vida consagrada - agonia u oportunidad

4
20/03/14 10:51 Revista Vida Pastoral - SAN PABLO Página 1 de 4 http://www.san-pablo.com.ar/vidapastoral/includes/articulos/imprimir.php?id=132 Revista Vida Pastoral - Año XLIV - Nº 248 - JULIO / AGOSTO 2004 Comunidad, carismas y ministerios Gerardo Daniel Ramos Crisis de la vida consagrada: ¿agonía u oportunidad? El presente artículo ahonda en las posibles causas de la crisis en la vida consagrada y sugiere el tránsito de senderos para la resignificación de la misma. Los indicadores de la crisis No hace falta explayarse demasiado en explicar por qué la vida religiosa tradicional está en crisis pues ya muchos lo han venido haciendo, y así la temática se ha convertido en campo trillado. Constataciones irrefutables Los modelos institucionales clásicos ya no responden a la nueva mentalidad global, más individual y subjetiva, amante de la experiencia personal y dueña autónoma de su propia libertad. La dificultad que muchos institutos religiosos experimentan para refundarse o inculturarse en el nuevo dinamismo cultural los hace percibirse a sí mismos como anacrónicos o anquilosados. Por otra parte, la identidad de cada uno de sus miembros y comunidades tiende a desdibujarse, funcionalizándose y perdiendo significancia evangelizadora. En muchos ámbitos cunde el desaliento y la resignación. La presencia de religiosos/as en colegios, por ejemplo, es en muchos casos irrelevante, y las experiencias de comunidades insertas que en los ‘70-‘80 se vieron florecientes, hoy han entrado en crisis. Ante la progresiva disminución de miembros, los superiores se ven obligados a "hacer malabarismos" –no siempre bien recibidos por sus hermanos– para conformar comunidades con un mínimo de "decoro". En contrapartida, los permanentes e improvisados cambios de funciones y acumulación de tareas sin los suficientes tiempos de preparación, descanso o discernimiento generan profundos desgastes psicoespirituales en las personas consagradas, que terminan agotadas. Un termómetro contundente muestra a las claras lo que está ocurriendo: no sólo ingresan pocas "vocaciones", sino que muchas de las que habían ingresado desertan. No puede engañarnos en este diagnóstico las aparentemente sorprendentes estadísticas de algún instituto de cuño restaurador que se retrotrae en sus modos de "reclutamiento vocacional" a los métodos anteriores al Vaticano II (¿Pan para hoy y hambre para mañana?). Una primera reacción Nunca me gustó resignarme a que las cosas sean simplemente como son sin un espacio lúdico mínimo como para soñar la utopía. Creo que es la misma fe la que nos invita siempre a procurar descubrir lo "inédito de Dios" en cualquier tiempo presente, convirtiéndolo en tiempo de salvación. Estoy convencido de que aún hoy

Upload: sergioraul

Post on 08-Sep-2015

6 views

Category:

Documents


1 download

DESCRIPTION

vida consagrada

TRANSCRIPT

  • 20/03/14 10:51Revista Vida Pastoral - SAN PABLO

    Pgina 1 de 4http://www.san-pablo.com.ar/vidapastoral/includes/articulos/imprimir.php?id=132

    Revista Vida Pastoral - Ao XLIV - N 248 - JULIO / AGOSTO 2004

    Comunidad, carismas y ministerios

    Gerardo DanielRamos

    Crisis de la vida consagrada: agona u oportunidad?

    El presente artculo ahonda en las posibles causas de la crisis en la vida consagraday sugiere el trnsito de senderos para la resignificacin de la misma.

    Los indicadores de la crisis

    No hace falta explayarse demasiado en explicar por qu la vida religiosa tradicionalest en crisis pues ya muchos lo han venido haciendo, y as la temtica se haconvertido en campo trillado.

    Constataciones irrefutables

    Los modelos institucionales clsicos ya no responden a la nueva mentalidad global,ms individual y subjetiva, amante de la experiencia personal y duea autnoma desu propia libertad. La dificultad que muchos institutos religiosos experimentan pararefundarse o inculturarse en el nuevo dinamismo cultural los hace percibirse a smismos como anacrnicos o anquilosados.

    Por otra parte, la identidad de cada uno de sus miembros y comunidades tiende adesdibujarse, funcionalizndose y perdiendo significancia evangelizadora. En muchosmbitos cunde el desaliento y la resignacin. La presencia de religiosos/as encolegios, por ejemplo, es en muchos casos irrelevante, y las experiencias decomunidades insertas que en los 70-80 se vieron florecientes, hoy han entrado encrisis.

    Ante la progresiva disminucin de miembros, los superiores se ven obligados a"hacer malabarismos" no siempre bien recibidos por sus hermanos para conformarcomunidades con un mnimo de "decoro". En contrapartida, los permanentes eimprovisados cambios de funciones y acumulacin de tareas sin los suficientestiempos de preparacin, descanso o discernimiento generan profundos desgastespsicoespirituales en las personas consagradas, que terminan agotadas.

    Un termmetro contundente muestra a las claras lo que est ocurriendo: no sloingresan pocas "vocaciones", sino que muchas de las que haban ingresado desertan.No puede engaarnos en este diagnstico las aparentemente sorprendentesestadsticas de algn instituto de cuo restaurador que se retrotrae en sus modos de"reclutamiento vocacional" a los mtodos anteriores al Vaticano II (Pan para hoy yhambre para maana?).

    Una primera reaccin

    Nunca me gust resignarme a que las cosas sean simplemente como son sin unespacio ldico mnimo como para soar la utopa. Creo que es la misma fe la quenos invita siempre a procurar descubrir lo "indito de Dios" en cualquier tiempopresente, convirtindolo en tiempo de salvacin. Estoy convencido de que an hoy

  • 20/03/14 10:51Revista Vida Pastoral - SAN PABLO

    Pgina 2 de 4http://www.san-pablo.com.ar/vidapastoral/includes/articulos/imprimir.php?id=132

    es factible recrear el modo de vivir los valores del Reino que otrora alumbr sentidosy estilos de vida diversos. Porque en realidad me parece que lo que est en crisis y"agotado" no es la vida consagrada, sino una forma obsoleta de plantearla y vivirla.Y gracias a Dios, hoy la teologa nos est permitiendo replantear con "fidelidadcreativa" esta cuestin.

    Buscando lo esencial en la historia

    La vida consagrada nace del empeo creyente por vivir la radicalidad de la fe,reproduciendo en un determinado momento histrico el estilo de vida de Jess:desde su experiencia filial, en apertura incondicional al Padre y desde la docilidadabsoluta al Espritu que lo conduce al desierto de lo inexplorado e inaudito. En estemarco fundamentalmente trinitario, los primeros anacoretas ermitaos (de eremos =desierto) incluyeron de un modo indisociado a su oracin ininterrumpida laconsideracin del prjimo: no slo como destinatario de su propia caridad yabnegacin, sino tambin como compaero de camino. Y as surgieron los cenobios.La vida consagrada, tanto en oriente donde naci como en occidente donde seinstitucionaliz estuvo marcada por esta experiencia comunitaria.

    Pero adems, los estilos de vida que sucesivamente fueron floreciendo, sobre todoen momentos de transformacin socio-cultural, fueron espacios salvficos porquejustamente intentaron posicionarse y responder a los desafos epocales que les tocvivir: los monasterios benedictinos en el marco agrario medieval; las comunidadesmendicantes en los albores de la vida urbana moderna; la Compaa de Jess anteel nuevo mapa del mundo y los desafos de la cultura moderna; los Hermanitos deJess ante la constatacin de ncleos humanos no cristianos o simplemente pobres yexcluidos.

    Por dnde renovar hoy el significado de la vida consagrada, llamada a ser "parbolaexistencial del Reino"? Cules son las nuevas sensibilidades que a la par que laponen en crisis le dan ocasin de renovacin y vida?

    Cuatro senderos en perspectiva pascual

    Creo que una mirada atenta a nuestro contexto socio-cultural nos permite identificarcuatro vetas, surcos o senderos pascuales a transitar que terminan abarcando otrascuestiones afines que hacen a nuestra poca.

    La sed de nuevas experiencias religiosas

    Hoy las personas quieren tener o hacer experiencias religiosas. Hay sed designificados trascendentes que "salven" de la frivolidad ligth postmoderna. Se buscade un modo imperioso entretejer una trama de sentido en la propia vida, al menosde un modo simblico y tal vez hasta precario. Se abre as un campo inmenso en elshopping de los nuevos grupos y movimientos religiosos para quienes procuramosofrecer un testimonio de bsqueda y experiencia teologal del Absoluto, siempre"fascinante y tremendo".

    La religiosa y el religioso podrn revisar, desde esta bsqueda generalizada de loshombres y mujeres de hoy, la autenticidad de su vivencia y preguntarse: Ofrezcoun testimonio de "excelencia" a partir de mi propia existencia gratuita y gozosa enDios? Convierto este ncleo de vivencia teologal en el centro de mi vida eintereses? Contribuyo positivamente a que otros puedan ir haciendo esta mismaexperiencia transfiguradora?

    El anhelo de vnculos profundos

  • 20/03/14 10:51Revista Vida Pastoral - SAN PABLO

    Pgina 3 de 4http://www.san-pablo.com.ar/vidapastoral/includes/articulos/imprimir.php?id=132

    Ante la precariedad de las relaciones humanas, reducidas generalmente a lofuncional y provisorio, renace la nostalgia por establecer vinculaciones de "gruesocalibre". Frente a la desconfianza que por principio tiende a primar ante los nuevosencuentros, surge imperiosa la necesidad de poder confiar y abrirse a los dems. Decara a las muchas veces recprocas seducciones y manipulaciones egostas en elplano sexual, se desean vnculos profundos, estables y entraables.

    En qu sentido los consagrados son capaces de ofrecer en su vida espacio fraterno?Somos capaces de hacerle espacio a las/os otras/os? Contribuimos a que quienesnos rodean descubran el gusto por establecer vinculaciones libres y abiertas?

    Frente al paradigma de la exclusin

    La gran mayora de los habitantes de este planeta compartimos un temorinsoslayable y casi endmico: el de quedar afuera, excluidos, "cados del mundo". Elmodelo neoliberal imperante, materialista y altamente competitivo, parece sugerir elsmil de "un embudo": cada vez hay menos espacio y oportunidades para lossegundos; cada vez ms se lleva todo el top one. Un modelo ciertamentedeshumanizante para todos los que participan de este juego inicuo, sea que ganen opierdan.

    Frente a estas realidades que todos de algn modo padecemos y que conducen amuchos a la depresin, las personas consagradas podemos preguntarnos: Hastaqu punto nuestros institutos ofrecen un modelo alternativo, socialmente creble einterpelador de "otro mundo posible"? Hasta qu punto nuestros trabajos ydedicaciones no nos impiden en la prctica estar humanamente disponibles paraquien se siente "explotado y deprimido", y tener "el gesto y la palabra oportuna"?Hasta qu punto el modo de gerenciar nuestras vidas muy ocupadas en "cosas" ypoco en "personas" nos permite asumir "los gozos y esperanzas, tristezas yangustias" de la gente, y especialmente de los ms pobres (ancianos, desempleados,enfermos, excluidos, menesterosos)?

    Ante el desafo de lo diferente

    Una ltima veta que culturalmente desafa y estimula a las formas emergentes devida consagrada es la de lo diferente. Dado que existe un profundo temor a laexclusin, la tendencia general es la desconfianza frente al otro o a lo otro. Esto serefleja en la mentalidad del country que establece muros separadores entre zonasresidenciales y entornos sociales hostiles; en los ghettos impenetrables yamenazadores que se constituyen en zonas perifricas y villas de emergencia; en losinescrupulosos lobbies empresariales y financieros de los grandes gruposeconmicos; en el corporativismo poltico y policial que hacen casi imposiblecualquier "depuracin" seria; en el etnocentrismo racial que desconfa de la gente deotro color o de otro lugar, y que motiva las crecientes trabas inmigratorias o inclusola posibilidad para conseguir una visa turstica en algunos pases del llamado primermundo.

    La vida consagrada ha sido a lo largo de la historia un puente establecido entre lodiverso. Muchas de nuestras comunidades son internacionales, compuestas porgente proveniente de diferentes estamentos sociales y variados modos de pensar.Podemos preguntarnos: Cmo optimizar estos mecanismos de intercambio ycomunin, de modo que sean un signo elocuente para "un mundo dividido porguerras y discordias"? Cmo hacer para que nadie quede excluido "ya desde elvamos" de la posibilidad de vivir un estilo de vida fraterno teniendo evidentementecualidades psicoespirituales para hacerlo por cuestiones meramente culturales?

    A modo de conclusin

  • 20/03/14 10:51Revista Vida Pastoral - SAN PABLO

    Pgina 4 de 4http://www.san-pablo.com.ar/vidapastoral/includes/articulos/imprimir.php?id=132

    Muchas veces lo que parece obstculo es en realidad desafo, y lo que parecefrontera es, mejor considerado, acceso. Cuandomiramos con ojos de fe las aparentes prdidas yfrustraciones que las personas consagradas hemos idoviviendo en relacin a la misma historia de nuestrosinstitutos, o del mismo "deterioro" de nuestrasexpectativas personales, podemos llegar a ser capacesde avizorar cierta luminosidad pascual. Si as lohacemos, nos abrimos al mundo con entusiasmorenovado y esperanza. Y esa es hoy y ha sido siemprenuestra vocacin y misin especfica: contribuir arecrear la vida teologal en la Iglesia y el mundo.

    2014 SAN PABLO - Riobamba 230 - C1025ABF Buenos AiresTel. (011) 5555- 2400/2401 Fax (011) 5555- 2425

    www.san-pablo.com.ar