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7/24/2019 Tutuna Mercado en Untref

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CULTURA // MS ALL DEL EXILIO

Tununa Mercado: ''Lo ertico esten el pensar''13:26 | Nilda, ms conocida como Tununa, inventa otra forma de decir.

Su escritura llama la atencin por su construccin y sensibilidad. Su

estilo es una marca de identidad.

Por Vivian Dragna // Lunes 19 de octubre de 2015 | 13:26

Voy a su casa a la hora de la merienda. Llevo masas dulces. Tununa llama

a su marido, (uno de los escritores y crticos que ms sabe de literatura

argentina), para que prepare caf. Ellos se conocieron en Crdoba, en la

carrera de Letras. Tununa era alumna del que se convertira en su

compaero de vida. La miro. Tiene los labios pintados, el pelo corto, lacio y
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muy oscuro, de un negro brillante, yo s, pero ella no sabe que yo s, que

manda a comprar una marca de tintura determinada a quien viaje a Mxico.

No Jitrik -su marido- le avisa que el caf est listo y Tununa deja el living

donde estamos instaladas. Es mi momento de observarlo todo. La bibliotecaes mi primer objetivo. Abarca tres paredes. Deseo que Tununa se demore

con el caf. La mayora de los libros regresaron con ellos. Otros fueron

recuperados en Buenos Aire. El matrimonio los guard en bales antes de

partir a Mxico, bales que deambularon gracias a la generosidad de los

amigos, por casas y depsitos ocultos de la dictadura.

Libros que sufrieron su propio destierro.

Miro los libros. Encuentro en los estantes las obras completas de Guy de

Maupassant, de Macedonio Fernandez, de Manuel Puig, de Rodolfo Walsh

y la de Federico Garca Lorca. Hay muchos libros, no puedo abarcarlo todo.

Descubro el Facundo de Sarmiento y uno de Augusto Monterroso. Tununa

regresa con el caf. Me ve observando su biblioteca, vuelvo al living, me

siento y la escucho. Habla pausado, sus frases se deslizan con una

musicalidad especial. Es la tonada cordobesa, pienso, y la cadencia que les

otorga a las palabras.

La biblioteca siempre es el lugar donde el nio se siente apresado poreso desconocido que es el libro. Mis padres eran gente ilustrada, mi pap

me haba trado una coleccin que se haba editado en Chile, las obrascompletas de Julio Verne. Y a mi hermana le compraron El tesoro de lajuventud,nosotras nos pasbamos el da leyendo eso. All haba una figurade una nia con una frase de Stevenson que me conmovi. Yo me qued

prendada de esa nia cuya imagen fue la tapa de la edicin de Tusquets deLaMadriguera que ahora se va a reeditar. La verdad de mi vida estcontenida en el libro Eltesoro de la juventud.Si yo tuviera ahora los veintetomos quizs lo nico que hara es leerlos.


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Tununa a los cinco aos

Emocionada, me muestra el libro. Las pginas estn amarillas y la tapa ha

perdido el color. Un libro rescatado del exilio.

Me pide que lea la frase de Stevenson. Miro el dibujo. La nia est sentadasobre una colina, en la tierra hay flores blancas, el cielo es muy azul. Se

toma las piernas con los brazos y mira el horizonte.

Una nia que suea. Igual que Tununa, pienso.

***

Tununa Mercado naci en Crdoba en 1939, vivi en Francia y estuvo

exiliada en Mxico durante la ltima dictadura militar. Es una de las

escritoras ms importantes de Argentina. Con su ltima novela Yo nunca tepromet la eternidad, recibi la Beca Guggenheim y gan el Premio Sor

Juana Ins de la Cruz. Escribi adems Celebrar a la mujer como a una

pascua, Canon de Alcoba, La letra de lo mnimo, La madriguera,

Narrar despus, y En estado de memoria.

Vive en un noveno piso sobre la calle Viamonte, en Buenos Aires. No es la

casa de antes de irse a Mxico, esa se perdi. El lugar es muy luminoso.


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En el living hay ms libros. Tambin en un pasillo que lleva a la cocina y

sobre un escritorio. Una casa invadida por los libros. Cul ser de Tununa

y cul de No?

Yo tardo muchsimo en leer los libros. A veces esa morosidad tiene quever con que el libro me est gustando mucho, es como si yo estuvieraescribindolo. Me pasa tambin con traducciones, ahora estoy leyendo Enmedio de ninguna parte,del premio nobel J.M.Coetzee y me he demoradomuchsimo. Trato de entrar en la subjetividad de los personajes, como si losdesmenuzara. Es algo increble ese libro. Es muy encerrado lo que se estdiciendo, muy interior.

Se levanta y va a buscar algo. Quiere mostrarme el libro de J.M.Coetzee.

Tiene una tapa verde con letras blancas. Lo abro, busco marcas o

anotaciones pero est impecable. Ella dice que las marcas son una

distraccin en la lectura, que si tiene que escribir algo lo hace en la ltima

hoja.

Desde su primer libro al segundo, pasaron veinte aos. La mayora de ellos

vivi en Mxico, sin embargo Tununa no se considera una escritora del

exilio.

Ese pas me entr por los odos, por los ojos, por el olfato, sent como un

enamoramiento, como una excitacin, como un eros, que se despertviniendo de un territorio de muerte. Hay textos situados, por ejemplo en elMercado de la Merced, en el centro de Mxico, donde se vocea para ofrecerlos productos, aflora un llamado desde el subsuelo. Eso, aunque no semencione, es Mxico.

Tununa trabaj de periodista como una forma de conectarse con la nueva

tierra. El oficio la dejaba entrar en la vida de la gente, en los libros y en la

cultura.

-No digo que esa escritura me expresara, la idea de que un texto o unpersonaje te exprese no es algo que yo dira. Ms bien era mi manera devivir, estaba dentro del universo de mis quehaceres, entonces yo escribaunos textos, de pronto tena una imagen y escriba. No era pensando en ellibro todava. Era una manera de conectarme con el mundo y adems tiene


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que ver con que yo le atribuyo a la escritura la fuerza del eros y de la vida,aunque se hable de la muerte.

***

En Mxico se inscribi en el Taller Nacional de Tapiz. All aprendi una

tcnica tradicional para tejer gobelino donde se realiza la trama por el lado

del revs con la ayuda de una gua que es un cartn pintado cuya imagen

del derecho se observa con un espejo. El gobelino es un tapiz manual

hecho en un telar. Se trata de trasladar una imagen a un soporte diferente.

En este caso, un tejido. Uno de los secretos es la tcnica para teir. El

objetivo es lograr el color ms parecido a la imagen que se va a copiar.

Tununa teji mucho en su etapa de exilio, ella dice que fue una actividad

salvadora y una puerta de entrada al infinito.

Aprend a tejer, la concentracin es muy grande. Son lugares de muchosilencio. El taller quedaba en un viejo convento de La Merced y la genteestaba afanosa, trabajando, viendo dibujos, yo pensaba que ah seescuchaba la msica de las esferas. Y la msica produce la ausencia. Esuna ausencia del ser. Se detiene la vida.

Me pregunto sobre la relacin entre tejido-bordado, erotismo y escritura.

Abro su texto llamado Punto final (del libro Canon de Alcoba) y leo una

frase: Pasar el hilo es algo ms que un primer movimiento sobre la labor:es el inicio de una produccin, como el primer roce de dos bocas mueve la

mquina del deseo. La hebra atraviesa un vaco y se adentra en un blanco

que, pertinaz, habr de colmar.

Leo otra frase: Es tentador, aunque ocioso, establecer, la pura analoga

entre bordar y escribir; poder realizar mediante argumentaciones, la

metfora: la escritura es como un bordado, la labor es como el texto.

Hay una especie de colapso de la realidad. Si te fijas un poco en una

artesana que est bordando, vers el grado de concentracin muy grande,no es por no equivocarse, ya tiene la prctica, no hara una puntada enfalso, lo mismo con la escritura, no daras un paso en falso, sigues y siguesel tren de la escritura.

***


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Tununa escribi Canon de Alcoba en Mxico pero el libro se public

finalmente en Argentina. Se trata de un libro con distintos textos que la

crtica defini como erticos. Sin embargo, dentro del libro, hay un captulo

que se llama Realidad, con un evidente tono poltico.

-Yo escriba y de repente tena la necesidad de recrear una imagen, elefecto que haba tenido en m la muerte de alguien. Por eso el libro es unCanon en el que aparecen aproximaciones o distintas respuestas a misemociones.

-Creo que esa diversidad de textos sucede porque no soy una escritora quese especialice en determinados temas o formas. Por ejemplo, hay un textoque se llama Nosaquen el ojo,fue escrito en Buenos Aires, antes de que

nos furamos a vivir a Mxico, y era sobre la muerte de Ortega Pea, peroen el texto no se dice quin era. Entonces yo hablo de ese momento de lamuerte, del anuncio y de la imagen de su cuerpo cuando ya est en elvelatorio y su mujer d vueltas alrededor del cajn.

Antes de ser editado, Canon de Alcoba fue presentado en un concurso en

Espaa. El concurso qued desierto. Tununa supo que hubo dos finalistas,

el de ella y otro libro. El editor que organiz el concurso dijo que el otro libro

era ms pornogrfico pero no estaba bien escrito, en cambio el de Tununa

s lo estaba pero el texto no lograba excitarlo.

El editor consider que con mi texto no le pasaba nada. Una escrituraertica est atravesada por otro tipo de modulaciones ms all de la escena

propiamente dicha del sexo. Esa es la impresin que algunos autores meproducen. Pienso en escritoras que tienen una tensin emocional comoMarguerite Duras o poetas como Ida Vilario o escritores como EnriqueMolina que tiene unos poemas que te envuelven si tienes odo para sentirese eros. Pero no puedo decir ms, lo mo es una escritura espontnea, no

pensaba escribir un cuento ertico, sino ms bien un cuento amoroso o delgoce, con ese tipo de expectativa que va progresivamente dndote unatensin.

En Canon de Alcoba, el primer cuento, Antieros, es un homenaje a la

materia, parece una receta de cocina. Est plagado de acciones. Se lo digo.


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S, es dejar decir a las cosas y la idea de la receta contamina el tipo deprosa y desarrolla al neutro porque no hay una persona en la narracin sinoque hay un infinitivo como en las recetas. A medida que escribo, van

surgiendo como los hervores de la materia. Se puede ver el modo gozosode las tareas de la casa. Lo ertico est en el pensar.

Tununa me sirve otro caf. Ya est oscureciendo y le pido encender alguna

luz. Aparece No, se despide de su mujer con un beso, me saluda, quiere

saber mi nombre y apellido. Cree haberme visto antes. Ella le pregunta a

qu hora va a volver.

***

Hay rasgos muy interesantes en la escritura de Tununa. Uno de ellos es su

obsesin por buscar otras formas de decir las cosas. Ella nunca dira

militares asesinos. Encontrara una manera menos esperable de decirlo. Y

siempre en una especie de morosidad de la frase, sin prisa, sin

preocuparse en que se trata de un cuento, en que hay que avanzar en la

trama.

Est claro que hay ciertas pautas establecidas para hablar, para hacer

documentos polticos donde siempre se debe calificar al enemigo o exaltar aquienes son tus amigos. Trato de salir de la superficie de las consignas. Lasfrases hechas se usan porque hay un acostumbramiento. Pero luego con la

prctica uno las detecta. Creo que leer a otros es lo que a uno lo vallevando a corregir lo propio, a tener nocin de la originalidad de un texto.

Tununa dice que ella no se propone inventar una historia, armar un guin y

seguir ciertas pautas. Creo que se trata de una especie de encadenamiento

mental relacionado con la escritura. Se lo pregunto.

En Nunca te promet la eternidad,hay un objeto que desglosar, situar,no es que yo hiciera un plan o tuviera que leer sobre la guerra en Espaa,sino que la guerra en Espaa era el contexto de la historia. Llegaba a unlugar y le preguntaba a algn amigo si tena algo sobre este tema, esto me

pas con Hctor Tizn, porque l haba vivido esa circunstancia, haba sidosensible a esto, entonces tena algunos libros. Uno fue muy importante para


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m, me sirvi para ubicar en el tiempo los acontecimientos de los personajesque yo quera armar. Despus me pregunt qu cosas necesitaba saber,

pero no considero que eso sea un plan. El texto mismo va sugiriendo que eslo que uno busca.

Se acuerda de su gato, lo llama. Me cuenta que est escondido en algn

lugar de la casa, desde que se fue su hijo. Haba estado de visita por unos

das. Es fsico y vive en Mxico. La hija vive en Buenos Aires y es pintora.

No tiene nietos.

***

Cuando escucha msica, se dedica slo a eso. Como si se tratara de una

lectura. O de una escritura. O de un tejido.

Encontr la palabra: Tununa es minuciosa en todo lo que hace.

Siente preferencia por Bach. Tambin por el americano Steve Reich,

pionero en msica minimalista. Est atenta a las presentaciones de Martn

Bauer en Buenos Aires. Conoci a Dino Saluzzi (en una actuacin en un bar

de Palermo) hace unos aos invitada por Nicolas Goyer, quien tradujo En

estado de memoria al francs en el ao 2004 para Sabine Wespieser

Editeur. La editora decidi otro ttulo para el libro: Mmoire argentine

Por las noches, en la cama, escucha FM Clsica.

***

Saco de la cartera mi ejemplar de En estado de memoria, el libro que

refleja lo que Tununa sinti cuando volvi al pas en 1987. Lo coloco en la

mesa del living. Mi libro s est repleto de marcas, anotaciones, bordes de

pginas dobladas. Ella lo toma y observa en silencio.

Son relatos independientes: reflexiones, recuerdos, sensaciones del

regreso. Un ejercicio de reconstruccin de la identidad. Un libro que requirienfrentarse a un pasado que pareca destinado al silencio.

Pienso que fue liberador porque estaba muy anudada. Haba llegado a laArgentina y Buenos Aires o Crdoba eran lugares que descubra, como sino los conociera o recordara. Eso me provocaba sobresaltos diversos.Tambin me afect enterarme de los que ya no estaban o encontrarme con


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los que haban quedado. Me emocionaba ir a un acto en la Plaza de Mayo oa una marcha. Todo eso forma parte de ese regreso del exilio y yo tena unaterrible necesidad de soltar eso, de poder escribirlo, como si fuera un diario,una bitcora. Mucha gente tuvo un shock tan grande que se regres

despus a Mxico. Habiendo elegido volver, como se dice en el interior dela Argentina: no se hallaron. Y se fueron. Entre los que volvieron hubopadecimientos diversos, hay gente que se enferm, se suicid, enloqueci.Para nosotros fue un perodo muy interesante porque fue algo buscado, noshaban echado del pas, yo quera volver, era un llamado, pero no como undeber, el pas estaba en nuestra historia, en nuestra vida. Por supuesto quedespus de tantos aos en Mxico habamos hecho nuestra vida all, o seaque dejar Mxico tambin fue duro.

Tununa sufre de gastritis emocional. As define ella lo que le sucede a su

estmago cuando est en estado de shock. Como cuando volvi a

Argentina.

Tengo preferencia por un texto del libro En estado de Memoria. Se llama

Intemperie. Le digo lo que creo: que al escribir acerca del hombre que

viva en el banco de la plaza,

escriba sobre ella. Los dos estaban en la intemperie, pero el hombre lo

viva como un estado natural, de eleccin.

En esos das que yo empec a escribir ese libro, no saba si iba a ser un

libro de impresiones, como una especie de diario, yo sala con mi perro a laplaza, ah lo conoc a Andrs y ese vnculo se volvi muy obsesivo. Eninvierno, o das de lluvia, yo pensaba que pasar con este hombre, viva enla plaza en forma precaria pero muy convincente, como alguien que jamsregresara a vivir bajo techo, era su eleccin. Claro, es homologable elsentimiento de intemperie que yo tena por el exilio. La intemperie es unacategora que est en el imaginario del que llega a un sitio que no conoce yregresa al pas despus de tantos aos, hace que uno est descolocado. Yotena una afinidad muy grande con ese hombre y sus situaciones extremas.

Despus de publicar el libro, Tununa fue a buscar al hombre de la plaza y

no estaba. Regres un da, luego otro, y nada. Hasta que un da lo encontr

en el patio de una escuela, en la calle Rodriguez Pea, era invierno, Tununa

le pregunt qu haca all, el hombre dijo que se haba ido de la plaza

porque lo empezaron a perseguir y ahora era nmade dentro de la ciudad.


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Esa vez que lo vi en la escuela me dijo: yas que Usted escribi un libroen el que aparezco, entonces le digo: es que justamente yo lo estababuscando para darle un libro. Le ped que me esperara y fui a casa a

buscar un ejemplar para l. Recuerdo que me pidi agua caliente parahacerse un t, que es lo que te piden los linyeras. Hay una leyenda, unahistoria lateral de un tiempo despus, en la que Ricardo Piglia paseaba poruna plaza y se cruz con este hombre, que lea mi libro.

***

Siento que en pocos minutos voy a dejar ese living en penumbras y la

msica en la voz de Tununa (la misma que encuentro en sus textos).

Hay un ltimo libro publicado por ella. Es una novela. El nombre me atrae:

Yo nunca te promet la eternidad.

Argumento: 1940, los nazis avanzan sobre Pars. Una madre y su pequeo

hijo escapan hacia el sur para salvarse y buscar al padre, al marido. Ella es

una activa militante antifascista; l ha sido brigadista internacional en la

guerra civil espaola. El xodo es desesperado: gente a pie, miles de

vehculos. La carretera se bloquea y el camin que los lleva se detiene. La

madre aprovecha para buscar agua y alimentos en un casero cercano. De

pronto oye caer bombas. Cuando regresa en medio de la estampida, su hijo

ya no est. Empieza, entonces, una bsqueda angustiante, de pueblo en

pueblo. Yo nunca te promet la eternidad est basada en hechos reales,desencadenados por la guerra y el xodo que lleva a sus protagonistas de

Berln a Pars, de Espaa a Jerusaln y termina en el Mxico de nuestros

das.

Suceso generador: Un hijo le entrega a Tununa el diario que haba llevado

su madre durante la guerra.

Yo empec a leer esos diarios y dije, ac hay una historia increble, es

decir hay una novela en s. Es la bsqueda del hijo perdido. Se fueencadenando en relacin al relato que me haca Pedro que fue el nioperdido. l consider que yo le estaba presentando a su madre, dijo: lalograste a mi madre.Esta es la parte novelstica que yo fui puliendo y quefue creble para su hijo. Eso fue lo mejor que me pas. El hijo estabasorprendido, no entenda cmo haba hecho para seguir los pasos de lamadre. Es una recreacin, una investigacin. Como ella llevaba un diario,


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hay datos que yo tomaba, me preguntaba por ejemplo, qu pueblo era ese,cmo haba llegado ah. Empec a escribir a fines de 1999 y publiqu en el2005.

***

No quiero irme sin preguntarle por sus proyectos de escritura.

En realidad, no quiero irme.

Me gust mucho este trabajo alrededor de gente real que tiene cosaspara decir. Hubiera querido escribir la historia de un republicano espaolasturiano, algo que me haba contado el director de una revista dondetrabajaba. Yo le dije de ir juntos a Espaa, a su pueblo, adonde estaba sugente, cuando l fue nio, me hubiera fascinado. l no pudo ir. Fui yo.

Cuando regres escrib una nota que sali en nuestra revista sobre losencuentros con la gente de ese pueblo. La historia es muy interesante

porque a los padres del director de la revista los mataron en el ao 42cuando ya la guerra haba terminado, pero el franquismo sigui matandogente, al padre lo fusilaron. Este hombre que trabajaba conmigo, DonOvidio, me confi algo una noche que me invit a su casa. Cuando estoy

por irme, me d un sobre pero me pide que no lo abra hasta que llegue a micasa. Tena una hora de viaje porque era lejos, yo no me aguant y lo abr.Lo que l me estaba dando era la carta que escribi su padre a la familia la

vspera del fusilamiento. La emocin fue muy fuerte, yo quera escribir esahistoria pero al ao siguiente, cuando volv a ver a Don Ovidio, habamuerto.

Saco otro libro de Tununa de mi cartera. Ahora estn sobre la mesa del

living: Canon de Alcoba y En estado de memoria. Le pido que me los

dedique. Ella sonre y mientras escribe, aprovecho para dar una ltima

mirada al departamento. En frente a una de las paredes de la biblioteca hay

un escritorio pequeo, una silla y una notebook. Es donde escribe Tununa,

pienso. Entre los libros.

***

Est contenta porque este ao fue jurado en un concurso literario, particip

en una mesa redonda en el Malba, brind una conferencia en la

Universidad Tres de Febrero, y un seminario de traduccin.


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Dice que todo eso la vuelve a colocar en el reino de la escritura.

A los 75 aos desea seguir escribiendo textos que ella considera difciles de

catalogar porque no tienen el formato de la literatura que se premia o

alcance editorial masivo.

Tununa es una narradora habilidosa y original. Ella inventa otra forma dedecir. Su escritura llama la atencin por su construccin y sensibilidad. Su

estilo es una marca de identidad.

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