el mundo, san juan, p. r. - domingo 5 de junio de 1938...

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    u EL MUNDO, SAN JUAN, P. R. - DOMINGO 5 DE JUNIO DE 1938. — a un portorriqueño capaz de rehusar- la. Pero yo también, como aquel gran líder nuestro que se llamó Luiz Muñoz Rivera, sé acallar en mi alma el sentimiento natural y legitimo en beneficio de los inte- reses y de la felicidad de mi pa- tria, si es que esos intereses y esa felicidad reclaman otra solución. Y de igual manera me expreso en cuanto a !a solu-lón Estado si.

    como dije antes, ella también pue- de hacer algún dia nuestra felici- dad en el orden político, económico y social.

    ,....••••«•••■  »....,.

    "Se ha dicho qua no somos ame- ricanos porque nos oponemos a la enseñanza DEL idioma Inglés en las escuelas, y esto (lo saben muy bien los señores de la minoría) es una gran falsedad. ¿Cómo hemos oe oponernos a la enseñanza DEL Inglés los que precisamente quere- mos y pedimos, según está clara- mente consignado en nuestro pro- grama, qi'» se l*J s esta ««'"natu-

    ra toda la extensión posible en nuestras escuelas, precisamente porque sabemos la gran necesidad c,ue tiene de ese idioma nuestro pueblo en su necesaria vida de compenetración con el pueblo de los Estados Unidos? A lo que nos- nemos, y esto es.pedogógicamente irrefutable, es a la enseñanza EN INGLES en nuestras escuelas, sen- cillamente porque esto es un enor- me disparate, y es además un cri- men que se comete con nuestros niños, obligándolos, forzándolos a desarrollarse en un idioma que no entienden, y porque tal sistema, además, nos cuesta el doble, más del doble, de lo que nos costaría un sistema sencillo de enseñanza EN nuestro idioma con enseñanza DEL Inglés. Muchas, muchas veces he- mos explicado nosostros esto a la minoría, y parece que no lo han en- tendido los señores adversarios, o que no lo quieren ntender. ¿Po- dría explicarme esto el doctor Bar- bosa? Yo se lo suplico a Su Seño- ría, y espero que Su Señoría podrá complacerme en cosa tan justa y tan fácil como ésta.

    BARBOSA.— Parece que Su Se- ñoría me ha escogido a mi para decir todo lo que quiere. Esta es una nueva faz de la discusión, por- que Su Sefioria está usando argu- mentos que yo no he usado esta tarde.

    BARCELO.— Yo no sé si estoy equivocado; dispénseme en todo ca- so, doctor; pero aqui se ha dicho que nosotros nos oponemos a la enseñanza DEL inglés, y fran- camente quiero decir a log republi- canos que nos combatan dentro de las propias ideas que sustentamos. Nosotros tenemos derecho a exigir que se nos crea por nuestra pala- bra y por nuestros actos, sin pene- trar, o Intentar penetrar, en nues- tro fuero interno. Cuando decimos que somos y nos sentimos leales americanos, que defendemos la bandera y estamos dispuestos a mo- rir por ella, se nos debe creer lo que decimos.

    "Que nos concedan simplemente.

    como buenos ciudadanos america- nos el régimen de gobierno que pe- dimos, y que después, cuando otras generaciones nos sucedan, nos con- cedan la independencia o el Esta- do, en la forma que Un unionis- ta mente supo explicar el señor Martines Nadal, y no en otra; pe- ro que nos hagan libres, como es justo que lo seamos y como es Jua-, to que lo pidamos, si es que ae quiere que no levantemos nuestras , *> protestas cada vez que nos demos cuenta de cualquier Inferioridad a que seamos sometidos".

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    La claridad y la precisión con que aparece expuesto en esos párra- fos el pensamiento da la Unión de Puerto Rico en lo concerníante a sus demandas políticas programá- ticas de 1920, no puede ser mayor. Es Innegable que durante su dis- curso, del cual aún quedan algunos detalles por conocer a mis lec- tores, Barceló pudo lograr mante- ner su serenidad inmune a los ata-' ques maquiavélicos de sus adver- sarios y permanecer, en toda laj discusión, dentro del programa, ha- ciendo del mismo una magnifica interpretación.

    Empero en el fondo del pense- • miento del orador parecía estar agitándose mientras hablaba, la idea de un nuevo cambio de plata- forma política para la colectividad que él acaudillaba, cuando de sus labios salieron estas palabras:

    "Pero yo también, como aquel gran líder nuestro que se llamó Luis Muñoz Rivera, sé acallar en mi alma el sentimiento natural y legitimo en beneficio de los intere- ses y de la felicidad de mi patria, SI ES QUE ESOS INTERESES Y ESA FELICIDAD RECLAMAN OTRA SOLUCIÓN".

    Y es que en las filas heterogéneas t de la Unión de Puerto Rico, donde la mayoría era partidaria da un régimen autonómico amplio, tan* amplio como el de un Estado de la .«. Unión Americana sin las cargas que consigo debería traer la lncor-» poración, venia sintiéndose, de ma- nera enérgica, pero respetuosa, una viva protesta contra el Jefe desde que éste y todos los unionis- tas que comparecieron ante la co- misión de congresistas de los Es- tados Unidos en abril de 1919, abo- garon por la independencia y Bar- celó dijo que la querían los porto- rriqueños aunque se murieran de hambre, no siendo esto lo que pen- saba y deseaba la mayoría de los habitantes de la Isla ni de los afi- liados a la Unión de Puerto Rico.

    Cierto que aqui mucha gente sa ha muerto de hambre desde la épo^ ca de la Conquista a raiz del Des- cubrimiento, hasta nuestros días, y que habrán de morirse mucha en tiempos venideros; pero asimismo . es cierto que aqui nadie quiera, ni ' ha querido nunca estando en sus cabales, morirse por falta de ali- mentación a cambio de qua le con- cedan a la Isla la independencia.

    En el seno de la Unión de Puer- to Rico comenzó a surgir una cri- sis con motivo de aquellas declara- ciones inoportunas; crisis que se aplacó un poco con al programa político mencionado, al de setiem- bre once de mil novecientos. vein-» te, que llevó de nuevo: a la colecti- vidad a los postulados de la Asam- blea de Miramar, poniendo sordi- na a las manifestaciones del ideal ' de la propia soberanía en un apla- zamiento justificado a cuyo fin de- bía llegarse por etapas.

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    Minami asume el Gobierno japonés... (Continuación de la página jé.)

    obligó al Gabinete da Toldo a ne- gociar con él y no con al de China el "incidente de Manchuria". Fué él quien hizo notificar a la Liga qua nada tenia que hacer en es- ta asunto advlrtiéndole que al Ja- pón tenia "ciertos derechos espe- ciales en Manchuria y en Mongo- lia". Fué él, y no el Ministro de Re- laciones, quien dio la solución fi- nal que trajo el Imperio y la coro- nación de Kang Teh en Manchu- kuo.

    KWANTUNG MAS FUERTE QUE TOKIO

    Luego Minami fué a tomar co- mando del Ejército da Kwantung, que tal es el nombre del Ejército que el Japón mantiene "en el conti- nente", Manchukuo y China. Mina- mi erigió a ese Ejército en otro Gobierno tanto o más poderoso que el de Tokio. Estableció la teoría de qua es el ejército Kwantung y no la Cancillería quien debe dar la norma de lo que el Japón debe hacer en el continente. Habla de- Jado da Ministro da la Guerra en su lugar al fogoso general Sadao Araki, el mismo que acaba de vol- ver al Goblnete, el cual era el portavoz de su política y de su au- toridad an Tokio.

    MINAMI EN EL INCIDENTE DEL YALU EN 1931 Y EN EL DE

    MARCO POLO EN 1937

    Toda la historia de los últimos cuatro aftoa en China es historia escrita con la espada, la astucia, el fanatismo patriótico y la despia dada acometividad de Minami. Cuan- do los generales no adictos a Mina- mi cerraron el camino da la Pre- sidencia del Consejo a Ugaki, Mi- nami logró qua el Emperador lla- mara al Gobierno al general Sen- juro Hayashi que era un instru- mento secundario no de toda la confianza de Minami. Este fué el que convocó a elecciones y aa de- jó derrotar abrumadoramente. Con el principe Konoye, que la suce- dió. Minami creyó llegado el mo- mento da forzar ea China la misma política que habla fañado en Man- churia en 1931, El incidente dal fe- rrocarril Manchuriano tuvo su con- trapartida, siete aftoa más tarde en el del Puente Marco Polo, y an- tes de que el Gobierno de Tokio hubiera tomado resoluciones al res-

    pecto Minami tenia sus divisiones aa marcha "castigando" a loa chi- nee como habla castigado años atrás a loa manchurlanos. El Inci- dente necesario se habla produci- do y el Gobierno pasaba de Tokio al Ejército Kwantung otra vez. Asi media China fué invadida y dos Gobiernos chinos al estilo de los de Manchuria da 1931 se han orga- nizado ya que acaban da unirse en los últimos días de mayo en pre- paración del nuevo Manchukuo que ha de comprender buena parte de la China. En este instante se ha producido la crisis ministerial y Mi- nami ha asumido de hecho, el po- der an Tokio que ya ejercía desde Korea. /

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    "SI LOS CHINOS QUIEREN DIVIDIR LA CHINA...

    "Esperen y verán" dijo el nuevo canciller Ugaki al 27 de mayo re- ciente. En un hombre que no fue- ra este veterano de 70 años y Te- niente de Minami podrían tomarse estas palabras como simple fanfa- rronada. Pero Ugaki es hombre de acción y tiene la "linea Minami" qua seguir, la misma de Manchu- kuo. Ugaki perteneció muy joven al Estado Mayor del Colegio Militar de Tokio, fué adicto Militar en la Embajada de Berlín, miembro del Supremo Consejo de Guerra, Mi- nistro de Guerra, candidato a Pre- mier. "Nuestra norma an China, declaró hace tiempo, es que China ea para loa chinos. Ahora ai los chinos quieran dividir su país nos- otros nada podemos hacer al res- pecto1'. Ugaki aplicará asa políti- ca sin lugar a dudas y hará que los chinos quieran dividir a su China.

    ARAKI QUIERE AL JAPÓN EN LOS 7 MARES Y LOS 5

    CONTINENTES

    Sadao Araki ea el ídolo de la ju- ventud militar; ea al filósofo y al orador y propagandista a la Goeb- bels de las teorías teocráticas mili- tares de Minami. 'El principio Im- perial de la nación japonesa, decla- ró hace poco, tiene que ser propa- gado por sobre los Siete Marea y extendido a loa Cinco Continentes. Todo lo qua se oponga a su progre- so debe ser suprimido por la fuer- za".

    En una entrevista publicada ha- ce pocos meses habló libremente de la necesidad vital en que el Japón se encontraba da "atacar, directa-

    menta al Pueblo Rojo del Soviet". "Loa occidentales, agregó, son en general materialistas. El Japón es espiritualista... Debemos unirnos para la armonía universal. Pero el Comunismo es la Religión de las bestias. Rusia es una prisión sin murallas... No hay sitio en un mundo civilizado para el Comunis- mo..."

    LA ALIANZA CON LA MARINA Y LA CASA MITSUI

    El Gabinete del 27 de mayo es pues Minami sin careta; la políti- ca del Ejército Kwantung de ex- pansión sin limite en el continente está en el timón. Minami ha resta- blecido además al "shogunato" en el Japón. El Emperador ya no go- bierna, su órgano de comunicación con el pala es el Ejército y el Ejér- cito es Minami; no un shogun feu- dal sino un shogun de laa fuerzas armadas todas. Fué sin duda el mis- mo Minami quien impidió la elimi- nación del Gabinete del Ministro del Interior almirante Nobumasa Suyectzugu; Minami quiere colabo- rar con la Marina, concillarse con lea Almirantes qua siempre resis- tieron un tanto su\ omnipotencia. Con la entrada al Ministerio de Fi- nanzas de Selhln Ikeda, Minami realiza además la unión con la ca- sa Mitsui dueña de más de la mi- tad de la riqueza industrial, comer- cial y financiera dal Japón. Ikeda fué Jefe de esa casa cuasi mitológi- ca hasta que entró a ocupar el car- go de Presidente del Banco del Japón de donde ha pasado al Mi- nisterio de Finanzas.

    El nombramiento del general Sheishlro Itagaki para Ministro de la Guerra es un gesto muy pro- pio de Minami. Eata General fué Shantung, él fué el qua sufrió hace poco le más afrentosa derrota que haya sufrido el ejército japonés en aj que loa chinea derrotaron en un siglo, la de Taiershchwang. Mi- nami quiere demostrar asi que sus generales no son responsables de eae desastre, son los elementos ci- viles infiltrados en el Gobierno de Tokio qua obstaculizaron el envío de los refuerzos que Itagaki pedia sin cesar desde China.

    PERSONAJES MUNDIALES

    Paul Van Zeeland, el amigo del Rey

    Paul Spaak es un socialista sin lucha de clases como más o me- nos puede considerarse la filiación do su maestro y amigo Van Zee- land que lo llevó al Gobierno en su primer Gabinete, lo hizo Ministro

    Lea los clasificados de EL MUNDO

    VAN jxr yasg de Relaciones en su segundo Mi- nisterio y ha sido sin duda quien lo perpetuó de Canciller en al Mi- nisterio Janson qua acaba* de re- nunciar y lo ha empujado al car- ge de Primer Ministro que ocupa desde el 17 de mayo reciente. '

    Spaak es acaso el primer jefe de un ministerio en la historia del mundo que se presenta ante un congreso donde se sienta su propia madre. Ella es senadora; el padre del nuevo Premier es un alto fun- cionario público de filiación libe- ral, un tio suyo fué ministro libe- ral Van Zeeland es la debilidad del Rey Leopoldo; si tiene igual afecto y confianza en Spaak a pe-

    sar de su destacado socialismo y

    de su sombrero alón a la Blum, es porque Van Zeeland se lo ha recomendado. La amistad del Rey con Van Zeeland y su grupo cons- tituye la primera fuerza política del Reino. El Joven monarca ejer- ce de esa manera una influencia en la política y en el gobierno que no se ajusta exactamente a las prácticas de la monarquía consti- tucional y parlamentaria. Muchas veces ha opuesto a los líderes po- líticos para asegurar el predomi- nio del grupo Van Zeeland que es de técnicos con un "brain trust" cu- yo núcleo es Henry Le Man, el Mi- nistro de Hacienda que acaba de renunciar para ser reemplazado por M. Gersrd, el Ministro ühersl que acompañó a Van Zeeland en su primer gabinete y dio solución su primer Gabinete y dio solución a la grave crisis financiera deva-

    Van Zeeland y Le Man eran par- tidarios de la devaluación y fueron ellos loa que en abril de 1935 cor- taron en 28 por ciento el valor en oro da la moneda belga y quebra- ron asi el llamado "bloc del oro" (Francia, Bólgica, Holanda. Suiza y los países escandinavos). La pre- sión de la libra desvalorizada ha- cia oada día más difícil entonces el mantenimiento de la orientación deflacionista del "bloc de oro"; la devaluación del dólar la hizo prec- isamente imposible. Van Zc'nnd tuvo el valor de hacer lo que Fran- cia sólo comprendió un año más tarde y de seguir una política mo- netaria muy semejante a la que aplica Roosevelt desde que abando- no el patrón oro. Sobre esa base Van Zeeland durante su primera Jornada en el Gobierno disminuyó •' desempleo y contuvo el alza del •osto de la vida efl menos de 9 por ciento en circunstancias que los precios al por mayor subieron 25 por ciento por efecto de la deva- luación.

    Van Zeeland se hizo el campeón de la democracia» y del régimen parlamentarlo contra las arremeti- das totalitarias dé León Degrelle. Después del "match" de la elección en Bruselas en que Van Zeeland renunció para hacer frente al de- safio de Degrelle y triunfó, el re- xJsmo pareció herido de muerte. Pero no fué asi. Esta renaciendo otea ves; sus 21 diputados gana-

    (Continuación de la página 2.)

    una ilusión. Recuerdo unas pala- bras de Carlos Nordmann, físico y astrónomo francés. Mi memoria, co- mo usted verá, todavía no se ha debilitado del todo. Deda Nord- mann: "Creíamos al tiempo y al es- pacio escarpias sólidamente clava- das en el muro tras el cual se ocul- ta la realidad, en laa que colgába- mos nuestras flotantes nociones del mundo exterior como colgamos la ropa en la percha, y ahora yacen en el cascote de las viejas teorías, arrancados y torcidos por el mar- tillo de la física nueva. Bien sa- bíamos, es cierto, que el alma de los seres permanecía oculta para nosotros; no obstante, creíamos ver-

    le el rostro. He aquí que, al acer- dos en una sola elección sobre cero en al congreso anterior mantienen una vivísima agitación y sin duda contribuyeron a la calda de Jan- son cuando se unieron a los cató- licos para votar contra los proyec- tos socializantes de Le Man.

    Aún cuando sus gabinetes de coa- lición no tenían diferencia alguna con los anteriores formados por li- berales y socialistas y católicos Van Zeeland les dló un carácter "nacional" que Spaak acaba de acentuar.

    Acusado de insignificante por unos, realzado como el único hom- bre de Estado de las democracias que no aparece confundido y vaci- lante Van Zeeland cayó envuelto en las sombras del escándalo del Banco Nacional de Bélgica aun cuando probó hasta la evidencia absoluta qua no habla incorrección alguna que pudiera imputársela. Pero fué una amarga jornada da todas maneras, amarga y muy tria- te. Frank el que era Gobernador del Banco cuando Van Zeeland era asesor murió y casi simultánea- mente con 41 fallecieron los direc- tores Tilmont y Barnat; el gene- ral Etienne que fué declarado lim- pio de toda imputación se suicidó sin embargo, y. otro suicida fué el director Puissant...

    Van Zeeland se doctoró en cien- cias económicas en Lovaina y en Princeton (E. U.). Ea casado, con hijos. Su esposa fué la más intima amiga de la Reina Astrid, lo que posiblemente cuenta en la amistad y confianza afectuosa qua el Rey le dispensa.

    carnos, éste no es sino una másca- ra El mundo exterior que Elnsteln nos muestra sólo es un baile de dis- fraces, y, por una ironía falaz, so- mos quienes han hecho los antifa- ces de terciopelo con tan pasajeros visos y los trajes relumbrantes. Le- jos de revelarnos la realidad, el es- pacio y el tiempo no son, según Elnsteln, sino velos flotantes que nosotros mismos hamos tejido y que nos la ocultan".

    —¡Es sorprendente!—dije yo. —SI que lo es. Fíjese usted:

    Cuando uno lee estas frases del sa- bio físico: "Creíamos al tiempo y al espacio escarpias sólidamente clavadas en el mundo tras el cual se oculta la realidad..." le parece que está leyendo en un libro de teosofía, de ocultismo, o por lo me- nos de la filosofía de Schopenhauer, Un influida por la mística dal Oriente; pero no es asi. Ese es el lenguaje de la física nueva. El len- guaje de un Carlos Nordmann, de

    un Elnsteln, de un Henri Poincare. —¡Es sorprendente!—volví yo a

    decir por decir algo. —Lo es, mi querido amigo. La

    ciencia se llena de misterio. La ciencia se llena da infinitud y de eternidad.

    —¿Quiere usted que descendamos ahora a la huerta, don Eulogio?— dije sonriendo a mi venerable in- terlocutor.

    —Con mucho gusto, amigo—con- testó don Eulogio incorporándose.

    —No, no, don Eulogio. He que- rido decir que descendamos ideoló- gicamente a la huerta ¿No cree us- ted qua para darse cuenta de lo sorprendente de todo lo creado no es preciso subir a aquellas alturas sino que aqui mismo tenemos el prodigio?

    —Eso creo, —contestó don Eulo- gio.— El prodigio está aqui. al al- cance de la mana Un tomate de esos es tan sorprendente como aquellas constelaciones. Una misma energía los ha hecho a los dos y en último término están formados de la misma sustancia Lo maravi- lloso está aquí, en la tierra junto a nosotros sin que sea preciso ir a buscarlo más lejos. Lo maravilloso da la tierra vale tanto como lo ma- ravilloso del cosmos. Un hombre, usted 'o yo, valemos tanto o más que todo el Universo. Pues bien; eso es lo que le da prestigio a nues- tra vida. Y esa noción y ese sen- timiento es en mi indesarralgable. No puedo apartarlos de mi. Y esa es la percepción sideral y cósmica de la vida de que le hablaba antea.

    —¿Tiene importancia darle valor a la vida?

    —¡Qué duda cabe! Darla valor a la vida es darnos valor a nosotros mismos. Realzar la vida es realzar- nos nosotros mismos. Porque, ¿po- demos concebirnos como separados, como distintos, de la vida? La vida y "nosotros" somos una y la misma cosa. Si tenemos un alto concepto de la vida lo tendremoa de nuestro ser y de nuestro destino. Y eso tie- ne consecuencias Inmensamente be-' nefidosas y digniflcadoras en la vi- da individual, en la social, y en la civilización humana, —explicó dora Eulogio.

    Eran más de laa seis de la tarde cuando ma despedí del anciano. En invierno las sombras de la noche van ganando rápidamente el valle y la montaña Cuando entré al pue- blo ya se encendían las luces de laa casas. Lo primero que hice al lle- gar a mi cuarto —como siempre que lo visitaba— fué copiar en una libreta la conversación del anciano. Por eso conserve fielmente sus pa- labras.

    MARTA MAREK,... (Continuación de la página é)

    Juez la notificó de la sentencia agregó: "Su satánica carrera ha* llegado esta vez a su fin". Marta recibió la sentencia con desdeñosa serenidad. "Espero la muerte con la mayor calma,.dijo, puedo llevar- me conmigo la reconfortante cer- teza de que yo no he asesinado. sino que he sido asesinada.

    Marta ejercía un poder tal que el Fiscal hizo especial mención da esta circunstancia para que el Ju- rado no fuera a dejarse engañar o fascinar como el que la habla abauel- to en 1925. Marta eatrajo dinero da to- das sus victimas y a todas laa hizo testar a su favor y asegurarse a su favor. Habla asegurado también a su tierno hijo Alfonso que estuvo a punto de ser su sexta victima.

    un demonio en polleras" la lla- mó el Fiscal, "la mejor cobra" fué' e! término favorito de la Prensa. Marta tuvo un solo rasgo humteo durante el proceso tratando" de proteger a "su hermano del alma" Jeno-Newman. judio comumat» un tiempo terrorista al servicio- da Ba- la «Cunen Hungría, que fué quien le ayudó en la preparación de laa ??,?' * J*1 ««"P*1"*» «> seguros duslÓn!00 d° ' **■ aR

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