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UNIVERSIDAD AUT~NOMA METROPOLITANA
UNIDAD IZTAPALAPA
DIVISIóN DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANIDADES $octo LOG \ A
SEMINARIO DE INVESTIGACIóN
G G ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ó ~ ECON~MICA Y PROYECTO EMPRESARIAL: LA MSIÓN DE COPARMEX”.
PRESENTAN:
PERALTA RODRÍGUEZ GUILLERMINA MATRICULA 92329543
VARGAS HERNÁNDEZ PATRICIA MATRICULA 92328966
L \ C € . Q C t 6 T ~ & c +
SOCIOLOGÍA DEL TRABAJO
ASESOR JAVIER RODRÍGUEZ LAGUNAS
MODERNIZACI~N ECON~MICA Y PROYECTO
EMPRESARIAL: LA VISIóN DE COPARMEX.
2
indice.
MODERNIZACI~N ECON~MICA Y PROYECTO EMPRESARIAL: LA VISIÓN DE COPARMEX.
Introducción. 5
APARTADO I SECTOR EMPRESARIAL Y MODERNIZACI~N ECON~MICA. 9
Capítulo l . El empresariado como sujeto social.
1 . 1. Estructuración de un sujeto social. 10
1. 2. Antecedentes históricos de las organizaciones empresariales mexicana. 18
1. 3. Principales organizaciones.
1. 3. 1 . Confederación de Cámaras de Comercio (CONCANACO).
21
22
1 . 3. 2. Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN). 22
1 . 3. 3. Cámara Nacional de la Industria y de la Transformación (CANACINTRA). 23
1 . 3 , 4. Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX). 24
I . 3 . 5. Consejo Coordinador Empresarial (CCE). 25
1 . 4. Participación del empresariado en l a economía. 26
l . 5. El sector empresarial frente a la modernización económica. 34
Capítulo 2. La propuesta de modernización salinista
2. 1. El nacimiento del Estado liberal social (1982-1992). 41
2. 2. La economía social de mercado. 47
2. 3. La Reforma del Estado. 52
2. 4. COPARMEX y el entorno económico. 59
3
APARTADO I1 MODERNIZACIóN ECONóMICA Y RELACIONES LABORALES.
Capítulo 3. Cambio en las relaciones laborales
3. 1 , Historia de las relaciones laborales
3. 2. Relaciones laborales en México.
3. 3. La nueva estrategia económica y la modernización laboral.
3. 4. Reforma a la legislación laboral.
3. 5. Reforma a la Ley Federal del Trabajo .
3. 6. El sector gubernamental.
3. 6. 1. Propuesta del Estado.
3. 7. El sector empresarial.
3. 7. 1 . Las propuestas de la COPARMEX.
3. 8. Propuestas laborales
3. 9. El sector sindical.
3. 9. l . Propuesta del sindicato.
3. 10. Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
3 . 10. 1. Contratación colectiva en la actualidad.
3 . 1 1. Cultura Laboral.
Conclusiones. Anexos.
67
69
71
78
83
84
85
86
88
96
97
98
102
104
108
121 113
Bibliografía. Hemerografia.
124 125
4
Introducción.
Durante los últimos años se han generado transformaciones muy relevantes en las formas
de organización de la sociedad y del Estado, en los procesos económico y laboral, así como en las
relaciones entre los diversos actores sociales.
En los ámbitos económico y laboral, las transformaciones están intimamente relacionadas
con los cambios ocasionados por la conformación de un nuevo patrón de acumulación capitalista a
nivel mundial, denominado globalización, orientado a alcanzar el crecimiento, la productividad y la
competitividad en mercados que se articulan a nivel internacional. El despliegue de la globalización
hace que se experimenten cambios en el ámbito laboral, como el abandono de esquemas y patrones
tradicionales de producción, para hacer surgir la producción flexible, la fábrica global, la ciudad
global, etc. Surge una nueva realidad a la que deben hacer frente los actores sociales (empresa,
sindicatos y Estado) para la intrelocusión sobre temas que atañen el proceso productivo.
La globalización del capitalismo implica una nueva división internacional del trabajo,
conlleva también una nueva redistribución de actividades productivas, así como la movilización de
los trabajadores calificados dentro de los componentes del mundo de trabajo.
Esta investigación tiene como objetivo avanzar en el estudio de la modernización
económica en México, a través de una revisión biblio-hemerográfica que hace un cohorte de
tiempo precisamente en la década de los ochenta, en virtud de que es en esta década en donde
surgen las bases del modelo económico neoliberal (Neoliberalismo), como una etapa posterior del
capitalismo.
El modelo Neoliberal ha impuesto la desrregulación económica para que sea el mercado
quien guíe las decisiones de los actores económicos en beneficio de la intervención privada, lo cual
implica el retiro del Estado de la producción directa, la flexibilización del proceso de trabajo y de
las relaciones laborales, que han ocasionado desplazamientos de personal, la disminución de ]a
bilateralidad y la precarización de las condiciones de vida y de trabajo.
5
Esta investigación presupone que en ese contexto de cambios resulta importante analizar
los efectos que se producen en la estructura económica y política del país, a fin de evaluar el
escenario de las relaciones laborales, por parte de los empresarios, los sindicatos y el Estado, a
partir de los proyectos y programas presentados en el sexenio salinista (88-94) para conocer en
que medida estos actores han redefinido su participación en las decisiones que se toman y si son
participes.
Un componente central de la modernización económica lo ha constituido el reacomodo del
Estado frente al mercado, transfiriéndole a éste actividades y funciones, y redefiniendo su papel en
la economía y ante las cuestiones sociales. Al Estado se le atribuye la responsabilidad del
estancamiento económico, el crecimiento del desempleo y de la economía informal entre otros
saldos negativos por lo que se hizo necesario su rekncionalización; a partir de ahí, abandonó
funciones amplias como ente en la producción y como instancia reguladora de la producción y la
competencia económica.
En el primer apartado, capítulo 1, se analiza la estructuración del sujeto social, como un
antecedente al estudio de los empresarios en México; se abordan las teorías de la modernización y
de la dependencia para entender que ambas dejan fuera de análisis las pautas específicas de
participación del empresario de la esfera política y social; más adelante se retoman otros enfoques
que caracterizan al empresariado como sujeto independiente en lo social y lo hacen participe en las
decisiones tanto políticas como económicas.
Posteriormente se hace una visión retrospectiva del nacimiento de las principales
organizaciones empresariales; la primera de las agrupaciones en crearse h e la Cámara de
Comercio, se instituyó como un órgano de representatividad del empresariado, en el cual puede
expresar su punto de vista y defender sus intereses ante los proyectos gubernamentales; de ésta
manera se van agrupando más organizaciones empresariales a través de instituciones oficiales.
Estas instituciones fungen como organizaciones encaminadas a concertar convenios entre
los empresarios y el Gobierno. Compatir los aspectos de la política gubernamental dio paso a la
reagrupación económica y política del empresariado, a la formulación de sus propuestas, a sus
formas de actuar, y su relación interna. En los últimos años los empresarios han empezado a
constituirse como actor independiente en el juego del poder, no solo para reclamar sus intereses
particulares, sino para plantear nuevas propuestas sociales.
6
En la década anterior, la política económica llevada a cabo bajo el gobierno de Miguel de
la Madrid presenta un cambio en las fuerzas económicas y sociales de la sociedad. Ante ello, el
empresario tiene que hacer frente a la causante directa (modernización económica) caracterizada
por la liberación del sistema económico que el Estado había controlado.
En el segundo capítulo, del primer apartado, se analiza la reforma económica del Estado.
La implementation de ésta se justificó por el mal hncionamiento del libre mercado, 10 que dio
lugar al desarrollo de fenómenos como la inflación, la mala gestión de recursos productivos de la
sociedad a través de empresas públicas. La nueva política económica se basó en reducir de
manera significativa la intervención estatal en las áreas productivas nacionales, limitándose a las
que no son estratégicas del país; estas condicionantes hicieron posible la modernización neoliberal
del estado. Los lineamientos que han guiado el paso del Estado social al Estado neoliberal han
sido: I - Que el Estado ya no h e capaz de impulsar el desarrolló económico y el beneficio social,
resultando inadecuado debido a que el sustento social del capitalismo no puede desarrollarse a
plenitud; 2- La desregulación económica, la privatización, que originó un proceso de construcción
de un nuevo modelo de desarrolló de carácter neoliberal.
La nueva política económica se sustentó en la flexibilización del proceso de trabajo y de las
relaciones laborales. Los rasgos que distinguen tal modernización han sido: pérdida del poder
adquisitivo del salario, reducción de las prestaciones sociales, aumento de la desocupación,
precarización del empleo, fragmentación de los mercados laborales, deterioro de las condiciones
de trabajo, etc. Por su parte, el sector empresarial buscó concretar un programa económico que
permitiera a los sectores productivos participar y diseñar estrategias que elevaran la actividad
productiva para lograr el crecimiento económico.
Otro componente hndamental de la modernización ha sido la reestructuración productiva,
también conocida como la reconversión industrial, la cual ha implicado cambios tecnológicos,
productivos y organizacionales, es decir, la recomposición del proceso y del mercado de trabajo,
La recomposición del mercado de trabajo se encuentra en la base de las nuevas relaciones
de producción capitalistas, la organización productiva, las innovaciones tecnológicas, las
relaciones laborales y contractuales, y la negociación colectiva, por nombrar algunos elementos
que definen la realidad del trabajo y que hoy se enfrentan a una serie de cambios que repercuten en
un replanteamiento en las relaciones laborales, etc.
7
Dichos aspectos son abordados en el capítulo tres, del segundo apartado, en éste se tratan los
efectos laborales que se han generado por el cambio del modelo productivo que ha sustentado el
desarrollo de la economía. Se analizan también las propuestas que la COPARMEX hace al
respecto.
Retomar la teoría de John Dunlop sobre las “relaciones industriales”, es menester para
entender el término de relaciones laborales, en virtud de que, cuando toda comunidad se
independiza, se crean necesariamente relaciones industriales entre empresarios, obreros y
organismos de gobierno, donde todos disfrutan de la misma situación de partida.
Los cambios que se generan dentro de las relaciones laborales, establecen nuevas formas
de relacion entre los factores de la producción; en particular, se analizarán los cambios en la
estrategia económica del país que se dan a partir de la aguda crisis experimentada en el 82, cuya
estrategia se basó en la estabilización y el cambio estructural. Por su parte, los cambios laborales
responden a una estrategia implantada desde el régimen de Miguel de la Madrid y seguida
consecuentemente en el seXenio de Carlos Salinas.
Posteriormente, se discute la posibilidad de reformar la legislación laboral trastocando el
tema de la Ley Federal de Trabajo. Los temas que están en debate y negociación son: la
contratación colectiva, su normatividad legal y contractual, la libre movilidad de los trabajadores,
las cláusulas que se vuelven más rígidas, los contratos que dejan de ser permanentes
convirtiéndose en temporales, las prestaciones y la libre disposición del trabajador, la ética del
trabajo, la disposición de espacios reducidos de estabilidad, así como la remuneración y la
promoción. De ahí surge la postura que toma el sector Gubernamental, el empresarial y el sector
sindical frente a la posibilidad de cambiar la legislación laboral. El acuerdo que pactan los sectores
se basa principalmente en una nueva cultura laboral y un proyecto nacional que tome en cuenta el
modelo de regulación mexicano.
. Y finalmente se presenta una parte conclusiva que nos lleva a realizar un balance analítico
de los puntos principales a bordados en esta investigación.
8
APARTADO I
SECTOR EMPRESARIAL Y MODERNIZACI~N ECON~MICA.
Los objetivos de este apartado son: 1- definir y situar al empresariado como sujeto social y
como grupo organizado (capítulo 1); y, 2- analizar las repercusiones de la propuesta de
modernización salinista (capítulo 2). Lo anterior responde a la necesidad de situar
contextualmente el papel del sector empresarial en torno a la política económica neoliberal.
9
Capítulo 1
E1 empresariado como sujeto social.
1. 1. Estructuración de un sujeto social.
Para entender el ámbito empresarial actual de nuestro país es menester abordar el estudio
del empresario como sujeto social, para lo cual es necesario revisar la información bibliográfica
pertinente a fin de poder definir y precisar las características del empresario como tal. Dicha
revisión se ha realizado a partir de los factores económicos externos, como el tamaño de los
mercados de trabajo y el grado de competencia, tomando en cuenta también, los factores de
naturaleza política y social, y analizando de esta manera el comportamiento del empresario.
Todos los grupos sociales contribuyen al desarrollo y se ven afectados por éI; sin embargo
su papel y participación pueden ser desiguales. En lo que respecta al sector empresarial, en las
últirnas décadas dicho sector ha tomado en México el camino de una política de transformación de
diversos aspectos del orden institucional y de la forma de constitución de la sociedad mexicana.’
En torno al análisis de los factores humanos en el desarrollo existen diversas perspectivas
teóricas de investigación; algunos estudios empresariales permiten observar dos perspectivas
principales:
1) El derivado de la teoría de la modernización, que asume que la implantación y el
crecimiento de sectores empresariales de importancia redunda en una mayor eficacia de las
economías nacionales y contribuye a cambiar las relaciones sociales y culturales tradicionales por
otras de carácter “moderno” (Germani: 1971). En relación al caso mexicano, esta escuela destaca
la existencia de un régimen autoritario que circunscribe al sector privado a un contexto de
“exclusión” de las decisiones políticas. De acuerdo con esto, el sector empresarial se habría
dedicado sólo a los negocios privados, sin involucramiento alguno en la esfera política, aunque
con dos fbnciones “naturales”: la representación de intereses y la consulta de sus representantes
sobre medidas gubernamentales de su incumbencia; ambos aspectos llevados a cabo por medio de
las organizaciones constituidas para ese efecto.
’ Ver en Autonomía y legitimidad, “Los empresarios, la política y el Estado de México” ed. Siglo XXI, México, 1997.
10
Esta demostración reside por un lado en el hecho de que ciertas decisiones políticas, que
tienen repercusión sobre intereses de negocios, se aplican sin tomar en cuenta la opinión del sector
privado, y, por otro, se basa en las diferentes pautas de reclutamiento y asociación que diferencian
al empresariado de la burocracia política.
2) El que resulta de la teoría de la dependencia, según la cual ésta se construye sobre una
triple asociación entre imperialistas centrales, estados nacionales periféricos y capitalistas locales.
Los estados nacionales enfrentan el dilema de las burguesías clásicas: imponer el interés general
del desarrollo nacional por encima de los intereses privados tanto locales como extranjeros. En el
caso de México este análisis se concentra en describir la acción estatal asociada al aumento o
disminución de su capacidad de decisión autónoma y de sus áreas de influencia.
.Lo anterior conduce a que las determinaciones estructurales limiten en forma decisiva los
esfberzos de los gobiernos por incrementar su autonomía frente a los intereses privados internos y
externos (Cardoso: 1979; Juaguaribe: 1997 y Prebish: 1981). La idea de que el sector empresarial
“no participa en política” se basa en que las élites son oligárquicas por naturaleza, es decir, son
excluyentes y autoritarias.
En resumen, la primera perspectiva reduce la investigación empírica al campo de políticas
públicas específicas, observando la limitación o expansión de los intereses económicos privados.
L a segunda perspectiva reduce el problema al tipo de alianza económica existente en un momento
dado entre el gobierno y la empresa privada. Ambos enfoques dejan fbera del análisis las pautas
especificas de participación del sector privado y sus aliados en la esfera política y social, las cuales
han sido siempre relevantes y complejas.
En ello, la explicación del comportamiento empresarial ha sido restringida a las determinaciones
estructurales que la constriiien o a la descripción de su influencia en las políticas gubernamentales; no se
presta atención a los empresarios como agentes políticos, con una acción colectiva compleja que implica
tanto a la estructura económica como a la influencia que tiene en las resoluciones de gobierno como
aspectos decisivos, pero que asimismo abarca su conducta estratégica.2
Váldes Ugalde, Francisco “Autonomía y legitimidad’ Los empresarios, la política y el estado en México; ed. Siglo XXI, México. 1997. p. 23.
1 1
Existen, además, otros enfoques del empresariado, los cuales caracterizan a éste como:
1) Clase social. El empresariado constituye o forma parte de una clase social consustancial
al modo de operar de un sistema social. En esta perspectiva, el análisis va dirigido a entender una
forma de “dominación” generalmente de carácter supranacional. Esta teoría esta vinculada a la
teoría de la dependencia y al marxismo, en ella se parte de las categorías de Capilal Financiero e
Imperialismo.
Esta concepción parte del supuesto de que la dinámica del desarrollo capitalista tiene
determinaciones externas en las formas de asociación del capital nacional que, a partir de una
posición económica subordinada en el sistema capitalista internacional, la burguesía articula
actividades de acumulación.
En el caso de México la modalidad de aparición del “Capital Financiero” (hsión de la industria
con la banca) conduce a la formación de una “oligarquía” esta constituye una parte de la burguesía y se
expresa en la combinacibn de formas de acumulación, pero unidas con el capital financiero nacional, el
capital extranjero y el núcleo central del grupo gobernante, los cuales determinan la orientación del
capitalismo en el país mediante la forma en que se a~oc ian .~
La burguesía que incluye a los empresarios se define a partir de las características que le
impone la estructura social derivada de un modo de producción que genera un interés económico
que debe ser asegurado mediante una forma de dominación estatal.
De este modo los estudios coinciden en que hablar de empresarios tiene pertinencia en el
contexto de las formas adoptadas por el capitalismo como sistema social. La noción de interés
privado y las diversas maneras en que se le reconoce una existencia social aparece por lo general
como un atributo inseparable del conjunto de hnciones que ese sector lleva a cabo.
2) Conlo élite. Esta perspectiva admite la idea de un comportamiento colectivo que
requiere de una explicación social; es decir, se propone el estudio de las organizaciones
empresariales como instituciones que dan forma y canalizan la participación política y las formas
de relación del actor con el poder político, dentro de la cual se sitúa la realidad política
empresarial, en donde se privilegia el análisis empírico de “élites”, “grupos de presión” y diversos
tipos de liderazgo, así como sus modalidades de organización, conflictos, alianzas etc.,
Ibid. P. 29.
12
Este enfoque parte de la necesidad de un enfoque sociológico O sociopolítico para adecuar
el Estado y la política a sus intereses.
Para el sociólogo un papel tan prominente en el proceso de desarrollo económico adquiere
importancia en el análisis de la comprensión de los agentes de cambio económico y social, ya que
tienen consecuencias funcionales y dishncionales que impregnan completamente la estructura
social. Max Weber y Tawney han señalado que las decisiones racionales del empresario están
inevitablemente restringidas y desfiguradas por el ambiente cultural. Sus incentivos y metas que
hacen la ganancia deseable derivan de la sociedad que lo ha socializado; toma decisiones que,
aunque racionales, están por lo menos influenciadas por los residuos, valores y restricciones que la
sociedad impone al arriesgarse a la libertad de elección económica.
3) Como sujelo social y politico En esta perspectiva se examinan las formas explicativas
sobre el comportamiento político de los empresarios; se considera al empresario como un sujeto
social y político para analizar situaciones y realidades específicas partiendo de sus características y
de su evolución.
Esta teoría pone en practica estrategias de acción política orientadas principalmente hacia
tres ámbitos de la vida social: 1- las políticas públicas; la política partidaria electoral; y, 2- la
acción cívica y cultural. Su énfasis en la organización empresarial como forma corporativa y, por
último, 3- se interesa por el ejercicio del poder tanto económico como social y p~l í t ico .~
Así, se observa que los empresarios mexicanos tienen características semejantes que
responden a la historia como desarrollo de clase; la revolución mexicana y los procesos posteriores
imprimieron rasgos a los actores sociales, como la exclusión de los empresarios en el juego
político; sus canales se regulan y reconstituyen mediante procedimientos que escapan a esos
campos de participación, ello indica una especificidad en su quehacer político, En torno a esto se
puede apreciar que la burguesía cuenta con tres niveles o perfiles organizativos: el primero 10
forman los grupos, y se halla dividido en:
El económico: se compone de sociedades de accionistas de empresas y capitales diversos,
agmpadas en una sola organización, las cuales están relacionadas entre si a traves de la actividad
económica y la hegemonía de los grupos más centrados.
Ver..Luma y Valdes. Estudios sobre México en el artículo “Perspectivas teóricas en el estudio de los empresarios en México”; México 1990.
13
El polífico administrativo: constituido por organismos que incluyen al conjunto de la
burguesía, que se agrupa según su base económica comercial, industrial o financiera. Se organiza
mediante las confederaciones de cámaras o las asociaciones. Cumple fknciones de integración
ideológica de todo el sector; en la base de estos organismos se encuentra un subnivel organizativo
que está estructurado por rama de actividad y se expresa en la formación de cámaras en las que se
agrupan intereses que se generan por actividades comunes.
El ideológico-político: compuesto por organizaciones que cumplen las fbnciones de
coordinación ideológica de la burguesía, de asesoramiento doctrinal y de regulación de las
relaciones de clase con el Estado. Estas pretenden representar y exponer las posiciones de la clase
en conjunto sobre aspectos de desarrollo, la política económica y otros problemas de carácter
naciona~.~
El segundo nivel esta identificado en el terreno político:
La.fraccion del norte, que tiene su fase en el grupo Monterrey, el cual económicamente ha
estado formado por cuatro subgrupos (Alfa, Visa, Cydsa y Ficcsa), pero también lo integran
sectores de la burguesía del noroeste del país (Grupo Industrial Saltillo) que controla empresas
como Cinsa y Cinfbsa entre otras, que se encontraba muy ligada al grupo Monterrey mediante
Banca Serfin, la cual les proporcionaba financiamiento.
La afinidad de ambos grupos se ha expresado en un alto poder de la burguesía conformada
por la familia López del Bosque y la familias Garza Sada en el congreso directivo de la
COPARMEX que controla el 70% de las acciones de las compañías GIS. Su política está dictada
por Garza Sada y tiene como característica un último grado de cohesión y uniformidad política e
ideológica, por lo tanto su posición es más radical, se identifica poco con el gobierno y rechaza la
interacción estatal en la economía, se vincula débilmente al sector público, lo cual le permite tener
posiciones de mayor dependencia ante el propio Estado y el grupo gobernante, Finalmente ejerce
el control absoluto de la COPARMEX y se ha valido de ella como su principal instrumento
político para participar en la
Ver, Nieto, Enrique: “El papel de las organizaciones empresariales en México”, México, 1980. Confrontese en Fragosa, Concheiro y Gutiérrez: “El poder de la gran burguesía”, ed. Cultura Popular, México, fi
1979.
14
La &cción central, que tenía una base financiera (consorcios como Banamex,
COPARMEX, Banca Cremi y Bancomer) que controlaba hasta antes de la nacionalización.
También está conformado por un sector de la burguesía industrial, nacida de un proteccionismo
estatal, que cuenta con un enorme poderío económico y participa en la dirección de varias
agrupaciones patronales.
Esta fracción se distingue por su gran influencia en el Estado y por un comportamiento
político más moderado; se resiste más a la participación política abierta, por lo que prefiere los
canales de negociación directa con el Estado.
Su peso en los organismos patronales es realmente importante, pues controla l a ABM y la
AMIS, y tiene influencia decisiva en la CONCANACO y la CONCAMIN. Juan Sánchez Navarro
pieza clave de la fracción ha sido presidente de ambas y del CCE.
El tercer nivel o perfil lo podemos localizar en la concentración de poder y control de
organismos patronales por los principales grupos económicos que están afiliados al sistema de
organización empresarial mexicano (1 970- 1976); solo una pequeñísima minoría tenía
representación en los órganos directivos de las 7 organizaciones (CONCAMIN, CONCANACO,
COPARMEX, ABM, A M I S , CCE y CMHN). Al respecto, señala Ricardo Tirado: “También se
observa una muy alta concentración de los puestos directivos principales en muy pocas unidades
econ~micas~’.~
De la articulación de las tres instancias (grupos, organismos y fracciones) resulta la base de
estructuración de los sujetos sociales de esta investigación: los envresarios.
La ubicación de su estudio en la dinámica social global se debe principalmente a sus formas
de inserción económica y al poder político, pero también al aspecto cultural y social. Al respecto,
afirma Cole: “Estudiar al empresariado es estudiar la figura central del desarrollo económico
moderno, y la figura central en la ec~nomia~’ .~
Tirado, Ricardo: “Las organizaciones empresariales mexicanas: perfil y control durante los setenta”, ed. Mineo, PP. 32-37.
LO anterior nos permite diversificar como surgen las organizaciones empresariales, Ya clue
no es posible hablar de organización cuando no este presente el Sujeto que 10 conforma (del cual
se hablara más adelante).
En 10s años setenta se presenta una situación de cierto deterioro político y económico
debido al agotamiento del modelo de acumulación y a las comprimidas vías de participación Social
Y poIí,tica, por 10 que fue necesario dar respuestas a esa situación; el gobierno tuvo que fijarse
nuevas metas:
Por una parte, acelerar e incrementar la producción del aparato productivo en SU conjunto,
fortalecer la presencia estatal en la actividad económica mediante el sistema mixto, asegurar una
distribución de ingreso más equitativa e impulsar un reforma fiscal que contribuya a sanear las
finanzas del Estado (reducir la balanza de pagos, recurrir menos al endeudamiento externo y
fomentar la inversión pública), y, por otra parte, fortalecer los canales de participación social, con
objeto de lograr vínculos con los demás sectores y ampliar los márgenes de representatividad.
Aunque el proyecto era muy moderado, pues mantenía en lo esencial el criterio de no
gravar fkertemente las utilidades de las empresas para no afectar la inversión privada ni las
actividades productivas, mostró muy pronto su deficiencia, pues la burocracia sindical y la cúspide
empresarial no encajaban en su nuevo programa, los empresarios expresaron sus objeciones.
CONCANACO, CONCAMIN, COPARMEX y AMIS definieron su posición en un desplegado
que tenía como eje central los siguientes puntos: 1- La obtención de fondos fiscales debe realizarse
mediante la eficiencia de la recaudación de nuevas tasas; 2- La empresa privada necesita
capitalizarse y las reformas impiden la reinversíón; además sostenían que era indispensable que los
proyectos se dieran a conocer a la iniciativa privada, como antes ocurría, a fin de que se tome en
consideración sus opiniones en la decisión definitiva.’
Ante las posturas empresariales el Gobierno modificó el proyecto Ley, logrando con esto
que los empresarios impusieran la idea de Reformarla y determinar su alcance, Así, en la primera
mitad de la década de los años ochenta, los empresarios mexicanos entraron en una fase de
reconciliación con el régimen.
9 Citado por Américo Saldívar, op.cit. p. 86.
16
A partir de ahí se presenta una lucha de clases y se amplían los márgenes de
representatividad del Estado, provocando una alteración en las relaciones normativas con el sector
público. La postura que adoptan los empresarios, para hacer respetar de actor social determinante,
es crear un organismo cúpula que oriente y findamente la acción política de la burguesía en forma
integral: el CCE (creado en 1975). A través de é1 se podían resolver las diferencias entre las
distintas fracciones y los grupos económicos. La negociación que se presentó estaba orientada en
dos sentidos: dentro de la clase y, sobre esta base, con el Estado, el Gobierno y otros sectores
sociales. Pero al mismo tiempo se instaló como un canal de participación completamente disociado
de los aparatos de Estado, Ello sintetiza la ofensiva empresarial contra los intentos del Estado
mexicano por fortalecer su posición hegemónica en la conducción del modelo de desarrollo,
caracterizado por el papel que juega el intervencionismo económico estatal.
La movilización actual de los empresarios se determinó en fbnción de dos aspectos: 1-
corregir las limitaciones de sus mecanismos participativos ante el gobierno; y 2- fortalecer sus
posiciones, y contrarrestar su debilidad política. La culminación del periodo presidencial de López
Portillo contrastó la gran capacidad del gobierno para recuperar con la ausencia de las instancias
empresariales para conservar el capital político alcanzado por éstos durante el régimen anterior.
Por lo tanto, el papel del empresario en el proceso de crecimiento económico se puede
considerar como el portador de la innovación tecnológica y el agente de la modernización. Pero
antes de que pueda ser el causante de un cambio, es el producto de cambios dinámicos que operan
dentro de la sociedad.’” En torno a ello, afirma Flavia Derossí: “El empresario es un factor
estratégico en el desarrollo, no el iniciador del desarrollo”.1’
En definitiva el rasgo más característico del empresario en los últimos años es que ha sufrido un
claro desarrollo como sujeto social. El mismo se expresa en su nueva política; el hecho de que su
participación se ha ampliado, abarcando tres esferas: la administrativa, la partidista y la cívica; sus
movimientos combinan esas vias y con ello se expresan en tres niveles de acción como grupos gestores (en
lo económico), como agentes sociales (penetración ideológica, y como actores políticos (vía partidista).I2
l o Ver Derossí, Flavia: “E1 empresario mexicano”, Instituto de Investigaciones Sociales, México, 1971, p. 12. I I Ibid. p. 13. I 2 Millan, René: “Los empresarios ante el Estado y la Sociedad ed. Instituto de Investigaciones Sociales UNAM, México 1988, p. 87.
17
1. 2. Antecedentes históricos de las organizaciones empresariales mexicanas.
Estudiar las organizaciones patronales mexicanas resulta importante, por un !ado para
conocer las características del sistema político mexicano, industriales, comerciantes y propietarios
agrícolas que expresan su punto de vista a través de las diferentes cámaras y otros organismos
similares que los agrupan; y por otro, para identificar la organización que tienen las agrupaciones
patronales para defender sus intereses ante los diversos proyectos gubernamentales. El siguiente
cuadro muestra la organización de algunas de las agrupaciones: l3
Organización
d-“ Fecha de fundación.
I“-- Estatuto juridico.
Tipo de afiliación.
Base de afiliación.
Número de afiliación.
Número de afrliados.
Cobertura aproximada.
Sectores.
I Tipo de estructura.
CONCANACO
12/juliol 1917
Institución pública
autónoma.
Obligatoria.
Cámaras regionales
/ empresas.
26 1
500,000
Media.
Comerciantes y
prestadores de
servicios.
Comercio, Servicio
y turismo.
Medio
Fuerte.
~ CONCAMIN
CANACINTRA
I 3 /sep. / 1918
Institución
5 /dic./ 1941
Institución
~ pública púltlica
autónoma.
Empresas C h a r a s y
Obligatoria. Mixta.
autónoma.
asociaciones Delegados
esp, Y + empresas.
75 cámaras y 71 delegados
ABM
I
12 /nov. /I928
Asociación
civil.
Voluntaria.
Empresas.
“”””“
82
Amplia.
Instituciones
financieras.
Financiero
Especializado.
Fuerte.
COPARMEX
26 I sep. / 1929
Sindicato.
Voluntaria.
centros
regionales/emp
resas
57
30,000
Reducida.
Patrones y
empresarios.
Plurisectorial.
General.
Fuerte
I C.E.E.
u 7 /mayo I1975
Asociación
civil.
Voluntaria.
Organiza-
ciones.
905,121 Amplia.
Organizacione!
1 sectoriales,
“cirpulas”.
, Plurisectorial.
General.
1 Media.
13 Datos tomados de1 artículo “Los dirigentes del Consejo Coordinador Empresarial” de Ricardo Tirado, publicado en la Revista Cotidiano no 50, 1992, p. 140.
18
En virtud de que los empresarios no cuentan con una representación en el congreso, para
frenar o modificar cualquier proyecto de ley, influyen en éste por medio de medidas
extraparlamenterias: frenando la inversión, sacando del país sus capitales, presionando para
modificar la línea política del gobierno, etc. En ocasiones pueden valerse de otros medios como la
iglesia, un partido político u otros movimientos que coadyuven a adoptar posiciones más abiertas
con respecto a los problemas sociales. Estudiar al empresario como clase social y el
comportamiento de éstos a través de sus respectivas “instituciones oficiales” resulta útil para los
que tienen el poder y para los que se interesan por el.cambio social.
Para situar cómo nacen las organizaciones empresariales es menester retroceder un poco y
analizar la relación de crecimiento económico del país, cuando la primera de las agrupaciones en
crearse h e la Cámara de Comercio de la Ciudad de México, la cual h e hndada en el año de 1874,
en virtud de que el comercio constituía unas de las hentes principales de capitales y representaba
uno de los sectores más importantes para el posible avance económico del país.14
Durante la época porfirista surgieron otras cámaras en diferentes ciudades del país, de las
cuales dentro de las que destaca la Cámara de Minería (1 906). En 1908 se promulga la primera ley
de cámara que otorgaba la personalidad jurídica a las ya creadas. A partir de los planteamientos de
la Constitución Mexicana, el Estado toma la iniciativa de hndar la Confederación Nacional de
Comerciantes (CONCANACO) en 191 7, y la Confederación de Cámaras Industriales
(CONCAMIN) en 19 18; dentro de esta última se encuentra la Cámara Nacional de la Industria y
de la Transformación (CANACINTRA). Estas dos organizaciones que tienen como objetivo
hncionar como órganos de consulta para el Estado y la defensa de los intereses particulares del
sector, son las dos primeras organizaciones con carácter de institución pública, o que son
diferentes de las creadas por iniciativa privada. Posteriormente se convocó a una reunión de
industriales con el objeto de organizar las cámaras correspondientes y la Confederación Nacional
que la agruparía.
I1 Solís, Leopoldo: “La realidad económica mexicana: revisión y perspectivas”, ed. Siglo XXI, 1971, México, pp. 37-38. ’’ Ver A’lcázar, Marco Antonio: “Las agrupaciones patronales en México”, El Colegio de México, 1970, p. 37.
19
El principal problema que enturbió las relaciones entre el sector privado y el Estado, en el
periodo anterior al régimen cardenista, h e la reglamentación del articulo 123 de la Constitución.
EI proyecto de Ley Federal del Trabajo generó dentro de la Asamblea General de la
CONCAMIN inquietudes, y por iniciativa del industrial Luis G. Sada se creó la Confederación
Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) que agrupa a todos los patrones,
independientemente de su calidad de industriales o comerciantes con objeto de actuar en forma
conjunta como “patrones sindicalizados” y encontrarse en mejores condiciones para enfrentar a las
organizaciones obreras.
Las objeciones al proyecto de Ley Federal del Trabajo heron expuestas por el grupo
patronal dirigidas a las Cámara de Senadores en agosto de 193 1. En dicha comunicación el
proyecto de Ley es calificado como “el más radical del mundo en favor de los trabajadores” y se
consideró que cuando una ley es dada “por una clase de ciudadanos en su beneficio” es fhesta
por que lleva en sí los puntos de discusión y niega la esencia de la democracia que “consiste en
que el gobierno representa a todas las clases”. Por otro lado, pide como consecuencia lógica del
sistema capitalista que garantiza la constitución, que reconozca a los empresarios el derecho de
dirección y que el Estado tonifique la autoridad empresarial para mantener la disciplina en el
trabajo y asegurar la eficiencia.
Una “precipitación” en las reformas sociales se traduciría (según el grupo patronal) en un
aumento del costo de la vida, en una disminución de la inversión por la salida de capitales del país,
en ausencia de inversión extranjera y, finalmente, en un aumento del desempleo.’6
COPARMEX se funda en 1929 como reacción a una política gubernamental a la que se
oponían los líderes del grupo Monterrey. Los puntos de la política empresarial surgieron durante
el periodo cardenista, debido a la amenaza de cerrar las industrias, dichos puntos son:
1) El Gobierno es el árbitro y regulador de la vida social.
2) El Gobierno está interesado en acrecentar las empresas, las demandas de los trabajadores serán
consideradas por las posibilidades económicas que ofrezca la empresa.
3 ) Los empresarios que se sienten fatigados por la lucha social, pueden entregar sus industrias a
los obreros y al Gobierno.
16
1988, PP. 50-5 1. Ver Arriola Woog, Carlos: “Los empresarios y el Estado. 1970-1982”, Coordinación de Humanidades, UNAM,
20
El Gobierno no podía destruir al sistema capitalista, como lo afirman las agrupaciones
empresariales, la política cardenista estaba orientada ante todo a consolidar la hegemonía e
independencia del Estado frente a todos los grupos sociales y a firmar su derecho a trazar la
política social y económica en fbnción de un “Interts Nacional”. Esta tesis se confirmó cuando se
promulgó una nueva legislación sobre las organizaciones patronales otorgando a las cámaras el
carácter de instituciones autónomas de carácter público.
Otra reforma importante del cardenismo es la agrupación indistinta de comerciantes e
industriales, tanto en el ámbito local como el nivql nacional, en la Confederación Nacional de
Comercio e Industria.”
1. 3. Principales organizaciones.
Dentro de las organizaciones actuales que agrupan al sector empresarial se encuentran dos
grandes grupos: las públicas y las privadas. El siguiente cuadro presenta dicha conformación:
Organizaciones empresariales.
INSTITUCIONES P ~ B L I C A S
CONCANACO ~
INSTITUCIONES PRIVADAS
0 ABM
CONCAMIN CANACINTRA
COPARMEX
” Idem, p. 52.
21
Por un lado están las organizaciones que tienen el carácter de institucionespúblicns y que
se encuentra organizadas de acuerdo a la Ley de Cámaras de Comercio y de las de Industrias,
promulgada el 2 de mayo de 1941, Las principales instituciones públicas que en el ámbito nacional
agrupan a los empresarios son la Confederación de Cámaras de Comercio (CONCANACO) y la
Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN) Dentro de esta última se encuentra la
Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA).
1.3. 1. Confederación de Cámaras de Comercio (CONCANACO).
Los objetivos principales de esta cámara son la representación de los intereses de carácter
general del comercio, así como el impulso a su desarrollo. Asume la representación de sus
asociados ante toda clase de autoridades y organismos descentralizados de la Federación, los
estados, y los municipios. Está constituida por 200 Cámaras Nacionales de Comercio y de
Comercio en pequeño (40), y de las cámaras mexicanas de comercio existentes en el extranjero o
que en lo sucesivo se formen. Se admiten como afiliadas a las Cámaras de Comercio radicadas en
el país, al igual que otras asociaciones representativas de actividades comerciales que así lo
soliciten. Se integra por una Asamblea General, un Consejo Directivo, auxiliado por un Comité
Ejecutivo, compuesto por el propio presidente, los vicepresidentes y los jefes de la sección
especializada de comercio interior y exterior.
1. 3. 2. Confederación de Cámaras Industriales (CONCAM~N).
Los objetivos de esta confederación son representar los intereses generales de la industria,
fomentar el desarrollo de la misma, “ser órgano de consulta del Estado”, ejercer “el derecho de
petición cuando proceda la expedición, modificación o derogación de leyes o disposiciones
administrativas, con objeto de fomentar y proteger el desarrollo de la industria na~ional”.’~
’* Arriola Woog. Carlos: “Los empresarios y el Estado. 1970-1982”, Coordinación de Humanidades, UNAM, 1988, p. 50.
22
La CONCAMÍN está integrada por 67 cámaras de industrias y 20 asociaciones de
industriales que disfrutan de los servicios de la federación. Las cámaras que forman parte de esta
organización son de diversos tipos: a) las que agrupan a los industriales de una misma rama a
escala nacional; b) las regionales que no tienen equivalente a nivel nacional; c) y la
CANACINTRA, que cuenta con 58 delegaciones y 16 subdelegaciones en el país. Está integrada
por una Asamblea General, un Consejo Directivo, que se integra con un representante de cada una
de las cámaras afiliadas y con un representante de la Secretaría de la Industria y Comercio. El
Comité Ejecutivo es el tercer órgano directivo, y se compone por el presidente del Consejo y sus
tres vicepresidentes, el tesorero y quince de sus miembros.
1.3. 3. CImara Nacional de la Industria y la Transformación (CANACINTRA).
Por otro lado, los objetivos de la CANACINTRA son representar y defender los intereses
de sus agremiados, y de ser un órgano de consulta del Estado, promover las mejores relaciones
obrero-patronales y la capacitación de técnicos y obreros. Está integrada por una Asamblea
General, un Consejo Directivo y una Comisión Ejecutiva.
El segundo grupo de instituciones que agrupa a los empresarios del país es de carácter
privado; está constituido como Asociaciones Civiles. Las instituciones que tienen éste carácter
son la Asociación de Banqueros de México (ABM), creada en 1928; y la Confederación Patronal
de la Republica Mexicana (COPARMEX).
La organización y funcionamiento de estas agrupaciones empresariales no se encuentra
reglamentada por el Estado. Otras organizaciones recientes son: el Consejo Coordinador
Empresarial (CCE), fundado en 1975, y la Unión Agrícola Nacional. l9
l 9 Ibid. p. 53.
23
1.3. 4. Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX).
La Confederación Patronal de la República Mexicana es una organización nacional de
hombres de empresa, constituida en 1929 como sindicato patronal, al amparo del artículo 123
Constitucional; su misión es “pugnar, mediante la unión y la representación de empresarios
afiliados voluntariamente, por la excelencia de la empresa, por un modelo de economía de
mercado con responsabilidad social”. Esta Confederación ha puesto énfasis en el estudio de las
relaciones “obrero-patronales” y ha procurado actuar como “sindicato de patronos”.
ORGANIZACI~N EMPRESARIAL COPARMEX
24
La COPARMEX se compone de treinta y cinco centros patronales de distintas ciudades
del país, que asocian indistintamente a comerciantes o industriales. Al igual que otras
organizaciones, los órganos directivos de la COPARMEX son una Asamblea General, que en este
caso se denomina Convención Nacional de Centros Patronales, un Consejo Directivo y una
Comisión Ejecutiva, cuyo presidente es el representante legal de la Confederación.
Los fines de la COPARMEX heron en sus comienzos estrictamente laborales, pero se han
ampliado a otros de mayor alcance, como: la capacitación empresarial, estudio de métodos y
sistemas administrativos, propiciar la modificación del entorno laboral, social, económico y
politico para hacerlo más favorable a las empresas, etc.; para ello se han creado diversas
asociaciones civiles afines con el Instituto de Administración Científica de las Empresas, y el
Instituto de la participación de las utilidades del salario, así como otros más.20 Precisamente sobre
este actor social gira nuestra investigación y los cambios que propicia la modernización
económica, del cuál hablaremos más adelante.
1.3. 5. Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Estructura del Consejo Coordinador Empresarial.2’
20
21 Idem. p.6 l . Datos tomado de Tirado, Ricardo: “Estructura del Consejo Coordinador Empresarial” ed. en Revista Cotidiano,
no 50, 1992, p. 131.
25
La agrupación patronal más importante surgida en los últimos años es el Consejo
Coordinador Empresarial (CCE), su constitución füe anunciada el día 7 de Mayo de 1975.
El CCE surgió como una respuesta a los acontecimientos sociales y políticos que tuvieron
lugar en el sexenio del presidente Echeverría.
El CCE esta integrado por las principales organizaciones empresariales del país:
CONCANACO, CONCAMIN, COPARMEX, Asociación de Banqueros, Asociación de Mexicana
de Instituciones de Seguros y el Consejo Mexicano de Hombres de Negocios.
Para su funcionamiento cuenta con un Consejo Directivo integrado por seis representantes
de cada una de las instituciones constituyentes, y una Comisión Ejecutiva formada por quince
miembros; ambos cuerpos heron precedidos inicialmente por un coordinador y un director
general, vocero oficial del consejo. Posteriormente, se reestructuró el Consejo. El periodo
presidencial del CCE dura seis meses.
Analizar a ésta agrupación empresarial es importante debido a que, hoy día, es un
organismo cúpula que encabeza a las principales organizaciones empresariales y, como tal, juega
un papel decisivo en la modernización económica del país.
1. 4. Participación del empresariado en la economía.
Como se mencionó en el apartado anterior, los empresarios se agrupan en organizaciones
para defender sus intereses ante los diversos proyectos gubernamentales. El sector empresarial ha
acordado con el Estado abstenerse de participar en la política y no incluirse como sector del
partido oficial,** io cual hace que se mantengan alejados de cualquier participación en puestos
públicos o políticos. Los empresarios influyen en la toma de las decisiones gubernamentales
mediante mecanismos formales e informales; cabe señalar que como grupo de presión hacen
cambiar cualquier línea de Gobierno que afecte sus intereses.
Caballlero Emilio (Coordinador): “Tratado de Libre Comercio”, Facultad de economía, UNAM-Diana, México, 1992, p. 133.
26
I
El desarrollo histórico de la política económica, de sustittrcih de inzportclciones al
rteoliherali.snm, refleja la transformación gradual que la economía ha presentado en los últimos
cincuenta años: menor participación del Estado y mayor injerencia del sector empresarial.
Un primer acuerdo que se logró entre empresarios privados y el Gobierno fue el esquema
de acumulación basado en la llamada economía mixta. El esquema partía de una forma de
acumulación de capital que subordinaba la lógica de los mercados a la regulación estatal mediante
el déficit y el gasto público, los cuales, a su vez, articulaban un mercado interno altamente
concentrado y protegido de la competencia interna~ional.~~
La estrategia económica de desarrollo adoptada por México en los 40’s se basó en el
proceso de sustitución de importaciones, el cual se caracterizó por la dirección hacia el mercado
interno de la producción manufacturera y la exportación primaria. Buscaba proteger la producción
doméstica de bienes de consumo contra la competencia de los mismos bienes producido en el
extranjero con el objeto de alcanzar altas tasas de crecimiento económico. Sin embargo, “la
incapacidad interna para la producción y la orientación de ésta al consumo interno provocaron la
libre importación de bienes intermedios y de capital necesarios para la producción industrial del
país, lo cual ocasionó que la industria se hiciera dependiente de la importación de bienes y de la
tecnología para su crecimiento así como la baja de divisas y el poder adquisitivo de México hacia
el
La solución para conseguir divisas fue desarrollar una economía cerrada basada en la
exportación materias primas hacia el exterior y atrayendo la inversión extranjera hacia nuestro
país. Tanto se busco atraer la inversión extranjera, que las grandes empresas transnacionales que
invertían en el país gozaron durante cuarenta años de un sistema con alta rentabilidad, estabilidad
en la tasa de cambios, etc.
23 Puga, Crisfina y Tirado, Ricardo: “Los empresarios mexicanos ayer y hoy”, ed. E1 caballito, México, 1992, p. 132. 24 Caballero, Emilio (coordinador): “Tratado de libre comercio”, Facultad de Economía, UNAM-Diana, México, 1992, p. 17.
27
Durante los años 70’s el modelo de acumulación de capital mostró su debilitamiento al
producirse desequilibrios en el sector externo, las finanzas públicas y los precios.2’ La planta
productiva industrial, al no exportar, era incapaz de adquirir por si sola las importaciones de
insumos que requería, lo cual trajo como resultado un rezago de la economía para competir con
los demás países en el mercado industrial tanto en el ámbito interno como externo. Lo anterior
derivo en una serie de enfrentamientos entre los grupos empresariales y los gobiernos de
Echeverría y López Portillo. El sector empresarial lejos de ser pasivo como venia desempeñando
su papel en términos políticos, empieza a plantear. su participación abierta en el sistema político
nacional, teniendo una notoria presencia en puestos de elección popular.
Frente a tal situación se inicia una nueva política de comercio exterior basada en la
liberación comercial, la cual pretende que el desarrollo de la economía esté sustentado en la
expansión del comercio exterior. Se busca que las exportaciones compensen las importaciones de
bienes y servicios, que contribuyan significativamente al crecimiento de la economía, y que
aseguren un saldo positivo en términos de la cuenta corriente de la balanza de pagos.
Con base en lo anterior se espera un aumento transitorio en el desempleo, derivado de la
contracción de la producción en las primeras ramas que no heran inmediatamente compensadas
con un aumento en el empleo en las ramas que se encuentran en expansión. O sea que la liberación
no ha representado incrementos significativos en la tasa de desempleo y, en cambio ha provocado
una recomposición de la fUerza laboral por sectores.
En la estructura industrial de México se está dando un proceso en el que una gran parte de
la industria está logrando aumentar su competitividad para enfrentar a los productores del exterior,
lo cual implica aumentar el tamaño de la planta y obtener economías de escala que no se pueden
explotar produciendo para el mercado interno (la apertura),
La industria en México se está modificando de manera cualitativa, pasando de una
estructura caracterizada por una orientación hacia una producción abundante y diversificada para
el consumo interno, pero con vacíos substanciales en la integración de sus eslabones intermedios;
25 Castaing, Juan: “La crisis estructural de la economía mexicana”, ed. en Investigaciones Económicas, no 163, enero-marzo de 1984. Citado por Puga, Cristina y Tirado, Ricardo: “Los empresarios mexicanos, ayer y hoy”, México, 1992, p. 133.
28
hacia un nuevo perfil que, en contraste, se caracteriza por una producción menos diversificada que
cubra el mercado interno, pero con mayor desarrollo de aquellas ramas industriales dirigidas hacia
el comercio exterior, findamentalmente de productos intermedios que, en sí mismos, descansan en
grados crecientes de integración vertical.
El nuevo perfil industrial, a partir de la liberalización y de su adaptación para tener éxito en
un ambiente competitivo, se comienza a sentir en la transformación de los procesos productivos y
distributivos, los cuales están permeados findamentalmente por un proceso de especialización y
por el aúmento del comercio exterior.
Un primer aspecto de la especializacidn que está caracterizando la transformacidn de la
irldustria lo constituye la reasignación de los recursos hacia aquellas actividades en las cuales se da
un aumento de su productividad y su eficiencia a través del aprovechamiento de ventajas
comparativas y competitivas. Esta tendencia ha traído consigo nuevas oportunidades de
exportación. De esta manera la transformación de la industria y la adaptación de sus procesos
productivos ha sido motivada por la exportación. Así, el segundo aspecto que está caracterizando
a la especialización es el hecho de que las ramas que se han desplegado con velocidad han sido
aquellas orientadas hacia el comercio internacional, que buscan acceder a los mercados del
exterior y contrarrestar la contracción del mercado interno.
La liberación, al enfrentar a los empresarios a la competencia, establece un espectro de
precios relativos acorde con las ventajas comparativas del país y aumentan la rentabilidad de la
exportación en relación con la producción; para el mercado interno ha proporcionado los
incentivos para llevar acabo este proceso de especialización y los medios para dirigir SU
producción hacia el mercado exterior.
Finalmente, la competitividad de la industria mexicana depende hndamentalmente de las
estrategias que sigan las empresas para aumentar sus niveles de productividad, de mantener su
posición en el mercado interno y de penetrar a los mercados del exterior y asegurar una mayor
flexibilidad ante un ambiente de plena competencia.
29
Hoy día la economía mexicana está casi totalmente abierta. Aunque aun prevalecen
restricciones no arancelarias al comercio de algunos productos, han desaparecido prácticamente
todos los demás impedimentos al comercio; así tras seis años de apertura, el sector se ha venido
ajustando.
Prácticamente no hay empresas que no hallan tenido que adquirir nuevas tecnologías,
reponer maquinaria, modificar sus líneas de producción y, sobre todo, competir por los clientes
que antes consideraban cautivos. Cada sector de la industria, sin embargo, ha recibido un impacto
diferente. Algunas empresas han fracasado y han tenido que cerrar sus puertas; otras han tenido
que desarrollar nuevos productos con gran éxito.
Para que la apertura sea exitosa, la transformación de la industria tendrá que arrojar un
saldo positivo en términos de producción, productividad, empleo, calidad e ingresos respecto de lo
que existía antes, aunque el número de sectores y/o empresas que permanezcan después del ajuste
sea mucho menor al que existía antes.
Lo que se busca es que los recursos fluyan hacia las actividades que tienen la mayor
rentabilidad, de modo que no haya despilfarros.
En las economías abiertas el crecimiento depende centralmente de lo que hagan las
empresas privadas. Por eso se considera a las empresas como la unidad findamental del cambio.
En México existen cientos de empresarios dinámicos y creativos que han sabido responder al reto
de la transformación de la economía, los cuales dependen de la capacidad empresarial y gerencia1
mismas que impulsan el cambio microeconómico.
En el caso de México el cambio microeconómico ha tenido hasta el momento dos etapas,
ambas impulsadas por las capacidades empresariales y gerenciales: en la primera (1982-89) el
ajuste de las empresas tanto en las crisis como en la contracción del mercado interno, como por
ejemplo, como la apertura de la economía, que consistió básicamente en aumentar de forma
considerable los niveles de eficiencia operativos; es decir, se buscó disminuir en lo posible los
costos de producción a través de la reducción de líneas, de ajuste en los niveles de utilización de la
mano de obra y el capital, de la búsqueda de mercados alternativos al interior, etc. En esta etapa
primera se puede hablar del inicio de una nueva concepción de las actividades empresariales; esto
es, los empresarios protegidos en la sustitución de importaciones comienzan el aprendizaje de una
nueva manera de enfrentar los negocios,
30
La segunda parte del proceso, la que está en marcha en este momento, se caracteriza
hndamentalmente por la conversión tecnológica. Los empresarios que Soportaron el embate de la
apertura Y del ambiente competitivo que ésta generó, están modernizando Sus procesos
productivos a través de conductas y acciones mucho más específicas.
ES así como se habla de una economía que ha revelado durante los años setentas y
ochentas evidentes indicios por superar los modelos que venían desarroMmdose.
Ahora, veamos con más detenimiento esta participación del empresario durante el gobierno
de Miguel de la Madrid. Durante éste se habían llevado a cabo relaciones encaminadas a
restablecer el convenio sustancial entre empresarios y gobierno sobre las bases de conceder
demandas del sector privado, tales como la reprivatización parcial de la banca, el fortalecimiento
del circuito financiero paralelo, el inicio de la venta de paraestatales, la reducción del gasto
público, el estricto control salarial, los apoyos a las grandes empresas en dificultades financieras,
etc. El Gobierno intentó superar los obstáculos, por la hga de capitales, en que los empresarios
se encontraban.
Los pactos económicos, impulsados entonces con el objetivo de contener la inflación y
reactivar la economía, heron el mayor acuerdo logrado entre ellos. La actitud empresarial regida
por la política de la desconfianza del sector privado expresaba su decisión de comprometerse de
forma más contundente al poder del Estado. La agudización de la crisis con altos niveles de
inflación, el reducido alcance de las incorporaciones de empresas estatales y la forma en que se
realizaron las modificaciones al contexto constitucional en las que se definió la economía mixta, así
como el sector social y el refrendo de la rectoría económica del Estado, hicieron decaer los ánimos
de los empresarios. Estos emitieron un discurso político que exigían los resultados de las políticas
económicas sostenidas desde el poder, aspiraban a una modificación del Estado en la economía;
reclamaban la democratización de algunos aspectos del régimen político y, en particular, querían
una clara limitación de las atribuciones presidenciales, hndamentalmente en lo que se refiere a la
afectación de la propiedad. Muchos empresarios pasaron a una política mayor y más abierta.
Desde el punto de vista empresarial la mayor parte de las medidas adoptadas por el
Gobierno, con las que el sector privado hizo su acuerdo, no había alcanzado sus objetivos por la
resistencia del modelo gubernamental interventor y proteccionista, así como por la ausencia de
participación directa y efectiva de los empresarios en los planes de Gobierno.
31
Pero, por otro lado, la dirigencia empresarial sí compartía muchos aspectos de la política
del gobierno de Miguel de la Madrid puesto que se daba a la tarea de reconquistar la confianza de
ese sector. Fue también de transición en lo que respecta a la reagrupación económica y política del
empresariado, la formulación de sus propuestas, sus formas de actuar y su relación interna. La
participación política pública de los capitalistas mexicanos no provenía sólo de los círculos de la
burocracia estatal, sino que hasta 1982 era compartida por los amplios segmentos de los propios
empresarios, al grado que se puede decir que se había configurado una clase empresarial
sumamente despolitizada, después de esa fecha, cada vez mayor número de empresarios
incursionaban en la actividad política abierta. Lo importante es que se trataba de algunas
personalidades aisladas o de la fracción empresarial que había mostrado cierta independencia del
poder estatal y conductual, políticamente radicales; asumía la necesidad de tener una presencia
política mayor y más abierta tanto en el país como fiera de éste.
Si bien la idea generalizada que sostuvo COPARMEX, de que la crisis económica tenía un
definido carácter político, llevó a numerosos dirigentes empresariales al señalamiento de la falta de
democracia efectiva en el país, a la crítica del Sistema Electoral y a la denuncia del fraude en
múltiples foros nacionales e internacionales; con ello el sector empresarial no estaba dispuesto a
tener un compromiso por el cambio democrático del país.
Poco antes de la elección presidencial varias agrupaciones empresariales, la más destacada
COPARMEX, no abandonaron su distanciamiento relativo con el sector gubernamental, buscando
su determinación autónoma, haciendo pública su evaluación de los precandidatos del partido
oficial. Sin embargo, los resultados se inclinaban por aquellos que mejor garantizaran el
continuismo de dicha política, entre ellos Carlos Salinas.
Lo que tuvo mayor trascendencia fue la creación de las condiciones para el desarrollo de
los planteamientos del programa alrededor de los cuales se planteó la postura de los principales
sectores dirigentes del empresario, a partir de una economía social de mercado, consideraron la
necesidad de la modernización integral del país.
Al mismo tiempo, Salinas de Gortari utilizó desde principios de su campaña electoral la
modernización como eje de su programa de Gobierno, empalmando un discurso en forma
sustancial al discurso oficial con el sector privado.
32
Expuso ante los dirigentes empresariales su propuesta de moder~~ización econhica, en la
que destacó el papel hndamental que en su proyecto tendría la inversión privada, así como el
compromiso de retraer al Estado de muchas de sus actividades económicas. Al respecto, afirmó
Salinas:
La inversi6n privada desempefiarh un papel fundamental por varias razones: por la prioridad que
tiene en la estrategia de desarrollo, el crecimiento de las manufacturas y exportaciones, Bmbito por
excelencia para la iniciativa de los particulares, incluidos los pequefios y medianos empresarios; también
por la considerable salud y fortaIeza financiera de los grandes grupos que multiplican su capacidad para
emprender nuevos proyectos.26
Posteriormente, lanzó una convocatoria a los empresarios para impulsar las
transformaciones económicas; les propuso una alianza estratégica y les ofreció garantías y
seguridad en sus personas y sus bienes.
Después de las elecciones cambio la actitud empresarial, se apoyó al nuevo presidente, en
virtud de la afirmación de que el sector privado sí era tomado en cuenta e incorporado en la toma
de decisiones. También se mostró el desgaste y acelerado proceso de la deslegitimación del
priísmo gobernante que influyó en l a exigencia de democratización del régimen que venía
sosteniendo al empresariado. Quienes tenían los mayores capitales actuaron temerosos cerrando
filas ante el surgimiento de una nueva fberza popular que cuestionaba el sentido mismo de la
política neoliberal; gobernantes y dueños del capital conformaron un acuerdo implícito consistente
en realizar las transformaciones sociales y económicas en el marco tradicional del régimen político,
sustentados en el presidencialismo coorporativista que ha impedido la democratización del Estado,
Los empresarios insistían en reformas políticas que permitieran asegurar la permanencia de
las medidas económicas adoptadas y las consolidación de un esquema en que sea más efectivo y de
fondo para la participación del sector privado.
26 El Reto, ed. Diana, México, 1988, p. 109.
33
Ahora, en un proyecto más acabado, en el que los empresarios ven reflejadas sus viejas y
nuevas demandas específicas, se trata de una política que se sustenta en el protagonismo del sector
privado, que depende de éste para sus inmediatos resultados, que se propone hacerse cargo
directo de cuestiones que tradicionalmente abarcan la burocracia del Estado. La llamada economía
mixta es aceptada en términos del predominio privado, y ha desaparecido el temor sobre la acción
política abierta de los empresarios.*’
A lo largo de los últimos años las expectativas empresariales se modificaron
substancialmente. En los medios de comunicación prevalecía la confianza entre el Gobierno y los
dueños del capital. El optimismo empresarial hizo eco de las proyecciones gubernamentales y
lanzó convocatorias a la participación privada en los procesos económicos. El acuerdo
fimdamental que los grandes empresarios lograron afianzar con el gobierno Salinista los colocó en
una nueva perspectiva de responsabilidad, propia de quienes participen directamente en la toma de
decisiones del poder estatal.
En este tiempo se dio tan amplia coincidencia entre los gobernantes y el conjunto del
sector privado que, aunque las propuestas no hayan sido recogidas por la administración salinista,
como las reformas políticas, parecen ser dejadas a un lado, incluso por aquellos que en el sexenio
anterior parecieran como sus más decididos radicales promotores.
1. 5. El sector empresarial frente a la modernización económica.
La administración salinista se dio a una doble tarea, cuya necesidad se vislumbraba ya
desde el comienzo de la década anterior; por un lado corregir y estabilizar la economía y por otro
cantbiar el modelo de desarrollo a través de la revisión del papel del gobierno en la economía,
de la apertura comercial al exterior y de las exportaciones. Preocuparse por instrumentos
financieros de capacitación de inversión extranjera a corto plazo, la paridad peso-dólar y la
disminución de las reservas internacionales fue tan obvio que dejaron a un lado la problemática
que radicaba precisamente en la economía, en su incapacidad de generar el empleo demandado.
27 Ver en Concheiro Bórguez Elvira, ‘‘El gran acuerdo: Gobierno y empresarios en la modernización salinista”, México 1996. ed; Era. p.49.
34
Se intentó romper con la inercia de la estructura económica de México y superarla a través
del establecimiento de un nuevo modelo de desarrollo.
Como ya lo mencionamos a mediados de los ochenta se dio un cambio radical en el país:
toda la política económica llevada a cabo bajo el gobierno de Miguel de la Madrid, como la
drástica reducción del gasto social, el inicio del proceso de privatización de las empresas públicas,
el impulso y desarrollo de los grupos financieros, el despliegue de la entonces llamada
reconversión industrial, los intentos de reactivar el sector exportador y el ingreso de México al
GATT, así como el descenso del salario real, etc.,, sienta las bases que hace posible la política
modernizadora de la administración salinista; se gestaba un cambio en las herzas económicas y
sociales de la sociedad. La causante directa es la adopción de la política neoliberal que se
caracteriza por liberar el sistema económico basado de una serie de mecanismos y
reglamentaciones que el Estado había aplicado en épocas pasadas para ir controlando la economía.
Basándose en que estos mecanismos y reglamentaciones habían de una u otra manera
obstaculizado la eficiencia del sistema, al limitar las leyes de la oferta y la demanda en el mercado,
El Estado debía limitarse a hnciones que sólo a éI le correspondían como la militar e intervenir
directamente como agente económico lo menos posible.
Algunas medidas del modelo que se aplicaron fueron:
- Bajar el impuesto a los ingresos mayores.
- Impulsar la inversión privada.
- Incrementar los gastos militares.
- Reducir los gastos relacionados con el bienestar social y la educación.
Se consideran los cuestionamientos de la iniciativa privada, en contra del presupuesto
federal que se asigna a la educación pública y gratuita que imparte el Estado, tanto que ahora se
exige que en las escuelas medio superior y a nivel superior que el acceso de la matricula disminuya
por que el Estado ya no destinará más presupuesto del que tienen, para solventar esa demanda; en
cuanto a impulsar la inversión privada ello se da más específicamente en el sexenio de Salinas,
cuando se pone en manos de los empresarios privados la venta de las empresas paraestatales.
La política neoliberal surge como resultado de una recomposición de herzas entre los
intereses del sector privado y los de las mayorías, reflejándose en dos vías: la primera es la
reducción de “costos” en la empresa y el incremento de las ganancias a través del congelamiento
de salarios y de la reducción de impuesto. La segunda es dejar más “campo” en el mercado al
sector privado, en particular en el área de servicios. En lugar de que el Estado proporcione salud,
educación, información, cultura y esparcimiento, el sector privado tomará a cargo estos servicios y
los venderá. Actualmente, si miramos un poco lo que sucede, podemos darnos cuenta como esos
lineamientos del nuevo modelo tienen efectos profindamente lesivos para los trabajadores
mexicanos y para la nación entera. Estamos hablando de la reforma del IMSS, privatizar el sector
salud y que tengan acceso solo unos cuantos, dejando a un lado la mayoría, es un problema grave
que ya se vislumbra como parte de las consecuencias del modelo neoliberal.
Si hablamos de la educación, servicios de transporte y demás nos damos cuenta de que ya
están formando parte también de un proyecto privatizador. Esto significa la evasión de la
responsabilidad social del Estado Mexicano que tiene para los diferentes sectores de la población.
Esta política consistió en disminuir el papel productor del Estado; reducir impuestos y
realizar recortes en el gasto público, abrir fronteras liberando la importación; atraer la inversión
extranjera para compensar la salida neta de capitales; restringir el mercado interno para Crecer a
través de la exportación.
Los principales puntos de la política del modelo neoliberal son: a) Reconversión Industrial;
b) Apertura incondicional al capital extranjero; c) Apertura económica; d) Libertad de precios; e)
Desregulación y flexibilización laboral; f) Privatizaciones; g) Libertad cambiaria; y, h)
Monetarismo.
El resultado de aplicar el modelo neoliberal y el pago de intereses se ve en una
reestructuración del aparato productivo. Las empresas cuyos mercados eran principalmente el
interno y la demanda generada por el sector público tuvieron que adecuar sus parámetros de
competitividad a los estándares internacionales, y, con ello, hacer inversiones, tanto en
infraestructura como en equipo. (Ver Anexo Número 1)
36
Este modelo exportador es el que tuvo un mayor auge en la década de los ochenta con el
Gobierno de Salinas, sin embargo, a países como el nuestro les fue más difícil seguir reglas
impuestas por el modelo, una de ellas h e al colocar sus productos a nivel internacional, ya que a
su vez se exigió una apertura de los mercados a los productos extranjeros, condicionado al
producto mexicano para que pueda ser exportado hacia el exterior y poder ser vendido en el
mercado mundial.
Por sí hera poco, la mayoría de esos productos de consumo final vienen a nuestro país a
desviar el poder de compra de los productos nacionales.
La población mexicana prefiere el consumo de productos extranjeros, porque simplemente
estamos atiborrados de propaganda extranjera, con lo que el gobierno mexicano tuvo que
emprender medidas en pro de lo producido en el país, fortaleciendo las industrias mexicanas.
Por lo tanto esto ha ocasionado el cierre de las empresas mexicanas cuyo producto es
desplazado por la competencia extranjera.
La culminación de esos cambios inducidos por el Neoliberalismo h e la firma del TLC entre
Canadá, Estados unidos y México. Empero, la competencia que se origina entre ellos es desleal
porque México no puede competir a nivel internacional con la tecnologia que tienen estos paises a
menos que haya una inversión en la esfera económica y productiva. En efecto se da la
consolidación del nuevo modelo económico y social; cuyo objetivo principal h e la inserción del
país en la economía internacional bajo las nuevas modalidades derivadas de lo que se ha llamado
globalización.
La crisis por la que atraviesa la economía mexicana es el desequilibrio que ha arrastrado la
estructura productiva y los problemas que se acumulan, así como el enfrentamiento que tiene que
hacerse al viejo modelo de desarrollo.
El interés por estudiar y analizar el periodo de Salinas (1988-1994) surge por la situación
tan compleja que vive nuestro país, donde hay una elevada tasa de desempleo, la caída
generalizada de los salarios, , un incremento de las importaciones mayor que de las exportaciones
y una planta productiva que no se siente capaz de competir , con la tecnología que tienen 10s
demás países a nivel internacional; todo esto ha causado revuelo en la actividad económica y en
los procesos de trabajo.
37
Donde impera una “economía sumergida”28 que se acentúa y se ve reflejada a través de un
incremento del subempleo y del sector informal; además los costos de la producción son cada vez
mayores, dando como resultado un deterioro del salario y del empleo, todo ello engloba 10 que es
el proceso de trabajo y por otro lado el Estado adopta una política neoliberal y a su vez el sector
empresarial sugiere estrategias frente a esos cambios, retoma como medida adoptar una nueva
política económica.
Dada la importancia y complejidad del problema, los empresarios demandan que la
flexibilización en la producción se traslade a la legislación laboral en general y a los contratos
colectivos en particular. Se hizo entonces más evidente reemplazar las situaciones por las que
estaba atravesando el país; hacer un cambio en la reconversión industrial y tener una mayor
productividad, con organizaciones que estén dispuestas a participar en el cambio y en la nueva
cultura de trabajo, centrada en la productividad.
Una crisis productiva que, frente a las nuevas condiciones del mercado y la globalización
de las economías, no se resuelven mediante políticas económicas ni reduciendo los costos
salariales; sino que se requiere de contemplar las diferentes dimensiones de la relaciones laborales
dentro y fuera del trabajo.
El proceso de reestructuración productiva exige un nuevo modelo económico basado en la
competitividad para competir con los mercados del exterior, mayor eficiencia en las unidades de
producción, tanto en el sector privado de la economía como en las empresas paraestatales; la
implementación de un nuevo sistema de relaciones laborales, flexibilizando los contratos
colectivos. Modificar el proceso de trabajo a partir de innovaciones tecnológicas y cambios en la
organización del trabajo, es una forma de gran relevancia en donde la perspectiva del sector
empresarial se acentúa frente al modelo de economía neoliberal, esta postura empresarial exige la
reducción del Estado en decisiones a nivel económico y social que los acuerdos se hagan sobre la
base de un consenso y diálogo entre el sector de trabajadores y empresarios; el Estado solo debe
ser un interlocutor, mediador en decisiones bilaterales.
Un Estado mínimo donde la fknción que tiene sobre la sociedad se reduce, ha mantenerse
al margen de decisiones político-económicas; de esta forma se consolidan nuevos vinculas
políticos entre el sector empresarial y el sector gobernante.
Tamez, Silvia: “Algunos enfoques sobre la reestructuración económica de México”, U M - 1 , México, 1989, p. 9,
38
Este modelo de relaciones laborales perduro más de treinta años permitiendo condiciones
de vida y trabajo estables en los sectores de la economía; a los empresarios los protegió hasta el
incumplimiento de sus responsabilidades laborales.
A partir de esto la función del Estado se tenía que redefinir, haciéndolo cada vez menos
participe en la economía, cambio la figura del Estado interventor a un Estado mínimo; seguir
manteniendo el carácter de interlocutor !%e dificil para el sindicalismo, ello generó la incapacidad
de enfrentar las políticas gubernamentales lo cual dio como consecuencia el deterioro de
condiciones de vida y de trabajo. También se vislumbraba el debilitamiento y la pérdida de
representatividad de los sindicatos frente al Gobierno, el desprestigio social del sindicalismo, la
inconformidad de las bases son causas que hacen más débil al sindicato; la pérdida de legitimidad
en el campo laboral iba en aumento.
Son necesarias nuevas formas de representación y participación de los sectores
involucrados en el cambio, buscar estrategias que provoquen confrontación con los trabajadores,
redefinir el viejo modelo corporativo de relaciones laborales para que respalde tanto a los
trabajadores como a los sindicatos en la toma de decisiones; en relación a la empresa, dar paso a
un proceso de modernización que para el sector empresarial el intento de modernizar ha
significado una serie de exigencias al Gobierno, como la privatización de todo, al poner en venta
las empresas paraestatales, debía acabarse el Estado que compite con la iniciativa privada en la
actividad económica, para abrir paso a un Estado que cree las condiciones para el desempeño del
capital privado. Tener una economía sin regulaciones ni obstáculos que impidan la asociación entre
empresa y capital extranjero, dando paso a la libre competencia.
A partir de este esquema se define la coyuntura en la cual se ven los desequilibrios del viejo
modelo de desarrollo que enfrenta el quebramiento de relaciones en el mercado, mientras las
empresas estatales, que abarcan sectores estratégicos, se veían ante la amenaza de no poder seguir
cumpliendo en la transferencia de excedentes, a otros sectores de la economía.
El estado no consiguió responder con política congruentes a las necesidades reales a corto
plazo; es decir, con el modelo de desarrolló implantado en la década de los setenta (sustitución de
importaciones), perseguía la elevación del nivel fisico de la calidad de vida de la población
mediante la importación de bienes de consumo, de tecnología, maquinaria y diseño, etc.;
39
el solo hecho de pensar que se alcanzaría un desarrollo necesario no h e tan productivo como se
pensó en primera instancia, sino que ha dejado ver un mayor subdesarrollo, y una mayor brecha
con respecto a los países que decidieron sí invertir en el desarrollo científico y tecnológico; sí
hacer el eskerzo para que haya una base en términos tecnológicos que toda economía requiere
hoy día.
La industria de un país se basa en la tecnología en ese “saber hacer algo”, importante
resulta que se enfrente a una modernización en términos generales y además que el personal esté
capacitado para aplicar esa tecnología, el es lo que preocupa al sector empresarial, cómo van a ser
frente a estos cambios.
Una economía globalizada que permita la creación de condiciones necesarias para insertar
su economía local y nacional a una economía internacional; las instituciones son un elemento
importante para controlar y regular los efectos de las kerzas de mercado. Esto es las acciones del
capital financiero y la realización mercantil de los intereses privados.
Entrar a una economía globalizada significa generará productividades y competitividades
entre bloques y economías nacionales, para que permanezcan sólo países que logren hacerlo en
términos del principio de “libertad de mercado y competencia”. Además de las innovaciones
tecnológicas y organizacionales.
Aumentar la competitividad entre naciones depende de la capacitación de los trabajadores;
de ahí parten las exigencias empresariales para que los recursos humanos se adecuen a las
necesidades de la producción y del mercado.
En este sentido, México busca un equilibrio macroeconómico haciendo a un lado los
problemas mencionados, generando dentro de esa propia élite gobernante la posibilidad de que el
modelo económico sea objeto de debate en la medida en que no se solucionaban los problemas
relacionados con el bienestar de la población mexicana.29
Así pues en el capítulo dos se retoma ésta propuesta de modernización, precisamente para
reflejar que impactos tuvo esta modernización productiva en los trabajadores y sus condiciones de
trabajo.
29 Ver en Concheiro Bórguez Elvira, “El gran acuerdo: Gobierno y empresarios en la modernización salinista”, México 1996. De; Era. p. 153.
40
Capitulo 2
La propuesta de modernización salinista
En la década de los ochenta México sufre cambios que revierten sus efectos en la
estructura económica, política y social del país. Las relaciones entre las clases sociales se
modificaron en varios aspectos. El papel de cada segmento social cambia de manera gradual y se
hace más evidente en el sector de mayor peso economico y social, es decir, el del gran empresario
nacional.
2. 1. El nacimiento del Estado liberal social (1982-1992).
El Estado social resulta de un doble proceso: el primero que representa el desarrollo del
proletariado, sus luchas y su organización, y el segundo que abarca el desarrollo del capitalismo en
un nivel monopolista e imperiaIista.“
El Estado social que en México imperaba hasta los años setenta y principios de los ochenta
se estructuró en un corporativismo limitado que representó la principal forma de interlocución
política, así también se ve que la acumulación del capital descanso en la reducción del salario real
del trabajador, es decir, el Estado tenía un papel destacado en sectores tales como la educación, la
reproducción parcial de la fberza de trabajo en el ámbito urbano, y sobre todo en la gestión
macroeconómica y el fomento económico, aunque mantenía una limitada intervención directa en la
economía; pero en la medida en el que el modelo ligado a un amplio proteccionismo y a un Estado
interventor no permitía dar alternativas para superar las dificultades de la economía ni para
insertarce en las alternativas generadas en la dinámica mundial el Estado empezó a estar en crisis
en estas circunstancias lo social no podía presentarse en toda su pureza. Así, el atraso capitalista y
la necesidad de acelerar el desarrollo social del país origino el Estado Social Autoritario.
30 Confrontese en De la Garza, Enrique: “Ascenso y crisis del Estado social”, ed. Colmex, México. 1988.
4 1
Ante esto el Estado social se muestra imperfecto, debido a que la relación que surgió %e
de incapacidad del Estado para impulsar el desarrollo económico y el beneficio social, resultando
inadecuado debido a que el sustento social del capitalismo no puede desarrollarse a plenitud. Por
otro lado, el vínculo Estado-sociedad fúe limitado, ya que sólo fue permitido hacerlo “legal”
dentro del Estado. Ante la crisis de estas fúnciones apareció la crisis social del Estado benefactor.
Así, en el periodo de López portillo, la crisis de los precios del petróleo en el mercado
internacional ocasionó una situación de fuerte crisis financiera, situación que se hizo más caótica
en medida que la fracción financiera privada provocó la polarización de la economía, la
especulación y la fuga de capitales. Ante esto López Portillo decretó la nacionalización de la
banca, con lo cual se abre un nuevo período coyuntural, ya que se tendría una visión más clara
respecto de los cambios socio-políticos.
Esto demuestra la decadencia del Estado de Bienestar, que se caracterizó por un
estancamiento permanente de la economía, un descenso de los ingresos de la mayor parte de la
población, una mayor ganancia para la burguesía, una desrregularización de la economía expresada
en el descenso del Gasto Publico y del Gasto Social, una desincorporación de las empresas
paraestatales y una reducción del monto y cambio en la asignación de transferencias, una pasividad
de la clase obrera y de los trabajadores en general; una democracia a la manera del Gobierno y una
insuficiente recuperación de la izquierda y de la derecha que aseguraban de la hegemonía de un
partido y un Estado que había llegado en 1992 en quiebra. Esto originó un proceso de
construcción de un nuevo modelo de desarrollo de carácter neoliberal.
Así. el modelo económico y político en su conjunto se caracterizó por la existencia de un
Estado proteccionista de la industria nacional que articuló la acumulación de capital con mercado
y legitimidad social. En el proceso de legitimación el coperativismo se convirtió en un punto clave
que transformo el plano estatal de definición de las políticas económicas, en el terreno principal de
acción y negociación, esto significó un agotamiento de la capacidad del sector agrícola, una crisis
fiscal (crisis de la deuda), una crisis socio-técnica de los procesos productivos de punta, en el
plano de la globalización el sistema de máquinas no permitieron los incrementos necesarios de la
productividad frente a la competencia en el mercado externo y la decadencia del mercado interno;
el agotamiento de la relaciones laborales del sindicalismo corporativo.
42
En este contexto de crisis la propuesta neoliberal propone:
a) Economías más abiertas y sistemas productivos globalizados.
b) Limitación de la línea intervencionista del Estado en la economía.
c) Desrregularización de los mecanismos del Estado Social ligados a la reproducción
social, la seguridad y la protección del trabajo; en otras palabras, un corporativismo que regule las
relaciones entre clases y el Estado social, en un plano.de coparticipación institucionalizada para el
disefío y sostenimiento de las políticas generales del Estado.
d) En el campo de las relaciones laborales se busca la flexibilización laboral, contractual,
salarial, organizativa, y de empleo del sistema de relaciones industriales.31
El Gobierno del expresidente Miguel de la Madrid Hurtado 1982-1 988 tuvo que
enfrentarse a una economía desequilibrada, heterogénea y muchas veces desvinculada, además de
un sistema político gastado en medio de una crisis mundial, ya que se da una significativa
diferencia en la actividad política, es decir, se inicia sobre izquierda y se termina con una
aspiración real al poder absoluto y legítimo de la nación. (Ensayos de la Modernidad 1882-1 885).
Esta situación se dividió en dos planos:
1) La de los cambios estructurales: los propiamente económicos, que tuvieron una acción
rápida y desconcertante, la implementación del PIRE, que en lo fbndamental constituyó una
política restrictiva de emergencia en todos los niveles, y que afecto especialmente a los sectores
más populares. Y los estructurales jurídicos en la reforma de la constitución.
2) Los enfrentamientos políticos: uno h e la lucha interna en el PRI. La SSP debió
enfrentar a: la tradición caudillista a los que atacó con “la renovación moral”, la reducción de los
privilegios debido a que los recursos heron reduciéndose cada vez más mediante la negación de la
diligencia sindical, y, la segunda, la de los constitucionalistas, también llamados radicales y
populistas, pero poco a poco se heron incorporando a la gestión del Gobierno. Esta situación se
vivía en el PRI y en toda la élite política: intereses económicos, formas y lugares donde ejercer el
poder. Aquí se observa que la lucha contra la oposición, fbe menor que en el interior del ‘‘sistema
político priísta” aunque la lucha todavía persiste en formas nuevas como en la posibilidad de
disolver el partido y crear uno que tenga la ideología de solidaridad,
3’ Ibid p. 164
43
Cuando comienza el deterioro del Estado de bienestar, en los sectores derechistas, o en el
sistema político de la derecha3* los grupos más extremos, hegemonizados por la figura carismática
de Clouthier, constituían la primera posibilidad de acceder al poder por lo menos hasta 1987. La
neutralización fue dándose poco a poco, ya que la élite pudo desarrollar políticas más coherentes
de cooptación, como fue la sesión de la gobernatura de Baja California, y el más importante el
acuerdo con los empresarios, así como una serie de acuerdos que se expresaron en los procesos
electorales.
Por otro lado en el periodo de Carlos Salinas de Gortari 1988-1 994, se observaron
aspectos fuertes de ruptura o distanciamiento, debidos a la incorporación de aspectos que
estuvieron ausentes o heron manejados con poca relevancia en el sexenio anterior. Uno de ellos
fue la Política de Gastos Social o más directamente el combate a la pobreza. Esto adquirió
aplicación a través del PRONASOL. Esta concepcion tiene muchos usos o ha servido para varias
cosas, así como también el programa ha tenido relación directa con los problemas que en
diferentes momentos debió enfrentar el Gobierno mexicano. Aquí la política social del Estado
mexicano es aparentemente contradictorio, ya que menciona una eliminación de los organismos
llamados del “bienestar social” mientras ejerce a través del Programa Nacional de Solidaridad una
modalidad intensiva y distinta de apoyo “social”; “el Estado de bienestar es un instrumento para
estabilizar, para amortiguar los problemas sociales, y no para pasar la transformación de la
sociedad ~apitalista.”~~
PRONASOL sirvió en 1989 para responder a los sectores que mayoritariamente votaron
por Carlos Salinas y para diseñar una estrategia que evitara el acercamiento de los sectores
importantes de la llamada izquierda social con los núcleos cardenistas que en ese momento
amenazaban con generar una crisis de Gobierno, y como último sirvió como un eslabón más en la
lucha por recuperar la legitimidad que se había perdido en 1988.
32 Al igual que en el caso del PRI y su entorno, la derecha expresa un gama de manifestaciones que van desde la tradición antirevolucionaria más pura hasta las nuevas formas de representación de la burguesía moderna, pasando por toda surte de extremismos desde los mds serios hasta los más folkloricos. Un intento de demostrar esta adversidad íüe elaborado por Cotidiano 24 julio-agosto de 1988. 33 Hopkenhahn, Martin: “Crisis del Estado Bienestar perifkrico: balance de actores y políticos” en Revista Trabajo y Democracia No. 10, AAo 2, México.
44
Así la reforma del Estado avanza en la descentralización. Las elecciones de 1 99 1, también
generaron expectativas en la población porque la gente confió en que a través de éste programa el
Gobierno les ayudaría a resolver algunos de sus problemas; al termino de estas elecciones se
interrumpió una competencia entre partidos. Se comienza a compartir poder con el PAN por
encima de resultados electorales o intereses partidistas; las decisiones partieron de la voluntad del
Ejecutivo Federal, mientras que el PRD abre una alternativa opositora desde una posición
nacionalista de izquierda.
Al mismo tiempo, sirve para generar competencia al interior del PRI. Debido a que los
comités de solidaridad han sido concebidos como organizaciones que podrían actuar de manera
paralela (o incluso remplazar) a la CTM o a la CNC como vehículos de incorporación,
organización y control.34 En 1992, Solidaridad demuestra que se ha pasado de ser un Estado
interventor obsoleto e ineficiente, a un Estado regulador, fberte, pequeño, eficiente y sobre todo
solidario. Esta característica se apoya en el total de gasto publico autónomo para ejercerce
durante 1992, el 50.9% se destina al desarrollo social.
El Gobierno salinista se afirma políticamente ya que sobrevive a la amenaza de pérdida de
legitimidad y se prepara a consolidar su proyecto de modernización económica. Así se avanza en
la vieja demanda empresarial de privatizar el ejido como elemento esencial para capitalizar el
campo, se libera a la iglesia de su tradicional ostracismo político y se consolida la flexibilidad
laboral con la firma del Acuerdo Nacional de Prod~ctividad.~~
, La Reforma del Estado salinista se afirma como: Liheralisnro Social. Este descalifica y
enjuicia opciones políticas que todavía forman parte de su ser: un estatismo absorbente que
persiste en no pocas líneas esenciales de gobierno -en especial todas aquellas que consolidan el
sistema presidencial-, y un neoliberalismo posesivo que se advierte contundente en el mundo
no es dificil suponer que el Estado Liberal Social en México resulta sinónimo de Estado
Liberal Autoritario. Por lo tanto, este Estado promueve, propone, proporciona, y regula la
actividad económica con una marcada orientación liberal.
34 Ver, Dresser, Denise: “Pronasol: los dilemas de la gobernabilidad’, El Cotidiano, no 49, UAM-A, México, julio- agosto de 1992. 35
36 Ver. Cotidiano 50, “Reformas constitucionales”. Informe especial, suplemento. El Financiero, marzo de 1992.
45
La idea de organización social que expresa, o readecúa su pasado “benefactor” y
transforma su facultad de rectoría económica renunciando a su carácter de propietario de medios
de producción, sin abandonar el control sobre el destino de la economía mexicana al mundo, sin
permitir tampoco ningún tipo de integración política, tiene como objetivo: la satisfacción de las
necesidades básicas de la población. Lo Único cierto es que, el Estado y la economía se liberan, y,
por su autoridad, la protección social permanece al Estado.
En base a esto, los recursos del PRONASOL se han destinado a obras de infraestructura
social básica: agua potable, drenaje, electrificación,. mejoramiento de escuelas, construcción de
centros de salud, empresas de solidaridad y otras obras de beneficio social. Para ello a contado
también con aportaciones de las comunidades, principalmente en trabajo. Esta orientación se basa
en el supuesto de que el mejoramiento de las condiciones de vida puede facilitar la incorporación
de la población de bajos ingresos a la actividad económica en forma regular. Sin embargo, existe
una duda debido a que: 1 ) PRONASOL no es instrumento destinado a modificar la estructura de
la distribución de ingreso; y, 2) Por más que este programa pueda aliviar algunos efectos de la
pobreza, no afecta las causas que lo producen es decir, la falta de un ingreso permanente y
adecuado a las necesidades de las familias. La solución a la desigualdad y a la pobreza está en el
crecimiento económico y el mejoramiento de las condiciones de acceso a los beneficios, por parte
de la mayoría de la población.
Lo social del liberalismo venía de la permanencia en el nuevo esquema de algunos rasgos
distintivos del sistema político que es el Estado “benefactor”, en especial en el carácter de
autoridad que el Estado continua ejerciendo sobre los procesos económicos, políticos y sociales,
desde toda una estructura de poder que mantiene una clase política conquistada en el apartado del
Estado. Así se entiende “lo social”, como el límite político a lo liberal desde el centralismo estatal,
desde el sistema presidencial, es decir, es el ingrediente político, mrtoritario y paternalista que el
Estado mexicano requiere para hacer posible el liberalismo ec~nómico.~’
37 Ibid p. 170
46
2. 2. L a economía social de mercado.
En el pasado, el modelo económico y social se caracterizó por ser un modelo de desarrollo
hacia adentro. El papel del Estado fue central en la medida en que con recursos públicos apoyó el
desarrollo.
N comenzar el gobierno de Echeverría quedó claro que el proteccionismo favoreció el
establecimiento indiscriminado de plantas destinadas al abastecimiento exclusivo del mercado
nacional, estimulando las exportaciones y propiciando patrones de crecimiento contrarios a una
mayor difusión de los beneficios del desarrollo; es decir, la industria no se volvió competitiva y el
ingreso se concentró aun más, se demostró que en los 70’s todavía no habia una existencia
explícita de desarrollo industrial, sino que sólo se crearon organismos con propósitos de
orientación industrial, sin llegar a definirse.
A principios de los 70’s el patrón de industrialización de México se conformó de la
siguiente forma: a) produciendo materias primas y artículos semielaborados de exportación; b)
Creando en el mercado interno una industria ligera de. importaciones y una industria semipesada,
base de empresas del Estado y filiales de los grandes consorcios internacionales; y, c) Sustituyendo
importaciones mediante el sostenimiento de precios internos altos, gracias a un proteccionismo
que sirvió para seguir enriqueciendo a empresarios extranjeros. El Estado llegó a intervenir
profbndamente en la vida económica, pero muchas de sus empresas a la postre cayeron en una
insuficiencia financiera, víctimas de la propia política en favorecer a la iniciativa privada y a la
corrupción.
Uno de los factores que causó la crisis del modelo de sustitución fbe el proteccionismo que
se empezó a aplicar a favor de la industria mexicana, io cual se concretó en medidas arancelarias
protectoras de la industria nacional, particularmente de la competencia estadounidense. El
proteccionismo aduanero, los subsidios acordados por el Estado, entre otros mediante el bajo
precio de los servicios urbanos y de la energía, así como el férreo control sindical ejercido.
Algunos autores opinan que el desgaste del modelo de sustitución de importaciones se debió a una
crisis en la productividad, mientras que otros suponen que se debió a la relación de precios y
salarios, y, sobre todo, al excesivo gasto social del Estado,
47
Al descartarse el modelo proteccionista a finales de los años 70’s se empiezan a dibujar
carencias en las estructuras del Estado y ha mostrar signos de debilidad. La crisis externa se
combino con la interna (mercado protegido, exceso de incapacidad de las empresas públicas, baja
la productividad de las industrias) con ello se produjo un gran decrecimiento y el estancamiento de
la economía. Estas bases se modificaron conforme avanzó la reforma macroeconómica, y, en
particular, la apertura de la economía, el saneamiento de las finanzas y la reestructuración del
sector
La globalización económica existe a nivel mundial y tienen entre sus características el paso
de la fabricación de grandes series a la producción flexible, segmentada y desmasificada, que se
adapta a las necesidades de los distintos segmentos de mercado. En los esquemas de producción
puede abarcar a unidades de diferente tamaño (pequeñas y medianas empresas).
Dentro de la política de fomento económico, para que puedan participar las pequeñas y
medianas empresas, se crean como estrategias de acción el impulso al asociacionismo y la
integración, mediante el cual estas empresas se vinculan entre sí y las grandes empresas realizan
procesos como el de subcontratación con empresas de menor tamaño. El beneficio que se obtenía
con esta política es que se aprovecha una nueva tendencia de los sistemas de producción y,
además, se protegen y generan empleos.
Uno de los puntos de la política de fomento económico, para elevar la productividad es
dar, impulso al sector industrial complementando con.servicios de apoyo a la producción, debido a
que esta política tiene como objetivo la generación de empleos. La importancia que se da al sector
industrial, es debido a que ahí se crean con mayor intensidad nuevos puestos de trabajo y es donde
la generación de ingresos, por persona, es mayor, en particular en el caso de las exportadoras. Sin
embargo, para que se cuente con un sector industrial competitivo es necesario que se
complemente con servicios de apoyo en las fases del proceso. En la fase inicial, dar impulso en las
áreas de consultoría, investigación y desarrollo, ingeniería, diseño y asesoría jurídica. Así como los
servicios prestados por bancos, aseguradoras, casas de bolsa, grupos financieros, etc.
38 Ver, Hiernaux Nicolas, Daniel: “De frente a la modernización: hacia una nueva geografía en campo y ciudad en una era de transcisión”; de. UAM-I, Depto CSH, México. 1994. pp. 25,26.
48
Respecto a la fase terminal es menester tener capacidad para aplicar el almacenamiento y
distribución de los productos, comercio al detalle, mercadotecnia y publicidad así como en
sistemas de procesamiento de información.
A partir de la década de los 80’s se ha llevado a cabo un proceso de transformación de las
bases productivas de las naciones, así como de las formas de inserción en el plano de la economía
mundial. Los cambios implican la modificación de las innovaciones tecnológicas y organizativas
de los sectores industriales más avanzados, a la vez que se plantean cambios en los mercados de
trabajo y en las relaciones laborales, a través de las formas de contrato, de salarios de jornadas de
trabajo, de la movilidad interna de trabajo, así como las acciones sindicales para garantizar la
negociación colectiva en estas nuevas condiciones de trabajo. Se han instrumentado nuevas
formas de organización del trabajo que han llevado en muchos casos a pensar en una
flexibilización de la fuerza de trabajo a través de la polivalencia y los círculos de trabajo.
Desde el punto de vista del libre mercado, se ha planteado que los ajustes de las relaciones
productivas y laborales depende del éxito del modelo económico. Generar productividades y
competividades entre bloques y economías nacionales es la forma en que opera la globalización
económica (para que permanezcan los países que logren hacer en términos de libertad de
mercados y competencia), además de la adaptación de los recursos humanos a las necesidades de
la producción flexible, la cual ha generado cambios en las instituciones educativas y en los sistemas
de reconocimiento en la calificación laboral (~apacitación).~~
En términos de las relaciones de producción y comercio internacional se ha planteado que
el derribamiento de las barreras proteccionistas de las naciones produciría nuevas oportunidades a
la producción y a los mercados, ya que la excesiva regulación de la economía por los Estados
limita la libertad de mercado. Los fundamentos económicos neoliberales son:
1- Frente al proteccionismo se plantea una estrategia de globalización comercial que
implica una nueva interdependencia de los mercados, basado en la libertad de mercado 0 en la
desrregulación.
39 Ver. .Rodriguez Lagunas, Javier: “Modernización productiva en México: las relaciones laborales el empleo y los salarios” Revista Acta Sociológica No. 14, Mayo-Ago, México, 1995. p.25.
49
2- El comercio en condiciones de intercambio libre obliga a las empresas a producir mejor,
con una mejor calidad y a menor precio.
* 3- La empresa moderna debe reorientar sus esquemas de competencia a partir de la
competencia libre en los mercados en condiciones de igualdad y oportunidad, basados en
productividad, la calidad y la competitividad.
4- De facto los intentos de renovación de los circuitos comerciales protegidos dejando sin
un claro sentido a la participación de las políticas económicas internacionales.
Asimismo, se plantean algunos puntos neoliberales frente al Estado:
1- El principal obstáculo al desarrollo del libre comercio mundial son las regulaciones de
los Estados, y para ello hay que limitarlo a la elaboración de las reglas para la convivencia
internacional.
2- Acotar su intervención; ello implica un Estado no interventor ni regulador de lo
económico, el papel político del Estado moderno se limita a la búsqueda y el desarrollo de reglas
sociales para la convivencia nacional.
3- El papel sobre regular y tutelar de los grupos sociales impulsa, por encima de la empresa
y de los individuos, las formas de beneficio social, lo cual lleva al déficit fiscal. En su lugar, el
Estado debe de permitir el libre desarrollo de los mercados de trabajo, que éstos se autoregulan y
generen un equilibrio en la reproducción social.4o
En México han habido importantes avances económicos y políticos que lo han convertido
en un país más competitivo, así la economía mexicana de los 90’s está fincada sobre unos
cimientos más sólidos que en otras épocas. En 1986 México ingresó al GATT; a partir del 88
hubo una ola de privatizaciones y este proceso sigue vigente. Así también hubo reducciones en
impuestos, así como incentivos fiscales para promover la inversión extranjera, los ajustes en la ley
de la inversión extranjera han abierto al 90% de la economía mexicana a una participación del
100% para inversionistas extranjeros.
A nivel internacional México participa en un mercado abierto al comercio exterior en el
que compite con un creciente número de productores extranjeros.
40 Bizberg Ilán, Enrique de la Garza, Yolanda Montiel: Modernización empresarial y relaciones industriales en México”, p.9 l .
50
AI respecto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) le marco a nuestro país un serie de
disposiciones, que confirman el cumplimiento a las reglas impuestas por un mercado mundial en
proceso de globalización, lo cual condujo a una negociación de apertura económica en donde los
gobiernos de México, EUA y Canadá se comprometieron a la firma del Tratado de Libre
Comercio de Norteamérica, a tratados comerciales con países en América del sur y a la inclusión
de México en la OCDE. México ha diversificado sus exportaciones para depender mucho menos
del petróleo como fiente principal de divisas. Estos desarrollos han ayudado ha aumentar la
captación de capitales y la participación de inversionistas, tanto nacionales como extranjeros, por
lo que los requerimientos de infraestructura obligan a que las ciudades mejoren el equipamiento
económico y social que ofrecen al inversionista.
Una vez que las empresas alcanzan un nivel de competitividad pueden participar en lo que
se conoce como las cadenas de valor, en donde cada empresa participa a lo largo de un proceso
para llevar productos y servicios hasta el consumidor final. Cada empresa debe saber en que
puntos de la cadena puede aportar valor, es decir, debe entender las necesidades de sus clientes y
proveedores en términos de calidad, enfoque de mercado, capacitación y tecnologia.
Estos elementos se deben de aplicar en cada eslabón de la cadena, es decir, cada empresa,
pequeña o grande, que participa, tiene que ser competitiva y ofrecer calidad, de lo contrario, no
podrá llegar a ofrecer un valor real para el consumidor final. Este es un concepto moderno, basado
en las exigencias de un mercado global moderno.
Las exigencias empresariales se orientaron hacia la unidad con el gobierno. Uno de los
representantes más radicales, presidente entonces de la CONCANACO, expresaba: "para que la
próxima administración cuente con la alianza del sector privado del país, y así logre la unidad en la
renegociación de la deuda externa, es necesario que la economía mixta mexicana se oriente de
manera definitiva por la economía social de mercado y rechace con firmeza las presiones que la
Internacional Socialista está ejerciendo desde dentro y fuera, con la presencia en México de sus
principales vocero^^^.^^
41 Garcia Suárez, Eduardo (Presidente de la Concanaco): La Jornada, 1" de septiembre de 1988.
51
2.3. La Reforma del Estado.
En el periodo 1982- 1992 se adecua la intervención del Estado en la economía a través de
dos etapas de desarrollo:
1) La etapa de transición a la “modernidad”, que arranca con Miguel de la Madrid en
septiembre de 1982 y termina en julio en 1988.42 Este periodo debiera caracterizarse como el de
“la transición a la modernización sin ideología”; en esta etapa se dan los pasos fbndamentales para
que puedan realizarse, posteriormente, los cambios más importantes en el periodo del presidente
Carlos Salinas de Gortari; también se dan las contradicciones entre los diversos grupos en el poder
y la sociedad en su conjunto, que hicieron imposible los cambios que, más adelante se
implementarían, los cuales destacan las modificaciones a las relaciones de producción en el campo
y las del Estado con la Iglesia. También se sientan las bases constitucionales de los cambios con las
reformas a los artículos 25, 26, y 27 de la Constitución y se inicia el proceso de privatización.
2) La etapa llamada “recuperación de la legitimidad perdida”43 que comienza en 1988 y
termina en 1992 en la asamblea del PRI con el discurso del Presidente Carlos Salinas de Gortari
sobre el iiberalismo social, pero que podría haberse llamado “La construcción de la ideología de la
modernidad y la recuperación de la legitimidad”. La coyuntura de 1988 expresa la continuación
de un proceso con un cambio cualitativo radical. En este periodo ya no habrá complicidad con el
Estado de Bienestar; en el terreno de la desrregulación y privatización se actuara con confianza;
estas serán las bases del nuevo liberalismo social. Aunque se observa un carácter de ideología
dominante en ambos subperiodos.
En estos periodos hubo muchos cambios en la política económica. En 1982 se inicia la
última crisis en México por la caída de los precios del petróleo y la elevación de las tasas
internacionales de interés. El Gobierno se vio obligado a realizar una fberte devaluación, y a
declarar la moratoria del pago de la deuda externa. La economía mexicana a partir de esos
momentos presenta dos etapas: una caracterizada por una profbnda crisis (1982-1986), y, la otra,
caracterizada por una recuperación relativa (1986- 1990).
42 Ver en Bolivar Ezpinoza, Augusto; y Rosa Albino Garavito Elías : “La modernización en cifras”, UAM-A, 1990. 43 Mendez Berrueta, Luis; Romero Miranda, Angel y Bolívar, Augusto: “Reencuentro con la legitimidad’, Relaciones 4 , segundo semestre, 1990, UAM-X, Departamento de Relaciones Sociales.
52
En la primera etapa el Gobierno consideró que la crisis tenía un carácter financiero y que
estaba vinculada a la deuda externa del país; motivo por el cual las políticas que se dieron tuvieron
como eje fbe la austeridad en el gasto público y una drástica disminución del salario real, empero,
dichas medidas fberon insuficientes para reactivar la economía. Hacia 1985 se considera que con la
crisis financiera se articula una crisis de productividad, resultante del agotamiento del modelo de
sustitución de importaciones. En 1988 aparece la idea de que la política anticrisis debe estar
articulada con otra de recuperación del crecimiento. A la estrategia propuesta primeramente se le
llamó “reconversión industrial”, y posteriormente se hablo de modernización.
Ante esto se debían acelerar las transformaciones en la planta productiva, pues su
obsolescencia, con respecto al exterior, era un hecho comprobado. Este fenómeno era privativo en
la pequeña y mediana industria, no así en la mayoría de las grandes empresas, ya sean
transnacionales o nacionales, del sector industrial. Respecto al campo, había regiones en el país
que producían con gran competividad. En los servicios había avances sobre todo en las
telecomunicaciones, y se estaba atrasado en otros sectores claves de la economía, como por
ejemplo, los bancos sectores claves de la economía.
Modernizar al país implicaba ampliar la producción y productividad, superar el rezago
tecnológico, reafirmar el camino de la economía mixta y descentralizar un nuevo esquema de
desarrollo industrial, así como completar la infraestructura y hacer eficiente la producción
Al asumir la Presidencia de la República, Carlos Salinas de Gortari (1 988-1994) tuvo que
enfrentar los retos que amenazaban la estabilidad del poder. La deuda externa no resuelta y el
postergado cambio estructural, junto al problema .de la legitimidad no alcanzada, conspiraban
contra la nueva administración, sin embargo después de un año se pudo recuperar la legitimidad
perdida y pasar a un proyecto de modernización que se dirigió principalmente a los aspectos
económicos con el exterior y ha aplacar en lo posible los ánimos políticos al interior; el Gobierno
incursionó en acciones no experimentadas.
41 José López Portillo: “Tercer Informe de Gobierno”, 1 de Septiembre de 1979, ed. “Los Presidentes de México ante la Nación”, tomoV, México, 1985, p. 641.
La reprivatización de la empresa paraestatal, la repatriación de capitales y el aumento de la
inversión extranjera, la reforma fiscal y la búsqueda del acuerdo de libre comercio con Estados
Unidos y Canadá, y, en general, la racionalidad financiera del Estado y el abandono a su política
paternal heron un hecho. La reconversión industrial avanzaba y la apertura económica de México
se convertía en razón del Estado. Con esto se ve un cambio en el contenido ideológico de las
reformas del Estado, así como un nuevo proyecto social: el liberalismo (1982-1992).
La esencia del programa económico residió en cuatro cambios estructurales:
1) Abrir la economía.
2) Llevar a cabo un programa de desrregularización.
3) Promover la inversión extranjera.
4) Una política de privatización.
“Salinas señaló que la crisis puso de manifiesto que una mayor propiedad estatal no es el
medio ,adecuado para resolver las necesidades de la población”.45
La concepción presidencial de las reformas antepone la economía a la política. El cambio
más relevante lo constituyó la forma de intervención del Estado en la economía. Al pasar de una
intervención económica del Estado a los tiempos de globalización económica, basada en un
sistema de empresas públicas a otra en la que los énfasis están opuestos en la regulación y el
control de los agentes y procesos económicos, el Estado va dejando en manos del sector privado
importantes espacios productivos pero, al mismo tiempo, tiende a imponerle restricciones que
normen su actividad. Entre los hechos que sobresalen en este campo están la reforma fiscal, que
suscito hertes reacciones del empresariado y nuevas legislaciones como la bancaria, que
resultaron un fiasco a la luz de la precipitación de la crisis económica de 1995.
45 Echeverria M, Rodolfo: “El Programa Nacional de Solidaridad: resultados y perspectivas” en Revista Cotidiano, No. 49, Julio-Agosto, México, 1992.
54
Uno de los hechos más notables de la gestión de Salinas fue la vertiginosa recuperación de
la confianza empresarial, obtenida por su programa de reformas, cuyo eje fue la privatización de
las empresas estatales46 el saneamiento de las finanzas pitblicas, la ampliación de los espacios para
la inversión privada (como el campo, con las reformas al artículo 27 constitucional) y las
negociaciones para la firma del TLCAN. Todas estas medidas satisfacieron las demandas del
sector privado, diferidas o denegadas, y sostuvieron activamente las expectativas empresariales en
la reestructuración de la economía.
La política Salinista de Modernización Económica se orientó hacia una nueva forma que se
sustenta en el retiro estatal de la actividad productiva y en la creación de condiciones para hacer
viable a la empresa privada como motor principal de la actividad económica y social (Estado
menos propietario). Paralelamente, el Estado redefine su papel como organizador de los sectores
sociales, subordinados en un esquema que pareciera irse hacia una forma diferente a la del
corporativismo tradi~ional.~’ Mediante esta transformación de la legitimidad estatal la esfera de
acción e influencia del sector privado está destinada a ampliarse, convirtiéndose en un factor de
“s~perordinación”~~ de la vida nacional.
La reforma del Estado consiste en una reformulación de las prioridades y funciones del gobierno
en sus relaciones con la economía y la ~ociedad.~’ El mecanismo fundamental que se reforma es la
conjunción de unificar en la acción económica estatal del desarrollo económico con justicia social.50
Mediante este planteamiento el Estado debe dejar de ser empresario en actividades que no
son de su exclusiva responsabilidad y permitir que el sector privado ocupe estos espacios; es decir,
Además, su gobierno ha reclasificado el listado de las empresas estratégicas con el objeto de permitir que ciertos sectores dejen de ser considerados estratégicos para pasar a manos privadas (especialmente en la industria petroquímica). Al respecto, vease, Taniura, Schatan y Mattar, 12991, pp. 95-96. 47 Los efectos de la reestructuración económica han minado la forma de organizaci6n de los sectores tradicionales de1 PRI. Asimismo, el Programa Nacional de Solidaridad puede llegar a generar nuevas formas organizativas que se constituyan en bases de apoyo para el gobierno, como por ejemplo, la nueva “estructura territorial” de ese partido. Empero, aún no se dispone de elementos suficientes para evaluar las consecuencias de esta política. 48 Vease la definición del alcance en el capítulo 2 del libro “Autonomía y Legitimidad del Estado”. 49 No abarca el sistema político ni las relaciones entre los poderes del Estado. Este último aspecto está reservado al tratamiento que se ha hecho del problema electoral. 50 Bizber, Ilan et al., “Modernización empresarial y relaciones industriales en México”; en Revista Sociológica, No. 21. México, 1993. p.91.
55
I
el Gobierno debe afinar sus facultades fiscales y de regulación de las actividades económicas
privadas y destinar sus recursos a la atención de las demandas de los sectores y regiones más
pobres del país con menores recursos, proporcionando “Soberanía y Justicia” (Estado solidario).
De esta manera el de privatización de empresas paraestatales y un programa nacional de atención a
la pobreza (Pronasol) buscan que el Estado pierda el carácter “paternalista” para facilitar la
iniciativa social.
Las reformas al artículo 27 constitucional, sobre la propiedad de la tierra, representan uno
de los cambios de mayor .envergadura emprendidos por la actual administración. Su objetivo es
propiciar modificaciones en la estructura de las relaciones económicas en el campo, dando por
terminado el reparto agrario y otorgando al ejido y a sus titulares una personalidad jurídica
diferente.
Las tendencias de largo plazo que aquejan a la agricultura mexicana siguen vigentes, así
como las relaciones que la nueva ley está destinada a establecer para capitalizar el campo. Aunque
el efecto potencial contenido en estas reformas puede representar un parteaguas en la estructura
de las relaciones predominantes en el campo, propiciando la formación de un campesinado de
mayor capacidad productiva, combinado con una presencia creciente de la agroindustria, a un
ritmo acelerado, en los cultivos con mayor demanda en el mercado internacional, se espera que el
sector privado dedicado al campo aumente su importancia y modifique de manera radical su
fisonomía del sector agropecuario nacional.
También se plantea la modificación de la política fiscal, pues constituye una de las
principales fuentes de ingresos gubernamentales. En este terreno los cambios han sido importantes.
En el ajuste de las finanzas públicas se ha mostrado mayor eficacia en su desempeño y ha llegado a
ofrecer cuentas superavitarias. La reducción del gasto público y la disminución de la partida por
concepto de pago de intereses mejoraron el margen de maniobra para aumentar los ingresos
tributarios del Gobierno Federal, que se ha modificado de 1988 a 1992. Una de las razones de este
cambio se encuentra en el aumento de los ingresos por concepto de impuesto sobre la renta, que
en 1992 representó un aumento. Este incremento se debe al aumento de la actividad económica, a
la ampliación de la base tributable y a la intensificación de la fiscalización (CEPAL,, 1993 : 25).
56
Por la vía de la captación de impuestos, el Gobierno ha sustituido ingresos que obtenía por
otra vía, y los programas y políticas llevadas a cabo en este respecto buscan consolidarse por este
camino.
De acuerdo con la teoría económica la normatividad económica debe propiciar cambios en
las conductas de los agentes, eliminando obstáculos y fomentando su iniciativa. Los cambios
efectuados se han orientado hacia dos frentes: 1- la desrregulación de actividades que no se
adecuan a las necesidades portuarias y comerciales, de salud, de turismo, minería, electricidad y
petroquímica; y, 2- las “acciones sistemáticas” que se enfocan a crear las acciones necesarias para
que las operaciones de mercados sean más eficientes en todos los campos. AI respecto se han dado
dos tipos de cambios legislativos: unos enfocados a “reducir los costos de transacción de los
particulares”, y otros dirigidos a cuestiones mismas del sector público como “ente” regulador, y
otros más para fomentar la libre concurrencia y la libre competencia de todos los sectores”.”
Otro aspecto fbndamental h e el desempeño como “arbitro” entre las relaciones de capital y
trabajo. Ninguna de estas normas ha sufrido modificación alguna; sin embargo se ve que el costo
del ajuste económico, así como el papel de la reconceptualización del Estado, se debe asumir en
las relaciones laborales. En la perspectiva de fortalecer el mercado se han erosionado las bases de
la negociación salarial al deshacerse los contratos colectivos de trabajo en aras de la flexibilización
laboral que favorece las negociaciones en el nivel de empresa en detrimento de las organizaciones
sindicales de rama u oficio.
L a Secretaria de Comercio y Fomento Industrial, efectúo cambios de la legislación que rige
diversas actividades económicas. El más notable es la expedición del Reglamento de la Ley para
Promover la Inversión Mexicana y Regular la Inversión Extranjera. En éste se estableció eliminar
trámites burocráticos, lo cual significo una menor intervención de la Comisión Nacional de
Inversiones Extranjeras (GNIE). (Secofi, 1992: cuadro 1)s2 Sin embargo, del total de la inversi6n
extranjera registrada, aproximadamente una tercera parte se ha concentrado en el mercado de
valores, sin radicarse en el sector productivo, Asimismo, otra se ha orientado al sector de
servicios
’’ Entre los que tratan de reducir los costos de transacción están las reformas a l a Ley de Sociedades Mercantiles y la Ley Federal de Correduría Pública; las que modifican la regulación gubernamental, como la Ley Federal de Competencia Económica y las reformas a la Ley de protección al Consumidor. Excelsior (loc.cit) ofrece una lista de los demh reglamentos que han sido modificados. 52 Cifras actualizadas hasta junio de 1992.
57
Por otra parte, en marzo de 1989 se estableció el programa para revisar el marco
regulatorio de la actividad económica nacional. Ésta es la actividad más importante desarrollada en
este campo, según el coordinador del programa de desrregulación económica de la Secofi; a partir
de estos cambios se han establecido las bases para una revolución microeconbmica.
L a promoción de la simplificación administrativa y la redefinición del marco normativo proceso
conocido como desrreglamentación, en donde se realizan actividades económicas para agilizar y disminuir
la gestión pública de la economía. Esto se realizó en rubros que parecían cuellos de b~tel la .~’
Otro aspecto importante dentro del salinismo es la enajenacicin de empresas pn?nesmrle.c.
(SI-ICP 1994), al modificar el artículo 28 de la Const i t~ción.~~ Se propone mantener bajo la
exclusividad del Estado solamente las áreas estratégicas. En virtud de que el crédito y la banca
eran considerados como actividades que el Estado debía mantener en forma exclusiva por razones
coyunturales de emergencia con la finalidad de restablecer el carácter mixto en la propiedad y
gestión de la banca para que el Estado cumpla sus responsabilidades sociales y también para
modernizar al propio sector bancario. De esta manera se utilizarían los fondos públicos para obras
de infraestructura y servicios demandados por la población.
La economía política se vuelve crucial debido a que la concentración económica y la
política de privatizaciones a tenido efecto en los grupos y las empresas más importantes del sector
público como: Telmex, Vitro, Grupo Industrial Alfa, Cifra, Valores Industriales, Cemex, Bimbo,
Grupo Industrial Minera de México e Industrias Peñoles. Sí ha esta característica se agrega el
hecho de que los empresarios que controlan estos grupos participan además en casas de bolsa y
aseguradoras que han extendido su influencia y han ocupado un papel importante en las
adquisiciones de las empresas privatizadas, se puede concluir que la concentración y el predominio
de los grupos más poderosos sigue siendo una de las características fbndamentales del gobierno.
Se observa que el dinamismo de estos grupos es insuficiente para generar los empleos y la
demanda interna que requiere la economía mexicana para crecer de manera sostenida.
53
5 4 Pozas, Ma de los Angeles: “Modernización de la industria y relaciones de trabajo” México, 1994, p. 120. Ver en Diario de debates de la Camara de Diputados, 3 de mayo de 1990, pp. 214-220.
58
2.4. COPARMEX y el entorno económico.
La situación económica actual de México presenta dos grandes problemas:
1- La existencia de una depresión cortoplasista aguda, generada por la baja del Producto Interno
Bruto en 7%, a la cual se aúna el crecimiento de la población; además de que el ingreso real
presento una reducción de 8.6%, el mayor de América Latina.
2- El estancamiento estructural de gran parte de la economía, el cual requiere una corrección de
fondo, con programas sui generis especiales, es decir, se necesita un nuevo modelo de desarrollo
integral que permita el crecimiento sostenido de éste; una democracia participativa; una economía
de mercado con responsabilidad social, así como la confianza en el Neoliberalismo, o la
globalización, para resolver la situación del estancamiento.
Una primera condición para aspirar el crecimiento sostenido y el empleo productivo es
precisamente evitar las fluctuaciones económicas (crisis), las cuales ha impedido el crecimiento
sostenido y lo han convertido en un crecimiento o estancamiento sostenido(como en el 74, el 82,
el 87 y en el 94). Para esto se requiere que el PIB crezca a un ritmo del 6% anual sostenido (2.5
de crecimiento de l a productividad laboral más 3% de crecimiento de la producción
económicamente activa). Así se observa que las consecuencias han afectado no sólo el nivel de
empleo, sino también al ámbito empresarial, así como la imposibilidad de pagar las deudas55.
La reestructuración económica y estatal durante los años 89 y 90 provocó importantes
transformaciones en las relaciones entre el Estado, el capital y el trabajo. Para superar esta crisis
Coparmex planteó como eje central de las acciones a la planta productiva y el empleo, los cuales
requirieron las siguientes medidas:
1 - La urgencia de concretar un programa económico que permita a los sectores productivos
la planeación segura.
2- Participar en el diseño de la estrategia económica.
3 - Rechazo de cualquier aumento de impuestos, ya que estos ahogan la actividad productiva.
59
4- Medidas que promuevan a la pequeña y mediana empresa.
S- Austeridad, desburocratización y cotnpetitividad del sector público.
6- .4pOyO a la situaciones financieras, reducción del gasto corriente, promoción de beneficios
fiscales al trabajador y las que fortalecen el poder adquisitivo de la poblaci6n.’6
La Coparmex señaló que la Crisis Económica tenía un definido carácter político, lo que la
llevó al señalamiento de la falta de la democracia efectiva en el pais, la crisis del sistema
económico. Ya que los empresarios insisten en reformas políticas que permitan asegurar la
permanencia de la estabilidad económica.
Así también en el terreno económico se proponen los siguientes puntos:
1- Un Gobierno sin empresa, promotor y no rector de la economía.
2- Un sindicalismo promotor de la productividad.
3- Una plena competencia electoral (democracia participativa).
4- Un sólida economía formal que minimice la economía subterránea.
5- Un legislación fiscal simple y estable.
6- Desarrollo de una sólida cultura de la excelencia empre~arial.~’
Por último, en cuanto a la legislación laboral se presentan los siguientes puntos:
I - La creación de un nuevo espacio para la intervención del Estado en la regularización coactiva
del comportamiento del individuo y de organizaciones pues su leyes limitan la esfera de la
autonomía de los contratos.
2- El nuevo papel del Estado como mediador y arbitro frente al capital y el trabajo.
3- El carácter tutelar de sus intervención y de las reglas que orientan reconocimientos entre
trabajadores y patrones.
COPARMEX se refiere al modelo económico y a la necesidad de crear una nueva cultura
económica - al habla de la urgencia de adoptar. un modelo de economía de mercado con responsabilidad
social. Es decir, un sistema económico en el que legitima ambición de toda persona de mejorar sus propia
situación y la de su familia, sea un motor para la generación de nueve riquezas. mediante una preparación
personal, profesional y técnica cada vez mejor.’R
Discurso pronunciado por el Lic. Antonio Sanchez Díaz Rivera, Presidente Nacional de Coparmex. Carrillo. Alejandro: “Los empresarios y el Gobierno”, ed. en el Cotidiano, vol. 6, p. 29, mayo-julio. Darm Arnal, Arturo: “Del diálogo a la discusión”. la Revista ENTORNO, No.95, año 97, Julio de 1996.
S?
5R
I
I
Se necesita un sistema fiscal mucho más simple, permanente y que de seguridad pública a
todos los causantes, es decir, se necesitan simple y sencillamente leyes que puedan ser entendida.s
para que puedan ser comprendidas, lo cual requiere un gran esfberzo de flexibilidad . Pero, para
que la economía crezca, también hace falta la iniciativa y la responsabilidad personal, sobre todo
del empresario, ya que en este programa los empresarios serán los ejecutores del mundo
económico, es decir que sean productivos en el sentido de que rindan los recursos que les son
entregados tanto en términos de dinero, trabajo y t e~no log ía .~~
Lo que se necesita es una economía de mercado que sea compatible con un crecimiento
económico que beneficie a todos y que tenga una tendencia a la reducción de los parámetros tan
inequitativos de la distribución del producto. Ello debe ser tomado con responsabilidad social ya
que es la base para garantizar un desarrollo integral en el país,
Para lograr el crecimiento económico y el aumento del bienestar de la población, así como
el desarrollo de la cultura de frugalidad, se requiere de fondos de capital, de incentivos concretos a
l a inversión, aunados a l a estabilidad y al flujo de inversión directa en infraestructura y bienes de
capital, por último, se requiere de un ahorro para financiarlo y así poder enfrentar esta nueva
realidad que ha sido la apertura económica. Para aumentar el ahorro a la par con el programa de
incentivos se necesita reducir las cargas de peso sobre los individuos de las empresas, reduciendo
el costo del aparto del gobierno. Por ello es más importante cambiar las premisa básicas del actual
esquema de ahorro, por un sistema regulado del mercado libre, descentralizado, y de opinión
voIuntaria.60
Para que México aumente la inversión y la competitividad en los mercados globales debe
contar con apoyo de las empresas, para completar estos con los esherzos del gobierno. Como lo
muestran los siguientes cuadros (1 y 2):
61
CUADRO No 1
INVERSIóN
- Claridad y transparencia en las relaciones con los inversionistas; para un mejor planeación en cada una de las etapas del fomento de la inversión; y que se prevea los obstáculos políticos o logisticos que pudieran existir.
-Simplificar la “tramitología”. los trámites en si debe ser más eficiente competitivo y rápidos.
- Cumplir con los compromisos que se adquieren, dentro de los tiempos promedios; es fortalecer la creatividad, estabilidad y certidumbre.
-Ofrece mayor incentivos fiscales, costos de inversión más competitivos, rendimientos atractivos y utilidades. Estos incentivos deben estar al nivel de los que ofrecen otros países.
- Anmentar el ahorro interno a través de mejorar la eficiencia. desarrollar y consolidar sistemas e instrumentos financieros.
EMPRESA ~~ ~~
- Entender las necesidades del país y lo que est6 haciendo el gobierno para aumentar la inversión . de manera que sepan cuales son los retos y las oportunidades. para planear de acuerdo con las posibilidades que existen.
-Dar prioridad a la capacitación y desarrollo de los empleados estimulando la capacidad de innovación y el potencial creativo, aunado a la aplicación de tecnología de vanguardia.
- Buscar formas para aumentar . continuamente, la competitividad y desempeño de acuerdo con las exigencias de los mercados internos. - Se requiere nuevas formas de gestión, organización para el trabajo productivo.
-Desarrollar políticas de productividad, que eviten subsidios innecesarios y eleven para obtener mejores salarios.
-Desarrollar programas de formación de empresarios para humanizar las relaciones humanas
COMPETITIVIDAD
-La alta dirección debe asegurar la claridad en las actividades que realizan. Esto debe permear a través de toda la organización para que cada empelado entienda la importancia de su particiapción er los procesos de calidad. implanta1 sistemas de mejora continua, pol que la calidad es un conceptc dinámico basado en el valor que I< asigna los clientes a los productos y servicios que adquieren.
- La empresa debe mantener un: comunicación con sus clientes J desarrollar estrategias de negocio: a las necesidades del mercadc cambiante.
- Se debe capacitar a lo: empleados permanentes, par: desarrollar al máximo SI
rendimiento y su productividad el las áreas claves para la empresa además esta debe hacer uso de 1: tecnología de punta a su alcanct para aumentar a un más I: productividad en sus empleados.
62
ClJADRO No 2
E D U C A C I ~ N
* Hacer m& eficiente el sistema, terminar con el rezago, elevar el promedio de escolaridad, readecuar los objetivos actuales con mira a una inserción de esquemas de mayor competitividad y globalidad. Que el sistema educativo apoye para que el modelo de economía de mercado con responsabilidad social aumente su viabilidad en México
* Promover valores: Responsabilidad, Civismo, superación. solidaridad. humanismo, fortaleza ramiliar, espíritu emprendedor y liderazgo social
* Oponerse a la visión utilitarista que tiende a ver el trabajo como salario, y al salario como costo, así con10 la que la identifica con la expresión moderna dc la esclavitud
* Lograr la consolidación de los actores
* Lograr 1a deducibilidad de los gastos educativos
* Multiplicar los esfuerzos en patronatos E
instituciones. así como las inicativas exitosas
* Enfatizar la formación de carácter, análisis para las vicisitudes cotidianas. la flexibilidad y la5 habilidades de pensamientó y liderazgo
*Capacitar a trabajadores y empresarios actualizando los conocimientos y habilidades
EMPLEO
* Una nueva cultura Laboral: productividad calidad, respecto y promoción de derechos y obligaciones
*Eliminar los impuestos sobre nómina. disminuir el costo, para lograr mayor eficiencia de la seguridad social
* Régimen especial simplificado, realista para las microempresas * Flexibilidad en horarios y contratos de traba-jo
* Ver la privatización como la gran generadora de empleos productivos y lograr
* Protección ecológica como generadora de empleos
* Descentralizar un porcentaje de población a nuevos centros poblacionales fundados al rededor de proyectos productivos
* El objetivo es el empleo, que los mexicanos tengan un trabajo productivo mediante la producción de la inversión y las facilidades que se den a la operación de las empresas * Fortalecer y modernizar la red de centros de capacitación para el trabajo, eficientar las bolsas de trabajo * Realizar un programa que permita a la pequefia 4 mediana empresa lograr niveles de competitividad internacional y garantice su permanencia. “Adoptar un desempleado: crear un nuevo proyecto de asesoría. capacitación, promover talleres familiares, promover el autoempleo
*Capacitar al trabajador para adquirir conocimientos, habilidad y destreza en la producción
* Adaptarse a los cambios que ocurren dentro de la oroducción
* En resumen, se puede observar que en materia econ6mica México obtuvo apoyos que
sirvieron para evitar una crisis de dimensiones insospechadas: respaldo financiero internacional;
superávit en la balanza comercial; control razonable de la información; abastecimiento de tasas de
interés; razonable estabilidad del tipo de cambio; inicio del procesos de desrregulación económica;
reformas fiscales que simplifiquen l a materia y que contribuirán a dar certidumbre jurídica a los
contribuyentes, Las alianzas para la recuperación económica ha cumplido en gran medida sus
compromisos; ha habido una recuperación gradual de la capacidad crediticia; se han realizado
esfuerzos en l a reordenación de sistemas financieros y en la solución a muchos problemas de
cartera; se ha reformado también la ley del IMSS.
2- Garantizar jurídicamente los derechos de los agentes económicos, sobre todo el derecho a la
libertad de emprender y el derecho de propiedad sobre los medios de producción.
3- No distorsionar los procesos de mercado.
En síntesis, para lograr mayor eficiencia y competitividad, en lo interno y en lo externo, el
Gobierno debe abarcar la creación de estructuras co.mpetitivas, de carácter institucional, el manejo
profesional, una visión de largo plazo, y, sobre todo, debe tomar prioridad sobre el precio mismo.
Se debe consolidar una reforma del Estado que lleve a un sistema de democracia participativa, a
una nueva política, a un verdadero Estado de Derecho y a una economía de mercado con sentido
social. El papel del Gobierno o del Estado será estimular al sector privado y realizar las obras de
infraestructura económica y educativa para que las empresas puedan crear y extender la economía
moderna.
Elementos de responsabilidad de la sociedad.
1) Educación y capacitación, para saber realizar las cosas.
6' Discurso pronunciado por el Licenciado Antonio Sánchez Díaz de Rivera, Presidente Nacional de Coparmex en la ceremonia inagural de la LXVI Asamblea Nacional Ordinaria. Marzo 1995.
64
2) Capital para, sabiendo hacer las cosas, poder hacerlas.
3) Una filosofia del trabajo para hacer bien las cosas; comenzando por la actividad empresarial,
haciendo con una tarea social.
Para enfrentar la situación económica los empresarios requieren de la participación de los
trabajadores, es decir, de un compromiso que asuman como propio en la productividad. En base a
esto los trabajadores deberían percibir una remuneración justa y tener accesos a servicios de
seguridad social de mayor calidad, que les permitan elevar la productividad y competitividad y.
con ello, obtener un valor asegurado que redunde en beneficio y competitividad, a fin de obtener
un valor asegurado que redunde en beneficio de la propia empresa de los trabajadores y de la
sociedad. Se introduce la prioridad de la productividad sobre los viejos planes de justicia social,
para lo cual se proponen algunas garantías, así como la individualización de los salarios, los
ascensos con base en la calificación y el reparto de utilidades a cada trabajador en el incremento de
la productividad.
COPARMEX plantea el reto de forjar un país abierto, globalmente competitivo. de mercado.
regimen de derecho económico vigorosa. y conciencia solidaria, para cerrar las grandes brechas
económicas y sociales , que son el mayor peligro para el futuro de México, para esto fortalece y promueve
los valores. ademAs de ser promotor y gestor del bien c o m í ~ n , ~ ~
Esto se logrará mediante una nueva cultura empresarial fincada en una visión de largo
plazo, la creatividad, el liderazgo, la responsabilidad social; es decir, a través de una nueva cultura
laboral basada en el respeto de la dignidad de la persona humana. L a empresa será como una
comunidad en la que todos trabajan por un bien común en l a que existe la ayuda mutua, se
colabora y se resuelven las diferencias mediante el diálogo tendiente a elevar la productividad y l a
competitividad como medios para alcanzar la creación de una riqueza mayor que sirva al bienestar
de todos las integrantes de la empresa y de la sociedad.
” Soto Priante, Sergio: “El nuevo camino” en Revista Entorno 95. Julio 1996.
APARTADO I1
MODERNIZACJÓN ECONóMICA Y RELACIONES LABORALES.
L a finalidad de este apartado es presentar un análisis crítico del impacto que la política
económica neoliberal ha representado para las relaciones laborales, y la propuesta que la
COPARMEX hace al respecto. Para llevar a cabo lo anterior se presentará de manera sucinta el
desarrollo de las relaciones laborales, la reforma a la legislación laboral y las principales propuestas
al respecto.
Capítulo 3
Cambio en las relaciones laborales.
3. l. Historia de las relaciones laborales.
Por sistema de Iielacimes hdustriales se entienden las premisas, valores, leyes.
instituciones y prácticas que regulan las relaciones de empleo. El término fue popularizado en
1958 por John Dunlop en su obra “Industrial Relations Systems”. Este modelo tuvo su origen
mucho antes de que se reconociera el estudio sobre relaciones industriales, o los estudios que
retroceden hasta los principios del proceso industrial. Anteriormente se hablaba de “organización
industrial’’ por que consideraba al trabajo como actividad de grupo, es el supuesto que Taylor y
Mayo plantearon, además de concebir a la empresa como una suma de individuos que pueden
tener intereses individuales diversos pero nunca antagónicos. Lo que hace Dunlop es ampliar e
incorporar a su modelo diversas organizaciones que pueden agrupar a estos actores como
instancias colectivas diferenciadas refiriéndose al análisis del sindicalismo obrero y los organismos
patronales.
Toda comunidad que se industrializa independientemente de forma política, crea obreros y
empresarios. Las sociedades industriales crean necesariamente relaciones industriales definidas
como el complejo de interrelaciones entre empresarios obreros y organismos de Gobierno.
IJn sistema de relaciones industriales está formado por tres grupos de actores: los
trabajadores y sus organizaciones; los empresarios y sus organizaciones; y, los organismos
gubernamentales interesados por el lugar de trabajo y la comunidad laboral. “Estos grupos obran
recíprocamente dentro del entorno específico, compuesto por tres contextos interrelacionados: el
tecnológico, el de los imperativos del mercado o presupuestarios y el de las relaciones de poder en
la comunidad general, así como el status derivado de los
Dicho sistema supone que empresarios y trabajadores disfrutan de la misma situaci6n de
partida y, aunque reconoce que tienen intereses distintos, se trataría de dos elementos que ejercen
presiones, pudiendo tanto el uno como el otro inclinar la balanza a su favor; un tercer elemento
que esta integrado es el Estado, que tiene una intervención desde
Aunque esta teoría no ha sido universalmente aceptada contribuyó a ofrecer un marco
organizativo que los investigadores utilizaron para elaborar modelos explicativos de las diferencias
entre empresas y sindicatos en las relaciones laborales.
De hecho el modelo de Dunlop hnciona bien siempre que el entorno y las prácticas de las
partes implicadas se mantuvieran estables. Se ha podido ver con mayor claridad que el marco de
los sistemas con sus insistencias en la estabilidad y en el consenso de los protagonistas en cuanto a
sus respectivos papeles encuentran grandes dificultades para explicar los aspectos dinámicos de las
relaciones laborales; son estos rasgos los que hay que entender sí queremos interpretar las
transformaciones actuales de la práctica de las relaciones laborales.
Sin embargo, en la teoría actual el concepto de sistema tiene un sesgo diferente por el
carácter regular de las relaciones industriales, con valores compartidos claramente establecidos y
aceptado por los factores.
El concepto de relaciones industriales remite a varios niveles de análisis que, sin construir
un sistema, pudieran ser articulados con otros niveles propios de las relaciones laborales. Para
Kochan y Katz es importante retomar la idea de relaciones industriales para entender el concepto
de Relaciones Laborales. (De la Garza: 1992). En lo referente a las relaciones laborales, cita
Spyropoulos:
Por relaciones laborales se entienden las formas y mecanismos de interrelación de los sujetos en el
marco de la organización, de la producción con el fin de adoptar decisiones en torno a las condiciones de
ejecución del trabajo y a la distribución de los re~ul tados .~~
Cualquier análisis de las relaciones laborales toma como punto de partida los actores
inmersos en e! sistema de producción: sindicato, empresarios y Estado.
A su vez, se ven trastocados por los cambios de las presiones ambientales. así como por las
decisiones estratégicas y la escala de valores de los empresarios, dirigentes sindicales, trabajadores
y las políticas que el Estado adopta.
Las circunstancias, tanto económicas, políticas y sociales, que vive México en la década de
los setenta y ochenta modificó las Relaciones Laborales, que tendieron a una flexibilidad en todo
sentido, pero que no se ha favorecido por desigualdades entre los distintos sectores productos del
país; no obstante, la apertura económica a ejercido una füerte presión para que la legislación se
modifique. En este sentido las opciones y la capacidad de decisión de los trabajadores, empresarios
y Gobierno repercuten en el curso y estructura de los sistemas de relaciones laborales.
3. 2. Relaciones laborales en México.
México ha sufrido profündas transformaciones que no sólo han modificado su perfil de
nación sino también el de sus principales actores sociales. Los cambios que se viven son de fondo,
se consolida una estructura industrial diferente que conlleva patrones de consumo distintos, y
junto a ello la reestructuración productiva, estableciendo nuevas formas de relaciones entre los
factores de la producción; es decir, sí la relaciones laborales están vinculadas al sistema de
producción por lo cual los cambios que se generen en el sistema tienden a repercutir en
modificaciones en cuanto a las relaciones de trabajo.
Es un hecho que en los últimos años el mundo del trabajo se está modificando con
demasiada premura; es un hecho también que las estrategias empresariales para asegurar el
crecimiento económico, bajo la lógica del mercado, se están modificando constantemente.
Todo esto hace que el tema de lo laboral se encuentre en el escenario de debate más
comentado en la actualidad. Se discute sobre la posibilidad de una nueva legislación del trabajo,
sobre cuales son las posiciones que empresarios y trabajadores deben asumir frente a los retos que
implica la calidad y productividad, y qué estrategias proponen el Estado, los sindicato y los
empresarios (en particular la COPARMEX) frente al cambio. Considerando las relaciones ante las
nuevas formas de organización de trabajo y modalidades de control de los procesos productivos,
que dependen de la participación y presencia del trabajador.
Las relaciones laborales están sufriendo replanteamientos que nunca antes se habían visto,
ocasionados en gran medida por la extensión de la revolución cientifico-tecnológica como base
técnica de la nueva fase de acumulación a nivel mundial. La recomposición del proceso de trabajo
y el replanteamiento de las relaciones laborales se expresan en un cambio del taylor-fordismo al
toyotismo japonés de los círculos de control de calidad y excelencia, del obrero tecnificado al
obrero polivalente de los equipos de máquinas y tecnología en proceso de especialización a la
organización del trabajo con base a la automatización, la robótica y la microelectrónica. L a nueva
cultura productiva de corte neoliberal implica la recomposición del proceso de trabajo y de
mercado.
Entre los componentes que han definido este cambio se encuentran tecnologías que
ahorran trabajo, la reducción de la demanda de mano de obra en los sectores de exportación, la
necesidad de elevar los niveles de productividad para competir internacionalmente, la disminución
del salario, la subcontratación, la disminución de la presencia sindical, tanto en los conflictos
laborales como en las nuevas condiciones de competencia en el mercado.
El modelo neoliberal ha impuesto la desrregulación económica para que sea el mercado
quien guíe las decisiones de los actores económicos en beneficio de la intervención privada; el
retiro del Estado de la producción directa, la flexibilización del proceso del trabajo y de las
relaciones laborales han ocasionado desplazamientos de personal, la disminución de la bilateralidad
y la precarización de las condiciones de vida y de trabajo.
En este sentido los debates, pactos y concertaciones que se han venido gestando son
consecuencia de la transformación del modelo de acumulación de capital en el país, ligado &te a la
crisis global del capitalismo y al resultado que se vive en el proceso de producción que apuesta a la
modernización de las estructuras organizativas del sistema productivo, la capacitación y la
tecnología.
Ante esta situación los trabajadores deberán hacer frente a los cambios que la
modernización exige, a través de modificaciones en la Ley Federal de Trabajo para proteger SUS
conquistas logradas de manera que el contrato no se revierta en su contra y para evitar la
anulación de las conquistas laborales logradas,
70
La atención que le dedican los sindicatos al contrato colectivo se está convirtiendo en un
campo de batalla entre éstos y la empresa en torno a la modernización; los empresarios proponen
un nuevo contenido en las cláusulas administrativas para incrementar la productividad. Por otro
lado, los empresarios y el Gobierno, en muchos de los casos, ante el temor de despidos de los
trabajadores, han manejado hábilmente la situación: o los sindicatos aceptan sus propuestas o se
cierra la fuente de empleo. En otros casos, los empresarios mismos buscan los emplazamientos de
huelga, para poder después declarar la quiebra de las empresas y con ello el cierre de la misma.
De esta manera avanza la imposición de cambios sin reformar la ley, lo cual ha logrado
abrir paso a estilos de negociación entre los sindicatos y las empresas en donde la emergencia de
las nuevas formas laborales no terminen por alterar las estructuras contractuales sin dar un nuevo
sentido a los mercados laborales.66 Lo anterior se ve claramente en la intención que fondo de los
pactos y acuerdos firmados durante el sexenio salinista
3.3. La nueva estrategia económica y la modernización laboral.
Los cambios en la estrategia económica del país se inician con la administración de Miguel
de la Madrid. Este cambio era una respuesta a los desequilibrios macroeconómicos que se
manifestaron en 1982 y que propiciaron la acumulación de la deuda externa, el estancamiento de la
actividad productiva, la vulnerabilidad de la economía ante choques externos y la inestabilidad de
precios, desequilibrios como la desigualdad y pobreza ya existentes, etc. El panorama que se vive
* en nuestro país es enfrentar una crisis económica, derivada esencialmente de la caída de los precios
del petróleo que agudizó el problema de la deuda externa. Dicha crisis se ha caracterizado por la
disminución del gasto público, el aumento de la inflación y del desempleo, y una baja en el salario
real. 67
“La experiencia de 1982 hizo evidente que las politicas proteccionistas y la excesiva
intervención del Estado en la economía habían fracasado en su capacidad de promover el
crecimiento económico sostenido con la estabilidad de
“ Ver, Rodriguez Lagunas, Javier: “Modernización productiva en México: las relaciones laborales. el empleo y 10s salarios”, Acta Sociológica no 14, mayo-Agosto de 1995, UNAM, p. 26.
Movimiento Obrero ante la Reconversión Productiva”, no 4. México. 1990. p. 16. “ SHCP: “El nuevo perfil de la economía mexicana”, febrero de 199 1.
67 Cuesta de la Fuente, Adolfo: “Las nuevas tecnologías están modificando las condiciones de trabajo” ed. en
71
I,a nueva estrategia económica requerida a partir de 1983 se basó principalmente en: la
estabilización y el cambio estructural. Las principales medidas que se empezaron a instrumentar
fueron:
1- Estricto control de las finanzas públicas, 2- Reforma fiscal, 3- Desrregulación del
sistema financiero, 4- Renegociación de la deuda externa, 5- Desrregulación en. materia de
inversión extranjera, 6- Desincorporación de empresas públicas, y 7- Apertura comercial.
Todos estos cambios han tenido efectos tanto en la economía como en los actores sociales.
En este sentido el escenario político tiene características novedosas, pero lo interesante es el
efecto que ha tenido la desincorporación de las empresas y la política del modelo neoliberal.
Primero se inicia un proceso de desincorporación de las empresas paraestatales. El Estado
tenia en sus manos alrededor de mil 1 1 5 empresas en 1982, y para I990 sólo 280; estos datos
indican que el Estado empieza a transferir hnciones y responsabilidades hacia otros actores de la
sociedad, hacia el Bmbito de lo privado.
Segundo, se presenta un proceso de adelgazamiento del Estado a través de la politica de
privatizaciones.
Desde principios de la década de los ochenta el escenario nacional se empezó ha
caracterizar por la presencia de un Estado mermado, contraído, endeudado, deficitario, sin los
recursos de antes. Un Estado que empezó a caminar en sentido opuesto al de los trabajadores.
A finales de los 80’s la prioridad del Estado es la productividad y no la protección social.
Reconversión, reestructuración o modernización se empezaron a emplear como temas recurrentes
para contrarrestar la crisis; una crisis que llevó al Gobierno a proponer una alternativa de solución
que fundaba las expectativas de crecimiento en el sector secundario-exportador y en la generación
de divisas y ganancias en el mercado externo. Este modelo de crecimiento fue aceptado más
abiertamente con el Gobierno de Salinas y planteó como finalidad sustancial la n~oderrrizacici~r del
pais. ’ Sin embargo surgió una interrogante: ¿cómo emprender la modernización económica
manteniendo al margen de todo cambio a los actores y sus demandas?.
Se inicia la reconversión, y el proceso de privatizaciones tiene que hacer hincapié en la
negociación laboral. Para proponer un cambio en las relaciones laborales del país donde 10s
pactos y concertaciones se encuentran sujetos a ciertos logros económicos, tienen que centrarse en
la nueva organización del trabajo, en la productividad y en las nuevas formas de relación entre 10s
72
factores de la producción. Esto es findamental para construir y proponer los cambios que ya
están siendo demandados por corrientes sindicales, agrupaciones empresariales y aun en el
discurso gubernamental: concertar una nueva legislación laboral para impulsar una modernización
Ahora bien el nuevo modelo de relaciones laborales que se vislumbra para nuestro país se
basa en un proyecto delineado por el capital extranjero y que, en sus lineamient.os generales, está
contenido en las propuestas del sector privado presentadas en 1988 por el Presidente.
Los cambios laborales responden a una estrategia de implantación de un modelo de
sociedad que viene hncionando a partir del régimen de Miguel de la Madrid, y que h e
consecuentemente seguido en el sexenio de Salinas, por ello resulta importante saber cuál ha sido
el impacto que ha tenido sobre las relaciones laborales a consecuencia de la apertura comercial.
Una de ellas fie el cierre de muchas empresas, por incosteabilidad y falta de competitividad, lo
cual generó alto grado de desempleo, así como el incremento del sector informal de la economía.
También la privatización de los servicios ha provocado el despido de miles de trabajadores del
sector público y, con ello, el achicamiento de las organizaciones sindicales de los trabajadores al
servicio del Estado; desaparecieron empresas públicas donde se construyeron grandes
organizaciones sindicales, varias de las cuales habían logrado significativas conquistas en el ámbito
económico y de prestaciones sociales; los contratos colectivos de trabajo se liquidaron como parte
de los requisitos que los compradores establecían para adquirirlas ; la descentralización productiva
o terciarización ha provocado que actividades del proceso de producción las realicen terceros, en
ciertas condiciones de trabajo, y para quienes generalmente no existe la posibilidad de
sindicalizarse o de establecer algún contrato con los trabajadores de otros establecimiento del
mismo grupo económico.
Ante la internacionalización del capital, de los procesos productivos y la integración
económica la mayoría de las organizaciones sindicales aún carecen de la participación a nivel
internacional que les permita enfrentar en mejores condiciones a las empresas transna~ionales,’~
69
70
~~ ~~ ~~
Ver en Bensusán Areous, Graciela: “Las razones de la reforma laboral en México”, Méxcio, 1992. p. 170. Confrontese enRodriguez Calderón, Eduardo: “Neoliberalismo~ en América Latina: Los impactos”, Revista
Horizonte Sindical. no 9, México, 1997, pp. 28-30.
73
Estado empresarit
E] siguiente cuadro muestra los cambios registrados en las relaciones laborales:
FLEXJBILIZACIÓN LABORAL
Estado benefactor
I Contratacihn colcctiva
. I Contrato por tiempo indeterminado
1 Restricciones a In subcontratacihrl
1 Pago de it1demnización por despido
I Puesto lija por trabajador
t- Remuneración por jornada
I Remuneracihn de septimo din, vacaciones y otras
prestaciones
t 1,ibertad regulada para los cambios en la organización del
trabajo
t IIorarios fijos de traba.jo
t hcensos por antigiiedad y capacidad
+ Autorización previa para modificar las condiciones
colectivas de trabajo
+ Solución del conflicto a travCs del
sindicato
Fuente: Datos tomados del artículo de Eduardo Rodriguez Calderón p. 30.
t contrato temporal o eventual
t 1,ihertad ahsoluta para suhcontratar y maqnilar
t Despido justificado por razones de
producción sin indemnización
+ Libre movilidad del trabajador en la empresa, a volurita
del patrcin
t Remuneración por productividad y por hora. El salari
desciende según las condiciones de la empresa
t Sin renlnneraci6n, por 110 ser tiempo trabajad
efectivamente
I 1,ihertad ahsolnta para organi7ar el traha.jo en la empresa
t Horarios de acuerdo a las necesidades de la empresa
+ Ascensos sólo por capacidad
-t Libertad patronal para modificarlas segiln sus necesidadel
I solución directa patr6n-trabajador
La flexibilidad de las relaciones laborales, y de su normatividad legal y contractual, así
como la libre movilidad de los trabajadores, conforman dos de los pilares de la reestructuración
productiva impuesta por el capital. Se trata, por un lado, de disminuir los costos empresariales
reduciendo los pagos por concepto de conquistas sindicales y prestaciones socioeconómicas; y,
por otro, disponer libremente del trabajador para ubicarlo en el lugar que la empresa decida,
desempeñando fknciones distintas de las comúnmente realizadas, eliminando la participación
organizada de los trabajadores en los procesos de cambio laboral en la fijación de las condiciones
de trabajo y en su regulación, sustituyéndola por la presencia individual del asalariado.
74
L a flexibilización laboral genera la precarización del empleo y el debilitamiento de las
organizaciones sindicales, además es impuesta por la empresa en la mayoría de los casos Ida
estrategia básica que siguen las empresas para incrementar la productividad se sustenta en la razón
de “hacer más con menos” que se aplica no sólo a los insumos y recursos financieros. sino también
en el ámbito laboral.
Sobre las formas de organización del trabajo la modificación resulta por la introducción de
nuevas tecnologías, que ahorran l a mano de obra y el factor de crecimiento sin empleo por los
ajustes de personal. Si el incremento en la productividad es a costa de reducir el número de
remuneraciones reales y la masa salarial, entonces va en contra de los derechos laborales que los
trabajadores defienden.
S.os derechos de los trabajadores son frecuentemente desconocidos por la parte
empresarial, como es el caso de la capacitación, el adiestramiento, l a preferencia y el ascenso entre
otros; lo mismo sucede con los contratos colectivos de trabajo. No se reconocen los derechos de
los trabajadores a la información y a participar en l a toma de decisiones, sino que éstas son
tomadas de manera unilateral.
L a flexibilidad en su definición y aplicación puede asumir varios objetivos, limitar la
plantilla laboral, como una forma de reducir los costos de la mano de obra en los gastos totales;
compactar y simplificar las relaciones contractuales en términos de puestos de trabajo, movilidad
interna, mecanismos de ascenso, niveles salariales y prestaciones sociales; involucrar y
compenetrar al trabajador con los objetivos productivos de la empresa, lo que puede implicar la
participación-decisión del trabajador por vía sindical, o, en el plano del proceso del trabajo, de
grupos laborales mediante los cuales es posible mantener la ocupación dentro de nuevos términos
fijados por un acuerdo.”
También se pretenden establecer las relaciones y condiciones de trabajo. En este sentido se
trata de hacer “flexibles” aquellos factores de la organización del trabajo que ahora resultan rígidos
frente a las modalidades que trae consigo la modernización. (Ver M a . Eugenia Meza: 1993) Sin
embargo, la flexibilidad no se limita a la reestructuración del empleo y, por lo tanto a la
reorganización de l a producción en las empresas, se trata de un proceso que provoca las
modificaciones de las instituciones económicas, sociales y culturales.
Los diferentes aspectos que involucra la flexibilidad son: flexibilidad interna de las
empresas y flexibilidad externa, ambas situadas en diferentes niveles. (Ver anexo 2)
A nivel macroeconómico, las modificaciones pueden ser “interiorizadas” y absorbidas por
la empresa por l a vía indirecta de la gestión de los recursos humanos, que abarca el conjunto de
medidas referentes a la ocupación de l a mano de obra y a la organización de trabajo. En este caso
se refiere a l a flexibilidad interna.
A nivel microeconómico, las diversas formas de ajuste afectan la legislación de trabajo, la
regulación del mercado laboral y las reducciones de las obligaciones de los patronos en el terreno
de la seguridad social. Se trata de la flexibilidad externa a las empresas, dado que los efectos de las
reestructuraciones industriales y de las transformaciones tecnológicas repercuten sobre el conjunto
de la población en forma de adaptaciones de las reglas institucionales.
Las diferentes formas de flexibilidad aplicadas en el terreno del empleo se clasifican en:
Flexibilidad salarial: La cual incluye los métodos que adaptan remuneraciones de los
asalariados de una empresa o bien a las fluctuaciones de la misma.
Flexibilidad técnico-organizativa: La cual favorece la movilidad de los trabajadores dentro
de la empresa, garantizándoles la posibilidad de realizar varias tareas a través de su asignación a
diferentes puestos de trabajo, es decir, se vuelve un trabajador polivalente; tienen que adaptarse a
los cambios tecnológicos y organizativos de la empresa.
Flexibilidad numérica: Se refiere al ajuste efectivo de la mano de obra o la modificación de
la duración de la jornada según las actividades de la empresa.
Flexibilidad de la jornada de trabajo: Es un método de adecuación del horario de trabajo y
de la organización de la producción en hnción de las variaciones cíclicas del mercado a las que la
empresa tiene que hacer frente. Adaptar los horarios de los trabajadores mediante la fijación de los
períodos semanales, mensuales o anuales de trabajo, con descansos o permisos de recuperación
etc. Estos factores son motivo especial de atención en la perspectiva de su flexibilidad con
respecto a la forma en que se encuentran previstos en la legislación laboral, y a los términos en que
se han establecido en los contratos colectivos de t rabaj~.’~
Confrontese en, November, András: “Nuevas tecnologías y transformaciones socioeconórnicas”, ed. en la Colección Cooperación y Tecnología. IEPALA, Madrid, 1994, p. 93.
76
Las autoridades se extralimitan en el uso de sus facultades juridicas para intervenir en las
relaciones colectivas de trabajo y en la libre sindicalización poniendo obstáculos, empresarios y
autoridades, al ejercicio de ese derecho.
Los riesgos de la flexibilidad se basa en l a necesidad de flexibilizar los esquemas
tecnológicos de producción, en su proceso de elaboración como en el proceso de
comercialización, asi como en los factores de tiempo y espacio dejando atrás los modelos
tayloristas. L a consecuencia fie que no se podía aplicar la flexibilización productiva sin impulsar la
flexibilidad laboral, de ahí la necesidad de promover la multihabilidad que permitiera tener
trabajadores bien calificados para el desempeño de los nuevos puestos creados por la tecnología;
la movilidad de los trabajadores facilitaría la incorporación de los trabajadores a los nuevos
modelos de organización laboral, cuyas características requerían la movilidad entre los diversos
puestos, turnos, plantas y lugares de trabajo. En suma, lo que pretende la flexibilización es una
condición para facilitar la creación del valor de los negocios, sin embargo, ello requeriría de saber
calcular y definir los modos e intensidad de la misma, de lo contrario la respuesta a las condiciones
de mercado podrían ser fatales y sus consecuencias podrían venir al final.
,/ INTT:RNACIONAL.IZACI~N 13E LOS
/ NEGOCJOS
REDCICCI~N DE UTILIZACl6N DEI, J,OS COSTOS CAPITAL FIJO
77
Así pues, en este contexto se pone en tela de juicio la reforma a la legislación laboral
vigente; la pregunta es si las modificaciones resultan benéficas para ambas partes o sólo para una
de ellas.
3. 4. Reforma a la legislación laboral.
El tema de reformar la legislación laboral, que hasta finales de la década de los setenta
predominó, se vuelve insistente con la adopción del neoliberalismo y la consecuente
reestructuración del aparato productivo.
Una de las principales líneas que transforman el mundo laboral está referida a las
innovaciones tecnológicas en los procesos productivos originados por la introducción de la
microelectrónica, la robótica y otros avances que han alterado las formas tradicionales de
organización del trabajo y el uso de la mano de obra.
Otra línea de transformación del mundo laboral está vinculada a las modificaciones en la
participación del Estado.
Como ya se mencionó anteriormente, la crisis de los ochenta provocó u n incremento en la
deuda externa, a pesar de haberse implementado políticas de ajuste económico, y dejando grandes
rezagos. Esto se ve claramente en las consecuencias fatales que han impactado a los trabajadores:
importante pérdida del poder adquisitivo, incremento de los despidos, desarrollo del trabajo
informal, así como la negociación de sus derechos más elementales. Tal situación ha llevado al
Gobierno a renegociar la política económica condicionada por la modernización del aparato
productivo, que comprende la modificación de las relaciones laborales y la apertura de la
economía a la inversión extranjera.
Anteriormente se señalaba a la inversión nacional como eje principal de la economía, la
cual regularía la inversión extranjera; ahora, México busca atraer capital por medio del desarrollo
de la inversión extranjera. El marco de las Relaciones Laborales está justificado por un proceso de
globalización de la economía y por el aumento de la productividad, resultando un nuevo tipo de
relaciones entre los actores socia~es.’~
‘ 3 Ver,Staelens, Patrick: “La transnacionalización de las relaciones laborales: una necesidad impostergable”. México. 1990. p. 240.
78
Para los empresarios es indispensable modernizar los procesos productivos y enfocar la
legislación laboral en la misma dirección: el logro de la modernidad.
Se buyca impulsar a los trabajadores y empresas hacia un esquema de mayor flexibilidad en
materia de aplicación de leyes laborales y fiscales, las cuales deberán ser sometidas a un proceso
de revisih. de manera tal que la Ley Federal de Trabajo sea modificada para generar confianza a
los inversionistas, estabilidad en el trabajador, que. a su vez, impulse la productividad, propiciar
relaciones obrero-patronales favorables; en suma, debe estimular la productividad en todos los
ámbitos de la relación laboral, sentando las bases de una modernización.
En cambio, para los sindicatos la reforma a la legislación significa una modificación en el
marco legal de las disposiciones que reglamentan las condiciones de trabajo, motivo por el cual
éstas han de llevarse a cabo siempre y cuando se logre un consenso entre las partes implicadas.
No es posible hablar de modificar la Ley cuando el sector sindical no es participe en el
cambio. Por ello es necesario modificar la Ley partiendo de los cambios que se presentan en la
empresa, como l a flexibilización del trabajo, la inserción en el esquema de competitividad, la
calidad que demanda la globalización de los mercados, etc.
Lograr una mayor productividad implica un tipo diferente de relaciones laborales, bajo las
cuales el trabajador es un “mil usos”, aislado que debe lograr el incremento en la producción.
L a única forma de aumentar la productividad es incrementar la responsabilidad y la
participación de los trabajadores en las empresas, discutiendo y analizando los sistemas de
producción, y los varios métodos para lograr una mayor productividad, así como los beneficios
que los trabajadores recibirían de tal aumento de la prod~cción.’~
Pero no se puede esperar una productividad mayor cuando no hay estabilidad en el empleo,
con el salario tan bajo que gana un trabajador que no le alcanza para cubrir sus necesidades
básicas, cuando las condiciones de trabajo son tan precarias que le impiden el mejoramiento de los
salarios y de las condiciones de trabajo.
El problema de la productividad es uno de los grandes retos en los que la iniciativa
gubernamental, empresarial y sindical tienen que avanzar.
’“lbid p.245.
79
Como dice Thomas Kochan* para que un país pueda enfrentar estos cambios es menester
empezar por reducir la sobreespecialización. desarrollar trabajos en equipo. innovar la tecnología y
mejorar los sistemas de capacitación y educación.
Efectivamente, lo que nuestro país necesita son “programas de capacitación por parte del
Gobierno, asi como una revisión del sistema educativo, a fin de que brinde la oportunidad de
formar jóvenes en áreas técnicas necesarias para las nuevas actividades económica^".^^ Con
respecto a la tecnología, es necesario que se produzca inversión tanto en infraestructura como en
desarrollos tecnológicos.
Todo lo anterior entra en discusión, ya que reformar la legislacicin laboral involucra la
transformación de las Relaciones Laborales en la forma en que se han visto establecidas hasta
ahora, y por otro lado, porque surge la necesaria discusión de su adecuación jurídica a través de
posibles reformas a la Ley Federal del Trabajo.
Los acontecimientos vinculados con el cambio de la legalidad laboral durante el periodo de
Salinas se identifican por las fases en las cuales las posiciones patronales, sindicales, así las del
aparato estatal respondieron a las presiones y resistencias en cuanto a la modificación de la
legislación.
Una de las primeras fases se caracterizó por la existencia de un consenso en los medios
sindicales, patronales y gubernamentales acerca de la necesidad de actualizar el marco jurídico de
las relaciones laborales, aunque existieron diferencias en cuanto al rumbo que éstas tomarían,
Los reclamos sindicales a favor de una reforma a la legislación laboral seguían
manifestándose cada vez más, a través de la CTM y el CT, por una propuesta del sector sindical,
que más adelante se mencionará.
*(IJno de los principales exponentes de la vertiente tehrica del andlisis de los sistemas de relaciones industriales)
En cambio, el sector patronal a través de la COPARMEX planteó a principios de 1986,
como parte de una propuesta de modernización del pais la urgencia de reformar l a legislación
laboral para impulsar la recuperación de la economía y la confianza de los inversionistas.
En consecuencia, la presión de reformar se intensificó; por un lado, las dificultades
electorales de las dirigencias obreras creaban un clima favorable para las expectativas de
reemplazo del corporativismo; por otro, la aceleración del proceso de apertura comercial y la
implementación de un modelo de desarrollo orientado hacia el exterior aumentaron las presiones
por la competitividad, circunstancia que fortaleció el argumento patronal respecto a la necesidad
de eliminar las rigideces propias de la normatividad vigente. Dentro del mismo sector empresarial
había opiniones acerca de l a importancia que debía asignarse a las exigencias planteadas por el
Gobierno.
. L a segunda fase se caracterizó por el uso de vías indirectas; el discurso del presidente
Carlos Salinas (primero de mayo de 1990) abrió esta nueva fase sobre la direccionalidad que se
quería imponer a la modernización laboral, pero también a los límites de esta estrategia.
Se reconocía al movimiento obrero organizado como pilar en el proceso de la
modernización y se ratificaba la vieja alianza; por otra parte se reclamaba un comportamiento
innovador empresarial, de los trabajadores y de los sindicatos orientados hacia la participación, la
capacitación y la distribución equitativa de los resultados; el Gobierno comprometió a los sectores
en la concertación de un instrumento que facilitara los ajustes necesarios en las relaciones obrero-
patronales a nivel de la empresa, para superar con rapidez los obstáculos que detenían el
crecimiento de la productividad y la calidad. L a mayor presión por la competitividad generada por
la apertura comercial y el inicio de las negociaciones del TLC, creaba un escenario propicio para
definir el viejo modelo de relaciones laborales y brindar cierta legitimidad a las expectativas
empresariales flexibilizadoras.
L a Coparmex aprovechó esta oportunidad para insistir en sus demandas: creación de
nuevas formas de contratación, no previstas en la Ley Federal de Trabajo; polivalencia, aumento
del tiempo productivo, eliminación de cualquier cláusula que atentara contra la productividad y la
calidad etc.
Por su parte, el movimiento obrero oficial exigió una recuperación salarial, previo a las
negociaciones de cualquier cambio destinado a promover la productividad. Amenazó al Gobierno
de estallar en huelga general de no respetarse y mantenerse el s~n/?rs quo que venia desempefiando
a lo largo de su historia.
81
La tercera fase de discusión entre el sector patronal y sindical estuvo ligada a los avances
del TLC. De manera implícita se llegó a un acuerdo, comprometiéndose el Gobierno de no alterar
el papel que iugaban estos actores mientras se firmaba el acuerdo trilateral.
Sin embargo, una exigencia empresarial podía intensificar la oposición al TLC, puesto que
buena parte de los argumentos en contra se centraban en los bajos costos salariales de México.
además se corría el riesgo de resquebrajar la disciplina cetemista que había resultado hndamental
para impedir cualquier estrategia e defensa de los intereses de los trabajadores frente al avance del
proceso de integración.
Entre objeciones y conveniencias de la situación laboral mexicana se logró negociar un
acuerdo paralelo al del exterior; surgiendo la incertidumbre de cual sería el futuro de la legislación
en materia para los tres paises, respetando la plena autonomía de regular en el hturo la relación
capital-trabaj~.’~
Posteriormente se dio a conocer que había. una iniciativa de reforma proveniente del
Gobieho, en ella se plasmaba la supresión del criterio de antigüedad como eje del sistema de
ascenso escalafonario y la desaparición de las juntas de conciliación y arbitraje. Esto constituyó un
punto importante de la implementación de los cambios en las relaciones laborales. El sector
patronal también dio a conocer los principios que debian cambiar en la legislación laboral vigente.
Pidió que desaparecieran las juntas de conciliación y arbitraje, o, en su caso, transformarlas en
otras con ambas facultades. A partir de ahí hubo consenso sindical, rechazando cualquier diálogo
para tratar ese asunto. La movilidad del titular de l a STyPS, contra medidas que perturbaran la
relación del gobierno con el movimiento obrero, puso un alto a las pretensiones de modificar la
legalidad vigente. (Bensusán y Garcia: 1995). Finalmente, se llega a un acuerdo entre estos dos
sectores para la firma de una nueva cultura laboral y así enfrentar los retos de la modernización
económica.
76 Ver en, Bensusán, Graciela: “La dimensión laboral del TLC ¿fin del status quo‘?” ed. en los acuerdos paralelos al TLC, México, 1996.
82
3. 5. Reforma a la Ley Federal del Traba-io.
La necesidad de reformar la Ley Federal de Trabajo obedece a una serie de cambios que
sufre México, misma que se plantea alcanzar una modernización a corto plazo. El debate sobre el
proyecto se ha abierto entre los factores de la producción, el sector gubernamental y la propia
sociedad, en relación a ciertas reformas que debiera sufrir l a Ley Federal de Trabajo.
La incorporación del artículo 123 a la Constitución f ie el resultado del efecto
transformador de la Revolución en las relaciones entre el Estado y la sociedad, de ahí surge el
reconocimiento del Estado a intervenir en la regulación de las relaciones entre trabajadores y
patrones por medio de la legislación y del arbitraje encaminado a corregir la desigualdad existente.
Desde la perspectiva de las organizaciones obreras el apoyo de los gobiernos para avanzar
en el cumplimiento de los derechos constitucionales í%e el argumento más poderoso a favor de
abandonar la acción directa. El terreno social era restringido y con la resistencia de los
empresarios a aceptar las nuevas reglas del juego se sentaron las bases para el creciente
autoritarismo en el escenario laboral.
En ese entonces los empresarios entendieron que el cumplimiento y alcance de los
derechos constitucionales dependían de la decisión gubernamental y del alcance del progreso
organizativo. Su acción impedía el hncionamiento de otro organismo en el que tuvieran que
compartir su poder con sus nuevos interlocutores: los sindicato^.^^ Años después cuando los actores sociales experimentan cambios profundos en razón del
desarrollo económico, de la crisis y de las políticas de estabilización que le siguieron, las reglas
forjadas en los años veinte continúan regulando sus relaciones. Sufren algunas modificaciones pero
no ha cambiado lo esencial de la LFT.
Hoy se vive en el mundo laboral una crisis descentralizada estatal, acompañada del
debilitamiento de los sindicatos y del creciente poder de los empresarios para beneficiarse de las
políticas oficiales. Estos condicionan la inversión productiva de los capitales a la satisfacción de
sus necesidades e intereses.
7 7 Ver, Cordova, Arnaldo: “Ideologia de la Revolución Mexicana”, ed. ERA, Méxco, 1973. p. 235. Citado por Graciela Bensusán: “La LFT: Una visión retrospectiva”, Documento de trabajo No 24, Fundación Ebert.
83
d
9
o
yu
Todas estas circunstancias acompañan el proceso de modificación de la legislación vigente.
L a reforma resulta indispensable entre los actores sociales, a fin de que negocien y formulen
nuevas reglas acordes a sus intereses.
El escenario es distinto, el cambio se ha producido en varios planos, primero en lo
económico, l a presencia de la crisis en el mundo a partir de 1973 y con mayor presencia en nuestro
país en 1982, generó un grave problema en el empleo causando baja en los salarios, la venta y el
cierre de las empresas entre otros. El remedio que surge es “la reconversión industrial”, la cual
reitera una nueva división en el trabajo. Los primeros pasos de la reforma se dan a mediados de
1988 cuando en plena campaña por la Presidencia de la República Salinas hace una propuesta al
Congreso del Trabajo, aun sabiendo que carecía de contenido, una reforma sin propuesta sin el
cómo de por medio, pero lo preocupante es cuando Salinas toma posesión el 1” de Diciembre de
1988 donde ratifica ese compromiso.
El segundo cambio se da en lo político, se inicia con la adopción del estado neoliberal, que
no es otra cosa que una forma de gracia presidencial constitutiva de la justicia social.78
A raíz de esto desaparecieron las razones que llevaron al congreso constituyente de 191 7 y
a los gobiernos revolucionarios a buscar mecanismos de protección de los trabajadores.
Sin embargo, los problemas crecientes derivados de la falta de representatividad sindical,
las dificultades para resolver los conflictos laborales surgidos durante y al fin de la vigencia de los
contratos colectivos, las trabas para adoptar sistemas de trabajo flexibles a los nuevos retos de l a
producción y competitividad, el aceptar a los sindicatos como interlocutores en los problemas de
la producción, y el seguir defendiendo el derecho del trabajo, son algunos de los temas en que los
actores deben concertar sí quieren avanzar en el cambio de las relaciones laborales, para que halla
una defensa real de esos intereses, sin detener el proceso de modernización económica actual,
3. 6. El sector gubernamental.
En el nuevo contexto, los cambios impulsados por el Estado discurren por una necesaria
adecuación a las transformaciones sociales, en lo referente a las relaciones laborales y a la política
de industrialización estatal.
7R Ver, De Buen, Nestor: “La reforma de l a Ley federal del Trabajo (Mito o exigencia)”. México, 1993, p. 376
P 81
Se discute el papel que juega el Estado, y se considera que su dirección debe cambiar por
la necesidad de modificar la política económica, así como por los cambios en el marco jurídico que
regulan las Relaciones Laborales, por las siguientes razones:
a) El papel del Estado como productor había llegado a tal grado que se convirtió en un
agente económico que obstaculizaba el buen desempeño del mercado; la insistencia en l a
privatización de sus empresas para dejar en manos de la iniciativa privada el desarrollo de l a
economía nacional.
b) Por haber generado gran cantidad de reglamentos y normas legales, tales como los
permisos de explotación de recursos naturales y las restricciones a la participación en actividades
diversas, que condicionaron la actividad del sector privado.
Todo lo cual iba perdiendo efectividad debido a lo ineficiente del Estado, así como a su
obstrucción del libre mercado, lo cual daba lugar al surgimiento de fenómenos como la inflación,
l a mala gestión de recursos productivos de la sociedad a través de las empresas públicas y el uso
de las influencias para intereses particulares, etc.; todo lo cual hizo necesario replantear el tipo de
Estado y de Relaciones Laborales que la nueva cultura productiva requería para consolidarse.
3. 6. 1. Propuesta del Estado.
En este escenario el Estado, bajo el predominio del pensamiento neoliberal, corriente
dominante en materia de política económica, decide retirar todas las protecciones al mercado
interno y abrirlo al exterior; reduce el gasto público y la inversión, y comienza un proceso de
privatización de sus empresas y acciones tendentes a modificar l a reglamentación de las relaciones
labora le^.'^ El presidente Salinas ratificó su compromiso de campaña, de promulgar una Ley laboral;
en Abril de 1989 se dio el primer paso al anunciarse la creaci6n de una comisión tripartita
convocada para discutir un proyecto de reforma que sería elaborado por el poder ejecutivo.8"
Salinas presentó una propuesta para modificar las relaciones de trabajo con el fin de adecuarlas a
l a nueva lógica económicas; en ésta propuesta se contemplan los siguientes aspectos:
7 9 Revisar, Estudio de la OIT: "Ajuste y sindicatos en Amércia Latina" ed. en Revista Horizonte. no S, 1995. Excélsior. 1" de Abril de 1989.
I - Que las empresas acepten que los sindicatos son interlocutores vdlidos en los problemas de la producción.
2- Que ernpresa y sindicato estudien de manera conjunta los problemas de la productividad.
3 - Que haya flujo suficiente de información de los planes productivos de la gerencia a las bases.
4- Que los empresarios acepten una efectividad en la política de capacitación y promoción que permita l a
productividad.
S- Que las empresas se comprometan a distribuir los beneficios económicos del aumento de la productividad con los
trabajadores.*’
Más tarde se rectificó la estrategia, al aclararse que la iniciativa de Ley surgiría de esa
comisión, con base en el análisis de las propuestas que presentarían los representantes de los
trabajadores y de los patrones. La comisión se instaló pero nunca hnciono debido al cambio dado
por el sector sindical a favor de la reforma, si anteriormente se rechazaba cualquier intento de
diálogo; en cuanto a este tema ahora estaba dispuesto asumir una posición defensiva en el terreno
de la legalidad laboral. Exigía el mantenimiento del orden laboral vigente a cambio de su disciplina
en la estrategia de lucha antinflacionaria y del apoyo en otros terrenos, como en los de la
privatización de la banca y las negociaciones del Tratado de Libre Comercio.
La estrategia del Estado siempre h e inteligente: golpeó a una serie de sindicatos y
contratos colectivos de trabajo, sobre todo en el sector paraestatal, pero siempre cuidando de no
enfrentarse con la clase obrera, sino de golpear de manera aislada e individual a los distintos
sindicatos democráticos e independientes, así como al derecho de huelga y la contratación
colectiva (ver en Vivero Reyes: 1993).
3. 7. El sector empresarial.
Por su parte, el sector empresarial, ante estos cambios que traía consigo el proceso de
modernización económica, tuvo que dirigir su acción hacia una cultura productiva en la que tenia
que cambiar las normas de comportamiento y rutinas en los centros de trabajo;
X I Ver en, De la Garza Toledo, Enrique: “Sindicalismo obsoleto, empresariado prermoderno y productividad’ ed. en Meridiano 99, México, 1990, pp. 15-18.
86
paralelamente a esto se introducía la nueva tecnología con el afán de contar con empresas capaces
de competir en costos y calidad en el mercado internacional, y con importaciones que ahora se
daban con la a?ert.ura comercial.
Algunas de las causas que condujeron a la transformación empresarial fueron, el nuevo tipo
de mercado, generando grupo o segmentos de consumidores hertemente diferenciado por el nivel
de ingreso; este mercado dio muestras de estancamientos combinándose con la caída de la
demanda, lo cual tornó poco efectiva la estrategia empresarial de aumentar su ganancia a través de
la reducción del costo mediante el incremento de la capacidad instalada de producción. Ahora la
permanencia de la empresa en el mercado y la ganancia también dependen de los aspectos de
calidad en producto y proceso; es decir, se ha modificado el camino de competitividad de las
empresas.
Atender dentro de un mismo mercado a distintos grupos de consumidores, resulta
inoperante para las empresas orientadas a la producción de un mismo modelo en grandes series, lo
cual en el pasado fue exitoso en la medida en que los gustos y tipos de consumidores eran más
uniformes. Hoy, el objetivo de disminuir los tiempos muertos y producir con calidad diferentes
modelos de un mismo producto significa estar en condiciones de enfrentar la competencia
internacional con éxito.
La empresa moderna no sólo exige maquinaria y equipo nuevos, sino que debe conseguir el
involucramiento del trabajador con estos objetivos a fin de que aproveche más su potencial
creativo, para mejorar la eficiencia del proceso productivo. Por lo tanto, lo anterior conduce a un
cambio en la cultura productiva, lo hábitos y las conductas en las plantas. Ahora es más frecuente
que la empresa demande a los trabajadores que se rolen en puestos y áreas de trabajo, que manejen
dos o más máquinas al mismo tiempo, que ademhs de la tarea de producción cumplan labores de
mantenimiento y limpieza, y que contribuyan en el proceso de perfeccionamiento productivo a
partir de los conocimientos que su experiencia de trabajo les proporciona; así pues el reto de la
modernización exige una capacidad multifimcional y un nivel de polivalencia adecuado a las
nuevas necesidades productivas de la empresa.
87
3. 7. 1. Las propuestas de la COPARMEX.
Con motivo de reformar la Ley Federal de Trabajo, los empresarios a través de la
Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX) hacen pública sus propuestas de
reformas a la Ley con el fin de lograr mayor eficiencia por medio de condiciones y acuerdos
sociales participativos y transparentes que promuevan una cultura de relaciones laborales entre el
Gobierno, los empresarios y los trabajadores. Por medio de un documento se presentaron
propuestas para un mejor el desarrollo de las relaciones laborales, de entre las cuales destacan:
flexibilidad en jornadas, descansos, cambios de turno, horarios, etc., siempre y cuando se realicen
mediante el trabajador o con el sindicato.(Ver anexo 3)
Las diversas críticas entre empresarios y sindicatos en torno a estas propuestas de
modificación de la Ley Laboral no se hicieron esperar, 1a.fTexibilidad ert la relacicin de frahqjo
considera la capacitación que requiere el trabajador para ocupar diversos puestos de trabajo,
mismos que tendrán una mejor retribución de conformidad con las posibilidades de la empresa, las
cuales no son decisiones unilaterales de la empresa; que únicamente se interesa explotar al
trabajador, como lo considera la CTM.
En cuanto a los contmtos fenrporales, por horn o ,jornada reducida estas propuestas
intentan ampliar el empleo y que pueden ser útiles en un determinado trabajo por ese tiempo.
Obviamente, se incluirían lo correspondiente a prestaciones independientemente de que se podría
establecer una forma de medir la antigüedad del trabajador en caso de que la relación se pudiera
extender por mucho tiempo. No es el propósito, aclaró el líder empresarial, de atacar prestaciones
como antigüedad, utilidades, capacitación, días festivos, vacaciones, etc. Este tipo de trabajo por
hora puede significar la eliminación del sistema de contratación colectivo establecido por la Ley, y,
que por lo tanto, al haber contratos temporales ya no habría revisión de los mismos y el
sindicalismo perdería una razón importante de existir. Estos razonamientos son inkndados porque
l a parte patronal reconoce expresamente que la principal forma de contratación sería el contrato
por tiempo indefinido y el establecimiento real de una relación colectiva conformada por la Ley,
88
Respeto a la racionalización de c a ~ ~ s a de sescisicin del conlrato de trabajo, la central.
obrera interpreta que se pretende bajar costos despidiendo personal, sin trabas legales para
hacerlo, y elio no es la intención, sino que se pretende que el trabajador se sienta más
comprometido a cumplir cabalmente con su trabajo, y que el patrón pueda sin muchas
complicaciones de tipo jurídico rescindir la relación cuando proceda, buscando ahorro de tiempo y
de gastos inútiles en beneficio de la productividad y de los trabajadores que sí son responsables.
En lo que respecta a rnaieria de salarios se busca incluir expresamente el pago por hora, el
cual tiene como crítica que el patrón trate de ahorrar prestaciones, por lo que no se daría ni el
pago del séptimo día ni otros conceptos; el licenciado Grajeda responde que este tipo de pago
estaría sujeto a una negociación que tendría que aceptar el propio trabajador o el sindicato, en
donde se incluya en el pago por hora todo lo correspondiente a prestaciones y de alguna manera se
estableciera alguna base para reconocer la antigüedad, vacaciones y derechos sociales de los
trabajadores. Consideró que este tipo de sistema se aplica en empresas extranjeras, principalmente
en Estados Unidos y Canadá, y que ha demostrado un alto grado de productividad.
'El punto concerniente a denlocrntizar In huelga no es de preocupar al sector empresarial,
cuando estas son emplazadas por sindicatos respetables y con planeamientos razonables, y que
éstas lleguen a estallar cuando no se ponen de acuerdo las partes en conflicto.
Nuestra solicitud va contra los pillos que abundan en todos los niveles del sector sindical de todo
el pais, que utilizan huelgas y los emplazamientos, no para defender los derechos de los trabajadores que
dicen representar, sino para cobrar letras de cambio, cheques sin fondos, lograr el desalojo en un juicio de
desahucio. lograr finalidades políticas totalmente diferentes al interés de los traba.jadores.
Una de las propuesta que desató hertes críticas de organismos laborales h e la de
pretender desaparecer Ia.~jmtas de Conciliacicin y Arbitraje, a lo cual el líder patronal contestó:
La crítica del secretario de educación (Licenciado Juan S. Millán) es. ¿,quién brindará la justicia
laboral'?. L a respuesta es que nos referimos a la desaparición precisamente de las Juntas de Conciliación.
ya que creemos que todas las juntas del país incluyendo las que existen deben ser Juntas de Conciliación y
Arbitraje, jamas podríamos pretender la desaparición de la justicia laboral en nuestro país cuando
tripartitamente formarnos parte de la misma.
89
Este cambio tenia origen patronal, aun cuando resultara inexplicable la posición del sector
gubernamental, no obstaculizo contar con un sistema de justicia laboral ni para su desaparición,
constituyendo una pieza clave en el cambio de las relaciones laborales.82
Ahora bien la posición dentro del sector empresarial en cuanto a reformar la legislacihn es
diferente.
El CCE se preocupó por negociar su respaldo al Gobierno en la concertación económica, a
cambio del saneamiento en las finanzas públicas y la intensificación de las privatizaciones.
La CONCAMIN adoptó una posición conservadora sobre la problemática laboral, en
primera instancia, por temor a que una reforma socavara las bases jurídicas del corporativismo en
un medio con altas tasas de sindicalización, pero, paralelamente se estaba gestando el Tratado de
Libre Comercio entre E. U., México y Canadá, y tuvo que agregar que ante el TLC se deben
cambiar las leyes laborales y de inversión extranjera, suprimir algunas conquistas laborales como el
aguinaldo, salario mínimo, contratos colectivos y la sindicalización por que son obstáculos
fundamentales para incrementar las ganancias y la productividad; también considera que existe un
excesivo proteccionismo obrero y corrupción sindical por lo que es necesario flexibilizar los
procedimientos laborales “para despedir a trabajadores ineficientes e irresponsables”.83
En cambio la COPARMEX, con apoyo de la CONCANACO, fue la promotora del
cambio. En una declaración que hace el entonces presidente de la COPARM-EX Manuel Ocejo
Moreno dice: “O se cambia la LFT o no habrá m~dernización”.~~
La CANACINTRA declara que la LFT ya cumplió su cometido y que hoy “México se
encuentra en una etapa diferente y por ello se requiere de una nueva legislación laboral”.85
82 Ver, Hernández, Andrés: “Ajuste y sindicatos en América Latina”. Manual de innovaciones tecnologicas OIT, 1995. p. 74.
Muñoz. Patricia: “Concamin: ante el TLC deben cambiar las leyes laborales y de inversión extranjera” ed. en La Jornada. México, 30 de octubre de 1991. p. 22.
Benitez, Rodolfo: “O se cambia la Ley del Trabajo en México o no habrá modernización” ed. en Meridiano 99, México, 1990, p. 9. ” Samaniego, Raúl: “Cumplió ya su papel la actual Ley Federal del Trabajo, dice Canacintra” ed. en La Jornada, México, 25 de enero de 1992, p. 26.
81
90
I
Por su parte el Centro de Estudios Sindicales (CES) declara que las modificaciones a la
LFT han sido desplazadas a fin de evitar cualquier fricción que ponga en peligro la estabilidad
social“ y la firma del TLC.
El Sindicato Mexicano de Electricistas también hizo declaraciones en un artículo publicado
en la revista de Lux en torno a que la LFT debe ser modificada para que se adecue a la
productividad y competitividad dentro del esquema neoliberal y del TLC.87
Las propuestas que tiene el sector empresarial consideran el establecimiento de un marco
jurídico que concilie y no polarice las posiciones de los factores de la producción, que ubique la
relación de trabajo en los límites de la modernidad y que permita enfrentar los retos de la
competitividad y el acceso a la economía de mercado.
Por ello los empresarios proponen un nuevo contenido en las cláusulas administrativas para
incrementar la productividad, entre las que se contemplan eliminar el escalafón ciego; capacitar a
los trabajadores fbera del horario de trabajo; definir en forma unilateral los programas de
capacitación; sustituir el pago de horas extras, estableciendo en forma desleal el cumplimiento de
las horas a trabajar por semana, de acuerdo a las necesidades de la empresa; incrementar la
participación de los trabajadores eventuales, como un medio para adecuar los costos salariales a
las fluctuaciones del mercado; se pone en juego l a herza de trabajo al existir mayor oferta que
demanda; libertad de la gerencia para asignar a los trabajadores en las diferentes áreas de la
producción; desaparecer las cláusulas de admisión y exclusión; sustituir la contratación colectiva
por la individual; disminuir el personal sindicalizado subcontratando.
Bajo esta perspectiva lo que se discute en materia de trabajo es el derecho privado como la
autonomía de la voluntad y la libre contratación, lo que proponen los empresarios es reglamentar
de manera mis flexible y sencilla la contratación temporal, a fin de regular los contratos por hora o
por jornada reducida, contradictorio a los intereses de los trabajadores eliminar la contratación
permanente sin tomar en cuenta las diversas opiniones y lo perjudicial que resultaría trabajar por
contratos temporales.
91
La estabilidad en el empleo prevista en la Ley federal de Trabajo, bajo el principio de la
duración de las relaciones de trabajo por tiempo indeterminado, y sólo por excepciones cuando kt
naturaleza del trabajo así lo exija y no se trate de labores de carácter ordinario y permanente, es
que la duración se puede delimitar por tiempo u obra determinada (artículos 35, 36 y 37).
Flexibilizar la estabilidad en el empleo es modificar las relaciones de trabajo que durante
luchas los trabajadores han logrado conquistar, estos se oponen, ya que las relaciones de trabajo
son por tiempo indeterminado, a fin garantizar sus derechos. Derecho que adquiere mayor
dimensión en un contexto en donde lo que se busca es el desarrollo económico y social.
Una de las inseguridades que trae consigo el proceso de modernización son las relaciones
de trabajo: s i existe un mercado donde la demanda es mucho mayor que oferta no puede haber
condiciones de igualdad y más si la duración de las relaciones de trabajo se deja al libre juego de
los factores de la producción. Esto pone en peligro el empleo.
Los programas que se impulsan en el marco de la modernización no cuentan con
definiciones particulares para dar respuesta al problema del desempleo, que es lo que en un
momento el discurso gubernamental planteó: la estabilidad en el empleo.
En cuanto al salario, se prevé que éste debería ser por hora trabajada y tomando en cuenta
la productividad de cada trabajador, partiendo de que la productividad se refiere
hndamentalmente al rendimiento una forma de retribuir el trabajo es midiendo precisamente el
rendimiento que logra obtenerse; las ganancias de cada trabajador varían según las reglas
preestablecidas con arreglo a cambios medidos en su rendimiento, es decir, su salario dependerá
de lo que produzca durante el período de paga. La fijación de un salario mínimo y la revisión de
los salarios profesionales remunerados se determinaran de acuerdo a la capacidad de cada
empresa.
Ahora bien, conforme a lo previsto en la Ley Federal de trabajo, se entiende por salario, en
términos genéricos, la retribución que debe pagar el patrón al trabajador por su trabajo (artículo
82). Una caracteristica del salario es precisamente la,de ser remunerador, lo que quiere decir que
ahora 'su fijación deben tomarse con los parámetros de la cantidad y fa calidad del trabajo, sin que
de manera alguna pueda ser inferior al salario mínimo (artículo 85).
92
I
El salario además de ser suficientemente satisfactorio a las necesidades normales de un jefe
de familia en el orden social, material y cultural y para proveer de educación obligatoria de los
hijos, es una de las conquistas que han logrado los trabajadores y mediante la firma de pactos se
pretende contraer el salario real, pagar conforme a la resultados de la empresa.
La jornada de trabajo forma parte de la discusión en materia de trabajo que, segun el sector
empresarial. debe sufrir algunas modificaciones.
La reglamentación de su duración máxima de la jornada de trabajo es una de las
condiciones determinantes en la organización del trabajo y está basada en artículo 123
Constitucional. En la Ley Federal de Trabajo es donde se establece lo que debe entenderse por
jornada de trabajo, definiéndose Csta como el tiempo durante el cual el trabajador está a
disposición del patrón para prestar su trabajo (artículo 58); en el marco de la productividad l a
distribución de ese tiempo tiene que ver con la forma de organización del trabajo a fin de lograr en
una misma unidad de tiempo el mayor rendimiento posible.
L a jornada de trabajo es la cantidad de tiempo con que cuenta el patrón par disponer de l a
fuerza de trabajo de sus trabajadores, en esta dirección pueden lograrse los mismos resultados
intensificando el trabajo en una misma unidad de tiempo, que si se prolongara l a jornada de
trabajo. La intensificación del trabajo resulta importante para elevar la productividad del trabajo,
además del uso de la tecnología altamente desarrollada.
En este sentido resulta importante la duración de la jornada de trabajo; es por ello que los
organismo empresariales han hecho propuestas específicas como:
Hacer más flexible el término de la jornada diaria que permita reducirla o ampliar por convenio entre las
partes y lo inherente a turno, puesto, descanso y horario, destacando la conveniencia para el país de continuar con
la semana de 48 horas de traba-jo distribuida a voluntad de las partes.
En particular, la Coparmex propone fijar la duración de la jornada de trabajo, sin exceder
de los máximos legales, así como repartir las horas laborales; el problema se presenta en el monto
del salario que debe percibirse por el tiempo efectivamente laborado.88
xx Más información en Meza, Ma. Eugenia: "Estabilidad. Jornada y Salario". México, 1993, P. 129.
La flexibilidad en la duración del tiempo en que el patrón dispone del trabajo favorece la
dependencia de la remuneración del trabajador a los factores fluctuantes de mercado. Por lo tanto
puede condicionar los días de descanso así como el de las vacacione~.~~
En realidad, lo que pretenden los trabajadores es reducir la jornada de trabajo, así como el
pago de compensaciones, en caso de cualquier modificación imputable al patrón que afecte el
salario del trabajador. Esto es lo que se realizará mediante convenios, si se modifica la legislación
laboral.,
En lo referente al derecho de hzlelga se considera que éstas se deben limitar para asegurar
el ritmo de la producción; así como sancionar a trabajadores, sindicatos y empresarios cuando
incurran en demandas o huelgas contrarias a las de l a ley, eliminar las huelgas por solidaridad,
clarificar responsabilidades a sindicatos y trabajadores en caso de declarar una huelga inexistente,
este es un principio fundamental de seguridad jurídica.
Sobre las prestaciones se menciona que el reparto de utilidades se debe realizar con base
en la productividad y logros de cada trabajador. Lo que los trabajadores pelean es que se les
otorgue un aumento de manera indirecta o en especie.
En lo que se refiere a sindicatos, se considera que debe existir libertad de afiliación,
eliminación de las cláusulas de exclusión y sindicalización obligatoria, acreditación satisfactoria de
la personalidad de los sindicatos, elección plena de los dirigentes sindicales y más libertad en l a
relación empresa-trabajador. En lo que concierne a la capacitacicin, ésta deberb estar orientada a
la productividad del individuo, a l a eliminación del escalafón ciego, y a crear comisiones de
productividad, seguridad e higiene.
Lo que propone el sector patronal es crear una ley de trabajo a la medida de 10s
inversionistas nacionales, y para la capacitación del capital extranjero. La legislación [aboral debe
estar orientada hacia la productividad, el modernismo y la competitividad internacional, pero
siempre protegiendo el derecho de los trabajadores; los objetivos que persiguen 10s patrones son
consecuencia y corresponden a la creatividad de l a empresa. Este proyecto choca con el
contenido que el constituyente de 1917 le imprimió al artículo 123.”
89 Ibid. p. 130.
no 4, México. 1990, p 248.
90 Ver, Dávalos, José: “La propuesta de la Coparmex”, ed. en El Movimiento Obrero ante Reconversión Productiva.
94
sindicato ha sido de los pocos en lograr esquivar algunos de los efectos derivados de la
implementación de las estrategias económicas que, para muchos, han significado despidos
masivos. el no respetar 10 pactado en 10s contratos colectivos de trabajo y la ruptura de la , < :':I;\\L*,, .:!',,!;!,,.* , , , , \.i S',:*,,:;,;:::<' t:: 1.2; i':.';t';.'$ p,k:yi \'S q..:? ;y , pl~..:::?. 3 : _.._ 55 1 , * ."".[': L." 1 .
Los cambios económicos han creado nuevas condiciones laborales que deben incorporarse
en la ley, ya que, hasta ahora, tales cambios se han dado, generalmente, contra los trabajadores. Se
propone incluir en la legislación laboral un capítulo que contemple los derechos y obligaciones de
empresas y sindicatos a fin de asegurar la bilateralidad en las negociaciones.
Es importante que la LFT se reforme pero no que se sustituya, ya que de ser sustituida se
modificaría la parte patronal que tiene más poder e influencia, resultando los trabajadores más
afectados, por lo tanto es preferible que se quede como está.
S,olicitan su revisión para que posibilite el desarrollo económico del país. Que se respeten
los acuerdos obrero-patronales, ya que son la autoridades las que violan los derechos de los
trabajadores.
Después de la declaración de reformar la LFT aún no se encuentran claras las cosas, pero
son ya varios los sindicatos que declaran la continua violación de sus derechos por parte de las
autoridades.
Arsenio Farell Cubillas secretario de trabajo y previsión social ha declarado que aún no se
ha modificado la Ley Federal de Trabajo; sin embargo la comisión Tripartita sigue vigente y se ha
presentado ya el proyecto de reformas a la Ley, por parte del sector patronal.
El actual presidente de la COPARMEX declaró a principio de año, que el cambio obligado
de los organismos sindicales y los contratos colectivos de trabajo CCT, seguirán en marcha hasta
que se logre l a transformación de la LFT a mediano plazo. Después de la firma del TLC, la LFT y
el artículo 123 tienen que ser revisados para hacer los cambios que se requieran. Pero por el
momento es importante que se firme el Acuerdo Nacional para llevar la Productividad
(ANEPC).9'
9' Ver en, Becerril, Andrea: "A mediano plazo deberá revisarse la LFT: Coparmex" ed. en L a Jornada, México, 24 de enero de 1992, p. 1 1.
95
3. 8. Propuestas laborales.
Los trabajadores reclaman un proyecto original mexicano en el cual no intervenga ninguna
legislación extranjera, porque no es adaptable a la circunstancias por las que atraviesa la sociedad
mexicana. Es imposible que una sociedad del tercer mundo se adapte a las condiciones que el
modelo económico exige, ya que ésta es un modelo para países desarrollados específicamente.
Los trabajadores rechazan las reformas constitucionales, demandan un proyecto que no afecte los
principios constitucionales.
Debe ser una ley proteccionista de los trabajadores como lo marca la Legislación Laboral,
aunque se le deben suprimir todas las exageraciones que contienen actualmente, eliminando el
paternalismo. (Ver Anexo Número 4)
Si observamos las propuestas y objetivos que persiguen los trahqjadores y empresarios
éstos son diferentes, cada uno de los actores cuida sus intereses, la actualización de la legislación
laboral debe realizarse para que ésta sea un factor que impulse a trabajadores y empresas hacia un
esquema de mayor flexibilidad en materia de aplicación y administración de leyes laborales y
fiscales, las cuales deben ser sometidas a un proceso de revisión que arroje como resultado su
simplificación para que genere confianza en el invefsionista, estabilidad en el trabajador e impulse
la productividad.
Las modificaciones deberán reflejar la necesidad de propiciar óptimas relaciones obrero-
patronales y deberán estar dotada de sistemas flexibles en su aplicación y observancia que
permitan al trabajador conservar su dignidad como persona y al empresario mantenerse al tanto de
los diferentes aspectos del entorno económico en que vivimos.
La respuesta ante la modernización productiva, ha sido la introducción de nuevas
tecnologías encaminadas a mejorar la calidad y la flexibilidad como política de desarrollo
económico del país; la disminución del papel del Estado en la economía ha acarreado un aumento
en el desempleo, una disminución en los salarios, y un temor inhndado en los trabajadores a ser
despedidos, lo que prolonga su estancia en el puesto de trabajo.
96
Así pues, la estrategia que ha seguido el sector empresarial frente a este cambio es que los
mismos empresarios buscan las condiciones para que se dé la huelga, para poder después declarar
la quiebra de la empresa y con ello, el cierre de la misma.
Los mismos sindicatos en numerosos contratos colectivos de trabajo han aceptado ya la
flexibilidad en materia de movilidad horizontal del trabajador e inclusive territorial; han aceptado
ya la selección de trabajadores tnás capacitados frente a otros que tienen mayor ambigiiedad; el
reajuste de puestos de empleo para enfrentar la competitividad y el mantenimiento de l a fbente de
trabajo; han aceptado ya de hecho que numerosas empresas contraten directamente a personal no
sindicalizado, aún cuando posteriormente se realice este requisito en cumplimiento a nuestra
legislación laboral.
Han aceptado ya flexibilidad en muchas ocasiones de las jornadas de trabajo en función de
las necesidades productivas de la empresa; la supresión de días festivos acordados dentro del
contrato colectivo de trabajo mediante un convenio con alguna contraprestación celebrada ante la
junta; han aceptado el recuento previo en numerosas huelgas, de solidaridad, de titularidad de los
contratos e inclusive de revisión de contrato, forzados muchas veces por la voluntad de los
propios trabajadores que no están de acuerdo en poner en peligro la fuente de empleos; han
aceptado ya la reducción de los periodos vacacionales en numerosos contratos colectivos de
trabajo, convencidos de que la productividad y la competitividad así lo exigen.92
3. 9. El sector sindical.
Este intento de cambio también influyó en l a vida de los sindicatos, al modificarse el
marco legal que regula las relaciones laborales, y, por lo tanto, el contenido de los Contratos
Colectivos. L a justificación para tratar de hacerlo son los supuestos altos costos que las
prestaciones y derechos de los trabajadores significan para las empresas, y que les impide tener
costos o productos con precios competitivos a nivel internacional. Otro obstáculo para la
modernización de las empresas son los contratos colectivos demasiado rígidos, de tal manera que
no permiten una eficiente administración gerencia1 de recursos humanos, de acuerdo a los retos
productivos de la empresa.
92 Ver en Bensusán Graciela y Carlos Garcia: “Legislación laboral en México”.ed. Fundación Ebert. México, 199s.p. 102
97
Estos objetivos buscan cambios en los mecanismos legales que impidan la facilidad de
contratación y despido de personal, la extensión semanal y mensual de la jornada de trabajo; ello
choca con Ins propuesta que tiene el sindicato de mantenerla o reducirla; los costos de despido de
los trabajadores; liberar los fondos sociales de jubilación; privatizar aspectos relacionados con los
servicios de salud y educación, y modificar la reglamentación sobre la actualización de los salarios
con el propósito de que estos dependan cada vez más de la productividad alcanzada por la
empresa.
Con los CC se busca el libre manejo de los trabajadores de acuerdo a las necesidades de l a
empresa; negociar los salarios en forma individual; ajustar los sistemas de pagos sólo a las horas
trabajadas y relacionar los incrementos salariales con los resultados obtenidos por la empresa en el
mercado.
Ante todo esto tiene que hacer frente el sindicato y proponer en que sentido van dirigidas
sus estrategias, que más adelante se explicaran.
3. 9. 1 . Propuesta del sindicato.
La opinión que tienen los sindicatos frente a la posibilidad de cambiar la legislación laboral
que ha dominado hasta 1982 difiere de los intereses del capital y el trabajo. El cambio que se
pretende a la reforma laboral, como ya se ha mencionado, es una de las consecuencias de la crisis y
la reestructuración productiva, que a los trabajadores y la dirigencia obrera no les ha beneficiado,
al contrario, el acercamiento creciente entre empresarios y gobierno opaca las demandas de los
trabajadores a través del sector sindical.
L a estrategia que utilizó en primera instancia el movimiento obrero para evitar una
transformación en la legislación laboral, contemplada sólo en demandas empresariales, fue
rechazar cualquier intento de discusión o negociacibn abierta de los posibles cambios incluyendo sí
éstos pueden o no beneficiar a los trabajadores.
Lo que se negicia en cuanto a reformar la legislación laboral es el grado de .flexibilidad
Inboml necesario para afrontar los nuevos retos de la productividad y la competitividad. Los
empresarios pretenden romper la 16gica corporativa para avanzar en éste campo. Pero el problema
no son los sindicatos, sino que va más allá de lo que se discute:
98
Lo que hoy está en entredicho es la capacidad del actual modelo de regulación para ofrecer
respuestas apropiadas a los complejos requerimientos de una situación dominada por los cambios
tecnológicos, organizativos de los mercados v en las relaciones entre el estado y la sociedad que alteran los
anteriores des equilibrio^.^'
La reforma no debe excluir al sector sindical, sino que, mediante mecanismos apropiados,
se puedan considerar los intereses de los trabajadores en las decisiones que los afectan, tanto al
nivel de empresa como a nivel de las políticas gubernamentales.
Las demandas sindicales a favor de una legislación laboral se plantearon desde 1978,
cuando la CTM y el CT plantearon una serie de medidas encaminadas a contrarrestar el peso
político de la iniciativa privada. Perduraron en los siguientes años pero sin éxito alguno; en tanto
que la crisis del 82 estaba agudizándose y el ajuste que le siguió provocó el debilitamiento de
interlocución entre movimiento obrero y las políticas gubernamentales.
Para 1988, la CTM pidió al entonces presidente electo -Carlos Salinas de Gortari- una
reforma a la legi~lación~~ laboral para adecuada a las condiciones de la productividad y a la
necesidad de una mayor protección para los trabajadores del país.
El documento que emite la CTM reclama lo siguiente puntos:95
-Instaurar l a jornada de 40 horas.
-El salario remunerador debía estar relacionando con los precios y utilidades.
-Aumento en el porcentaje del reparto de utilidades.
-Ampliar el periodo vacacional con pagos de una prima superior.
-El aumento de la aportación patronal al Instituto de fondo nacional de la vivienda para los
trabajadores (TNFONAVIT).
-Reglas relativas a incrementar la capacidad y el adiestramiento en el empleo.
93 Bensushn. Graciela y Garcia, Carlos: “Legislación laboral en México”. ed. Fundación Ebert, México. 1995. p.
Comité Nacional de la CTM, dirigido a Carlos Salinas de Gortari. México,sep. de 1988. p. 6. Datos tomados del documento que el Comité Nacional de la CTM dirigió a Carlos Salinas de Gortari. México,
92. 91
93
septiembre de 1988, p. 6.
99
Las opiniones que plantean las organizaciones sindicales, sobre la posible reforma laboral
son diversas, las ventajas de lograr u n cambio a favor de los trabajadores implica un cambio legal
que debe llevarse a cabo mediante u n consenso entre ambas partes.
Si en u n primer momento el sindicato rechazó cualquier intento de diálogo sobre la
reforma, ahora lo que tiene que definir son estrategias que le permitan determinar la partictpación
en el reajuste, para que la modernización beneficie también al trabajador. Para que su participacicin
no sea marginal, y, por el contrario, éste inmersa en el cambio y la participación, para lo cual
tendría que replantear una posición participativa, anticipándose a las acciones de la empresa en
materia de reconversión, proponiendo un programa de acción.
Si se da una innovación tecnológica, y la reconversión de las fuerzas de trabajo, el acuerdo
sobre éste punto debe surgir entre ambas partes, las cuales deberán tener acceso a la información,
así como un control sobre el diseño de la programación de los sistemas productivos, etc.
Hablar de los resultados que produce la modernización suena interesante y más aun cuando
esos resultados están afectando el mercado de trabajo. Si ya observamos que una de las
modificaciones que pide precisamente el sector empresarial es l a reduccicin del salario pagado por
hora, como en el tipo de sistemas aplicado a las empresas extranjeras, que lograron mayor
productividad; pero aquí el resultado es la precarización del salario, que afecta la estabilidad
laboral al sustituir el empleo permanente por el trabajo de tiempo parcial y temporal, y por l a
subcontratación de mano de obra.
El punto de partida para las negociaciones entre trabajadores y empresarios, es que los
primeros deben reconocer que el éxito de la empresa es l a realización de l a producción en el
mercado; y los segundos, que el trabajo fisico e intelectual es base de la ganancia y que, en
consecuencia, la empresa debe compartir los beneficios con los trabajadores.
También repercutió en
Ambas modificaciones obligan al sindicato a cambiar su estrategia en la negociación
colectiva; ante el pago por conocimiento se deben fijar los criterios de intensidad del trabajo y
garantizar la calidad de la capacitación en fimción de los niveles de formación de los trabajadores,
y negociar lo que se evalúa como conocimientos requeridos por el trabajo polivalente; ante el
salario flexible el sindicato debe tratar de transformar el personal eventual en personal de planta y
vincular el salario a la productividad, ya que esta forma parte del desarrollo de una cultura de
trabajo.
Los procesos de transformación productiva influyen también en la flexibilidad en el empleo
originando modificaciones en los contratos laborales. Para la empresa es conveniente que se
optimicen los resultados del proceso de producción a través del trabajo polivalente, tasas
superiores de rotación de personal, etc. Empero, los empresarios desprotegen a los trabajadores y
limitan la capacidad de negociación de los sindicatos.
Por lo tanto los sindicatos están dispuestos a la implementación de nuevas fórmulas de
empleo, siempre que estén incorporados a la negociación colectiva y no afecten los puestos de
trabajo estructurados. L a estabilidad laboral es una conquista histórica del movimiento sindical que
ha permitido mejorar las condiciones de vida y trabajo de los asalariados, por lo cual puede ser
negociada si están reguladas por el contrato colectivo de trabajo y de acuerdo a las normas en
materia de empleo.
Los procesos de transformación productiva de integración de nuevas tecnologías, de
subcontratación etc., están generando nuevas discusiones y aumentando los enfrentamientos entre
estos sectores. Las acciones sindicales oponen resistencia a iniciativas empresariales de negociar
cláusulas desfavorables en materia de seguridad ocupacional, supuestamente compensada por los
aumentos de los salarios.
En este contexto el sindicato debe desarrollar hnciones que lleven a la defensa de 10s
interese socioeconómicos de los trabajadores; hablar de mercado de trabajo también implica la
“realidad socio-laboral’” en el cual el trabajador esta inmerso así como los salarios, el empleo y
las condiciones de trabajo.
96 Godio. Julio: “Restructuración del mercado laboral y estrategia sindical” ed. en Revista Nueva Sociedad, no 124. marzo-abril de 1993.
101
Es necesaria una estrategia sindical que permita centralizar las demandas diferenciadas en
materia de empleo, salarios e ingresos basada en cuatro componentes fundamentales.
a) Desarrollar acciones sindicales a partir de plataformas que recojan las demandas de los
trabajadores según sectores, ramas y empresas de producción y servicios.
b) Vincular las acciones sindicales, revindicativas en materia de empleo, salario e ingresos,
con la demanda de una mayor participación de los trabajadores en la gestión de la empresa.
c) Desarrollar plataformas de acción sindical en materia de salarios, empleos e ingresos,
estructuradas según el principio de que la fkerza de la clase trabajadora reside en la unidad de
todos los trabajadores.
d) Desarrollar estrategias sindicales socio-politicas para incidir en el mercado laboral a
nivel nacional por rama de actividad, exigiendo al Estado el cumplimiento de su rol regulador en la
economía a través de la promoción a la inversión, expansión del empleo y fijación del salario
mínimo.
Sobre esta estrategia sindical es posible mencionar las diversas demandas que existen entre
empresa y trabajadores. Se habla de un proceso de modernización en la cual la reconversión de la
producción y la flexibilidad del mercado de trabajo necesitan una defensa que proteja los derechos
laborales.
Aquí entra el papel de los sindicatos, y la negociación que pretenden es precisamente con
los empresarios. Con éste modelo la introducción de nueva tecnología acelera los cambios en el
proceso productivo.
3. 10. El Contrato Colectivo de Trabajo (CCT).
La contratación colectiva se establece como un derecho de la clase trabajadora, en
términos de lo que establece la legislación laboral y los reglamentos del artículo 123
Constitucional y la LFT. Dentro de las relaciones de trabajo se considera a los sindicatos, huelgas
y contratación colectiva como ejes principales para entender su historia.
102
I
5
3
4
3
3
9
''El contrato colectivo nació de la necesidad económica de establecer condiciones
semejantes de trabajo para realizar el propósito de que a igual trabajo debe corresponder salario
igual" (Ley Federal de Trabajo, 193 l. Naturaleza del Contrato Colectivo de Trabajo). Por
definición expresa de la Ley, el contrato colectivo es aquél en que se establecen las condiciones
según los cuales debe prestarse el trabajo en uno o más centros de trabajo o empresa.
L a ley establece la facultad de los factores de l a producción, entendidos estos como Capital
y trabajo, para dictar en ellos normas que regulen las relaciones de trabajo. El contrato colectivo
es entonces una fuente generadora del derecho, ya que se impone como obligación que siempre se
pacte en condiciones superiores a las ya establecidas en caso de revisión.
L a Ley establece la irrenunciabilidad de los derechos de los trabajadores, cuando se vean
afectados individualmente sus derechos, podrán acudir a los tribunales para reclamarlos.
Los sindicatos carecen de la dificultad legal para disminuir las condiciones individuales de
trabajo que impliquen un beneficio para los trabajadores y que éstos tengan el derecho a
reclamarlos.
En la actualidad no se recurre a éstos recursos por temor a represalias, las cuales van desde
sanciones hasta el despido. La revisión de los contratos colectivos se establece por conducto de un
convenio aprobado por las autoridades del trabajo, las cuales tienen la obligación de vigilar que no
se establezcan en condiciones diferentes a las anteriormente pactadas.
Sin embargo, en el sexenio de Miguel de la Madrid y en el de Salinas de Gortari, los
contratos colectivos han disminuido, empezando por los de las grandes empresas paraestatales y
descentralizadas, en lo que se han minimizado las condiciones de trabajo, dejando al patrón la
libertad de fijarlas, desde la admisión de los trabajadores hasta la libre movilidad en el proceso
productivo.
Los cambios se dan muchas veces fuera del proceso de revisión, presionando las
autoridades del trabajo a los sindicatos para admitir las nuevas condiciones, contratando
abiertamente su obligación constitucional. L a disminución de los derechos de los trabajadores en
los contratos colectivos, iniciada en las empresas paraestatales, hoy se ha generalizado a las de la
iniciativa privada lo que ha provocado situaciones críticas para la clase obrera que ha perdido
derechos históricamente conquistado^.^'
97 Ver en. Vivero Reyes. Jorge: "Bilateralidad y Productividad". México, 1993. p. 198.
1
I
El contrato colectivo no es solamente la mayor conquista realizada por la vía sindical, sino
también la expresión de solidaridad entre los diversos elementos de la producción. En el CC reside
la garantía del orden de la disciplina y de la armonía de las relaciones entre capital y el trabajo
(Mario de la Cueva).
El derecho colectivo de trabajo se desdobla en varios principios e instituciones: la libertad
de coalición fluye hacia la asociación profesional y la huelga. Aquélla es la unión permanente de
los trabajadores, en tanto que la huelga es el procedimiento que permite obligar a los patronos a
aceptar una regulación equitativa de las relaciones de trabajo; y el derecho del contrato plasmar6
dicha reg~lac ión .~~
. El contrato Colectivo establecido en l a Carta Magna y su Ley reglamentaria,
específicamente en el título séptimo, de los artículos 386 al 421, tiene como principios centra le^:^^ (Ver Anexo Número 5)
En el contrato colectivo se plasman los derechos que van adquiriendo los trabajadores
mediante su trabajo y sus luchas, tanto en el aspecto económico como en las cláusulas
administrativas, donde se pactan las condiciones de trabajo. Un CCT a la vez refleja el desarrollo
económico y social de una empresa y de los trabajadores que en ella presten sus servicios.( Ver
Anexo Número 6)
3. 10. 1. Contratación colectiva en la actualidad.
Durante mucho tiempo el movimiento obrero puso mayor atención en los aspectos
económicos, en las cláusulas administrativas que tiene relación con la productividad y con la
relaciones obrero patronales. Actualmente, con la modernización el CCT, se pone en apuros a los
trabajadores para encontrar l a forma de pactar las nuevas condiciones de trabajo que impulsan la
estrategia neoliberal.
98 Derecho Mexicano del Trabajo, tomo 11, México, 1967. pp. 220-226. 99 Corroborar en, Contreras Montes, José Luis: “La productividad y la contratación colectiva”. México, 1993. pp.
227-228.
Se habla que para llegar a formar parte del “primer mundo”, es necesario elevar l a
productividad y calidad de nuestros productos y que para lograrlo es necesario flexibilizar y
modernizar l a planta productiva del país. así como dejar que las fherzas del mercado actúen, y
retirar al Estado de la producción, dejándolo solamente en áreas administrativas, para lo cual debe
reprivatizarse la mayoría de las actividades que anteriormente controlaba el mismo.
Esta estrategia neoliberal también revierte sobre los sindicatos atacando ofensivamente los
derechos colectivos de los trabajadores; el sector patronal considera a los sindicatos como un
obstáculo por su contratación “rígida”, baja productividad, procesos de trabajo caducos,
tecnologías obsoletas, etc.
Es necesario “modernizar la legislación laboral creando un nuevo tipo de trabajador más
eficiente y productivo combatir a los promotores de la inmovilidad laboral: los sindicatos y su
contratación colectiva . 7 7 100
En ntnferia IahornI se pretende debilitar el papel de los derechos colectivos
(sindicalización, contratación colectiva y huelga) como condición para insertarse en l a nueva
productividad impuesta de acuerdo con los intereses de las empresas transnacionales.
Han afectado derechos como el del empleo, salud, educación, vivienda, salario
remunerador, la libre sindicalización, el derecho de huelga y l a contratación colectiva entre otros.
A partir de ahí, lo que ha caracterizado a la estrategia es el cierre ilegal de empresas
declaradas en quiebra para después reabrirlas con nuevo personal, salarios y prestaciones mínimas
dentro de lo que establece la Ley. Esta forma ilegal de operar se ha visto en casos como
Aeroméxico, Ingenieros Azucareros, CISA, ACROS, Conasupo, Renault, Ruta 1 O0 etc.
La política de reajustes masivos de personal es otra forma de atacar los derechos colectivos
de trabajo; con la modernización muchos de los trabajadores calificados han tenido que sufrir los
despidos.
El derecho de la contrnfacicin colectiva se ha debilitado desde el momento en que se
permitió la renuncia a derechos adquiridos y pactados, lo cual posibilito que los patrones tuvieran
acceso a la revisión y, como ya se menciono anteriormente, ello es una violación al CCT cuando
no se llaga a un acuerdo bilateral, debe existir acuerdo entre ambas partes.
I
A los patrones les conviene por que así pueden imponer y modificar unilateralmente
condiciones de trabajo. avanzado en la libre y arbitraría movilidad de los trabajadores,
desapareciendo los escalafones y haciendo nula la estabilidad en el empleo.
Por otra parte la libre sitldicalizacidn es otro derecho que se ha visto trastocado por las
autoridades del trabajo, violando en cualquier momento las disposiciones legales establecidas. No
aceptan los registros de los sindicatos por que no les conviene.
Para el sector patronal como para el gubernamental, lo mejor sería pactar entre ambos sin
que hubiese obstáculos. El derecho de huelga ha quedado reducido, ya sea por medio del cierre de
las empresas o de las ilegales calificaciones de inexistencia impuestas políticamente por la STyPS.
Modernizar la legislación laboral implica crear un obrero “universal” o “polivalente” de
manera que el patrón pueda disponer en cualquier momento del trabajador, sin tomar en cuenta los
escalafones que le pertenecen obstruyéndole la aspiración a una ascenso. Lo cual le obstaculiza
mejorar económicamente dentro del proceso del trabajo, puesto que se estarían eliminando las
categorías y labores especificamente pactadas.
Se rompe con el principio de la estabilidad en el empleo, a fin de poder escoger la mejor
mano de obra y dejar a un lado la que no les sirva. Se pretender contratar a los más jóvenes y
calificados, pudiendo rescindir sin obstáculos legales en cualquier momento a los trabajadores
realizando ajustes masivos sin respetar la Ley.
Se debilita el derecho colectivo de trabajo, disminuyendo al mínimo la participación
sindical en el proceso de producción. Se crean la participación creativa y propositiva de los
trabajadores y no hay participación sindical, lo cual aleja a los trabajadores de la concertación para
la productividad.
Es imperdonable que se exija a los trabajadores elevar su productividad cuando el sector
empresarial no participe en discusiones como la del cambio. Según las estadísticas solamente el
5% de las empresas cuenta con tecnología moderna o con posibilidades de adquirirla rápidamente.
Las empresas están adaptándose a las condiciones de la competencia mediante la mayor
explotación de sus trabajadores.”’
La discusion en 1989 acerca de la posibilidad y necesidad de modificar la Ley Federal del Trabajo
se centró en la modificación de relaciones contractuales, pasando a un modelo confrnctl~al,flexi~~e
con unilateralidad empresarial en las decisiones del trabajo respecto a los sindicatos.
1 ) Flexibilidad en el proceso de trabajo.
-Definición amplia de las finciones de las categorías.
-Movilidad interna.
-Elasticidad de la jornada diaria, semanal y anual.
-No injerencia en intensidad, calidad, productividad y métodos de trabajo.
-Escalafón por capacidades.
-No inserción sindical en la decisión de cambios tecnológicos o de organización del
trabajo.
2) Flexibilidad en el empleo.
-Libertad para subcontratar.
-Libertad para emplear o desemplear.
-Libertad para reajustar personal de base.
-Libertad para crear categorías de confianza o aumentar el número de empleados.
3) Flexibilidad salarial.
-Salario por hora y en función de productividad y de una jornada flexible.
En cambio, en el modelo anterior la intensidad de la flexibilidad de los contratos colectivos
en México ha estado en función de la importancia de la productividad de la empresa en cuanto a
su permanencia en el trabajo; el tipo de estrategia empresarial con respecto a la productividad, la
política laboral estatal con respecto a las empresas exportadoras por el Estado; la estrategia
sindical con respecto a la flexibilización.’02
I o1 Ver, Contreras Montes. José Luis: “El proceso de modernización productiva y la contratación colectiva” México, 1990. p. 232. I ” ’ Confrontese en, Esteve Díaz. Hugo: “Los riesgos de la flexibilidad’, ed. en Entorno no 92, abril de 1996, pp. 26- 28.
Los riesgos en la flexibilidad que actualmente enfrentan las empresas es que no están
preparadas psra las exigencias del modelo económico; en algunas de la empresas su tecnología no
ha sido renovada, sus modelos administrativos son pocos eficientes; la capacidad de producción es
baja en comparación a la demanda, todo lo cual no permite su entrada a la mercado libre.
Pues bien los cambios no sólo giran sobre las bases de una nueva cultura productiva al
interior de cada empresa, sino que hace falta redefinir paralelamente las bases económicas,
políticas y sociales que dirigen el rumbo de este país.*O’ Si bien es necesario construir una nueva
cultura laboral y un nuevo proyecto nacional incluyentes.
3.11 L a cultura Laboral
Este pacto o acuerdo resulta importante por varias razones: recordemos que el sector
sindical representado por la CTM, había logrado pactar sólo en 1945 entre la CONCAMIN y la
CANACINTRA. El objetivo fündamental de ese pacto, “obrero industrial”, consistió en limitar las
demandas laborales para favorecer el crecimiento industrial; ahora la nueva cultura laboral se pacta
en un contexto diferente, cuando México vive una de las crisis económicas más profündas, y existe
una gran cantidad de desempleo, la evidente quiebra de numerosas empresas micro, medianas y
pequeñas, y algunas grandes; un deterioro muy drástico de los salarios, de las prestaciones, de los
servicios; en su conjunto se vive un proceso de descomposición social, política, económica y
cultural bien marcada. (Ver Anexo Número 7).
Se firma el “Acuerdo para una nueva cultura laboral” entre la Confederación Patronal de
la República (Coparmex), la Confederación de Trabajadores de México (CTM), el Consejo
Coordinador Empresarial (CCE), el Consejo del Trabajo (CT) y el Presidente de la República; el
cual incentivó entre los dirigentes empresariales y sindicales, partidos políticos un debate entorno a
esta propuesta.
‘ ( n Ibid. p 108.
I O8
En los objetivos planteados se consideró:
-La dificil situación por la que pasa el país, basándose en la convicción de que la crisis solamente
se puede superar sí permanecen unidos y trabajando por le bien común.
-La urgente necesidad de conservar y crear empleos, y de mejorar los niveles de vida de los
trabajadores. lo que implica la sobrevivencia y el mejoramiento de las empresas.
-Para construir un futuro más promisorio es necesario fomentar los valores del trabajo, la
solidaridad, la honestidad, la competitividad la calidad y la disciplina.
Lo que se discute es la forma en que se concibe la relación capital-trabajo, para modificar
las prácticas laborales vigentes. Para generar e impulsar nuevas formas de relación y cultura
laboral entre los actores productivos en los contextos de mayores niveles de competitividad en el
mercado nacional e internacional a partir de la productividad y la calidad que, no es nada fácil,
sino, todo lo contrario, es complejo. AI respecto, Carlos Abascal Carranza afirma:
Estamos ante el gran desafio de cambiar la visión economisista. de como se entendía la relación
obrero-patronal en la empresa por una concepción mucho más humana, más integrada, y al mismo tiempo
más realista del trabajo y de las relaciones laborales; sin embargo. el reto es que se pueda entre
trabajadores y empresarios, dirigentes patronales y líderes obreros, conjuntamente con los obreros impulsar
una nueva cultura sobre las relaciones productivas que. al mismo que enfática en la productividad, rescaten
la promoción del trabajo humano como esencial a la actividad económica.’0“
Es importante mencionar las transformaciones tecnológicas, los avances de los procesos
productivos y las nuevas formas de organización del trabajo, se requiere un nuevo tipo de empresa
y de sindicato; es decir, una nueva cultura productiva que apunte a un cambio en las actitudes,
responsabilidades, las formas de conducta y las rutinas de trabajo en los individuos y las empresas.
Para tener claro este esquema, sociedad-empresa, será importante definir las tareas
correspondientes a cada ámbito.
Las empresas deben privilegiar los cambios técnicos y el factor humano como factor
hndamental para alcanzar una nueva cultura productiva; la necesidad de crearla involucra a la
sociedad en general, pero específicamente al Estado, empresa y sindicatos.
I o1 Wilde, Roberto et al: “Nueva cultura productiva. Estrategias empresariales y sindicales”. ed. en Cotidiano no 80. nov-dic de 1996. p. 107.
109
Para definir que tipo de Estado se requiere para ello y que responsabiliades y compromisos
adquiere ante la producción, educación y salud etc., las empresas necesitan actuar bilateralmente
con los trabajadores para poder superar las viejas prácticas verticales tradicionales; la
organización de los trabajadores, al igual que los otros actores enfrenta retos que tendrán que
discutir y superar entre sus agremiados para democratizar la vida sindical y participar en los
cambios desde su perspectiva en un todo nacional.
Gran parte de esta situación se le atribuye a las políticas neoliberales ejecutadas en el
sexenio salinista, así como a la enorme corrupción que está integrada a las estructura del poder; a
la gran confrontación de los grupos del poder; también puede atribuírsele al concentrado poder en
la República, a la permanencia de un partido de Estado; en el conjunto de este escenario se pacta y
se firma el acuerdo sin tomar en cuenta la situación material y la poblacional, l a cual se ve
depauperada con menos ingresos y muchas necesidades por cubrir.
En estas condiciones la propuesta de los empresarios y sindicatos está orientada a extender
la política del trabajo menospreciado y mal pagado tal y como se ha venido dando en los últimos
años. En el fondo se orienta a extraer el mayor beneficio de los trabajadores mexicanos, para
favorecer a las empresas y particularmente a las transnacionales. Por ello detrás de los pactos y
acuerdos económicos está el deterioro de la fuerza de trabajo.
La cultura laboral no puede entenderse al margen de lo que sucede en los espacios
productivos, en la reestructuración de los mercados de trabajo y en la dinámica sindical. Con la
relación al espacio productivo, la cultura laboral se relaciona con la tecnología, con la
organización del trabajo y con las relaciones labora le^.'^^
Es l a organización del trabajo el elemento base que permite entender la cultura laboral. En
el caso mexicano se puede observar que pocas empresas han emprendido el camino de las
innovaciones organizacionales, se intenta generalizar una nueva cultura en el mundo del trabajo.
Esta estrategia empresarial a nivel discurso permite observar la orientación del cambio
industrial, los intereses empresariales y las acciones estatales.
105 Ver en, Leyva Piña, M.A y Mendoza: “El acuerdo para la nueva cultura laboral: del concepto a la estrategia”, ed. en Cotidiano no 80, nov-dic de 1996, pp. 11. 15 y 20.
El incremento de la productividad y la elevación de la calidad van a seguir basados en el
esfilerzo de los trabajadores. En consecuencia se puede proponer que la reestructuración de
capital en el pais, va más allá del éxito de alguna empresa, y se apoya en la degradación del
trabajo.
Ante el avance de las estrategias empresariales, tanto en el discurso como en la prktica, es
necesaria la elaboración de alternativas sindicales que incluyan puntos principales del mundo del
trabajo y que las modas quedan sujetas a éste.
Antes de firmar los acuerdos sobre cultura laboral es necesario reflexionar, discutir y
problematizar desde los sindicatos a las formas de organización del trabajo desde el piso de la
fábrica hasta la política industrial y laboral que se impulsa.
L a búsqueda de alternativas sindicales implica pensar en los problemas del trabajo. Con el
corporativismo, los sindicatos se apropiaron de una cultura estatal desde la cual formaron
concepciones sobre la sociedad, el poder y el trabajo. Actualmente, se intenta unir a los sindicatos
para concebir, diagnosticar y resolver problemas desde las culturas y estrategias empresariales.
Se puede estar de acuerdo con los empresarios, entender el proceso de trabajo de creación
y recreación de cultura y de las relaciones de poder.
Desde los sindicatos se puede impulsar a recuperar las tradiciones costumbres, símbolos
valores y la memoria histórica que hace de los trabajadores actores con identidad distinta a la del
capital; los sindicatos tienen un camino que recorrer y un reto que enfrentar, cómo piensan así
mismos a partir de esta reflexión, cómo pensar sindicalmente al Estado y a las empresas.
Ante las políticas del libre mercado el sindicalismo se encuentra con un nuevo problema
para analizar y proponer acciones que definan su quehacer de manera prospectiva, ante las nuevas
condiciones que marcan ei desempeño de las organizaciones sindicales, frente a las
transformaciones de las configuraciones económicas, así como de los procesos de cambios
tecnológicos y organizativo del trabajo, de los regímenes políticos y de las formas de organización
social y de los valores sociales y culturales.
En México, desde hace más de quince años, se iniciaron un conjunto de cambios en los
centros de trabajo, así como y en las relaciones laborales. Los cambios han sido para aumentar la
productividad, la calidad, la eficacia y la competitividad.
1 1 1
Frente a estas acciones implantadas, los sindicatos se encuentran ante desafios de
representantes de los intereses de los trabajadores y, en su papel de gestores de los derechos
laborales y sociales, los sindicatos no sólo carecen de una estrategia sindical actualizada y a largo
plazo para enfrentar las demandas tradicionales como el empleo, el salario, la seguridad social,
que, por demás, hoy parecen no reales: el corporativismo sindical, la nueva cultura laboral y las
competencias laborales.
Se requiere de nuevas formas de acción sindical que preserven la autonomía de las
organizaciones, intervenga en la definición de políticas de Estado para orientarlas a favor de los
trabajadores y de la sociedad.
Cultura nueva que tendrá que enlazarse en un nuevo pacto social y politico, sustentado en
relaciones y estructuras democráticas y con múltiples expresiones: acuerdos sobre capacitación,
empleo, calidad y productividad, mejoramiento de las condiciones de vida y de trabajo,
introducción de nuevas tecnologías, todo lo cual supone la participación de la clase trabajadora en
el sistema politico y
Es l a urgente necesidad de crear empleos, mejorar los niveles de los trabajadores, lo que
implica l a sobrevivencia y el mejoramiento de las empresas, a través de un diálogo propositivo
para la discusión de la nueva cultura laboral.
Si la Cultura Laboral está relacionada con el cambio tecnológico, con las relaciones
laborales, podemos agregar que a partir de tales o cuales estrategias no se logró reformar la Ley
Federal de Trabajo, porqué, pues simplemente por que no se puede ajustar una Ley a un modelo
socioeconómico en una economía globalizada, en lugar de generar empleos y combatir el grave
problema, se vislumbra lo contrario con las reformas flexibilizadoras el empleo se incrementa y el
empleo precario también; entonces de cuales rigideces se habla en cuanto a la Ley actual para
impedir la modernización de la planta productiva lo que se requiere es que cuando se pacten todo
tipo de cambios las partes estén de acuerdo y que esos cambios no impliquen renuncia de
derechos.
Finalmente la reforma a la legislación laboral h e una de las pocas Breas que no ha sido
reformada por la política neoliberal y un propósito frustrado de la administración Salinista; Hoy
día se pretende un nuevo dialogo entre los actores sociales para su debate.
112
Anexos.
Anexo 1
Política neoliberal.
Política Neoliberal del Gob. I1 a
afectado:
/ la. Al retirarse como empresario de la economía dejó su causa en manos del sector privado. Para industriales como los de nuestro país, es más fácil ganar dinero a través de la bolsa de valores sacando las divisas al extranjero o invirtiendo bienes raíces, que invertir en proyectos de producción. 2a. Los gobiernos, además de retirarse de las decisiones empresariales, reducen sus inversiones públicas en infraestructura para atraer el capital extranjero que produce para la exportación.
Inversiones prodttctivas
La primera es directa; al reducir los gastos el Gobierno disminuye la demanda, ya sea directa o indirectamente; a través de los sueldos pagados a los empleados.
La segunda es indirecta; al adoptar como única
medida resulta inaceptable debido a que las empresas mexicanas no están en condiciones de exportar por que no alcanza los estándares de la competitividad internacional.
Demanda interna por dos vías vía de crecimiento la exportación. Esto en gran
113
FLEXIBILIDAD SALARIAL.
FLEXIBILIDAD NUMÉRICA.
FLEXIBILIDAD
GANIZATIVA TECNICO-OR-
FLEXIBILIDAD DE LA
JORNADA DE TRABAJO.
Anexo 2
Formas de flexibilidad.
FLEXIBILIDAD FLEXIBILIDAD (- lNTERNA ) EXTERNA ) * Variación de los salarios
salarios. en hnción de los * Desindización de los
*Reducción de las resultados de la empresa. cargas sociales patronales.
*Adaptación de los efec- *Trabajadores internos. tivos del personal a la fluc *Trabajo a distancia. tuación coyuntural. *Trabajo a tiempo par- *Contrato de duración li- cial. mitada o para una tarea definida.
*Independientes.
"Polivalencia. *Compartir el trabajo.
*Subcontratación.
"Recualificación "Reciclaje (formación).
semana. "Trabajo de fines de
formación. "Trabajo nocturno. *Alternancia trabajo- *Horario continuo. jornada de trabajo. horarios. *Reducción de la *Modificación de los
Fuente: Datos tornados del artículo "Efectos económicos y sociales de las nuevas tecnologías" 1994. p8S
I14
Anexo 3
Propuestas de la COPARMEX.
2 1 , Permitir que las partes establezcan libremente la duración de los contratos colectivos de
traba-io.
2. 2. Flexibilizar los casos de contratación por tiempo determinado.
2. 3. Propiciar la utilización de servicio de trabajadores en actividades múltiples,
independientemente del puesto asignado. .,
2. 4. Posibilidad de que las partes (trabajador y empresa) convengan en reducir o ampliar la
jornada, la modificación de turno, del puesto, de los horarios y de los descansos.
2. 5. Establecer el sistema de aprendizaje de los trabajadores con pago proporcional al de los
puestos de planta calificados.
3. I , Flexibilizar el principio de la estabilidad en el empleo
3 . 2. Simplificar los procedimientos de retiro, revisando los conceptos de indemnización, retiros y
salarios caídos.
3. 4. Que los trabajadores y la empresa puedan negociar los retiros de los trabajadores.
3. 8. Establecer en cualquier caso, de terminación del contrato de trabajo, indemnizaciones
razonables que no afecten a la empresa nacional, dejándola en desventaja con la competencia del
comercio exterior.
3. 9. Pago de compensación (no indemnización) por mes laborado, cuando se den por terminados
anticipadamente los contratos de tiempo y obra determinada.
4. I . Modificar los sistemas de indemnización, haciéndolos congruentes con la capacidad de la
empresa.
6. 2 . Establecer el salario por hora, con base en el trabajo efectivamente realizado.
6. 6. Pago equitativo del salario con base en la productividad, antigüedad, servicio efectivamente
prestado, resultados, asistencia y la calidad demostrada en el trabajo de cada persona.
6. 7. Pago de salario de conformidad con los resultados y la situación de la empresa.
8. I . Establecer un procedimiento basado en los principios generales del derecho.
8. 2. Establecer la igualdad procesal y derogar la carga de la prueba a! patrón.
8. 4. Establecer sanciones a trabajadores y sindicatos cuando incurran en denlandas
improcedentes y en huelgas contrarias a la ley.
1 I S
8. 7. 8 . 8 . Separar la conciliación del arbitraje y establecer un procedimiento sumario. previo a la
aceptación de la demanda.
8. 9. Establecer el arbitraje obligatorio, a solicitud de cualquiera de s u partes, en materia colectiva.
8 . 10. Derogar la ampliación de la demanda individual.
8 . I I . Suprimir la suplencia de la deficiencia de la demanda del trabajador.
8 . 13. Establecer el interrogatorio libre en la prueba testimonial.
8 . I í ’ . Fi-jar la prescripción en 30 días.
8 . 2 1 . La falta de comparecencia de cualquiera de las partes a la primera audiencia, ocasiona que se
tenga por desisto al actor y por ternlinado el juicio.
8 . 22. Restablecer el principio de quien afirma está obligado a probar
9. 2. Establecer un registro público nacional de sindicatos, descentralizando los procediniientos a
las entidades federativas.
9 , 6. Establecer un procedinliento sumario para resolver los conflictos colectivos encaminados a
la huelga.
9. 7. Eliminar las huelgas por solidaridad.
9. 8. Que se puedan solicitar incidentes de inexistencia de la huelga tantos como se desee, a efecto
de demostrar la falta de la mayoría.
9. 12. Analizar previamente sí hay mayoría de trabajadores, en demandas de titularidad del contrato
colectivo y de la administración del contrato ley.
9. 13. En caso de violencia de los trabajadores o sus representantes, concluir de oficio la disputa
sobre la titularidad.
9. 14. Permitir la intervención del sindicato sólo en los conflictos de orden colectivo.
9. 16. En caso de huelga o de juicio sobre la titularidad, requerir el acta de la asamblea respectiva
con nombres y firmas de los trabajadores.
9. 17. La personalidad de los sindicatos debe acreditarse satisfactoriamente.
9. 22. Regular de manera especial la huelga en las empresas de servicios.
9. 23. Revisar los objetivos de la huelga y señalar de oficio el recuento.
Propuestas de la Coparmex. Datos tomados del artículo de José Dávalos “Movimiento Obrero ante la
Reconversión Productiva“? pp. 248-258.
Anexo 4
Propuestas laborales.
Se deben corregir algunas cuestiones contenidas en la ley vigente que inclusive contradicen
los testos constitucionales “libertad sindical del trabajador”.
Procurar flexibilizar la relación obrero-patronal, eliminando la extrema rigidez de la ley
vigente, entre cuyos aspectos están la movilidad fimcional y geográfica del traba-jador.
Se debe reglamentar de manera más sencilla la contratación de trabajadores telnporales
“aumento del empleo”.
Racionalizar las causales de rescisión del contrato de trabajo para evitar que sean dificiles y
formalistas y que, en buena medida, propicien la irresponsabilidad y la improductividad.
Establecer una limitación en cuanto a la responsabilidad de los juicios laborales por el pago
de salarios caídos, que actualmente es indefinida, no obstante se demuestre que el traba-jador labore
en otro empleo y percibe salario.
Se debe establecer que los días de descanso obligatorio se traslade en s u disfrute al lunes
inmediato anterior para no entorpecer la continuidad del trabajo.
Se debe clarificar conforme a la Constitución el concepto de salario, ya que la ley tiene
nueve definiciones diferentes.
En materia de participación de utilidades ésta se debe reglamentar para hacerla congruente
con la situación económica de cada empresa.
Se debe reestructurar el capítulo de capacitación, suprimiendo cargas burocráticas que
impidan su desarrollo.
Se debe desaparecer el escalafón ciego con base a la antigüedad y restableccr el escalafón
segiln la capacitación y adiestramiento de los trabajadores.
Se debe modificar la reglamentación de la prima de antigiiedad haciéndola más justa y
equitativa.
En las primas o comisiones a los agentes de comercio, se debe evitar la simulación en
perjuicio de trabajadores auténticos.
Se debe establecer un registro nacional de la contratación colectiva para un mejor
conocimiento de publicidad de los numerosos contratos colectivos de trabajo convencidos de que la
productividad y la competitividad así lo exigen.
117
f
Y
Anexo 5
Principios del CCT.
I " Ileglantentar las condiciones de trabajo, los salarios y prestaciones. derechos y obligaciones de los traba.jadores bcio el
I)ri1lcil)io de establecer derechos superiores a los mínimos qne establece l a 1 , F l (art. 386-394), ya que 10s CC'I' S o n para mejorar
l a I,ev v existe l a prohibici6n de que no deben de contener rentrncia de derechos que no pueden pactnrse con menores tlerecllos
(Irle el anterior
2" I(egla~nelltar las condiciones en que deben de darse los servicios de los trabajadores, derechos Y obligaciones; especificar
cntcgoríos y las funciones de cada Lnla mediante los escalafones, condiciones y medidas de higiene y seguridad, de capacitacihn
y adicstrarniento.
3" Tener períodos perfectamente estipulados para ser revisados, siendo facultad exclusiva la revisicin de la parte sindical, y no
del sector patronal sino estaría violando los derechos de los CCT.
4" I,os C ' C ' I ' por SII natr1rale7.a jurftlica se pactan de fonna bilateral E l acuerdo entre las partes es en todos los sentitlos para fijar
salnrios, prestaciones econ¿)tnicas, las condiciones admillistrativas, las diversas condiciones mixtas v los carnbios en la
contratacibrr colectiva.
5" 1,a contrataciOn colectiva es obligatoria, no voluntaria, para los patrones como norma protectora de los trabajadores y s u
organixaciór~ sindical (art. 387).
6" Mantiene el principio delnocriitico de la mayoría colno condición para su aceptacicin y fonnulacibn, ya que es estipulando que
l a revisih debe ser con el acuerdo de la mayoría de los trabajadores,
7" Sel7ala el principio de titularidad sindical del CCT, l a proteccih de la materia de trabajo, para evitar que los patrones
tnantengan otras fuentes de trabajo con trabajadores distintos y con menores prestaciones (art. 395 y 396).
8" Se establece claramente quiénes son los titulares de los contratos y qniénes tienen la personalidad jmídica para representar a
los trabajadores ante los patrones.
9" En el caso del Contrato Ley, guarda los mismos principios fkndarnentales con la variacicin que se establece para cada rama
industrial, con la finalidad de igualar condiciones econcitnicas y de trabajo para todos los trabajadores de esa rama.
I O " Tanto los Contratos colectivos como los Contratos I q , tienen que ser representados y registrados ante las autoridades
laborales, y en el caso del contrato Ley tiene la participacicin del Presidente de la Repílblica siendo los reqnisitos muy claros y
concretos.
Fuente: 'I'otnado de "T)erecho mexicano del trabajo", t. IT, México, I967
Anexo 6
Contenido de los contratos colectivos.
I - I<nlrc l o s individrtales se encnentran prestaciones estrictamente personales, que van desde vacaciones. agninaldo. ahorro.
iornad:l tlc tratyjo. sancioncs, pennisos y otras que estrin relacionadas con el co11jnnto de los trabajadores de l a empresa como
aspectos escalafonarios, pnestos, departamento, fnnciones y varios m,is
2- Prestaciones de orden colectivo que benefician al conjunto del sindicato, cotno aportaciones de los empresarios para becas;
deporte, porcent3jcs por la realizacihn de obras de contratacihn de obreros no sindicalizados y el descuento de cuotas sindicales
ordinarias y extraordinarias, así como aportaciones a fideicomisos.
3- Se cstablecc~~ las cl6rtsr1las dc exclusiOn, sea por admisihn o separaciOn (le trabajadores eventuales o de hase. l o y e da ;I los
cotnitts sindicales 1111 control sobre la materia de trabajo y poder político para decidir sobre la contratacihn o separacibn de l o s
trakljadores. 1,os trabajadores eventuales se pneden admitir mediante l a matliplllaciótl de sns necesidades.
4- 1 , o s C ‘ C I ‘ ir~clrlyen escalafones -a través de los crtales se regulan los ascensos y ca~nbios departamentales- fi~nda~nentados en
la antig(\edad, en el departamento o centro de trabajo
Se fijan las obligaciones patronales relativas a la capacitacihn y adiestramiento de los trabajadores que propicien el ascenso y
nmdidad en operaciones o puestos distintos.
5- Los CC’I’ establecen los tabuladores de salarios con sistemas de pago específicos: por destajo, fracciones etc. También se
fijan los incentivos y las tablas de producción, entre otros factores.
6- lil pago del salario debe ser con base en el tiempo de trabajo, independientemente de lo producido. bajo el principio de qlle a
trabajo igual, salario igual.
7- Iln los CC’I‘ se acuerda l a fornlación de diversas cornisiones mixtas, de patrones y tlahajadorcs: higienc y seguridad
escalafonarias, disciplinarias, hasta la productividad que por nlncho tiempo ha servido para regular las cargas de trabajo. La
1.ey establece que los CCT podrá establecerse la organizacihn de comisiones mixtas para el cumplimiento de funciones sociales
o ccorl6nlic;ls
Datos tomados del articulo “Proceso de Modemizacihn Productiva y la Contratacihn Colectiva” de Viveros Reyes, Jorge México, 1993, pp. 198-200.
I19
Anexo 7
Acuerdo para una nueva cultura laboral.
L
i
i
Y
I
b
1 ) E l trabajador hrnnano tiene 1111 valor ético y trascendente que debe ser respetado
y protegido por l a sociedad.
2) E l fi~ndamento clue determina el valor del trahajo es. e11 primer lugar. la
dignid:rtl de pct-sona de qttién lo e.jccuta, lo cual detennina su primncia sohre las
cos:ts. sistemas econcimicns y administrativos.
3) 111 tral)a.io ademhs de ser el medio legitimo de manutencihn del ser Iwnano y s u
fimilia, debe ser también el medio de desarrollo integral de la persona .
4) El tralx+ es fuente de derechos y obligaciones para el hombre. I n s derechos
deben ser respetndos y promovidos. Las ohligaciones deben ser cumplidas con
espiritu de responsaldidad y autoexigencia.
S ) ] , , I lugar mayoritario del traba-jo en la actualidad es la empresa, donde confluyen
tra1)ajadores. directivos e inversionistas. l a cual no podría existir sin ellos. 1,a
solidaridad entre sus integrantes y s u decidida parlicipacihn favorecen la
productividad. h i la clave para avanzar en la productividad y la calidad para l a
competitividad radica sobre todo en l a coordinacihn de los sectores productivos.
Asimismo se quiere promover l a adopción de medidas creativas y encontrar salidas
i
i
i
ir
pr5cticas > ’ eficaces a los obsticulos
a
CTM-COPARMEX 6) Para poder elevar el nivel de vida de la sociedad e!
necesario la productividad, que es un proceso en e
que interviencn numerosos factores. y que dehc
permitir una rem~tneracihn mejor a las personas q r t c
intervienen pnm lograrlo FI traha.jo qne gener:
desarrollo es garantía de la paz social.
7) 10s esfilerzos por asegurar mayores beneficios a lo!
trabajadores, deben tener siempre en cuenta 1;
sitnacihn econhmica general del pais y de las enlpresal
et1 particular.
8) I s globalizacihn debe impulsar la creatividad, I:
responsabilidad social, la imaginaci6n de l o
mexicanos para adoptar nna nueva cultura lahoral qu’
pemlita alcanzar el pleno empleo cot1 productividad !
calidad para l a cotnpetitividad.
9) 1.a nueva cultrlra laboral debe estar hasada en e
dialogo, l a concertacicin y l a unidad de esfiterzos entr,
las organi7acioncs sindicales y los directivo
empresariales , orientada siempre a la creación ;
conservacihn de la empresa, a la conservacihn ’
pronmcihn del empleo.
1 O) E l tema en que deben coincidir para w a pront
resolucihn organismos enlpresariales. sindicatos
gobierno es el de la justa remuneracih de todos lo
factores de la producción procurando ante todo que S
den las condiciones favorables para l a generacihn d
empleo digno y productivo.
1 1 ) 1,a CTM y la Copinnex están convencidos de I
importancia de impnlsar las condiciones I;~vor:lhle
para el hptinlo desarrollo del trabajo.
Desplegado emitido por la CTM-Coparmex el 26 de Julio de I995
120
CONSlDERAClONES FINALES
Los cambios fundamentales que se dieron en el sistema económico del país, parten del
agotamiento del modelo que durante mucho tiempo prevaleció (sustitución de importaciones). L a
transición al modelo económico neoliberal fue una de las pautas principales para entender la
modernización económica que se gestaba, y los efectos que provocó en los esquemas laborales.
Esta modernización se baso en reacomodar el papel que el Estado venía desempeñando
frente a la economía y en cuestiones sociales. Al principio, el Estado fue u n protector de los
grandes empresarios, hasta el incumplimiento de sus deberes. Ahora la tendencia es hacia la
libertad de acción empresarial y patronal que, anteriormente, estaba restringida; ya no se podían
representar los mismos intereses a través del Estado, por lo cual éste tuvo que restringir sus
funciones (Estado mínimo).
En la actualidad la participación que tiene el sector empresarial, tanto en lo político, social
y económico, es más activo. Como lo demuestra esta investigación, el sector empresarial toma en
sus manos la iniciativa para controlar y regir las políticas económicas que México requiere;
desempeña un papel importante en el avance económico y tecnológico, así como en la emergencia
de privatizar los intereses del sector público, hnciones que en un principio le correspondieron al
Estado; además obtuvo nuevos espacios y una mayor injerencia en la política económica.
Esta modernización implicó un cambio en las relaciones económicas y laborales. El nuevo
perfil requerido a partir de la liberación y su adaptación para tener éxito en un ambiente
competitivo, generado por el modelo, busca un cambio en la organización del trabajo, orientado a
modificar las estructuras que anteriormente estaban limitadas, Ello repercutió en los procesos de
producción, exigiendo al trabajador capacidad multifuncional, recualificación en ese “saber hacer
algo”, capacitación y movilidad interna, etc. Se busco implementar un sistema de ralaciones
laborales que respondiera a la nueva política económica, adecuando el empleo a las nuevas
tecnologías y a las nuevas formas de organización del trabajo, de tal manera que estos cambios
apuntaron en beneficio de los empresarios al tener a los trabajadores a disposición para moverlos
de puesto cuando fuera requerido por la empresa (movilidad interna),
121
EI punto central qu'e las propuestas patronales buscaron, fue una flexibilidad capaz de
acceder' a la productividad y a la calidad, elementos que lograrán una competencia dentro de la
globalizacion del mercado. Esta realidad empresarial empezó a encontrar obstáculos dentro de las
exigencias del proceso de modernización, ya que no es posible dar una solucicin a los problemas
que vive el país cuando un proyecto empresarial es delineado por políticas extranjeras, y mucho
menos cuando se implanta un modelo económico -que esta diseñado para países del primer
mundo- de esta indole en nuestra sociedad.
Por otra parte, la estrategia que utilizó el sector sindical, en primera instancia, h e rechazar
cualquier tipo de negociación con respecto a reformar l a legislación laboral; los sindicatos sabían
que las demandas del sector empresarial ponían en peligro los monopolios de agremiación y, sobre
todo, el papel histórico que habían logrado
Los sindicatos se encuentran ante el desafio de la representatividad por lo tanto deben
desarrollar acciones concretas a partir de las demandas de los trabajadores, además deben de
revisar sus estrategias y cambiar su enfoque en hnción de las nuevas condiciones económicas. Ello
debe estar orientado a una mayor productividad y autonomía de sus organizaciones para dar pauta
a la Nueva Cultura Laboral abriendo espacios de diálogo entre el trabajador, el empresario y el
sindicato.
L a s relaciones entre las partes serán siempre cambiantes, ya que los empresarios, como
cualquier otro grupo, presionarán para obtener el máximo de ventajas, El Estado, a su vez, deberá
controlar y manejar esas demandas en knción de los proyectos e intereses nacionales, en otras
palabras, el estado debe ser sólo el arbitro y regulador de la vida social. Mientras que los
sindicatos deben encontrar nuevos caminos para defender los intereses de sus agremiados , sin ]o
cual peligra realmente su sobrevivencia,
Fue menester que los intereses empresariales y las demandas sindicales se acoplarán para el
buen funcionamiento de las relaciones de trabajo. Dicho acoplamiento radicó en que las demandas
empresariales influyeron en el campo de las relaciones laborales, ya que estas son consideradas en
las decisiones gubernamentales; por otro lado, las clases trabajadoras no deben ser excluidas del
acuerdo para formular la nueva cultura laboral.
122
Sin embargo, la Cultura Laboral también tiene que ver con la cultura del ser
humano, es decir tomar en cuenta al trabajador dentro de las decisiones de la empresa. L a cual se
da mediante un dialogo económico entre obrero y patrón. Donde la nueva relación de compromiso
de los trabajadores con las metas de los empresarios, es de involucramiento de los valores que
tienen los trabajadores con la empresa, pero esto puede desaparecer al manifestarse alguna
dificultad con los mandos o al no ver recompensados su esfuerzo, con mejoras salariales,
profesionales o de condiciones de trabajo, En definitiva si las demandas de los trabajadores no son
respetadas entonces es i n W tratar de negociar cualquier cambio, cuando estos están al margen.
Finalmente, esta investigación contribuye con elementos que motivan a la reflexión y a la
elección de mejores propuesta para que México avance hacia una mayor productividad y
competitividad y, claro, a un mejor fbturo para la nación mexicana. Así también sirve para dar
inicio a una serie de investigación en torno a las propuestas del campo laboral. Como es el caso,
por ejemplo, la Legislación Laboral, cambio que se pretendió hacerle y el cual no esta definido
tadavia; es por ello que este proyecto de investigación sigue abierto a las partes interesadas y a
quienes se interesen en esta línea de trabajo.
123
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I26
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