www.lahora.com.ecEcuador, domingo 30 de marzo de 2014 Nº 860

Amadou y MariamUna lección de ritmo y vida.

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>>DIÁLOGO.Hans Behr Martínez, el escritor que sueña alto.

>>ANTOLOGÍA. 100 años de Paz.

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2 Ecuador, domingo 30 de marzo de 2014antología

arTes/ CNN Y AGENCIAS • “Seré breve. Sin embargo, como el tiempo es elástico, us-tedes tendrán que oírme durante ciento ochenta largos segundos”, pronunciaba Octavio Paz, cuando recibía el Nobel. Sí, el tiempo es elástico y se extiende a una centuria del nacimiento del escritor mexi-cano. Por suerte, dicha elasticidad permi-te que su obra venza a las manecillas del reloj.

México y el mundo de las letras mun-diales están a horas de festejar un siglo del alumbramiento de una de las voces y plumas más exhaustivas del siglo XX: Oc-tavio Paz (Ciudad de México, 31 de marzo de 1914 – 19 de abril de 1998).

Amante de la lírica, género del que aseguraba haberse seducido desde joven, manifestaba que escribía versos porque es lo que siempre supo hacer y que le apostaba a la prosa cuando ésta le servía para defender a la poesía.

Su trabajo se nutrió de dos vertientes, la experimentación y el inconformismo, características que primaron en sus ju-veniles pasos por el modernismo, su in-clinación por lo existencial y sus tintes surrealistas.

Su vida, en definitiva, se bamboleó en-tre vivir la ‘Libertad bajo palabra’ hasta tratar de descifrar el camino por ‘El la-berinto de la soledad’, tal como se titulan dos de sus obras cumbres: la primera un poemario y la segunda un ensayo. Éstas, al igual que sus más de 40 libros publica-dos, le valieron grandes reconocimientos como el Cervantes (1981), el Nobel de Li-teratura (1990) y el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades (1993), este último por su revista Vuelta.

legadoDe la poesía reflexiva sobre el amor a los ensayos críticos de la sociedad mexicana, así de amplio es el legado de la obra de Oc-tavio Paz, según sus amigos y críticos que, a casi 16 años de su muerte, aún debaten sus alcances.

“El legado principal es su poesía. Siem-pre se consideró un poeta que escribió sobre todo, porque sabía de todo un poco”, consi-

dera el crítico literario y académico Hugo Verani. El también profesor de las univer-sidades de California y Notre Dame puso como ejemplo el poema ‘Piedra de Sol’: “Es un poema que no es solo inteligencia. Com-bina sabiduría, la riqueza de su lenguaje y la imaginativa y el encantamiento que tenía Paz con el mundo”, señala.

Para otros conocedores de la obra del autor mexicano, el legado de Paz es la crí-tica social que realizaba a través de una ideología liberal. “Octavio Paz se caracte-riza por una pasión crítica que permea el resto de su obra (…) Propone una visión crítica, múltiple, moderna, de reflexionar, de oponerse a lo existente desde una pos-tura liberal”, menciona el escritor Sergio González Rodríguez.

Muchos consideran que el mayor le-gado de Paz fue como promotor cultu-ral. Éste es el caso del escritor y amigo de Paz, Fernando Savater: “Además de ser un creador, fue un gran agitador cultu-ral. Organizó revistas, actos públicos, dio apoyo a jóvenes que estaban comenzando y a muchos nos reveló autores que no co-nocíamos”.

mirada políticaPara Paz la misión del poeta iba mucho más allá de la fusión estética; convocaba a la inteligencia, la integridad moral y el valor civil, pues el fin último era hurgar, indagar y criticar las circunstancias y el contexto de una época, dice Armando González Torres, compilador de sus tex-tos políticos.

Al presentar el pasado 24 de marzo, en el Auditorio Octavio Paz del Senado de la República, el libro ‘Itinerario crítico, antología de textos políticos de Octavio Paz’, González Torres señaló que a partir de estas reflexiones no es de extrañarse que, desde joven, Paz se haya ocupado de asuntos artísticos e intelectuales, y así haya escrito poesía pero también perio-dismo, crítica, filosofía y mucha política.

“Escribió sobre una política pecu-liar, porque si bien estuvo preocupado e inmerso en el presente, nunca militó en ningún partido, ni ocupó ni le interesó

Un siglo de Paz

tus ojosPOEMA

Tus ojos son la patria del relámpago y de la lágrima, silencio que habla, tempestades sin viento, mar sin olas, pájaros presos, doradas fieras adormecidas, topacios impíos como la verdad, otoño en un claro del bosque en donde la luz canta en el hombro de un árbol y son pájaros todas las hojas, playa que la mañana encuentra constelada de ojos, cesta de frutos de fuego, mentira que alimenta, espejos de este mundo, puertas del más allá, pulsación tranquila del mar a mediodía, absoluto que parpadea, páramo.

memoria. Esta gráfica, realizada por Gorka Le-jarcegi, retrata a un Paz

firme pese a los años.

Ecuador, domingo 30 de marzo de 2014 3antología

PoeTa. En la biblioteca de su casa. La imagen fue tomada por Fabrizio León Diez, en 1989.

Discurso del Premio nobelEN EL MOMENTO DE RECIBIRLO

Majestades, Señoras y Señores:

Seré breve. Sin embargo, como el tiempo es elástico, ustedes tendrán que oírme duran-te ciento ochenta largos segundos.

Vivimos no sólo el fin de un siglo sino de un período histórico. ¿Qué nacerá del derrum-be de las ideologías? ¿Amanece una era de concordia universal y de libertad para todos o regresarán las idolatrías tribales y los fanatismos religiosos, con su causa de discordias y tiranías? Las poderosas democracias que han conquistado la abundancia en la libertad ¿serán menos egoístas y más comprensivas con las naciones desposeídas? ¿Aprenderán éstas a desconfiar de los doctrinarios violentos que las han llevado al fracaso? Y en esa parte del mundo que es la mía, América Latina, y especialmente en México, mi patria: ¿alcanzaremos al fin la verdadera modernidad, que no es únicamente democracia política, prosperidad económica y justicia social sino reconciliación con nuestra tradición y con nosotros mismos?

Imposible saberlo. El pasado reciente nos enseña que nadie tiene las llaves de la histo-ria. El siglo se cierra con muchas interrogaciones. Algo sabemos, sin embargo: la vida en nuestro planeta corre graves riesgos. Nuestro irreflexivo culto al progreso y los avances mismos de nuestra lucha por dominar a la naturaleza se han convertido en una carrera sui-cida. En el momento en que comenzamos a descifrar los secretos de las galaxias y de las partículas atómicas, los enigmas de la biología molecular y los del origen de la vida, hemos herido en su centro a la naturaleza. Por esto, cualesquiera que sean las formas de organi-zación política y social que adopten las naciones, la cuestión más inmediata y apremiante es la supervivencia del medio natural. Defender a la naturaleza es defender a los hombres.

Al finalizar el siglo hemos descubierto que somos parte de un inmenso sistema – con-junto de sistemas – que va de las plantas y los animales a las células, las moléculas, los átomos y las estrellas. Somos un eslabón de “la cadena del ser”, como llamaban los anti-guos filósofos al universo. Uno de los gestos más antiguos del hombre un gesto que, desde el comienzo, repetimos diariamente es alzar la cabeza y contemplar, con asombro, el cielo estrellado. Casi siempre esa contemplación termina con un sentimiento de fraternidad con el universo. Hace años, una noche en el campo, mientras contemplaba un cielo puro y rico de estrellas, oí entre las hierbas oscuras el son metálico de los élitros de un grillo. Había una extraña correspondencia entre la palpitación nocturna del firmamento y la musiquilla del insecto. Escribí estas líneas:

Es grande el cieloy arriba siembran mundos.Imperturbable,prosigue en tanta nocheel grillo berbiquí.

Estrellas, colinas, nubes, árboles, pájaros, grillos, hombres: cada uno en su mundo, cada uno un mundo y, no obstante, todos esos mundos se corresponden. Sólo si renace entre nosotros el sentimiento de hermandad con la naturaleza, podremos defender a la vida. No es imposible: fraternidad es una palabra que pertenece por igual a la tradición liberal y a la socialista, a la científica y a la religiosa.

Alzo mi copa – otro antiguo gesto de fraternidad – y brindo por la salud, la ventura y la prosperidad de Sus Majestades y del noble, gran y pacífico pueblo sueco.

PieDra De solExTRACTOS

Un sauce de cristal, un chopo de agua,un alto surtidor que el viento arquea,un árbol bien plantado mas danzante,un caminar de río que se curva,avanza, retrocede, da un rodeoy llega siempre:un caminar tranquilode estrella o primavera sin premura,agua que con los párpados cerradosmana toda la noche profecías,unánime presencia en oleaje,ola tras ola hasta cubrirlo todo,verde soberanía sin ocasocomo el deslumbramiento de las alascuando se abren en mitad del cielo……voy entre galerías de sonidos,fluyo entre las presencias resonantes,voy por las transparencias como un ciego,un reflejo me borra, nazco en otro,oh bosque de pilares encantados,bajo los arcos de la luz penetrolos corredores de un otoño diáfano,voy por tu cuerpo como por el mundo,tu vientre es una plaza soleada,tus pechos dos iglesias donde oficiala sangre sus misterios paralelos,mis miradas te cubren como yedra,eres una ciudad que el mar asedia,una muralla que la luz divideen dos mitades de color durazno,un paraje de sal, rocas y pájarosbajo la ley del mediodía absorto,vestida del color de mis deseoscomo mi pensamiento vas desnuda,voy por tus ojos como por el agua,los tigres beben sueño de esos ojos,el colibrí se quema en esas llamas,voy por tu frente como por la luna,como la nube por tu pensamiento,voy por tu vientre como por tus sueños…… quiero seguir, ir más allá, y no puedo:se despeñó el instante en otro y otro,dormí sueños de piedra que no sueñay al cabo de los años como piedrasoí cantar mi sangre encarcelada,con un rumor de luz el mar cantaba,una a una cedían las murallas,todas las puertas se desmoronabany el sol entraba a saco por mi frente,despegaba mis párpados cerrados,desprendía mi ser de su envoltura,me arrancaba de mí, me separabade mi bruto dormir siglos de piedray su magia de espejos revivíaun sauce de cristal, un chopo de agua,un alto surtidor que el viento arquea,un árbol bien plantado mas danzante,un caminar de río que se curva,avanza, retrocede, da un rodeoy llega siempre.

ocupar puestos políticos prominen-tes. Octavio Paz siempre vio la política como una ocupación moral más que como una ocupación profesional”, ex-plica González Torres.

Por su parte, el politólogo Jesús Sil-va-Herzog opina que en Paz se encuen-tran dos reflexiones pertinentes para 2014: “En primer lugar que la demo-cracia no es sencilla. En Paz nunca está la idea de que ahí está la utopía, de que la democracia era un régimen sencillo. Yo diría que invita a caminar hacia ella, pero con cuidado, porque la democra-cia no es una pieza de ingeniería, sino algo mucho más complicado. La segun-da es que la única manera de procurar la salud de la vida pública en México es a través de la crítica”.

epitafio para un poetaPOEMA

Quiso cantar, cantar para olvidar su vida verdadera de mentiras y recordar su mentirosa vida de verdades.

Ecuador, domingo 30 de marzo de 2014diálogo4

Hans Behr Martínez se enamoró de las letras desde niño, en los cuartos de hos-pital. Es decir, su matrimonio con la lite-ratura es válido y respetó aquello de que hay que estar unidos ‘en la salud y en la enfermedad’.

Con el tiempo sus males fueron supe-rados, pero el amor por la lectura nunca terminó, desembocando después en la es-critura, actividad que le ha sonreído con importantes reconocimientos (premios ‘Aurelio Espinosa Pólit’, ‘Ángel F. Rojas’, entre otros).

Superando la distancia y aprovechan-do las ventajas de la tecnología, ARTES tomó contacto con el escritor guayaqui-leño, quien compartió sus experiencias y visiones sobre su trabajo y la literatura nacional.

‘al mal tiempo, buena cara’. Un niño enfer-mizo se va enamorando de la lectura cada vez que está en el hospital. ¿así comienza su historia como escritor?

Efectivamente, los libros me rescata-ron y me enseñaron la paciencia.

¿Qué autores cautivaron su atención por entonces?No recuerdo autores específicos. Sí histo-rias. Me encantaba una de una torta que buscaba que no se la comieran. Y un libro que trataba de África, de la vida de los leones y olía maravillosamente.

creció y su salud mejoró, pero lo que nunca cambió fue su amor por la lectura…Efectivamente, en mis cumpleaños me gustaba que, aparte de juguetes, me rega-laran libros y revistas de cómics.

de la lectura nacieron los primeros textos. ¿Qué escribía en sus primeros años? ¿Qué edad tenía?La primera novela la hice a los 14 años, quería ir con ella a Hollywood, que la hi-cieran película, era una historia policial… interminable, tenía más de 200 páginas.

su carrera arranca con pie derecho: augus-to roa Bastos preside un jurado que lo elige para representar al ecuador en un encuen-tro de jóvenes escritores en madrid. ¿no hay mejor espaldarazo que eso?Fue una gran experiencia, aparte de co-nocer a escritores nacionales, que hasta ahora son mis grandes amigos, conocí autores (al mismo Roa Bastos, Monterro-so y Gutiérrez Souza) y pensamientos di-versos. Pero, el mejor espaldarazo en esos días fue la familia: mis padres, mi herma-na, mi tía. Con el tiempo se incorporaron

‘Siempre he soñado alto’

mi esposa, mis hijos y muchos amigos.

de ahí se consolida como narrador, ¿nunca le cautivó la poesía?Tuve mi experiencia corta con la poesía, me sirvió para enamorar a mi esposa, allí me retiré, ya había obtenido el mejor pre-mio. Realmente, en la narración me siento como zombi comiendo cerebro o como ca-ballo corriendo en una playa.

los premios han sido desde el inicio una constante en su carrera. ¿cómo le ayudan a un escritor el obtenerlos?Gracias a Dios y a los buenos vientos que desea todo barco, los premios me han

acompañado. En cierta medida me han abierto las puertas para formar parte de antologías o ser considerado por las edi-toriales.

¿Piensa que un premio mide la calidad de una obra?Usualmente un premio respalda la obra, la casualidad no es amante del trabajo dedicado. A mí me gusta comprar libros premiados, es una forma de investigar el tema y el estilo del ganador, su enfoque de definir el mundo, pero en ocasiones me he llevado decepciones. Hace poco abandoné a medio camino un Premio Alfaguara. El lector también tiene ese derecho, abando-

nar una lectura. Imagino que yo no seré inmune a esa protesta silenciosa.

‘maratón’ alcanza en 2009 el Premio ‘au-relio espinosa Pólit’: una gran meta. como escritor, ¿le llevó a plantearse objetivos más altos?Ganar el ‘Aurelio Espinosa Pólit’ fue toda una anécdota. Justamente, cuando recibí la llamada, elaboraba una presentación y estaba detenido en la foto del gol de Gerd Müller, en la final del 74, mi futbolista preferido. Fue una grata coincidencia. Un gol inolvidable que le hice a la vida. En lo personal siempre he soñado alto, con ambición desmedida. Es lo que me lleva a esforzarme y buscar, en las madrugadas, el mejor espacio para escribir, claro, en compañía de un perro y un café cargado, en ese caso soy como una caricatura, me veo así, un escritor con su perro.

con ‘las luces de la felicidad’ alcanza el Premio ‘ángel f. rojas’, otro galardón im-portante. ¿la literatura es su luz? ¿cuándo piensa que esta flama se apagará?Espero que no se apague nunca. Siempre me vienen ideas y hay que estar prepa-rado para atraparlas. A veces aparecen cuando corro o cuando manejo y hago lo posible para recordarlas cuando esté frente a un papel.

¿en qué trabaja últimamente?Después de ‘Las luces de la felicidad’, que es una novela policiaca dentro de una es-fera de ficción, donde mi detective se une a Stephen Hawking para dar caza a un asesino en serie, he concluido una novela juvenil que está siendo analizada por una editorial. Culmino otra de la misma cate-goría enfocada en el liderazgo, valiéndo-me del reino animal. Se me antoja hacer después una segunda parte de ‘Las luces de la felicidad’.

con sus tres décadas de trayectoria, ¿qué visión tiene de la literatura ecuatoriana ac-tual?Me cansaré de nombrar grandes autores de distintas generaciones, Montalvo, Dá-vila, Béjar, Chávez, en fin, pero pese a la globalidad que ayuda mucho a ser cono-cido en el exterior, el escritor ecuatoriano debe luchar como esos caballos que, en las carreras, les ponen más peso que los otros. La razón, no somos un país ‘marke-tero’, literariamente hablando. Pero, con-fío, que un día el aroma del río Guayas o los vientos de la serranía se impongan a la niebla londinense. (DVD)

ddelatorre@lahora.com.ec

Hans BeHr

aUTor. Es una de las plumas más ágiles y premiadas de la literatura nacional. (Foto: Cortesía Hans Behr Martínez)

Tuve miexperienciacorta con la

poesía, me sirviópara enamorar ami esposa”.

Perfil

Escritor ecuatoriano (Guayaquil, 1962). Ha publicado los libros de cuentos ‘Ojos de piquero’, ‘Circo’ y ‘Errantes y embusteros’; las novelas ‘Los senderos de Emaús’, ‘Maratón’ y ‘Las luces de la felicidad’, y ha incursionado en la literatura infantil con títulos como ‘Casita, Casona y Casuna’ y ‘Soldado 3113’.

Ecuador, domingo 30 de marzo de 2014 5protagonistas

El ritmo que alumbra las

tinieblas

Es pura imaginación. Sólo, tan sólo, es el recrear lo que te han contado. Imagina a Manu Chao conduciendo un vehículo, escuchando una emisora cualquiera. De repente, un par de voces flechan su aten-ción, mientras que la guitarra taladra sus sentidos: queda cautivado.

Así fue su encuentro con Amadou y Mariam, esposos y músicos de Malí, con quienes tuvo que contactarse, inevitable-mente, para decirles cuánto le gustó su propuesta y, después, trabajar y colabo-rar de manera mutua.

Quito tuvo un doble encuentro con la pareja africana. Ellos cerraron con ‘bro-che de oro’ la décima edición del Festival de Jazz el pasado domingo, además de brindar un conversatorio con el público en la Alianza Francesa un día después de su presentación.

En ambos eventos portaban sus inse-parables gafas oscuras, las mismas que develan a primera vista la ceguera que padecen, la cual tuvo sus ventajas porque, como el propio Amadou dice: “Sin ésta no nos hubiésemos conocido, no seríamos lo que somos ahora. Por ser ciego pude en-contrar a mi compañera, Mariam, en un centro para jóvenes no videntes”.

Desde entonces, envolvieron su amor entre los sonidos y formaron un dúo que destella luz –capaz de irradiar sobre cual-quier tiniebla–, al compás de la música africana fusionada con jazz, blues y rit-mos cubanos, egipcios e indios.

conciertoLa Plaza del Teatro amaneció del largo letargo al que está acostumbrada. Había jóvenes y familias con sus hijos, periodis-

amadoU & mariam

tas, curiosos, afroecuatorianos y muchos gringos.

Los vecinos y ‘personajes’ que mal vi-ven allí habitualmente entre sus cuatro paredes observaban atónitos la masa de personas que ataviadas con ropas floridas y amplias sonrisas esperaban con ilusión y cierto nerviosismo la llegada de Ama-dou y Mariam, la pareja de músicos ma-lienses que tenían el acometido de clausu-rar el X Festival de Jazz de Quito.

Aparecieron en torno a las 14:00. Llegaron a paso lento acompañados por miembros de la organización (ambos son invidentes). Iban ataviados con pieles y ropas típicas africanas, de estampados de color azul celeste y rosa.

Tras pisar el escenario, toda esa calma y parsimonia se trasformó en un melódi-co y ante todo vitalista discurso. La con-tundente batería marcaba la pauta, que se iba enriqueciendo con timbales y bongos

y la pegadiza voz de Amadou, quien ata-viado con una guitarra de oro supo hacer suyo el escenario.

El concierto fue una gran fiesta plaga-da de ecos del África Negra, de sonidos envolventes y evocadores, de una energía sincera apuesta por el ritmo. Acorde tras acorde, canción a canción, Amadou y Ma-riam dieron una lección de ritmo y vida a todos los asistentes.

charlaAmadou sonríe cada vez que el micrófono se pega a sus labios para responder las in-quietudes de los panelistas y del público. Por su parte, Mariam es mucho más seria y menos participativa. Una de las pocas veces que la cantante dibuja su sonrisa es para darle ánimos a Sofí, una de las asis-tentes que comparte su no videncia y su amor por la música como corista.

“La energía se siente. La alegría, el ca-

riño y el respeto van más allá de las mira-das. Quito nos ha tratado bien y cómo lo percibimos: pues sí, nos cogió la altura”, bromea con picardía Amadou.

Entre videos de sus canciones y re-membranzas de su trabajo, los cantantes interactúan por casi dos horas en un au-ditorio donde el calor abriga como si fuese un concierto.

En una de las proyecciones, un video no oficial recoge imágenes estremecedo-ras cobijadas al son de ‘Politic Amagni’, tema de Amadou y Mariam, que expone: “La política es violencia”.

“La política tiene muchas facetas. No queremos la corrupción, las ansias des-medidas de poder y las guerras”, mani-fiesta Amadou tras el video, demostrando que sus ojos están siempre alerta.

Por su parte, el público reflexiona y comprende eso de que ‘no hay peor ciego que el que no quiere ver’. (MAP - DVD)

detalles sobre la pareja

° Mariam Doumbia tiene 55 años y Amadou Bagayoko tiene 59.

° Ambos nacieron en Bamako, capital de Malí.

° Cantan en mambara (idioma de un grupo étnico predominante en Malí), además de incluir varios dialectos africanos, francés y algo de inglés.

° Participaron en la grabación de ‘Celebrate the day’, himno oficial del Mundial de Fútbol Alemania 2006.

° Han producido 11 discos, considerando ‘Voices de FIFA World Cup’ y recopilaciones antológicas.

° Uno de sus discos más conocidos es ‘Dimanche à Bamako’, producido por Manu Chao.

energÍa. Con sus ritmos, los músicos africanos cautivaron a quienes se dieron cita en la Plaza del Teatro (Foto: Florent Tribalat)

Ecuador, domingo 30 de marzo de 2014biblioteca6

composición electrónica:Pantone Impresiones

edita: Editorial Minotauro S.A.correspondencia:

Planta Diario La HoraAv. Galo Plaza N62-08 y Nazaret

fax: 247-6085 casilla 17-17-243 CCIcul tu ra @la ho ra .co m.ec

Quito, ecuador

director (e): Francisco Vivanco Riofríoeditor: Agustín Garcells Cordónredactor: Damián de la Torre Ayoradiseño: Guillermo Sánchez

Páginas irreverentesosWaldo PaZ y miÑo J• De “mujeres que quitan el sentido”, de aquellas que pasean su belleza, sin vacilar, creando el des-concierto, sembrando a la vez deseos y envidias, con el hiriente contoneo de sus caderas, en aquellos y ellas que las miran, está prensada la sensual literatura, que desnudo ante ustedes esta semana, sin re-cato y con placer enorme de proponerla a la vista de todos. Que mientras más pron-to se lea, menos fría será la espera de que mejore el tiempo que nos arrincona.

Firma la obra ‘Así es como la pierdes’ el escritor dominicano Junot Díaz, dueño de un estilo y tipo que pasa por lo colori-do, extravagante y raro, si se consideran los esquemas formales, que no deja de ser delicioso, único, vivencial, callejero, vibrante, provocador.

Nueve relatos de pasiones desatadas en las humedades del mar o en el calor de las sábanas hacen el corpus de caderas anchas, revoltosa melena y senos grandes de ‘Así es como la pierdes’: ‘El sol, la luna y las estrellas’, ‘Nilda’, ‘Alma’, ‘Otra vida, otra vez’, ‘Flaca’, ‘La doctrina pura’, ‘In-vierno’, ‘Miss Lora’ y ‘Guía de amor para infieles’.

Doscientas siete páginas irreverentes que bordean estados existenciales extre-mos, en los que el continuo matiz de la deslealtad lleva al lector por los párra-fos de amor y erotismo fundidos entre las sombras, las dudas, las luces, el dolor, la soledad, la pérdida, la ausencia, la lu-juria, la traición y sus delicias y sus con-secuencias. Cuando la infidelidad tiene respuestas encrespadas de los celos, de ‘la dignidad’ ofendida y sus extremos, los episodios de revancha producen daños colaterales y causan víctimas inocentes.

El honor y sus cuentos, tan bien escri-

tos, han quedado en la obra, que desde la portada atrapa como envuelven las curvas que no cubren los trajes cor-tos de baño, de dormir o de follar, que ellas en el juego de seducción se tallan para ejer-cer de amantes o de amadas. Desde los cuerpos, las almas se vuelcan a vivir tormentos. Cuando la pasión llama no hay consideraciones previas, normalmente, de razonar po-cos se ufanan y de contener-la, menos. Quien esté libre de culpa que lance la prime-ra letra para que intente des-mentir lo imposible: “Tu novia descubre que le estás pegando cuernos. (De hecho, ella es tu prometida, pero en cuestión de segundos eso no va a impor-tar para nada.) Se podía haber enterado una, se podía haber enterado de dos, pero como eres un cuero loco que ja-más vació la latica de basura del correo electrónico, ¡se enteró de cincuenta!... Sí claro, cincuenta en un periodo de seis años, pero vamos, hombre… ¡cincuenta fokin jevas! ¡Por el amor de Dios! Quizá si hubieras estado comprometido con una blanquita de mente superabierta. Tu novia es una cabrona salcedeña que no cree en nada; de hecho; la única adver-tencia que te hizo, lo que siempre te juró que jamás te perdonaría, fue serle infiel. Lo haces y te entro a machetazos, te pro-metió. Y, por supuesto, juraste que jamás lo harías. Lo juraste. Juraste que jamás”. (Pág. 173)

Junot Díaz es un palabrista poco cono-cido en el medio, la casa Mondadori lo tie-ne entre los importantes de su estupendo

los más Vendidos

° Cincuenta sombras de Grey, e.l. James (Grijalbo).°Bajo la misma estrella, John green (Nube de tinta).°El juego de Ripper, isabel allende (Random House).°Y las montañas hablaron, khaled Hosseini (Salamandra).

argenTina

° Nada que perder 2, edir macedo (Planeta).°La misa ha terminado, gustavo álvarez (Lemoine).°Bajo la misma estrella, John green (Random House).°Pa’ que se acabe la vaina, William ospina (Planeta).FUENTE: LIBRERíA NACIONAL

colomBia

°El lector del Julio Verne, almudena grandes (Tusquets).°Qué hacer cuando en la pantalla aparece The End - Paula Bonet (Lunwerg)°Las tres bodas de Manolita, almudena grandes (Tusquets).°La ladrona de libros, markus Zusak (DeBolsillo).FUENTE: CASA DEL LIBRO

esPaÑa

mÉxico

° Bajo la misma estrella, John green ( Nube de Tinta).°Ladrona de libros, markus Zusak (Debolsillo).°El niño con el pijama de rayas, John Boyne (Salamandra).

°Divergente, Verónica roth (Molino).FUENTE: LIBRERíA GANDHI.

°Nada que perder (tomo 2) edir macedo (Planeta).°Bajo la misma estrella, John green (Nube de Tinta).°La ladrona de libros, markus Zusak (DeBolsillo).°El Ecuador y la Alemania nazi, francisco núñez del arco.FUENTE: LIBRI MUNDI

°Bajo la misma estrella, John green (Nube de Tinta).°Cincuenta sombras de Grey, e.l. James (Grijalbo).°Hush Hush, Becca fitzpatrick (Ediciones B).°El juego de Ripper, isabel allende (Random House).Fuente: Mr. Books

ecUador

nota: listado de libros de ficción de efe, excep-to ecuador.

ViTrina de liBros

rePresenTaciones ancesTrales y colores del cosmosestelina Quinatoa

Este libro, bellamente ilustrado, muestra los diseños de los platos del Carchi, la zona norte de Ecuador y del departa-mento colombiano de Nariño, donde han sido reconocidas tres tradiciones alfareras, que constituyen la evidencia material prehispánica del pueblo a la llegada de los españoles. Este contenido es de gran interés para estudiantes de diseño de todas las universidades del país. min. de cUlTUra y PaTrimonio

Vidas de Un siglo… Un siglo de Vidascecilia ortiz Batalla

Es una recopilación de historias de vida de 11 personas que entre los 100 y 106 años han residido en el Distrito Metropolitano de Quito. Ellos nos cuentan y recrean al Quito del pasado siglo con valiosos testimonios que enriquecen la memoria colectiva acerca de un pasado común que genera lazos de pertenencia entre los habitantes de Quito y que refuer-za la identidad quiteña. insTiTUTo meTroPoliTano de PaTrimonio

datos del autorJunot Díaz

(República Dominicana, 1968). A los 6 años se mudó con sus padres a Nueva Jersey. Obtuvo su grado de maestría en Bellas Artes en Cornell University, en Ithaca, Nueva York (1995), y actual-mente trabaja como profesor de escritura creativa en el Instituto de Tecnología de Massachussets. Su carrera como escritor empezó con la publicación de su cuento ‘Ysrael’, en la revista Store. Su primer libro, ‘Drown’ (1996) es una colección de 10 cuen-tos que fue traducida al español bajo el título Boys (Debolsillo, 2009) y que trata sobre la vida urbana de los dominicano-estadounidenses en las urbes de Estados Unidos. ‘The New Yorker lo incluyó entre los mejores 20 escritores en su lista ‘Fiction Under-40. The Future of American Fiction’. Con su primera novela, ‘La maravillosa vida breve de Óscar Wao’, ganó el Premio Pulitzer 2008.

catálogo. En varias librerías de nuestra ciudad he visto sus trabajos, yo adquirí mi ejemplar en Librería Rayuela. Vaya por el suyo a su confiable librería.

opymj2008@gmail.com

Ecuador, domingo 30 de marzo de 2014 7el librero

Édgar FREIRE RUBIO • Leo con interés la no-ticia de que en Cuenca se va a realizar un congreso para abordar el tema de la lectu-ra y de sus pocos “viciosos”. Lo cierto es que las cifras de consumo de libros y los índices de lectura son deprimentes. Ante este panorama, el Gobierno sigue pensan-do que editar libros y regalarlos es la me-jor medida para fomentar esta actividad y, mientras tanto, el esfuerzo privado llega a poca gente.

Es vergonzoso constatar que Quito ni siquiera dispone de una Biblioteca Nacio-nal que esté a la altura de lo que la cultura demanda y que las pocas bibliotecas que tenemos están sin actualizar. Sin embar-go, deberemos alegrarnos porque un es-tadio de fútbol va a ser remodelado para aumentar su “clientela”.

Bien expresaba alguien que “el circo continúa, pero qué importa que a nivel de Hispanoamérica sigamos con una es-tadística de lectura desastrosa”. Cómo envidiarán los autores y libreros esos 40.000 fanáticos que fueron a ad-mirar a Metallica. Con cada entra-da mínima se podría comprar dos o tres buenos libros. En el Ecuador abundan los analfabetos funciona-les a “millares surgir”.

En este artículo me he robado el título de otro, escrito por el perio-dista español M. Rodríguez Rive-ro y de su comentario entresaco lo que me interesa por la coyuntura. Rodríguez afirma que la asocia-ción estadounidense Read Aloud insiste en que “la lectura en voz alta es lo más importante que los padres o tutores pueden hacer para ayudar a sus hijos a aprender: desarrolla, entre otros bienes morales y afectivos, las destrezas lingüís-ticas, la comprensión lectora, el gusto por la lectura y la habilidad narrativa. Sólo 15 minutos de lectura durante los primeros cinco años de la vida de un niño suponen más de 450 horas de inmersión en un mundo de placer e información que será definitivo para su desarrollo”.

Y uno se pregunta, al igual que Rivero, ¿están nuestros padres de familia o profeso-res dispuestos a dedicar ese pequeño tiem-po para practicar este “saludable ejercicio”? Y remato añadiendo: si leyéramos seríamos una masa crítica y no nos venderían ‘gato por liebre’ ni elegiríamos como depositarios de tan altas dignidades a cantantes, futbo-listas o advenedizos de la política. Otro sería entonces el cantar de este país. ¿O no?

Libresa me ha dado una buena noticia: una nueva reimpresión (16 en total) de ‘Quito: tradiciones, leyendas y memoria’ (Antares 104). Son cerca de 30 mil ejem-plares los que mis amigos quiteños han consumido de esta compilación en estos años. Mi ‘ego’ se ha engrandecido y no he podido callarme. Lo propio sucede con ‘El barrio de los prodigios’ (Alfaguara-Santillana), cuenta con un ‘nicho’ de ni-ños y jóvenes que tienen aprecio a las memorias de San Roque que les compar-te este Librero acerca de sus vivencias in-fantiles (hace más de seis décadas atrás). Norberto Bobbio, en su libro ‘Senectute’, afirma que “hablar de sí es un hábito de la edad tardía…” Eso es lo que a lo mejor me está pasando. En fin.

Verónica Mosquera, de Santillana, me ha puesto a leer dos novelas: ‘Yo soy el fuego’, de Óscar Vela, y ‘Los años per-didos’, de Juan Pablo Castro. Óscar Vela sigue en la búsqueda de su propia voz en esta novela experimental, de factu-

ra coral. Y hay que leerla de co-rrido para no perderse en lo tre-pidante de las acciones y captar las voces de los personajes en el territorio de una ciudad deliran-te. No defrauda, pero prefiero ‘Desnuda oscuridad’. Juan Pablo Castro está cada vez más sólido. Posiblemente, ésta es su mejor novela. La ciudad está bien re-tratada y Faustino Alcázar es re-conocible. Se palpa su fracaso, la desolación, la mediocridad, como

confiesa el propio autor. Las 345 pági-nas no cansan, dejan satisfecho. ¡Qué bien por este par de autores! Y para mis entretiempos, la amiga me recomienda leer dos textos (uno infantil y otro juve-nil): ‘Cuentos de Tío Tigre, Tío Conejo y Juan Bobo’, del incansable Édgar Allan García, y ‘Me llamo trece’, de la cubana Liset Lantigua. Lo haré, por supuesto. ¡Mil gracias!

¿Cuántos miles y miles de libros se ha-brán pergeñado sobre Dios? Y uno más no terminará de llenar ese ‘vacío’ exis-tencial que algunos padecemos. Gustavo Vela Ycaza me remite ‘La Biografía de Dios’. El mérito es la capacidad de con-cisión apta para ‘dummies’ como yo. La Biblia en 125 páginas. ¡Qué aventura!

Rosalía Arteaga ha puesto toda su pasión en la educación ecuatoriana. Y permanece activa y sin esconderse, actitud propia de nuestros expresi-

¡En voz alta y para todos…!

dentes (salvo dos contadas excepciones). Dos libros recientes atestiguan este compromiso: ‘Quinto con-curso nacional Excelencia Educativa, 2013’ y ‘Descubriendo Ex-celencia’ (un resumen de las cinco edi-ciones de este concurso) Fidal “se pasa” con este par de textos muy dignos y tes-timoniales. ¡Congratulaciones!

César Chávez, el amigo lector y bi-bliotecario, me comparte un libro muy sugestivo: ‘Diario de un médico loco’, de Leonidas Andreiev. Este texto forma par-te de la colección Literatura y Justicia y en su contraportada leemos que se dis-tribuye mensualmente con ‘El Telégrafo’. ¡Un acierto de colección! Lástima que su distribución será mínima. ¿Por qué no hacerlo con otros periódicos? Felicito al editor y al director de esta ‘inencontrable’ biblioteca (E. Villacís y A. Correa, pero más a mi amigo bibliotecario).

las revistasNunca falta alguna revista en mi velador. La primera que llega es ‘Gestión’ No. 236 (Dinediciones). Lectura apta para legos en economía y temas empresariales. Ya está digerida. Lo mismo ‘América Latina en Movimiento’ (ALAI. No. 492), com-pletamente dedicada a la figura del papa Francisco. ¡Estupendo! ‘Ser Familia’ (Don Bosco), que sigue tan campante con sus 32 años a cuestas. Rica y atractiva.

Jorge Medina me pone al tanto del primer número de ‘Procesos y Energía’ (Ed. Universitaria, Facultad de Ingeniería

Química, ene-ro, 2014). En Química, siem-pre me saqué ‘bombero’ en el famoso ‘Juan Montalvo’, pero agradezco la gen-tileza.

El CAAP nun-ca se olvida del

Librero. ‘Ecuador Debate’ (No. 90) pone como tema central “el pensar en la Uni-versidad”, dossier que no tiene desperdi-cio. ¿Se venderá en nuestras librerías?

La ‘Revista Q’ del Municipio quiteño ha cambiado de timonel. Edwin Alcarás ha reemplazado al poeta Alfonso Espino-sa. ¿Cambio de época? Alentador el ho-menaje a Antonio Ordóñez. De joven pre-sencié y escuché ‘Réquiem por la lluvia’, de Martínez Queirolo. ¡Inolvidable! ¡Qué reconfortante que todavía haya gratitud!

Y ahora, mi perorata mensual: pacien-cia a Diego Oquendo Silva, Marcelo La-lama, Luis Mora, Raúl Serrano, Libresa, Raúl Pacheco, Pedro Barreiro, CCE (Tun-gurahua). Ando leyendo poco a poco. ¡Hasta abril! “Amén”.

PD: Apagar velas, como viejo Librero, por los 80 años de FCE de México. Habré vendido miles y miles de libros de esta prestigiosa Editorial, especialmente los Breviarios y la Colección popular, ¿ejem-plos?: ‘Pedro Páramo’, ‘El llano en lla-mas’, ‘El Capital’, de Carlos Marx; ‘Ser y tiempo’, de Heidegger, ‘Los de abajo’... ¿Y los cientos de textos universitarios, como los de Keynes y Zamora? ¡Qué tiempos aquellos! ¡Congratulaciones! Y qué bue-no que el FCE tenga previsto poner aquí una sede, quizás sea en un sitio central de Quito. ¡Bienvenidos!

Cualquier envío a la Casilla 17-01-2561 o entregar a Lana Sola en la Sucre 370 y García Moreno (Quito), colo-cando el nombre de Martha Freire Rubio y atención a Edgar Freire Rubio.

tome nota

Ecuador, domingo 30 de marzo de 2014bambalinas8

recomendados

‘Antes del atardecer’ (2004) es una pelí-cula romántica estadounidense, dirigida por Richard Linklater y protagonizada por Ethan Hawke y Julie Delpy, quienes también participan en el guion junto al director.

sinopsisSe trata de la secuela de ‘Antes del ama-necer’. Tras nueve años de su encuentro en Viena, Jesse y Celine nuevamente están juntos. Esta vez, París los cobija. Él promociona su libro, el cual se basa sobre su pasado con Celine. Ella asiste a la librería donde el escritor firma tex-tos. Los profundos diálogos, las mágicas miradas y el tan sutil pero furtivo cortejo, renacerán en un soleado día parisino. Sus vidas han cambiado, pero su amor parece insuperable.

Como la primera bocanada de aire de la mañana, aquella que, conscientemente, evidencia que seguimos vivos, así se percibe el último trabajo del estadouni-dense Beck.‘Morning Phase’, lanzado a finales de febrero de este año, demuestra que este artista continúa experimentando entre diversos géneros, aunque pierda sus raí-ces de folk y soul.Un total de 13 temas conforman el álbum, los mismos que fueron compuestos por el propio Beck, donde sobresalen cancio-nes como: ‘Morning’, ‘Blackbird chain’, ‘Country Down’, entre otras.

ddelatorre@lahora.com.ec

diálogos y miradas

las fases de Beck

País: Argentina año: 2013Directora y guionista: Lucía PuenzoreParto: Natalia Oreiro, Álex Brendemühl, Diego Peretti, Elena RogerstiemPo: 93 minutoscalificación: ****

‘Wakolda (el doctor alemán)’

ricardo SEGREDA • ‘Wakolda’ (‘El doctor alemán’), de Lucía Puenzo, basada en su novela, es una contemplación perturban-te, aunque fascinante, sobre el infame nazi doctor Josef Mengele y su vida en el exilio de Sudamérica.

Mengele, desde luego, fue el más no-table nazi no-capturado después de la Segunda Guerra Mundial. Por factores culturales y políticos, Mengele fue pro-tegido por los gobiernos de Argentina, Paraguay y Brasil, en connivencia con sus comunidades de expatriados alema-nes que tenían considerable influencia sobre las dictaduras derechistas que go-bernaron esos países. Incluso el Mossad de Israel, que había capturado a Adolf Eichmann, no lo pudo arrestar debido a limitaciones legales de acuerdos inter-nacionales de extradición.

En 1978, con Mengele todavía vivo, el nazi salió como el principal antagonista en la película hollywoodense de suspen-so ‘Los niños de Brasil’ y luego murió al año siguiente por causas naturales o por ahogamiento accidental. Pero, mientras que la citada película fue una explotación de Mengele como leyenda, ‘Wakolda’ es una exploración del tema de este villano alemán. Hay también una temática co-nexión entre esta película y la última de Puenzo, la aclamada ‘XXY’, que trata de un tema médico-fisiológico, así como se-xual, sobre un adolescente nacido como varón y mujer.

Con una audacia creativa, Puenzo ha inventado un contexto de ficción para presentar el monstruoso médico alemán de Auschwitz, el pervertido, sociópata

cirujano-científico que rutinariamen-te trató mujeres y niños, especialmente gemelos, como animales de laboratorio. En ‘Wakolda’ Mengele es virtualmente adoptado por una familia argentina que recientemente heredó una casa de campo por un lago en la comunidad escénica de Bariloche.

Una niña actriz muy talentosa, Flo-rencia Bado, tiene el papel de Lilith, la hija de 12 años de la familia que es nota-blemente más pequeña que sus compa-ñeros y cuyo cuerpo aún está por desa-rrollar. Mengele (alias Helmut Gregor) y Lilith tienen una fascinación mutua, él porque el cuerpo de Lillith parece atro-fiado para su edad y ella porque él es un hombre exótico de ciencia.

Como concebido por Puenzo y realiza-do por el actor Álex Brendemühl, Men-gele sale como un villano simpático dig-no de Alfred Hitchcock: culto, atractivo y sinuosamente encantador. El dicho de que ‘el camino al infierno está empedra-do con buenas intenciones’ aplica en este caso con una venganza cuando el médico alemán ofrece ‘corregir’ el problema de Lilith (que lo ha hecho objeto de burla en su nueva escuela). Utiliza un tratamien-to hormonal supuestamente progresista, uno que con mucho ánimo también quie-re aplicar al ganado.

También tiene un interés personal en el embarazo de la madre de Lilith, Eva, es-pecialmente después de que descubre que tiene gemelos (en Auschwitz los gemelos eran las principales víctimas de sus ‘ex-perimentos’). Al mismo tiempo está fasci-nado con la profesión del padre de Lilith,

El nazi Mengele en

Argentina

un fabricante de muñecas. El último sirve como metáfora para la idea nazi de una ‘raza superior’ y, lógicamente, Mengele ofrece asesorar al padre sobre cómo fa-bricar muñecas ‘perfectas’ con cabellos rubios y ojos azules.

La actriz Elena Roger es magnífica en el papel de Nora Eldoc, la agente del Mossad que encontró a Mengele en Ar-gentina, pero no pudo convencer a sus supervisores de capturarlo antes de que huyera a Paraguay.

La película tiene muchos temas provo-cativos, como la misoginia que las niñas en una cultura conservadora sufren en su adolescencia y la actitud ambivalente de los argentinos hacia la cultura alemana que muchos querían emular, pero sin ad-mitirlo, en los años después de la Segun-da Guerra Mundial.

De hecho, la relación de los padres de Lilith con Mengele, intimidados por este ‘experto’ europeo, pero con dudas acerca de sus métodos y motivos, simboliza esta ambivalencia.

rick.segreda@gmail.com

PelÍcUla. El actor Álex Brendemühl interpreta al doctor nazi Josef Mengele en el

filme de Lucía Puenzo.