redes y la dinamica de la empresa

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Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=81803203 Redalyc Sistema de Información Científica Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal Becerra Rodríguez, Fredy Las redes empresariales y la dinámica de la empresa: aproximación teórica INNOVAR. Revista de Ciencias Administrativas y Sociales, Vol. 18, Núm. 32, julio- diciembre, 2008, pp. 27-45 Universidad Nacional de Colombia Colombia ¿Cómo citar? Número completo Más información del artículo Página de la revista INNOVAR. Revista de Ciencias Administrativas y Sociales ISSN (Versión impresa): 0121-5051 [email protected] Universidad Nacional de Colombia Colombia www.redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

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como organizar redes

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    RedalycSistema de Informacin Cientfica

    Red de Revistas Cientficas de Amrica Latina, el Caribe, Espaa y Portugal

    Becerra Rodrguez, FredyLas redes empresariales y la dinmica de la empresa: aproximacin terica

    INNOVAR. Revista de Ciencias Administrativas y Sociales, Vol. 18, Nm. 32, julio-diciembre, 2008, pp. 27-45

    Universidad Nacional de ColombiaColombia

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    INNOVAR. Revista de Ciencias Administrativas ySocialesISSN (Versin impresa): [email protected] Nacional de ColombiaColombia

    www.redalyc.orgProyecto acadmico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto

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    * Ingeniero industrial, candidato a doctor

    en Administracin de la Universidad CEU

    San Pablo de Madrid; profesor asociado

    del Departamento de Ingeniera Industrial

    de la Universidad Nacional de Colombia,

    sede Manizales; profesor asociado de la

    Facultad de Economa y Administracin de

    Empresas de la Universidad de Manizales.

    Correo electrnico:

    [email protected]

    Becerra Rodrguez, F. (2008). Las redes empresariales y la din-mica de la empresa: aproximacin terica. Innovar, 18 (32), 27-46.

    Las redes empresariales y la dinmicade la empresa: aproximacin terica

    Fredy Becerra Rodrguez*

    r e s u m e nEn las ltimas cuatro dcadas se ha observado un creciente inters en la literatura por el estudio de los sistemas productivos en conjunto, ms que sobre las empresas como unidades particulares, en especial los anlisis sobre las redes empresariales y las configuraciones que estas presentan. Desde esta perspectiva, el presente trabajo se centra en la nocin de red empresarial y su incidencia en el desarrollo de la empresa, haciendo alusin a lo que se entiende por redes sociales, empresariales e institucionales. Despus se plantean aspectos relativos a la dinmica de las empresas y las redes empresariales, donde se sugiere el cambio de perspectiva de la accin empresarial centrada en la empresa, por el trabajo en redes donde se interacta adems con otros agentes. Luego se propone una taxonoma de los tipos de redes empresariales que se presentan en los sistemas productivos, haciendo nfasis en las redes en entornos locales y regio-nales. Finalmente se dan algunas conclusiones en las que se resalta la importancia de las redes empresariales como mecanismo para el desarrollo de las empresas y la relevancia de la existencia de estas en entornos geogrficamente localizados.

    P a l a b r a s c l a v e : red empresarial, cluster, distrito industrial, economas de aglomeracin, desarrollo local, desarrollo regional.

    a b s t r a c t

    B u s i n e s s n e t w o r k s a n d c o m p a n y d y n a m i c s : a t h e o r e t i c a l a p p r o a c h

    Growing importance has been given in the literature during the last four decades to studying joint production systems (more than studying companies as particular units), especially analysis concerning entrepreneurial companies and their configurations. The present work is thus centred on the notion of business networks and their effect on company development, alluding to that understood by social, business and institutional networks. Aspects relating to company dynamics and business networks are then mentioned as this is where the pers-pective regarding company-centred business action becomes changed for working in networks involving interacting with other agents. Taxonomy for the types of business networks in production systems is then proposed, emphasising networks in local and regional set-tings. Some conclusions are given indicating the importance of business networks as a mechanism for company development and their relevance in geographically-localised settings.

    K e y w o r d s : business network, cluster, industrial district, economies of agglomeration, local development, regional development.

    r s u m

    L e s r s e a u x d e n t r e p r i s e s e t l a d y n a m i q u e d e l e n t r e p r i s e : a p p r o c h e t h o r i q u e

    Durant les quarante dernires annes on observe une augmentation importante des publications sur ltude des systmes productifs dans leur ensemble plus que sur les entreprises en tant quunits particulires, et plus spcialement les analyses sur les rseaux dentreprises et leurs configurations. Dans cette perspective ce travail est centr sur la notion de rseau dentreprise et son incidence dans le dvelo-ppement de lentreprise, faisant allusion ce quon entend par rseaux sociaux, rseaux dentreprises et rseaux institutionnels. Dautres aspects sont ensuite dvelopps en relation avec la dynamique des entreprises et des rseaux dentreprises o on suggre un chan-gement de perspective de laction dentreprise centre sur lentreprise, pour le travail en rseaux o il y a, de plus, une interaction avec dautres agents. Une taxonomie des types de rseaux dentreprises se prsentant dans les systmes productifs est ensuite propose, tout en insistant sur les rseaux en milieux locaux et rgionaux. Finalement limportance des rseaux dentreprise est indique comme mcanisme pour le dveloppement des entreprises et lintrt de leur existence en milieux gographiquement prcis.

    Mots c l : rseau dentreprise, cluster, District industriel, conomies dagglomration, dveloppement local, dveloppement rgional.

    r e s u m o

    A s r e d e s e m p r e s a r i a i s e a d i n m i c a d a e m p r e s a : a p r o x i m a o t e r i c a

    Nas ltimas quatro dcadas se tem observado uma crescente importncia na literatura sobre o estudo dos sistemas produtivos em conjunto, mais do que sobre as empresas como unidades particulares; em especial a anlise sobre as redes empresariais e as configu-raes que estas apresentam. Sob essa perspectiva o presente trabalho concentra-se na noo de rede empresarial e sua incidncia no desenvolvimento da empresa, aludindo ao que se entende por redes sociais, empresariais e institucionais. Depois traam-se aspectos relativos dinmica das empresas e s redes empresariais onde se sugere a mudana de perspectiva da ao empresarial centrada na empresa, pelo trabalho em redes onde se interage, alm disso, com outros agentes. Logo prope-se uma taxonomia dos tipos de redes empresariais que se apresentam nos sistemas produtivos, enfatizando as redes em ambientes locais e regionais. Finalmente emitem-se algumas concluses nas que se indica a importncia das redes empresariais como mecanismo para o desenvolvimento das empresas e a relevncia da existncia destas em ambientes geograficamente localizados.

    P a l a v r a s c h a v e : rede empresarial, cluster, Distrito industrial, economias de aglomerao, desenvolvimento local, desenvolvi-mento regional.

    C l a s i f i c a c i n J E L : L14, P25, R12. Rec ib ido : abril de 2008 A probado : julio de 2008

    C o r r e s p o n d e n c i a : Fredy Becerra, Calle 5a, No. 14a-24, Manizales, departamento de Caldas, Colombia.

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    Introduccin

    El presente artculo es parte del trabajo que el autor est realizando para obtener la suficiencia investigado-ra en el doctorado en Administracin La empresa en una economa internacionalizada, y que actualmente cursa con la Universidad CEU San Pablo de Madrid, Espaa, cuya perspectiva tiene como referente la ac-cin empresarial en redes dentro de los sistemas pro-ductivos locales y regionales.

    En los sistemas productivos, cada vez cobra mayor im-portancia la observacin y el anlisis de los fenme-nos asociados con el surgimiento y desarrollo de las empresas en el contexto de las relaciones con agentes externos, los stakeholders1, que pueden afectar positiva o negativamente el comportamiento de la empresa, o ser afectados por las acciones, decisiones o planes de esta (Carroll, 1993; Gibson, 2000); en cualquier caso se compromete la capacidad competitiva de la empre-sa (Drucker, 1984; Porter y Kramer, 2002; citados por Truo et l., 2005).

    Las relaciones de las empresas con sus competidores di-rectos dentro de un mercado, as como las que estable-cen con sus proveedores y clientes y las que construyen con otros agentes gubernamentales y no gubernamen-tales dentro de una localidad o regin, pueden con-tribuir a crear fuentes de ventaja competitiva para la empresa (Porter, 1991, 1995, 1999), en especial las pe-queas y medianas empresas, cuyas caractersticas las hacen ms vulnerables al entorno competitivo actual2. Tales relaciones determinan la configuracin de redes empresariales (de distinta naturaleza y tipo) como un mecanismo que resulta beneficioso para los integran-tes de la red dado el intercambio dinmico entre los integrantes, as como de los recursos que estos poseen (Dabas, 2004) y comparten en un contexto de cola-boracin y competencia: informacin, conocimiento y tecnologa, entre otros.

    Segn este enfoque, este artculo presenta, en primer lugar las ideas bsicas que aluden a la nocin de red y a los componentes de las redes, especficamente a los conceptos de nodos (personas, instituciones, empresas, etc.) y relaciones (flujos) que determinan la estructu-ra de red (Snijders, 2003), y a la importancia de la red como mecanismo para la solucin de problemas que los agentes no pueden resolver de manera individual.

    En segundo lugar se describen los aspectos que de-finen a las redes sociales, y las redes instituciona-les y empresariales, donde las primeras centran su atencin en las personas que utilizan este mecanis-mo como medio para la solucin de problemas que aquejan a una comunidad (salud, educacin, vivien-da, servicios, entre otros) y las segundas, donde la es-tructura de red resulta una estrategia apropiada para enfrentar fenmenos como: volatilidad de la deman-da, segmentacin del mercado, reduccin del ciclo de vida del producto, incertidumbre estratgica (Yoguel et l., 2000), cambio tecnolgico acelerado, ambiente altamente competitivo, exigentes normas de calidad y regulaciones ambientales, entre otros, que implican un considerable incremento en la presin competitiva para las empresas.

    En tercer lugar se muestra cmo el enfoque centrado en la empresa y sus atributos evoluciona hacia el an-lisis cuyo enfoque trasciende la unidad productiva y se centra en los sistemas productivos como un todo, atendiendo especialmente al papel de las redes empre-sariales y su incidencia en la forma de operar de las empresas; se hace nfasis en las implicaciones favora-bles que las redes tienen para las empresas y como estas surgen en entornos donde se presentan aglomeraciones de actividades empresariales y comerciales.

    En cuarto lugar se propone una taxonoma de redes empresariales, indicando que las redes pueden pre-sentarse a nivel global y local, donde la territorialidad propuesta en las segundas es de especial relevancia en este trabajo, por lo que se describen distintos tipos de redes que se dan en un entorno localizado (regin o localidad).

    Finalmente se presentan algunas conclusiones deriva-das de la literatura consultada.

    1. El concepto de red

    El concepto de red es hoy una va para explicar el fun-cionamiento de la sociedad, y es cada vez ms popular en muchas disciplinas (Cabus y Vanhaverbeke, 2006); de all la importancia que se le confiere para com-prender fenmenos sociales y econmicos donde estn inmersos distintos agentes interrelacionados y para ex-plicar el comportamiento individual de estos. En la re-

    De acuerdo con Carroll (1993) los 1 stakeholders son aquellos grupos o individuos con quien la organizacin interacta o tiene algn tipo de interdependencia. Tales grupos o individuos se entienden aqu como proveedores, clientes, competencia, organizaciones gu-bernamentales y no gubernamentales. Al respecto, Unido (2001, p. 12) habla de cluster stakeholders-enterprises and institutions.

    Si bien las empresas grandes tambin estn sujetas a los riesgos de la competencia internacional, en el caso de las Pyme son ma-2 yores los obstculos para un mejor desempeo competitivo dado su tamao (Unido, 2001) y por lo tanto para ellas, las redes resultan en un mecanismo expedito para lograr economas de escala, mayor poder de negociacin, incrementar la capacidad de aprendizaje y de innovacin, entre otros aspectos.

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    presentacin de una red mediante un grafo (nodos y lneas), donde los nodos son actores (personas, empre-sas, grupos sociales, etc.), se puede reconocer tanto la importancia de la red para el individuo como de un in-dividuo particular dentro de la red. En el primer caso esto se observa mediante el grado de salida de un actor que est definido por el nmero de salidas de este actor hacia otros actores (vnculos que son importantes para l) y refleja la importancia que tiene la red para este actor. En el segundo caso esto se observa por el grado de entrada de un actor que est definido por el nme-ro de vnculos de otros actores con este actor, lo que refleja el inters que tienen los otros actores de tener vnculos con este actor particular y por lo tanto la im-portancia de este dentro de la red (Snijders, 2003).

    La red es un mecanismo o estrategia de integracin y articulacin de diferentes agentes que tienen un obje-tivo que los incita a aliarse bajo este tipo de estructura. Puede tener tamaos diferentes, desde un equipo que trabaje en red, a una red de barrio o de una clase en una escuela, hasta una red internacional. Puede haber igualmente red de redes, de tal forma que dentro de una red pueden formarse subredes, con objetivos es-pecficos (Dabas, 2004). En mbitos marcados por la diversidad, la red, como modelo de organizacin, no busca homogeneizar sino organizar la heterogeneidad, permitiendo la autonoma relativa entre sus integran-tes; la red tiene la ventaja de atravesar las fronteras de lo pblico y lo privado, las instituciones, las empresas o las universidades, las asociaciones o grupos voluntarios (Arvanitis, 1996, p. 41).

    La red es un sistema abierto en el cual el intercam-bio entre sus integrantes y con agentes de otros gru-pos sociales permite la potencializacin de los recursos (Dabas, 2004) de los integrantes de forma individual como de la red en su conjunto. La red es una metfora que permite hablar de relaciones sociales dinmicas. De acuerdo con Aruguete (2004), el trmino de red se puede definir as:

    Laredesunaestrategiaquerelacionalasproduc-ciones sociales y la subjetividad que en ellas se des-pliega.

    Lasredessonformasdeinteraccinsocial,definidapor un intercambio dinmico entre personas, gru-pos e instituciones en contextos de complejidad.

    La red es un mecanismo para la accin y la produc-cin de alternativas vlidas para enfrentar problemas o atender oportunidades de los agentes participantes de esta, quienes pueden ser del mismo tipo o completa-mente heterogneos. Las redes sociales son, por tanto, conjuntos de relaciones sociales o interpersonales que ligan individuos u organizaciones en grupos. Como

    fruto de las relaciones, directas e indirectas, entre ac-tores (la interaccin, la comunicacin, el intercambio, etc.), se pueden identificar estructuras relacionales a las que atribuir la emergencia de propiedades sistmi-cas; estas estructuras emergentes nos pueden ayudar a comprender, y por tanto a predecir e incluso a gestio-nar mejor, los resultados de la accin humana (Sanz, 2003, p. 22).

    La estructura sistmica de las redes comprende tres elementos bsicos: nodos, que son los componentes (in-dividuos, organizaciones, etc.) entre los cuales se dan vnculos segn el inters de los miembros; un nodo es una unidad que puede contener y pasar informacin, y como tal una conexin entre dos nodos significa que hay algn paso de informacin entre estos (La-zer, 2003). Las relaciones o intercambios (informacin, conocimiento, tecnologa, bienes y servicios, etc.) que definen y rigen, en esencia, el comportamiento de la red; en otras palabras, un conjunto de nodos interre-lacionados es una red informacional (Lazer, 2003). Y la comunicacin, que puede estar determinada por los roles sociales (formales o informales) que desempean los nodos dentro de la red. Los roles sociales formales estn frecuentemente determinados por grupos, orga-nizaciones o culturas, y son reflejo de la designacin de posiciones formales (por ejemplo un gerente). Aunque los aspectos formales de los grupos son importantes, gran parte de la dinmica de las redes es el resultado de influencias informales y de la interaccin de proce-sos formales e informales (Johnson et l., 2003), que a su vez define el grado de formalidad o informalidad de la comunicacin en las redes, y que adems puede ser directa o indirecta, tcita o explcita.

    Siguiendo a Johnson et l. (2003), tanto la naturaleza como la multiplicidad y coincidencia de ambos tipos de roles (formales e informales) en las redes pueden tener un impacto sobre la evolucin y estabilidad de las es-tructuras de red. Ms importante, sin embargo, todas estas estructuras de red tienen implicaciones para los resultados de grupos semejantes, como productividad, moral de grupo, eficiencia, bienestar psicolgico indi-vidual, comunicacin de grupo y conflicto de grupo.

    2. Redes sociales, institucionales y empresariales

    La nocin de red social se ha asociado a la interre-lacin de personas. Referencia muy precisa de ello se encuentra en Mitchell (1969), quien define la red como un conjunto especfico de lazos entre un con-junto definido de personas, con la propiedad de que las caractersticas de estos lazos, vistas como un total, pueden ser usadas para interpretar los comportamien-

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    tos sociales de las personas implicadas. No obstante, el concepto se ha ampliado a grupos, organizaciones e instituciones (Sonquist y Koenig, 1975; Galaskiewicz, 1979; Burt, 1980; Walker et l., 1997; Lazer, 2003; Bor-gatti y Foster, 2003; Tracey y Clark, 2003; Johansson y Quigley, 2004; Viedma, 2004; Pyhnen y Smedlund, 2004; Ibarra et l., 2005; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; Cabus y Vanhaverbeke, 2006; entre otros) que interactan para obtener unos resultados que les sean favorables a las unidades individuales y a la red en su conjunto. Una red es en cualquier caso una estructu-ra social que, de acuerdo con Blau (1975) citado por Cook y Whitmeyer (1992), tiene tres enfoques princi-pales: i) como una configuracin de posiciones y rela-ciones sociales; ii) como el sustrato que hay debajo de toda la historia y vida social; y iii) como un espacio multidimensional de las posiciones diferenciadas de la gente en una sociedad u otra colectividad.

    2.1 Red social

    En el sentido de la definicin de Mitchell (1969), una red social se constituye en el medio de integracin so-cial de las personas que permite interpretar y modificar los comportamientos de estas en funcin de resolver problemas relacionados por ejemplo con el mbito de la salud, la vivienda, la crianza, el cuidado de los nios, entre otros; y que individualmente no pueden resolver. As, las redes sociales se constituyen en los ambien-tes donde las personas obtienen apoyo material, emo-cional, afectivo, de informacin, etc., convirtindose en el principal soporte de integracin de las personas frente a una sociedad erosionada en sus fundamentos (Martnez, 2004).

    Las redes sociales son una respuesta a la creciente des-articulacin de la sociedad y su consecuente individua-lizacin, y por tanto permiten el reconocimiento de la pertenencia del individuo en mltiples comunidades, donde su identidad ya no depende de su inclusin en una clase o grupo social. En este nuevo escenario se aceptan las diferencias y el mutuo reconocimiento, construyendo convivencia y solidaridades. En esencia, una red social existe en la medida en que se tejen un conjunto de relaciones de inters colectivo entre or-ganizaciones o individuos, en las que estos coinciden, colaboran, se comunican, etc., mediante acuerdos bi-laterales o multilaterales (Sanz, 2003), con los que se busca resolver las problemticas que son difciles de so-lucionar de manera individual.

    El modelo de redes sociales surge durante la segunda mitad del siglo XX y se desarrolla como una aplicacin de la teora moderna de la comunicacin al tejido de interacciones que se configura alrededor de las perso-nas (Aruguete, 2004). De acuerdo con esto, el anlisis de redes sociales centra su atencin en las relaciones de los individuos, convirtindose as en una alterna-tiva o el complemento al anlisis del comportamiento social de los individuos basado en los atributos de estos (Verd y Mart, 1999); de all que el anlisis de redes so-ciales haya tenido su origen en ciencias sociales como la sociologa y la antropologa (Lozares, 19963; Sanz, 2003; Knox et l., 2006; adems de otros). Despus de los aos setenta del siglo pasado, el anlisis de redes sociales ha crecido rpidamente, adquiriendo una es-pecial importancia en las escuelas de negocios (Fried-kin, 2003). En la perspectiva de los negocios, las redes empresariales e institucionales elemento central en este trabajo constituyen un objeto de estudio tratado en forma amplia en la literatura, que abarca percepcio-nes sobre lo que son las redes empresariales, tipos de redes empresariales, actores de las redes empresariales, y ventajas y desventajas de estas (Walker et l., 1997; Lazer, 2003; Borgatti y Foster, 2003; Tracey y Clark, 2003; Viedma, 2004; Pyhnen y Smedlund, 2004; Fu-jita y Krugman, 2004; Ibarra et l., 2005; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; Lpez y Caldern, 2005; Ca-bus y Vanhaverbeke, 2006, entre otros).

    2.2 Redes empresariales e institucionales

    En las actuales circunstancias del comercio internacio-nal, las empresas encaran una serie de nuevos retos entre los que pueden mencionarse: volatilidad de la de-

    Carlos Lozares, en su artculo Teora de las redes sociales, publicado en Internet, hace una descripcin detallada del origen y desa-3 rrollo del anlisis de redes sociales incluyendo concepciones tericas, mtodos y tcnicas de investigacin. Extrado en noviembre de 2007 desde http//seneca.uab.es/antropologia/jlm/ars/paperscarlos.rtf

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    manda, segmentacin del mercado, reduccin del ciclo de vida del producto, incertidumbre estratgica asocia-da al nuevo escenario mundial (Yoguel et l., 2000), cambio tecnolgico acelerado, ambiente altamente competitivo, exigentes normas de calidad y regulacio-nes ambientales, entre otros, que siguiendo a Yoguel et l. (2000) implican un considerable incremento en la presin competitiva para los agentes econmicos. Esta situacin requiere explorar el potencial de nuevos mo-delos para el desarrollo empresarial en los que los mo-delos de desarrollo en red, conformados por empresas e instituciones pblicas y privadas concentradas en es-pacios claramente definidos, resultan ser la alternativa viable frente a la dificultad de las empresas de enfren-tar tales retos de manera individual.

    Segn Tracey y Clark (2003), las redes de interaccin han supuesto un significado particular en los recientes aos porque de ellas se presume una importancia para el aprendizaje y la innovacin. Los mismos autores plantean que esta coyuntura es suficiente para sealar que las redes estn en la idea de fomentar el aprendi-zaje interactivo de las organizaciones participantes a travs de la accin de compartir conocimiento e infor-macin; ello hace posible la construccin de confianza, compartir valores y formas de trabajo (Tracey y Clark, 2003). La formacin de redes es producto de las rela-ciones que le incumben a las firmas o de la explotacin de las oportunidades inherentes a la red, reforzando la estructura de la red o reformndola (Galaskiewicz y Wasserman, 1981; Mariden, 1985; Kogut et l., 1994, citados por Walker et l., 1997). De acuerdo con este autor existen dos tipos de oportunidades que deter-minan el proceso de formacin de la red. Primero, la estructura de la red es un vehculo para inducir la co-laboracin durante el desarrollo del capital social4; de hecho el concepto de red, como un camino para expli-car el funcionamiento de la sociedad, es cada vez ms popular en varias disciplinas (Cabus y Vanhaverbeke, 2006). Segundo, los vacos (rupturas) en los patrones de los flujos de informacin reflejan oportunidades po-tencialmente provechosas para establecer conexiones entre las firmas no relacionadas (Burt 1992, citado por Walker et l., 1997); estas oportunidades estimulan la

    accin interempresarial de los agentes en los distintos segmentos de la industria (Walker et l., 1997).

    De acuerdo con Tracey y Clark (2003), las firmas regu-larmente interactan y construyen alianzas con orga-nizaciones que forman parte de sus ambientes (como proveedores, clientes, competidores, etc.) sobre los cuales hay alguna capacidad para imponer un grado de control que es estimado legtimamente por ambas partes; a este respecto los agentes confan mucho en su capacidad de persuadir, acomodarse y colaborar con otros actores. Estos procesos pueden ser negociados a travs de redes de interaccin social entre agentes y sus homlogos y otras organizaciones relevantes.

    Las redes son mecanismos o estrategias de integra-cin y articulacin de diferentes agentes que tienen un objetivo que los incita a aliarse bajo este tipo de estructura. De acuerdo con UNDP5 (1999) una red empresarial debe tener, al menos, las siguientes cua-tro caractersticas:

    Orientacin a la demanda u orientado al mercado; debe existir un mercado (consumidor) promisorio para el producto6.

    Orientacin al empresario por lo que deben existir em-presarios que acepten un proyecto y estn interesados en operarlo; esto se logra cuando estn dispuestos a in-vertir tiempo y recursos propios en el proyecto.

    Capital social es un concepto en elaboracin; no obstante es frecuente que en la literatura se aluda a las relaciones de confianza 4 que se dan entre las personas que constituyen una comunidad. Este aspecto es retomado en las relaciones interpersonales (Macas, 2002; Pyhnen y Smedlund, 2004; Malewicki, 2005) que se encuentran inmersas en las redes empresariales.

    Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas, por su sigla en ingls.5

    Segn Lpez (2003), los conceptos de la vieja cadena productiva presentados por muchos estudiosos del tema son una secuencia 6 de eslabones, y el de la comercializacin es el ltimo, es decir, el consumidor est al final. En dicho esquema el productor vende a quien puede. En las nuevas teoras de la competitividad, la red de valor inicia por el consumidor, y desde all se empieza la compleja interaccin de los diferentes nodos correspondientes a provisin de insumos, produccin, transporte, etc., para llevar al consumidor el producto acordado desde el principio. En la red de valor el productor vende a un mercado identificado desde el principio.

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    Orientacin al negocio, porque el proyecto mediante el cual se articulan debe ser un negocio rentable para los empresarios que lo operen, y debe hacerse un estudio econmico-financiero minucioso antes de iniciarlo.

    Orientacin a generar cambios permanentes en la estruc-tura productiva de los empresarios, ya que los proyectos de la red deben generar una serie de ajustes que tie-nen que realizar los empresarios para alcanzarlo. De hecho las redes influyen cambios en la estructura pro-ductiva de las empresas y del territorio que alberga a las redes, dando lugar a innovaciones de carcter socioeconmico (Becerra y Naranjo, 2007); de igual manera modifican la cultura empresarial (Minguzzi y Passaro, 2000) incidiendo, por ejemplo, en nuevos modelos de negocio.

    Las redes son escenarios donde se presentan fuertes relaciones de las empresas con sus competidores direc-tos dentro de un mercado, as como las que estable-cen con sus proveedores y clientes, y con otros agentes (instituciones de apoyo gubernamentales y no guber-namentales), que pueden contribuir a crear fuentes de ventaja competitiva para la empresa (Porter, 1991, 1995 y 1999). En estos modelos de organizacin inte-rempresarial e interinstitucional, la cooperacin cons-tituye tal vez la caracterstica ms importante; las redes ofrecen un modelo hbrido entre competencia y coo-peracin, algunas veces denominado coo-peticin, en funcin de buscar mayor flexibilidad y compartir costos y riesgos, etc. (Cabus y Vanhaverbeke, 2006). Las redes son una forma de organizar las relaciones entre empresas que, sin dejar de competir, incluyen a la cooperacin como parte de su estrategia de negocios con el propsito de alcanzar un mejor desempeo en una determinada industria.

    Las empresas que cooperan o colaboran a travs de una red deben compartir objetivos similares, o al me-nos complementarios, trabajando para hacer a la red ms competitiva y para aumentar la eficiencia conjun-ta. El grado de control es bajo7; lo que se busca es la conformacin de un sistema homogneo de pequeas unidades autorreguladas, que compartan conocimien-tos y visin interna pero que no deban guiarse nece-sariamente por los lineamientos de un holding central. Siguiendo a Cervilla y Lorenzo (2000), en las redes empresariales e institucionales interesa particularmen-te el aprendizaje que tiene lugar entre las empresas y

    Esto es particularmente cierto en las redes horizontales que estn compuestas, generalmente, por Pyme dentro de un mismo esla-7 bn en la cadena productiva (Unido, 2001; Lpez, 2003). En el caso de las redes verticales esto no es tan notorio, ya que generalmente en estas existen una o ms empresas grandes que se rodean de Pyme proveedoras de insumos, donde las primeras tienen un papel dominante (Lpez, 2003). En el caso de los clusters y los distritos, lo ms comn es que exista una mezcla de relaciones de equidad y de dominancia entre las empresas que pueden ser morigeradas a partir de relaciones formales.

    Organizacin para el Desarrollo Industrial de las Naciones Unidas, por su sigla en ingls.8

    que las beneficia a travs de los efectos sinrgicos que surgen de la resolucin conjunta de problemas.

    Segn la Unido8 (2001, p. 9), una red empresarial es un grupo de empresas que colaboran en un proyecto de desarrollo conjunto, complementndose unas con otras y especializndose con el propsito de resolver proble-mas comunes, lograr eficiencia colectiva y conquistar mercados a los que no pueden acceder de manera in-dividual. Las redes empresariales y otros mecanismos de asociatividad referenciados en la literatura como: cluster (Porter, 1991 y 1999; Humprey, 1995; Schmitz, 1995; Buitelaar, 2001; Perdomo y Malaver, 2003; Na-varro, 2003), distritos industriales (Becattini, 1992, 2002; Nassimbeni, 2003; Belso-Martnez, 2006; Mc-Donald et l., 2006, Muscio, 2006) y sistemas o entor-nos locales (Camagni, 1991; citado por Yoguel et l., 2000) proporcionan a las empresas el acceso a servi-cios especializados de tecnologa, compra de insumos, promocin, comercializacin, diseo, procesos indus-triales, financiamiento y actividades en comn, facili-tando el surgimiento de economas de escala.

    Las formas de asociatividad mencionadas convergen hacia caractersticas comunes, a tal punto que los con-ceptos se utilizan indiscriminadamente para hacer referencia a los sistemas productivos; as por ejemplo para la OCDE (1999) los clusters pueden ser caracte-rizados como redes econmicas con fuertes vnculos entre firmas interdependientes en cadenas de produc-cin con valor agregado. Carbonara (2002) plantea que las redes inter-firmas han sido el principal agente de cambio en los distritos industriales y son el modelo de produccin distintivo de estos ambientes econmi-cos. Biggiero (2001) se refiere a los distritos indus-triales como hiper-redes. Sergenberger y Pyke (1991) citados por Helmsing (1999) definen los distritos in-dustriales como redes de pequeas industrias entre las que hay una divisin del trabajo logrando de esta ma-nera especializacin y eficiencia productiva. Becatti-ni (2002), aludiendo a los trabajos de Porter, plantea la proximidad conceptual entre el cluster y el distrito marshalliano, y menciona tambin a otros conceptos como afines: el rea sistema, el ambiente (milieu) in-novador. En los trabajos de la OCDE se observa una tendencia a utilizar de forma similar conceptos como sistemas de innovacin, redes empresariales y redes de produccin (OCDE, 1999a y b).

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    No obstante, en la literatura se plantean algunas suti-les diferencias, la Unido9 (2001) hace referencia a las redes empresariales horizontales y verticales donde las primeras estn compuestas por Pyme y las segundas se establecen a partir de relaciones entre una o ms empresas grandes con otras de menor tamao que ge-neralmente son sus proveedores. Los clusters los defi-ne como concentraciones geogrficas y sectoriales de empresas que producen y venden bienes relacionados o complementarios. Segn ellos, la principal diferen-cia est en que las redes horizontales tienen una ini-ciativa de negocio en comn (Unido, 2001, p. 18) y las redes verticales resaltan la colaboracin entre em-presas grandes y Pyme (Unido, 2001, p. 21). Pero am-bos aspectos tambin se sealan en la literatura sobre cluster y distritos industriales y otras nociones simi-lares (Pietrobelli y Olarte, 2002). Para la Unido, las redes empresariales pueden desarrollarse dentro o in-dependientemente de los clusters, aspecto que tambin es anotado por Lpez (2003); para este autor las redes empresariales estn constituidas por un pequeo n-mero de empresas.

    A pesar de las diferencias mencionadas, en general en la literatura se observa una tendencia ms generaliza-da a que los conceptos mencionados sean utilizados indistintamente para el estudio de los sistemas produc-tivos, inmersos en lo que algunos denominan una eco-noma en red (Pyhnen y Smedlund, 2004) y que por tanto la nocin de red empresarial comience a ser pre-dominante. Johannisson y Ramrez-Pasillas (2002, p. 298) plantean que las firmas operan no solo en redes de negocios, sino que tambin interactan con institu-ciones y organizaciones econmicas y sociales, aspecto ampliamente subrayado en la literatura que analiza los sistemas productivos desde los diferentes conceptos ya referenciados.

    Segn Lpez (2003), los objetivos principales de una red empresarial son:

    Elevar la competitividad y la rentabilidad de las empresas de la red.

    Inducir la especializacin de las empresas en algu-nas de las diferentes etapas del proceso productivo.

    Consolidar la presencia en el mercado de las em-presas que integran la red.

    Facilitar el acceso de las empresas a servicios que les resultan inaccesibles de manera individual.

    3. La dinmica de la empresa y las redes empresariales

    De acuerdo con Tracey y Clark (2003), el creciente predominio de las grandes corporaciones de Estados Unidos, integradas verticalmente alrededor de los aos veinte con estructuras jerrquicas elaboradas y formas de organizacin multi-divisional, fomentaron la creen-cia de que las pequeas firmas basadas en sus destrezas no eran relevantes en la sociedad industrial moderna porque ellas no disfrutaban de las economas de es-cala que s tenan las grandes firmas. Y no fue sino a partir del ltimo cuarto del siglo XX cuando la rigidez de las grandes firmas y los sucesos denominados eco-noma del conocimiento y la informacin en regiones como el Silicon Valley se hizo cada vez ms evidente, que economistas y cientficos sociales se preocuparon de los sistemas econmicos y del desempeo corpo-rativo, dentro de los que tomaron mayor significado e inters el desarrollo de pequeas firmas. Al mismo tiempo hubo un incremento considerable del nmero de pequeas firmas por todo el mundo desarrollado, y la introduccin del trmino cultura empresarial en las organizaciones. Lo anterior introdujo una nueva confianza en la capacidad de las pequeas empresas para contribuir a la regeneracin econmica (Tracey y Clark, 2003) de los sistemas productivos dentro de las regiones y pases.

    Por otro lado, Cabus y Vanhaverbeke (2006) plantean el rpido incremento de las redes entre agentes eco-nmicos, y que, en efecto, para mantenerse competi-tivas, las empresas han cambiado su organizacin, y las relaciones inter-firmas han tenido un considerable aumento durante los ltimos 25 aos. Nuevas formas de organizacin corporativa y nuevas estrategias de cooperativas entre productores, proveedores y clientes han remplazado las estructuras jerrquicas fordistas. Y agregan estos autores que en estas nuevas relaciones industriales la flexibilidad de la produccin y del tra-bajo comienza a ser un punto central de atencin, de tal forma que estos sistemas se caracterizan por una progresiva externalizacin de las estructuras de pro-duccin, dando lugar a que las cadenas de produccin funcionen como redes de empresas (Hinterhuber y Le-vin, 1994; Miles y Snow, 1995; Castells, 1996; Morgan, 1997, citados por Cabus y Vanhaverbeke, 2006).

    Respecto de lo anterior y observando otros fenmenos asociados al xito de las empresas y de las regiones,

    Cabe anotar que en este mismo documento la Unido hace referencia a 9 cluster de Pyme (SMEs cluster), lo que en cierta manera no marca una diferencia sustancial con la composicin planteada para las redes horizontales y verticales. De hecho un cluster o un distrito industrial u otro concepto similar puede ser interpretado como una red (Biggiero, 2001; OCDE, 1999a y b).

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    Eraydin y Armatli-Kroglu (2005) hacen referencia al inters que se indica en la literatura reciente sobre el desarrollo espacial y la geografa industrial en las que se muestran muchos sucesos identificados como dis-tritos industriales que estaban en regiones perifricas y semiperifricas desde tempranas dcadas, e indican que esta situacin ha creado un amplio inters para definir los factores de xito de los distritos y la forma como han alcanzado competitividad internacional, y citan ejemplos como los de Emilia Romagna, Baden Wrttemberg y Silicon Valley, adems de experiencias en Amrica Latina, Asia y frica. Y en una perspecti-va similar anota Messner (1996, p. 25) que el cambio del paradigma productivo que partiendo de la pro-duccin masiva estandarizada se ha orientado hacia la produccin flexible y el carcter interactivo de la innovacin, han aumentado claramente la importan-cia de las localizaciones industriales y de los espacios aglomerativos regionales para la competitividad de las empresas. En este escenario, y siguiendo a Yoguel et l. (2000), la competitividad emerge como un fen-meno sistmico, conceptualizacin que viene con la idea de que las ventajas comparativas pueden ser crea-das y, por tanto, tienen una naturaleza dinmica. En el paso de ventajas comparativas10 estticas a ventajas dinmicas, la tecnologa y el desarrollo de procesos de aprendizaje individual y colectivo concebidos como procesos interactivos de naturaleza social son facto-res principales para los sucesos econmicos de pases, organizaciones y regiones (Yoguel et l., 2000).

    Los sistemas productivos, tal y como se conocen hoy, implican, entonces, la concentracin de actividades comerciales, industriales, cientficas, tecnolgicas, fi-nancieras y urbanas dentro de espacios geogrficos claramente definidos, de tal manera que estos se cons-tituyen en escenarios propicios para las interrelaciones entre empresas e instituciones, que pueden incidir po-sitiva o negativamente en el comportamiento de una empresa en especfico (Carroll, 1993; Gibson, 2000); en cualquier caso se compromete la capacidad compe-titiva de la empresa (Drucker, 1984; Porter y Kramer, 2002, citados por Truo y Gual, 2005), en especial para las pequeas y medianas empresas, Pyme11, cuyas caractersticas las hacen ms vulnerables a un ambien-te exacerbadamente competitivo como el del momento actual, en particular en pases en vas de desarrollo.

    Dadas sus caractersticas, el mecanismo de conforma-cin de redes institucionales puede representar un pa-pel importante en la generacin de nuevas estrategias de poltica industrial para el desarrollo de la competi-tividad de las Pyme, ya que les facilitara el acceso a servicios tales como entrenamiento, difusin de tecno-logas y promocin de exportaciones. Todo ello ofrece-ra posibilidades que en general una empresa pequea no podra alcanzar por s sola, pudiendo combinar de esta manera las ventajas de su flexibilidad y tamao con las ventajas competitivas de las empresas grandes: acceso a tecnologas, capital financiero y mercados in-ternacionales. En efecto, en estos sistemas de redes in-ter-firmas, las grandes compaas tanto como las Pyme estn activamente combinadas en la cadena de valor, reconfigurando as los sistemas de negocios (Cabus y Vanhaverbeke, 2006).

    No obstante, las relaciones entre las empresas y sus am-bientes es complejo, dinmico y borroso; las empresas estn localizadas dentro de sistemas sociales, polticos y econmicos complejos que fomentan algunos tipos de accin y limitan otros (Tracey y Clark, 2003). Es-tos ambientes han puesto de manifiesto la importancia de trascender el anlisis meramente individual de las empresas y su comportamiento, en tanto que la efecti-vidad de la respuesta empresarial al entorno est ms all de las actividades llevadas a cabo por la organi-zacin individual, y como tal requiere considerar uni-dades de anlisis que incluyen a las empresas y otros

    La ventaja comparativa se da por la tenencia de recursos productivos dentro de una empresa que otras no poseen y que le permiten 10 producir un bien o servicio a menores costos que los competidores. Una ventaja competitiva es la capacidad que tiene la empresa para agregar valor a un bien o servicio; este valor es el que los compradores estn dispuestos a pagar ya sea por una oferta de precios ms bajos que los competidores por beneficios equivalentes o porque se ofrece un beneficio distintivo en el bien o servicio (Porter, 1995).

    En Colombia, el tamao de la empresa se establece segn el artculo 2 de la Ley 590 de 2000, modificado por la Ley 905 de 2004. 11 Los criterios son nmero de empleados y total de los activos de la empresa. La pequea empresa es aquella que posee entre 11 y 50 trabajadores, y activos totales entre 501 y menos 5.000 salarios mnimos mensuales legales vigentes. La mediana empresa es aquella que posee entre 51 y 200 trabajadores, y activos totales entre 5.001 y 30.000 salarios mnimos mensuales legales vigentes.

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    agentes interrelacionados (Yoguel et l., 2000), como las redes empresariales e institucionales independien-temente de la nocin que se asuma (distritos industria-les, cluster, cadenas, entornos o sistemas locales, etc.). En esta misma perspectiva, Eraydin y Armatli-Kroglu (2005) plantean que una idea bsica de la literatura sobre distritos industriales, cluster y aglomeraciones es que es el sistema productivo completo, ms que las fir-mas en s mismas, lo que debera ser considerado ante la dificultad de entender el desempeo diferenciado de los negocios.

    Estas unidades de anlisis tienen su origen en la no-cin de economas de aglomeracin, que engloba di-ferentes interpretaciones en lo que a configuraciones productivas se ha presentado en la historia econmi-ca, desde las teoras de la localizacin (Weber, 1909 citado por Toral, 2001), de la concentracin espacial, y de las economas de urbanizacin (Stonier y Hague, 1966; Richardson, 1978; Gonzlez y Cuervo, 1997; Al-tenburg, 2001) y posteriormente en las elaboraciones del concepto de cluster (Porter, 1991 y 1999; Humprey, 1995; Schmitz, 1995; Buitelaar, 2001; Perdomo y Mala-ver, 2003; Navarro, 2003; entre otros), ampliamente difundido a partir de la dcada de los noventa; en las concepciones neomarshallianas de los distritos indus-triales12 (Becattini, 1992, 2002; Garca et l., 2001; Saba, 2003; Nassimbeni, 2003; Belso-Martnez, 2006; McDonald et l., 2006; Muscio, 2006); en nociones como gobierno industrial (Borello, 1994; citado por Yoguel et l., 2000) y sistemas o entornos locales (Ca-magni, 1991; citado por Yoguel et l., 2000); as como en las ideas relacionadas con la integracin vertical en cadenas productivas; y ms recientemente en los con-ceptos de redes empresariales13, redes institucionales y redes de produccin (Yoguel et l., 2000).

    En todos los casos puede referenciarse una zona geo-grfica especfica, y dentro de ella una concentracin de empresas cuyas relaciones aprovechan externali-dades a la firma y constituyen elementos favorables para lograr economas de escala (Banco Interameri-cano de Desarrollo, 1966) y menores costos transac-cionales (Coase, 1994) producto de esas relaciones. De acuerdo con Van Oort (2004) citado por Eraydin y Armatli-Kroglu (2005), en todos los modelos for-

    males de concentraciones industriales se asume que los retornos incrementales, que han sido la nocin cla-ve para entender la nueva teora del crecimiento, son el resultado de las ventajas dinmicas y acumulativas de la proximidad espacial. As mismo y producto de la aglomeracin econmica, los estudios de la geogra-fa industrial se han centrado en externalidades como: la existencia de mercados laborales especializados, la ocurrencia de desbordamientos (spillovers) de conoci-miento y tecnologa entre las empresas localizadas y la emergencia de negocios complementarios (Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; Novick y Carrillo, 2007), que son extensamente aprovechados por las empresas para lograr mayores fuentes de ventaja competitiva (Porter, 1991, 1995 y 1999).

    Las economas de aglomeracin presentan dos clasi-ficaciones (Richardson, 1978). La primera tiene un enfoque empresarial y de produccin donde se apro-vechan las economas internas de escala partiendo del tamao ptimo de la planta, las economas de localiza-cin que proveen un conjunto de externalidades pro-ducto de la concentracin de empresas de un mismo tipo de industria, y las economas de urbanizacin de acuerdo con el grado en que se desarrolle la actividad econmica de una zona especfica. La segunda clasifi-cacin presenta un enfoque urbano y de consumo, que incluye economas del hogar, de la actividad comercial y social.

    Adems de la clasificacin presentada, tambin se pue-den ver dos tipos de economas de aglomeracin (Bece-rra, 2005 y 2006; Becerra y Naranjo, 2007)14: uno que

    Marshall (1957) introduce el concepto de distrito industrial en su libro 12 Principios de economa, que fue publicado en su versin ori-ginal en 1890.

    Si bien es comn analizar los 13 clusters, las cadenas productivas y otras formas de aglomeracin empresarial, sin aludir explcita-mente a la nocin de red, en el presente trabajo se asume que estas formas de aglomeracin empresarial tienen los componentes que definen una red, esto es, nodos y relaciones, por lo que el tratamiento que aqu se les dar estar inmerso en el concepto de red empresarial.

    Conviene comentar que la diferenciacin de los dos tipos de economas de aglomeracin que aqu se hace no implica una contra-14 posicin entre ellas; por el contrario, la percepcin emprica de los sistemas productivos muestran la coexistencia de unos y otros en la distintas regiones del mundo.

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    se considera, est fundamentado en la concentracin del capital y la riqueza, dentro del cual se agrupan, de manera vertical u horizontal o en ambos sentidos, un conjunto de empresas bajo la tutela de una firma, y que no en pocas ocasiones trascienden los lmites territo-riales de un pas (Palomeque, 1962). Ejemplo de estas lo constituyen los konzern (holding), consortium, pool, cartel, trust, etc. Y el otro tipo, enmarcado en la nocin de redes empresariales, que est fundamentado en la desconcentracin del capital y la riqueza, incluye los clusters, los distritos industriales, las cadenas produc-tivas, etc., que de igual manera agrupan un conjunto de empresas, pero que a diferencia del primero, poseen independencia de firma15.

    En ambas formas de economas de aglomeracin hay un aprovechamiento de las economas externas sur-gidas del cmulo de empresas y de las relaciones pro-pias que se establecen entre ellas (Becerra y Naranjo, 2007). En el caso de la relacin con los mercados, di-fieren sustancialmente; en las primeras hay, al igual que con el capital, una fuerte tendencia a concentrar el mercado y por esta va a suprimir la competencia; en las segundas, se da una desconcentracin del mercado y una coexistencia de la competencia con la coopera-cin empresarial (Saba, 2003). Este ltimo aspecto es de especial relevancia en las redes empresariales, en tanto que los integrantes de estas, en general, tienen igualdad o equidad de condiciones dentro de la red (responsabilidades, iniciativas, independencia, etc.) adems de obtener una serie de beneficios producto de las interrelaciones con los otros agentes econmicos que configuran la red de interaccin. A este respecto, Hotz-Hart (2000, p. 434), hace un resumen cuidadoso de los beneficios de las redes empresariales16:

    Mayor acceso a la informacin, conocimiento, destre-1. zas y experiencia. En particular, las redes proveen oportunidades para el aprendizaje acerca de nuevas formas de operacin y nuevas tecnologas, y pueden reducir los costos y el tiempo de desarrollo de nue-vos productos y procesos de produccin.

    Mejora en los vnculos y cooperacin entre los miem-2. bros de la red, particularmente entre usuarios y pro-veedores. La competencia de las firmas destacadas dentro de una red puede servir como gua de com-paracin (benchmark) para otros. Las redes pue-

    den animar el aprendizaje interactivo, la sinergia y complementariedad entre grupos especializados a travs de las firmas participantes en reas como di-seo, produccin, mercado y finanzas.

    Mejora en la capacidad de respuesta.3. Las redes per-miten a las firmas participantes responder ms r-pido y anticiparse a las cambiantes circunstancias competitivas, y aprender de nuevas formas de tec-nologa.

    Reducir el riesgo, el peligro moral, los costos de tran-4. saccin y de informacin. Las redes de firmas con ventajas complementarias pueden compartir recur-sos y reducir costos. Los riesgos tambin pueden ser evaluados y compartidos, y de esta manera tomar decisiones con mayor informacin y reducir costos adicionales.

    Mejora la confianza y la cohesin social.5. Las alian-zas fomentan valores, metas y normas comparti-das y formas de trabajo que facilitan la solucin de problemas, acciones colectivas y comportamiento innovador, con frecuencia a travs de una combi-nacin compleja de competencia y cooperacin.

    4. Tipologa de redes empresariales

    Un aspecto que marca una aparente diferencia entre los conceptos de economas de aglomeracin y redes est en el hecho de que las primeras aluden a un lugar espacial con lmites relativamente definidos, mientras que las redes hacen alusin a nodos y relaciones en-tre los nodos con el fin de facilitar la transacciones entre estos (Johansson y Quigley, 2004) sin distinguir lmites espaciales, lo que implica que las redes, como unidades de anlisis, se pueden ver desde la perspec-tiva de una regin especfica (en este caso la red es tambin una aglomeracin) o redes cuyos lmites te-rritoriales se trascienden (Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005). En realidad los conceptos tienen ms elementos en comn que diferentes, al punto que, de acuerdo con Johansson y Quigley (2004), resultan complementarios en tanto que proveen beneficios a los participantes en un determinado mercado; de hecho, las redes entre ac-tores econmicos dispersos sobre un espacio pueden actuar como un sustituto para las aglomeraciones de actores en un punto singular, proveyendo algunos o to-

    En este caso la nocin de firma est asociado a la definicin de economa de la propiedad privada (Maskell, 2001), en el que una 15 firma es un conjunto de produccin que resume las posibilidades de transformacin de productos mediante sucesos en el tiempo y en un lugar diferenciado de otro, cada firma se corresponde, generalmente con uno o un grupo de propietarios.

    Hotz-Harts concluye sobre estos objetivos de las redes a partir del anlisis de investigaciones empricas y casos estudiados por 16 otros autores en diferentes lugares del mundo. Existe tambin una vasta literatura que da cuenta de las ventajas de las redes (Jensen, 1996; Feldman y Audretsch, 1999; Feser y Bergman, 2000; Nassimbeni, 2003; Alonso-villar et l., 2004; Power y Lundmark, 2004; Pyhnen y Smedlund, 2004; Blasio y Di Addario, 2005; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; Bell, 2005; Hervs y Dalmau, 2006; Novick y Carrillo, 2007).

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    dos los servicios adquiridos y los incrementos en pro-ductividad derivados de la aglomeracin (Johansson y Quigley, 2004).

    La perspectiva anterior sugiere una primera taxono-ma de redes empresariales basada en los lmites den-tro de los cuales ellas operan; esto es, redes globales y redes locales. Novick y Carrillo (2007) plantean que las redes pueden ser estudiadas desde una perspectiva nacional, regional o internacional. Las redes globales estaran configuradas por nodos interrelacionados que operan en distintos lugares geogrficos, y por tanto no estn directamente influidas por las condiciones de un ambiente especfico (instituciones de apoyo, infraes-tructura cientfico-tecnolgica, mercado laboral espe-cializado, menores costos de transaccin, entre otras); para ellas la proximidad espacial no es un aspecto de-terminante en la cooperacin entre empresas, y esta cooperacin puede ser sostenida y operacionalizada a travs de largas distancias (Revilla-Dez, 2002). Una explicacin para la existencia de tales redes puede dar-se, en un sentido, por el hecho de que muchas em-presas, segn McCann (1995), tienen pocos vnculos comerciales o no los tienen con otras firmas locales en la misma industria; y en otro sentido, porque muchas empresas tienen pocos vnculos o no los tienen con otras firmas en una misma rea urbana o ni siquiera en la misma regin geogrfica en la cual ellas estn localizadas17. Para Eraydin y y Armatli-Kroglu (2005) hay diferentes redes globales que pueden iniciar con esfuerzos conjuntos para la innovacin y el desarrollo; estas redes estn formadas por proveedores y clientes (cadenas de valor), redes de servicios globales, redes internacionales de I&D de excelencia acadmica y re-des de transferencia de conocimientos.

    Ejemplos de esta clase de redes son las denominadas cadenas de abastecimiento o suministro que se defi-nen como la red de organizaciones que se hallan implicadas a travs de una serie de eslabones, corrien-te arriba y corriente abajo en los diferentes procesos y actividades que producen valor en forma de productos y servicios depositados en las manos del consumidor

    ltimo (Christopher, 1994, citado por Sarache et l., 200818), y las redes de produccin (Yoguel et l., 2000), compuestas por un grupo de agentes que establecen continuas relaciones entre ellos a lo largo del tiempo. Segn Yoguel et l., las relaciones pueden resultar en la auto-coordinacin de agentes autnomos o en la presencia de uno o ms agentes coordinadores. Igual-mente especifica que para tales redes no se requiere la proximidad geogrfica de los agentes componentes19, entre otras caractersticas. Tambin se incluyen en este tipo de redes las denominadas cadenas productivas o cadenas de produccin, que hacen referencia a cade-nas de compaas interrelacionadas que atraviesan los lmites tradicionales de las actividades primarias, se-cundarias y terciarias, y ligan las compaas de cada una de estas reas por su contribucin al producto fi-nal (Marceu, 1994, p. 7, citado por Navarro, 2003).

    Las redes locales, perspectiva relevante en este traba-jo20, implican la definicin del espacio geogrfico (lo-calidad) en que actan las empresas componentes de la red, independientemente de si las relaciones son verti-cales u horizontales o de ambos tipos, pero que adems incluye las relaciones con otros agentes del desarrollo situados en la misma localidad y que generan un am-biente favorable (innovacin y desarrollo tecnolgi-co, flujos de conocimiento, intercambio de servicios e informacin, etc.) para la competitividad empresa-rial, aspecto destacado en la vasta literatura sobre clus-ter y distritos industriales (Porter, 1991, 1995 y 1999; Jensen, 1996; Messner, 1996; Carrie, 1999; Schmitz y Nadvi, 1999; Becattini, 2002; Navarro, 2003; Canils y Romijn, 2003; Oliveira y Fensterseifer, 2003; Beaudry y Breschi, 2003; Perdomo y Malaver, 2003; Viedma, 2004; Khan y Ghani, 2004; Lai et l., 2005; Feldman et l., 2005; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; Hervas y Dalmau, 2006; Mesquita y Lazzarini, 2006; Novick y Carrillo, 2007, entre muchos otros). El incremento en las relaciones inter-firmas es consecuencia de la cre-ciente popularidad de las redes de empresas. Ms in-teracciones econmicas, vnculos materiales, as como flujos de informacin estn afectados por la proximi-

    McCann (1995) hace estos planteamientos para mostrar un efecto paradjico en las relaciones empresariales, en el que adems 17 destaca cmo estos elementos cuestionan algunos argumentos de las economas de localizacin y de las economas de urbanizacin en lugares donde pueden existir cluster fuertes en un determinado sector industrial o en cluster de varias actividades econmicas concentradas en una regin.

    Una descripcin relacionada con las cadenas de suministro puede verse en el captulo V, Logstica y gestin de la cadena de abas-18 tecimiento, escrito por este autor, en F. Becerra, (Ed. y Comp.) (2008), Gestin de la produccin: una aproximacin conceptual.

    Esta caracterstica es planteada por el autor para diferenciarla del concepto de 19 cluster industrial, que implica concentracin espacial de los agentes econmicos interactuando en un nivel local y facilitando el desarrollo de eficiencia colectiva (Yoguel et l., 2000).

    La referencia explcita a la importancia de las redes locales como centro del presente trabajo, no desconoce la importancia en las 20 relaciones que se tienen con otros agentes y empresas por fuera de los lmites de la localidad. De hecho podra plantearse que hoy no existen redes locales sin vnculos a redes globales: las caractersticas del mercado actual lo exigen. Esto es recabado en toda la lite-ratura referenciada en este documento.

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    dad de los actores econmicos (Cabus y Vanhaverbe-ke, 2006).

    En este contexto, las redes empresariales tienen distin-tas configuraciones:

    las que obedecen a los intereses de sus integrantes y de la red;

    las que estn determinadas por el rol que desempe-a cada integrante de la red;

    las que estn definidas por el papel que cumplen dentro del sistema de valor (Porter, 1991)21.

    En el primer caso, el inters puede estar centrado en objetivos como: aprovisionamiento de insumos, ven-ta de productos y servicios, promocin conjunta y de-manda de servicios especializados (Lpez, 2003).

    En el segundo caso, se pueden observar tres tipos de redes (Lpez, 2003): las denominadas All-Ring No Core donde el papel de los integrantes es equilibra-do; en ellas se establecen relaciones de colaboracin estables y se genera una rotacin del liderazgo en los distintos proyectos. Las Core-Ring Coordinating, don-de una de las empresas adquiere el papel de lder pero no puede prescindir de los dems integrantes; en ellas el lder tiende a asumir una posicin privilegiada en la red (centralidad). Y las Core-Ring Leading, donde hay una marcada jerarqua por parte de una empre-sa; el lder independiente de los dems nodos puede modificar arbitrariamente la estructura de la red, de-cidiendo conectar o desconectar a cualquiera de los dems sujetos. El nmero de conexiones de la red es mnimo, mientras que el lder alcanza un nivel muy alto de centralidad.

    En el tercer caso se acude al nivel y tipo de relacio-namiento que existe entre las empresas localizadas en una regin especfica; aqu las redes, como unidad de anlisis, tienen como referencia el nivel de aglomera-cin de empresas, y el volumen y clase de empresas in-volucradas en la red. Desde esta perspectiva se tienen dos niveles de redes: en la primera se incluyen las redes verticales y horizontales, que en general involucran un nmero pequeo de empresas alrededor de un objeti-vo comn (Lpez, 2003; UNDP, 1999); y en la segun-da se encuentran los distritos industriales y los clusters industriales, que implican en general un alto nivel de aglomeracin empresarial con vnculos que relacionan a las empresas entre s y a estas con otros agentes gu-bernamentales y no gubernamentales en funcin de la

    competitividad empresarial y regional (Porter, 1991, 1995, 1999; Messner, 1996; Schmitz y Nadvi, 1999; Becattini, 2002; Navarro, 2003; Canils y Romijn, 2003; Beaudry y Breschi, 2003; Perdomo y Malaver, 2003; Khan y Ghani, 2004; Lai et l., 2005; Feldman et l., 2005; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; Hervas y Dalmau, 2006; Novick y Carrillo, 2007, entre mu-chos otros).

    Para Cabus y Vanhaverbeke (2006), el tipo de redes que emergen dependen de factores especficos como la actividad, el entorno econmico y poltico, y el gra-do de competencia. Estos fenmenos inducen a pen-sar en un carcter evolutivo de las redes empresariales dado que el desarrollo toma formas diferentes en cada momento histrico, tambin la organizacin es-pacial de la produccin cambia y se transforma, y las estrategias territoriales de las empresas y las estrategias econmicas de las ciudades y regiones condicionan es-tos cambios, y por tanto, son tambin responsables del surgimiento y transformacin de los clusters y milieus (Vsquez-Barquero, 2006, p. 77). Biggiero (2001) al referirse a los distritos industriales plantea que son sis-temas autoorganizados, caracterizados por crear un orden en el lmite del caos, muestran positivas y nega-tivas externalidades, son altamente sensibles a condi-ciones iniciales, y por tanto tienen un comportamiento impredecible. Minguzzi y Passaro (2000), al observar las redes empresariales en el sur de Italia, establecen que el ambiente influye fuertemente en la cultura em-presarial y que en el caso de las pequeas industrias una dificultad comn es la apertura al cambio, lo que incide en la actitud para adaptarse a la organizacin en red.

    4.1 Redes horizontales y verticales

    Estas redes generalmente estn constituidas por un nmero reducido de empresas. Para Lpez (2003), la operacin eficiente de una red depende del nmero de integrantes; no obstante sobre este aspecto no se puede tener un acuerdo generalizado. Segn este au-tor, una red empresarial debe estar constituida por un grupo limitado y claramente definido de empresas independientes, que colaboran para alcanzar objetivos comunes de mediano y largo plazo, orientados hacia el desarrollo de la competitividad de los distintos partici-pantes. De acuerdo con el mismo autor, en una red de ms de 20 empresas se adquiere poder de negociacin; sin embargo, podra ser difcil de gestionar el consen-

    Porter (1995) presenta dos conceptos que eventualmente pueden confundirse: la cadena de valor y el sistema de valor; el prime-21 ro hace referencia a las actividades funcionales dentro de la empresa o unidad productiva donde diferencia actividades primarias y de apoyo. El segundo hace referencia a un entorno mayor en el que existen proveedores de insumos, entidades de apoyo, empresas ncleo del sistema, canales de distribucin en que cada uno de ellos tiene su propia cadena de valor. En otras palabras, el sistema de valor es un conjunto de cadenas de valor interconectadas.

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    so entre todos los empresarios que la integran. Segn su experiencia en Mxico, Venezuela, Colombia, Per, Nicaragua y El Salvador, la de Marco Dini en Chile, Nicaragua y Mxico, y la de Maeso en Uruguay, Brasil y Per, se permite sealar que las redes integradas por ms o menos diez empresarios tienen un buen poder de negociacin y son relativamente giles en su toma de decisiones. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo distingue entre redes horizontales y redes verticales (UNDP, 1999).

    Redes horizontalesUna modalidad de cooperacin entre empresas indepen-dientes, de tamao comparable, que producen un mismo tipo de bien y deciden agruparse para comercializarlo, ad-quirir insumos en conjunto, coinvertir o dotarse de ser-vicios comunes; o por empresas que se organizan para producir en conjunto un nico producto, especializn-dose cada una de ellas en las distintas partes y compo-nentes del mismo. En general estas redes estn orientadas principalmente a la bsqueda de economas de escala y de mayor poder de negociacin, y suelen estar compuestas por grupos de micro, pequeas y medianas empresas de la misma localidad y del mismo sector.

    Este grupo de empresas ofrecen el mismo bien o servi-cio, las cuales cooperan entre s en algunas activida-des, pero compiten entre s en un mismo mercado; es decir, ocupan el mismo lugar en la cadena productiva.

    Redes verticalesAquellas modalidades de cooperacin entre empresas que se sitan en posiciones distintas y consecutivas en la ca-dena productiva y se asocian para alcanzar ventajas com-petitivas que no podran obtener de forma individual. El ejemplo ms tpico es el establecimiento de una relacin de proveedura estratgica y estable entre varias empresas clientes y sus redes de micro, pequeas y medianas sub-contratistas o proveedoras.

    Es el caso tpico de desarrollo de proveedores a travs de la alianza entre empresas grandes y pequeas, en el que las pequeas son proveedores con cierto nivel de especializacin en productos manufacturados requeri-dos para los bienes fabricados por las grandes. En este esquema, las empresas grandes se dedican a aquellas actividades para las que son mejores y les resultan ms rentables, y las empresas pequeas aseguran una cuo-ta de produccin vendida de forma segura, lo que les permitir sostenerse en el corto plazo y crecer en el largo plazo.

    4.2 Distritos industriales y cluster industriales

    Dentro de la literatura, en la que se presta especial atencin a estos dos conceptos, dada su importancia en el desarrollo y crecimiento econmico de las em-presas y de las regiones, en realidad no parece haber un consenso sobre las diferencias entre uno y otro (por ejemplo, Humprey, 1995; Schmitz, 1999; Navarro, 2003; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; McDonald et l., 2006; Hervas y Dalmau, 2006; Belso-Martnez, 2006; Vsquez-Barquero, 2006). Becattini (2002, p. 23), haciendo referencia a los trabajos de Porter y sus discpulos, manifiesta: Porter insiste y profundiza cada vez ms su concepto de cluster de empresas has-ta hacerlo muy cercano al de distrito industrial mar-shalliano. Y agrega ms adelante Una vez reconocida la utilidad heurstica del concepto de distrito indus-trial y, por tanto, la existencia emprica de bloques de fenmenos que se pueden comprender a travs de ese instrumento cosa que ocurre, grosso modo, a princi-pios de los noventa se empiezan a dar definiciones y caracterizaciones de distrito ms o menos afines: el rea sistema, el milieu innovateur, el cluster, etc. (Be-cattini, 2002, p. 24).

    Ambos conceptos aluden a un ambiente en el que las empresas se favorecen de la proximidad espacial, la construccin y consolidacin de relaciones con empre-sas e instituciones gubernamentales y no gubernamen-tales, el desarrollo de habilidades para la innovacin, la especializacin, entre otras. Esta perspectiva tiene su origen en las economas basadas en la territoriali-dad propuestas por Marshall, especficamente en la nocin de distritos industriales (Marshall, 1957); se-gn l existen tres fuerzas de interaccin en los proce-sos de localizacin (Krugman, 1991; Fujita, Krugman y Venables, 1999; citados por Cabus y Vanhaverbeke, 2006). Primero, una industria concentrada geogrfi-camente es soporte para proveedores locales especia-lizados de insumos. Segundo, una concentracin de firmas emplea trabajadores del mismo tipo agrupados en un mercado laboral. Tercero, la proximidad geogr-fica facilita la difusin de informacin, que produce como resultado efectos de derramamiento (spillover) de conocimientos.

    Distritos industriales

    La nocin de distrito industrial tiene origen en el pen-samiento de Alfred Marshall22, quien plantea que los rendimientos crecientes en la industria podran obte-nerse por dos vas (Marshall, 1957): la concentracin

    Becattini (2002) hace una sntesis del pensamiento de Marshall, y de la forma como este economista construye su concepcin del 22 funcionamiento de la economa en regiones de Inglaterra, especialmente sus observaciones sobre la cuchillera de Sheffield y el me-tal de Birmingham.

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    de la produccin en grandes empresas verticalmente integradas (esto es, con todas las fases de produccin de un bien) o por la concentracin en un determinado territorio de un gran nmero de empresas pequeas (muchas de ellas de carcter familiar) que producen un mismo tipo de bien y que cooperan y compiten entre s, o que se especializan en fases del proceso productivo del bien final. La nocin de distrito industrial es reto-mada en la dcada de los sesenta del siglo pasado. En este sentido Becattini (2002, p. 18) observa que

    Algunos economistas italianos perciben algunos cu-riosos fenmenos: a) en ciertas zonas del pas, donde la gran empresa, pblica y privada, que opera en sectores de alta intensidad de capital y/o alta tecnologa, muestra cla-ros signos de declive, se produce un extrao florecimien-to de pequeas empresas manufactureras, a cuyo impulso crecen la renta, el empleo y las exportaciones en la zona; b) las pequeas empresas de estas aglomeraciones se pre-sentan tcnicamente preparadas para el trabajo que rea-lizan, en un nivel parecido al de las grandes empresas de la competencia.

    Pyke y Sengenberger (1992), citados por Belso-Mart-nez (2006), describen los principales rasgos de los dis-tritos industriales como la existencia de fuertes redes de pequeas firmas, donde a travs de la especializa-cin y la subcontratacin, las firmas comparten entre ellas mismas el trabajo requerido para la manufactura de bienes particulares y promueven la eficiencia y las habilidades colectivas. Adems, los distritos industria-les promueven la confianza y cooperacin, lo que ex-plica el dinamismo empresarial y la flexibilidad.

    Becattini (1992) describe el distrito industrial como una entidad territorial y social caracterizada por la presencia activa de una comunidad de personas y un grupo de firmas en una rea o zona natural e hist-ricamente delimitada. La comunidad de personas po-see un sistema homogneo de valores y perspectivas. Y, respecto del grupo de firmas localizadas dentro del distrito, cada una es especializada en diferentes fases de la manufactura en la que puede haber una industria dominante o una serie de industrias complementarias. Esta divisin del trabajo no es solamente vertical sino tambin horizontal, abarca una combinacin de coo-peracin vertical y competencia horizontal. Estas rela-ciones de cooperacin estn basadas en los principios de reciprocidad y clima de confianza.

    Para Muscio (2006), las firmas en los distritos com-parten antecedentes sociales y culturales comunes, los cuales facilitan la complementariedad entre activida-des y la cooperacin entre actores locales. Las firmas estn frecuentemente especializadas en etapas parti-culares del proceso de produccin y estn envueltas en procesos de divisin del trabajo. El autor plantea,

    adems, que las redes verticales y horizontales conti-nuas y estables entre las firmas locales generan una mezcla compleja de confianza, de lenguaje compartido y hbitos que contribuyen a la creacin de redes semi-formales. Estas redes proveen a cada firma individual la posibilidad de llevar a cabo operaciones complejas en las que el capital propio, las habilidades tcnicas y las capacidades empresariales y de organizacin no son suficientes para realizar tales operaciones en for-ma individual. Y finaliza diciendo que las firmas en los distritos se benefician de un crculo virtuoso de coope-racin y competencia entre agentes locales que gene-ran externalidades positivas y derrames (spillovers) de conocimiento localizado.

    Nassimbeni (2003, p. 153) resume las principales caractersticas de los distritos industriales en las si-guientes:

    Gran proporcin de pequeas y muy pequeas fir-mas.

    Aglomeracin de firmas en una localizacin geo-grfica.

    Las firmas estn comprometidas en varias etapas de la produccin (intensa especializacin).

    Densas redes de naturaleza social y econmica.

    Combinacin de competencia y cooperacin entre firmas.

    Rpida difusin de informacin informal, nuevas ideas, experiencias y know-how.

    Adaptabilidad y flexibilidad.

    Cluster industriales

    El estudio de las redes empresariales, teniendo como perspectiva al cluster trasciende el enfoque tradicional basado en los sectores econmicos y en la reduccin de costos derivados bsicamente de la proximidad de factores de produccin y de los mercados. Porter (1999, p. 2) afirma que: En la actualidad, la naturaleza de las economas de aglomeracin ha cambiado, lo mismo que su nivel, que es el de los cmulos (clusters), no el de los sectores definidos de manera restrictiva.

    El concepto cluster hace referencia a un conjunto de empresas que, por su actividad especializada, confor-man un complejo integrado, cuyo dinamismo est ca-racterizado por la retroalimentacin constante de un crculo virtuoso generador de innovacin (Karlsson, 1997; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; McDonald et l., 2006, y muchos otros). Becerra y Naranjo (2007) plantean que los clusters son un ambiente favorable para los procesos de innovacin, que conducen a: in-

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    crementar las capacidades de innovacin y desarrollo tecnolgico en las empresas y aumentar su productivi-dad y competitividad; a la formacin de nuevas empre-sas; y a acrecentar los flujos entre las empresas y otros agentes del desarrollo econmico dentro de las regio-nes (Khan y Ghani, 2004; Canils y Romijn, 2003; Lai et l., 2005).

    Segn Porter (1991, 1999), los clusters agrupan a una amplia gama de industrias y otras entidades relaciona-das; incluyen a proveedores de insumos crticos (como componentes, maquinaria y servicios), y de infraes-tructura especializada. Con frecuencia tambin se ex-tienden hasta canales y clientes, y lateralmente hasta fabricantes de productos complementarios y empresas que operan en industrias relacionadas por sus habili-dades, tecnologas o insumos comunes. Tambin se consideran organismos gubernamentales y otras ins-tituciones como universidades, agencias encargadas de fijar normas, centros de estudio, proveedores de capa-citacin y asociaciones de comercio que proveen en-trenamiento, educacin, informacin, investigacin y apoyo tcnico.

    Siguiendo con Porter (1999), citado por Becerra y Na-ranjo (2007), dado el agrupamiento surgen fenmenos como: el apoyo entre empresas, expresado en rela-ciones verticales y horizontales; en la rivalidad entre competidores que promueve los enfoques de I&D y fa-cilita la introduccin de nuevas estrategias y tcnicas; en la fluidez y rpida difusin de la informacin y las innovaciones a travs de los canales de proveedores o de compradores que tienen contactos con mltiples competidores.

    De acuerdo con Becerra y Naranjo (2007), el conteni-do del trmino cluster incluye tres aspectos conceptua-les que estn sujetos a la especificidad de cada espacio econmico, dentro de un periodo de tiempo determi-nado y en un contexto histrico particular:

    En un espacio y periodo especfico: se refiere a for-1. mas de actividad econmica concentradas a nivel regional dentro de sectores relacionados, usualmen-te conectados a la infraestructura de conocimiento (institutos de investigacin, universidades, etc.).

    En un espacio y periodo especfico: hace referencia 2. a cadenas de produccin verticales, sectores muy restringidos en los cuales hay fases adyacentes del proceso de produccin, que forman el ncleo de los clusters (por ejemplo, la cadena proveedor-fabrican-

    te-distribuidor-cliente). Las redes que rodean a las empresas ncleo tambin se incluyen en este segun-do aspecto.

    En un espacio y periodo especfico: se refiere a in-3. dustrias definidas a un alto nivel de agregacin (por ejemplo un cluster textil) o cluster de sectores a un nivel mucho ms alto de agregacin (como un clus-ter de la cadena productiva fibras-textil-confec-cin). Estos cluster se denominan habitualmente mega-cluster.

    La Comisin Econmica para Amrica Latina, Cepal, considera que parte fundamental de los clusters lo constituyen las esferas de influencia o de soporte es-pecializado, tales como investigacin y desarrollo, fi-nanzas, servicios profesionales; otras denominadas infraestructura blanda compuestas por las institu-ciones de apoyo como asociaciones locales, gobierno, instituciones financieras, instituciones de educacin, las cuales proporcionan conocimiento e informacin, recursos financieros, etc. Por ltimo se encuentra la infraestructura dura compuesta por las carreteras, puertos, aeropuertos, etc. La existencia de un cluster dentro de una regin presenta las siguientes ventajas (Cmara de Comercio de Medelln23, citado por Ram-rez y Becerra, 2001):

    Ayuda a regionalizar la poltica industrial y tecno-lgica del pas en funcin de las potencialidades de cada regin.

    Contribuye a construir una visin conjunta que mejora la posicin competitiva de la industria en los mercados.

    En Antioquia, y especialmente en Medelln, se abord el tema de los 23 clusters industriales, a partir de los estudios de Monitor Com-pany en 1994, en el que bsicamente se identificaron 16 cluster en el pas y en las regiones. A partir de all se comenzaron a desarrollar algunas estrategias en el desarrollo de cluster en esta y otras ciudades del pas. En el caso de Medelln han tenido especial atencin los clusters textil-confeccin, artes grficas, jugos de frutas, bienes de capital, flores y petroqumicos.

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    Fortalece la plataforma competitiva en trminos de infraestructura productiva, social, servicios y logstica.

    Al estar organizado alrededor de clientes y usos fi-nales, enfoca mejor las necesidades de los consu-midores (locales y externos), que son el eje de la ventaja competitiva.

    Crea mercados ms eficientes con menores costos transaccionales (costos de bsqueda) para todos los jugadores del cluster, y por ello dinamiza la produc-tividad.

    Ayuda a entender la especializacin de los munici-pios en el contexto del desarrollo territorial.

    conclusiones

    Las condiciones actuales de la economa y el comer-cio mundial ejercen una fuerte presin para la com-petitividad de las empresas. Este contexto ha dado origen a la renovada importancia de la actuacin de estas en relacin con otras empresas y agentes (Tikka-nen y Parvinen, 2006) para promover la innovacin, el desarrollo tecnolgico, la estrategia empresarial y, por esta va, contribuir al desarrollo econmico y social. La competitividad de la empresa est ligada a las rela-ciones que tiene con otras empresas y organizaciones del entorno. El conjunto de las relaciones y sus acto-res (nodos) son el fundamento de las redes (Snijders, 2003). Esta lgica de pensamiento permite establecer que las distintas formas de asociatividad empresarial (cluster, distrito industrial, cadenas de produccin, en-tre otros) que se presentan en las localidades y regiones constituyen en esencia redes empresariales. El territo-rio donde las empresas se aglomeran se concibe como un ambiente favorable para el surgimiento y sosteni-miento de redes de diferente naturaleza: sociales, de empresas, de conocimiento, etc. y de estas se presume que son un mecanismo de orden fundamental para en-tender el comportamiento de las empresas.

    De la literatura revisada se ha podido establecer que las redes empresariales surgen por la interaccin que se da entre las unidades productivas que pueden en-contrarse dentro de un territorio (redes locales/regio-nales/nacionales) o trascender los lmites de este (redes globales/internacionales). En este trabajo se ha hecho nfasis en las redes empresariales locales y regionales dada la reconocida influencia que tienen en el positivo desempeo de las unidades productivas, de las redes como un todo y del territorio en el cual se albergan (Walker et l., 1997; Cervilla y Lorenzo, 2000; Yo-guel et l., 2000, Unido, 2001; Tracey y Clark, 2003; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005). Las redes empresa-riales localizadas se pueden clasificar segn el objeti-

    vo que las convoque, por el papel que desempean los integrantes dentro de la red (Lpez, 2003), y por el papel que cumplen dentro del sistema de valor (Por-ter, 1991). En esta ltima clasificacin se distinguen las redes horizontales y verticales caracterizadas por un pequeo nmero de empresas, los clusters y distri-tos industriales que implican en general un alto nivel de aglomeracin empresarial con vnculos que relacio-nan a las empresas entre s y a estas con otros agentes gubernamentales y no gubernamentales en funcin de la competitividad empresarial y regional (Porter, 1991, 1995, 1999; Messner, 1996; Schmitz y Nadvi, 1999; Becattini, 2002; Navarro, 2003; Canils y Romijn, 2003; Beaudry y Breschi, 2003; Perdomo y Malaver, 2003; Khan y Ghani, 2004; Lai et l., 2005; Feldman et l., 2005; Eraydin y Armatli-Kroglu, 2005; Hervas y Dalmau, 2006; Novick y Carrillo, 2007) y en los que se combinan relaciones de tipo vertical y horizontal simultneamente.

    Cabe reiterar la importancia de entender que el an-lisis hoy se centra ms en los sistemas productivos completos y no en las empresas individuales, y son justamente las redes empresariales como unidades de anlisis las que reciben mayor atencin en la litera-tura. A este respecto el cluster y el distrito industrial son las redes empresariales de carcter regional o lo-cal a las que ms se les ha prestado atencin en las tres ltimas dcadas, no solo en crculos acadmicos, sino que se extiende a gobiernos y organismos inter-nacionales (OCDE, Banco Mundial, Unido, Unctad, Cepal, OIT); y que por tanto la poltica de cluster, que sustituye a las tradicionales polticas sectoriales, se haya convertido en la piedra angular de la pol-tica industrial en muchos pases (Roelandt y Den Hertog, 1998, p. 23) (Navarro, 2003, p. 22). De igual manera ha cobrado vigencia el estudio de la redes ho-rizontales y verticales como mecanismos giles para el fortalecimiento de las empresas, particularmente de las Pyme (UNDP, 1999; Unido, 2001; Lpez, 2003), dado que este tipo de redes implican el reconocimien-to fcil y rpido de objetivos comunes, en el caso de las redes horizontales, que congregan a empresas que operan en un mismo eslabn de una cadena de pro-duccin. En el caso de las verticales, porque alrededor de una o ms firmas grandes se congregan pequeas empresas proveedoras de bienes e insumos importan-tes para el sistema productivo de las primeras.

    Elementos comunes al anlisis basado en redes empre-sariales son: la existencia de aglomeracin de empresas (economa de aglomeracin), instituciones de apoyo, de investigacin, organismos gubernamentales y finan-cieros; el dinamismo cientfico-tecnolgico e innova-cin, ampliacin en los flujos comerciales, y producto de todo lo anterior, un aumento en la capacidad de

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    competir de las empresas competitividad. Pero ms all de ello, debe presentarse alguna interaccin o re-lacin entre las empresas concentradas y de estas con los dems agentes dentro del espacio de concentracin (Navarro, 2003), aspecto que es relevante en este enfo-que24, y que es el que determina mayores posibilidades de desarrollo social y econmico de las regiones y los pases. Refirindose especficamente a los clusters, Na-varro (2003, p. 3) plantea que:

    Los tipos de dimensiones de los anlisis de cluster que per-mitiran clasificar los estudios cluster y precisar el concep-to cluster empleado son los siguientes: i) tipo de relacin (interdependencia o similitud) entre empresas o sectores; ii) tipos de flujos (de productos o de conocimientos); iii) nivel de anlisis (micro, meso o macro); iv) lmites espa-ciales del cluster (nacional, regional o local); v) organiza-ciones tomadas en consideracin25.

    Las relaciones son entonces, el elemento fundamental para la comprensin de las redes empresariales, especialmente los 24 clusters y distritos industriales, en tanto que la aglomeracin de empresas por s misma no implica la existencia de vnculos y la cooperacin entre los actores (Navarro, 2003). Esta sutil diferencia entre las aglomeraciones y las redes empresariales normalmente no es notada en la literatura, como lo subrayan Altenberg y Meyer-Stamer (1999), citados por Navarro (2003) al hacer referencia a los clusters.

    Navarro (2003) hace un anlisis cuidadoso de cada una de las dimensiones que, segn l, permiten tanto la clasificacin como el 25 uso del concepto cluster.

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