viviendo libre en cristo 1

3

Click here to load reader

Upload: via-visionarios-en-accion

Post on 24-May-2015

2.259 views

Category:

Education


1 download

DESCRIPTION

Por que queremos derrocar las mentiras que puedan haber en tu mente, esas fortalezas que te hacen vivir estancado y muchas veces sin esperanza. Hoy hemos decidido pararnos y gritar las verdades de Cristo que nos hacen libres, hemos decidido poner en evidencia a Satanás en sus mentiras y así experimentar a Dios en plenitud!!!!. Te invitamos a conocer este hermoso discipulado adaptado del libro "Viviendo libres en Cristo" de Niel T. Anderson.

TRANSCRIPT

Page 1: Viviendo Libre en Cristo 1

“Viviendo libre en Cristo” Discipulado Iglesia Evangélica Bautista “Visión de Reino” Departamento de jóvenes VI.A, 7 de Junio del 2009

“Viviendo libre en Cristo” 1era Parte, Aceptados en Cristo

1 e r C a p í t u l o

Índice 1.- Soy aceptado 2.- Soy hijo de Dios 3.- Soy amigo de Cristo

Soy aceptado

Luchar por ser aceptado: Desde nuestra más tierna infancia luchamos por ser

aceptados y aprobados por las personas significativas. El sistema social en la que la mayoría fuimos formados, nos daba la impresión de que seríamos ALGUIEN si parecíamos buenos o teníamos una buena posición. Sin embargo, siempre nos quedamos cortos en esto, hagamos lo que hagamos para ser aprobados. Nada podemos hacer para merecer el amor voluntario sin condiciones. Nos afanamos bajo la falsa suposición de que todos nos aceptarán si vivimos perfectamente.

¿Sientes que aún buscas que tus padres u otras personas te aprueben? ¿Has comprometido tu integridad para evitar el rechazo?

Testimonio: “…He prestado atención a los pensamientos negativos sobre mí misma que creía propios. No me daba cuenta de que Satanás puede emplear nuestras experiencias pasadas para poner pensamientos en nuestra mente que nos condenan y derrotan…”

TÚ no eres producto del pasado, eres resultado de la obra de Cristo en la cruz. Eres hija/o

de Dios, el fundamento de tu aceptación está en Él, no en el ser humano Relacionarse con otras personas: El fundamento de todo conocimiento futuro

es entender y recibir amor sin condiciones de Dios, no tienes que hacer cosas para que Dios te acepte algún día. Eres completamente aceptado por Dios tal y como eres. Nuestras acciones y obras deben responder al amor que Dios nos tiene y no ser un intento de ganarnos Su favor. Hallar que somos aceptados en Cristo sirve también de base para nuestras relaciones con el prójimo. (lee Ro.12:7 al margen) Nuestra necesidad de ser aceptado y de pertenecer son legítimas, dadas por Dios. Pero si tratamos de satisfacerlas independientes de Dios, estamos condenados a cosechas la insatisfacción que conlleva vivir por si mismo. (lee 1Pedro 2:1-5, al margen) Buscar la aprobación en el prójimo y no en Cristo, hace que al carecer aceptación de ellos, se empiecen a pensar tácticas y estrategias para manipular a la gente o presentar una imagen falsa para ganar la aprobación. Cuando esto falla, se envidia a quienes parecen tener lo que no se tiene y la consecuencia lógica, calumniarlos para rebajarlos a su propio nivel.

Competencia innecesaria: No tienes que seguir sintiéndote amenazado por la gente y competir con ellos cuando sabes quién eres en Cristo, porque ya te sientes seguro y amado. Experimentaremos a veces, el rechazo de parte del prójimo, pero nunca seremos echados fuera por nuestro Padre celestial.

Sigue la oración

AMADO PADRE CELESTIAL: te ruego que abras mis ojos para que pueda conocer y recibir personalmente tu amor sin condiciones y tu aceptación. Renuncio a las mentiras de Satanás que cuestionan tu amor insistiendo que debo ganarme tu amor y aprobación. Opto por creer que soy aceptado por Cristo. Pido tu gracia para sostenerme cuando encaro el rechazo de la humanidad y que me capacites para resistir la opresión de mis semejantes que me tienta a transigir. Te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.

Versículo para

MEMORIZAR

Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en

su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;

los cuales no son engendrados de sangre, ni de

voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de

Dios. Jn. 1:12-13

Por tanto, recibíos los unos a los otros, como también

Cristo nos recibió, para gloria de Dios. Ro.15:7

Eres producto de la obra de Cristo!!!

Eres aceptado por Cristo!!!

Desechando, pues, toda malicia, todo engaño,

hipocresía, envidias, y todas las detracciones, desead,

como niños recién nacidos, la leche espiritual no

adulterada, para que por ella crezcáis para salvación,

si es que habéis gustado la benignidad del Señor.

Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente

por los hombres, mas para Dios escogida y preciosa,

vosotros también, como piedras vivas, sed edificados

como casa espiritual y sacerdocio santo, para

ofrecer sacrificios espirituales aceptables a

Dios por medio de Jesucristo. 1P.2:1-5

1

Page 2: Viviendo Libre en Cristo 1

“Viviendo libre en Cristo” Discipulado Iglesia Evangélica Bautista “Visión de Reino” Departamento de jóvenes VI.A, 7 de Junio del 2009

Soy hijo de Dios

Lo que más importa creer de nosotros mismos es que somos hijos de Dios y que ser su hijo es un derecho que nos es dado por el mismo Dios.

¿Sigo siendo hijo?: ¿hubo algo que yo pudiera haber hecho para deshacer mi

relación con mi padre terrenal una vez que nací? ¿Seguí yo siendo su hijo si él me echaba de su casa, si trataba de desheredarme? Sí, seguía siéndolo porque estábamos emparentados por sanguinidad. Con Dios es lo mismo. Tuviste la opción de aceptarlo como tu Señor y Salvador, luego de esto por gracia eres salvo y entras en la familia de Dios, por lo tanto, ¿Hay algo que te pueda hacer perder el parentesco con tu Padre celestial? Personalmente creo que no, ¿Por qué? Porque estas emparentado por consanguinidad. (lee 1P. 1:18-19 al margen)

¿Me abandonará Dios?: No se trata realmente si yo opto o no, o si soy capaz o incapaz de mantener esa relación con Dios. La cosa radica en si Dios me abandonará u olvidará, o no, pues El prometió no hacerlo. Puedes optar por desobedecerle y dejar de vivir en armonía con el Padre Celestial, pero eso no afecta la relación de consanguinidad; en la medida que obedezcas a Dios; vivirás en armonía. Si piensas que la obediencia determina si sigues o no relacionado con Dios, entonces te sujetas al legalismo; somos salvos por gracia por medio de la fe, no por obras!!! Eso sí, debemos confiar y obedecer “El que ama, mi palabra guardará” (Jn. 14:23)

No somos salvos por la conducta que observamos; somos salvos por la manera en que creemos. (lee al margen 1Juan 3:1-3)

Este versículo sirve de base para la forma de vida en que llevamos. Nadie puede comportarse consistentemente si se contradice con la manera que se percibe a sí mismo.

Hijo del Padre Celestial: Cuando Jesús le enseñó a orar a los discípulos comenzó con el “Padre nuestro”. Padre significa una persona, una relación, significa alguien que podamos conocer. Al dirigirnos de esa forma a nuestro Padre celestial mostramos intimidad. Si Él es nuestro Padre entonces nosotros tenemos que ser sus hijos. ¿Tienes esta seguridad?, si no la tienes, ¿Por qué no la arreglas esto ahora mismo? El diablo puede venir a decirte “¿Qué derecho tienes para llamarte hijo de Dios?” Renuncia a eso por ser una mentira, porque la verdad es que Dios te ha dado ese derecho!!!

No es un derecho que te hayas ganado; Juan 1:12 dice que Él te la dio.

Si nunca has estado seguro de tu relación con Dios sigue la siguiente oración: AMADO PADRE CELESTIAL, te agradezco por morir en la cruz tomando mi lugar y

mi pecado en ti. Me doy cuenta que no podría tener relación alguna contigo si me basara en mis obras. Te agradezco que soy perdonado en Cristo y, ahora mismo, si nunca lo hice antes, te recibo en mi vida. Creo que Jesús murió por mi pecado, fue resucitado al tercer día y, ahora, confieso con mi boca que Jesús es el Señor.

Vengo a Ti como hijo Tuyo. Te agradezco por darme vida eterna. Renuncio a toda mentira de Satanás que me dice que no tengo derecho a ser llamado hijo Tuyo; te agradezco que Tú me hayas dado ese derecho. Ya no confío más en mí; mi confianza está Ti y en que soy salvo por lo que Tú has hecho por medio de Cristo en la cruz, no por algo que yo hubiese hecho. Ahora me acepto como hijo de Dios debido a la dádiva gratis que Tú me has dado. Recibo alegremente esa dádiva y la acepto por toda la eternidad. Oro en el nombre de Jesús amén.

Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en

su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios;

los cuales no son engendrados de sangre, ni de

voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de

Dios. Jn. 1:12-13

Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana

manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros

padres, no con cosas corruptibles, como oro o

plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de

un cordero sin mancha y sin contaminación, 1P. 1:18-19

Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que

seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no

nos conoce, porque no le conoció a él. Amados, ahora

somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos

que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él,

porque le veremos tal como él es. Y todo aquel que tiene

esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como

él es puro. 1 Juan 3:1-3

El Padre te dio el

derecho de ser su hijo

2

Page 3: Viviendo Libre en Cristo 1

“Viviendo libre en Cristo” Discipulado Iglesia Evangélica Bautista “Visión de Reino” Departamento de jóvenes VI.A, 7 de Junio del 2009

Soy amigo de Cristo

¿Qué es un amigo?: Un amigo es alguien que te invita a su intimidad confidencial. La amistad es una relación recíproca. Un amigo es alguien que te ama, que toma en cuneta tus intereses, que está a tu lado en tus peores momentos y que se sacrifica para satisfacer tu necesidad.

Jesús, el amigo definitivo: En Cristo tienes el mejor amigo que podrías tener. Muchos podrán abandonarte durante las épocas tempestuosas, pero Jesús te invita a acercarte a Él. Jesús dice en Jn.15:12-17 que ya no eres más un siervo que sólo obedece ordenes sin entender el propósito. Jesús lleva a SUS amigos a SU intimidad (lee Juan 15:15; 16:13-15). Jesús se nos revela… lo conocemos… Nos invita a acercarnos… Él es amigo que permanece más cerca que un hermano, Aquel que se queda con nosotros en la adversidad. Él dio su vida intencionalmente por nosotros, se sacrificó ”En esto hemos conocido el amor, en que Él puso la vida por nosotros”(1Jn. 3:16) Jesús es tu amigo porque Él optó por ser amigo tuyo. Él te escogió a ti.

¿Cómo puedo ser amigo de Cristo?: ¿Cómo puedo ser recíproco en nuestra relación? Volvamos a ver qué hace un amigo. Lo más importante es que te reveles a Dios, ser totalmente honesto con Él, caminar en la luz y descargarse ante Él, sabiendo que el Señor te ama y toma en cuenta tus intereses. ¿Qué desea y requiere profundamente Él? No sólo que lo amemos por sobre todo lo demás sino también que amemos a quienes nos rodean. “Y nosotros tenemos este mandamiento de él. El que ama a Dios, ame también a su hermano” (1Jn. 4:21)

¿Qué significa amar a un hermano como amigo?: Primero debemos ser reales. Esto significa que debemos ser tal cuales, sin caretas con nuestros amigos, ser honestos, a pesar de que en muchas ocasiones seamos heridos por el otro, debemos amar sin condición. Y segundo debemos perdonar, como no vivimos con gente perfecta, ser real nos exige perdonar como Cristo a perdonado (Ef.4:32). La falta de perdón es el cimiento principal que abre la puerta de la iglesia a Satanás, pues el perdón ayuda a que las personas encuentren su libertad en Cristo. El diablo denuncia cuando los cristianos pelean o abrigan rencores y se separan unos de otros.

Perdonarse uno mismo: Resulta muy difícil perdonar y amar al prójimo sin perdonarse ni amarse. Cuando uno se perdona, sencillamente se pone de acuerdo con Dios y recibe su perdón. La falta de perdón hace que la persona no perdonada esté en una cárcel, donde sólo un haz de luz le puede llegar. Cuando damos el perdón a otros o a nosotros mismos ofrecemos libertad de la prisión, haciendo que la luz en toda su plenitud nos toque. Nos liberamos de enfermedades, de pensamientos tormentosos y cambia nuestra forma de vivir y enfrentar el futuro en Cristo.

Si tienes conflictos con este punto ¿Por qué no los arreglas de una buena vez? Te invitamos a realizar la siguiente oración:

AMADO PADRE CELESTIAL: ¡qué privilegio llamarte Padre; cuán agradecido estoy que me hayas elegido para ser tu amigo! Renuncio a la mentira de que no soy digno de ser Tu amigo porque Tú me haces digno. Renuncio a la mentira de que todos son Tus amigos excepto yo. Anuncio la verdad que yo también soy Tu amigo porque Tú me has elegido. Desde hoy en adelante, quiero expresarte mi amor siendo sincero y honesto contigo sobre mí mismo y amando y siendo real con los hermanos. Gracias por este privilegio, gracias por llamarme, gracias por elegirme. Te lo digo en el precioso nombre de Jesús. Amén.

Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros,

como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. Vosotros sois

mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os

llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su

señor; pero os he llamado amigos, porque todas las

cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. No

me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a

vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca;

para que todo lo que pidiereis al Padre en mi

nombre, él os lo dé. Esto os mando: Que os améis unos a

otros. Juan 15:12-17

Jesús es tu amigo porque Él optó por ser

amigo tuyo.

Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos,

perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en

Cristo. Ef.4:32

3