a tema 01

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TEMA 1. La dimensión simbólica (elaborar ficha 1) 1. Somos seres simbólicos 1.1. El “Homo simbólicus” - Nuestra estructura binaria (sí-no, tierra-cielo, claro-oscuro, alto-bajo, masculino-femenino, sístole-diástole, inspiración-expiración, izquierda- derecha, nuestra manera de caminar bípeda, el árbol con su raíces y ramas, día-noche, húmedo-seco…) Existen tantas realidades que percibimos en forma de pares y construimos tantos conceptos en base a su par, que la estructura binaria nos abruma y nos conforma enormemente, siendo difícil escapar a ello. No hablamos de estructura dual o dualista. La diferencia es considerable y la podemos ver en esta imagen desde la forma binaria o dualista: imagen binaria imagen dual En la imagen binaria los 2 componentes son aliados para la creación de formas, tonos, mezclas, gradaciones, diferentes del blanco o del negro. En la imagen dual (o dualista) los 2 componentes están contrapuestos y no crean nada nuevo sólo existen blanco o negro y donde está uno no puede estar el otro, no comparten absolutamente nada de la imagen. 1.2. El “Homo religiosus” En nuestra afición por la formación de pares hemos creado un par singular para mostrar nuestro modo de concebirnos trascendesntes o religiosos. Es el par hombre-dios. Por efecto del machismo “hombre” se ha acabado identificando con “varón” para terminar formando pareja con “mujer”, perdiendo así un origen etimológico interesante y curioso por conocer: Es de sobra sabido que en la lengua española el término 'hombre' reúne las acepciones de 'ser humano' y de 'varón', siendo la segunda de las dos la novedosa y secundaria, pues lo que su ancestro etimológico hominem significaba era precisamente 'ser humano'.( mares homines: "seres humanos machos", homines feminae: "seres humanos hembras", homines... uirei atque mulieres: "seres humanos varones y mujeres"). Los hombres (homines), los humanos (humani) son, pues, humildes (humiles) porque son de la tierra (humus), frente a los seres luminosos o divinos, a los dioses (dei), que son celestes (caelestes) o de arriba (superi). El hombre es por naturaleza, por esencia, humilde. Y por eso querer volverse otra cosa es un acto de soberbia, de superbia, palabra emparentada con superi.

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Page 1: A tema 01

TEMA 1. La dimensión simbólica (elaborar ficha 1) 1. Somos seres simbólicos

1.1. El “Homo simbólicus”

- Nuestra estructura binaria (sí-no, tierra-cielo, claro-oscuro, alto-bajo, masculino-femenino, sístole-diástole, inspiración-expiración, izquierda-derecha, nuestra manera de caminar bípeda, el árbol con su raíces y ramas, día-noche, húmedo-seco…) Existen tantas realidades que percibimos en forma de pares y construimos tantos conceptos en base a su par, que la estructura binaria nos abruma y nos conforma enormemente, siendo difícil escapar a ello. No hablamos de estructura dual o dualista. La diferencia es considerable y la podemos ver en esta imagen desde la forma binaria o dualista:

imagen binaria imagen dual En la imagen binaria los 2 componentes son aliados para la creación de formas, tonos, mezclas, gradaciones, diferentes del blanco o del negro. En la imagen dual (o dualista) los 2 componentes están contrapuestos y no crean nada nuevo sólo existen blanco o negro y donde está uno no puede estar el otro, no comparten absolutamente nada de la imagen.

1.2. El “Homo religiosus” En nuestra afición por la formación de pares hemos creado un par singular para mostrar nuestro modo de concebirnos trascendesntes o religiosos. Es el par hombre-dios. Por efecto del machismo “hombre” se ha acabado identificando con “varón” para terminar formando pareja con “mujer”, perdiendo así un origen etimológico interesante y curioso por conocer: Es de sobra sabido que en la lengua española el término 'hombre' reúne las acepciones de 'ser humano' y de 'varón', siendo la segunda de las dos la novedosa y secundaria, pues lo que su ancestro etimológico hominem significaba era precisamente 'ser humano'.( mares homines: "seres humanos machos", homines feminae: "seres humanos hembras", homines... uirei atque mulieres: "seres humanos varones y mujeres"). Los hombres (homines), los humanos (humani) son, pues, humildes (humiles) porque son de la tierra (humus), frente a los seres luminosos o divinos, a los dioses (dei), que son celestes (caelestes) o de arriba (superi). El hombre es por naturaleza, por esencia, humilde. Y por eso querer volverse otra cosa es un acto de soberbia, de superbia, palabra emparentada con superi.

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1.3. El símbolo: entre la presencia y la ausencia - El ser humano puede representar el mundo de dos maneras: directa e indirectamente. La directa tiene lugar cuando la cosa se representa «en carne y hueso» y se hace presente al espíritu en sí misma. La indirecta sucede cuando el objeto está ausente y se le re-presenta al ser humano en imagen. Una de esas formas indirectas de re-presentación es el símbolo. - El símbolo antiguo indica un objeto que se rompe en dos partes iguales de forma que cada uno de los firmantes de un pacto se queda con una parte. Cada parte por separado carece de valor. El valor simbólico radica en la relación de una mitad con la otra. La unión de ambas partes llevada a cabo por los portadores es lo que constituye la prenda del pacto. La reunión de las partes escindidas lleva al reconocimiento, a la identificación y al encuentro. - Lo expresa bellamente y con precisión •Mircea-Eliade: «El símbolo revela ciertos aspectos de la realidad -los más profundos- que se niegan a cualquier otro medio de conocimiento. Imágenes, símbolos, mitos, no son creaciones irresponsables de la psique, responden a una necesidad y llenan una función: dejar al desnudo las modalidades más secretas del ser» - El símbolo presencializa una ausencia y actualiza algo que no puede alcanzarse, que es imposible de percibir o no es conocido. Lo específico del símbolo es ser epifanía del misterio, manifestación de lo indecible. El símbolo nos abre a la trascendencia en el seno de la inmanencia, apunta a la presencia en medio de la ausencia, remite a la comunicación cuando se experimenta la soledad. Pero precisamente por su carácter inexaurible (inagotable), el símbolo, además de desvelar, vela, además de manifestar, oculta, para no disolver el misterio.

1.4. Los grandes temas simbólicos : No son muchos los grandes temas simbólicos presentes en la mayoría de las culturas: el origen-destino, la vida-muerte, el amor-fecundidad, el bien-mal

2. LA DIMENSIÓN SIMBÓLICA 2.1. La conciencia de límite: las especies animales marcan sus límites y a ellos se aferran,

el ser humano tiende a trascender los límites.

CONOCIDO

PROFANO

DESCONOCIDO

SAGRADO

TABÚ(trasladar algo profano a lo sagrado)

HIEROFANÍA(trasladar algo sagrado en lo profano)

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2.2. La dimensión espacial, planteada de dos maneras:

CONTRAPOSICIÓN

LA DIMENSION ESPACIAL

FUSIÓN

Contraposición: el lugar de dios (o el misterio) y el lugar del ser humano no tienen nada que ver. Donde se encuentra uno no se puede encontrar el otro. Fusión: no existe separación de ligares, sólo existe un único lugar para dios (o el misterio) y para el ser humano. Lo que cambia es la manera en que se es en ese único espacio. Se puede ser una mera manifestación (a modo de una pieza de puzle) o el todo (a modo del puzle completo) La dimensión temporal, entre lo caduco y lo eterno: - sobre todo en las celebraciones se trasciende lo limitado (se celebra lo eterno) El tiempo no existe. - Hay sobre todo 2 concepciones del tiempo: circular y lineal (mitos del eterno retorno, la reencarnación, son modos de interpretar lo limitado y a la vez lo eterno.

Entre lo temporal y lo eterno

LA DIMENSION TEMPORAL

El tiempo lineal El tiempo circular