VALIDEZ Y CONFIABILIDAD DE LOS INSTRUMENTOS DE MEDICIÓN

Un instrumento de medición es un recurso o una técnica metodológica que

permite medir, recolectar información acerca de una variable psicológica,

existen diversas formas de agrupar a los ya famosos “test”, pueden ser según

su objetivo, la forma como se aplica, a la población que está dirigida, etc. La

construcción de estos instrumentos, es un proceso riguroso, objetivo, para ello

requiere de una base teórica, la cual nos permitirá operativizar la variable que

se pretende medir. La construcción de pruebas se caracteriza por la búsqueda

de la validez y confiabilidad. Pero surge la necesidad de responder las

siguientes interrogantes ¿Qué es medir? ¿Qué es la validez y confiabilidad?

¿Cómo se valida un instrumento de medición psicológica? ¿Cuándo es

confiable un instrumento de medición psicológica?

Empezaremos respondiendo sobre qué es medir, según Stevens (1951), medir

es asignar números, símbolos o valores a las propiedades de objetos de

acuerdo a ciertas reglas. Y para Carmines (1991) medir es un proceso de

vincular conceptos abstractos con indicadores empíricos. Podemos definir

entonces que medir consiste cuantificar las características de una determinada

variable.

En psicología se mide aspectos como la personalidad, inteligencia, actitudes,

que por lo general son constructos, es decir conceptos creados para referirse a

una característica del comportamiento que no se puede observar directamente

en la realidad, pero son inferibles a través de la conducta. Ahora es necesario

entender que es validez y confiabilidad, de acuerdo a Hernández, Fernández,

y Baptista (1998), la validez, es el grado en que un instrumento realmente

mide la variable que pretende medir, por ejemplo, un instrumento válido para

medir inteligencia debe medir la inteligencia y no la memoria. De igual forma

existen varios procedimientos para determinar la validez de un test, validez de

contenido se refiere al examen sistemático del contenido del test para

determinar si comprende una muestra representativa de la forma de conducta

que ha de medirse, el cual se realizara mediante un juicio de expertos. Otro

aspecto es la validez predictiva, la cual indica la efectividad del test en la

predicción de algún resultado futuro, también se considera a la validez

concurrente, la cual se refiere a la relación entre las puntuaciones del test y los

índices de status del criterio obtenido, aproximadamente al mismo tiempo, se

conoce como validez concurrente, por ejemplo, las puntuaciones altas

obtenidas en un test de inteligencia por un grupo de estudiantes universitarios

se contrastan con los buenos resultados académicos obtenidos por estos. Y la

última evidencia es la validez de elaboración o de hipótesis de trabajo.

Kerlinger (2002), señala que la confiabilidad es el grado en que un

instrumento produce resultados consistentes y coherentes. Es decir en que si

aplica la prueba en momentos diferentes al mismo sujeto, se obtiene resultados

iguales. Por ejemplo, si una persona obtiene un CI de 110 en la primera

aplicación y días después 80 al repetir el test, es obvio que esas puntuaciones

ofrecen poca confianza y por ende, el instrumento de medida utilizado carece

de fiabilidad. Pero ¿Cómo se logra que un test es confiable? Existen varias

formas de lograr que un test sea confiable, para un cuestionario se utiliza el

índice de Bellack, para lo cual se debe aplicar dos veces un cuestionario a la

misma persona en un corto período de tiempo, luego se obtiene el índice de

Bellack, el cual consiste en dividir los números de acuerdos por cien, entre la

suma de aciertos y desacuerdos, según Pourtois (1992), considera que el

instrumento es confiable si el índice de Bellack resultante es superior al umbral

arbitrario de 80. Otra manera de evaluar la confiabilidad es a través de del

cálculo de la medida de estabilidad por la vía del test-retest. Según Pérez

(1998), en este procedimiento un mismo instrumento es aplicado en dos

oportunidades o más a un mismo grupo de personas, después de cierto

período de tiempo. Si la correlación entre los resultados de las diferentes

aplicaciones es altamente positiva, el instrumento se considera confiable. El

valor de la correlación es un valor ubicado entre el –1 y 1. El cálculo de este

coeficiente se utiliza para mediciones de variables o dimensiones que

responden a una escala de medición de intervalo o razón. Es importante que

para la aplicación de esta prueba, se tome un lapso de tiempo lo

suficientemente largo para que los sujetos se olviden de lo que contestaron y,

por el otro, no tanto que se produzcan cambios importantes. Este tipo de

medición se utiliza en investigaciones cuantitativas. Y la forma que más se

utiliza es el Coeficiente alfa de Cronbach el cual permite determinar la

confiabilidad; utilizando la fórmula, si el resultado es 0.80 o más se considera

aceptable el instrumento. El cálculo del coeficiente de confiabilidad Alfa de

Cronbach se utiliza para mediciones de variables o dimensiones que

responden a una escala de medición de intervalo o razón.

Podemos concluir que la construcción de prueba está orientada y tiene como

objetivo alcanzar los niveles más altos de confiabilidad y validez, ya que de ello

depende de ser usado por la comunidad científica. Por ello se debe conocer

sobre confiabilidad y validez.

BIBLIOGRAFÍA

Hernández, Fernández, Y Baptista (1998) “Metodología De La Investigación

científica”.

Kerlinger, F. (1975). “Investigación Del Comportamiento. Técnica Y

Metodología. México: Interamericana

Perez (1998), “Teoría Y Métodos Para La Construcción De Escalas De

Actitudes”. Editorial Buenos Aires.

Stevens, S.(1951) Handbook Of Experimental Psychology Wiley. N. York.