rol del maestro en la sociedad

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ROL DEL MAESTRO EN LA SOCIEDAD (Mensaje al Maestro) 1. LA EDUACCIÓN, EL MAESTRO Y LA REALIDAD: La educación de las nuevas generaciones no escapa a los modos de producción y estructura social concreta en la que se da; es decir, es una tarea hecha por y con personas en una sociedad concreta, en determinado espacio y tiempo. Funciona en concordancia a la formación económico – social (un determinado momento del desarrollo social) y corresponde a un determinado régimen económico (base social) y auna ideología y sistema juridico que se forma en concordancia a las relaciones sociales de producción (superestructura social). Por ello, en el funcionamiento de la sociedad interviene un conjunto de elementos de tipo jurídico, militar, ideológico que actúan para garantizar la reproducción de las relaciones producción y la ideología dominante. Esto determina el carácter de la educación, el para qué se educa a los hombres a través de la escuela, los objetivos de la educación que son fijados por el Estado. Los ideales pedagógicos varían, nunca son permanentes, pues se trata de formar individuos hacia una determinada dirección; sin embargo, en esta tarea también intervienen la familia, las costumbres y los medios de comunicación, siendo la más importante el papel del maestro y la escuela. Las ideas y valores que se producen y difunden en y por estas instancias, conducen a la formación de los individuos potenciando o negando su sencibilidad y capacidad de comprensión de los problemas humanos: confieren la esencia final a la personalidad. Por otro lado, en la educación se cruzan los intereses del Estado que dirige, controla y organiza la educación; las espectativas de ascenso social que nos impone la sociedad: las proyecciones económicas de la eficacia profesinal y los requerimientos de la cultura individual. Por ello, no es posible afrontar aisladamente el estudio de las bases, objetivos y métodos de la educación, al margen de la estructura general de la sociedad. Cualquier esfuerzo individual, aislado de los problemas educativos es inútil por depender de la económia y la supraestructura, por lo cual debe ser comprendido como un problema económico – social. La enseñanza y la formación del magiaterio se da en un orden determinado, no existe por sí misma, siendo necesario saber: para qué enseñemos, qué pretendemos formar y cómo lograrlo, implementarlo.,

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Presentación de los Maestros en la Sociedad

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Page 1: Rol del maestro en la sociedad

ROL DEL MAESTRO EN LA SOCIEDAD

(Mensaje al Maestro)

1. LA EDUACCIÓN, EL MAESTRO Y LA REALIDAD: La educación de las nuevas

generaciones no escapa a los modos de producción y estructura social concreta en

la que se da; es decir, es una tarea hecha por y con personas en una sociedad

concreta, en determinado espacio y tiempo. Funciona en concordancia a la

formación económico – social (un determinado momento del desarrollo social) y

corresponde a un determinado régimen económico (base social) y auna ideología y

sistema juridico que se forma en concordancia a las relaciones sociales de

producción (superestructura social).

Por ello, en el funcionamiento de la sociedad interviene un conjunto de elementos

de tipo jurídico, militar, ideológico que actúan para garantizar la reproducción de

las relaciones producción y la ideología dominante. Esto determina el carácter de

la educación, el para qué se educa a los hombres a través de la escuela, los

objetivos de la educación que son fijados por el Estado.

Los ideales pedagógicos varían, nunca son permanentes, pues se trata de formar

individuos hacia una determinada dirección; sin embargo, en esta tarea también

intervienen la familia, las costumbres y los medios de comunicación, siendo la más

importante el papel del maestro y la escuela.

Las ideas y valores que se producen y difunden en y por estas instancias, conducen

a la formación de los individuos potenciando o negando su sencibilidad y

capacidad de comprensión de los problemas humanos: confieren la esencia final a

la personalidad.

Por otro lado, en la educación se cruzan los intereses del Estado que dirige,

controla y organiza la educación; las espectativas de ascenso social que nos

impone la sociedad: las proyecciones económicas de la eficacia profesinal y los

requerimientos de la cultura individual. Por ello, no es posible afrontar

aisladamente el estudio de las bases, objetivos y métodos de la educación, al

margen de la estructura general de la sociedad. Cualquier esfuerzo individual,

aislado de los problemas educativos es inútil por depender de la económia y la

supraestructura, por lo cual debe ser comprendido como un problema económico

– social. La enseñanza y la formación del magiaterio se da en un orden

determinado, no existe por sí misma, siendo necesario saber: para qué

enseñemos, qué pretendemos formar y cómo lograrlo, implementarlo.,

Page 2: Rol del maestro en la sociedad

Dentro de este panorama, en la educación escolarizada, en la enseñanza-

aprendizaje, intervienen: la escuela, como Institución Educativa de primer orden y

el maestro como principal agente.

Los maestros han conquistado un lugar y su lejitimidad profesional a costa de

mucho sudor y lágrimas, pero siguen actuando lejos de las necesidades y

aspiraciones de los educandos y el país. Recrean a través de la escuela, los

problemas y prejuicios en su entorno social; trasladan a la escuela y sus problemas

y frustraciones; cultivan el individualismo (muchas veces encubierto en posturas

ultra) que fomenta la competencia (propia del sistema capitalista) , marginando a

los disminuidos sociales o fisicos; campea en él lo ostentoso (arribismo,

autosuficiencia, menosprecio a los demas: alumnos, padres de familia

deshumanizante (rigido cumplidor de normas que impone y aveces no cumple) ,

recepcionando ansiosamente lo foráneos desmedro de lo nacional y popular ( a

veces lo declara). Sus prototipos son: el arribismo y la huachafería; los complejos y

las simulaciones, y la inmoralidad.

Las escuelas, principales instituciones educativas, al igual que los maestros (no

podía ser de otro modo), no han cumplido ni cumplen su papel liberador: no han

impulsado la socialización, la cultura, mucho menos las solidaridades y el ejercicio

de la crítica, cayendo, muchas veces en el sectarismo y dogamtismo.

La escuela no ha logrado romper las trabas y cercos ideológicos, pese a ser el

responsable de la formación de las nuevas generaciones. Lejos de amortiguar las

contradicciones étnicas y sociales, han propiciado su agravamiento, generando

violencia y agresividad en los maestros que imponen su dictadura a través de

castigos físicos y psicológicos a los alumnos; estos a su vez se tornan rebeldes,

marginando y ridiculizando a los deformes, marginados y pobres; no tienen

identidad nacional ni mucho menos personal; son simples imitadores de formas de

conducta e ideas que muchas veces ni comprenden, convirtiéndose en simples

caricaturas de otras realidades.

2. ROL DEL MAESTRO

El maestro necesita comprender, sentir y vivir su responsabilidad en la creación de

un nuevo orden, para ennoblecer y dignificar la dignidad humana, pues de todas

las victorias humanas le toca, en gran parte, el mérito; pero también de todas sus

derrotas le corresponde responsabilidad. La sumisión y la servidumbre no pasan

únicamente sobre la dignidad de los que aprenden, sino sobre todo, de los que

enseñan.

Por estas consideraciones el objetivo del maestro debe ser:

Page 3: Rol del maestro en la sociedad

a) La formación y desarrollo intelectual, moral y de la personalidad del educando

en todos sus aspectos.

b) Hacer del educando agente de cambio a través del conocimiento científico de

la realidad y sus ubicación conciente y operativa en ella, al margen de la

imposición vertical.

c) Formar al estudiante en todas sus fuerzas intelectuales, físicas, morales y

estéticas en forma sólida y armónica.

d) Priorizar la instrucción y la educación nacional y popular en todos los niveles y

especialidades.

e) Tener conciencia y vocación profesional de servicio, al margen del utilitarismo y

el supeditar el trabajo a intereses subalternos (proselitismo, manipulación).

f) No realizar un trabajo mediocre, rutinario, conformista, mecánico. Con fe y

optimismo, pese a la dura realidad del presente, buscar un futuro mejor.

g) Conocer lo que enseña, partiendo del conocimiento de la realidad donde

trabaja y la de sus alumnos.

AFECTIVOS Y NO REPRESIVOS

La actitud del maestro debe ser educativa y no de amaestramiento, afectivos y no

represivos, dados básicamente con el ejemplo más que en las palabras. Buscar siempre la

cooperación de los padres y alumnos organizados, sin paternalismo, utilitarismo y

manipulaciones, que sean entes autónomos y activos. Siempre deben tener en cuenta que

el educando no es un ser pasivo, sin carácter y convicciones a formar arbitrariamente, es

persona con su propio mundo real y subjetivo.

El maestro es una categoria de trabajador intelectual muy cercano al pueblo por su

condición social y su papel social. Es un trabajador intelectual, extraño a toda

concupisciencia comercial y el arribismo de todo pelaje. Es un profesional honesto, sincero

consigo mismo y con los demás, veras en todos los actos de su vida. Es más, debe conocer:

los fines y objetivos de la enseñanza no en forma mecánica, sino de manera crítica,

constructiva, creadora y lejos de toda sumisión; los principios del desarrollo del niño; los

avances de la ciencia y la técnica para planificar y transmitir conocimientos (contenidos)

veraces; las formas de alcanzar las metas trazadas ( nunca trabajar al azar); la metodología

y los materiales didácticos a usar. Por todo lo dicho, el maestro debe ser un continuo

investigador científico, un profundo cococedor de los avances de la ciencia y la tecnología,

del tema que transmite, de la realidad donde trabaja y las condiciones de sus alumnos.

Por otro lado, debe saber ser autoridad y amigo, orientar participando.

Page 4: Rol del maestro en la sociedad

ESCOGIMOS UNA HERMOSA TAREA

Difícil y por lo mismo hermosa tarea que escogimos, por lo cual estamos en la obligación

de asumirla, ejercerla (no detenerla) con vocación de servicio, amor, iniciativa, creatividad

y alegría para formar, orientar y enseñar con nuestra vida, con una voluntad férrea y

convicción sincera, emoción y alegría del deber cumplido, nunca caer en la arrogancia, el

abuso, el triunfalismo y mucho menos el pesimismo.

MI GRATITUD AL MAESTRO

La gratitud no es una flor de esas que crecen en el campo sin que nadie las siembre y

coseche. De esas flores del prado que se encuentran crecidas al borde el camino, al pie de

un árbol o a la vuelta de un arroyo y que basta recogerla.

Al contrario, la gratitud es una tarea, un trabajo, un modo de vivir, de sentir y expresar,

tan difícil, raro en un mundo como el nuestro, de egoismo, envidia, maldad, olvido,

indiferencia e ingratitud. Por ello es necesario cultivarla, trabajar para lograrla, merecerla

por el trabajo y la obra emprendida, pues jamás muere quien vive en el corazón de los

demás. Nos bilipendiran , nos despreciarán, nos marginarán, pero seguiremos

construyendo con nuestra palabra, con ejemplo, con docencia el futuro de la patria.

Que nuestros niños jamás nos digan que les enseñamos a mentir, aprendiendo un mundo

al revés; que aprendieron a leer y escribir solo palabras en el pizarrón con tiza que borra

con el borrador y que solo son mentiras. Que nuestro mensaje sea un testimonio vivo y

vivido.

Mi gratitud sentida a los maestros de ayer, hoy siempre, que dieron y dan su vida por la

construcción de un mejor porvenir y en esta hora de injusticias y desventura permitanme

expresar con César Vallejo: “Y en esta hora fría, en que la tierra trasciende a polvo

humano y es tan triste, quisiera yo, tocar las puertas, y suplicar a no sé quién, perdón, y

hacerle pedacitos de pan fresco, aquí, en el horno de mi corazón…”(El Pan Nuestro).

EL JUEGO DE LOS NIÑOS

El juego del adulto tiene frecuentemente un aspecto negativo, es un remedio contra la

fatiga al cambiar de actividad o contra el aburrimiento, es tomado como un

“entretenimiento”.

Page 5: Rol del maestro en la sociedad

El juego del niño, en sentido contrapuesto al interior, tiene siempre un aspecto positivo.

Se introduce completamente en él. Según Claparede, es el trabajo, el bien, el deber, el

ideal de la vida, la única atmósfera en que un ser psicológico puede insertarse y, en

consecuencia, puede actuar. El niño es un ser que juega. Es en sí la síntesis de las

actividades espontáneas.

El juego evoluciona libremente hacia la actividad creadora y llega muy lejos de esta

evolución; revela los impulsos irresistibles de la naturaleza. Todo se da como si el niño

percibiera oscuramente la llamada de una trascendencia a la que respondería a través de

múltiples adquisiciones y de la organización de éstas.

NATURALEZA Y CARACTERÍSTICA DEL JUEGO

Todas las actividades espontáneas del niño toman el carácter de juegos. Antes de tener

instrumentos, juega con su piecisito; las primeras vocales y sílabas moduladas, la

expresión musical y el lenguaje son juegos.

El juego es un fin en sí mismo, procura placer, hacer reir, pero también es un medio

inconsciente de aprender a distinguirse del mundo, afirmarse a sí mismo y a conocer ese

mundo.

Siendo en apariencia una actividad gratuita, el juego toma ya el aspecto que no dejará de

caracterizar: un esfuerzo por desarrollar funciones latentes, acceder a conductas

superiores, todo juego es una conquista, afirmación y desarrollo de esta conquista; está

en el centro de la infancia.

LA ACCIÓN EDUCATIVA

El conocimiento del niño y el conocimiento de la naturaleza del juego y de sus

posibilidades, permiten definir y orientar la acción docente, en sus grandes líneas y en sus

posibilidades. Su dunción es, primeramente, negativa y consiste en respetar el juego del

niño, en molestarle e interrumpirle lo menos posible, en limitar sus intervenciones. Si para

jugar el niño utiliza casi todos los materiales de que dispone, la renovación de los juegos

exige variedad de materiales, que conservan y abastecen la necesidad de acción y el

apetito de conocimiento. La diversidad de juegos voluntariamente educativos y de los

juegos sin más, que llegan a serlo como por añadidura, es hoy día casi infinita.

En el aula, los sectores de interés se prestan a las actividades de imitación o de

construcción. En la sección de los pequeños, los cubos y los materiales elementales

Page 6: Rol del maestro en la sociedad

priviligiados se juntan en la estera, con los juguetesde arrastrar, que favorecen el

movimiento.

En el patio, las pelotas, cuerdas y aros no pueden hacer olvidar la abrumadora tristeza de

los suelos embetunados. Los maravillosos toboganes, columpios, jaulas y mallas para

trepar, en la arena, o mejor en el césped, hacen del recreo una fiesta en la que cada uno

escoge su lugar de diversión. Un gran espacio disponible, un jardín al lado del patio, es el

sueño, demasiado rara vez realizado, de todo docente del centro educativo que aspire a

un equipamiento completo y el sentimiento de falta, que la moda querria que se llamase

“sentimiento de frustación”, le impide, a veces, ver todo lo puede hacer “sentimiento de

frustación”, le impide a veces, ver todo lo que pude hacer con “nada” más que con ella

misma; sugerimos unos juegos colectivos, lanzarlos, después dejarlos evolucionar

libremente para no eliminar las iniciativas, sino quedarse atento para evitar las

brutalidades y las violencias, para frenarlas antes que se desarrollen.

EL PAPEL DEL JUEGO EN LA FORMACIÓN DEL CARÁCTER

En este aspecto, tiene una notable importancia. Se expresa bajo dos aspectos esenciales:

la adquisición de la autonomía de las personalidades a través de la regla y la disciplina y la

integración de esta personalidad en la sociedad infantil que prepara al integración del

hombre en la sociedad de los adultos.

El juego fucional que expresa solo el empuje interno de las pulsaciones primitivas es

rápidamente superado. Desde la edad de los tres años, el niño busca los objetos un

auxiliar de su personalidad, se prolonga en los objetos de los que se apropia; quiere poder

reencontrarlos, disponer de ellos.

Montessori ha sido la primera en subrayar esta necesidad “de orden” que tienen los niños

y que es un medio de reasegurarse y un medio de acción. Bajo su forma más elemental, se

manifiesta por la repetición del gesto con las mismas formas; or la búsqueda de los ritmos

que en el niño lleva en él antes de ir a su encuentro. La regla es el orden puesto en

nuestros actos. La fijeza les reasegura. La regularidad de los horarios, una cierta

monotonía en el desarrollo de éstos les ayudara a habituarse al centro.

Si esta necesidad de regla, de orden, no fuese natural, se buscaría envano el fundamento

sólido de los métodos y de la moral. Ahora bien, encontramos esta necesidad en los

juegos más sencillos: seguir el borde de una acera sin apartarse de ella, avanzar en la sala

de juegos andando solo sobre los cuadrados blancos; todo esto es fi jarse una regla

arbitraria y obedecerla.

Page 7: Rol del maestro en la sociedad

El papel de la educación (educadora) no es debilitar las personalidades fuertes que ya se

presienten en el juego, sino orientarlas hacia una acción protectora y generosa y de

animar a los más débiles.

IDEAS GENERALES SOBRE LA PRESENTACIÓN DEL MAESTRO EN EL AULA

1. La presentación personal de un maestro tiene una considerable importancia, pues

de ella depende la impresión que puede producir en un grupo humano dentro de

la clase, que puede consistir en rechazo o acercamiento.

A su vez, en toda presentación personal influye básicamente dos aspectos:

a) Modo de vestirse y

b) Postura física.

A) De la vestimenta que elija el maestro depende que los alumnos lo acepten o lo

rechacen, porque no es lo mismo que una persona que, por ejemplo, práctica

el básquet lo realice con pantalón largo o buzola, que con ropa sport (short y

polo, zapatillas) que es la más adecuada. La postura física del profesor está

determinada no solo por el vestuario que tiene sino también por el peinado,

perfume, es decir, todo en su conjunto contribuye a que el maestro proyecte

su personalidad en clase. El profesor debe tener presente que como maestro

nunca debe ofender a los alumnos. Jamás deberá ir vestido muy alevosamente

atractivo, deberá vestir con sencillez pero con propiedad. No se de confundir la

sencillez y limpieza con la suciedad y la mugre. Si sus alumnos son de

extracción campesina, jamás deberá ir elegantemente vestido. Tendrá que

adecuarse a las ciscunstancias del momento.

B) La postura física es el complemento de la vestimenta y los laumnos observarán

el modo de andar, de mirar, de hablar, de sentarse y pararse; en el buen tino,

para desplazarse, gesticular y aprovechar el uso de los miembros del cuerpo,

en especial los brazos y las manos.

Algunos especialistas dominan el “lenguaje del cuerpo” que transmite, en

forma inconsciente, muchos mensajes, inclusive antes que ls palabras

empiecen a oírse. Luego, en plena exposición, este lenguaje mudo servirá de

sostén a la palabra hablada o en caso contrario, la debilitar por completo.

Cuando analizamos las condiciones profesionales y personales de un maestro nos debemos

referir a dos aspectos, particularmente, importantes:

1. Su presentación personal y

2. Su forma de hablar.

Page 8: Rol del maestro en la sociedad

2. El modo de hablar. Todo profesor para llegar a sus alumnos deberá hacer su

entrada con una motivación sencilla, haciendo uso de las técnicas del principio

pedagógico denominado “el conocimiento de los propósitos” (o motivación), pero

con entereza y altivez; pero sin arrogancia. Debe dirigirse a la clase con una mirada

amable pero franca; sin temor, pero sin aires de superioridad.

Si el maestro habla de pie, debe mantenerse derecho o en posición digna,

procurando que sus músculos se mantengan relajados; no debe dejarse dominar

por el nerviosismo, porque su postura sería tensa y desfavorable.

El maestro debe considerar que va a conversar con un grupo humano que se ha

reunido para oírlo y recibir algo de él. Debe recordar que mientras dura la clase

dispondrá de una serie de medios auxiliares, la expresión del rostro, los

movimientos de brazos y manos; aprovecharlos moderadamente, porque de lo

contrario pueden convertirse en aspavientos que distraen y molestan.

Para que los movimientos respondan sin exageración a lo que se está expresando,

se debe enfatizar o acentuar el mensaje verbal. Esto se logrará si se mantiene una

verdadera comunicación con los alumnos y deja a su cuerpo soltura y

espontaneidad. En caso de sentir alguna inseguridad, tratar de observar la

conducta de maestros que dejan buena impresión, para aprender algo de ellos.

En caso de sentirse lo suficientemente seguro y tranquilo de sí, tratar de acptar las

críticas y comentarios que pudiera oír de su enseñanza, inclusive solicitar la

opinión de un maigo capaz de ser sincero. Debemos recordar que exponer una

clase es un acto que siempre debe revestir seriedad; un acto en que el maestro

tiene que mostrar respeto a sí mismo y a sus alumnos. Esta es una característica de

toda clase que agradecen todos y en cualquier circuntancias.

No hay razón para usar palabras bajas o frases de doble sentido en una clase,

porque una idea puede expresarse, incluso con mayor fuerza, con términos

correctos, bien calculados, dichos fríamente.lo normal al hablar en una clase, es

usar términos adecuados; cuando se sabe que los alumnos no conocen bien el

significado de un término, se deberá consignarlo en la pizarra y, si es necesario, se

deberá aclarar el concepto de manera clara.

La persona que consigue tener un dominio del lenguaje y buenas costumbres en su

modo de hablar cotidiano, no tiene que preocuparse a la hora de exponer una

clase porque las palabras adecuadas brotan espontáneamente.

Una disciplina para adquirir el dominio del lenguaje y soltura es la siguiente:

1. El maestro debe conservar su estilo personal y acostumbrarse a hablar con

propiedad.

2. Debe tener presente el nivel de entendimiento del alumno que lo escucha y

adaptarse a él.

Page 9: Rol del maestro en la sociedad

3. El maestro debe evitar lucirse sin necesidad.

4. Expresarse en forma clara y precisa, tratando de evitar.

a) Términos que desconoce.

b) Utilizar expresiones ofensivas para los alumnos.

c) Hacer uso de vulgaridades.

5. Ejercitar en forma permanente la lectura buena.

6. Hablar correctamente cuando coversa.

CUALIDADES Y DEFECTOS DEL MAESTRO

Cuando estemos en clase debemos aprovechar las buenas cualidades y corregir defectos,

porque se puede destruir todo el buen efecto de la expresión viva. En la actualidad se

cuenta con una ayuda muy valiosa que es la grabación de la voz, porque podemos

escuchar una y otra vez para corregirla y mejorarla.

Los defectos pueden originarse desde cualquiera de estos conceptos:

a) La emisión de los sonidos.

b) La pronunciación de las palabras.

a) Emisión de los sonidos

Un buen sonido de voz depende de la vibración de las cuerdas vocales para

producir el sonido que nosotros deseamos; tenemos que expeler el aire en cierta

forma y con determinada presión.

Todo maestro debe ser como el atleta; necesita saber como respirar y un buen

ejercicio para lograrlo es dejar salir el aire en una espiración larga y controlada;

luego hacer el mismo ejercicio, pronunciando frases de diversa longitud y

apreciamos que, en la medida que respiramos correctamente, la voz suena más

agradable. Aclaremos que la emisión de los sonidos empiezan en el fondo de los

pulmones y debe realizarse sin esfuerzo alguno; así se podrá realizar clases

prolongadas y seguidas sin fatigarse ni sentir dolores en la región cervical, que es lo

generalmente ocurre cuando hacemos mucho esfuerzo.

Debe constituir un hábito el respirar correctamente para un maestro. Es ridículo

desarrollar exposiciones con un respiración deficiente y entrecortada, porque las

palabras y las frases brotan como “a saltos”; este defecto hace perder al profesor

recursos preciosos como las inflexiones de la voz y la entonación adecuada.

El profesor que no ejerce la emisión del aire, tiene que elevar el volumen haciendo

una presión más aguda en las cuerdas vocales. Consecuentemente, los músculos se

pondrán más tensos en lugar de conservar el normal tono muscular que evita el

Page 10: Rol del maestro en la sociedad

esfuerzo. Esta ciscunstancia lo volverá agotador y poco a poco se irá perdiendo el

sonido de la voz.

La habiliada de algunos maestros de dar sonoridad a la propia voz sin aumentar el

esfuerzo, es lo que se denomina impostación de voz, lo cual permite dar mayor

realce a las exprsiones con el timbre y sonoridad. Una práctica sencilla de impostar

la voz, consiste en cantar una línea o frase entera de una canción y luego decirla a

modo de conservación, procurando darse cuenta la forma que se pronuncie en

uno y otro caso. Esto enseña a hablar cantando, es decir a conservar el aparato de

formación en la misma forma que cuando se canta y cuando se habla, aunque la

expulsión del aire al hablar sea más libre, menos controlada que al cantar.

Si es posible, tratar de grabar estos ejercicios y analizar las diferencias fijándose en

el progreso que se logra en cuanto a dar vida y entonación a su palabra hablada y

ritmo a su respiración. Lo ideal sería realizar la técnica de impostación y ejercicio

de canto.

En genral, el profesor debe evitar algunos defectos que aburren a los alumnos

como:

- Falta de volumen, que no permite oír.

- Volumen excesivo, que molesta los oídos y cansa la atención.

- Desagradbles sonidos que se producen al poner énfasis en sílabas con vocales

defíciles.

- Hablar emitiendo los sonidos por la nariz.

- Evitar la aspereza o ronquera que suena a enfermedad, que tiene tono agresivo

y desagradable.

Estos vicios son corregidos casi en forma total con las prácticas de impostación

vocal, porque estos defectos son indicadores de falta de dominio sobre el aparato

de fonación.

b) Pronunciación de la palabra.

Para transmitir ideas, la buena pronunciación es aún más importante que la

emisión correcta de los sonidos. Para ello, el profesor debe evitar con cuidado los

vicios de dicción como:

- Expresarse demasiado a prisa. Esto causa que los alumnos no puedan seguir

sus ideas, cayendo, en poco tiempo, en el aburrimiento.

- Tampoco debe expresar muy despacio. Este defecto trae como consecuencia la

monotonía y, por ente, el sopor.

- Mascullar las palabras, porque no se pronuncian las sílabas con claridad o

porque s dicen las palabras a medias.

Page 11: Rol del maestro en la sociedad

- Dejar las frases a medias, olvidando las palabras enteras, que se refleja en la

indecisión interior del profesor en el momento de hablar.

- Incurrir en estribillos, ellos comunmente se conocen como “muletillas” porque

son pequeñas muletas en el que se apoya el maestro inseguro cuando siente

que empieza a cogear. Y cogea por la pobreza de vocabulario.

- Pronunciación incomprensible que es sinónimo de mascullar palabras, pero se

extiende en frases enteras. Cuando tenemos una idea clara, debemos ser

capaces de expresarla con claridad.

- Repeticiones inútiles, es un recurso negativo del profesor inseguro. Es cuando

se reitera una idea sin importancia, casi con las mismas palabras, cuando los

alumnos ya entendieron la idea que ha transmitido, esto es desperdiciar

tiempo y energías.