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GOBIERNO DEL ESTADO DE MEXICO

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MONOGRAFIA

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CONTENIDO

PROEMIO 5

ANTECEDENTES HISTORICOS 7 EL MEDIO GEOFISICO. 15

CLIMA, AGRICULTURA, GANADERIA El

TENENCIA DE LA TIERRA, INDUSTRIA, COMERCIO. 25

COMUNICACIONES Y TRANSPORTES, FINANZAS, DEMOGRAFIA.' 29

HIGIENE Y SALUBRIDAD, ELECTRIFICACION, ALIMENTA

CION TRABAJO, CASA Y VESTIDO. 33

EDUCACION. 37

ARTE, CULTURA, DEPORTES. 41

CONSIDERACIONES GENERALES Y RECOMENDACIONES. 45

46 BIBLIOGRAFIA.

No. Gat

No.de Orden

oda acción para ser fructífera necesita cimentarse sobre el conocimiento y,

éste, habrá de ser todo lo amplio que la información y la experiencia lo permitan.

Es preciso que nos conozcamos mejor y que lleguemos hasta la raíz misma de

los problemas que nos afectan. Nuestro Estado posee una vasta extensión y las

dificultades que ofrecen su topografía, las distancias y otros factores de integración,

constituyen obstáculos qué afectan a toda planeación ágil que busque resultados

óptimos.

A ello obedece la publicación de estas monografías, esfuerzo del Gobierno del

Estado: ofrecer una visión ligera y a un tiempo profunda, en sus datos esenciales, de

la realidad de los ciento veinte municipios que integran nuestra Entidad. En la tarea

hemos sido eficazmente apoyados por los municipios que aportaron el material que

sirvió para editarlas. Estos trabajos no son en manera alguna completos. Sin embargo se

encontrarán en ellos bajo la forma de cifras, promedios, estadísticas o descripciones,

los aspectos principales que integran la vida política, económica y social de cada

municipio.

El acopio de información servirá de punto de partida para el análisis y la

búsqueda de medios con que resolver los problemas según su importancia o

urgencia. Y en esta labor es preciso contar con la colabora ción y el esfuerzo de

todos nosotros. Si ello se logra, estas ediciones habrán alcanzado su verdadero

propósito.

Toluca de Lerdo, enero de 1971

CARLOS HANK GONZALEZ GOBERNADOR CONSTITUCIONAL DEL ESTADO DE MEXICO

PROEMIO

CALACOAYA.—Lugar histórico donde Cortés rea- grupó sus fuerzas en su marcha a Tepozotlán.

ANTECEDENTES HISTORICOS

ZARAGOZA.—MONOGRAFIA. 9

I. ANTECEDENTES HISTORICOS

Pocos vestigios quedan de los antiguos pobladores de este Municipio, aunque todo hace presumir que el área fuera frecuentada por migraciones y, más tarde, asiento de tribus sedentarias que se acogieran a la ventajosa ubicación de sus suaves lomajes y a la bondad de su clima, para establecerse allí.

Asegura Vaillant que los primeros pueblos del Valle de México de que tenemos conocimiento vivieron en el plano de la Cultura Media, en los siglos inmediatamente anteriores y siguientes al inicio de nuestra era. Ocupaban aldeas permanentes, se mantenían sobre todo de les productos de sus campos, hacian utensilios apropiados de piedra, de hueso y de barro, y moldaban pequeños ídolos de tierra cocida. En aquella época el Valle de México era un lugar magnífico para vivir. Altas cadenas de montañas circundan un fértil Valle, situado a poco más de 2,000 m. s.n.m., en el que existía un gran lago salado, el de Texcoco, alimentado al sur por dos lagunas de agua dulce, la de Xochimilco y la de Chalco; al noroeste por otras dos, la de Xalcotan y la de Zumpango; y al noreste por un perezoso arroyo, el río de Acolman, que recogía las aguas del feraz Valle de Teotihua- can. Estos lagos eran poco profundos y sus riberas pantanosas pobladas de juncos atraían una gran afluencia de aves salvajes. En las laderas boscosas abundaba el venado.

Sin embargo, las condiciones no eran iguales en todos los bordes del lago. Según Motolinía, la parte norte era muy fresca y fértil, en tanto en lo alto de las sierras se enseñorea la niebla. Las tierras ubicadas hacia el sur y el oeste, agrega, son secas y no llueve sino en tiempo de aguas, “y aún menos que en las otras partes de esta Nueva España, y así es muy grande la diferencia que hay de una parte a la otra (que) está lo más del tiempo seco, lo cual es muy de notar que en tampoco espacio haya tan grandes extremos”.

Lo agreste y montuoso de la región que nos ocupa, pudo ser aprovechado como refugio para bandas que, como los otomíes y ma- zahuas, vivían en forma inestable y primitiva. La proximidad de los lagos bastaba para proveerles de alimentos y de productos que otros grupos más adelantados cultivaban. Al mismo tiempo, el monte les servía para ocultarse cuando bandas mejor organizadas les amenazaba. Las alturas y la vegetación les servía para sustraerse a sus ataques a la espera de mejor ocasión para volver a sus an- dadás.

Todo parece indicar, y esta es la opinión de Clavijero, que a la destrucción del imperio tolteca, hacia mediados del siglo XI d.n.e., varias familias toltecas se establecieron en el noroeste del Valle de México. Un siglo más tarde, llegan al sitio las avanzadas chichimecas y es casi seguro que Achitomatl, capitán de Xólotl, haya recorrido exhaustivamente la región, en cumplimiento de las disposiciones de su rey que le ordenó “que fuese a reconocer el origen de ciertos humos que el príncipe Nopaltzin había observado en su ex-pedición (hacia el noreste del lago)”. La ruta seguida por este capitán, desde Tenayuca, necesariamente ha de haber comprendido el antiguo territorio de Atizapán.

Al dividir Xólotl su reino en varios señoríos, nombró al príncipe Acolhuatzin, personaje que había arribado conjuntamente con otros dos príncipes de la nación Acolhua, señor de la ciudad y distrito de Atzcapotzal- cc, “y de él descendieron aquellos reyes ba

10 ZARAGOZA.— MONOGRAFIA.

jo cuyo yugo estuvieron más de 50 años los mexicanos”.

A la muerte de Acolhuatzin, le sucede Tezozomoc y la ciudad-estado de Atzcapot- zalco alcanza su mayor importancia.

Es probable que de esta época date la fundación de dos de los pueblos más antiguos de Atizapan: Calacoaya y Tecoloapan, porque señalan una especie de frontera de las tierras ocupadas por los otomíes y por hallarse dentro de la ruta que comunicaba a Tlacopan (Tacuba) con Tepotzotlán.

La circunstancia de hallarse los llanos de Atizapán, en el camino más practicable hacia Villa del Carbón y Xilotepec, fortalecen la suposición de que, al producirse las continuas guerras que hasta el estableci- m ento del imperio azteca se sucedieron casi sin intermitencias, toda el área conocio de movimientos de tropas, de depredacio-nes y robos sin cuento, y de una constante inquietud que obligó a replegarse hasta muy al interior a las bandas otomíes que no consentían en aceptar las alianzas con los conquistadores. Ello permitió su supervivencia y hasta el presente pueden hallarse núcleos otomíes casi en estado puro, como ocurre en San Feo. Magú.

Clavijero nos explica este proceso de la manera siguiente: “En el siglo XV, (los oto- míes) comenzaron a vivir en sociedad y a civilizarse, reducidos a poblaciones y sometidos a la corona de Acolhuacán, o a fuerza de armas o voluntariamente movidos del ejemplo de otras naciones cultas. Fundaron en la tierra de Anáhuac y aún en el mismo Valle de México, innumerables poblaciones (...) conservando hasta ahora, aún en esas colonias alejadas, inalterable su primitivo lenguaje. Pero no toda la nación se redujo por entonces a vida civil; mucha parte o la mayor quedó juntamente con los chichimecas en la vida salvaje, y ambas naciones, confundidas por los españoles bajo el nombre de chichimecas, se hicieron célebres por sus hostilidades y correrías y no se redujeron del todo hasta el siglo XVII. Los otomíes han sido reputados por la nación más ruda de la tierra de Anáhuac, parte por la dificultad que todos sienten en entender su lengua y parte por la servidumbre de tantos siglos, que no les ha dejado entera libertad para las funciones del alma; pues aún en tiempos de los reyes mexicanos eran tratados como esclavos. Antiguamente fueron célebres en la caza y hoy comercian por la mayor parte en telas bastas de que se visten los indios”.

Tras el dominio fugaz de los tepenecas de

Tlacopan, los territorios que actualmente forman el Municipio de Atizapán pasaron a formar parte del Imperio Azteca. No existen indicios de que éstos últimos hayan tenido que recurrir directamente a la fuerza para obtener de sus habitantes los tributos que exigían a los sometidos y quizá la guerra contra Xilotepec, que obligó a Moctezuma a efectuar una incursión hasta ese se-ñorío, constituya el solo caso en que las tro- •pas aztecas pisaron su territorio.

El sucesor de Moctezuma, Axayácatl, lleva el poderío azteca hasta su máximo, y aunque en sus conquistas hacia el Oeste de Tenochtitlan llega hasta el reino de Míc- chuacan, el reino de Tlacopan se mantiene independiente dentro de la estructura de la Triple Alianza, y durante los 90 años del imperio azteca constituye el componente de menor consideración dentro del sistema gubernamental tripartita de dicho imperio. Hacia 1431 trasladaron la capital de Atza- pctzalco a Tlacopan (Tacuba) y nombraron Tepanecatecuhtli (príncipe tepaneca) al tlahtoani de esta ciudad. Sin embargo, permitieron a Atzcapotzalco continuar su monopolio del comercio de esclavos dentro del nueve Tepanecapan. Tanto el Códice Osuna ccmo los Anales de Cuauhtitlan indican la existencia de 8 Tlahtocáyotl, o unidades ad-ministrativas gobernadas por un tlahtoani, dentro del territorio subordinado a Tlacu- pan. Los actuales terrenos ocupados por el Municipio de Atizapan, quedaban en el primer tlahtocáyotl, cuya cabecera era Tlacopan, con una provincia directamente dependiente de ella, tan extensa, que abarcaba parte del Valle de Toluca y cuyos límites corrían por las orillas occidentales de la Laguna de Lerma. Tocante a la división de las actividades militares, en cuatro distritos, Atizapan quedaba comprendido en el primero de ellos, con cabecera en Atzcapotzalco, y cuya jurisdicción abarcaba hasta Zumpango, Coyoacan, Xalatlaco y Tacuba.


Comprendían estos distritos “a los pueblos que obedecían a Tlacupan que se juntaban aquí para las guerras y, de aquí repartían los tributos y buscaban y traían cal, piedra y madera, pétatl, escudillas, platos, a todos y los demás materiales...” (“Memorial de los Pueblos”). Referente a las provincias tributarias, es de hacerse notar que Tlaco- pan y zonas adyacentes constituían la lla-mada “Zona Libre”. En ella se encontraban pueblos tan importantes como Tacuba, Atz- capotzalco y Coyoacán, todas las tres antiguas cabeceras tepanecas. En 1568 el área contenía 42,000 habitantes; en 1532, todavía tenía cerca de 200,000 Hab. y antes de la Conquista debe de haber tenido unos 280,000 o sea casi el 10% de la población total del Estado de Tlacopan y Mazahuacan en 1520. Otro dato importante que cabe señalarse es que en las guerras, el ejército de Tlacopan iba a la vanguardia de los ejércitos centrales del imperio. Sus guerreros entraban en la batalla inmediatamente después de las últmas tropas auxiliares y antes de las de Texcoco y las de México, lo cual co loca a los pobladores de la zona de Atiza- pán entre los primeros proveedores de carne de cañón para las conquistas de la Triple Alianza.

Tal era la situación que prevalecía en el área que nos ocupa, a la llegada de Hernán Cortés a estas tierras.

Poco hay que relatar sobre las actividades de los primitivos habitantes de nuestro Municipio hasta la fatídica Noche Triste, en que el conquistador fuera casi aniquilado por las enardecidas tropas aztecas.

El estudio de los diferentes documentos consultados nos permiten reconstruir, casi paso por paso, el itinerario que cubriera Cortés desde su huida de Tenochtitlan, a partir de Popotla, hasta su arribo a Tepot- zotlán, que marca la etapa más ominosa de su marcha hasta Tlaxcala para reponer sus fuerzas y su ejército.

La noche del 1" de julio de 1520, roto el cerco que Cuauhtémoc y sus huestes habían establecido en tomo a las fuerzas de Cortés, éste pudo escapar hasta Popotla y luego de cruzar el pueblo de Tlacopan pudo tras rudos esfuerzos trepar hasta Totolte- pec (Orozco y Berra) o Otoncalpolco (Clavijero), en realidad, el pequeño montículo donde al presente se alza el Santuario de los Remedios. Se estableció en el sitio mismo donde hoy está la capilla y, al día siguiente bajó hasta Calacoayan. Dice Orozco y Berra: “Al amanecer, cinco de a caballo lograron despertar los

escuadrones puestos al paso, con lo cual la hueste pudo subir las cortas alturas; llegó a Calacoayan (CALACOAYAN. “El Sr. Olaguíbel dice: celaqui, entrar; la terminación ya, denota la acción del verbo. Lugar por donde se entra”. Es necesario dar mas amplia explicación a esta palabra. El nombre correcto mexicano es Calacoayan, que se compone de calacoa, entran, voz impersonal del verbo calaqui, entrar, y de la seudoposposición yan, que expresa el lugar donde se ejecuta la acción del verbo, y significa: “Lugar por donde se entra”. El P. Molina Traduce: “Puerta o entrada para entrar o salir”. Tal vez este pueblo que se halla en las primeras lomas del Valle de México, hacia el N.O., era la única o principal garita por donde entraban los matlatzincas al citado Valle), cuyo pequeño pueblo quemó y destruyó, apoderándose de los víveres, bajó a la llanura de Ati- zapán y antes de mediodía logró refugiarse en el pueblo de Teocalhuican (¿actual San Andrés Tecoloapan ?). Era un pueblo de otomíes, parientes de los de Tlaxcalla, cuyo señor Otocoatl, ya por el parentesco, ya por el odio de raza con los mexicas, recibió con amor a los fugitivos, dándoles víveres y aún algunos hombres para acompañarlos”. La penosa peregrinación de las derrotadas fuerzas españolas continua por Cuauhtitlán y Tepotzotlán, bordea las riberas del lago de Zumpango, hasta arribar al pueblo de Citlaltepec.

Consolida la Conquista, las autoridades españolas se disponen a repartir la tierra, sea otorgando encomiendas o bien fijando los límites a los bienes comunales de cada pueblo.

Así, e1 capitán Hernán Cortés concedido el señorío y Cacicazgo de Tacuba y sus sujetos, entre los cuales indudablemente se encontraban los pueblos correspondientes a nuestro actual Municipio y todos sus atributos, a Doña Isabel Moctezuma, hija del último Emperador del México Antiguo, lo cual


fue aprobado por los Reyes de España. Pos teriormente a muchos descendientes de los tlatoque aztecas y tlaxcaltecas les fueron reconocidos sus derechos y a otros por sus servicios y lealtad a la Corona de España.

En 7 de junio de 1537, el Virrey don Gastón de Peralta hizo merced de las tie rras que correspondían al pueblo de San Mateo Tecoloapan y es muy probable que hacia esta misma fecha se haya hecho entrega de las tierras correspondientes a Ca- lacoaya.

En sus comienzos, estos terrenos se hallaban bajo la jurisdicción del Distrito de Tlalnepantla, como parte integrante de la Municipalidad del mismo nombre. Tal vez la primera concesión sea la que, con fecha de 1581, se otorga a Lope García de Palacio y a Juan de Rivas, que comprendía “una caballería de tierra en términos de este pueblo bajando del pueblo de San Lorenzo para el monte, y se dió mandamiento acordado para que el alcalde mayor de dicho pueblo viese las diligencias, por dichas tierras realengas”. Y ya dentro de los linderos de Ati- zapán en el año de 1595, hallamos esta “Merced a Luis de Peralta, de dos caballerías de tierra en términos de este pueblo, en un cerro que llaman Tizapán, linda (...) por el sur con tierras de Isabel González en las lomas y laderas de Tizapán, aguas vertientes al norte y al sur. . .”.

La creación de mayorazgos, algunos ori-ginados en los bienes acumulados por los conquistadores (los más) y otros provenientes de los nobles indígenas, como en el caso de los Cortés Moctezuma Chimalpopoca (Cacicazgos de Tacuba y México), dió origen a la aparición de enormes latifundios, como en el caso de la Hacienda de Santa Mónica que en sus límites orientales casi llegaba a las goteras de Tlalnepantla y por el lado occidental estrangulaba al pueblo de Calacoa- ya, lo que dio origen a interminables plei-tos entre los naturales de este pueblo, que trataban de proteger sus tierras contra la voracidad de Blas Mejía, propietario de la Hacienda. Buena prueba de esta situación nos la dan estos dos documentos que transcribimos:

1705. CALACOAYA, En 23 de marzo, se declaró no poder hacerse merced a Juan

Domingo indio cacique de este pueblo, de un pedazo de tierra en el referido pueblo, inmediato al camino que baja del monte para esta ciudad, lindando en el oriente con él, siguiendo por la falda del cerro llamado Xo- chimancas, que como eriazo y baldío había cultivado cuatro años, y ordenando

se ampare a Blas Mejía, dueño de la Hacienda nombrada Santa Mónica, en términos de Tlalnepantla, que contradijo esta pretensión, por incluirse dicho pedazo de tierra en otro, dentro de los linderos de dos mercedes que presento. (V. 67. F. 2 vta.).

1749. CALACOAYA, En 31 de octubre, se aprobó y confirmó el remate de las tierras nombradas La Comunidad, pertenecientes al pueblo de Santa María Calacoaya. que por estar entre las tierras de la hacienda de Santa Mónica, no tienen entrada libre (subr. mío), por lo que se remataron a José Labrador Cortés, vecino de Tlalnepantla, depositando la cantidad de $ 1,000.00 (V. 77. F. 172.).

Nos preguntamos: ¿alguien que no fuera ajeno a los intereses de la dicha hacienda, tendría interés en adquirir unas tierras que no tenían libre acceso?

En largo proceso (1726-1810) puede seguirse los pormenores de la lucha en que se vieron envueltos los habitantes de Calacoaya por un lado y copetudos personajes de la nueva aristocracia terrateniente, por otro, y que se formó como consecuencia de los mayorazgos a que hacíamos mención.

1726-1810. TACUBA, Autos seguidos por Domingo García Mendiola contra Juan Soria, sobre tierras del Molino de Santa Mónica, y que también fueron seguidos por el Marqués del Valle de la Colina con la Condesa de Miravalles sobre el mismo. Domingo García Mendiola era propietario de la hacienda de Santa Mónica, sita en términos de la jurisdicción de Tlalnepantla quien también promovió juicio sobre tierras con los NATURALES DEL PUEBLO DE Calacoaya (subr. mío), estableciendo en ellas un rancho que comprendía un sitio de ganado menor nombrado Miltepec. A fojas 5 aparece certificación de la posesión y medidas que se hicieron en dicha hacienda el año de 1710, sacada de los autos promovidos contra los naturales de Calacoaya. (...) Se

ZARAGOZA.—MONOGRAFIA. >tecí 18

menciona el rancho de San Antonio, propie-dad del Conde de Miravalies. (V. 2501. Exp. 1-F. 404).

Como es natural, esta cadena de despojos culminó en cruentas luchas, como el episodio que transcribimos:

1771. TACUBA, Diligencias realizadas y sumaria contra los que resultaron cabecillas en el alboroto y conmoción que llevaron a cabo los naturales de Calacoaya el 25 de septiembre de 1770, a efecto de impedir la práctica de diligencias mandadas hacer por la Real Audiencia. Las protestas de los indios fueron contra su gobernador que los t ranizaba, y por pretender quitarles sus tierras, entre otras, las de comunidad y las llamadas Tlascoapan. (V. 2501. Exp. 2-F 23).

Desde la consolidación de la conquista, con la erección de la Audiencia y Chancille- ría Real de México en la Nueva España, con residencia en la “Ciudad de México Tenúx- titlan” y su primera disposición en materia de división Territorial según cédula real de 20 de febrero de 1534, en la que se dispone que “La Nueva España se divida en cuatro provincias o mitras: la de Michoacán, la de México, la de Guazacualco y la de los Mix- tecas, que los oidores de la Audiencia de México hicieron efectiva en 30 de julio de 1535, los terrenos ocupados por el actuai Municipio de Atizapan de Zaragoza, pertenecieron a lo que en la actualidad forma el Estado de México, con la sola excepción de la división territorial decretada por el Segundo Imperio, en que transitoriamente pasó a pertenecer al Departamento del Valle de México. (Art. 2", de la Ley de 3 de marzo de 1865).

Por último, y según Decreto N" 30 de 3 de septiembre de 1874, siendo gobernador del Estado el Lie. Alberto García, Zaragoza alcanza el rango de Municipio. En su Art. 1", dicho documento establece que:

“Art. 1’—Se formará un nuevo Municipio en el Distrito de Tlalnepantla, compuesto de los pueblos de San Francisco de Atizapan, San Mateo Tecoloapan y Calacoaya, de las Haciendas del Pedregal, San Mateo; de los Ranchos Chiluca y La Condesa, pertenecientes ahora al Municipio de Tlalnepantla; y de la Hacienda de Sayavedra,

Rancho Blanco y Rancho Viejo, correspondientes ahora a la Municipalidad de Monte-Bajo.

“El nuevo Municipio llevará el nombre de “ZARAGOZA” y su cabecera será el pueblo de SAN FRANCISCO ATIZAPAN”.

Originalmente, el lugar respondía al nombre

de “llanos de Atizapán” y el pueblo que más tarde iba a ser cabecera municipal, se llamaba simplemente Atizapán. Los conquistadores, llevados de su celo evangeliza- dor agregaron el apelativo de San Francisco y hasta 1862 el pueblo se llamó San Francisco Atizapán. Más tarde pasa a llamarse Atizapán de Zaragoza y a partir de 1969 cambió su nombre por el de CIUDAD LOPEZ MATEOS.

' No es sino hasta el 30 de septiembre de 1969, que el Gobernador Constitucional del Estado, C. Prof. Carlos Hank González, por decreto N° 3 de la misma fecha, aprobado por el Poder Legislativo, impone el nombre de ATIZAPAN DE ZARAGOZA al municipio, con el que se le denomina.

En la parte pertinente de dicho decreto se lee: “Artículo Primero.—En lo sucesivo el municipio de Zaragoza del Distrito Rentístico y Judicial de Tlalnepantla se denominará Atizapán de Zaragoza y su Cabecera Municipal Ciudad López Mateos”.

Del ameno trabajo del Dr. José Negrete Herrera, entresacamos algunos datos curiosos que se refieren a este municipio.

Señala que Atizapán, por situarse dentro de una vía muy transitada poseía desde tiempos muy remotos, una gran cantidad de mesones o paradores destinados a los arrieros y conductores de recuas y carretas. Ello le daba características muy pintorescas y le comunicaba una gran actividad por el gran alopio de productos, especialmente agrícolas y carbón vegetal que bajaban desde Monte-Alto, Transfiguración, San Pedro Atzcapotzaltongo, Progreso Industrial, Villa del Carbón, etc., y por la corriente de víveres y otras mercancías que subía desde Tlalnepantla, o desde la Capital.

Antes de que pudiera disponerse de caminos más o menos transitables, los viajeros hacían el recorrido desde Atzcapotzalco hasta Puente de Vigas en un modesto e in


cómodo tren de vía angosta, tirada por un tronco de muías. Desde este punto, habia que continuar por las solitarias y polvorientas lomas de Santa Mónica hasta alcanzar “la larga calzada que conducía a la Hacienda de Santa Mónica, sombreada por dos hileras de frondosos ahuehuetes”. Desde allí se avistaba el pueblo de Calacoaya, “pueblo que podía considerársele como una extensa huerta de árboles frutales”. A fines del siglo pasado, en un paraje de este pueblo llamado “Las Vueltas de Calacoaya”, se escondían bandas de forajidos que asolaban la región. Hasta la captura e inmediato fusilamiento del cabecilla, nombrado Timoteo Andrade, la región pudo recobrar la paz y seguridad.

Hacia 1887, las comunicaciones mejoraron con la inauguración de una especie de diligencia que hacía el servicio entre el Pedregal y Tlalnepantla, pasando por Atiza- pán, El Cochinito, Calacoaya y San Andrés. Poco más adelante, se construyó el ferrocarril de Monte-Alto, que prestó sus servicios hasta 1940. Su ruta abarcaba México, Tlalnepantla, Monte-Alto hasta Progreso Indus trial, y transportaba carga y pasajeros.

Entre los hechos muy particulares que nos recuerda el Dr. Negrete, figura el hallazgo de tesoros en la cabecera municipal. Dice: “En nuestro pueblo se encontraron fabulosos tesoros, a medida que derrumbaban casas antiguas para hacer nuevas construcciones.

“El hallazgo de estos tesoros, no era obra de milagros, pues tenían una explicación natural que daban nuestros antepasados, y que arrancaba de las agitadas etapas de la Guerra de Intervención Francesa, entre los años de 1862 y 1867, lapso en

que cruzaban la región contingentes militares no muy disciplinados (...) y siempre temidos por sus actos de rapiña. Los de más triste memoria fueron las hordas sanguinarias del traidor Leonardo Márquez.

“Todas las familias de Atizapán se ponian a salvo, abandonando sus hogares para buscar refugio en los cerros de Atlaco y Grande. En la precipitación de su angustiosa huida, enterraban todo lo que tenían de valor con la esperanza de volver algún día a rescatarlo. Pero muchas (de estas) riquezas quedaron abandonadas, por múltiples circunstancias, e ignoradas hasta que algún afortunado las encontró al azar del zapapico”.

También cita el hecho de que figuras tan notables como Comonfort y el Gral. Zaragoza, habían hecho de Atizapán el lugar preferido para su reposo, dadas sus especiales condiciones de clima, de vegetación y de cercaníá a la capital.

Hoy, Cd. López Mateos camina con rapidez y seguridad hacia el progreso. Lentamente asimilada por el crecimiento demográfico explosivo que experimenta el Distrito Federal, sus campos apacibles van siendo convertidos en fraccionamientos destinados a construcciones habitacionales. Sus calles, antaño solitarias y polvorientas, al presente se ven invadidas por una corriente incesante de automóviles y camiones que van y vienen. Los días domingos, se agrega al ajetreo diario la creciente corriente turística que sale de la ciudad en busca de solaz, y que se dirige en busca de sitios que como San José El Vidrio, San Francisco Magúx y Villa del Carbón, conservan intactos sus atractivos naturales.

Situación Geográ flea

Extensión y Límites División

Política Hipsometría Geog ra

fia Grogra fia

Hidrología e Hidrogra fía

Geología

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Flora y Fauna

EL MEDIO GEOFISICO

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n. EL MEDIO GEOFISICO

a) —SITUACION GEOGRAFICA:

El Municipio de Atizapán de Zaragoza se ubica en el extremo Norponiente del Valle de México, y se extiende sobre los suaves lomajes que constituyen las últimas estribaciones del Monte Alto.

b) .—EXTENSION TERRITORIAL ¥ LI MITES.

Posee una extensión territorial de 74.95 Km2 y limita con los siguientes Municipios, en los puntos que se indican: por el Norte con los de Nicolás Romero y Tultitlán; por el Sur con los de Jilotzingo y Naucalpan de Juárez; por el Oeste con el de Tlazala de Fabela; y por el Este con el de Tlalnepantla.

c) .—-DIVISION POLITICA:

Pertenece al Treceavo Distrito Judicial y Rentístico, con asiento en la ciudad de Tlalnepantla.

Su cabecera municipal es Ciudad López Mateos, ubicada a los 19 ' 35’ 05” de Latitud Norte y a los 99" 15’ de Longitud Oeste del Meridiano de Greenwich.

El Municipio está compuesto por las si-guientes localidades:

Ciudad López Mateos, los pueblos de Ca- lacoaya y San Mateo Tecoloapan; las rancherías de Calz. Atizapán San Mateo Tecoloapan, Explanadas de Calacoaya, Las Ta- biqueras (Calacoaya), El Pedregal, Emiliano Zapata, El Potrero y Puerto de Chivos; las Colonias de Las Colonias, La Cruz, Morelos, Zona Federal y El Mosco; El Túnel, Ermita, Las Trojes, Ahuehuetes, San Martín de Porres, López Mateos, Cristóbal Hi-guera y México Nuevo; por los Ranchos de Madín,

de Castro, Chiluca y Rancho Viejo; por los Ejidos de Las Peñitas (en San Mateo Tecoloapan), de Chalma (en San Mateo Tecoloapan) y ampliación de Tenayuca; por los Fraccionamientos de Las Acacias, Atizapán Moderno, Balcones del Valle, Rincón Colonial Pistas Paraíso, Los Lavaderos, La Cañada, Capistrano, Jacarandas, Las Arboledas y Jardines de Atizapán; y por los Fraccionamientos y Clubes de Golf de Bellavista y Hacienda.

Zaragoza se erige en Municipio por Decreto N’ 30 del H. Congreso del Estado de México, de fecha 31 de agosto de 1874. En virtud de este Decreto cambia su antiguo nombre de San Francisco por ZARAGOZA.

El nombre azteca de su Cabecera, Atizapán, proviene, según interpretación de Manuel de Olaguíbel, de A, agua; tizatl, tiza; pan, sobre: En el agua cenicienta.

De acuerdo a Robelo: “Se compone, en mexicano, de atl, agua; tizatl, tierra blanca colorante que se designa en castellano con el aztequismo “tizate” o “tizar”, y pan, en o sobre; y significa: “En agua blanca o de tizar”.

Acerca del erigen del nombre de los pueblos de importancia dentro del municipio, éstos son:

CALACOAYAN: “El señor Olaguíbel dice: calaqui, entrar; la terminación ya, denota la acción del verbo. Lugar por donde se entra”. Es necesario dar más amplia explicación a esta palabra. El nombre correcto mexicano es Calacoayan, que se compone de calacos, entran, voz impersonal del verbo Calaqui, entrar, y de la seudo-posposi-


ción yan, que expresa el lugar donde se ejecuta la acción del verbo, y significa: “Lugar por donde se entra”. El P. Molina traduce: “Puerta o entrada para entrar o salir”. Tal vez este pueblo que se halla en las primeras lomas del Valle de México, hacia el Noroeste, era la única o principal garita por donde entraban los matlatzincas al citado Valle. (Robelo).

TECOLOAPAN: Tecolo-apan, “río de te-colotes”, en lengua mexicana. El jeroglífico se compone de un apantli o caño de agua, que quiere decir río, y de la cabeza del teco- lctl, buho virginiano, de Bonaparte. (Robelo).

La figura pertenece tanto al Códice de Mendoza como al de Moctezuma. (Peñafiel).

CHILUCA: Chiluca, la piedra de este nombre (Traquita anfibólica). “Donde abunda la chiluca”. (Olaguíbel).

Lugares no habitados: ALACO. Cerro» “Barranca”. MADO. Otomí. Terreno. “Piedra larga”. XOCHIMILCO. Terreno. “Jardín”. XOCHIMAUCA. “Lugar de los jardines”

d) .—HIPSOMETRIA:

Su topografía es irregular, a causa de su ubicación en la especie de rampa que se alza desde el borde occidental del municipio de Tlalnepantla, y trepa por las estribaciones de Monte Alto.

Su cabecera Municipal, Ciudad López Mateos, se encuentra ubicada en los 2,205 m.s.n.m. Esta altitud varía, en forma descendente hacia el Este y, en forma ascendente hacia el Oeste, hasta alcanzar un máximo de 2,325 m.s.n.m. en los límites con el Municipio de Nicolás Romero.

e) .—GEOGRAFIA:

La geografía de este municipio es irregular.

Posee un área de valles casi horizontales, uno de los cuales sirve de asíelitó a su cabecera. El resto está constituido por lomajes y algunos pequeños cerros, cuya estructura veremos en el capítulo referente a orografía. f) .—OROGRAFIA:

El área donde se asienta el Municipio de Atizapán de Zaragoza, corresponde al segundo sistema orográfico del Estado de México; esto es,

al sistema que se encuentra situado entre el Estado de México y los límites occidentales del Distrito Federal, y que se cuenta a partir de la notable elevación peñascosa conocida con el nombre de Cerro de la Bufa, situado al Noreste de la población de Jiquipilco y que se dirige hacia el Sureste, formando una cordillera muy amplia que se conoce en su parte más elevada con el nombre de Monte Alto, y en su parte de menor elevación como Monte Bajo, los que se unen con la sierra de las Cruces en la parte occidental del Distrito Fede-ral. En esta parte, la cordillera reduce su amplitud pero alcanza su mayor altura, siguiendo francamente hacia el sur pasando por los Municipios de Ocoyoacac, Capulhuac, Tianguistenco, Jalatlaco, Ocuilan y Malinal- co, penetrando también con otras ramificaciones al Municipio de Ixtapan de la Sal.

De la Sierra de Monte Alto y hacia el Oirente, parten ramificaciones una de las cuales es el Municipio de Atizapán de Zaragoza. El contrafuerte que toma la dirección de este Municipio, se une con la llamada sierra de Guadalupe Hidalgo, sita dentro del Estado de México que limita con la parte más septentrional del Distrito Federal. Tanto esta ramificación como la que pasa por Tlazala de Fabela se conectan por el Norte con la sierra de Tepotzotlán.

En la sierra de Guadalupe, que mencio-náramos líneas atrás, se aprecian las elevaciones de: cerro del Chiquihuite, cerro de Tepetlales, cerro Gordo y cerro Cabeza Blanca.

g) .—HIDROLOGIA E HIDROGRAFIA:

El sistema hidrográfico y la hidrología de este Municipio son bastante pobres, en parte por la naturaleza del terreno y su declive y, en parte por el proceso de deforestación sensible que se abate sobre el área.

Con las limitaciones que aconseja lo magro de su caudal, podemos mencionar al río de San Javier y el desagüe de Barrancas del Pedregal.


Los manantiales son escasos y no son aprovechables.

h) .—GEOLOGIA:

Los terrenos, como quedara dicho, co-rresponden a derivaciones y serranías de Monte Alto, que están constituidas por rocas efusivas de la época terciaria y posterciaria, que tuvieron origen en tres épocas sucesivas de actividad volcánica, según se desprende del análisis químico de su composición y de su estructura. Estas tres épocas de actividad volcánica se reconocen por el carácter ñsico y la naturaleza química de sus rocas, existiendo, sin embargo, muchas variantes y tipos de transición. Las rocas correspondientes a las dos primeras épocas son de tipo andesitico, y las originadas por la tercera época de actividad volcánica son basálticas.

i) MINERALOGIA:

No existen yacimientos metalíferos en el área. Solamente se ubican algunas minas de

tepetate, piedra brasa y arenilla. En la actualidad, se encuentran en explotación

2 canteras de piedra y 2 minas de arenilla. j) .—FLORA Y FAUNA:

Dentro de los límites del municipio, la vegetación es muy rala.

Entre los árboles, predominan el fresno, el pirul y el pino, no aprovechables, para prevenir la erosión.

De entre las hierbas típicas de la región, pueden mencionarse las siguientes: mirto cam p e s t r e, huizache, escobilla, jarilla y abrojo. Con carácter de hierbas típicas se encuentran el quelite y la verdolaga.

Asimismo se explota el maguey.

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CLIMA

AGRICULTURA

GANADERIA

* 1.a imnlantación de granjas avícolas significa un fuerte impulso a la economía local.

En la explotación del ganado vacuno se ha considerado en primer lugar su calidad.


m CUMA

IV. AGRICULTURA

V. GANADERIA

Las existencias ganaderas, para el año de 1970, pueden estimarse en las cifras siguientes:

Las temperaturas a lo largo del año oscilan entre los 1.5" C y los 28" C, con cifras absolutas de 8.5" C y 33.0" C, respectivamente.

Las heladas se presentan raramente y, cuando ello ocurre, es en los meses de diciembre y enero. Las heladas tempranas se producen en la segunda quincena de sep

tiembre y las tardías en la segunda quincena de mayo.

El régimen de lluvias se extiende de mayo a septiembre, con mayores precipitaciones en mayo y junio. El promedio anual se aproxima a los 700 mm.

La estación seca comprende los meses de diciembre a abril.

La mayor parte de la superficie está compuesta por tierras de temporal agostadero; una mínima parte, de alrededor de 102 Has., por tierras de riego.

Debido al avance demográfico, la superficie destinada a la agricultura ha venido experimentando una constante y acelerada disminución, al punto que en la actualidad, puede asegurarse que las actividades agrícolas son mínimas.

Se cosecha algo de maíz y alfalfa. A es

ta última variedad se destinan alrededor de 10 Has., con un rendimiento promedio, en cada corte, de 8,000 Kgs/Ha. Se efectúan 8 cortes al año, por lo cual el promedio de rendimiento resulta alrededor de 5,000 Kgs. por Ha., con una producción anual de 64 toneladas.

La cosecha de 1970 resultó regular, como consecuencia de las inclemencias e irre-gularidades del tiempo. El precio de venta de la alfalfa fue de $ 70.00 por tonelada.

24 ZARAGOZA.—MONOGRAFIA.

GANADO DE CRIA: Vacunos: Mayores de un año

500 (tinos) Vacas 1,400 cabezas Mayores de un año

Toros 5 500 ” (corrientes) Toretes 5 Para engorda

Becerros 15 De seis meses a un año

Becerras 100 500 ” (finos) (criollas) 200 100 (corrientes)

Terneras 100

Vacas en explotación (holandesas) 400

Borregas

Lanar: 2,000 cabezas

Porcinos: Caprino

De seis meses a un año

1,000 cabezas (cruzados) Cabras 3,000 cabezas

GANADO DE LABOR:

Burros 500 cabezas Muías

300

OTROS ANIMALES:

Conejos domésticos 1,000 cabezas Aves de corral

500,000 unidades

Es de hacerse notar que existen impor- cipal arroja las cantidades siguientes: tantes granjas avícolas. El consumo muni-

Pollos de engorda 1,100

Guajolotes. 1,000

con un precio medio de venta, para el productor, de $ 14.00 y 45.00, respectivamente.

DERIVADOS PECUARIOS: La producción diaria de leche es, en promedio,

de 20 litros por vaca, lo que arroja una producción diaria de 8,000 litios, en total.

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TIERRA INDUSTRIA

COMERCIO

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.


VI. TENENCIA DE LA TIERRA

CUADRO DE DOTACIONES EJIDALES

a) .—EJIDOS:

Las asignaciones originales al Municipio de Atizapán de Zaragoza, arrojaban las siguientes cifras: (VER CUADRO).

b) .—PEQUEÑA PROPIEDAD:

Las cifras correspondientes a Pequeña y Gran Propiedad han experimentado sensibles cambios, en razón de los ininterrumpidos y crecientes fraccionamientos creados dentro del municipio, ocasionados, a su vez,

por la presión del crecimiento demográfico que padece el Distrito Federal.

A guisa de información, daremos los datos que se tenían para 1963, fecha en que comienza a acentuarse dicha presión. Los índices estadísticos, en esa ocasión, nos hablaban de 3,420 Has. que correspondían a pequeña propiedad y 400 Has., a grandes propiedades. Es probable que haya habido una disminución del 75% en la primera y del 100% en la segunda.

Dentro del Municipio no existen Bienes Comunales.

Poblado Solic. Dictad. Public. Ejecufc Atizapan de

Zaragoza 20 nov 25 29 oct 25 5 die 25 6 nov 25 Calacoaya 4 die 28 14 ago 31 11 sep 31 26 sep 31 Chiloca 19 abr 38 13 nov 40 22 jul 40 25jul 40 S. Mateo Te-

coloapan 20 nov 16 20 nov 25 — 6 nov 25 S. Mateo Teco-

loapan (A) 2 abr 35 16 oct 40 28 nov 40 15 ene 41 TOTALES.

NOTAS: (A) Ampliación FUENTE: DA AC., Deleg. Toluca, etc.: Sr. Lastiri.

Riego Temporal Pastal Cerril Otros Total — 497-30-00

85-00-00 276-00-00

— —

00-00-40 497-30-40 85-00-00 276-00-00

32-53-00 — 214-57-00

247-10-00

32-53-00 858-30-00 214-57-00 152-00-00 152-00-00 00-00-04

152-00-00 1257-40-40

Resolución Presidencial

28 ZARAGOZA,—MONOGRAFIA

Vil. INDUSTRIA

Al presente, operan dentro del munici- pió 29 industrias importantes, de acuerdo a las siguientes especialidades:

vni. COMERCIO

Operan 213 comercios, distribuidos como sigue:

Tenda jones 8tí Loncherías 9 Tortillerias 9 Expendios petróleo 5 Carnicerías 5 Granjas avícolas 9 Almacenes expedios materiales para construcción 7 Farmacias 6 Misceláneas 25 Expendio pulque 10 Zapatería 1 Peluquerías 6

Tienda CONASUPO 1 Restaurantes 2 Tintorerías 3 Vulcanizadoras 1 Expendio de pollo 1 Vidriería 1 Tiendas Art. en Gral. 6 Funerales 1 Cantina 1 Alberca 1 Salón de baile I Sala de belleza 1 Tiendas de abarrotes 1 Varios 14

Prod, químicos 1 Plásticos 1 Cartón y papel 2 Asfalto industrial 1 Materiales p. construcción 3 Tabicón prensado 5 Construe, cajas fuertes 1 Aparatos eléctricos 3 Impresoras 1 Laboratorios 1 Transformadora alimentos 1 Autopartes 1 Extrae, y elaboración de productos pétreos 1

Refacciones industriales 1 Fertilizantes 1 Nylon 1 Varias 3

TALLERES: Panaderías 2 Hornos de tabique 27 Taller electromecánico 1 Cor.fec. de pieles 2 Mueblerías 1 Molinos de nixtamal 3 Talleres mecánicos 3 Herrería 1

40

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COMUNICA C IONES Y

TRANSPORTES FINANZAS

DEMOGRAFIA

Entrada a Ciudad López Mateos, desde Tlalnepantla.

Gran incremento ha tenido la pavimentación de carreteras y calles.

ZARAGOZA.—MONOGRAFIA. SI

IX. COMUNICACIONES Y TRANSPORTES

X. FINANZAS

Para el año de 1970, el estado de las finanzas era:

INGRESOS: $ 6,406,600.00 Particpación Estatal: $ 17,146.55 EGRESOS: $ 6,406,497.00 Participación Federal: $ 562,812.00

XI. DEMOGRAFIA

De acuerdo con los Censos Nacionales de Población, ésta se distribuye en la forma siguiente:

La cabecera municipal se encuentra a 7 Kms. de Tlalnepantla, sobre la carretera federal pavimentada Tlalnepantla-Villa del Carbón, y a la misma distancia de la autopista México, DF.-Querétaro, con lo cual está muy bien comunicada con el resto de! país.

La estación de ferrocarril más próxima está en Naucalpan de Juárez.

Cuenta con caminos vecinales a: San Mateo Tecolcapan, Acacias, Capistrano, Ca- lacoaya, San Cristóbal Higuera, México Nuevo y Cóforo.

Cuenta con suficiente dotación de teléfonos de Teléfonos de México, S. A.

Las principales líneas de transporte son: •‘Monte Alto” y “Sultana”, que comunican con Villa del Carbón y Distrito Federal e Intermedios.

Se capta la señal de todos los canales de T.V. del D.F. y se escuchan todas las estaciones de radio de la Capital.

No se captan las estaciones radioemisoras de Toluca.

32 ZARAGOZA.—MONOGRAFIA

POBLADO

HOMBRES MUJERES TOTAL Ciudad López Mateos 3,069 3,153 6,222 Calacoaya 2,222 2,267 4,489 San Mateo Tecoloapan 2,352 2,315 4,667 Col. Cristóbal Higuera 1,923 1,843 3,766 Fracc. Jacarandas 1,641 1,820 3,461 Fracc. Las Arboledas 2,046 2,541 4,587 Col. México Nuevo 1,082 1,100 2,182 Fracc, Jardines de Atizapán 972 1,052 2,024 Col. Martín de Porres 602 568 1,170 Fracc. La Cañada 300 615 1,115 Fracc. Capistrano 544 568 1,112 Fracc. Club de Golf Hacienda 446 642 1,088 Ampl. Ejido Tenayuca 475 439 914 Col. López Mateos 435 455 890 El Potrero 510 448 958 Calz. Atizapán San Mateo 368 360 728 Col. Ahuehuetes 324 301 625 Las Tabiqueras (Calacoaya) 283 272 555 Col. Las Colonias 283 245 528 Explanada de Calacoaya 244 259 503 Fracc. Las Acacias 222 247 469 Rancho Madín 207 215 422 Fracc. Atizapán Moderno 201 226 427 Fracc. Balcones del Valle 175 200 375 Ejido Las Peñitas (S. Mateo) 194 177 371 Col. La Cruz 184 139 323 El Pedregal 171 148 319 Fracc. Rincón Colonial 139 175 314 Col. Morelos 134 164 298 Col. Zona Federal y El Mosco 136 136 272 Col. El Túnel 130 114 344 Col. Ermita 92 125 217 Rancho de Castro 109 94 203 Col. Las Trojes 95 83 178 Rancho Chiluca 83 75 158 Fracc. y Club de Golf Bella Vista 46 80 126 Pistas Paraíso 48 59 107 Los Lavaderos 23 27 50 Ejido de Chalma (S. Mateo) 9 5 14 Rancho Viejo 6 4 10 Puerto de Chivos 4 6 10 Emiliano Zapata 635 636 1,271

TOTALES: 22,729 23,762 46,491

ESTADISTICAS:

Porcentajes: »

Población urbana 58.4% Jefes de familia: 7,725 Población rural 41.2% Promedios:

Densidad de Población: 621.63 hab/km2 Personas/vi vienda: 6.08 Habitaciones: 7,643 Personas/familia: 6.02

MOVIMIENTO DEMOGRAFICO:

(1970) Nacidos muertos 38 Nacimientos 1976 Defunciones en nieno-

Matrimonios 698 res de un año 193 Defunciones 448 Mortalidad infantil 430.8/1000

HIGIENE K SALUBRIDAD

ELEC TRIFICA CION

TRABAJO

ALIMENTACION

CASA Y VESTIDO

La construcción de un mercado es una de las necesidades más apremiantes para Ciudad López Mateos.

El empleo de tabique y cemento va remplazando gradualmente al tradicional adobe de barro cocido.

ZARAGOZA.— MONOGRAFIA. 35

XII. HIGIENE Y SALUBRIDAD

XHI. ELECTRIFICACION

El consumo de energía eléctrica, en el za un promedio mensual de 2,206,574 KW Municipio de Atizapán de Zaragoza alean- hora.

XIV. ALIMENTACION, CASA Y VESTIDO

Puede calcularse el costo de la alimen- La habitación tradicional con muros de tación entre $ 4.50 y $ 5.00, diarios, por adobe y piso de tierra va siendo rápidamen- persona. te desplazada por aquella que emplea ma

Unicamente existen servicios en la cabecera municipal.

Se cuenta con dos sanatorios de maternidad: la Clínica Zaragoza, atendida por 3 médicos y 5 enfermeras; disponen de 10 camas; y la Clínica Dr. Feo. López Trabado, atendida por 1 médico y 10 enfermeras. Dispone de 10 camas.

Ambas clínicas cuentan con Sala de Ex-pulsión, Sala de Operaciones y Rayos X.

El servicio médico municipal se encuentra atendido por un médico y proporciona únicamente consulta externa.

Existe un Centro de Salud “B”, con hospital “D” atendido por un médico titulado, 1 pasante y dos enfermeras. Se dispone de 10 camas, 1 quirófano y 1 sala de Expulsión. Tiene servicio de inmunizaciones, curaciones, inyecciones y urgencias. Proporciona consulta externa y hospitalización.

Las siguientes poblaciones carecen de

electricidad, drenaje y agua potable: Col. López Mateos, Col. México Nuevo, Col.

C. Higuera, Col. Las Colonias y Col. Condesa. Carece de drenaje y electricidad la Col.

Ahuehuetes. Se halla en trámite la electrificación de los

poblados siguientes: Col. La Cruz, Col. Lomas de Guadalupe, Col. San Martín de Porres, Col. Marin, Ejido San Mateo, poblado de Chiluca y Rancho de Castro.

En el Rastro Municipal de Cd. López Mateos se efectuó la siguiente matanza, durante 1970 (promedio anual):

Vacuno 720 cabezas Porcino 2,400 Lanar 3,168 Aves 135,000 unidades


teriales más modernos y ligeros, como son construcción de viviendas. tabique y el concreto. A partir de la déca da de los 60’s puede decirse que se ha aban- No existen, en la actualidad, vestidos ti donado totalmente el método tradicional depicos tradicionales.

XV. TRABAJO

Dentro de la actividad tipificada como “trabajo calificado”, existen en la actualidad los siguientes trabajadores, en cifras estimativas:

Actividad Maestros Operarios

Tintorería o Jefes 8 16

Albañileria 50 250 Fontanería 3 0 Pintura 10 0 Cantería 10 0 Panadería 10 20 Construcción 25 0 Herrería 6 15 Electricidad 0 5

Fuerza de trabajo disponible:

Mineros 45 Comerciantes 734 Farmacéuticos 2 Médicos 23 Enfermeras 14 Parteras 6 Ingenieros 5 Abogados 40 Veterinarios 3 Químicos 15 Contadores 30

Trabajadores de Atizapán que radican en el Municipio:

Campesinos 300

Profesores 210 Profesionistas 140

Además, hay 250 profesionistas que viven en Atizapán, pero ejercen su profesión en otros lugares-

Existen 3 familias dedicadas a la alfarería; 3 personas dedicadas a la carpintería y 3 personas a la mueblería, todas en forma particular.

EDUCACION

rdiñes Je Niños Educación

Primaria Secun

Cuadros Sinóptico Je la

Educación en el Municipio

Educación lana

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XVI. EDUCACION

La educación impartida dentro del municipio de Atizapan de Zaragoza, se encuentra distribuida en la forma siguiente, y de

ALUMNOS

Inscritos Asist Media

Localidad H M T H M T Aulas Maestr. Clasif.

Cd. López Mateos 574 527 1,074 541 521 1,062 19 21 Urb. Fracc. Jacarandas 425 389 814 402 360 762 15 15 »» S. Mateo Tecoloapan 471 402 872 429 372 801 16 17 Rural Fracc. Las Acacias 252 234 486 226 211 437 10 11 Urb. Balcones del Valle 73 72 145 60 61 121 6 2 »» Jardines de Atizapan 184 159 343 165 142 307 6 5 »» Cd. López Mateos (1) 493 435 928 481 423 904 19 14 »» Calacoaya (1) 152 121 273 118 96 214 14 2 »» S. Mateo Tecoloapan (1) 118 86 204 115 84 199 16 1 Rural Col. Higuera 273 260 533 261 243 504 10 9 Urb. Madín 18 20 38 18 20 38 2 1 »» Rancho Chiluca 19 17 36 19 17 36 1 1 Rural

M Calacoaya 407 384 791 356 317 674 14 14 Fracc. Jacarandas 280 256 536 246 227 273 15 13 Urb. Arboledas 42 38 80 39 33 72 6 3 Part. Calacoaya 58 139 197 53 123 176 6 8 Part.

TOTALES: 3812 3639 7451 3529 3251 6780 175 137 NOTAS: (1) Vespertina.

2.—SISTEMA ESTATAL.

A I U M N O S

Inst Inscritos Asist. Media

H M T H M T Aulas Maest. Cl. Hasta

Col. Méx. Nuevo 267 289 556 243 265 508 11 10 Urb. VI El Pedregal 178 155 333 160 144 304 7 6 Urb. VI

TOTALES: 445 444 889 403 409 812 18 16

acuerdo a las cifras que se detallan a).—ENSEÑANZA PRIMARIA: 1.—SISTEMA FEDERAL.


b).—ENSEÑANZA PREESCOLAR:


NOTAS: (1) El personal docente es pagado por los padres de familia.

c) .—ENSEÑANZA SECUNDARIA:


ANALFABETISMO:

Dentro del Municipio de Atizapán de De este porcentaje, un 25% correspon- Zaragoza, el índice de analfabetismo puede de a niños en edad escolar y un 13% a adul- estimarse en un 15%, aproximadamente. tos.

Inscritos H M T

Asist. Media Aulas Maest Cl. Hasta H M T

Cd. López Mateos 84 — 84 81 — 81 12 3 Urb. III Jardines de Atizapán 97 — 97 88 — 88 10 3 Urb. III

TOTALES: 181 — 181 169 — 169 22 6

Sist Federal

Sist. Estatal PROMEDIO: Primaria Prim Preesc. See.

Alumnos/profesor

49.48

50.75 38.33 28.17 Alumnos/aula: 38.74 45.11 38.33 7.68

ALUMNOS. lnst

Localidad

Las Arboledas H 66

ALUMNOS Inscritos Asist Media

M

75 T

141

H

50

M

65 T

115

Aulas Maestr. 3 3(1) Urb.

POBL

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ARTE

GULTURA

DEPORTES

Templo del pueblo de Calacoaya.


XVII. ARTE,

Las actividades artísticas de este Municipio se reducen a un grupo de poesía coral y un grupo de danzas folklóricas, organizados por la escuela secundaria “Isidro Fabela”.

No se cultiva ninguna forma de artesanías, ni existen cultores del arte popular en ninguna de sus formas.

No existen grupos de danzas regionales y únicamente está en actividad una estudiantina municipal llamada “Zaragoza”.

Tal vez, debido a la cercanía de la Capital, las

viejas tradiciones artísticas de la cabecera se fueron perdiendo hasta el punto que, en la actualidad, no se manifiestan en forma alguna.

Las fiestas que celebra el Municipio son dos: 4 de octubre, fiesta religiosa para celebrar a

San Francisco, patrono del pueblo; y 5 de mayo, fiesta cívica con que se conmemora la Batalla de Puebla, en honor de cuyo héroe se puso su nombre al Municipio.

XVIII. CULTURA.

Existe una biblioteca pública, en formación, con una existencia inicial de 1200 volúmenes, donados por el H. Ayuntamiento.

Los clubes sociales existentes son: “Me- xica”, “Benavides”, “San Mateo” y de Leones, de Las Arboledas.

El Municipio no cuenta con cines y carece también de grupos teatrales organizados.

Entre sus edificios históricos merece citarse el Templo de la Cabecera, construido en los albores del siglo XVII, tal vez alrededor de 1600, reedificado en su mayor parte en 1884 y cuyo altar mayor fue reconstruido en 1929.

También se conservan las casas donde solían venir a buscar descanso el Gral. Ignacio Comonfort, el escritor Juan A. Mateos, el Gral. Vicente Riva Palacio y el Grid. Ignacio Zaragoza.

Entre los monumentos históricos merece citarse el puente llamado de Calacoaya, ubicado en la Av. Los Ailes y Santa Monica, que fuera construido en 1792.

Se cuenta con varios monumentos dedicados

a los héroes y personajes ilustres: Ignacio Zaragoza, Lie. Adolfo López Mateos, Miguel Hidalgo, Benito Juárez y a los Niños Héroes.

Existen algunos lugares de recreo susceptibles de convertirse en centros turísticos, mediante un acondicionamiento adecuado. Podemos citar los siguientes:

El Balneario de Atizapán, que cuenta con dos albercas y parques, pero que al presente ofrece un aspecto de desagradable abandono y los Lienzos Charros de San Juan y de Calacoaya. Asimismo, el rio que conserva su belleza natural con sus vetus


tos árboles; Madín y la cascada que existe entre este Rancho y el de Chiluca; la Presa de Guadalupe, sita a diez kilómetros de la cabecera,

en el fraccionamiento “Lago de Guadalupe”, que flanquea un bosque de eucalipto, donde se puede practicar el remo.

XIX. DEPORTES.

Los deportes que más se practican son el fútbol, basquetbol, volibol, caballismo v golf. El número de equipos y de canchas disponibles es el siguiente:

Fútbol: 100 equipos y 14 canchas. Operan dos Ligas Locales;

Basquetbol: 20 equipos con 14 canchas; Volibol: 20 equipos y 14 canchas. Tocante a los otros deportes, menciona

remos .a los siguientes: Hípico Francés, Golf de la Hacienda, Nacional de Equitación y Club Rancho El Argentino.

Una de las albercas del Balneario Popular de Ciudad López Mateos,


De las figuras más importantes nacidas en este Municipio, merecen citarse:

Lie. Adolfo López Mateos, Presidente de la República (1958-1964), eminente político e intemacionalista;

Dr. José Negrete Herrera, escritor y periodista, autor de la única monografía que se ha escrito sobre este Municipio;

Dr. Abel González Herrera, ginecólogo destacado, que hizo importantes contribuciones a la medicina. Figura entre los primeros que suprimió la “cuarentena” a las parturientas, en época de la Revolución;

Los revolucionarios Manuel y Arturo Herrera, quienes formaron una Junta Revolucionaria, en Atizapán, para derrocar a Victoriano Huerta, ambos asesinados sobre el camino a Tlalnepantla;

Adolfo Camacho, Guillermo Pérez, Alfonso Núñez, Luis Herrera y Juárez, Mario Vázquez Núñez, Tirso Villegas (alcanzó el grado de Coronel, junto a Emiliano Zapata) y Dña. Ana María Vázquez de Mouret, todos ellos elementos que prestaron su valiosa cooperación a la causa revolucionaria de 1910.

RECOMENDACIONES.

Aparte de la importancia que tiene para el

turismo interior el acondicionar y restaurar aquellos sitios que ofrecen las ventajas necesarias para convertirse en concurridos sitios turísticos, es de toda urgencia ampliar la carretera que comunica a Tlalnepantla con Villa del Carbón. El excesivo tránsito de autobuses y camiones la convierte- en sitio de mucho peligro para los automovilistas que, en especial, los días domingo o en épocas de vacaciones, prefieren para descanso los hermosísimos parajes y bosques que se ofrecen en los alrededores de Villa del Carbón y de Tlazala de Fabela la carretera en cuestión, es demasiado angosta y en su trazado abundan las curvas cerradas y desprovistas del necesario peralte.

De efectuarse estos trabajos, esta ruta podría llegar a convertirse en la más importante vía de desfogue para los habitantes del Distrito Federal, que quieran aprovechar sitios tan cercanos a sus hogares, con clima y atmósfera adecuadas para la recuperación de la salud y para el descanso.

Entre los problemas que requieren una atención pronta, debemos anotar los viejos conflictos que surgieron por la falta de co- lindancias y límites precisos entre el Municipio de Atizapán de Zaragoza y los de Tlalnepantla y Tultitlán.

Consideraciones Generales y Recomendaciones


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CREDITOS

TEXTOS: Carlos Héctor González. FOTOGRAFIAS: Luis Contreras M. GRAFICAS: Benito Bernáldez y Manuel Delgadillo. PORTADA: Alberto Martínez Carpinteiro.

Una edición de la Dirección de Prensa y Relaciones Públicas del Gobierno del Estado de México.

TIRO: 6.000 Ejemplares.

Toluca de Lerdo, 1971.

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