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Consideraciones teóricas de lacompetitividad empresarial

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  • OmniaISSN: [email protected] del ZuliaVenezuela

    Labarca, NelsonConsideraciones tericas de la competitividad empresarial

    Omnia, vol. 13, nm. 2, 2007, pp. 158-184Universidad del Zulia

    Maracaibo, Venezuela

    Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=73713208

    Cmo citar el artculo

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    Pgina de la revista en redalyc.org

    Sistema de Informacin CientficaRed de Revistas Cientficas de Amrica Latina, el Caribe, Espaa y Portugal

    Proyecto acadmico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

  • Omnia Ao 13, No. 2 (2007) pp. 158 - 184

    ISSN: 1315-8856

    Consideraciones tericas de lacompetitividad empresarial

    Nelson Labarca*

    Resumen

    El objetivo del presente artculo es analizar las diferentes corrientestericas que permiten abordar el estudio de la competitividad empresarialbajo un escenario econmico, poltico, social y cultural dinmico a nivelinternacional, nacional, regional y municipal, por lo que se desarrolla unainvestigacin de tipo documental al considerar su definicin e importanciaen el sector industrial. Se presenta un abordaje histrico desde AdamSmith, David Ricardo, J.S. Mill, los clsicos, entre otras corrientes delpensamiento econmico; as como las principales fuentes de la competiti-vidad segn Michael Porter; la propuesta de la Comisin Econmica paraAmrica Latina (CEPAL), sobre el tema de la competitividad. Se concluyeque las diferentes corrientes tericas que explican la competitividad hanpermitido construir un camino largo y fructfero para la bsqueda de al-ternativas de solucin a las principales debilidades que presentan las ca-pacidades locales y regionales de desarrollo industrial, as como los deter-minantes econmicos, polticos y sociales que caracterizan el crecimientoindustrial sostenido centrndose en los aspectos de creacin de redes en-tre gobierno, instituciones, empresas y organismos privados para el logrode un desarrollo industrial y mayor competitividad nacional.

    Palabras clave: Aspectos tericos, competitividad empresarial, indus-tria, empresa, sector pblico.

    Recibido: 09-01-07 Aceptado: 31-05-07

    * Profesor investigador de la Escuela de Economa. Acreditado de la Facultad de Ciencias Econmi-cas y Sociales de la Universidad del Zulia (LUZ). Dr. en Ciencias Humanas. Acreditado en el progra-ma de promocin al investigador (PPI) del Ministerio de Ciencia y Tecnologa. E-mail: [email protected].

  • Theoretical Considerations of ManagerialCompetitiveness

    Abstract

    The objective of the present article is to analyze the differenttheoretical currents in a study of managerial competitiveness for adynamic economic, political, social and cultural scenario at theinternational, national, regional and municipal levels. Adocumentary-type investigation was developed, considering itsdefinition and importance in the industrial sector. A historical approachon the topic of competitiveness was presented including Adam Smith,David Ricardo, J.S. Mill, the classics, among other currents of economicthought, as well as the main sources of competitiveness according toMichael Porter; the proposal for the Economic Commission for LatinAmerica (CEPAL). The article concludes that the different theoreticalcurrents explaining competitiveness have permitted building a long andfruitful road searching for alternative solutions for the main weaknessesshown by the local and regional capacities of industrial development, aswell as the economic, political and social determinants characterizingsustained industrial growth centred on aspects of creating networksamong government, institutions, companies and private organisms forindustrial development and greater national competitiveness.

    Key words: Theoretical aspects, managerial competitiveness, industry,company, public sector.

    1. Introduccin

    La competitividad empresarial hoy en da es considerada untema fundamental en los sectores de actividad econmica tanto anivel de pases desarrollados como en vas de desarrollo. El con-texto internacional y sobre todo el proceso de mundializacin exi-ge a las organizaciones ser eficientes y eficaces en el manejo de losrecursos financieros, humanos, naturales, tecnolgicos entreotros, para poder enfrentar el reto que representa el mercado nosolo nacional sino fuera de las fronteras de sus pases de origen.

    La presente investigacin pretende abordar aspectos teri-cos fundamentales en el mbito de la competitividad para el desa-rrollo del mbito empresarial. Es as como, en primer trmino seestudiar la competitividad, su definicin e importancia en elcontexto industrial.

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  • Asimismo, el trabajo presenta un abordaje histrico de lacompetitividad desde Adam Smith, David Ricardo, J.S. Mill, losneoclsicos entre otras corrientes del pensamiento econmico.

    Por otra parte, se presentarn las principales fuentes de lacompetitividad segn Michael Porter.

    Tambin, se plantear un aspecto por dems interesantecomo el camino hacia una competitividad sistmica, abordandoen el anlisis los niveles meta, macro, micro, as como dentro delmismo los factores que determinan la competitividad a nivel deempresa, y lo referente al nivel meso, as como la competitividaden un entorno dinmico, lo lineamientos generales, los determi-nantes de la misma en un contexto sistmico y, por ltimo, lasconclusiones.

    2. Consideraciones sobre la competitividadde las naciones

    La Real Academia Espaola (1992) define competitividadcomo competitivo, capaz de competir y competitividad capacidadde competir, rivalidad para la consecucin de un fin. Porter (1985)seala que la competitividad es la capacidad de una empresapara producir y mercadear productos en mejores condiciones deprecio, calidad y oportunidad que sus rivales.

    Segn Ivancevich y Lorenzi (1997), la competitividad es lamedida en que una nacin, bajo condiciones de mercado libre yleal, es capaz de producir bienes y servicios que puedan superarcon xito la prueba de los mercados internacionales, mantenien-do y an aumentando al mismo tiempo, la renta real de sus ciuda-danos.

    Asimismo, la competitividad de una empresa es su capaci-dad para suministrar bienes y servicios igual o ms eficaz y efi-ciente que sus competidores. Enright et al. (1994).

    Entonces para una empresa del sector transable de la econo-ma esto significa lograr un xito sostenido en los mercados inter-nacionales sin contar con protecciones o subsidios. Aunque loscostos de transporte podran permitir a las empresas de un pascompetir exitosamente en su mercado interno o en mercados ad-yacentes, el concepto de competitividad se refiere generalmente alas ventajas basadas en una mayor productividad.

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  • Indicadores de la competitividad segn Enright et al. (1994),en el sector transable incluyen la rentabilidad de la empresa, sucociente de exportacin (exportaciones divididas entre la produc-cin) y participacin en el mercado regional. El desempeo logra-do en el mercado internacional proporciona una medida directade la competitividad de una empresa. En cambio, segn los mis-mos autores en el sector no transable, la competitividad de unaempresa se refiere a su capacidad para alcanzar o superar a lasmejores empresas del mundo, en costos y calidad de los bienes yservicios. Es difcil medir la competitividad en el sector no transa-ble, ya que no se dispone de un indicador directo de desempeoen el mercado. Indicadores de competitividad en esta parte de laeconoma incluyen la rentabilidad y las medidas de costo y cali-dad de las empresas.

    En aquellas industrias caracterizadas por inversiones ex-tranjeras directas, el porcentaje de ventas en el exterior de unaempresa (ventas en el exterior divididas entre la totalidad de lasventas) y su participacin en mercados regionales o globales per-miten medir su competitividad.

    En lo referente a la competitividad de una industria Enright, etal. (1994) plantean que consiste en la capacidad que tienen las em-presas nacionales de un sector particular para alcanzar un xitosostenido contra (o en comparacin con) sus competidores for-neos, sin protecciones o subsidios. La competitividad de una indus-tria puede medirse en trminos de la rentabilidad general de las em-presas, la balanza comercial en la industria, el balance entre inver-siones extranjeras directas salientes y entrantes y mediciones direc-tas de costo y calidad. La competitividad medida en el mbito de lasindustrias es a menudo un indicador ms fiel de la salud econmicade un pas que la competitividad medida en las empresas.

    Para un pas, la competitividad se traduce en la posibilidadque tienen sus ciudadanos para alcanzar un nivel de vida elevadoy creciente. En la mayora de los pases, el nivel de vida est deter-minado por la productividad con la cual se utilizan los recursosnacionales, el producto por unidad de trabajo o capital utilizado,as como un nivel de vida elevado y creciente para todos los ciuda-danos de un pas puede sostenerse, nicamente, por medio demejoras continuas en la productividad, ya sea alcanzando unamayor productividad en los negocios existentes o incursionandoexitosamente en negocios de mayor productividad. En el planonacional, la competitividad se medir por el nivel de vida alcanza-do y su crecimiento, el nivel y el crecimiento de la productividad

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  • agregada y la capacidad de las empresas nacionales para aumen-tar su penetracin en los mercados mundiales a travs de expor-taciones o inversiones extranjeras directas.

    3. Aspectos histricos de la competitividad

    Pero el inters por la competitividad no es de reciente data,tiene sus races en las reflexiones de los economistas sobre lascausas de la posicin dominante de un pas u otro en un momen-to dado, sobre el secreto de su superioridad y sobre las estrategiaspara lograrlas (Hernndez, 1998).

    La discusin sobre este tema ha interesado a una ampliagama de pensadores, entre estos a Adam Smith quien present elprimer argumento moderno sobre la competitividad, al cuestio-nar la idea mercantilista de que el secreto de la superioridad deun pas estaba en el control de la economa y la maximizacin desus reservas en oro y plata. Smith celebraba los beneficios de lacompetencia para lograr la maximizacin de la eficiencia y comoconsecuencia mejorar el bienestar.

    En este sentido, segn Apleyard y Field (2003) Smith centrsus ideas sobre la actividad econmica dentro de un pas a la es-pecializacin y el intercambio entre pases. Afirm que los pasesdeberan especializarse y exportar aquellos bienes en los cualestuvieran una ventaja absoluta y deberan importar aquellos bie-nes en los cuales el socio comercial tuviera una ventaja absoluta.Cada pas debera exportar aquellos bienes que produjera mseficientemente porque el trabajo absoluto requerido por unidadera menor que aquel del posible socio comercial.

    Para Smith, segn Apleyard y Field (2003), la fuente de estasventajas absolutas era el conjunto nico de recursos naturales(incluido el clima) y las habilidades que caracterizaban una na-cin en particular. Tambin reconoci que ciertas ventajas po-dran ser adquiridas a travs de la acumulacin, la transferenciay la adaptacin de destrezas y tecnologas.

    Por otra parte, esta posicin de carcter liberal por parte deAdam Smith condujo a que se gestaran fuertes ataques a sus ar-gumentos:

    As tenemos que los alemanes del siglo XIX, seguidores deFriedrich List, argumentaron a favor de un sistema cerrado paraprotegerse de los ya industrializados ingleses; los socialistas in-gleses como J.A. Hobson, teman que las inversiones de las em-

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  • presas inglesas en el exterior debilitaran la supremaca de Ingla-terra; los marxistas con Lenin a la cabeza vean la cobertura mun-dial de los grandes conglomerados financieros como una sustitu-cin de la competencia abierta por un sistema de control y suje-cin a favor de los poderosos y para los proteccionistas de los aostreinta, el sistema de mercados abiertos slo podra conducir alcaos y a la depresin (Hobsbawm, 1997).

    Al igual que Smith, David Ricardo y su teora sobre comerciointernacional delinean los contornos para estudiar la competitivi-dad, ms precisamente la teora de principios del siglo XIX sobrelas ventajas comparativas reconociendo que las fuerzas del mer-cado asignarn los recursos de una nacin a aquellos sectoresdonde sea relativamente ms productiva.

    Lo anterior significa que una nacin puede importar un art-culo en el que podra ser el producto de ms bajo costo, si todavaes ms productiva en la produccin de otros bienes (Porter,1990).

    En la teora de Ricardo, el comercio se basaba en las diferen-cias en la productividad de la mano de obra entre unas y otras na-ciones. Diferencias que atribua a diferencias inexplicadas, en elentorno o clima de las naciones que favoreca a algunos sectores.Sin embargo, aunque Ricardo estaba en el buen camino, el centrode atencin en la teora del comercio, tom otras direcciones.

    La versin dominante de la teora de la ventaja comparativa,propuesta por Heckschen y Ohlin, est basada en la idea de quelas naciones tienen todas unas tecnologas equivalentes pero quedifieren en sus dotaciones de lo que se dio en llamar factores deproduccin tales como tierra, mano de obra, recursos naturales ycapital. Los factores no son ms que los insumos bsicos necesa-rios para la produccin.

    Entonces, las naciones consiguen ventajas comparativasbasadas en los factores en aquellos sectores que hacen un uso in-tensivo de los mismos que poseen en abundancia. Exportan estosbienes e importan aquellos en los que tienen una desventaja com-parativa en los factores (Porter, 1990).

    Por otra parte, segn Apleyard y Field (2003) los economis-tas clsicos pensaban que la participacin en el comercio interna-cional sera una fuerza positiva importante para el desarrollo.Adam Smith argumentaba que los mercados de exportacin po-dan habilitar a un pas para utilizar recursos que de otro modopermaneceran ociosos. El movimiento resultante en busca del

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  • pleno empleo aumentara el nivel de actividad econmica y permi-tira que el pas adquiriera bienes extranjeros para aumentar elconsumo o la inversin y el crecimiento.

    Sin embargo, los mismos autores sealan que Ricardo y loseconomistas clsicos posteriores argumentaron que los benefi-cios del comercio no resultaban del empleo de los recursos subu-tilizados, sino del uso ms eficiente de recursos domsticos, lo-grado mediante la especializacin en la produccin de acuerdocon la ventaja comparativa.

    As mismo, J.S. Mill plantea segn Hobsbawm (1997) que lateora ricardina no permite explicar cmo se establecen los pre-cios relativos internacionales (es decir, los trminos de intercam-bios), ya que en ella no aparece el papel de las demandas nacionaly extranjera. Este espacio fue llenado por Mill con su teora de losvalores internacionales y de la demanda recproca esta forma-da por dos proposiciones:

    1. Los productos de un pas se cambian contra los producto-res de otros, por un valor tal que la totalidad de sus exportacionespuede pagar exactamente la totalidad de sus importaciones. Aslas cosas, la oferta de exportacin de un pas A es la contrapartidacontable de su demanda de importaciones; las funciones de ofertade exportaciones y demanda de importaciones se confunden(Apleyard y Field, 2003).

    Para el pas B ocurre lo mismo. En equilibrio la oferta de ex-portaciones de A (idntica a su demanda de importaciones) debeser igual a la demanda de importacin de B (idntica a su oferta deexportaciones). Entonces, en equilibrio, la cantidad de mercan-cas demandadas por un pas a otro pas paga exactamente lacantidad de mercancas demandadas por este al primero. En estesentido, podemos hablar de demanda recproca la demanda deun pas paga la demanda del otro.

    2. Los trminos de intercambio (y los precios relativos) de-pendern de las funciones de oferta y demanda. Pero, habidacuenta de que es imposible asignar una regla general a los gustosy a los medios de los consumidores, es imposible decir por adelan-tado en qu proporciones se intercambiarn las mercancas entres. Sin embargo, el principio general, se puede plantear con facili-dad. Un pas obtendr las importaciones de acuerdo a los trmi-nos de intercambio tanto ms favorables en cuanto la demandaextranjera de sus productos sea mayor y su demanda de importa-ciones sea menor.

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  • Entonces Smill, segn Apleyard y Field (2003) aporta ideasimportantes para el desarrollo del comercio internacional en lo re-ferente a los trminos de intercambios, precios relativos, entreotros; lo cual constituye la base para el logro de la competitividad.

    As mismo, la corriente neoclsica y marginalista tuvo suaporte significativo al comercio y a la competitividad permitiendoque el pensamiento econmico predominante adoptara un mto-do distinto, basado en la esttica comparativa, en el que no inte-resa tanto la evolucin del sistema o de la empresa desde un pun-to temporal a otro, sino la pura comparacin de dos estados dife-rentes, cuya diferencia relevante se reduce al nmero o al tamaode las empresas, pero mantenindose constantes la tcnica pro-ductiva y los costos (Guerrero, 2005).

    Se ha utilizado segn Guerrero (2005), la idea intuitiva y rea-lista asociada a experiencias reales de pequeas empresas quevan creciendo hasta convertirse en medianas, despus en gran-des y finalmente en enormes empresas, como base suficientepara identificar en s mismo el cambio de escala ante la perspecti-va evolutiva o dinmica, idea reforzada por la elaboracin del con-cepto de largo plazo marshalliano, en el cual pareca introducirsela dimensin temporal, pues, se daba tiempo a las empresas paracambiar de escala o tamao de sus activos fijos (y no slo para po-der variar la cuanta de sus factores variables).

    Es importante destacar que en las ltimas dcadas la luchapor los mercados se ha vuelto una obsesin en los principales pa-ses del mundo, y la competitividad se reconoce como un atributoclave de las economas nacionales. En los aos sesenta dentro delmundo desarrollado se haban elaborado, tambin teoras decompetitividad desigual, su versin ms popular fue expresadapor Jean-Jacques Servan-Shreiberg (1967) en el Desafo Ameri-cano. Los europeos estaban alarmados por la falta de competitivi-dad de sus industrias frente a las norteamericanas, estas ltimasdebido a su enorme mercado interno y a su acceso al mercadomundial gozaban de un tamao que les permita ciertas ventajas,en mercado, en escala de produccin y en desarrollo tecnolgico;los europeos, en cambio, operaban en mercados fragmentados,con empresas familiares y en naciones de poblacin limitada e in-suficiente integracin (Hernndez, 1998).

    Esta situacin los condujo a propiciar la creacin de empre-sas grandes en una Europa integrada a travs de la accin guber-namental, el equivalente de una poltica industrial y la accin pri-

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  • vada concertada para enfrentarse a las empresas norteamerica-nas, en fin de lo que se trataba era de acelerar la consolidacin delMercado Comn Europeo y de lanzar una ola de reestructura-cin, adquisiciones y alianzas entre empresas.

    En la dcada de los setenta, segn Porter (1990) se revirti latendencia en una industria tras otra, las empresas japonesasdesplazaban a sus competidoras estadounidenses; ejemplo deesto fueron la industria automotriz los japoneses lograron cap-tar cerca del cuarenta por ciento del mercado norteamericano, desemiconductores, cmaras fotogrficas, equipos de oficina; enrobtica se convirtieron en lderes desde el comienzo, mientrasque en computadores y equipos de telecomunicaciones, entabla-ron una lucha por alcanzar el liderazgo.

    Es as como comenz una competencia deliberada por partede empresas dispuestas a desplazar a sus rivales, con base en lainnovacin, el mejoramiento continuo y la reduccin de costos.En cierto modo los japoneses inventaron la competencia en elsentido actual, lo que se denomina competencia comparativa, di-rigida a desplazar rivales bien identificados y conocidos. Los nor-teamericanos, vctimas de esa competencia despiadada, crearonel concepto de competitividad (Hernndez, 1998).

    En este sentido cuando los tigres asiticos se introdujeronpor la senda que haba delineado Japn, la situacin se volvi anms apremiante para norteamericanos y europeos.

    4. La competitividad en el espacio global

    El nivel de vida de un pas depende cada vez ms de la com-petitividad de sus empresas. La competitividad es lo que determi-na si las empresas sern capaces de aprovechar las oportunida-des que brinda la economa internacional.

    Es as como, Kelly (1996) el comercio mundial y las inversio-nes extranjeras han aumentado ms rpidamente que la produc-cin mundial durante las ltimas dcadas. La competitividad enlas industrias sujetas al comercio internacional y la inversin ex-tranjera directa puede brindar una forma de apuntalar sustan-cialmente el crecimiento econmico. Esto es particularmente im-portante, segn Paredes (1994) en el caso de pases pequeos, enlos cuales la competitividad puede permitir a las empresas sobre-ponerse a las limitaciones de sus reducidos mercados internos yalcanzar su mximo potencial.

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  • La competitividad tambin resulta de vital importancia segnEnright, et al. (1994), para que las empresas de un pas puedan pro-tegerse contra las amenazas de la economa internacional. En efec-to, la competencia internacional se ha vuelto ms feroz que nunca.Menores costos de transporte y comunicacin, barreras arancela-rias ms bajas y la difusin de la tecnologa se han combinado parahacer ms aguda la competencia en el mbito internacional.

    Es as como, la competencia internacional ejerce una pre-sin sin precedentes sobre todo los agentes econmicos de unpas, incluyendo la gerencia, la fuerza laboral y el gobierno. En unambiente en el cual las empresas de un pas deben mejorar conti-nuamente para contrarrestar la amenaza que representa un ejr-cito cada vez mayor de competidores, puede resultar desastrosopara las empresas nacionales que la gerencia, la fuerza laboral oel gobierno no enfrenten el reto.

    La competitividad en el sector no transable es tambin de vi-tal importancia para la salud econmica de un pas. Este sectorrepresenta una gran porcin de cada economa. En la actualidad,cuando la prosperidad econmica sigue siendo apenas una ilu-sin para la mayora de la poblacin mundial, las ineficiencias eneste sector deben reducirse lo ms posible. (Rosales, 1990).

    Adems, la competitividad del sector no transable tiene unimpacto significativo sobre la competitividad del sector transable,el cual depende de aquel para una extensa gama de bienes y servi-cios. Un sector no transable ineficiente y abultado puede arras-trar hacia abajo la productividad del pas directa e indirectamen-te, debido a su impacto sobre otras industrias, sean de bienestransables o no (Figura 1).

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    COMPETITIVIDAD

    Crecimiento mundial delcomercio e inversiones

    Globalizacin de laCompetencia

    Ventajas especiales enmercados del exterior

    Aumento de laproductividad en sectores

    comerciales yno comerciales

    Figura 1Importancia de la Competitividad

    Fuente: Enright, M; Francs, A. y Scott, E. (1994).

  • El reconocimiento de que los pases no pueden eludir los ri-gores de la competencia internacional es cada vez mayor. Ningnpas es completamente autosuficiente. Las naciones estn vincu-ladas a la economa internacional a travs del comercio de bienesy servicios, los flujos de capital y los precios de los productos bsi-cos. La experiencia de los pases en desarrollo durante los aosochenta revel que los intentos de aislar una economa pueden te-ner efectos perjudiciales. En la actualidad, los pases pueden tra-tar de huir de la economa mundial, pero no pueden esconderse(Paredes, 1994).

    Lo anterior resulta particularmente cierto para los pases pe-queos donde los costos generados por el aislamiento econmico,en trminos de la bsqueda de rentas improductivas y prdidasde eficiencia, pueden ser sustanciales y para los pases en desa-rrollo, donde cualquier prdida de eficiencia implica, por lo gene-ral, mayores niveles de pobreza. El crecimiento imputado por lasexportaciones que han experimentado Japn y los otros pasesasiticos, as como el relativo estancamiento de las economas desustitucin de importaciones, han puesto en evidencia tambin elvnculo existente entre competitividad internacional y desarrolloeconmico (Kelly y Gonzlez, 1993).

    5. Fuentes de la competitividadsegn Michael Porter

    Es en este contexto, donde surge el inters terico y prcticopor la competitividad sobre todo en los Estados Unidos y es lo queda impulso al famoso estudio de Porter (1985) acerca de los deter-minantes de la competitividad en las industrias exitosas de diezpases.

    Porter toma el concepto de ventaja competitiva referido has-ta entonces a las empresas nicamente y lo aplica a las industriasnacionales y por extrapolacin a las naciones (la ventaja compe-titiva de la naciones, 1991). Abre as, el camino a los diagnsticosnacionales de competitividad. El concepto de ventaja competitivaaplicado a los pases no es muy diferente del de ventaja compara-tiva dinmica, utilizado anteriormente, ambos sugieren que ade-ms de las ventajas comparativas que poseen como producto dela historia (acumulacin de capital), la demografa (mano de obra)o la naturaleza (recursos naturales) las naciones pueden crear

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  • ventajas mediante el desarrollo de infraestructura, tecnologa ocapacidad gerencial.

    Michael Porter, presenta un modelo para evaluar la influen-cia del pas sobre la competitividad internacional de sus empre-sas. Dentro de este marco, los determinantes de la competitividaden una industria especfica son las condiciones de los factores,las condiciones de la demanda, las industrias relacionadas y deapoyo; y la estrategia, la estructura y la rivalidad de las empresasdel pas (Figura 2). Los pases tienen xito en industrias en lascuales dichos factores brinden los incentivos, presiones y capaci-dades necesarias para innovar y mejorar las ventajas de una em-presa (Betancourt y Freije, 1993).

    El modelo de Porter ofrece una alternativa sistemtica a lasexplicaciones de la competitividad centradas en un nico rasgode una economa como pueden ser los recursos naturales, lasprcticas generales o las polticas gubernamentales.

    Es as como en este modelo, las condiciones de los factoresse interpretan en forma amplia y abarcan niveles de capacitacin,capacidad tecnolgica e infraestructura fsica y de negocios, ade-ms de otros factores ms tradicionales como tierra, mano deobra, recursos naturales y capital. Las condiciones de los factoresse refieren a su disponibilidad, creacin y desventajas selectivas.La disponibilidad de recursos naturales o una mano de obra nocalificada ayudar a los pases a competir en industrias basadasen tales elementos.

    Sin embargo, Porter (1990) concluye que en un nmero cadavez mayor de industrias, la ventaja competitiva proviene de facto-res (como el conocimiento y la pericia) que se crean y no se here-dan. Los factores ms importantes en muchas industrias son

    Consideraciones tericas de la competitividad empresarial 169

    Estrategia,estructura y rivalidad

    de la empresa

    Industriasrelacionadas y de

    apoyo

    Condicionesde los

    factores

    Condicionesde la

    demanda

    Hechosfortuitos

    Gobierno

    Figura 2Determinantes de la Ventaja Competitividad Nacionales

    (Importancia de la Competitividad)

  • aqullos cuyo desarrollo requiere una inversin pblica y privadasignificativa, y aqullos empleados en una o pocas industrias. Es-tos factores promueven las ventajas, ya que tienden a ser difcilesde imitar o de obtener a distancia. En algunos casos, las desven-tajas en factores bsicos pueden servir de estmulo a la innova-cin y, en ltima instancia, crean ventajas. Sin embargo, dichasdesventajas deben ser selectivas, ms que sistmicas, para pro-mover innovacin y ventajas.

    En cuanto a las condiciones de la demanda, estas se refierenal tamao, grado de refinamiento y estructura de segmentos de lademanda local. Porter (1990) concluye que la naturaleza de la de-manda local tiene un efecto desproporcionado sobre las percep-ciones y respuestas a las necesidades de los compradores. Sushallazgos acerca del tamao de la demanda local son ambivalen-tes. Una demanda local grande permitir a las empresas alcanzareconomas de escala en el mercado local, lo cual representa unaventaja en aquellas industrias sujetas a corridas largas de pro-duccin de productos estandarizados. Una demanda local redu-cida puede obligar a las empresas a incursionar tempranamenteen mercados internacionales, lo cual representa una ventaja enindustrias que requieren adaptacin local y una presencia global.

    El factor industrias relacionadas y de apoyo segn Porter(1990) se refiere a la presencia de proveedores de primera y em-presas agrupadas en industrias con tecnologas, canales de dis-tribucin o mercados objetivo en comn. Los proveedores de pri-mera categora a menudo entregan a las empresas locales maqui-narias e insumos superiores, antes que a sus clientes en el ex-tranjero. Las empresas locales que llevan la delantera en indus-trias relacionadas a menudo son una fuente de tecnologa y cono-cimientos que pueden difundirse entre las industrias.

    En lo que se refiere al factor estrategia y estructura de la em-presa incluye las caractersticas nacionales distintivas que pue-den observarse en los objetivos de compaas e individuos, estra-tegias empresariales y estructuras organizativas tpicas. Los pa-ses tienen xito en aquellas industrias cuyas estrategias y estruc-turas se ajustan tanto a la industria como al pas.

    Porter agrupa la rivalidad nacional junto con la estrategia yla estructura de la empresa, aunque posiblemente uno prefieraseparar los determinantes que se encuentran dentro de la empre-sa (estrategia y estructura de la empresa) de aqullos que se en-cuentran fuera de ella (rivales). En todo caso, uno de los hallazgos

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  • ms importantes de Porter es que la rivalidad entre empresas lo-cales estimulan la innovacin y la actualizacin de las capacida-des de las empresas.

    Segn Porter (1990), se entienden mejor las polticas guber-namentales y los hechos fortuitos si se consideran su impacto so-bre los factores locales; el tamao, el grado de refinamiento y lasegmentacin de la demanda local, el desarrollo de industrias re-lacionadas y de apoyo, las estrategias y estructuras de las empre-sas locales, as como el nivel de rivalidad entre ellas. El gobiernoejerce influencia sobre los determinantes a travs de su impactosobre los costos y la disponibilidad de los factores, su papel comocomprador, su impacto sobre los objetivos de las empresas e indi-viduos y su impacto sobre la naturaleza de la competencia dentrode las industrias.

    En cuanto a los acontecimientos fortuitos pueden sacudirlas estructuras industriales existentes y dar mayores ventajas alos nuevos competidores al modificar la importancia relativa delos diversos determinantes. Entre los acontecimientos fortuitosse incluyen guerras, desastres naturales, interrupcin en el su-ministro y otros hechos sobre los cuales no tienen control directolas naciones ni las empresas de una industria.

    Hoy en da, se plantea un nuevo enfoque denominado com-petitividad sistmica, el cual se abordar a continuacin.

    6. Hacia una competitividad sistmica

    Todo lo antes expuesto nos lleva al concepto de competitivi-dad sistmica el cual surgi segn Attenburg y Messner (2002) enel contexto del anlisis de los dinmicos procesos de industrializa-cin en Asia Oriental y del rezagado desarrollo de Amrica Latina.

    Inicialmente fue un intento de hacer converger diferentesdisciplinas y teorizaciones, as como servir de orientacin en elanlisis de los factores complejos de los que depende el xito delas estrategias para crear industrias competitivas.

    En este mismo orden de ideas, la Comisin Econmica paraAmrica Latina (CEPAL, 2001) plantea que el concepto de compe-titividad sistmica, por su parte, se caracteriza y distingue, antetodo, por reconocer que un desarrollo industrial exitoso no se lo-gra meramente a travs de una funcin micro o de condicionesmacroeconmicas estables en el nivel macro, sino tambin por laexistencia de medidas especficas del gobierno y de organizacio-

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  • nes privadas de desarrollo orientadas a fortalecer la competitivi-dad de las empresas (nivel meso). Adems, la capacidad de vincu-lar las polticas meso y macro est en funcin de un conjunto deestructuras polticas y econmicas y de un conjunto de factoressocioculturales y patrones bsicos de organizacin (nivel meta).

    Es as como, los elementos distintivos del concepto de com-petitividad sistmica segn la CEPAL (2001), son entonces: a) ladiferenciacin de cuatro niveles analticos (meta, macro, meso ymicro) y b) la vinculacin de los elementos de cuatro diferentes es-cuelas de pensamiento: la economa de la innovacin y las teorasevolutivas dentro de las lneas de pensamiento de Schumpeter, laescuela post-estructuralista con la redefinicin del papel del Es-tado en los procesos de industrializacin tarda; la nueva econo-ma institucional, bsicamente dentro de los esquemas neoclsi-cos, con el nfasis en los sistemas de reglas y derechos de propie-dad, y la escuela moderna de administracin.

    Asimismo, en el rea de las ciencias sociales, la competitivi-dad sistmica tambin se relaciona con la sociologa econmica,la sociologa industrial, la geografa econmica y las ciencias pol-ticas, todos ellos con la nocin de redes, elemento central detrsdel concepto de competitividad sistmica.

    En definitiva, el concepto de competitividad sistmica es unaaproximacin analtica para entender los factores que contribu-yen a lograr un desarrollo industrial exitoso (Eissa y Ferro, 2001).

    Es importante sealar que el concepto segn la CEPAL(2001), trata de ir ms all de la discusin contrapuesta entre esta-do y mercado y se centra ms en encontrar el equilibrio adecuadoentre las fuerzas del mercado y la intervencin (formulacin e im-plementacin de polticas dirigidas a promover el desarrollo indus-trial y competitivo). La aproximacin correcta al concepto permitesugerir campos de accin de la poltica pblica relevantes para laindustria. Muchos de estos son especialmente importantes comoel fortalecimiento de las capacidades de gestin y estratgicas, ladifusin de las nuevas tecnologas de informacin, la adopcin denuevos sistemas y normas de calidad, lo cual entre otras cosas, fa-cilitara una mayor integracin de las cadenas de valor.

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  • 7. La competitividad en un entorno dinmico

    Se puede intuir que la ventaja que ofrece el concepto heurs-tico de competitividad sistmica radica en que es lo bastanteabierto como para incluir las fortalezas y debilidades que determi-nan las capacidades local y regional de desarrollo. Asimismo, tra-ta de capturar los determinantes polticos y econmicos de un de-sarrollo industrial exitoso, centrndose en los aspectos de crea-cin de redes (networking) entre gobiernos, instituciones, empre-sas y organizaciones privadas de desarrollo para la creacin deli-berada de las condiciones de un desarrollo industrial sostenido yde mayor competitividad nacional.

    La competitividad en este sentido segn la CEPAL (2001), essistmica al menos por tres razones:

    a. Una empresa en general no es competitiva por s misma,especialmente si no cuenta con un entorno de apoyo a proveedoreso servicios orientados a la produccin, o una presin competitivade competidores locales. La competitividad en el nivel micro estbasada en la interaccin. El aprendizaje de interaccin (learning-by-interacting) es clave en el proceso de innovacin, especialmentecuando se constituyen ventajas competitivas dinmicas.

    b) Un entorno que favorece la competitividad se encuentraarraigado en un sistema nacional de normas, reglas, valores einstituciones que definen los incentivos que moldean el compor-tamiento de las empresas.

    c) El estado tiene un papel decisivo en el momento de definir eldesarrollo industrial y la reestructuracin productiva de un pas,especialmente bajo las nuevas modalidades de gobernabilidad.

    Por lo tanto, a medida que aumenta la complejidad de lasnuevas formas de organizacin industrial, la naturaleza sistmi-ca de la competitividad adquiere ms importancia.

    Entonces, de todo lo antes expuesto, se puede afirmar que eltrabajo coordinado entre estado, instituciones pblicas y priva-das y empresas es fundamental para el xito en el logro de un cre-cimiento industrial sostenido y competitivo (Dvalos, 1996).

    Consideraciones tericas de la competitividad empresarial 173

  • 8. Lineamientos generales para la competitividad

    El modelo de competitividad para el desarrollo segn Villa-rreal y Ramos (2001) considera los siguientes aspectos:

    Parte de la globalizacin como una realidad y no como unaideologa, pero reconoce que el mercado y la apertura por ssolos no conducen a un desarrollo con competitividad. Porello plantea una nueva estrategia de insercin activa a la glo-balizacin basada en un modelo de competitividad sistmicapara el desarrollo que permita enfrentar el nuevo juego de lahipercompetencia global en el mercado nacional, de tal ma-nera que la apertura ante la globalizacin se acompaa deuna articulacin productiva interna y de cohesin social.

    Asimismo, es un enfoque integral en los niveles de los siste-mas econmicos, polticos y sociales.

    Es un enfoque concreto en tanto que considera la formacinde las diez (10) capitales de la competitividad.

    Es un enfoque con orientacin de polticas pblicas. El mo-delo mide el ndice de competitividad, define y analiza losobstculos a la competitividad y define las polticas pblicaspara mejorar la misma.

    Es un enfoque con visin-accin, visin de largo plazo, pueslos problemas estructurales de competitividad requieren deun horizonte de 20 aos, pero exigen accin en el corto plazoy evaluacin y seguimiento anual con base en una planea-cin adaptativa dado los nuevos entornos y los cambios dis-continuos de una economa global y nacional todava entransicin.

    El objetivo es el desarrollo, esto es, el crecimiento sustenta-ble con empleo y equidad. Ello requiere cerrar la brecha de lacompetitividad y apoyarse en la nueva tecnologa para poten-ciar el desarrollo humano.

    Finalmente, plantea que el reto de la instrumentacin re-quiere reformas y un cambio institucional que solo pueden alcan-zarse en consensos polticos, de aqu la necesidad de un proyectode nacin con visin de futuro.

    En este ltimo aspecto, segn Kelly (1996) para las econo-mas de Amrica Latina representa un reto lograr alcanzar no solola viabilidad econmica, sino tambin la poltica y social que per-mita canalizar esfuerzos en pro de un proyecto de pas.

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  • 9. Condiciones para el logro de la competitividad

    Se parte de los elementos conceptuales, aplicados al enfoquesistmico de la competitividad. En l se considera segn Eissa yFerro (2001) que existen cuatro esferas que condicionan y mode-lan su desempeo: en primer lugar, el nivel micro-econmico (enla planta y dentro de las empresas, para crear ventajas competiti-vas); en segundo lugar, el nivel mesoeconmico (eficiencia del en-torno, mercados de factores, infraestructura fsica e institucionaly, en general, las polticas especficas para la creacin de ventajascompetitivas); en tercer lugar, el nivel macroeconmico (polticafiscal, monetaria, comercial, cambiaria, presupuestaria, compe-tencia) y, finalmente, el nivel meta econmico o estratgico (es-tructura poltica y econmica orientada al desarrollo, estructuracompetitiva de la economa, visiones estratgicas, planes nacio-nales de desarrollo).

    En este sentido, el enfoque sistmico adquiere relevancia sise tiene en cuenta el desafo de la industria en su constante pro-ceso de adaptacin experimentado desde mediados de los aosochenta y resumido en un modelo sustentado, en su forma msgeneral, en los preceptos que subyacen en el consenso de Wa-shington. Ante una realidad cambiante y un entorno ms compe-titivo y abierto, el enfoque sistmico de la competitividad ofrecenuevas alternativas de anlisis y de formulacin de poltica pbli-ca para la industria de los pases en vas de desarrollo.

    Sin embargo, es importante segn Guerrero (2005) conside-rar que los pases en vas de desarrollo cuentan con estructurasproductivas muy endebles lo cual es una gran debilidad para labsqueda de mejorar los niveles de competitividad.

    10. Determinantes de la competitividaden un contexto sistmico

    1. Nivel Meta: Capacidad Nacional de Conduccin

    Para optimizar los potenciales de efectividad en los nivelesmicro, macro y meso, resultan decisivas la capacidad estatal deconduccin de la economa y la existencia de patrones de organi-zacin que permitan movilizar capacidades de creatividad de lasociedad. La modernizacin econmica y el desarrollo de la com-petitividad sistmica no pueden dar resultados sin la formacinde estructuras en la sociedad entera (Esser, et al., 1994).

    Consideraciones tericas de la competitividad empresarial 175

  • Es as como, si se emprenden reformas macroeconmicassin desarrollar al mismo tiempo una capacidad de regulacin yconduccin (reforma del estado, articulacin de los actores estra-tgicos) y sin la formacin de estructuras sociales, las tendenciasa la desintegracin social se agudizarn todava ms. La competi-tividad sistmica sin integracin social es un proyecto sin pers-pectiva. El desarrollo de la competitividad sistmica es, por tanto,un proyecto de transformacin social que va ms all de la simplecorreccin del contexto macroeconmico (Eissa y Ferro, 2001).

    2. Nivel Macro: Asegurar condiciones macroeconmicasestables

    Dentro del marco de un concepto pluridimensional (queapuesta por la competencia, la cooperacin y el dilogo socialpara canalizar sistemticamente los potenciales nacionales haciael desarrollo de competitividad internacional), resulta decisiva laexistencia de mercados eficaces de factores y productos que per-mitan asegurar una asignacin eficaz de recursos.

    En este sentido, las experiencias de los aos setenta yochenta segn la CEPAL (2001) han demostrado que un marcomacroeconmico inestable perjudica en forma sustancial la capa-cidad de funcionamiento de los mercados de factores y productos.

    De ah que para estabilizar el marco macroeconmico es pre-ciso recurrir en primer lugar y sobre todo a una reforma de la pol-tica fiscal y presupuestaria, as como de la poltica monetaria ycambiaria, especialmente del rgimen de tipos de cambios. Sinembargo, como lo plantean Eisaa y Ferro (2001), la transicin deun marco macroeconmico inestable a otro estable resulta difcilpor las siguientes razones:

    La lucha contra la inflacin a travs de una poltica presu-puestaria, fiscal y monetaria restrictiva suele restringir nosolo el consumo, sino tambin las inversiones, limitando conello todava ms los mrgenes de crecimiento de la economa.

    En muchos casos, las medidas de estabilizacin macroeco-nmica no pueden surtir efectos si no van acompaados dedifciles y muchas veces largas reformas estructurales, para-lelas, como por ejemplo la reforma del sector econmico esta-tal, el desarrollo de un sector financiero eficaz y una reformade la poltica de comercio exterior.

    Entre diferentes medidas reformadoras son frecuentes losconflictos de objetivo, hecho que alarga el perodo previo almomento en que las reformas empiezan a surtir efecto.

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  • Los costos del ajuste econmico, se dejan sentir de inmedia-to, mientras que sus beneficios demoran en llegar, de mane-ra que la produccin, la inversin y la ocupacin experimen-tan en una primera fase una evolucin negativa.

    Los distintos sectores sociales no son afectados por igual porlas consecuencias de las medidas de estabilizacin macroe-conmica y las reformas estructurales. Ese proceso da lugarms bien a ganadores y perdedores con los graves conflictosconsiguientes en el plano de la poltica interior.

    Entonces, la estabilizacin del marco macroeconmico re-quiere por lo tanto una voluntad poltica realmente frrea. Serexitosamente solamente si el gobierno demuestra su determina-cin de implementar las difciles y conflictivas reformas y si consi-gue organizar una articulacin nacional de fuerzas dispuestas ala reforma y movilizar el apoyo internacional (Esser, et al., 1994).

    3. Nivel Micro

    En los pases industrializados y en desarrollo ms avanza-dos, la dcada de los ochenta fue una fase de cambios radicales enel nivel micro. Dicha fase se cristaliz en una nueva fase de pro-duccin, investigacin y desarrollo empresarial e interaccin en-tre empresas, esa nueva prctica rompe con el tradicional para-digma taylorista-fordista.

    Todo lo anterior, segn Eissa y Ferro (2001) constituye ungran desafo no solo a las empresas de pases en vas de desarro-llo, sino muy en particular, a las de los pases industrializados deoccidente, ya que vuelve obsoletos enfoques y procedimientosmuy arraigado. Las transformaciones pendientes no se limitan alnivel empresarial. Estas incluyen tambin las relaciones interem-presariales as como el espacio meso.

    4. Nivel Meso. Formacin de Estructuras

    En el marco del ajuste estructural de los ochenta se conside-r que la clave para mejorar la competitividad eran las reformasmacroeconmicas y las modernizaciones en el nivel micro, posibi-litadas e impuestas por las mismas reformas. Este enfoque sosla-ya la significacin que tiene abrir y ensanchar espacios econmi-cos, como tambin optimizar constantemente el entorno empre-sarial. En contraste con las teoras neoclsicas de asignacin derecursos y de comercio exterior que, rechazando las polticas tec-nolgicas e industriales activas y anticipatorias, confan en la efi-cacia de los mercados internacionales de tecnologa y en el gradoptimo de las decisiones que las empresas adoptan en forma des-

    Consideraciones tericas de la competitividad empresarial 177

  • centralizada, los pases industrializados y en vas de industriali-zacin que en los ochenta registraron un desarrollo ms dinmicoy mejoraron su posicin en el ranking de la economa mundial,fueron aquellas que emprendieron una optimizacin selectiva dela dimensin meso, ubicada entre el contexto macroeconmico yel nivel micro-econmico (CEPAL, 2001).

    En este sentido, el mercado por s solo, no optimiza la forma-cin de localizaciones industriales. Al mismo tiempo, el plantea-miento del estado de desarrollo que propugna la escuela estruc-turalista se ve desbordado por la complejidad de la produccin yorganizacin industriales, cuando intenta materializar una es-tructura eficaz en el sector manufacturero. Los pases que practi-can con xito polticas de localizacin industrial ven perfilarse ac-tualmente patrones organizativos sociales de nuevo tipo y patro-nes ms complejos de conduccin (Eissa y Ferro, 2001).

    La articulacin innovadora de bancos, empresas e institu-ciones intermediarias tanto pblicas como privadas, permite for-mar estructuras en el espacio de las polticas de nivel meso enuna accin orientada al largo plazo.

    Entonces, la importancia fundamental que esta rea segn(Eisser, et al., 1994) descuidada por la poltica econmica revistepara el desarrollo de una competitividad duradera se ha manifes-tado en el hecho de que una serie de pases en vas de desarrollo(por ejemplo: Brasil) sometidos a programas de ajuste estructuralconsiguieron estabilizar con xito las condiciones macroeconmi-cas generales, pero sin que se produjese la esperada reactivacinde sus economas.

    En este sentido, no se trata solamente de que el crecimientoeconmico en mercados capaces de funcionar depende de polticaseconmicas orientadas a la estabilidad (estructuracin del espaciomacro), sino que el desarrollo del espacio meso requiere de polti-cas locacionales activas (estructuracin del espacio meso). Estoatae en particular, a los pases en desarrollo de estructura dbil.

    Es por ello que los espacios econmicos dinmicos se distin-guen por condiciones generales que incentivan la innovacin (edu-cacin bsica, sistema universitario, etc.) y por instituciones espe-cficas para clusters o sectores, que contribuyen a cristalizar ven-tajas competitivas especficas (institutos tecnolgicos sectoriales,centros de formacin especializados, entre otros) (CEPAL, 2001).

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  • Entonces, segn Eissa y Ferro (2001) la importancia de la di-mensin meso ha seguido en aumento en el curso de la pasadadcada debido a los avances revolucionarios en tecnologa y orga-nizacin y a la superacin del paradigma productivo tradicional-mente fordista. La innovacin posee un carcter recientementeinteractivo que se basa en procesos de intercambio, organizadossegn criterios tanto propios del mercado como ajenos a l. Losefectos e innovaciones acumulativos en los que se basa la compe-titividad sistmica se desarrollan gracias a un denso entrelaza-miento en el nivel micro y a relaciones de cooperacin formales einformales entre empresas y el conjunto de instituciones cerca-nas a los clsteres en los cuales operan.

    Bajo las condiciones anteriores, la innovacin y el desarrollode capacidad tcnica adquieren un carcter interactivo, orienta-do a lo comn, puesto que los procesos de aprendizaje y de inter-cambio sobre la base de la reciprocidad y de los mecanismos demercado, hacen que la produccin de una empresa dependa tam-bin de la de sus rivales, de su proveedores y de una estructurainstitucional propicia a la innovacin. La capacidad tecnolgica,como fundamento de la competitividad de una economa, se basaen conocimientos y proceso acumulativos difcilmente transferi-bles, que surgen cuando empresas e instituciones interactanentre s, cristalizando patrones y ventajas competitivas especfi-cas para cada pas (Eisser, et al., 2001).

    Por consiguiente, las que compiten en el mercado mundialya no son empresas aisladas que operan en forma descentraliza-da, sino clsters industriales, grupos de empresas constituidasen redes, cuya dinmica de desarrollo depende sustancialmentede la eficacia de sus localizaciones industriales, es decir, de laexistencia de universidades, centros de entrenamiento, centro deinvestigacin y desarrollo, sistemas de informacin tecnolgica,organizaciones sectoriales privadas, entre otras.

    Resulta tambin esencial desarrollar una infraestructura fsi-ca que facilite la exportacin (sistemas de transporte y telecomuni-caciones). Mucho ms difcil resulta, sin embargo, reformar y desa-rrollar, con vista a la competitividad, las instituciones necesariaspara implementar polticas de educacin, investigacin, tecnologay otras polticas de localizacin que apoyen a la industria y sirvanpara estructurar el espacio meso. Este ltimo apunta a desarrollarun tejido institucional (hardware) eficaz y depende de la capacidadde interaccin estrecha entre actores privados y pblicos agrupa-dos en un clster (software) (Eissa y Ferro, 2001).

    Consideraciones tericas de la competitividad empresarial 179

  • Es importante la creacin de nuevas formas de conduccin,el estado opera no como un clsico estado intervencionista, sinoms bien como generador de impulsos, moderador, comunicadorentre empresas y asociaciones empresariales, sector cientfico,instituciones intermedias o incluso sindicatos; su objetivo con-siste en promover la difusin de informacin relevante y elaborarvisiones de medio y largo plazo que sirvan de gua a polticas p-blicas de nivel meso e iniciativas particulares.

    As las cosas, segn la CEPAL (2001) las polticas formado-ras del espacio meso poseen una dimensin nacional y una regio-nal, local. A nivel nacional, las polticas de nivel meso apuntan adesarrollar infraestructuras fsicas especialmente concebidaspara clsters (transporte: puertos, redes ferroviarias y viales; te-le-comunicaciones, sistemas de abastecimiento y evacuacin:energa, agua/desage, desechos) y a desarrollar tambin estruc-turas intangibles (desarrollo de sistemas educacionales, etc.),son igualmente significativas las polticas selectivas y activas enel rea del comercio exterior (poltica comercial, estrategias de pe-netracin en mercados), as como una defensa activa de interesesen el mbito internacional.

    Asimismo, la creciente importancia de los factores de es-tructura espacial para la competitividad de las empresas generala necesidad de aplicar polticas de descentralizacin y de volver acoordinar las competencias de instancias polticas nacionales,regionales y locales. Ya sean anacrnicas las polticas industria-les tradicionales que se formulan leyes de las localizaciones. En elmarco de la reforma del Estado resulta decisivo ampliar las com-petencias y los mrgenes de financiamiento de las administracio-nes regionales y comunales. El objetivo consiste en desarrollarestructuras institucionales que hagan factible formar estructu-ras en las localizaciones locales y regionales (CEPAL, 2001).

    En este sentido, la formacin regional de estructuras apuntaa consolidar la articulacin interempresarial, configurar el mbi-to supraempresarial, crear estrechas relaciones entre industria yservicios y establecer relaciones de interaccin entre el nivel re-gional y el nacional.

    Es importante destacar que la formacin de estructuras enel mbito econmico es inviable sin la formacin de estructurasen el mbito social. Si se fortalecen las fuerzas de mercado sin queocurra lo mismo con las estructuras sociales, la orientacin a lacompetitividad no tendr xito. La reforma y el desarrollo de la

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    180 Omnia Ao 13, No. 2, 2007, pp. 158 - 184

  • educacin deben apuntar a tres objetivos: la orientacin hacia elsistema de valores, el fortalecimiento del impacto social y la pre-paracin del nuevo nivel de calificacin (Eissa y Ferro, 2001).

    Es as como en la orientacin de la educacin hacia valores,razones polticas, sociales y econmicas, hacen necesaria unaorientacin hacia el sistema de valores dirigido a alcanzar la con-vivencia consensual, la responsabilidad comn y la capacidadpara solucionar conflictos, la cooperacin comunicativa y el tra-bajo en grupo, as como un aprendizaje activo e independientedurante toda la vida (CEPAL 2001).

    En cuanto al fortalecimiento del impacto social, ste se forta-lece con la creacin de prioridades dentro de una educacin bsi-ca para todo y un sistema de capacitacin industrial. Existiendola demanda correspondiente, la calificacin vocacional puedeadecuarse a los requerimientos especficos del sector informal, ala formacin vacacional tcnico-artesanal o a la formacin deobreros calificados en segmentos econmicos orientados a lacompetitividad (Esser, et al., 2001).

    En lo concerniente a la preparacin de los nuevos perfiles decalificacin, en la fase de reorientacin de la poltica econmicapasa casi siempre a primer plano la tarea de intensificar la capaci-tacin y el perfeccionamiento laboral en la misma empresa. Lasfirmas que aplican los nuevos conceptos de organizacin intensi-fican el entrenamiento (Esser, et al., 2001).

    Entonces la cooperacin concreta entre educacin, investi-gacin y sector productivo, contribuye a acercar la formacin pro-fesional a las necesidades econmicas, a colocar con rapidez egre-sados universitarios en la produccin, a mejorar las tcnicas dia-logales, a formar redes y a mejorar la competitividad internacio-nal de las empresas (CEPAL, 2001).

    Por otra parte, en materia de polticas comerciales los pasesde economa exitosas se distinguen por una poltica importadoraselectiva. Esta incentiva las importaciones, no solo porque los in-sumos importados y, en algunos casos, los bienes de inversin go-zan de liberaciones arancelarias y fiscales (drawback). Por encimade eso, se ofrece a la industria una proteccin que se basa en claroscriterios de performance y tiene carcter temporal (CEPAL, 2001).

    Adems con esas economas exitosas existe el fomento a laexportacin a cargo de una serie de instituciones relacionadascon esa actividad que soportan y fundamente el desarrollo comer-

    Consideraciones tericas de la competitividad empresarial 181

  • cial, tales como los consorcios exportadores, agencias de promo-cin comercial, infraestructura, entre otros.

    Es importante destacar el sector financiero y su imperativanecesidad de modernizarse y plantearle a las empresas posibili-dades de inversin. La competencia interbancaria ayuda a poneren marcha procesos de racionalizacin con la consiguiente reduc-cin de costos en el sector y la aparicin de posibilidades de finan-ciamiento adicionales, los mrgenes de transaccin se reducen,disminuyen los costos de administracin de pequeas carteras devalores, todo ello contribuye definitivamente al desarrollo del sec-tor industrial de un pas (Eissa y Ferro, 2001).

    Otro aspecto interesante en el nivel meso, es lo correspon-diente a la poltica ecolgica ambiental preventiva la cual debe es-tar dirigida a combatir y evitar el deterioro ambiental, incentivan-do adems la capacidad nacional de innovacin que apunta a de-sarrollar formas de produccin poco contaminantes. Toda estra-tegia ambiental dirigida al futuro se basa en visiones, institucio-nes e instrumentos cuyo objetivo es modificar la manera como seutiliza hasta ahora la naturaleza. Esta estrategia es un elementointegrante de la estrategia de industrializacin. (CEPAL, 2001).

    Todo lo antes expuesto configura los elementos ms impor-tantes en la construccin de un camino frtil y provechoso paraalcanzar el nivel meso en la configuracin de las estrategias sobrela base de la competitividad sistmica.

    10. Conclusiones

    Se puede afirmar que el planteamiento terico-metodolgicode la competitividad no es de reciente data, ha evolucionado a lolargo de los cambios ocurridos en el mbito econmico, poltico, so-cial, cultural entre otros, lo cual ha permitido construir un caminolargo y fructfero para la discusin y el anlisis de las fortalezas ydebilidades que determinan las capacidades locales y regionales dedesarrollo industrial. As como las determinantes polticos y eco-nmicos que caracterizan el crecimiento industrial sostenido, cen-trndose en los aspectos de creacin de redes entre gobierno, insti-tuciones, empresas y organizaciones privadas para el logro de undesarrollo industrial y mayor competitividad nacional.

    Por lo tanto, a medida que aumenta la complejidad de lasnuevas formas de organizacin industrial, los principios tericossobre la competitividad adquieren vigencia y mayor valor estrat-

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    182 Omnia Ao 13, No. 2, 2007, pp. 158 - 184

  • gico para formular planes de desarrollo industriales en pases envas de desarrollo, lo cual constituye un aporte valioso para el ad-venimiento de nuevas alternativas de desarrollo industrial quepermita el logro de una senda de crecimiento econmico sosteni-do de los pases del tercer mundo.

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