una nueva modalidad para belladona
Post on 15-Dec-2014
312 Views
Preview:
DESCRIPTION
TRANSCRIPT
Una nueva modalidad
para Belladona.
Por. Cyrus Maxwell Boger, 1898.
“Los escritos menores de C. M. Boger.”
Traducción. Lic. Hom. Francisco Navarro Rincón.
La experiencia clínica es con frecuencia el único método, por el cual
somos capases de determinar las modalidades de nuestros remedios.
Es por eso, que con muchas dudas llamo su atención a un remedio tan
antiguo como la misma homeopatía y reclamo para él una modalidad
que hasta ahora solo se insinúa en sus experimentaciones.
Todos nosotros hemos sabido desde los primeros días de nuestra
practica, que los dolores de cabeza de belladona son generalmente
agravados por acostarse con la cabeza baja, y cuando se toma la
acción general del remedio se toma en consideración este hecho que
no parece tan extraño después de todo, porque sabemos que
congestiona la circulación capilar, por lo tanto, el latido cardíaco se
transmite a las ramificaciones más finas del sistema arterial, así que
dejando que el miembro lesionado o inflamado cuelgue hacia abajo
favorece esta congestión e incrementa la presión interna al mismo
tiempo aumenta el dolor.
Esa es la patología del mismo. La experiencia clínica nos confirma
esto, y nos muestra que la agravación por acostarse corre como un
hilo rojo a través de toda la acción de este importante remedio qué
Boenninghausen clasifica entre los antipsoricos. Personalmente he
encontrado que esto es una modalidad casi invariable de Belladona,
sea cual sea la condición, desde dolores de cabeza hasta todo tipo de
condiciones inflamatorias gota y tumores. Tan firmemente esta esto en
mi mente, que lo mantengo como uno de los síntomas principales o
Key-notes, para el remedio.
Con el fin de demostrar esto plenamente, relatare la historia, en parte
de un caso, curado donde esta característica se destaco con un
protagonismo poco común.
Este verano, hace dos años, un paciente trabajador de una mina fue
gravemente herido tras ser golpeado fuertemente en la cabeza cuando
un tablón se le cayó siendo la distancia de seis metros, su condición,
por un tiempo, parecía alarmante, pero gracias a nuestro inmortal
Hering, GLONOINUM, 1m, retiro toda evidencia de su discapacidad.
El verano pasado de nuevo fue gravemente herido, al ser golpeado en
la espalda por una pieza de escantillón; esta vez su recuperación
parecía solo parcial, y gradualmente comenzó a perder la fuerza,
aparentemente causado por una diuresis que aumentaba lentamente,
lo que parecía ser provocado por acostarse. El venia de vez en
cuando por medicina y trabajaba días impares hasta que durante el
invierno la gripe lo ataco. Esto lo confino a la casa, donde lo vi
apuntalado a una silla con un ligero aumento de la temperatura,
algunos dolores de cabeza, y gran postración. Al preguntarle porque,
él estaba constantemente en esa silla, respondió que en cuanto se
acostaba la profusa orina volvía llenando hasta la mitad de un cubo
durante la noche. Al expresarle mi duda acerca de esta declaración, el
pobre hombre se ofreció a quedarse en la cama en la noche para
convencerme de su verdad, lo que fue una crueldad de mi parte,
porque el hombre es escrupulosamente honesto y veraz. Sin embargo
al día siguiente se encontraba el recipiente lleno a más de la mitad de
orina y mi paciente nada mejor. Esta ocasión su dolor de cabeza me
hizo pensar en Belladona de la cual recibió dos dosis de la 45m
(fincke) el dolor de cabeza desapareció de inmediato, y por extraño
que parezca la micción profusa tomo el mismo curso. Ahora bajo
placebo ha mejorado, crecido fuerte, y se ha expuesto al trabajo más
duro.
C. M. Boger. M. D.
top related