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S UN POCO CHINO

Cuando ests en el gimnasio mira a tu alrededor. Encontrars gente de todos los colores y

todas las razas... salvo chinos y paquistanes. No los encontrars sencillamente porque

estn trabajando. Evidentemente, t tienes todo el derecho a moldear tu figura de acuerdo

con tus pretensiones estticas. Pero ten en cuenta que, mientras tanto, los chinos y los

paquistanes estn trabajando.

Mucha gente se pregunta cmo las madres chinas son capaces de ayudar a sus hijos a

obtener resultados extraordinarios en matemticas y un dominio admirable de al menos un

instrumento musical. En mi opinin, lo que demuestra esto es que tal cosa es posible. Pero

hay que estar dispuesto a pagar el precio de la dedicacin intensiva.

Lo que una familia espaola media considerara una educacin estricta est an muy lejos

de lo que una familia china promedio considera normal. Una familia espaola valorara

como una educacin estricta la que obligara a un hijo a una hora diaria de estudio de un

instrumento musical. Para una familia china, una hora diaria no significa nada. Piensan en

dos o en tres horas diarias. Y la primera hora es la fcil.

Una familia espaola media muy probablemente estar convencida de que la presin

acadmica no es beneficiosa para el desarrollo psicolgico armonioso de su hijo. Un

representante de las asociaciones de padres de Catalua declaraba recientemente a la prensa

que los maestros han de motivar a los alumnos para que aprueben, y as no les debern

examinar en septiembre.

Una familia china promedio cree que su hijo debe ser el mejor alumno de su clase, que

unos buenos resultados en la escuela ponen de manifiesto una buena educacin en el

hogar y que el que a nada aspira, nada consigue. Una familia china promedio cree que

un resultado mediocre en la escuela pone de manifiesto una negligencia familiar. Los

padres chinos dedican diez veces ms tiempo que los padres espaoles a supervisar los

estudios de sus hijos. En cada familia china estn convencidos de que no hay nada ms

gratificante y estimulante que un resultado excelente.

Los padres chinos creen firmemente que para sobresalir en una actividad hay que trabajar

duro, pero saben que los nios no se muestran espontneamente muy partidarios del

trabajo. Esto significa que los padres deben dar el empujn inicial. Saben tambin que

cuando se est estudiando algo, por ejemplo una lengua extranjera o un instrumento

musical, las cosas siempre son difciles al principio. Los padres espaoles tambin lo

saben... por eso han comenzado tantas veces a aprender ingls... pero lo abandonan

fcilmente. Los padres chinos saben que es precisamente ante las primeras dificultades

cuando hay que esforzarse ms, porque sin esfuerzo no hay buenos resultados, mientras que

los buenos resultados animan a los estudiantes a seguir esforzndose.

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Hay que aadir que los hijos chinos parecen capaces de soportar la presin de los padres

mucho mejor que los nuestros. Saben que no hay resultado que no se pueda mejorar con un

poco ms de esfuerzo. Y lo saben por experiencia. Parecen tambin ms reticentes a la hora

de recibir elogios fciles.

Los padres chinos son ms directos que nosotros. All donde nosotros diremos a nuestro

hijo que no debe distraerse tanto, los padres chinos no tienen inconveniente en decirle que

es un perezoso.

Los padres espaoles se preocupan mucho de la autoconfianza de sus hijos y de su

estabilidad emocional; los padres chinos, de su fortaleza, de sus recursos y de sus

aspiraciones.

Si el hijo de una familia espaola llega a casa con un siete en un examen, probablemente

ser felicitado. Una familia china pondr el grito en el cielo y los padres harn docenas de

ejercicios con su hijo para superar este vergonzoso siete.

Las familias chinas creen que la mejor manera de proteger a sus hijos es fortalecindolos,

preparndolos para el futuro, permitiendo que experimenten todo lo que son capaces de

lograr con esfuerzo y dedicacin intensiva. Creen que sta es la mejor manera de robustecer

su autoconfianza.

A la prctica intensiva de una actividad la podemos llamar tambin inteligencia persistente.

Los padres chinos son muy exigentes, es verdad, pero no parece que eso les impida ser

queridos por sus hijos. No hay jvenes en el mundo ms predispuestos a contribuir con sus

impuestos al bienestar de las generaciones mayores. Los hijos chinos se sienten en deuda

con sus padres por el tiempo que stos les han dedicado. El 63 % est dispuesto a esta

contribucin, frente al 20 % de los jvenes espaoles.

Sobre la autoconfianza, que a nosotros tanto nos preocupa, el libro de referencia es The

Poiver of Positive Thinking, de Norman Vincent Peale, que es de 1952. Se han vendido

millones de ejemplares del mismo y, sin embargo, contina habiendo pesimistas,

deprimidos, derrotistas, inseguros e incluso personas que han visto degradarse su

autoestima por no poder responder adecuadamente al bombardeo del pensamiento positivo.

Una ancdota. Escuch ajordi Pujol contar que en el transcurso de una reunin del comit

Espaa-Corea, en Casa Asia de Barcelona, todos insistieron en que uno de los principales

motores del desarrollo econmico de Corea era la educacin. Por eso es comprensible la

cara de extraeza que pusieron los coreanos cuando se enteraron de que en Espaa un

alumno poda pasar de curso aunque hubiera reprobado varias asignaturas. Como pensaban

que no lo haban entendido bien, se lo hicieron repetir. Cuando, finalmente, se dieron

cuenta exacta de lo que pasaba en nuestros centros educativos, sonrieron, con una elegante

sonrisa diplomtica que no ocultaba su perplejidad.

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Si tenemos en cuenta que los padres espaoles se implican en la escuela de sus hijos

mucho, muchsimo ms que los padres chinos, coreanos... o finlandeses, podramos

preguntarnos si lo que cuenta para el xito de los nios es la implicacin de los padres en el

centro o la relevancia que le conceden a la educacin y las expectativas de progreso que

despiertan en sus hijos.

Escaneado Por Profesor Pedro Lizrraga Njera