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“¿Qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de consumo y humo? ¿vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas? También les queda discutir con Dios, tanto si existe como si no existe, tender manos que ayudan a abrir puertas entre el corazón propio y el ajeno, sobre todo les queda hacer futuro.” Mario Benedetti “Aun si supiera que el mundo se desintegrara mañana, igual plantaría mi manzano.” M. L. King “Aun si supiera que el mundo se desintegrara mañana, igual plantaría mi manzano.” M. L. King “¿Qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de consumo y humo? ¿vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas? También les queda discutir con Dios, tanto si existe como si no existe, tender manos que ayudan a abrir puertas entre el corazón propio y el ajeno, sobre todo les queda hacer futuro.” Mario Benedetti

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PREVENCION ADICCIONES

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“¿Qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de consumo y humo? ¿vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas? También les queda discutir con Dios, tanto si existe como si

no existe, tender manos que ayudan a abrir puertas entre el corazón propio y

el ajeno, sobre todo les queda hacer futuro.”

Mario Benedetti

“Aun si supiera que el mundo se desintegrara mañana, igual plantaría mi manzano.”

M. L. King

“Aun si supiera que el mundo se desintegrara mañana, igual plantaría mi manzano.”

M. L. King

“¿Qué les queda por probar a los jóvenes en este mundo de consumo y humo? ¿vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas? También les queda discutir con Dios, tanto si existe como si

no existe, tender manos que ayudan a abrir puertas entre el corazón propio y

el ajeno, sobre todo les queda hacer futuro.”

Mario Benedetti

¡GRACIAS!Grupo de Trabajo en Adicciones

Proyecto SAP-UNICEFEEM N° 9

2009

“Tus hijos no son tus hijos, son hijos e hijas de la vida, deseosa de sí misma.

No vienen de tí, sino a través de tí, y aunque estén contigo, no te pertenecen.

Puedes abrigar sus cuerpos, pero no sus almas, porque ellos viven en la casa del mañana,

que no puedes visitar, ni siquiera en sueños. Puedes esforzarte en ser como ellos,

pero no procures hacerlos semejantes a tí, porque la vida no retrocede ni se detiene en el ayer.

Tu eres el arco del cual tus hijos, como flechas vivas, son lanzados.”

K. Gibrán