valencia un gran mundial:maquetaciÛn 1 · 2010. 1. 27. · mucha juventud entre los guar-dianes...

4 abril 2008 l atletismo español

Mundial de Valencia 2008

60m: Fasuba al fin medallaCierto es que 60m son idénticos en cual-quier latitud, pero el nigeriano Olusoji Fa-suba, 23 macizos años, no quiso desdeñarel factor campo y no desaprovechó laoportunidad de competir en el lugar delos hechos justo un mes antes del magnoevento. Los 6.51 que lograra en el mitin, aapenas dos centésimas de su primado per-sonal, le satisficieron tanto que en la finaldel Mundial se limitó a hacer un “copia-pega” que le catapultó, desde su 5º pues-to de Moscú 2006, a lo más alto del cajón.No podía ser de otra manera siendo su ma-dre, jamaicana, prima del campeón olím-

Por tercera vez en la historia, la máxima citauniversal bajo techo recaló en suelo español;tras los Mundiales organizados por Sevilla(1991) y Barcelona (1995), Valencia acogió la 12ªedición, en la que el primer récord se batióincluso antes del primer pistoletazo, y es que,aún en año olímpico, nada menos que 159 paísesacudieron a la competición, en la que la rusaYelena Soboleva batió su propio récordmundial de 1.500 femeninos con unos espeluz-nantes 3:57.71 en la mejor carrera de la historia.Por parte española, Juan Carlos Higuero salvó elorgullo patrio con su bronce, también en1.500m, lo que suponía un merecido broche deoro a su amplísima trayectoria bajo techo. Otranota positiva fue el hecho de que con gran ante-lación al evento no quedaran ya localidadesdisponibles. Valencia quedará siempre marcadapor haber albergado la última aparición en pis-ta cubierta de una leyenda viva, María Mutolay por la maldición de las vallas, donde los abru-madores favoritos, Dayron Robles y Susana Ka-llur, por diferente casuística, no alcanzaronsiquiera las semifinales

Hombres

12º Campeonato del mundo en pista cubiertaValencia 7, 8 y 9 de marzo

Un gran mundial

Por : Emeterio Valiente: Fotos: Miguélez

Gran renovación de campeones,hasta el punto de que ninguno delos 12 oros individuales de Moscúrepitió éxito, si bien sólo 4 de elloslo intentaron (Francique/400,Rybakov/altura, Walker/pértigay Hoffa/peso) y dos vencedoresde Valencia ya lo habían sido conanterioridad (Holm y Cantwell).Mucha juventud entre los guar-dianes del oro, con 8 de los 12campeones no habiendo cumpli-do aún los 25 años y sólo el sue-

co Holm como treintañero yquien, con 4 oros ya en el zurrónsólo cede ante Ivan Pedroso (5) enel apartado de oros masculinos.El dominio africano en mediofon-do (800, 1.500 y 3.000) fue abru-mador, maravillando además losnuevos y tiernos monarcas, (Kaki,Mekonnen y Tariku Bekele) queapenas promedian 20 años. El úni-co doblete lo protagonizaron lospesistas de Estados Unidos, Cant-well y Hoffa.

Valencia Un Gran Mundial:Maquetación 1 27/01/10 9:15 Página 2

5abril 2008 l atletismo español

pico de 200m en Montreal 76, Don Qua-rrie. Además, el plusmarquista de la disci-plina, Maurice Green presente en el veló-dromo, había vaticinado segundos antesdel pistoletazo final el éxito de Fasuba,quien tras su amargo 4º puesto en los 100de Osaka, al fin alcanzaba una gran meda-lla, inauditamente ausente hasta ahora enun atleta que acredita 6.49 y 9.85 en las dosdistancias más impacientes del programa.Original como él solo, Fasuba y ya con elbronce del 4x100 olímpico de Atenas enel bolsillo, puso un anuncio a través del“IAAF Forum” para encontrar entrenador,respondiendo a su petición un francés, Pie-

rre-Jan Vazel, quien también ejerce comocorresponsal de prensa de la IAAF en esepaís. El olfato de Green fue tal que tam-bién acertó el resto del podium, apostan-do por dos velocistas de más lustroso pa-sado que presente: el británico Chambers,que volvía tras cumplir su sanción por do-paje y sus “bolos” norteamericanos, comoplata y Kim Collins de St. Kitts y Nevis co-mo bronce. Finalmente, ambos fueron ga-lardonados con la plata merced a su em-pate en 6.54, marca personal de Chambers,quien siempre guardará un grato recuer-do de nuestro país, pues en Sevilla 99 y enValencia ha conseguido sus dos preseas in-dividuales a nivel mundial.

400m: Christopher vencepacientementeEl canadiense Tyler Christopher no acusósu condición de neófito en pista cubierta yes que el bronce mundialista de Helsinki2005 sólo debutó en el atletismo de bolsi-llo sobre sus predilectos 400m el 16 de fe-brero de 2008, por lo que las dos rondasprevias a la final, en las que ya se antojabael más poderoso, no dejaron de ser un mag-nífico banco de pruebas de cara al momen-to de la verdad. Llegado el mismo, el suecoJohan Wissman y el bahameño Chris Brownse pegaron literalmente por la calle libre,alcanzada en unos frenéticos 21.10 -pocosinstantes tan intensos hay en pista cubier-ta como esa colisión de obuses al paso porla campana, mientras Christopher -que vioa Jeremy Wariner por Valencia y sólo respi-ró cuando comprobó que no calzaba cla-vos sino unos horteras y gigantescos zapa-tos blancos- esperó paciente su momentoy en la breve recta de meta aún tuvo tiem-

Tyler Christopher




po y energía suficientes para doblegarabrumadoramente al dúo que le habíaderrotado diez días antes en Estocolmo.El canadiense, que ya llegaba con la me-jor marca del año, llevó la misma hasta45.67, mientras Wissman ¡qué paso másinusualmente exitoso del 200 al 400! re-sistió hasta el epílogo el acoso de Browny tuvo el doble premio de la plata y debatir el récord sueco (46.04) mientras elbahameño hubo de contentarse con igua-lar su plata moscovita.

800m: Día 1 después de Kaki Ha nacido una estrella. Con cacofonía,eso sí, pero estrella a la postre. Los de-más sudan, y él haciendo honor a suapellido, lo tiene “chupao”. AbubakerKaki Khamis, que así se llama el indivi-duo, maravilló al entendido públicodel mediterráneo con una final de an-tología, en la que nadie se acordó deilustres ausentes como Borzakovskiy -sólo presente en el 4x400- o el enton-ces vigente campeón Bungei, lesiona-do en vísperas del evento. El júnior -osi no lo fuera, ¿qué más da?- sudanés,que ya aterrizó en Valencia con la vitolade ser uno de los favoritos, ejecutó el planmaquinado por su técnico, que simple-mente consistía en visionar los videos delgran Joaquim Cruz y repetir la jugada. Consucesivos pasos de 24.92 (200), 51.26 (400)y 1:18.28 (600) Kaki no cedió el lideratoun solo instante y tan sólo una plata olím-pica como Mbulaeni Mulaudzi fue capazde inquietarle y apurarle hasta el final. Sucrono fue espectacular (1:44.81) por 1:44.91del sudafricano, que ya sabe cómo se lasgasta su vecino de arriba. Quizás no escasualidad que Kaki naciera en 1989, jus-to el año en que el keniata Paul Ereng es-tableciera -y de qué manera- el entoncesrécord universal en el Mundial de Buda-pest, por cierto tres centésimas más len-to que Kaki ahora… mientras Yusuf SaadKamel -hijo de Billy Konchellah, campe-ón mundial de la distancia en Roma 1987-otorgaba a su Bahrein de adopción un ca-rísimo bronce con 1:45.26. La generosidadde Kaki se ilustra en el hecho de que noquiso percibir remuneración alguna porlos efectos colaterales de su actuación,cuales fueron que los otros cinco finalis-tas batieron sus registros, con el letónMilkevics doblegando apuradamente al

ruso Bogdanov (1:45.72/1:45.76) para re-petir así su chocolate de Moscú. Kaki seconvirtió en el más tierno ganador (18años y 262 días) en la historia de los Mun-diales y su crono le aúpa a la 5ª plaza dela lista de todos los tiempos. Sus próxi-mos planes pasan por asaltar el récorddel mundo júnior al aire libre que poseeel keniata Japheth Kimutai con 1:43.64.

1.500m: Mekonnen aprendetáctica

Lo que faltaba para el duro. Claros domina-dores ya del 5.000, 10.000, 3.000 obstácu-los, cross y con éxito keniata también en el800, resulta que el 1.500 era el único terri-torio que les faltaba por conquistar a etío-pes y keniatas en el medio-fondo y el largoaliento. A pesar del triunfo de Gebrselassieen Maebashi 99, del oro olímpico de Ngenyen el 2000 y de frecuentes “marcones” pordebajo incluso de 3:30 al aire libre, lo cier-to es que el día “D” a la hora “H” su escasainteligencia táctica les jugaba malas pasa-das, circunstancia que han aprovechado bienlos Cacho, Silva y Heshko para engordar sushistoriales. Pero hete aquí que Valencia pue-de marcar un punto de inflexión a ese res-pecto. Con nueve finalistas que no tenían

desperdicio alguno -sólo al marroquí Ba-ba se le podía descartar como medallis-ta- el 1.500 deparó un inolvidable espec-táculo, en el que encabezó primero el lí-der de la lista del año, Daniel KipchirchirKomen para ser relevado por el futurocampeón Mekonnen en el 300 y por Ba-ba en el 700, que inyectó algo de mús-culo al ritmo (2:29.34 por el 1.000). JuanCarlos Higuero se batía el cobre dentrodel grupo, con los inevitables codazoscuando confluyen más de media doce-na de fieras hambrientas, mientras Artu-ro Casado, que dejó cariacontecidos asus seguidores tras clavarse en la últimavuelta de su semifinal y ser repescado“in extremis” por tiempos, optaba pormantenerse a cola del furgón sorteandolos rastros de sangre de la cruenta bata-lla que se libraba 10 metros por delante.Fue a falta de dos vueltas cuando, de unatacada, Arturo se colocó sabia y hábil-mente en posición de bronce, tras Me-konnen y Komen. Los últimos 100m fue-ron antológicos: Higuero, que marchabaaún 6º, hizo un 2x1 en la recta, adelan-tando a Willis y Ramzi, maniobra que ya

le otorga la categoría de “the lion” y apare-ciendo amenazante en el retrovisor de Ar-turo, que perseguía, con denuedo pero sinéxito, a Mekonnen y Komen. La estampa a20m del final, con Higuero ganándole infi-nitesimalmente terreno a Arturo en unacontienda fratricida sin concesiones, ha en-grosado ya los anales del campeonato. Me-konnen se colgó el oro con 3:38.23, por3:38.54 de Komen, que repetía plata, mien-tras Higuero (3:38.82) ganó su primera me-dalla de espectro mundial y dejó a Arturocomo único coloso sin medalla por apenas6 centésimas, mientras Ramzi (3:40.26) y losdemás fueron generosamente batidos porel madrileño, cuya entrada en meta cayen-do al tartán bicolor avivó el recuerdo delEuropeo de Madrid 2005, cuando Reyes Es-tévez hizo de Higuero y le birló, aún conmás agonía que ahora, el bronce en el últi-mo suspiro. Fue un 1.500 que duró bastan-te más de 3:38.23, pues el campeón etíopefue descalificado por pisar por dentro dela calle 1 -lo que convertía a Higuero en pla-ta y aún más relevante, a Arturo en bronce-y sólo dos horas después la reclamación dela delegación etíope fue aceptada, lo queconvertía de nuevo en válido el veredictoque dictó el tartán.

Kaki Khamis




3000m: Mucho Bekele Cabe razonablemente concluir que, detrásde la decisión de Kenenisa Bekele de no dar-se una vuelta por Valencia, había dos razo-nes primordiales: una, pensando en el Mun-dial de cross de Edimburgo, evitar que el eri-treo Tadese le volviera a mojar la oreja yotra, de parecida enjundia, permitir que suhermano Tariku, líder del año con 7:31.09por delante del propio Kenenisa, se gradua-ra al máximo nivel y le sustituye-ra como monarca de la disciplina.La carrera amaneció lenta (2:48.58por el 1.000) antes de que el bron-ce olímpico de los 3.000 obstácu-los Paul Kipsiele Koech, aligerarala cadencia hasta cruzar los dosprimeros kilómetros en 5:25.71,parcial de 2:37.13. Fue a falta de700m cuando Tariku, 21 años re-cién cumplidos, asestó un cambiosostenido que masacró a uno desus más temidos contrincantes, elaustraliano Craig Mottram, que ados vueltas del epílogo sacó labandera blanca de rendición. Pordetrás de Tariku, Koech y Abra-ham Cherkos, el etíope que firma-ra la mejor marca júnior de la his-toria (7:38.03) en Stuttgart un mesantes, capeaban el temporal co-mo buenamente podían, pero el

endiablado ritmo de Bekele, que cubrió en¡2:22! los 1.000 postreros metros para mar-car 7:48.23 al final, les dejó arrasados, a Ko-ech (7:49.05) menos que a Cherkos (7:49.96),mientras el resto de náufragos del huracánBekele (Soi, Mottram, Farah) arribaron ameta a años luz del etíope. Una reflexiónfinal: de haber estado en pista Kenenisa pro-bablemente habría triunfado, pero la de-mostración de Tariku dejó la impresión de

que en el rango de distancias entre el 3.000y el 5.000 las diferencias entre ambos es-tán, como el dólar, en un mínimo histórico.

60mv: Xiang intimida a RoblesLa megaestrella de la disciplina en 2008, elcubano Dayron Robles, empezó a perder eloro mundialista cuando se anunció que elplusmarquista mundial y campeón del mun-do de 110m vallas, Liu Xiang, comparecería

Liu Xiang, ganó muy fácil la prueba de 60mv




a orillas del Turia… ¡sin haber competidouna sola vez en todo el invierno! En la rue-da de prensa celebrada 48 horas antes delsupuesto duelo, mientras el tranquilo chi-no comentaba que la cita se la tomaba co-mo si fuera una simple reunión, sin mayo-res pretensiones, el ya atormentado talen-to cubano, autor de las cinco mejores mar-cas del año coronadas por los impresionan-tes 7.33 de Stuttgart, admitía trémulo queXiang era el mejor y que ya había ganadolos títulos más importantes, mientras él os-tentaba marcas que quitan el hipo (registratambién 12.92 en 110v) pero “aún no he ga-nado nada”. ¡Menuda premonición! El sor-teo trajo la desgracia a Robles, que fue ali-neado en la misma serie que Xiang, a prime-ra hora de la mañana. Es fácil imaginar lasmanos sudorosas del cubano en los tacosintentando inútilmente dejar de pensar enXiang y concentrase en los suyo. El disparosonó y para la obnubilación de los allí reu-nidos, Robles se paró tras salir de tacos pen-sando que habría un segundo disparo en se-ñal de salida nula , pero lo cierto es queXiang acababa de realizar la mejor puestaen acción de su vida (0.105s) y eso acabó dedesconcertar a Robles, que corría por la ca-lle contigua. Tras darse cuenta de su colo-sal error, emprendió de nuevo la marcha enbusca de uno de los cuatro puestos que da-ban acceso a semifinales, pero no hubo mi-lagro en forma de caída masiva y el héroede Guantánamo se frotaba los ojos en me-ta creyendo estar padeciendo sólo un malsueño. El resto de la película, más previsi-ble, se resumiría en que Xiang ganó la pre-sea de oro que aún le faltaba (había sidobronce en 2003 y plata en 2004) con 7.46,muy lejos de los registros de Robles, mien-tras el incombustible estadounidense AllenJonson se llevó la plata a los 37 años y 7días con 7.55, convirtiéndose en el meda-llista de edad más provecta en la historiade la competición. Hubo dos bronces en7.60 para el letón Olijars y el ruso Borisov,que no confirmó por cierto los 7.44 con losque llegaba a Valencia.

Altura: Holm, ese pequeño giganteHay que reconocer que el sueco StefanHolm, que más que tobillos tiene muelles,es un tipo generoso. Tras abrazar el oro portercera ocasión consecutiva en Budapest04, y dado que el siguiente Mundial se ce-

lebraba en Moscú, cedió entonces la pol-trona a otro grande de la especialidad, Yev-geniy Rybakov, y elegantemente no le ad-virtió de que en la subsiguiente cita, Va-lencia, ya no habría bula. Por un momen-to, parecía que el concurso, que acabó sien-do excelente, iba a caer en la más absolu-ta mediocridad, pues el ruso brincó sobre2,30 a la primera y los otros siete saltado-res que continuaban en competición acu-mularon dos nulos cada uno. El estadou-nidense Andra Manson, el chipriota Kyria-

kos Iannou (bronce en Osaka) y Holm fran-quearon la altura a la tercera y mientraslos dos primeros acabaron así sus saltosexitosos compartiendo un bronce nada ca-ro en 2,30m, los dos patas negras se dispu-sieron a iniciar su particular partida de aje-drez. En 2,32 primero Rybakov y despuésel actual campeón olímpico triunfaron ensu primera tentativa. El ruso pudo con elsiguiente reto, 2,34, a la segunda lo que lle-vó a Holm, lastrado por sus nulos en 2,30,a no gastar más cartuchos en esa altura eintentar el 2,36… ¡que pasó a la primera! loque hizo palidecer a Rybakov, que acaba-ba de hacer nulo y reservó dos oportuni-dades para 2,38, que era la marca con laque acudía a Valencia. Tras su segundo nu-

lo, Holm se proclamó campeón y venga-ba de alguna manera la ausencia de su com-patriota y flamante plusmarquista mun-dial Susana Kallur, cuya ausencia en la ron-da decisiva de las vallas se anunció en eltranscurso del concurso. Con su cuarto oroy su ¡122ª! actuación sobre 2,30m ya en elzurrón Holm decidió atacar su marca per-sonal de 2,40m, lograda al conquistar eloro del Europeo de Madrid 2005. Tras losdos primeros intentos sobre 2,41, este gran-dísimo pequeñísimo (1,81) saltador se dio

cuenta de que no podría con ello y acabósu actuación, declarando que tras los JJ.OO.de Pekín se replanteará su futuro; si com-binamos sus 32 años con la retirada haceunos meses de su alter ego femenina Kaj-sa Berqvist, no pinta bien el tema…

Pértiga: Lukyanenko ¿elpróximo 6 metros?Otro juego de tácticas presenció la pérti-ga. Tres atletas continuaban vivos sobre 5,80:el vigente campeón Brad Walker (EEUU), elruso Evgeniy Lukyanenko, y el australianocampeón de la Commonwealth Steve Ho-oker, pero el norteamericano “sólo” regis-traba un mejor salto válido de 5,70, al no in-tentar 5,75 ni 5,80. La prueba parecía virtual-

Stefan Holm



mente decidida cuando, tras fallar una vezsus rivales, Walker franqueó 5,85 a la prime-ra, suspense incluido pues la varilla se mo-vía más que los precios. Lukyanenko res-pondió bien con un éxito en la segunda ten-tativa, mientras Hooker se reservó dos in-tentos para 5,90, altura en la que estuvo elnudo gordiano, pues mientras Walker, ob-sesionado con hacer el menor número desaltos posibles pues su forma física no erala idónea, renunció a ella, Lukyanenko lossaltó a la primera, logrando marca mundialdel año y personal a la vez; como Walker,que en 2006 se elevara por encima de 6,00mal aire libre, falló sus tres intentos sobre 5,95permitió la primera medalla gorda del ru-so, que anunció su firme intención de con-

vertirse en próximo miembro del exclusi-vo “club de los 6 metros” cuyo accionistamayoritario, Sergey Bubka, estaba presen-te en Valencia en su calidad de Vicepresi-dente 1º de la IAAF.

Longitud: Tomlinson ganó unconcurso mediocreLa ausencia por lesión de última hora de lanueva estrella de la especialidad, Irving Sa-ladino (8,42 días antes), lastró de maneradescomunal este concurso horizontal. Lacalificación ya hizo atisbar que la final te-nía todas las papeletas de convertirse en lamás paupérrima de la historia de los cam-peonatos (anterior, el alemán Dietmar Haaf,8,15 en Sevilla 91) y en ese sentido, no de-fraudó lo más mínimo. El británico ChrisTomlinson finalizó la cuarta tanda en cabe-za con 8,06 (sí, sí, han leído bien, ocho ceroseis en Valencia 2008) y sólo el sudafrica-no Godfrey Mokoena, 23 años cumplidosla víspera de la calificación, consiguió ate-rrizar más lejos, aunque tampoco se mos-tró muy espléndido con sus 8,08 de la quin-ta ronda, a los que Tomlinson no pu-do responder en sus dos últimos vue-los de rasante. El bronce se lo llevópuesto Mohamed Al Khuwalidi (Ara-bia Saudí), que tuvo el detalle de queal menos apareciese el guarismo 8(8,01 de su cuarto ensayo). Y pensarque el amigo Lamela se tuvo que con-formar hace nueve años con la platabrincando hasta 8,56…

Triple: Idowu cumple al finlas expectativasA sus 29 años, el británico Philips Ido-wu corría ya serio peligro de conver-tirse en la joven promesa que no aca-ba de explotar. Creció con la brutalresponsabilidad de suceder a Jona-than Edwards, también presente en elvelódromo y ese yugo insuperable lehabía acompañado hasta ahora. Perollegó la segunda ronda de la final, don-de el campeón de Europa de Birming-ham mató el concurso con 17,75m, su-perior incluso a su mejor prestaciónal aire libre (17,68). Idowu había oscu-recido injustamente el fenomenal ini-cio del cubano David Giralt, que en-ganchó dos esfuerzos medidos en 17,43y 17,47, mientras el rey del aire libre enOsaka, Nelson Évora, asistía alucina-do a esa opulencia métrica. El portu-

gués realizó tres saltos casi idénticos(17,26/17,27/17,26) y esa consistencia le re-portó el bronce, pues el italiano FabrizioDonato también alcanzó 17,27 en la cuartatanda, pero cedió ante Évora por mor delsegundo mejor salto del portugués(17,26/17,10).

Peso: Cantwell canta su venganzaFirmando una de las mejores series de dis-paros en la historia del campeonato, Chris-tian Cantwell recuperó el título de monar-ca de los 7,260kgs que ganó en 2004 y per-dió a músculos de Hoffa en Moscú. Si habíaun doblete más que probable en categoríamasculina, ese era el del peso y los estadou-nidenses no defraudaron y firmaron el úni-co 1-2 en hombres, mimético del que se dioen Budapest 2004. Todos los esfuerzos vá-lidos de Cantwell, hasta cinco, acabaron amás de 21 metros, por sólo uno de su ene-migo doméstico. Los iniciales 21,14 de Cant-well le proporcionaron un temprano lide-rato que Hoffa se encargó de quebrar con

Evgeniy Lukyanenko

Philips Idowu



Mundial de Valencia 2008un segundo tiro de 21,20m después del cualse desquició, no volviendo a realizar inten-to alguno válido y quedando sus 21, 49 ma-tutinos de la calificación como su más lar-ga prestación de los campeonatos. En el se-gundo tiro Cantwell se acercó a un centí-metro del líder con 21,19 y ya en la siguien-te tentativa tomó definitivamente el lide-razgo con 21,59, que incluso superó en el 5ºcon 21,77 y reforzó en el últimodisparo (21,69). Tras los dos colo-sos de las barras y estrellas se ubi-có el polaco Tomasz Majewski,que no cabía -y ya es difícil- en síde gozo con su récord polaco de20,93 que le reportaron el bron-ce, lo máximo a lo que razonable-mente podía aspirar el resto depesistas. El polaco se llevó el bron-ce derrotando a otros dos euro-peos, el bielorruso Andrei Mikh-nevich (20,82, oro en Paris 2003y posteriormente sancionado) yel polifacético holandés RutgerSmith (20,78). Según sus declara-ciones al concluir el concurso, pa-rece ser que Cantwell está enfa-dado con medio mundo, lo quele llevó a declarar que esperabaque, a su debido momento, le en-terrasen boca abajo para que susenemigos le pudieran besar... eltrasero.

Heptatlón: Clay, a loCassiusBryan Clay ganó por K.O. No po-día ser de otra manera ostentan-do ese apellido. Hace un par deaños se quedó con la miel en loslabios en Moscú cuando cinco asquerosospuntos le separaron del oro. Campeónmundial al aire libre en Helsinki 2005, es-te nativo de Honolulu, que tiene un perrolabrador que cronometra 31 segundos enlos 400m, debutó en Valencia arrollandoa sus siete rivales con una victoria inape-lable en el 60 con 6.71, una nadería para al-guien que acredita 6.65 y que acababa dequedar 4º (igual que en los 60v) en las prue-bas de selección de su país. Sólo el esto-nio Raja fue capaz de bajar también de 7.00y, en el segundo evento (longitud) más delo mismo, éxito con 7,75m por 7,63 del bie-lorruso Andrei Krauchanka, mientras Sebr-le se entonaba algo con 7,60. La ventaja deClay ascendía ya a 170 puntos sobre el es-

tonio y no hizo sino aumentar después desu tercera victoria parcial en el peso (16,21mmarca personal) hasta 202p sobre Sebrle,segundo entonces. El primer día se cerrócon la altura donde Krauchanka impuso suley con 2,15 mas los 2,09 de Clay (para unglobal de 3.736p) resistieron parcialmenteel acoso de Sebrle, que con 2,12 redujo a174p su desventaja antes de irse a la cama,

mientras Krauchanka y el kazajo Karpov,que se presentaban como líderes del añogracias a sus idénticas puntuaciones (6.229puntos) en Tallinn, competían ferozmen-te por el bronce con ventaja para el pri-mero de 50 puntos. Los 60vallas que abrí-an el segundo día se revelaron decisivos,aunándose otro inapelable triunfo de Clayen 7.86 con la lesión de Sebrle, que forza-ba al campeón olímpico y plusmarquistamundial de decatlón al abandono, con loque se quebraba su racha tras haber sidomedallista en los últimos ¡5! Mundiales.Mala pata la del checo de 33 años, que tam-bién se lesionara hace 10 años en el Euro-peo de Valencia. Con una renta de 326 pun-tos amasada por Clay sobre Krauchanka

después de 5 eventos, la penúltima esta-ción vio cómo el bielorruso exhibía de nue-vo su destreza en los saltos, llevándose lapértiga con 5,30, por 5,20 de Karpov y 5,00de Clay, que aún llegó a los finales 1.000metros con la posibilidad de batir el ré-cord del mundo de su compatriota DanO’Brien (6.476p). Si bien 2:45.4 no parecí-an la cuadratura del círculo, sí se antojaba

procelosa la empresa te-niendo en cuenta que nun-ca antes había corrido másque cuatro segundos máslento. Al final, Clay se con-formó con 2:55.64 para untotal de 6.371 puntos, seismás que su tope anteriorpero que no le sacan de laoctava plaza de siempre.Krauchanka también ven-ció a Karpov (2:46.49/2:47.45) y añadió cincopuntos (6.234) a su récordnacional mientras Karpovse colgó el bronce con6.131.

Relevo 4x400:EE.UU de bóbilisEl sorprendente ArismendyPeguero colocó a su Repú-blica Dominicana en un in-esperado liderato tras la pri-mera posta (46.91), entre-gando el palito a un buenconocedor del palito, co-mo Carlos Santa, quien ac-tuó bien pero no pudo con

el ímpetu desplegado por elestadounidense Jamaal Torran-

ce (45.73) que hizo sus deberes dejando alos suyos en una cabeza que ya no abando-narían. El podio era entonces EEUU, Rep.Dominicana y Jamaica pero el último rele-vista caribeño, DeWayne Barrett adelantójusto antes de la campana a Yoel Tapia pa-ra ceder 90 centésimas a los norteamerica-nos (3:06.79 / 3:07.69) y aventajar en ape-nas ocho centésimas a los paisanos de Fé-lix Sánchez. Fue el séptimo éxito yanqui enel relevo, aunque la primera vez que lo con-seguían sin un sólo finalista en la prueba in-dividual. La caída del tercer relevista ruso,Dyldin, nos privó del espectáculo que hu-biera supuesto ver las evoluciones de Bor-zakovskiy, que corrió sin ningún aliciente50m detrás de su inmediato predecesor. n

Bryan Clay



60m: Ángela Williams eclosiona

Por fin Ángela Williams tocó el oro. Ya con28 años, la norteamericana fue una niña pro-digio en los años 90 que batía todos los ré-cords de su edad pero a nivel absoluto nun-ca acabó de maravillar, con sendas platasen pista cubierta en los Mundiales de Lis-boa 2001 y Birmingham 2003. La desgraciale persiguió en Atenas cuando el cuartetoUSA que integraba perdió el palito y se vol-vió de vacío. Si le sumamos que en las dossiguientes temporadas sufrió un par de frac-turas en la espinilla, se antoja más que me-recido su oro valenciano, logrado ante con-trincantes que habían corrido más veloz-mente en la temporada, como la nigerianaIdoko -que se tambaleó después de salir detacos y perdió toda opción- y la rusa Polya-kova. Con infrecuente salida válida a la pri-mera, Williams marcó 7.06, marca personaly mundial del año también, aunque no fuehasta el último tercio cuando tomó el lide-rato que compartían la británica Jeannette

Kwakye y Tahesia Harrigan, de las caribeñasIslas Vírgenes Británicas, uno de los paísesmás ínfimos en tamaño del mundo (95 ki-lómetros cuadrados y 22.000 habitantes),aunque Harrigan vive en Florida desde los11 años. Kwakye igualó en semifinales el ré-cord británico de 7.13 establecido en el Eu-ropeo de ¡Madrid 86! por Beverly Kinch yen la final directamente lo destrozó con7.08, aventajando a Harrigan por una solacentésima. Por cierto, la primera llamadaque realizó este purasangre de 26 años fuea su hijo Khamauri, de apenas tres años, quevio la proeza materna por Internet en casajunto al entrenador de su mamá. Ningunade las tres medallistas ha bajado jamás de11.00 al aire libre en el hectómetro, así queya tienen objetivo estival.

400m: Monopolio rojoEl rodillo ruso copó las dos primeras plazasy se adueñó del cuarto oro consecutivo enel evento. Olesya Zykina partía como favo-

Mujeres

Apenas un par de triunfadoras de Moscú saborearon de nue-vo el éxito, la etíope Meseret Defar (3.000m) y la rusa YelenaIsinbayeva (pértiga). Curiosamente, si alguien a priori hubie-se garantizado que una “Yelena” establecería una nueva plus-marca mundial, casi todos las miradas se hubiesen desviadohacia la pertiguista y no hacia Yelena Soboleva, la reina delos campeonatos por su determinación en batir el récord de1.500m arriesgando al máximo en una prueba llena de estre-

llas. Los cuatro dobletes los protagonizaron Rusia (400 y 1.500),Etiopía (3.000) y Estados Unidos (60m vallas). La gran sorpre-sa del campeonato fue la victoria de la australiana TamsynLewis en el 800 en la primera ocasión que alcanzaba una granfinal. Aunque muy meritorios, los cuartos puestos de MayteMartínez (800) y Ruth Beitia (altura) dejaron el correspon-diente regusto amargo al no poder repetir sus bronces de Bir-mingham y Moscú, respectivamente.

Olesya Zykina

En Valencia vimos la mejor carrera de la historia en 1.500 metros



Mundial de Valencia 2008rita y tras el primer 200, cubierto en 23.73,se confirmaba su hegemonía, pero NatalyaNazarova, acreditada pianista y violinista yposeedora de los títulos de 2003 y 2004, sele echó encima en la recta de meta y ape-nas una mísera centésima les distanció enla foto-finish, que acreditó también el bron-ce de la estadounidense Shareese Woodsque se merendó nada más a salir a la ucra-niana Antonina Yefremova y soportó su ata-que en los metros finales, devolviendo a sunación el orgullo perdido, pues desde 1997ninguna representante del país de las ba-rras y estrellas había osado subir al podium.

800m: Lewis se estrena a los 30Sin duda, la mayor sorpresa del fin de sema-na. Ni Mutola, ni Mayte, ni las rusas… sinouna pálida australiana de 29 años de histo-rial mediocre cuyos frecuentes guiños a laespecialidad del 400 -donde acaba de ga-nar el título australiano y posee varios orosde la Commonwealth en el relevo 4x400,amén de unos interesantes y recientes 51.55-se antojaron decisivos. Las series y semifina-les hicieron coincidir por un lado a Mutolay Mayte y por otro a la ucraniana TetyanaPetlyuk y a la británica Meadows. Mientrasel primer dúo se tomó con inteligente cal-ma las cosas, Petlyuk tiraba y tiraba comouna posesa hasta el punto de bajar de 2:00en semifinales, con la británica a su vera tam-bién por debajo de esa cota. La coyuntura

parecía ideal para Mayte que llegaba, comoMutola, habiendo corrido hasta ¡6.5 segun-dos! más lento que el otro tándem en el con-junto de ambas rondas, con la ventaja obviaque ello debía producir en una final a ritmo.Pero se fastidió el invento cuando a la rubiaPetlyuk, que recordaba por su fisonomía ysu modus operandi a la castigada y retiradaCeplak, se le olvidó el ligero detalle de im-poner en la final el tren al que nos había malacostumbrado. Así que, con un paso de 1:03.11por el 400 liderado por la mozambiqueñasólo faltaron los tacos de salida para que laprueba se convirtiera en un auténtico 400.Un instante decisivo acaeció justo antes del500, cuando Mutola se abrió antes de en-trar en la curva para abortar los adelanta-mientos de Petlyuk y Mayte, circunstanciaaprovechada por Lewis (que debía de habervisionado justo antes de la salida el interiorque hizo Cacho en Barcelona 92) para colar-se por dentro y hacerse con una colocaciónde auténtico privilegio que ya no perdería.Al toque de campana, Petlyuk estaba en ca-beza, seguida de Lewis y Mayte, mientrasMutola, cuyo olfato táctico fue siempre su-blime, languidecía increíblemente en estaocasión totalmente encerrada. La siete ve-ces, ya guarismo definitivo, campeona mun-dial en pista cubierta dio caza a Mayte an-tes de la última curva, pero ahí se frenó suprogresión, mientras Lewis, entrenada porsu hermano mayor Justin, atrapó casi en los

cuadros a Petlyuk y se llevó a las antípodascon 2:02.57 un oro que ella misma no se cre-ía, con nueve centésimas de avance con laucraniana, mientras Mutola mantuvo a rayaa Mayte para derrotarla por 18 centésimas(2:02.97/2:03.15), en su 9ª aparición en unmundial -récord absoluto, al desempatarcon Javier Sotomayor, al que igualó Mano-lo Martínez- y con un balance final de sieteoros, una plata y un bronce.

1.500m: Soboleva, la mejor entrelas mejoresBien podría considerarse a esta disciplinacomo la auténtica reina de los campeona-tos y es que la estadística así lo avala: récorddel mundo (¡sí, en un campeonato, increí-ble!) a cargo de Yelena Soboleva con 3:57.71,superando su reciente tope (3:58.05,10 defebrero) mientras la etíope de nacimiento yatleta de Bahrein de adopción, Maryam Yu-suf Jamal se quedó sin medalla… ¡bajando decuatro minutos! siendo la vigente campe-ona del mundo de aire libre y hallándose,como demostró, en magnífica forma. Bastecitar el dato de que sólo cinco mujeres handescendido de la cota de 4:00 en la historiaen pista cubierta y cuatro de ellas estuvie-ron en la ya inolvidable final de Valencia. Laprueba partió viva, con Soboleva, que ha co-rrido este invierno el 800 en 1:56.49, impo-niendo su cadencia por el 400m (1:03.26) y800 (2:07.89). Para entonces sólo tres atle-tas, la también rusa y defensora del títuloYuliya Fomenko, la etíope Burka y la citadaJamal continuaban con opciones de podium,pero mientras Fomenko aún fue capaz dedar un acordado relevo a la diva Soboleva,las africanas se quedaron poco después deforma irremisible. Fomenko alcanzó el 1.200en 3:11.53 por delante de una Soboleva queparecía retenida, así que justo en la campa-na pegó el acelerón que le conduciría a su-perarse a sí misma con 3:57.71, con la jugosarecompensa adicional del 50.000 $ por ba-tir la plusmarca mundial. Una alucinada Fo-menko, ya desposeída de su trono, se llevóel honor de haber colaborado en una bue-na causa y la plata con 3:59.41, mientras lapugna a cara de perro mantenida por las mi-lleras del altiplano se saldó a favor de Bur-ka, 3:59.75 por delante de Yamal, 3:59.79. So-boleva puede así presumir de haber batido,en el transcurso de un Mundial, el primer ré-cord del mundo femenino en carreras indi-viduales desde que Merlene Ottey estable-ciera el de 200m en Sevilla 91, apenas hace



17 años y se tomó cumplida revancha de susplatas de Moscú 2006 (ante Fomenko) y Osa-ka 2007 (ante Jamal).

3000m: Defar, sin despeinarseCuando Marta Domínguez cruzó la metaen el Mundial de Birmingham 2003 hacecinco años en posición de plata, no era aúnconsciente de a quién acababa de ganar nide que podría, cinco años después, presu-mir de ser la última atleta en batir en pistacubierta a Meseret Defar, que así se llama-ba una jovencísima etíope de apenas 19 añosy talento infinito. Defar, nada menos quemejor atleta IAAF del año 2007, encadenóen Valencia su tercera victoria consecutiva,

con lo que igualó en el historial de la disci-plina a otra menuda, en todos los sentidos,atleta como la rumana Gabriela Szabo; de-claraba la plusmarquista mundial de 5.000en la víspera que guarda un especial cariñoa esta competición pues su oro de Buda-pest supuso el punto de partida de su ful-gurante carrera, que ha ensombrecido a mu-jeres de la talla de Tirunesh Dibaba, acumu-lando ya 17 triunfos consecutivos indoor enel periodo 2004-2008. Su último éxito notuvo demasiada historia: tras un cómodo1.000 en 2:59.33 y un 2.000 cubierto en5:55.50 con la marroquí Mariem Alaoui Sel-souli en cabeza, la actual campeona del

mundo y olímpica de los 5.000m se insta-ló en la cabeza a falta de dos vueltas, aun-que no fue hasta el último 200 -más rápi-do que el de Tariku Bekele para totalizar8:38.79- cuando decidió abrir brecha sobresu compatriota Meselech Melkamu, queconfirmó la gran impresión que había dadoen la reunión del 9 de febrero para ser pla-ta con 8:41.50 por delante de Selsouli(8:41.66) que, apoyada por una pancarta ro-tulada en vasco desde las gradas, resistió elenvite de la keniata Sylvia Kibet, que al me-nos se vio recompensada con el siempre re-levante récord de su país (8:41.82) mientrasa la rusa Olga Komyagina le cupo el honorde ser la primera europea en 5ª plaza.

60mv: Jones tira de ránkingTras cierto desencanto por no poder asis-tir al duelo Robles-Xiang en la vertientemasculina, las vallas tampoco ofrecieronen el apartado femenino el glamour es-perado, ya que la mega-favorita sueca Su-sanna Kallur se lesionó en el calentamien-to previo a las semifinales y la prudenciale aconsejó no agravar una dolencia que,mal gestionada, le podría apartar del sue-ño olímpico de Pekín. Así las cosas, el es-calafón corrió con rigurosidad y la esta-dounidense Lolo Jones, segunda marquis-ta del año, soportó admirablemente lapresión que de repente le sobrevino pa-ra subir a lo más alto del cajón con 7.80.Josephine Onya aspiraba, y ¡de qué ma-nera! a ocupar una de las dos plazas va-cantes en el podium, no en vano había

marcado 7.84 en la matinal primera ron-da: marca personal, récord de España pro-mesa, mejor marca de todas las partici-pantes y la más rápida prestación en pri-mera ronda en la historia del campeona-to, ¿alguien da más? Lamentablemente,cuando se hallaba en posición de bron-ce, Onya impactó con el último imple-mento, que se partió, acabando en elsuelo desconsolada, aunque llegara a me-ta en unos anecdóticos 43.72 segundos,mientras EEUU firmaba el doblete graciasa Candice Davis (7.93) y la cubana AnayTejada consiguió que el podium tambiénhablase español con su bronce cronome-trado en 7.98.

Altura: Vlasic, la diosa de las alturasLa ecuación 2,00m = medalla se cumplió arajatabla y aquellas que arquearon la espal-da por encima de ese siempre elitista listónobtuvieron presea. La croata Blanka Vlasicempieza a irradiar un aura de invencibilidadpreocupante para sus rivales. Una auténti-ca heroína en su país, hasta el punto de apa-recer su efigie en un sello del servicio pos-tal croata. Vlasic ofreció un concurso inma-culado, hasta 2,01 inclusive, en el que siem-pre fue en cabeza si bien tras el 1,99 RuthBeitia también presentaba una tarjeta inta-chable que abruptamente se quebró en 2,01.Habiendo franqueado también a la prime-ra dicha medida la defensora del título Sle-sarenko, el bronce de Beitia dependía de latercera tentativa de la ucraniana Vita Pala-

Mesert Defar

Blanka Vlasic




mar quien, para desgracia de la cántabra,mejoró marca por vez primera en cuatroaños al franquear esos 2,01, impidiendo queBeitia repitiera su bronce moscovita. La lu-cha por el oro resultó muy desigual: trasrealizar su primer nulo de la final, Vlasic pa-só sin apuros 2,03 a la segunda mientras lacampeona olímpica Slesarenko fracasó portres veces, dejando expedito el camino pa-ra que la croata demandara la varilla a 2,09lo que hubiera supuesto desalojar a KajsaBerqvist del libro de récords. Si bien no es-tuvo en un tris de superarlo en ninguno deellos, los brincos de Vlasic sobre esa astro-nómica altura sugieren que esa altura pue-de estar a su alcance en un futuro no dema-siado lejano, siendo además la segunda vezen 8 meses que intentaba una plusmarcamundial en España, pues el pasado julio yaatacó el tope de aire libre, derribando tresveces sobre 2,10m. Los 1.226 puntos que acu-muló por su 2,03 supusieron la más alta pun-tuación entre los concursos femeninos.

Pértiga: Isinbayeva sólo a los puntosUn rasgo que define y caracteriza a los au-ténticos campeones es que son capaces devencer aún cuando no tienen “su día”. Tal fueel caso de la rusa Yelena Isinbayeva, que acu-muló en el Lluís Puig su tercero entorcha-do consecutivo pocas fechas después debatir de nuevo la plusmarca mundial con4,95. Una aún más cercana sorpresiva derro-ta frente a su compatriota Svetlana Feofa-nova en Bydgoszcz no redujo un ápice laconfianza de la campeona olímpica y mun-dial, que sólo inició el concurso en 4,65, fran-queando por supuesto a la primera; paraentonces, cuatro atletas habían superado4,60 al primer ensayo: Feofanova, la brasi-leña Fabiana Murer, la estadounidense Jen-nifer Stuczynski y la polaca Monica Pyrek.Curiosamente, las cuatro se aliaron estadís-ticamente contra Isinbayeva y no optaronal 4,65, lo que se reveló acertado pues, ex-cepto Feofanova, el resto triunfó tambiénsobre 4,70, no intentados por la jefa, que sefue directa al 4,75, también con éxito pri-merizo. Stuczynski fue la otra atleta que es-caló con éxito esa medida, a la segunda, nointentando ninguna de ellas el 4,80 y fallan-do ambas sobre 4,85 tres veces, lo que sinduda dejó un poso de desilusión tanto en-tre el público congregado como en la pro-pia Isinbayeva, que ganó así ajustadamente

por nulos frente a la yanqui con esos 4,75,mientras que se otorgaron dos bronces, per-sonificados en Pyrek y Murer (4,70).

Longitud: Gomes, oro de 7 quilates La portuguesa Naide Gomes se revela co-mo una consumada especialista del atletis-mo bajo techo. Dos veces campeona de Eu-ropa y oro en pentatlón en 2004, amén delbronce que alcanzó en la última edición conlos mismos 6,76 que Concha Montaner. Fuela brasileña Maurren Higa Maggi quien lide-raba tras la primera ronda con 6,74m, peroGomes contraatacó a continuación con 6,82respondiendo Maggi a su vez con marca per-sonal de 6,89 en el tercero. Para entoncesla líder del año Irina Simagina arriesgaba encada oportunidad hasta encadenar tres nu-los, pero se colocó en plaza de plata al ha-cer 6,84 en la cuarta tanda, a lo que respon-dió Gomes con 6,87 recuperando la segun-da posición justo antes de brincar a 7,00 enla penúltima ronda para reivindicar el oro,que no pudieron evitar ni Maggi (6,73 y nu-lo en sus dos salto finales) ni Simagina, cu-ya mejora paulatina (6,85 y 6,88 finales) nofue suficiente para pasar del bronce. En re-alidad, el concurso se ciñó a estas tres gran-

des de la disciplina, pues el resto, encabe-zados por la francesa Eloyse Lesueur, que-dó distanciado un mínimo de 28 centíme-tros del bronce.

Triple: Savigne propicia la tragedia griegaEl triple arrancó potentemente, con 14,93para la subcampeona olímpica griega De-vetzi, a lo que la flamante triunfadora deOsaka, Yargelis Savigne, respondió con 14,89.La sorprendente líder del año (15,08), la es-lovena Marija Sestak aterrizó a 14,68 en lasegunda tanda, para ubicarse en provisio-nal bronce. Los siguientes fuegos artificia-les llegaron en la cuarta ronda cuando De-vetzi alcanzó 15,00, que le convertían en lasexta de la lista mundial de todos los tiem-pos. Sin cambios significativos en la penúl-tima oportunidad se llegó al desenlace delconcurso en el que Savigne -la más jovencampeona en Valencia, 23 años y 115 días-consiguió por vez primera en pista cubier-ta saltar más de 15 metros (idéntico logropero al aire libre acaeció en Alcalá de He-nares el pasado julio) con el marcador es-cupiendo las cifras, 15,05 (4ª de la historia),para desesperación de la griega y felicidadcasi definitiva de la cubana, que aún tuvo

Naide Gomes



que pasar por el trago de presenciar una po-derosa aunque insuficiente ejecución deDevetzi, cuyos 14,91 del postrero intento delconcurso le dejaron lamentándose de unanueva derrota acaecida en el último alien-to. Por su parte, Sestak defendió el broncecon sus 14,68 frente al avance de la kazajaOlga Rypakova, aunque quedó a años luzde su marca mundial del año.

Peso: Vili gana sin estar en viloEn su primera competición bajo techo encuatro años, la neozelandesa Valerie Vili sig-nificó oro puro, salvo por su atuendo negroarbitral, adicionando este entorchado a suoro japonés. A diferencia del pasado vera-no en Osaka, cuando la bielorrusa Nadze-ya Ostapchuk llegó en cabeza al sextotiro decisivo, Vili llevó la iniciativa aquídesde el inicio, enviando el artefactoa 20,19 a las primeras de cambio, refor-zado por los 20,07 de la tercera ronday por sus 19,89 finales. Ostapchuk, quese presentaba ufana en Valencia comolíder indiscutible con 20,35 (por los 20,13al aire libre que había acreditado la ne-ozelandesa en su tierra) no pudo acer-carse más que a 45 centímetros de surival, gracias a los 19,74 de su terceratentativa. Más interesante resultó laencendida lucha por el bronce, que pa-recía controlado por la cubana Misley-dis González hasta el último ensayomerced a sus 18,75 del tercer disparo,mas la china Meiju Li ¡qué peligro vana tener los chinos en Pekín, con o sinpolución!, desplazó el implemento has-ta 19,09 y cercenó las esperanzas de lacubana.

Pentatlón: ¡Qué tía! esta He-llebautA pesar de tener éxito debe haber atle-tas a las que una sola disciplina les sa-be a poco; ese es el caso de la belga TiaHellebaut, quien por cierto anuncia su re-torno, de cara a los JJOO de Pekín, al saltode altura, donde es la actual campeona deEuropa, tanto en pista cubierta como al ai-re libre. Casi nada, en un evento dominadoincontestablemente por las chicas del vie-jo continente. La ausencia por lesión de Ca-rolina Kluft había incrementado súbitamen-te las posibilidades de victoria de la britá-nica Kelly Sotherton, compulsivamentehambrienta de oro tras visitar dos veces el

segundo cajón del podium en los dos últi-mos Europeos de pista cubierta (en Birming-ham a escasos 17 puntos de Kluft) y habersido bronce olímpico en Atenas y mundialen Osaka. Pero Hellebaut no tenía la másmínima intención de allanar el camino dela británica, que encabezaba después de losiniciales 60v -8.25 por 8.54 de la belga- quetomó el liderato tras la altura para no aban-donarlo ya gracias a la mejor marca jamáslograda en una combinada femenina (pen-tatlón o heptatlón): 1,99, que le distancia-ron 162 puntos sobre la rusa Bogdanova y168 sobre Sotherton. El talón de Aquiles deHellebaut está en el peso, mas su marca per-sonal de 13,85 minimizó el traspiés pues susmáximas rivales sólo le superaron por 70

centímetros, lo que les llevó a perder mo-mentáneamente sus puestos de podium enfavor de la lituana Skujyte y de la ucrania-na Dobrynska. La longitud resultó casi laxacon las cinco primeras en 23 centímetros yvictoria para Sotherton en 6,45m, con loque se llegó a los decisivos 800 con una di-ferencia de 107 puntos (3.994/3.887) de He-llebaut sobre la británica, mientras Bogda-nova (3.870) también recuperaba el provi-sional bronce. La estadística arrojaba el da-

to de que Sotherton debía correr 7.7 segun-dos más rápido que la belga para enjugar sudesventaja…y a punto estuvo de conseguir-lo, gracias a su victoria y a una excelentemarca personal de 2:09.95 por los 2:16.42 deHellebaut (6.47 segundos), que llegó tam-baleándose a meta antes de desplomarse.Finalmente, 15 puntos separaron a ambas(4.867/4.852) mientras Bogdanova conser-vaba el bronce y se convertía en la revela-ción de la combinada con 4.753p, sólo 11 másque Natalya Dobrynska.

Relevo 4x400m: La octava sinfonía rusaEl imperio ruso dominó por octava ocasiónconsecutiva, aunque con mayor dificultad

de la que podría presumirse apriori, poniendo en liza a las dosprimeras de la prueba individual.En el plano individual, Natalya Na-zarova consiguió su quinto oro re-levista, lo que unido a sus dos éxi-tos individuales de 2003 y 2004totalizan 7, los mismos, aunqueobviamente menos relevantes,que los cosechados por Mutola,amén de su plata individual aquíen Valencia. Después del primerrelevo protagonizado por Gus-china (52.36) parecía que las rusasbarrerían ya que distanciaban encasi 10 metros a EE.UU y Bielorru-sia, margen que mantuvo la se-gunda rusa, Levina, cronometra-da en 52.37. Fue curiosamente conel concurso de las estrellas Naza-rova y Zykina cuando se redujo laventaja, pues menos de dos ho-ras antes habían batallado hastala extenuación para llevarse oroy plata con 51.09 (Zykina) y 51.10(Nazarova) a quien se le tomó52.54 en su posta, lo que llevó alas bierlorrusas (S. Usovich) y a las

estadounidenses, a través de la bronce in-dividual Woods, a reducir desventaja. El úl-timo capítulo tenía morbo pues la plata deBirmingham, Ilona Usovich, no había com-petido en el evento individual para reser-varse para el cuarteto y sólo un 50.90 deZykina (por 51.17 de Usovich) les permitió alas suyas entonar un nuevo alirón, 73 cen-tésimas por delante de las otras ex soviéti-cas, (3:28.17/3:28.90) mientras EEUU agarra-ba el bronce nada lejos en 3:29.30. n

Valerie Vili


valencia un gran mundial:maquetaciÛn 1 · 2010. 1. 27. · mucha juventud entre los guar-dianes...

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