c 14 cu lt u r a viernes 15 de marzo de 2019 ... - unam · desde hace 40 aÐos, buena parte de la...

1
Viernes 15 de marzo de 2019 EL UNIVERSAL C14 CULTURA Los coprolitos prehispánicos conservan restos del material genético de las bacterias que conformaban la microbiota intestinal de los pobladores originales de Mesoamérica. Al ser secuenciado, este material permitiría re- conocer las especies de bacterias de esa micro- biota, las cuales podrían ser útiles en los tras- plantes de heces fecales para mejorar la salud digestiva de la población del país. No sólo el excremento antiguo, sino también cráneos de diferentes culturas que aún conser- van sarro dental y momias prehispánicas y mes- tizas con el tracto digestivo intacto se analizarán genéticamente para determinar si la microbiota intestinal de los pobladores originales de Me- soamérica es diferente de la población actual de M éxico. En este análisis histórico de la ecología y evo- lución de las bacterias que forman la microbiota intestinal del mexicano participan investigado- res de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y del Hospital Ángeles de la Ciudad de México. De acuerdo con René Cerritos Flores, inves- tigador de la Facultad de Medicina de la UNAM adscrito al Centro de Investigación en Políticas, Población y Salud de esta misma casa de estu- dios, la microbiota intestinal de los hombres y mujeres mesoamericanos no fue la misma antes y después de la Conquista española. “Con la sustitución de la dieta (compuesta por maíz, frijol, calabaza, chía, insectos comesti- bles...) hubo un cambio en la microbiota intes- tinal de los pobladores originales de Mesoamé- rica, porque se modificaron las condiciones y los recursos con que su comunidad bacteriana se comenzó a alimentar”, asegura. PROYECTO UNAM Texto: Fernando Guzmán Aguilar [email protected] ESPECIAL Diplomado en divulgación de las humanidades La Dirección General de Divulgación de las Humanidades de la UNAM invita al “Diplomado en divulgación de las humanidades 2019”, que se realizará los martes y viernes, del 2 de abril al 20 de septiembre, de 11:00 a 14:00 horas, en la Casa de las Humanidades. Informes e inscripciones, en el teléfono 56-58-11-21, extensiones 102, 110 y 106, y en el correo elec- trónico d i f h u m @ u n a m.m x CORTESÍA UNAM Cuatro modelos de cargadores solares En 2016, los emprendedores Alejandro Crespo López y Miguel Ángel González Ramírez, egresados de la Facultad de Ingeniería de la UNAM, fundaron la empresa TechStem. Ya han creado cuatro modelos de car- gadores para teléfonos celulares, tabletas y computadoras portátiles, que contienen de uno a seis paneles solares. Las nuevas versiones son una bolsa para mujer y un portafolio para hombre con un panel solar, una batería y un circuito de carga de uno y dos puertos USB para cargar dos dispositivos móviles de manera simultánea. ESPECIAL Especies de plantas y animales en peligro Según Lázaro Guevara, investiga- dor del Instituto de Biología de la UNAM, alrededor de 30% de las especies de plantas y animales sil- vestres están amenazadas o en pe- ligro de extinción. Uno de los eco- sistemas más impactados es, sin ninguna duda, el marino. La so- breexplotación de especies, la contaminación y el cambio climá- tico no sólo modifican la acidez de las aguas de los océanos, sino tam- bién incrementan considerable- mente el riesgo de que desaparez- can organismos como los corales, los moluscos, los equinodermos, los crustáceos y el fitoplancton. Investigadores universitarios determinarán, mediante el análisis de coprolitos, sarro dental antiguo, momias y muestras recientes, si hubo un cambio en su composición Bacterias ¿Qué especies de bacterias se eliminaron? ¿Cuá- les aumentaron su tamaño poblacional? ¿Qué parte de la microbiota intestinal está asociada a la dieta prehispánica? ¿Qué cambió y qué per- sistió desde entonces? ¿En qué se diferencia la antigua microbiota intestinal de la actual, que se nutre de productos procesados? ¿Una vez cono- cida la diversidad bacteriana nativa se podrían trasplantar especies benéficas para la salud? En busca de respuestas a éstas y otras inte- rrogantes se analizarán coprolitos de hace ocho mil años encontrados en cuevas de Puebla, crá- neos de hace tres mil años y momias de hace dos mil años, así como de la época virreinal y del siglo XVIII. “De muestras antiguas ya datadas por el INAH y el Instituto de Investigaciones Antro- pológicas (IIA) de la UNAM podremos saber su composición bacteriana; también, a partir de ellas, descubriremos qué comían los hombres y mujeres mesoamericanos, e incluso qué bacte- rias los enfermaban”, apunta Cerritos Flores. Con ese objetivo, del excremento antiguo que contiene material genético de las bacterias que hace ocho mil años integraron la microbiota in- testinal de un humano, se extraerá una fracción de ácido desoxirribonucleico (ADN) y se se- cuenciará; de esta manera se sabrá a qué espe- cies pertenecían dichas bacterias. En el sarro dental de cráneos y en el tracto digestivo intacto de las momias también está atrapada la huella genética de bacterias. De am- bos materiales se extraerán muestras para aislar y secuenciar el ADN, e identificarlas. “Con estas técnicas de secuenciación de ADN se puede establecer, asimismo, qué genotipo pa- tógeno llevaba dentro el individuo y qué comió”, dice el investigador. La microbiota intestinal de los pobladores ori- ginales de Mesoamérica se comparará con la de connacionales con obesidad y/o desnutrición que consuman una enorme cantidad de pro- ductos procesados y refrescos. Muestras Desde hace 40 años, buena parte de la colección de coprolitos mesoamericanos está en Estados Unidos. Muchas muestras, colectadas en el Va- lle de Tehuacán, las resguarda la Universidad de Te x a s . En México, el INAH y el IIA resguardan las muestras más antiguas de coprolitos, cráneos mayas con sarro dental y restos momificados “De muestras antiguas ya datadas por el INAH y el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM podremos saber su composición bacteriana; también, a partir de ellas, descubriremos qué comían los hombres y mujeres mesoamericanos, e incluso qué bacterias los enfermaban” RENÉ CERRITOS FLORES Investigador de la Facultad de Medicina de la UNAM adscrito al Centro de Investigación en Políticas, Población y Salud de esta misma casa de estudios EL DATO La de los pobladores originales de Mesoamérica se comparará con la de connacionales con obe- sidad y/ o desnutrición. prehispánicos encontrados en Durango y Chi- huahua. Con el Museo de las Momias de Gua- najuato se gestionará un convenio para obtener muestras posteriores a la Conquista. Además de Cerritos Flores, quien se dedica a elaborar una megabase de datos sobre muestras disponibles, por la Facultad de Medicina par- ticipan en este proyecto las doctoras Rosario Morales y Gabriela Delgado, del Departamento de Bacteriología y Parasitología, quienes anali- zarán bacterias patógenas ( Helicobacter pylori, Escherichia coli, del género Salmonella...) para determinar cuáles conformaban la microbiota intestinal nativa y cuáles especies trajeron los españoles o se fueron implantando a lo largo del tiemp o. Por el IIA lo hace el doctor Luis Alberto Vargas, estudioso de la alimentación mesoamericana y su impacto en la dieta; por el INAH, la doctora Josefina Mansilla, quien resguarda restos mo- mificados del país en la Dirección de Antropo- logía Física de ese instituto; y por el Hospital Ángeles, el doctor Fernando Mundo Gallardo, gastroenterólogo y experto en endoscopías en momias que les hará biopsias a algunas de éstas para obtener muestras. Trasplante de heces fecales A nivel mundial ya se aplican terapias basadas en la ingesta de fracciones de heces fecales que contienen microbiota intestinal sana. En nuestro país recién se empiezan a aplicar estas terapias. “En algunas personas, la administración fre- cuente e intensa de antibióticos propicia que su tracto digestivo esté habitado sólo por unas cuantas especies de bacterias, lo cual les causa un déficit en la absorción de nutrientes y las vuelve propensas a infecciones por la coloni- zación intestinal de otros patógenos”, explica Cerritos Flores. Para que estas personas tengan una mayor di- versidad de especies en su microbiota intestinal se les trasplanta una fracción de la comunidad bacteriana sana donada por otros individuos en sus heces, como si fuera sangre. “Si, con base en el análisis genético y evolu- tivo de una microbiota intestinal ancestral ba- sada en el maíz y otros alimentos prehispáni- cos, llegamos a saber cuáles especies de bac- terias son más benéficas, éstas se podrían ob- tener de comunidades originales que aún si- guen una dieta prehispánica y casi no consu- men bebidas azucaradas y productos procesa- dos”, afirma el investigador. A partir de ese reservorio de microbiota in- testinal ancestral que aún persiste, algunas es- pecies bacterianas se podrían trasplantar, pre- via donación, a quien lo requiera o cultivar en laboratorio. “Aunque este proyecto es de ciencia básica, todos los conocimientos que se generen even- tualmente podrían ser utilizados por otro grupo de investigación con un fin terapéutico”, con- cluye Cerritos Flores. b Microbiota intestinal del mexicano, antes y después de la Conquista

Upload: others

Post on 29-May-2020

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: C 14 CU LT U R A Viernes 15 de marzo de 2019 ... - UNAM · Desde hace 40 aÐos, buena parte de la colecciÒn de coprolitos mesoamericanos estÀ en Estados Unidos. Muchas muestras,

Viernes 15 de marzo de 2019 EL UNIVERSALC14 CU LT U R A

Los coprolitos prehispánicosconservan restos del materialgenético de las bacterias queconformaban la microbiotaintestinal de los pobladoresoriginales de Mesoamérica.

Al ser secuenciado, este material permitiría re-conocer las especies de bacterias de esa micro-biota, las cuales podrían ser útiles en los tras-plantes de heces fecales para mejorar la saluddigestiva de la población del país.

No sólo el excremento antiguo, sino tambiéncráneos de diferentes culturas que aún conser-van sarro dental y momias prehispánicas y mes-tizas con el tracto digestivo intacto se analizarángenéticamente para determinar si la microbiotaintestinal de los pobladores originales de Me-soamérica es diferente de la población actual deM éxico.

En este análisis histórico de la ecología y evo-lución de las bacterias que forman la microbiotaintestinal del mexicano participan investigado-res de la Universidad Nacional Autónoma deMéxico, del Instituto Nacional de Antropologíae Historia (INAH) y del Hospital Ángeles de laCiudad de México.

De acuerdo con René Cerritos Flores, inves-tigador de la Facultad de Medicina de la UNAMadscrito al Centro de Investigación en Políticas,Población y Salud de esta misma casa de estu-dios, la microbiota intestinal de los hombres ymujeres mesoamericanos no fue la misma antesy después de la Conquista española.

“Con la sustitución de la dieta (compuesta pormaíz, frijol, calabaza, chía, insectos comesti-bles...) hubo un cambio en la microbiota intes-tinal de los pobladores originales de Mesoamé-rica, porque se modificaron las condiciones y losrecursos con que su comunidad bacteriana secomenzó a alimentar”, asegura.

PROYECTO UNAMTexto: Fernando Guzmán Aguilar

alazul10 @hotmail.com

E S P E

C I A L

Diplomado en divulgación de las humanidadesLa Dirección General de Divulgación de las Humanidades de la UNAMinvita al “Diplomado en divulgación de las humanidades 2019”, que serealizará los martes y viernes, del 2 de abril al 20 de septiembre, de 11:00a 14:00 horas, en la Casa de las Humanidades. Informes e inscripciones,en el teléfono 56-58-11-21, extensiones 102, 110 y 106, y en el correo elec-trónico d i f h u m @ u n a m.m x

CORT

ESÍA

UN

AM

Cuatro modelos de cargadores solaresEn 2016, los emprendedores Alejandro Crespo López y Miguel ÁngelGonzález Ramírez, egresados de la Facultad de Ingeniería de la UNAM,fundaron la empresa TechStem. Ya han creado cuatro modelos de car-gadores para teléfonos celulares, tabletas y computadoras portátiles,que contienen de uno a seis paneles solares. Las nuevas versiones sonuna bolsa para mujer y un portafolio para hombre con un panel solar,una batería y un circuito de carga de uno y dos puertos USB para cargardos dispositivos móviles de manera simultánea.

E S P E

C I A L

Especies deplantas y animalesen peligroSegún Lázaro Guevara, investiga-dor del Instituto de Biología de laUNAM, alrededor de 30% de lasespecies de plantas y animales sil-vestres están amenazadas o en pe-ligro de extinción. Uno de los eco-sistemas más impactados es, sinninguna duda, el marino. La so-breexplotación de especies, lacontaminación y el cambio climá-tico no sólo modifican la acidez delas aguas de los océanos, sino tam-bién incrementan considerable-mente el riesgo de que desaparez-can organismos como los corales,los moluscos, los equinodermos,los crustáceos y el fitoplancton.

I nve st igado re su n ive rs it a r io sdeterminarán, medianteel análisis de coprolitos,sarro dental antiguo,momias y muestrasrecientes, si huboun cambio en suc o m p o s ic ió n

B a cte r i a s¿Qué especies de bacterias se eliminaron? ¿Cuá-les aumentaron su tamaño poblacional? ¿Quéparte de la microbiota intestinal está asociada ala dieta prehispánica? ¿Qué cambió y qué per-sistió desde entonces? ¿En qué se diferencia laantigua microbiota intestinal de la actual, que senutre de productos procesados? ¿Una vez cono-cida la diversidad bacteriana nativa se podríantrasplantar especies benéficas para la salud?

En busca de respuestas a éstas y otras inte-rrogantes se analizarán coprolitos de hace ochomil años encontrados en cuevas de Puebla, crá-neos de hace tres mil años y momias de hace dosmil años, así como de la época virreinal y delsiglo XVIII.

“De muestras antiguas ya datadas por elINAH y el Instituto de Investigaciones Antro-pológicas (IIA) de la UNAM podremos saber sucomposición bacteriana; también, a partir deellas, descubriremos qué comían los hombres ymujeres mesoamericanos, e incluso qué bacte-rias los enfermaban”, apunta Cerritos Flores.

Con ese objetivo, del excremento antiguo quecontiene material genético de las bacterias quehace ocho mil años integraron la microbiota in-testinal de un humano, se extraerá una fracciónde ácido desoxirribonucleico (ADN) y se se-cuenciará; de esta manera se sabrá a qué espe-cies pertenecían dichas bacterias.

En el sarro dental de cráneos y en el tractodigestivo intacto de las momias también estáatrapada la huella genética de bacterias. De am-bos materiales se extraerán muestras para aislary secuenciar el ADN, e identificarlas.

“Con estas técnicas de secuenciación de ADNse puede establecer, asimismo, qué genotipo pa-tógeno llevaba dentro el individuo y qué comió”,dice el investigador.

La microbiota intestinal de los pobladores ori-ginales de Mesoamérica se comparará con la deconnacionales con obesidad y/o desnutriciónque consuman una enorme cantidad de pro-ductos procesados y refrescos.

M u est ra sDesde hace 40 años, buena parte de la colecciónde coprolitos mesoamericanos está en EstadosUnidos. Muchas muestras, colectadas en el Va-lle de Tehuacán, las resguarda la Universidad deTe x a s .

En México, el INAH y el IIA resguardan lasmuestras más antiguas de coprolitos, cráneosmayas con sarro dental y restos momificados

“De muestras antiguas ya datadaspor el INAH y el Instituto deInvestigaciones Antropológicasde la UNAM podremos saber sucomposición bacteriana; también,a partir de ellas, descubriremosqué comían los hombresy mujeres mesoamericanos,e incluso qué bacteriaslos enfermaban”RENÉ CERRITOS FLORESInvestigador de la Facultad de Medicina de la UNAMadscrito al Centro de Investigación en Políticas,Población y Salud de esta misma casa de estudios

EL DATO

La de los pobladores originales de Mesoaméricase comparará con la de connacionales con obe-sidad y/ o desnutrición.

prehispánicos encontrados en Durango y Chi-huahua. Con el Museo de las Momias de Gua-najuato se gestionará un convenio para obtenermuestras posteriores a la Conquista.

Además de Cerritos Flores, quien se dedica aelaborar una megabase de datos sobre muestrasdisponibles, por la Facultad de Medicina par-ticipan en este proyecto las doctoras RosarioMorales y Gabriela Delgado, del Departamentode Bacteriología y Parasitología, quienes anali-

zarán bacterias patógenas (Helicobacter pylori,Escherichia coli, del género Salmonella...) paradeterminar cuáles conformaban la microbiotaintestinal nativa y cuáles especies trajeron losespañoles o se fueron implantando a lo largo deltiemp o.

Por el IIA lo hace el doctor Luis Alberto Vargas,estudioso de la alimentación mesoamericana ysu impacto en la dieta; por el INAH, la doctoraJosefina Mansilla, quien resguarda restos mo-mificados del país en la Dirección de Antropo-logía Física de ese instituto; y por el HospitalÁngeles, el doctor Fernando Mundo Gallardo,gastroenterólogo y experto en endoscopías enmomias que les hará biopsias a algunas de éstaspara obtener muestras.

Trasplante de heces fecalesA nivel mundial ya se aplican terapias basadasen la ingesta de fracciones de heces fecales quecontienen microbiota intestinal sana. Ennuestro país recién se empiezan a aplicar estaste r a p i a s .

“En algunas personas, la administración fre-cuente e intensa de antibióticos propicia que sutracto digestivo esté habitado sólo por unascuantas especies de bacterias, lo cual les causaun déficit en la absorción de nutrientes y lasvuelve propensas a infecciones por la coloni-zación intestinal de otros patógenos”, explicaCerritos Flores.

Para que estas personas tengan una mayor di-versidad de especies en su microbiota intestinalse les trasplanta una fracción de la comunidadbacteriana sana donada por otros individuos ensus heces, como si fuera sangre.

“Si, con base en el análisis genético y evolu-tivo de una microbiota intestinal ancestral ba-sada en el maíz y otros alimentos prehispáni-cos, llegamos a saber cuáles especies de bac-terias son más benéficas, éstas se podrían ob-tener de comunidades originales que aún si-guen una dieta prehispánica y casi no consu-men bebidas azucaradas y productos procesa-do s”, afirma el investigador.

A partir de ese reservorio de microbiota in-testinal ancestral que aún persiste, algunas es-pecies bacterianas se podrían trasplantar, pre-via donación, a quien lo requiera o cultivar enlab oratorio.

“Aunque este proyecto es de ciencia básica,todos los conocimientos que se generen even-tualmente podrían ser utilizados por otro grupode investigación con un fin terapéutico”, con-cluye Cerritos Flores. b

Microbiota intestinaldel mexicano, antes y después de la Conquista