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UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
CARRERA DE PSICOLOGÍA INFANTIL Y
PSICORREHABILITACIÓN
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que
presentan adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio
Municipal “Fernández Madrid”.
Trabajo de investigación previo a la obtención del título de Psicólogo Infantil y
Psicorrehabilitador.
Quito, 2019
AUTOR: Sarmiento Proaño Ronny Fernando
TUTORA: Msc. María Elena Silva Viteri
ii
DERECHOS DE AUTOR
Yo, Ronny Fernando Sarmiento Proaño en calidad de autor y titular de los derechos morales y
patrimoniales del trabajo de titulación RELACIÓN DE LOS ESTILOS DE CRIANZA CON
LOS NIVELES DE AGRESIVIDAD QUE PRESENTAN ADOLESCENTES
PROCEDENTES DE FAMILIAS MONOPARENTALES DEL COLEGIO
MUNICIPAL “FERNÁNDEZ MADRID” , modalidad presencial, de conformidad con el
Art. 114 del CÓDIGO ORGÁNICO DE LA ECONOMÍA SOCIAL DE LOS
CONOCIMIENTOS, CREATIVIDAD E INNOVACIÓN, concedo a favor de la Universidad
Central del Ecuador una licencia gratuita, intransferible y no exclusiva para el uso no comercial
de la obra, con fines estrictamente académicos. Conservo a mi favor todos los derechos de autor
sobre la obra, establecidos en la normativa citada.
Así mismo, autorizo a la Universidad Central del Ecuador para que realice la digitalización y
publicación de este trabajo de titulación en el repositorio virtual, de conformidad a lo dispuesto
en el Art. 144 de la Ley Orgánica de Educación Superior.
El autor declara que la obra objeto de la presente autorización es original en su forma de
expresión y no infringe el derecho de autor de terceros, asumiendo la responsabilidad por
cualquier reclamación que pudiera presentarse por esta causa y liberando a la Universidad de
toda responsabilidad.
En la ciudad de Quito, a los 7 días del mes de Agosto del 2019.
Firma: ________________________________
Ronny Fernando Sarmiento Proaño
CC: 1715693873
Dirección electrónica: [email protected]
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APROBACIÓN DE LA TUTORA
En mi calidad de Tutora del Trabajo de Titulación, presentado por RONNY FERNANDO
SARMIENTO PROAÑO, para optar por el Grado de Licenciado en Psicología Infantil y
Psicorrehabilitación; cuyo título es: RELACIÓN DE LOS ESTILOS DE CRIANZA CON
LOS NIVELES DE AGRESIVIDAD QUE PRESENTAN ADOLESCENTES
PROCEDENTES DE FAMILIAS MONOPARENTALES DEL COLEGIO
MUNICIPAL “FERNÁNDEZ MADRID”, considero que dicho trabajo reúne los requisitos
y méritos suficientes para ser sometido a la presentación pública y evaluación por parte del
tribunal examinador que se designe.
En la ciudad de Quito, a los 7 días del mes de Agosto del 2019.
________________________________
Msc. María Elena Silva
DOCENTE-TUTORA
C.C: 0801398553
iv
DEDICATORIA
Quiero agradecer a mi familia, en especial a mis padres Ximena Proaño y Ramiro Sarmiento
por estar presentes en mi vida y estar pendiente durante esta larga etapa universitaria, no solo
en los estudios sino también sino también enseñándome a ser mejor persona, he aprendido
mucho de ustedes y sé que seguirán haciéndolo. A mis hermanos Ricardo y Ariel por
hacerme reír y sentirme renovado, son aquello que se espera tener al regresar a casa, gracias.
A mis amigos Marco y David por acompañarme no solo durante el colegio sino durante la
universidad, llegando a ser grandes amigos, compartiendo tantas historias que faltaría paginas
para expresarme y sé que continuaremos por mucho tiempo y por su puesto a buen Víctor
que, aunque nos habíamos distanciado, el futbol nos juntaría de nuevo, además de cuya ayuda
durante esta etapa del proyecto de grado ha sido importante, gracias a los tres.
Finalmente, a mis amigos de la universidad en especial con lo que pase gran parte de mi
tiempo como son Memo, Caro, Michael, Vero, Yesi y Willo que son las personas con que
más he compartido, gracias a todos por hacer de estos años tan estupendos.
v
AGRADECIMIENTOS
Al Colegio Municipal “Fernández Madrid” por abrirme sus puertas y brindarme la
oportunidad de realizar mi investigación, gracias a los psicólogos e inspectores que me
ayudaron y facilitaron esta última etapa universitaria.
A los profesores que semestre a semestre me enseñaron muchas cosas, mostrándome que la
psicología va más allá de lo que uno piensa y mostrándome lo fascinante que es cada una de
sus ramas, además de no solo enseñarme lo teórico sino también como debe ser un buen
profesional Psicólogo Infantil y Psicorrehabilitador.
Por ultimo a mi tutora la Msc. María Elena Silva, agradeciéndole de manera especial debido a
las grandes enseñanzas que he tenido, así como también su paciencia, guiándome de la mejor
manera a en este último trabajo de investigación.
¡Muchas Gracias!
vi
INDICE DE CONTENIDO
DERECHOS DE AUTOR ....................................................................................................... ii
APROBACIÓN DE LA TUTORA ....................................................................................... iii
DEDICATORIA ...................................................................................................................... iv
AGRADECIMIENTOS ........................................................................................................... v
RESUMEN................................................................................................................................ x
ABSTRACT ............................................................................................................................. xi
INTRODUCCIÓN ................................................................................................................... 1
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA .............................................................................. 3
HIPÓTESIS .............................................................................................................................. 6
OBJETIVOS ............................................................................................................................. 7
JUSTIFICACIÓN E IMPORTANCIA .................................................................................. 8
MARCO TEORICO .............................................................................................................. 11
CAPITULO I: ESTILOS DE CRIANZA ............................................................................ 11
1.1 Aspectos Generales de los estilos de crianza .................................................................... 11
1.2 Modelos de estilos de crianza. .......................................................................................... 13
1.2.1 Modelo de Diana Baumrind .................................................................................... 13
1.2.2 Estilos parentales de Maccoby y Martin ................................................................. 15
1.2.3 Modelo de Darling & Steinberg .............................................................................. 16
1.3 Tipos de estilos de crianza. ............................................................................................... 17
1.3.1 Estilo Autoritario .................................................................................................... 17
1.3.2 Estilo Autoritativo o democrático ........................................................................... 19
1.3.3 Estilo Permisivo ...................................................................................................... 21
1.3.4 Estilo Negligente ..................................................................................................... 22
1.4 Los estilos de crianza y su relación con adolescentes. ...................................................... 24
1.5. Los estilos de crianza en familias monoparentales. ......................................................... 26
1.6. Estilos de crianza y agresividad ....................................................................................... 28
CAPITULO II: La agresividad ............................................................................................ 31
2.1 Aspectos generales de la agresividad ................................................................................ 31
2.1.1 Factores de Protección ............................................................................................ 34
2.1.2 Factores de riesgo ................................................................................................... 36
2.2. Teorías de la Agresividad. ............................................................................................... 39
vii
2.2.1 Modelo instintivo .................................................................................................... 40
2.2.2 Bases biológicas de la agresividad .......................................................................... 41
2.2.3 Teoría del Síndrome AHA ...................................................................................... 43
2.2.4 Teoría de la frustración Agresión ........................................................................... 43
2.2.5 Modelo del déficit de procesamiento de la información ......................................... 44
2.2.6 Teoría de agresividad de Bandura........................................................................... 46
Tabla 1.- Análisis del aprendizaje social de la agresión. ........................................................ 48
2.3. Tipos de agresividad. ....................................................................................................... 49
2.4. La agresividad y su presencia en familias monoparentales. ............................................ 52
MARCO METODOLÓGICO .............................................................................................. 55
Variables de la investigación .................................................................................................. 55
Definición conceptual de variables ......................................................................................... 55
Definición operacional ............................................................................................................ 55
Enfoque de la investigación .................................................................................................... 55
Alcance de la investigación .................................................................................................... 56
Diseño de investigación .......................................................................................................... 56
Población ................................................................................................................................ 56
Muestra ................................................................................................................................... 56
Criterios de inclusión .............................................................................................................. 56
Criterios de exclusión ............................................................................................................. 57
Criterios de eliminación .......................................................................................................... 57
Métodos .................................................................................................................................. 57
Técnicas .................................................................................................................................. 57
Instrumentos ............................................................................................................................ 58
Consideraciones éticas ............................................................................................................ 59
Metodología de campo ............................................................................................................ 60
Limitaciones presentadas ........................................................................................................ 61
RESULTADOS DE LA INVESTIGACIÓN ....................................................................... 62
DISCUSIÓN ........................................................................................................................... 66
CONCLUSIONES.................................................................................................................. 69
RECOMENDACIONES ....................................................................................................... 70
viii
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ................................................................................. 71
ANEXOS ................................................................................................................................. 77
PLAN APROBADO ............................................................................................................... 95
ix
INDICE DE TABLAS
Tabla 1.- Análisis del aprendizaje social de la agresión. ........................................................ 48
Tabla 2.- Características sociodemográficas de los adolescentes. .......................................... 62
Tabla 3.- Características sociodemográficas de los padres. .................................................... 63
Tabla 4.- Estilos de crianza ..................................................................................................... 64
Tabla 5.- Niveles de agresividad de los adolescentes. ............................................................ 64
Tabla 6.- Correlación de los niveles de agresividad y estilos de crianza. ............................... 65
Tabla 7.- Comprobación de hipótesis. .................................................................................... 66
x
RESUMEN
TÍTULO: Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan
adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Autor: Sarmiento Proaño Ronny Fernando
Tutora: Msc. María Elena Silva Viteri
El trabajo de investigación de Psicología Infantil y Psicorrehabilitación, sobre la relación de
los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes procedentes
de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”. El objetivo principal
de esta investigación es Relacionar la influencia de los estilos de crianza con los niveles de
agresividad en adolescentes procedentes de familias monoparentales. Y los objetivos
secundarios son Definir los estilos de crianza en familias monoparentales y; Identificar los
niveles de agresividad en adolescentes de familias monoparentales. La investigación es del
tipo relacional, no experimental; con una muestra final de 38 adolescentes de familias
monoparentales de 2do “BGU” luego de ser aplicados los criterios de eliminación. Para la
obtención de datos se utilizaría la Escala de Estilos parentales para adolescentes de Musita y
García validado en España con un 0,96 de coeficiente de confiabilidad, el estilo de crianza
más frecuente es el Estilo Autorizativo. También se utilizaría el Cuestionario de Agresividad
de Buss y Perry validado en Perú con un 0,83 de coeficiente de confiabilidad, el nivel de
agresividad más frecuente es el alto. En relación a la hipótesis se verifico que existe una
relación estadística entre los estilos de crianza y los niveles de agresividad de adolescentes
procedentes de familias monoparentales con un coeficiente de correlación (r) de 0, 686 que
equivale a una correlación positiva alta y una significancia de p= 0,01. Se concluye que existe
una relación entre los estilos de crianza y agresividad en adolescentes procedentes de familias
monoparentales.
PALABRAS CLAVES: ESTILOS DE CRIANZA/AGRESIVIDAD/ ESCALA DE
ESTILOS PARENTALES PARA ADOLESCENTES DE MUSITA Y GARCÍA/
CUESTIONARIO DE AGRESIVIDAD DE BUSS Y PERRY.
xi
ABSTRACT
TITLE: Relationship of parenting styles with levels of aggressiveness that adolescents from
single-parent families of the Municipal School "Fernández Madrid" present.
Author: Sarmiento Proaño Ronny Fernando
Tutor: Msc. María Elena Silva Viteri
The research work of Child Psychology and Psychorehabilitation, on the relationship of
parenting styles with the levels of aggressiveness presented by adolescents from single-parent
families of the Municipal School "Fernández Madrid". The main objective of this research is
to relate the influence of parenting styles with levels of aggressiveness in adolescents from
single parents. And the secondary objectives are to define parenting styles in single parents
and; Identify levels of aggressiveness in adolescents of single parents. The research is
relational, not experimental; with a final sample of 38 adolescents from single-parent families
of 2nd “BGU” after the elimination criteria were applied. In order to obtain data, the Parental
Styles Scale for adolescents of Musita and García validated in Spain with a 0.96 reliability
coefficient would be used, the most frequent parenting style is the Authorizing Style. The
Buss and Perry Aggression Questionnaire validated in Peru with a 0.83 reliability coefficient
would also be used, the most frequent level of aggressiveness is high. In relation to the
hypothesis, it was verified that there is a statistical relationship between parenting styles and
levels of aggressiveness of adolescents from single-parent families with a correlation
coefficient (r) of 0.686 which is equivalent to a high positive correlation and significance of
p = 0.01. It is concluded that there is a relationship between parenting and aggressiveness
styles in adolescents from single parents.
KEY WORDS: AGING / AGGRESSIVE STYLES / PARTIAL STYLE SCALE FOR
MUSITA AND GARCÍA TEENAGERS / BUSS AND PERRY AGGRESSIVE
QUESTIONNAIRE.
1
TÍTULO
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Autor: Ronny Fernando Sarmiento Proaño
Tutora: María Elena Silva
INTRODUCCIÓN
La presente investigación establece una relación entre los estilos de crianza con los niveles
de agresividad que presentan adolescentes procedentes de familias monoparentales. La cual
es una investigación cualitativa, del tipo correlacional y no experimental.
Hay que recordar que las investigaciones que consideran los estilos de crianza y la
agresividad dentro etapa del desarrollo como es la adolescencia y considerando el factor
monoparental de la familia son escazas tomando solamente en cuenta la adolescencia o la
monoparentalidad por lo que hace difícil compararlas con otras investigaciones y de ahí
también la importancia del tema.
Partiendo de los establecido anteriormente, en donde recalcamos la importancia de los
estilos de crianza y la agresividad; y ahora poniendo especial énfasis en las familias
monoparentales, se ha observado durante las últimas décadas un aumento de este tipo de
familias, por motivos como separación, migración, muerte u otros, llegando a dificultar la
paternidad por un solo miembro además que el hijo estaría en la adolescencia que conlleva
sus respectivos retos en la crianza, haciéndola interesante.
La investigación también estaría fundamentada en la teoría cognitiva social de Albert
Bandura. Que sustenta, que el aprendizaje de comportamientos por medio de modelos, tiene
un lugar destacado en las formas reconocidas de aprehender, ya que la mayor parte de los
comportamientos se aprehenden por medio de la observación (Bandura & Rivière, 1982).
Esta teoría plantea que todos comportamientos pueden ser aprendidos mediante la
interacción social con otra persona, que en esta investigación sería el padre con el que
convive el adolescente, de manera que la forma en que interactúan padres con los hijos es
2
aprehendida y repetida por los hijos en sus otros entornos, presentándose una variedad de
comportamientos, los cuales pueden ser agresivos o no.
Concluyendo que en las familias monoparentales el proceso de crianza es mucho más
complejo, para lo cual dentro del marco de la investigación conoceremos más a fondo los
estilos de crianza que ejercen estas familias y su relación con los niveles de agresividad,
analizando la temática de forma más general y específicamente en el Colegio Municipal
“Fernández Madrid”.
3
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
Durante las últimas décadas hemos podido observar un cambio en la estructura familiar,
según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC ,2010) el 4,7% de la población
femenina que representa un 339.656 es madre soltera. Estableciendo que la cantidad de
madres solteras existentes en el Ecuador representando un número bastante grande y sin
tomar en cuenta que aspectos como viudez, migración, separación. Por lo que el proceso de
crianza por parte de un solo progenitor es muy frecuente dentro de nuestra sociedad, llevando
al progenitor a asumir una mayor cantidad de responsabilidades y descuidando aspectos no
solo familiares, sino sociales, económicos y académicos en los hijos, trayendo consigo una
falta de control, afecto y varios trastornos psicológicos en los hijos.
Entre los trastornos más frecuentes en adolescentes entre los 14 y 18 años según
Fernández, Arias y Sutil (2000). El 39% presenta trastornos de comportamiento, 19,5% son
depresivos, el 11,7 % ansiedad, 9,1% trastornos específicos del desarrollo, 2,6% trastornos de
eliminación, desaparecen los trastornos de la actividad y de la atención, y 2,8% de rivalidad
entre hermanos, y trastornos de alimentación añadiendo los anterior la Dra. Alegría Majluf
(1999) como citó Gallegos (2013) en su investigación con 908 estudiante de 11 a 17 años,
encontró que más problemas psicológicos tenían adolescentes de padres separados
Estableciendo que muchos adolescentes pueden generar en algún momento un trastorno
durante su desarrollo y el riego aumenta cuando estos adolescentes provienen de padres
separados, por lo que es importante el estilo de crianza aplicado en familias monoparentales y
así evitar futuros problemas.
Los problemas durante la adolescencia se pueden atribuir a la familia según Hernández
(1997) como citó Capano, González & Massonnier (2016, p.415) “No existe otra instancia
social que logre reemplazarlas en la satisfacción de las necesidades psicoafectivas de todos
sus integrantes y su retroalimentación emocional”. Concluyendo la importancia de los padres
durante el proceso de crianza ya que sirve como base para el desarrollo personal y en especial
con la estructura monoparental presente en la familia.
Por lo que podemos decir que la participación de la familia es fundamental durante la
aplicación de los estilos de crianza ya que según Fletcher, Steinberg y Sellers (1999) como
citó Aroca & Cánovas (2012, p.162) mencionan que los adolescentes que tienen solo un
4
padre que aplique el estilo autoritativo, puede tener hijos más competentes que no tienen
ningún padre.
Mostrándonos lo importante de aplicar un adecuado estilo de crianza sin importar que la
lleve a cabo solo un padre, pero esto no sucede en todas las familias, según Sheehan y
Watson (2008) como citó Raya, Pino & Herruzo (2009, p.213):
“En otras ocasiones, se han comparado distintos tipos de disciplina, observándose
que una disciplina agresiva, caracterizada por un bajo nivel de razonamiento y altos
niveles de agresividad tanto física como verbal y emocional, genera conductas
agresivas en los propios hijos mientras que una disciplina menos agresiva y basada
en el razonamiento no lo hace”.
Indicándonos que los estilos de crianza donde predomina una disciplina excesiva, castigos
y falta de razonamiento generalmente se lo relaciona con comportamientos agresivos, ya que
los padres funcionan como modelos de aprendizaje de las distintas formas de agresividad y
llegando a ser un problema debido a que la agresividad se aplica sobre otros miembros de la
familia o sus pares.
Retomando lo anterior la agresividad se torna más preocupante en contextos familiares
monoparentales ya que según Loeber y Hay (1997) como citó Rodríguez, Barrio & Carrasco
(2013, p.120) mencionan que aproximadamente el 75% de hijos que pertenecen a familias
monoparentales presentan comportamientos agresivos por un periodo de tiempo.
Estableciendo que la familia monoparental es un factor de riesgo para el desarrollo
comportamientos agresivos, pero esto refiriéndose solo al entorno familiar.
Los comportamientos agresivos tienden a expandirse a otras áreas del desarrollo, a nivel
escolar autores como Cangas, Gázquez, Pérez, Padilla & Miras (2007) como citó Senabre et
al. (2012) mencionan que: “en el contexto español, aproximadamente el 40% de los escolares
presencia o participa diariamente en comportamientos agresivos”. Estableciendo que del 75%
de comportamientos agresivos, un 40% se puede presenciar en instituciones educativas,
llegando a ser un grave problema, ya que estos comportamientos pueden llegar a ser
naturalizados y posteriormente aprendidos tanto por las victimas como por los observadores.
Concluyendo en el problema que representa el uso de un inadecuado estilo de crianza
como generador de comportamientos agresivos, además de recordar que el adolescente se
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desenvuelve en varios contextos, razón por la cual se debería intervenir siempre tomando en
cuenta los estilos de crianza como un factor fundamental para evitar el desarrollo de la
agresividad ya que este dependerá en como pueda afectar al desarrollo integral.
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HIPÓTESIS
HI: Existe una relación estadística entre los estilos de crianza y los niveles de agresividad de
adolescentes de familias monoparentales.
HO: No existe una relación estadística entre los estilos de crianza y los niveles de agresividad
de adolescentes de familias monoparentales
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OBJETIVOS
Objetivo general
Relacionar la influencia de los estilos de crianza con los niveles de agresividad en
adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal
“Fernández Madrid”.
Objetivo especifico
Definir los estilos de crianza en familias monoparentales del Colegio Municipal
“Fernández Madrid”.
Identificar los niveles de agresividad en adolescentes de familias monoparentales del
Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
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JUSTIFICACIÓN E IMPORTANCIA
La importancia de la investigación está en cómo el aumento de familias monoparentales
según el (INEC, 2016) ha existido un incremento de divorcios en un 83,45% en las últimas
décadas, lo cual ha tenido un impacto dentro de los estilos de crianza que a su vez influyen en
comportamientos agresivos en adolescentes, autores como Blanco y Umayahara (2004) como
citó Ceja (2016, p.124)
“Consideran que el trabajo de ambos padres, la existencia mayoritaria de familias
monoparentales, la incorporación de la mujer al trabajo, con el consecuente cambio
de roles generado al interior del hogar, la mayor escolarización de la población, y el
acceso a información a través de los medios de comunicación masivos, han generado
profundos cambios respecto a las formas de criar a los niños y niñas, a quienes los
crían y en que consiste dicha crianza”.
Recalcando aspectos como la monoparentalidad y la inclusión laboral de la mujer como
aspectos que han generado cambios en la crianza de los hijos que no solo se han dado en el
país sino a nivel mundial, aportando un punto de comparación con otras investigaciones y
focalizándose en la adolescencia ya que muchas de las investigaciones de estilos de crianza se
realizaron en niños, autores como Ramírez (2005) plantean que las estrategias socializadoras
cambian y evolucionan a medida que crecen los hijos, debido a los nuevos requerimientos
que vienen con su desarrollo. Por lo que el estudio de estilos de crianza es diferente en niños
que en adolescentes y todavía más importante porque los estudios se basan en familias
nucleares
En relación a beneficios del estudio de la variable de estilos de crianza según García, Rivera
& Reyes (2014, p.134) concluyen que: “Padres que utilizaron el estilo orientado al amor fueron
más propensos a interiorizar los valores de sus padres, los cuales asumían como propios, a
diferencia de los niños de padres que utilizaban un estilo orientado a los objetos”. Recalcando
que los estilos de crianza basados en el afecto ayudan al desarrollo individual, al favorecer la
capacidad de absorber valores, pero no solo tiene efectos a nivel personal, sino que también
mejora sus relaciones interpersonales tanto con sus padres como con sus pares, razón por la
cual es importante investigarlo en nuestro contexto.
9
Sin embargo, lograr la aplicación de un adecuado estilo de crianza no es fácil, en especial
en una familia con estructura monoparental, lo cual tiene como consecuencia un aumento en
la aparición de distintos trastornos algunos de los cuales están relacionados con la agresividad
autores como Berk (1999) como citó Arias (2013, p.29):
“El comportamiento agresivo es multicausal, pero dado que el papel de la familia
en el desarrollo psicológico de la persona es indiscutible, el funcionamiento familiar,
es el mejor predictor de la aparición de las conductas agresivas, así como de su
tránsito hacia la delincuencia juvenil”.
Recalcando en como la participación de la familia es un factor de riesgo decisivo para la
aparición de comportamientos agresivos, razón por la cual se espera que tenga un impacto en
la participación de los padres y crear conciencia e interés sobre como la participación de los
padres, aunque sea en familia monoparental tiene efectos sobre la agresividad de los hijos.
A la agresividad se la toma más en cuenta en las últimas décadas tanto que la Organización
Mundial de la Salud (OMS, 2002) ha desarrollado Informe Mundial sobre Violencia y Salud
donde se recalca aspectos como definición, clasificación, formas y qué hacer ante la
violencia, este informe se daría por investigaciones como la de Chaux (2003); Farrington
(2004); Samper, Aparici & Mestre (2006) como citó Mestre, Samper, Tur Porcar, Richaud &
Mesurado (2012, p.1264) “Diferentes estudios concluyen un aumento de la conducta agresiva
y de la inestabilidad emocional desde los últimos años de la infancia hasta la adolescencia”.
Añadiendo a lo anterior Loeber y Hay (1997) como citó Rodríguez, Barrio & Carrasco (2013)
mencionando que comportamiento agresivo se presenta en un 75% de los hijos que
pertenecen a familias monoparentales durante un periodo estable de tiempo. Estableciendo un
aumento de comportamientos agresivos, los cuales según Mestre, Samper, Tur Porcar &
Cortés (2008, p.432) “El comportamiento agresivo suele presentarse en distintos lugares:
hogar, escuela y comunidad, y esto provoca deterioro clínicamente significativo de la
actividad social, académica o labora”. Llegando a establecer que ha existido un aumento en el
comportamiento agresivo, el cual no solo se presenta en el hogar sino también en la escuela y
comunidad, muchas veces creando un mayor malestar y llegando a dificultar la interacción no
solo con la familia sino también con otros espacios por lo que al notar comportamientos
agresivos dentro del hogar es necesario actuar de manera oportuna.
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Pero no muchas veces los padres de familias monoparentales se dan cuenta de los cambios
de comportamiento de sus hijos debido a sus nuevos roles, razón por la cual la agresividad
llega a presentarse e intensificarse en varios contextos, la importancia en su estudio aumenta
y aún más cuando tomamos en cuenta que la agresividad, puede ser aprendida, citando a
Carpio (2016, p.8):
“La respuesta agresiva de un niño es porque reacciona ante una situación de
estímulo respuesta, este conflicto es generado a través del aprendizaje vicario, es
decir tienen origen en el contexto familiar y se reproduce en el contexto escolar del
infante, todo aprendizaje es el resultado del medio ambiente donde el individuo se
desenvuelve, el individuo absorbe lo observable”.
Al ser la agresividad un comportamiento aprendido, no solo se puede reproducir dentro de
la familia por hermanos sino también puede llegar a el entorno escolar y llegando a ser
aprendido por los compañeros de clases y usado como método de control e imposición y
aunque no sea aprendido este tipo de comportamiento puede llegar a ser naturalizando, razón
por la cual es importante actuar desde la familia, al ser el espacio que más influencia tiene
sobre los adolescentes.
Debido a todo lo mencionado anteriormente se espera concluir que existe una estrecha
relación entre los estilos de crianza y agresividad, de forma de que esta investigación sirva no
solo para establecer una relación entre estas dos variables sino como base para ejecutar
programas o proyectos que ayuden a mejorar el diario vivir de las familias monoparentales.
11
MARCO TEORICO
CAPITULO I: ESTILOS DE CRIANZA
1.1 Aspectos Generales de los estilos de crianza
Al tratar el tema de estilos de crianza es inevitable no tomar en cuenta a la familia y su
papel dentro del desarrollo social, desde el punto de Schneider, Cavell & Hugnes (2006)
citado por Aroca & Cánovas (2012) la familia en las últimas décadas el primer agente social
y educativo que se relaciona con establecer reglas y normas de comportamientos en mayor
medida que otros agentes sociales. Considerando a la familia como el eje principal para el
aprendizaje de comportamientos, razón por la cual, los estilos de crianza aplicados por los
padres tienen vital importancia.
Con el fin de definir a los estilos de crianza me he visto en la necesidad de primero
recalcar que esta temática ha sido ampliamente estudiada donde diferentes autores para
referirse a la relación entre padres e hijos, usarían también otros términos, autores como
Torío, Peña & Rodríguez (2008) citado por Velázquez & Villouta (2013) donde para esta
relación se usaría términos como estilos de crianza, estilos educativos y por último el termino
estilos parentales, han sido visto como sinónimos. Recalcando como los estilos de crianza,
estilos parentales o estilos educativos son usados de la misma forma y serán tomados como
iguales durante la investigación.
Ahora aclarado esto podemos enfocarnos en la definición de los estilos de crianza,
tenemos en aportes de Torío et al. (2008) citado por Velázquez & Villouta (2013, p.14)
mencionan que:
“Los Estilos de Crianza representan la forma de actuar de los adultos respecto a
los/as niños/as ante situaciones cotidianas, la toma de decisiones o la resolución de
conflictos. Por lo tanto, en este proceso se ponen en juego las expectativas y modelos
de los/as padres/madres, quienes pretenden regular las conductas de los/as menores y
marcar unos parámetros que serán el referente tanto para comportamientos como
para actitudes de sus hijos/as”.
Otra definición la hallamos por parte de Darling & Steinberg (1993) citado por Capano &
Ubach (2013, p.87) “Los estilos educativos parentales son un conjunto de actitudes hacia los
12
hijos que les son transmitidas y que en su totalidad crean un clima emocional, en el cual se
expresan los comportamientos de los padres”. Y por último tenemos a Aroca (2010):
“Estilo educativo es el conjunto de pautas y prácticas de crianza, cuyo objetivo es
la socialización y educación de los hijos, donde interactúan rasgos de personalidad,
experiencias pasadas y características genéticas, tanto parentales como filiales, que
se contextualizan dentro de un sistema intra, meso y macro familiar inmerso, a su vez,
en un marco transcultural e histórico determinados” (p.84).
Los que podemos concluir de estas tres definiciones es que donde de las dos primeras
definiciones que el estilo de crianza se basa en la forma en cómo actúan los padres hacia los
hijos. Mientras que los tres conceptos difieren, el primero se enfoca expectativas de los
padres y la forma de control hacia los hijos, el segundo en como los estilos de crianza
influyen el clima emocional, y el tercer concepto enfocándose en pautas y prácticas de
crianza (comportamientos concretos de los padres hacia los hijos) y las características tanto
personales como del entorno que intervienen en la aplicación de distintos estilos,
manifestándose diferentes definiciones de estilos de crianza.
Pero hay algo en lo que están de acuerdo varios autores y es que la aplicación de los
distintos estilos, están sujetos a muchas variables, según Ceballos & Rodrigo (1998) citado
por Izzedin & Pachajoa (2009) muchos padres ya tienen definidas varias estrategias para el
control del comportamiento de los hijos, las cuales se expresan en las distintos estilos de
crianza y su uso dependerá de características de los padres como de los hijos.
Conociendo que la aplicación de los distintos estilos de crianza depende características de
hijos como de padres, de manera más específica las características de los hijos que
intervienen en los estilos de crianza han sido abordadas por Harris (2002) citado por Aroca &
Cánovas (2012) expresando que los padres no tienen un estilo de crianza prestablecido, ya
que el modo en como interactúa el padre con el hijo dependerá de su apariencia, edad, su
comportamiento, salud, etc. Aplicado el estilo de crianza en tomando todo esto a
consideración y llevado a cabo conjuntamente.
Mencionado varias características mucho más específicas de los hijos que intervienen en
la aplicación de los distintos estilos y como las diferencias propias de cada hijo alteran o
modifican como se ejecuta el estilo de crianza además de que la aplicación se hace de manera
bidireccional.
13
Aunque hemos visto características de los hijos tenemos un aporte aún más completo, el
cual fue realizado por Palacios (1988) citado por Ramírez (2005, p.168) donde:
“Postula que las prácticas educativas de los padres pueden estar determinadas
por una serie de factores que se dividen en tres grupos. Un primer grupo relacionado
con el niño: edad, sexo, orden de nacimiento y características de personalidad. Un
segundo grupo relativo a los padres: sexo, experiencia previa como hijos y como
padres, características de personalidad, nivel educativo, ideas acerca del proceso
evolutivo y la educación y expectativas de logro que tienen puestas en sus hijos. Un
tercer grupo relacionado con la situación en la que se lleva a cabo la interacción:
características físicas de la vivienda y contexto histórico”.
Concluyendo que en la aplicación de los estilos de crianza interactúan varios factores
como los personales, familiares, culturales y del contexto histórico, haciendo de esta una
variable compleja de analizar. En lo que es contexto histórico que solo se lo menciono
brevemente, tiene que ver con aspectos sociales, culturales, económicos del lugar, tiempo
donde se sitúa la familia, llegando a adaptarse los estilos de crianza a las particularidades del
entorno.
1.2 Modelos de estilos de crianza.
Dentro de las personas que han estudiado los estilos de crianza tenemos a varios
proponiendo varios modelos desde diferentes perspectivas algunas coincidiendo en algunos
aspectos y diferenciándose en otros, motivo por el cual comenzaremos con la pionera en el
estudio de este tema, Diana Baumrind quien planteo varias de las bases teóricas
fundamentales en el estudio de este tema.
1.2.1 Modelo de Diana Baumrind
Durante el estudio de los estilos de crianza Diana Baumrind en 1966 se identificó tres
estilos: el estilo autoritativo, estilo autoritario y estilo permisivo según Torío et al. (2013)
citado por Velásquez & Villouta (2008) Diana Baumrind es la investigadora más relevante en
cuanto al estudio de los diferentes estilos de crianza en su afán de determinar cómo estos
afectan en el comportamiento de niños y niñas, tomando en cuenta dentro de sus estudios la
interacción de tres variables como son el control, comunicación e implicación afectiva o
afecto-hostilidad.
14
Reconociendo la extensa labor de Baumrind en explicar que son estilos de crianza,
tipología, dimensiones entre otras cosas que se tomarían en cuenta dentro de su investigación.
De las distintas dimensiones abordadas por Baumrind autores como citó Ramírez (2005,
p.172,173) las detallarían:
En cuanto a la comunicación padres-hijos, existen padres altamente comunicativos,
utilizan el razonamiento para obtener la conformidad del niño, explican las razones de
las medidas punitivas, piden opinión, animan a expresar argumentos y escuchan
razones. Por el contrario, bajos niveles de comunicación caracterizan a padres que no
acostumbran a consultar a los niños ni a explicar reglas de comportamiento, utilizan
técnicas de distracción en lugar de abordar el problema razonando directamente con el
niño. Igualmente, el grado de comunicación permite establecer las diferencias entre
los distintos tipos de padres.
Respecto al grado de control, existen padres que ejercen mucho control sobre sus
hijos, intentando influir sobre el comportamiento del niño para inculcar determinados
estándares. Usan estrategias como la afirmación de poder, el castigo físico o la
amenaza y privan al niño de objetos o ventajas materiales, retirada de afecto e
inducción. El ejercicio del control puede manifestarse de forma consistente o
inconsistente. Según las estrategias utilizadas, tendríamos los cuatro tipos de padres
ya mencionados: autoritarios, permisivos, democráticos y negligentes.
Y, por último, teniendo en cuenta la dimensión de afecto-hostilidad en la relación,
existen padres afectuosos que expresan interés y afecto explícitos por el niño, por su
bienestar físico y emocional; y hay padres que muestran conductas contrarias, es
decir, hostiles. Por ello, de nuevo se evidencian las diferencias de los padres en esta
dimensión.
Estableciendo a la comunicación como un aspecto que incentiva o no al hijo a brindar sus
opiniones, argumentos como también refutarlos mediante la lógica, afecto-hostilidad como el
grado de interés y afecto que los padres tienen con sus hijos y el control cuya dimensión está
guiada por el conjunto de normas, reglas y en qué grado estas les otorgan autonomía a los
hijos. Todas estas dimensiones se involucran unas con otras permitiendo establecer los
distintos estilos de crianza y que es el resultado de la presencia en mayor o menor medida de
una u otra dimisión.
15
Mencionándose además que dentro de la dimensión de control se puede observar que se
divide en dos, la primera que viene a ser el control psicológico según Oliva, Parra & Arranz
(2008) viene a ser el uso de técnicas sugestivas y maniobras con el fin de generar culpa o
retirar afecto, llegando a ser aplicada cuando los hijos realizan comportamientos no
adecuados. Y otro es el control conductual que como menciona García et al. (2014, p.136) es
“El factor control conductual se refiere al otorgamiento de premios de los padres a los hijos
cuando cumplen con lo establecido por ellos”.
Estas dos formas de control son frecuentemente utilizadas por los padres, el control
conductual es el que se debería usar frecuentemente ya que, según Oliva et al. (2008) es el
control psicológico el que altera que genere autonomía personal afectando directamente en su
identidad personal, generando efectos en su individualidad. Esto tendría consecuencias a
futuro, ya que alteraría la capacidad de desenvolverse en los distintos entornos que rodea a la
persona dificultando el proceso de adaptación en distintos entornos.
1.2.2 Estilos parentales de Maccoby y Martin
Este modelo es propuesto posteriormente al de Diana Baumrind en 1966, según MacCoby
& Martin (1983) citado por Ramírez (2005) plantea que el estilo permisivo se puede dividir
de dos formas, un el estilo democrático-indulgente, que se caracteriza por ser permisividad y
afecto, y el segundo que es rechazo- abandono o indiferente, caracterizada por una relación
indiferente y aparada de su hijo.
Notando que el estilo permisivo no solo tiene una perspectiva como menciono Baumrind,
sino que este se divide en dos, el estilo democrático- indulgente y rechazo-abandono o
indiferente dando un total de cuatro estilos.
Para dar un total de cuatro estilos de crianza según Fuentes, García, Gracia & Alarcón
(2015, p.118) son dos dimensiones tomadas en cuenta que interaccionan dentro de este
modelo:
La dimensión aceptación/implicación hace referencia al grado en el que los padres se
implican de manera afectiva en la socialización de los hijos mostrándoles cariño,
ofreciendo su apoyo y comunicándose con ellos haciendo uso de la razón cuando
éstos se comportan de manera inadecuada.
16
La dimensión severidad/imposición se refiere al grado en el que los padres actúan de
manera estricta e impositiva para establecer los límites en su conducta e imponer así
su autoridad.
La dimensión de aceptación/implicación vendría a ser el grado afecto, comunicación y
apoyo que tienen los padres hacia los hijos y la dimensión de severidad/imposición vendría a
ser las reglas y normas que se le aplican.
1.2.3 Modelo de Darling & Steinberg
Dentro de este modelo para Darling & Steinberg (1993) citado por Arndt & Soto (2004,
p.190) definieron el estilo de crianza como “una constelación de actitudes hacia los niños,
que son comunicadas hacia él y que, tomadas en conjunto, crean un clima emocional en que
se expresan las conductas de los padres”.
Que vienen a ser una serie de actitudes de los padres hacia los hijos que crean el clima
emocional de la familia. Para establecer su modelo partieron de dos dimensiones las cuales
son, la dimensión apoyo y la de control.
En cuanto a la dimensión apoyo según Darling (1999) como citó Casais, Flores &
Domínguez (2017) mencionando que la dimensión de apoyo hace referencia al afecto, calidez
y al nivel en el que se estimula al desarrollo individual y como su propia autorregulación.
Mientras que según otro autor como es Velázquez & Villouta (2013):
“La dimensión apoyo, se define como una conducta expresada por el padre o la
madre hacia un/a hijo/a, que hace que el/la niño/a se sienta confortable en presencia
del mismo y confirme, en la mente del niño/a, que es básicamente aceptado/a como
persona” (p.15).
En estas dos definiciones de la dimensión apoyo se observa que tienen como objetivo
principal, el desarrollo propio del niño aceptándolo su individualidad y permitiendo su
desarrollo personal.
En cuanto a la otra dimensión que es el control según Darling (1999) como citó Casais,
Flores & Domínguez (2017 p.2719) se menciona:
“El control, por su parte, se relaciona con las exigencias de los padres, con las
demandas que hacen a sus hijos para integrarlos a la familia, para atender sus
17
demandas de madurez, supervisión, esfuerzos disciplinarios y de voluntad para
enfrentar al niño que desobedece”.
Otro aporte lo tenemos por parte de Torio, Peña & Rodríguez (2008) citado por Velázquez
& Villouta (2013) parte de que la dimensión control como un comportamiento que los padres
hacia los hijos, el cual se realiza con el fin de encaminar las acciones de los hijos de la
manera más adecuada según los criterios de los padres.
En cuanto estas definiciones tenemos que estas no son muy similares, Darling se enfoca en
el control, como factor para regular el comportamiento del hijo haciendo demandas de
madures y disciplinada, en la segunda definición de control, se representa como el padre
pretende guiar a su hijo según sus creencias de acerca de la crianza.
Aun así, del resultado de la interacción de estas dos dimensiones nos da como resultado
tres estilos de crianza según Darling & Steinberg (1993) como se citó en Reséndiz, Díaz,
Cuevas & Barranco (2008) surgen de la interacción de las dimensiones de control y afecto, ha
surgido el estilo autorizativo o democrático, caracterizado por un alto control y afecto, el
estilo permisivo con un bajo control y alto afecto y por último el autoritario que presenta un
alto control y bajo afecto. Estableciendo tres estilos de crianza que son considerados dentro
de este modelo.
1.3 Tipos de estilos de crianza.
Dentro de los modelos de los estilos de crianza se toman en cuenta tres o cuatro estilos, los
que vendrían a ser los principales representantes en esta temática, dentro de los cuales se
pasará a detallar los principales aportes hallados de cada estilo.
1.3.1 Estilo Autoritario
En este estilo de crianza cuyo concepto fue mencionado Aparici (2004) citado por
Senabre et al. (2012) refiriéndose a que es un estilo, donde la mayoría de comportamientos de
los hijos son negativos, razón por la cual se aplica reglas estrictas, cuyo incumplimiento tiene
consecuencias aversivas, llegando a relacionarlo principalmente con inestabilidad emocional
y comportamientos agresivos.
Otro aporte es el mencionado por Mayseless, Scharf & Sholt (2003) citado por García et
al. (2014, p.134) aclarando que:
18
“Los padres autoritarios intentan controlar las conductas y actitudes de los hijos
con un conjunto absoluto de normas; valoran la obediencia, el respeto a la autoridad
y la preservación del orden; carecen de sensibilidad hacia sus hijos, a los que
demandan una alta madurez debido a que son intolerantes ante comportamientos
inapropiados”.
Presentándose al estilo autorizativo como uno que intenta imponer normas y reglas
estrictas, tonándose intolerante cuando no se cumplen, utilizando castigos y riñas con el fin
de mantener el orden valorando aspectos como la obediencia, respeto y madurez, dejando de
lado el aspecto afectivo y ser considerado innecesario.
La obediencia que se presenta dentro de este estilo de crianza es vista por los padres según
Torío, Peña & Inda (2008) citado por Capano et al. (2016, p.419) “como una virtud,
mantienen a sus hijos subordinados y restringen su autonomía, provocando problemas en su
adaptación social y una disminución de la seguridad en sí mismos”.
Viendo a este estilo como la ausencia de autonomía y trayendo varios problemas como
adaptación social y seguridad, pero esto no solo trae consigo los problemas ya mencionados,
sino que la aplicación de este estilo según Baumrind (1968) citado por Izzedin & Pachajoa
(2009, p.111) donde los padres que ejercen este estilo de crianza le dan mucha importancia a
las reglas, normas y castigos, dejando de lado la interacción con los hijos y restringiendo el
desarrollo de la autonomía y creatividad.
Recalcando la ausencia de autonomía y aumentando el factor creatividad, alterando la
capacidad de los hijos de aprender comportamientos adaptativos que le permitan
desenvolverse en los distintos entornos pero existirían otros problemas como los
mencionados en aportes de Lila, van Aken, Musitu & Buelga (2006) citado por Oliva et al.
(2008, p.94) donde mencionan que los hijos criados bajo el estilo autoritativo son
“Igualmente, estos chicos y chicas son menos propensos a explorar identidades alternativas y
a adoptar valores morales propios pues son muy sensibles a la presión parental”. Y por último
tenemos a Maccoby & Martin (1983) Capano et al. (2016) mencionando que los hijos criados
bajo este estilo de crianza reflejan problemas a nivel emocional, debido al poco afecto que
reciben, lo que les lleva mostrarse poco afectivos, temerosos, coléricos, tristes y con por
capacidad de interiorización de valores.
19
Dando como resultado una gran variedad de problemas personales, familiares y
psicosociales que no permitirían tener un adecuado desenvolvimiento, presentándose
problemas en los diferentes contextos que interactúa.
En lo que respecta a la ausencia de autonomía que existe dentro de este estilo, he hallado
autores como citado por Fletcher, Steinberg & Williams-Weeler (2004); Pettit & Laird
(2002); Jacobson & Crockett (2000) como citó Aroca & Cánovas (2012, p.162) mencionando
en sus investigaciones que:
“No obstante, y ante la expectativa de que surjan nuevos datos que revelen lo
opuesto, diferentes autores coinciden en que, por una parte, el control que ejercen los
padres es conveniente para la prevención de conductas problemáticas en los hijos y,
por otra, contemplan la ventaja del control para el desarrollo y ajuste del
adolescente”.
Mencionando que el control tiene efectos positivos durante la crianza, pero la aplicación
excesiva de esta, tendría efectos negativos en los hijos restándole autonomía. Y llegando a la
conclusión de que existen más argumentos en contra que a favor en la aplicación del estilo
autoritario pues afectaría varias áreas necesarias para el desarrollo por lo que no se le
consideraría adecuado usar este estilo de crianza.
1.3.2 Estilo Autoritativo o democrático
Dentro de este estilo de crianza tenemos un concepto aportado por Ramírez (2005, p.172):
“Deriva su nombre de la práctica educativa de padres democráticos, que son los que
presentan niveles altos en comunicación, afecto, control y exigencias de madurez”.
Exponiendo que dentro de este estilo se observa que existen todas las dimensiones de los
modelos a un nivel medio a alto, a diferencia de los otros estilos donde una dimensión es
superior a otra o la ausencia de todas como en el estilo negligente. Este estilo es llegado a
considerarse según DeVores & Ginsburg (2005) como el estilo más adecuado para el
desarrollo de los hijos, llegando a ser relacionado con altos niveles de autoestima y bajos
problemas de ansiedad y depresión. Otros aspectos positivos más específicos son los
mencionados por Izzedin & Pachajoa (2009, pag.111):
“Los padres que adhieren a este modelo de crianza son más responsivos a las
necesidades de los hijos proveyéndoles responsabilidades, permitiendo que ellos
20
mismos resuelvan problemas cotidianos, favoreciendo así la elaboración de sus
aprendizajes, la autonomía y la iniciativa personal”.
Concluyendo que este estilo favorece el desarrollo personal, autoestima, autonomía,
llegando a ser considerado más como un factor de protección para los hijos, ayudando a los
padres a que el proceso de crianza sea más fácil en especial porque existe un balance entre el
control y autonomía que se da a los hijos, esto se logra según Velásquez & Villouta (2013)
mencionando: “Estos/as padres/madres se caracterizan porque intentan dirigir la actividad
del/la niño/a, pero utilizan el razonamiento y la negociación” (p.23). Dejando a sus hijos que
exploren, tomen la iniciativa en varios aspectos y no imponiendo los deseos de los padres,
llegando a un consenso en cuanto a los problemas que se pueden presentar, además de
facilitar el establecimiento de reglas y normas las cuales van a ser consensuadas y no
impuestas, la cual es llevada a cabo mediante la comunicación de ambas partes.
Como sabemos la comunicación algo vital para el desarrollo personal y familiar de los
hijos en especial dentro de estilo autoritativo, autores como Musitu & Soledad (1993) citado
por Ramírez (2005) han relacionado a los estilos de crianza y la comunicación en la familia,
mencionando que los padres que usaban estilos basados en apoyo y afectos, tienen más
niveles de comunicación, mientras que lo que usaban bajos niveles de comunicación, llegan a
usar más castigos.
Llagando a la conclusión de que la comunicación está íntimamente relacionada con los
estilos de crianza, donde mayores niveles de comunicación se ve reflejado con mayor apoyo
y afecto de los padres y viceversa.
Otro aporte importante es el realizado por Torío, López & Cols et al. (2008) citado por
Senabre et al. (2012, p.148) recalcando que: “Respecto al estilo autorizativo, los menores que
crecen en ambientes familiares caracterizados por el apoyo, el cariño y la comunicación
paterno-filial estimulan el desarrollo positivo del niño”. Nos trae como conclusión la
importancia del estilo autorizativo como parte fundamental para lograr un desarrollo positivo
en especial en las etapas tempranas de los hijos sin embargo lo generaliza a todos los tipos de
desarrollo. Así, más específicamente dentro de los tipos de desarrollo, según Bandura (1986,
2001) citado por Mestre, Tur, Samper, Nácher & Cortés (2007) el uso del estilo de crianza
autoritativo potencia el desarrollo social, el cual se ve reflejado en el aumento de la
motivación y facultad de escucha.
21
Por lo que el estilo autoritativo trae consigo un aumento en el desarrollo social se
presentaría como el adecuado para criar a los hijos, trayendo consigo efectos positivos que se
verán a nivel individual, familiar y sobre todo a nivel social facilitando las relaciones
interpersonales tanto con su familia como con sus pares y donde los problemas que surgen
durante el desarrollo surgirán de manera transitoria en relación a su edad de desarrollo.
1.3.3 Estilo Permisivo
Este estilo es conceptualizado por Nardone, Giannot & Rocchi (2003) citado por García et
al. (2014, p.135) mencionando que:
“Es un estilo libre que permite a los hijos regular sus propias actividades con
poca interferencia de los padres, debido a que no imponen reglas, solo las enuncian
sin consecuencias por su transgresión, situación que permite su fluctuación y
transformación constante”.
Aumentando lo anterior tenemos a Baumrind (1997) citado por Izzedin & Pachajoa (2009,
p.111) conceptualizando a este estilo como “El estilo permisivo o no restrictivo refleja una
relación padre e hijo no directiva basada en el no control parental y la flexibilidad”.
Reflejando que este estilo se caracteriza por la ausencia de control por parte de los padres,
donde los hijos están a cargo de sus propias actividades llegando a ser regulados por ellos
mismo y flexibles a la hora de ejercer control de los comportamientos de los hijos, esto se le
atribuye según Valdivia (2010) citado por Capano et al. (2016) a que los padres no saben
cómo relacionarse adecuadamente con sus hijos, además de su temor de criarlos de manera
incorrecta.
Los hijos que viven bajo un estilo permisivo llevan un estilo libre, donde ellos mismos
regulan sus actividades, existiendo una ausencia de reglas y normas además del miedo de los
padres de influir demasiado en sus hijos, la cual se refleja con una excesiva presencia
autonomía y flexibilidad, y debido a este temor que los padres y su falta de capacidad de
interactuar de manera adecuada con sus hijos, es que no existe ningún tipo de refuerzo sobre
cuales comportamientos son adecuados, llegando a el mismo establecerse normas y reglas
según su criterio. Los efectos que tiene el estilo permisivo de los padres en el hijo según
Sorribes & García (1996, p.164):
22
“A nivel de socialización, resaltar que las competencias sociales de los niños
criados en hogares permisivos son positivas, indicándose una gran espontaneidad,
originalidad, creatividad, a la vez que las relaciones con iguales son óptimas. No
obstante, tienen dificultades para controlar sus impulsos y son desobedientes cuando
no cumplen sus deseos, a la vez demandan cierta atención de sus padres y mantienen
cierta dependencia con ellos”.
Mostrando que tiene varios efectos tanto positivos que espontaneidad, creativas,
originalidad y en sus relaciones personales como también negativos mostrándose impulsivo y
desobediente ya que no sigue parámetros de comportamientos debido a que el aprendizaje
normas y valores sociales depende en su mayoría de en qué círculo social donde el hijo se
desarrolla y al no existir normas y valores estables el hijo se torna indiferente ante estas.
Aun así, reforzando lo positivo de este estilo de crianza según Gracia, Fuentes & García
(2010) citado por Capano et al. (2016) los problemas comportamentales que presentan los
adolescentes criados bajo el estilo permisivo son menores a diferencia de los que son criados
bajo estilos autoritarios y negligentes. Reforzando lo dicho anteriormente tenemos a autores
como Musitu y García (2005) citado por Oliva et al. (2008, p.94) mencionado que “los
adolescentes que crecen en hogares permisivos, aunque no suelen mostrar baja autoestima”.
Recalcando que la aplicación de este estilo no es el que tiene menos efectos negativos
debido a la afectividad o implicación que reciben los hijos, observando la importancia de la
variable apoyo o afecto que predomina en este estilo de crianza y estableciendo a los hijos de
padres autoritarios o negligente como lo que presentan aún más problemas.
1.3.4 Estilo Negligente
Los padres que utilizan este estilo de crianza son según Velázquez y Villouta (2013, p.25)
“Los/as padres/madres que ejercen este estilo de crianza se caracterizan por la escasa
implicación afectiva en los asuntos de sus hijos e hijas y por el abandono de su rol en la tarea
educativa de los/as mismo/as”. Otro aporte de este estilo de crianza lo tenemos de García et
al. (2014, p.135):
“Los padres negligentes muestran poco o ningún compromiso con su rol, no ponen
límites a sus hijos porque se carece de interés en hacerlo, son pocas las respuestas
23
afectivas o de control conductual en situaciones diarias y/o en aquellas en que
críticamente se requieren”.
Estableciendo que los padres que usan este estilo no muestras afecto alguno y mucho
menos control debido a la falta de interés en la crianza y escaso compromiso según Izzedin &
Pachajoa (2009) los padres tienden a pasar la responsabilidad de la crianza a personas
allegadas a la familia como abuelos, hermanos e hijos, permitiéndoles hacer lo que quieran
para no involucrarse.
Esta falta de efecto y control por parte de los padres se ve reflejado en la excesiva
autonomía, lo que nos lleva a las investigaciones realizadas por Mestre et al. (2004); Samper
et al. (2006) citado por Raya et al. (2009) recalcando que la desmesurada autonomía que se
da con este estilo de crianza es perjudicial, en especial en etapa la de desarrollo como la
adolescencia.
De manera más específica los efectos negativos que se le atribuyen a este estilo los
hallamos en aportes de Kurdek y Fine (1994); Steinberg (2001) citado por Oliva et al. (2008,
p.94) mencionando que:
“Así, la falta de afecto y supervisión propia de estos padres y madres tiene efectos
muy negativos para el desarrollo de estos chicos y chicas, que con frecuencia
presentan desajustes a nivel social como impulsividad, conducta delictiva o consumo
abusivo de sustancias”.
Otros autores como Knutson, DeGarmo & Reid (2004); Mazefsky & Farell (2005);
McCoy et al. (1999) citado por Raya et al. (2009) le atribuirían a este estilo de crianza como
un factor de riesgo importante para el desarrollo de comportamientos agresivos.
Teniendo como resultando que la aplicación del estilo negligente genera desajuste social,
impulsividad hasta actividades delictivas y consumo de drogas y marcando como
determinante para el desarrollo de comportamientos agresivos que es el punto esencial de la
investigación.
Llegando a la conclusión de que la aplicación del estilo negligente con traer consigo
efectos negativos, debido a la ausencia total o casi total de los padres en la crianza, razón por
la cual su uso no es recomendado de ninguna manera.
24
1.4 Los estilos de crianza y su relación con adolescentes.
Hay que tomar en cuenta que la crianza, en lo que se refiere a adolescencia abarca
mayores retos en los padres, modificando muchas veces las pautas del estilo de crianza que se
viene usando durante la niñez, ya que no son las más adecuado en la adolescencia y debido a
las nuevas exigencias que conlleva, según Segura & Mesa (2011) citado por Capano et al.
(2016, p.420):
“Es frecuente que cuando el control es muy severo los hijos terminen rebelándose
ante sus padres, especialmente al principio de la adolescencia, momento en el que
suelen buscar una mayor libertad y autonomía, mientras que sus padres y madres
intentan seguir manteniendo un control estricto”.
Debido a estas ansias de libertad y autonomía que surgen con la adolescencia aumenta el
nivel de control que los padres ejercen sobre los hijos, esto se debe al temor de que adopten
comportamientos inadecuados, llegando a ser excesivo el uso de control y castigos esto
generaría en el adolescente según Aroca & Cánovas (2012) bajas habilidades sociales, escasa
capacidad para asimilar reglas y normas, baja autoestima y dificultad en la toma decisiones.
Mientras que Pons & Berjano (1997) citado por Capano & Ubach (2013) relacionaría el
excesivo control y poco afecto con el consumo excesivo de alcohol durante la adolescencia.
Y por último tenemos a tenemos a Martínez, Estévez & Jiménez (2003) citado por Senabre et
al. (2012) mencionando que un estilo de crianza rígido con la aplicación excesiva de castigo
físico y violencia intrafamiliar se relaciona con respuestas agresivas.
Concluyendo que el exceso de acciones realizadas por las ansias de control de los padres,
son realizadas por motivación de conseguir un adecuado desarrollo de los hijos, trayendo
consigo la aplicación estilo autoritario que vienen con problemas como dificultad para tomar
decisiones por sí mismo como son baja autoestima, deficiencia en internalizar normas,
agresividad inclusive llegando hasta el consumo de alcohol.
Otros problemas que se le atribuyen al excesivo control vienen a ser más graves, llegando
inclusive a trastornos, autores como Newcomb, Mineka, Zinbarg & Griffith (2007) citado por
Cuervo (2010) plantean que el cuidado excesivo y la percepción negativa de la crianza está
relacionada con problemas como la depresión y ansiedad durante la adolescencia.
25
La aplicación de el estilo autoritario durante la adolescencia está relacionado con
múltiples problemas, algunos llegado a ser trastornos, poniendo al estilo de crianza que
priorizan el control sobre el afecto como un factor de riesgo para el desarrollo de los hijos. En
el lado opuesto del estilo autorizativo tenemos el permisivo, según Capano & Ubach (2013,
p.88):
“Los niños, luego adolescentes que viven en hogares con estilo permisivo
demuestran ser poco obedientes, tienen dificultad en la interiorización de valores,
viven situaciones de agresividad en la familia, tienen baja autoestima, padecen de
falta de confianza, tienen bajos niveles de control de sus impulsos, manifiestan
dificultades a nivel conductual, como ser el consumo de sustancias y alcohol”.
Presentando varios aspectos negativos en el uso de estilo permisivo los más
representativos son la baja autoestima y el consumo de sustancias durante la adolescencia
también otros autores como Fuentes et al. (2015) mencionarían que el uso de estilo permisivo
trae consigo inestabilidad emocional, presentándose con mayor frecuencia en familias que
usan estilo permisivo que en los otros estilos de crianza. Además de los problemas ya
mencionados, por ultimo tenemos a García & Gracia (2009) citado por Senabre et al. (2012,
p.152) “Trabajos similares apuntan a que el estilo indulgente y autorizativo caracterizado por
altos niveles de afecto y disposición a la respuesta se relaciona negativamente con el ajuste
comportamental en el adolescente”.
Recalcando que ajuste comportamental y la inestabilidad, baja autoestima, impulsividad,
consumo de sustancias entre otras varias, ubicando al estilo permisivo como un factor de
riesgo y perjudicial para el desarrollo del adolescente. También tenemos otro estilo como es
el negligente, que tendría los siguientes problemas mencionados por Aroca & Cánovas
(2012):
“Bajos niveles de afecto y control parental supondrían un estilo educativo
indiferente y con poca implicación en la educación del hijo. Lo más habitual es
encontrar a un adolescente cuyo desarrollo cognitivo es deficitario y con problemas
en sus relaciones interpersonales. En este apartado habría mayor número de jóvenes
antisociales o con graves problemas conductuales con su padre y madre” (p.161).
26
Anexando otras características tenemos por parte de Capano & Ubach (2013)
estableciendo que presentan problemas como falta de seguridad y estabilidad, problemas para
relacionarse con pares y bajos niveles de tolerancia a la frustración.
De forma resumida afecta al desarrollo personal y psicosocial, donde su baja capacidad
personal supondría una barrera que le dificulta la interacción consigo mismo como con otros
adolescentes y sus padres.
Por último, el estilo autorizativo, según Katainen, Räikkönen & Keltikangas-Järvinen
(1999); Pakaslahti & Keltikangas-Järvinen (1996) citado por Mestre et al. (2007, p.213) “Por
su parte, los adolescentes que reciben un feedback social positivo, y se perciben aceptados
por los demás, tienden a definir estrategias alternativas de resolución de problemas
relacionales, antes de manifestar comportamientos negativos”. Concluyendo que este estilo
caracterizado por altos niveles de control como de afecto, tendría efectos positivos durante la
adolescencia, favoreciendo el desarrollo del adolescente.
1.5. Los estilos de crianza en familias monoparentales.
Los estilos de crianza han tenido un gran cambio durante las últimas décadas, de pasar a
ser la familia clásica de padre, madre e hijos a ser un solo padre con su hijo/s, llamándose a sí
mismas, familias monoparentales, llegando a ser como mencionaría Valdivia (2007) citado
por Capano et al. (2016) una verdadera revolución familiar con grandes cambios en su
dinámica familiar.
Debido a esta revolución familiar, esta conlleva una serie de transformaciones, sobre todo
en los estilos de crianza y su carácter bidireccional, razón por la cual requerirá una serie de
cambios por parte de todos los integrantes con el fin de adaptarse a la nueva realidad y evitar
problemas en el desarrollo de los hijos, pero cuales serían estos cambios según García &
Constante (2011) citado por Puello, Silva & Silva (2014, p.228) “Expresan que la familia
funciona de acuerdo con su tipología estructural, y cuando la familia es uniparental, las
reglas, los roles, la jerarquía y la comunicación se ajustan para mantener el funcionamiento y
adecuarse a la nueva estructura”. Por lo que se concluye que la aplicación de los estilos de
crianza debe considerar todos los cambios mencionados, además de la colaboración de todos
los integrantes de la familia y así adaptarse a sus nuevos roles.
27
En muchas ocasiones las familias monoparentales no logran una adaptación adecuada,
donde el padre que quedó a cargo de los hijos a cargo de la crianza, tiende a cambiar el estilo
de crianza aun así según Oliva et al. (2008, p.100) “Mientras que los estilos democráticos
fueron más usuales en las familias tradicionales y menos en familias monoparentales, con los
estilos estrictos ocurría exactamente lo contrario, ya que se presentaban con más frecuencia
en hogares con un solo progenitor”.
Concluyendo que el estilo democrático o autorizativo se presenta con mayor frecuencia en
familias clásicas y tiende a disminuir en familias monoparentales, dando lugar a que surja
estilos basados en el control como es el autoritario a fin de evitar que los hijos aprendan
comportamientos inadecuados.
Otros autores como Simons & Chao (1996) citado por Cantón, Cortés & Justicia (2002)
expresan que en familias monoparentales los estilos de crianza afectan aspectos como el uso
adecuado de estrategias disciplinarias o falta de supervisión, favoreciendo el desarrollo de
comportamientos delictivos. Relacionando a las familias monoparentales con estilos como
permisivo o negligente, los cuales se originan por la necesidad de trabajar o por la presencia
de más responsabilidades que antes eran compartidas con la pareja y asumidas por los hijos
mayores.
La aplicación de estos estilos con bajos niveles de control trae consigo varias
consecuencias, según Florsheim, Tolan & Gorman Smith (1998) citado por Cantón et al.
(2002) las prácticas de crianza inadecuadas con hostilidad, bajo control e inconsistentes están
relacionados con comportamientos impulsivos y desafiantes, además de su atracción por
actividades delictivas. Otros efectos tenemos de autores como Capano & Ubach (2013. p.88)
mencionarían otros efectos:
“La falta de afecto, de supervisión y guía, de estos niños y adolescentes conlleva
efectos muy negativos en el desarrollo de los mismos: sienten inseguridad e
inestabilidad, son dependientes de los adultos, tienen dificultad de relación con sus
pares, tienen baja tolerancia a la frustración”.
Mencionando varias características negativas más que afectan tanto el desarrollo personal,
familiar, social, etc. Para evitar todos estos problemas en los hijos, autores como Cuervo
(2010) recomienda que:
28
“La familia debe considerar los cambios en la estructura y dinámica familiar que
pueda alterar las pautas de crianza (valores, normas, comunicación, solución de
problemas y regulación emocional, entre otros) para evitar generar inconsistencias y
conflictos durante la infancia o para generar estrategias de afrontamiento y de
resolución de problemas que faciliten el desarrollo adecuado durante la infancia”
(p.118).
Al considerar todos estos cambios y llevarlos a cabo dentro de la familia monoparental, se
reduce enormemente futuros problemas en el desarrollo de los hijos autores como Mestre et
al. (2007, p.213) mencionan que, en familias estables con reglas, normas y sobre todo valores
bien establecidos, lo problemas que se presenten durante la adolescencia transcurrirán de
manera breve y sin muchas complicaciones.
Concluyendo que todas las dificultades serán de forma transitoria y de ahí la importancia
de un proceso de crianza adecuado. Además, la existencia de un solo padre en la estructura
familiar solo es un factor de riesgo por lo que Clack & Barber (1994) citado por Cantón et al.
(2002, p.48) “No obstante, los adolescentes que viven en hogares intactos, pero con escaso
interés del padre por ellos tienen menor autoestima que los de hogares monoparentales en su
situación”.
Recordándonos que el estilo de crianza, aunque sea en una familia monoparental, si se le
toma la debida importancia, traerá consigo efectos positivos en el adolescente evitando así
futuros problemas y logrando un desarrollo integral.
1.6. Estilos de crianza y agresividad
Durante el estudio de los distintos estilos de crianza algunos han sido ampliamente
relacionados con la agresividad según De la Torre, García-Linares & Casanova (2014) citado
por Capano et al. (2016, p.419) “refieren que la percepción por parte de los adolescentes de
un estilo de crianza autoritario se encuentra asociada a mayores manifestaciones de
agresividad”. De manera que la agresividad es aprendida según Castillo, Sibaja, Carpintero &
Romero (2015) como un mecanismo básico de supervivencia de los excesivos castigos y
formas de control de padres o hermanos, motivo por el cual aprende formas agresivas de
interacción.
29
Por lo que el estilo de crianza autoritario junto a sus características, están relacionadas
con el aprendizaje de comportamientos agresivos ya sea por experiencia u observación.
El estilo de crianza autoritario no ha sido el único que se le ha relacionado a la
agresividad, autores como Tur-Porcar, Mestre, Samper & Malonda (2012) citado por Senabre
et al. (2012, p. p.147) “hacen hincapié en la relación de determinados factores punitivos de la
crianza, como son la hostilidad, la negligencia y la permisividad, con el comportamiento
agresivo de los hijos”. Anexando a lo mencionado anteriormente tenemos a García-Linares
(2014) citado por Capano et al. (2016) en su estudio concluyeron que los estilos de crianza
que más se relacionan con comportamientos agresivos vienen a ser los rígidos e indulgentes.
que los estilos permisivos y negligente, favorecen al desarrollo de comportamientos
agresivos.
Aunque hemos visto que los comportamientos agresivos se presenten en estilos
autoritarios, permisivos y negligentes estos no se presentan en el mismo nivel según Gracia et
al. (2010) citado por Capano et al. (2016, p.418) “Cabe aclarar que los problemas de
conducta que presentan los adolescentes con padres permisivos son menores que los que
presentan los adolescentes con padres autoritarios y negligentes”. Formulando que el estilo
autoritario y negligente son lo que generan mayores problemas comportamentales en relación
al estilo permisivo donde el afecto reduce la incidencia de comportamientos agresivos.
Y por último enfocándonos en el estilo autorizativo o democrático, en estudios realizados
por Roa & Del Barrio (2002); Tur, Mestre & Del Barrio (2004) citado por Raya et al. (2009,
p.212):
“Han demostrado que un estilo educativo excesivamente autoritario o por el
contrario excesivamente permisivo favorece la aparición de conductas agresivas en el
niño, mientras que un estilo autoritativo, caracterizado por altos niveles de apoyo,
supervisión y flexibilidad actúa como factor protector de la conducta agresiva”.
Otros autores reforzarían lo mencionado anteriormente tenemos a Senabre et al. (2012,
p.153) mencionando: “Así, la educación basada en la aceptación e implicación de los
progenitores se vincula con hijos menos agresivos”.
Concluyendo que el estilo autoritativo o democrático como el que más adecuado no solo
porque evitar generar diversos problemas comportamentales entre ellos la agresividad, sino
30
que la aplicación de este estilo conlleva un desarrollo integral tanto en la niñez como en la
adolescencia, en especial en familias monoparentales.
31
CAPITULO II: La agresividad
2.1 Aspectos generales de la agresividad
La agresividad, este término ha sido ampliamente investigado por muchas personas,
debido a la importancia que se le ha otorgado dentro de la sociedad, razón por lo cual ha
adquirido protagonismo en las últimas décadas, esto ha proporcionado muchos aportes tanto
en el concepto, etiología como otros aspectos, en lo que se refiere el concepto, Johnson
(1972) como citó Andreu (2010) indica que el termino agresividad se le ha atribuido tantos
significados que en su aplicación ha perdido su significado. Por lo que el concepto de
agresividad es usado de manera indiscriminada para referirse a una variedad de
comportamientos del tipo violento.
Aun así, vamos a mencionar algunos conceptos de agresividad según Bushman (2002)
citado por Carrasco & González (2006, p.8) menciona que es “Cualquier comportamiento
dirigida hacia otro individuo, que es llevada a cabo con la intención inmediata de causar
daño”. Enfatizando el carácter intencional de hacer daño a otra persona. También tenemos
otro aporte presentado por Berkowitz (1996) citado por Andreu (2010, p.9) “La agresividad
hace referencia a la disposición relativamente persistente de ser agresivo en varias situaciones
diferentes”. Manifestando a la agresividad como un comportamiento presente a durante un
periodo significativo de tiempo, ya que puede ser resultado de una respuesta al entorno hostil.
Y por último Bandura (1972) como citó Carrasco & Gonzales (2006, p.8) “Conducta
adquirida controlada por reforzadores, la cual es perjudicial y destructiva”. Definiendo a la
agresividad como un comportamiento cuyo aprendizaje dependerá de los reforzadores
externos.
Concluyendo que los distintos conceptos de agresividad toman en cuenta tantas
características tanto individuo como del entorno, las cuales influyen en mayor o menor
medida según Carrasco & González (2006, p.8) las características en las que coinciden la
mayoría de conceptos son:
a) Su carácter intencional, en busca de una meta concreta de muy diversa índole, en
función de la cual se pueden clasificar los distintos tipos de agresión.
32
b) Las consecuencias aversivas o negativas que conlleva, sobre objetos u otras
personas, incluido uno mismo.
c) Su variedad expresiva, pudiendo manifestarse de múltiples maneras, siendo las
apuntadas con mayor frecuencia por los diferentes autores, las de índole física y
verbal.
Recalcando que, de todas las características de la agresividad, este comportamiento
agresivo no se presentaría solo de manera físicas, sino que también verbal o material,
existiendo una variedad de formas de presentarse y por supuesto es de esperarse que estos
comportamientos agresivos tendrían consecuencias según Aguilar (2008) citado por Chamba
(2015, p.21) serían las siguientes:
a) Romper el dialogo o hacerlo más difícil para situaciones posteriores.
b) La persona agresiva es rechazada y se le etiqueta negativamente, aun agregándole más
críticas a fallas que no tienen en realidad.
c) Los actos agresivos no provocan normalmente sentimientos de satisfacción, sino
principalmente la culpabilidad.
d) La agresión provoca muchas veces agresividad como respuesta y la probabilidad de
que se intensifique rápidamente la interacción negativa haciéndose más violenta es
muy alta.
e) El dolor repetido en el intercambio social infringido por la agresividad promueve
inevitablemente el deterioro moral, psicológico, incluso de la salud física de los que
participan, como también la desintegración y el rompimiento en las relaciones.
f) La acción agresiva provoca normalmente resentimientos difíciles de manejar.
g) El agente agresor promueve el temor a su alrededor.
h) La persona muy agresiva acaba por lo general quedando muy sola.
En donde la agresividad generaría consecuencias aversivas tanto a nivel individual como
también social, generando que este comportamiento aversivo se mantenga e intensifique y
produciendo consecuencias no solo en el agresor sino también quienes presencian el acto
agresivo autores como Leite (2012) citado por Chamba (2015) menciona consecuencias para
los espectadores de la siguiente manera:
a) No saber cómo actuar cuando presencia comportamientos agresivos hacia otros.
33
b) Aprendizaje a través de modelos inadecuados de actuación por medio exposición,
observación y refuerzo.
c) Disminución de sensibilidad cuando se observa comportamientos agresivos en otras
personas, de manera que se naturaliza.
d) Adquisición de métodos inadecuados de obtener sus objetivos.
e) Preludio para efectuar comportamientos delictivos.
f) Reconocimiento y estatus dentro de su grupo de pares.
g) Reproducción de comportamientos agresivos en otros ámbitos (por ejemplo: en el
entorno académico, de familia, etc.)
Concluyendo que en el observador tiene una predisposición para el aprendizaje y
generalización además de falta de sensibilidad, llegando a naturalizar los comportamientos
agresivos. Afortunadamente a pesar de todas las consecuencias de la agresividad tanto en el
agresor como en el espectador, no en todos se presenta con la misma duración según Moffit
(1993); Moffit, Caspi, Dickson, Silva & Stanton (1996); Moffit (2003) citado por Carrasco &
Gonzales (2006, p.29) los agresores los clasificaron:
a) Los agresores de curso persistente, cuyas conductas agresivas se inician a los tres
años y continúan empeorando progresivamente a lo largo de los años persistiendo en
la vida adulta. El origen de sus conductas se encuentra en los procesos neurológicos
del desarrollo (temperamento incontrolable, anormalidades neurológicas, retraso
motor, bajo nivel intelectual, dificultades de lectura, memoria deficitaria,
hiperactividad y baja tasa cardiaca) y adversidades familiares (familias
monoparentales, madres con retraso mental, maltrato familiar, disciplina
inconsistente, conflicto familiar, bajo nivel económico y rechazo por parte de los
iguales).
b) Agresores de curso limitado a la adolescencia, cuyo origen se encuentra en los
procesos sociales que comienzan en la adolescencia y desisten en la vida adulta, como
son la delincuencia del grupo de iguales, las actitudes inmaduras ante la adolescencia
o la adultez y el deseo de autonomía.
En esta clasificación podemos observar que la agresividad no siempre es persistente a lo
largo de la vida razón por suele declinar en algún momento del desarrollo y que para que se
presente a lo largo de la vida es necesario que no solo se presente un factor de riesgo sino
varios los cuales veremos a continuación.
34
2.1.1 Factores de Protección
Dentro de los factores de protección existen varios donde cuyo objetivo es lograr un
desarrollo integral y evitar específicamente el que se generen comportamientos inadecuados
más específicamente dentro de este capítulo del tipo agresivo según Carlo et al. (2010);
Garaigordobil (2009); Mestre, Samper & Frías (2002); Vaish, Carpenter & Tomasello (2009)
citado por Mestre et al. (2012, p.1264) estableciendo que habilidades como la empatía,
preocupación, comprensión y acercamiento hacia otros como factor protector de
comportamientos agresivos.
Postulando la importancia de la empatía para evitar comportamientos agresivos debido a
su carácter de ponerse en el lugar otros comprendiendo pensamientos, emociones y
comportamientos que tiene otra persona. Otro factor de protección es el mencionado por
Bermúdez, Teva & Sánchez (2003) citado por Mestre et al. (2012, p.1264):
“Las personas más estables emocionalmente poseen una mayor autoestima, más
capacidad de autocontrol en situaciones adversas, en definitiva, tienden a la
planificación de la acción, actuando de forma eficaz y al afrontamiento de
situaciones, aprendiendo de estas aun cuando suponen fracaso”.
Mencionando que la autoestima favorecería los procesos de afrontamiento, autocontrol y
planificación, donde obviamente al tener más control de sus comportamientos, favorecen al
desarrollo de estrategias más adecuadas evitando así comportamientos agresivos.
Y por último tenemos al abordado por Cook et al. (2010); Estévez et al. (2012) citado por
Martínez, Ruiz, Zurita, Chacón, Castro & Chacón (2017, p.136) “Las diversas disciplinas
físico-deportivas aumentan claramente comportamientos prosociales que pueden disminuir
conductas agresivas, como se manifiesta en investigaciones relevantes”. Anexando lo
anteriormente mencionado tenemos a Magnan, Kwan & Bryan (2013); Chahín-Pinzón &
Libia (2011) citado por Martínez et al. (2017) la actividad física tiene además de beneficios
fisiológicos también psicológicos, interviniendo en los niveles de agresividad y control de
impulsos.
Recalcando a través de estos autores que las actividades físico deportivas son creadoras de
comportamientos pro sociales sirviendo como regulador de comportamiento agresivos. Que
35
dando como conclusión que existen varios factores personales que es necesario tomar en
cuenta durante el tratamiento psicológico.
También se tomarán en cuenta a la familia llegando a ser el primer espacio de
socialización y en especial como comportamientos de los padres pueden ser considerados
factores de protección, autores como Moreno, Echavarría, Quiñones & Pardo (2014) citado
por Carpio (2016, p.9):
“Afirman que la familia saludable posee características como ser la fuente de
autoridad, estabilidad y apoyo a largo plazo, de tal manera que muestre suficiente
flexibilidad para adaptarse a los cambios normales del desarrollo, así como a
aquellas crisis inesperadas”.
Mostrándose que la estabilidad, apoyo y flexibilidad dentro de la familia son importantes,
de manera que la familia pueda adaptarse y manejar cualquier crisis en los hijos, protegiendo
la aparición de comportamientos propios de la adolescencia.
En relación a la familia también tenemos a Motrico, Fuentes & Bersabe (2001) & Larson,
(s/f) citado por Ceja (2016) recalcando que los padres que muestran autocontrol ante
situaciones complicadas sirven como modelo en los hijos, otorgando estrategias de cómo
manejar sus comportamientos y sentimientos a sus hijos.
Estableciendo la importancia que tiene la familia en especial los padres ya que estos
actúan como modelo de control de la ira y demostrando su capacidad para adaptarse a
circunstancias adversas, demostrando la importancia de autocontrol ante situaciones difíciles.
El ámbito escolar como segundo espacio de socialización donde tanto niños como
adolescentes pasan una gran cantidad de tiempo, aprendiendo a interactuar con otros, autores
como Webster-Stratton & Taylor (2001) citado por Sanabria & Uribe (2010) mencionan que
un entorno escolar saludable favorece el desarrollo de comportamientos pro sociales
mejorando la interacción entre estudiante y con los profesores. Más específicamente según
Verlinde et al. (2000) citado por Cid, Diaz, Perez, Torruella & Valderrama (2008, p.25)
“Observaron que los niños que tuvieron profesores que mantenían el orden en la sala de
clases y proporcionaban claras guías para una conducta aceptable, mostraron menos agresión
en los cursos superiores”.
36
Mostrando que un buen ambiente escolar junto con el manejo adecuado de los profesores
con el uso de reglas y normas claras favorece el desarrollo de buenas relaciones con sus
alumnos, llegando a desarrollar comportamientos pro sociales en los estudiantes.
Concluyendo a partir de esto que existen varios factores de protección que van desde
individuales, familiares y académicos, que evitan la aparición de comportamientos agresivos.
2.1.2 Factores de riesgo
Cuando abordamos factores de riesgo nos referimos aquellos componentes que favorecen
el desarrollo de una situación, que en este caso son comportamientos agresivos, los cuales
han sido abordados en parte por las teorías de agresividad sin embargo hay varios factores,
trastornos o circunstancias específicas que no se toman en cuenta dentro de estas teorías que
mencionaremos como Del Barrio, Moreno & López (2001); Tur et al. (2004) citado por
Mestre et al. (2012, p.1264) mencionan que la inestabilidad emocional como factor de riesgo
para la presencia de agresividad tanto física como verbal, dificultando el desarrollo
comportamiento pro sociales y empáticos. Viendo esta incapacidad de controlar las
emociones como una característica dificulta la capacidad de establecer relaciones
interpersonales.
Otra característica que viene a constar como factor de riesgo es la impulsividad,
recordando que muchas veces es tomada en cuenta es los distintos reactivos psicológicos que
pretenden medir la agresividad, autores White, Moffitt, Caspi, Bartusch, Needles &
Stouthamer-Loeber (1994) citado por Andreu, Peña & Penado (2012, p.442):
“Es evidente que la impulsividad constituye uno de los factores más importantes
en el desarrollo de comportamientos agresivos durante la etapa de la niñez y la
adolescencia, tanto como factor conductual referido a la desinhibición e inquietud
motora, como factor cognitivo que implica una importante falta de previsión y
planificación de la conducta”.
La impulsividad actuando a nivel conductual, cuyo efecto tiene consecuencias en el
control motor actuando de manera agresiva sin previa premeditación y dentro del componente
cognitivo alterando toda su capacidad de elaboración de estrategias adecuadas.
37
Otros de los aspectos individuales que influye en la agresividad son resultado de la
investigación de Mestre et al. (2012, p.1265) mencionando que: “El afrontamiento implica
siempre la adquisición de un cierto control de la situación, que puede oscilar entre un
dominio total y un mero control de las emociones suscitadas por el evento estresante”. En
donde, muchas veces la falta de estrategias de afrontamiento ocasiona en las personas
comportamientos agresivos por lo que es importante fomentar al desarrollo de una diversidad
de estrategias, por lo que los adolescentes entre 12 y 15 años usualmente que las estrategias
de afrontamiento sean del tipo relajantes, como actividades físicas, tener éxitos personales,
concentrarse en solucionar el problema (Mestre et al., 2012).
Mencionando que la edad no sería algo significativo en el desarrollo de estrategias de
afrontamiento, ya que sin importar la etapa del desarrollo donde se encuentre la persona, se
busca en que la mayoría de estrategias sean de actividades de ocio y autorrealización, muchas
de las cuales pueden ser aplicadas diariamente en especial cuando existen problemas
comportamentales entre ellos la agresividad.
Recordando que entre las estrategias de afrontamiento están las actividades deportivas
autores como Stafford, Alexander & Fry (2013) citado por Martínez et al. (2017, p.137):
“Aunque señalan que la práctica deportiva puede ser transmisora de
contravalores que convierten al deporte en un vehículo transmisor de elementos
agresivos y nocivos para el desarrollo personal de los adolescentes y que
desencadenan en procesos de bullying y agresividad que constituyen elementos de
vulnerabilidad social”.
Planteando esta actividad como transmisora de contravalores y favoreciendo al desarrollo
de comportamientos agresivos, algo que es completamente opuesto a lo anteriormente
mencionado, pero aun así cabe recalcar que este estudio se realizó en adolescentes que
practicaban deportes de contacto.
Y entre los factores de riesgo, hay varios relacionados con la familia, según Patterson
(1986) citado por Aroca & Cánovas (2012, p.161) determina que:
“Lo que nos lleva a concluir que determinados padres y madres establecen un
ciclo de violencia parento filial que puede tener como consecuencia el aprendizaje de
38
nuevas conductas violentas y de relación por parte del hijo/hija, así como un estilo
coercitivo parental”.
En donde, la existencia de agresividad dentro de la familia, especialmente de los padres
puede traer como consecuencia el aprendizaje de comportamientos violentos, existiendo
como modelos de aprendizaje o por experiencia propia, y cuyo valor funcional de los
comportamientos agresivos se efectúa como medio de defensa de la propia familia.
También se lo asocia con otras características parentales ya que autores como Del Barrio
& Roa (2006) citado por Raya et al. (2009, p.213) mencionarían que:
“También existen otros elementos familiares relacionados con la tendencia a la
agresión como pueden ser la violencia paterna, el alcoholismo, la depresión, la
calidad de las relaciones y las desavenencias matrimoniales, el divorcio o la
monoparentalidad”.
Estableciendo que existe una gran variedad de aspectos familiares en especial en relación
a los padres que, entre hermanos, los cuales predisponen a generar comportamientos
agresivos y debido a que la familia es el primer espacio de socialización es necesario eliminar
el mayor número de factores de riesgo dentro del núcleo familiar.
En cuanto a aspectos escolares tenemos Rutter et al. (2000) citado por Sanabria & Uribe
(2010, p.260) mencionando que: “En resumen, se señala que algunas dinámicas en los centros
educativos como la inasistencia, el fracaso y el vandalismo escolar y las agresiones entre
compañeros son factores asociados a conductas antisociales y delictivas en los jóvenes”.
Recalcando varios aspectos relacionados a nivel escolar, donde los compañeros de clases
sirven como modelo de aprendizaje de los comportamientos agresivos, el cual muchas veces
se aprende con el fin de identificarse dentro de un grupo.
También dentro del contexto escolar se involucra aspectos académicos según Swain
(1991) citado por Sanabria & Uribe (2010) la percepción del estudiante de su desempeño
académico influye directamente en la autoestima, llegando a relacionar unos bajos niveles de
autoestima con comportamientos antisociales.
39
Estableciendo que aspectos individuales como la autoestima afecta en la apreciación de
que se tiene uno mismo, donde a menos rendimiento académico más comportamientos
antisociales pueden generar.
Y por último aspectos culturales, los cuales fueron mencionados por Shaffer (2000) citado
por Castillo (2006, p.168) “También observa que las tendencias agresivas o antisociales de
las personas dependen en gran parte del grado en que su cultura o subcultura fomente o
acepte la cultura de este tipo”.
Donde el comportamiento agresivo es más posible que se presente si es aceptado en el
medio donde se encuentra y por lo tanto seria visto por el agresor como una forma común de
relacionarse con los demás.
Entre las características más frecuentes que hay, están las propuestas por Abrahán (1996);
Farrington (1992); OPS, (2002); Taylor, citado en Frías, López & Díaz (2003) citado por
Sanabria & Uribe (2010, p.260) mencionando que: “Por eso no es extraño observar que las
personas con comportamientos delictivos habitan en contextos sociales desfavorecidos,
deteriorados, desorganizados, con baja supervisión policial, con ventas de drogas ilegales y
alcohol”.
Mencionado la importancia del contexto cultural, donde sí se crece en un entorno
desfavorable con la presencia de varios modelos de comportamiento agresivo, hay una mayor
posibilidad que este tipo de comportamientos puedan ser aprendidos.
2.2. Teorías de la Agresividad.
Cuando hablamos de agresividad existen múltiples teorías, las cuales han tratado de
explicar su origen, según Castrillón, Ortiz & Vieco (2004) citado por Castillo (2006, p.167)
manifiestan que:
“Es indudable entonces, que, cuando se habla del comportamiento agresivo, se
hace referencia a una multicausalidad, pues, tal comportamiento está influenciado
por diferentes factores: social, cultural, genético y biológico, tanto a nivel familiar
como individual, justificándose, así, el abordaje desde diversos enfoques teóricos”.
Llegando a considerar tantos aspectos que implica el comportamiento agresivo que varios
autores proponen múltiples teorías con el fin de explicar a qué se debe este comportamiento.
40
2.2.1 Modelo instintivo
Dentro del modelo instintivo según Londoño (2010) citado por Carpio (2016) menciona
que la agresividad halla en el interior de todo ser humano de manera innata por lo que se la
encuentra desde el nacimiento de toda persona. Considerando a la agresividad como algo que
no depende de nosotros si la tenemos o no, ya que esta se presentaría de igual manera, autores
como son Contini (2015, p.38) de la observación a peses de coral y de estudios
experimentales con ratas, detalla diversas funciones de la agresión que pueden sintetizase en:
a) El cambio de conducta de sociable a agresiva cuando las ratas se encontraban con
otras que no pertenecían a la misma comunidad.
b) Territorialidad: la agresividad se desencadena al acercarse un animal de la misma
especie al territorio del otro.
c) Defensa de los hijos: analiza cómo la agresividad aparece con relación a la defensa
de aquellos: en los animales en los cuales uno de ellos está destinado al cuidado de la
cría, sólo éste es potencialmente agresivo con sus congéneres.
d) Establecimiento de una jerarquía dentro de la sociedad animal organizada. Según
Lorenz (1998) citado por Contini (2015, p.38) pudo comprobar que cada uno de los
integrantes que vivía en una sociedad sabia identificar quien era más fuerte que él, o
más débil.
e) La agresividad hace posible la emergencia de vínculos amistosos entre lo sujetos.
Estos comportamientos, que se los puede considerar agresivos no lo son considerados del
todo ya que Carrasco & González (2006, p.15) mencionarían que: “Los etólogos interpretan
el comportamiento agresivo, tanto animal como humano, dentro del proceso de selección
natural, el cual evolucionó al servicio de diversas funciones, de ahí su carácter funcional”.
Añadiendo a lo anterior tenemos a Contini (2015) “Ofrece numerosos ejemplos de estudios
con animales en los que es experto y plantea que la agresividad no es un fenómeno
intrínsecamente malo, sino que cumple una función esencial en la conservación de la especie”
(p.38).
41
Llegando a considerar a la agresividad algo intrínsecamente bueno debido a su carácter
funcional, donde el objetivo sería principalmente el de la preservación de la especie.
A pesar de todo lo argumentado, existen varios puntos que no han sido tomados en cuenta
en este modelo ya que muchas de las investigaciones realizadas son efectuadas en animales
tratando de globalizar los comportamientos en todas las especies incluidos los seres humanos
y olvidado la compleja estructura psicológica del ser humano o como diría Tinbergen (1951)
citado por Carrasco & González (2006, p.15):
“El hombre, dentro de la escala evolutiva, habría superado su propia escala
genética, de modo que apenas responde a los estímulos agresivos como lo hacía en el
pasado, o como lo hacen otras especies, principalmente por parte de los machos”.
Dejando esta teoría con varios aspectos al azar que son necesarios tomar en cuenta y por
lo que no es muy aplicada dentro del contexto humano, debido a la complejidad de sus
acciones.
2.2.2 Bases biológicas de la agresividad
Sobre las bases biológicas desde hace mucho tiempo se ha investigado sobre las relaciones
entre el cerebro y la agresividad, esto se ha ido intensificando sobre todo con los avances
tecnológicos en áreas como son la bioquímica, imagenologia, bioquímica, neurofisiología,
etc.
La agresividad ha sido relacionada con varias estructuras entre las que más sobresalen
según De Cantarazzo (2001) Champi (2012) Las respuestas adaptativas como sed, miedo,
hambre, motivación sexual y la agresividad están relacionadas con los sistemas límbicos
como hipotalámicos. Otra estructura cerebral es citada por Blair & Cipolotti (2000); Blair
(2001) citado por Carrasco & González (2006) relacionarían a las lesiones el córtex orbito
frontal con la agresividad, también tenemos a Raine, Buchsbaum & LaCasse (1997) gyrus
parietal superior, y a ciertas anomalías en la asimetría cerebral. Y por ultimo Martel (2001)
citado por Champi (2012, p.85) “Se menciona el circuito de Papez y la relación al incremento
de adrenalina y noradrenalina (norepinefrina), así como también la actuación de los cuerpos
mamilares, el cíngulum, hipocampo e hipófisis”.
42
Observando que varias áreas cerebrales en especial aquellas con estructuras subcorticales
en donde vale recalcar el sistema límbico como también el circuito Papez cuya función es la
regulación de emociones como viene a ser la ira que muchas veces es responsable en la
generación de respuestas agresivas, también se ha relacionado a la agresividad con algunos
neurotransmisores, Champi (2012, p.85) menciona que:
“La norepinefrina está vinculada con la expresión externa de la agresión y la
adrenalina con las respuestas ansiosas, pero surgen investigaciones de los estados
hormonales no son capaces por si mismos para experimentar una emoción concreta
sea este el temor o la ira pues tiene que relacionarse con el medio externo, como por
ejemplo cuando un individuo se tope con un grupo de personas que le resulten
hostiles”.
Recalcando la relación entre la norepinefrina o también llamada noradrenalina con los
comportamientos agresivos, poniéndolo no como un factor decisivo la presencia de este
neurotransmisor, ya que se requiere estímulos externos es necesaria. Otro neurotransmisor
relacionado es mencionado por Gil et al. (2002, p.296) comentan que:
“Se ha involucrado a la actividad de la serotonina como un factor biológico
importante, entre otros, para determinar el umbral de violencia. Las personas con
antecedentes de conducta agresiva impulsiva (y de suicidio), y las cepas de ratones
que muestran más agresividad, tienen concentraciones bajas de serotonina en el
cerebro”.
Tomando en cuenta la importancia de la serotonina ya que entre una de sus funciones que
tiene este neurotransmisor está la de regular el estado de ánimo, de ahí que las bajas
cantidades de serotonina da como consecuencia una conducta agresiva.
Y, por último, donde se relaciona la actividad gonadal, autores como Carrasco &
González (2006, p.18) Se ha relacionado a la agresividad con la actividad gonadal como es la
testosterona, en especial en varones que son los que presentan mayores niveles de esta
hormona.
Por lo que no es de asombrase que la mayoría de actos violentos han sido atribuidos a
hombres y estos se ven influenciado mayor manera durante la adolescencia que se da un
aumento de la testosterona en las conductas agresivas, de ahí la importancia de estrategias de
43
control de comportamientos agresivos especialmente durante el desarrollo. Otra hormona que
también es importante mencionar según Champi (2012, p.85):
“Pero también es importante dar a conocer otras sustancias que existen otras
sustancias hormonales como los andrógenos que tienen efectos duraderos sobre las
conductas de irritabilidad tanto en el hombre como la mujer, sustentados en estudios
donde se vio que la castración en el varón y la mengua de los andrógenos
suprarrenales luego de extraer la glándula pituitaria de la mujer, disminuyen la
agresividad”.
Resumiendo, que la presencia de testosterona en el hombre como también andrógenos
favorecen conductas agresivas, además de la mayor concentración de estas dos hormonas se
presentarían en el hombre aumentando la incidencia de comportamientos agresivos en
hombre.
2.2.3 Teoría del Síndrome AHA
Esta teoría de la agresividad nos plantea que para que exista agresividad por parte de
cualquier persona, estas deben pasar por una seria de estados, donde Spielberger et al.
(1983,1985); Spielberger, Reheiser & Sydeman (1995); Spielberger & Moscoso (1996) citado
por Carrasco & González (2006, p.19) nos plantean la teoría de siguiente manera
“Spielberger y sus colaboradores sitúan los constructos ira, hostilidad y agresión
interrelacionados en un continuo que sigue la siguiente secuencia: Un acontecimiento
genera una emoción (ira), que se ve influenciada por una actitud negativa hacia los
demás (hostilidad) y puede desembocar en una acción violenta (agresión), con
consecuencias también de índole negativa”.
Observamos que el comportamiento agresivo es un proceso secuencial, donde
primeramente algún suceso genera una emoción como es la ira, a partir de esta se origina la
hostilidad para terminar en agresión, viendo que es necesario partir de una emoción para que
se desarrolle cualquier acto agresivo.
2.2.4 Teoría de la frustración Agresión
En esta teoría los principales representantes son Dollard, Doob, Miller, Mowerer & Sears
(1939) citado por Contini (2015) mencionando que cuando los objetivos o metas se ven
44
interrumpidas da origen a comportamientos agresivos. Anexando a lo anterior según Contini
(2015, p.42) “Las situaciones de privación no inducen siempre al comportamiento agresivo,
sino que éste se presenta cuando el sujeto no logra satisfacer un logro deseado”.
Planteándonos que no es solo porque exista la privación va a existir agresividad, sino que
este debe ser significativo para la persona, ya que la misma meta u objetivo no va a crear los
mismos niveles de frustración en todos. Debido a esto autores como Carrasco & González
(2006, p.19) que:
“La conducta agresiva estará en función de la cantidad de satisfacción que
el individuo contrariado haya anticipado sobre una meta que no ha alcanzado
y el grado de expectativa sobre su logro: cuanto mayor sea el grado de
satisfacción frustrado y el grado de expectativa de logro, mayor será la
inclinación a infringir un daño”.
Añadiendo que existe una correlación directamente proporcional entre los niveles de
frustración y agresividad, pero según Miller (1941) citado por Carrasco & González (2006)
aunque la frustración está íntimamente relacionada con la agresividad esta no da siempre
como resultado respuestas agresivas y que depende del repertorio de comportamientos que
tenga la persona para reaccionar a la frustración.
Concluyendo la necesidad de alcanzar los niveles necesarios de frustración como también
no tener respuestas alternativas ante la frustración, los que permiten canalizar en
comportamientos agresivos.
2.2.5 Modelo del déficit de procesamiento de la información
Este modelo plantea que el procesamiento de información se distorsiona creando en el ser
humano comportamientos agresivos, de manera más detallada por Dodge (1991); Dodge &
Coie (1987); Raine, Dodge, Loeber et al. (2006) citado por Andreu et al. (2012, p.442) “Este
modelo, la agresión sucede como reacción a una amenaza percibida, fundamentalmente
percibida de forma distorsionada, y que suele estar mediada por una activación emocional
intensa, altos niveles de hostilidad y déficits en el procesamiento de la información”. Entre
los factores que intervienen en el procesamiento de la información según Crick & Dodge
(1994) citado por Carrasco & Gonzales (2006, p.23) mencionarían que: “Diversos factores
45
emocionales, fisiológicos conductuales, sociales y constitucionales están implicados en la
instalación de particulares estructuras de memoria socio-cognitivas”.
De manera que en el procesamiento de información existen múltiples factores
involucrados que van desde aspectos individuales como del entorno, y de cómo perciba la
información dependerá si se presenta o no un comportamiento agresivo. El procesamiento de
la información es realizado de manera secuencial según Pakaslahti (2000) citado por Carrasco
& González (2006, p.23) recopila cada una de las fases del procesamiento, que diferencian a
los niños agresivos de los no agresivos:
En la fase 1, orientación hacia el problema social, los sujetos agresivos codifican
inadecuadamente la situación social y las señales internas. Por ejemplo, los niños
agresivos indagan mucho menos sobre los hechos en una situación social y prestan
menos atención a las señales del ambiente que los niños no agresivos.
En la fase 2, interpretación y análisis de la situación, se han detallado las siguientes
características en el procesamiento de los niños agresivos frente a los no agresivos: a)
hacen un análisis de la situación de acuerdo con sus experiencias pasadas en
situaciones similares más que sobre los hechos concretos de la situación actual; b)
realizan un mayor número de atribuciones hostiles y de intencionalidad al
contrincante o interlocutor y, c) realizan un menor número de inferencias sobre los
resultados de la situación.
En la tercera fase, formulación de una meta, los adolescentes agresivos son más
propensos a formular metas hostiles, tales como la dominancia o la venganza,
independientemente del sesgo de intencionalidad, y experimentan una mayor
frustración ante la interferencia o no consecución de las metas deseadas.
En la cuarta fase, generación de estrategias para resolver y manejar el problema, los
niños agresivos generan un mayor número de estrategias agresivas, pragmáticas,
impulsivas o destructivas. Los niños no agresivos, generan un mayor número de
estrategias y son capaces de imaginar un mayor número de soluciones alternativas a
una situación conflictiva.
En la quinta fase, evaluación de la estrategia más adecuada para resolver el
conflicto, aparecen dos grupos de diferencias: una en relación con los estándares
internos (normas morales, valores, creencias) y otra en relación con sus estrategias de
afrontamiento. En cuanto a la primera, los niños agresivos consideran las estrategias
46
agresivas menos reprobables desde el punto de vista moral y actitudinal que los niños
no agresivos, aprueban más favorablemente la conducta agresiva y piensan que las
víctimas no sufren y merecen lo que se les hace. En cuanto a la segunda, los niños
agresivos esperan conseguir mayores recompensas si utilizan estrategias agresivas, así
como un mayor incremento de su autoestima y una reducción del trato aversivo por
parte de los otros.
Además, anticipan menores consecuencias negativas derivada de sus actos, sólo
consideran las consecuencias a corto plazo y se perciben más autoeficaces en el
manejo de actos agresivos para la consecución de sus deseos. A esto hay que añadir su
consideración de las conductas agresivas como actos más difíciles de inhibir que las
acciones prosociales y de menor coste y esfuerzo.
Finalmente, en la sexta y última fase del procesamiento, la ejecución conductual de la
estrategia mejor evaluada, los niños agresivos ejecutan y emplean, en consonancia
con el procesamiento previo, estrategias conductuales agresivas.
Observando que las diferencias en el procesamiento de la información son considerables y
se presentan tanto en la percepción, análisis, estrategias, evaluación y ejecución,
planteándonos paso a paso cómo se desarrolla un comportamiento agresivo en alguien que
procesa la información adecuadamente como la que no lo hace.
2.2.6 Teoría de agresividad de Bandura
Albert Bandura considera la agresividad dentro de su teoría del aprendizaje social, la cual
trata de abarcar tanto el origen, instigadores, reforzadores y los factores sociales que
favorecen el aprendizaje de un comportamiento agresivo, la presencia de todo
comportamiento no surge de la nada según Bandura (1975) Las personas no vienen con
comportamientos agresivos, sino que estos deben ser aprendidos a través de la observación de
modelos o por experiencia propia. Donde la agresividad es considerada por Bandura (1972)
citado por Carrasco & González (2006, p.8) como: “Conducta adquirida y controlada por
reforzadores, la cual es perjudicial y destructiva”.
Estableciendo que la agresividad no es innata, sino que estos comportamientos son
aprendidos en especial de su entorno más próximo recalcando el carácter aversivo además de
que para que alguien modele un comportamiento agresivo no basta con una sola observación
u experiencia de un comportamiento, sino que la posibilidad de aprender dependerá de varios
47
aspectos según Bandura, Grusec & Menlove (1966) citado por Bandura (1975, p.311)
menciona que:
“Por varias razones, la exposición a modelos agresivos no asegura
automáticamente el aprendizaje por observación. En primer lugar, algunas personas
no sacan gran provecho del ejemplo porque no observan los rasgos esenciales de la
conducta del modelo. En segundo lugar, la observación de la conducta de un modelo
no influirá mucho en las personas si éstas se olvidan de lo observado. Las influencias
del modelamiento pasado alcanzan algún grado de permanencia cuando pueden
representarse a manera de imágenes, palabras o cualquier otra forma simbólica”.
Recalcando que para que exista el aprendizaje es necesario que pueda extraerse rasgos
esenciales de ese comportamiento, que pueda ser representado y que tenga el impacto
necesario para no se olvidado. Pero a pesar de su capacidad aprender en su totalidad el
comportamiento según Bandura (1975) si la persona a pesar de que tenga la capacidad de
adquirir, retener, poseer y actuar agresivamente, no actúa de esta manera es debido a que no
le encuentra beneficio a este comportamiento o porque las consecuencias son muchas
mayores a los beneficios de ejecutar los comportamientos agresivos aprendidos.
Mencionando varias condiciones para el aprendizaje de comportamientos y enfocándonos
en último aspecto que es, si está o no sancionado ya que su ejecución según Bandura (1975,
p.308):
“Comúnmente las personas no agreden de maneras directas y conspicuas que
pudieran originar el riesgo de represalias. En lugar de ello, tienden a atacar a otros
de modo que, para protegerse de contrataques, la responsabilidad por sus acciones
lesivas se diluya o quede oculta”.
Llegando a dificultar la identificación de la agresividad como también del uso de
reforzadores para dar fin a los comportamientos.
La teoría del aprendizaje social es muy amplia ya que no solo trata de explicar el origen
sino también como se mantienen los comportamientos, pero nos centraremos en el origen de
la agresión y específicamente en el aprendizaje social de las influencias familiares, ya que el
objetivo de la investigación es describir la influencia de los estilos de crianza en la
48
agresividad. Aun así, en el siguiente cuadro se detalla como la teoría de Bandura actúa sobre
la agresión.
Tabla 1.- Análisis del aprendizaje social de la agresión.
Origen de la agresión Instigadores de la agresión Reforzadores de la agresión
Aprendizaje por observación
Ejecución reforzada
Determinantes estructurales
Influencias del modelamiento
Desinhibitorias
Facilitadoras
Activadora
Acrecentamiento del estimulo
Tratamiento aversivo
Asaltos físicos
Amenazas e insultos
Reducción aversiva del
reforzamiento frustración
Móviles de incentivo
Control por instrucciones
Control simbólico y grotesco
Reforzamiento externo
Recompensas tangibles
Recompensas sociables y de status
Expresión de las heridas
Alivio de tratamiento aversivo
Reforzamiento vicario
Recompensa observada
Castigo observado
Autorreforzamiento Autocastigo
Autorrecompensa
Neutralización del autocastigo
Justificación moral
Comparación ventajosa
Difusión de la responsabilidad
Deshumanización de la victima
Atribución de la culpa a las
victimas
Malinterpretación de las
consecuencias
Fuente: Extraído de Bandura (1975, p.310)
Dentro de las influencias familiares tenemos a Escobar (2005) citado por Gallego (2011,
p.7) “Señala que los comportamientos agresivos en la infancia tienen su origen en el núcleo
familiar, es la familia con quien los niños y las niñas pasan la mayor parte de su tiempo,
viendo, sintiendo y haciendo lo que los adultos hacen”. Mientras que Villalobos, Chaves &
Pérez (2013, p.327)
“El padre, la madre o cuidador, a través de la interacción, transmiten al niño un
conjunto de reglas, principios y formas de actuar que constituyen el sistema de
relaciones convenidas y compartidas por la comunidad a la que pertenecen (marco
cultural)”.
Estableciendo que la familia es el origen de los comportamientos agresivos, aprendiendo
mediante la experiencia, observación o ejecución las distintas formas de interacción que
incluyen reglas, principios, formas de relacionarse, las cual guían su accionar de los hijos en
los distintos entornos sociales. Los hijos que observan esta forma de interrelación de los
49
miembros de la familia según Buss & Perry (1992) citado por Castillo (2006, p.167)
concluyen que:
“Cuando en la familia se intentan solucionar los problemas con agresividad y
enfrentar la agresividad con agresividad, los niños fácilmente relacionan la fuerza
con la consecución del objetivo y ven que la fuerza funciona de una forma muy
efectiva para convencer y controlar a otros”.
Observando el carácter funcional que tiene la agresividad, viendo como esta resulta
efectiva para controlar a otras personas, además la importancia de los padres según estudios
Hoffman (1960) citado por Bandura (1975) las técnicas agresivas usadas por los hijos hacia
sus compañeros o hermanos son aprendidas de los padres ya que estos sirven como modelos
de aprendizaje de una variedad de técnicas para dominar a otros,
Concluyendo la importancia de la familia y en especial los padres, ya que son figura para
el aprendizaje de todo tipo de comportamientos y de ahí la importancia que existan buenas
relaciones familiares, ya que estas se van reforzando mutuamente entre todos los miembros
de la familia.
2.3. Tipos de agresividad.
Dentro de la tipología de agresividad existen una gran variedad, esto se lo atribuye a la
característica multidimensional ya que van desde la forma de expresión, motivación,
participación, por lo que se tratara de mencionar aquellos más mencionados por la literatura.
La agresividad en torno a la forma de interacción ha sido dividida en dos tipos de
agresión, la directa o manifiesta y la indirecta o relacional, autores como Estévez, Jiménez &
Musitu (2008); Moreno, Estévez, Murgui & Musitu (2009) citado por Martínez, et al. (2017)
definen a la agresividad manifiesta como aquella donde existe un contacto directo entre el
agresor y el agredido, el cual es llevado a través de interacción física. Mientras que la del tipo
relacional según Estévez et al. (2008); Van Geel, Vedder & Tanilon (2014) citado por
Martínez et al. (2017) como la que se genera de forma indirecta y que tiene como objetivo
distancias a la víctima de sus compañeros.
Manifestándose el tipo de agresividad según el nivel de contacto que tenga el agresor con
la persona agredida, ya que esta puede ir desde golpes, empujones, amenazas verbales,
50
destrucción de las pertenencias como sería la manifiesta o directa como también indirecta o
relacional por ejemplo crear rumores, exclusión, avergonzar con el fin de distanciar de sus
pares.
Acerca de la agresividad relacional Moreno et al. (2009) citado por Martínez et al. (2017)
menciona que esta genera un mayor daño y es más usual que la del tipo manifiesto, además
que identificarla es mucho más complejo. Concluyendo que este tipo de agresividad es más
aversiva y frecuente por lo que es mucho más fácil encubrirla y así evitar consecuencias en el
agresor. La agresividad del tipo relacional y manifiesto en relación al sexo, según Martínez et
al. (2017, p.139) citan que: “Las conductas violentas según el género de la muestra revelaron
que el género masculino se asociaba a cifras más elevadas en agresividad manifiesta y
relacional con respecto al femenino”. Dándose más agresividad del tipo relacional en mujeres
y manifiesta en hombres.
En cuanto a esta clasificación se caracteriza por su carácter motivacional a la hora de
hacer daño, se la obtiene de aportes realizados por Dodge y sus colaboradores, la dividirían
en agresividad reactiva y proactiva, según Ramírez & Andreu (2003) citado por Andreu, Peña
& Ramírez (2009, p.38):
“Así, la denominada agresión reactiva describe aquellas conductas que se
suscitan como reacción a una provocación o a una amenaza percibida (real o
imaginada); mientras que la agresión proactiva incluye acciones desencadenadas
intencionalmente para resolver conflictos o para conseguir beneficios, recompensas o
refuerzos valorados por el agresor; lo que no implica necesariamente que la
motivación primaria de la agresión sea provocar sufrimiento o daño a la víctima”.
Mirando a la agresividad reactiva como consecuencia a una amenaza la cual es muchas
veces justificada por el medio mientras que la proactiva se realiza con el fin de obtener algún
beneficio o satisfacción propia llegando a ser reprobada e incluso atribuyéndole el carácter
delictivo.
Al centrarse en la agresividad reactiva y los problemas relacionados tenemos a Connor,
Steingard, Anderson & Melloni (2003) citado por Andreu, Peña & Penado (2012) en una
investigación realizada en niños y adolescentes que estaban recibiendo tratamiento
psicológico encontraron que la agresividad reactiva y la impulsividad se relacionaba en
hombres mientras que en mujeres se lo vincula con traumas a edades tempranas. Por lo que a
51
pesar de no ser el tipo de agresividad que más problemas genera en el desarrollo, hay
diferentes estrategias para actuar ante una provocación o amenaza.
Otra clasificación es la realizada por Buss (1961) y Buss & Perry (1992) citado por
Contini (2015, p.37) categorizaron la agresión en: a) físico-verbal, b) activa-pasiva, c)
directa-indirecta.
a) En la dimensión físico-verbal se diferencia entre el uso de la fuerza o del lenguaje
para infringir daño a un sujeto.
b) La dimensión activa-pasiva elude al modo en que el agresor se involucra en la
generación de daño a otro. Un modo activo seria por ejemplo que un adolescente se
ofusque con el profesor que lo desaprobó de un modo injusto desde su perspectiva el
adolescente procede entonces a estropear los neumáticos del automóvil del docente.
Una forma pasiva de agresividad sería que el adolescente estuviera acompañado por
un amigo, quien es testigo de la acción, pero no interviene señalando lo inadecuado
del proceder de su par.
c) La dimensión directa-indirecta: en la directa, la acción de un sujeto tiene como
objetivo central producir un daño en forma directa a otra persona. Dicha agresión
puede ser verbal o física, por ejemplo, golpear a alguien o gritarle. En cambio, la
agresión indirecta tiene también el mismo propósito, pero se realiza por medio de
otras personas o pertenencias, por ejemplo, dañar la propiedad de una persona o
hablar mal de él “a sus espaldas”.
Centrándose en el primer punto como se expresa el comportamiento agresivo sea físico o
verbal, segundo el grado de participación que tiene la persona y tercero las estrategias usadas
para inferir daño.
Y por último en la clasificación tenemos a aportes como los de Feshbach (1970); Atkins,
Stoff, Osborne & Brown (1993); Kassinove & Sokhodolsky (1995); Berkowitz (1996) citado
por Carrasco & González (2006, p.11) dividiéndola en agresividad instrumental, emocional y
hostil:
Agresividad hostil: Acción intencional encaminada a causar un impacto negativo
sobre otro, por el mero hecho de dañarle, sin la expectativa de obtener ningún
beneficio material.
52
Agresividad instrumental: Acción intencional de dañar por la que el agresor obtiene
un objetivo: ventaja o recompensa, social o material, no relacionada con el malestar
de la víctima.
Agresividad emocional: Agresión de naturaleza fundamentalmente emocional
generada no por un estresor externo, sino por el afecto negativo que dicho estresor
activa, produciendo ira y tendencias agresivas.
Dentro de los tres tipos de agresividad la primera que es hostil cuyo fin es causar daño sin
fin alguno, solo por el simple hecho de causar daño a otra persona, la segunda que es
instrumental que a diferencia de la anterior busca alguna recompensa por lo que es
premeditada e intencionada y la tercera que es emocional en donde los actos agresivos son
consecuencia del estado emocional actual del agresor.
De todas las mencionadas la de carácter instrumental es recalcada por Atkins, Staff,
Osborne & Brown, 1993; Hare, Cooke & Hart (1999); Newman (1997); Patrick & Zempolich
(1998); Vitaro, Gendreau, Trenblay & Oligny (1998) citado por Andreu et al. (2012) ya que
de todos los tipos de agresividad se la relaciona en mayor medida con comportamientos
disóciales y posteriormente delictivos. Esto se ha relacionado según Andreu, Peña y Ramírez
(2009); Oliva & Antolín (2010); Raine et al. (2006) citado por Andreu et al. (2012) a que los
individuos que usar la agresividad instrumental tiene un punto de vista positivo acerca del uso
de la agresividad y sus consecuencias, presentando una ausencia de empatía y falta de
afectividad. Estableciendo que de entre los tres tipos de agresividad, la instrumental es la que
es atribuida efectos adversos para el desarrollo teniendo consecuencias no solo durante la
infancia, sino que perdurando durante la etapa adulta.
Concluyendo a pesar de todas las tipologías de agresividad vistas, existen una variedad de
formas de ser vistas y todas con sus particularidades, con sus respetivas consecuencias
algunas más significativas que otras, pero aun así aversivas para desarrollo tanto para el
agresor como para el agredido.
2.4. La agresividad y su presencia en familias monoparentales.
La estructura monoparental esta se la atribuye muchas veces a la separación de la pareja,
divorcio, migración o muerte de uno de los padres debido a este cambio es frecuente que se le
relacione con algunos problemas entre ellos la agresividad, razón por la cual se puede decir
53
que los comportamientos agresivos han tomado más presencia en las últimas décadas,
llegando a ser más visualizada dentro de la sociedad y ha sido objeto de estudio, autores
según Carpio (2016, p.10):
“La crisis del divorcio es un evento complejo de afrontar, especialmente para los
hijos de corta edad que aún no poseen desarrolladas completamente sus esferas
cognitivo-afectivas, que en muchos de los casos no saben sobrellevar la situación y si
no reciben una adecuada orientación”.
Recalcando como el cambio en la estructura familia como es el divorcio, que es una de las
causas más comunes en familias monoparentales trae consigo problemas en la esfera
cognitiva-afectiva y en especial con los hijos de menor edad, ya que no tiene las estrategias o
recursos necesarios para asimilar de mejor manera el cambio en la estructura familiar.
Este cambio de estructura conlleva a que uno de los dos padres asuma el proceso de
crianza, por lo cual se cuestiona quien es el más apto para llevar a cabo la crianza de los
hijos, Ceja (2016, p.134):
“Algo importante a destacar es que cuando los y las jóvenes provienen de padres
separados, el porcentaje para el padre incrementa de manera considerable,
mostrando ser la figura con menos capacidad de manejar los conflictos con sus hijos
e hijas, teniendo una actitud agresiva, indiferente y evasiva ante las situaciones
conflictivas y agresivas”.
Estableciendo que el padre tiene menos aptitudes para manejo de conflictos de los hijos
llegando a ser indiferente o evasivo ante los problemas de los hijos, aun así, las
consecuencias para los hijos sean cual sea el progenitor a cargo son varias, entre los
problemas tenemos los citados por Hetherington & Henderson (1997) citado por Suarez,
Delgado & Freijo (2009) mencionan que una alteración dentro de la estructura familiar tiene
consecuencias en los hijos y en especial a los menores estando predispuestos a tener bajo
rendimiento escolar, habilidades sociales problemas del comportamiento de dificultades para
relacionarse con los miembros de su familia.
Tratando una diversidad de problemas durante la niñez, de los cuales varios están
estrechamente relacionados con problemas de agresividad como también existen otros que no
lo están, pero aun así representan una amenaza para el desarrollo de los hijos.
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Los adolescentes también tendrían sus propias dificultades a consecuencia de la
monoparentalidad y aumentando a sus nuevas necesidades de exploración autores como
Cantón et al. (2002, p.51) detallarían que:
“Los adolescentes inicialmente se caracterizan por sufrir una depresión aguda y por
presentar comportamiento antisocial, conductas regresivas (aislamiento social y
emocional en el colegio, carencia de amistades en otros ámbitos) y ansiedad por su
futuro. Dieciocho meses después de la separación se produce un empeoramiento de los
niños mayores, pre adolescentes y adolescentes que al principio parecían haberse
adaptado a la situación provocada por la ruptura, presentando más problemas de
conducta y de rendimiento, especialmente los varones”.
Otros autores como son Simons & Chao (1996) citado por Cantón et al. (2002, p.48)
mencionarían que “Los adolescentes de ambos géneros que viven en hogares monoparentales
presentan más conductas delictivas (robos en hipermercados, citación judicial, persistencia en
actos delictivos) que en hogares intactos”.
Presentando a la agresividad y monoparentalidad como algo altamente relacionado sin
importar la etapa del desarrollo donde se produzca el cambio de estructura familiar y por lo
que debe ser tomado con toda la seriedad posible al ver los numerosos problemas que
conlleva.
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MARCO METODOLÓGICO
Variables de la investigación
Variable 1: Estilos de crianza que presentan adolescentes procedentes de familias
monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Variable 2: Niveles de agresividad que presentan adolescentes procedentes de familias
monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Definición conceptual de variables
Estilos de crianza: Los estilos de crianza según Torío et al. (2008) citado por Velázquez
& Villouta (2013, p.14) “Los Estilos de Crianza representan la forma de actuar de los adultos
respecto a los/as niños/as ante situaciones cotidianas, la toma de decisiones o la resolución de
conflictos”.
Agresividad: La agresividad según Bandura (1972) como citó Carrasco & Gonzales
(2006, p.8) “Conducta adquirida controlada por reforzadores, la cual es perjudicial y
destructiva”.
Definición operacional
Para la evaluación de los estilos de crianza se usó la Escala de Estilos parentales para
adolescentes de Musita y García (ESPA29) clasificándolos en estilo: Autoritario,
Autorizativo, negligente e indulgente.
Los niveles de agresividad fueron medidos con el Cuestionario de agresividad de Buss y
Perry (AQ) mostrando los siguientes factores como son: agresividad, hostilidad e ira.
Enfoque de la investigación
El diseño de esta investigación responde al enfoque cuantitativo. “Este enfoque lleva una
secuencia y es probatorio, llevando a cabo un plan o diseño para su posterior aplicación, el
cual va a constar de preguntas, objetivos, revisión de la literatura, etc.” (Hernández, 2014).
56
Alcance de la investigación
Es una investigación del tipo correlacional. Es aquella que evalúa dos o más variables a
través de la medición, cuantificación, análisis y establecer vinculaciones. (Hernández, 2014).
Diseño de investigación
Investigación del tipo no experimental ya que no involucra una manipulación de las
variables, observando los hechos de manera natural, sin intervención del investigador
(Hernández, 2014). También se presentará como un diseño transversal ya que realizará una
sola evaluación en un punto de tiempo determinado.
Población
La población consta de 45 adolescentes pertenecientes a familias monoparentales de ambos
sexos (23 mujeres y 22 hombre) que se encuentren en 2do BGU con edades entre 16, 17 y 18
años y que sean parte del Colegio Municipal “Fernández Madrid.”
Muestra
El tamaño de la muestra consta de 40,540 que consta con un margen de error de 5% que es
margen de error admisible en una investigación social, por motivos de criterios de
eliminación la muestra fue de 38 estudiantes (18 hombres y 20 mujeres).
Criterios de inclusión
Que se encuentren en 2do de BGU.
Participación voluntaria en la investigación.
Que provengan de familias monoparentales.
Tener una ficha clínica actualizada en el DECE.
Haber llenado el consentimiento informado.
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Criterios de exclusión
Presencia de trastornos psiquiátricos o neurológicos.
Estructura monoparental durante un tiempo mínimo de un año.
Criterios de eliminación
Cambio de la unidad educativa.
Adolecentes que se abstengan de llenar los test durante su aplicación.
Haber llenado los test de manera incompleta.
Métodos
Método Deductivo. – A través de la deducción se pasa de un conocimiento general a uno
específico, donde las generalizaciones son puntos de partida para llegar a conclusiones
lógicas, el cual se realiza mediante el razonamiento (Rodríguez y Pérez, 2017).
Método Descriptivo. – Es un método cuyo objetivo es describir fenómenos, situaciones,
contextos, para conocer cómo se presenta y manifiestan en cada circunstancia y someterla a
un análisis (Hernandez,2014).
Método Estadístico. – Facilitara el análisis e interpretación de los datos obtenidos de los test
usados, llegándose a usar el muestreo aleatorio simple y el programa Excel para el manejo de
la base de datos.
La hipótesis que se va a analizar se realizara a través de la correlación de Pearson con un
nivel de significancia estadístico del 99%.
Técnicas
Técnica Bibliográfica. – Que es la recolección de material bibliográfico cuya función es
sustentar la parte teórica de la investigación.
Técnica Psicométrica. – Es el uso de instrumentos psicométricos con fin de medir
fenómenos psicológicos para así comparar resultados de los participantes y analizarlos e
interpretarlos de manera objetiva.
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Instrumentos
Escala de Estilos parentales para adolescentes de Musita y García (ESPA29)
Es un cuestionario por Musita y García (2001) validado en España, el cual ha sido usado
para valorar el estilo de crianza usado por los padres independientemente el cual consta de 29
ítems, el cual mide dos dimensiones la primera es de aceptación/implicación que a la vez se
divide en cuatro subescalas la cuales son afecto, diálogo, indiferencia y displicencia y la
segunda dimensión es coerción/imposición que se divide en tres subescalas que son
privación, coerción física y coerción verbal. El test consta de puntuaciones que van del 1 al 4,
donde 1 punto es igual a nunca, 2 puntos a algunas veces, 3 puntos igual muchas veces y 4
puntos igual a siempre, de la suma de todos estos puntos se obtiene las puntuaciones de las
escalas para después obtener la puntuación directa de las dimensiones y transformar la
puntuación en centil y representar está en el plano. El espa29 tiene como coeficiente de
confiabilidad 0,96 y en cuanto a la validez teórica del instrumento se realiza mediante un
análisis factorial. Los cálculos se realizaron con el programa SPSS 8.0 extrayendo los
factores con el método PFA-análisis de componentes principales y aplicando la rotación
varimax con normalización káiser.
Cuestionario de agresividad de Buss y Perry (AQ)
Este cuestionario se utiliza para evaluar los niveles agresividad el cual ha sido adaptado y
validado por Matalinares et al. (2006) en el país de Perú, constando de 4 dimensiones y la
distribución de ítems por dimensión es la siguiente: agresión física tiene 9 ítems, agresividad
verbal 5 ítems, hostilidad 7 ítems e ira 8 ítems, con un total de 29 ítems en todo el
instrumento. Con respuestas que son completamente falso para mi igual a 1 punto, bastante
falso para mi igual a 2 puntos, ni verdadero ni falso para mi es igual a 3 puntos, bastante
verdadero para mi igual 4 puntos, completamente verdadero para mi igual a 5 puntos. La
confiabilidad del cuestionario de agresividad se determinó mediante la aplicación de la
fórmula de Alpha CronBach, con un coeficiente de confiabilidad de 0,83. Mientras que,
respecto a la validez de constructo presentada por el instrumento, mediante el análisis
factorial exploratorio, que permite verificar la estructura de los principales factores utilizando
el método de los componentes principales.
59
Consideraciones éticas
Respetar a la persona y comunidad que participa en el estudio
Se establecerá una buena relación tanto con adolescentes como con las autoridades y
profesores del colegio, la cual se realizará a través de una comunicación asertiva, utilizando
un adecuado vocabulario con el fin de que no dé lugar a dudas ni malos entendidos, durante
todo el proceso de aplicación de la investigación.
Autonomía
La existencia de una total autonomía en la autorización por parte de los padres como
también de sus hijos en la participación de la investigación y su capacidad de desistir de la
misma en cualquier momento de la aplicación de los diferentes reactivos psicológicos (Anexo
1).
Además de la aprobación que ha existido por parte del Colegio Municipal “Fernández
Madrid” mostrando su interés y apoyo en la realización de este proyecto de investigación
(Anexo 3).
Beneficencia
Se establecerá una línea base de los estilos de crianza que se llevan aplicando y su relación
con la agresividad en familias con estructura monoparental, el cual tiene como fin, llegar a
tener una mayor comprensión del tema para la posterior elaboración programas o proyectos
que beneficien a las familias con estructura monoparental.
Confidencialidad
Todos aquellos instrumentos que sean entregados a los participantes carecerán de datos de
identificación que los relacione con los datos proporcionados, de manera que los adolescentes
y su familias permanezcan en total anonimato, asegurando la confidencialidad durante toda la
aplicación del proyecto de investigación, además que todos los instrumentos llenados serán
únicamente y sus datos serán manejados únicamente por el investigador y con fines
60
netamente estadísticos, asegurando todo lo mencionado a los participantes a través del
consentimiento informado.
Aleatorización equitativa de la muestra
Durante la identificación de la muestra se realizará de manera aleatoria, donde se elaborar
una lista de los estudiantes para luego a través de números seleccionar quienes no entraran en
la investigación con el fin de no discriminar a nadie sin tomar en cuenta etnia, sexo, nivel
socioeconómico, etc.
Protección de la población vulnerable
Esto se realizará mayormente a través de la confidencialidad, donde se protegerá de
manera rigurosa toda la información obtenida además de la identidad, igualdad en el trato de
forma que todas las relaciones se realicen con todo el respeto posible y garantizando el
interés superior del niño, donde si observamos que sucede algo a causa de la investigación se
tomará las medidas pertinentes a pesar de que en la investigación no existan riesgos.
Riesgos potenciales del estudio
No existen riesgos durante la aplicación de la investigación debido a que no existe
manipulación de la muestra y a su carácter netamente descriptivo
Idoneidad ética y experiencia del investigador
La idoneidad ética referida a la capacidad del tutor para asesorar un proyecto de
investigación (Anexo 4).
Experticia refiriendo a la capacidad de estudiante para efectuar adecuadamente proyectos
de investigación (Anexo 5).
Metodología de campo
La presente investigación está basada en la Relación de los estilos de crianza con los
niveles de agresividad que presentan adolescentes procedentes de familias monoparentales
61
del Colegio Municipal “Fernández Madrid”. El proceso que se realizó dentro del colegio es
primeramente un contacto inicial con el Colegio Municipal “Fernández Madrid” con la
posterior aprobación del Rector Lucas Nicolalde, donde se estableció la población a través
de la revisión de carpetas de los estudiantes que pertenezcan a segundo de BGU, a su vez se
efectuó la revisión y aprobación de los instrumentos que se va a usar por parte de la psicóloga
del colegio encargada de investigaciones la Dra. Hilda Padilla, para después con el apoyo de
inspección obtener el consentimiento informado de los padres, llegando a obtener la muestra
y la posterior aplicación los reactivos correspondientes a cada una de las variables para
después analizar, interpretar los resultados y verificar su relación con la hipótesis para su
posterior presentación.
Limitaciones presentadas
Existió Problemas al coincidir con las actividades u obligaciones que tenía designada la
psicóloga encargada de investigaciones Dra. Hilda Padilla.
La recolección del consentimiento informado tomo más tiempo del esperado.
62
RESULTADOS DE LA INVESTIGACIÓN
Del análisis descriptivo de una población de 38 adolescentes, miembros de familias
monoparentales pertenecientes al Colegio Municipal “Fernández Madrid”, se encuentran las
siguientes características sociodemográficas.
Tabla 2.- Características sociodemográficas de los adolescentes.
Frecuencia Porcentaje
Edad
15 años 1 3%
16 años 21 55%
17 años 15 39%
18 años 1 3%
Sexo Masculino 18 47%
Femenino 20 53%
Número total de hermanos incluyendo al
adolescente
1 5 13%
2 21 55%
3 7 19%
4 5 13%
Lugar que ocupa entre los hermanos
1° 19 50%
2° 13 34%
3° 4 11%
4° 2 5%
Elaborado por: Sarmiento, R. (2019).
En la tabla número dos se detalla las características sociodemográficas, observando que la
edad de los estudiantes que pertenecen a segundo de bachillerato general unificado es de 16
años correspondiente a 55%, concordando con lo mencionado por el INEC (2016) donde la
edad para este curso de 16 años. Con respecto al sexo la muestra se reparte equitativamente
53% de mujeres y 47% de hombres coincidiendo con el INEC (2010) la población femenina es
mayor en Pichincha. Al hablar del número de hermanos incluyendo al adolescente, se
evidencia que la mayoría tiene al menos 2 hermanos que equivale al 55%, evidenciado a través
del INEC (2001) donde la media de integrantes en familias monoparentales es de 3,6 en caso
de jefatura materna y de 3,4 si es jefatura paterna. Y finalmente en relación al lugar que ocupa
el hijo entre los hermanos, la mitad (50%) indico ser los primogénitos, al igual que en estudios
de Landeta & Potosí (2018) en un estudio aplicado en familias monoparentales mayoría de su
muestra que equivale al 30% fue primogénito.
63
Tabla 3.- Características sociodemográficas de los padres.
Frecuencia Porcentaje
Edad
- 39 18 44%
40 - 50 16 45%
+ 51 4 11%
Sexo Masculino 3 8%
Femenino 35 92%
Escolaridad
Primaria 5 13%
Secundaria 22 58%
Superior 11 29%
Existe apoyo económico por
parte de su padre o madre que
vive fuera del núcleo familiar
hacia su hijo
Si 10 26%
No 18 48%
Algunas veces 10 26%
En la tabla tres se detallan las características sociodemográficas de los padres, donde se
observa que el 47% tiene menos de 40 años contrastando con los datos del INEC (2016), donde
menciona que la mayor cantidad de divorcios se dan en edades de entre 30 a 39 años. En
relación al sexo de los padres el 92% son mujeres, coincidiendo con esto Landeta & Potosí
(2018) mencionarían que el 97% de las mujeres están a cargo de la familia monoparental. En
cuanto al nivel de escolaridad el 13% tiene instrucción de nivel primaria y el 58% completaron
la educación secundaria, esto es en parte contradictorio ya que en un estudio en madres solteras
el 31,16 % un nivel de escolaridad primario y el 24 % instrucción secundaria y el 18,42 % tiene
estudios superiores (INEC, 2010). En lo que respecta al apoyo económico el 48% de los hijo/as
no recibe nada por parte del padre o madre que no es parte de la estructura familiar,
coincidiendo con estudios de Morgado, Gonzales & Jiménez (2003) aproximadamente el 42%
de los padres paga la pensión que se estableció judicialmente, mientras que no paga o da menos
de lo establecido.
Análisis inferencial
Del análisis inferencial se detallaron los niveles de agresividad a través del cuestionario de
agresividad de agresividad de Buss y Perry, y los estilos de crianza, mediante la escala de
estilos parentales para adolescentes de Musita y García (ESPA29), todo esto junto con las
características sociodemográficas de los adolescentes, lo que permite elaborar la discusión,
conclusiones y recomendaciones.
64
Tabla 4.- Estilos de crianza
En la tabla cinco se detallan los resultados obtenidos a través de la escala de estilos
parentales para adolescentes de Musita y García (ESPA29), donde se expresan los siguientes
resultados, un 26% estilo autoritario, 44% estilo autorizativo, 19% estilo indulgente o
permisivo, 11% estilo negligente; por lo que se observa que el estilo predominante en la
presente muestra es el estilo autorizativo, coincidiendo con lo citado por Jorge y González
(2018) mencionado que el estilos autorizativo o democrático es frecuentemente usado por los
padres sin existir diferencias considerables del estado civil de los progenitores.
Tabla 5.- Niveles de agresividad de los adolescentes.
En la tabla cuatro se indican los resultados obtenidos a través del cuestionario de
agresividad de agresividad de Buss y Perry, donde se obtuvieron los siguientes resultados, un
8% nivel de agresividad bajo, 37% nivel de agresividad medio, 50% nivel de agresividad alto
y 5% nivel de agresividad muy alto, estableciendo que por lo menos la mitad de la muestra
presenta altos niveles de agresividad. Reforzando lo dicho tenemos a Loeber y Hay (1997)
como citó Rodríguez, Barrio & Carrasco (2013) mencionando que comportamiento agresivo
se presenta en un 75% de los hijos que pertenecen a familias monoparentales durante un
periodo estable de tiempo.
Estilo de Crianza
Frecuencia Porcentaje
Autoritario 10 26%
Autorizativo 17 44%
Indulgente 7 19%
Negligente 4 11%
Total 38 100%
Nivel de agresividad
Frecuencia Porcentaje
Bajo 3 8%
Medio 14 36%
Alto 19 50%
Muy Alto 2 6%
Total 38 100%
65
Tabla 6.- Correlación de los niveles de agresividad y estilos de crianza.
En la tabla seis se establece la correlación entre los niveles de agresividad y estilos de
crianza, donde se puede observar que el porcentaje más representativo con un 21% se sitúa en
un nivel de agresividad alto y un estilo de crianza autorizativo o democrático, lo que indica que
contrario a lo expuesto en la bibliografía, una parte importante de los adolescentes de la muestra
presentan rasgos agresivo a pesar de que en su hogar se maneja un estilo de crianza autorizativo,
esto puede ser debido a las características de hogar monoparental en la que están implicados
los adolescentes de la presente investigación.
Coeficiente de correlación de Pearson
Comprobación de Hipótesis
Se comprueba la hipótesis con el coeficiente de correlación de Pearson donde el nivel de p
es 0,01 es decir 99% de confianza sea verdadera y 1% de probabilidad de error.
Por lo que las siguientes hipótesis a comprobar son:
HI: Existe una relación estadística entre los estilos de crianza y los niveles de agresividad
de adolescentes de familias monoparentales.
|Estilo Crianza Total
Autoritar
io
Autorizati
vo
Indulgent
e
Negligen
te
Niv
el A
gre
sivid
ad
B 2 (5%) 1 (3%) 3
(8%)
M 2 (5%) 6 (15%) 3 (8%) 3 (8%) 14
(36%)
A 7 (18%) 8 (21%) 4 (11%)
19
(50%)
M
A 1 (3%) 1 (3%)
2
(6%)
Total 10
(26%) 17 (44%) 7 (19%) 4 (11%)
38
(100%
)
66
HO: No existe una relación estadística entre los estilos de crianza y los niveles de
agresividad de adolescentes de familias monoparentales
r=0, 686 (valor del coeficiente)
p=0,01 (significancia)
N=38 (número de casos correlacionados)
Tabla 7.- Comprobación de hipótesis.
Correlaciones
Nivel Agresividad Estilo de Crianza
Estilo de Crianza
Correlación de Pearson ,686** 1
Sig. (bilateral) ,000
N 38 38
**. La correlación es significativa en el nivel 0,01 (bilateral).
Como se muestra en la tabla 5, con una significancia de p= 0,01; con un coeficiente de
correlación (r) de 0, 686 se prueba la hipótesis de investigación y se rechaza la hipótesis nula
en una correlación positiva alta; es decir que existe una relación entre los estilos de crianza y
los niveles de agresividad de adolescentes de familias monoparentales.
DISCUSIÓN
En los resultados de esta investigación se estableció que existe una correlación de Pearson
0,686 que es una relación estadísticamente alta entre los estilos de crianza y los niveles de
agresividad que presentan adolescentes procedentes de familias monoparentales, resultado
que no se puede comparar con otras investigaciones, pues a pesar de realizar una amplia
búsqueda de estudios con estas variables no existen investigaciones centradas en adolescentes
procedentes de familias monoparentales.
El estilo autorizativo o democrático como también es llamado, ha sido el más frecuentes
de todos los estilos, dentro de la investigación se recalca que este estilo de crianza se asocia
67
con todos los niveles de agresividad en unos en mayor medida que con otros y en especial
con los niveles altos de agresividad con un 21 % del total de la muestra. Este resultado se ha
opuesto a la teoría que hasta ahora hemos visto, donde autores como Roa & Del Barrio
(2002); Tur et al. (2004) citado por Raya et al. (2009) mencionarían que el estilo autorizativo
como un factor de protección del comportamiento agresivo. Estableciendo al estilo de crianza
autorizativo como un factor que ayuda a no desarrollar comportamientos agresivos sin
embargo no es determinante.
Por lo que Cumming & Davies (1994); Davies & Lindsay (2004); Ram & Hou (2005)
como citó Rodríguez, Del Barrio & Carrasco (2013, p.120) mencionan que “No considerar
las variables sociodemográficas de forma conjunta ha propiciado conclusiones contradictorias
tal como señalan algunos investigadores”.
Entre algunas de las variables que se recolecto es si existe apoyo económico de parte de su
expareja, estableciendo que el 48 % no recibe nada de parte de su ex conyugue y el 26 % lo
recibe algunas veces, según otro estudio de Hernández y Ramírez (2006) de 150 mujeres
divorciadas y separadas, 78.7% de ellas trabajaba, observando que esto no es propio de
nuestra investigación, sino que se replica en otras familias monoparentales. Por tal motivo se
ha visto obligado a que las madres de familias monoparentales tomen protagonismo dentro
del ámbito laboral con la finalidad de que la familia pueda sostener su estatus económico.
Esto trae como consecuencia que la crianza sea llevada a cabo parcialmente varias personas,
existiendo confusión en cuanto a normas y reglas se refiere, haciendo que estilo de crianza
autorizativo o democrático no sea muy efectivo.
Usualmente la crianza es asumida principalmente por el hijo primogénito con la ayuda de
algún familiar principalmente los abuelos/as maternas, en la investigación aproximadamente
la mitad de los adolescentes seria el hijo primogénito, esto significaría para el adolescente
según Morgado, Gonzales & Jiménez (2003) que, en su posición de hermanos mayores, ellos
asuman la responsabilidad de sus hermanos menores de modo cotidiano. Cuyo efecto según
Hurlock (1980) es una disminución de la vida social del adolescente y un aumento de
responsabilidades en el hogar. Llegando a ser un factor de riesgo no solo para el mismo
adolescente sino también para sus hermanos, ya que hay que tomar en cuenta que el
adolescente aún se encuentra en etapa de desarrollo, por lo tanto, no se encuentra listo para
asumir las responsabilidades de sus padres Llegando a observar que el estilo autorizativo a
68
pesar de ser importante para un adecuado desarrollo de los hijos, hay que tomar en cuenta los
varios factores de riesgo a los que se ven inmersos los adolescentes procedentes de familias
monoparentales.
En el estilo autoritario cuya característica es el control excesivo con ausencia de afecto, se
observa que de todos los adolescentes que se le aplica este estilo de crianza su mayoría se
relacionaría con niveles altos de agresividad, coincidiendo con investigaciones como De la
Torre et al. (2014) citado por Capano et al. (2016) donde se refieren que este estilo se
relaciona positivamente con la agresividad. Esto se debería según Chaux (2003) como citó
Álvarez (2011) a que los hijos tienden a imitar los comportamientos violentos de los adultos.
Actuando como modelos de comportamiento agresivo o espectadores.
En lo que respecta al estilo permisivo o indulgente se presentaría con niveles altos,
llegando a ser el nivel alto de agresividad en el estudio llevado a cabo por Roa y Del Barrio
(2002) como citó Raya et al. (2009) mencionan que un estilo permisivo favorece la aparición
de comportamientos agresivos. Esto se ocasiona según Sorribes & García (1996) por la falta
de control que existe en ellos, por lo que tienden a actuar impulsivamente, a hacer lo que
quieran y que cumplan sus deseos. Por tal motivo al momento de no poder obtener lo que
desean ellos suelen comportarse de manera agresiva.
Por último, el estilo negligente dentro del estudio se ha visto como el menos frecuente con
un 11% del total de la muestra, se lo ha relacionado con niveles medios de agresividad.
Estando en contra de la teoría hasta ahora vista como por ejemplo estudios de Knutson,
DeGarmo & Reid (2004); Mazefsky & Farell (2005); McCoy et al. (1999) citado por Raya et
al. (2009) relacionan a este estilo de crianza como un factor importante para desarrollar
comportamientos agresivos. Esto se le podría atribuir también a características
sociodemográficas, los adolescentes no pudieron haber contado con los suficientes factores
de protección familiares, pero si individuales, escolares o culturales suficientes como para
que no se refleje un comportamiento agresivo, aun así, esto no significa que hayan generado
problemas como ansiedad o depresión, etc.
69
CONCLUSIONES
Una vez evaluado a los adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio
Municipal “Fernández Madrid”, en cuanto a estilos de crianza aplicados por los padres existe
una mayor frecuencia del Estilo Autorizativo o democrático correspondiendo al 44 % de la
muestra, seguido por el Estilo Autoritario con un 26 % de la muestra, el Estilo Indulgente o
Permisivo con un 19 % de la muestra y por último el estilo negligente con un 11 % de la
muestra, donde el estilo más frecuente que se da con esta población es el autorizativo.
En cuanto a los niveles de agresividad presente en la muestra se observó que el 50%
corresponde a un nivel alto de agresividad, el 36 % un nivel medio de agresividad, 8%
presentaba niveles bajos de agresividad, y finalmente un 6 % un nivel muy alto de
agresividad. Enfatizando que la mayoría de adolescentes tiene niveles altos de agresividad.
En relación a los estilos de crianza y niveles de agresividad se ha observado que el estilo
autorizativo o democrático se relaciona con niveles altos de agresividad en el 21% de la
muestra, el estilo autoritario se relaciona con niveles altos de agresividad en el 18% de la
muestra, el estilo indulgente o permisivo se relaciona con un nivel alto de agresividad en el
11% de la muestra y, por último, el estilo negligente se relaciona con el nivel medio de
agresividad en el 8% de la muestra. El nivel autorizativo sobresale en su relación con los
niveles de agresividad.
Se ha confirmado la hipótesis de la investigación, señalando que existe una relación
estadística entre los estilos de crianza y los niveles de agresividad de adolescentes de familias
monoparentales, llegando a ser comprobada con un nivel de significancia positivamente alta
de 0, 686 en el coeficiente de correlación de Pearson.
La poca importancia que otorgan los padres al proceso de crianza, ya que debido a al
aumento de roles paternos, estos descuidan sus relaciones con sus hijos, trayendo como
consecuencia que cualquiera que sea el estilo de crianza aplicado se vea afectado y no tenga
el impacto esperado.
70
RECOMENDACIONES
Se recomienda evaluar los estilos de crianza en adolescentes que tengan problemas del
comportamiento, académicos, familiares sobre todo cuando ha existido un cambio en la
estructura familiar con el fin de realizar una intervención psicológica de manera oportuna,
considerando el estilo de crianza aplicado por el padre y las características propias de
adolescente.
Debido a los niveles altos de agresividad presentados en los adolescentes de familias
monoparentales se recomienda llevar a cabo talleres del buen trato como también de
resolución de conflictos con el propósito de que exista una mejor convivencia del adolescente
a nivel familiar, escolar y comunitario.
Se recomienda realizar charlas a los padres sobre el estilo de crianza autorizativo y su
relación con altos niveles de agresividad con el fin de compartir cuales son las ventajas y
desventajas de este estilo de crianza, así como cuales son los roles y funciones que debe
llevar a cabo cada miembro de la familia para que este estilo tenga la mayor eficiencia
posible.
A la universidad se recomienda avanzar en la validación pruebas psicométricas y estudio
de los estilos de crianza y agresividad en adolescentes con la finalidad de indagar a
profundidad sobre los factores influyen en el nivel de agresividad en adolescentes
provenientes de familias monoparentales y así lograr una visión más objetiva sobre esta
temática.
Profundizar en una guía que conlleve pautas de crianza en adolescentes de familias
monoparentales, con el fin de mejorar la funcionalidad familiar y llevar un proceso de crianza
más efectivo.
71
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77
ANEXOS
Anexo 1: Consentimiento informado
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA INFANTIL Y PSICORREHABILITACIÒN
UNIDAD EDUCATIVA MUNICIPAL “FERNÁNDEZ MADRID”
Consentimiento Informado
Quito, ____ de ______________del 2018
Yo, _________________________________________ con cédula de identidad Nº_______________,
tutor legal del adolescente llamado _____________________________, , autorizo libre y
voluntariamente la participación mía y de mi representado en la presente investigación que será
conducida por el estudiante Sarmiento Proaño Ronny Fernando perteneciente a la carrera Psicología
Infantil y Psicorrehabilitación de la Universidad Central del Ecuador y cuyo objetivo de estudio es
estudiar “Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Como padre, madre de familia y/o representante legal responderé el cuestionario y el adolescente los
test, el cual tiene como objetivo que proporcione la información necesaria para la realización de esta
investigación, la cual será manejada de manera estrictamente confidencial y no será usado con ningún
otro propósito fuera de los de este estudio sin mi consentimiento. He sido informado de que puedo hacer
preguntas sobre el proyecto en cualquier momento durante la participación del mismo, como además
podemos retirarnos del proyecto, cuando así lo decida, sin que esto perjudique en ninguna forma, a mi
persona ni a mi representado.
Firma: ____________________
C.I: ______________________
78
Anexo 2: ficha de recolección de datos
Universidad Central Del Ecuador
Facultad De Ciencias Psicológicas
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Ficha de recolección de datos
Fecha de Elaboración:
Datos del padre o madre y/o representante legal
Ocupación:
Edad:
Sexo:
Número de hijos:
Nivel de escolaridad:
Datos del estudiante
Sexo:
Edad:
Curso:
Lugar que ocupa entre los hermanos:
Datos Familiares (No llenar en caso de fallecimiento de uno de los padres)
1.- Indique la razón por la cual convive solo/a con su hijo/os:
a) Por separación temporal
b) Por separación definitiva
c) Por migración
d) Por desaparición
e) Por Viudez
f) Por abandono
2.- Hace que tiempo convive solo/a con su hijo/os:
a) 1 a 3 años
b) 3 a 5 años
c) 5a 10 años
d) Más de 10 años
3.-Existe apoyo económico por parte del padre o madre hacia su hijo.
a) Si
b) No
c) Algunas veces
4.- Su hijo/a tiene comunicación con su padre o madre.
79
a) Presencial
b) Ocasional
c) Por obligación
d) Por redes sociales
5.- Existe apoyo (económico, emocional, social) por parte de su familia:
a) Su nueva pareja
b) Sus padres
c) Otros parientes
d) No recibe apoyo
MUCHAS GRACIAS POR SU COLABORACION
80
Anexo 3: Aprobación del proyecto por parte del colegio
81
82
Anexo 4: Idoneidad Ética
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA INFANTIL Y PSICORREHABILITACIÒN
Quito, 20 de Mayo del 2019
Yo, María Elena Silva con CI 0801398553 docente de la Facultad de Ciencias Psicológicas de la
Universidad Central del Ecuador, con 20 años de experiencia como docente, he tutorado más de 300
tesis de pregrado, certificando la capacidad de tutorar al señor Sarmiento Proaño Ronny Fernando en el
presente estudio “Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan
adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
”.
___________________________
Msc. María Elena Silva
C.I: 0801398553
83
Anexo 5: Experticia del investigador
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA INFANTIL Y PSICORREHABILITACIÒN
Quito, 20 de Mayo del 2019
Yo, Sarmiento Proaño Ronny Fernando con CI 1715693873, egresado de la carrera de Psicología
Infantil Y Psicorrehabilitación de la Universidad Central del Ecuador, primera vez que realizo una
investigación de este tipo, sin embargo, cuento con los conocimientos teóricos bastos para emprender
el mismo.
___________________________
Sarmiento Proaño Ronny Fernando
CI: 1715693873
84
Anexo 6: Cuestionario de agresividad de Buss y Perry (AQ)
Universidad Central Del Ecuador
Facultad De Ciencias Psicológicas
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Cuestionario de Agresión (AQ)
Institución: Unidad Educativa Municipal “Fernández Madrid”
Fecha de elaboración: ___/___/___
Curso: ______
Paralelo: ______
Instrucciones
A continuación, se presentan una serie de afirmación con respecto a situaciones que podrían ocurrirte.
A las que deberás contestar escribiendo un aspa “X” según la alternativa que mejor describa tu
opinión.
CF = Completamente falso para mi
BF = Bastante falso para mi
VF = Ni verdadero ni falso para mi
BV = Bastante verdadero para mi
CV = Completamente verdadero para mi
85
Recuerda que no hay respuestas buenas o malas, solo interesa la forma como tu percibes. Sientes y
actúas en esas situaciones.
CF BF VF BV CV
01. De vez en cuando no puedo controlar el impulso de golpear a
otra persona.
02. Cuando no estoy de acuerdo con mis amigos, discuto
abiertamente con ellos.
03. Me enojo rápidamente, pero se me pasa enseguida.
04. A veces soy bastante envidioso.
05. Si se me provoca lo suficiente, puedo golpear a otra persona.
06. A menudo no estoy de acuerdo con la gente.
07. Cuando estoy frustrado, muestro el enojo que tengo.
08. En ocasiones siente que la vida me ha tratado injustamente.
09. Si alguien me golpea, le respondo golpeándole también.
10. Cuando la gente me molesta, discuto con ellos.
11. Algunas veces me siento tan enojado como si estuviera a punto
de estallar.
12. Parece que siempre son otros los que consiguen las
oportunidades.
13. Suelo involucrarme en las peleas algo más de lo normal.
14. Cuando la gente no está de acuerdo conmigo, no puedo evitar
discutir con ellos
15. Soy una persona apacible.
16. Me pregunto por qué algunas veces me siento tan resentido por
algunas cosas.
17. Si tengo que recurrir a la violencia para proteger mis derechos,
lo hago.
18. Mis amigos dicen que discuto mucho.
19. Algunos de mis amigos piensan que soy una persona
impulsiva.
20. Sé que mis “amigos” me critican a mis espaldas.
21. Hay gente que me provoca a tal punto que llegamos a
pegarnos.
22. Algunas veces pierdo el control sin razón
23. Desconfió de desconocidos demasiados amigables.
24. No encuentro ninguna buena razón para pegar a una persona
25. Tengo dificultades para controlar mi genio
26. Algunas veces siento que la gente se está riendo a mis espaldas.
27. He amenazado a gente que conozco
28. Cuando la gente se muestra especialmente amigable, me
pregunto que querrán.
29. He llegado a estar tan furioso que rompía cosas.
86
Anexo 7: Escala de Estilos parentales para adolescentes de Musita y García
(ESPA29)
Universidad Central Del Ecuador
Facultad De Ciencias Psicológicas
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Escala de Estilos parentales para adolescentes (ESPA29) de Musita y García
A continuación, encontrarás una serie de situaciones que pueden tener lugar en tu familia. Estas
situaciones se refieren a las formas en que tus padres responden cuando tú haces algo. Lee
atentamente las situaciones y contesta a cada una de ellas con la mayor sinceridad posible. No hay
respuestas correctas o incorrectas, lo que más vale es la sinceridad.
Las puntuaciones que vas a utilizar van de 1 hasta 4, así:
El 1 es igual a NUNCA
El 2 es igual a ALGUNAS VECES
El 3 es igual a MUCHAS VECES
El 4 es igual a SIEMPRE
Utiliza aquella puntuación que tú creas que responde mejor a la situación que tú vives en tu casa.
EJEMPLO:
CUESTIÓN PADRE
1. Si ordeno mi
cuarto
Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
Has contestado marcando el número 3 en el apartado “Me muestra cariño”, que quiere decir
que tu padre te muestra cariño MUCHAS VECES cuando tú ordenas tu cuarto.
Has contestado 2 en el apartado “Se muestra indiferente” que quiere decir que tu padre
ALGUNAS VECES se muestra indiferente cuando tú recoges la mesa.
Para cada una de las situaciones que te planteamos valora estos aspectos:
ME MUESTRA CARIÑO: Quiere decir que te felicita, te dice que lo has hecho muy bien,
que está muy orgulloso de ti, te da un beso, un abrazo o cualquier otra muestra de cariño.
SE MUESTRA INDIFERENTE: Quiere decir que, aunque hagas las cosas bien, no se
preocupa mucho de ti ni de lo que haces.
HABLA CONMIGO: Cuando haces algo que no está bien, te hace pensar en tu
comportamiento y te razona por qué no debes volver a hacerlo.
LE DA IGUAL: Significa que sabe lo que has hecho, y aunque considere que no es
adecuado, no te dice nada. Supone que es normal que actúes así. ME RIÑE: Quiere decir que
discute contigo por las cosas malas que has hecho.
ME PEGA: Quiere decir que te golpea, o te pega con la mano o con cualquier objeto.
ME PRIVA DE ALGO: Es cuando te quita algo que normalmente te daría como, por
ejemplo, dejar de darte propinas, o darte menos de lo normal como castigo, dejarte sin ver
87
televisión durante un tiempo, impedirte salir de casa, encerrarte en tu habitación o cosas
parecidas.
Verás que las situaciones que pueden suceder en tu familia se encuentran detrás de la página. En
primer lugar, deberás leer cada situación y contestar en la parte derecha destinada a las reacciones que
tiene tu padre. Cuando acabes de valorar las reacciones de tu padre a todas las situaciones, deberás
voltear la página, volver a leer las situaciones y contestar en la parte destinada a las 120 reacciones
que producen en tu madre. Es muy importante que sigas este orden y que las valoraciones que hagas
de tu MADRE sean independientes de las que has hecho de tu PADRE. SI TIENES ALGUNA
DUDA, CONSULTA CON EL RESPONSABLE ANTES DE EMPEZAR.
88
1
Nunca
2
Algunas veces
3
Muchas Veces
4
Siempre
1. Si obedezco las cosas que me manda.
2. Si no estudio o no quiero hacer los deberes que me mandan en el Colegio/Instituto.
3. Si viene alguien a visitarnos a casa y me porto con cortesía.
4. Si rompo o estropeo alguna casa de mi casa.
5. Si traigo a casa el boletín de notas a final de curso con buenas calificaciones.
6. Si voy sucio y desastrado.
7. Si me porto adecuadamente en la casa y no interrumpo sus actividades
8. Si se entera de que he roto o estropeado alguna cosa de otra persona, o en la calle.
9. Si traigo a casa el boletín de notas al final de curso con algún suspenso.
10. Si al llegar noche, vuelvo a casa a la hora acordada, sin retraso.
11. Si me marcho de casa para ir a algún sitio, sin pedirle permiso a nadie.
12. Si me quedo levantado hasta muy tarde, por ejemplo, viendo la televisión.
13. Si le informa alguno de mis profesores de que me porto mal en la clase.
14. Si cuido mis cosas y voy limpio y aseado.
15. Si digo una mentira y me descubren.
16. Si respeto los horarios establecidos en mi casa.
17. Si me quedo por ahí con mis amigos o amigas y llego tarde a casa por la noche.
18. Si ordeno y cuido las cosas en mi casa.
19. Si me peleo con algún amigo o alguno de mis vecinos,
20. Si me pongo furioso y pierdo el control por algo que me ha salido mal o por alguna cosa que no
me ha concedido.
21. Cuando no como las cosas que me ponen en la mesa.
22. Si mis amigos o cualquier persona le comunican que soy un buen compañero.
23. Si habla con alguno de mis profesores y recibe algún informe del colegio/instituto diciendo que me
porto bien.
24. Si estudio lo necesario y hago los deberes y trabajo que me manda en clase.
25. Si molestan en casa o no dejo que mis padres vean las noticias o partido de futbol
26. Si soy desobediente
27. Si como todo lo que me ponen en la mesa.
28. Si no falto nunca a clases y llego todos los días puntual.
29. Si alguien viene a casa a visitarnos y hago ruido o molesto.
89
Mi padre …
1. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
2. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
3. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
4. Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
5. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
6. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
7. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
8. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
9. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
10. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
11. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
12. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
13. 22.Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
14. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
15. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
16. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
17. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
18. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
19. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
20. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
21. Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
22. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
23. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
24. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
25. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
26. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
27. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
28. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
29. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
90
Mi madre …
1. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
2. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
3. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
4. Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
5. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
6. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
7. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
8. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
9. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
10. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
11. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
12. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
13. 22.Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
14. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
15. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
16. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
17. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
18. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
19. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
20. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
21. Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
22. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
23. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
24. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
25. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
26. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
27. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
28. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
29. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
91
Anexo 8: Aprobación de comité de ética
92
93
94
95
PLAN APROBADO
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLOGICAS
MATRIZ PARA LA PRESENTACION DEL PROYECTO DE TRABAJO DE TITULACION
2019
96
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
Carrera: Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
Línea de Investigación: Clínica Infantil y evaluación en los grupos de atención prioritaria
Sublinea de investigación: Prevención para los problemas del desarrollo humano.
Nombre del estudiante: Ronny Fernando Sarmiento Proaño
Nombre del tutor: Msc. María Elena Silva
97
1. TÍTULO
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
2.1. Delimitación del problema
Durante las últimas décadas hemos podido observar un cambio en la estructura familiar, según el
periódico El Comercio (2015) del total de madres en el Ecuador, el 32% están divorciadas, separadas,
viudas o son madres solteras. Por lo que las madres llevarían el proceso de crianza en solitario,
asumiendo una mayor cantidad de responsabilidades, no solo familiares, sino sociales, económicas y
académicas, trayendo consigo una falta de supervisión, afecto y trastornos en los hijos.
Entre los trastornos más frecuentes en adolescentes entre los 14 y 18 años según Fernández, Arias
y Sutil (2000). el 39% presenta trastornos de conducta, 19,5% son depresivos, el 11,7 % ansiedad,
9,1% trastornos específicos del desarrollo, 2,6% trastornos de eliminación, desaparecen los trastornos
de la actividad y de la atención, y 2,8% de rivalidad entre hermanos, y trastornos de alimentación
añadiendo los anterior la Dra. Alegría Majluf (1999) en su investigación con 908 estudiante de 11 a
17 años, encontró que más problemas psicológicos tenían adolescentes de padres separados
Estableciendo que muchos adolescentes pueden generar en algún trastorno momento de su
desarrollo y el riego aumenta cuando estos adolescentes provienen de padres separados, por lo que es
importante el estilo de crianza aplicado en familias monoparentales
Esto se puede atribuir según Hernández (1997) como citó Capano, González & Massonnier (2016,
p.415) a que “No existe otra instancia social que logre reemplazarlas en la satisfacción de las
necesidades psicoafectivas de todos sus integrantes y su retroalimentación emocional”. Concluyendo
la importancia de los padres durante el proceso de crianza en especial con la estructura monoparental
presente.
Por lo que podemos decir que la participación de la familia es fundamental durante la aplicación
de los estilos de crianza ya que según Fletcher, Steinberg y Sellers (1999) como citó Aroca &
Cánovas (2012, p.162) mencionan que los adolescentes que tienen solo un padre que aplique el
estilo autoritativo, puede tener puede tener hijos más competentes que no tienen ningún padre.
Mostrándonos lo importante de aplicar un adecuado estilo de crianza sin importar que la lleve a
cabo solo un padre, pero esto no sucede en todas las familias, según Sheehan y Watson (2008) como
citó Raya, Pino, Herruzo (2009, p.213):
98
“En otras ocasiones, se han comparado distintos tipos de disciplina, observándose que
una disciplina agresiva, caracterizada por un bajo nivel de razonamiento y altos niveles de
agresividad tanto física como verbal y emocional, genera conductas agresivas en los propios
hijos mientras que una disciplina menos agresiva y basada en el razonamiento no lo hace”.
Indicándonos que los estilos de crianza donde predomina una disciplina excesiva, castigos y falta
de razonamiento generalmente se lo relaciona con comportamientos agresivos, reforzando lo dicho
tenemos Aparici (2004) como citó Perales, Ordóñez & Pérez (2012, p.147) concluyen que: “Respecto
al estilo autoritario, es un estilo que valora negativamente el comportamiento de los hijos, impone
normas estrictas y utiliza habitualmente los castigos y las riñas, se correlaciona positivamente con
inestabilidad emocional y con mayor propensión a desarrollar comportamientos agresivos”.
Concluyendo que ciertos estilos de estilo de crianza y la forma en como interaccionan con los
hijos, tiende a generar problemas de agresividad, ya que se le atribuye al aprendizaje de las distintas
formas de agresividad a los padres, que se realiza mediante la experiencia u observación, llegando a
ser un problema debido a que se aplica sobre otros miembros de la familia o sus pares.
La agresividad se torna más preocupante en contextos familiares monoparentales, Loeber y Hay
(1997) mencionan que aproximadamente el 75% de hijos que pertenecen a familias monoparentales
presentan comportamientos agresivos por un periodo de tiempo. Siendo la familia monoparental un
factor de riesgo para el desarrollo comportamientos agresivos, pero esto refiriéndose solo al entorno
familiar, los comportamientos agresivos tiendo a expandirse a otras áreas del desarrollo, a nivel
escolar autores como Cangas, Gázquez, Pérez, Padilla y Miras (2007) como citó Senabre et al.
(2012) mencionan que: “en el contexto español, aproximadamente el 40% de los escolares presencia o
participa diariamente en comportamientos agresivos”. Estableciendo que del 75% de
comportamientos agresivos, un 40% se puede presenciar en instituciones educativas.
Infiriendo que la agresividad debe ser tomada con la toda la seriedad, ya que estos
comportamientos se presentan con mucha frecuencia además de llegar a ser naturalizada y
posteriormente aprendidas tanto por las victimas como por los observadores, reproduciendo los
comportamientos agresivos en otros contextos.
Concluyendo en el problema que representa el uso de un inadecuado estilo de crianza como
generados de comportamientos agresivos, además de recordar que el adolescente se desenvuelve en
varios contextos, razón por la cual se debería tratar tanto tomar en cuenta los estilos de crianza como
un factor fundamental para evitar el desarrollo de la agresividad ya que este dependerá en como pueda
afectar al desarrollo integral.
99
2.2 Preguntas
¿Existen estilos de crianza asociados con ciertos niveles de agresividad en adolescentes de
familias monoparentales en el Colegio Municipal “Fernández Madrid”?
¿Cuáles son los estilos de crianza en familias monoparentales en el Colegio Municipal
“Fernández Madrid”?
¿Cuál es el nivel de agresividad en adolescentes de familias monoparentales en el Colegio
Municipal “Fernández Madrid”?
2.3 Objetivos
2.3.1 Objetivo general
Relacionar la influencia de los estilos de crianza con los niveles de agresividad en
adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández
Madrid”.
2.3.2 Objetivo especifico
Definir los estilos de crianza en familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández
Madrid”.
Identificar los niveles de agresividad en adolescentes de familias monoparentales del Colegio
Municipal “Fernández Madrid”.
2.4. Justificación
La importancia de la investigación está en cómo el aumento de familias monoparentales en las
últimas décadas ha tenido un impacto dentro de los estilos de crianza los cuales a su vez influyen en
comportamientos agresivos en adolescentes, autores como Blanco y Umayahara (2004) como citó
Ceja (2016, p.124) “Consideran que el trabajo de ambos padres, la existencia mayoritaria de familias
monoparentales, la incorporación de la mujer al trabajo, con el consecuente cambio de roles generado
al interior del hogar, la mayor escolarización de la población, y el acceso a información a través de los
medios de comunicación masivos, han generado profundos cambios respecto a las formas de criar a
los niños y niñas, a quienes los crían y en que consiste dicha crianza”.
Otro aspecto que le da relevancia al estudio es que muchas de las investigaciones de estilos de
crianza se realizaron en niños, autores como Ramírez (2005) plantean que las estrategias
socializadoras cambian y evolucionan a medida que crecen los hijos, debido a los nuevos
100
requerimientos que vienen con su desarrollo. Por lo que el estudio de estilos de crianza es diferente en
niños que en adolescentes y todavía más importante porque los estudios se basan en familias nucleares
En relación a beneficios del estudio de la variable de estilos de crianza según García, Rivera y Reyes
(2014, p.134) concluyen que: “Padres que utilizaron el estilo orientado al amor fueron más propensos
a interiorizar los valores de sus padres, los cuales asumían como propios, a diferencia de los niños de
padres que utilizaban un estilo orientado a los objetos”. Recalcando que los estilos de crianza basados
en el afecto ayudan al desarrollo individual, al favorecer la capacidad de absorber valores, pero no solo
tiene efectos a nivel personal, sino que también mejora sus relaciones interpersonales tanto con sus
padres como con sus pares, razón por la cual es importante investigarlo en nuestro contexto.
Sin embargo, lograr la aplicación de un adecuado estilo de crianza no es fácil, en especial en una
familia con estructura monoparental, lo cual tiene como consecuencia un aumento en la aparición de
distintos trastornos algunos de los cuales están relacionados con la agresividad autores como Berk
(1999) como citó Arias Walter (2013, p.29): “El comportamiento agresivo es multicausal, pero dado
que el papel de la familia en el desarrollo psicológico de la persona es indiscutible, el funcionamiento
familiar, es el mejor predictor de la aparición de las conductas agresivas, así como de su tránsito hacia
la delincuencia juvenil”. Recalcando en como la participación de la familia es un factor de riesgo
decisivo para la aparición de comportamientos agresivos, razón por la cual se espera que tenga un
impacto en la participación de los padres y crear conciencia e interés sobre como la participación de
los padres, aunque sea en familia monoparental tiene efectos sobre la agresividad de los hijos.
Aunque a la agresividad se la toma más en cuenta en las últimas décadas autores como Chaux
(2003); Farrington (2004); Samper, Aparici & Mestre (2006) como citó Mestre et al. (2012, p.1264).
“Diferentes estudios concluyen un aumento de la conducta agresiva y de la inestabilidad emocional
desde los últimos años de la infancia hasta la adolescencia”. Uniendo a lo anterior tenemos a Mestre,
Samper, Tur Porcar y Cortes (2008, p.432) “El comportamiento agresivo suele presentarse en
distintos lugares: hogar, escuela y comunidad, y esto provoca deterioro clínicamente significativo de
la actividad social, académica o labora”. Llegando a establecer mediante a través de estos aportes que
ha existido un aumento en el comportamiento agresivo, el cual no solo se presenta en el hogar sino
también en la escuela y comunidad, muchas veces creando un mayor malestar y llegando a dificultar
la interacción no solo con la familia sino también con otros espacios por lo que al notar
comportamientos agresivos dentro del hogar es necesario actuar de manera oportuna.
Pero no muchas veces los padres de familias monoparentales se dan cuenta de los cambios de
comportamiento de sus hijos debido a sus nuevos roles, razón por la cual la agresividad llega a
101
presentarse en varios contextos, la importancia en su estudio aumenta y aún más cuando tomamos en
cuenta que la agresividad, puede ser aprendida, citando a Carpio (2016, p.8):
“La respuesta agresiva de un niño es porque reacciona ante una situación de estímulo
respuesta, este conflicto es generado a través del aprendizaje vicario, es decir tienen origen
en el contexto familiar y se reproduce en el contexto escolar del infante, todo aprendizaje es
el resultado del medio ambiente donde el individuo se desenvuelve, el individuo absorbe lo
observable”.
Al ser la agresividad un comportamiento aprendido, no solo se puede reproducir dentro de la
familia por hermanos sino también puede llegar a el entorno escolar siendo aprendido por lo
compañeros de clases y usado como método de control e imposición y aunque no sea aprendido este
tipo de comportamiento puede llegar a ser naturalizando, razón por la cual es importante actuar desde
la familia, al ser el espacio que más influencia tiene sobre los adolescentes.
Debido a todo lo mencionado anteriormente se espera concluir que existe una estrecha relación
entre los estilos de crianza y agresividad, de forma de que esta investigación sirva no solo para
establecer una relación entre estas dos variables sino como base para ejecutar programas o proyectos
que ayuden a mejorar el diario vivir de las familias monoparentales.
2.5. Resultados y beneficios esperados
Ayudará a comprender como se relaciona la agresividad con los estilos de crianza en adolescentes
procedentes de familias monoparentales, el cual cubrirá un hueco de conocimiento que
proporcionando información dentro de nuestro contexto además que otorgará una visión más clara
sobre la problemática, ayudando a disminuir los niveles de estrés presentes en las familias
monoparentales y aumentando la funcionalidad familiar.
3. Marco Teórico
CAPITULO I: ESTILOS DE CRIANZA
1.1 Aspectos Generales de los estilos de crianza
1.2 Modelos de estilos de crianza
1.2.1 Modelo de Diana Baumrind
1.2.2 Estilos parentales de Maccoby y Martin
1.2.3 Modelo de Darling & Steinberg
1.3 Tipos de estilos de crianza
1.3.1 Estilo Autoritario
102
1.3.2 Estilo Autoritativo o democrático
1.3.3 Estilo Permisivo
1.3.4 Estilo Negligente
1.4 Los estilos de crianza y su relación con adolescentes
1.5. Los estilos de crianza en familias monoparentales
1.6. Estilos de crianza y agresividad
CAPITULO II: La agresividad
2.1 Aspectos generales de la agresividad
2.1.1 Factores de Protección
2.1.2 Factores de riesgo
2.2. Teorías de la Agresividad
2.2.1 Modelo instintivo
2.2.2 Bases biológicas de la agresividad
2.2.3 Teoría del Síndrome AHA
2.2.4 Teoría de la frustración Agresión
2.2.5 Modelo del déficit de procesamiento de la información
2.2.6 Teoría de agresividad de Bandura
2.3. Tipos de agresividad
2.4. La agresividad y su presencia en familias monoparentales
4. Hipótesis y Variables
a. Hipótesis
HI: Existe una relación estadística entre los estilos de crianza y los niveles de agresividad de
adolescentes de familias monoparentales.
HO: No existe una relación estadística entre los estilos de crianza y los niveles de agresividad de
adolescentes de familias monoparentales
4.2. Variables
4.2.1. Definición conceptual de variables
103
Variable Independiente
Los estilos de crianza según Torío, Peña & Rodríguez (2008) citado por Velázquez & Villouta
(2013, p.14) “Los Estilos de Crianza representan la forma de actuar de los adultos respecto a los/as
niños/as ante situaciones cotidianas, la toma de decisiones o la resolución de conflictos”.
Variable Dependiente
La agresividad según Bandura (1972) como citó Carrasco & Gonzales (2006, p.8) “Conducta
adquirida controlada por reforzadores, la cual es perjudicial y destructiva”.
4.2.2. Operativización de variables
Variable
Independiente
Indicador Medidas Instrumento
Agresividad
Agresividad
Hostilidad
Ira
99 a más puntos
83-98 puntos
68-82 puntos
52-67 puntos
Menos de 51 puntos
Cuestionario de
agresividad de
agresividad de Buss y
Perry (1992) adaptado
por Matalinares,
Yaringaño, Uceda,
Fernández, Huari.
Campos y Villavicencio.
(2012)
Coordenadas
Estilos de
Crianza
Autoritario
Autorizativo
Indulgente
Negligente
Aceptación/
implicación
1-49
51-99
51-99
1-49
Coerción/
imposición
51-99
51-99
1-49
1-49
ESPA29
Escala de Estilos
parentales para
adolescentes de Musita
y García(2001)
104
5. Metodología
5.1. Enfoque de la investigación
El diseño de esta investigación responde al enfoque cuantitativo. “Este enfoque lleva una secuencia
y es probatorio, llevando a cabo un plan o diseño para su posterior aplicación, el cual va a constar de
preguntas, objetivos, revisión de la literatura, etc.” (Hernández, 2014).
5.2. Alcance de la investigación
Es una investigación del tipo asociativo. “Asocia variables mediante un patrón predecible para un
grupo o población” (Hernández, 2014).
5.3. Diseño de la investigación
Investigación del tipo no experimental ya que según Hernández (2014) es que no involucra una
manipulación de las variables, observando los hechos de manera natural, sin intervención del
investigador (Hernández, 2014).
6. Población y muestra
6.1. Población
La población consta de 45 adolescentes pertenecientes a familias monoparentales de ambos sexos
(23 mujeres y 22 hombre) que se encuentren en 2do BGU con edades entre 16 y 17 años y que sean
parte del Colegio Municipal “Fernández Madrid.”
6.2. Tipo de muestra
Muestreo probabilístico, esta es según Hernández (2014, p.175):
“En las muestras probabilísticas, todos los elementos de la población tienen la misma posibilidad
de ser escogidos para la muestra y se obtienen definiendo las características de la población y el
tamaño de la muestra, y por medio de una selección aleatoria o mecánica de las unidades de
muestreo/análisis”.
105
6.3. Calculo del tamaño de la muestra
El tamaño de la muestra consta de 40,540 donde el tamaño de la población fue de 45 estudiantes y
consta con un margen de error de 5% que es margen de error admisible en una investigación social.
𝑛 = 𝑁
𝑒2 (𝑁 − 1) + 1
𝑛 = 45
0,052 (45 − 1) + 1
𝑛 = 45
0,0025 (44) + 1
𝑛 = 45
0,11 + 1
𝑛 = 45
1,11
n = 40, 540
6.4. Criterios de inclusión y exclusión
6.4.1. Criterios de inclusión
Que se encuentren en 2do de BGU.
Participación voluntaria en la investigación.
Que provengan de familias monoparentales.
6.4.2. Criterios de exclusión
Presencia de trastornos psiquiátricos o neurológicos.
Estructura monoparental durante un tiempo mínimo de un año.
7. Recolección de datos
7.1. Procedimiento
Se efectuará un contacto inicial con el Colegio Municipal “Fernández Madrid” donde se realizará
la investigación, donde se establecerá la población como la muestra a través de la revisión de carpetas
106
de los estudiantes que pertenezcan a segundo de BGU, a su vez que se hará una revisión de los
instrumentos que se va a usar por parte de la psicóloga del colegio encargada , para después aplicar
los reactivos correspondientes a cada una de las variables, analizar, interpretar los resultados y
verificar su relación con la hipótesis.
7.2. Instrumentos
Consentimiento Informado
Ficha de recolección de datos
Escala de Estilos parentales para adolescentes de Musita y García (Anexo 9).
Es un cuestionario por Musita y García (2001) validado en España, el cual ha sido usado para
valorar el estilo de crianza usado por los padres independientemente el cual consta de 29 ítems, el cual
mide dos dimensiones la primera es de aceptación/implicación que a la vez se divide en cuatro
subescalas la cuales son afecto, diálogo, indiferencia y displicencia y la segunda dimensión es
coerción/imposición que se divide en tres subescalas que son privación, coerción física y coerción
verbal. El test consta de puntuaciones que van del 1 al 4, siendo 1punto igual a nunca, 2 puntos a
algunas veces, 3 puntos igual muchas veces y 4 puntos igual a siempre, de la suma de todos estos
puntos se obtiene las puntuaciones de las escalas para después obtener la puntuación directa de las
dimensiones y transformar la puntuación en centil y representar está en el plano. El espa29 tiene como
coeficiente de confiabilidad 0,96 y en cuanto a la validez teórica del instrumento se realiza mediante
un análisis factorial. Los cálculos se realizaron con el programa SPSS 8.0 extrayendo los factores con
el método PFA-análisis de componentes principales y aplicando la rotación varimax con
normalización káiser.
Cuestionario de agresividad de Buss y Perry (Anexo 10)
Este cuestionario se utiliza para evaluar los niveles agresividad el cual ha sido adaptado y validado
por Matalinares et al. (2006) en el país de Perú, constando de 4 dimensiones y la distribución de ítems
por dimensión es la siguiente: agresión física tiene 9 ítems, agresividad verbal 5 ítems, hostilidad 7
ítems e ira 8 ítems, con un total de 29 ítems en todo el instrumento. Con respuestas que son
completamente falso para mi igual a 1 punto, bastante falso para mi igual a 2 puntos, ni verdadero ni
falso para mi es igual a 3 puntos, bastante verdadero para mi igual 4 puntos, completamente verdadero
para mi igual a 5 puntos. La confiabilidad del cuestionario de agresividad se determinó mediante la
aplicación de la fórmula de Alpha CronBach, con un coeficiente de confiabilidad de 0,83. Mientras
que, respecto a la validez de constructo presentada por el instrumento, mediante el análisis factorial
exploratorio, que permite verificar la estructura de los principales factores utilizando el método de los
componentes principales.
107
8. Análisis de datos
En el análisis de datos se va a realizar primeramente una matriz con los datos obtenidos de los
instrumentos implementados, donde posteriormente se va a usar el programa STATS 2.0 lanzado el
año del 2009, para a través del chi cuadrado se va análisis de los datos de las distintas variables,
permitiendo verificar la hipótesis, confiabilidad y finalmente presentarlos en gráficos o cuadros de
manera organizada para interpretarlas al final, se establecerá la correlación de varios aspectos:
Los tipos de estilos de crianza en los adolescentes.
Ocupación de los padres y estilos de crianza.
Niveles de agresividad en los adolescentes.
Sexo de los adolescentes y niveles de agresividad.
Correlación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad.
9. Consideraciones éticas
9.1. Respetar a la persona y comunidad que participa en el estudio
Se establecerá una buena relación tanto con adolescentes como con las autoridades y profesores del
colegio, la cual se realizará a través de una comunicación asertiva, utilizando un adecuado
vocabulario con el fin de que no dé lugar a dudas ni malos entendidos, durante todo el proceso de
aplicación de la investigación.
9.2. Autonomía
La existencia de una total autonomía en la autorización por parte de los padres como también de
sus hijos en la participación de la investigación y su capacidad de desistir de la misma en cualquier
momento de la aplicación de los diferentes reactivos psicológicos (Anexo 1).
Además de la aprobación que ha existido por parte del Colegio Municipal “Fernández Madrid”
mostrando su interés y apoyo en la realización de este proyecto de investigación (Anexo 2).
9.3. Beneficencia
Se establecerá una línea base de los estilos de crianza que se llevan aplicando y su relación con la
agresividad en familias con estructura monoparental, el cual tiene como fin, llegar a tener una mayor
comprensión del tema para la posterior elaboración programas o proyectos que beneficien a las
familias con estructura monoparental.
108
9.4. Confidencialidad
Todos aquellos instrumentos que sean entregados a los participantes carecerán de datos de
identificación que los relacione con los datos proporcionados, de manera que los adolescentes y su
familias permanezcan en total anonimato, asegurando la confidencialidad durante toda la aplicación
del proyecto de investigación, además que todos los instrumentos llenados serán únicamente y sus
datos serán manejados únicamente por el investigador y con fines netamente estadísticos, asegurando
todo lo mencionado a los participantes a través del consentimiento informado (Anexo 6)
9.5. Aleatorización equitativa de la muestra
Durante la identificación de la muestra se realizará de manera aleatoria, donde se elaborar una lista
de los estudiantes para luego a través de números seleccionar quienes no entraran en la investigación
con el fin de no discriminar a nadie sin tomar en cuenta etnia, sexo, nivel socioeconómico, etc.
9.5. Protección de la población vulnerable
Esto se realizará mayormente a través de la confidencialidad, donde se protegerá de manera
rigurosa toda la información obtenida además de la identidad, igualdad en el trato de forma que todas
las relaciones se realicen con todo el respeto posible y garantizando el interés superior del niño, donde
si observamos que sucede algo a causa de la investigación se tomará las medidas pertinentes a pesar
de que en la investigación no existan riesgos.
9.6. Riesgos potenciales del estudio
No existen riesgos durante la aplicación de la investigación debido a que no existe manipulación
de la muestra y a su carácter netamente descriptivo
9.7. Idoneidad ética y experiencia del investigador
La idoneidad ética referida a la capacidad del tutor para asesorar un proyecto de investigación
(Anexo 3).
Experticia refiriendo a la capacidad de estudiante para efectuar adecuadamente proyectos de
investigación (Anexo 4).
109
10. Cronograma de actividades
11. Recursos
11.1. Recursos Materiales
Insumos de oficina
o Hojas
o Esferos
Cuestionario de agresividad (AQ)
Cuestionario de estilos de crianza de Robinson
2018 2019
Actividades Octubre Noviembre Diciembre Enero Febrero Marzo Abril Mayo
1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4 1 2 3 4
1
2
3
4
1
2
3
4
Formulación del
tema x x x x x x x x
Revisión
Bibliográfica x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x
Elaboración del
plan de
investigación x x x x x x x x
Desarrollo del
marco teórico x x x x x x x x
Aprobación del
plan de
investigación
x
x
x
x
Recolección de
datos de la
muestra
x
Aplicación de
reactivos
x
Análisis e
interpretación de
resultados
x
Elaboración de
conclusiones y
Recomendaciones
x
x
Elaboración del
informe final
x
110
11.2. Recursos Económicos
Transporte
Alimentación
Copias
11.3 Recursos tecnológicos
Computador
Internet
Pendrive
11.4. Recursos Espaciales
Habitación
Materiales Cantidad Costo Unitario Costo total
Hojas 300 0.02 ctvs. 6 $
Copias 300 0.02 ctvs. 6 $
Esferos 10 0.40 ctvs. 4 $
Transporte 120 0.25 ctvs. 30 $
Alimentación 90 2.50 $ 225 $
Pendrive 1 12 $ 12 $
Internet (mes) 7 24 $ 168 $
Total 447 $
111
12. Referencias Bibliográficas
Arias, W.L. (2013) Agresión y violencia en la adolescencia: la importancia de la familia. recuperado de:
http://ucsp.edu.pe/imf/wp-content/uploads/2014/12/Agresionyviolenciaenlaadolescencia1.pdf
Capano Bosch, A., González Tornaría, M., & Massonnier, N. (2016). Estilos relacionales parentales: estudio
con adolescentes y sus padres. Revista de Psicología (PUCP), 34(2), 413-444.
Carrasco, M. Á., & González, M. J. (2006). Aspectos conceptuales de la agresión: definición y modelos
explicativos [Theoretical issues on aggression: concept and models]. Acción psicológica, 4(2), 7-38.
Casais Molina, D., Flores Galaz, M., & Domínguez Espinosa, A. (2017). Percepción de prácticas de crianza:
análisis confirmatorio de una escala para adolescentes. Acta de investigación psicológica, 7(2), 2717-
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113
13. Anexos
Anexo 1 - Consentimiento Informado
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA INFANTIL Y PSICORREHABILITACIÒN
UNIDAD EDUCATIVA MUNICIPAL “FERNÁNDEZ MADRID”
Consentimiento Informado
Quito, ____ de ______________del 2018
Yo, _________________________________________ con cédula de identidad Nº_______________,
tutor legal del adolescente llamado _____________________________, , autorizo libre y
voluntariamente la participación mía y de mi representado en la presente investigación que será
conducida por el estudiante Sarmiento Proaño Ronny Fernando perteneciente a la carrera Psicología
Infantil y Psicorrehabilitación de la Universidad Central del Ecuador y cuyo objetivo de estudio es
estudiar “Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Como padre, madre de familia y/o representante legal responderé el cuestionario y el adolescente los
test, el cual tiene como objetivo que proporcione la información necesaria para la realización de esta
investigación, la cual será manejada de manera estrictamente confidencial y no será usado con ningún
otro propósito fuera de los de este estudio sin mi consentimiento. He sido informado de que puedo hacer
preguntas sobre el proyecto en cualquier momento durante la participación del mismo, como además
podemos retirarnos del proyecto, cuando así lo decida, sin que esto perjudique en ninguna forma, a mi
persona ni a mi representado.
Firma: ____________________
C.I: ______________________
114
Anexo 2 – Aprobación del proyecto por parte del colegio
115
116
Anexo 3 – Idoneidad Ética
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA INFANTIL Y PSICORREHABILITACIÒN
Quito, 20 de Mayo del 2019
Yo, María Elena Silva con CI 0801398553 docente de la Facultad de Ciencias Psicológicas de la
Universidad Central del Ecuador, con 20 años de experiencia como docente, he tutorado más de 300
tesis de pregrado, certificando la capacidad de tutorar al señor Sarmiento Proaño Ronny Fernando en el
presente estudio “Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan
adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
”.
___________________________
Msc. María Elena Silva
C.I: 0801398553
117
Anexo 4 – Experticia del investigador
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGÍA INFANTIL Y PSICORREHABILITACIÒN
Quito, 20 de Mayo del 2019
Yo, Sarmiento Proaño Ronny Fernando con CI 1715693873, egresado de la carrera de Psicología
Infantil Y Psicorrehabilitación de la Universidad Central del Ecuador, primera vez que realizo una
investigación de este tipo, sin embargo, cuento con los conocimientos teóricos bastos para emprender
el mismo.
___________________________
Sarmiento Proaño Ronny Fernando
CI: 1715693873
118
Anexo 5 – Declaración de no conflicto de intereses – Investigador
Quito. 20 de Mayo del 2019
Señores
Colegio Municipal “Fernández Madrid”
ASUNTO: Declaración de no conocer circunstancias que impliquen
conflicto de intereses.
Por medio de la presente certifico que ni el suscrito ni el estudiante de pregrado Sarmiento Proaño
Ronny Fernando y a su vez la tutora académica Mgs. María Elena Silva, no conocen circunstancia
alguna que implica conflicto de intereses para realizar el proyecto de investigación en el Colegio
Municipal “Fernández Madrid.
Cordialmente.
____________________
Ronny Fernando Sarmiento Proaño
Estudiante De Pre-Grado De La Universidad Central Del Ecuador
Facultad De Ciencias Psicológicas
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
119
Anexo 6 – Declaratoria de confidencialidad
UNIVERSIDAD CENTRAL DEL ECUADOR
FACULTAD DE CIENCIAS PSICOLÓGICAS
PSICOLOGIA INFANTIL Y PSICORREHBAILITACION
DECLARACIÓN DE CONFIDENCIALIDAD
TEMA DE INVESTIGACION: Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que
presentan adolescentes procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández
Madrid”.
En la ciudad de Quito, Ecuador, con fecha 15 de febrero del 2019, quien suscribe, Sarmiento Proaño
Ronny Fernando, con el número de cedula de identidad 1715693873, estudiante de la Carrera de
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación, declara.
DESCRIPCIÓN:
En la investigación que se realizara, se llevara a cabo una revisión de historias clínicas con el fin de
elaborar una matriz de las familias monoparentales existentes, para la posterior evaluación mediante
“La Escala de Estilos parentales para adolescentes de Musita y García” y “El Cuestionario de
agresividad de Buss y Perry” para luego presentar los resultados obtenidos al Colegio Municipal
“Fernández Madrid”
Que, quien suscribe, participa en la ejecución del Proyecto de Investigación denominado “Influencia
de los estilos de crianza en la agresividad en adolescentes de familias monoparentales” financiado por
el estudiante Sarmiento Proaño Ronny Fernando, y ejecutado por el mismo estudiante realizado en
conjunto por Facultad de Ciencias Psicológicas de la Universidad Central del Ecuador y el Colegio
Municipal Fernández Madrid
1. Que el Tutor y/o académico responsable del citado proyecto de investigación es la profesora Dra.
María Elena Silva perteneciente a la Facultad de Ciencias Psicológicas de la Universidad Central
del Ecuador.
2. Que, en razón de la participación en el proyecto de investigación, recibiré datos, antecedentes o
cualquier otro conocimiento relacionado con la institución, en particular las relacionadas con la
120
investigación.
3. Que, quien se suscribe, se compromete a manejar la información de manera estrictamente
confidencial, tomando todas las consideraciones existentes para que la información no llegue a ser
conocida por terceros, no autorizados, las cuales será aplicadas con el fin de proteger la información
de los participantes.
4. El suscrito solo podrá divulgar la información recibida por parte de los participantes con la
autorización por escrito del director académico responsable de la investigación o los propios
participantes.
5. Si como consecuencia el suscrito actuara de manera negligente, de manera que se divulga
información confidencial, este deberá dar las respectivas declaraciones a los participantes de la
investigación por todos los daños costos, reclamos y gastos que provengan del incumplimiento de
los deberes mencionados en los números anteriores, sin prejuicio a perseguir las demás
responsabilidades penales, civiles o administrativas, haciéndose responsable de las infracciones
cometidas por su negligencia.
6. Que, quien suscribe, declara aceptar las siguientes condiciones en el cumplimiento de los deberes
ya mencionados:
6.1. Los deberes de confidencialidad expresados estarán vigentes hasta 1 año después de finalizado
el Proyecto de Investigación.
6.2. Habiendo terminado él debe de confidencialidad, ya sea por razones de tiempo o por voluntad
del participante, quien se suscribe se compromete a destruir o restituir toda la información
confidencial de los participantes que se encuentre en su posesión, ya sea física o digital.
Se exceptúa del carácter confidencial y reserva aquella información que:
a. El suscrito pruebe que, al tiempo de su entrega, se encontraba con dominio público, había
sido desarrollada por el con anterioridad, o fue puesta a disposición por un medio y dueño
legitimo distinto a los participantes de la investigación.
b. Con la posterior entrega de la información esta llegue a ser de dominio público, en
cualquier forma que no importe una violación a las obligaciones contenidas en esta
declaración.
121
Beneficios y riesgos de la investigación
Establecer una línea de información que sirva como base para la elaboración de programas dentro de
la institución, con el fin de mejorar la calidad de vida que existen dentro del colegio, por lo no
existiría riesgos durante la investigación
Confidencialidad: Toda la información que sea recolectada, será manejada de la manera más
adecuada, llegando a ser estrictamente confidencial y siendo usados solamente por los investigadores
llegando a ser usados solamente con fines investigativos.
Derechos: La realización de la investigación, no presentara ningún derecho a los investigadores, a
excepción del tipo estrictamente académicos.
122
Anexo 7 - Compromiso de confidencialidad
COMPROMISO DE CONFIDENCIALIDAD
Quito. 20 de Mayo del 2019
Yo, Sarmiento Proaño Ronny Fernando con número de cedula 17156963873 declaro, que la
información proporcionada anteriormente sobre esta investigación, así como los datos e investigación
que recolectare para la misma como cualquier resultado que se obtenga de la investigación, será usada
exclusivamente para fines académicos. Además, soy consciente de las implicaciones legales de la
utilización de los datos, información, resultados recolectados o producidos por esta investigación, con
cualquier otra finalidad que no sea la estrictamente académica y sin consentimiento informado de los
pacientes. En fe y constancia de aceptación de estos términos, firmo, el autor de la investigación.
___________________________
Ronny Fernando Sarmiento Proaño
1715693873
123
Anexo 8 – Ficha de recolección de datos
Universidad Central Del Ecuador
Facultad De Ciencias Psicológicas
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Ficha de recolección de datos
Fecha de Elaboración:
Datos del padre o madre y/o representante legal
Edad:
Sexo:
Ocupación:
Número de hijos:
Nivel de escolaridad:
Datos del estudiante
Sexo:
Edad:
Curso:
Lugar que ocupa entre los hermanos:
Datos Familiares (No llenar en caso de fallecimiento de uno de los padres)
1.- Indique la razón por la cual convive solo/a con su hijo/os:
g) Por separación temporal
h) Por separación definitiva
i) Por migración
j) Por desaparición
k) Por Viudez
l) Por abandono
2.- Hace que tiempo convive solo/a con su hijo/os:
e) 1 a 3 años
f) 3 a 5 años
g) 5a 10 años
h) Más de 10 años
3.-Existe apoyo económico por parte del padre o madre hacia su hijo.
d) Si
e) No
f) Algunas veces
4.- Su hijo/a tiene comunicación con su padre o madre.
124
e) Presencial
f) Ocasional
g) Por obligación
h) Por redes sociales
5.- Existe apoyo (económico, emocional, social) por parte de su familia:
e) Su nueva pareja
f) Sus padres
g) Otros parientes
h) No recibe apoyo
MUCHAS GRACIAS POR SU COLABORACION
125
Anexo 9 - Cuestionario de Agresión (AQ)
Universidad Central Del Ecuador
Facultad De Ciencias Psicológicas
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes
procedentes de familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Cuestionario de Agresión (AQ)
Institución: Unidad Educativa Municipal “Fernández Madrid”
Fecha de elaboración: ___/___/___
Curso: ______
Paralelo: ______
Instrucciones
A continuación, se presentan una serie de afirmación con respecto a situaciones que podrían ocurrirte.
A las que deberás contestar escribiendo un aspa “X” según la alternativa que mejor describa tu
opinión.
CF = Completamente falso para mi
BF = Bastante falso para mi
VF = Ni verdadero ni falso para mi
BV = Bastante verdadero para mi
CV = Completamente verdadero para mi
126
Recuerda que no hay respuestas buenas o malas, solo interesa la forma como tu percibes. Sientes y
actúas en esas situaciones.
CF BF VF BV CV
1. De vez en cuando no puedo controlar el impulso de golpear a
otra persona.
2. Cuando no estoy de acuerdo con mis amigos, discuto
abiertamente con ellos.
3. Me enojo rápidamente, pero se me pasa enseguida.
4. A veces soy bastante envidioso.
5. Si se me provoca lo suficiente, puedo golpear a otra persona.
6. A menudo no estoy de acuerdo con la gente.
7. Cuando estoy frustrado, muestro el enojo que tengo.
8. En ocasiones siente que la vida me ha tratado injustamente.
9. Si alguien me golpea, le respondo golpeándole también.
10. Cuando la gente me molesta, discuto con ellos.
11. Algunas veces me siento tan enojado como si estuviera a punto
de estallar.
12. Parece que siempre son otros los que consiguen las
oportunidades.
13. Suelo involucrarme en las peleas algo más de lo normal.
14. Cuando la gente no está de acuerdo conmigo, no puedo evitar
discutir con ellos
15. Soy una persona apacible.
16. Me pregunto por qué algunas veces me siento tan resentido por
algunas cosas.
17. Si tengo que recurrir a la violencia para proteger mis derechos,
lo hago.
18. Mis amigos dicen que discuto mucho.
19. Algunos de mis amigos piensan que soy una persona
impulsiva.
20. Sé que mis “amigos” me critican a mis espaldas.
21. Hay gente que me provoca a tal punto que llegamos a
pegarnos.
22. Algunas veces pierdo el control sin razón
23. Desconfió de desconocidos demasiados amigables.
24. No encuentro ninguna buena razón para pegar a una persona
25. Tengo dificultades para controlar mi genio
26. Algunas veces siento que la gente se está riendo a mis espaldas.
27. He amenazado a gente que conozco
28. Cuando la gente se muestra especialmente amigable, me
pregunto que querrán.
29. He llegado a estar tan furioso que rompía cosas.
127
128
129
Anexo 10 - Escala de Estilos parentales para adolescentes de Musita y García
Universidad Central Del Ecuador
Facultad De Ciencias Psicológicas
Psicología Infantil y Psicorrehabilitación
Relación de los estilos de crianza con los niveles de agresividad que presentan adolescentes procedentes de
familias monoparentales del Colegio Municipal “Fernández Madrid”.
Escala de Estilos parentales para adolescentes (ESPA29) de Musita y García
A continuación, encontrarás una serie de situaciones que pueden tener lugar en tu familia. Estas situaciones se refieren
a las formas en que tus padres responden cuando tú haces algo. Lee atentamente las situaciones y contesta a cada una
de ellas con la mayor sinceridad posible. No hay respuestas correctas o incorrectas, lo que más vale es la sinceridad.
Las puntuaciones que vas a utilizar van de 1 hasta 4, así:
El 1 es igual a NUNCA
El 2 es igual a ALGUNAS VECES
El 3 es igual a MUCHAS VECES
El 4 es igual a SIEMPRE
Utiliza aquella puntuación que tú creas que responde mejor a la situación que tú vives en tu casa. EJEMPLO:
CUESTIÓN PADRE
1. Si ordeno mi
cuarto
Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
Has contestado marcando el número 3 en el apartado “Me muestra cariño”, que quiere decir que tu padre te
muestra cariño MUCHAS VECES cuando tú ordenas tu cuarto.
Has contestado 2 en el apartado “Se muestra indiferente” que quiere decir que tu padre ALGUNAS VECES se
muestra indiferente cuando tú recoges la mesa.
Para cada una de las situaciones que te planteamos valora estos aspectos:
ME MUESTRA CARIÑO: Quiere decir que te felicita, te dice que lo has hecho muy bien, que está muy
orgulloso de ti, te da un beso, un abrazo o cualquier otra muestra de cariño.
SE MUESTRA INDIFERENTE: Quiere decir que, aunque hagas las cosas bien, no se preocupa mucho de ti
ni de lo que haces.
HABLA CONMIGO: Cuando haces algo que no está bien, te hace pensar en tu comportamiento y te razona
por qué no debes volver a hacerlo.
LE DA IGUAL: Significa que sabe lo que has hecho, y aunque considere que no es adecuado, no te dice
nada. Supone que es normal que actúes así. ME RIÑE: Quiere decir que discute contigo por las cosas malas
que has hecho.
ME PEGA: Quiere decir que te golpea, o te pega con la mano o con cualquier objeto.
ME PRIVA DE ALGO: Es cuando te quita algo que normalmente te daría como, por ejemplo, dejar de darte
propinas, o darte menos de lo normal como castigo, dejarte sin ver televisión durante un tiempo, impedirte
salir de casa, encerrarte en tu habitación o cosas parecidas.
Verás que las situaciones que pueden suceder en tu familia se encuentran detrás de la página. En primer lugar, deberás
leer cada situación y contestar en la parte derecha destinada a las reacciones que tiene tu padre. Cuando acabes de
valorar las reacciones de tu padre a todas las situaciones, deberás voltear la página, volver a leer las situaciones y
contestar en la parte destinada a las 120 reacciones que producen en tu madre. Es muy importante que sigas este orden
130
y que las valoraciones que hagas de tu MADRE sean independientes de las que has hecho de tu PADRE. SI TIENES
ALGUNA DUDA, CONSULTA CON EL RESPONSABLE ANTES DE EMPEZAR.
1
Nunca
2
Algunas veces
3
Muchas Veces
4
Siempre
1. Si obedezco las cosas que me manda.
2. Si no estudio o no quiero hacer los deberes que me mandan en el Colegio/Instituto.
3. Si viene alguien a visitarnos a casa y me porto con cortesía.
4. Si rompo o estropeo alguna casa de mi casa.
5. Si traigo a casa el boletín de notas a final de curso con buenas calificaciones.
6. Si voy sucio y desastrado.
7. Si me porto adecuadamente en la casa y no interrumpo sus actividades
8. Si se entera de que he roto o estropeado alguna cosa de otra persona, o en la calle.
9. Si traigo a casa el boletín de notas al final de curso con algún suspenso.
10. Si al llegar noche, vuelvo a casa a la hora acordada, sin retraso.
11. Si me marcho de casa para ir a algún sitio, sin pedirle permiso a nadie.
12. Si me quedo levantado hasta muy tarde, por ejemplo, viendo la televisión.
13. Si le informa alguno de mis profesores de que me porto mal en la clase.
14. Si cuido mis cosas y voy limpio y aseado.
15. Si digo una mentira y me descubren.
16. Si respeto los horarios establecidos en mi casa.
17. Si me quedo por ahí con mis amigos o amigas y llego tarde a casa por la noche.
18. Si ordeno y cuido las cosas en mi casa.
19. Si me peleo con algún amigo o alguno de mis vecinos,
20. Si me pongo furioso y pierdo el control por algo que me ha salido mal o por alguna cosa que no me
ha concedido.
21. Cuando no como las cosas que me ponen en la mesa.
22. Si mis amigos o cualquier persona le comunican que soy un buen compañero.
23. Si habla con alguno de mis profesores y recibe algún informe del colegio/instituto diciendo que me
porto bien.
24. Si estudio lo necesario y hago los deberes y trabajo que me manda en clase.
25. Si molestan en casa o no dejo que mis padres vean las noticias o partido de futbol
26. Si soy desobediente
27. Si como todo lo que me ponen en la mesa.
28. Si no falto nunca a clases y llego todos los días puntual.
131
29. Si alguien viene a casa a visitarnos y hago ruido o molesto.
Mi padre …
1. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
2. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
3. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
4. Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
5. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
6. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
7. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
8. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
9. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
10. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
11. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
12. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
13. Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
14. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
15. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
16. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
17. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
18. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
19. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
20. Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
21. Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
22. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
23. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
24. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
25. Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
26. Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Me priva de algo
1 2 3 4
27. Se muestra indiferente
1 2 3 4
Me muestra cariño
1 2 3 4
132
28. Me muestra cariño
1 2 3 4
Se muestra indiferente
1 2 3 4
29. Me priva de algo
1 2 3 4
Habla conmigo
1 2 3 4
Le da igual
1 2 3 4
Me riñe
1 2 3 4
Me pega
1 2 3 4
Mi madre … 1. Me muestra cariño
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Se muestra indiferente
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2. Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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3. Se muestra indiferente
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Me muestra cariño
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4. Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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5. Me muestra cariño
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Se muestra indiferente
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6. Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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7. Se muestra indiferente
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Me muestra cariño
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8. Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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9. Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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10. Me muestra cariño
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Se muestra indiferente
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11. Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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12. Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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13. Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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14. Se muestra indiferente
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Me muestra cariño
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15. Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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16. Me muestra cariño
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Se muestra indiferente
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17. Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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18. Se muestra indiferente
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Me muestra cariño
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19. Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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20. Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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21. Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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22. Me muestra cariño
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Se muestra indiferente
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23. Se muestra indiferente
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Me muestra cariño
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24. Me muestra cariño
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Se muestra indiferente
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25. Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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Habla conmigo
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26. Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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Me priva de algo
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27. Se muestra indiferente
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Me muestra cariño
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28. Me muestra cariño
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Se muestra indiferente
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29. Me priva de algo
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Habla conmigo
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Le da igual
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Me riñe
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Me pega
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