personal que la amplia tarea requiere. Ante el desenvolvimientoestupendo de la vitalidad del país, donde intervienen tantos factores ajenosa los patrióticos, debe formarse un tipo nacional, plasmado en el moldede los patricios que pospusieron todo al superior sentimiento de la patria,para detener si es posible esta avalancha cosmopolita que en su mareaavasalla pasado, presente y porvenir, suprimiendo recuerdos y jerarquías,y haciendo el vació moral, que apaga los latidos viriles del corazón."31

y este autoritarismo podía, en algunos casos como el del Joaquín V.González de nuestra "Introducción", tener desbordes militaristas yexpan-sionistas. Tal el caso del poeta que, cual místico, rezaba en el altar de lapatria:

"Y tú, bandera celeste y blanca, que coronas las fortalezas, las navesy los puertos del país más rico y feliz del universo (.. .), te pido con todo elcorazón, con toda el alma, que continúes siendo el símbolo de mí nacio-

31. Dardo Corvalán Mendilaharsu, "El régimen escolar propio - Las escuelas de LaRloja", Monitor, 31 de agosto de 1910, pág. 257-262.



EL ERACASO DEL PROVECTO ARGENTINO 51

nalidad. Que cualesquiera que sean los vaivenes a que suelen estar sometidoslos imperios y las naciones, tCi las guies a Ia RepiThilca Argentina, ml patna,por Ia senda fulgurante de los triunfos (...). Que seas, como el centinelaavanzada de un campamento, y puedas, coma los dioses de Homero, de unpaso abarcar a! mundo (...). Que mañana, cuando despierte el genlonacional al calor de una gran idea, to ilumines con Ia sabiduria ye! valor, paraque sobre cualquier suelo que pise, coma sobre cualquier mar que navegue,sean marcados sus pasos con las fulgurantes claridades de Ia victoria... "32

Por otra parte, el Monitor de esa época era un ãvido consurnidorde todos los autoritansmos y militarismos que pudiera enconfrar en elextran)ero, y traducia los articulos que ilegaban a Ia atención de Ia redaccióny compartlan su ideologla. Tal el caso, par ejemplo, del nümero de febrerode 1913, donde se traduce un artIcu!o británico en el que se cantan loas alnacionalismo japonés, agregando aprobatonamente que: "En el Japon noexiste distinción entre el individuo y el Estado; cualquiera que ataque at

Estado ataca también a cada uno y a todos los sübditos dcl Japón".33 Laelección del articulo noes casual, un mes después de Ia aparición de una notasabre "El primer batallón infantil argentino". Otro articulo seleccionado par€1 Monitor para su traducción del ingles y publicación, sermoneaba:

"El media eficaz de mantener Ia paz con nuestros vecinos esestar siempre completamente preparados para combatirlos y vencerlos, enel comercio y en Ia guerra, y ésto exige unidad en el interior, en lugar dedesunión que todo Ia altera y destruye."34

No deja de ser lrónico que se seleccionaran estos articulos escritosen Ia patria del liberalismo, un pals que, segün los informes de los emisariosdel Consejo en Europa, no habia avanzado demasiado en materia deeducación patriótica y no era el más apto para servir de modelo. Peroindudabiemente, y a pesar de ello, ci lmperio (coma Ia palabra "liberal")conservaba su prestigio entre Ia elite argentina, ytodo ejemplo de ideologlaautoritaria y militarista que de alli proviniera era usado para promover Iacausa de Ia educación patriótica.

32. Esteban N. Balmaceda, 1a benders argentina, MonItor, 31 de marzo de 1912,$g. 372-373.

33. E1 deber de los dudadanos ejernplo prSctlco del Waducldo de TheRevIew of Review., Londrea, MonItor, 28 de febrero de 1913, p*g. 125-144.

34. Patriotlsmo, traducido de Btitlsh Boys, Londres; MonItor, 31 de octubre de1913, pág. 57.


nalidad. Que cualesquiera que sean los vaivenes a que suelen estar sometidoslos imperios y las naciones, tú las guíes a la República Argentina, mi patria,por la senda fulgurante de los triunfos (...). Que seas, como el centinelaavanzada de un campamento, y puedas, como los dioses de Hornero, de unpaso abarcar al mundo (.. .). Que mañana, cuando despierte el genionacional al calor de una gran idea, lo ilumines con la sabiduría y el valor, paraque sobre cualquier suelo que pise, como sobre cualquier mar que navegue,sean marcados sus pasos con las fulgurantes claridades de la victoria..."32

Por otra parte, el Monitor de esa época era un ávido consumidorde todos los autoritarismos y militarismos que pudiera encontrar en elextranjero, y traducía los artículos que llegaban a la atención de la redaccióny compartían su ideología. Tal el caso, por ejemplo, del número de febrerode 1913, donde se traduce un artículo británico en el que se cantan loas alnacionalismo japonés, agregando aprobatoriamente que: "En el Japón noexiste distinción entre el individuo y el Estado; cualquiera que ataque alEstado ataca también a cada uno y a todos los súbditos del Japón" .33Laelección del artículo no es casual, un mes después de la aparición de una notasobre "El primer batallón infantil argentino". Otro artículo seleccionado porel Monitor para su traducción del inglés y publicación, sermoneaba:

"El único medio eficaz de mantener la paz con nuestros vecinos esestar siempre completamente preparados para combatirlos y vencerlos, enel comercio y en la guerra, y ésto exige unidad en el interior, en lugar dedesunión que todo lo altera y destruye. "34

No deja de ser irónico que se seleccionaran estos artículos escritosen la patria del liberalismo, un país que, según los informes de los emisariosdel Consejo en Europa, no había avanzado demasiado en materia deeducación patriótica y no era el más apto para servir de modelo. Peroindudablemente, y a pesar de ello, el Imperio (como la palabra "liberal")conservaba su prestigio entre la élite argentina, y todo ejemplo de ideologíaautoritaria y militarista que de allí proviniera era usado para promover lacausa de la educación patríótica.

32. Esteban N. Balmaceda, "La bandera argentina". Monitor, 31 de marzo de 1912,pág. 372-373.

33. "El deber de los dudadanos: un ejemplo práctico del Japón", traduddo de Th.RevIew o, Revlews, Londres; Monitor, 28 de febrero de 1913, pág. 125-144.

34. "Patriotismo", traduddo de Britlsh Boys, Londres; Monitor, 31 de octubre de1913, pág. 57.



52 CARLOS ESCUDE

No obstante, el prestigio bntánico no era percibido como contradic-torlo con este nacionalismo de Ia clase politica argentina, y no eraconsiderado óbice para callar respecto de aquella ofensa histórica que tanfuncionalpodia resultar para avivar el "patriotismo": las Malvinas. La mismamegalomania que se venia alimentando, por ofra parte, era aplicable alfuturo de esa reivindicación argentina, y asi lo veia Santiago Lopez desdelas páginas del Monitor:

"(...) Seria un anacronismo indigno del tiempo quehemos alcanzadoy de Ia alta cultura de una gran NaciOn (Gran Bretaña) prolongar obstinada-mente Ia indebida retención de lo que no le pertenece nile pertenecerájamás. Por otra parte, y por qué no decirlo, Ia Argentina, cuyoengrandecimiento prodigioso nadie podra detener, llegara tin dia no lejanoa liquidar sus cuentas pendientes, obedeciendo a una necesidad que sientetodo pueblo celoso de sus derechos, y entonces es casi seguro que no serepetirá impunemente el atentado a La desmantelada Sarandi del33•"35

Es preciso señalar, sin embargo, que los articulos dedicados a LasMalvinas en el Monitor son muy escasos. La causa de Malvinas erafuncional para Ia educación patriOtica, no obstante lo cual se manejO conprudencia y no se hizo campaña. El delirlo "patriOtico" no era suficientecorno para eliminar todo pragmatismo (esa perversiOn, consecuencia de Icque analizamos, ilegarla décadas rnás tarde) y Ia relaciOn con Gran Bretañaera demasiado vital como para arriesgarla en aras de tin irredenlismo quenada podia aportar. La cita de arriba, más que como ejemplo de unacampaña que en esa época no se a cabo, debe interpretarse como unailustraciOn más del militarismo y Ia megalomania que acompanaban a Iaeducación patriOtica. La megalomanIa, Ia perdida del sentido de realidad,vista en tantos de los ejemplos citados, se perpetuO en las percepciones delargentino sobre su pals, a través de los textos escolares, inspiradosprecisamente por los pedagogos que venimos estudiando. A su vez, elmilitarismo era un componente central en Ia ideologla de los Ramos Mejia,Bavio, Bunge, Roas y de Vedia, y se ponia de manifiesto explicitamente enlos escntos de estos hombres y de sus discipulos menores, ilegando hasta Ia

35. SantIago Lopez, MaMnas, MonItor, 28 de febrero de 1912, p6g. 236.

52 CARLOS EsCUDE

No obstante, el prestigio británico no era percibido como contradic-torio con este nuevo nacionalismo de la clase política argentina, y no eraconsiderado óbice para callar respecto de aquella ofensa histórica que tanfuncional podía resultar para avivar el "patriotismo" : las Malvinas. Lamismamegalomanía que se venía alimentando, por otra parte, era aplicable alfuturo de esa reivindicación argentina, y así lo veía Santiago López desdelas páginas del Monitor:

"(...) Sería un anacronismo indigno del tiempo que hemos alcanzadoy de la alta cultura de una gran Nación (Gran Bretaña) prolongar obstinada-mente la indebida retención de lo que no le pertenece ni le pertenecerájamás. Por otra parte, y por qué no decirlo, la República Argentina, cuyoengrandecimiento prodigioso nadie podrá detener, llegará un día no lejanoa liquidar sus cuentas pendientes, obedeciendo a una necesidad que sientetodo pueblo celoso de susderechos, y entonces es casi seguro que no serepetirá impunemente el atentado a la desmanteladaSarandí del año33."35

Es preciso señalar, sin embargo, que los artículos dedicados a lasMalvinas en el Monitor son muy escasos. La causa de Malvinas erafuncional para la educación patriótica, no obstante lo cual se manejó con

. prudencia y no se hizo campaña. El delirio "patriótico" no era suficientecomo para eliminar todo pragmatismo (esa perversión, consecuencia de loque analizamos, llegaría décadas más tarde) y la relación con Gran Bretañaera demasiado vital como para arriesgarla en aras de un irredentismo quenada podia aportar. La cita de arriba, más que como ejemplo de unacampaña que en esa época no se llevó a cabo, debe interpretarse como unailustraciónmás del militarismoy la megalomanía que acompañaban a laeducaciónpatriótica. La megalomanía, la pérdida del sentido de realidad,vistaen tantos de losejemplos citados, se perpetuó en laspercepcionesdelargentino sobre su país, a través de los textos escolares, inspiradosprecisamente por los pedagogos que venimos estudiando. A su vez, elmilitarismo era un componente central en la ideología de los Ramos Mejía,Bavio,Bunge,Rojasy deVedia, y seponía de manifiestoexplícitamenteenlosescritosde estos hombresy desusdíscípulosmenores, llegandohasta la

35. SantiagoL6pez, "Las Mallllnas",Monitor, 28 de febrero de 1912, pAgo236.



EL FRACASO DEL PROVECTO ARCENrnN0 53

ültizna directora y maestra que, ávidas de una promociOn, enviaban unarticulo al Monitor. Asi se forjo Ia cultura nacional. Como dije conanterioridad, no sorprende que, posteriorrnente, el destino del pals se hayaasociado a un poder militar que —por ausencia de desarrollo industrial ydentifico-tecnolOglco- solo alcanzaba para avasallar a una poblaciOnlocal que, reiteradamente, se vio pnvada de su soberania.

La cuestión judla

No es extraño ni paradojico que el ideal esencialmente autoritarioy antipluralista de La educaciOn patriOtlca se percibiera como amenazado portodas las manifestaciones de diversidad, Ia principalde las cuales, aunque noIa ünica, era La existencia de escuelas judias, particutarmente en Ia provinciade Entre Rios, donde Las colonias judlas eran muy importantes. Más aün: lasescuelas judias de Entre RIos fueron uno de los caballitos de batalla deErnesto Bavio, quien lucró con el tema en el transcurso de su can-era defuncionarlo, convirtiéndolo en una verdadera campaña. Bavio no estabasolo, sin embargo, en su oposición a las escuelas judias, y esta oposiciOn,por otra parte, era Ia dimensiOn más visible de una desconfianza generali-zada hacia toda enseñanza que noestuviera bajo Iaegida del Estado en formadirecta. Ejemplo de esta desconfianza más amplia es un articulo deBemardo L. Peyret, de 1910, también sobre Ia educaciOn en Enfre Rios:

"Hagamos (...) La escueLa nuestra, una y (mica por su espiritunacional y propagaciOn de Ia cultura Ia escuela argentina en elamplio concepto del patriotismo (...). Nuestra vocaciOn pafriOtica (...) debetender a secundar La escuela oficial, (mica que mantiene puro eL espiritu deIa nacionalidad, en pigna con Ia particular cuyo florecimiento huele a'profusion sospechosa', desde que Ia escueLa privada ha sido en nuestropals, segün afirmación circunstanciada de Roas, 'uno de Los factoresde Ladisolución nacional', yes actualmente objeto de preocupaciOnno obstante su sometimiento a Las Ieyes de educación (porque)depende de congregaciones intemacionales, de coLonias extranjeras, deescuelas sectarias o propaganda acrátlca. de sinagogas o sindicatos eu-ropeos (...)."36

36. Bemardo L Peyret, "La educadon en Enire RIos, capftuio de La EacurlaOfIdal Nadonaljata, puthcado en €1 Monitor, 30 de novlembve de 1910, p6g. 381-382.


última directora y maestra que, ávidas de una promoción, enviaban unartículo al Monitor. Así se forjó la cultura nacional. Como dije conanterioridad,no sorprende que, posteriormente, eldestinodelpaís se hayaasociado a un poder militarque -por ausencia de desarrollo industrialycientífico-tecnológico- sólo alcanzaba para avasallara una poblaciónlocalque, reiteradamente, se vio privada de su soberanía.

La cuestión judía

No es extraño ni paradójico que el ideal esencialmente autoritarioyantipluralistade laeducaciónpatrióticasepercibieracomoamenazadoportodas las manifestaciones de diversidad, la principal de las cuales, aunque nola única, era la existencia de escuelas judías, particularmente en la provinciade Entre Ríos, donde las colonias judías eran muy importantes. Más aún: lasescuelas judías de Entre Ríos fueron uno de los caballitos de batalla de~rnesto Savia, quien lucró con el tema en el transcurso de su carrera defuncionario, convirtiéndolo en una verdadera campaña. Savia no estabasolo, sin embargo, en su oposición a las escuelas judías, y esta oposición,por otra parte, era la dimensión más visible de una desconfianza generali-zada hacia toda enseñanza que no estuviera bajo la égida del Estado en formadirecta. Ejemplo de esta desconfianza más amplia es un artículo deBernardo L. Peyret, de 1910, también sobre la educación en Entre Ríos:

"Hagamos (oo.) la escuela nuestra, una y única por su espíritunacional y propagación de la cultura pública, la escuela argentina en elamplio concepto del patriotismo (...). Nuestra vocación patriótica (...) debetender a secundar la escuela oficial, úníca que mantiene puro el espíritu dela nacionalidad, en pugna con la particular cuyo florecimiento huele a'profusión sospechosa', desde que la escuela privada ha sido en nuestropaís, según afirmación circunstanciada de Rojas, 'uno de los factores acti\lOsde la disolución nacional' , y es actualmente objeto de preocupación pública,no obstante su sometimiento a las leyes vigentes de educación (porque)depende de congregaciones internacionales, de colonias extranjeras, deescuelas sectarias o propaganda acrática, de sinagogas o sindicatos eu-ropeos (...)."36

36. Bernardo L. Peyret, "La educación en Entre Ríos", (¡]t!mo capitulo de La E_eIa

Oficial Nacionalista, publicado en el Monitor, 30 de nOlllembre de 1910, pág. 381-382.



54 CARLOS ESCLJDE

La preocupación de Bavio, en cambio, se centraba más direc-tamente en el "problema judio'. En 1908 escribia, en un informe sobre eltema:

"En las aldeas judias es todavia peor, pues son colonos más cerradosy excluyentes: all toda Ia ensenanza transmitida en las escuelas, absolu-tamente toda, es en hebreo y no hay más libro de lectura que Ia Biblia. Lascolonias judlas pertenecen a una gran compania con asiento en elextranjero, propietaria de Ia tierra y de sus judios, representada por unaadministración local que monopohza todos los servicios, hasta el de Iaeducación, pues ella es Ia que organiza las escuelas, que designa personal,yb que es increible, las hace subvencionar por el gobierno de Ia Provincia. . .1

Hay que Ilamar a las cosas por su nombre (...): es denigrante, espara nosotros que haya escuelas en el pals en las que Ia enseñanza quereciben los niños argentinos sea exclusivamente extranjera. Es urgente y dealta politica nacional el poner remedio a este deplorable estado de cosas.Necesario es que aquellos colonos entiendan una vez por todas que estánen Ia Repthlica Argentina, al amparo de sus instituciones y de Ia liberalidadde sus leyes, y que sus hijos, aqul nacidos, no son rusos, alemanes ni hebreossino argentinos. La obra no puede dejarse para más tarde, porque lasdificultades e inconvenientes serán mayores. A esta condición tendremosuna patria homogénea, esencialrnente argentina. Es ilusorio pretenderdifundir el patriotismo entre aquellas gentes, si antes no formamosambiente nacional en sus escuebas."37

El ideal esencialmente antipluralista (y por lo tanto antiliberal) de Iaeducación pathótica, por otra parte claramente presente en muchos de lostextos que hemos revisado, surge pristinamente de estos documentos sobreIa "cuestión judla": se buscaba "una patria homogénea"; una cultura"integral y nacional", "repartida por una mano"; se intentaba sembrar "Iaunidad" por medios autoritarlos, y "unidad" significaba ausencia de disenso;se intentaba difundir Ia idea de que el disenso y Ia diversidad, lejos deagregarle vitalidad y riqueza cultural a una sociedad compleja y competitlva,eran "antipatrioticos", y por lo tanto indeseables, inmorales, condenablesy, en lo posible, reprimibles. El iniorme de Bavio sobre el "problema judlo"fue muy bien recibido en el Consejo, y el mes siguiente el Monitor publicó,en su sección de notas, el siguiente comentario:

37. Emesto Bavio, Las escuelas Entre Rios, Part. 1, Monitor 30 denovtembre de 1908, $g. 601-603.

54 CARLOS EsCUDE

La preocupación de Savia, en cambio, se centraba más direc-tamente en el "problemajudío".En 1908 escribía,en un informesobre eltema:

"En las aldeas judías es todavía peor, pues son colonos más cerradosy excluyentes: allí toda la enseñanza transmitida en las escuelas, absolu-tamente toda, es en hebreo y no hay más libro de lectura que la Biblia. Lascolonias judías pertenecen a una gran compañía con asiento en elextranjero, propietaria de la tierra y de sus judíos, representada por unaadministración local que monopoliza todos los servicios, hasta el de laeducación, pues ella es la que organiza las escuelas, que designa personal,y lo que es increíble, las hace subvencionar por el gobierno de la Provincia.. .!Hay que llamar a las cosas por.su nombre (...): es denigrante, es depresivopara nosotros que haya escuelas en el país en las que la enseñanza querecibenlosniñosargentinos sea exclusivamenteextranjera.Esurgenteydealta política nacional el poner remedio a este deplorable .estado de cosas.Necesario es que aquellos colonos entiendan una vez por todas que estánen la República Argentina, al amparo de sus instituciones y de la liberalidadde sus leyes, y que sus hijos, aquí nacidos, no son rusos, alemanes ni hebreossino argentinos. La obra no puede dejarse para más tarde, porque lasdificultades e inconvenientes serán mayores. A esta condición tendremosuna patria homogénea, esencialmente argentina. Es ilusorio pretenderdifundir el patriotismo entre aquellas gentes, si antes no formamosambiente nacional en sus escuelas."37

B ideal esencialmente antipluralista (y por lo tanto antiliberal) de laeducación patriótica, por otra parte claramente presente en muchos de lostextos que hemos revisado, surge pristinamente de estos documentos sobrela "cuestión judia": se buscaba "una patria homogénea"; una cultura"integral y nacional", "repartida por una mano"; se intentaba sembrar "launidad" por medios autoritarios, y "unidad" significaba ausencia de disenso;se intentaba difundir la idea de que el disenso y la diversidad, lejos deagregarle vitalidad y riqueza cultural a una sociedad compleja y competitiva,eran "antipatrióticos", y por lo tanto indeseables, inmorales, condenablesy, en lo posible, reprirnibles. B informe de Savia sobre el "problema judío"fue muy bien recibido en el Consejo, yel mes siguiente el Monitor publicó,en su sección de notas, el siguíente comentario:

37. ErnestoBavlo, "Las escuelas extranjeras en Entre R!os, Parte .", Monitor 30 denoviembrede 1908, pág. 601-603.




"Se ha demostrado con este caso Ia necesidad de continuar, por asidecirlo, Ia obra argentinizadora iniciada por ci presidente del ConsejoNacional de Educacion, Dr. José Maria Ramos Mejia. (...) Se persigue unideal esencialmente argentino. Los que aqt.ü se arraigan, hombres de razasdistintas, venidos de tierras iejanas, deben adoptar el idiorna del pals parasus hijos (...). Se aspira, en una palabra, a plasmar sus esplritus sobre elespIritu argentino, y tal aspiración no puede entenderse como contraria aIn libertad. Es una cuestión patnótica y no sectaria. Va en ello el interéssupremo de in nacionalidad, a cuyo engrandecirniento debe cada uno suconcurso y, por cierto, no es Un exceso exigir a los argentinos que no seanextranjeros en su propio pals. (...) En este sentido, ci presidente del Conse.to(...) realiza una obra de intensa moralización patrlótica. El programa, cuyanobleza no debe siqulera encomendarse, será practicado sin violencias y sininjusticias. Pero, lentarnente, tenazmente, se impondrá en beneficlo detodos."38

La "cuestión judia" llego a ser un asunto de gran relieve, muyespecialmente por supuesto en Ia misma provincia de Entre Rios, donde seincorporó a La Constitución provincial una cláusula que establecia que "Iaeducación será de caracter esencialmente nacional (...)". El Tribuno deParaná afirmaba que Ia difusión de La educación nacional "no debe tenerlimite, y (...) en nuestra carta fundamental debe Implantarse imperativa-mente". También Ia Dirección General de Enseñanza de Entre Rios dispusoque en toda escuela dependiente de Ia Jewish Colonization Association quetuviera dos o más maestros, uno por b menos ftiese argentino, a cargo dclidioma nacional, historia y geografia argentina, instruccióri moral y agricul-tura. Dispuso también que estas escuelas debian adoptar ci programa de lasescueias péblicas, que las salas de clases debian todas ostentar retratos depróceres argentinos, que las composiclones de los alumnos deblanguardarse para ser mostradas a los inspectores, que Un inspector deesa Dirección General harla a las escueias judias y rusas por lo menos seisvisitas anuales, y que toda israelita o rusa" tendria anexa unabiblioteca infantiil formada principalmente de autores argentinos y decarácter circulante. Estos datos estaban incorporados al segundo informe deBavio sobre las "escuelas extranjeras de Entre Rios", de principios de 1909,donde se sugiere una vez más que los colonos son casi esclavos de Ia JewishColonization Association, que pot su parte tenia 23 escuelas, frente a solotres escuelas provinciales, en las 463.000 hectáreas de campo que posela.

38. de Ia MonItor, 31 de de 1908, pa9. 1007.


"Se ha demostrado con este caso la necesidad de continuar, por asidecirlo, la obra argentinizadora iniciada por el presidente del ConsejoNacionalde Educación,Dr. José MariaRamos Mejia.(oo.) Se persigue unideal esencialmente argentino. Los que aquí se arraigan, hombres de razasdistintas, venidos de tierras lejanas, deben adoptar el idioma del pais parasus hijos (...). Se aspira, en una palabra, a plasmar sus espiritussobre elespiritu argentino, y tal aspiración no puede entenderse como contraria ala Ubertad. Es una cuestión patriótica y no sectaria. Va en ello el interéssupremo de la nacionaUdad, a cuyo engrandecimiento debe cada uno suconcurso y, por cierto, no es un exceso exigir a los argentinos que no seanextranjeros en su propio pais. (...)En este sentido, el presidente del Consejo(...) realiza una obra de intensa moraUzación patriótica. El programa, cuyanobleza no debe siquiera encomendarse, será practicado sin violencias y sininjusticias. Pero, lentamente, tenazmente, se impondrá en beneficio detodos. "38

La "cuestión judia" llegó a ser un asunto de gran relieve, muyespecialmente" por supuesto en la misma provincia de Entre Rios, donde seincorporó a la Constitución provincial una cláusula que establecia que "laeducación será de carácter esencialmente nacional (.oo)".El Tribuno deParaná afirmaba que la difusión de la educación nacional "no debe tenerlimite, y (oo.) en nuestra carta fundamental debe implantarse imperativa-mente".Tambiénla DirecciónGeneralde Enseñanza de Entre Riosdispusoque en toda escuela dependiente de la Jewish Colonization Association quetuviera dos o más maestros, uno por lo menos fuese argentino, a cargo delidioma nacional, historia y geografia argentina, instrucción moral y agricul-tura. Dispuso también que estas escuelas debian adoptar el programa de lasescuelaspúbUcas,que las salas de clases debian todas.ostentar retratos depróceres argentinos, que las composiciones de los alumnos debíanguardarse para ser mostradas a los inspectores, que un inspector deesa Dirección General haria a las escuelas judias y rusas por lo menos seisvisitas anuales, y que toda" escuela israeUta o rusa" tendrla anexa unabiblioteca infantiil formada principalmente de autores argentinos y decarácter circulante. Estos datos estaban incorporados al segundo informe deBavio sobre las "escuelas extranjeras de Entre Rios" , de principios de 1909,donde se sugiere una vez más que los colonos son casi esclavos de la JewishColonization Association, que por su parte tenia 23 escuelas, frente a sólotres escuelas provinciales, en las 463.000 hectáreas de campo que poseia.

38. Notas de la redaccl6n, Monitor, 31 de diciembre de 1908, pág. 1007.



56 CARLOS ESCUDE

Bavio criticaba el tiempo, para él que estas escuelas dedicaban aIa enseñanza de Ia religion judla, ye! escaso tiempo dedicado a Ia enseñanzalaica39.

Este era, pues, un ideal esencialmente antipluralista, con maticesantisemitas: sugerir que La Jewish Colonization Association era propietanade "sus judios" no está demasiado lejos del infantil pero perverso infundiode que los judios comen a sus hijos o que realizan misas negras con sacrificioshumanos. Por otra parte, en La reacción de las autoridades de Ia provinciade Entre Rios se observa Ia influencia ideolagica del Consejo, que iba muchomás allá de las escuelas que administraba directamente y que alcanzabaintensamente a todos los consejos o direcciones provinciales. Una a una, lasprovincias se plegaban entusiastamente al movimiento de educaciOnpatriOtica. El 30 de octubre de 1908, por ejemplo (durante el primer añode Ia gestiOn de Ramos Mejia en el Consejo) se promulgaba una nueva Leyde Educación Com&i en Ia provincia de COrdoba (N° 2025), que estableciaen su articulo 20 que Ia educaciOn primaria tendiia por objeto "favorecer eldesarrollo integral de las facultades del niño, formar su carácter y despertaren su alma sentimientos morales y patrióticos".4°

Lentamente, pues, se iba cemiendo sobre Ia Argentina un espiritude intolerancia que, a través de estos mecanismos, se incorporaria a Lacultura: aversion por el pluralismo y Ia diversidad, autoritarismo y una cuota,nada despreciable, de antisemitismo. La "cuestiOn judla" fue motivo dehonda preocupaciOn en el Consejo, y a ella -especificada en el casoentremano— Se le dedicO un nümero de notas que, por razones de tiempoy espaclo, no puedo tratar en detalle aqul. Por otra parte, como veremos enelcapItulo ref erente ala década del P30, habla una dara discriminación entreescuelas extranjeras. Para el Estado argentino no era lo mismo una escuelaparticular de Moisesville, sórdida y sospechosa, que La Escuela Escocesa deSan Ancirés, a cuyos aniversarios asistla el ministro.

Las criticas contemporáneas a la educaciónpatriótica

En este contexto, que dependiera de una carrera docente ode funcionarlo püblico se iba a animar a oponerse al proyecto de RamosMejia y sus adláteres? Obviamente, casi nadie, yb que es más, esa oposiclOn

39. Parte II del informe de Bavlo citado en nota 37, MonItor, 31 de enero de 1909.p6g. 3-44.

40. MonItor, 31 de enero de 1909, p6g. 173-179.

56 CARLOS EsCUDE

Bavio criticaba el tiempo, para él excesivo, que estas escuelas dedicaban ala enseñanza de la religión judía, y el escaso tiempo dedicado a la enseñanzalaica39.

Este era, pues, un ideal esencialmente antipluralista, con maticesantisemitas: sugerir que la Jewish Colonization Association era propietariade "sus judíos" no está demasiado lejos del infantil pero perverso infundiode que los judíos comen a sus hijos o que realizan misas negras con sacrificioshumanos. Por otra parte, en la reacción de las autoridades de la provinciade Entre Ríos se observa la influencia ideológica del Consejo, que iba muchomás allá de las escuelas que administraba directamente y que alcanzabaintensamente a todos los consejos o direcciones provinciales. Una a una, lasprovincias se plegaban entusiastamente al movimiento de educaciónpatriótica. El 30 de octubre c.ie1908, por ejemplo (durante el primer añode la gestión de Ramos Mejía en el Consejo) se promulgaba una nueva Leyde Educación Común en la provincia de Córdoba (N°2025), que establecíaen su artículo 2° que la educación primaria tendría por objeto "favorecer eldesarrollo integral de las facultades del niño, formar su carácter y despertaren su alma sentimientos morales y patrióticos" .40

Lentamente, pues, se iba cerniendo sobre la Argentina un espíritude intolerancia que, a través de estos mecanismos, se incorporaría a lacultura: aversión por el pluralismo y la diversidad, autoritarismo y una cuota,nada despreciable, de antisemitismo. La "cuestión judía" fue motivo dehonda preocupación en el Consejo, y a ella -especificada en el casoentrerrlano- se le dedicó un número de notas que, por razones de tiempoy espacio, no puedo tratar en detalle aquí. Por otra parte, como veremos enel capítulo referente a la década del '30, había una clara discriminación entreescuelas extranjeras. Para el Estado argentino no era lo mismo una escuelaparticular de Moisesville, sórdida y sospechosa, que la Escuela Escocesa deSan Andrés, a cuyos aniversarios asistía el ministro.

Las críticas contemporáneas a la educaciónpatriótica

En este contexto, ¿quíén que dependiera de una carrera docente ode funcionario público se iba a animar a oponerse al proyecto de RamosMejíay sus adlátere s? Obviamente, casi nadie, y lo que es más, esa oposici6n

39. Parte 11dellnfonne de Savia citado en la nota 37, Monitor, 31 de enero de 1909,

pág. 3-44.40. Monitor, 31 de enero de 1909, pág. 173-179.




y critica carecerlan por completo de Ia proyección que, pot media delMonitor y el autontario que operaba en el interior delConsejo, tenian los propulsores de Ia educación patnótica. Pot cierto,durante Ia gestión de Ramos Mejia, los artIculos que critican a! proyectoextremista, con un par de notables y honrosas excepciones, brillan par suausencia. Entre las excepciones hay uno que esboza una critica muydiplomática a algunos de los excesos más evidentes. Es el caso de CasimiroOlmos, que después de explayarse largamente sobre Ia importancia delpatriotismo, ajustandose asi al tono de Ia epoca, se pregunta silos mediosadoptados para Ia promoción de esa cualidad son verdaderamente los másidoneos. "Cabe preguntar", nos dice, "cuando los niflos aclaman a SanMartin, cuando dan vlvas al Congreso de Tucumán, cuál es elvalor de los grandes patricios y cuánto les debemos pot su magna obra?"Olmos creia que no, y arguye:

"Nos alarman los avances del indiferentismo, Ia pobreza de lasmanifestaciones patrióticas en los öniversarios de los grandes dias, ycreyendo que Ia causa de todo está en Ia insuficiencia de los programas dehistoria, nos apresuramos a llenar los vacios (...). Y el resultado es siempreel mismo. Es que, segCln mi modesto entender, hemos errado el camino: losniños no entienden La historia y será inütil que tendamos ante su vista losejemplos de hechos gloriosos: no los haremos patriotas. Debemos empezarpot formar en los nifios el concepto del hombre, el concepto de Ia misiónque cada ciudadano debe lienar como tal (..). Cuando se haya hechocomprender a cada nina cuáles son sus deberes y derechos coma hombrey su situación en Ia sociedad (...), entonces deberá formársele el conceptode patria. Si Hega a penetrar sus deberes para con el patrimonio que harecibido de sus mayores; si advierte que su obligacion es conservarlo ymejorarlo, entonces comprendera cuál es el valor de aquellos esfuerzosgrandiosos par Ia libertad, sabrá admirar sinceramente las figuras denuestros patricios y se sentirá conmovido al oir las notas de nuestra CancionNacional. A este resultado no se liegará con áridas lecciones de historia,desnudas de entusiasmo, sino con lecciones prácticas de moral y delnstrucción civica. Porque son vhtudes las que necesitamos formaren los nlños, no fingidos entuslasmos; una virtud cIvica robusta,el chismo, que seth Ia fuerza verdadera con que sostendremos lasInstituciones y Ia felicidad comun (...)."

Olrnos concluye, atinadamente, que "civlsmo y patriotismo son


y crítica carecerían por completo de la proyección que, por medio delMonitor y el "verticaUsmo" ¡wtoritario que operaba en el interior delConsejo, tenian los propulsores de la educación patriótica. Por cierto,durante la gestión de Ramos Mejía, los artículos que critican al proyectoextremista, con un par de notables y honrosas excepciones, brillan por suausencia. Entre las excepciones hay uno que esboza una crítica muydiplomática a algunos de lo~ excesos más evidentes. Es el caso de CasimiroOlmos, que después de explayarse largamente sobre la importancia delpatriotismo, ajustándose así al tono de la época, se pregunta si los mediosadoptados para la promoción de esa cuaUdad son verdaderamente los másidóneos. "Cabe preguntar", nos dice, "cuando los niños aclaman a SanMartín, cuando dan vivas al Congreso de Tucumán, ¿conciben cuál es elvalor de los grandes patric:ios y cuánto les debemos por su magna obra?"Olmos creía que no, y arguye:

"Nos alarman los avances del indiferentismo, la pobreza de lasmanifestaciones patrióticas en los aniversarios de los grandes días, ycreyendo que la causa de todo está en la insuficiencia de los programas dehistoria, nos apresuramos a llenar los vacíos (. ..). y el resultado es siempreel mismo. Es que, según mi modesto entender, hemos errado el camino: losniños no entienden la historia y será inútil que tendamos ante su vista losejemplos de hechos gloriosos: no los haremos patriotas. Debemos empezarpor formar en los niños el concepto del hombre, el concepto de la misiónque cada ciudadano debe llenar como tal (..). Cuando se haya hechocomprender a cada niño cuáles son sus deberes y derechos como hombrey su situación en la sociedad (...), entonces deberá formársele el conceptode patria. Si llega a penetrar sus deberes para con el patrimonio que harecibido de sus mayores; si advierte que su obligación es conservarlo ymejorarlo, entonces comprenderá cuál es el valor de aquellos esfuerzosgrandiosos por la libertad, sabrá admirar sinceramente las figuras denuestros patricios y se sentirá conmovido al oír las notas de nuestra CanciónNacional. A este resultado no se llegará con áridas lecciones de historia,desnudas de entusiasmo, sino con lecciones prácticas de moral y deinstrucción cívica. Porque son virtudes las que necesitamos formaren los niños, no fingidos entusiasmos; una virtud cívica robusta,el civismo, que será la fuerza verdadera con que sostendremos la.instituciones y la felicidad común (. ..). "

Olmos concluye, atinadamente, que "civismoy patriotismo son

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58 CARLOS ESCUDE

palabras sinónimas", una gran verdad que Ramos Mejia y los suyos jamáscomprendieron.4'

Mucho másduro en su crItica, y Ia verdadera gran excepcion en estaépoca del Consejo y el Monitor, fue el articulo que a mediados de 1909publicó un poeta muy querido por sus contemporáneos (y quizás por ello,tolerado): Enrique Banchs. La suya fue La Onica critica fuerte que, de unmodo extraño, se infiltró en el Monitor, y a partir de su articulo no hubornás criticas publicadas en el órgano of icial del Consejo. Banchs, por otraparte, nunca más se opuso en forma frontal al movimiento de educaciónpatriótica. Pero, cabe reconocerlo, con Ia publicación de este articulo yahabia cumplido ampliamente con su deber de civismo, cual patriotaauténtico en el sentido de Olmos. El articulo de Banchs es, además de unabella pieza, Ia antItesis del pensamiento de un Bunge y las declamaciones deun de Vedia. Se ubica en el contexto de las canciones escolares, un tema que,por su actividad, era apropiado para Ia plurna de Banchs, y éste aprovechaIa ocasión para desarrollar una critica que va mucho más aliá de las letrasde estas canciones:

son los pensamientos de Las canciones escolares argenti-nas? La mayoria son patrióticas. El patriotismo es una cosa buena porquees un ideal para el mayor nümero de las gentes. Pero tiene, como el carbon,diferentes fornias. En nuestras canciones predomina el patriotismo hinchadoy falso de los diarios parroquiales. Ha franqueado Ia frontera que separa losublime de lo ridiculo. (...) La alevosa punteria patriótica-Iiteraria queengendra esas canciones se decide por San Martin y Beigrano.Esos son nombres que no debieran salir de Los textos de historia donde susacciones y sus obras son evaluadas con serenidad. L.os niños carecen enabsoluto de Ia nociOn de proporciones en historia. Se les impone, pues, unabonita lecciOn de falsedad al presentarles a esos agentes de La Independenciacon perfiles inusitadamente colosales, magnos hasta la insensatez. Sinembargo, fueron humanos y no hicieron más que cumplir con su deber. Talvez infiltrando al niño Ia conciencia de que esos hombres cumplieron consu deber e hicieron cosas inspiradas en el razonamiento y no en el deliria,se sentirá capaz de hacer lo que ellos en parecidas circunstancias. Mientrasrepresenten para Ia mente infantil hinchazones de genlo, de dMnidad, deinlinito, son modelos inmorales, porque su vida no se ofrece a La irnitación.

41. Casimiro Olmos, Patrlótica, Monitor, 31 de agosto de 1908, p5g.86-87.

58 CARLOS EsCUDE

palabras sinónimas", una gran verdad que Ramos Mejíay los suyos jamáscomprendieron.41

Mucho más duro en su crítica, y la verdadera gran excepción en estaépoca del Consejo y el Monitor, fue el artículo que a mediados de 1909publicó un poeta muy querido por sus contemporáneos (y quizás por ello,tolerado): Enrique Banchs. La suya fue la única crítica fuerte que, de unmodo extraño, se infiltró en el Monitor, y a partir de su artículo no hubomás críticas publicadas en el órgano oficial del Consejo. Banchs, por otraparte, nunca más se opuso en forma frontal al movimiento de educaciónpatriótica. Pero, cabe reconocerlo, con la publicación de este artículo yahabía cumplido ampliamente con su deber de civismo, cual patriotaauténtico en el sentido de-0lmos. El artículo de Banchs es, además de unabella pieza, la antítesis del pensamiento de un Bunge y las declamaciones deun de Vedia. Se ubica en el contexto de las canciones escolares, un tema que,por su actividad, era apropiado para la pluma de Banchs, y éste aprovechala ocasión para desarrollar una crítica que va mucho más allá de las letrasde estas canciones:

..¿Cuálesson los pensamientos de las canciones escolares argenti-nas? La mayoría son patrióticas. El patriotismo es una cosa buena porquees un ideal para el mayor número de las gentes. Pero tiene, como el carbón,diferentes formas. En nuestras canciones predomina el patriotismo hinchadoy falso de los diarios parroquiales. Ha franqueado la frontera que separa losublime de lo ridiculo. (oo.)La alevosa puntería patriótica-literaria queengendra esas canciones se decide comúnmente por San Martín y Belgrano.Esos son nombres que no debieran salir de los textos de historia donde susacciones y sus obras son evaluadas con serenidad. Los niños carecen enabsoluto de la noción de proporciones en historia. Se les impone, pues, unabonita lección de falsedad al presentarles a esos agentes de la Independenciacon perfiles inusitadamente colosales, magnos hasta la insensatez. Sinembargo, fueron humanos y no hicieron más que cumplir con su deber . Talvez infiltrando al niño la conciencia de que esos hombres cumplieron consu deber e hicieron cosas inspiradas en el razonamiento y no en el delirio,se sentirá capaz de hacer lo que ellos en parecidas circunstancias. Mientrasrepresenten para la mente infantil hinchazones de genio, de divinidad, deinfinito, son modelos inmorales, porque su vida no se ofrece a la imitación.

41. Caslmlro Olmos, "Educación Palrlótlca", Monitor, 31 de agosto de 1908, pág.86-87.



EL FRACASO DEL PROYECTO ARGENTINa 59

Ni siquiera pueden ser amados (...}. La literatura histonca cuando se hacecon (un) criterio fomentador del prodigio y de lo heroico, tiene para elel peligro de que obsesionado por La brillantez del pasado no salga de sucirculo, atrayente como una edad de oro, y desdene el tiempo presente porvulgar y bajo, indigno de que se le consagre ningün esfuerzo (...). Más valeque los niños sepan que todas las épocas son de una identidad abrumadora;que La vulgaridad es el patrimonio de todas Las edades humanas (...)".

"La cancion escolar actual en lo que significa parte principal de La

enseñanza tiende, como flecha ai hito, a concretar en el ànimo de los niñosIa idea de que ser argeritino es un privilegio excepcional, una ejecutoria denobleza. El honor de nacer en terrltorio argentino es una suerte compartidaabundantemente con nuirierosas farnilias de insectos. Nuestros antepasa-dos hicieron algunas cosas notables, por ejemplo ganar batallas. Venere elniño las glorias pasadas, pero no se las atribuya. Ninguna parte tuvo él enesos hechos."

Banchs concluye proponiendo, para los varones de los gradosprimarios superiores, "trabajar en el sentido de intensificar el arnor a Ianaturaleza y el optimismo en La vida".42

He aqul una Cinica y valiente reacción, que proponla algo que, másque diferente, era justo lo contrario del proyecto militarizante de RamosMejIa. Todos los programas de instrucciôn civica e historia se proponian elobjetivo de (mas que enseñar) obligar a amar a La patria o a fingir ese amor.Esto no podIa sino desesperar a un auténtico poeta, que era, él rnismo, Iaantitesis de un obsecuente rimador como Picarel. Entonces propuso, a Lamanera de boutade ironica, trabajar para intensificar el amor a Lanaturaleza hasta el panteismo. Pero los tiempos no estaban para eso, y estearticulo debe haberle provocado a Banchs más de un dolor de cabeza, queno he podido documentar. Banchs, claro, no era una indefensa rnaestra quepodia ser exonerada impunemente. Pero nunca más volvió a escribir sobreeste tema.

Conclusiones

No, Los tiempos no eran propicios para Un pensamiento como el deBanchs. Por el contrario, estaban imbuidos de un patrioterismo y una

42. Enrique Banchs, Candor,es escolares, Monitor, 31 de de 1909, pig.29-35.

-EL. FRACASO DEL PROYECTO ARGENTINO 59

Ni siquiera pueden ser amados (...). La literaturahistóricacuando se hacecon (un)criterio fomentador del prodigio y de lo heroico, tiene para el niñoel peligro de que obsesionado por la briUantez del pasado no salga de sucírculo, atrayente como una edad de oro, y desdeñe el tiempo presente porvulgary bajo, indignode que se le consagre ningúnesfuerzo(...). Másvaleque los niños sepan que todas las épocas son de una identidad abrumadora;que la vulgaridad es el patrimonio de todas las edades humanas (...)".

"La canción escolar actual en lo que significa parte principal de laenseñanza tiende, como flecha al hito, a concretar en el ánimo de los niñosla idea de que ser argentino es un privilegio excepcional, una ejecutoria denobleza. El honor de nacer en territorio argentino es una suerte compartidaabundantemente con numerosas familias de insectos. Nuestros antepasa-dos hicieron algunas cosas notables, por ejemplo ganar bataDas. Venere elniño las glorias pasadas, pero no se las atribuya. Ninguna parte tuvo él enesos hechos."

Banchs concluye proponiendo, para los varones de los gradosprimarios superiores, "trabajar en el sentido de intensificar el amor a lanaturaleza y el optimismo en la vida".42

He aquí una única y valiente reacción, que proponía algo que, másque diferente, era justo lo contrario d~1proyecto militarizante de RamosMejía. Todos los programas de instrucción cívica e historia se proponían elobjetivode (más queenseñar)obligar a amar a lapatriao a fingirese amor.Esto no podia sino desesperar a un auténtico poeta, que era, él mismo, laantítesis de un obsecuente rimador como Picarel. Entonces propuso, a lamanera de boutade irónica, trabajar para intensificar el amor a lanaturaleza hasta el panteísmo. Pero los tiempos no estaban para eso, y estearticulo debe haberle provocado a Banchs más de un dolor de cabeza, queno he podido documentar. Banchs, claro, no era una indefensa maestra quepodia ser exonerada impunemente. Pero nunca más volvió a escribir sobreeste tema.

Conclusiones

No, los tiempos no eran propicios para un pensamiento como el deBanchs. Por el contrario, estaban imbuidos de un patrioterismo y una

29-35.42. Enrique Banchs, .Las canelones escolares., Monitor, 31 de julio de 1909, pág.



60 CARLOS ESCIJDE

megalomania que se autoalirnentaban y a través de los mecanismossuministrados por el Conse;o, se generalizaban ala población toda, dejandoun sello permanente en Ia cultura argentina. No es necesario ilegar a losextrernos ilustrados por un Picarel para cornprenderlo. Mn hombres sezios,como Manuel Gálvez, calan victimas de este deliria colectivo. En sus"Himnos de Ia nueva energia", escribla:

"Y he aqul que se acerca, angustiosa y secreta,Ia fatklica hora de Ia Europa latina.Se diria una enorme catedral que se agrieta.Mas por ahora no terminani el alma de estirpe ni su influjo inmortal.En este libro yo seré el poetade ml raza, cantando La esperanza divinaque salvará a Ia tierra del duelo universal;esa esperanza que en su fuerza IlevaIa energia naciente y nuevade nuestra espléndida Argentina."43

El mesianismo, es obvio, es un corolario de Ia megalomania, y nopuede sorprendemos: los destinos manifiestos van de Ia mano con esterasgo cultural.

Tan grande era Ia difusión de los çxeceptos del proyecto de RamosMejia, que no sorprende que, hacia fines de 1913, se diera ya por sentadoel éxito de La empresa de este hombre que acababa de dejar su cargo y estabaya próximo a terminar sus dias. Reyes M. Salinas escnbla por aquella fechaen el Monitor: "La enseñanza patriôtica no puede ser más abundante.En este sentido es una obra ya realizada en principios y formas estables,creada."

Sin embargo, ese mismo autor observaba que esa enseñanzapatriotica era aCm unilateral, girando alrededor de Ia historia, sus prohombresy acontecimientos más notables. Proponla entonces:

"ES necesario, pues, amplificarla, completarla, yendo al fondo de Iacuestión, al alma nacional, tantas veces ponderada pero no suficiente-mente comprendida. (...) Este ideal exige (...) proclamar las excelencias denuestra legislación, Ia más liberal del mundo. Conocer y ponderar las

43. Manuel GMvez, Los hin'inos de Ia nueva energla (versos Monitor,31 de octubre de 1911, pay. 69.

60 CARLOS EsCUDE

megalomanía que se autoalimentabany que, a través de los mecanismossuministrados por el Consejo, se generalizaban a la población toda, dejandoun sello permanente en la cultura argentina. No es necesario llegar a losextremos ilustrados por un Picarel para comprenderlo. Aún hombres serios,como Manuel Gálvez, caían víctimas de este delirio colectivo. En sus"Himnos de la nueva energía", escribía:

"Y he aquí que se acerca, angustiosa y secreta,la fatídica hora de la Europa latina.Se diría una enorme catedral que se agrieta.Mas por ahora no terminani el alma de estirpe ni su influjoinmortal.En esteÍibro yo seré el poetade mi raza, cantando la esperanza divínaque salvará a la tierra del duelo universal;esa esperanza que en su fuerza lleVala energía naciente y nuevade nuestra espléndida Argentina. "43

El mesianismo, es obvíO, es un corolario de la megalomanía, y nopuede sorprendemos: los destinos manifiestos van de la mano con esterasgo cultural.

Tan grande era la difusión de los preceptos del proyecto de RamosMejía, que no sorprende que, hacia fines de 1913, se diera ya por sentadoeléxitode laempresadeestehombrequeacababa dedejarsucargo yestabaya próximo a termínar sus dias. Reyes M. Salinas escribía por aquella fechaen el Monitor: "Laenseñanza patriótica no puede ser más abundante.En este sentido es una obra ya realizada en principios y formas estables,creada. ..

Sin embargo, ese mismo autor observaba que esa enseñanzapatriótica era aún unilateral, girando alrededor de la historia, sus prohombresy acontecimientos más notables. Proponía entonces:

"Esnecesario, pues, amplificarla, completarla, yendo al fondo de lacuestión, al alma nacional, tantas veces ponderada pero no suficiente-mente comprendida. (oo.)Este ideal exige (oo.)proclamar las excelencias denuestra legislación, la más liberal del mundo. Conocer y ponderar las

43. Manuel Gá1vez, "los himnos de la nueva energla (versos patrióticos)", Monitor,

31 de octubre de 1911, pág. 69.




bellezas incontables de nuestra naturaleza, las fuentes de riqueza, (...)tamblén es obra de sano patriotismo. Para ello no es necesario mostrarilagas y debilidades que no tenemos, por el gusto de copiar lo que se haceen otras partes o hacer gala de erudición (...)""

Es decir que nada era suficiente, y habia que cumplir con el mandatode Enrique de Vedia, que habia propuesto "ilegar a todos los excesos sintemores ni ixisilanimidades". ilagas y debilidades? Eso era traición,y además, por decreto, mentira. La Republica Argentina habia dejado de serun pals perfectible. Esto, par definición y consecuencia lógica, significa quehabia perdido su futuro.

Finalmente, esta Ciltima afirmacian mia es rnás que mera retórica yjuego intelectual. Todo el proyecto de Ia educación patriótica partIa de unaconcepción estática de Ia nacionalidad, a Ia que se buscaba cristalizar enformas Por ende, implicaba un vano y utópico intento dedetener a Ia historia. Vaya como ilustración un hecho rescatado por CarlSolberg: Manuel Gálvez crela que una de las más fehacientes pruebas de Iadesnacionalización cultural que estaba sufnendo Ia Argentina era Ia difusiônde ese baile canyengue y extranjerizante, el tango.45

44. Reyes M. Salinas, escuelas (subtitulo 1a patria en las escuelas). Monitor,31 de octubre de 1913, pág. 76-77.

45. C. Solberg, op. cit., pSg. 141, dondese cbs a Manuel Gálvez, El diarlo d.Gabriel Quiroga: opiniones sobre Ia vida argentina, pág. 129.


bellezas incontables de nuestra naturaleza, las fuentes de riqueza, (oo.)

también es obra de sano patriotismo. Para ello no es necesario mostrarllagas y debilidades que no tenemos, por el gusto de copiar lo que se haceen otras partes o hacer gala de erudición (...)" ,44

Es decirque nada era suficiente,y habíaque cumplircon elmandatode Enrique de Vedia, que había propuesto "llegar a todos los excesos sintemores ni pusilanimidades", ¿Mostrar llagas y debilidades? Eso era traición,y además, por decreto, mentira. La República Argentina había dejado de serun país perfectible. Esto, por definición y consecuencia lógica, significa quehabía perdido su futuro.

Finalmente, esta última afirmación mía es más que mera retórica yjuego intelectual. Todo el proyecto de la educación patriótica partía de unaconcepción estática de la nacionalidad, a la que se buscaba cristalizar enformas "definitivas;'. Por ende, implicaba un vano y utópico intento dedetener a la historia. Vaya como ilustración un hecho rescatado por CarlSolberg: Manuel Gálvez creía que una de las más fehacientes pruebas de ladesnacionalización cultural que estaba sufriendo la Argentina era la difusiónde ese baile canyengue y extranjerizante, el tango.45

44. Reyes M. Salinas, "Las escuelas" (subtitulo "La patria en las escuelas'), Monitor,31 de octubre de 1913, pág. 76-77.

45. C. Solberg, op. cit., pág. 141, dónde se cita a Manuel Gálvez, El diario deGabrlel Qulroga: opiniones sobre la vida argentina, pág. 129.



capitulo ii capitulo 11 - argentina-rree.com fracaso del proyecto argent… · capitulo ii la...

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