Sobre la concepción de McLuhan acerca de las extensiones del ser humano Jorge Méndez Martínez 1

Resumen

A partir de la afirmación de McLuhan sobre los medios de comunicación como extensiones del hombre, considero sus implicaciones como ampliación de la mente, tomando como base el Sistema Nervioso Central (SNC) y la relación con la tecnología eléctrica. En una precisión acerca de aquello que se extiende, se aborda la derivación de las extensiones como recursos internos y recursos externos de la mente, hacia la conformación de una inteligencia colectiva. Finalmente se comenta la idea de Robert K. Logan sobre los nuevos medios como extensiones de los viejos medios. Se concluye que los medios, sus extensiones y nosotros mismos, nos prolongamos infinitamente, en una inteligencia compartida.

Palabras clave

McLuhan, medios de comunicación, extensiones, electricidad, Logan, inteligencia compartida.

Abstract

From the assertion of McLuhan on the media as extensions of man, are discuss their implications as an extension of the mind, on the basis of the Central Nervous System and the relationship with the electrical technology. In a precision about what is in the extended position, discusses the derivation of the extensions such as internal resources and external resources of the mind, toward the formation of a collective intelligence. Finally, there is the idea of Logan on the new media as extensions of the old media. We concluded that the media, its extensions and ourselves, we extend infinitely, in a shared intelligence.

Key words

McLuhan, media, extensions, electricity, Logan, shared intelligence.

Introducción

En el libro Comprender los medios de comunicación. Las extensiones del hombre,

McLuhan (1996) plantea ya – desde el mismo título –su tesis sobre cómo los medios

constituyen una prolongación de nuestro cuerpo y mente. Nuestros sistemas nerviosos son

ampliados con ayuda de los medios de comunicación.

Es de nuestro interés comentar la idea específica de la extensión de nuestra mente. Cuando

decimos “la mente”, las implicaciones conceptuales son diversas. En sentido físico tendría

que ver con el cerebro y éste como parte del Sistema Nervioso Central (SNC). En sentido

más abstracto tendría que ver con el pensamiento.

Los conceptos antes mencionados han llenado páginas (de papel y de Internet) en

discusiones interminables. Aquí sólo señalamos que en el habla cotidiana, los términos se

intercambian. Haremos la diferencia cuando convenga a una precisión explicativa.

Comentaremos, en primer lugar, el Sistema Nervioso, en su relación con el discurso de

McLuhan.

La electricidad y el sistema nervioso

McLuhan resalta la cuestión del flujo eléctrico. Cabe comentar que, de hecho, el

funcionamiento fisiológico de nuestro cuerpo y mente implican actividades eléctricas.

Como ejemplo, consideremos los electrocardiogramas y electroencefalogramas.

J. Alonso (2002), en su texto introductorio a la Psicología, comenta: “hay un sistema

electroquímico de comunicación, donde la actividad eléctrica se corresponde con el

impulso nervioso y la actividad química cerebral se produce por las sinapsis de las

neuronas” (Alonso, p. 48). Vemos aquí ya la mención de la “comunicación” y de la

“actividad eléctrica”.

En el campo de la neurobiología se han investigado diversos aspectos de los flujos

eléctricos en el Sistema Nervioso. Ramón de la Fuente y F. J. Álvarez Leefman (1998, p.

18) , por ejemplo, comentan: “Hans Berger diseñó el primer aparato para el registro de

potenciales eléctricos del cerebro intacto”. Los trabajos iniciales de Berger dieron lugar al

registro por encefalograma en 1924, reportado en 1929 (Tudor, et al., 2005).

Podemos mencionar también el dramatismo del electrochoque en la denominada Terapia

Electro Convulsiva (Reed, 2013). Se aplican descargas eléctricas en el cerebro del paciente

con el objeto de producir "transformaciones electroquímicas en las células nerviosas que, a

su vez, se traducen en síntesis de proteínas que modifican los neurotransmisores

involucrados en la patología" (Mizrahi, 2012).

Las anteriores menciones apoyan las nociones que discute McLuhan acerca del impacto de

la electricidad en la vida del ser humano.

Del SNC (interno), hacia el mundo, (externo)

En Comprender los medios de comunicación. Las extensiones del hombre, se establece

como una primera gran extensión del sistema nervioso a la tecnología de los medios de

comunicación de masas, para después considerar como segunda gran extensión a la

tecnología eléctrica (McLuhan, 1996, p. 279).

El punto interno del SNC interviene en el mundo como una extensión de nuestra mente, de

nuestro conocimiento, de manera bidireccional. Se maneja el concepto de prótesis, en la

medida que se amplía o extiende algo. De la misma manera que extendemos nuestra

percepción visual con los lentes, lo hacemos con la percepción auditiva con los audífonos.

Para el sentido táctil tenemos bastones y guantes. Así, podemos hablar de extender nuestro

conocimiento, especialmente con el uso de los medios de comunicación.

Pero ¿por qué se dice que se extiende el conocimiento? Un ejemplo claro lo constituye la

búsqueda de información. Para consultar textos ya se tiene la alternativa de hacerlo en

lugares distantes sin necesidad de desplazarnos físicamente. Esto es, nos extendemos en el

espacio. Si consideramos que no hay horarios estrictos de consulta, nos extendemos en el

tiempo. Esto es, nos extendemos en el tiempo y en el espacio.

En el ejemplo anterior, se trataba de manejo de información. Pero hacemos también algo

con esa información, es decir, pasamos al conocimiento. Cabe señalar la diferencia entre

información y conocimiento. Destacamos la contribución de Burke “…el término

“información” se referirá a todo aquello que se presenta como relativamente “crudo”,

específico y práctico; en cambio, utilizaremos el término “conocimiento” para designar

aquello que ha sido “cocido”, procesado o sistematizado por el conocimiento” (2002, p.

24).

Así resulta que extendemos no sólo nuestras posibilidades de obtener información, sino

también extendemos nuestras capacidades de construcción social del conocimiento.

Recursos internos extendidos a recursos externos

Mencionamos que se extiende el conocimiento, nuestras capacidades intelectivas, nuestra

inteligencia. Podemos calcular, escribir, diseñar, dialogar…en un tiempo y espacio más

amplios, extendidos.

Tenemos el recurso interno de la memoria, con todo nuestro conocimiento almacenado,

listo para usarse. Recordamos cosas momentáneas, como un número telefónico que estamos

leyendo para marcar: nuestros ojos escanean el número escrito, lo retenemos por unos

segundos para desviar la mirada hacia las teclas (analógicas o digitales), marcamos y luego

ese recuerdo se va. Esta es la memoria de corto plazo, de corta duración. Si recordamos

algo por más tiempo, se habla de memoria de largo plazo. Una estructura intermedia la

constituye la memoria de trabajo. De hecho, en el modelo actual, en un continuo, la

memoria de trabajo organiza la información de las otras memorias (Sternberg, 2011, p.

191).

Bien, los recursos de nuestra memoria, de nuestro Sistema Nervioso, son internos. Pero

también tenemos recursos externos. Un libro de notas, una agenda, una grabación de audio

o imagen (foto o video), constituyen recursos externos. Es como hablar de una memoria

externa, en la cual nos apoyamos para actuar en el mundo.

Ahora, con los medios de comunicación, esos recursos se extienden ampliamente en

espacio y tiempo. Son extensiones de conocimiento. Si anotamos una definición en papel

para consultarla después, podemos también tener un archivo de computadora. Más aún,

dicho archivo puede estar en una nube informática, como en Skydrive o Google Drive, lo

puedo consultar en cualquier momento y cualquier lugar. El caso es que, además, también

puedo relacionarme socialmente más allá de la contigüidad física.

Grafíco 1.

Fuente

De la extensión a la inteligencia colectiva

La gran extensión, ahora, del conocimiento, se puede dar más allá de nuestra piel. Esto es,

podemos usar los recursos de otras personas. A través de una comunicación bidireccional,

interactiva, se extienden los recursos de conocimiento. Lo que sabemos, lo compartimos; lo

que los demás saben, nos lo comparten. Ello sucede en Internet, con las redes sociales.

Tenemos las individualidades agrupadas y conectadas, en un bloque pensante. Se mueven

en el ciberespacio como los cardúmenes de peces, las parvadas de aves, o las acciones de

hormigas en grupo. A principios de los noventas, William Wheler habló del grupo de

hormigas trabajando en grupo como un superorganismo. A modo de constituir en sí otro ser

(Rasmus, 2001).

Los humanos conformamos un bloque de conocimiento, coordinado, en movimiento

pensante, en un estar ahí…todos, en una apertura cosmológica de la comunicación.

Hay muchos otros puntos previos en los que puede verse un antecedente al pensamiento

colectivo. Por ejemplo, la noción del inconsciente colectivo de Jung, que vía el lenguaje se

mantiene a través de los tiempos de la humanidad como una permanencia colectiva.

Durkheim alude a una conciencia colectiva (ver Luci, 2001), como el conjunto de creencias

y sentimientos comunes al término medio de la población, que tiene vida propia y es

distinta de la conciencia individual (aunque se da en ella).

Cabe destacar la aportación de Pierre Levy, uno de los principales autores acerca de la

inteligencia colectiva, quien señala:

“…una inteligencia repartida en todas partes, valorizada constantemente, coordinada en tiempo real…, el fundamento y el objetivo de la inteligencia colectiva es el reconocimiento y el enriquecimiento mutuo de las personas, y no el culto de comunidades fetichizadas o hipóstasiadas.” (Levy, 2004)

Volvemos a McLuhan, con Derrick de Kerckhove. En la idea de la inteligencia colectiva,

incorpora elementos de las redes. En su obra La piel de la cultura utiliza estos términos

como una metáfora para explicar el papel de las tecnologías, que – al igual que McLuhan –

señala que funcionan como extensión de nuestros cuerpos y mentes (Baldessar y Giglio,

2011).

Grafíco 2

Fuente:

Ampliación de las extensiones

Al extender nuestro conocimiento con los medios de comunicación, también constituimos

“el mensaje”. Hay una adaptación. Si los objetos mecánicos se adaptan a nuestra forma, nos

metemos en el concepto de la ergonomía. Dentro de ésta, una de sus especializaciones

alude también el conocimiento, se trata de una ergonomía cognitiva, que se concentra en los

procesos tales como la percepción, la memoria y el razonamiento, además de los aspectos

físicos. Entre los diversos aspectos abordados por la ergonomía cognitiva (International

Economics Association, 2013), se encuentran las interacciones humanas con el medio de la

computadora, la cual a su vez nos conduce a Internet. Esto significa la relación con los

medios de comunicación.

Ante la observación de que McLuhan observó que los medios y tecnologías son extensiones

de la mente y el cuerpo y que el contenido de cualquier nuevo medio es un viejo medio,

Logan (2010) amplía esta idea con su planteamiento de que al combinar estas dos

proposiciones tenemos que un nuevo medio es la extensión de un viejo medio, y así,

recursivamente, es la extensión de una extensión. En este planteamiento, Logan considera

que las innovaciones tienen como dimensiones básicas, componentes cognitivos, sociales y

tecnológicos.

Destaca su mención de la importancia del andamiaje cognitivo, con base en Andy Clark.

Esto tiene que ver con los medios como recursos externos tecnológicos, que constituyen

una base o andamio, que apoya el desarrollo de las habilidades cognitivas en cuanto a su

relación con los medios como extensiones.

Conclusiones

La extensión de nuestro conocimiento, nuestras habilidades, nuestro Ser, se integra hacia

una amplia noción de inteligencia compartida. Ya realmente en una Aldea Global, con

mentes conectadas eléctricamente en el ciberespacio. Todo el tiempo y en todo espacio,

estamos pensando también colectivamente, apoyándonos (andamiaje), conectando medios y

personas. Los medios se conectan y extienden una y otra vez. A su vez, las extensiones se

conectan entre sí, prácticamente de una manera infinita. Finalmente, nosotros nos

extendemos, entre medios y personas.

Referencias

Alonso, J. I. et al. (2002). Psicología. Madrid: McGraw-Hill/Interamericana de España.

Baldessar, M. J. y Giglio K. (2011). La piel y sus extensiones: contribuciones de Kerckhove para la convergencia de la cibercultura. Razón y Palabra, 75.

Burke, Peter (2002). Historia social del conocimiento. De Gutenberg a Diderot. Barcelona: Paidós.

Fuente, Ramón de la (1998). Las bases neurológicas de la mente. Una visión de conjunto. En Ramón de la Fuente y F. J. Álvarez Leefmans (1998). Biología de la mente. México: Fondo de Cultura Económica, 9-22.

IEA (2013). Ergonomics. International Ergonomics Association. http://www.iea.cc/

Levy, Pierre (2004) Inteligencia colectiva: por una antropología del ciberespacio. Washington, D. C.: Organización Panamericana de la Salud. http://www.minipimer.tv/txt/20110120/Inteligencia-Colectiva-Pierre-Levy.pdf

Logan, R. K. (2010). Understanding New Media: extending Marshall McLuhan. New York: Lang Publishing.

Luci, Florencia (2001). Pensar la Política Social: aportes desde Durkheim. IIGG/UBA-CONICET. http://es.scribd.com/doc/104398219/Pensar-La-Politica-Social-Aportes-Desde-Durkheim

McLuhan, M. (1996). Comprender los medios de comunicación. Las extensiones del ser humano. Barcelona: Paidós. (edición original en inglés, 1964)

Mizrahi, D. (2012) ¿Sabía usted que aún se usa el electroshock? Infobae. http://www.infobae.com/2012/05/10/1050157-sabia-usted-que-aun-se-usa-el-electroshock

Reed, J. (2013) ¿Para qué se sigue usando el "electroshock"?.BBC Mundo. http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2013/08/130802_terapia_electroconvulsiva_depresion_kv.shtml

Rasmus G Winther (2001) Wheeler, William Morton. Wiley Online Library: John Wiley & Sons. http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1038/npg.els.0002950/full

Sternberg, R. J. (2011). Psicología cognoscitiva. México: CENGAGE Learning

Tudor, M., Tudor, L. y Tudor; Kl. (2005). Hans Berger (1873-1941)--the history of electroencephalography. Acta Med Croatica, 59(4):307-13. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/16334737

1 Doctorante, Centro Avanzado de Comunicación Eulalio Ferrer (Mëxico). Su cuenta de e mail es: jorge3344@gmail.com