tincunacu coreografias significantes - capitulo 5

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CAPITULO 5

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  • CoreografassignificantesCaptulo 5

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    > Coreografas significantes

    La danza ritual

    Se dice que la danza procede de un tiempo festivo que rompe con eltiempo ordinario en funcin de haber sido creada para celebrar algn aspectode la existencia. Se cree que las primeras danzas fueron, o bien abstractas,basadas en movimientos convulsivos, o bien de carcter imitativo o descriptivo,tomando en cuenta la observacin del entorno natural, es decir, la flora, lafauna, el cielo y los fenmenos atmosfricos. En ambos casos, debieron habermanifestado la relacin primordial que el hombre estableci con su cuerpo y sumedio. Cambiantes y a la vez, fieles a una ntima sustancia, las danzasacompaaron a la humanidad desde siempre y en mucho se anticiparon alteatro. Porque si el fenmeno de la teatralidad surge cuando existe un acto derepresentacin organizado tendiente a la produccin de sentido, las danzas, entanto coreografas significantes, tambin generan teatralidad, ya que cumplenun plan de movimientos en un espacio determinado, organizado de tal modoque el conjunto expresa y promueve ideas y sentimientos.

    Se sabe que todos los pueblos originarios han escenificado ydramatizado sus vivencias poniendo en juego un pensamiento simblico. As,el chamn (palabra que significa calor interior en una de las lenguassiberianas, usada para nombrar a las personas que practican ese oficio encualquiera de las regiones del mundo) invoca a los dioses ante la mirada de losdems o bien la comunidad baila para s misma o para otro grupo humano alos efectos de expresar sentimientos comunes. En algunos casos, la ritualsticade los pueblos originarios, preserva la religiosidad heredada de los antepasados,la cual consiste en la representacin e interpretacin de su particularpercepcin del mundo, su cosmovisin, su necesidad de vivir en consonanciacon la naturaleza:

    El movimiento ritual afirma un escrito chino del siglo IV a.Crastrea de continuo el mundo celeste y terrestre. Si espritus, elementos,aromas, colores o sonidos pierden sus proporciones adecuadas, entoncesse producen la confusin y el caos y las personas pierden sus cualidades

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    coreografas significantes

    Asimismo se practicaron desde temprano las danzas circulares dirigidas por ungua. En las danzas de exorcismos o encantamientos, la ronda sola volversemuy estrecha: los danzantes iban tomados de la mano, segn se dice, para evitarla insercin de fuerzas negativas dentro del crculo. Algunas veces, estosencantamientos tuvieron el objetivo de proteger espacios, para lo cual eranecesaria la participacin de un gran nmero de personas. As, cuando losespacios fueron demasiado amplios, se produjo la ruptura del crculo,sobreviniendo la formacin de una cadena serpenteante, la que dio lugar a unafigura caracterstica de muchas danzas folklricas.

    Otra forma de danza muy antigua es la que asume una formalaberntica. Como emblema del misterio, el laberinto protege el centro sagradodurante el tiempo de la iniciacin. A estas formas coreogrficas se las relacionacon los estados de xtasis: las danzas circulares y en espiral constituyen el tipoms puro de las danzas de veneracin, porque ponen nfasis en el centro y enla creacin del espacio interior.

    En la antigua Grecia existieron danzas colectivas en las que el coro y sudirigente se movan desde el crculo a la espiral, formando una serpiente.Entrelazando las manos o los brazos, los bailarines seguan los mismos pasos. Ypor consecuencia, un mismo ritmo, lo cual, en muchas religiones, constituyeun medio para acceder a la experiencia mstica. En ilustraciones hindes, lasgopis o pastoras de Krishna, smbolo del sol, danzan en forma circularrepresentando a los planetas que lo rodean. Tambin los celtas practicarondanzas circulares. Los chamanes de todas las religiones de pueblos originariosgiran sobre su eje para convertirse en el centro primordial y despertar as lasfacultades mgicas concedidas por los dioses. En el islamismo existe unadoctrina exttica (que tiende al xtasis, estado que tambin buscan loschamanes) llamada sufismo, corriente espiritual que busca el modo de llegar auna unidad mstica. Entre sus prcticas se encuentran, adems de los ejerciciosde respiracin y vocalizacin, las narraciones y la poesa tradicionales, lasdanzas circulares de los derviches.

    El surgimiento de las danzas profanas fue un fenmeno muy posterioral de las danzas circulares. La formacin de hileras de danzantes enfrentados enparejas fue, tal vez, uno de los primeros pasos hacia la transformacin de ladanza ritual en un fenmeno espectacular, para ser expuesto ante un pblico.

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    inherentes. Por esta razn llevan a cabo los actos rituales, con el objetorespetuoso de mantenerse ligados a ellas.

    La danza estuvo desde siempre vinculada a la tierra y el cielo, a lasactividades estacionales, la lunacin y las funciones vitales. Se cree que, con ladesaparicin de los trabajos agrcolas tal como se cumplieron en pocasarcaicas, muchas danzas festivas se perdieron o sufrieron modificaciones enrelacin a como fueron interpretadas en sus inicios. Porque desde sus orgenes,las danzas rituales fueron actos organizados que obedecan a ciertos motivos:por un lado, los pueblos agricultores crearon danzas para asegurarse losbeneficios de las fuerzas naturales, para celebrar el paso de las estaciones, lasfases de la luna. Pero tambin dedicaron danzas a los nmenes protectores y alos antepasados as como en todas las culturas hubo danzas destinadas acelebrar alguna etapa de cambio en la vida, como el nacimiento, la iniciacinsexual o el matrimonio.

    A lo largo del tiempo, el movimiento organizado ha venidodesempeando un papel socializador, en virtud de permitirle al hombre laarticulacin de un cdigo comunicativo. Se afirma que algunos rasgos deaquellos primitivos bailes celebratorios de los ciclos agrarios o del paso de unaa otra etapa de la vida subsisten todava en las danzas folklricas de todas lasregiones del mundo. En la observacin de los rasgos expresivos particularesmediante los cuales cada cultura se manifiesta se puede constatar que, deAmrica a Asia, pasando por Oriente Medio y frica se extiende un dilogosecreto entre sus respectivos danzantes populares. Sus esquemas fijos, giros ymudanzas coinciden, en tanto varan acentos, pisadas y braceos. De carctercolectivo o solista, estas prcticas populares continan vigentes. Y se perpetanal margen de otras formas de danza que abandonaron el terreno de lo annimopara tomar otros rumbos expresivos de la mano de coregrafos e intrpretes.

    Primeros planteos formales

    Se dice que las danzas de conjunto ms antiguas fueron de carctercircular. El crculo constituye una forma poderosa, simblica, que en s mismacontiene las ideas de incorporar, dar y recibir, pero tambin de excluir.

  • Algunos estudiosos afirman que los bailes folklricos de carcterambulatorio de los Andes derivan de estas formas descritas: el tomarse de lasmanos o los ponchos, como en el huayno peruano y boliviano o nuestrocarnavalito. Tambin el Inca Garcilazo describe danzas que reunan entre 200y 300 hombres tomados de las manos, quienes daban primero un paso atrs yluego dos hacia adelante, para repetir el esquema. En cuanto a las danzas deoficios que, segn afirma, se practicaron en el incario, en tierra boliviana seinterpretaron danzas de ovejeros, labradores, de pescadores, de monteros. Alrespecto, el cronista acota que ordinariamente eran todas con sonido, paso ycomps muy espacioso y flemtico.

    La danza tradicional en el NOA

    El repertorio de danzas folklricas que suele practicarse en las festividadesdel NOA puede ser variado, especialmente en las ciudades capitales de la regino, en el caso de Salta o Jujuy, en localidades cercanas a las ciudades de mayorpoblacin o en pueblos donde se organizan regularmente festivales folklricos yjineteadas. En cambio, en las pequeas localidades del interior de la provinciade Jujuy, no se bailan ni chacareras ni zambas, aunque s el carnavalito, elbailecito y la cueca. El bailecito, danza de galanteo influenciada por danzas desaln europeas, es de procedencia boliviana, aunque tal vez su origen seaperuano, como ocurre con el huayno, danza alegre de parejas enfrentadas ytomadas de las manos. El carnavalito, por su parte, fue antiguamente unadanza colectiva de trote regular y movido que por tramos puede ejecutarsesobre un solo pie. Con el tiempo se transform en un baile de pareja suelta que,segn las figuras de rondas, filas y serpentinas se vuelve danza de conjunto. Suorigen tambin debe rastrearse en Bolivia, en danzas de origen coya.

    Se trata de una danza de Carnaval y, por lo tanto, ligada a las prcticaspropiciatorias de la cosecha: antiguamente algunos bailarines llevaban en sumano un tallo de maz (llamado chacra, en quechua) o un girasol, costumbreque en algunos lugares se conserva. Hoy la planta que est siempre presente esla albahaca, en ropas y sombreros o detrs de la oreja de los participantes delrito carnavalero. El especialista Carlos Vega acota: La supervivencia de

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    El modo de delimitar el espacio de la danza se volvi una decisin importante.En China se trazaba en plazas y mercados un crculo de tiza para establecer ellugar de exhibicin de bailarines callejeros, costumbre tambin practicada porlos yezidas transcaucasianos.

    Los incas y la danza

    Lamentablemente, no se conocen datos acerca de las danzas de lasparcialidades aborgenes del NOA anteriores a la dominacin del imperio inca.En cambio, de las danzas practicadas en el incario existen muchas descripcionesde danzas colectivas circulares y de espiral. Segn los informantes de la poca,cultivaban variados gneros musicales. Cantaban sus canciones sentimentales(harawis) o de trabajo (hayllis) en forma colectiva, contraponiendo corosalternados con cantos solistas.

    Tambin se sabe que los incas eran afectos a diferentes formas deespectculo: en Cuzco fueron comunes los simulacros evocativos de batallas yotras escenas de conjunto. Sanca rimac eran llamados los actores cmicos ykacha rimac, los que se ocupaban de temas graves. Quienes se dedicaban a lasbufoneras y acrobacias, eran los sancuchikuy y los llamallama.

    Los incas tambin interpretaron danzas sobre temas diversos. Las habamixtas y de hombres y mujeres solas. Otras estaban reservadas a situacionesparticulares. Cachiua se llam la danza nocturna bailada por jvenes alrededorde los sembrados, en primavera. Haba bailarines enmascarados, llamadossanayta y ayamusca. Algunos danzaban con otro bailaran sobre las espaldas, loque presumiblemente fue una forma de venerar a las huacas, en virtud de queesta fue una de las modalidades de danza ms tarde prohibida.

    Segn relata el padre Cristbal de Molina en 1574, el taki collo sebailaba en la plaza del Cuzco. Los danzantes iban cubiertos con pieles de puma.As tambin vestan los jvenes que festejaban su ingreso a la adultez, al bailartomados de una soga revestida en oro, segn cuenta el mismo cronista.Bernab Cobo tambin describe la misma danza de movimientos sinuosos yagrega que se mataba a un cordero con esa misma soga para la comida que secelebraba una vez terminada la danza.

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  • animales, como el jaguar, chancho de monte, toro, chivo y oveja. Segn su tema o motivacin, tambin puede establecerse otra tipologa

    de danzas. Si bien no hay referencias sobre danzas de curacin para serejecutadas por chamanes, ni mortuorias, ni danzas de oficio en las culturasanteriores a los Incas o en el incario mismo, no se descarta que hayan existidoprcticas dancsticas de ese tipo. S hubo danzas agrarias propiciatorias,dedicadas a deidades protectoras o a los antepasados, durante los ciclosagrcolas. En ciertos casos, las anteceden danzas para santificar el espacio de larepresentacin (rituales de circunvalacin y tambin ritos de disculpa, como sepractica en Bali, para pedir perdn por anticipado a los dioses, por cualquiererror que pudiera cometerse en la celebracin, ya que se danzafundamentalmente para agradar a los dioses). Se trata de danzas mmicomgicas (que imitan determinadas acciones mediante movimientos estilizados)relacionadas con la siembra (el salto suele simbolizar el crecimiento de lassemillas y brotes), la recoleccin, el nacimiento y la muerte (ciclos derenovacin anual). Tambin se incluyen aqu las danzas de la lluvia, queaparecen en todas las culturas originarias, como los indios pueblo, de Arizonao la danza del suri o de samilantes, que inspir a los mapuches argentinos sudanza del avestruz o choiquepurrun, segn algunos investigadores.

    Del Carnaval en el NOA

    Existen danzas festivas cuya marca fundamental es la canalizacin deenergas, como lo son las de procedencia boliviana llamadas diabladas,caporales y tinkus las cuales, durante el festejo del Carnaval, se practican enJujuy y Salta. Para verlas en su original esplendor es necesario viajar hastaOruro, ciudad minera de los Andes bolivianos, durante el Carnaval. Ladiablada es una de estas danzas tradicionales que renen elementosprehispnicos y europeos ingresados luego de la Conquista espaola. Elespectculo se compone de danzas de conjunto entre las cuales se intercala unacoreografa dialogada denominada relato de los diablos que presenta unaestructura similar a la del auto sacramental de la Espaa medieval: all se narrael combate que entablan Satans y su squito compuesto por los Siete Pecados

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    arcaicos ritos pecuarios aparece cuando la ronda gira en torno de pequeosobjetos que simbolizan el ganado; y el bandern con cintas de colores es, por suparte, otro resto de la antigua danza agraria. Tambin nota que esta danzaresulta lejansima parienta de las danzas de trenzar o danzas de cintas que, hastahoy, amenizan los pesebres de Navidad. La tradicional danza de las cintas, quelos chicos jujeos suelen bailar los 8 de diciembre, da de la InmaculadaConcepcin, en honor al nio Jess o en Nochebuena, con sus diversasmudanzas (huachitorito, estrella, doble estrella, contradanza, cadena yadoracin) conserva una base aborigen sobre la cual se asent una influenciaeuropea innegable, ligada a los ritos de mayo originados en el culto al rbol, ejedel universo. Una de las secciones de la danza ms conocida es el huachitorito,pantomima de adoracin, en la cual un chico juega a ser un novillo: baja lacabeza y, con los codos imita los cuernos, en tanto torea los pauelos que leagitan los otros chicos participantes, que tienen la intencin de enlazarlo yllevarlo hacia el pesebre para que se arrodille ante el nio Dios.

    Al examinar otra clasificacin de las danzas tradicionales, en base a susaspectos formales, se puede aclarar que, si bien se registran giros y saltos enalgunas danzas folklricas practicadas en el NOA, no existe ningunaexclusivamente de giro o de salto como en frica o en zonas montaosas deEuropa ni tampoco danzas que, como las de Bali, son solo ejecutadas con lasmanos, los ojos y el cuello. En cambio, s se puede hablar de danzas abiertas,de carcter extrovertido, con desplazamientos y mudanzas, como el yamencionado carnavalito. Y tambin danzas cerradas o de balanceopresumiblemente para propiciar la meditacin o el xtasis, como el pin pin,danza aborigen del chaco salteo, regin ubicada al este de la provincia.Asimismo, se llama pin pin al instrumento que acompaa el baile, especie detambor realizado con el tronco del palo borracho o yuchn, cavado por dentro,rellenado de agua y tapada su boca con cuero de cabra. El tambor cuenta conun metro y medio de altura pero, enterrado en el suelo, llega a la altura delpecho del ejecutante, quien lo golpea con un palo largo. A este instrumento sele otorga especial protagonismo durante el aret, fiesta que se celebra hacia lafinalizacin del verano, cuando ya ha terminado la cosecha. Participan de estafiesta los chiriguanos y los wichi. Bailan en una ronda, cubiertos los rostros trasmscaras de madera pintada con agregado de plumas, que representan

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  • Muchas de estas danzas, al espectador ocasional o profano, le parecenaburridas, montonas o repetitivas. Y lo son, si uno asiste a ellas encalidad de espectador. Porque son danzas que tienen un sentido yfuncin ritual, que provocan algo dentro de los danzantes. No sondanzas ejecutadas para ser mostradas sino para ser vividas. Por estotienen tan poco xito entre los turistas, porque duran horas y lo que haypara ver se lo puede observar en diez o quince minutos. Incluso, muchasde estas danzas se ejecutan en crculo y los bailarines dan las espaldas aquien est fuera del crculo. Pero qu cosa ocurre en el crculo? Tratende danzar y ejecutar al mismo tiempo un pinkillo (flauta) durante horas,y se darn cuenta de cmo cambia la percepcin de las cosas. As, estasdanzas tienen sentido en cuando expresan una vivencia, aun cuando nola muestran a quien est fuera. Tal vez el hecho de mostrar disminuyelo vivido? Lo ignoro, pero s que diferentes rituales que llevan hacia unestado de conciencia diferente, un trance, prevn tambin unreemplazante de dicho trance, un sustituto. Si el estado de alteracin dela conciencia, de percepcin fsica superior a las fuerzas no llega, si eldios no visita ese da al danzante o ejecutor, entonces este puederepresentar a la posesin, fingirla. Y los dems asistentes aceptan yfingen creer en algo que es solo la formalizacin, la representacinprecisa pero mucho menos potente que el posible original. En estoscasos, la representacin funciona, como decimos en la jerga teatral,para salvar el da.

    En los das de Carnaval, en asentamientos rurales de la provincia de Jujuy,un juego danzado descrito por la antroploga Claudia Forgione llam la atencinde Antonio Paleari que lo cita en su Diccionario mgico jujeo. Se trata de

    un contrapunto entablado entre un grupo de mujeres y otro dehombres, o entre grupos de distintas localidades quebradeas y cuyosversos, generalmente con un contenido picaresco-amoroso van increscendo en tanto se caldean los nimos y transcurren las horas.Mientras la chicha y el vino comenzaron a distribuirse generosamenteentre los presentes, irrumpieron de improviso en el patio dos jvenesgritando y con una mazorca de maz -sin madurar- recin arrancada,sostenindola con la mano izquierda en posicin erecta a la altura delrgano sexual masculino. Ambos simulaban toparse con la mazorca , entanto los presentes iban haciendo coro a estos dos personajes. Luego,comenzaron a topar a las mujeres sin distincin de edad ni estado,hecho que motiv algaraba y giles jugueteos. Unas mujeresenfrentaban y trataban de sacarles las mazorcas a los jvenes, otras losrechazaban a empujones. Durante ms de media hora ninguno de losdos ces de brincar, en tanto el erkencho sonaba ininterrumpidamente.Hacia el final del juego comenzaron a correrse buscando toparse entreellos tratando de quitarse, mutuamente, la mazorca. Se revolcaron en elsuelo, se agredieron con la nica mano que les quedaba libre y con lospies, y como ninguno de los dos ceda en su intento, concluyeron la

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    Capitales en contra del Arcngel Miguel, representante de la justicia divina.Las mscaras de los diablos realizadas en yeso, metal y papel mach

    presentan un barroco conjunto de figuras de dragones y ofidios superpuestos,imgenes que se repiten en las capas, fajas y casacas bordadas de sus intrpretes.Sus contenidos simblicos luego convertidos al cristianismo y a un mensajede carcter evangelizador en este espectculo que dramatiza la lucha entre elbien y el mal pertenecen a una cosmovisin animista propia de los ritos decarcter agrcola y religioso. Estas mscaras han sufrido un largo proceso dedesarrollo, pero con el transcurso de los aos fueron modificndose hastaencontrar un perfil esttico que recuerda los rasgos exaltados con que la nacinchina represent a los dragones a lo largo de los siglos.

    Mi mirada es la de un artista de teatro que ve o descubre, bajo la cscarade una fiesta, un llanto fnebre, de un ritual, de una danza, los elementosfundamentales de este vastsimo territorio que hoy llamamos teatro,argumenta Csar Brie, director del boliviano Teatro de los Andes. Al Carnavalde Oruro en su conjunto, el artista lo describe de este modo:

    Durante tres das (y luego de una preparacin de meses) decenas demiles de personas se renen en comparsas con trajes y mscarasextraordinarios y bailan sin cesar hasta caer. El arcngel gua a losdemonios en la diablada, las chinas supay coquetean con sus cortsimasfaldas, las morenadas se mueven lentamente con sus mscaras metlicasy sus trajes que se asemejan a gigantescos pasteles. Los incas saltan conpasos que solo deportistas resisten, el tincu, transplantado del campo alos estudiantes de la ciudad, ha perdido en este contexto su dimensin delucha ritual y ha incorporado pasos acrobticos. El jueves entran loscampesinos, cuyas danzas han originado la mayor parte de las otras, enun Carnaval menos vistoso tal vez, pero radicado ms profundamente.La iglesia, que haba expulsado estas danzas de las procesiones en las quese haban originado, hoy las recibe al final del recorrido, en una catedralabierta donde, curas con baldes de agua bendita bendicen a los danzantesagotados que entran de rodillas, las mscaras en la mano y baados desudor y lgrimas, a hacerse perdonar pecados cometidos y a cometer enesas tres noches en las que todos los diablos andan, se desatan, de la manode la euforia, el alcohol, la sensualidad, la alegra y la ofrenda.

    En el mismo artculo se refiere tambin a ciertas danzas de los Andesque, por su naturaleza exttica no despiertan inters al observador ajeno a esacultura:

    Hay en el mundo andino diferentes danzas con vestidos magnficosy pasos elaborados que se ejecutan en determinados momentos del ao.

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  • Se trata de un baile mmico ritual a travs del cual los danzantes reproducenciertas caractersticas de sus animales totmicos: a lo largo de las diferentesfiguras o fases de la danza, los bailarines imitan los pasos del luan o guanaco ensu ascensin a los cerros, las contorsiones del puma, los rpidos movimientosde cabeza del tero. Sin embargo, la figura ms caracterstica del lonkomeodanzado en las comunidades mapuches neuquinas es la del choiquepurrun,segmento de la danza en la que se imita al choique, especie de avestruz de tresdedos en cada pata, an caracterstica de la zona del centro y sur de Neuqun.

    Esta ave constituye para los mapuches la expresin de la alegra y lagracia. El baile ritual se realiza hacia el este, sobre una pista delimitada por unamplio trazado circular solamente destinado a los intrpretes que compiten entrminos de resistencia fsica. Segn apuntan los especialistas, la ejecucin dela danza no se cie a una coreografa fijada previamente sino que existenmovimientos libres sobre un motivo determinado, de modo que el mejorbailarn es el que ms resiste, ya que desde antiguo tambin, la danza no eracuestin de armona o de gracia sino de aguante, tal como subraya EstebanErize. Hombre avestruz o bien choiquehuenche, en lengua mapuche, es elnombre que designa a cada uno de los cinco intrpretes del choiquepurrun,baile solamente reservado a los hombres. La danza se ejecuta al son del kultrun,esta vez apoyado en el suelo y tocado con dos palillos, tambin solo porhombres. Segn Willy Hassler, la danza se divide en cinco piezas querepresentan el nacimiento y el posterior desarrollo de la vida del avestruz, desdela rotura del huevo y sus primeros aleteos hasta que el animal domina lasgambetas caractersticas de su modo de correr. La importancia de esta danzaproviene de la significacin que para los mapuches tiene esta ave: cuando se vea un choique realizando la carrera zigzagueante, este hecho se interpreta comoun anuncio de un cambio meteorolgico. Los intrpretes de esta danza llevanuna indumentaria especial que Hassler describi de este modo:

    En la cabeza, plumas de variados colores; camisa y faja concascabeles en bandolera; calzoncillos largos arremangados, chirip negroque remataba en una cola en la parte trasera; las rodillas tenan uncrculo azul, en las tibias, una cruz, y en los pies, dibujados los largosdedos del avestruz. El conjunto pintado simulaba las patas de esteanimal. (...) Sobre la espalda, completamente extendido, el poncho, conel que se ejecutan los movimientos que representan el aleteo del ave.

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    coreografas significantes

    accin en el mismo instante en que otro joven enarbol una planta demaz que acababa de arrancar de un cultivo cercano, nos tomaba de lamano brincando al son del erkencho, recorriendo el patio y realizandozigzagueantes figuras o amagando otras en espiral. Los hombres queintegraban la fila, enarbolaron tambin plantas de maz. As continuaronhasta que el erkencho dej de sonar.

    Paleari aclara que el juego descrito encuentra para su desarrollo elmbito temporal adecuado, puesto que el Carnaval en la Quebrada coincidecon la primera cosecha de maz y esa coincidencia cronolgica es la que, anuestro criterio, facilita la accin licenciosa y orgistica, eliminando las barrerasdel pudor y de las normas de conducta impuestas por la educacin religiosa.

    Rituales coreografiados en el NOA

    1) Danza de samilantes o danza del suriSon siempre varones los intrpretes de esta coreografa que se ofrece

    frente a la iglesia del pueblo en todas las fiestas patronales celebradas en laQuebrada de Humahuaca y la Puna jujea. Los samilantes llevan unavestimenta confeccionada con plumas de and o avestruz americano, ya queel sentido de la danza es imitar a ese animal, llamado suri, en quechua,estrechamente vinculado a las tormentas y a la falta de lluvia. Se dice que eland, cuando est por llover, realiza unas corridas que le son caractersticas.Tanto los pueblos originarios del NOA como los antiguos mapuches realizaronuna danza basada en las evoluciones de este animal, en trance de percibir elcambio metereolgico.

    De all se impondra la creencia de que basta invertir los trminos(realizar el movimiento del animal sin que existan signos de tormenta prxima)para asegurarse lluvias suficientes. Como ya se dijo, hay quienes sostienen queel choiquepurrun de los mapuches (de choique, avestruz, y purrun, danza, enmapudungun o lengua mapuche) es uno de los signos de la influencia inca sobreeste pueblo originario del actual Chile, si bien hoy en da, solo se conserva ladanza en los asentamientos neuquinos, durante la rogativa del nguillatun. Estacelebracin, la ms importante del mundo mapuche, comienza con la danzadel lonkomeo, la que se repetir durante los cuatro das que dura la rogativa.

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  • La estructura repite el esquema de la novena: son nueve series en las que serealiza el esquema de nueve mudanzas, todo lo cual es contabilizado por unapersona que pasa nueve piedritas de una mano a otra. Si bien existen variantesde una zona a otra, el paso de la danza involucra a todo el cuerpo. El paso delsuri o paso caracterstico de la danza de samilantes consiste en cuatro tiemposque se cumplen siempre con las rodillas en flexin. A veces se inicia con unabreve patada al aire:

    el danzante salta en el lugar comenzando con la pierna izquierda, conla pierna derecha flexionada; vuelve a saltar y apoya el pie derecho llevando la otra pierna elevadadetrs de esta; sucede un momento de suspensin por flexin de ambas rodillas; vuelve el pie izquierdo a poyarse en tierra.As, la sucesin de pasos se repite, comenzando con la pierna derecha.

    Especialistas en folklore, los jujeos Marcia y Alfredo Cabezas handescrito la ceoreografa exhaustivamente:

    1) las parejas se ubican frente a frente; al sonar la corneta los bailarinesasientan en el suelo el gancho que llevan en la mano derecha; colocan elsombrero encima de l y apoyan esa mano sobre la izquierda;2) hacen dos movimientos, levantando los talones para ambos costados,hacia la izquierda y hacia la derecha;3) en tres saltos largos, imitando al avestruz, dan una vuelta alrededordel gancho, golpeando con el taln de la pierna izquierda y dando elpaso con la derecha;4) en el cuarto salto levantan el gancho con la mano derecha y toman elsombrero con la izquierda; hacen dos flexiones con salto, una adelante,otra atrs, frente a frente las parejas;5) medio giro (a la izquierda y derecha cada bailarn) de frente a laimagen, con una flexin de reverencia;6) las parejas se colocan de costado, frente a la imagen. Comienzan adanzar con cuatro saltos hacia delante y cuatro saltos hacia atrs, conflexiones sin dar la espalda a la imagen. Repiten esta figura tres veces: 1y 3, levantando y bajando los brazos; la 2 llevando los brazos paraambos costados;

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    El estudioso Adn Quiroga, al referirse al comportamiento del suri antela proximidad de una tormenta, escribi:

    En el folklore calchaqu, hasta hoy el suri es anunciador de la lluvia.Cuando el tiempo est por cambiar, esta gran ave nerviosa abre las alas,cuyas plumas desordenadas sacude, y corre al encuentro de la primerarfaga hmeda de viento que llega. Cuando la descomposturaatmosfrica se anuncia con los primeros truenos lejanos, huyevertiginosamente de un lado al otro, describiendo grandes curvas,moviendo su cuello largo y flexible, abriendo su pico y volteandocuriosa y airosamente en el aire, doblando sus largas canillas de maneraque aparece como un ser fantstico, que cobra con la agitacin de suplumaje formas diversas, corriendo a medio vuelo sobre la llanura.

    Es por las mismas razones que los samilantes, durante las fiestaspatronales que se festejan en otoo e invierno, meses correspondientes a laestacin seca, realizan el rito pidiendo lluvias, en tanto si se realiza en primaveray verano, meses de estacin hmeda, bailan la danza para agradecer el aguarecibida. La coreografa completa se realiza en dos oportunidades frente a laimagen ubicada en el atrio de la iglesia: durante la vspera de la festividad, ala noche, y durante la tarde del da siguiente. Los samilantes tambinparticipan de las procesiones con las imgenes alrededor de la plaza y el puebloy, recin desde hace unos aos, a instancias de los padres Jess y PedroOlmedo, este ltimo obispo de la Prelatura de Humahuaca, los danzantes soninvitados a entrar a la iglesia, junto a los instrumentistas que los acompaan,con el objeto de ser bendecidos. Antes no ocurra lo mismo: Por qu noentran los suris a la iglesia?, pregunta en octubre de 1970 Juan GabrielGonzlez, estudioso que describe para La Gaceta de Tucumn los detalles dela festividad de Santa Rosa, en Tastil: Despus que nos saquemos las plumas,pues, es la respuesta del samilante interrogado. No hay forma de que nosexplique por qu no pueden asistir a misa con las plumas, ya que segn afirma,realizan el rito para la Virgen. No entiende nuestra pregunta. Igual suertecorremos con los otros suris. Quiz acta en ellos, de manera solapada, elsentimiento de que esa tradicin es un elemento extrao o perifrico al ritualcristiano, aventura el cronista.

    La estructura coreogrfica de la danza del suri consiste en tandas deavances y retrocesos de frente a la imagen. La serie concluye con un giro y elretroceso de la primera pareja que deja su lugar a sus compaeros de cuadrilla.

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    coreografas significantes

    7) con cuatro pasos seguidos, imitando al avestruz, se hace una vueltaentera;8) siguen danzando hacia delante y hacia atrs con pasos largos; davuelta y dando la espalda a la imagen, con saltos y flexiones de frente,dos veces;9) giro para quedar frente a la imagen, uno por la izquierda, otro por laderecha, en tres pasos. Se adora otra vez, hacia delante y hacia atrs, alllegar cerca de la imagen debe hacerse una reverencia;10) se colocan las parejas frente a frente, hacen un avance, un retroceso,un avance como para chocar, enganchan los bastones, pareja a pareja;11) dan media vuelta bailando y cambian de lugar;12) desenganchan de nuevo y con el bastn y el sombrero arriba, hacenavance, retroceso, avance, frente a frente, enganchan de nuevo ybailando vuelven a su lugar;13) hacen dos flexiones con salto frente a frente, por parejas;14) giro hacia la imagen; bailan por adelante y atrs dos veces; a latercera hacen una reverencia cerca de la imagen; siguen bailando y al 5avance colocan el sombrero sobre el bastn, y luego hacen una flexincomo arrodillndose, primero sobre la pierna derecha y luego sobre laizquierda.15) terminan la danza y la msica, de rodillas rezan juntamente con todoslos fieles; el gancho asentado en el suelo y el sombrero arriba de este;16) el esquema de la danza, segn la notacin tradicional es la siguiente:

    C E C I L I A H O P K I N S 166

    Parejas de frente. Dos movimientos en puntasde pie, a los costados.

    Tres saltos largos alrededordel bastn.

    Dos reflexiones con salto. Medio giro con flexin. Cuatro saltos adelante,cuatro atrs. (3 veces).

    Vuelta entera con pasosseguidos.

    Pasos largos, de espalda,saltos y flexiones de frente.

    Giro para quedar frente ala imagen y adoracin(repetir figura 6).

    De frente por parejas;enganchan los bastones.

    Media vuelta cambiando delugar.

    Avance, retroceso, avance,enganche y cambio de lugar(repetir figura 10).

    Dos flexiones con salto. Giro hacia la imagen ydanza (repetir figura 6).

    Imagen Giro

    Danzarines

    Pasos largos

    Saltos y flexiones

    Vuelta entera

    Bastn y sombrero

    REFERENCIAS

    Esquema danza del suri

  • en la mano, un pico o bastn hecho de una rama de rbol terminadaen un gancho.El acompaamiento musical es solo ejecutado con bombo y erke. En

    contadas ocasiones, los samilantes cantan una cancin con letra en quechua.

    2) Hueveada, empollamiento y capada del toritoEn un trabajo basado en la observacin de la fiesta de San Jos celebrada

    en Abra Pampa, Jujuy, la investigadora Mara Azucena Colatarci describealgunas variantes de la danza del suri, a las que integra en el grupo deadoraciones o invenciones, dedicadas a un santo o a una Virgen: la hueveada oempollamiento y la capada del torito. Entre los andes, son los machos losque empollan huevos. La hembra los pone y se va. Y parece que el suri hacemovimientos circulares alrededor de los huevos, aporta respecto de la primeraadoracin el seor Luis Alberto Wayar, entrevistado por Renata Kulemeyer.Respecto de la segunda, cabe destacarse que en las mascaradas vascas celebradasentre el primer da del ao y el fin del Carnaval, el personaje ms importante,el hombre-caballo llamado Zamalzain (un celebrante que se desplaza con unarmazn de madera que indica muy sumariamente las caractersticas delanimal) es tambin capado durante la fiesta. As lo describe Julio Caro Baroja:El que hace la operacin arroja al aire dos corchos que simulan ser los rganosgenitales. Zamalzain finge quedar debilitado, pero poco a poco recuperadespus sus fuerzas y baila, saltando ms que nunca, pegando enormescabriolas. Segn el autor, uno de los rasgos recurrentes de las mascaradas delCarnaval europeo es presentar, a travs del acto de castracin o muerte yresurreccin de un personaje simblico, la prdida y la inmediata recuperacinde las fuerzas reproductoras.

    Colatarci describe del siguiente modo ambos rituales coreografiados:

    La hueveada es realizada por los suris y se enlaza con la adoracinque estos ejecutan. Para hacerla, dos suris se desprenden del grupo yproceden a delimitar el espacio donde prepararn el nido. Los dos surisbarren con palmas una porcin de terreno cuadrado o circular cercanoa la luminaria, donde harn el nido; para marcar los lmites emplean lospicos. Delimitado el espacio acercan un poco de paja al lugar para armarel nido y retornan junto al grupo para continuar adorando.

    Luego, todos los suris se dirigen al nido y dan algunas vueltasalrededor del mismo hasta que se ubican en rueda, mirando hacia el

    tincunacu 169

    coreografas significantes

    Mientras se realiza la danza descrita se toca el erke, instrumentotambin llamado corneta, rematada la punta de la larga caa hueca con unabocina de metal, comnmente confeccionada con una lata de duraznosreplegada a martillazos y no con el asta de vaca antes caracterstica. Por suparte, el campanero tae las campanas en la torre de la iglesia, mientras algunostiran cohetes y bombas de estruendo. Los samilantes ejecutan su adoracinfrente a la iglesia durante la tarde de la vspera. Luego salen al camino a recibira las imgenes que llegan de algn poblado de la zona. Bailan con unos picoso bastones de madera de los que una saliente les permite un nico gestotravieso: enganchar el tobillo de algn distrado para hacerlo tambalear o tiraral piso. Un rasgo de picarda y humor inesperado en el marco devocional queencuadra la procesin.

    Puede haber entre las parejas de plumudos, un chico vestido del mismomodo, que oficia el rol de el pollo. Entre el pblico, hay quienes quierenrobar al chico apartndolo de la danza, y es ese el momento en que losmayores utilizan el bastn que llevan entre las manos para engancharlo en eltobillo de los entrometidos, y hacerlos caer al suelo. En otros momentos, loscuatro samilantes enganchan sus picos o bastones al ras del suelo y giran comosi estuvieran pelendose entre s.

    El vestuario que presenta el samilante jujeo, est influenciado por larepresentacin del suri boliviano, danzante de Carnaval con gran profusin deplumas en la cabeza y el cuerpo. Si bien existen algunas variantes, segndescribe Esteban Sajama, su vestuario es el siguiente:

    poncho corto de lana de oveja sobre el que se disponen las alas; 4 fajas de 5 centmetros de ancho cubiertas con plumas de avestruzcruzadas sobre el pecho; 4 fajas ms angostas que las anteriores, tambin cubiertas de plumasatadas en las muecas y en los brazos, por arriba de los codos; una faja igual, para el cuello; una faja con plumas bien largas atada a la cintura, a modo de faldelln; una tira con cascabeles para cada pierna, atada por sobre las rodillas; en la cabeza, un pauelo atado en la barbilla y sobre l, un bonete deplumas. A veces, el samilante solo se pone un sombrero aludo adornadocon plumas de avestruz;

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  • disponen de mistura (papel picado) y lana de color para enflorar altorito antes de caparlo; adems hacen un hoyo en la tierra en el lugardonde se realizar esta invencin, delante del santuario o a variosmetros de la entrada del mismo. La adoracin comienza cuando elindividuo se coloca el atuendo ceremonial sobre la cabeza y realizadesplazamientos en el rea comprendida entre el oratorio y laentrada al predio. En tanto, la persona que ha sido designadapreviamente toma un lazo, lo persigue hasta que logra enlazarle lospies, de modo que lo derriba y, una vez que est bien maneado, allado del hoyo y mientras la mujer que lo capar se prepara, el toritoes enflorado con lanas de colores entre sus astas y a los presentes lesarrojan talco y mistura. Mientras realizan estas actividades, challanel hoyo practicado en la tierra volcando vino o leche caliente(ponche) cigarrillos y hojas de coca en su interior; de la bebida queutilizan convidan a los presentes que estn ms cerca del grupo queadora. A continuacin, la mujer, munida de un pequeo cuchilloprocede a capar al torito, al par que este realiza movimientosconvulsivos tratando de impedir el hecho sin lograrlo. Los testculoscaen sobre un plato que est ubicado debajo del atuendo y quecontiene un lquido con colorante, que se usa para embeber unamarca con las iniciales SJ, de San Jos, y con la misma marcar a lospresentes sobre la ropa. Para finalizar, vierten el contenido del platoen el hoyo, lo tapan, sueltan al torito que se incorpora y salecorriendo, mientras todos se dispersan.

    3) Danza de los cuartosTambin llamada adoracin de cuartos, esta danza est directamente

    ligada a la que ejecutan los samilantes, ya que en base al nmero de cuartos deanimal que donan las familias de la zona para festejar al santo o la Virgen delpueblo, cada cuatro cuarteras se organiza una cuadrilla de plumudos. Enfuncin de sostener las medias reses (de cordero, chivo o llama sin cabeza, colani vsceras), es preciso formar parejas de danzantes, de cualquier sexo y edad.Se ubican en hileras de frente a la imagen, sosteniendo los cuartos de modo quesu cara interna se oriente hacia el frente. La danza consiste en ejecutar avancesy retrocesos acompaados de constantes balanceos de las piezas de carne: haciaadelante y atrs, con los brazos extendidos, y hacia arriba y hacia abajo,tambin con los brazos extendidos, de modo que los cuartos se elevan porencima de las cabezas de los danzantes.

    Las evoluciones incluyen giros que se ejecutan sin soltar el cuarto, hacia

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    coreografas significantes

    centro, agachados y muy juntos; es as que solo se ven los plumajes quelos tapan. Los suris mayores, que han barrido el espacio en el que est elnido, quedan afuera del grupo, dan vueltas en torno del mismo, saltansobre l, indican a los suris que estn en el nido cmo acomodarse mejory preguntan si ya estn listos los huevos (se trata de huevos duros opapas hervidas).

    El maestro de suris, que no lleva un atuendo diferenciado, tambinrevisa el nido y lo aprueba. Llega entonces el momento esperado portodos, mientras los que estn en el nido permanecen quietos y los dosmayores adquieren una actitud expectante, el maestro de suris anunciaen voz alta que aquellos que deseen intentar el robo de los huevos delnido pueden hacerlo; la nica condicin es participar de a dos por vez.

    Participan de la hueveada solo los hombres jvenes, estosprcticamente se arrojan sobre el nido mientras los suris que estnafuera tratan de impedirles el robo pegndoles y enganchndolesdistintas partes del cuerpo con sus picos, con particular inters en laspiernas y pies. En ciertas ocasiones, algn participante logra sucometido, entonces se come el huevo en medio de las felicitaciones ycomentarios de los presentes; en otros casos no pueden y se retiran delnido apaleados, causando hilaridad en los presentes. Este mecanismo deinvasin y defensa del nido contina hasta que el maestro de surisindica que el tiempo establecido (son diez minutos aproximadamente)ha terminado. En este momento se acerca al nido, introduce su manoen l (en medio de los suris) y saca un plumaje diciendo: Aqu est elpollito, el pollito es mo, lo muestra a la concurrencia y los suris selevantan, as se desarma el nido y todos retornan frente al santuario parareiniciar la adoracin de suris al son de los toques instrumentales quehaban cesado al comenzar la hueveada.

    La cantidad de veces que se hace el empollamiento de los suris esvariable y depende de las promesas que haya; adems, no tiene relacincon la cantidad de veces que se realiza la adoracin de suris.

    En cuanto a la capada del torito, varios personajes intervienenactivamente:

    a) torito: es un individuo adulto de sexo masculino que se colocasobre la cabeza el atuendo ceremonial denominado torito;b) otro individuo adulto de sexo masculino cuya funcin es enlazary manear al torito;c) una mujer adulta que se encargar de capar al torito; d) otra persona, de sexo indistinto, que ayuda en las tareas, yasosteniendo al torito, ya colocando el recipiente donde virtualmentecaer la sangre en el momento de la capada, ya marcando a lospresentes despus de la misma;e) para iniciar la capada preparan previamente el atuendoceremonial torito, adosndole los testculos de un cordero;

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  • 9) al final de la danza, se realiza el corte de los cuartos, mediante golpessecos y fuertes;10) una vez separados por la mitad los cuartos, repetir las figuras 3 y 4;11) colocar los trozos de cordero al pie de la imagen, en seal deveneracin;12) despus de orar por unos minutos, cada uno levanta su parte,iniciando la partida del misachico.El esquema coreogrfico, segn los especialistas, es el siguiente:

    4) Danza de Torito y Caballitos Comnmente, junto a los samilantes, en las procesiones se distinguen

    tres adolescentes quienes, aliados dos contra el restante, juegan a embestirseen funcin de los roles que interpretan: dos son los caballitos que resisten

    izquierda y derecha, y tambin figuras, como las del puentecito, semejante a ladel carnavalito: todas las parejas elevan sus cuartos formando arcos, debajo delos cuales pasa la ltima pareja del fondo, con sus brazos bajos para ubicarse enprimer trmino, elevando su cuarto, para que sucesivamente las dems parejaslos imiten. Esta misma figura se realiza, a veces, de adelante hacia atrs. Otrade las figuras de conjunto recibe el nombre de brinquillo, y consiste en unaronda de los participantes unidos tomando los extremos de los cuartos, dandola espalda al centro de la rueda.

    La cuarteada o tirada de cuartos es el momento de la danza en el que losparticipantes tiran de las piezas de carne para separarlas. Se trata de un ritualque tendra origen prehispnico, recuperado posteriormente para las fiestaspatronales desde que se lo incluye en la celebracin de San Santiago, patronode la hacienda. Con movimientos enrgicos (que a veces deben ser repetidosuna y otra vez) se descuartizan las piezas de carne, a veces marcadas con unapiedra de cuarzo si las que tiran los cuartos son mujeres. A quien logra elpedazo ms grande, se le augura abundancia y prosperidad durante ese ao.

    Marcia y Alfredo Cabezas, los especialistas jujeos ya mencionados,tambin realizaron la descripcin de esta danza:

    1) ubicarse en pareja, tomando los cuartos de cordero en nmero de seisy ocho; 2) al ritmo de la corneta, bajar los cuartos y arrodillarse en signo deveneracin;3) en posicin de pie, levantar los cuartos en alto, retroceder y avanzar dosveces, bajando alternadamente los cuartos, con paso rtmico y cortadito;4) con los cuartos en alto, sin interrumpir el ritmo, hacer un girocompleto hacia fuera;5) repetir la figura 3, pasando luego cada pareja por debajo de lasrestantes;6) repetir figura 4;7) caminar con paso rtmico, por espacio de unos metros, y repetir denuevo las figuras 3 y 4;8) cuando se detiene el misachico al final de la procesin (ya sea en eloratorio o en la iglesia), al frente de la imagen hacer una reverencia conlos cuartos;

    C E C I L I A H O P K I N S tincunacu 172 173

    coreografas significantes

    2 veces.

    1- Ubicacin 2- Veneracin. 3- Avance y retroceso.

    4- Giro

    Santo o imagen Cuartos bajados

    Danzarines Cuartos en alto

    Cuartos de cordero Giro hacia afuera

    REFERENCIAS

    Esquema danza de los cuartos

  • tincunacu 175

    coreografas significantes

    las acometidas del tercero, el torito. Con un vestuario y aditamentos yadescritos anteriormente el Torito con montera de cuero simulando lacabeza del animal, los Caballitos, con un aro de cuero que se ajusta a lacintura, con una cabeza de caballo en su parte delantera bailan al son de laflautilla y la caja. Pocos se avienen a aventurar algn significado para esteritual de procesin.

    Se suman al cortejo dos adolescentes que bailan Caballitos,simulando luchar con un tercero, el Torito. Avanzan y retroceden, aveces van contra el pblico. Y el Torito, ah ya est, es un smbolotpicamente cristiano, porque hay dos caballeros, un torito, la imagende la Virgen, y uno de los caballeros la defiende a la Virgen de lasembestidas del torito que viene a ser el diablo,

    interpreta el mismo seor Wayar, en la entrevista citada de Renata Kulemeyer. En funcin de establecer antecedentes hispnicos de esta danza, adems

    de Zamalzain, el hombre-caballo ya citado, se encuentran Zaldiko, personajede los Carnavales de Navarra y los caballitos que intervienen en las procesionesdel Corpus, en Pamplona. En Valencia, el investigador Flores Arroyuelodescribe antiguos danzantes, unos con cuerpo de caballo y otros, que recuerdana los samilantes: En el siglo XVII, los danzantes utilizaban cascabeles en losjarretes de las piernas y adornaban sus cabezas con grandes plumas dediferentes colores.

    Ligada a la danza de Torito y Caballitos, Colatarci describe otrainvencin o adoracin. Se trata de La sealada, que solo se celebra si alguienofrenda a la imagen nuevos atuendos para danzar Torito y Caballitos. As,tres hombres previamente elegidos se colocan los nuevos atuendosceremoniales, mientras que los presentes exceptuando a los nios que debenalejarse del lugar hacen corralito, tomndose de las manos para impedirque los caballitos y el torito escapen. Entre los presentes, sern enlazados ymaneados, se les arrojar papel picado y se los sealar con las iniciales delsanto.

    Los jujeos Marcia y Alfredo Cabezas tambin codificaron la coreografade esta danza:

    1) entran bailando el torito adelante y los caballos atrs, dando laespalda al pblico. Los caballos hacen un trote corto como corriendo; el

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    toro da un paso adelante y otro atrs, moviendo con mucha gracia lacabeza; se da vuelta, tratando de embestir repetidas veces a los caballos,los cuales se defienden con sus cuchillos y banderillas; 2) se ubican a la inversa de la entrada, se arrodillan y rezan. Al comenzarel flautero y el ritmo de la caja, se levantan y hacen un giro y uncontragiro, los dos caballos y el toro, levantando una vez el pie izquierdoy otra, el derecho;3) cruce de los caballos en el centro, ambos de frente. El toro haciendoun paso adelante y otro atrs, aguarda;4) ataque del toro al caballo nmero 1. El caballo da un girodefendindose; el toro da una vuelta a su alrededor tratando decornearlo; el caballo se defiende con el cuchillo y la banderilla;5) lo mismo hace con el caballo 2;6) la danza prosigue; los caballos hacia delante y atrs hacen un avance,retroceso y avance dndose vuelta con un giro. El toro siguindoles, hacelo mismo tratando repetidas veces de cornear a los caballos, pero estosse defienden.7) comienza la segunda parte. Cambian de ubicacin el toro y loscaballos. El flautero da la seal para comenzar el caracoleo, o sea, giro ycontragiro del toro y los caballos; cruce de estos en el centro; el toroataca al caballo primero y luego al caballo segundo y trata de embestir alos fieles, pero los caballos lo evitan. Mucho vale en esta danza la graciay el movimiento que hagan el torito y los caballos;8) giro y contragiro del toro y los caballos. Terminan arrodillndosefrente a la imagen. Rezan, luego comienza el flautero a dar el ritmo parael caracoleo de los caballos y el toro;9) cruce de los caballos en el centro y ataque del toro.10) avance y retroceso bailando;11) salida del misachico, mientras tanto la danza del torito sigueadelante de la imagen.El esquema correspondiente es:

  • La adoracin de los Cachis en la Fiesta Grande de Iruya

    Esta coreografa descrita en su contexto festivo en el ltimo captulode este libro tiene lugar el primer domingo de octubre, durante la FiestaGrande en homenaje a la Virgen del Rosario, patrona del pueblo salteo deIruya. La adoracin de los Cachis sucede antes y durante las procesiones de lasimgenes por el pueblo; la interpretan 10 jvenes de sexo masculino querepresentan al negro, a una pareja de ancianos, a cuatro jvenes (dos changosy dos chinas), ms dos Caballitos y un Torito, estos ltimos, sin mscaras. Elritual consiste en nueve avances con sus retrocesos, ms variaciones. LosCaballitos inician el desfile, saludando ceremoniosamente a la imagenquitndose sus sombreros, mientras cumplen con la serie de movimientospautados. Luego, tras un giro y una rpida carrera hacia atrs, los caballitosgiran entre s, mientras que el Torito traza la figura de un ocho, pasando entreellos. Por su parte, los cachis o personajes enmascarados se dividen yemprenden un crculo desde lugares opuestos, conteniendo en su interior a lasfiguras descritas. Por su parte, el negro deambula por detrs de estasformaciones. El esquema es el siguiente:

    NegroCachi Joven Cachi jovenCachi joven Cachi jovenViejo Vieja

    dos Caballitos

    ToritoEl orden que llevan en la procesin es el que sigue:

    cuatro Cachis jvenes en parejasNegropareja de ViejosToritodos Caballitos

    atrio de la Iglesia

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    coreografas significantes

    C E C I L I A H O P K I N S 176

    Giro del caballo 1 y vueltadel toro.

    Giro del caballo 2 yvuelta del toro.

    Avance, giro, retroceso,giro, avance, giro.

    Cambiando de ubicacin serepite fig. 2,3,4 y 5.

    Giro y contragiro; searrodillan y rezan.

    Cruce de caballos en elcentro; el toro ataca.

    Repetir la fig. 6.

    Giro y contragiro

    Torito Giro

    Caballito Vuelta

    Imagen Avance o retroceso

    REFERENCIAS

    Caballitos y toro, deespaldas al pblico.

    Giro y contragiro. Cruce de caballos en elcentro, el toro aguarda.

    Esquema danza de Torito y Caballitos

  • 1) una pareja joven y principal;2) una o varias parejas de viejos;3) un personaje animal, importante, estrechamente relacionado con laprimera pareja;4) varias representaciones de animales de importancia secundaria;5) mscaras de carcter oscuro que asustan y espantan;6) mscaras de carcter alborotado de rasgos femeniles.Las mascaradas heredadas de las celebraciones espaolas, con los

    aditamentos propios de sus renovadas prcticas en estas tierras, vienen areeditar la antigua relacin entre el culto al suelo y el comienzo y final del ao.As, el rea cultural andina practic desde tiempos coloniales fragmentos deunas celebraciones que en el trnsito perdieron su antiguo sentido para asumirotros o para, sencillamente, sumarse al repertorio festivo de los pueblos.Sobreviven en esos segmentos el antiguo culto a los muertos y las fuerzasreproductoras que sola ejecutarse mediante el desgarramiento de animalestotmicos, mascaradas de hombres representando a un dios y danzas extticas,todos elementos que, segn Caro Baroja son caractersticos de la religin demuchas viejas colectividades de economa agraria, sedentaria.

    La mascarada de los Cachis, es una danza ritual o una danza ldica? Sindudas, hoy resume ambas caractersticas. En tiempos de la Colonia espaola,la danza de los habitantes originarios fue censurada, ya por su supuesto valorincitador a las pasiones o bien por temor a la hereja idlatra. El rezo no podapracticarse sino mediante el recogimiento y la meditacin, por lo cual noexisti la necesidad de aprovechar las danzas originarias para orientarlas haciauna dimensin devocional, por la falta de compatibilidad de ambas actividades:si hay actitud de rezo, entonces no existe el baile, ya que si se baila, seguroentonces que no se est rezando. Para otras culturas, sin embargo, el baile y lamsica se constituyen como una expresin de la fe, accin conjunta quecanaliza una energa ligada a lo sagrado.

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    coreografas significantes

    Si tiempo atrs la adoracin de los cachis contaba con una secuenciaque se desarrollaba lejos del sacerdote y la iglesia, como algunos afirman, hoyya no es as. Los Cachis persiguen al Torito para montarlo, el Torito juega aembestir al Negro o al pblico, los Caballitos enfrentan al Negro. Todosbailan en ronda, tomados de las manos, saltando en un pie y apoyando eltaln de la otra pierna, hasta que se sueltan y aplauden con los brazos en alto.Todos bailan en conjunto menos el Negro que baila solo, acompaado delsonido de una corneta, msica que luego debe pagar con billetes que extraede sus bolsillos.

    Por otra parte, todos niegan conocer el significado y origen de estamascarada simblica. Don Arturo, propietario del almacn que dista 50 metrosde la iglesia afirma que en sus 83 aos de vida vio a los Cachis repetir la mismaadoracin y los mismos juegos: Es algo muy antiguo y nadie puede sabercmo empez, subraya. Uno de los intrpretes de la danza de Caballitos en laFiesta Grande de octubre de 2006 da su versin:

    Los Cachis son una familia; los padres son los que tienen el pelo blanco,los jvenes son los changos y las chinas que, en realidad, son varonesdisfrazados. El personaje del Negro representa al mal, es mujeriego y sepelea con el resto. El Torito y los dos Caballitos representan el bienestarde la gente.

    Todos los que toman parte de este ritual, ensayado en todas sus fases,son promesantes. Forman al menos tres grupos: los que adoran en la vspera,al alba del da de la celebracin, al medioda y a la tarde.

    Julio Caro Baroja relaciona las mascaradas invernales europeas, origendel Carnaval,

    con la nocin de aparicin de los demonios y fantasmas y de las almasde los muertos sobre la tierra alrededor del solsticio invernal. Estospersonajes -segn el investigador- contribuyen, entre otras cosas, apromover la fertilidad de la tierra y a expulsar a los espritus malignosmediante el sonido mgico de las campanas que llevan colgando.

    Por otra parte, Caro Baroja encuentra personajes recurrentes en lasmascaradas invernales espaolas, que parecen relacionarse directamente con laadoracin de los Cachis:

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  • en otros por simple traslacin de los organizadores. En Jujuy, los nios realizan la danza frente a durables pesebres caseros

    interiores, o van por las calles los das de procesin y danzan junto a losnacimientos que arman los devotos en las aceras. Se ejecuta generalmente desdeNavidad hasta Reyes.

    Los antecedentes de esta curiosa danza rural se remonta a los tiempos enque buena parte de la humanidad, inerme y en lucha, atribua espritu ysensibilidad a los animales, a los vegetales, a los elementos y a muchas otrascosas. Directa o indirectamente, de ese animado mundo circundantedependan sus posibilidades de subsistir y le rendan ingenuo culto.

    Moraban en los rboles los espritus de los rboles mismos o lo espritusde los propios antepasados del primitivo, creador de invisibles deidadestutelares por puro rigor de orfandad. Los bosques, calcinados a sol odesplumados y ateridos, estaban poblados de nimas y eran lugares de culto. Aellos acudan los hombres en busca de lluvias oportunas, de sol propicio, defecundidad para los ganados y para las mujeres; y aun clamaban por que latierra, inconstante anual con sus inviernos estriles, tornara a las promesasprimaverales del fruto y de la espiga.

    Tiempos eran, los de entonces, muy anteriores a las lejanas fechas en quelas ninfas gentiles y alegres protegan las sagradas selvas helnicas y danzabanen torno a las encinas videntes acechadas por los stiros. Precursor, el primitivoinnominado rindi al espritu de la vegetacin el culto estrepitoso en colorinesy cantares de que los continentes conservan vestigios en sus reservasetnogrficas y folklricas. An en nuestros das o hasta hace pocas dcadas, loshombres danzan o danzaban en crculo con el rbol en el centro. Los hombresadornaban el rbol benefactor o el palo que lo representa, y entre los adornosfiguran las telas o cintas de colores. El rbol en su bosque o cortado yconducido a la aldea, o el palo, su desnudo personero, representaban para losatribulados agricultores, la primavera misma: y la primavera vena con l,henchida de fuerza, a vivificar los surcos, los frutales, el ganado, las mujeres;con sus retoos emerga la vida renovada y los hombres queran atraer sumisterioso beneficio. Por eso rondaban a su alrededor; por eso lo adornaban

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    coreografas significantes

    APNDICE

    La danza de las cintas, por Carlos VegaLa idea que engendra nuestra inocente danza de trenzar viene rodando

    milenios desde la prehistoria. Antiqusima institucin de cultos dej al fin,entre sus vestigios ltimos, el mstil seco y recto adornado de cintas, rodeadode nios y cantares.

    Solo en apariencia la danza de las cintas se nos presenta como la arcaicaronda en que los ejecutantes se mueven en crculo sin tocarse. Porque, enprimer lugar, los bailarines no pueden enlazarse o tomarse debido a que lascintas les ocupan las manos; en segundo lugar, porque la ronda no es meraconsecuencia rtmica de un exceso de energa, sino un menester cargado desentido, impregnado del mensaje propiciatorio, en fin, porque no es una ronday nada ms, sino una ronda en torno al mstil en que se trenzan las cintas. Estadanza pertenece al grupo de las abstractas; es decir, que los danzantes noexteriorizan su significado por la accin pantommica, como ocurre con lasimitativas, pero est muy lejos de ser una danza abstracta pura, porque hay enella algo ms que ordenados movimientos de bailarines con tal o cualpensamiento. En las danzas congneres precursoras del baile de trenzar, lasevoluciones se realizan en torno al animal sacrificado o al altar o montculo defrutos o al rbol que simboliza el espritu de la vegetacin, la fecundidad de lanaturaleza. Aditamentos posteriores, transferencia de actitud y de significaciny un objetivo secundario el de trenzar, configuran la danza de las cintas, encuyo mstil sobrevive el recuerdo del rbol benefactor. Tcnicamente, pues, setrata de una danza de fertilidad o, ms ampliamente, de una danzapropiciatoria.

    Por pura persistencia en los cauces de la tradicin oral, la danza de lascintas se ejecuta hoy solamente en el extremo del Noroeste argentino; por obrade ocasional transplante, se ha realizado modernamente alguna vez en el oestey en el centro del pas, pero casi con seguridad, fue conocida tiempo atrs enmuchas otras partes de nuestro territorio. En su forma y con los detallesactuales, es muy probable que haya pasado al Noroeste argentino de las vecinasregiones bolivianas. Danza folklrica viva, muere en algunos lugares y retoa

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  • Revista Ciencia y cultura N15, 16 de agosto de 2005, Universidad CatlicaBoliviana San Pablo. Quiroga, Adn, La cruz en Amrica, Castaeda, 1977.Cabezas, Marcia y Alfredo, Danzas culturales del norte jujeo, Jujuy, 1989.

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    coreografas significantes

    incluso con cintas de colores, smbolo del fruto. Pueblos de casi todas partes y grupos folklricos europeos, africanos,

    asiticos y americanos han rendido o rinden culto al rbol prdigo y al palo desu madera, lo adornan y cantan danzando a su alrededor. El mstil encintadoy contorneado de danzantes es, sin duda alguna, el antepasado directo de lasdanzas de trenzar. Aunque se desconocen las etapas por las cuales el primitivoculto al rbol se convierte en el juego cristiano de las cintas. En Amrica delSur se debe a la importacin espaola. Espaa conserva hasta nuestros das, nosolo la danza de las cintas, pura, sino tambin los antiguos ritos del rboladornado, diversas formas intermedias, las formas derivadas, como la cucaa yla cruz de mayo, y hasta el sentido con que se adscriben a las fiestas cristianas.

    La danza de las cintas no tiene msica propia exclusiva. Dondepredomina un sistema vernculo, los danzantes suelen adoptar su msicaregional, pero por lo general, la danza se ejecuta al son de villancicos deNavidad, como en alguna provincia de Espaa.

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