Historia de un detective

1 Historia de un detective

2 Cinemont, un festival decortos a lo grande

3 La noche americana

4 Pan negro: unapelícula amasada conauténtica miga de la

posguerra civil

Tal y como expresa el titular del presente artículo, estaslíneas van dedicadas a comentar una historia compleja,dura, curiosa y contundente, un laberinto, con ciertos ecosal del Fauno, lleno de circunstancias intrigantes ysobrecogedoras desarrolladas en un áspero marco: el dela posguerra civil española. Es también una historia desupervivientes, de gente que supo luchar a pesar de loshorrores y que se sacrificó por el pan de sus hijos, aunquefuera negro, todo un símbolo de la precariedad socialexistente.

Una frase impresa en el cartelpromocional de la película PanNegro dice que «las mentiras delos adultos crían pequeñosmonstruos», unas significativas yacertadas palabras que definencon claridad el guión desarrolladopor su director: el mallorquín AgustíVillaronga. Efectivamente, lapelícula ¯inspirada en el l ibrohomónimo del escritor catalán EmiliTeixidor¯ se ambienta en elcorazón de la Cataluña ruraldurante los años 1940, unterritorio poblado por vencedoresy especialmente por vencidos,pero cuyo significado final trata decómo despierta la conciencia moralen el interior de un alma cándida y

Pan negro: una película amasada con auténtica miga de la posguerra civil

BRIGADA 21 es una publicación cuyo objetivo es la divulgación de la cultura audiovisual, que no hace necesariamente suyas las opiniones de sus colaboradores

60

BRIGADA 21Edit a: Asociación Cultural Audiovisual y Cine-Forum FORAJIDOSColabora: Excmo. Ayutamiento de Montilla.Área para la Igualdad y el Desarrollo Social y Cultural

Tirada: 300 Ejemplares. (Bimestral)Imprime: Imprenta San Francisco Solano SLDEPÓSITO LEGAL CO-1629-2006ISSN 1888 - 329X NÚMERO 24

Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011

www.fora

jidos.es

Es curioso que en tantos números

aparecidos de nuestra pequeña

revista hayamos hecho pocas

referencias a la película que nos

da cabecera. «Brigada 21» es

una excepcional cinta realizada

por William Wyler, autor de tantas

obras maestras como pueden ser

«Los mejores años de nuestra

vida», «Ben Hur», «La calumnia»,

«Vacaciones en Roma», «La

heredera», ect.

La realidad es que esta película

cuyo guión escribió Philip Yordan

se basa en una obra de Sidney

Kingsley para el teatro llamada

«Historia de un detective». En

ella, la acción se lleva a cabo en

una comisaría americana. Kirk

Douglas, interprete principal, es el

detective amargado, casado con

la fenomenal actriz Eleanor

Parker (véanla entre otras

películas en «La novia salvaje»,

«Sin remisión» o «Pasaporte a la

fama»), que persigue a un

médico abortista y que, al final, se

entera de que su propia mujer fue

a ponerse en manos de ese

médico para que le practicara un

aborto.

La trama de Wyler es opresiva e

inquietante, no exenta de una

parte de dulzura en la que

Douglas parece dispuesto a

olvidar el pasado de su mujer,

pero ese pasado vuelve una y otra

vez hasta que, en la propia

comisaría, uno de los

delincuentes arrebata la pistola a

un policía y asesina al

protagonista principal, que tiene

tiempo de dirigirle a esposa unas

palabras de arrepentimiento.

Decían los críticos «entendidos»

que Wyllian Wyler era lento en sus

películas. Nosotros, como no

somos tan entendidos,

opinamos lo contrario. No

tenemos más que visionar

algunas de ellas para observar

esa mano magistral que se deja

caer en cada uno de sus filmes

hasta el punto de no dejarnos

despegar los ojos de la pantalla.

¿O es que tenemos que recordar

la carrera de cuadrigas de «Ben

Hur»?

Pues como sólo queríamos hablar

de nuestra cabecera, en eso

estamos. Por cierto, y a modo de

anécdota, ¿saben que nuestra

asociación fue creada por veintiún

componentes? Así fue. Y algo

más, esta obra fue llevada al

teatro televisivo en Estudio 1,

interpretada extraordinariamente

por Fernando Guillén.

José Pérez Merino

de cómo esta viene dada por el terrible descubrimiento de un mundo adulto alimentado porlas mentiras; para sobrevivir, traicionará sus propias raíces y acabará descubriendo almonstruo que habita en él.Pero precisamente lo bueno de Pan Negro es eso mismo, que se trata de una películainquietante y anómala sobre la posguerra civil; no es una más. Lo que la distingue de susantecesoras del mismo subgénero es que no divide a la sociedad en buenos y malos, niofrece acontecimientos políticos de la época. Sus personajes, ambiguos y moralmentedudosos: héroes/villanos, valientes/cobardes, etc., van más allá del simplismo ideológico,pues buscan sobrevivir entre una sociedad rota y llena de actos condenables, fruto delos acontecimientos originados durante la guerra civil.La intensa e impactante secuencia de arranque, donde un hombre y su hijo son brutalmenteasesinados en medio del bosque, presenta claros tintes de cuento gótico, lo cual haceque los espectadores puedan mostrar cierto desconcierto. A partir de aquí Andreu (FrancescColomer), el niño protagonista, irá viendo cómo su propio padre, un hombre dispuesto amorir por sus ideales republicanos, es acusado como presunto autor del crimen por unalcalde cacique, teniendo que ocultarse por ello. Su madre (Nora Navas), ahora sola ytrabajando todo el día en una fábrica textil, no puede cuidarlo, así que Andreu se veráobligado a irse con su abuela, sus tías y sus primos. Entre estos últimos destacará surelación con Nuria (Marina Comas), una niña devastada por todo lo que le ha tocado vivir.También hace amistad con un adolescente tuberculoso que se halla internado en unconvento, esperando la cercanía de la muerte. Por otro lado, las leves escenas de sexoque contiene la película se convertirán en todo un descubrimiento para los menores o enun arma de opresión para los adultos.En último lugar, decir que la película Pan Negro pasó sin pena ni gloria por las salas decine; posteriormente ha sido galardonada con los nueve mejores galardones en los XXVPremios Goya: película, dirección, actriz protagonista y de reparto, actor y actriz revelación,guión adaptado, dirección de fotografía y dirección artística.

Alberto Moreno V ega

Cinemont, un festival de cortos a lo grandeSURGE DESPUÉS DEL ÉXITO DE LA PRIMERA MUESTRA DE CORTOMETRAJES

Por iniciativa de la Asociación Cultural Central, la Primera Muestra de Cortometrajes, hecha conpuras intenciones divulgativas, ha abierto ahora el camino a un proyecto mucho más ambicioso: unconcurso nacional de cortometrajes en Montilla. Se une así nuestra ciudad al amplio circuito delocalidades andaluzas que disfrutan de festivales y certámenes cinematográficos de toda índole. Antes o temprano tenía que ocurrir esto en un lugar, este paraíso peliculero nuestro, que tiene másque probada su enraizado apego a la gran pantalla, y es tan dado a fantasear con las estrellas delceluloide (por cierto que habrá que ir pensando en renovar el surtido de apelativos relacionados conel noble arte de la proyección, ya que, como quizás sepáis, las bobinas con los mágicos fotogramastienen sus horas contadas en ese imparable proceso de renovación tecnológica que ya se está encargando de mandar al asilo, al trastero rollos, carretes ybobinas).A los hechos me remito. Montilla cuenta desde 1999 con la Asociación Cultural Audiovisual Cine Forum «Forajidos», esos fuera de la ley capaz de retarse a duelosi ven en peligro su contrastada condición no ya de cinéfilos, sino de cinéfagos, que necesitan, como el comer, el contacto carnal (si es pecaminoso, mejor) conlas imágenes en movimiento. Inasequibles al desaliento, mantienen una publicación y, cuando es oportuno, son muy dados a montar ciclos para difundir lasmayores obras maestras del cine clásico y también contemporáneo. Incluso organizaron un homenaje anual al cine andaluz, con premios a Juan Luis Galiardo,Juan Diego, Antonio Meliveo, Antonio Pérez, Fernando Tejero y María Barranco. Un ciclo de reconocimientos a nuestros más destacados artistas que cualquier díade estos resucita y vuelve con renovados bríos.Pero hay más. Un paisano nuestro, Francisco Fernández Córdoba, «Paquitín, fue extra extraordinario en algunas de las superproducciones de Samuel Bronstonen España. Estuvo con Cary Grant, Frank Sinatra y Sofía Loren en «Orgullo y Pasión», con Tyrone Power en «Salomón y la Reina de Saba» y salía de airosoespadachin en «Dónde vas Alfonso XII». También se le recuerda por su intervención en «Guerreras Verdes», en la que además aparecía otro paisano, Blas Palma,

caracterizado como guardia civil montado a caballo.Como extra profesional, precaria condición laboral para lo que se requería carnet del Sindicato de Espectáculos,«Paquitín» rodó casi una veintena de películas, entre ellas «Los clarines del miedo» y «Pan, amor y Andalucía». En sutarjeta de visita decía: Francisco Solano Fernández Córdoba, «Paquitín». Ex torero, ex cineasta. Agente comercial,según recuerda Gonzalo Rubio con quien trabó una gran amistad durante el largo rodaje en Córdoba de la película«Guerreras Verdes».Otro dato: la actriz Lucina Gil, que pasó toda su niñez en Montilla, ganó un Goya al mejor cortometraje documental porsu cinta «El hombre feliz». Muy cerca de ganarlo ha estado otro montillano, el dramaturgo Juan Carlos Rubio, por suguión en «Hansala», junto a Chus Gutierrez. Pero como no son horas de erudicción, ni de cansarles con másnombres, paso sin detenerme ni dar detalles en las veces que este viejo solar ha servido de escenario de largometrajes,y teleseries para televisión.A todo esto, como más arriba se decía, se ha unido durante la pasada navidad, exactamente la noche del 30 dediciembre, una muestra en la que se proyectaron 17 cortometrajes en la renacida pantalla del Teatro Garnelo. Unaselección de las propuestas presentadas en el «Nutria», el concurso de jóvenes valores que organiza cada año entresus alumnos la Escuela de Artes y oficios Mateo Inurria, de Córdoba.

Lo que esa noche nos brindó la oportunidad de acercarnos al trabajo comocineastas principiantes de tres directores de nuestra tierra: Luito López Cid,Javier Portero Vela y Joaquín Arjona y Victor García. El primero de ellos firma«Recuerdos», una melancólica narración sobre el paso del tiempo y la memoriahecha con buen pulso narrativo y una notable calidad fotográfica. De la excelenteutilización de la cámara por parte de Luito tuvimos otro llamativo complementoesa misma noche. Porque suya, precisamente, es la colección de 7 fotografíasdedicadas al desnudo femenino que se dispuso en el vestíbulo del teatro amodo de bienvenida al público. Una galería de retratos de mujeres que, bajo eltitulo de «Insinuación» ofrecía una muestra de desnudos artísticos «que nosacerca a la sensualidad del cuerpo femenino, buscando sus sutiles recorridosa través de diferentes técnicas fotográficas que expresan la importancia de laforma y la textura, utilizando para ello un lenguaje sencillo y carente de artificio».De Javier Portero Vela es «Buscando nuevas sensaciones», un recorrido porMontilla, frente a la que el autor muestra impulsos contradictorios, revelandosu deseo, más allá de la estrechez de su pueblo, de descubrir nuevos espaciosvitales.El trío de autores locales se completó con Joaquín Arjona y Víctor García. «TheTrip», el viaje, es el título de su corto, una experiencia sensorial de quien busca la evasión química con estéticade videoclip. Tres propuestas diferentes que, unidos al resto de los trabajos elegidos, reflejan una gran variedadde criterios y que sobre todo, dejan entrever que en algunos de ellos ya se percibe descollante el talento paradesenvolverse con éxito en este oficio. Quién sabe, quizá en estos balbucientes cortos está la semilla defuturos grandes nombres de nuestro cine.Es fácil apreciar en este plural conjunto de obras que la generación a la que todos estos jóvenes pertenecenes la más contaminada de imágenes. Un brote de autores acunados por una sociedad tremendamenteaudiovisual y acostumbrada a tener a mano lo necesario para darnos su propia visión de la realidad. Se hadicho, y sin duda es así, que los avances tecnológicos han democratizado el acceso a la realización depelículas, algo que hasta hace bien poco estaba reservado a muy pocos. Falta por saber si, efectivamente alhacerse este mundo más asequible, estamos a las puertas de una eclosión de nuevos y brillantes cineastas.Fue una satisfactoria experiencia que ha llevado a dar el siguiente paso: la convocatoria del Primer Festivalde Cine y Fotografía Ciudad de Montilla, «Cinemont», un modesto certamen de alcance nacional con premiosen metálico, orientado, según Francisco Javier Herrador, presidente de la Asociacion Cultural Central, aconvertirse en el principal concurso de cortometrajes en la provincia de Córdoba. Las bases, fechas y cuantíade los premios pueden consultarse en la web: www.cortometrajesmontilla.blogspot.com. En ella se indica quela convocatoria está dirigida «a los amantes del arte cinematográfico, ya sean profesionales del sector oaficionados al mismo».

Manuel Bellido Mora

La noche americanaFrançois Truffaut (1932-1984) fue uno de losgrandes maestros del cine francés, un director deculto, prolífico e innovador de cuyas películas guardoun recuerdo de juventud imborrable.De joven era bastante golfillo, espectador de cineen horas de rabona y lector voraz y apasionado.Como cineasta, Truffaut destacó por su oposición atodo academicismo, por su espléndido trabajo conla cámara, por sus magníficos guiones originales yadaptaciones de obras literarias y porque, como aHitchcock, le gustaba aparecer como actor enalgunas de sus películas. Incluso apareció en escenaen «Encuentros En La Tercera Fase», de Spielberg,quien le tenía gran admiración.Sus largometrajes resultaban impactantes, desde«Los Cuatrocientos Golpes» hasta «El Último Metro»,pasando por «El Pequeño Salvaje», «Fahrenheit451» y «La Noche Americana», por la que recibió elÓscar a la mejor película en habla no inglesa en1973.Como curiosidades, el salvaje era un niño que existió

de verdad en el Aveyrony que se crió en unbosque entre las brumasdel oscuro Languedocfrancés; «Fahrenheit451» es la temperaturaen grados Fahrenheit a laque arden los libros; y «LaNoche Americana» es unatécnica cinematográficaque consiste en aplicar unfiltro a la cámara parapoder grabar durante eldía y que parezca que esde noche.

Carlos García Navarro

Cinemont, un festival de cortos a lo grandeSURGE DESPUÉS DEL ÉXITO DE LA PRIMERA MUESTRA DE CORTOMETRAJES

Por iniciativa de la Asociación Cultural Central, la Primera Muestra de Cortometrajes, hecha conpuras intenciones divulgativas, ha abierto ahora el camino a un proyecto mucho más ambicioso: unconcurso nacional de cortometrajes en Montilla. Se une así nuestra ciudad al amplio circuito delocalidades andaluzas que disfrutan de festivales y certámenes cinematográficos de toda índole. Antes o temprano tenía que ocurrir esto en un lugar, este paraíso peliculero nuestro, que tiene másque probada su enraizado apego a la gran pantalla, y es tan dado a fantasear con las estrellas delceluloide (por cierto que habrá que ir pensando en renovar el surtido de apelativos relacionados conel noble arte de la proyección, ya que, como quizás sepáis, las bobinas con los mágicos fotogramastienen sus horas contadas en ese imparable proceso de renovación tecnológica que ya se está encargando de mandar al asilo, al trastero rollos, carretes ybobinas).A los hechos me remito. Montilla cuenta desde 1999 con la Asociación Cultural Audiovisual Cine Forum «Forajidos», esos fuera de la ley capaz de retarse a duelosi ven en peligro su contrastada condición no ya de cinéfilos, sino de cinéfagos, que necesitan, como el comer, el contacto carnal (si es pecaminoso, mejor) conlas imágenes en movimiento. Inasequibles al desaliento, mantienen una publicación y, cuando es oportuno, son muy dados a montar ciclos para difundir lasmayores obras maestras del cine clásico y también contemporáneo. Incluso organizaron un homenaje anual al cine andaluz, con premios a Juan Luis Galiardo,Juan Diego, Antonio Meliveo, Antonio Pérez, Fernando Tejero y María Barranco. Un ciclo de reconocimientos a nuestros más destacados artistas que cualquier díade estos resucita y vuelve con renovados bríos.Pero hay más. Un paisano nuestro, Francisco Fernández Córdoba, «Paquitín, fue extra extraordinario en algunas de las superproducciones de Samuel Bronstonen España. Estuvo con Cary Grant, Frank Sinatra y Sofía Loren en «Orgullo y Pasión», con Tyrone Power en «Salomón y la Reina de Saba» y salía de airosoespadachin en «Dónde vas Alfonso XII». También se le recuerda por su intervención en «Guerreras Verdes», en la que además aparecía otro paisano, Blas Palma,

caracterizado como guardia civil montado a caballo.Como extra profesional, precaria condición laboral para lo que se requería carnet del Sindicato de Espectáculos,«Paquitín» rodó casi una veintena de películas, entre ellas «Los clarines del miedo» y «Pan, amor y Andalucía». En sutarjeta de visita decía: Francisco Solano Fernández Córdoba, «Paquitín». Ex torero, ex cineasta. Agente comercial,según recuerda Gonzalo Rubio con quien trabó una gran amistad durante el largo rodaje en Córdoba de la película«Guerreras Verdes».Otro dato: la actriz Lucina Gil, que pasó toda su niñez en Montilla, ganó un Goya al mejor cortometraje documental porsu cinta «El hombre feliz». Muy cerca de ganarlo ha estado otro montillano, el dramaturgo Juan Carlos Rubio, por suguión en «Hansala», junto a Chus Gutierrez. Pero como no son horas de erudicción, ni de cansarles con másnombres, paso sin detenerme ni dar detalles en las veces que este viejo solar ha servido de escenario de largometrajes,y teleseries para televisión.A todo esto, como más arriba se decía, se ha unido durante la pasada navidad, exactamente la noche del 30 dediciembre, una muestra en la que se proyectaron 17 cortometrajes en la renacida pantalla del Teatro Garnelo. Unaselección de las propuestas presentadas en el «Nutria», el concurso de jóvenes valores que organiza cada año entresus alumnos la Escuela de Artes y oficios Mateo Inurria, de Córdoba.

Lo que esa noche nos brindó la oportunidad de acercarnos al trabajo comocineastas principiantes de tres directores de nuestra tierra: Luito López Cid,Javier Portero Vela y Joaquín Arjona y Victor García. El primero de ellos firma«Recuerdos», una melancólica narración sobre el paso del tiempo y la memoriahecha con buen pulso narrativo y una notable calidad fotográfica. De la excelenteutilización de la cámara por parte de Luito tuvimos otro llamativo complementoesa misma noche. Porque suya, precisamente, es la colección de 7 fotografíasdedicadas al desnudo femenino que se dispuso en el vestíbulo del teatro amodo de bienvenida al público. Una galería de retratos de mujeres que, bajo eltitulo de «Insinuación» ofrecía una muestra de desnudos artísticos «que nosacerca a la sensualidad del cuerpo femenino, buscando sus sutiles recorridosa través de diferentes técnicas fotográficas que expresan la importancia de laforma y la textura, utilizando para ello un lenguaje sencillo y carente de artificio».De Javier Portero Vela es «Buscando nuevas sensaciones», un recorrido porMontilla, frente a la que el autor muestra impulsos contradictorios, revelandosu deseo, más allá de la estrechez de su pueblo, de descubrir nuevos espaciosvitales.El trío de autores locales se completó con Joaquín Arjona y Víctor García. «TheTrip», el viaje, es el título de su corto, una experiencia sensorial de quien busca la evasión química con estéticade videoclip. Tres propuestas diferentes que, unidos al resto de los trabajos elegidos, reflejan una gran variedadde criterios y que sobre todo, dejan entrever que en algunos de ellos ya se percibe descollante el talento paradesenvolverse con éxito en este oficio. Quién sabe, quizá en estos balbucientes cortos está la semilla defuturos grandes nombres de nuestro cine.Es fácil apreciar en este plural conjunto de obras que la generación a la que todos estos jóvenes pertenecenes la más contaminada de imágenes. Un brote de autores acunados por una sociedad tremendamenteaudiovisual y acostumbrada a tener a mano lo necesario para darnos su propia visión de la realidad. Se hadicho, y sin duda es así, que los avances tecnológicos han democratizado el acceso a la realización depelículas, algo que hasta hace bien poco estaba reservado a muy pocos. Falta por saber si, efectivamente alhacerse este mundo más asequible, estamos a las puertas de una eclosión de nuevos y brillantes cineastas.Fue una satisfactoria experiencia que ha llevado a dar el siguiente paso: la convocatoria del Primer Festivalde Cine y Fotografía Ciudad de Montilla, «Cinemont», un modesto certamen de alcance nacional con premiosen metálico, orientado, según Francisco Javier Herrador, presidente de la Asociacion Cultural Central, aconvertirse en el principal concurso de cortometrajes en la provincia de Córdoba. Las bases, fechas y cuantíade los premios pueden consultarse en la web: www.cortometrajesmontilla.blogspot.com. En ella se indica quela convocatoria está dirigida «a los amantes del arte cinematográfico, ya sean profesionales del sector oaficionados al mismo».

Manuel Bellido Mora

La noche americanaFrançois Truffaut (1932-1984) fue uno de losgrandes maestros del cine francés, un director deculto, prolífico e innovador de cuyas películas guardoun recuerdo de juventud imborrable.De joven era bastante golfillo, espectador de cineen horas de rabona y lector voraz y apasionado.Como cineasta, Truffaut destacó por su oposición atodo academicismo, por su espléndido trabajo conla cámara, por sus magníficos guiones originales yadaptaciones de obras literarias y porque, como aHitchcock, le gustaba aparecer como actor enalgunas de sus películas. Incluso apareció en escenaen «Encuentros En La Tercera Fase», de Spielberg,quien le tenía gran admiración.Sus largometrajes resultaban impactantes, desde«Los Cuatrocientos Golpes» hasta «El Último Metro»,pasando por «El Pequeño Salvaje», «Fahrenheit451» y «La Noche Americana», por la que recibió elÓscar a la mejor película en habla no inglesa en1973.Como curiosidades, el salvaje era un niño que existió

de verdad en el Aveyrony que se crió en unbosque entre las brumasdel oscuro Languedocfrancés; «Fahrenheit451» es la temperaturaen grados Fahrenheit a laque arden los libros; y «LaNoche Americana» es unatécnica cinematográficaque consiste en aplicar unfiltro a la cámara parapoder grabar durante eldía y que parezca que esde noche.

Carlos García Navarro

Historia de un detective

1 Historia de un detective

2 Cinemont, un festival decortos a lo grande

3 La noche americana

4 Pan negro: unapelícula amasada conauténtica miga de la

posguerra civil

Tal y como expresa el titular del presente artículo, estaslíneas van dedicadas a comentar una historia compleja,dura, curiosa y contundente, un laberinto, con ciertos ecosal del Fauno, lleno de circunstancias intrigantes ysobrecogedoras desarrolladas en un áspero marco: el dela posguerra civil española. Es también una historia desupervivientes, de gente que supo luchar a pesar de loshorrores y que se sacrificó por el pan de sus hijos, aunquefuera negro, todo un símbolo de la precariedad socialexistente.

Una frase impresa en el cartelpromocional de la película PanNegro dice que «las mentiras delos adultos crían pequeñosmonstruos», unas significativas yacertadas palabras que definencon claridad el guión desarrolladopor su director: el mallorquín AgustíVillaronga. Efectivamente, lapelícula ¯inspirada en el l ibrohomónimo del escritor catalán EmiliTeixidor¯ se ambienta en elcorazón de la Cataluña ruraldurante los años 1940, unterritorio poblado por vencedoresy especialmente por vencidos,pero cuyo significado final trata decómo despierta la conciencia moralen el interior de un alma cándida y

Pan negro: una película amasada con auténtica miga de la posguerra civil

BRIGADA 21 es una publicación cuyo objetivo es la divulgación de la cultura audiovisual, que no hace necesariamente suyas las opiniones de sus colaboradores

60

BRIGADA 21Edit a: Asociación Cultural Audiovisual y Cine-Forum FORAJIDOSColabora: Excmo. Ayutamiento de Montilla.Área para la Igualdad y el Desarrollo Social y Cultural

Tirada: 300 Ejemplares. (Bimestral)Imprime: Imprenta San Francisco Solano SLDEPÓSITO LEGAL CO-1629-2006ISSN 1888 - 329X NÚMERO 24

Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011Marzo-Abril 2011

www.fora

jidos.es

Es curioso que en tantos números

aparecidos de nuestra pequeña

revista hayamos hecho pocas

referencias a la película que nos

da cabecera. «Brigada 21» es

una excepcional cinta realizada

por William Wyler, autor de tantas

obras maestras como pueden ser

«Los mejores años de nuestra

vida», «Ben Hur», «La calumnia»,

«Vacaciones en Roma», «La

heredera», ect.

La realidad es que esta película

cuyo guión escribió Philip Yordan

se basa en una obra de Sidney

Kingsley para el teatro llamada

«Historia de un detective». En

ella, la acción se lleva a cabo en

una comisaría americana. Kirk

Douglas, interprete principal, es el

detective amargado, casado con

la fenomenal actriz Eleanor

Parker (véanla entre otras

películas en «La novia salvaje»,

«Sin remisión» o «Pasaporte a la

fama»), que persigue a un

médico abortista y que, al final, se

entera de que su propia mujer fue

a ponerse en manos de ese

médico para que le practicara un

aborto.

La trama de Wyler es opresiva e

inquietante, no exenta de una

parte de dulzura en la que

Douglas parece dispuesto a

olvidar el pasado de su mujer,

pero ese pasado vuelve una y otra

vez hasta que, en la propia

comisaría, uno de los

delincuentes arrebata la pistola a

un policía y asesina al

protagonista principal, que tiene

tiempo de dirigirle a esposa unas

palabras de arrepentimiento.

Decían los críticos «entendidos»

que Wyllian Wyler era lento en sus

películas. Nosotros, como no

somos tan entendidos,

opinamos lo contrario. No

tenemos más que visionar

algunas de ellas para observar

esa mano magistral que se deja

caer en cada uno de sus filmes

hasta el punto de no dejarnos

despegar los ojos de la pantalla.

¿O es que tenemos que recordar

la carrera de cuadrigas de «Ben

Hur»?

Pues como sólo queríamos hablar

de nuestra cabecera, en eso

estamos. Por cierto, y a modo de

anécdota, ¿saben que nuestra

asociación fue creada por veintiún

componentes? Así fue. Y algo

más, esta obra fue llevada al

teatro televisivo en Estudio 1,

interpretada extraordinariamente

por Fernando Guillén.

José Pérez Merino

de cómo esta viene dada por el terrible descubrimiento de un mundo adulto alimentado porlas mentiras; para sobrevivir, traicionará sus propias raíces y acabará descubriendo almonstruo que habita en él.Pero precisamente lo bueno de Pan Negro es eso mismo, que se trata de una películainquietante y anómala sobre la posguerra civil; no es una más. Lo que la distingue de susantecesoras del mismo subgénero es que no divide a la sociedad en buenos y malos, niofrece acontecimientos políticos de la época. Sus personajes, ambiguos y moralmentedudosos: héroes/villanos, valientes/cobardes, etc., van más allá del simplismo ideológico,pues buscan sobrevivir entre una sociedad rota y llena de actos condenables, fruto delos acontecimientos originados durante la guerra civil.La intensa e impactante secuencia de arranque, donde un hombre y su hijo son brutalmenteasesinados en medio del bosque, presenta claros tintes de cuento gótico, lo cual haceque los espectadores puedan mostrar cierto desconcierto. A partir de aquí Andreu (FrancescColomer), el niño protagonista, irá viendo cómo su propio padre, un hombre dispuesto amorir por sus ideales republicanos, es acusado como presunto autor del crimen por unalcalde cacique, teniendo que ocultarse por ello. Su madre (Nora Navas), ahora sola ytrabajando todo el día en una fábrica textil, no puede cuidarlo, así que Andreu se veráobligado a irse con su abuela, sus tías y sus primos. Entre estos últimos destacará surelación con Nuria (Marina Comas), una niña devastada por todo lo que le ha tocado vivir.También hace amistad con un adolescente tuberculoso que se halla internado en unconvento, esperando la cercanía de la muerte. Por otro lado, las leves escenas de sexoque contiene la película se convertirán en todo un descubrimiento para los menores o enun arma de opresión para los adultos.En último lugar, decir que la película Pan Negro pasó sin pena ni gloria por las salas decine; posteriormente ha sido galardonada con los nueve mejores galardones en los XXVPremios Goya: película, dirección, actriz protagonista y de reparto, actor y actriz revelación,guión adaptado, dirección de fotografía y dirección artística.

Alberto Moreno V ega