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La identifi cación por radiofrecuencia (RFID) no es un asunto novedoso. De hecho, esta tecnología ya se usa para tareas tan varia-das como realizar el seguimiento de los equipajes en los aeropuertos o de libros en las bibliotecas, arrancar el motor de un co-che, pagar el peaje de una autopista de for-ma automática y un larguísimo etcétera. Y sin embargo, este término aún cuenta con cierta mala prensa y muchos son los artícu-los que recogen rocambolescas noticias con implantes de etiquetas bajo la piel como protagonistas o que alertan sobre proble-mas en cuanto a la protección de la intimi-dad derivados de algunos de sus usos.

Pero el propósito de la RFID consiste simplemente en trasmitir datos mediante un dispositivo portátil, llamado etiqueta o transpondedor, que es leído por un lector y procesado según la aplicación determinada. Las etiquetas –las hay de diferentes tipos según su fuente de alimentación y según las radiofrecuencias en las que trabajan– cuen-

tan con un número de identifi cación con-creto, y son asignadas a un producto del que, entonces, se puede hacer un segui-miento. La identifi cación por radiofrecuen-cia lleva siendo utilizada desde hace déca-das y las prognosis para su desarrollo en los años venideros son francamente optimistas. IDTechEx, experto en la materia, predice que en 2007 se venderán 1.710 millones de etiquetas y que el valor total del mercado de la RFID (incluyendo hardware, sistemas, integración...) en todo el mundo ascenderá a casi 5.000 millones de dólares. Este rápido crecimiento podría desembocar en un aba-ratamiento de los costes de producción, que a su vez podría suponer un incremento en su uso.

Seguimiento de bobinas de papelLa industria de los periódicos y sus

proveedores también han puesto sus ojos en esta tecnología. Aunque de momento, con cierta timidez. El grupo británico News In-

ternational, parte del conglomerado mediá-tico News Corporation, es una excepción. Desde 2005, el departamento encargado de las compras de papel prensa ha realizado una serie de pruebas para probar la efectivi-dad del uso de la identifi cación por radio-frecuencia en el área del papel. Los objeti-vos consistían en contar con un sistema de seguimiento de las bobinas 100% fi able. Debido a los elevados costes de las etique-tas RFID, el proyecto incluyó el uso de mandriles fabricados con diferentes mate-riales, con el fi n de comprobar la posibili-dad de su reutilización y, de paso, su efecto sobre la maculatura.

“Dada la magnitud de nuestras opera-ciones, el control de la logística de papel por medio de códigos de barras no nos pa-rece del todo apropiado ni fi dedigno”, cuen-ta Bénédicte Gercke-Lamy, responsable del soporte técnico para la compra de papel prensa del grupo. “De las etiquetas RFID es-perábamos conseguir buenos resultados de seguimiento, y para ello necesitábamos que éstas fuesen leídas sin problemas en un ra-dio de varios metros y que la información quedase almacenada en una base de datos a la que acceder con sencillez”, dice.

Así, News International puso en mar-cha una serie de pruebas, primero con eti-quetas de 433 MHz y luego de 868 MHz. Los resultados demostraron que era posible contar con un sistema de seguimiento fi a-ble. Pero cada etiqueta activa, como las uti-

RFID: el mejor código de barras

La identifi cación por radiofrecuencia promete una verdadera revolución en el ámbito de la logística para todas las industrias. Periódicos y proveedores realizan ya las primeras pruebas y confían en una bajada generalizada de precios y en nuevos avances.

Etiqueta RFID situada dentro de un extremo de un

mandril de bobina de papel para su seguimiento,

como los usados en News International.

Identifi cando a la RFIDLa identifi cación por radiofrecuencia es un método de almacenamiento y recupe-ración de datos remoto.

EtiquetasLas hay de tres tipos según su alimentación (pasivas, activas y semiactivas) y

de cuatro según su radiofrecuencia (baja, alta, ultra alta y micro onda). (3368)

CostesEl precio de las etiquetas varía según el tipo. Las más baratas son obviamen-

te las pasivas, aunque implican un mayor desembolso a la hora de adquirir los lectores necesarios. En general, no es una tecnología que requiera grandes in-versiones. Y sus costes seguirán bajando.

Uso actualDesde abrir la puerta de su coche a pagar un peaje o billete de tren, pasando

por el seguimiento de libros en las bibliotecas o de equipajes en los aeropuertos, muchas son las actividades que ya se realizan gracias a la RFID.

Uso potencialSustituirán muchos códigos de barras. Sus posibilidades a la hora de hacer

seguimientos de materiales y automatizar su gestión son numerosísimas. Vea Informe especial de Ifra 04.2006. Ideas innovadoras no faltan, tampoco en la industria editorial, que especula sobre su uso para medir la difusión. (3369)

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Características de la RFID Frecuencia de trabajo 100-135 KHz 13,56 MHz 868/915 MHz 2,45 GHz

Funcionamiento Acoplamiento inductivo Acoplamiento electromagnético o generación

de ondas electromagnéticas

Fuente de alimentación Pasiva Pasiva y semiactiva

(batería para el sensor)

Pasiva y activa (en el caso de generación de

ondas electromagnéticas)

Capacidad de almacenamiento

Sólo lectura, o lectura

y escritura (en general

hasta 2 KBit)

En general lectura y

escritura (hasta 2 KBit)

Sólo lectura, o lectura y escritura (en general

hasta 256 KBit en los sistemas activos)

Alcance < 1,0 m Hasta aprox. 1,7 m Hasta aprox. 6,0 m (acoplamiento electro-

magnético);

> 100 m (en el caso de generación de ondas

electromagnéticas)

Efecto frente a metales Debil campo magnético, interferencias de las

ondas de radiofrecuencia. La ferrita disminuye

las interferencias metálicas

Los metales refl ejan las ondas

Lectura simultánea de varias etiquetas

Técnicamente posible

pero poco frecuente

Posible

(hasta 100 etiquetas)

Posible

(hasta 500 etiquetas)

Posible

(hasta 500 etiquetas)

Vida útil Sistemas de lectura y escritura con memoria EEPROM; reescritura posible de 10.000 a 100.000

veces; en sistemas activos y semiactivos, depende de la vida útil de la bateria

Transferencia de datos Baja Alta Muy alta Muy alta

Precio por etiqueta [Euro]

Entre 0,50–1,00

(pasiva)

Entre 0,40–0,70 (pa-

siva) y 8,00 con sensor

de temperatura

Entre 0,40–0,70 (pa-

siva) y 60,00 con sen-

sor de temperatura

De 30,00 a 50,00

(activa)

Marzo 2007 técnicas de prensa Mari Pascual RFID

lizadas en los ensayos, cuesta alrededor de diez libras esterlinas, y News International no podía permitirse el lujo de implantar di-chas etiquetas en los mandriles y después de su utilización tirar éstos a la basura. Así, se llegó a la conclusión de que el proyecto de instalación de la tecnología RFID para el control del papel tenía que hacerse junto con un proyecto de reutilización de los mandriles. “Contar con mandriles reutiliza-bles nos daba la oportunidad de usar eti-quetas RFID con una vida útil de unos cinco años, como mínimo. Los mandriles de alu-minio, como los usados entonces, suponen además otros benefi cios: producen una me-nor maculatura y reducen el número de ro-turas de banda, además de ser los que MAN Roland recomienda utilizar en las nuevas rotativas Colorman XXL que vamos a insta-lar en Londres”, explica Gercke-Lamy.

El largo viaje de las etiquetasNews International, junto con Core

Control International –proveedor de los mandriles y las etiquetas–, y las papeleras involucradas pusieron en marcha durante las pruebas un fl ujo de trabajo en círculo para las bobinas de papel. Los camiones de las fábricas de papel llevaban hasta las plantas del grupo las bobinas con los man-driles de aluminio y sus etiquetas RFID, que ya habían sido asociadas con el número de bobina (código Ifra) y con el mensaje elec-trónico papiNet en la propia papelera. A la entrada de éstas a las plantas de News In-ternational, se producía la primera lectura. La identifi cación por radiofrecuencia, al contrario que los códigos de barras, permite una lectura en conjunto de todas las etique-tas. “Los lectores pueden leer hasta 44 bobi-nas en de dos a tres segundos”, se congra-tula Gercke-Lamy, “pero también contamos con lectores a la entrada del almacén de pa-pel, que durante las pruebas leían una a una cada etiqueta para poder identifi car y aislar cada bobina con problemas individualmen-te, en el caso de que estuviese mal declara-da o no hubiese podido ser identifi cada co-rrectamente”. Además, una de las rotativas contaba con lectores que leían de nuevo la etiqueta cuando la bobina estaba ya siendo usada en la producción. Este lector se en-cuentra a una distancia escasa de la bobina de papel para evitar errores en la lectura de la señal. “Las lecturas cruzadas son un gran problema en la identifi cación por radiofre-cuencia, sobre todo cuando se trabaja con

etiquetas activas, ya que el alcance de la se-ñal es mayor”, explica Gercke-Lamy. Gene-ralmente, una vez que se ha utilizado una bobina y sólo queda de ella el mandril y su merma, éste es introducido en una máquina que desenrolla el papel restante, lo mide y lo deja caer en una jaula para su posterior reciclado. Durante el período de prueba, el mandril se llevaba a un intermediario, don-de se lavaba y pasaba un control de calidad, en el que sufría las mejoras pertinentes, si necesarias. Y de ahí, volvía a la papelera, donde se le bobinaba de nuevo papel a su alrededor.

“Tras varios ciclos completados, des-cubrimos que si trabajamos con una pape-lera nacional, sita en el Reino Unido, pode-mos completar una vuelta en dos semanas. Si trabajamos con una papelera situada en

el norte de Europa, como resulta en muchos casos, se necesita un mes, para no forzar demasiado las cosas. Ambos plazos de tiem-po nos parecen efi cientes y proporcionados para un trabajo como el que realizamos”, apunta Gercke-Lamy.

Los resultados de ambas fases fueron satisfactorios. De hecho, la segunda fase (con mandriles de aluminio y varias empre-sas papeleras involucradas) demostró que el completado automático de los mensajes pa-piNet –asociado a la lectura RFID en la lí-nea de embalaje de bobinas en las papele-ras– era un 99,8% fi able (sobre una muestra de 4.000 bobinas), lo que permite pensar en una gestión del almacén optimizada, en plataformas de facturación automáticas, en la posibilidad de hacer un seguimiento de las bobinas que se devuelven al fabricante de papel por ser defectuosas...

Ventajas en toda la cadena logística Peter Milton, director general de Core

Control International, explica: “La identifi -cación por radiofrecuencia abre todo un campo de posibilidades en diferentes áreas de la logística del papel. La información que aparece en ella permitiría realizar el in-ventario del papel prensa que se encuentra en un almacén cada quince minutos. Ade-más, los datos escritos en cada etiqueta no se pierden y pueden ser incluidos en una

Dada la magnitud de nuestras operacio-nes, el control de la logística de papel por medio de códigos de

barras no nos parece del todo apropiado ni fi dedigno.

Bénédicte Gercke-Lamy

News International»

Introduzca el número (del vínculo directo al artículo) on-lineEntrevista a Elan Freedberg, director de marketing de Power Paper (3362)

Entrevista a Klaus Weingarten, encargado del desarrollo y gestión de RFID, IAL

Automation und Logistik GmbH (3394)

Entrevista a Andrew James, responsable de ventas RFID, Harland Simon (3386)

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base de datos de materiales en cuestión de segundos. Nosotros hemos creado una in-terfaz a través de Internet a la que nuestros clientes pueden acceder por medio de una contraseña. En esta web, los usuarios de nuestras etiquetas y mandriles encuentran el historial de cada una de sus bobinas de papel, antes, durante y después de la pro-ducción. Entre los datos que pueden cono-cer de forma automática aparecen algunos tan relevantes como la identifi cación del nivel de maculatura total y de la maculatu-

ra por categorías (de mandril, de arranque, por roturas...) y productos, el uso o empleo real de papel prensa, frente al uso posible de este material dadas las toneladas com-pradas...”.

Esta empresa británica –que cuenta con una larga experiencia en el mundo de la impresión y que es la propietaria de los mandriles de aluminio, que alquiló a las pa-peleras para las pruebas– cree en el futuro de la identifi cación por radiofrecuencia. “Una etiqueta RFID puede contar con un

sensor que almacene datos como la hume-dad o temperatura del ambiente desde den-tro del mandril, lo que ayudará a entender las causas de muchas roturas de la banda de papel durante la producción. Además, como es posible realizar lecturas dentro de la ro-tativa, se puede monitorizar el proceso de producción. Esto supone que es factible sa-ber tras una rotura y al momento, qué ban-da se ha roto en primer lugar, dónde, por qué, etc. Y qué decir de su uso como útil administrativo”, añade Milton.

Los beneficios aquí mencionados han sido desarrollados en el Informe especial de Ifra 04.2006 a partir de una serie de escenarios sobre el uso de RFID en un diario.

Introduzca el número (del vínculo directo al artículo) on-lineSeguimiento del papel y reducción de maculatura en News International (3380)

Entrevista a Björn Jonnsson, responsable de negocio, Holmen Paper (3366)

Entrevista a Samuli Strömberg, vicepresidente de marketing, UPM Raflatac (3387)

Entrevista a Claes Skoglund, responsable de marketing técnico, Stora Enso (3383)

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Mailroom

Posibles benefi cios para las plantas

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También el periódico alemán Rheini-sche Post ha comprendido cómo la identifi -cación por radiofrecuencia puede ayudarles a automatizar y gestionar con menos es-fuerzo y mayor precisión la logística del pa-pel. Matthias Tietz, uno de los impulsores del Informe especial de Ifra 04.2006 sobre RFID afi rma: “Aún no hemos implementa-do la tecnología RFID en nuestra empresa, pero ya hemos dado dos grandes pasos en pos de su pronta introducción. Contamos con un almacén automatizado de papel y tenemos ya mucha información sobre este consumible. Con la RFID podríamos inter-cambiar esta información con nuestros pro-veedores de forma sencilla y mejorar la ges-tión del papel. Además estamos trabajando, junto con EAE y Ferag, en una serie de es-pecifi caciones para el control de los encar-tes. El objetivo consiste en controlar, a tra-vés de la RFID, el almacén de insertos y la atribución de órdenes con los productos que hay en cada palet a la encartadora corres-pondiente. La idea está lista y queremos co-menzar la instalación en 2008”.

En el campo de los proveedoresEn cualquier caso, y como muestran

ambos ejemplos, cuando se piensa en intro-ducir una nueva tecnología en un fl ujo de trabajo consolidado es necesario colaborar con los proveedores involucrados. Empresas como la citada Core Control, la israelí Power Paper, o la alemana IAL Automation und Logistik investigan las posibles aplicaciones de la identifi cación por radiofrecuencia en diferentes industrias. Tanto Klaus Weingar-ten, de IAL, como Elan Freedberg, de Power Paper, destacan la relevancia que esta tec-nología puede tener en el seguimiento de las bobinas de papel prensa para los rotati-vos, campo en el que ambas empresas ya han hecho pruebas e instalaciones piloto.

Aun así, ambos son conscientes de que existen todavía difi cultades para que

Los periódicos han de prepararse para intro-ducir la RFID, ya que su avance continuará y cambiará nuestra

forma de organizar la logísti-ca de la producción.

Manfred Werfel, director de investigación y

subdirector general de Ifra»

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Informe especial de Ifra sobre RFID Ifra ha sacado a la luz un Informe especial que describe los

principios técnicos y las aplicaciones específi cas en la pro-ducción de periódicos de la Identifi cación por radiofrecuen-cia (RFID).

La versión alemana de este informe se distribuyó a los miembros de Ifra junto con la edición de enero de técnicas de prensa en alemán. Las versiones en francés e inglés se

distribuirán con los números de las revistas de marzo y abril respectivamente. Los miembros de Ifra pueden descargar de forma gratuita este informe en www.ifra.com, ‘Investigación’, subapartado ‘Special Reports’.

Los no miembros de Ifra interesados en leer este informe, pueden adquirir

una copia impresa por 130 euros. Para solicitar un ejemplar, escriba un men-saje a Ulrike Leis-Kolb a la dirección leiskolb@ifra.com, o pídalo por teléfono (+49.6151.733.772).

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En la entrada a la dársena de la planta de News International en Londres dos

lectores de RFID registran cada vez que una etiqueta entra o sale del recinto.

RFID Marzo 2007 técnicas de prensa Mari Pascual

esta tecnología se popularice, no sólo entre los propios periódicos, sino también entre sus proveedores, en este caso, las papeleras.

El primer problema que aparece cuan-do se trata de la RFID, se encuentra en las propias etiquetas y su variedad. Weingarten explica: “Nosotros trabajamos con etiquetas pasivas UHF. Hasta hace un año, antes de que se introdujera el estándar GEN2, esta tecnología no era adecuada para la indus-tria papelera o al menos, para el seguimien-to de bobinas, debido al pobre alcance de la lectura de la señal”.

GEN2 es un estándar propuesto por la organización EPCGlobal para la RFID (EPC signifi ca Electronic Product Code y es el número que emite la etiqueta RFID) en la identifi cación de cualquier artículo en la cadena de suministro para las empresas de cualquier tipo de industria en todo el mun-do. Además, existe una serie de estándares alternativos basada en la clasifi cación de la ISO 18000-6. Pese a estos esfuerzos, no hay ninguna corporación pública global que gobierne las frecuencias usadas en la RFID y cada país puede fi jar sus propias reglas; algo que no ayuda a su introducción.

Freedberg, cuya empresa trabaja con tecnologías en UHF pero con etiquetas se-mipasivas, añade que “serán necesarias mu-chas pruebas y mucha formación para que la identifi cación por radiofrecuencia se convierta en la norma para los periódicos. El proceso será largo, similar al que supuso la adopción de los códigos de barras”. En el

caso de Power Paper, las etiquetas son ma-nufacturadas por la propia empresa, lo que hace que sean más baratas de lo nor-mal. Sin embargo, en general, el elevado precio de estas etique-tas, en su mayoría fa-bricadas en silicona, no ha benefi ciado en absoluto su populari-dad.

Aun así, sus re-conocidos benefi cios son muchos como para no ponerse manos a la obra. La mayo-ría de empresas papeleras se muestran más que activas en este campo, puesto que sa-ben que sus clientes acabarán por reclamar el uso de esta tecnología para evitar errores. UPM-Kymmene, incluso, ha creado UPM Rafl atac, una división dedicada exclusiva-mente a esta tecnología. “Aunque UPM Ra-fl atac no se dedica a la fabricación de pro-ductos específi cos para los periódicos, sí fabrica una gran variedad de productos RFID que cubren muchas áreas de aplica-ción. Además, nuestra empresa matriz, UPM-Kymmene, trabaja activamente en la implantación de la RFID para el seguimien-to de las bobinas”, dice Samuli Strömberg, vicepresidente de marketing de la fi lial UPM Rafl atac.

No son los únicos. Holmen Paper lle-va a cabo en la actualidad pruebas con eti-quetas semipasivas con frecuencia ultra alta. “Esperamos obtener ventajas de costes y efi ciencia a través de la cadena de sumi-nistro, tanto para nosotros y nuestros socios logísticos como para nuestros clientes, los impresores, en cuanto a automatización, se-guimiento, intercambio de información y rendimiento”, explica Björn Jonnson, res-ponsable del desarrollo de negocio de la empresa sueca.

A pesar de que esta tecnología lleva décadas en uso, aún hay ‘agnósticos’ en el sector que no creen en ella. Sus argumentos no son pocos: las etiquetas pasivas –más baratas– presentan problemas de legibili-dad; las etiquetas con una señal más clara son aún caras, lo que impone su reutiliza-ción; la señal de la etiqueta no se lee en determinadas condiciones de humedad (cla-ve para el papel prensa) o en contacto con ciertos metales; y como dice Claes Sko-glung, de Stora Enso, muchos son los clien-tes de las papeleras que ni siquiera han in-troducido la lectura de los códigos de barras presentes en las bobinas desde hace años.

Sin embargo, y como muestra el caso de News International, la cooperación entre diarios y proveedores puede dar con solu-ciones adecuadas para los problemas reales. La identifi cación por radiofrecuencia es una tecnología que madura a gran velocidad y de forma constante. No es de extrañar pues que sean muchos más los que creen que esta tecnología supondrá toda una revolu-ción para los periódicos y sus proveedores (y no sólo nos referimos al papel), tanto en la optimización y automatización de proce-sos internos como de sus relaciones. <

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