descubren crustÀceos de estero en Àmbar de chiapas · asÌ, en vez de haber llegado a la...

1
EL UNIVERSAL Viernes 13 de marzo de 2 02 0 CULTURA A33 PROYECTO UNAM Texto: Fernando Guzmán Aguilar [email protected] Sesión sobre Jorge Luis Borges El Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM invita, como parte del Seminario de Literatura y Filosofía Española del siglo XX, a la sesión “Borges: poesía y filosofía en Fervor de Buenos Aires ”, que impartirá David Huerta, Premio FIL Guadalajara de Lenguas Romances 2019, el jueves 19 de marzo, de 17:00 a 19:00 horas, en la Sala de Usos Múltiples del citado instituto, en CU. ESPECIAL La UNAM, en el lugar 103 de las mejores del mundo De acuerdo con el QS World Univer- sity Rankings 2020, la UNAM ocupa el lugar 103 entre las mejores uni- versidades del mundo y es una de las dos mejores universidades de Iberoamérica (la otra es la de Buenos Aires). Asimismo, supera a todas las universidades españolas y se ubica en el top 50 en 12 áreas del conoci- miento. El QS World University Rankings se elabora con base en la reputación académica y de emplea- bilidad de las universidades, las ci- taciones científicas, el rango de los estudiantes en relación con la plan- tilla y de los estudiantes nacionales con los internacionales. CORTESÍA UNAM Se crea la Coordinación de Igualdad de Género Se creó la Coordinación de Igualdad de Género de la UNAM, de- pendiente de la Rectoría. Su objetivo será implementar e instru- mentar las políticas institucionales sobre la materia. Tendrá ejes de acción transversal hacia las demás secretarías y coordinaciones de la institución, y su primera acción será convocar a foros por escuelas y facultades, y en los subsistemas de investigación, con miras a un Congreso Universitario sobre Género. También cola- borará en la organización y difusión del foro Beijing+25, de ONU Mujeres, que se realizará el 7 y 8 de mayo en el CCU Tlatelolco. Descubren crustáceos de estero en ámbar de Chiapas El ámbar de Simojovel de Allende, Chiapas, constituye un patrimonio natural mexi- cano que no ha sido cuidado debidamente, ya que valiosas piezas de esta resina que contienen fauna fósil han sido vendidas y sacadas del país. Para Francisco Javier Vega —inve stigador del Instituto de Geología de la UNAM que, con- juntamente con María de Lourdes Serrano Sánchez, profesora de la Facultad de Ciencias de esta misma casa de estudios, ha descrito innumerables ejemplares de fauna estuari- na— fue toda una sorpresa saber que a finales de 2019 científicos chinos adquirieron una sin- gular pieza de ámbar que contenía camarones fósile s. Así, en vez de haber llegado a la Colección Nacional de Paleontología, bajo resguardo de la UNAM, o por lo menos a algún museo de Chiapas, esa pieza fue depositada en el Ins- tituto Smithsoniano de Washington, DC, Es- tados Unidos. “500 años de pobreza y abandono han vuel- to recelosas a las comunidades de Simojovel, que dependen de la venta de esta gema semi- preciosa. El ámbar de este lugar es único en el mundo por el tipo de ambiente en que dicha resina se habría depositado hace 23 millones de años: un manglar cercano a la antigua costa oriental de Chiapas”, apunta el investigador univer sitario. De esta manera, la gente de Simojovel pre- fiere vender su ámbar a los chinos y no a sus compatriotas. Los chinos, por su lado, le com- pran el ámbar más traslúcido, que en ocasio- nes contiene fósiles. Afortunadamente, al ám- bar estratificado o “s u c i o”, que contiene fauna estuarina (microcrustáceos y otros grupos ma- rinos), no llama tanto su atención, aunque, co- mo ya se mencionó, han comenzado a com- prar y publicar piezas con organismos que no habían sido reportados a nivel mundial. Campo La Granja En la formación llamada Lutita Mazantic, ubi- cada en Simojovel, se extrae ámbar transpa- rente con hormigas, arañas, alacranes y otros artrópodos terrestres, y a veces con hongos y restos de plantas. Éste es el ámbar más común, el cual se usa en joyería. Las piezas de ámbar con fauna estuarina y marina sólo afloran en el pueblo de Campo La Granja, ubicado muy cerca de Simojovel. “Por fortuna, la extracción de este ámbar ha disminuido porque, al estar intercalado con arenisca acarreada por influencia de las ma- reas, es muy oscuro y duro, y contiene una gran cantidad de materia orgánica y sedimen- to, lo que lo hace poco atractivo para la joyería”, indica Vega. En Campo La Granja, Vega y Serrano Sán- chez rescataron piezas de ámbar con diversos crustáceos: cochinillas (isópodos acuáticos y terrestres), copépodos (hoy en día representan la mayor biomasa en el mar), minúsculos can- grejos estuarinos, tanaidáceos y ostrácodos. “Todas ya fueron referidas en revistas inter- nacionales de alto prestigio y depositadas en el Museo Eliseo Palacios Aguilera de la Secre- taría del Medio Ambiente e Historia Natural del Estado de Chiapas, en Tuxtla Gutiérrez.” Plantas prehistóricas Varios científicos coinciden en que el ámbar chiapaneco es una resina producida por una leguminosa llamada localmente guapinol que aún crece en la región selvática de Chiapas, aunque es probable que las especies originales del género ya estén extintas, como Hym e n a e a mexicana e Hymenaea allendis , estudiadas y reportadas por Sergio Ceballos, también inves- tigador del Instituto de Geología de la U NA M . Actualmente, la especie más común en Chiapas es Hymenaea courbaril , si bien otras 13 especies todavía se hallan en otros puntos de América. “Éstas también eran famosas entre las cul- turas prehispánicas por producir copal, el cual se convierte en ámbar después de permanecer millones de años sepultado y ser expuesto por ero sión”, añade el investigador. Fauna fósil exclusiva Como parte de su investigación doctoral, Se- rrano Sánchez estableció una metodología pa- ra el estudio de yacimientos ambaríferos, que posteriormente fue copiada por paleontólogos franceses sin que le dieran ningún crédito. Con base en sus estudios, ahora se sabe que, hace 23 millones de años, el estero chiapaneco donde se producía la resina poco densa era una planicie costera, con un ambiente pare- cido al de un manglar. “Campo La Granja era un lugar semejante a un estero o un manglar, con una gran diver- sidad faunística y florística. Al parecer, el ám- bar de la Lutita Mazantic fue depositado cien- tos de miles de años después en una zona más alta y continental, donde los artrópodos y otros organismos terrestres son más comunes. En el ámbar de Campo La Granja también se han descubierto ocasionalmente algunos organis- mos terrestres y hasta de agua dulce (larvas de insectos e insectos acuáticos), pero en menor cantidad”, señala Vega. Hay muchos países ricos en ámbar, pero no se tienen reportes científicos de la diversidad y abundancia de los crustáceos de Campo La Granja, excepto de tres ostrácodos hallados en el ámbar del Báltico, que es un poco más an- tiguo (del Eoceno, 44 millones de años). “En Campo La Granja se han encontrado miles de ejemplares de ostrácodos de diferen- tes especies y en diferentes etapas, tanto de vida como de descomposición. Algunos aún estaban vivos cuando la resina comenzó a so- lidificarse. Estos hallazgos son importantes porque se trata de fauna exclusiva y diversa, en promedio de 200 micras de longitud. Hoy co- mo en el pasado, Chiapas es un centro de bio- diver sidad”, subraya el investigador de la Uni- versidad Nacional. Hipótesis El siguiente objetivo de Vega y Serrano Sán- chez es describir las nuevas especies halladas en piezas de ámbar de Simojovel, en particular las de Campo La Granja, y tratar de explicar cómo llegaron ahí. Ambos paleontólogos postulan que, hace 23 millones de años, dicha resina habría sido ex- cretada por la vegetación como una respuesta ante el estrés ambiental surgido por la intensa actividad volcánica que había en aquel enton- ces al este y oeste de la región que ahora es Chiapas. “Comprobar esa hipótesis no es tarea fácil, con todo y que contamos con piezas de ámbar que contienen carbón y ámbar quemado, tan- to dentro como en parte de sus sedimentos. También trataremos de entender la proceden- cia de los sedimentos y obtener una edad más precisa mediante el estudio detallado de cier- tos granos de arena conocidos como zircones”, dice Vega. El ámbar de Chiapas es uno de los más es- tables e hialinos del mundo, pero de todos mo- dos requiere una labor de preservación. Por ejemplo, las piezas recolectadas y descrita en la década de los 50 del siglo XX por paleon- tólogos de Estados Unidos, y depositadas en la colección de la Universidad de Berkeley en Ca- lifornia, ya se están deshaciendo como con- secuencia de los efectos de la oxidación. No hay que olvidar que el ámbar es materia or- gánica que se había mantenido sepultada por millones de años. b FOTOS: COTESÍA FRANCISCO JAVIER VEGA “En Campo La Granja se han encontrado miles de ejemplares de ostrácodos de diferentes especies y en diferentes etapas, tanto de vida como de descomposición. Algunos aún estaban vivos cuando la resina comenzó a solidificarse” FRANCISCO JAVIER VEGA Investigador del Instituto de Geología de la UNAM Hace 23 millones de años, esta resina habría sido excretada por la vegetación como una respuesta ante el estrés ambiental Pieza de ámbar con fauna fosil. ADN e ingeniería genética ¿Es posible encontrar ácido deso- xirribonucleico (ADN) prehistórico y hacer ingeniería genética para re- cuperar una especie extinta? A este pregunta, Vega responde lo siguiente: “Yo le apostaría sólo a un ADN congelado, como los de un mamut y un lobo descubiertos re- cientemente en Siberia, pero con tan sólo unas cuantas decenas de miles de años de antigüedad. Re- cuperar ADN de especies preser- vadas en ámbar es una fantasía que a todos nos gustaría ver hecha rea- lidad, pero el ADN es una molécula muy delicada y frágil, y aunque hay fenómenos evolutivos que permiten la supervivencia en estado latente (criptobiosis) de algunos grupos por decenas de años, la ‘vigencia’ del ADN tiene un límite. Por ejemplo, en un herbario de Londres se resguar- daba un musgo colectado hace 110 años de edad que mostraba al mi- croscopio unos elementos muy ra- ros, como cristalinos. Éstos fueron separados y depositados en agua dulce para su hidratación. Se tra- taba de ‘momias’ de rotíferos, or- ganismos microscópicos acuáticos y semiacuáticos que se rehidrataron y revivieron pocos minutos.” Crías de hembras de cochinillas.

Upload: others

Post on 29-May-2020

2 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: Descubren crustÀceos de estero en Àmbar de Chiapas · AsÌ, en vez de haber llegado a la ColecciÒn Nacional de PaleontologÌa, bajo resguardo de la UNAM, o por lo menos a algÙn

EL UNIVERSAL Viernes 13 de marzo de 2 02 0 CULTURA A33

PROYECTO UNAMTexto: Fernando Guzmán Aguilar

alazul10 @hotmail.com

Sesión sobre Jorge Luis BorgesEl Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM invita, como partedel Seminario de Literatura y Filosofía Española del siglo XX, a la sesión“Borges: poesía y filosofía en Fervor de Buenos Aires”, que impartirá DavidHuerta, Premio FIL Guadalajara de Lenguas Romances 2019, el jueves 19de marzo, de 17:00 a 19:00 horas, en la Sala de Usos Múltiples del citadoinstituto, en CU.

E S P E

C I A L La UNAM, en el lugar

103 de las mejoresdel mundoDe acuerdo con el QS World Univer-sity Rankings 2020, la UNAM ocupael lugar 103 entre las mejores uni-versidades del mundo y es una delas dos mejores universidades deIberoamérica (la otra es la de BuenosAires). Asimismo, supera a todas lasuniversidades españolas y se ubicaen el top 50 en 12 áreas del conoci-miento. El QS World UniversityRankings se elabora con base en lareputación académica y de emplea-bilidad de las universidades, las ci-taciones científicas, el rango de losestudiantes en relación con la plan-tilla y de los estudiantes nacionalescon los internacionales.

CORT

ESÍA

UN

AM

Se crea la Coordinaciónde Igualdad de GéneroSe creó la Coordinación de Igualdad de Género de la UNAM, de-pendiente de la Rectoría. Su objetivo será implementar e instru-mentar las políticas institucionales sobre la materia. Tendrá ejesde acción transversal hacia las demás secretarías y coordinacionesde la institución, y su primera acción será convocar a foros porescuelas y facultades, y en los subsistemas de investigación, conmiras a un Congreso Universitario sobre Género. También cola-borará en la organización y difusión del foro Beijing+25, de ONUMujeres, que se realizará el 7 y 8 de mayo en el CCU Tlatelolco.

Descubren crustáceos deestero en ámbar de Chiapas

El ámbar de Simojovel deAllende, Chiapas, constituyeun patrimonio natural mexi-cano que no ha sido cuidadodebidamente, ya que valiosas

piezas de esta resina que contienen fauna fósilhan sido vendidas y sacadas del país.

Para Francisco Javier Vega —inve stigadordel Instituto de Geología de la UNAM que, con-juntamente con María de Lourdes SerranoSánchez, profesora de la Facultad de Cienciasde esta misma casa de estudios, ha descritoinnumerables ejemplares de fauna estuari-na— fue toda una sorpresa saber que a finalesde 2019 científicos chinos adquirieron una sin-gular pieza de ámbar que contenía camaronesfósile s.

Así, en vez de haber llegado a la ColecciónNacional de Paleontología, bajo resguardo dela UNAM, o por lo menos a algún museo deChiapas, esa pieza fue depositada en el Ins-tituto Smithsoniano de Washington, DC, Es-tados Unidos.

“500 años de pobreza y abandono han vuel-to recelosas a las comunidades de Simojovel,que dependen de la venta de esta gema semi-preciosa. El ámbar de este lugar es único en elmundo por el tipo de ambiente en que dicharesina se habría depositado hace 23 millonesde años: un manglar cercano a la antigua costaoriental de Chiapas”, apunta el investigadoruniver sitario.

De esta manera, la gente de Simojovel pre-fiere vender su ámbar a los chinos y no a suscompatriotas. Los chinos, por su lado, le com-pran el ámbar más traslúcido, que en ocasio-nes contiene fósiles. Afortunadamente, al ám-bar estratificado o “s u c i o”, que contiene faunaestuarina (microcrustáceos y otros grupos ma-rinos), no llama tanto su atención, aunque, co-mo ya se mencionó, han comenzado a com-prar y publicar piezas con organismos que nohabían sido reportados a nivel mundial.

Campo La GranjaEn la formación llamada Lutita Mazantic, ubi-cada en Simojovel, se extrae ámbar transpa-rente con hormigas, arañas, alacranes y otrosartrópodos terrestres, y a veces con hongos yrestos de plantas. Éste es el ámbar más común,el cual se usa en joyería.

Las piezas de ámbar con fauna estuarina ymarina sólo afloran en el pueblo de Campo LaGranja, ubicado muy cerca de Simojovel.

“Por fortuna, la extracción de este ámbar hadisminuido porque, al estar intercalado conarenisca acarreada por influencia de las ma-reas, es muy oscuro y duro, y contiene unagran cantidad de materia orgánica y sedimen-to, lo que lo hace poco atractivo para la joyería”,indica Vega.

En Campo La Granja, Vega y Serrano Sán-chez rescataron piezas de ámbar con diversoscrustáceos: cochinillas (isópodos acuáticos yterrestres), copépodos (hoy en día representanla mayor biomasa en el mar), minúsculos can-grejos estuarinos, tanaidáceos y ostrácodos.

“Todas ya fueron referidas en revistas inter-nacionales de alto prestigio y depositadas enel Museo Eliseo Palacios Aguilera de la Secre-taría del Medio Ambiente e Historia Naturaldel Estado de Chiapas, en Tuxtla Gutiérrez.”

Plantas prehistóricasVarios científicos coinciden en que el ámbarchiapaneco es una resina producida por unaleguminosa llamada localmente guapinol queaún crece en la región selvática de Chiapas,aunque es probable que las especies originalesdel género ya estén extintas, como Hym e n a e amexicana e Hymenaea allendis, estudiadas yreportadas por Sergio Ceballos, también inves-tigador del Instituto de Geología de laU NA M .

Actualmente, la especie más común enChiapas es Hymenaea courbaril, si bien otras13 especies todavía se hallan en otros puntosde América.

“Éstas también eran famosas entre las cul-turas prehispánicas por producir copal, el cualse convierte en ámbar después de permanecermillones de años sepultado y ser expuesto porero sión”, añade el investigador.

Fauna fósil exclusivaComo parte de su investigación doctoral, Se-rrano Sánchez estableció una metodología pa-ra el estudio de yacimientos ambaríferos, queposteriormente fue copiada por paleontólogosfranceses sin que le dieran ningún crédito.

Con base en sus estudios, ahora se sabe que,hace 23 millones de años, el estero chiapanecodonde se producía la resina poco densa erauna planicie costera, con un ambiente pare-cido al de un manglar.

“Campo La Granja era un lugar semejante aun estero o un manglar, con una gran diver-sidad faunística y florística. Al parecer, el ám-bar de la Lutita Mazantic fue depositado cien-tos de miles de años después en una zona másalta y continental, donde los artrópodos y otrosorganismos terrestres son más comunes. En elámbar de Campo La Granja también se handescubierto ocasionalmente algunos organis-mos terrestres y hasta de agua dulce (larvas de

insectos e insectos acuáticos), pero en menorcantidad”, señala Vega.

Hay muchos países ricos en ámbar, pero nose tienen reportes científicos de la diversidady abundancia de los crustáceos de Campo LaGranja, excepto de tres ostrácodos hallados enel ámbar del Báltico, que es un poco más an-tiguo (del Eoceno, 44 millones de años).

“En Campo La Granja se han encontradomiles de ejemplares de ostrácodos de diferen-tes especies y en diferentes etapas, tanto devida como de descomposición. Algunos aúnestaban vivos cuando la resina comenzó a so-lidificarse. Estos hallazgos son importantesporque se trata de fauna exclusiva y diversa, enpromedio de 200 micras de longitud. Hoy co-mo en el pasado, Chiapas es un centro de bio-diver sidad”, subraya el investigador de la Uni-versidad Nacional.

H i p ó tes i sEl siguiente objetivo de Vega y Serrano Sán-chez es describir las nuevas especies halladasen piezas de ámbar de Simojovel, en particularlas de Campo La Granja, y tratar de explicarcómo llegaron ahí.

Ambos paleontólogos postulan que, hace 23millones de años, dicha resina habría sido ex-cretada por la vegetación como una respuestaante el estrés ambiental surgido por la intensaactividad volcánica que había en aquel enton-ces al este y oeste de la región que ahora esChiapas.

“Comprobar esa hipótesis no es tarea fácil,con todo y que contamos con piezas de ámbarque contienen carbón y ámbar quemado, tan-to dentro como en parte de sus sedimentos.También trataremos de entender la proceden-cia de los sedimentos y obtener una edad másprecisa mediante el estudio detallado de cier-tos granos de arena conocidos como zircones”,dice Vega.

El ámbar de Chiapas es uno de los más es-tables e hialinos del mundo, pero de todos mo-dos requiere una labor de preservación. Porejemplo, las piezas recolectadas y descrita enla década de los 50 del siglo XX por paleon-tólogos de Estados Unidos, y depositadas en lacolección de la Universidad de Berkeley en Ca-lifornia, ya se están deshaciendo como con-secuencia de los efectos de la oxidación. Nohay que olvidar que el ámbar es materia or-gánica que se había mantenido sepultada pormillones de años. b

FOTO

S: C

OTE

SÍA

FRAN

CISC

O J

AVIE

R VE

GA

“En Campo La Granja se hanencontrado miles de ejemplaresde ostrácodos de diferentesespecies y en diferentes etapas,tanto de vida como dedescomposición. Algunos aúnestaban vivos cuando la resinacomenzó a solidificarse”FRANCISCO JAVIER VEGAInvestigador del Instituto de Geología de la UNAM

Hace 23 millones de años, esta resina habría sido excretadapor la vegetación como una respuesta ante el estrés ambiental

Pieza de ámbarcon fauna fosil.

ADN e ingenieríage n é t ica

¿Es posible encontrar ácido deso-xirribonucleico (ADN) prehistórico yhacer ingeniería genética para re-cuperar una especie extinta?A este pregunta, Vega responde losiguiente: “Yo le apostaría sólo a unADN congelado, como los de unmamut y un lobo descubiertos re-cientemente en Siberia, pero contan sólo unas cuantas decenas demiles de años de antigüedad. Re-cuperar ADN de especies preser-vadas en ámbar es una fantasía quea todos nos gustaría ver hecha rea-lidad, pero el ADN es una moléculamuy delicada y frágil, y aunque hayfenómenos evolutivos que permitenla supervivencia en estado latente(criptobiosis) de algunos grupos pordecenas de años, la ‘v i g e n c i a’ delADN tiene un límite. Por ejemplo, enun herbario de Londres se resguar-daba un musgo colectado hace 110años de edad que mostraba al mi-croscopio unos elementos muy ra-ros, como cristalinos. Éstos fueronseparados y depositados en aguadulce para su hidratación. Se tra-taba de ‘momias’ de rotíferos, or-ganismos microscópicos acuáticos ysemiacuáticos que se rehidrataron yrevivieron pocos minutos.”

Crías de hembras de cochinillas.