tema: “la justicia · la justicia será siempre un tema abierto, un tema discutido y afrontado...
TRANSCRIPT
EDUCACIÓN
SECUNDARIA
TEMA: “LA JUSTICIA”
¿Qué es la justicia?
Todos estamos llamados a velar por la justicia, a luchar para que a nadie se le prive de sus
derechos fundamentales, a trabajar para que la solidaridad sea el eje en torno al cual gire
toda la vida social de los estados y del mundo.
La palabra “justicia” y sus derivados son moneda de uso común. Pero cuando alguien nos
pregunta “¿qué es la justicia?”, sentimos que el suelo debajo de los zapatos se hace
resbaladizo, que no tenemos una clara idea de lo que pueda ser la justicia.
Intentemos ofrecer alguna definición con la ayuda de algunas opiniones y teorías del
pasado y del presente.
Para alguno la justicia consistiría en actuar según las leyes. Pero si las leyes son “injustas”,
quien obedece a la ley no puede ser justo...
Para otros sería justicia dar a cada uno lo suyo. Esta definición se encuentra ya entre los
griegos del siglo V antes de Cristo, y fue recogida por Cicerón. Los autores medievales
acogieron en parte esta definición. Santo Tomás de Aquino (siglo XIII) repetía, con una
fórmula del pasado, que justicia es “la voluntad perpetua y constante de dar a cada quien
lo que es suyo por derecho”. Pero, ¿qué es “lo suyo”? ¿Hay posesiones que algunos tienen
(como “lo suyo”), que han sido adquiridas de modo injusto, sin “derecho”?
Otros piensan que la justicia consiste en respetar los pactos y no hacer violencia contra las
personas. En seguida surgen las preguntas: ¿qué significa ser persona? ¿Todos los seres
humanos son personas?
¿Es injusto dañar o eliminar al hijo no nacido, porque todavía no tiene reconocimiento legal,
porque “aún” no es persona? ¿Un enfermo terminal es persona? ¿Qué pasa cuando los
pactos son “injustos”?
En el diálogo titulado República, Platón pone una serie de importantes reflexiones en boca
de algunos protagonistas y ofrece varias opiniones sobre la justicia.
Según la mentalidad antigua que presenta y critica Platón, la justicia consistiría en lo que
impone el más fuerte. Para otros, la justicia sería una especie de limitación de nuestras
ambiciones para evitar el conflicto continuo con los demás. Para otros, según la
definición que ya vimos, justo es darle a cada uno lo que le pertenece.
Nosotros, en cambio, creemos que la justicia implica un apoyo continuo, total, entre
todos (sin ninguna exclusión) los miembros de la sociedad. En cierto sentido, la justicia
no puede existir sin solidaridad. Una solidaridad que nace desde respeto a todos y, de
modo especial, desde reconocimiento de los derechos de los más débiles.
Esto implica descubrir que también el enfermo merece nuestro apoyo porque siempre
es alguien digno de respeto. Aunque no produzca nada, aunque parezca un peso, cada
ser humano vale por sí mismo. Apreciar una vida humana simplemente en función de su
productividad, o desde un cálculo de su “calidad de vida” o de los costos que produce el
cuidarla y mantenerla, implica entrar en una mentalidad primitiva e injusta que puede
llevar a experiencias tan dramáticas como las que llenaron de horror la Europa dominada
por los totalitarismos nazi o comunista.
Creemos, además, que es injusto no respetar los derechos fundamentales de quienes
tienen “enfermedades en el alma”. Los malhechores, los delincuentes, también son
personas, también merecen respeto. Ciertamente, deben pagar sus delitos. Incluso a
veces habrá que privarles de su libertad para que no puedan causar daño a otras
personas. Pero todo ello no quita el buscar maneras de “redimirlos”, de educarlos para
que puedan volver a la vida social de un modo distinto y justo. A ello debe orientarse
toda sanción, aunque la realidad (la triste realidad) de las cárceles no ofrezca en muchos
lugares castigos que sean realmente educativos y “redentores”.
La justicia será siempre un tema abierto, un tema discutido y afrontado por todos.
Especialmente a la hora de establecer leyes.
Todos estamos llamados a velar por la justicia, a luchar para que a nadie se le prive de
sus derechos fundamentales, a trabajar para que la solidaridad sea el eje en torno al
cual gire toda la vida social de los estados y del mundo en esta etapa de globalizaciones
y de cambios. De este modo la justicia dejará de ser un sueño, una utopía irrealizable,
para convertirse en algo real, concreto, vivo, en fuente de armonía y de paz, en manantial
de respeto y de apoyo hacia todos y cada uno de los seres humanos que viven a nuestro
lado.
Por: P. Fernando Pascual | Fuente: catholic.net
SER JUSTO
B. . Predica con el ejemplo
Seamos honestos, rectos y,
sobre todo, compasivos y
humanos. Recuerda que los
jóvenes siempre te están
observando y aprenden del
ejemplo.
C. Enseña a ser empáticos
No permitamos que se cometan
atropellos contra nosotros mismos
ni contra los demás. Que cada quien
reciba lo que le corresponde y
tomando decisiones que no afecten
negativamente a los demás.
A. Enseña la diferencia entre el bien
y el mal
Es lo más primordial es enseñarles a los
jóvenes a diferenciar entre lo que está
bien y lo que está mal. De esa manera,
podrán tomar cada uno sus decisiones
con la conciencia de saber qué está
haciendo.
PON EN PRÁCTICA EL VALOR DE LA JUSTICIA
Sé justo en tus acciones y decisiones
Es importante que expliques por qué tomaste
una decisión u otra y con base en qué circunstancias actuaste.
Actúa de manera racional
Cuando tenga una riña con alguno de sus hermanos, primos o amigas, hazle comprender
que existe la justicia y sobre ella vas a tomar la decisión para determinar quién está en lo
correcto y quién no.
Pon algún limites
Cuando te pidan algo que consideras que no se merece en el momento, no cedas.
Amplíale el panorama poniendo sobre la mesa todos los hechos y estimula a que sea ella
la que determine si es justo o no lo que pide en el momento.
ES JUSTO TRABAJAR NUESTROS TALENTOS
OBJETIVO: Que los jóvenes comprendan que Dios les ha dado muchos talentos,
cualidades y habilidades, distintos a cada persona y es justo que ello sea reconocido.
Necesitan: Un tarjetón decorado por ellos mismos.
Actividad: Se reúnen en familia.se va pasando el tarjetón y cada miembro debe poner
una cualidad, habilidad o talento del joven.
El dueño de la tarjeta lo recibe y debe comprometerse a desarrollar en esa semana algún
talento que él elija.
Reflexión: Debemos comprender que la felicidad se encuentra en responder a lo que
Dios en nosotros ha creado, y para lo que nos ha querido. Es también responder a los
compromisos contraídos con Dios, con los demás y consigo mismo
Otras ideas: Pensar
- Es muy difícil ser justos y saber qué es lo que cada uno verdaderamente le corresponde.
Para ello es muy importantes estar unidos a Dios en la oración y conversar y analizar,
cada situación con él.
- ¿Qué nos pide Jesús para llegar al Cielo? ¿Qué te está pidiendo en forma personal?
¿Qué mejores en qué? ¿Qué ayudes a quién? ¿Qué compartas qué?
- Analizar la Parábola del hijo prodigo
Encontramos la representación de la justicia en la famosa obra de arte “El Juicio de Salomón” modelada
en la XII bovedilla de las Logias Vaticanas, cuya decoración pictórica diseñó el artista renacentista Rafael.
Esta representación del Juicio de Salomón o Salomónico, justicia, decisión o sabiduría de Salomón o
Salomónica, son denominaciones convencionales de un tema muy tratado en el arte, que se fundamenta
en lo narrado en el Libro I de los Reyes (3: 16-28),1 . En él se escribe el recurso que utilizó Salomón, Rey
de Israel, para averiguar la verdad en un caso judicial que se le presentaba: la disputa entre dos mujeres,
el hijo de una de las cuales había muerto; ambas decían ser la madre del niño vivo.
Libro I de los Reyes (3: 16-28)…«Ésta afirma: “Mi hijo es el que vive y tu hijo es el que ha muerto”; la
otra dice: “No, el tuyo es el muerto y mi hijo es el que vive.”» Y añadió el rey:
—Traedme una espada.
Y trajeron al rey una espada. En seguida el Rey dijo:
—Partid en dos al niño vivo, y dad la mitad a la una
y la otra mitad a la otra.
Entonces la mujer de quien era el hijo vivo habló al Rey
(porque sus entrañas se le conmovieron por su hijo), y le dijo:
— ¡Ah, señor mío! Dad a ésta el niño vivo, y no lo matéis.
—Ni a mí ni a ti; ¡partidlo! —dijo la otra.
Entonces el Rey respondió:
—Entregad a aquella el hijo vivo, y no lo matéis; ella es su madre.
Y todo Israel oyó aquel juicio, que había dado el Rey y le temieron, porque vieron que había en él
sabiduría para juzgar.
Además de exaltar la justicia y la sabiduría de quien ejerce el poder legítimo que proviene de Dios,
resalta el valor de la abnegación del amor maternal (que prefiere renunciar al propio derecho por el
interés superior del hijo) en contraste con la maldad de la envidia (que prefiere el mal ajeno aun sin
provecho propio).
Qué labor tan noble la de aquellos que aman la justicia, que la buscan, pero sobre todo de quienes se
empeñan en garantizarla.
“La justicia y la sabiduría, dualidad eterna, sin sabiduría no puede haber justicia, y no se puede ejercer
justicia sin sabiduría”.
Isis Cristina Gallegos Velázquez
TRABAJO ELABORADO POR:
LIC. HNA MARLENI TICLLA - COORDINADORA ONDEC
RECOPILACION DE TEXTOS DE:
https://es.catholic.net/op/articulos/33943/cat/607/que-es-la-
justicia.html
https://blog.colegios-cedros-yaocalli.mx/yaocalli/valor-justicia-como-
ponerlo-en-practica
https://yoporlajusticia.gob.mx/2019/10/21/el-juicio-de-salomon/
http://clubnet.fundacionnet.cl/wp-content/uploads/2015/01/Otras-
din%C3%A1micas-para-aprender-la-Justicia.pdf