Varón que se quiere, usa morral…

Cuenta la historia que en Roma y Grecia aparecieron los que podrían considerarse los primeros bolsos o alforjas. Se dice que estos accesorios surgieron como alternativa al uso de los bolsillos. Ya en esa época mujeres y hombres los llevaban colgados al cuello e, incluso, los ponían en las imágenes de sus divinidades, como Mercurio, el dios del comercio.

No se sabe con precisión desde cuando se usaron bolsos y alforjas, pero no es difícil de imaginar que en la prehistoria se usaran accesorios hechos de pieles o tejidos para transportar alimentos producto de la caza y recolección,. En el Perú, igualmente, durante el imperio incaico los chasquis también usaban un bolso para llevar sus mensajes. En conclusión, este tipo de accesorio se convirtió en un elemento o herramienta fundamental para la humanidad en muchas épocas.

En la actualidad, las mujeres cuentan con un accesorio femenino, la cartera, cuya función es contener y transportar los objetos de uso diario importantes para ellas: maquillaje y perfumes, cepillos para el cabello, billetera, monedero, llaves, teléfono, lentes, papel tisú, entre muchos otros. Expertos de la moda manifiestan que la cartera refleja la personalidad y el estilo de la dama que la lleva, mientras que ellas consideran que sin cartera no podrían vivir. Increíble, por cierto.

Asunto de hombresPero, aquí viene lo bueno, ¿por qué ellas pueden tener este accesorio exclusivo y los varones no? Bueno, hoy existe un accesorio masculino equivalente a la irremplazable cartera femenina y se llama morral. Si bien es cierto que un morral puede ser de tela, de plástico u otros materiales, lo ideal es uno de cuero que reúna calidad, tradición y estilo. Y mejor aún, uno de la marca Renzo Costa.

Como autor de esta nota y Gerente Comercial de Renzo Costa, les confieso que poseo dos modelos diferentes de morral, y que desde que los uso disfruto de mayor comodidad en mis actividades diarias. Hasta podría decir que estos morrales son la envidia de amigos y excompañeros de estudios, por la versatilidad, estilo y elegancia que como accesorios le dan a la imagen de un hombre.

Las mujeres llevan siempre consigo su cartera y lo hacen a lo largo de toda la vida. Entonces, ¿por qué el varón que se quiere no puede usar un morral?

Los hombres que queremos lucir siempre bien —sin necesidad de llegar a ser metrosexuales— podemos llevar con estilo varonil nuestra billetera, agenda, tablet, celular, perfume y artículos de uso personal, audífonos, etcétera, en un morral de cuero. ¿Por qué no? ¿quién nos lo impide?

Un morral debería ser parte de nuestro outfit, nos da mucho orden y es un gran aporte en la mejora de nuestro estilo de vida. Varón que se quiere, usa morral.