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Agradecimientos:

A mi familia, por el apoyo y mecenazgo incondicional de tantos caprichos; a Sebastián, quien por fortuna encontró la Piedra Rose�a para traducir mis jeroglíficos sónicos; a Francisco, quien tras su lente ha captado momentos maravillosos de este viaje y me ha visto crecer más allá de los acordes y las melodías; a Felipe, cuyo arte y estilo le dieron identidad visual al presente disco y a Ricardo, cuyo diseño sonoro le dio a las canciones una personalidad insospechada y felizmente inaudita. A Luis Rivera y Carlos Céspedes, quienes han creído en mí desde que dibujé los primeros acordes y con paciencia bendita oyeron las mil y una versiones del álbum; a Rodrigo Rivera y su hermosa familia, quienes acogieron y dieron soporte técnico a este y tantos otros proyectos; a Lin, tester primario de muchas canciones y dueña de la que t a l v e z s e a l a m e j o r d e t o d a s ; finalmente, a Lagarto, Molino y Rio, mi pasado, presente y futuro en el universo paralelo del rock nacional.

Prólogo

Al oeste del paraíso,en el teatro de arena

un alacrán perturba el sueño de los lagartos.

Sigan.Si la sed los agobia,

sepan que siempre fluye un río

al final del viaje.No crean en los oasis

ni en los manantiales que ostentan.

Lejos de la herida, la sal seduce también

cristalina.Sigan la ruta

y hacia atrás nunca miren:solo hallarán esqueletos

en la ciudad de los recuerdos

Duelo desértico

En el pedregalLa sangre entibia

En éxtasis al mirar al sol Errante volvió

Su templo nómada Emprende un lagarto

Su vuelo fugaz

Se oye un disparo en la tormentaLa emboscada fue a traición

De plomo es la herida que atormentaA duelo el corazón

Lanza estelar, constelación de un diosEn tierra, la danza de un escorpión

Bajo la arena acecha eternoAciago en su duna espera un rey El duelo es un rito en el desierto

Y el veneno es su ley

Amarga Musa

Un verde sideralTu risa

Es santidad que espera perversiónDesgarrar tus hábitos, mi ritual

Un cáliz macabro fue (al oír su voz)Su beso de furia (en su boca el abismo fui)

Entre sus brazos me vuelvo irrealMe amarro a los cielos y lo vuelvo

infernal

He visto gardeniasFlotando a ultramar

Y desaparecerEs el absenta en mí

Elixir salvajeSu desnudez

Tu saliva se vuelve anísVerde alacrán en mí

Ayer naufragué en tu pielHasta ahogarme en tu sed

Es tu risa

Sigo despierto en la nieblaEterno azul

Color de fuegoDanzando bajo la lluviaSigo tu sombra a lo lejos

Es tu risa, es tu risaLa furia que nos cegó

Dulce tinieblaUna estrella calcinó

Y en el jardínUna esfinge se volvió

Nada terminaAntes de resucitar

SaturaciónEl eco de tu voz se fue

Susurra el finalYa que nada es real

DéjameQuítameDéjame

Despierto y en silencio

Germen

AmebasA una micra de ti

InciertasSu hábito es transitarUn charco a tus pies

Constelación abismal

Danzan en silencio hasta multiplicarCambian de forma hasta no volver

Sonidos En estado germinal

Efecto y placerde un acorde fugaz

Tendido en el centro de este huracánNo me resisto a su eléctrico placer

InvadenCada parte de mi ser

Es toxinaDel otro lado de la piel

Y es la piel intoxicándomeHasta hacerte aparecer

Sueño auricularCadencia e hiel

La cuerda en míEn perfecta tensión

Interludio:

Verás:

El mundo se divide en dos categorías:los que tienen un revólver y los que cavan...

Tú cavas...

(”The Good, The Bad and The Ugly”)

A la deriva

En la ruta Las luces te ciegan

Es la oscuridadEl tenue ardor de transitar

A la derivaEl viento nos desvió

Volar nunca fueLa redención de este ritual

Sin palabrasEl gesto es naturalEl miedo de los dos

En la penumbra, un adiós

Tiempo muerto A ciegas tu mirar

Tras la hojarasca una señal

Quebrado lo vuelvo a armarLa hondura no apura el temor

Cruza hasta el fin

Sueño Espiral

SumergidoEntre acordes vi

De un espiralSu disonar

Es el instante lo realColor intenso en espiral

Es el vértigo de estarEn dispersión

Caminas por la luz del solHasta sentir la nostalgia de ver

Lo eterno es solo un deja vuEs el tiempo un estado mental

Después de caer

Caminar y avanzarEs un espejismo más

Ciego extraño el color del sol

MMr. Miles

Se oye el galoparAl son de los muertos

Es Mr. Miles en el desiertoEl alma al rodarA orillas del rio

Su sequedad amó

La vara del solA fuego cayó

Un 12 y 6La muerte esperó

Hoy el caminarEs hielo y silencio

Sus huellas no estánY no es el viento

La piel que habitó es carne del solY es unalacrán

El aire en su voz

Siento tus labios musitarLa sierpe eterna de un puñal

Es fríaLa sangre al trepidar

FrioSu lento despertar

Al este del edénUn lagarto bajo el solSueña un dios lunar

En las dunas alacrán

Epílogo

AmigosLa tormenta empezó

Y este es el fin

Ejecutados los primeros acordes durante el invierno del 2013, supe que era el momento de que las pesadillas sónicas de mi mente tuviesen vida propia. Después de tantos años de búsqueda y experimentación musical, en el medio del camino un luminar emerge sobre mí en el cielo infinito: sin discursos ni banderas, la música es el lenguaje de la libertad. Desde entonces declaro mi total independencia y transito libre entre estridencias de terciopelo y melodías saturadas. Al finalizar esta obra y escribir estas palabras, quisiera creer que de esa certeza, este disco es el germen.

AV

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