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Comparativa de crecimiento y producción en diferentes regímenes de calras en una masa de pino radiata en Balmaseda.

OTAOLA-URRUTXI TEJERA, MIKEL .¹

¹Departamento de Agricultura. Diputación Foral de Bizkaia.

Resumen

El objetivo de este estudio es examinar dos regímenes de claras que se han venido realizando en los montes públicos en el municipio de Balmaseda (Bizkaia) .Por una parte, un método de rotación tradicional, es decir, un régimen de claras medio-débiles por lo bajo, frente a otro régimen de claras fuertes por lo bajo-medio.

Con el fin de alcanzar este objetivo se pretende determinar el modelo de manejo silvícola para definir el calendario de claras y densidades con el fin de obtener la máxima productividad y volumen en madera de calidad unido a una masa que presente gran vigor y estabilidad. Así mismo se trata de lograr la gestión más sencilla y económicamente más rentable.

Modelo de crecimiento mediante claras fuertes que producen crecimientos del diámetro regulares. Masas de pino radiata tratadas mediante claras fuertes deben presentar crecimiento en diámetro constante a lo largo del turno.

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Modelo de crecimiento para masas tratadas mediante claras tradicionales débiles. La competencia intraespecifica afecta al

crecimiento del diámetro. La intolerancia del pino radiata a la falta de luz provoca en cierto rango de densidades poda natura l( reducción de copa viva) y por consiguiente perdida productiva

Palabras clave

Pino radiata, Régimen de claras, calendario silvícola.

1. Introducción

La importancia del pino radiata en la Comunidad Autónoma del País Vasco está fuera de toda duda. Es la primera especie en importancia tanto en superficie como económica. La producción de este pino entre las coníferas del estado representa el 25% siendo su superficie de tan solo el 3,6% (HERMOSO et al. 2007).

Sin embargo, son diferentes los factores que en los últimos años han hecho que la superficie de esta especie esté en retroceso pasando en menos de 20 años de una superficie de algo más de 150.000 Ha en el año 1.996 a menos de 130.000 en el año 2.012 (inventarios forestales CAPV).

Por una parte, el minifundismo forestal existente y la falta de cultura forestal son factores que dificultan la adopción por parte de los propietarios de una selvicultura intensiva y coordinada con las necesidades de la industria forestal ( RODRÍGUEZ et al. 2004) unido al sector de la madera debilitado por numerosas circunstancias (falta de competitividad-rentabilidad, industria local debilitada, práctica ausencia de I+D+i y de mercados que aporten mayor valor añadido para la madera de gran calidad , las sucesivas ciclogénesis ocurridas en los últimos años, política silvícola tradicional…), ha producido que la cotización de la esta madera se haya contraído en los últimos años, perdiendo interés entre los propietarios forestales.

Hoy en día en el País Vasco sigue vigente el modelo de crecimiento y producción de selvicultura tradicional propuesto por MADRIGAL Y TOVAL (1975) y posteriormente simulaciones (CASTILLA Y PRIETO, 1992; CANTERO et al., 1995; ESPINEL et al., 1997; RODRÍGUEZ et al., 2004), basados en régimen de claras entre débiles y moderadas

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Esta selvicultura tradicional aplicada para el manejo de esta especie es muy probable que esté alejada de la producción potencial, de alta calidad de su madera y de inversión si se compara a los datos de crecimiento y producción por Otaola-Urrutxi y Errandonea (2012) proponen unas tablas de producción mediante un régimen de claras fuertes

Recientemente se ha elaborado los datos de crecimiento y producción para este pino en los montes de Balmaseda (Bizkaia) a partir de los trabajos llevados a cabo desde el año 2006 mediante clareos y claras mixtas en todas las masas de radiata. Se trata de anticiparse a la poda natural con el fin de obtener una masa homogénea con madera de alta calidad y libre de nudos muertos o saltarines para turnos de 25 años.

Mediante las diferentes modelos de crecimiento y tablas de producción es posible comparar y planificar los diferentes regímenes silvícolas, productividades y la estimación del volumen y crecimiento de las masas a lo largo del turno.

Así mismo la valoración económica, según los modelos de manejo a elegir, puede orientar al técnico o gestor forestal a planificar su trabajo.

Masa de pino manejada mediante clareo y claras débiles. Presenta alta densidad, pies heterogéneos, índice de copa viva bajo y ramas muertas ( nudos saltarines) que restaran valor comercial de la madera. Gran esfuerzo para realizar la poda

de penetración

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Densidades altas y claras tardías producen peor calidad de madera y crecimientos unitarios menores.

Pinar de 13 años tratado mediante claras fuertes. A diferencia de la foto anterior la masa presenta gran vigor, las copas no presentan ramas muertas y se caracteriza por pies homogéneos

Por otra parte, turnos de más de 30 años, debido a altas densidades, son poco rentables ya que aumentan los gastos de gestión y retrasan tanto los aprovechamientos intermedios como el final

Como especie de luz, el pino radiata, es una especie que no tolera la competencia y necesita espacio para su desarrollo óptimo, de lo contrario, en espesuras trabadas es posible que su producción se estanque en gran medida (menor disponibilidad de agua por intercepción de la precipitación en los meses de mayor estiaje, reducción de la velocidad de la

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mineralización de la materia orgánica y pérdida de vigor por competencia intraespecifica al perder parte de la copa viva), siendo necesario turnos más largos para lograr igual volumen unitario. Los crecimientos en altura (en estudio) parece que se incrementan con regímenes de claras fuertes al ser proporcional al incrementado del diámetro por lo tanto dependientes de la densidad. Es por esto, regímenes de claras fuertes podrían variar las alturas para una misma estación en el caso del pino radiata.

2. Material y métodos

En los montes de utilidad pública del municipio de Balmaseda se llevan desarrollando desde el año 2006 claras fuerte por lo bajo-medio (estrato inferior y subdominante) a todas las masas de pino insigne reforestadas del año 1997 en adelante. Independientemente del número de pies por hectárea procedentes de la reforestación en el momento de realizar el clareo se eliminan los pies dominados, mal formados y codominantes hasta dejar una densidad de 550 pies por hectárea. Con este manejo se pretende liberar competencia con el fin de obtener una buena estructura de la masa, incremento de la resistencia al viento y mejora de la calidad de madera para sierra para las sucesivas claras.

En este trabajo se está realizando un seguimiento dinámico de las parcelas permanentes representativas de las masas de pino radiata mediante inventarios anuales a lo largo del turno.

La metodología empleada para la realización de los sucesivos inventarios se utilizan parcelas permanentes para la creación de las “Tablas de producción y crecimiento del Pinus radiata en Balmaseda (OTAOLA-URRUTXI Y ERRANDONEA, 2012). Estas parcelas se encuentran distribuidas en todas las masas de esta especie y que han sido reforestadas a partir del año 1996 y que han sido gestionadas mediante clareos y claras fuertes.

Sin embargo la red de parcelas se va incrementando a medida que se van incorporando nuevas masas reforestadas,

Esta red de parcelas abarcan la totalidad de los rodales situados en los Montes de Utilidad Pública del municipio de Balmaseda (Bizkaia) (MUP 124, 125, 126 y 127) del Catálogo.

La característica principal de estas masas es que debido a su gestión, el índice de estabilidad se encuentra comprendido entre 0’53 y 0’75 mientras que el índice de copa viva es superior al 60% de la altura total y no presentan poda natural por competencia intraespecífica.

Así mismo se ha realizado otra red de parcelas que representan a la totalidad de los rodales reforestados entre los años 1985 y 1995. Son bosques procedientes de reforestaciones con densidades mayores a 1600 pies/ha. Hasta el año 2006 han sido gestionados con clareos muy débiles (ailados) y clara débiles. Posteriormente se han gestionado con claras fuertes para su puesta en luz.

Finalmente en las masas reforestadas anterior al año 1985 (1960-1985) se realizan claras débiles por lo bajo preparatorias para su tala debido a su escasa respuesta a la puesta en luz ya que presentan índices de copa viva cercanos al 30% de la altura total. En este caso no se realizan parcelas, sino conteos pie a pie para su posterior tala.

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REPLANTEO DE LAS PARCELAS

Para la instalación y medición de las parcelas permanentes se realizan parcelas circulares de 10 metros de radio (315m²) en los primeros años de edad (10-12 años) ampliados a 15m (707m²) en los sucesivos años. Son parcelas que se adaptan correctamente a masas homogéneas y regulares de Pino radiata reforestado a marco real.

El replanteo de las parcelas se lleva a cabo con cinta métrica mientras para el inventario dimétrico se numeran todos los pies, marcando el punto para la medición del diámetro normal para los sucesivos inventarios.

En la medición de las alturas se miden diferentes formas; al realizar las claras y clareos, la altura se mide con cinta “in situ” y para los árboles en pie se utilizan diferentes hipsómetros (VERTEX, SUNTO…).

Hasta febrero de 2013 son 32 el número de parcelas permanentes en masas gestionadas mediante clareos y claras fuertes, procedentes de reforestaciones posteriores al año 1996. Estas parcelas y las que se vayan incorporando en años próximos aportarán mediante los inventarios anuales a lo largo del turno un modelo preciso y dinámico de esta opción de gestión.

En las masas reforestadas entre los años 1985-1995 se han realizado parcelas permanentes circulares de radio 15m (707m²) para estudiar la respuesta y evolución a las claras fuertes, después de un periodo de aproximadamente de 5-10 años con competencia intraespecífica excesiva. El número de parcelas que representan a estas masas es de 14.

En el presente trabajo se incluye el señalamiento y seguimiento de las diferentes claras y clareos.

Patrón de crecimiento regular y sostenido durante su el turno en masas tratadas con claras fuertes. Los crecimientos corrientes anuales deben oscilar entre el 20-30%

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Mediante clareos a edad temprana (4-6 años) mejoraremos la estructura de la masa (pies dominantes) y se incrementa el vigor de la planta (índice de esbeltez y equilibrio copa-sistema radical). La respuesta a la puesta en luz es inmediata y espaciamientos en clareos de 4-5 m será espesura cerrada en un intervalo de 3-4 años.

Clareo tardío. El costo económico es mayor por pérdida de crecimiento de la masa resultante y por el mayor numero de

jornales empleados

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Testa de un pino del mismo rodal pasados 5 años del clareo. Los crecimientos en diámetro se multiplican por 3.

Tres fotografías tomadas de un rodal desde un mismo punto en los años 2007-2009-2012

Año 2007 (clareado en febrero del 2006)

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Verano 2009: antes de la 1ª clara comercial

Primavera 2012: antes de realizar la 2ª clara comercial.

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En las masas de pino insigne en torno a 20 años gestionadas hasta el año 2006 mediante claras medio-débiles se procede a realizar claras fuertes con el fin de vigorizar la masa, mejorar su estabilidad y recuperar la producción individual. Se observa en masas que aun no están estancadas y que conservan al menos un 40% de copa viva, responden a la clara con crecimientos en diámetro notables.

Masas de más de 30 años de edad que han estado gestionadas con regímenes de claras débiles. Son masas estancadas que no tienen capacidad de respuesta a la puesta en luz y sus copas no recuperan el espacio liberado. Normalmente su índice de copa viva es del 30-40% y la espesura de la masa ronda el 80%.

Patrón de crecimiento de masas de pino radiata con densidades altas y puestas en luz 10 años tarde. Hasta los 20 años la respuesta puede ser satisfactoria siempre que el índice de copa viva no baje del 30%.

Para el estudio de las masas manejadas por régimen de claras fuertes se han realizado parcelas de medición permanentes en todas las reforestaciones desde el año 1997 con el fin de describir la su evolución posterior.

En las masas manejadas con claras débiles se mide la totalidad de la masa pie a pie para el cálculo de su volumen para su posterior tala.

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4. Resultados

En las tablas siguientes de calidad de estación II se presentan los datos medios por tratamiento que definen los resultados del trabajo

En la primera tabla se describe la evolución de dos modelos de regímenes de claras: antes y después de la clara y masa extraída para calidad de estación II.

.

TIPO DE CLARA EDAD Nº/Ha. Dg/cmABm² H ̥ Vm³/pie Vm³/Ha. Nº/Ha. Dg/cm

ABm² Vm³/pie Vm³/Ha. Nº/Ha. Dg/cm

ABm² Vm³/pie Vm³/Ha.

ABm² Vm³/Ha.

5 1050 8,7 6,8 8,1 0,021 22,05 500 7,3 2,2 0 550 10,3 4,6 0 0 6,8 22,05

10 550 21,4 17,96 12,8 0,169 92,95 200 18,3 5,25 0,126 21,4 350 22,8 12,7 0,204 71,55 17,95 92,95

13 350 29,6 24,07 17,9 0,524 183,4 125 26,5 8,27 0,35 43,75 225 31,2 18,82 0,65 146,25 31,52 211,4

17 225 38,5 23,27 21,3 1,023 230,17 75 35,2 4,86 0,791 59,32 75 40,8 18,41 1,1 192,5 38,99 316,97

25 175 51,8 31,59 28,8 2,51 456,75 52,17 581,22

8 1500 11,2 12,3 50 1450

13 1450 15,7 28,06 15,2 0,139 201,55 560 14,3 8,99 0,087 48,72 890 16,1 19,07 0,13 152,83 28,06 201,55

15 890 25,49 18,9 0,217 193,13 290 17,2 6,57 0,164 47,56 600 20,7 15,88 0,292 175,2 34,48 271,48

20 600 28,04 22,2 0,417 250,2 160 21,5 5,81 0,336 53,76 440 26,2 23,21 0,47 207,84 43,29 317,9

25 440 32,76 26,1 0,738 324,28 120 27,3 7,02 0,573 68,4 320 31,8 26,28 0,84 269,12 54,13 487,56

30 320 30,94 28,8 1,118 357,76 70 32,4 5,77 0,841 58,87 250 38,5 28,78 1,29 323,4 59,35 600,71

35 250 31,71 31,2 1,563 390,75 65,87 668,06

MASA PRINCIPAL ANTES DE LA CLARA MASA EXTRAÍDA MASA PRINCIPAL DESPUÉS DE LA CLARA MASA TOTAL

FUERTE

MEDIO-DÉBIL

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Los efectos de las claras tienen efectos sobre el árbol ( volumen, vigor) y en la producción de la masa

Efectos de la intensidad de la clara sobre la producción de la masa

El régimen de claras fuerte se parte de una densidad baja (densidades que evitan la competencia intraíspecifica), o bien de un clareo que evite la competencia intraespecífica a edades tempranas con el fin de obtener un porcentaje elevado de madera para sierra en la 1ª clara y sucesivas y poder reducir el turno.de corta seleccionando los arboles de porvenir. Se observa en las talas que los crecimientos en diámetro son constantes en el tiempo.

Por otra parte en las claras débiles o medias se retrasa la eliminación de competencia con el fin de obtener rentabilidad en el mayor numero de pies en detrimento del crecimiento en volumen. La masa entra en competencia y se produce poda natural (perdida de copa viva) en los primeros años y fustes de peor calidad (menor vigor- estabilidad e índice de copa viva bajo.

Son significativos los crecimientos corrientes entre las dos masas y las respuestas a la

eliminación de competencia (fotos).

Comparativa de los crecimientos en volumen y área bisimétrica según el tratamiento

CRECIMIENTOS MEDIOS CRECIMIENTOS CORRIENTES

TIPO DE CLARA EDAD N/pies ImABT m²/ha/año

ImVT m²/ha/año

IcAB m²/ha/año

IcV m²/ha/año

FUERTE

5 1050 0 0 2,8 10 550 1,52 9,29 7,9 37,28

13 350 2,42 15,75 11,4 18,42 17 225 2,29 21,42 14,3 37,84

25 175 2,09 23,25

MEDIO-DÉBIL

13 1450 2,16 15,5 15 890 2,3 18,61 3,21 20,15

20 600 2,16 17,32 1,76 21,1 25 440 2,15 18,97 2,17 23,28 30 320 1,97 19,21 1,04 17,72 35 250 1,88 19,68 1,3 13,47

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Comparativa del peso de las claras y el espaciamiento

TIPO DE CLARA EDAD Nº pies HART % a.c. HART % d.c.

Peso clara % Nº pies

FUERTE

10 550 33,31 42,09 47,62 13 350 29,86 37,57 36,37 17 225 31,29 35,42 35,71

25 175 26,25

MEDIO-DÉBIL

13 1450 16,72 20,81 38,63 15 890 17,55 25,71 32,58 20 600 16,39 21,19 26,67 25 440 18,27 20,7 27,27 30 320 19,41 21,81 28,57 35 250 20,27

0

20

40

60

80

100

120

140

160

10 12 14 16 18 20 22 24 26 28 30 32 34 36 38 40 42 44 46 48 50

RELACIÓN DENSIDAD-DIÁMETROS7 AÑOS 8 AÑOS 12 AÑOS 13 AÑOS

Incremento de los diámetros en 6 años en masas libres de competencia. Las claras son fundamentales para acortar el turno.

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5. Conclusiones

En el régimen de claras fuertes se produce un crecimiento constante en las masas a lo largo del turno, tanto en diámetro como en altura mientras que en masas intervenidas mediante regímenes de claras medios-débiles se produce un bloqueo del diámetro que retrasa la edad de corta por presentar un decrecimiento por competencia intraespecifica. Por lo tanto el régimen de claras fuertes concentra toda la producción en un menor número de pies, regulares y de elevado grosor, es decir, madera de gran calidad, sin nudos muertos. Aunque es preciso continuar con las mediciones de las parcelas permanentes, se puede afirmar que compensan este tipo de claras por que mejoran la estabilidad de la masa, resistencia a daños abióticos, abaratan los costos y facilitan la gestión. Así mismo la venta de esta madera de alta calidad tiene mejor aceptación en el mercado desde la 1ª clara.

Resultados de los datos de los inventarios sucesivos de las parcelas permanentes en

masas gestionadas mediante claras fuertes; 1. Porcentaje de madera de sierra en la primera clara >16 cm de diámetro para

masas de 10 a 13 años está comprendido entre el 41% y el 59% del volumen total extraído.

2. Los incrementos diamétricos para esta gestión son constantes en el tiempo. La calidad de la estación podría definirse por el incremento diamétrico.

3. Comunicación personal con D. Luis Chauchard (agosto 2012). Los índices de sitio para 25 años podrían llegar a los 42m de altura para esta gestión en Balmaseda, rangos similares a los mejores rodales chilenos.

4. Producción corriente anual para diferentes rodales comprendidos entre 23 y 48 m³/ha/año.

La producción lejos de reducirse con las claras fuertes se incrementa frente a otros

regímenes de claras debido al gran crecimiento y respuesta de las masas de este pino a temprana edad ya que como especie intolerante sufre poda natural en espesuras trabadas y por ello pérdida de capacidad de fotosíntesis.

La evaluación económica debe ser uno de los objetivos a revisar ya que los resultados

son evidentes y la rentabilidad económica entre los diferentes regímenes puede ser de muchos miles de €s por hectárea. No solo a de reparar en la valoración de los productos resultantes sino también los turnos de corta y costos económicos deben ser de utilidad al gestor- propietario.

6. Agradecimientos

Primeramente debo agradecer a Txema Omañas (Ingeniero de Montes de la zona), que siempre me ha aconsejado y apoyado. Desde el año 2006 y a pesar de las dificultades del momento nunca frenó ante las adversidades. A Elena Errandonea (Ingeniera Técnica Forestal de la zona) por facilitar los trabajos y sumar. A mis compañeros por su ayuda y consejos.

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7. Bibliografía

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