tomas caballero - toguy

107
TOGUY tomás caballero

Upload: docencia-universitaria

Post on 10-Nov-2015

48 views

Category:

Documents


2 download

DESCRIPTION

Novela del escritor formoseño (2012)

TRANSCRIPT

  • TOGUY toms caballero

  • TOGUY toms caballero

  • TOGUY toms caballero

    TOGUY

    Toms Caballero

  • TOGUY toms caballero

    NDICE PROLOGO

  • TOGUY toms caballero

    BREVE RESEA DEL AUTOR COMENTARIO AGRADECIMIENTO OTRAS OBRAS

    PRESENTANDO A TOGUY......... EL SUEO DE TOGUY DANA EL ROBO LA DEVOLUCIN NO TODO ES TAN FCIL EL ACCIDENTE INTERNADO LA PROPUESTA EL ASALTO LA VERGENZA DESCONTROLADO REFLEXIN EVA UN NIO NDIGO

    PRLOGO

  • TOGUY toms caballero

    A finales del siglo XVI, Montaigne (1533-1592) ya sostena que el hombre vive en sociedad porque lo necesita y no porque le agrade hacerlo. Sostena que si dejramos al hombre librado en su propio deseo, l preferira estar solo; cuando el ser humano convive lo hace en un intento de aunar fuerzas para enfrentar la bsqueda de su propio bienestar. Aos ms tarde, I. Kant (1724-1804) dijo: El ser humano vive en una insociable sociedad. Para l, la naturaleza del ser humano es la soledad, pero agrega que este ser socialmente inepto, egosta y solitario tiene tres necesidades bsicas: sed de poder, sed de bienes materiales y sed de honores. Mientras tanto Rousseau (1712-1778) deca: El hombre sociable vive en manada y obtiene de los dems proteccin y reconfirmacin de su existencia, aplauso o alabanza. Podra citar a pensadores de todos los tiempos y todos coincidiran en que el hombre slo se relaciona en sociedad para darle sentido a su vida. Toguy se pone en la piel de cada nio que camina por las rutas de cualquier lugar del mundo y se encuentra en cada una sintiendo lo mismo: una soledad impuesta por una sociedad insociable e insaciable con sed de honores, sed de bienes materiales, sed de justificar su existencia. Quiere encontrar su propia ruta en la que pueda llegar a ser l mismo, sin colgarse de la vida de los dems. Pero la problemtica social a la que se enfrenta cada da lo hace muy vulnerable ante la violencia por la ausencia de educacin, de alimentos, y de amor.

  • TOGUY toms caballero

    Su moral se basa en la supervivencia y se limita a lo que las calles le ofrecen teniendo que pensar slo en el momento, sin hoy, y sin maana. Encontrarse con Abril lo hace recorrer su desolada niez: Supe que an era nio, expresa. Entrega su mirada a la ternura que por primera vez roza su ser, un ser identificado con El gusanito:

    nadie me quiere... todos me odian... mejor me como el gusanito...

    le saco lo de adentro... mmm! qu rico el gusanito!...

    Quiero pensar que slo el ritmo de la msica es, por sobre todas las cosas, su espejo y no la suciedad de su andar rastrero por las calles. Toguy era el reflejo de las hipocresas de la polticas educativas, frase acomodada en un contexto en el que se puede afirmar que es una obra con un elevado sentido humano y social. Es valiente y a la vez doloroso reconocer que vivimos como los topos, sumidos en nuestra propia cueva, queriendo resaltar las miradas esquivas de cada da, las voces calladas, las gargantas ahogadas por la impotencia de tener que aceptar que supuestamente todo es posible, que los Estados tienen en el puo la solucin a los problemas sociales y no abren su mano para dejarla salir. Toms Caballero nos muestra una vez ms a travs de un gnero diferente, su sensibilidad, la calidez de su mirada del otro sin dejarlo solo, y el amor que siempre prima en sus obras en todas sus manifestaciones.

  • TOGUY toms caballero

    l se mete en la piel de cada personaje, se involucra y nos involucra a quienes leemos Toguy, porque al hacerlo vamos visualizando las imgenes de cada una de las situaciones en las que se superpone una ficcin con una realidad que nos enfrenta cada da. Y vamos a ver en la calle, en cada esquina, a un Toguy y seguramente a partir de la lectura de esta obra, lo vamos a mirar de otra forma: vindolo. Y vamos a sentir que ese nio nos hizo cambiar en algo, nos hizo reflexionar sobre el accionar de la sociedad en la que estamos insertos, sobre nuestro propio accionar y sentiremos la necesidad de caminar la ruta de Toguy, la de Abril, la del mdico que desafa su propio bienestar en favor del otro. Entonces me pregunto: cuntos nios ndigos necesitamos para cambiar las reglas sociales? Cuntos Toguy necesitamos para sentir la paz que nos da buscar el bienestar general y as justificar nuestra existencia y nuestro propio bienestar? Clarita Marrelli

    BREVE RESEA DEL AUTOR

  • TOGUY toms caballero

    Toms Caballero, naci el 21 de Diciembre del

    ao 1952, en la localidad de Gran Guardia, provincia

    de Formosa. De profesin mdico pediatra.

    Inquieto hombre de la cultura, entrelaz la

    medicina con la poesa, el cuento, la dramaturgia y

    la formacin actoral, incursionando en el teatro y el

    cine.

    Observador silencioso, esculpi sus trabajos en

    forma y fondo, fiel a un modelo personal, rescatando

    los valores de lo abstracto, la belleza, el sufrimiento,

    la injusticia, la distribucin inequitativa de la riqueza

    y el amor.

    Sin temor a desnudar las pasiones humanas, sus

    sueos, sus fantasas, poniendo de manifiesto su

    reconocida sencibilidad y romaticismo.

  • TOGUY toms caballero

    COMENTARIO

  • TOGUY toms caballero

    TOGUY: fue concevido como un emblema de la

    hipocreca que domina al mundo.

    No llega a ser un sucedo histrico.

    Naci en una sociedad preada de

    desigualdades.

    Fue gestado en el amor al semejante y el dolor

    de las injusticias

    Los nios y los jvenes son los que pueden

    cambiar las reglas de juegos; para que sea una

    realidad todos debemos colaborar, desde el lugar que

    nos toque participar.

    Abramos los ojos, miremos a nuestro alrededor,

    accionemos.

    EL AUTOR.

    AGRADECIMIENTOS

  • TOGUY toms caballero

    A mis padres, por darme la vida y educarme

    con el ejmplo.

    A mis maestros por ensearme sin

    mesquindades.

    A mi familia por apoyar siempre mis

    inquietudes.

    A mis pacientes por permitirme mirarlos a los

    ojos y crecer con ellos.

    A mis desinteresados colaboradores

    OTRAS OBRAS

  • TOGUY toms caballero

    CANTO DE AMOR Y ESPERANZA I

    CANTO DE AMOR Y ESPERANZA II

    ENTRE CADILLOS Y ALGODN

    ANTOLOGAS POETICAS Y TEATRAL

    PRESENTANDO A TOGUY

  • TOGUY toms caballero

    An el semforo miraba en verde. Al llegar a la Av. Los Lapachos tuve que frenar con brusquedad, estaba sentado en la platabanda con sus pequeos pies sobre la acera:

    Oye chiquito por favor! No tens miedo que te apriete los pies?

    Se encogi de hombros mascujando a voz de alto murmullo como para orlo:

    - Bah! qu vieja culo crespo! ... y mirando sin mover los prpados, -No tens una monedita Ta?-.

    - Te espero cruzando la avenida-, contest. Dicho esto, estacion cumpliendo con la ley; apenas baj del auto ya estaba prendido de mis ropas-.

    - No tens un centavito Doa?- Tendra unos seis aos. Con dos grados bajo

    cero de sensacin trmica, descalzo, sus cabellos rubios eran una pasta mezcla de tierra, restos de vegetales pegajosos. Se rascaba casi con desesperacin. La cara mugrienta. De la nariz colgaban dos mocos amarillentos que de tanto en tanto se quitaba con la mano o fregndolo con el antebrazo; los labios y los cachetes paspados por el fro. Vesta una camiseta mangas largas y un pantaloncito corto, deshilachado. Lo tom de la mano, nos sentamos en un cantero de la vereda, comenc una pequea charla:

    - Cmo te llams?- - Toguy Y vos Doa?- - Abril y decime Cuntos aos tens?-

  • TOGUY toms caballero

    - Siete, pero vos Ta parece que tens un montonazo porque ests requete arrugada y vieja No?-, lo dijo con la inocencia de un nio

    - Decme una cosa No tens una tricota? No sents fro?-

    - Una qu Doa? Ahora ando solo El Cabezn se mandao temprano con el camin de la soda y no gelve.-

    - Pero es la una de la maana Con quin volves?-

    - Ya va a lleg el Cabezn, se ju a las seis a chori, despus viene, si consigue algo nos rajamos pa ll, comimos un poco, despus se vamo pa las casas.-

    - Quers estas galletitas? - Y... geno... pero el Cabezn siguro trae la bolsita, eso es gueno pa pasa la noche.- - Qu bolsita?- - La bolsita con el posi .... la puta que soi

    preguntona Ta Me das o no la monedita?- - Ome...sos muy pequeo... No vas a la

    escuela?- - Ja!... no me hagai reir Doa.... tanta pregunta

    y pregunta y no me dai el centavo..... Acaso yo te andoy preguntando de ande chori ese chorro e guita que tens en los bolsillos?-

    - Ey, nio! No hables as. Yo no tengo mucho dinero, slo lo que consigo trabajando, no robo a nadie.-

  • TOGUY toms caballero

    - Ja!... pa lo que mi importa!..... yo quiero un centavo y chau.... a ver... Doa.... siguro que vos soi dotora No?-

    - No. Tengo otra profesin, trabajo en un laboratorio, si vos quers te invito a conocerlo.-

    - Al lavatorio? Ni loco.... es embolante que me manden a ba, me cago de fro y despus viene la gripa y no tengo aliento pa anda de aqu pa all cirujiando. Una vez tena mucha fiebre y me ba, despus derecho al hospital a internar, eso fue porque me agarr la frialdad-.

    - Un laboratorio es un lugar muy lindo, te va gustar conocerlo, eso s.... tendras que baarte.-

    - Ni en pedo, Ta cmo dijiste que te llamabas?-

    - Abril, mir sera bueno que te cuides un poco No tenes miedo que te atropellen y te maten?-

    - No importa Doa, no se pierde nada.... pero si vos quers me pods regal un disman... eso pa escuch las cumbias.... me gusta la musiquita, esa del gusanito Te gusta?-

    - Ay Toguy, As es como te llamas? tom... con esto compras una leche y vas a dormir. Nos vemos maana y seguimos nuestra charla Te parece?-

    - Bah! Siguro que maana ni te acords que existo, todas son iguales... por eso digo.... qu importa si un auto me ramia o no.... si despus nadie te da bola....-

  • TOGUY toms caballero

    - Yo quiero verte maana... tenemos mucho de que hablar-.

    - Y... si vos quers.... meta noms pues... si traes el disman te espero...-

    -Nos vemos entonces.- Sub al auto; viaj como atontada. Se

    arremolinaban todas las sensaciones al mismo tiempo, se entrechocaban unas con otras; por un lado vea sus dos mocos colgando de la nariz, por otro oa su voz que de tanto posi muy precoz se volva adulta, senta el fro adosndose a su piel y tena fro yo tambin an estando bien abrigada. Toguy? Qu significado encerrar ese nombre?. La cumbia el gusanito Cmo suena?. Sus mocos, sus temblores, su mirada perdida, su voz distorsionada:

    - Si me trais el disman te espero - eso dijo y el cabezn Quin ser? Qu hombre tan desalmado, dejar as en la intemperie a un inocente mita!. Sus mocos, su mirada esquiva, vieja culo crespo Ten una monedita Ta?, este lenguaje tan especial, De dnde ser oriundo?, no mi importa si el auto me ramia, total no se pierde nada... esto hizo perder el control de mis emociones y... y... casi lloro... va!! en realidad estaba llorando en silencio...

    Me atropell la noche sumida en cavilaciones, me atormentaban, dominaban mi accionar. Todo lo experimentado era superior a las naturales defensas atvicas, pensaba en las personas ateas Tendran razn en sus principios?

  • TOGUY toms caballero

    Al amanecer, quise tomar una taza de caf, ste achicharr parte del paladar, la ansiedad araaba el pensamiento, an no era la hora pero apresurada corr a la calle sin calentar el motor del auto, o que alguien deca algo desde casa, nada entend, solo quera partir, hallar al pequeo.

    Llegu a la esquina del da anterior y nada... el gorrin no estaba. Esper a que el semforo diera luz verde. Por primera vez quera que ese zorro mecnico se quedara clavado en el rojo, pero tuve que continuar la marcha previo bocinazo del seguidor circunstancial. Llegu a la esquina, gir a la derecha cuatro veces, circulaba de nuevo en la avenida Los Lapachos. Los cien metros recorr a paso de hombre poniendo a pruebas mi testadurez, oponindome a las presiones de los viajantes del momento, ningn improperio ni insulto me afectaba, vieja culo crespo eso quera or, pero nada. Desilusionada, prosegu.

    Llegu a destino. En el cajn de cuatros paredes donde da a da paso gran parte de las horas, en total embeleso con los elementos de trabajos, stos resultaban extraos, raros, los vea borrosos, algunos hasta desconocidos. Luego de caminar sin saber a donde, buscando nada, me dispuse a trabajar. Extend el brazo derecho tratando de tomar un frasquito del ltimo escaln de la vitrina y la Timina Tritiada por poco no alfombr la oficina, tuve que arrojarme al piso para abarajarla. Hubiera sido una verdadera catstrofe, con seguridad tendra que ir a

  • TOGUY toms caballero

    dar cuenta porqu estaba all ese material tan peligroso, porqu un manejo poco cauto del mismo. En consecuencia, mi estabilidad laboral navegara en globo aerosttico en medio de un huracn. De inmediato hice lo que deba.

    Muda, miraba el piso, slo alcanc a divisar dos mocos chorreando de una silueta sin forma.

    No atin a iniciar las tareas, tom la llave del auto, sin decir nada a nadie, emprend el regreso hacia la avenida Los Lapachos.

    En la misma esquina estaba. Vio que estacionaba, de nuevo sus longos mocos verdosos apoyados en los cristales del auto. Con sonrisa amplia, fresca, alegre, su mirada interrogaba con mil preguntas a la vez, todas juntas, en su media lengua.

    Baj del auto, atac sin piedad: - Ta, Trajiste el Disman?... vos prometiste

    Ta! Si no trai el Disman es porque sos igual a todas. Yo tei dicho que quiero escuch la cumbia! Trajiste, s? el Cabezn dijo que va a tra la cumbia del gusanito... l seguro que cumple Me trajiste ta?.

    Habl sin parar, dira hasta sin respirar. - Hola Toguy-, dije feliz. Habl mas lento, no

    te apresures, te vas a ahogar en tus propias palabras.-

    - Eeeh, Ta! Cmo me vi ahog en mis palabras? Uno se ahoga en el agua... y yo no tengo cmo, ya que agua no tengo, ni quiero tampoco. Solo quiero mi Disman. Trajiste o no? mmmm ya

  • TOGUY toms caballero

    s... no mia traioo...... ya me pareca que eras igual a todas las dems.-

    - Las dems Tambin son culo crespo Toguy? - Ataqu tratando de aminorar el impacto de su acoso respecto al equipo de msica que tanto quera.

    En su plida tez floreci la inocencia, como si fuesen dos manzanas apetitosas, maduras. Sus pecas, incontables, se iluminaban como serpentinas. Quise comrmelo a besos. Supe que an era un nio, que la vida con sus trampas lo haba impulsado a ese lugar a sobrevivir de manera tan miserable.

    - Cmo era que te llamabas vos? - Interrog , escapndose l tambin del ataque.

    - Abril, como el mes Sabes que hay un mes que se llama Abril?-

    - Mmm, sip.- - Toguuuyyy! Ests mintiendo!- El silencio habl por l, por sus padres, por el

    gobierno, por las entidades intermedias que asisten a nios carenciados y en especial, habl por la sociedad en su conjunto. Me siento parte de ella, donde l tambin respira. Con l comparto aire, oxigeno, ambiente, calles, la ciudad, el pas, mi pas, nuestro pas, sus leyes que con seguridad no son iguales para todos. Toguy era el reflejo hecho persona de la hipocreca de las polticas educativas. Ser por eso que no pude dormir desde el da que conoc a ste pequeo gorrin de la calle? Un dolor lacerante, ardiente, aprisionaba mi garganta. Ni la saliva poda tragar.

  • TOGUY toms caballero

    Met con lentitud la mano en la cartera, buscando algo para el pequeo.

    - Ta!! Mi trajiste el Disman!!! -Grit desesperado.

    - No, no, te traje eso. Te traje un Nugatn...- - Un ratn? Acaso me ves como un gato de

    los basurales, ah?- Respondi ofendido. - Nu-ga-tn, es una barra de chocolate, muy,

    muy sabrosa- - Chocolate? A ver, quiero ver como es.- Aprision la pequea reliquia, retir su

    envoltorio, oli, gir entre sus dedos, luego comi un buen trozo del mismo, disimulando su generosidad guard el resto en el mugriento bolsillo.

    - No te gusta el chocolate? - pregunt - Si mi gust No vi que lo com entero?- - Nooo, no no no, no te lo comiste a todo. Por

    qu guardaste un trozo en el bolsillo?- Sus inocentes ojos adquirieron un brillo con mil

    palabras en el aire, dijo con voz goteando de su garganta:

    - Es para el Cabezn. El nunca come estas cosas. De seguro li va gust. El vive choriando pero es muy bueno conmigo.-

    - Est bien, tom estos cuatro ms. Saba que te agradara por eso te traje cinco barras. Me perdonas por no comprarte el diskman? Tal vez algn da...-

  • TOGUY toms caballero

    - Vo ten una chorrera 'e guita. No te cuesta traer uno - dijo ms calmado, entretenido comiendo su golosina, haciendo pucherito con la boca.

    No quise comprar su voluntad. Slo endulzar su vida por unos segundos aunque ms no sea. Adems, comenzbamos a trabar buenas migas. La amistad sincera no se compra ni se vende, se la conquista. No soy, no he sido ni creo que sea poltica alguna vez, no era intencin intercambiar trofeos. Con sinceridad deseaba conquistar su amistad. Todo naca del fondo ms puro de mis sentimientos.

    Gir sobre mis pasos para salir de alli y me tropec de lleno con el preocupado rostro de Jacinto. -Vos por aqui? Que pasa? -Nada, nada...- Cmo nada! Tu cara no dice eso...- -Es que sta maana te vi salir tan...tan...a ver...cmo decirte...tan distraida, tan distante que me preocup y te segu.- -Entend bien? Te preocupaste por m! Contest tratando de ocultar mi extraeza y por qu no decirlo mi vaindad de mujer. -S, me preocup, Hago mal en preocuparme por vos? -No, yo no dije eso...pero...a ver...a ver... Qu es lo que pasa por tu cabeza eh? -Ests tan distante, tan diferente...- -Ah! Penss que me veo com otro!- Ataqu como defensa propia pues vea venir sus agresiones.

  • TOGUY toms caballero

    -Slo te dije que me preocupup tu manera de actuar, tu actitud...como esquiva...como ocultando algn secreto...hablamos tan poco ultimamente...- -Ultimamente...as es que me andas siguiendo...mir vos...- -Sabs uma cosa... no quiero que te pase nada malo...mira dejaste en la sala tu portafolios, que es para vos como tu vida.- -Gracias...si quers saber la verdad, te lo voy a decir...- -A ver...- -S me veo com otro...- -Abril!- grit con el rostro plido de ira -Cmo?- -Que me veo con otro- dije tranquilamente -Y me lo decs asi?...- -As como...Dme eso!- Aunque no lo recib, mi rostro sinti su cachetada. -As...tan campante, sin miedo a que reaccione aqu em medio de la calle, sin siquiera ponerte colorada.- -S, as!...- respond desafiante. -J,j,j Dnde est esse...? Y...quin es, se puede saber?...a ver...no me digas que es... -Quin?- -No, nada....ja, j, j.- Not su irona, sent su nerviosismo, sent que ganaba por primera vez en mucho tiempo. -Dale, decmelo...en quin ests pensando...dale... -Lo conozco acaso?- -No, no lo conocs.-

  • TOGUY toms caballero

    -Mejor si no lo conozco.- -S? Se puede saber porqu es mejor? Ahora me apropi yo de su irona. -As no sentir ningn remordimiento cuando lo parta em dos.- -Ah! -Donde est, ah!. -schiiisss....All est! Jacinto mira hacia todos lados, est incmodo, no alcanza a entender qu sucede. -No lo ves?, mirlo.- -Aay, ay , ay querida, yo quiero entenderte Abril, pero Qu es lo que te pasa?, aqu no veo a nadie, a no ser a eseee... -Cuidado con lo que vas a decir.- interrump presurosa. -Abril, querida, hago un gran esfuerzo para comprenderte, pero te aseguro que me cuesta...y eso vos lo sabs muy bien...- -Claro que te cuesta... porque para vos es como si nada hubiese sucedido en nuestras vidas...- -Desde que perdiste el embarazo aqul, nunca ms fuiste la misma- -No me preguntes porqu, pero con ste chico me sucede algo muy especial...siento necesidad de ocuparme de l... y eso me ahoga, me ahoga, Me entends? -S, claro, es lgico- -Quers decir que lo mo es porque no tengo hijos.- -No dije eso-

  • TOGUY toms caballero

    -Pero lo pensaste- -Abril, Abril, por favor, vmos a casa. sta noche lo conversamos Si?- -Ahora que conociste al otro, con el que te engao, and tranquilo, yo todava tengo que seguir charlando con l.- -Tambin tens que conversar conmigo.- -Qu pasa ahora.- -La casa, nuestra casa...- -Qu tiene de particular nuestra casa? A ver...- -Ultimamente lo tens muy descuidada, ya no veo esas flores que tanto te gustaban, mir, no s si lo records pero me pediste que cargara el lavarropas com mis ropas, es como que nada te importa querida- -Est bien Jacinto, and tranquilo.- -Tu casa querida, nuestra casa... acordte que existimos- -S, si, dejme tranquila un momento por favor. Gracias por el portafolios!- -Abril, no te demores querida. Estar esperndote- -Claro, lo tendr en cuenta, enseguida voy-

  • TOGUY toms caballero

    EL SUEO DE TOGUY

    Para Toguy no fue una noche ms. Pas a ser una muy especial. Tanto es as que dej de cirujear temprano. Eran las dos y media de la madrugada de un crudsimo invierno. Tal vez el sexto o el sptimo para l, en realidad no lo recordaba bien. Lleg al pequeo espacio que le corresponda, un hueco mugriento con el aire viciado por infinidad de olores diferentes donde se entremezclaban la humedad ocre y amarga, materiales en descomposicin, restos de vino tinto barato, baando el suelo, desperdicios de roedores y la agobiante falta de oxgeno. l disfrutaba de un perfume que haca unos minutos nada mas haba arrimado a su mucosa virgen de todo aroma agradable, esa Ta desconocida y melanclica que se acerc a conversar con l.

    Encendi el hollinado candil, comenz a examinar los envoltorios de chocolate que le haba regalado esa seora, que al parecer no era tan encrespada como impresionaba al comienzo. Miraba de un lado, del otro, no recordaba el nombre. Estaba escrito en varios lugares del finsimo papel de film, peroooo... adems la luz del candil se agotaba.. se llamaba...

    -Cmo se llamaba este chocolate?... algo asi como... un ratn... un... un... rat... ra...- y la luz se

  • TOGUY toms caballero

    hizo sombra y con la sombra lleg lo irreal al cerebro de Toguy.

    Una bruma gris con cristales violetas, orga de colores invadan el espacio onrico del pequeo aprendiz de ciruja. Un extravagante olor a perfume haca de sbana, lo envolva de cuerpo entero. Jams haba disfrutado tanto de un encuentro con uno de sus obligados adversarios en la vida. De repente vio a su madre gorda, andrajosa, slo que el rostro no era de ella, sino de esa Ta que se acerc a preguntarle tantas cosas.

    Sinti que le tomaban de la mano y comenzaban a caminar por un sendero llenos de espinas, el rostro esta vez era el de su madre y el cuerpo que lo acompaababa el de la seora aquella. Eso lo preocupaba mucho, se esforzaba para que ninguna rama toque la delicada piel de su acompaante. La lastimara, sangrara, no quera que sufriera por nada, es que:

    - Fue tan buena conmigo - deca sin hablar, moviendo apenas los resquebrajados labios, azotados por el fro.

    De repente una desdentada y mamtica mujer le dio un empujn. Sinti elevarse hacia el techo traccionado de una parte de su crencha, un grito acusador deca:

    -Porqu no mirs por donde camins?. Con razn algunos te llaman Tab -.

    Gir una, otra vez sobre su propio eje, mucho espacio no tena, se rascaba la cabeza con bronca,

  • TOGUY toms caballero

    casi con desesperacin, nada ms que esta vez l pensaba que se estaba frotando el lugar de donde su verdadera madre haba arrancado un mazo de pelos quebradizos, pegajosos, color ladrillo.

    Al instante de nuevo sonrea, masticaba nada, abri los lagaosos ojos en dos o tres oportunidades.

    - Vos s que sos diferente a la dagor!. Me gusta caminar con vos, slo que no, eso de... de... tener que baarme... eso hace mal. Con el fro, te puede agarrar la pulmona y si es doble, no te salvas por nada. Sabes ta? En casa me llaman Tab que quiere decir en guaran, loco, opa y no me gusta eso. Yo prefiero que me llamen Toguy, como lo haca ella-. Continuaba sonriendo, gozaba, estaba feliz, se acurrucaba en brazos de esa seora que ola tan bien. Se senta un nio de verdad, se saba amado por alguien. Por primera vez se haba inclinado la balanza de sus sueos hacia la felicidad; por una noche dej de cirujear. Por una noche se supo ser humano, como todos los dems, hasta que alguien ingres corriendo, a esconderse en esa guarida y lo regres a la cruda y agria realidad. De nuevo suspir el fro, la desproteccin, el abandono, la mezcla hednica de la miseria desnudando su cuerpo, sus sueos.

  • TOGUY toms caballero

    DANA

    Dos das despus iba a mis actividades, sin

    apuro pues era muy temprano, apenas las seis y veinte de la maana., an no amaneca cuando pas por la esquina acostumbrada y lo v acurrucado en la platabanda, dormido.

    Sin dudar un instante, fu a su encuentro, lo levant, lo llev al auto, lo acomod en el asiento del acompaante, continu durmiendo un rato ms, estaba contemplndolo cuando v que se deslizaban unas lgrimas por sus mejillas, era estremecedor ver la imagen de ese nio. De pronto, abri los ojos, me vi y dijo:

    - Estaba soanado con ella, Doa - rompi en llanto abrazndose a m. - Con quien soabas? - Con la Dana, mi hermanita menor, que ya si

    muri, porque el hijo de puta de mi tata la mato. - Cmo dijiste? Cmo es eso? - Ella haba nacio deforme, no mucho, yo solo le

    notaba el labio partio, decan que tena labio le... le... - Labio leporino - apresur a decir. - Si, eso... - Y? - Y geno... mi tata, el muy hijo de perra no la quera por eso. - Y entonces?

  • TOGUY toms caballero

    - Un da si mand pa las casas en pedo, como ella lloraba la agarr y... y...

    - Y qu? -Y...primero le arranc el vestidito, despus le rompi la bombachita y...y... le hizo...le hizo!... pareca la Min, la mueca negra de trapo, entre sus piernas. No poda gritar porque le tapaba la boca con la mano Doa... el muy degenerao... yo v todo... y encima... como segua lloriqueando... agarr un cuchillo de la mesa y... li cort el cogote...- El pequeo no poda continuar, en medio de un

    llanto entrecortado. Trat de acariciarlo, contenerlo, pero quera desahogarse y continu:

    - El cuchillo estaba moto y el infeliz no terminaba de matarla...y chorri sangre por todo el rancho y como segua llorando, la agarr por las patas y le golpe la cabecita varias veces en el poste de luz que hay ajuera, hasta que no se a movio ms... y..y..y entonces...

    - Entonces qu? - Lo hizo de gelta... - Qu cosa? - Le golvi a poner entre sus piernas y se rea,

    se rea fuerte y se agitaba y los ojos se le agrandaaban y se cerraban y se agrandaban y se agitaba. Tena el pantaln todo manchado Doa... volvi al llanto.

    - Dios... Cuntos aos tena?-

  • TOGUY toms caballero

    - Iba a cumpl cuatro. Mi amiga la Emilia le iba a hac la torta, igual que el ao pasao-.

    - Y tu mam Toguy?- - Ese no es en verda mi nombre, pero es como

    quiero llamarme ahora-. - Cada minuto me sorprendes ms, es un

    hermoso nombre Me podes explicar eso?- - La vieja mi puso Toms, pero mis hermanos

    me decan Tomy o Taby, menos ella, la Dana, que casi no saba hablar, pero en cuanto poda, abra su boquita y deca Toguy. Yo me pona bien gordo i contento. Por eso, desde que se muri, a todos les dije que mi nombre es TOGUY.

    - Es un nombre precioso y me enorgulleces... ahora decime Y tu mam?

    - A ella tambin la acuchill cuando se queria meter en la bronca... le meti el cuchillo en la panza y as la levant hasta que li llego a las tetas... pero se salv, por ahi anda... medio atontada todava, a veces gelve y otras... nadie sabe ande anda. Pero a ese hijo de puta, en cuanto salga e la crcel, voy hacia all y lo via mat.- - Por Dios, no digas eso.-

    - Y que quiere Doa Abril... lo odio y si los otros no se meten... lo mato.-

    -O sea que lo llevaron preso.- -Si, pero no por lo que hizo a la Dana sino... -Porqu entonces? -Porque un domingo no tenamos para comer y

    le rob un gallo al vecino del frente de casa.-

  • TOGUY toms caballero

    32

    -Un gallo dijiste? Por robar un gallo est preso?- mi sorpresa no terminaba nunca.

    -Si, es que el seor tiene muchos gallos, los hace pelear y gana plata con eso. Y el que nosotros comimos era el campen.-

    -S, El campen! !J! -Si vos vieras el escndalo que hizo por el gallo

    el seor.- -Por un gallo, por un gallo.- -S, es que era el campen ta; Mi campen

    seor, mi campen, no puede ser: mi pura sangre hecho un guiso-; imitaba al dueo del ave.

    -Huyyy!, el campen, si, si el campen!.Decime Dnde ocurri todo eso?-

    -En donde nosotros viviamos, en la bajada.- - Bueno, despus continuamos con eso - dije

    para cambiar de tema, porque ya comenzaba a dudar de lo que me contaba; de inmediato le pregunt:

    - Emilia Quin es?- - Ah!... esa es la amiga de nosotros. Es medio

    conchetita pero es gena, siempre nos espera, nos connvida algo, a veces nos manda a barr la vedera, despus nos sentamos pa charl... Sabs?... ella nos pone la cumbia el gusanito y nosotros bailamos en la calle-.

    - Y como es esa cumbia?- - No la conoces Ta? Si es ms conocida que la

    ruda macho... Es gensima!... ven... baj...- Bajamos del auto... ya en la vereda, l dijo:

  • TOGUY toms caballero

    33

    - As e... mir... - comenz a menearse con unos movimientos muy graciosos, pareca que la meloda deslizaba por su piel, se notaba una habilidad natural para la danza, luego tarare lo siguiente:

    nadie me quiere... todos me odian... mejor me como el gusanito... le saco lo di adentro............ mmmm! qu rico gusanito...!

    Se rea y bailaba, se haba olvidado del macabro

    relato anterior, pero yo no. Me promet hacer algo por ese nio que mostraba a cada instante su inocencia, a pesar de las iniquidades que haba sido obligado a vivir.

  • TOGUY toms caballero

    34

    EL ROBO Sali temprano con el Cabezn. Primero

    recorrieron las vidrieras de distintos negocios dedicados a la venta de artculos electrnicos. Buscaran precio?

    - Tanto te gusta ese disman? - pregunt, el Cabezn.

    - Y... sip... Una ta me prometio, pero naa hasta hoy. A mi me gusta mucho la msica-.

    - S? A ver qu tipo emsica te gusta?- - Mi gusta to-o tipo emsica, mi gusta la

    chacarera, la zamba, el chamam, la polca pero lo que m mi gusta ela cumbia Conocs vo la cumbia del gusanito?-

    - No Toguy, no la conozco, ni que tuviera tiempo para esas cosas. Cmo es la msica?-

    - Efcil de record. Quedate aqu, un rato nada ms. Mira ...-

    Y en medio de la acera un pequeo gurrumn con maravillosa agilidad comenz a danzar y a tararear la cumbia del gusanito que tanto le agradaba.

    Sorprendido por tanta calidad y destreza artstica el Cabezn, acarici la cabeza de su acompaante y le dijo:

  • TOGUY toms caballero

    35

    - No te conoca esa habilidad. Quin ti enseo esos pasos? De donde sacaste ese tema?

    - Mi amiga la Emilia mi enseo, ella tiene el compac. Lo compr en la vedera el mercado. Si tengo el disman , al disco lo chorio y listo.-

    - Ahora me explico porqu no te resististe a sacarte un poco la mugre que tenas encima. Hasta ti lavaste la cabeza, pareces un nio bien, solo que la campera te queda un poco grande - susurr el Cabezn regalando al pequeo malandrn una mirada bonachona, poco usual en l.

    Mientras Toguy bailaba y tarareaba su msica para el Cabezn, una multitud comenz a rodearlos, ya se oan algunos aplausos, hasta un otra! otra! otra!

    - Colaborando con una monedita p el artista pog favo! - Se escuch murmurar al nio bailarn. Esto hizo que la gente recordara de inmediato que tenan poco tiempo y muchsimo por hacer todava. En un santiamn la acera qued tan limpia, despejada como el da sbado despus de un repentino aguacero.

    - Tengo una idea Toguy - carraspe el Cabezn. - S? Mmm... parece que estas pensando lo

    mismo que yo. A ver mirme aqu, a lo ojos, a ver, a ver... si es lo que yo pienso, no hay problems, as di paso le choriamos algo a los curiosos.

    - Te anims Toguy? - A bail en la calle? Claro que mi animo!

    Pero vo so el qui ten que chori. Yo bailo y pido la

  • TOGUY toms caballero

    36

    monedita y vo en lo tuyo. Perooo... parece que no va a pod s che.

    - A ver? Porqu no se vamo a pod? - Yyyy... no tenimos el disman. Con qu vi

    escuch la msica ah? Sin la msica no se pue bail tanto, se va dir la gente enseguida.

    Prosiguieron su camino sin apuro, en realidad, no deban llegar a ningn lado ni compromiso alguno los acosaba. Se chocaban con los paseantes, cientos en una maana fresca, blanquecina como las anmicas mucosas del nio.

    A un gesto casi invisible del Cabezn el pequeo ciruja se larg a llorar a los gritos, sin consuelo, se vio en el piso tomndose el abdomen, llorando sin parar. Todos ofrecan auxiliarlo, momento ms que oportuno para el Cabezn y su magia punguistica. Con dos billeteras ajenas en su bolsillo lanz un silbido caracterstico, el nio se fue calmando, aceptando algunas golosinas ofrecidas por compasivas mujeres viandantes.

    Entrelazados en la multitud, arrastrados por la torva seguan su andar buscando la felicidad, como le gustaba filosofar al Cabezn. l sostena que la felicidad estaba adormilada en el instante mismo de hacer las cosas, buenas o malas pero al hacerlas. Llegado al final del hecho, ste pasaba a ser recuerdo y no produca la misma sensacin placentera de estar concretando algo. A veces es cosa de un segundo nada ms. Si los obstculos son

  • TOGUY toms caballero

    37

    mayores, mximo los goces, que podran llegar a tener un piso pero jams un techo.

    Letreros gigantes, luces de nen parpadeandos como si fuesen los ojos de una dama tratando de conquistar su corazn los invitaban a ingresar al Mundo electrnico, nombre que distingua a un inmenso negocio repleto de compradores.

    - Uuuyyyy... mira la cantid e disman qui hay aqu. Dentremos a ver Si ah?. En una di esa nos podemos llev uno - vociferaba excitado Toguy, a la vez que daba pequeos salto alrededor de su hermano.

    - No ti apures, debes calmarte, con esta facha y as atontado nos descubrirn pronto. Record que cuando la tormenta se avecina la calma te puede salvar la vida - sentenci sereno el Cabezn.

    - Vamos antes a la estacin de servicios de la esquina - propuso resuelto.

    - A qu vamos a dir all, si el disman est aqu?. Yo quiero entrar aqu - se encocoraba el excitado gurrumn.

    - Vamos primero all, luego regresamos, haceme caso, tranquilizate - orden el punguista.

    Una vez llegado al lugar, buscaron de inmediato el bao del local. Hacia all se dirigieron. Adentro, tramaban una y otra vez cmo haran para apropiarse del equipo de msica sin ser advertido por los vendedores. Toguy soport estoico que le lavaran la cara, le ordenaran la ropa, acept con disgusto colocarse una gorra de lana en la cabeza.

  • TOGUY toms caballero

    38

    - Es que tens el pelo igual a un mazo de perejil seco, quebradizo y abandonado en una quinta vida de agua - murmur el Cabezn mientras acicalaba a su acompaante.

    -Que bien que habl vo; algn da yo vi habl como vo-

    Se miraron por ltima vez en el manchado espejo del lugar, partieron resuelto, exitados en busca de accin.

    Una mirada ingenua, una sonrisa frgil y un andar sutil los recibi a la entrada del local.

    - En qu puedo serles til? - inquiri la sonrisa. - Deseamos ver los diskman - contest sereno el

    Cabezn, que tomaba de la mano como a un nio tierno y frgil a Toguy, ste era la imagen viviente de la inocencia.

    Frente al mostrador donde se exhiban telfonos, radios, equipos musicales de los ms variadas modelos y tamaos, trabajaban dos empleados apabullados por la cantidad de clientes.

    -El nmero treinta y cinco- se oy llamar, mientras el otro empleado trataba de mil maneras diferentes hacer entender a una cliente las razones de los precios, el porqu las diferencias de valores si la compra era al contado, con tarjetas de crditos o crdito a sola firma.

    El Cabezn hizo exhibir casi todos los modelos de diskman dispuestos para la venta, siempre algo no lo conformaba, algo faltaba al equipo. La

  • TOGUY toms caballero

    39

    impaciencia y el nerviosismo crecan como creca la clientela ansiosa por ser atendida.

    La seora de los precios increp con dureza al empleado, ste reaccion palideciendo como palidece la noche con el albor primero, antes de abofetearla con eptetos no recomendables y en la seguridad que costara el puesto a su compaero de tareas, el vendedor que estaba atendiendo al Cabezn se alej de donde estaba, concurri en auxilio de su amigo. Tiempo y circunstancia ms que suficiente para que Toguy guardara uno de los equipos dispuestos sobre el mostrador-vitrina, coloc un cenicero de madera, ofrecidos a los clientes, en su reemplazo en la caja correspondiente. Lo hizo metido entre las piernas del Cabezn, protegido por la campera dos talles mayor al suyo. En medio del alboroto generado, protestando por la ineficiencia de los empleados el Cabezn y Toguy se retiraron del lugar. Eran felices, pero con goces diferentes. El uno, por la accin realizada, el otro porque acariciaba su pequeo tesoro escondido entre el abrigo.

    - Ta, ya no necesito ms que mi regales nada - repeta para su adentro.

  • TOGUY toms caballero

    40

    LA DEVOLUCION Durante unos das no fue posible pasar a

    visitarlo, en mis retinas bailoteaban su imagen, sus gestos inocentes, sufridos. Cuando por fin pude, lo v desde lejos, estaba balanceando su cuerpo de aqu para all, bailaba, tarareaba algo que con segurididad sera su cumbia, su rostro no era tal sino una sonrisa amplia y feliz. Estacion, esper a que se acercara, mientras busqu lo que tena para l, baj del auto con el presente.

    - Hola, Toguy salud, le d un beso. - Hola, Doa Abril, hace mucho que no vens...

    Qu ti anda pasando? - Nada, no me fue posible... - Qu andai medio tristona? - No, no pasa nada.. te extra Sabes? - Ah, qu geno!... Qu tens en la mano? Mi

    trajiste algo, un chocolate? Segua moviendo los pies al ritmo de una

    meloda, cuando advert que de sus odos colgaban dos cables, v el bulto en su bolsillo.

    - Toguy tenes un diskman! De donde lo sacaste? - Baj la cabeza tratando de esconder su verguenza, desnudando su verdad, yo traspiraba finito.

  • TOGUY toms caballero

    41

    - No me digas que lo robaste... Porqu hiciste eso? Tomar lo que no es nuestro est muy mal, no debe hacerse.-

    - Yo quera uno, vos ibas a traer pero no apareciste ms.-

    - Las cosas no se obtienen as, hay que ganarlas con esfuerzo, si tenemos que esperar para conseguirlo, se espera. Cuando ms nos cuesta algo, ms lo queremos despus-.

    Dicho esto sub al auto, dej el paquete en el asiento, hu del lugar. Estaba desilucionada, triste, miles de espinas se clavaron en mi garganta. Anduve un rato, detuve el vehculo, no estaba bien lo que hizo, sobre todo porque... entonces pens... si quiero que sea un nio de bien, tenemos que empezar ahora; volv.

    Cuando vio que estacionaba, corri a mi encuentro, diciendo:

    - Disculpame Doa, no le gelvo a hac, pero no te enojes-.

    - Estoy triste, no pude venir antes, tuve unos inconvenientes, pero pens mucho en vos. Tanto que hoy traa un regalo para darte-.

    - Qu mi trajiste Doa?- Miraba y miraba el paquete tratando de

    adivinar, viendo mi expresin se puso serio, pregunt:

    -Mi trajiste el disman? - S, Toguy... - Doa...!

  • TOGUY toms caballero

    42

    Se le llenaron los ojos de lgrimas, no saba que hacer, retir los auriculares y el aparato de su bolsillo, me los entreg.

    - Yo no quiero este Doa, quiero el que mi trajiste vos-.

    - Solo te lo voy a dar si antes reparamos el dao que hiciste. Iremos al lugar de donde lo sacaste, lo devolveremos-.

    - Tai loca vos, me van a llev a la crcel, me van a mechone y todo eso...no, ni en pedo pienso, no quiero ir.

    - No te van a hacer nada porque vas a ir conmigo, te lo prometo, debemos hacerlo para que recuerdes que nunca ms debes tomar lo que no es tuyo y vas a ver qu hermoso es respirar libre de culpas. Sub al auto, dale sub.-

    Demor un poco, a desgano obedeci. Con la cara llena de angustia y desolacin entramos, pregunt por el gerente, una vez con l dije:

    - Seor, aqu venimos a devolver algo que no es nuestro.

    Toguy extendi las manos con el aparato, el gerente lo recibi, lo mir fijo y le dijo:

    - Espero que no vuelvas a hacer esto otra vez. El nio patitieso, nada contest. Haba algo en

    esa mirada Ped disculpas por l, saludamos, nos fuimos.

    Ya frente a frente, aprision sus pupilas y dije:

  • TOGUY toms caballero

    43

    - S que te cost hacer esto, pero es como debe ser, tienes que aprender a no tomar lo que no es tuyo nunca ms Estamos de acuerdo?-

    - S...- - Bueno, ahora vamos... quiero que pienses bien

    en esto, volveremos a vernos maana, recin entonces te dar mi regalo. Adems quiero pedirte que traigas a tu mam, necesito conversar con ella.-

    - Le vai a cont todo?- - Solo necesito hablar con ella Podrs traerla?- - Y... si la encuentro, le digo que venga, pero no

    le conts nada, por favor.- - Prometeme que te vas a portar bien, quiero ser

    tu amiga, protegerte, pero tenes que ser recto en tus acciones.

    -Geno, lo prometo... por ahora.

  • TOGUY toms caballero

    44

    NO TODO ES TAN FACIL

    Mientras regresaba pensaba... por ahora! Haba dicho por ahora.....qu pillo salvaje este chico, pero aprend a quererlo, me agradaba su sinceridad... por ahora! por ahora, no poda dejar de repetir con una mueca feliz en mis labios.

    Toguy vi alejarse el auto sin posibilidad de detenerme, sinti liviano su bolsillo, no le molestaba nada en los oidos, la cucaracha era un recuerdo, se palpaba, y... nada; sali corriendo detrs del vehiculo. Vano esfuerzo, me haba escapado, como fugaz eran mis visitas.

    - La ta me hizo el cuento del to!. Qu tonto fui! Siguro que ella trabaja para esa gente. Es una ms de los que roban a los pobres, con guantes blancos como dice el Cabezn. Ahora que le digo?. Ya s... le dir que mi robaron... pero... eso es peligroso porque l ya conoce a todos los que chorian por ac, adems somos nuevo en la zona se armar una!. No, mejor digo otra cosa... a ver.. si le pasa algo por mi culpa Ya s!

    En ese preciso instante un patrullero se detuvo frente mismo donde perplejo elucubraba Toguy. No tubo tiempo de huir.

  • TOGUY toms caballero

    45

    - Qu hice yo seor? - imploraba, tirndose boca abajo, adhirindose a la madre tierra.

    Un polica enorme, con un abdomen gestante de por lo menos ocho meses, tom la cintura de su andrajoso pantaln. ste no resisti. Es que Toguy estaba pegado al suelo, con las uas clavadas en el mismo. Con toda su vergenza a la vista fue introducido con brutalidad a la crcel rodante. Ya en el vehculo, un poco ms calmado pregunt de nuevo:

    - Qu hice yo seor? Porqu me llevan? Yo no mat, no rob, no mi estoy drogando, no molesto a nadie.-

    - Qu no robaste decs? Ests seguro pequeo ladronzuelo? Vas a tener que decirselo al Sr. Carlos, el dueo del Mundo Electrnico, que te conoce muy bien. En realidad Quin ya no te conoce a vos pibe?

    - A donde me llevan? La ta!. Flor de ta mi resulto!-

    - No preguntes nada! Y Callte, mita de porquera! Pareces un mariquita. Segus protestando y te vamos a devolver al lugar de donde viniste - fue lo que recibi como respuesta.

    Al otro da temprano pas por el lugar acostumbrado.

    - An debe estar dormido - me dije, poco convencida.

    Lleg la hora en que el sol viva un cuarto de su recorrido lumnico, el paquete de regalo en mi escritorio pareca decirme: Llvame junto a l.

  • TOGUY toms caballero

    46

    Sin decir nada a nadie enfil sonmbula hacia la avenida Los Lapachos. Alguien invisible me alertaba: algo no anda bien.

    Al llegar al semforo, mi corazn lata rengueando. l no estaba. Ocupaba su lugar una persona que por las facciones era Toguy hecho casi un hombre. Preocupado, miraba hacia todos lados. No dud:

    - Ese debe ser el hermano-, murmur. Ni bien estacion se acerc presuroso: - Usted debe ser la ta - fue su presentacin

    dubitativa, casi avergonzada. - Toguy habla mucho de Usted - agreg,

    sabiendo casi con certeza que estaba ante la persona indicada.

    - Dnde est l? - Respond, certificando su acertijo.

    - El seor del kiosco dijo que ayer lo llev la yuta. Debe estar en la sexta. Usted podra ayudarnos seora? - indag rogando.

    - Est bien Qu hizo? - pregunt y recib como respuesta un gesto, una mueca de desconcierto.

    - Nos vemos all?- propuse inquisidora. - Es que yo... seora... - alcanc a or que

    ensayaba una justificacin. Ya en la recepcin de la comisara sexta,

    escuch su voz pidiendo auxilio, vomitando mil improperios de todos los colores, era una orga de insultos. Cada grito iba acompaado de unos golpes en una puerta metlica inmensa, color verde

  • TOGUY toms caballero

    47

    desteida, corroida por el oxido. Cada tum, tum! Pareca de ultratumba.

    - Toguy!? - Grit a la altura de la cerradura. - Sos vos Toguy!? - Seora, Por favor! Usted est en una

    comisara. No puede hacer eso. A quien busca usted?

    Los golpes a la puerta cesaron, imaginaba a mi pequeo amigo agazapado, transpirado a pesar del fro, ansioso porque alguien lo saque de esa caldera.

    - Busco a Toguy seor - respond, tratando de serenarme. Temblaba entera. Jams pens estar en una situacin similar.

    - Clmese seora, tome asiento. Recapitulemos: aqu no tenemos a ningun Toguy. Cmo es la persona a la que est buscando? Cul es su nombre de pila?

    - Slo s que es un nio, un inocente, un ngel solitario, abandonado a su suerte por Usted, por m, por la sociedad toda.

    - Yo no he abandonado a nadie seora! Tenga cuidado con lo que dice! Si no aclara el nombre de la persona por la que est tan interesada no podemos ayudarla. Al menos aqu - agreg molesto el oficial de turno.

    - Toms. Toguy, s, s, Toms se llama. Adems conozco su voz, cuando ingres aqu lo o con absoluta claridad pidiendo auxilio. Cmo es posible que encierren as a un nio indefenso?

  • TOGUY toms caballero

    48

    Al escuchar mis protestas, tom confianza y exclam:

    - Taaa! Aqu estooooyyy! Y su vocecita se prolongaba por los pasillos oscuros, siniestros, como un eco de nunca acabar.

    - Ese pequeo bribn es su sobrino, seora? - pregunt sorprendido el agente.

    - No lo es en realidad, pero s, s, s, es mi sobrino.

    - Seora, es o no es su sobrino? - No lo es por gentica pero s desde el punto de

    vista social como tambin lo es de usted y de todos los que componemos esta complicada sociedad - aclar con ms confianza.

    Mi lucha se estaba iniciando, deba serenarme. No soy letrada y olfateaba que no sera tan fcil rescatar de las garras de la injusticia a mi pequeo amigo.

    - Aqu llega el seor Carlos, parte interesada en este asunto. Saquen al pillo de all - orden a un subalterno.

    Cuando apareci, quice abalanzarme sobre l, protegerlo en mis brazos. Una helada orden a mi espalda lo evit.

    - Seora, por favor! Sernese, el nio est acusado por el seor Carlos Constantini!

    Recin all pude ver al seor Carlos. No era otra persona que el gerente, dueo de la casa Mundo Electrnico, donde habamos ido a devolver el diskman aquel.

  • TOGUY toms caballero

    49

    La indignacin, limitando con el odio invadi mi ser, espetndolo sin temor alguno:

    - Ser posible que Usted haya sido capaz de esto?. Con razn esa mirada cuando fuimos a hablarle..

    -Seora... -Ser posible?- -Usted no se imagina las veces que me robaron;

    estoy hast ac de los ladrones... -Pero el chico devolvi lo que llev, yo misma

    lo acompa o ya se olvid de eso- -S lo recuerdo, pero algn freno hay que

    ponerlos. Me tienen arto, no me dejan trabajar tranquilo.-

    -Es nada ms que un nio, mrelo. Algo debemos hacer por l -

    -La entiendo seora, yo slo pido me dejen trabajar en paz. Estoy cansado de los ladrones menores de edad.-

    -Ser posible que una persona de su posicin, no sepa valorar lo maravilloso que tiene el arrepentimiento? El valor intrnseco que encierra ese acto, principio y base de la dignidad del hombre. Es nada ms y nada menos que un nio. Mrelo. Todos somos responsables de su situacin. Todos debemos trabajar por l. Es un nio brillante. Le falta oportunidad y le sobran desprecios

    Rojo de ira, el seor Carlos, dueo absoluto de los agentes de turno, hasta pareca en posesin de la

  • TOGUY toms caballero

    50

    comisara en su totalidad, respondi interrumpiendo mi alocucin.

    - Seora! Si Usted defiende con tanta vehemencia a este ladronzuelo es tan culpable como l, por lo que me ver obligado en ampliar mi demanda hacia su persona. No alcanzo a comprender cmo una seora de su alcurnia tenga un comportamiento semejante.-

    - Haga lo que le plazca seor! Yo slo s que la avaricia, la indignidad, la miseria humana, la mediocridad son hermanas entre s y por lo que puedo ver usted las tiene a todas conviviendo consigo, la nica alcurnia que conozco es la de pertenecer a la raza humana.-

    - Estos engendros humanoides, no son dignos de cohabitar con nosotros, seora, forman parte de la lacra de la sociedad, no merecen vivir siquiera. Cada da me convenzo ms y ms de la necesidad de disminuir la edad de la condena - fue notorio como el indignado y descontrolado empresario quera reabsorver sus palabras, tragrselas, bailoteaba en sus carnosos labios el arrepentimiento de haber esbozado lo que dijo.

    -O bien ser muy difcil evitar la formacin de un escuadrn ...-; quizo acotar el Agente de Polica

    -De la muerte? complet presurosa, mirndolo por el rabillo del ojo.

    -Seora! El seor agente no dijo tal cosa- Me transfom, sent que la sangre herva a

    borbotones en mis venas.

  • TOGUY toms caballero

    51

    A no? Podran explicarme con ms claridad qu es lo que quizo decir?. Hubo una ciudad aqu cerquita noms que se hizo muy famosa por sus escuadrones de la muerte. Saben ustedes que fue uma verdad, muy lamentable por cierto-

    -Nosotros seora, estamos muy lejos de los treinta millones de habitantes como ellos.-

    -O sea, si Formosa tuviera treinta millones de habitantes se justificara la conformacin de un escuadrn...saben una cosa...- Me par enfrente de ese poderoso hombre, clavando la mirada lo apual con palabras

    -Yo misma me ocupar para que todo el mundo se entera que aqui en Formosa existen personas que quieren aniquilar a los chicos de la calle.-

    -Seora! -Seora, seora! Asistir gozosa el funeral de

    Mundo Electrnico.- -Usted est exagerando demasiado.- -LLamorn al Juez de Menores o prefieren que lo

    haga yo.- -Nadie creeer lo que est diciendo, ni siquiera

    su protegido.- -Sabe lo que har con su empresa, con las

    personas como ustedes y con su miserable aparatejo?. Esto! - dije arrojando al suelo el diskman comprado en el negocio de mi interlocutor, para regalar a Toguy. El equipo se parti en mil pedazos, una esquirla tropez con su rostro rubicundo.

  • TOGUY toms caballero

    52

    Toguy tom coraje y viendo mi valenta se anim a hablar:

    - Soy un mita num. Pero lo que dijo esta ta es cieto. Tan cierto como que yo naci de la barriga de una mujer, igual que ustedes. Si ando vagando por las calle es nada m porque nadie me mir nunca. Porque nadie se acerc a preguntarme qu necesito, si tengo paps, ni donde vivo, ni si tengo hambre. No s lee ni escribi pero se pens y tambin se razon eh.

    Pero a Dios le d ltima y mando a un ngel que no me tiene asco ni miedo, hasta me d besos y todo.

    Ahora por suerte s quin soy, tengo un espejo donde mirarme y lo ms grande es que ya s hacia donde quiero caminar.

    Form nom eso que es para matar a los chicos seor Carlos No le tengo ni un carajo de miedo!. No mi importa nada. -

    Todos nos quedamos mudos ante semejante

    discurso del nio. En ese preciso instante se present el Juez de

    Menores. Se hizo un silencio de nunca acabar. Don Carlos tena los ojos ingurgitados, estaba a punto de volcar unas lgrimas.

    - Qu sucede seor oficial? Porqu el apuro en llamarme? Saben que estoy muy ocupado todos los das. Espero no sea una pequeez la causa de su llamado - fue la manera de presentarse el magistrado de turno, ignorndonos.

  • TOGUY toms caballero

    53

    - Seor Juez, seor Carlos, seora... seora... - Abril - me apresur en contestar. - Ah, si, seora Abril. Podramos pasar a la

    oficina por favor? As discutimos como corresponde esta cuestin-

    Una hora despus, sal con Toguy tomado de la mano. Al abandonar de la oficina solt su mano ante la sorpresa de ver a Jacinto esperndome, muy serio.

    -Muchsimas gracias seor comisario. Gracias a todos....-

    -Buenos das-., fue el seco saludo de mi marido. -Buenos das. Seor?-, indaga el agente. -No, nada. Vengo junto a la seora. Gracias- -Hola. Disculpme que te haya molestado.-

    ensay una frase. -Est bien querida, pero Qu significa sto!

    Para que necesitabas tu documento tan urgente! -Hubo un pequeo problemita con l-. Seal

    con la mirada a mi amigo. -Dej mi trabajo y vine cruzando los semforos

    em rojo cuando recib tu mensaje. -Disculpme, es que estaba tan nerviosa que no

    me tom el tiempo para explicarte de qu se trataba.- -Al menos presentmelo.- -El es Toguy...- -Mucho gusto...as es que vos sos Toguy-, lo

    volvi a examinar de arriba hacia abajo sin disimular su desaprovacin.

    -S seor, yo soy Toguy-

  • TOGUY toms caballero

    54

    -En qu los te ests metiendo eh!, acical mi odo con un aliento caliente como nunca lo haba sentido.

    -Ms despacio, no grites, estamos en una comisara-.

    -Vaya novedad. Ser posible carajo?. Usted puede creer agente? Vmonos a casa!-.

    -Si, s. Vmos pero...y el nio...no lo podemos dejar aqu slo-.

    -No lo pensar llevar al Hotel de Turismo supongo. Vmos te digo!. Disclpeme usted jefe...-

    -And tranquila ta, yo s como llegar a donde est el Cabezn-

    Sent uma frrea garra que me arrastraba hacia la calle.

  • TOGUY toms caballero

    55

    EL ACCIDENTE Segn lo convenido, al da siguiente me present,

    ya estaba esperando parado, miraba de reojo, con la cabeza medio agachada, como sintiendo culpa. Salud ignorando lo sucedido.

    - Hola Toguy Cmo ests? - Bien. No dijo ms, miraba a mi alredodor con

    insistencia , como buscando algo. Entonces me inclin, por la ventanilla saqu el

    paquete, se lo entregu. Estaba muy excitado, con rapidez rompi la envoltura y lo vio.

    - Gracias doa!, nunca recib un regalo tan lindo, lo vi cuid mucho paque dure una chorrera di aos.-

    - Me alegro que te guste y s..., quiero que lo cuides mucho, cuando ya no funcione, guardalo de recuerdo, para que siempre te acuerdes de quin te lo di. Cambiando de tema Y tu mam?- - Por ah anda Me tens el diman hasta que la traiga?-

    Entreg y sali corriendo. No se dio cuenta que un auto vena por la avenida. No tuvo tiempo de frenar, en un segundo su cuerpo era elevado por encima del capot del vehculo, cay como una bolsa sobre el asfalto, o un estampdo seco, nico, luego la quietud. Escalofros y temblores me visitaron, paralizndome por un instante.

    Instante en que todo era confuso. El conductor baj; sobre l se abalanzaron. Un muchacho de unos

  • TOGUY toms caballero

    56

    catorce aos, sac el cinto, amaneraba con pegarle. En seguida se acerc llorando una mujer gorda, de baja estatura, con los cabellos despeinados gritando:

    - Dejalo Cabezn!, ya lo vai a agarr ms tarde- y dirigindose al conductor:

    - Este es mi hijo Qu li hiciste? Criminal! Maldito! - vociferaba mientras el hombre trataba de hablar hasta que con acierto lo dejaron balbucear:

    - Llevmoslo al hospital urgente. Seora, por favor acompeme-.

    - Matarlo es lo que tengo que hac! Pero vamo antes que se muera el Toguy tambin.

    Dicho esto, el seor lo subi a su auto y partieron. Observaba incrdula, sub al mo, los segu hasta que llegamos al Hospital de Nios.

    Hospital de Nios! Dios mo! Cunto tiempo hace que no entraba a un lugar asi!.

    Una pestilencia en el ambiente, mezcla de lavandina, cloaca sin funcionar, la mugre pintaba el piso. La negligencia luca orgullosa. Las paredes, dejaban ver trozos de revoque, humedad, restos de pintura que hacan un perfecto ensamble con la dejadez del lugar. En medio de ese olor nauseabundo, ingres.

    Caminaba hacia el quirfano, tratando de esquivar a las madres y padres tirados en el piso, mugrientos, con sus bebes enfermos, tan sucios como ellos.

    Razonaba, Donde estn las autoridades?Estn todos ciegos? Hasta sent culpa de esa realidad que

  • TOGUY toms caballero

    57

    ignoramos, nos hacemos los sordos, no escuchamos sus gritos de auxilio porque carecemos de capacidad de reaccin o no queremos desviar nuestras miradas, vivimos como los topos, sumidos en nuestra propia cueva o como los caballos de tiro al que se le ocluye su mejor visin, con esas delesnables y molestas anteojeras. Menos mal que los privilegiados son los nios!, si as no fuera Qu seria esto?.

    Antes de llegar, encontr a la seora gorda y despeinada que, continuaba llorando, le pregunt:

    - No sabe nada an? - Lo estn operando, parece que se quebro una

    pierna nada ms. T quin sos? - Soy amiga de su hijo, l iba a buscarla para

    que conversramos cuando le sucedi esto. - Ah! - fue su nica respuesta. - Seora le pidieron algo? Algn

    medicamento? Algn material?. - S, una ristra i remedios, como no s lee, se la

    entregue al hijo e perra que lo atropello. Pero no parece tan malvao, le trajo todo lo que necesitaba y pago no se qu cosa ms.-

    - Fue un accidente, el nio no vio el auto, pero todo se va a solucionar. Cuando pase esto, Usted y yo debemos conversar.-

    - Bueno... despus.- De pronto sali el mdico, pregunt por la

    madre, le dej flotando un escueto informe. - Tuvimos que operar, fue fractura expuesta de

    tibia y peron, por suerte el hombre que lo arroll

  • TOGUY toms caballero

    58

    consigui con celeridad las placas y tornillos que hacan falta, que por cierto son muy caros. Ahora est dormido, bajo el efecto de la anestesia pero puede estar tranquila que se recuperar pronto.-

    - Si , Doctor - fue todo lo que dijo. Y en seguida vimos pasar un enfermero que

    llevaba al nio en una camilla. Su semblante estaba plido como la piel de un pomelo, dorma, era un ngel.

    Lo llevaron a una sala, en la que haba una serie de camas, una al lado de la otra, sin separcin ms que la que permite el paso de un hombre. Camas viejas, con colchones sin funda, sin sbanas, con la goma espuma desmembradas otras con medio cotn manchado con sangre o vaya uno a saber con qu inmundicia.

    Ms que hospital pareca un depsito de despojos humanos, una chacarita humana. Algunos slos, otros acompaados por un montn de familiares, apiados alrededor del enfermo, tomando mate, comiendo, contndose cosas, calificando al personal. Nadie se quejaba de las condiciones infrahumanas.

    Me sent en otro mundo, otra vez qued pensando en cunto sufrimiento, cunta degradacin, cunta desolacin aquejaba a esos nios enfermos, algunos moribundos, sin tener siquiera el alivio de un lecho sano, limpio, con los cuidados necesrios.

    Aqu la fe luchaba igual que los nios por sobrevivir.

  • TOGUY toms caballero

    59

    Pero ya llegarn las pocas de elecciones, el propio gobernante o su testaferro vendr con dos o tres colchones a comprar una que otra miserable voluntad, abonando la corrupcin, sosten de su poder.

    Me qued hasta que el nio despert, a la par de su madre. Senta araada el alma. Mudo el corazn. Mi devocin empalideca como perda la rozagancia el rostro de Toguy.

  • TOGUY toms caballero

    60

    TOGUY INTERNADO Tuve que alejarme de ese manicomio fsico.

    Resultaba pesado andar, una parte ma quedaba sentada al borde de una mugrienta pero necesaria cama.

    - Seora, est plido Toguy, no dude en llamar a los mdicos- dije preocupada y part, depositando un billete en su mano.

    - Para sus gastos - dije. - S, gracias- alcanc a or que balbuceaba. Adelant media hora al despertador, deba

    visitarlo antes de ingresar a trabajar. Apurando el paso ingres al sector donde haba

    estado por ltima vez. - Buen da seora - salud una de las mdicas

    del lugar. - El nio est otra vez en quirfano, recin lo

    llevaron. Est sangrando por dentro- carraspe preocupada. Flotaba en el ambiente una tensa preocupacin. Estara tan grave? O sera que algo no expresado los atemorizaba?

    - Qu sucedio? Porqu al quirfano de nuevo?- inquir enrgica, descontrolada.

    Se miraron unos a otro. Esa fue la respuesta que recib. Hasta que uno de los profesionales, el ms joven murmur algo que no comprend pues me crecieron alas, a travs del aire llegu a la entrada del quirfano.

    All estaban, el Cabezn casi tan plido como haba dejado a su hermano, la madre en actitud

  • TOGUY toms caballero

    61

    oratoria contra una de las paredes que por fortuna luca mejor que las del otro sector.

    En eso apareci una desencajada enfermera. Casi a gritos se dirigi a la mujer:

    - Sangre seora!. Necesitamos sangre urgente.- - Sangre? Para qu sangre?. Yo no tengo -

    respondi a la defensiva. - Cmo que no tiene? Cmo vive entonces?

    Adems est gordita. Todas dicen lo mismo. Vaya al banco de sangre corriendo! - Orden enrgica la auxiliar.

    - Le doy yo, seorita - intercedi el Cabezn. - Vos no podes, sos muy joven an. - Entonces van a dejar morir a mi hermanito?.

    Le vi hac un quilombo eh - solloz el joven adolescente.

    - Seorita, disculpe Usted pero Qu grupo necesita? - pregunt decidida.

    - No lo s - respondi dubitativa. - En el laboratorio le dirn. Pero vyanse ya

    por favor! El nioooo...- - Se muere - le en su desesperacin. Ya en la unidad de terapia intensiva Toguy no

    respiraba. Una mquina lo haca por l. Cuando abri los ojos, no poda hablar por los

    tubos implantados en su garganta. Tom mi mano, not que la nvea funda de su almohada estaba hmeda, no porque transpirara. Acarici su frente, distraje mi llanto acomodando las blancas y relucientes sbanas que llev de regalo.

  • TOGUY toms caballero

    62

    Me acerqu a sus odos, porque segura estaba de orme, le susurr:

    - Pronto te vas a reponer. Ests en buenas manos. Ten valor. Sabes Toguy? Ahora estamos ms unidos que nunca pues una parte de m se introdujo en tu cuerpo. Estars bien. Te duele algo?-

    Respondi apretando con suavidad mis manos, lo suficiente como para saber que oa, comprenda, adems estaba contestando.

    Esa pequea brisa motora, amain la tormenta desatada. Supe que se iba a reponer.

    Ya ms tranquila intent valorizar la magnitud de su sufrimiento. Tena un tubo en la garganta, una mquina respiraba por l a pesar de su lucha por vencerlo, dos gruesas agujas clavadas en su cuello, un incmodo yeso, la panza vendada casi en su totalidad. Todo eso era comprensible, el paciente politraumatizado con ruptura del bazo, se presentaba as, tal como nos explicaron los profesionales, pero lo que no alcanc a comprender bien era porqu le haban tusado las crenchas y la forma en que lo haban hecho.

    - Tan mal gusto tienen en el quirfano! - pens ofendida. Un brillante olor a azufre emanaba de su cabeza. En ese momento tom una decisin.

    Pens en todos los accidentes que ocurren a diario, la cantidad de nios desamparados que tenemos.

  • TOGUY toms caballero

    63

    Sintiendo a Toguy un poco mo, ped una entrevista con el mdico jefe.

    - Seora Qu le une a usted con ste nio? Es familiar? O alguien ligado a los suyo es el implicado en el caso?. Pregunto, porque no es frecuente que alguien como Usted se interese tanto en un nio como el que recibimos ayer.-

    - Ni lo uno ni lo otro Doctor. Solo soy su amiga. Soy profesional, no de la medicina, la vida puso a ste nio en mi camino hace un tiempo ya. Hoy ni recuerdo la circunstancia. Fui a visitarlo a su trabajo, cuando con horror tuve que presenciar el terrible accidente.-

    - El nio trabaja? - no parece o tal vez sus ingresos sean muy escasos. O bien... es uno ms de los tantos explotados en nuestro pas. Puedo saber donde, en qu lo hace?-

    - Vive y trabaja en la calle. El monstruo de la fatalidad lo expulso hacia ese lugar. Es un buen chico, a mi humilde entender es brillante. Solo que le sobran fatalidades, lo nico que abunda en l es necesidad, miseria.-

    - Seora... Me dijo su nombre? - inquiri picaresco el mdico.

    - Abril, doctor - respond a secas. - Abril, hermoso nombre el suyo...- - No vine para hablar de mi doctor-. contest

    irritada, pletrica y arrepentida. - Si seora - resopl el mdico, acumulando en

    sus mejillas toda la vergenza del hospital. Eso sec

  • TOGUY toms caballero

    64

    mis prejuicios, saba que estaba ante alguien capaz de alterarse cuando es acicalada su dignidad.

    - Doctor, tengo muchas cosas para agradecer en nombre de los nios como Toguy, tal vez no sea quien deba hacerlo, pero deseo manifestarle esto.-

    - Gracias seora muchsimas gracias! No nos ocurre todos los das esto, no es a m a quien debe decir estas cosas, tal vez tendra que ir al diario, publicitarlo - se apresur a contestar.

    La pista se despej. Aterric entonces diciendo: - Yo no entiendo demasiado de medicina, pero...

    tambin tengo muchas cosas para cuestionar. Esto es un Hospital para asistir a los nios, doctor. Cmo es posible que funcione en estas condiciones? Disculpe Usted que se lo diga pero... la mugre forma parte de vuestros atuendos. Este guardapolvo blanco, con apresto, bien planchado y perfumado es una ofensa al servicio ofrecido a nuestro futuro. Tom la molestia de leer en los anuncios de entrada al hospital, all parecera que ingresamos a un nosocomio del primer mundo. Por ej. Habla de servicio de diagnstico por imgenes como ser ecografas, tomografas, resonancia... magntica, hemoterapia, accidentologa y tantas otras cosas ms.

    Toguy no pudo acceder a ellos Porqu doctor? Porque no tiene para solventar? Porque es un nio de la calle?-

    - Esos equipos, seora... balbuce. Le ahorr saliva diciendo:

  • TOGUY toms caballero

    65

    - No funcionan en este momento porque le falta una plaqueta que cuesta ciento cincuenta pesos, al ecgrafo lo maneja con exclusividad el personal del servicio y... ellos no estn disponibles las veinticuatro horas porque no se los contrata... Ya lo s doctor. S que todo esto escapa a su responsabilidad pero... Nadie en ste bendito Hospital tiene capacidad de revelarse? O la rutina los amodorra, los tornan en apariencias insesibles?

    Ni qu hablar de las salas de internacin, los colchones si se los puede llamar as, el apiamiento de la gente sin control alguno, lo cual aumenta el cortejo de miseria exhibido en cada baldosa.

    Esto doctor lo que menos aparenta es ser un Hospital de Nios, mas bien un supermercado de la miseria humana. Desea que publicite todas estas pequeeces doctor?.-

    Luego de una eternidad que dur un minuto de desafiante silencio, eramos dos gladiadores en encarnada disputa , sus cuerdas vocales hiladas por la impotencia pudieron hilvanar algunas palabras:

    - La espero maana a las ocho seora, la llevar ante el Director de la institucin. No me deje solo por favor.

    Su mirada era otra. Se levant, extendi la mano en seal de despedida. No insist. Comprend con claridad lo que haba realizado. Antes de salir agregu:

    - Gracias doctor por todo lo que hace por los nios. S que Toguy saldr del mal paso, una cosa

  • TOGUY toms caballero

    66

    ms: disculpe mi vehemencia. No fue intencin importunarlo.

    - Al contrario. Gracias a Usted. Nunca nadie nos haba dicho algo as - repiti su frase que parece la tena a flor de labios.

  • TOGUY toms caballero

    67

    LA PROPUESTA Me present de visita al hospital, cargada de

    cosas y con un acompaante. - Hola cmo ests Toguy? - Hola Doa, estoy bien, pero esta pata duele

    mucho y tambin la panza.- - Pobrecito! Voy a decir a la enfermera que te

    de un calmante as te tranquilizas, pero antes quiero presentarte a este seor, se llama Fernando pero le dicen Fer.-

    Miraba con desconfianza, pues el peluquero tena un fenotipo particular, muy pulcro, con modales delicados. Al presentarlo, ste se acerc y le dijo:

    - Hola, beb! haciendo un ademn con la mano derecha.

    - No seai puto...! te vi a met un bombazo, yo no soy ningn beb, soy macho y me la banco.-

    - Toguy, no respondas de esa manera. El seor es muy amable, viene porque lo traje para que me ayude con tu cabellera. Quiero proponerte algo- agregu.

    - Qu quers hac con mis mechas?- - Como no puedo peinarte, tampoco puedes

    baarte por ahora, pens que te agradara cortarte el cabello, para que no te pique ni moleste. Mir, traje estos algodones y crema con la que pienso limpiarte un poco, vas a quedar hermoso, luego te voy a poner esta ropa nueva.-

  • TOGUY toms caballero

    68

    - Ropa nueva? Nunca me puesieron algo nuevo, a ver... mostrame que trajiste No ser ropa e marica, no?... bueno, si quers pelame entero, hace lo que quieras.-

    - Muy bien, entonces te pelar, quedars hecho un hermoso chiquitn, ya vers-.

    D orden a Fer para que iniciara su trabajo. Toguy permaneci inmvil hasta el final. En verdad era un hermoso nio, con cara de beb, cmo deseaba en ese momento que sea hijo salido de mi vientre. Empec con mucha paciencia a limpiarlo, se dejaba sin chistar. Luego le puse la ropa nueva, un perfume de nio muy suave, acerqu un espejo que haba llevado para que viera su nueva imagen, era una belleza de criatura.

    - La puta que estoy fachero, ta! Me dejaste que parezco hijoi dotor.-

    - Es que sos hermoso, quisiera tenerte ms cerca mo.-

    - Y yo quiero ir a viv con vos.- - En serio te gustara? Pero... conmigo tendras

    que estudiar mucho, portarte muy bien, como un seor.-

    - Yo hago todo lo que quieras, si me llevs.- - Bueno, chiquito, hablar con tu mam para

    que te de permiso de estar un tiempo conmigo-. A todo esto, ya haba acordado con su madre

    que vendra a casa el sbado. Estuvo puntual. A las cinco de la tarde golpe

    las manos, corriendo detrs de mi ansiedad, sal:

  • TOGUY toms caballero

    69

    - Buenas tardes, Doa-. - Buenas tardes, Seora, adelante. Nos

    conocemos desde hace un tiempo y an no s su nombre, yo soy Abril... y Ud.?-

    - Eva-. - Adelante, Eva. Pasemos a la cocina,

    tomaremos un caf-. - No s qu quiere convers conmigo-. - Bueno, es algo delicado pero muy

    importante... Desea caf o t?- - Caf... y... si tiene un pedazo de pan...- - Srvase lo que desee. Bien, no andar con

    vueltas. En concreto, deseo ocuparme de la educacin de Toguy. Quiero solicitar su autorizacin, que permita preparalo para que rinda lo que ya perdi de acuerdo a su edad, as el ao prximo puede ingresar como corresponde a la escuela-.

    - Yo no lo mand a estudi porque no tengo plata p eso, apenas saco p com algunos das-.

    - Pensando en eso es que quisiera que permita tener a Toguy en casa de lunes a viernes. Ud. Podr venir cada vez que lo desee y por supuesto los fines de semana. Es un nio muy inteligente, es necesario su educacin No le gustara verlo progresar en la vida?-

    - No s, eso no es p nosotro, nosotro somo pobre y vamo a mor pobre-.

    - Depende de Usted, pinselo, es imprescindible hacer algo por el nio. Adems, he notado que tiene

  • TOGUY toms caballero

    70

    inclinacin por la msica, se debe estimular todas sus capacidades, desarrollar su potencial. No puedo ver que su hijo viva como lo hace... desamparado en la calle-.

    - El no es est desamparado, estoy yo y estn sus hermanos.-

    -Ya lo s- -Ud. me engelve con sus palabras, pero... vi

    ten que habl con los otros hijos, porque... el tipo est en la crcel-.

    - No se preocupe, no tenga miedo que l nada puede hacerle ahora-.

    - Bueno, est bien, si es por el bien de Toguy, geno-.

    - Podramos empezar cuando salga del hospital, ya que deber hacer rehabilitacin, necesitar un espacio... mientras, le voy enseando sus primeras lecciones-.

    - Geno, pero ni crea que se va a adue de mi Toguy-.

    - No hara tal cosa, el nio es su hijo, eso no est en discucin, solo quiero colaborar con su formacin, con su consentimiento y con su ayuda, Ud. es de fundamental importancia en toda esta tarea-.

    - Geno, yo vi ven cada vez que pueda-. - Muy bien, hasta pronto entonces-.

  • TOGUY toms caballero

    71

    EL ASALTO Haca apenas un mes que Toguy estaba

    conmigo. Un da llegbamos, a casa, cuando me pareci

    ver salir un joven muy orondo, hacindose el distraido.

    - Toguy me pareci o ese muchacho sala de casa?-

    - Eh?... Qu?... no s... no lo vi fue su respuesta, pero atrap su palidz.

    Apenas entr algo estaba mal, un vaco en la mesita ratona indicaba la ausencia del equipo musical, comenc a revisar, con asombro constataba que se haban llevado gran parte de mis escasos bienes, adquiridos con esfuerzo, dos televisores, dos video grabadoras, casi todos los aparatos electrnicos. Hasta los objetos de menor valor y la ropa se haban llevado.

    Los delicuentes realizaron una gran tarea, no dejaron huella, ni rastro de nada. Observ a Toguy que estaba sentado en el piso, en un rincn, muy preocupado, pensativo.

    - Qu pasa Toguy?- - Nada... nada... es que se robaron todo... hijos

    de perra!- En ese momento vi pasar un vecino, al relatarle

    lo sucedido, dijo que haba visto entrar a dos jvenes, que pensaba eran de la familia pues entraban y salan como dueos de casa. Adems, a

  • TOGUY toms caballero

    72

    uno de ellos los haba visto conversar con Toguy en una oportunidad.

    Sent una glida lagartija caminar por el espinaso, comprend el porqu de la preocupacin del nio. Qued absorta, perpleja, no sala del asombro, no saba como reaccionar, era su familia Cmo podan hacer ese dao con tal desparpajo? Tanta desconsideracin? Haban usado a la criatura para realizar tan deplorable acto.

    Quera ordenar mis ideas, trataba de no hacer juicios prematuros, pero todo conduca al mismo punto. Volv a revisar cada rincn de la casa, comprobaba que seguan faltando cosas.

    - Toguy, falta un juego de llaves Lo viste?- - Eh?... no... yo no vi nada-. - Ac sucede algo extrao, los ladrones no

    forzaron ninguna cerradura, usaron nuestras llaves... necesito que digas la verdad... al muchacho que sala cuando nosotros llegbamos Lo conoces?-

    - Yo no hice nada-. - Ya lo s, la pregunta es diferente Lo conoces?

    Es tu amigo?- - Es... es...- - Quin?- - Es... el... Brasa-. - Quin es el Brasa?- - Es... Ta... Le juro que yo no hice nada... ni les

    d nada... ese que iba saliendo es el Brasa... mi hermano el ms grande que se llama Fidel-.

  • TOGUY toms caballero

    73

    Nada respond, no poda Qu hacer en esa circunstancia?

    Deba reportar el robo pero no tena capacidad para denunciar a su propio hermano, tena el convencimeinto que los autores eran l y el Cabezn pero no tena pruebas, an con pruebas... Qu hacer? eran sus hermanos! No pensaba en recuperar nada, slo maquinaba cmo alejar de Toguy ese entorno de delincuencia que lo rodeaba, que estaba enquistado hasta en su propia familia.

    Y Jacinto, Cmo hago para contenerlo? -Abril, querida, dnde ests! Abril! -Que pasa- murmur apenas Dnde te metiste?- -Estaba revisando la casa..., dije en voz de hilo -Qu pas ac!- -Parece que entraron y se llevaron algunas

    cosas- murmur distraida. -Falta el televisor, el equipo de msica, mi

    laptop, Mi laptop!, all guardo cosas muy importantes de mi trabajo, documentaciones que no se me pueden perder.-

    - Es lo que estaba revisando, si falta algo ms- -Ya s, ya s, ni me hables- -Qu decis? Sabes algo acaso?- -Tu protegido, tu exelente nio!- -Jacinto, porqu decis eso...- -Cunas veces te repet que no quera que entre

    en mi casa. Estas personas ya no tienen regreso. Lo llevan en su sangre. Averiguaste algo sobre ellos?;

  • TOGUY toms caballero

    74

    en ese instante record cuntas veces me dijo que averiguara los antecedentes de toda su familia, la verdad no lo hice, ste es el momento en que me senta en grave falta.

    -Yo... eeh- -Claro que no! Tu intuicin femenina te deca

    que lo ibas a llevara a la ms alta ubicacin cientfica, vos y tu ciencia , Sabes una cosa?, me tens podrido con ese tema, podrido me tens...-

    -Pero escuchme un...no todo est perdido, todava-

    -Todava, todava...Todava insists con esos miserables?; o te vas y hacs la denuncia a la polica o yo lo busco y tendrs que ir a visitarlo de nuevo al hospital...mmm aunque...tal vez eso preferas No?-

    -Ests delirando Jacinto, cmo voy a preferir eso-

    -Cambiaste mucho conmigo despus de tus escapadas al hospital-

    -Qu ests diciendo?- -Conociste a alguin acaso?; reapareci intacta

    su irona. -Jacianto!. No seas ordinario- -Cuidado con lo que decs!; cuid tu boquita

    nena, porque bien sabs que no respondo de m- -Me vas a pegar acaso?- -Si es necesario para que aprendas de una vez

    por todas Claro que lo har!; y a decir de su rostro creo que estaba dispuesto a hacerlo. Le en su mirada.

  • TOGUY toms caballero

    75

    -J, j la verdad no s cul es la diferencia- -A qu te referis. Me ests comparando con

    alguien acaso- -Y...siempre me pegs-, ataqu para poner freno

    a su clera. -Qu decis? -Con el cuento que lo hacs dormido, sin darte

    cuenta, ya llevo dos costillas rotas y varios hematomas en el cuerpo-

    -And!-; sint el impacto -Menos mal que nunca me diste en la cara

    porque sino...- -Sin que; me vas a denunciar por pegador o te

    vas a mudar de la casa, eh; hacelo querida y vers las consecuencias.-

    -Sos un ordinario!, eso es lo que sos.- -Ah claro! Yo soy ordinario, no como ese tu

    medicucho que atenda a tu protegido...- -Jacinto!-; grit con todas mis fuerzas para

    tratar de simular el rojo de mi rostro. -Estoy mintiendo acaso, si vivas embelesada

    por l, por no decierte otra cosa- -Grosero!- -Ordinario, grosero, dale, dale continu con tus

    cariitos, decme bruto, asqueroso, sucio, degenerado, impotente, qu ms. Eh!-

    -Escuchme bien, nunca te dije impotente.- -Pero me diste a entender- -Para m Toguy es el hijo que vos no me pudiste

    dar-

  • TOGUY toms caballero

    76

    -Viste? A Dios gracias que no te d, porque si sale como vos, mamita querida, adems cmo te iba a embarazar si cada vez que lo hacamos era una verdadera violacin, una competencia de judo-

    -Bruto! Ignorante!- -Dale, dale, qu ms, pero te advierto una cosa

    querida eh,- Qu me tens que advertir?; declo, no andes a

    medias.- -Dos veces no; entendlo bien- Dos veces? A qu te refers?; sta vez senta

    que la ira invada hasta mis ropas ntimas. -Sabes muy bien lo que te estoy diciendo, o ...ya

    te olvidaste de tu prsonal trainer...- -Ora vez con lo mismo!-; suspir aliviada. -Encima maricn el infeliz! -Hasta cuando, hasta cundo- -No te hagas la inocente, ni la artista conmigo,

    no te queda, pero te adviento y escuchme bien. Una ms y te reviento Te qued bien claro?-

    -Entonces que tendr que hacer yo que recibo esos annimos donde me dicen que pass horas y horas en el barrio coluccio eh!; yo tengo pruebas escritas, vos habls porque en realidad te sents culpable por todo lo que me hacs sufrir.-; ataqu poco convencida de lo que deca.

    -Barrio coluccio, Vos me viste alguna vez? Cules son tus pruebas?, los anonimos son anninmos y nada ms.-

  • TOGUY toms caballero

    77

    Tengo mi dignidad Sabes?; jams ira a arrastrarme por el barro para espiarte. Jams!; pero tens cuidado porque a veces el cntaro se rompe con una sola gota de agua-

    -Mir vos! No saba que a la guampa se la llama cntaro ahora...-

    -Hijo de puta-; murmur en voz muy baja. -Qu ests murmurando?; v que se abalanzaba

    sobre m amenazante. Un snif, snif a mis espaldas me salv.

  • LA VERGENZA Se agolparon en m un sin fin de perturbadoras

    ideas. Las piernas casi se doblan, parecan de gomas, mi cuerpo entero era en ese instante una simple hoja reseca y temblorosa por el viento.

    Analizaba la codicia, el abandono, la miseria, no solo aquella donde se necesita de todo sino en la humana, la ms terrible de las miserias, la envidia malfica, la falta de decoro, la indignidad, la mediocridad, la escala de valores, cuantificadas en cero en ste caso. El tembladeral alienante de desesperacin me regal un pequeo espacio de optimismo y dije: Tendr que trabajar mucho si quiero que Toguy aflore del barro, lmpido, esplendoroso.

    Hecha una estatua, solo mis ojos danzaban hacia los cuatros puntos cardinales en un paneo cinematogrfico, respiraba entrecortada, con dificultad, la boca se llen de saliva espesa, pegajosa, amarga y el orgullo de lo que crea era mi mas bella accin reptaba por el fango. Se represent ntegro el Hospital donde habia estado internado mi amigo, la entrevista, mis reclamos altaneros al mdico que haba salvado la vida a Toguy, esta vez la vergenza como un bumerang se traslad a mis mejillas. El pensamiento se detuvo unos segundos en el rostro sereno y augusto del profesional que en ese instante estara como yo lo estoy en este momento. Envidi su pasta, su aplomo, su capacidad de soportar la mugre.

  • TOGUY toms caballero

    4

    - Tal vez sus logros profesionales eran los nicos valederos para l - razonaba en silencio.

    Hacia la derecha en un rincn, sentado con las rodillas flexionadas, atenazadas por sus brazos a la altura de sus rotulas, escondiendo la cabeza, sollozaba Toguy. No pude dejar de pensar: Estar actuando? O su pena ser tan verdadera como lo era su figura en la sala de estar de mi casa?.

    Cuando los msculos fibrilaban nada ms, tom coraje, me sent a su lado. Retir su gorra, prenda que tal vez sea la que ms amaba. No se inmut. Acarici su sedoso pelo, lo llam susurrando:

    - Toguy, Toguy, debemos hablar, en esa actitud nada solucionaremos, pero es necesario, molesto pero necesario-.

    - No!. Son todos unos hijos eperra - contest sollozando.

    Eso me anim. Que se defienda, acuse, diga lo que diga pero que no calle. El mutismo es una puerta muy difcil de atravesar, siempre nos deja sin descubrir qu hay detrs de la misma.

    - Tenes razn en decir lo que opinas, pero no puedes dejar de lado tu dosis de responsabilidad. Yo te regal mi confianza y...

    - Qu mi vas a denunciar, para que me lleven otra vez preso? - atac presuroso.

    - Qu quers decir con eso? Qu yo fui la que te denunci cuando lo del diskman? - contest irritada.

  • TOGUY toms caballero

    5

    Al instante comprend que logr lo que quera, cual era distraer mis razonamientos, desviar la conversacin hacia un terreno ms ventajoso para l.

    - Si vos no me llevabas a devolver el disman yo no hubiera ido preso y tendra el disman que fue como un regalo del Cabezn. Adems yo no rob, solo ped prestado, lo iba a pagar cuando sea grande y cobre un sueldo como vos-.

    - No digas! Para pedir prestado se debe ir de frente no a las escondidas como fueron ustedes - prosegu, prestndome a su intencin.

    No contest, pero not que estaba mas relajado. Mirando a travs del ngulo formado por su pierna y muslo vi en el piso una gran mancha de agua. Babeaba sin control.

    - De eso hablaremos en otra oportunidad, ahora quiero que mires a tu alrededor. Los muebles estn vacos, ya nadie habla ni canta en esta casa, eso es porque...-

    - Yo no hice nada!. No chori nada de esta casa- - Ya lo s, pero...- - Pero vos crees que tengo la culpa! Mejor me

    voy a la mierda de sta casa! - atac a sabiendas que destrozara mi debilitada defensa.

    Pens a mil por segundo, deba ser firme, recta, coherente, justa, comprensiva y por sobre todas estas cosas no deba dejar en blanco, la desesperacin para retenerlo conmigo, me atrap. Senta el olor a la derrota invadindome inexorable como una enfermedad terminal.

  • TOGUY toms caballero

    6

    - En ningn momento yo dije tal cosa - me defend dubitativa. No es de hombre cambiar las palabras de los dems. Es un principio de respeto. Varias veces conversamos del tema. Pero las cosas se deben analizar, cortar de raz; las plantas que no nos sirven. Lo recordas?.

    - Yo no soy una planta podrida, ni una plaga - se defendi resuelto.

    - Ya lo s. Para m sos la mejor planta del jardn. La que llenar de flores y perfumar mi existencia en la vejez contest con un romanticismo cursi y doloroso, intentando conquistar su corazn.

    - Recin no dijiste eso -. - Est bien Toguy, si queres lo dejamos aqu,

    pero maana al regresar de la escuela lo analizaremos a fondo, en tanto esta noche yo decido qu camino seguir, respecto al robo-.

    Desatenaz sus piernas, tom la gorra, se la estrell en la cabeza con la bisera tapando la oreja derecha. Era una manera ms de castigarme. Ya no poda continuar acariciando sus cabellos. Sigilosa elev mi brazo izquierdo y desligu la llave de la luz. Una tenue penumbra rojiza dibujaba dos siluetas en meditacin mahometana. Call por un instante que pareca una vida entera. Interrump la oscuridad, la soledad, el idilio, el silencio diciendo, lo ms dulce posible:

    - Toguy, hijo mo...- - Yo no soy tu hijo! - carraspe cido.

  • TOGUY toms caballero

    7

    - S, s, ya lo s que no soy tu madre, pero te quiero tanto o ms que a mi propio hijo. No pretendo reemplazar a ella, su vientre generosa te engendro, a vos y a todos tus hermanos. Pero es necesario que sepas que cada ser humano es lo que es, segn sus circunstancias, sus vivencias, sus experiencias, su formacin, sus oportunidades, la planta de lilium que adorna la entrada de nuestra casa, no deja de regalarnos sus flores, que son sus hijas. Si prestas atencin a las mismas ningunas son iguales, una es ms roja que otra, ms grande, ms colorida, algunas son amarillentas, te dira que hasta parecen tristes. Unas lucen menos que otras.

    El ser humano Toguy, brilla en especial por su dignidad, por sus virtudes, por su sinceridad, por su humildad, su sencillez, por sus conocimientos profundos de las cosas. Es virtuoso el hombre que vence a la miseria con dignidad, sirvindose nada ms de su propio esfuerzo, sabiendo aprovechar y utilizar las oportunidades que se les brindan.

    Cmo vencer las dificultades? pues afrontndolas, examinndolas, corrigiendo lo que est mal. Si agachamos la cabeza, relajamos el cuerpo abandonando la lucha, ante el primer obstculo que se nos interpone, flaqusimo seran nuestros logros, tal vez lleguemos al triunfo pero jams a la gloria. El primero Toguy, es efmero, circunstancial, pasajero, vanal. Si logrs te vers rodeados de aduladores, lisonjeros, arrastrados, oportunistas, ladrones, sin ideales propios, sin embargo si obtenes la gloria en

  • TOGUY toms caballero

    8

    cambio, hasta tus enemigos reconocern tus valores, podrs brillar para otras generaciones. Jess muri en la cruz, torturado, sin blasfemar, otros fueron aniquilados por una horda de intiles pero con mucho poder obtenido por la fuerza y felices han bebido veneno o sereno soportaron la hoguera, por eso hoy an irradian luz sus conocimientos, sus acciones, alcanzaron la gloria, que es eterna. Todos conocemos a Jess, nadie recuerda tan siquiera el nombre de su matador que tal vez haya sido vitoreado por los enemigos del ms grande de los humanos-.

    Desconozco si me entendi, si me esc