Dirección y edición: Ana Perea y Patricia Lobato.

Asesoras de edición: Isabel Figueroa y Emma Samper.

Ilustración de portada: José Antonio Rodríguez.

Colaboradores: Club de lectura Fnáticos, Paula Cruz, Inmaculada Díaz,

Ángel López, Enrique Martín, Germán Ortega, Ana Rosa Sánchez, José

Luis Sánchez, Guillermo Tessainer, Jonás Torres, René Wegmann.

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Por Ana Perea, profe de Lengua y Literatura.

En Entrevista con un vampiro de Anne Rice, al principio de la historia el

muchacho que va a hacer la entrevista dice:

- A veces entrevisto hasta tres o cuatro personas en una noche si tengo suerte.

Pero tiene que ser una buena historia. Eso es justo. ¿No le parece?

- Sumamente justo- contestó el vampiro.

Y eso es justamente lo que pretendemos desde esta revista: contar una buena historia

porque como dice el lema del blog de nuestra biblioteca Uno llega a ser grande por lo

que lee y no por lo que escribe, Jorge Luis Borges. (Un poco de publicidad nunca viene

mal, ¿verdad? ¡Ji,ji!)

Desde este Caldero de libros pretendemos daros a probar una “cucharadita” para

abriros las ganas de seguir “comiendo” o “bebiendo sangre” si es preciso.

Los ingredientes han sido vertidos en el caldero con mucho cariño: doce gotitas de

sangre, un par de colmillos afilados, una pizca de vurdalak, dos uñas de murciélago

secas, virutillas de madera santificada…

El proceso de cocción ha sido seguido con mimo y cariño, y vigilado constantemente

ya fuese durante el crepúsculo, la luna nueva, el eclipse, el amanecer o el sol de

medianoche.

Esperemos que probar de este caldero os deje un buen sabor de boca.

Pero, atención, absténganse aquellas personas que:

padecen problemas de corazón;

temen a la oscuridad;

no creen en los seres de la noche;

piensan que Crepúsculo es solo una puesta de sol.

Y ahora a …

hincarle el colmillo a la revista.

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FNÁTICOS

Club de lectura del IES Nº1 Fuengirola Por Ana Perea, profesora de Lengua y Literatura.

Después de un año de existencia, los Fnáticos empezamos este curso con muchas ganas

e ilusión. Y con mucha “sed” de aventuras.

Lo primero que se imponía era hacer recuento: algunos de los miembros que echaron a

andar el club ya no estaban este año y, aunque su espíritu seguía con nosotros,

necesitábamos “sangre” nueva para comenzar esta aventura 2012/2013.

En las primeras reuniones fuimos dibujando estrategias para encontrar nuevos socios; y

otros aventureros espontáneos se unieron también voluntariamente a nosotros.

Una vez reunido el material “humano”, lo siguiente era decidir qué aventura nos

apetecía vivir. Después de mucho pensar y darle vueltas, he de decir, para ser sincera,

que la aventura nos eligió a nosotros.

¿Cómo? Un vampiro llegó al IES Nº1 de Fuengirola.

Un pestilente y enigmático vampiro andaba suelto por el

instituto Nº1 de Fuengirola. Estaba sediento de sangre y buscaba,

desesperado, un cuello tierno y suave donde hincar sus afilados

colmillos.

Un día, sin ir más lejos, burlando la vigilancia de los profesores de

guardia, el maléfico vampiro encontró una víctima cuando esta salía tranquilamente

de su clase para ir al baño. Al principio, la inocente alumna pensó que era alguien

disfrazado debido a la cercanía de la fecha de Halloween; pero la pestilencia que

emanaba de aquel cuerpo la puso alerta. Al acercarse más, la víctima pudo comprobar

que las gotas de sangre que resbalaban por su lengua

eran... ¡AUTÉNTICAAAAS!

El miedo que sintió atraversar su corazón en ese momento le dio

fuerzas para echar a correr.

Mientras enfilaba el pasillo adelante buscando refugio en su

clase, los oídos le zumbaban frenéticamente, aunque no sabía si

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eran los latidos de su corazón o los pasos del vampiro que la seguía muy de cerca.

Pensaba que aquello NO estaba sucediendo. Estaba soñando y de un momento a otro

se despertaría en su cama. se reiría con su hermana al contarle el sueño tan

"vampiresco" que había tenido, y ella se burlaría diciéndole que, como siempre, su

imaginación le había jugado una mala pasada.

Irrumpió en clase como una exhalación. La

sorpresa de sus compañeros y profesores fue

taquicárdica. La víctima consiguió escapar y el

vampiro huyó.

Podéis imaginar el miedo que se apoderó de todos.

Pero los FNÁTICOS, con ese espíritu aventurero

que les caracteriza, se convirtieron en periodistas e

investigadores y consiguieron lo

imposible:

¡Una entrevista con el vampiro!

Después de una angustiosa persecuión en la que se temió por la vida de algunos

alumnos, y de unas negociaciones interminables (podéis imaginaros que los vampiros

tienen todo el tiempo del mundo ¡ja,ja!) para poder conseguir la exclusiva, podréis leer

el resultado en Entrevista con el vampiro de Anne Rice.

Ella ha descubierto que Louis de Pointe du Lac no es un vampiro como los demás. En

él no hacen efecto ni los ajos ni las estacas. Louis sufre y siente tener que matar, pero

tiene que sobrevivir... Su sed de sangre lo llevará a límites insospechados incluso para sí

mismo.

"-Ya veo…- dijo el vampiro, pensativo, y lentamente cruzó la

habitación hacia la ventana.

Durante largo rato, se quedó allí contra la luz mortecina de la calle

Divisadero y los focos intermitentes del tránsito.

El muchacho pudo ver entonces los muebles del cuarto con mayor

claridad: la mesa redonda de roble, las sillas. Una palangana colgaba

de una pared con un espejo."

Así comienza Entrevista con el vampiro.

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-Seño, pero ¿los vampiros se reflejan si se miran en un espejo? -preguntaron Selma y

Miriam.

-¿Y para qué quieren mesas y sillas si ellos duermen

durante el día, y por la noche cazan?- preguntó

Samuel con su mente práctica.

-¿Es verdad que los vampiros leen!- se sorprendió

Álvaro.

-¿Y lo de la vida eterna?- quiso saber Vida. (ji,ji)

Así comienza nuestro debate.

Pero eso es otra historia.

¿Por qué le encargamos la entrevista a Anne Rice y no alguno de nosotros, los

Fnaticos?

Si me guardáis el secreto os lo contaré: En esos momentos estábamos metidos de

lleno en una misión, tarea, empresa, deber, cometido, trabajo, encargo...(llamadlo como

queráis) de suma importancia :

Ponerle nombre a la revista que el IES Nª1 de Fuengirola.

Sííííííí. Esta que tenéis ahora mismo en las manos. Así que ,como podréis ver, MISIÓN

CUMPLIDA.

Y, aparentemente, este es el final de la historia, pero… ¡CUIDADO! Porque todavía el vampiro sigue sediendo de sangre.

Si alguién os parece sospechoso o si notáis a vuestro alrededor un olor extraño, no

penséis que es vuestra imaginación. Avisad inmediatamente a algún

FNÁTICO. Ellos sabrán qué hacer.

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La saga Crepúsculo de Stephenie Meyer.

Por Paula Cruz, alumna de 1º de Bachillerato D

Crepúsculo es una saga de cuatro partes, escrita por su autora Stephenie Meyer. La saga

cuenta la historia de una adolescente, que se muda de Phoenix a Forks, para pasar un tiempo

junto a su padre. Allí se enamora de un vampiro, camuflado bajo la apariencia de un humano

corriente, el cual por suerte, siente también una extraña atracción hacia ella.

En general, es una saga muy profunda, dependiendo también de quién sea el espectador,

algunos se sentirán más atraídos, otros menos.

Como seguidora de esta saga, he de decir que, pese al éxito de las películas, los libros

son muchísimo mejores, pues en ellos se ve el verdadero sentimiento de la autora, a quien no

debemos quitar protagonismo y se plasma claramente su intención en cada momento.

Sus libros han recibido bastantes críticas en contra, por ejemplo, el error de no haber

caracterizado correctamente a sus personajes, pues en ellos los vampiros adquieren cualidades

que realmente no tienen, así como se suprimen otras imprescindibles a la hora de describirlo; sin

embargo, pienso que en una historia el autor tiene total libertad sobre ella, tanto en la trama

como a la hora de describir a los personajes.

Tanto los libros como las películas captan de una forma u otra la atención del

espectador o lector. A primera cualquier persona se decide a ver las películas, las cuales se

llevaron muchos aplausos por parte de la audiencia, primeramente por una historia de amor,

algo que naturalmente está presente en cada uno de nosotros. A priori puede parecer una simple

historia de amor, pero ¿realmente es simple? La verdad es que no, pues es un amor un tanto

prohibido, el cual al principio debe ser camuflado para evitar problemas entre el mundo de los

humanos y el de los vampiros; es quizá esta peculiaridad la cual llama mucho la atención, así de

como la forma en la que se desarrolla la acción, pues es bastante entretenida y compleja.

Los libros quizá no puedan llegar al corazón de todos, pero he de decir que, cuando

captas la intención de su autora, no puedes parar de leer; es como que te incita a seguir, es una

forma de expresarse bastante profunda, algo que en las películas claramente no puede

apreciarse.

En conclusión, dejando a un lado sus críticas, es una historia bastante llamativa y

peculiar, tanto desde el punto de vista de un lector como el de un espectador. Y, aunque las

películas hayan tenido más éxito con respecto a los libros, no debemos olvidar a quién

realmente hizo posible la historia, Stephenie Meyer, la cual se expresó a través de sus libros.

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Con las pelis de Crepúsculo.

Por Jonás Torres, antiguo alumno de nuestro instituto.

Por fin ha llegado a nuestras pantallas la última parte de la saga “Crepúsculo”; y es

que somos muchos los fanáticos que hemos esperado a lo largo de cuatro años para

poder ver el desenlace de una de las historias de amor más intensa jamás contada. Esa

historia es la de Bella y Edward Cullen, una chica aparentemente normal que consigue

lo que ninguna inmortal ha conseguido, enamorar perdidamente al chico más deseado y

admirado en el instituto de Forks.

Si bien puede parecer la típica historia entre adolescentes, nada está más lejos de la

realidad, puesto que Edward y su familia son nada más y nada menos que vampiros.

Stephenie Meyer, escritora de la saga y productora de su puesta en cine, ha sido

capaz de inventar un mundo lleno de misticismo que ha eliminado por completo la

imagen de los “chupasangres” que teníamos hasta ahora, y ha hecho de estas criaturas

especies alucinantes a los que todo el mundo le gustaría parecerse.

Es inevitable el tener que comparar los libros de la saga con sus respectivas

películas, y es que existen fans incondicionales de dichos relatos que dicen estar

decepcionados con su puesta filmográfica. Y a mí me gustaría llevar a la reflexión a

estas personas que pretenden que en una cinta de dos horas se pueda llegar a

profundizar tanto como en un relato de cientos de páginas. Puesto que es por todos

conocido el hecho de que una persona profundiza y se deja llevar más por las emociones

cuando se trata de leer un texto escrito. Estas películas no sólo han contado con la

aprobación de su autora en el guión si no que ella misma ha podido modificar y

aconsejar en las escenas de la trama con el fin de que se asemeje lo más posible a su

historia original. Y en ella podemos disfrutar de unos efectos especiales

impresionantemente realistas, una fotografía y decorados a la altura del cine de James

Cameron (Titanic, Avatar) y unos actores de lujo, Kirsten Stewart, Robert Pattinson,

Taylor Lautner.

Amanecer parte II, que actualmente se está proyectando en los cines de todo el

mundo, ha conseguido, al igual que sus predecesoras, ser la película más vista en cada

uno de los países que la ha retransmitido por varias semanas consecutivas, superando

incluso al carismático y sofisticado agente 007 en su última entrega. Y es que millones

de personas no podemos estar equivocados.

Así que si alguna vez te has dejado llevar por prejuicios y todavía no has disfrutado

del fenómeno “Crepúsculo”, no esperes más y engánchate a esta aventura de suspense,

intriga, amor y pasión que ha hecho historia y que nunca jamás podrás olvidar de tu

memoria.

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Chupasangres no aptos para diabéticos

Por René Wegmann, profe de Informática

He visto todas las películas de la saga Crepúsculo y sí, soy un hombre. No es que me

gusten especialmente, pero es lo que hay cuando tienes pareja. Quizás no te obliguen a

ir, como es mi caso, pero intentan convencerte y despiertan una alerta en tu interior que

te dice que debes ir.

En la primera parte (Crepúsculo) te convencen diciendo cosas como: “Pero si es una

película de vampiros...” y tú vas y te lo crees. Estuve durante toda la proyección

esperando ver a algún vampiro de la talla de Bela Lugosi o de Gary Oldman en el

Drácula de Bram Stoker (es decir, vampiros como mandan los cánones), pero sólo me

encontré un pastelazo empalagoso.

En la segunda parte (Luna Nueva) tienen que rogarte un poco más, y terminan

convenciéndote con afirmaciones del estilo a: “Pero si en esta salen hombres-lobo...”.

Uno que ya está con la mosca detrás de la oreja piensa... “en la primera decían que había

vampiros y salió como salió; pero es imposible que mezclen vampiros y hombres-lobo y

que la cosa no sea interesante”. Así que al final caes. Pues bien, te vuelves a equivocar y

te encuentras con escenas tan empalagosas que podría jurar que vi a otros espectadores

en mi misma situación inyectarse insulina para contrarrestar tamaña cantidad de

contenido fílmico azucarado. Por ejemplo, una chica de diecisiete años que se encuentra

con un chico medio en pelotas, con sentimientos confusos hacia él y lo único que sale es

decirle: “¡Qué hermoso eres!” Pero vamos hombre... ¿Dónde se ha visto eso?

En la tercera entrega (Eclipse) ya te vas haciendo el cuerpo porque sabes que el día

va a llegar y vas a ir. No obstante, siguen intentando convencerte con afirmaciones del

estilo a: “Pero si en esta hay una lucha entre ejércitos de vampiros y hombres-lobo...”.

Te resignas y piensas: “Ya, seguro...” y al final vas y compruebas que como en las

anteriores si bien hay alguna escena de acción y algún que otro golpe cómico, el ochenta

por ciento de la película sigue siendo contenido vetado para todo aquel que no tenga un

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páncreas a prueba de bomba.

Entonces llega la cuarta entrega (Amanecer) y ves aterrado que le sigue una coletilla:

“1ª parte”.¿CÓMO? ¿Pero cómo osan dividir la última entrega en dos películas? Eso es

tortura. Eso seguro que contraviene el tratado de Ginebra, el de Kioto y hasta el de

Anatomía de Grey. Piensas que semejante castigo debe verse recompensado en una vida

posterior: “En la siguiente vida seguro que me reencarno en un guapo Play-boy

millonario y con alas” [Raj Koothrappali en Big Bang Theory].

Haces caso omiso a los comentarios que te siguen haciendo para animarte a ir. A

estas alturas, ya te da igual que te diga que hay vampiros, hombres-lobo o el mismísimo

Arnold Schwarzenegger peleando a cuchillo con Chuck Norris (seguro que si lo hubiera

lo convertirían en algo digno de Los puentes de Madison). Te agarras los machos y vas,

para descubrir que... TENÍAS RAZÓN. Sólo que en esta hay un nuevo aliciente: el

miedo. Miedo que mete la protagonista. Ya daba repelús verla al principio, pero durante

todo el embarazo ya pasa a pánico. Se la veía tan demacrada que pensé por un momento

que era una película de Tim Burton.

En fin, al final pasas el trago y sientes un alivio cuando acaba. Pero inmediatamente

piensas “¿cuánto falta para la siguiente?”y no tardas dos segundos en enterarte que al

igual que los reos con su ejecución, tu felicidad tiene fecha de caducidad: 1 año.

Llega el fatídico día y vas al cine. Tu pareja te pregunta si quieres Coca-Cola y tú le

sorprendes diciendo que sí pero Light (ya habrá bastante contenido empalagoso en la

película). Te preparas para lo peor y descubres horrorizado... QUE NO ESTÁ TAN

MAL. Inmediatamente se te encoge el corazón y caes en la cuenta: “al final lo han

conseguido; te han llevado al lado oscuro”. Afortunadamente descubres que se estaban

reservando para ponértelas TODAS las escenas empalagosas seguidas. (ZAS en todos

los morros). Es entonces cuando llega el final de la película y todos aplauden y tú estás

por sumarte a ellos porque el suplicio por fin ha terminado.

Muchos dicen que estas películas demuestran lo que es el amor y aunque parezca

extraño, estoy de acuerdo con ello. Si no es amor el tragarse la saga entera, ya me dirán

qué lo es.

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Sobre La familia del “vurdalak” de Tolstoi

Por Ana Rosa Sánchez, alumna de 1º Bach.A.

Me llama la atención la actitud tan humana que tienen estos vampiros. Son

diferentes a los demás, son más reales que el resto de los vampiros que todos

conocemos. Pero, a la vez, dan más miedo porque estos “vurdalaks” chupan sangre de

su propia sangre.

Mantienen el secreto al hablar con su familia, que todavía no ha sido mordida,

como si a ellos mismos no los hubieran convertido en unos seres sedientos de sangre

humana gente de su propia familia.

El protagonista, después de haber pasado un tiempo en casa de una familia donde

ocurren hechos un tanto “extraños”, regresa al cabo de dos años para hacerles una visita.

Pero al llegar al pueblo ve que todo está desierto, tal y como le dijo el religioso que

vivía en el templo, y busca a la familia que dejó atrás. Pasa allí la noche y descubre que

no está solo. Ve a la hermana, Sdenka, de la cual se enamoró porque le recordaba a una

duquesa que él conocía; también vio a los familiares pero notó algo raro en ellos, y a

raíz de eso tuvo que marcharse de allí de inmediato.

“Miré a Sdenka, y vi que su rostro, aunque siempre hermoso, estaba contraído

por la muerte, que sus ojos no veían, y que su sonrisa era el rictus que deja la agonía

en el rostro de un cadáver. Al mismo tiempo, percibí en el aposento ese olor

nauseabundo que emana normalmente de las criptas mal cerradas. Ante mí se alzó la

espantosa verdad con todo su horror, y recordé, demasiado tarde la advertencia del

ermitaño.”

Como muchos otros vampiros no pueden tocar imágenes religiosas, o pisar el suelo

bendito de una iglesia, o un templo sagrado, pero lo espeluznante en esta historia es que

todos conviven juntos en el pueblo.

En otros libros o películas en las que los vampiros son protagonistas sale como

referencia que no pueden tocar, oler o comer ajos porque es como un ‘’insecticida’’ que

los ahuyenta, pero en esta historia no se hace referencia a los ajos, aunque sí al sol.

Respecto a este tema en el que muchos de los vampiros mueren al ser expuestos a la

luz solar, unos autores son más realistas que otros. Pongo el ejemplo de la saga

Crepúsculo, donde la familia Cullen no muere al ser expuesta al sol, sino que brillan

con él; otro ejemplo sería el de la película titulada Van Helsing donde una de las novias

del Conde Drácula muere a causa de los rayos del sol, tal y como siempre se ha dicho de

ellos.

Pero quiero concluir que sean casi humanos o no, puedan o no tocar imágenes

religiosas o puedan sentir o no los rayos del sol, todos ellos alguna vez y por siempre

beberán sangre…

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Drácula de Bram Stoker

Por Inma Díaz, profe de Griego.

“…Van Helsing abrió su misal y comenzó a leer, y Quincey y yo repetimos lo que decía del

mejor modo posible. Arthur colocó la punta de la estaca sobre el corazón del cadáver y, al

mirar, pude ver la depresión en la carne blanca. Luego, golpeó con todas sus fuerzas. El objeto

que se encontraba en el féretro se retorció y un grito espeluznante y horrible salió de entre los

labios rojos entreabiertos. El cuerpo se sacudió, se estremeció y se retorció, con movimientos

salvajes; los agudos dientes blancos se cerraron hasta que los labios se abrieron y la boca se

llenó de espuma escarlata...”

Bram Stoker(1847-1912) publicó esta novela en 1897. Se inspiró en las leyendas en torno

al príncipe de Valaquia, Vlad Drácula(Transilvania en 1431-Bucarest 1476) o Vlad el

Empalador sobrenombre que consiguió por su gusto en empalar a los enemigos.

¿Cómo llegó a conocer Bram Stoker a este príncipe? Varias fueron sus fuentes: el libro

escrito por William Wilkinson, cónsul británico en Bucarest, que trataba sobre el principado de

Valaquia cuna del conde Drácula; y las charlas que mantuvo con un orientalista Arminius

Vámbery, que aparece citado dentro del libro. Pero su interés lo despertó su madre. Siendo niño

sufrió una enfermedad que lo mantuvo en cama hasta los ocho años, su madre le contaba

historias de terror que despertaron su curiosidad.

En su época estaba de moda la novela gótica o de terror. Stoker se basa en las convenciones

de este género que nace como réplica al racionalismo del siglo XVIII y llega hasta finales del

XIX. Esta narrativa se caracteriza porque se desarrolla en castillos o monasterios lúgubres

llenos de criptas y pasadizos, poblados de fantasmas y seres sobrenaturales, paisajes sombríos,

personajes extranjeros y mujeres inocentes aterrorizadas por diablos, vampiros, hombres lobo,

fantasmas, ruidos extraños y en el fondo una gran dosis de erotismo encubierto.

¿Qué hace de su novela algo especial? Solo las primeras páginas transcurren en un país

remoto, Transilvania, en el palacio del conde Drácula. La obra se desarrolla en una Inglaterra

moderna de la segunda mitad del siglo XIX, inmersa en la revolución industrial, racional y

progresista, no hay nada más terrible que la vulnerabilidad de nuestra vida cotidiana. “¿Quién

de nosotros hubiera aceptado una posibilidad semejante, en medio de nuestro siglo diecinueve,

científico, escéptico y realista?...” pregunta Van Helsing.

A pesar del título, el conde Drácula aparece en pocas páginas; al principio de la novela,

cuando Jonathan Harker visita por motivos de trabajo el palacio del conde, y poco más. La obra

se teje con los fragmentos de los diarios escritos por los diferentes personajes. El miedo está en

lo que no vemos, en la presencia que nosotros los lectores conocemos y los personajes de la

novela aún no, solo el lector conoce todos los hechos. Sabemos lo que está pasando, quién es el

culpable de la muerte de Lucy, pero tenemos que esperar a que ellos lo descubran. Nos

sentimos aliviados cuando aparece el doctor Van Helsing, un siquiatra holandés, que conoce

esas criaturas a las que denomina “no muertos” o “Nosferatu” (título que el propio autor barajó

en un principio para su obra), capaces de dirigir a los elementos: a la tormenta, la niebla…; dar

órdenes a los animales dañinos: murciélagos, ratas… Pueden cambiar de forma y tamaño para

entrar o salir de cualquier sitio. Tienen una gran fuerza y una inteligencia aguda...se fortalecen

con la sangre de los otros… pero ¡cuidado! no son libres. Pueden entrar en cualquier casa solo si

alguien los invita, les afectan los ajos, las cosas sagradas y solo pueden reposar en suelo donde

no haya reliquias santas.

El origen de la palabra Nosferatu es incierto, no es “no muerto” como creyó el propio autor

(tengo predilección por su origen griego νοσοφόρος “portador de enfermedad” o por la latina

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"tú eres nuestra bestia salvaje" que se obtiene de "noster tu fera", y con un simple arreglo, se

llega a "nosferatu"). Los Nosferatu eran temidos en Transilvania (cuyo significado en latín es

“más allá del bosque”) identificados con demonios.

Bram Stoker era irlandés nació en Dublín. Estudió matemáticas y tuvo diferentes trabajos

hasta que se convierte en representante del actor Henry Irving al que admiraba profundamente.

Se trasladó entonces a Londres y allí comenzó a escribir relatos. Tardó siete años en escribir

Drácula. Aunque escribió otras obras como El entierro de las ratas o la madriguera del gusano

su nombre ha quedado ligado al vampiro para siempre. Se dice que al morir susurraba “strigoi,

strigoi, strigoi…” mientras señalaba a un rincón de su habitación en Londres. En rumano strigoi

significa espíritu maligno.

Os recomiendo el libro y, en su defecto, alguna de las buenas versiones cinematográficas

que hay. La primera vez que vi Drácula tendría nueve o diez años. Una versión en blanco y

negro. Fue una tarde de domingo en la que mis padres habían ido a dar un paseo y mis

hermanos y yo nos quedamos “haciendo los deberes”. Nos sentamos los tres delante del

televisor en silencio mientras anochecía, muertos de miedo, sin hablar. Mi hermana mayor se

marchó diciendo algo así como “os la vais a cargar”, nosotros ni la miramos, absortos por un

muerto que revivía entre las sombras para clavar sus dientes mientras uno dormía plácidamente,

para colmo, no era fácil matarlo. El sonido de la cerradura de la puerta nos hizo salir

escopetados a la habitación, me quedé sin ver el final, sin saber si lo remataban o no. Con el

tiempo he descubierto que es inmortal. Cada cierto tiempo vuelve a las pantallas renovado para

placer de unos pocos. De todas las versiones me quedo con la de Ford Coppola. En ella las

escenas se superponen llenas de color, efectos visuales y erotismo, el color rojo invade las

pantalla, recuerdo los ojos de Drácula que observan a Jonathan por las ventanillas del tren que

le conduce al castillo del Conde. La estupenda fotografía, el cuidado estudio de los interiores, de

los personajes, la caracterización de Drácula, la fidelidad al libro… en fin, os animo a que la

veáis.

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Recomendación de cine: Déjame entrar (2008)

Por Enrique Martín, alumno de 2º de Bachillerato B

Ante esta película, un amante del cine y del género solo puede descubrirse y

admirarla como la mejor película de vampiros del siglo. Esta película, basada en el libro

del mismo título del sueco John Ajvide, trata el amor entre una vampiresa y un chico

humano respetando la mítica figura del vampiro, tan prostituida por la saga Crepúsculo.

Alejada del vampirismo “para adolescentes exaltadas” y de la violencia gratuita,

Déjame Entrar se ha vendido como lo que es: una película de autor fuera de la

comercialidad de otros metrajes sobre vampiros.

El director Tomas Alfredson innova desde la tradición del vampiro, dándole a la

historia un toque tan perverso como dulce. Podríamos definir esta película como una

pesadilla vestida de cuento de hadas; pesadilla que con la poesía de sus imágenes nos

transporta a una especie de sueño. Pero si algo hace sentir Déjame Entrar al espectador

eso es el frío; frío en cada paisaje, en cada aliento de los personajes, en cada tormento

de unos niños asustados del mundo tan cruel en el que viven, y del amor que ha nacido

entre ellos. El film tiene su propio ritmo, un ritmo lento que resulta exigente para ciertos

espectadores; no es una película para cualquier público.

Las escenas en los exteriores resultan deliciosas para la vista, donde resalta la nieve

y el blanco. Cada escena en la que aparecen los jóvenes protagonistas está llena de

emoción contenida. Unos protagonistas con una apariencia inocente que no hace más

que ocultar un fondo oscuro e incluso malvado. El director esconde la violencia más

dura del film, al igual que las apariencias esconden el fondo oscuro de los protagonistas.

Este aspecto de los personajes queda representado fenomenalmente en la escena del

asesinato en el túnel, en la que Alfredson hace un gran uso del lenguaje

cinematográfico.

El título Déjame entrar hace alusión al imperativo del amor, un amor peligroso. En

la película comparan la sed de sangre de la niña vampira con la pasión amorosa, ya que

bien es cierto que ambas pueden devorarte. Esta pasión lleva a un desenlace

sorprendente, con la magnífica escena final en la piscina que queda como broche de oro

para una de las mejores películas de estos últimos años.

No es de extrañar que cuando se estrenó la película en festivales y salas sorprendiera

por su calidad. El film logró un merecidísimo éxito, además de varios reconocimientos

en festivales como el de Sitges, San Sebastián, o en el neoyorquino festival de Tribeca.

Es de esperar que esta película se convierta en un clásico y que sobreviva al tiempo

como unas de las mejores películas de género de la historia del cine.

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Pariendo monstruos

Por Patricia Lobato, profe de Lengua y Literatura.

Estamos a principios del siglo XIX, Lord Byron y su médico John Polidori reciben

en una villa de Ginebra a un grupo de invitados intentando sobrellevar un verano tan

tempestuoso que hará que 1816 sea recordado como el “Año sin verano”. Percy B.

Shelley, poeta, y su pareja Mary Woolstonecraft se encuentran entre ellos. Una de esas

tormentosas noches, tras tres días encerrados por culpa de las malditas lluvias, Byron

reparte láudano1 en cantidad y realiza una interesante propuesta a sus invitados:

competirán a ver quién crea el cuento más terrorífico que jamás se haya escrito.

Será una mujer la que alumbre al monstruo más terrible de toda la literatura: a la

criatura sin nombre del doctor Victor Frankenstein. Esta “criatura” robará protagonismo

a su propio creador -ese romántico que jugó a ser Dios, ansiando el poder de devolver la

vida a la materia muerta-, en la novela que se publicará más adelante con el título de

“Frankenstein o el moderno Prometeo”. Pocos saben que esta terrorífica novela es, ante

todo, una historia de amor: la del doctor Frankenstein por la chica con la que se crió y a

la que quiere devolver la vida tras fallecer ésta.

Pero no será éste el único monstruo que den a luz estos ingleses narcotizados;

Polidori comienza esa noche la gestación de su relato “El vampiro”. Aunque la figura

del chupasangres pertenecía ya a la tradición popular, Polidori la limará y humanizará.

En ese cuento nos encontramos por primera vez un vampiro aristocrático cuyo exquisito

paladar lo inclina más por los esbeltos y pálidos cuellos de las jovencitas de alta

sociedad que por el ganado de los campesinos. Empezará, pues, con Polidori todo un

género que culminará en el Drácula de Bram Stoker.

Si os apetece echarle un vistazo y os da pereza acercaos a la biblioteca, aquí os dejo

un enlace en el que podéis leerlo entero: http://www.gothicba.com/elvampiropolidori .

Fotograma de la película Remando al viento, de Gonzalo Suárez, en la que se cuenta la historia de la gestación del

Frankenstein.

1 Droga que se extrae del opio.

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“¿Por qué es gratis?”

Por José Luis Sánchez, alumno de 2º de Bachillerato C y ganador del VII Certamen Literario de nuestro Centro.

Supongo que entré porque estaba borracho. Tras la puerta había unas escaleras

hacia abajo. Supongo que bajé porque estaba borracho. El olor era insoportable.

Tuve una arcada. Después de las escaleras, dos pasillos; izquierda y derecha. Entre

ellos una especie de recepción.

- Emmm, hola.

- Hola.

- Me han dicho que esto es…

- Un prostíbulo.

- Mm, sí. Y, emm, verá no llevo mucho encima y me dijeron que…

- Es totalmente gratis, señor.

- ¿Sí?

- Vaya, parece que es mi día de suerte.

- No lo dudo, señor.

Supongo que no me sorprendí realmente porque estaba borracho. Aquella mujer

me indicó uno de los dos pasillos, pero no hizo además de acompañarme. Sin más,

avancé por aquella senda de la miseria. Había varias puertas con un pequeño cristal

en la parte superior, supongo que para catar sin necesidad de torcer el pomo. Sobre

el marco de cada puerta, una placa con un nombre inscrito en ella. Hice uso de aquel

cristal para descubrir una especie de dormitorio. Enseguida vislumbré una mujer

atrapada tras cada uno de los cristales. Todas ellas permanecían sentadas junto a una

mesita de noche, la cual tenía su luz prendida. El resto de la habitación estaba a

oscuras, aunque se distinguían una cama y un tocador. Solo cuatro puertas, dudo de

si habría las mismas en el otro pasillo. Entré en la cuarta; es un buen número. En la

placa un nombre: Jolene.

Estaba sentada. Leyendo. Me sorprendió, pero no parecí sorprendido. Supongo

que era porque estaba borracho. Dejó de leer, me miró y cerró su libro, dejándolo

sobre la mesilla.

- Me llamo Vincent, Vincent Gallow- comencé.

- Jolene.

- La placa no miente, ¿eh?

- ¿Por qué iba a hacerlo?

Todo aquello era demasiado para mí. No soy esa clase de tíos. La boca se me

secó, y miré a cualquier parte en que no estuviera ella. El silencio duró unos

interminables once segundos.

- Bueno, y ¿cómo funciona esto? ¿Hay algún tipo de norma?

- Ninguna.

- ¿Ninguna?

- Ninguna.

- ¿Gratis?

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- Gratis.

- ¿Por qué?

- ¿Por qué no?

Jolene, Dios Jolene, si tú supieras lo a punto que estoy de romperme en mil

pedazos. Pero deja de mirarme con esos ojos, ¿no te das cuenta de que me precipitas

al suicidio? ¿A que me autoinmole? Por favor deja de mirarme así; no soy ninguno

de esos tipos. Por favor, deja de mirarme.

- Me haces sentir sucio- dije.

- ¿A qué te refieres?

- Nunca he hecho esto antes, y me encuentro fatal. Creo que voy a vomitar.

- Hazlo en el pasillo.

Salí al pasillo a vomitar. Volví a entrar unos segundos después. Jolene era una

mujer de unos veinte. Cabellos rojos a juego con sus labios y vestido. Y ojos que

serían capaces de atravesar a treinta hombres enfilados. Todo aquello no ayudaba al

proceder de mi soltura. Sin más, me senté sobre la cama; ella seguía sentada allí.

Minutos después, se acercó a mí despacio, y se posó sobre mis piernas con

delicadeza; sabía que podía romperme en cualquier momento. Me besó. Cuatro

besos tímidos conllevaron al desenfreno. Comenzó a desnudarse y yo correspondí

de la misma manera. Todo fue muy rápido. Un parpadeo y ya estaban nuestros

cuerpos desnudos. Chillando de placer. La habitación me daba vueltas, supongo que

porque estaba borracho. Fuera comenzó a llover. Pero dentro ardíamos en llamas.

Escuché la lluvia a través de todas aquellas paredes golpeando en la azotea. Mi vida

murió en el momento en que aquellas gotas tocaron cualquier techo, y nací de nuevo

recordando mi vida entera como un sueño. Y como un sueño son aquella cama, y

aquellas gotas de sudor. La miro. Me mira.

- ¿Por qué es gratis?

Su boca se acercó a mi oído.

- ¿Por qué no?- y descendió hasta mi cuello.

En un primer momento, pensé que iba a perderse de nuevo en mi cuello. Pero no

fue así. Sus manos empezaron a apretar mi brazo y mi costado, y sus dientes se

clavaron en mí. Grité. La solté y comencé a empujarla; pero aquellas manos solo

parecían una prolongación más de mi cuerpo. Mordió más y más fuerte. No tardó

demasiado en sangrar. Sus ojos se dilataron y mis párpados se cerraron. Supongo

que no era porque estaba borracho.

Me desperté en mi cama. Solo. Vaya pesadilla. Era martes. Me incorporé en la

cama. No, no fue una pesadilla. El cuello me ardía. Volvía a tener ganas de vomitar.

Me levanté y fui al baño. El reflejo de mi cuello en el cristal reflejaba lo evidente;

sus dientes. Jolene, ¿por qué me haces esto? Me lavé la cara y salí hacia la cocina.

Al cruzar el marco, sentí que iba a explotar como maíz. Me alejé rápidamente de la

cocina y miré mi piel. Desprendía humo. El humo parecido a las duchas del

invierno, cuando tan solo quieres hervir. Entonces volví a entrar. Y lo mismo. Los

rayos del sol. Volví al dormitorio y cogí el teléfono. Llamé a Lou.

- Lou, joder, no te lo vas a creer.

- Espera- la persona al otro lado de la línea gritó “Lou”. Esperé.

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- Dime Vincent.

- Joder Lou, no te lo vas a creer.

- Dime.

- Ayer fui al prostíbulo que me dijiste.

- ¡Ah! ¿Y qué tal? ¿Es realmente gratis?

- Cállate. Estoy realmente jodido.

- ¿A qué te refieres?

- Creo que me han pegado algo.

- No jodas, ¿una venérea?

- No parece. No tengo ni idea de lo que es.

- No me sorprendería lo más mínimo. ¿Vas a ir al médico?

- La cuestión es que no puedo ponerme en contacto con la luz solar.

- ¿Qué eres, un vampiro?

- Algo así.

- Anda joder, Vincent. Ve a comprarte una capa- y colgó.

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El vampirismo y las series de televisión

Por Ángel López, profe de ATAL.

El vampirismo, como sabemos, aparece como tema fundamental en muchos y diferentes

formatos artísticos: literatura, cine, comics, pintura. Con la llegada de los canales temáticos,

especialmente los americanos, aparecen muchas series de ciencia ficción, dedicados a todo tipo

de públicos, infantil, juvenil y adulto. Pues bien, como no podía ser menos, el vampirismo

también tiene su propio apartado, como tema principal, en las series de televisión. Permitidme

que os recomiende algunas de estas series, cada una de ellas dirigida a un público diferente.

En este apartado me gustaría destacar para un público más juvenil a Buffy Cazavampiros

(iniciada en 1997), en la que una joven estudiante de secundaria es elegida para luchar contra las

fuerzas del mal, ayudada por un grupo de amigos y guiada por un bibliotecario experto en la

materia. También destacaría la más reciente Mi niñera es un vampiro (2011), serie canadiense

en la que se narran las aventuras de Ethan Morgan, vidente, su mejor amigo, Benny, que es un

hechicero y su niñera Sarah, que es una vampiresa. Episodio tras episodio se enfrentan a fuerzas

sobrenaturales colaborando entre ellos en la lucha contra el mal.

Para un público juvenil o adolescente también

recomendaría Crónicas vampíricas, serie

estadounidense estrenada en 2009 y dirigida por Kevin

Williamson. En esta serie una adolescente de 17 años,

que vive en la población de Mystic Falls, intenta

seguir con su vida tras el accidente que mató a sus

padres. Entonces conoce a un misterioso estudiante

llamado Stefan Salvatore, del que se enamora y que

esconde un terrible secreto, es un vampiro. La llegada

de su hermano lo complica todo en un mundo

sobrenatural de vampiros y brujas, tras descubrirse que

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la adolescente es idéntica a la vampiresa que convirtió a ambos y de la que estaban enamorados.

Para un público algo mayor, me gustaría mencionar la serie True Blood (Sangre Fresca)

estrenada en 2008, de Allan Ball. Va ya por la quinta temporada y ha sido un gran éxito en

Estados Unidos. Es la historia centrada en un pueblo de Luisiana, Bon Temps, en la que la gente

debe adaptarse a una sociedad en la que los vampiros salieron a la luz pública. La gente tiene

que acostumbrarse y enfrentarse a las criaturas de la noche, que no siempre tienen las mejores

intenciones. Está centrada en la vida de una camarera con poderes telepáticos llamada Sookie

Stackhouse, y en todos los que la rodean.

Por último, permitidme que hable de la serie de culto que me inició en este mundo, The

Munsters o La Familia Monsters, telecomedia emitida originalmente entre los años 1964 y 1966

en Estados Unidos y que ha sido repuesta en muchas ocasiones en España, especialmente en el

mítico programa matinal La bola de cristal. La serie utiliza a unos personajes de terror en

situaciones cómicas. Los padres son una pareja de vampiros que tienen que lidiar con todo tipo

de situaciones extrañas y divertidas. Para haceros una idea La Familia Addams, que todos

conoceréis, es un “remake” de esta serie. La serie es en blanco y negro, en una época en la que

sólo había un canal de televisión y en la que no existían los móviles ni Internet, en suma, la

“prehistoria” de la tele para algunos. Y es que todos tenemos un pasado.

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¿Chupan sangre los murciélagos?

Por Germán Ortega, alumno de 1º de Bachillerato B

Los hábitos alimenticios de los murciélagos son casi tan variados como los de todos los

mamíferos en conjunto, y esta diversidad dietética es responsable en gran medida de la

diversidad morfológica, fisiológica y ecológica que se aprecia en estos animales. Se alimentan

de insectos y otros artrópodos, fruta, polen, néctar, flores, hojas, carroña, sangre, mamíferos,

peces, reptiles, anfibios y aves.

Los murciélagos que se alimentan de sangre se llaman hematófagos.

A pesar de la extensa visión popular de los murciélagos como animales que se

alimentan de sangre, en realidad sólo existen tres especies hematófagas, todas originarias de

América. Los murciélagos hematófagos se conocen con el nombre de vampiros.

Las tres especies son: el vampiro común, el vampiro de patas peludas y el vampiro de

alas blancas.

El vampiro común se alimenta de la sangre de perros, sapos, tapires, guanacos e

incluso focas, mientras que el vampiro de patas peludas se alimenta de la sangre de aves.

El vampiro de alas blancas también se alimenta de la sangre de aves y la mayoría de la

información que se tiene de ella ha sido obtenida a partir de ejemplares encontrados en

gallineros.

Vampiro común

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¿Cuánto sabes sobre vampiros?

¿Con qué otro término se le llama a un vampiro?

. Nosferatu

. Chupasangre

. Murciélago

¿Qué ocurre si a un vampiro le da la luz del sol?

. Lo mata

. Lo hiere

. Lo debilita y ciega

¿Cómo se mata a un vampiro?

. Disparándole

. Clavándole una estaca en el corazón

. Clavándole la estaca y cortando su cabeza

¿Cuál de estos es una clase de vampiro?

. Rigthwla

. Succubus

. Vampiuria

¿Los vampiros pueden cruzar el agua en

movimiento?

. Si

. No

. Depende

¿De qué otra manera se puede debilitar a un

vampiro?

. Con agua bendita.

. Cantando una canción religiosa.

. Clavándole un crucifijo.

¿Cuál es el estado vital de un vampiro?

. Muerto en vida

. Inmortal

. Está entre la vida y la muerte

¿Cómo se llama el personaje histórico que fue un

mítico vampiro?

. Vlad, principe de Bacaladia

. Vlad Tepes

. Vlad Vampire

¿Qué famosa condesa cometió crímenes lo más

parecido a un vampiro?

. Elizabeth Swan

. Elizabeth Bathory

. Elizabeth Dracul

¿Con qué animal se identifica un vampiro?

. Lobo

. Murciélago

. Gato

¿Quién es la diosa de los vampiros?

. Larvae

. Lilith

. Leslet

¿Qué significa la palabra vampiro?

. volador, beber, chupar y lobo

. chupa sangre

. no muerto

¿Cuál de estas enfermedades te puede producir un

vampiro?

. Günther

. Hepatitis

. Cáncer en la sangre

¿Qué famoso personaje acaba con Drácula?

. Doctor Williams

. Abraham Van Helsing

. Jack Siward

¿Cuál de estos relatos pertenece a la novela

vampírica?

. La sangre de la vida

. Eclipse

. El crucifijo

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Respuestas al test “¿Cuánto sabes sobre vampiros?”

¿Con qué otro término se le llama a un vampiro?

Nosferatu

¿Qué ocurre si a un vampiro le da la luz del sol?

Lo debilita y ciega

¿Cómo se mata a un vampiro?

Clavándole la estaca y cortando su cabeza

¿Cuál de estos es una clase de vampiro?

Succubus

¿Los vampiros pueden cruzar el agua en movimiento?

No.

¿De qué otra manera se puede debilitar a un vampiro?

Con agua bendita.

¿Cuál es el estado vital de un vampiro?

Muerto en vida

¿Cómo se llama el personaje histórico que fue un mítico vampiro?

Vlad Tepes

¿Que famosa condesa cometió crímenes lo más parecido a un vampiro?

Elizabeth Bathory

¿Con qué animal se identifica un vampiro?

Murciélago.

¿Quién es la diosa de los vampiros?

Lilith.

¿Qué significa la palabra vampiro?

volador,beber,chupar y lobo

¿Cuál de estas enfermedades te puede producir un vampiro?

Günther

¿Qué famoso personaje acaba con Drácula?

Abraham Van Helsing

¿Cuál de estos relatos pertenece a la novela vampírica?

Eclipse

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“Las metamorfosis del vampiro”

La mujer, entretanto, con su boca de fresa,

retorciéndose igual que una sierpe entre brasas

y amasando sus senos tras el férreo corsé,

derramaba palabras impregnadas de almizcle:

“Son húmedos mis labios y conozco la ciencia

de perder en un lecho la conciencia de antaño.

Enjugo todo llanto en mis pechos triunfantes

y hago reír al viejo con risas infantiles.

Quien me ha visto desnuda y sin velos me compara

con el sol y la luna, con el cielo y los astros.

Cuando aprisiono a un hombre con mis temidos brazos

o cuando a los mordiscos abandono mis pechos,

desenfrenada y tímida, delicada y robusta,

soy, mi querido sabio, tan experta en deleites,

que sobre este colchón, desmayado de gusto,

los ángeles, rendidos, por mí se perderían.”

-Cuando ya de mis huesos la médula sorbió

y yo lánguidamente me dirigí hacia ella

para besarla, tierno, vi tan sólo a mi lado

un pellejo viscoso, rebosante de pus.

Cerré entonces los ojos con un terror helado

y al volverlos a abrir al vivo resplandor,

a mi lado, en lugar del fuerte maniquí

que parecía haber hecho provisión de mi sangre,

chocaban en desorden fragmentos de un esqueleto,

produciendo un chirrido como el de una veleta

o el de un cartel colgado de una barra de hierro

que el viento balancea en las noches de invierno.

Este poema fue incluido por su autor, el francés Charles

Baudelaire, en la primera edición del famoso libro Las flores del

mal. Los lectores de la época – el siglo XIX- se escandalizaron

tanto con lo que allí leyeron, que el poeta fue llevado a juicio y

obligado a pagar una cuantiosa multa; además, trece de los poemas

del libro fueron censurados y no aparecieron en la siguiente

edición. “Las metamorfosis del vampiro” es uno de estos textos

prohibidos.

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¿CUÁL ES EL COLMO DE

UN VAMPIRO? Si sabes la respuesta a esta pregunta, juega con nosotros.

1º Escribe tu respuesta en un trocito de papel procurando que nadie la lea y dóblalo.

2º Vuelve a desdoblar el papel y escribe tu nombre y el curso porque se te habrá

olvidado.

3º Vuelve a doblarlo otra vez.

4º Dirígete a la biblioteca (esa habitación llena de libros al final del pasillo de la planta

baja) y busca una caja con el rótulo El caldero de los libros.

5º Introduce tu respuesta dentro de la caja.

6º Despídete amablemente de la persona encargada de la biblioteca. Te lo agradecerá.

7º Continúa con tu vida normalmente y espera hasta que se publique el veredicto.

8º Acuérdate de que el viernes 21 de diciembre es el último día para jugar.

9º Protege tu cuello del chupasangre que anda suelto por el instituto.

¿Te atreves a participar?

Shakespeare lo llamó humo engendrado por el hálito de los suspiros, Lope beber veneno por licor suave, Ambrose Bierce locura temporal que se cura con el matrimonio… Y es que el amor, el más tormentoso, el más

desgarrado o, a veces, el más cómico, ha protagonizado millones de páginas desde que el primer escritor cogió la primera pluma.

Es por esto que nuestro próximo número, que saldrá en primavera –

que dicen es la estación del amor- , irá dedicado a la literatura amorosa. Si tú también tienes algo que decir al respecto, si leíste un poema o un

apasionado novelón que te hizo emocionarte –o vomitar- , y quieres añadir algún ingrediente a este caldero, sólo búscanos.