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24 horas con el Señor Año del Encuentro con el Señor en su PALABRA 2019

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24 horas con el Señor

Año del Encuentro con el Señor en su PALABRA

2019

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VIA CRUCISAño del Encuentro con El Señor En Su Palabra

2019

¨Tu Palabra Me Da Vida¨Salmo 118

La Palabra de Dios es viva y eficaz y más cortante que

espada de dos filos; penetra hasta la división entre el alma

y el espíritu, de las articulaciones y médulas; y

discierne sentimientos y pensamientos del corazón.

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VIA CRUCIS1

Nos enseña el Directorio sobre la Piedad Popular y la liturgia en el Número 135:

El Vía Crucis es un camino trazado por el Espíritu Santo, fuego divino que ardía en el pecho de Cristo (cfr. Lucas 12,49-50) y lo impulsó hasta el Calvario; es un camino amado por la Iglesia, que ha conservado la memoria viva de las palabras y de los acontecimientos de los último días de su Esposo y Señor.

En el ejercicio de piedad del Vía Crucis confluyen también diversas expresiones características de la espiritualidad cristiana: la comprensión de la vida como camino o peregrinación; como paso, a través del misterio de la Cruz, del exilio terreno a la patria celeste; el deseo de conformarse profundamente con la Pasión de Cristo; las exigencias de la sequela Christi, según la cual el discípulo debe caminar detrás del Maestro, llevando cada día su propia cruz (cfr. Lucas 9,23)

Movidos por esta enseñanza, en el Año de la Palabra nuestro camino de la Cruz acompaña la alegría con la que la Iglesia ha ofrecido los signos del amor a cuantos comparten los sufrimientos de Jesús en su camino al Calvario.

En cada estación, además del texto sagrado que la ilumina, tras una sencilla consideración de las bondades de Dios, en una plegaria ofrecemos al Señor nuestro deseo de escuchar su palabra. El testimonio de algunos santos, escogidos de distintos lugares y de distintas experiencias, nos ayudarán a concretar el amor de Dios que se nos dio plenamente en el Sacrificio Pascual de Cristo.

1 Texto elaborado por el P. Diego Uribe Castrillón, de la Arquidiócesis de Medellín. Las

adaptaciones son de la Conferencia Episcopal de Colombia. Las imágenes son del Centro Studi e Ricerche Exio Aletti del Pontificio Intituto Orientale.

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Tu Palabra Me Da Vida

Salmo 118

En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.R. Amén.

Te adoramos, oh Cristo y te bendecimos.R. Que por tu santa Cruz redimiste al mundo.

En aquel tiempo Jesús le dijo a Felipe: «Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del hombre. En verdad, en verdad os digo: Si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto. El que se ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en este mundo, se guardará para la vida eterna. El que quiera servirme, que me siga, y donde esté yo, allí también estará mi servidor; a quien me sirva, el Padre lo honrará. Ahora mi alma está agitada, y ¿qué diré? ¿Padre, líbrame de esta hora? Pero si por esto he venido, para esta hora: Padre, glorifica tu nombre». Entonces vino una voz del cielo: «Lo he glorificado y volveré a glorificarlo». Juan 12,23-29

El camino de la Cruz en el Año de la Palabra, nos ha de permitir ver en el amor de Jesús las expresiones más claras de la vida y de la paz que necesitamos, la manifestación efectiva del amor que salva, la expresión clara y evidente de la proporción del amor Divino, el camino para ser artesanos del perdón, la reconciliación y la paz.

Condenado injustamente, hace que se cumpla la profecía con la que la voz de Isaías anunció los dolores de uno al que llamó Siervo: “…cargó con nuestros dolores, y nosotros lo tuvimos por castigado de Dios, herido y humillado. Pero él fue traspasado por nuestras iniquidades, molido por nuestros pecados” (Isaías 53, 4-5).

Avancemos también nosotros. Aprendamos a¨Ir al encuentro con el Señor en su Palabra¨ cómo nos lo ha enseñado Jesús.

Muchas vidas se han unido a este camino en la larga historia de la Iglesia, mostrándonos cómo se puede seguir al Maestro, como se puede acompañar su camino, como se puede ganar la gloria a la que llega Jesús.

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Algunos santos, Maestros en el amor de Dios, nos recordarán cómo se concreta el amor que salva. La Madre, como lo hizo hace casi dos mil años, estará muy cerca, para recordarnos el secreto de este camino de esperanza: “haced lo que Él diga” (Juan 2, 5).

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PRIMERA ESTACIÓNJESÚS ES CONDENADO A MUERTE

Del Evangelio según San Lucas 23,23-25 “Pero ellos se le echaban encima, pidiendo a gritos que lo crucificara; e iba creciendo su griterío. Pilato entonces sentenció que se realizara lo que pedían: soltó al que le reclamaban (al que había metido en lacárcel por revuelta y homicidio), y a Jesús se lo

entregó a su voluntad”.

MeditaciónLos discípulos de Jesús somos constructores del Reino que

El mismo puso en nuestras manos. Un reino que no se parece en nada al que tantos buscan implantar en el mundo. En esta estación Jesús coronado de espinas comparece ante la iniquidad de un tribunal humano acusado por algunos que no entendieron el mensaje que proponía un nuevo orden de cosas que solo es posible cuando se vive en el amor, en la generosidad y en la verdad.

Señor de la Sentencia:En una humanidad desgarrada por la injusticia y el

desamor, nosotros tus discípulos queremos construir contigo un Reino de vida y de esperanza. Danos la alegría de poder mostrar con nuestras obras aquella vida nueva que nos anuncias, aquella verdad que Pilatos no alcanzó a descubrir en tu rostro cubierto de dolor, aquella luz que surge de tu corona de espinas, la única corona que tiene el poder de sanar, de redimir, de hacer más justa y noble la vida. Amén.

En el año del encuentro con el señor en su palabra, pidamos para que el amor con el que Dios nos entregó su mismo corazón, haga de cuantos tienen la tarea de gobernar los pueblos, los administradores de la verdadera justicia y los constructores de la verdadera reconciliación. Con Santo Tomás Moro, servidor justo y fiel, pidamos para el mundo entero que podamos ser bondadosos como el Padre. Amén.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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SEGUNDA ESTACIÓNJESÚS CARGADO CON LA CRUZ

Del Evangelio según San Marcos 15, 20 Terminada la burla, le quitaron la

púrpura y le pusieron su ropa.Y lo sacan para crucificarlo.

MeditaciónSe acercan a Jesús sus verdugos y le ofrecen un madero

dramático en el que han cruzado dos trozos de leño. Para nosotros, más que un tormento ese madero es la bandera del Rey, de nuestro Rey. Todos los reinos humanos tienen bandera, la izan victoriosos como señal de posesión, juran por ella, la defienden, la veneran. Ahora, en el camino doloroso que conduce hasta el Gólgota, le es ofrecida a Jesús una Bandera, es la bandera discutida que anunció Simeón (cfr. Lucas 2, 35). Jesús la besa, se abraza a ella y la toma sobre sus hombros para marcar con ella el camino de la Iglesia, para enarbolarla como los héroes en la cima del monte, indicando su victoria.

Oh Cruz fiel:En esta humanidad que ve marcados sus caminos por las

cruces con las que se señala el dolor de tantos rostros de la violencia: la de los grupos alzados en armas, el desplazamiento forzado, la violencia contra las mujeres, la corrupción; ayúdanos a entender que eres la escala por la que se alcanza la vida, eres la tabla de salvación que nos regala el cielo, eres la mano tendida que rescata al hombre, eres la bandera del Rey, la que se viste de luz para indicar al mundo el triunfo del amor. Con Jesús te recibimos para llevarte como señal de la Victoria del Rey que en ti venció el poder del pecado y de la muerte. Amén.

En el año del Encuentro con el Señor en Su Palabra, pidamos la alegría de poder llevar con amor no sólo nuestra propia cruz sino la cruz de todos los que sufren y esperan el aliento de nuestras acciones de amor y de esperanza. Con San Pedro Claver, Esclavo de los Esclavos, pidamos la gracia del amor solidario para que seamos bondadosos como el Padre. Amén.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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TERCERA ESTACIÓNJESÚS CAE POR PRIMERA VEZ

Del libro del Profeta Isaías 53, 4.6Él soportó nuestros

sufrimientos y aguantó nuestros dolores; nosotros

lo estimamos leproso, herido de Dios y humillado;

Todos errábamos como ovejas, cada uno siguiendo su camino; y el Señor cargó

sobre éltodos nuestros crímenes.

MeditaciónPuede parecer a muchos que aquí se humilla y se aplasta un

hombre, pero para nosotros aquí se levanta la humanidad. Jesús se hizo de tal modo solidario con la humanidad, que no esquivo llegar incluso hasta el dolor mismo con tal de levantar al hombre y de hacerle recobrar su dignidad y su esperanza. La Primera Caída de Jesús en su camino recuerda aquella vez primera en la que la humanidad se alejó del amor de Dios y evoca la ternura con la que el Dueño de la vida, rescató a su pueblo y le devolvió la esperanza.

Jesús Caído:Cuántos te han buscado en tus santuarios, sedientos de

vida, de esperanza, de paz. Vuelve a levantarte que el camino es largo, levanta contigo a cuantos hemos caído, a las victimas de la violencia. Tiéndenos tu mano amiga para que nosotros, tus discípulos, podamos ser misioneros de esperanza y levantar el corazón de quienes han perdido la confianza y la alegría. Haz que podamos ser ministros de la Reconciliación que restaura y salva, que hace posible el reencuentro de los hermanos.

En el año del Encuentro con el Señor en Su Palabra, pidamos la alegría que llena el corazón de tantos creyentes que, en distintos lugares, han decidido tender su mano de bondad para levantar a los caídos. Con San Damián de Molokai, sintamos el gozo de entregarnos al que sufre con amor para que seamos Bondadosos como el Padre. Amén.

Padre nuestro… Dios te salve María…

9

Meditación:

CUARTA ESTACIÓNJESÚS ENCUENTRA A SU MADRE

Del Evangelio según San Lucas 2, 34-35.51Simeón los bendijo y dijo a María, su madre:

«Este ha sido puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; y será como un signo de

contradicción y a ti misma una espada te traspasará el alma—, para que se pongan de

manifiesto los pensamientos de muchos corazones».Él bajó con ellos y fue a Nazaret y

estaba sujeto a ellos. Su madre conservaba todo esto

en su corazón.La vía dolorosa es cruzada por varios y misteriosos caminos,

entre ellos el de María, la Madre, la que, según la tradición espera a Jesús con el corazón transido de dolor. Es en la vida de María donde mejor se ha realizado el plan de Dios, aceptado y recibido por ella sabiendo que en la voluntad divina estaba también esta espada de la que nos hablaba San Lucas hace un instante. En la Madre leemos también la figura de la Iglesia, la de una comunidad que es familia. Ella se hace caminante con los discípulos de Jesús y llora con los sufrimientos de todos, porque todos somos la espada que traspasa su corazón. Que Colombia, siempre fiel al amor de María, pueda encontrar con su ayuda caminos de paz y de esperanza.

Jesús, Hijo de María Virgen:Te encuentras con tu Madre y nuestra Madre y recibes de

su corazón el aliento y la fuerza necesaria para seguir tu camino. Ella viene a ti con la misma ternura con la que te arrulló en Belén y te consoló en Nazaret. Haz que aprendamos a reconocer en la Inmaculada Dolorosa, la fe que necesitamos tus discípulos para seguir anunciando la esperanza como María, la Hija de Sion, y danos el gozo de sentir que Ella, la Madre, nos abraza también a nosotros en el camino de la vida.

En el año del Encuentro con el Señor en Su Palabra, pidamos la alegría de saber que la Madre de Jesús nos ha hecho sus hijos y que, entregados como ella a la Gloria de Dios, podamos servir a todos con alegría y anunciar la paz y la esperanza a todos. Con San Juan Pablo Segundo, Papa, imploremos la dicha de ser “de María” para que con ella podamos ser Bondadosos como el Padre. Amén.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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QUINTA ESTACIÓNEL CIRINEO AYUDA A JESÚS A LLEVAR LA CRUZ

Lectura del Evangelio según San Lucas 23, 26Mientras lo conducían,

echaron mano de un cierto Simón de Cirene, que volvía del campo, y le

cargaron la cruz, para que la llevase detrás de Jesús.

Meditación:Simón de Cirene, si somos exactos, sería el primer discípulo

de verdad. Se hizo discípulo en un encuentro dramático y pudo hacer realidad aquello que dijo Jesús: “Quien quiera seguirme que tome su cruz” (Lucas 9,23). Hoy, a casi dos mil años de distancia, sigue vivo en nosotros el recuerdo de un extranjero, venido de Cirene, que luego contó a sus hijos Alejandro y Rufo, la maravillosa experiencia que cambió su vida: supo ser solidario con el dolor y aprendió con dolor a llevar la cruz de otro que resultó ser, no solo el Salvador del Mundo, sino también Señor de la Historia. Por esto, en ese camino doloroso, en Simón de Cirene encontramos también nosotros un amigo nuevo que aprendió a llevar la cruz y que nos quiere invitar a seguir al que carga con nuestros dolores.

Señor Jesús:Por los méritos de tantos que como tú amigo Simón de

Cirene han hecho suyas las cruces de todos, ayúdanos a trabajar con amor por los otros, a tender nuestras manos al que padece, a ofrecer nuestro corazón al que llora, a ser hermanos del que camina en soledad llevando la cruz de sus dolores, a practicar la solidaridad, la fraternidad y el perdón ante tantos rostros de violencia.

En el año del Encuentro con El Señor en Su Palabra, pidamos la dicha de saber seguir los pasos de Jesús con amor. Aprendamos a amar con generosidad, aprendamos a descubrir mil formas de acudir al servicio de los que nos necesitan. Con san Vicente de Paul, busquemos la renovación de la caridad para que podamos ser Bondadosos como el Padre. Amén.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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Meditación:

SEXTA ESTACIÓNLA VERÓNICA LIMPIA EL ROSTRO DE JESÚS

Lectura del Libro del profeta Isaías 53, 2-3Creció en su presencia como

brote, como raíz en tierra árida,

sin figura, sin belleza.Lo vimos sin aspecto atrayente,

despreciado y evitado de los hombres, como un

hombre de dolores, acostumbrado a sufrimientos, ante el cual se ocultaban los

rostros,despreciado y desestimado.

Una mujer, dice la tradición, sale al encuentro del Señor en el camino hacia el Calvario. Ha visto en su crudeza todo el dolor del Señor de la vida, que en su rostro ha decidido asumir los muchos rostros del dolor, de la violencia, de la muerte. Dicen que Jesús le regaló, impresa en su alma misma, una imagen que, como extraño misterio no muestra enojo, no revela venganza, solo irradia amor e inspira compasión. Es la imagen del Siervo doliente la que devuelve la paz. La violencia humana solo es vencida por un acto de amor, sin amarguras, sin resentimientos, es decir, una mujer que sale al camino, es la vencedora de tantas violencias, porque se hizo bondad y se llevó como premio el rostro agradecido del Rey de la Gloria.Señor Jesús:

Que un día en la gloria podamos verte, pero porque primero sentimos que también estabas en el rostro de tus discípulos, los que sufren, los que lloran, los que mueren. Tú nos has prometido dejarnos ver tu rostro, danos la alegría de mirar tu hermosura doliente y de poder socorrer con bondad a los que nos hacen ver tu rostro a cada paso del camino. Danos el gozo de sembrar en los corazones la esperanza, danos la dicha de ver sonreír a cuantos padecen el rigor de la violencia, danos la capacidad de no ser indiferentes, tener actitudes de desconfianza y escapismo ante tantos rostros de violencia. Amén.

En el año del Encuentro con el Señor En Su Palabra, pidamos la gracia de ver en el rostro de todos el rostro de Dios, pidamos la fe necesaria para lavar la faz doliente del hermano con el bálsamo de la alegría y de la esperanza. Que Santa Isabel de Hungría, nos ayude a acercarnos al dolor humano para que seamos Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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SEPTIMA ESTACIÓNJESÚS CAE POR SEGUNDA VEZ

Del Libro de las Lamentaciones 3, 1-2. 9. 16Yo soy el hombre que ha

conocido el sufrimiento bajo la vara de su cólera; me ha

conducidoy llevado a la tiniebla y no a la

luz; ha cerrado mis caminos con sillares, ha retorcido mis

sendas.Me ha roto los dientes con

piedras, me ha aplastado en el polvo.

Meditación:Otra vez la caída. Si la primera recordaba las infidelidades

de otro tiempo, la segunda nos presenta al hombre de hoy segunda vez postrado bajo el peso de tanto dolor, de tanto desprecio por la ley divina del amor. Jesús humildemente baja hasta el dolor del mundo otra vez, mil veces más. No dejará de hacerlo porque sabe que nosotros, sus discípulos, tropezamos y caemos, olvidamos la bondad y reincidimos en nuestras infidelidades. Necesitamos levantarnos nuevamente, buscar las raices de nuestra violencia, volver al camino, recobrar la dignidad, sentir el amor de Dios.

Jesús caído:Te dicen las plegarias humildes que eres el Caído que

levantas los caídos. Tiéndenos tu mano una vez más, no olvides cuánto necesitamos la fuerza del Espíritu para no volver a caer. Enséñanos a encontrar en el corazón de la Iglesia, tu legado de amor y de bondad, ayúdanos a alzar el vuelo hacia la grandeza del amor de Dios que tú nos revelas. Haz que esta Iglesia colombiana sea la garante de un espacio de reconciliación para seguir construyendo los espacios para una paz duradera. Amén.

En el Año del Encuentro con El Señor en Su Palabra, pidamos la gracia de ser apoyo y fortaleza para tantos caídos y que el amor con el que San Juan Bosco tendió la mano a la juventud dispersa y descarriada, nos ayude a ser también nosotros bondadosos como el Padre.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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OCTAVA ESTACIÓNJESÚS SE ENCUENTRA CON LAS MUJERES DE JERUSALÉN

Del Evangelio según San Lucas 23, 28-31Jesús se volvió hacia ellas y les dijo: «Hijas de

Jerusalén, no lloren por mí, lloren por ustedes y por sus hijos, porque miren que vienen días en

los que dirán: “Bienaventuradas las estériles y los vientres que no han dado a luz y los pechos que

no hancriado”. Entonces empezarán a decirles a los

montes: “Caigan sobre nosotros”, y a las colinas: “Cúbranos”; porque, si esto hacen con el leño

verde,¿qué harán con el seco?».

Meditación:Siempre en el discurrir de la Historia, estarán ellas, las

mujeres fieles, las que por ser madres, hermanas, hijas, amigas, jamás defraudan, nunca vacilan, tienen la fuerza y la entereza necesarias para asumir la vida con decisión y amor. Por eso están también junto a Jesús, haciendo gala de una fidelidad que ni siquiera pudieron vivir sus apóstoles más cercanos. Jesús las encuentra en su vía dolorosa y les prodigará una mirada de amor agradecido que las hace discípulas misioneras, modelos de fe, de esperanza y amor de verdad. También entre nosotros hemos encontrado el valor de tantas mujeres servidoras de la paz, consagradas, catequistas, maestras, madres. Que entendamos su misión y que recordemos que Ellas son la cuna en la que nace la paz.

Jesús:Maestro bueno, que supiste asociar a tu camino la fidelidad

y la grandeza de la mujer, que las constituiste en privilegiadas testigos de tu gloria, ayúdanos a seguir encontrando en la dulzura de las mujeres de hoy la huella maravillosa del amor que no vacila, el testimonio fiel de quienes, como madres, hermanas, hijas, amigas, serán siempre luz y consuelo para el mundo.

En el año del Encuentro con El Señor en Su Palabra, pidamos la intuición y la disponibilidad que distinguió a las santas Mujeres de todos los tiempos y por la intercesión de Santa Laura Montoya, Misionera, salgamos a los caminos de nuestra patria colombiana a calmar la sed de esperanza de tantos que sufren. Que podamos ser Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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NOVENA ESTACIÓNJESÚS CAE POR TERCERA VEZ

Del Libro de las Lamentaciones 3, 27-32 Es bueno que el hombre cargue con el yugo desde su juventud.

Siéntese solo y silencioso cuando el Señor se lo impone; ponga su boca en el polvo, quizá haya

esperanza;ponga la mejilla al que lo maltrata y se harte de

oprobios.Porque el Señor no rechaza para

siempre; y si hace sufrir, se compadece conforme a su inmensa bondad.

Si llega a afligir, se apiada luego según su inmenso amor…

Meditación:La tercera caída de Jesús es también la tercera oportunidad

que se nos da de reconsiderar nuestra vida y descubrir que Dios no cesa en su amor y que su bondad es constante invitación a vivir rectamente, con corazón puro, lejos de las trampas que nos tiende el mundo. Jesús se acerca al final de su doloroso camino, pero la humanidad prosigue esta marcha. Sin embargo ahora el camino se aligera, porque Jesús nos seguirá mostrando a quienes queremos ser sus discípulos que nuestra tarea será, desde ahora levantar del polvo al desvalido, tender nuestra mano solidaria al que ha caído, para que todos recuperen la dignidad que Cristo nos conquistó con su entrega.

Señor Caído:Vuelve hacia el dolor tantas comunidades nuestras

golpeadas por la violencia tu luminoso rostro lleno de bondad, para que tengamos el valor que seguir nuestro camino con el corazón fortalecido por el amor providente que nos reconcilia con el Padre. Que esta humanidad que tantas veces se ha postrado ante las muchas imágenes que retratan tu dolor pueda comprometerse en una verdadera experiencia de Reconciliación que devuelva la esperanza y la paz a todos. Amén.

En el año del Encuentro con El Señor en Su Palabra, pidamos la fuerza y la alegría con la que los Santos se comprometieron en el rescate de los que sufren y que con su ministerio ofrecieron la reconciliación y el perdón a tantos hermanos. Que San Pío de Pietrelcina nos ayude a seguir ofreciendo el amor y el perdón y a ser Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro…

15Dios te salve María…

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DÉCIMA ESTACIÓNJESÚS ES DESPOJADO DE SUS VESTIDURAS

Del Evangelio según San Marcos 15, 24Lo crucifican y se reparten sus ropas,

echándolas a suerte, para ver lo que se llevaba cada uno.

Meditación:Jesús nos muestra aquí el dolor de tantos seres humanos a

los que el mundo les ha arrancado a girones sus esperanzas, sus deseos de vivir, su dignidad. Los discípulos misioneros del Señor hemos de asumir la tarea de cubrir el despojo de la humanidad con el vestido nuevo de la esperanza, con las vestiduras luminosas del amor que perdona, sana, redime y comunica vida, para que cada ser humano, cada persona que habita en este mundo sienta cómo es el amor de Dios el que restaura de verdad la vida, haciendo de todo ser humano un santuario de vida y de paz.

Jesús despojado:Todo lo has entregado y luces ante el mundo vestido de rey

con la púrpura gloriosa de tu sangre. Que ese amor inmolado nos renueve y que, vestidos con la gracia de tu amor, seamos capaces de cubrir con bondad a cuantos sufren y a cuantos todo lo esperan de quienes hemos decidido ser tus discípulos. Que nosotros podamos cubrir con el manto de la bondad a cuantos sufren, que podamos trazar caminos de reconciliación para todos. Amén.

En el Año del Encuentro con El Señor en Su Palabra, pidamos la decisión y el coraje necesarios para cubrir la vida desolada y triste de tantos despojados de su dignidad. Que San Martín de Tours nos enseñe a arropar con el amor y la esperanza a los que sufren y a ser Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro…

Dios te salve María…

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UNDÉCIMA ESTACIÓNJESÚS CLAVADO A LA CRUZ

Del Evangelio según San Lucas 23, 33Y cuando llegaron al lugar llamado «La

Calavera», lo crucificaron allí, a él y a los malhechores,

uno a la derecha y otro a la izquierda.

Meditación.Se alza ahora sobre el mundo la única bandera que une y da

identidad: Jesús elevado sobre todo, vencedor aunque parezca vencido, triunfador, aunque muchos piensen que ha sido derrotado. Según su promesa, es ahora cuando atrae a todos, cuando se revela en su grandeza todo el poder del amor, cuando sus brazos abiertos trazan sobre el mundo la señal del perdón y de la paz. Ahora están unidos Cristo y Cruz de un modo tan pleno que no podrá entenderse nunca al Rey sin su trono y al trono sin su Rey. En este instante vemos los discípulos del Maestro como se inicia el único reinado que atraviesa los siglos porque se apoya en el amor y en la entrega verdadera. Todo lo demás pasa, Jesús será desde ahora todo para todos.

Rey Crucificado:Extiende por el mundo tu reino de salvación. Cosido al

madero danos la libertad, la vida, la paz. Que tus brazos extendidos reúnan el rebaño, que tu corazón se abra para que en el tengan cabida todas las ovejas que el pecado dispersó y en ti podamos ser un solo rebaño bajo un mismo pastor, un solo reino a la sombra redentora de tu cruz, que Colombia, animada por tus discípulos misioneros siga construyendo el puente de la reconciliación que una, como lo hiciste en la cruz, el cielo y la tierra, en un abrazo de paz y de esperanza.

En el año del Encuentro con El Señor en Su Palabra pidamos la voluntad para hacer de la Cruz salvadora del Señor la bandera que señale el camino de la esperanza y de la paz a tantos crucificados por el odio y por las persecuciones. Que San Pablo Miki y sus compañeros mártires nos enseñen a anunciar desde la cruz la urgencia de ser Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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DUODÉCIMA ESTACIÓNJESÚS MUERE EN LA CRUZ

Del Evangelio según San Lucas 23, 44-46Era ya como la hora sexta,

y vinieron las tinieblas sobre toda la tierra, hasta la hora nona, porque se

oscureció el sol.El velo del templo se rasgó por

medio. Y Jesús, clamando con voz potente, dijo:«Padre, a tus manos encomiendo mi

espíritu».Y, dicho esto, expiró.

Meditación:En verdad este es el Hijo de Dios, dice el centurión y lo

repite la fe. Estamos ante el desconcertante misterio de Dios que se revela de este modo y que nos anuncia en la muerte de su Hijo hasta dónde puede llegar el amor, pues ya lo había dicho el mismo Jesús: “¡Así amó Dios al mundo! Le dio al Hijo Único, para que quien cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna” (Juan 3,16). Cuando para muchos cesa la vida, para los que creemos en Jesús esta hora nona es la hora del reinado de Dios, es la hora en la que, gracias al amor redentor del Hijo entregado por muchos, por todos, podemos decir de cada hermano: Verdaderamente este ser humano es hijo de Dios.

Cristo de la Expiración:Que admirable momento: nos has conquistado el amor del

Padre, nos has dado la ternura de una Madre, nos has reconciliado con todos, nos has dado la vida plena, nos ha hecho hermanos y discípulos, nos has dado tu Espíritu. Gracias porque en el silencio sacrosanto que envuelve el Gólgota, todo ha comenzado a ser nuevamente, todo ha sido creado para siempre, todo se ha reconstruido cuando nos has reconciliado con el Padre.

En el año del Encuentro con El Señor en Su Palabra, supliquemos la confianza necesaria para encontrar en el costado abierto del Salvador, la fuente inagotable de perdón y de esperanza para nuestra Colombia. Que la ardiente piedad de Santa Gertrudis nos ayude a sentir el amor del corazón de Cristo y a volver a acoger la Palabra del Señor de la gloria que nos invita a ser Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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DECIMATERCERA ESTACIÓN

JESÚS BAJADO DE LA CRUZ Y EN BRAZOS DE MARÍA

Del Evangelio según San Marcos 15, 42-43Al anochecer, como era el día de la Preparación,

víspera del sábado, vino José de Arimatea, miembro noble del Sanedrín, que también

aguardaba el reino de Dios; se presentó decidido ante Pilato y le pidió el cuerpo de Jesús. Este

compró una sábana y, bajando a Jesús, lo envolvió en la sábana…

Meditación.Cómo nos representan José de Arimatea y Nicodemo. Cómo

estamos unidos a ellos quienes somos discípulos del Maestro y queremos, como esos varones del tiempo de Jesús, seguirlo buscando, ir por Él hasta la cruz, recogerlo y recibirlo en el corazón, ir a llevarlo al mundo, contando a todos que el Señor de la vida nos ha conquistado la vida verdadera. Aquel viernes estos hombres fueron hasta la montaña y recogieron el cuerpo de Jesús. Ahora nosotros queremos ir al mundo a recoger con amor el cuerpo de Cristo extendido por todos los confines de este mundo, para reunirlo en la Iglesia, para congregarlo en la comunión del mismo amor, para hacerlo una familia, para que se nutra con el Pan de los hermanos y se lance al mundo con la misión de llenarlo todo con el amor de Dios.

Cristo en brazos de María:Reúne tu Iglesia, tráela desde los extremos del mundo,

congrégala en el regazo maternal de la Reina que te ha recibido primero. Danos el gozo de ser misioneros de tu amor y de mostrar como en los brazos de la Iglesia, a quien María representa, hay lugar para todos, hay amor para todos, hay Evangelio para alegrar el corazón de todos, hay palabras que reconcilian, hay mesa servida para celebrar la paz, hay abrazo de amor para quienes se ofrezcan el perdón y la esperanza.

En el año del Encuentro Con El Señor en Su Palabra, imploremos el amor ardiente por la Iglesia Madre y pidámosle a Santa Catalina de Siena, enamorada de la Iglesia de Cristo, que nos ayude a recordar que la gran familia de Dios es la casa que acoge en sus brazos a cuantos buscan consuelo y paz y a cuantos quieren ser Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro… Dios te salve María…

20

DECIMACUARTA ESTACIÓN

EL SEÑOR EN EL SANTO SEPULCRO

Del Evangelio según San Lucas 23, 52-53José de Arimatea acudió a

Pilato y le pidió el cuerpo de Jesús.

Y, bajándolo, lo envolvió en una sábanay lo colocó en un sepulcro excavado en la roca, donde nadie había sido puesto

todavía.

MeditaciónEl Sepulcro no es sólo un monumento en el que se guarda

un cuerpo destrozado. Es la cuna de la nueva vida, es el espacio que se hace testigo de la victoria de Jesús sobre la muerte, es la puerta que se abre para que todos vengan y vean como la muerte ya no tiene poder, como el dolor se ha quedado encerrado, como las sábanas y el sudario graban para siempre las huellas del amor más grande, para dar paso a una vida nueva, llena de luz y de esperanza. Jesús es puesto con amor en un sepulcro nuevo, para que de allí, de ese Jardín del Edén restaurado y renovado, salga el nuevo Adán a renovar eternamente la vida de quienes lo quieran acoger como Dios y como hermano.

Jesús Sepultado:Que venga sobre el mundo el misterio de tu silencio, que

encontremos en ti la paz que buscamos, que puedas ser tú la vida de quienes serán tus discípulos en el curso de la historia y que han de confesar que las sombras que ahora te cubren, se convertirán en la luz inextinguible que anuncie al mundo tu victoria. Haz que en esta tierra colombiana bendecida por tu amor, florezcan y den fruto las semillas de reconciliación que no nos cansaremos de sembrar. Amén.

En el año del Encuentro con El Señor en Su Palabra, roguemos para todos sentimientos solidarios para proclamar la victoria de Jesús sobre la Muerte. Que la Intercesión poderosa de San Juan XXIII nos ayude a descubrirle a la Iglesia nuevos caminos para anunciar la gloria de Jesús a todas las gentes, de modo que todos sean Bondadosos como el Padre.

Padre nuestro… Dios te salve María…

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RITO CONCLUSIVOIndulgencia

Para obtener la gracia de la Indulgencia con la que la Iglesia ha enriquecido la práctica de la Vía de la Cruz, pidamos por el Papa, por la unidad y santidad de la Iglesia, por el descanso de los fieles difuntos y, con amor proclamemos nuestra fe.

Se recita el Credo.

Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra.

Creo en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor,Que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen,padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos,al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielosy está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.

Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica,la comunión de los santos, el perdón de los pecados,la resurrección de la carne y la vida eterna.

Amén.

Oración por la Paz de Colombia

Padre, Tu eres un océano de paz y nos regalas por medio de tu Hijo Jesucristo y por la acción del Espíritu Santo este don, y lo siembras en nuestro corazón por medio de la conversión y la reconciliación.

Tu nos confías la paz a nuestra responsabilidad,

22convirtiéndonos en artesanos de la paz, para construirla con “pasión, paciencia, experiencia y tesón”.

23

Tu quieres que nuestras familias sean escuelas de paz donde te escuchemos, acojamos y te sigamos mejor y, así germinen palabras y gestos de perdón, escucha, diálogo, ternura, amor y reconciliación. Que los niños y jóvenes se conviertan en protagonistas de un futuro de paz.

Acompáñanos en las responsabilidades que tenemos en nuestra vida social, política, económica, cultural y eclesial. Haz que difundamos el respeto por la vida, las personas y la creación; que seamos solidarios, fraternos, justos y trabajadores del bien común.

Acoge en tu casa a quienes murieron víctimas de la guerra fratricida, mueve el corazón de los actores violentos para que vuelvan a Ti y sean también ellos constructores comprometidos de la paz. Fortalece a las víctimas en su dignidad y otórgales valentía para ofrecer el perdón.

Que María Reina de la paz, nos ayude a desarmar el corazón, a vivir la justicia, el perdón, la reconciliación y la paz, para que nazca en Colombia la civilización del amor. Amén.

Oración Final

Atiende, Dios de amor,la oración confiada de esta familia santaque ha recorrido el camino de la Cruz de tu Hijo,y haz que los testimonios valerosos de tantos creyentes que han sido bondadosos como el Padre,nos ayuden a proclamar la eterna vigencia del amor que salva, que consuela, que alimenta,que calma la sed de vida y de esperanza de la humanidad.

Que todos los que hemos celebrado la Muerte Gloriosa de Jesús, iluminados por el Espíritu Santo,podamos ser Bondadosos como el Padre. Amén.

Bendigamos al Señor.R. Demos gracias a Dios.

241. Reconciliación de varios penitentes con confesión y

absolución individual

Rito de entrada

Monición inicial:

Al iniciar este momento de perdón, motivémonos escuchando la invitación que nos hizo el Papa Francisco:

La palabra de Dios al inicio del camino cuaresmal dirige a la Iglesia y a cada uno de nosotros dos invitaciones. La primera es aquella de San Pablo: “Déjense reconciliar con Dios”. No es simplemente un buen consejo paterno y mucho menos una sugerencia. Es una verdadera y propia súplica en nombre de Cristo: “Les suplicamos en nombre de Cristo: déjense reconciliar  con Dios”. ¿Por qué un llamamiento así tan solemne y apasionado?

Porque Cristo sabe cuán frágiles y pecadores somos. Conoce la debilidad de nuestro corazón, lo ve herido por el mal que hemos cometido y rápidamente,  sabe cuánta necesidad tenemos de perdón, sabe que es necesario que nos sintamos amados para realizar el bien. Solos no podemos hacerlo, por esto el Apóstol no nos dice que “hagamos cualquier cosa”,  sino que "nos dejemos reconciliar con Dios", permitirle que nos perdone con confianza porque Dios es más grande que nuestro corazón. Él vence el pecado y nos levanta de la miseria si nos confiamos a Él. Está en nosotros reconocernos necesitados  de bondad: es el primer paso del camino del cristiano; se trata de entrar a través de la puerta abierta, que es Cristo, donde Él nos espera, el Salvador y nos ofrece una vida nueva y alegre.

Puede haber  algunos obstáculos que cierran las puertas del corazón. Está la tentación de blindar las puertas, o sea de convivir con el propio pecado, minimizándolo, justificándonos siempre, pensando que no somos peores que los demás y de esta manera bloqueamos la cerradura del alma y permanecemos encerrados en nosotros mismos, prisioneros del mal. Otro obstáculo es la vergüenza de abrir la puerta secreta del corazón. La vergüenza, en realidad, es un buen síntoma porque indica que queremos cortar con el mal. Sin embargo, no debe jamás transformarse en temor o miedo.

 Y existe una tercera insidia: aquella de alejarnos de la puerta. Sucede cuando nos escondemos en nuestras miserias. Cuando "rumeamos"  continuamente relacionando entre ellas las cosas negativas hasta el punto de hundirnos en el sótano más oscuro del alma. Entonces nos convertimos en familiares de la tristeza que no queremos, nos acobardamos y somos débiles frente a las tentaciones. Esto sucede porque permanecemos solos en nosotros mismos, encerrándonos y huyendo de la luz. Solamente la gracia del Señor nos libera. Dejémonos entonces reconciliar escuchando a Jesús, que dice a quien está cansado y oprimido: “Vengan a mí”. No permanecer en sí mismo  sino ir hacia él. Ahí existe la Paz y el descanso.

1. Canto de entrada:2. Saludo:

La gracia, la bondad y la paz de Dios Padre y de Jesucristo, su Hijo, en la verdad y en el amor, estén con ustedes.

3. Monición presidencial:Oremos, hermanos y hermanas, para que Dios, que nos llama a conversión y nos

25ofrece su bondad, nos conceda la gracia de una verdadera y fructuosa penitencia.

Silencio

Dios omnipotente y bondadoso, que nos has congregado en el nombre de tu Hijo,

para que alcancemos tus bondades y hallemos gracia para ser socorridos en el momento oportuno:

abre nuestros ojos para que veamos el mal que hemos hecho y transforma nuestros corazones para que nos convirtamos a ti

sinceramente; que tu amor reúna de nuevo a los que el pecado dividió y dispersó;

que tu poder sane y fortalezca a los que hirió la fragilidad; que tu Espíritu dé nueva vida a los que la muerte venció;

para que, restablecido el amor en nosotros, brille en nuestras obras la imagen de tu Hijo,

y todos los hombres y mujeres, iluminados por la claridad de Cristo, que resplandece en el rostro de la Iglesia, reconozcan, como enviado tuyo, a

Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor.Amen.

Liturgia de la Palabra

4. Lectura: Is 59, 1-4.9-15

Lectura del libro de IsaíasEl poder del Señor no se ha quedado tan corto como para no salvar,ni es él tan duro de oído que no pueda escuchar.Son sus maldades las que se interponen entre ustedes y su Dios;son sus pecados los que han hecho que él se cubra el rostro y no los quiera oír.Tienen las manos manchadas de sangre, los dedos untados de crímenes,sus labios dicen mentiras, su lengua planea maldades.No hay quien haga denuncias justas, ni entable pleitos con honradez.Confían en la mentira y afirman falsedades;Conciben la maldad y dan a luz el crimen.

Por eso, Dios no nos hace justicia y no viene en defensa de nosotros.Esperábamos la luz, y vinieron tinieblas, claridad, y andamos a oscuras.Andamos a tientas, como ciegos junto a una pared, como si no tuviéramos ojos;En pleno día tropezamos como si fuera de noche, teniendo salud estamos como muertos.Todos nosotros gruñimos como osos, gemimos igual que las palomas.Esperamos el juicio de Dios, pero en vano, la salvación, pero está lejos de nosotros.Pues son muchas nuestras transgresiones contra ti, y nuestros pecados nos acusan;tenemos presentes nuestras transgresiones, reconocemos nuestras culpas:haber sido rebeldes e infieles al Señor, haber vuelto la espalda a nuestro Dios,

26haber hablado de violencia y de traición, haber tramado engaños en nuestro corazón.Se tergiversa el derecho, la rectitud se queda lejos,la sinceridad tropieza en las plazas, la honradez no tiene cabida;la lealtad ha desaparecido, al que se aparta del mal lo saquean.El Señor contempla disgustado que ya no existe la justicia.

Palabra de Dios.

5. Salmo: 32 (31)R. Confesaré al Señor mi culpa.

Dichoso el que está absuelto de su culpa,a quien le han sepultado su pecado;Dichoso el hombre a quien el Señorno le apunta el delito. R.

Había pecado, lo reconocí,no te encubrí mi delito;Propuse: <<Confesaré al Señor mi culpa>>,y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R.

Por eso, que todo fiel te supliqueen el momento de la desgracia: la crecida de las aguas caudalosasno lo alcanzará. R.

Tú eres mi refugio,me libras del peligro,me rodeas de cantos de liberación. R.

6. Evangelio.: Juan 8, 1-11

Lectura del Santo Evangelio según San JuanJesús se dirigió al monte de los Olivos. Y por la mañana temprano fue otra vez al templo, y toso el pueblo se reunió junto a él; él se sentó y se puso a enseñarles. Entonces los escribas y los fariseos le llevaron una mujer que habían sorprendido cometiendo adulterio, la colocaron en medio y le dijeron a Jesús: <<Maestro, a esta mujer la sorprendimos en el momento mismo de cometer adulterio. Y en la Ley nos mandó Moisés que a esas personas hay que darles muerte apedreándolas. ¿Tú qué dices?>> Esto lo decían para ponerlo en dificultades y tener de que acusarlo. Pero Jesús se inclinó y empezó a escribir con el dedo en el suelo. Como ellos siguieron insistiendo con la pregunta, él se levantó y les dijo: << ¡El que no tenga pecado, que le tire la primera piedra!>> Y se volvió a inclinar y siguió escribiendo en el suelo. Ellos, al oír esto, se fueron retirando uno por uno, comenzando por los más viejos; y quedó solo Jesús, con la mujer, que seguía allí delante. Entonces se incorporó y le preguntó: <<Mujer, ¿dónde están? ¿Nadie te

27condenó?>> Ella respondió: <<Nadie, Señor. >>Jesús le dijo: <<Pues tampoco yo te condeno. Vete, y de ahora en adelante no peques más.>>

Palabra del Señor.

7. Homilía8. Examen de consciencia

A continuación las 30 preguntas propuestas por el Papa Francisco para hacer una buena confesión:

En relación a Dios¿Solo me dirijo a Dios en caso de necesidad? ¿Participo regularmente en la Misa los domingos y días de fiesta? ¿Comienzo y termino mi jornada con la oración? ¿Blasfemo en vano el nombre de Dios, de la Virgen, de los santos? ¿Me he avergonzado de manifestarme como católico? ¿Qué hago para crecer espiritualmente, cómo lo hago, cuándo lo hago? ¿Me revelo contra los designios de Dios? ¿Pretendo que Él haga mi voluntad?

En relación al prójimo¿Sé perdonar, tengo comprensión, ayudo a mi prójimo? ¿Juzgo sin piedad tanto de pensamiento como con palabras? ¿He calumniado, robado, despreciado a los humildes y a los indefensos? ¿Soy envidioso, colérico, o parcial? ¿Me avergüenzo de la carne de mis hermanos, me preocupo de los pobres y de los enfermos?

¿Soy honesto y justo con todos o alimento la cultura del descarte? ¿Incito a otros a hacer el mal? ¿Observo la moral conyugal y familiar enseñada por el Evangelio? ¿Cómo cumplo mi responsabilidad de la educación de mis hijos? ¿Honro a mis padres? ¿He rechazado la vida recién concebida? ¿He colaborado a hacerlo? ¿Respeto el medio ambiente?

En relación a mí mismo¿Soy un poco mundano y un poco creyente? ¿Cómo, bebo, fumo o me divierto en exceso? ¿Me preocupo demasiado de mi salud física, de mis bienes? ¿Cómo utilizo mi tiempo? ¿Soy perezoso? ¿Me gusta ser servido? ¿Amo y cultivo la pureza de corazón, de pensamientos, de acciones? ¿Nutro venganzas, alimento rencores? ¿Soy bondadoso, humilde, y constructor de paz?

Liturgia Sacramental9. Recitación de la confesión general:

Hermanos y hermanas, confiesen sus pecados y oren los unos por los otros, para que obtengan la salvación. Yo confieso ante Dios todopoderoso…

10. Canto penitencial:11. Oración dominical:

Con las mismas palabras que Cristo nos enseñó, oremos a Dios, nuestro Padre,

28para que perdone nuestros pecados y nos libre de todo o mal: Padrenuestro…..

12. Oración:Padre de bondad, que has preparado por medio de tu Iglesia los auxilios

que necesita nuestra debilidad, concédenos recibir con alegría y demostrar con la santidad de nuestra vida la fuerza renovadora de tu

gracia. Por Jesucristo nuestro Señor. Amen.

13. Confesión y absolución individual.

2. ADORACION EUCARISTICA

Monición inicial:

En este Año del Encuentro Con El Señor en Su Palabra, la Iglesia se convierta en el eco de la Palabra de Dios que resuena fuerte y decidida como palabra y gesto de perdón, de soporte, de ayuda, de amor. Nunca se canse de ofrecer bondad y sea siempre paciente en el confortar y perdonar. La Iglesia se haga voz de cada hombre y mujer y repita con confianza y sin descanso: « Acuérdate, Señor, de tu bondad y de tu amor; que son eternos » (Sal 25,6). MV 25

Ahora dispongámonos con toda la Iglesia, con todos los ángeles y los Santos a Adorar al Señor. Él nos manifiesta su bondad permaneciendo eternamente con nosotros.

Canto: Cantemos al Amor de los amores.

El Sacerdote o el Diacono expone el Santísimo en la custodia sobre el altar.

Bendito, alabado y adorado sea Jesús en Santísimo Sacramento del Altar.

R/ Sea para siempre bendito y alabado.

Aquí me tienes, Jesús.Vengo a hacerte un rato de compañía.

Para alabar contigo al Padre. Para agradecerle sus gracias sobre nosotros.

Para pedir perdón por el mundo pecador.Para suplicarle sus favores por mediación tuya.

Creo que estás aquí presente, Señor Jesús.Y creo en ti, y te adoro y te amo.

Vengo a verte porque me estás esperando.Porque me amas, y me quieres ver contigo.

Porque te amo, y no sé pasar sin ti.

Eres mi Dios, y te adoro.Eres mi maestro, y te escucho.

29Oración del Año del Encuentro con el Señor en Su PalabraSeñor Jesucristo,tú nos has enseñado a ser bondadosos como el Padre del cielo, y nos has dicho que quien te ve, lo ve también a Él. Muéstranos tu rostro y obtendremos la salvación.

Tu mirada llena de amor liberó a Zaqueo y a Mateo de la esclavitud del dinero; a la adúltera y a la Magdalena de buscar la felicidad solamente en una creatura; hizo llorar a Pedro luego de la traición, y aseguró el Paraíso al ladrón arrepentido. Haz que cada uno de nosotros escuche como propia la palabra que dijiste a la samaritana: ¡Si conocieras el don de Dios!

Tú eres el rostro visible del Padre invisible, del Dios que manifiesta su omnipotencia sobre todo con el perdón y la bondad: haz que, en el mundo, la Iglesia sea el rostro visible de Ti, su Señor, resucitado y glorioso.

Tú has querido que también tus ministros fueran revestidos de debilidad para que sientan sincera compasión por los que se encuentran en la ignorancia o en el error: haz que quien se acerque a uno de ellos se sienta esperado, amado y perdonado por Dios.

Manda tu Espíritu y conságranos a todos con su unción para que el Año del Encuentro con el Señor en Su Palabra, sea un año de gracia del Señor y tu Iglesia pueda, con renovado entusiasmo, llevar la Buena Nueva a los pobres proclamar la libertad a los prisioneros y oprimidos y restituir la vista a los ciegos.

Te lo pedimos por intercesión de María, Madre de Dios, a ti que vives y reinas con el Padre y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos.Amén.

AYUNO

Moisés, antes de acercarse a la zarza ardiente, antes de entrar en la Presencia divina, ha de descalzarse, porque entra en una tierra sagrada (+Ex 3,5). Y nosotros, los cristianos, antes que nada, «para celebrar dignamente estos sagrados misterios», debemos solicitar de Dios primero el perdón de nuestras culpas. Hemos de tener clara conciencia de que, cuando vamos a entrar

30en la Presencia divina, cuando llevamos la ofrenda ante el altar (+Mt 5,23-25), debemos examinar previamente nuestra conciencia ante el Señor (1Cor 11,28), y pedir su perdón. «Los limpios de corazón verán a Dios» (Mt 5,8).