primeros tiempos de la fotografÍa en zaragoza

PRIMEROS TIEMPOSDE LA FOTOGRAFÍA

EN ZARAGOZA

Formatos “Carte de Visite” y “Cabinet Card”

FONDOS procedentes de colecciones privadas

SALA DE EXPOSICIONES DE CAJALÓN

del 10 de Junio al 31 de Julio de 2010

PRIMEROS TIEMPOSDE LA FOTOGRAFÍA

EN ZARAGOZA

Formatos “Carte de Visite” y “Cabinet Card”

Apéndice documental

3 Apéndice documental

Una ciudad que, sólo veinte años antes de la foto-grafía más antigua que mostramos en el catálogo, había visto pasar a los carlistas de Cabañero y que en los años posteriores se debatiría, como el resto de España, entre liberales y progresistas, demócratas y moderados… la “Gloriosa”, el derrocamiento de Isabel II, o el advenimiento de Amadeo.

Unos hechos que se encuentran como telón de fon-do de esta maravillosa colección de fotografías que ahora mostramos al público y que nos hablan de una burguesía emprendedora -más entonces que ahora, para lamento nuestro- y atenta a las modas y nove-dades cultas que venían de Europa, en una Zarago-za cuna en estas técnicas y que encuentra en José Ramos Zapetti (1837) a uno de los pioneros de la fotografía española, de forma coetánea a los trabajos de Daguerre en Francia.

Cajalón quiere aportar con esta exposición, su con-tribución al estudio de esas raíces culturales de Za-ragoza y de Aragón que explican lo que fuimos y nos permiten entender lo que somos. Una labor en la que estamos empeñados y que nos permite ahora disfrutar de estas pequeñas y delicadas joyas en for-ma de fotografías de una Zaragoza que estaba en-tonces dibujando su futuro.

Una vez más, desde Cajalón tenemos la oportunidad de mostrar nuestra vocación de mantener un vínculo cercano y directo con el medio cultural aragonés y zaragozano. Una vinculación natural que nos viene dada por la propia naturaleza de Cajalón: una entidad pegada a la tierra en la que trabaja y que se muestra atenta a su devenir social, económico y cultural.

En esta ocasión lo hacemos con la exposición “Pri-meros tiempos de la fotografía en Zaragoza” de la que este catálogo es el legado material. El experto, interesado o simplemente curioso, que se adentre en estas páginas, no sólo se va a encontrar con una deli-cada y heterogénea colección de retratos, o vistas de una Zaragoza perdida y ahora reencontrada. Tam-bién podrá respirar los aromas de la atmósfera invi-sible que rodea un periodo de la vida de Zaragoza y de España, en esa segunda mitad del S. XIX, que resultó ser una suma de experimentos sociales y po-líticos fallidos que explican en buena parte el retraso con que España se incorpora a la modernidad.

La mirada, entre divertida y nostálgica, que nos ofre-ce el magnífico trabajo de selección de José Antonio Hernández Latas, nos enseña una ciudad que, no lo olvidemos, todavía seguía lamiéndose las cicatrices de Los Sitios de Zaragoza, como nos muestra la inédita imagen de la fachada de Santa Engracia que recuerda a un remedo de decorado cinematográfico pero que era, todavía en esas fechas (1864), un testi-go de aquellos hechos trágicos y heroicos.

Bruno CatalánPresidente de Cajalón

4Apéndice documental

PRIMEROS TIEMPOS DE LA FOTOGRAFÍA EN ZARAGOZAFormatos “Carte de Visite” y “Cabinet Card”


El patrimonio fotográfico zaragozano de los pri-meros tiempos es un patrimonio frágil y disper-so, cuya pervivencia debemos fundamentalmente al celo por la preservación de la memoria familiar de sus propietarios y a la encomiable pasión por la historia gráfica de la ciudad de algunos ilustres coleccionistas. Solo gracias a la desinteresada co-laboración de unos y otros, ha resultado posible reconstruir este panorama de excepción sobre la fotografía zaragozana en las tempranas décadas de 1860 y 1870.

Nos encontramos frente al conjunto más primitivo de imágenes fotográficas de la ciudad de Zaragoza nunca antes expuesto, solo precedido por la serie que el fotógrafo británico Charles Clifford tomó con motivo de la visita a la ciudad de Isabel II, en 1860. Entre sus autores, los gabinetes fotográficos de Mariano Júdez y Ortiz, Gregorio Sabaté Férriz, Manuel Hortet y Molada, Anselmo Coyne Barreras y Jean Laurent y Cía.

La dificultad y excepcionalidad que supone haber conseguido reunir este conjunto de imágenes, inte-grado por más de ciento setenta y cinco fotografías a la albúmina, en su mayor parte inéditas, nos con-cede la oportunidad única de evocar aquella Zara-

goza de mediados del siglo XIX, sus monumentos, sus pintorescos rincones urbanos, así como la ga-lería de retratos de sus más ilustres habitantes y su mundo de relaciones personales.

Este valioso conjunto de materiales fotográficos históricos, compuesto por fondos de hasta doce colecciones o legados particulares, estructura la presente muestra en cuatro apartados: galería de retratos, tipos aragoneses y foráneos, vistas de Za-ragoza y artefactos fotográficos.

Un poco de historia… Dejando atrás los tiem-pos de los pioneros, del exclusivo daguerrotipo en cobre y del experimental calotipo o talbotipo, el nuevo descubrimiento de la fotografía al colodión húmedo (Scott Archer, 1851) y su positivado a la albúmina, propiciaron el paulatino establecimiento de los primeros gabinetes fotográficos en las ciu-dades.

Pero la patente que verdaderamente revolucionó y popularizó la fotografía fue el reducido y econó-mico formato de la “carte de visite” o tarjeta de visita fotográfica. En 1854, el fotógrafo parisino André Adolphe Disdéri patentó este formato, ins-pirado en las reducidas dimensiones de las tarjetas

José AntonioHernández Latas

Investigador ARAIDen la Universidad de Zaragoza

Para Julia y Miguel,mis hijos.


de visita impresas1. Pero no fue hasta 1859 en que comenzó a comercializar masivamente este tipo de retratos, gracias al decisivo impulso que supuso para su patente, la visita a su estudio del empera-dor Napoleón III junto a su esposa, la emperatriz Eugenia de Montijo y su hijo, el príncipe imperial (fotografías pertenecientes a la serie primigenia se pueden contemplar en la presente muestra). A partir de ese momento, la flor y la nata de la aris-tocracia parisina y europea, desfiló incesantemente por el estudio de Disdéri, seducida por el innegable encanto del novedoso formato fotográfico:

“El éxito, entonces verdaderamente estre-pitoso de Disdéri fue debido legítimamente a su ingenioso descubrimiento de la “carte de visite”. Su intuición de industrial había escogido bien el momento justo. Disdéri había creado una verdadera moda que de repente seducía a todos. Más aún: invirtien-do la proporción económica válida hasta entonces, esto es dando infinitamente más por infinitamente menos, él hizo definitiva-mente popular la fotografía. En fin, es de justicia reconocer que muchas de aquellas pequeñas imágenes, improvisadas con pro-digiosa rapidez frente al interminable desfi-le de la clientela, no carecían ni de un cierto gusto, ni de encanto.”

Félix Tournachon Nadar:Quand j’étais photographe, París, 1900.

Ya a mediados de 1865, el fotógrafo neoyorquino Mathew Brady comercializaba en su gabinete la denominada “carte de visite Imperial”, en forma-to algo mayor, que más tarde se conocerá como “cabinet card” y que en España se utilizó también bajo las denominaciones “Tarjeta Álbum” y “Re-trato Álbum”. Ambos formatos, “carte de visite” y

“cabinet card” serán los hegemónicos durante las décadas de 1860 y 1870.

La “cartomanía” o fiebre por el retrato en ambos formatos, conmocionó desde principios de la dé-cada de 1860, por igual, a Europa y a América, y junto a las fotografías se comercializaban lujosos álbumes, algunos de ellos incluso sujetos a patentes y otros de confección más artesanal, que todas las familias, desde las aristocráticas, hasta las mediana-mente acomodadas, se preciaban de poseer y exhi-bir en sus salones y reuniones sociales.

Algo más tardíamente, comenzaron a fabricarse, además, elegantes visores de fotografías, cartosco-pios, grafoscopios, estereografoscopios, etc., como los que pueden contemplarse en el recorrido expo-sitivo, que permitían, mediante la incorporación de lentes de aumento, disfrutar hasta del más mínimo detalle de estas discretas fotografías.

Primeros gabinetes fotográficos zaragozanos

Muy pocos zaragozanos conocen, que entre los pioneros en la invención o descubrimiento de la fotografía figura un enigmático pintor zaragozano, de nombre José Ramos Zapetti, que fue compañe-ro de pensionado en Italia de los pintores Federico de Madrazo y Carlos Luis Ribera. Según recogen las memorias inéditas del también pintor Vicente Poleró Toledo, cuyo retrato, por cierto, forma par-te de la exposición, Ramos Zapetti llegó a fijar con su cámara oscura la imagen de una figura y parte de su estudio en una plancha de cobre allá por el año 1837, un par de años antes de que Jacques-Louis Mandé Daguerre diera a conocer su invento ante la Academia de Ciencias y Bellas Artes de París. Sin embargo, resulta algo desconcertante que desde

1 McCAULEY, Elizabeth Anne: A.A.E. Disdéri and the Carte de Visite Portrait Photograph, Yale University Press, New Haven and London, 1985.


que Francisco Alcántara diera a conocer esta re-ferencia acerca del pionero zaragozano en la revista Madrid científico (nº 398, 1902) y, posteriormente, en La Fotografía (Año II, nº 18, marzo de 1903)2, nada se haya podido añadir al respecto y que la figura del pionero Ramos Zapetti sea todavía hoy una asigna-tura pendiente para la historiografía de la fotografía española.

Pero, al margen de la legendaria y sugerente figura de Ramos Zapetti, la ciudad de Zaragoza vio pronto en sus calles la presencia de los primeros daguerrotipis-tas ambulantes, la mayor parte de ellos procedentes de la vecina Francia, que recorrían las provincias de España, con sus equipos fotográficos a cuestas, de feria en feria3. Sin embargo, a día de hoy todavía no se ha publicado o dado a conocer ninguno de los da-guerrotipos tomados en la ciudad, ya fueran retratos o vistas urbanas.

Posteriormente, como hemos adelantado, se impon-dría la técnica del colodión húmedo que dio a cono-cer el británico Sir Frederick Scott Archer (1851) y que, como la práctica precedente del calotipo, per-mitía realizar diferentes copias a partir de un mismo negativo. Las copias se positivarán en papel a la albú-mina y serán pronto distribuidas en los comerciales formatos conocidos como “carte de visite”, paten-tado por Disdéri (1854), o “cabinet cards”, según la acepción anglosajona de la patente impulsada por el neoyorquino Mathew Brady a partir de 1865.

Es el tiempo en el que comienzan a abrirse los pri-meros gabinetes estables de fotografía en Zarago-za. El más importante de todos ellos fue el que dirigió el joven fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz, entre los años 1856 y 1874. Prácticamente coetá-neos, pronto surgieron los de Morera y Garrorena (desde 1857), el de Gregorio Sabaté Férriz (Villa-nueva de Gállego, 1827 – Zaragoza, 1891) a partir de 1858, de quien presentamos un álbum inédito de vistas de Zaragoza4 y el de Manuel Hortet y Molada, documentado entre 1859 y ca. 1880, fotó-grafo de la Comisión de Monumentos Provincial de Monumentos Históricos y Artísticos y del Mu-seo de Zaragoza. Hortet, seguramente fotógrafo foráneo afincado en Zaragoza, fue el primero que ostentó en la ciudad el título de Fotógrafo de la Real Casa, a partir de 1880 y poseyó uno de los más importantes gabinetes locales, hasta la con-solidación de Anselmo Mª Coyne Barreras (Pam-plona, 1829 - Zaragoza, 1896)5 y de su saga, como sucesores de Júdez.

Otros fotógrafos locales cuyos gabinetes tuvie-ron una vida más efímera durante estas décadas, fueron los que abrieron Antonio Gascón (hacia 1866), Enrique Rays (1861), el denominado “So-ciedad Fotográfica de Zaragoza” de Santos Álva-rez y Serra (1864 - 1869), el de Marcelino García Orga (Zaragoza, ca. 1841 - 1922) ca. 1865, el de Venancio Villas (1865 - 1880) y el de Leandro y Duplán (ca. 1869), con sedes en Pamplona y Zara-

2 Se hacen eco de esta noticia BECCHETTI, Piero: La fotografía a Roma, dalle origine al 1915, Editore Colombo, Roma, 1983; y SOUGEZ, Marie-Loup: Historia de la Fotografía, Cuadernos de Arte Cátedra, Madrid, 1996; entre otros. Y, recientemente, BATCHEN, Geoffrey: Arder en deseos. La concepción de la fotografía, Gustavo Gili, 2004.

3 Según recoge la prensa local, fue amplia la nómina de daguerrotipistas que recalaron en la ciudad, habitualmente con motivo de las fiestas del Pilar: Mr. Constant “retratista de París” (1845), Madame Senges (1849), Sr. Díaz (1850), Mr. Anatole (1851), Mr. Monnet (1852), Luis de Tannyon (1852), J.A. Franquesa (1852), Jean H. Gairoard (1852), Mr. Dubois (1852), Mr. Torres (1857) etc.

4 Ver apartado de Catálogo núms. 155 a 175. Además, en el Apéndice Documental se puede consultar la transcripción íntegra de su acta de defunción, pág. 219.

5 Ver el retrato de Anselmo Mª Coyne en el apartado de Catálogo, nº 30 y su certificado de defunción en el Apéndice Documental, nº 4, pág. 220. Sobre los Coyne, ver SÁNCHEZ MILLÁN, A.; ROMERO, A. y TARTÓN, C.: Los Coyne. 100 años de fotografía, DPZ., Zaragoza, 1988. Y CASTRO, Antón: “Los Coyne: el arte de mirar a lo largo de 150 años”, en Pedro Avellaned (comisario): Coyne, Gobierno de Aragón, Zaragoza, 2003.


goza y que también disfrutó del título honorífico de Fotógrafo de Cámara de SS.MM.

Algo más tarde, a comienzos de la década de 1880, establecieron sus gabinetes algunos de los fotógra-fos cuyos rostros damos a conocer en primicia en la presente muestra, como Joaquín Júdez Luis (Za-ragoza, ca. 1859 - 1922)6, sobrino del malogrado fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz, quien inicialmen-te instaló su estudio junto a Román Larruy en la calle Alfonso I, 28, para posteriormente y en solita-rio, trasladarlo a la calle Torre Nueva, 41. También Mariano Pescador Saldaña7, miembro de una cono-cida dinastía de artistas zaragozanos que formó la sociedad “Mariano Pescador y Cía.” junto a su her-mano Ventura, para la explotación del gabinete fo-tográfico ubicado en el Paseo de la Independencia nº 308 y por último, Lucas Escolá Arimany (Sarriá, Barcelona, 1857 – Zaragoza, 1930)9, con estudio en el mismo Paseo de la Independencia, nº 2610.

Mariano Júdez y Ortiz (1856 - 1874), usos y costumbres de su gabinete fotográfico

Mariano Júdez y Ortiz regentó el gabinete fotográ-fico más importante de la Zaragoza de mediados de siglo XIX, y sin duda, uno de los más impor-tantes de la España de su tiempo. Pero, además, es justamente considerado uno de los pioneros de la fotografía de paisaje natural en España, gracias a

sus soberbios álbumes y series de vistas estereos-cópicas del Monasterio de Piedra (1866-1871). A Júdez dediqué un estudio monográfico y una ex-posición hace unos años11. Desde entonces, hasta la presente exposición, son sustanciales las nuevas aportaciones que enriquecen su todavía provisional catálogo y que, con motivo de la presente muestra, podremos dar a conocer, especialmente en el ám-bito de las vistas de Zaragoza y de su serie de tipos aragoneses.

Pero, la figura del pionero Mariano Júdez, puede en esta ocasión servirnos como referente y modelo a la hora de evocar algunos de los usos y costumbres de estos primeros gabinetes fotográficos, que tan lejanos nos quedan y sobre los que disponemos de tan escasa documentación. Tres serán fundamen-talmente los aspectos que me gustaría desarrollar al respecto. Por un lado, el de las tiradas o número de copias realizadas por negativo en el caso de las series comerciales. Por otro, el del equipamiento fotográfico en tiempos del formato “carte de vi-site” y, por último, el de las relaciones comerciales y de colaboración establecidas entre los diferentes fotógrafos.

En nuestro mundo actual, habituado a la como-didad y vertiginosidad de la fotografía digital y a tarjetas de memoria capaces de almacenar miles de imágenes, resulta difícil hacerse idea del esfuerzo que suponía en los tiempos del colodión húmedo hacer una sola fotografía de paisaje o un retrato

6 Ver sus retratos en el apartado de Catálogo, núms. 33, 34 y 35 y su acta de defunción en el Apéndice Documental nº 5, pág. 221

7 Retratos en el Catálogo, núms. 31 y 32.

8 Por su interés, ante la escasez de documentación existente sobre la constitución de estos primeros gabinetes fotográficos zaragozanos, transcribo en el apartado Apéndice Documental nº 1, págs. 215 a 217, el acta fundacional de la sociedad industrial “Mariano Pescador y Cía.” (1882).

9 Retrato de grupo, en el Catálogo, nº 36. Sobre Lucas Escolá, ver SERRANO PARDO, Luis: “Lucas Escolá” en la revista Pasarela, Zaragoza, nº 11, mayo de 2001.

10 Además de los citados, a partir de la década de 1880, se establecieron en Zaragoza los gabinetes de Enrique Beltrán (sucesor de Hortet; Méndez Núñez, 14 y Alfonso I, 1), Constantino Gracia (Cerdán, 50), Infante y García (Sitios, 2), Acín y Poza (Coso, 52), Fotografía Artística de Bernardino Pardo (Escuelas Pías, 6), Nicolás Florenzzano (Sitios, 2) y Gran Fotografía Austríaca (Alfonso I, 38), entre otros.

11 HERNÁNDEZ LATAS, José Antonio: El gabinete de Mariano Júdez y Ortiz (1856-1874), pionero de la fotografía en Zaragoza, Cortes de Aragón, Zaragoza, 2005.


de exterior. Las placas de vidrio con la emulsión fresca y reciente, goteando literalmente, debían ser colocadas en condiciones de oscuridad en la cáma-ra fotográfica. Esto obligaba a realizar la operación previa de preparado de la emulsión en el interior de una estancia cerrada. Y, en el caso de paisajes naturales, en el interior de tiendas de campaña-laboratorio. Y todo ese esfuerzo antes de poder impresionar durante un par de segundos, una sola toma fotográfica, siempre aprovechando las mejo-res condiciones lumínicas diurnas.

Por otra parte, la principal fuente de ingresos del fotógrafo de entonces era fundamentalmente el retrato. Así que solo algunos de entre los nume-rosos retratistas locales, bien por su espíritu em-prendedor, bien por su inclinación artística hacia el paisaje, se aventuraban a sacar de su estudio los aparatosos bártulos de fotógrafo. Ese fue afortu-nadamente el caso de Júdez, que llegó a realizar, como podrá comprobar el visitante de la exposi-ción, más de una treintena de vistas urbanas de la ciudad de Zaragoza, así como las ya citadas series del Monasterio de Piedra.

Pero decía que hoy día es difícil situarnos ante aquel tiempo de los inicios de la fotografía comercial de mediados del siglo XIX. El hallazgo y cotejo de unas inscripciones numéricas, manuscritas en el re-verso de algunas de las nuevas tarjetas de visita re-cuperadas, tanto en el caso de vistas urbanas, como en la serie de tipos aragoneses, arrojan algo de luz sobre el número de copias que fotógrafos como Jú-dez realizaban a partir de cada uno de los negativos al colodión. Así, en los reversos de las fotografías recientemente recuperadas como “Aragonés con la capa” (catálogo, nº 98) y “Aragonés” (catálogo, nº 102) encontramos las inscripciones respectivas “4-18” y “1-15” y en las vistas de la basílica del Pilar (catálogo nº 116), de la iglesia de San Fernan-do de Torrero (catálogo, nº 140), de la puerta del Duque de la Victoria y de la Torre Nueva (catálo-

go nº 122), encontramos respectivamente también, las siguientes: “1-9”, “6-14”, “5-13”, “4-12”. ¿Qué significaban esas inscripciones? ¿Con qué objeto las anotó Júdez? La explicación más convincente parece la siguiente: el segundo de los números se-parados por un guión, correspondería al número total de copias de cada tirada (18, 15, 9, 14, 13 ó 12), y por su parte, el primero de los números haría referencia al orden que la copia recuperada ocupa-ba dentro del número total de la tirada. Es decir, en el primero de los ejemplos citados, hablaríamos de una tirada de 18 fotografías, y la fotografía aludida ocuparía el cuarto lugar de entre esas dieciocho. El objeto de esas inscripciones es evidente, no solo llevar escrupulosamente la contabilidad de las ven-tas, sino planificar la realización de nuevas copias una vez que la tirada estuviera próxima a venderse o agotarse en su totalidad.

Naturalmente, solo estas series de tipos aragoneses o de vistas de la ciudad estaban sujetas a sucesivas tiradas y realización de copias, y solo en algunas de ellas aparecen estas indicaciones manuscritas, que no aparecen en el caso más prolífico y habitual de sus retratos de gabinete. Pero en cualquier caso, lo verdaderamente reseñable es el tener por vez pri-mera constancia fehaciente del exiguo número de copias por imagen que se realizaban y comercia-lizaban, seguramente muy ajustado a la demanda real. Series en torno a una quincena de copias o ejemplares por negativo. Creo que estos datos pue-den ayudar a entender la dificultad que supone este empeño de recuperación de un legado fotográfico tan exclusivo y limitado en número de copias. E, igualmente, por el contrario, la enorme satisfacción y en no pocas ocasiones, la emoción, que nos pro-porciona cada nuevo hallazgo.

Siguiendo con esta evocación de usos y costum-bres de los gabinetes fotográficos locales, ejempli-ficados a través de la figura del pionero Mariano Júdez y Ortiz, querría aludir ahora al equipamiento


del gabinete fotográfico. Y es que, se tiene por co-mún que los gabinetes fotográficos en tiempos de la tarjeta de visita fotográfica o “carte de visite” utilizaban indefectiblemente cámaras de múltiples objetivos (4, 6, 8, etc.), a partir de las cuales, podían obtener el mismo número de imágenes diferentes por placa. En efecto, esto era así en el caso de los más importantes estudios fotográficos parisinos y madrileños, cuya gran demanda obligaba a dispo-ner de los medios más eficaces, independientemen-te de su coste. Sin embargo, en ciudades de provin-cia, como Zaragoza, con menos habitantes y, en consecuencia, con una clientela más reducida en número, lo más oportuno era utilizar para este tipo de retratos las versátiles cámaras estereoscópicas o de doble objetivo. Con ellas, como demuestran los retratos expuestos del escritor Juan Federico Mun-tadas Jornet (catálogo, núms. 67 y 68) o del céle-bre paisajista Carlos de Haes (catálogo, núms. 57 y 58), tomados ambos en el gabinete de Júdez, se obtenían dos tomas diferentes y consecutivas del retratado por cada una de las placas. No he encon-trado ningún caso de un mayor número de poses o escenas en los retratos tomados por gabinetes fotográficos zaragozanos, de entre los más de mil que llevo inventariados y catalogados durante estos años atrás.

Pero la utilización de cámaras estereoscópicas no solo era habitual en el caso de retratos individuales, sino que era práctica común en el caso de retra-tos de parejas o de matrimonios. Es decir, en una misma placa, se tomarían los retratos de la mujer y el marido, cada uno de ellos individualizados por cada uno de los dos objetivos de la cámara este-reoscópica. Son los casos de los retratos del escul-tor Antonio José Palao y su esposa Concepción Ortubia (catálogo núms. 41 y 42), o también el de la pintora aficionada Ana Ascaso y su marido, el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Zaragoza, José Moncasi (catálogo núms. 45 y 46), por poner dos ejemplos concretos.

Y, naturalmente, estas cámaras de doble objetivo permitían tomar imágenes estereoscópicas, espe-cialmente indicadas para las vistas urbanas y paisa-jes, que Júdez y otros fotógrafos como el francés afincado en Madrid, Jean Laurent, comercializaron indistintamente en dos formatos diferentes, como tarjetas estereoscópicas y como tarjetas de visita, individualizando cada una de las dos imágenes de la placa. Véase el ejemplo de las dos vistas de la Fuente de la Princesa o de Neptuno en la plaza de la Constitución, que se pueden contemplar en la muestra (Catálogo, núms. 127 y 128), y de las que conocemos la existencia de su correspondiente tarjeta estereoscópica en una colección madrileña. En definitiva, tres tipos de vistas comercializadas a partir de una única placa. A la vista de lo expuesto, acerca de la versatilidad de las cámaras estereoscó-picas y conociendo el fuerte desembolso económi-co que suponía la adquisición de cualquier cámara, es más que razonable que muchos de los gabinetes zaragozanos optaran por las cámaras estereoscópi-cas, en detrimento de las cámaras específicas para “carte de visite”, de múltiples objetivos. También estos argumentos pueden ayudar a explicar la difi-cultad de encontrar entre los coleccionistas espa-ñoles de material fotográfico y específicamente de cámaras fotográficas de época, ejemplares de estas primeras cámaras de objetivos múltiples para “car-te de visite”.

A propósito también del gabinete de Mariano Jú-dez y por último, tengo que añadir, que algunas de las nuevas aportaciones que presentamos en la muestra, convierten en certeza algunas hipótesis o sospechas expuestas por quien esto escribe en sus publicaciones precedentes, acerca de las relaciones comerciales establecidas entre Júdez y otros gabine-tes fotográficos nacionales. Algunos autores, entre los que me incluyo, ya habían aludido a la posibi-lidad de que fotógrafos como el británico Char-les Clifford o el francés Jean Laurent, utilizaran las privilegiadas vistas que proporcionaba la céntrica


Distintivos de algunos de los gabinetes zaragozanos del siglo XIX, litografiados en el reverso de fotografías en formato “carte de visite”.


ubicación de los sucesivos estudios o gabinetes de Mariano Júdez, en los áticos del Coso nº 35 y 33, respectivamente, para realizar algunas de sus pers-pectivas sobre el Paseo de la Independencia. Pues bien, en el caso de Jean Laurent, exponemos en la muestra dos fotografías elocuentes de esa posible relación comercial o de colaboración entre ambos. Se trata por un lado de un mosaico taurino, integra-do por los retratos de los más importantes toreros del momento (catálogo, nº 90), y de un grupo de tipos gallegos (catálogo nº 103), ambos comercia-lizados bajo el distintivo del gabinete zaragozano de Mariano Júdez, a partir de los originales de Jean Laurent, como hemos podido comprobar. Hoy lo consideraríamos una apropiación indebida de la propiedad intelectual. Sin embargo, al parecer, se trataba de una práctica muy extendida entre los fo-tógrafos del siglo XIX.

Así sucede también con la pareja de retratos de los reyes de España, Amadeo I (1871-1873) y su espo-sa Mª Victoria del Pozo (catálogo núms. 15 y 16), que se corresponden con los retratos que tomó el madrileño Pedro Martínez de Hebert y que, sin embargo, fueron comercializados en Zaragoza con el distintivo del gabinete de Júdez. O con el retrato de Pío IX (catálogo, nº 17), también a partir de un retrato oficial del pontífice.

Del mismo modo, Mariano Júdez a su vez, cedió la comercialización de algunas de las vistas de Za-ragoza de las que fue autor al fotógrafo local San-tos Álvarez y Serra, quien las comercializó entre 1864 y 1869 en su estudio contiguo del Coso, con el distintivo “Sociedad Fotográfica de Zaragoza”. Desconocemos los pormenores y la naturaleza de esta colaboración o cesión de derechos entre Ma-riano Júdez y Santos Álvarez, pero como vemos,

tampoco en este último caso se preserva la autoría intelectual de Júdez12.

Aquella Zaragoza de las décadas de 1860 y 1870

Sin duda, uno de los mayores atractivos de la pre-sente muestra lo constituye la recuperación de un amplio conjunto, compuesto por más de sesenta vistas fotográficas de la ciudad de Zaragoza, que abarcan el periodo cronológico comprendido entre 1860 y 1880, todas ellas procedentes de coleccio-nes privadas.

Es bien sabido, que las primeras imágenes foto-gráficas conocidas de la ciudad de Zaragoza fue-ron realizadas por el fotógrafo británico Charles Clifford, durante la segunda semana de octubre de 1860, con motivo de la visita de Isabel II a la ciu-dad. Se trata de una docena de fotografías en for-mato álbum, que fueron estudiadas y reproducidas por el hispanista Lee Fontanella13.

Pues bien, a pesar de exceder el tamaño de los formatos “carte de visite” o “cabinet card”, se ha considerado conveniente incluir en la muestra por su antigüedad y singularidad, un reducido núme-ro de siete albúminas, coetáneas de estas primeras fotografías de Clifford, que fueron realizadas por el fotógrafo local Mariano Júdez y se encuentran encartadas en el álbum de Andrés Martín e Ipás, del que hablaremos pormenorizadamente más ade-lante. La presencia en esta serie de albúminas, de la Torre de La Seo sin chapitel, ni andamiajes (catálo-go nº 106), permite establecer con precisión la cro-nología del conjunto, puesto que sabemos que un rayo incendió y arruinó su chapitel en 1850. Desde

12 Vistas originales de Mariano Júdez y su versión correspondiente por la “Sociedad Fotográfica de Zaragoza” han sido emparejadas para su cotejo a lo largo del recorrido expositivo.

13 FONTANELLA, Lee: Clifford en España. Un fotógrafo en la Corte de Isabel II, El Viso, Madrid, 1999.


entonces, la torre de La Seo permaneció sin cha-pitel, hasta enero de 1861, en que fue andamiada para la colocación del nuevo chapitel fundido en los talleres zaragozanos de Julio Goybet y Cía14. El límite cronológico inferior para esta serie de sie-te albúminas, por el contrario, lo establece la vista del Monumento a Pignatelli (catálogo, nº 108), que como sabemos fue inaugurado el 24 de junio de 1859. Así pues, la datación de este primitivo con-junto de albúminas queda establecida entre junio de 1859 y diciembre de 1860. Por lo que podemos afirmar, que este primitivo grupo de albúminas es coetáneo o incluso anterior cronológicamente a la serie de fotografías realizadas por Clifford.

El caso de las fotografías en formato “carte de vi-site” resulta también de especial relevancia puesto que el elevado número de imágenes conservados, hasta veintisiete, no tienen parangón en el ámbito de la fotografía española de la década de 1860. Por decirlo de otro modo, ninguna ciudad de España dispone de tan amplio número de vistas urbanas en formato “carte de visite”. Todas fueron realizadas por el gabinete zaragozano de Mariano Júdez y Or-tiz, y algunas de ellas, además, fueron comercializa-das por el gabinete de Santos Álvarez y Serra, con el distintivo “Sociedad fotográfica de Zaragoza”.

Si la Torre Nueva y el Ebro a su paso bajo el puente del Ebro y el Pilar, seguían siendo los referentes iconográficos más reconocibles de aquella Zarago-za de mediados del siglo XIX, la inquieta mirada de Júdez también prestó atención a la renovación de la fisonomía urbana que estaba teniendo lugar a comienzos de la década de 1860, fundamentalmen-te en torno al Paseo de la Independencia. Desde su estudio abierto en el ático del Coso, nº 35, pudo

contemplar, como un espectador de privilegio, las sucesivas inauguraciones de la nueva fachada del Palacio de la Diputación Provincial (1858) y del Monumento a Pignatelli (1859), que culminaba la expansión de la ciudad hacia el sur, en el espacio que pasó a conocerse como Glorieta de Pignate-lli. Y también se hizo eco de la construcción de nuevos monumentos conmemorativos como las desaparecidas Puerta del Ángel (1860), erigida con motivo de la visita de Isabel II y la nueva Puerta del Duque de la Victoria (1861), en hierro fundido.

Pero, hay algo que resulta especialmente interesan-te cuando se analiza en conjunto esta serie de foto-grafías, me refiero al protagonismo que Júdez con-cede a los paseos pintorescos del río Huerva y del Canal Imperial, como zonas de ocio y disfrute ciu-dadanos. Aunque hoy cueste creerlo, el río Huerva y su ribera arbolada, así como el paso del Canal Imperial por la ciudad, formaban parte indisoluble de la iconografía urbana y natural de aquella Zara-goza de la década de 1860. En las fotografías de Jú-dez podemos reconocer los nuevos puentes sobre el Huerva, construidos en piedra sillar en torno a 1855, denominados de San José (junto a la iglesia de San Miguel de los Navarros) y de Santa Engra-cia (en las cercanías de la glorieta homónima), o el antiguo Puente de América sobre el Canal Impe-rial. Es precisamente en esta última imagen foto-gráfica del Puente de América o en otras como la Almenara de Nuestra Señora del Pilar, e incluso en la vista de la iglesia de San Fernando en Torrero, en las que hemos encontrado grandes similitudes con la serie de litografías realizadas por Blanchard para su obra Paseo pintoresco por el Canal Imperial de Aragón (Madrid, 1833)15, que casi con toda seguridad de-bieron servir como referente iconográfico al joven

14 CANELLAS LÓPEZ, Ángel: La torre campanil de San Salvador de Zaragoza, Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis, Zaragoza, 1975.

15 Publicado también bajo el título: Memoria histórica del Canal Imperial de Aragón: Noticia sobre las utilidades que produce y explicación de lo que contienen las láminas que se publican, Madrid, 1833.


fotógrafo zaragozano a la hora de confeccionar su serie de vistas sobre el Canal Imperial.

Será a partir de la década de 1870, cuando los redu-cidos formatos de las tarjetas de visita o “cartes de visite”, dejen paso a los más generosos de las “ca-binet card”. Jean Laurent y Minier16, Manuel Hor-tet y Molada, Anselmo Coyne Barreras y Gregorio Sabaté Férriz, serán los fotógrafos que se ocuparán de realizar y comercializar las vistas de la ciudad en dicho formato. Todos ellos permanecieron atentos a la evolución incesante de la fisonomía urbana de Zaragoza. En sus vistas fotográficas descubriremos una basílica del Pilar más próxima a su imagen ac-tual, después de la construcción de su cúpula mayor (1866-1869), proyectada por José de Yarza y con-cluida por Juan Antonio Atienza, también presente, por cierto, en la galería de retratos de nuestra ex-posición (catálogo nº 63). Podremos contemplar la recién inaugurada calle Alfonso I (1867), que el alcal-de Candalija abrió, rasgando, sin contemplaciones, el sinuoso trazado medieval del casco histórico. Y, sobre todo, constataremos en las páginas del álbum de Vistas de Zaragoza del fotógrafo villanovense Gre-gorio Sabaté Férriz uno de los últimos y fallidos in-tentos por salvar de la piqueta a la sentenciada Torre Nueva, aligerándola del peso que suponía su carac-terístico chapitel bulboso. En la secuencia de imáge-nes consecutivas presentes en el álbum de Sabaté y datadas en torno al año 1878, podemos contemplar, en un primer momento, a la Torre coronada todavía por su airoso chapitel bulboso, inmediatamente en la siguiente imagen, observamos a la Torre ya con su chapitel andamiado y listo para su desmontaje, y por último, la descubrimos ya desmochada, con su última y austera cubierta.

Álbum de Andrés Martín Ipás

Hace algunos años, con motivo de la documenta-ción previa de la exposición dedicada al fotógrafo Mariano Júdez en el palacio de la Aljafería (2005), supe de la existencia de un grupo de siete vistas de Zaragoza, atribuidas al propio Júdez, de las que el Archivo Municipal de Zaragoza conservaba refe-rencia en su base de datos y copias en formato de diapositivas de 35 mm. Se trataba de un conjunto reducido pero del mayor interés, de cuyas imágenes se desconocía el formato original, la transcripción de sus posibles distintivos o inscripciones y, sobre todo, la identificación del propietario que las cedió al Archivo.

Con todo, a pesar de la escasez de datos, la certeza de la autoría de Júdez, que las tempranas icono-grafías presentes en las diapositivas confirmaban, me animó a reproducirlas en las páginas de aquella publicación monográfica sobre Júdez, en pequeño formato, con el ánimo de dejar, al menos, constan-cia de su existencia.

Algún tiempo después, a lo largo de diferentes bús-quedas sobre iconografía de algunos hitos urbanos de la Zaragoza de mediados del siglo XIX, reali-zadas a través de Internet, tropecé de nuevo con aquellas enigmáticas imágenes tempranas, atribui-das a Júdez. Las imágenes servían para ilustrar es-cenarios de la ciudad en los que habían tenido pro-tagonismo durante los Sitios de Zaragoza de 1808 y 1809. Al pie de esas albúminas de Júdez, junto a su título, las imágenes se identificaban como obra del fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz y, afortunada-mente, también se identificaba en esta ocasión su propietario, Mariano Martín Casalderrey.

16 Forman parte de la exposición, con intención exclusivamente testimonial, una selección de siete vistas de Zaragoza en formato “cabinet card”, procedentes de colecciones privadas, de entre la amplia serie comercializada por Laurent. Todas ellas fueron ya dadas a conocer dentro del exhaustivo estudio y catálogo de la obra J. Laurent y Cía. en Aragón. Fotografías 1861-1877, realizado con motivo de la exposición homónima, por Ricardo Centellas y Carlos Teixidor Cadenas (Diputación de Zaragoza, 1997). A dicha publicación remito a quien desee profundizar en el catálogo de la obra de Jean Laurent en Aragón.


Distintivos de algunos de los gabinetes zaragozanos del siglo XIX, litografiados en el reverso de fotografías en formato “carte de visite”.


No es extraño que en el ámbito de las fotografías de mediados del siglo XIX, éstas se encuentren disper-sas, prácticamente ilocalizables, hasta que el azar o algún otro tipo de acontecimientos las hace visibles, como en este caso. Proceden en muchos de los casos de legados familiares y se conservan, habitualmente, acompañando los retratos de vetustos antepasados, que resultan hoy irreconocibles, cuando no iniden-tificables incluso para sus actuales descendientes y propietarios. Cuando me interesé por el legado de la familia Martín, pensaba tan solo en ese grupo redu-cido de fotografías, que conocía y había publicado a partir de las diapositivas conservadas en el Archivo Municipal. Por ello, mi sorpresa e interés se incre-mentaron, cuando Mariano Martín me hizo ver que aquel grupo de siete imágenes, no eran sino parte de un conjunto mayor, integrado por un número sin precedente de vistas de Zaragoza en formato “carte de visite”, nada menos que veinte imágenes. Y que todas ellas procedían de un álbum dedicado a su an-tepasado, Andrés Martín Ipás, de su puño y letra por el fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz. Además, en las páginas de dicho álbum encontraría una nueva sor-presa, dos soberbios retratos en formato álbum del propio Júdez y de su mujer Tomasa Chinar17.

Así pues, en esa pertinaz búsqueda, tantas veces in-fructuosa, en la que, como he dicho, cada nueva ima-gen era considerada toda una conquista, me encon-traba de repente ante un legado unitario, constituido por veintisiete vistas de Zaragoza y dos retratos en gran formato de Júdez y de su esposa, además de otros tantos retratos familiares, que por sí mismo constituía el mejor testimonio en imágenes conoci-do hasta la fecha de aquella Zaragoza de la década de 1860, tan solo fotografiada coetáneamente, unos meses antes, por el fotógrafo de cámara de Isabel II, Charles Clifford.

No cabía duda, un álbum así confeccionado, con la efigie del fotógrafo y su mujer en primer térmi-no y dedicado “a Dn. Andrés Martín Ipás”, solo podía responder a un valioso obsequio realizado por Mariano Júdez a su amigo y tal vez benefactor, Martín Ipás. Desgraciadamente, no hemos podido averiguar mucho más, por el momento, del origen y naturaleza de esta relación de amistad o de pro-tectorado que unía a ambos personajes y que dio origen a este legado singular.

Pero ¿quién fue Andrés Martín Ipás? Debo a su actual descendiente, Mariano Martín Casalderrey, celoso custodio del legado y memoria familiar, los datos que a continuación expongo:

Andrés Martín Ipás (Zaragoza, 1821 – 1889), cuya familia procedía de la provincia de Teruel, nació en Zaragoza y fue el cuarto de ocho hermanos, de los que solo sobrevivieron tres. Sin profesión conocida, al parecer, vivía de la administración de las rentas que les proporcionaba su acomodado pa-trimonio familiar, en particular del arrendamiento de tierras de labor y de viviendas e inmuebles. Se sabe, no obstante, que colaboró junto a su herma-no Mariano, durante su etapa como tesorero del Ayuntamiento de Zaragoza. Su afición más noble, que compartía con su otro hermano, Bartolomé, fue la bibliofilia. Ambos eran bien conocidos en la ciudad por su afición a la compra y colección de libros, formando en su tiempo una notable biblio-teca, parte de la cual conserva en la actualidad su familia. Permaneció soltero y sus restos descansan en el cementerio de Torrero de Zaragoza.

Como deja entrever esta breve semblanza biográ-fica, la desahogada situación financiera de Martín Ipás, así como sus posibles relaciones e influencias en el Ayuntamiento de la ciudad, inducen a pensar, tal vez, en algún tipo de colaboración financiera o

17 Catálogo núms. 22 y 23.


asesoramiento profesional con el gabinete de Ma-riano Júdez, que el fotógrafo zaragozano quiso re-conocer y agradecer con este elaborado obsequio “…en prueba de eterna gratitud”.

Álbumes y legado de Hilarión Júdez y Ortiz

La referida exposición monográfica sobre el gabi-nete de Mariano Júdez y Ortiz, tuvo entre otras felices consecuencias, el encuentro con las actuales descendientes de uno de los hermanos del fotó-grafo, Hilarión Júdez y Ortiz (Zaragoza, ca. 1831 – 1906), a su vez padre del también fotógrafo Joa-quín Júdez Luis. Me estoy refiriendo a las hermanas Paz y Pilar Zoppetti de la Pardina, a su iniciativa y generosidad debo el haber podido conocer y tra-bajar con su legado fotográfico, compuesto funda-mentalmente por retratos, en diferentes formatos.

Entre los varios álbumes de diferentes épocas que conserva la familia, destaca especialmente uno, en formato “carte de visite” y cubierta de pedrerías, en cuyo interior hemos podido recuperar varios re-tratos inéditos del fotógrafo Mariano Júdez y Or-tiz, su mujer y su familia, así como algunos retratos de quien fuera su sobrino, el futuro fotógrafo Joa-quín Júdez Luis (Zaragoza, ca. 1859 – 1922), cuyo rostro nos era desconocido. Entre dichos retratos, querría destacar uno en el que el propio Mariano Júdez se autorretrata como fotógrafo, es decir, con el birrete de trabajo y el elegante batín de estudio18. Ambas prendas, por cierto, se habían convertido en imprescindibles en la estereotipada imagen de los fotógrafos de las décadas de 1860 y 1870. Y ambas tienen su justificación, el birrete, como en el caso de los cocineros, para que ningún cabello

caiga sobre la placa emulsionada al colodión hú-medo o sobre el posterior positivado a la albúmina; y el batín de trabajo, muy aconsejable, debido a la manipulación constante de placas húmedas recién preparadas y sus consiguientes salpicaduras, pe-queños vertidos, etc.

No sería poca cosa, la presencia y recuperación de estos retratos inéditos, habida cuenta de la dificul-tad de poner rostro o encontrar retratos de estos fotógrafos zaragozanos de los primeros tiempos. Pero, además, en dicho álbum encontramos un ter-cer fotógrafo retratado, Anselmo Coyne Barreras (Pamplona, 1829 – Zaragoza, 1926)19, también re-lacionado con la familia Júdez, ya que una vez fa-llecido el fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz, se aso-ciará con su viuda, Tomasa Chinar y Torrente para la explotación del gabinete fotográfico del Coso nº 33, bajo la nueva denominación “Júdez y Coyne”. Desde entonces, 1874, Anselmo Coyne se estable-cerá definitivamente en Zaragoza como cabeza de familia de una dinastía de fotógrafos y cineastas que ha llegado hasta nuestros días.

Desaparecido sin descendencia el matrimonio for-mado por Mariano Júdez y Ortiz y Tomasa Chi-nar, algunos de los objetos procedentes de su casa familiar fueron recogidos y conservados por su hermano Hilarión. Entre ellos destacan un par de bodegones pintados al óleo, por el artista oscense León Abadías Santolaria (Huesca, 1836 – Córdo-ba, 1894), quien fuera pintor ayudante del estudio de Júdez por breve tiempo, entre 1861 y 1863. Y, además, los retratos al óleo, no firmados aunque atribuidos también a León Abadías, de Mariano Jú-dez y de su esposa Tomasa Chinar. Ambos retratos de calidad discreta, fueron realizados a partir de las fotografías de gran formato que, curiosamente, se

18 Catálogo, nº 25.

19 Catálogo, nº 30


conservan en el álbum ya mencionado de Andrés Martín Ipás. Por último, a modo de inventario, ha-bría que hacer mención de un pequeño retrato al óleo de un perrito, al parecer, la mascota del matrimonio Júdez Chinar, y de una cuchara sopera de plata, con las iniciales “MJ”, como únicos objetos conservados que fueron propiedad en su día del malogrado fotó-grafo zaragozano.

Al margen de estos retratos familiares, también las páginas del álbum de Hilarión Júdez y Ortiz, mues-tran algunos otros retratos de interés que hemos seleccionado para la presente muestra, como el del pontífice Pío IX, curiosamente comercializado por Mariano Júdez a partir de un retrato oficial, según reza el distintivo al pie de la albúmina, o el del cé-lebre y valeroso torero “El Tato”, antes de su grave cogida de 1869, fotografiado en el estudio pamplo-nés de Leandro.

Álbumes de los Condes de Sobradiel

En las respetables manos de una colección particu-lar zaragozana se encuentran en la actualidad un par de voluminosos álbumes de tamaño folio y cuatro fotografías por página, que fueron en otro tiempo propiedad de los Condes de Sobradiel y de sus fami-liares zaragozanos. Uno de ellos, el más interesante, cuyas cubiertas en cuero rojo, presentan una coro-na real, bajo la cual cobija la inicial mayúscula “S.” de la casa de Sobradiel y en cuyas guardas hay una etiqueta adherida con el emblema de la casa de So-bradiel: “Campanas de Ahones ia non combairem mes” (sic.), consta de nada menos que de doscientas fotografías en formato “carte de visite”. El lujoso ál-bum de páginas de corte y filete dorado alrededor de cada una de las fotografías, fue confeccionado por

encargo en París, en el prestigioso establecimiento de Alphonse Giroux, ubicado en el número 43 del Boulevart des Capucines20.

El segundo álbum, también procedente de algu-na de las ramas de la familia Cavero, conserva en la actualidad tan solo ciento sesenta y siete de sus doscientas antiguas fotografías, y aunque también se trata de un álbum de idénticas características, sus cubiertas están repujadas sobre piel marrón. En su portada, luce las iniciales sobredoradas: “M.” y “C.”, inscritas, cada una de ellas, en el interior de un pequeño escudo heráldico, que debe interpre-tarse como el enlace familiar de las casas “M.” y “Cavero”.

Ambos álbumes fueron encontrados y adquiridos recientemente en un comercio dedicado a artícu-los de coleccionismo, sellos, monedas y postales, de la capital zaragozana. Solo por la inusual can-tidad de fotografías en formato “carte de visite” que contienen y en cuyos reversos encontramos un inagotable muestrario de distintivos y referencias de los gabinetes fotográficos locales, nacionales y extranjeros, los álbumes ya presentarían el mayor interés. Y aunque es bien cierto que, desde nuestra perspectiva actual, resulta una tarea prácticamente imposible el tratar de identificar a la mayor parte de los personajes en él retratados (familiares y amigos de los Condes de Sobradiel y su extensa familia, repartida y con propiedades en Madrid, Zarago-za y Sobradiel). Por fortuna, entre las páginas del álbum, se encuentran además algunos de los más ilustres personajes de la vida política, cultural y re-ligiosa europea de mediados del siglo XIX.

Para comenzar, nos encontramos con la grata sor-presa que supone descubrir dos de las fotografías de la familia imperial francesa, pertenecientes a la primera serie conocida y realizada por el fotógra-

20 Tras su acuerdo comercial con Daguerre, el establecimiento de Alphonse Giraux había sido el primero en comercializar cámaras para daguerrotipos.


fo André Adolphe Disdéri en su estudio parisino, allá por el año 1859. A esa primera visita de Napo-león III y Eugenia de Montijo, junto a su hijo, el príncipe heredero, al estudio de Disdéri, atribuyó el fotógrafo coetáneo Félix Nadar la posterior fortuna de su patente, el formato “carte de visite”. A partir de ese momento, toda la aristocracia, nobleza y alta burguesía, no solo francesa, sino europea acudió en masa al estudio de Disdéri, poniendo de moda du-rante más de dos décadas estos retratos de pequeño formato coleccionables. Así lo rememoró años des-pués, el gran fotógrafo parisino Félix Nadar, en sus memorias21:

“Una circunstancia singular, inesperada, ex-cepcional (Disdéri hubiera pronunciado la pa-labra ¡Exclusiva!) contribuyó un día a dar el empujón definitivo a su popularidad, ya de por sí inaudita: Napoleón III, desfilando con gran pompa, a lo largo del bulevar, a la cabeza del cuerpo de la Armada que partía hacia Italia, ¡se detuvo delante del estudio de Disdéri para hacerse fotografiar¡ Y detrás de él, la Armada entera, en formación, armas al hombro, espe-ró hasta que el fotógrafo realizó su retrato al Emperador. Gracias a aquel golpe de efecto, el entusiasmo hacia Disdéri se convirtió en deli-rio; el universo entero conocía su nombre y la dirección de su gabinete.

Sería difícil llevar la cuenta de los millones de personas que pasaron por su establecimiento en aquellos años de abundancia ,y seguramen-te, el que menos la llevó fue ciertamente el propio Disdéri.”22

Confirman la antigüedad y originalidad de estos dos primeros retratos de la familia imperial fran-cesa, la factura artesanal de los mismos: albúminas adheridas sobre tarjetas de corte irregular, no ho-mogéneo, ni estandarizado todavía. Y que el distin-tivo del gabinete de Disdéri, ubicado en el reverso de las tarjetas, todavía no luce el título honorífico de “Photographes de S. M. L’Empereur”, que poco después será habitual en sus tarjetas.

La presencia de estos retratos de la familia impe-rial ilustra sin duda la relación de amistad existente entre los Condes de Sobradiel y la familia de los Condes de Montijo, puesto que, en las páginas del álbum, no solo aparece la emperatriz Eugenia de Montijo, retratada en dos imágenes, sino también su madre, María Manuela Kirkpatrick, y su herma-na “Paca” de Montijo, duquesa de Alba, así como su esposo, el duque y sus hijos23.

También es digna de reseñar la presencia del retra-to de Isabel II en el álbum de los Condes de Sobra-diel. Y no es prescindible esta afirmación, ya que el hijo de los condes, Francisco Cavero y Álvarez de Toledo (Zaragoza, 1838 – Utebo, 1905), militar de carrera, participó como Ayudante de Campo del General Ortega en la fracasada sublevación carlista de abril de 1860. Y, como Ortega, fue condenado a muerte. Sin embargo, Isabel II, intercedió magná-nimamente por el condenado concediéndole el in-dulto. Mucho tuvo que ver en este perdón regio, la amistad de los Condes con la Casa Real, así como su poderoso mundo de influencias y relaciones:

21 NADAR, Félix Tournachon: Quand j’étais photographe, París, 1900.

22 Sin embargo, la sagaz fotohistoriadora Elizabeth Anne McCauley, que reconstruyó a través de la prensa el itinerario del recorrido de este desfile militar presidido por Napoleón III, el día 10 de mayo de 1859, en su obra de referencia A.A.E. Disdéri and the Carte de Visite Portrait (Yale University Press, London, 1985) afirma que el cortejo militar no transcurrió por delante del estudio de Disdéri. Pero, no por ello resta credibilidad al relato de Nadar y propone como hipótesis más razonable que la visita de la familia imperial fuera realizada esa misma tarde. Lo confirmaría especialmente la indumentaria civil y no militar que luce el emperador Napoleón III en esta primera serie de fotografías conocidas y realizadas en el estudio de Disdéri.

23 Ver catálogo, núms. 7 a 14.


“Al enterarse la aristocrática familia de Sobra-diel del riesgo que corría la vida de su hijo, puso en juego todas sus valiosas influencias. Su respetable señora doña María Teresa Ál-varez de Toledo y Palafox, madre de Paco Ca-vero, salió a escape para Madrid en un coche de postas, matando dos caballos en el viaje para llegar pronto a la Corte. Recibida por la reina Isabel, imploró el perdón de su hijo y el de todos los prisioneros.

Para conseguir el indulto intercedieron tam-bién todos los parientes de la casa de Sobra-diel, condesa de la Romana, condesa de Mon-tijo, la emperatriz Eugenia, Medina Sidonia, marqueses de Lazán, duque de Bivona, Fernán Núñez, Xiquena y otras linajudas personali-dades que vivían en íntimo trato con la reina. Cavero y sus compañeros se salvaron, pero no pudo lograrse el indulto del mariscal de cam-po, D. Jaime Ortega.”

(Extracto del manuscrito anónimo, Memorias de un Zaragozano, datado hacia principios del siglo XX24)

Así pues, aun teniendo entre los de su propia san-gre irredentos carlistas, como el propio hijo de los Condes, Francisco Cavero, en un acto de reconoci-miento, gratitud y desagravio, el retrato de Isabel II formó parte siempre del álbum y la memoria familiar de los Condes de Sobradiel.

No podía faltar, tampoco, entre las páginas del álbum de esta familia de marcado carácter tradicionalista y católico, la presencia tanto del retrato del pontífice Pío IX, como los del arzobispo de Zaragoza y poste-riormente cardenal, Fray Manuel García Gil, durante cuyo mandato impulsó la construcción y decoración la cúpula mayor (1866 - 1869) de la basílica del Pilar y la consagración del templo, en 1872.

Por último, son igualmente del mayor interés algunas de las fotografías que ilustran los usos y costum-bres de la suntuosa vida social de la aristocracia española en tiempos de Isabel II. Es decir, junto al retrato de la soprano Adelina Patti, la cantante lírica más célebre y admirada de su tiempo, toda una diva del bel canto, también el álbum se hace eco de los célebres “bailes de trajes” o disfraces que se celebraron los lunes de Carnaval en el madrile-ño palacio de Cervellón de los duques de Fernán Núñez, cuyos retratos, por supuesto forman parte también del álbum. Estos bailes, a los que asistía la reina Isabel II y lo más granado de la aristocracia española, estaban dedicados a la evocación o am-bientación sucesiva de diferentes asuntos históri-cos, en un remedo mundano de los gustos y temas que el género de la pintura de historia ponía de actualidad a través de las exposiciones nacionales de Bellas Artes. Entre los bailes temáticos que a través de los personajes caracterizados y retratados en los gabinetes madrileños de Ángel Alonso Mar-tínez o Pedro Martínez de Hebert, podemos evo-car, descubrimos los dedicados al Quijote (1862) y a la Corte de los Reyes Católicos (1863), así como otros dedicados a Italia y al siglo XVII. Y, entre los escasos personajes que hemos podido reconocer, junto a los duques de Fernán Núñez, encontramos a la condesa Scláfani y a Leonor Lezcano.

Así glosaba la periodista Faustina Sáez de Melgar, en las páginas de la revista La Violeta, el baile de trajes dedicado a la Corte de los Reyes Católicos, en 1863:

“Cuando los Reyes subieron y tomaron asien-to en el salón, empezó a desfilar una brillante comparsa que representaba la antigua Corte de Castilla, en tiempo de Isabel la Católica, fielmente reproducida por los importantes

24 GALÉ CASAJÚS, Enrique: “Un texto desconocido referente a la muerte del general Ortega”, en Boletín informativo Grupo de Historia de Tauste n° 3, Tauste, Agosto del 2002.


personajes que vestían trajes de aquella épo-ca con una exactitud admirable.

Después comenzó el baile, que se prolongó hasta la madrugada, siendo notable la extra-ña mezcla de nombres, épocas y naciones que allí se confundían, ofreciendo a la ima-ginación recuerdos ya sangrientos, ya memo-rables, ya tristes, risueños o gloriosos, según los sucesos, los tiempos o los personajes que cada cual personificaba.[…] ”

Álbumes de los pintores zaragozanos Bernardino Montañés y Mariano Pescador

Del conjunto del legado del pintor Bernardino Montañés (Zaragoza, 1825 – 1893) que, hasta hace unos años, custodiaban los descendientes fami-liares, actualmente en manos de un comerciante, prácticamente la totalidad de las fotografías han sido vendidas y dispersadas irreversiblemente. Esta dispersión del legado de Bernardino Montañés es sintomática de la indiferencia que durante estos años atrás las instituciones tuvieron hacia nuestro patrimonio fotográfico histórico. Estos son los he-chos: En 1996, en colaboración con la Diputación de Zaragoza, la Academia de España en Roma y el Instituto Italiano de Cultura, comisarié una ex-posición que itineró a Roma, Madrid y Zaragoza sobre la importante colección de calotipos y albú-minas de Italia de la colección Montañés. Un con-junto excepcional por su antigüedad (1848-1867) y por el contenido de algunos de sus numerosos calotipos o talbotipos, especialmente los retratos de los pensionados españoles en Roma, etc. Pues bien, después de más de diez años de desinterés hacia el legado por parte de las instituciones, hace aproximadamente un año que todo el legado, indi-

vidualizado fotografía a fotografía, salió a subasta y se dispersó definitivamente, despojando a Aragón uno de los conjuntos más importantes y exclusivos de este periodo fundacional de la historia de la fo-tografía. Solo aquella publicación de 1996 queda hoy como testimonio de aquel singular conjunto.

Pero el legado Montañés, además, conservaba al-gunas otras carpetas con fotografías de Zaragoza (Laurent, Coyne, Júdez, etc.) y unos álbumes con retratos. De todo ese legado fotográfico, quien esto escribe pudo recuperar algunos de los álbu-mes de retratos de familiares y amigos y las albú-minas en formato “carte de visite” de su segundo viaje a Roma, en 1867. De estos álbumes tan solo dos de ellos contienen retratos, y un tercero alber-ga fundamentalmente fotografías de esculturas de la antigüedad greco-romana adquiridas durante su estancia en Italia. Pero la particularidad e interés de los primeros estriba en que, entre sus páginas, con-serva una importante galería de retratos inéditos de artistas locales y nacionales, que viene a ilustrar su mundo de relaciones personales y que hoy damos a conocer en esta muestra. No abundaré mucho en la descripción de dichas imágenes, puesto que están cumplidamente reproducidas y descritas en el apartado de catálogo.

Ya hemos visto que es habitual que los álbumes zaragozanos de época isabelina inicien sus páginas con retratos de la controvertida monarca. En el caso de Montañés parece algo casi obligado, pues-to que el pintor zaragozano llevó a cabo hasta tres retratos al óleo de Isabel II, uno para el Ayunta-miento de la ciudad y dos para el palacio de la Di-putación Provincial. Desgraciadamente ninguno de ellos ha llegado hasta nosotros, puesto que fueron pasto de las llamas durante los incidentes revolu-cionarios de septiembre de 186825. En su legado originario, junto a estas dos fotografías de Isabel II

25 HERNÁNDEZ LATAS, José Antonio: Bernardino Montañés (1825 – 1893). Arte y erudición en la edad de la inocencia, Col. Mariano de Pano, CAI, Zaragoza, 2002.


de Laurent (catálogo núms. 5 y 6), en formato “car-te de visite”, también se hallaban dos albúminas de gran formato, hoy perdidas, firmadas por los fotógrafos Charles Clifford y Jean Laurent, que el zaragozano tomó como modelos para llevar a cabo sus respectivos retratos pictóricos. También resulta en cierto modo previsible la presencia del arzobispo Manuel García Gil, a quien Montañés retrato hasta en dos ocasiones y con quien hubo de entablar es-trecha relación durante su etapa como director de la decoración pictórica de la cúpula mayor del Pi-lar, entre los años 1870 y 1872. Y aún debemos dar cuenta de una imagen fotográfica más, en esta ape-nas esbozada relación entre pintura y fotografía, se trata del retrato del compositor y Maestro de Capilla de La Seo, Domingo Olleta Mombiela (Zaragoza, 1819 - 1895), realizado por el fotógrafo Júdez y que, indiscutiblemente, sirvió de modelo para el posterior retrato pictórico de Montañés, que hoy día se con-serva en las salas de la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis.

Junto a los citados, los álbumes de Montañés alber-gan también los retratos fotográficos de los pintores Mariano Pescador Escárate (Zaragoza, 1816 – 1886), León Abadías Santolaria (Huesca, 1836 – Córdoba, 1894), Vicente Arbiol Rodríguez (Madrid, 1812 – Oviedo, 1876), Eustasio Medina Peñas (+ Zaragoza, 1880), Benito Soriano Murillo (Palma de Mallorca, 1827 – Madrid, 1891), y Ramón García Hernández; del pionero de la arqueología y conservador del Mu-seo de Zaragoza, Paulino Savirón Esteban (Alustan-te, 1827 – Zaragoza, 1890) y del malogrado arqui-tecto madrileño Gerónimo de la Gándara (Ceceñas, 1825 – Madrid, 1879), entre otros.

Para concluir con los álbumes de Bernardino Monta-ñés, comentario aparte merece el retrato también in-édito del pintor y restaurador Vicente Poleró Toledo (Cádiz, 1824 – Madrid, 1899), compañero de estu-

dios de Bernardino Montañés en la Escuela Superior de Pintura de Madrid, en cuyas memorias inéditas dio noticia de la existencia del pintor zaragozano pensionado en Italia, José Ramos Zapetti, apodado por sus compañeros “el nigromántico”, debido a su afición a los experimentos químicos. Según Poleró, en torno a 1837 Ramos Zapetti llegó a conseguir reproducir, mediante la cámara oscura y sobre una placa de cobre, la imagen del interior de su estudio. Es decir, según Poleró, este pintor zaragozano, nada menos que habría aventajado en unos años a Dague-rre en la invención de la fotografía.

En cuanto al álbum del pintor Mariano Pescador Escárate (Zaragoza, 1816 - 1886), profesor de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza, y por cier-to, uno de los más populares artistas de la ciudad gracias a sus escenografías y telones de fondo para el Teatro Principal, tengo la convicción de que su presencia resultaría imprescindible en cualquier re-copilación sobre fotografía zaragozana de los pri-meros tiempos que se precie.

Hace ya algunos años di a conocer pormenorizada-mente su contenido en un artículo a doble página para el periódico Heraldo de Aragón26. Este pequeño álbum de veinticuatro páginas, repujado en piel y que conserva intactos sus cierres metálicos (algo poco habitual), fue un obsequio personal del fotó-grafo zaragozano Mariano Júdez y Ortiz al pintor Mariano Pescador Escárate. En sus guardas, como en el caso del álbum de Andrés Martín Ipás, el fo-tógrafo de su puño y letra dejó la siguiente dedica-toria: “A D. Mariano Pescador / su amigo Mariano Júdez”. A diferencia del álbum de Martín Ipás, aquí no encontramos nuevos autorretratos del fotógra-fo, aunque sí una interesante galería de retratos compuesta por algunos de los más destacados ar-tistas locales y nacionales: los pintores Federico de

26 “Memoria de la Zaragoza de ayer en un álbum fotográfico isabelino”, 13 de abril de 1997.


Madrazo Küntz (Roma 1815 – Madrid, 1894), Ber-nardino Montañés (Zaragoza, 1825 – 1893), Pablo Gonzalvo Pérez (Zaragoza, 1828 – Madrid, 1896) y el propio Mariano Pescador Escárate; los escultores Ponciano Ponzano (Zaragoza, 1813 – Madrid, 1877) y Antonio José Palao Marco (Yecla, 1824 – Zarago-za, 1886) y el escritor, erudito y político Gerónimo Borao (Zaragoza, 1821 - 1878), sin lugar a dudas, uno de los personajes más relevantes de la cultura y las letras aragonesas durante el siglo XIX.

Mariano Pescador y Escárate27, fue el cabeza de fa-milia de una importante dinastía de artistas, en la que figuran los pintores y profesores de Bellas Ar-tes, Serafín, Alejo y Félix Pescador Saldaña. Pero, además, otro de sus hijos, Mariano Pescador Sal-daña se dedicó profesionalmente a la fotografía, estableciendo su gabinete fotográfico en Zaragoza, gracias al apoyo económico de su hermano mili-tar, Ventura Pescador Saldaña. Ambos, Mariano y Ventura, con fecha de tres de mayo de 1882, cons-tituyeron ante el notario Basilio Campos y Vidal la sociedad industrial “en comandita” denominada “Mariano Pescador y Cía”28, para la explotación del

gabinete fotográfico abierto en el céntrico Paseo de la Independencia nº 30. El retrato del futuro fo-tógrafo Mariano Pescador Saldaña, sentado a hor-cajadas de manera informal sobre un silla, junto a otro de sus hermanos, Serafín, fue realizado en el estudio del fotógrafo zaragozano Marcelino García Orga y se conserva, como decimos, en el interior del álbum de su progenitor, Mariano Pescador Es-cárate. Un nuevo rostro que añadir, por fortuna, a la todavía escasa nómina de estos primeros fotó-grafos cuyas fisonomías hemos podido identificar.

En conclusión, este conjunto de álbumes, proce-dentes de los legados familiares de los pintores Bernardino Montañés y Mariano Pescador Escára-te, se constituyen en documentos insustituibles y complementarios entre sí a la hora de evocar el pa-norama o galería iconográfica de los retratos de los artistas zaragozanos y su entramado de relaciones afectivas y profesionales durante la segunda mitad del siglo XIX.

27 Sobre los Pescador, consultar GARCÍA GUATAS, Manuel: “Los Pescador”, Gran Enciclopedia Aragonesa, Zaragoza, 1982. Y del mismo autor: “Telones y teloneros”, Artigrama, nº 10, Zaragoza, 1993 y “La escenografía en el Teatro Principal de Zaragoza”, Artigrama, nº 13, Zaragoza, 1998.

28 Ver la transcripción íntegra del Acta de constitución de la Sociedad “Mariano Pescador y Cía” en el Apéndice documental, nº 1, págs. 215 a 217.

25 Estampas devocionales

Catálogo

Álbum de los Condes de Sobradiel Fabricación: Alphonse Giroux, Bulevard des Capucines, París, ca. 1860

Contiene doscientas fotografías, formato “carte de visite”Cubierta repujada en piel roja, con la Inicial “S.” de Sobradiel, coronada.

Colección particular, Zaragoza


1 Estampa de la Virgen del Pilar

Fotógrafo: Manuel Hortet y Molada, ca. 1878

Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”

Al dorso, los sellos húmedos: “Cabildo Metropolitano de Zaragoza” / “Hortet, fotógrafo, Zaragoza”

Colección particular, Zaragoza.

Reproducción fotográfica de la litografía realizada por Antonio Andrés Oliván en 1878, a partir de la pintura de José Méndez y Andrés, pintor de Cámara de Isabel II.

28Estampas devocionales

2 Estampa de la Virgen del Pilar

Fotógrafo: Anselmo Coyne Barreras, ca. 1878


En relieve, en el anverso: “Coyne, sucesor de Júdez / Zaragoza”


Reproducción fotográfica del detalle de la imagen de Nª Sª del Pilar, extraído de la citada litografía de Antonio Andrés Oliván, realizada en 1878.


3 Estampa de la Virgen del Pilar en su Camarín


Albúmina sobre papel, formato “cabinet card”

Al dorso, litografiado: “A. Coyne / Fotógrafo de la Real Casa /

Plaza de la Constitución, 5, entresuelo, Zaragoza (…)”

Litografiado en el anverso: “Nª Sª del Pilar de Zaragoza”

Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Reproducción fotográfica de la litografía del Camarín de la Virgen del Pilar, realizada en la imprenta y litografía de Antonio Andrés Oliván en Zaragoza, inspirada en estampas previas realizadas respectivamente por Tomás Rocafort y José Lafuente, en las primeras décadas del siglo XIX.

galería de retratos

Cámara de estudioFrancia, ca. 1865

Para placas al colodión húmedo, formato 18 x 18 cms.Objetivo E. Français, París

Colección Boisset-Ibáñez, Zaragoza

33 Monarquía e imperio

4 Isabel II, reina de España (1833 - 1868)

Fotógrafo: Jean Laurent, Madrid, ca. 1860


Al dorso, sello húmedo: “Photographie de J. Laurent / Cª de Sn. Gerónimo, 39”

Álbum de los Condes de Sobradiel


Retrato de tres cuartos de Isabel II. A partir del mismo negativo al colodión, el fotógrafo francés Jean Laurent realizó al menos otra versión del mismo retrato, enmarcado en un formato oval y a mayor tamaño, que se conserva en el Archivo General del Patrimonio Nacional, Madrid.

34Monarquía e imperio





Tercer álbum del pintor Bernardino Montañés


Versiones de frente y de perfil del retrato de Isabel II con traje de gala, bordado con algunos de los emblemas del escudo de armas del Reino, el castillo y el león rampante.






Tercer álbum del pintor Bernardino Montañés



7 Napoleón III, Eugenia de Montijo y su hijo, el príncipe Eugenio Luis Napoleón

Fotógrafo: André Adolphe Disdéri, 1859


Al dorso, sello húmedo: “Photographie de Disdéri & Cie. / 8, Boulevart des Italiens”



Retrato de la familia imperial en su primera visita al estudio de André Adolphe Disdéri, el año 1859.


8 Eugenia de Montijo (Granada, 1826 – Madrid, 1920), emperatriz consorte de Francia

Fotógrafo: André Adolphe Disdéri, París, 1859


Al dorso, sello húmedo: “Photographie de Disdéri & Cie. / 8, Boulevart des Italiens”



Elegante y grácil retrato de la emperatriz Eugenia Guzmán Portocarrero, perteneciente a la primera serie de fotografías, en formato “carte de visite”, tomadas en el estudio de Disdéri en 1859. Alejandro Dumas hijo escribió de ella: “La joven y hermosa condesa de Montijo, graciosa, risueña, libre, elegida por su gracia y su belleza por el jefe de la nación más grande del mundo para ocupar a su lado el primer trono del universo, hacía palidecer de repente la importancia hereditaria y consabida de todas las otras princesas de Europa”.


9 Eugenio Luis Napoleón Bonaparte(París, 1856 - Ulundi, Sudáfrica, 1879),príncipe imperial de Francia

Fotógrafo: André Adolphe Disdéri, París, ca. 1860


Al dorso, sello húmedo: “Disdéri & Cie. / Photographes de S.M. L’Empereur / 8, Boulevart des Italiens / Paris”



Retrato del príncipe imperial, hijo de Napoleón III y Eugenia de Montijo, como tambor de granaderos del ejército francés. Tras proclamarse la III República francesa, se exilió a Bélgica junto a su familia y posteriormente a Gran Bretaña, donde se incorporó al ejército británico. Con tan solo veintitrés años, falleció en la guerra contra los zulúes.


10 María Manuela Kirkpatrick (Málaga, 1794 – Carabanchel, 1879), condesa de Montijo



Al dorso, sellos húmedos: “Disdéri & Cie. / Photographes de S.M. L’Empereur / 8, Boulevart des Italiens / Paris” y “A. Giroux & C”



Retrato de la madre de Eugenia, emperatriz de Francia, y de María Francisca de Sales “Paca”, duquesa de Alba. De ascendencia escocesa, María Manuela fue hija de William Kirkpatrick, cónsul de EE.UU. en Málaga, y contrajo matrimonio con Cipriano Palafox Portocarrero, conde de Tebas. María Manuela promovió en su casa de Madrid continuas reuniones, tertulias y fiestas.


11 Jaime Fitz James Stuart(Palermo, 1821 – Madrid, 1881), duque de Alba






Esposo de María Francisca de Sales, popularmente conocida como “Paca”, hermana de la emperatriz Eugenia de Montijo. Formó parte de la Corte imperial de Napoleón III.


12 María Francisca de Sales Guzmán (1825 - 1860), duquesa de Alba y condesa de Montijo






Retrato de “Paca de Montijo”, hermana de la emperatriz Eugenia, de cuya Corte imperial formó parte.


13 María Francisca de Sales Guzmán, duquesa de Alba y sus hijos






Entrañable retrato de familia de “Paca de Montijo” con sus hijos Carlos María, María de la Asunción y María Luisa.


14 Carlos María Fitz James Stuart(1849 – Nueva York, 1901),hijo de los duques de Alba en traje escocés






Retrato del primogénito de los duques de Alba, con indumentaria alusiva a sus antecedentes escoceses por parte de su abuelo materno, William Kirkpatrick.


15 Amadeo I, rey de España (1870 - 1873)

Fotógrafo: Comercializado por Mariano Júdez y Ortiz, 1871-1873, a partir del original realizado por Pedro Martínez de Hebert, Madrid.


Al dorso, litografiado: “Gabinete fotográfico de Mº Júdez / medalla de cobre Exposición Regional Aragonesa de 1868 / Zaragoza / Coso, 33, último piso”

Colección Francisco Javier Júdez Pastor, Barcelona.

Retrato oval del monarca de origen italiano, Amadeo I, de breve reinado, del que conocemos dos versiones: una firmada por el fotógrafo madrileño Pedro Martínez de Hebert y otra por el gabinete zaragozano de Mariano Júdez y Ortiz.


16 María Victoria del Pozo dalla Cisterna, reina consorte de España (1870 - 1873)

Fotógrafo: Comercializado por Mariano Júdez y Ortiz, 1871 - 1873, a partir del original de Pedro Martínez de Hebert, Madrid.


Al dorso, litografiado: “Gabinete fotográfico de Mº Júdez / medalla de cobre Exposición Regional Aragonesa de 1868 / Zaragoza / Coso, 33, último piso”

Colección Francisco Javier Júdez Pastor, Barcelona

Retrato oval de la reina consorte, perteneciente a la misma sesión fotográfica que la fotografía precedente, en la que ambos monarcas posaron tanto individualmente, como juntos, presumiblemente en el estudio madrileño de Pedro Martínez de Hebert.

46Jerarquía eclesiástica

17 El pontífice Pío IX (1846 - 1878)

Fotógrafo: Comercializado por Mariano Júdez y Ortiz, 1862 - 1864


Al dorso, litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 35 frente a la Fuente / Zaragoza”

Álbum de Hilarión Júdez y Ortiz

Colección Paz y Pilar Zoppetti de la Pardina, Zaragoza

Sendos retratos de Giovanni Mastai Ferretti, beato Pío IX, uno comercializado en el gabinete zaragozano de Mariano Júdez y otro procedente del estudio romano de los Hermanos Alessandri. En los retratos oficiales de Pío IX es recurrente la presencia iconográfica de la Inmaculada Concepción, cuyo dogma proclamó el propio pontífice en 1854. Cuando años antes, en 1849, fue proclamada la II República Romana y hubo de huir a Gaeta (Reino de las Dos Sicilias), España, junto a una coalición de potencias católicas, acudió en su auxilio y contribuyó al derrocamiento de la República y a su restitución en el trono pontificio.

47 Jerarquía eclesiástica

18 El pontífice Pío IX (1846 - 1878)

Fotógrafo: Fratelli D’Alessandri, Roma, ca. 1860


Al dorso, litografiado: “Fratelli D’Alessandri / Roma / Via del Corso… / Ritratti originali di SS. Pio IX (…)”




19 Fray Manuel García Gil, arzobispo de Zaragoza (1859 - 1877)

Fotógrafo: Antonio Gascón, 1862


Al dorso, sello húmedo: “Fotografía Gascón / Coso esquina / a la de la Soledad, 2, 5º / Zaragoza”

Inscripción manuscrita sobre la página del álbum: “El Sr. Arzobispo García Gil 1862. + 1881”

Álbum 2º de Bernardino Montañés


Retratos oval, de busto y de cuerpo entero del Arzobispo Fray Manuel García Gil, realizados respectivamente en gabinetes zaragozanos de Antonio Gascón y Mariano Júdez. Eminente teólogo dominico, originario de San Salvador de Camba (Galicia), austero y caritativo en extremo, a decir de Juan Moneva. Durante su mandato impulsó la construcción y decoración la cúpula mayor (1866-1869) de la basílica del Pilar y la consagración del templo, en 1872.

49 Jerarquía eclesiástica

20 Fray Manuel García Gil, arzobispo de Zaragoza (1859 - 1877)

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1862 - 1864


Al dorso, litografiado: “Júdez / Fotógrafo / Coso, 35 frente a la Fuente, último piso”




21 Fray Manuel García Gil, cardenal arzobispo de Zaragoza (1877 - 1881)

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1877


Al dorso, litografiado: “Sabaté / Fotógrafo / Paso Torresecas, nº 5 / Detrás de la Fonda de las 4 Naciones / Zaragoza”



Retrato sedente de Fray Manuel García Gil con el hábito y birrete cardenalicios, tomado en el estudio zaragozano de Sabaté.

51 Primeros fotógrafos y su entorno

22 El fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz(Zaragoza, 1832 - 1874), autorretrato

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, ca. 1861Albúmina sobre papel, 23 x 17 cms.Álbum de Andrés Martín IpásColección Mariano Martín Casalderrey, Zaragoza

Soberbio autorretrato, por su formato, calidad y óptimo estado conservación, del fotógrafo zaragozano, encartado en el álbum de Andrés Martín Ipás, en cuya página opuesta se lee la siguiente dedicatoria manuscrita en grandes letras rotuladas: “A. Dn. Andrés Martín en prueba de eterna gratitud / el fotógrafo M. J.”.

52Primeros fotógrafos y su entorno

23 Tomasa Chinar y Torrente, esposa del fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, ca. 1861

Albúmina sobre papel, 23 x 17 cms.

Álbum de Andrés Martín Ipás

Colección Mariano Martín Casalderrey, Zaragoza

Retrato también encartado en el álbum de Andrés Martín e Ipás, en página contigua al de su esposo, el fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz. Tras enviudar en 1874, Tomasa Chinar estableció un acuerdo comercial con el fotógrafo Anselmo María Coyne para la explotación del gabinete fotográfico del Coso nº 33, que había regentado el difunto Júdez. La nueva sociedad industrial pasó a denominarse inicialmente “Júdez y Coyne”, y posteriormente, a partir de 1877, “Coyne y compañía, sucesores de Júdez”.






Dedicatoria manuscrita al dorso: “A D. Bernardino Montañés, su amigo Mariano Júdez”

Álbum del pintor Bernardino Montañés


Retrato sedente del fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz, aparentemente irreconocible en su oficio de fotógrafo si no fuera por la presencia del elegante batín de trabajo como parte de su indumentaria. El retrato, con dedicatoria manuscrita al dorso, se constituye en elocuente testimonio de la relación de amistad establecida entre Júdez y el pintor zaragozano Bernardino Montañés, en cuyo álbum fotográfico se ha conservado hasta nuestros días.


25 El fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz(Zaragoza, 1832 - 1874),autorretrato con indumentaria de trabajo






Excepcional autorretrato de Mariano Júdez como fotógrafo, es decir con su birrete, batín y sujetando en su mano izquierda el reloj cronómetro con el que medir con precisión el tiempo de exposición de cada fotografía. Caracterización habitual de los fotógrafos de gabinete del siglo XIX, a la que solo le faltaría la cámara fotográfica de estudio como parte del autorretrato.



Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1864 - 1868Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Al dorso, litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 33 frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”Álbum de Hilarión Júdez y OrtizColección Paz y Pilar Zoppetti de la Pardina, Zaragoza

A diferencia del anterior autorretrato, caracterizado como fotógrafo, en este nuevo autorretrato de gabinete, Mariano Júdez posa elegantemente, ataviado con levita y chistera en mano.


27 Tomasa Chinar y Cayetana Luis, esposa y cuñada, respectivamente, del fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz



Al dorso, litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 33 frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”



Escenográfica composición de Tomasa Chinar y Cayetana Luis, mujer y cuñada respectivamente del fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz, representando la contemplación compartida de un simbólico álbum de fotografías.


28 Los hermanos Mariano y Joaquín Júdez Ortiz, sus respectivas esposas y su cuñada.

Fotógrafo: Leandro, Pamplona, ca. 1859


Al dorso, litografiado: “Fotografía de Leandro / Pamplona”

Inscripción manuscrita a lápiz, al dorso: “Tía Mariquita, Tomasa, Joaquín y su mujer, hermanos del bisabuelo”



Equilibrada composición oval del retrato de grupo de la familia Júdez, tomada en el estudio pamplonés de Leandro. De izquierda a derecha y de arriba abajo, los retratos de Joaquín Júdez y su mujer (de nombre desconocido), Tomasa Chinar, el fotógrafo Mariano Júdez y Cayetana Luis, mujer de Hilarión Júdez. La naturalidad y desenfado con el que algunos de los retratados descansan o se apoyan sobre los otros, no es sino un inteligente recurso compositivo que garantiza al grupo mantener la necesaria estabilidad durante el tiempo de posado.


29 El pintor León Abadías Santolaria(Huesca, 1836 – Córdoba, 1894),ayudante en el gabinete de Mariano Júdez






Único retrato fotográfico publicado hasta la fecha del pintor oscense, que se incorporó en 1861 al gabinete fotográfico de Mariano Júdez como colaborador, con el objeto de retocar y colorear manualmente los positivos fotográficos. Tan solo dos años después, en 1863, abandonó el estudio de Júdez para incorporarse como catedrático interino de Dibujo en el Instituto General y Técnico de Huesca, donde por cierto, tuvo entre otros ilustres alumnos a Santiago Ramón y Cajal.


30 El fotógrafo Anselmo María Coyne Barreras (Pamplona, 1829 - Zaragoza, 1896)

Fotógrafo: Anselmo Coyne, Pamplona, ca. 1873


Al frente, en relieve: “Coyne y Marín / Pamplona”



Autorretrato oval de Anselmo María Coyne Barreras realizado en el estudio pamplonés de Coyne y Marín. Resulta más que razonable la presencia del retrato de Coyne en el álbum de Hilarión Júdez, ya que tras el fallecimiento de su hermano Mariano Júdez en 1874, Anselmo Coyne estableció un acuerdo comercial con la viuda de éste, Tomasa Chinar, con el objeto de explotar conjuntamente su gabinete fotográfico del Coso nº 33.


31 El fotógrafo Mariano Pescador Saldaña

Fotógrafo: Marcelino García Orga, ca. 1865


Inscripción manuscrita en el reverso: “A mi querido hermano M. Pescador / hoy 6 de octubre”

Al frente, en relieve: “Mº García / Fotógrafo / Sitios, 2 / Zaragoza”

Álbum del pintor Ventura Pescador Saldaña

Colección Luis Alfonso Mesa Bandrés, Barbastro (Huesca).

Retrato individual del futuro fotógrafo, Mariano Pescador, dedicado a su hermano, el militar Ventura Pescador Saldaña, con quien establecerá la sociedad “Mariano Pescador y Compañía” en 1882, para la explotación del gabinete fotográfico ubicado en el Paseo de la Independencia, nº 30.


32 El fotógrafo Mariano Pescador Saldaña y su hermano Serafín, profesor de Dibujo



Al frente, en relieve: “Mº García / Fotógrafo / Sitios, 2 / Zaragoza”

Álbum del pintor Mariano Pescador Escárate

Colección Luis Alfonso Mesa Bandrés, Barbastro (Huesca)

Escenográfica y desenfadada composición del retrato de los hermanos Pescador Saldaña en el gabinete de Marcelino García. El fotógrafo zaragozano Mariano Pescador Saldaña regentó años más tarde su propio gabinete en el Paseo de la Independencia, nº 30, formando sociedad con otro de sus hermanos, de nombre Ventura y militar de profesión.


33 El fotógrafo Joaquín Júdez Luis, niño(Zaragoza, ca. 1859 - 1922)



Reverso litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 33 / frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”



Retratos, a diferentes edades, del fotógrafo Joaquín Júdez Luis, sobrino del también fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz e hijo de Hilarión Júdez y Ortiz. Se estableció como fotógrafo en 1882, junto a Román Larruy, en su gabinete de la calle Alfonso I, nº 28, para posteriormente independizarse y, en sus últimos años, trasladar su gabinete a la calle Torre Nueva, nº 41.


34 El fotógrafo Joaquín Júdez Luis(Zaragoza, ca. 1859 - 1922)



Al dorso, litografiado: “Hortet / Fotógrafo de SS.MM. / Méndez Núñez, 14 / Comisión de Monumentos Artísticos / Exp. Aragonesa y Ateneo Zaragozano”




35 El fotógrafo Joaquín Júdez Luis(Zaragoza, ca. 1859 - 1922)

Fotógrafo desconocido, ca. 1880





36 El fotógrafo Lucas Escolá Arimany(Sarriá, Barcelona, 1857 – Zaragoza, 1930),su hermano el pintor Salvador Sarriá, 1854 – Madrid, 1905)y un tercer personaje desconocido en el estudio de Venancio Villas

Fotógrafo: Venancio Villas, 1880


Colección Carmen Baras Escolá, Zaragoza

En torno a un velador y sobre la alfombra inconfundible del gabinete fotográfico de Venancio Villas, los tres personajes escenifican una amigable reunión. A pesar de la deficiente conservación de la imagen, el retrato de grupo presenta el mayor interés, puesto que junto a los hermanos Escolá se encuentra un tercer personaje, no identificado, que presumiblemente podría ser el dueño del gabinete, el propio Venancio Villas, o incluso otro fotógrafo relacionado familiarmente con los hermanos Escolá, el también fotógrafo Gregorio Sabaté Férriz, suegro de ambos.


37 Petra Sabaté Espinosa, hija del fotógrafo Gregorio Sabaté Férriz y futura esposa del también fotógrafo Lucas Escolá Arimany

Fotógrafo: Gregorio Sabaté, ca. 1860

Al dorso, litografiado: “Sabaté / Fotógrafo / Paseo de Torresescas, nº 5 / Detrás de la Fonda de las 4 Naciones / Zaragoza”



Petra Sabaté Espinosa contrajo matrimonio en 1884 con Lucas Escolá, quien abrió su gabinete de fotografía en el Paseo de la Independencia nº 26.


38 María Sabaté Espinosa, hija del fotógrafo Gregorio Sabaté Férriz y futura esposa del pintor Salvador Escolá Arimany

Fotógrafo: Gregorio Sabaté, ca. 1875

Al dorso, litografiado: “GS / Establecimiento fotográfico de G. Sabaté / Coso 13, Zaragoza / Frente al arco de S. Roque”



María Sabaté Espinosa, vestida como hortelana. Contrajo matrimonio con el pintor Salvador Escolá en 1884.


39 El pintor Salvador Escolá Arimany(Sarriá, Barcelona, 1854 – Madrid, 1905),yerno del fotógrafo Gregorio Sabaté y hermano del también fotógrafo Lucas Escolá

Fotógrafo: Carneiro & Gaspar, Brasil, ca. 1875

Al dorso, litografiado: “Carneiro & Gaspar / 60, Rua de Gonçalves Días, Río de Janeiro / 58, Rua da Imperatriz / Sao Paulo / Casa em Paris / Rua de Rivoli, 79”



Retrato frontal de Salvador Escolá en el que se identifica su rasgo fisionómico más característico, la pérdida de su ojo derecho. Pintor especializado en el género del retrato, fue pensionado en Roma por la Academia de Bellas Artes de San Jorge de Barcelona, y posteriormente, su peripecia vital le llevó a Uruguay, Brasil, Zaragoza, Portugal y finalmente a Madrid.

69 Escultores, pintores y arquitectos

40 El escultor Ponciano Ponzano y Gascón (Zaragoza, 1813 – Madrid, 1877)

Fotógrafo: Rafael Castro Ordóñez, Madrid, ca. 1862


Al frente, litografiado: “Galería de los Contemporáneos / R. Castro, fotogº”



Célebre autor, entre otras muchas obras, del frontón y los leones del palacio del Congreso de los Diputados en Madrid, cuyo retrato, comercializado en el estudio madrileño de Rafael Castro, formaba parte de una escogida serie de retratos de personalidades de la nación, conocida como “Galería de los Contemporáneos”.

70Escultores, pintores y arquitectos

41 El escultor Antonio José Palao Marco(Yecla, Murcia, 1824 – Zaragoza, 1886),profesor y director de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1862- 1864


Al dorso, litografiado: “M Júdez / Fotógrafo / Coso, 35 frente a la Fuente / Zaragoza”



Interesante fotografía de estudio, que nos permite contemplar uno de los trípodes para cámara fotográfica del estudio de Mariano Júdez y Ortiz, en esta artificiosa composición en la que Antonio Palao posa caracterizado como escultor, junto a uno de sus bocetos, compás en una mano, y maza y gubia en la otra. La elegancia de su indumentaria, impropia del trabajo de taller, delata la artificiosidad de la puesta en escena.


42 María Concepción Ortubia, señora de Palao (Zaragoza, 1832 - ¿?) con su bebé en el regazo







43 El pintor Mariano Pescador y Escárate(Zaragoza, 1816 - 1886),escenógrafo del Teatro Principal y profesor de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza






Mariano Pescador y Escárate fue el cabeza de familia de una dinastía de artistas, entre los que destacan los también pintores Serafín, Alejo y Félix y el fotógrafo homónimo, Mariano Pescador Saldaña. El retratado oculta, con naturalidad, su mano izquierda en el bolsillo del pantalón, puesto que con motivo de los trabajos llevados a cabo en el retablo mayor de la Catedral de Murcia, sufrió una sajadura en uno de sus dedos.


44 Manuela Saldaña, señora de Pescador

Fotógrafo: Santos Álvarez, ca. 1866


Al dorso, litografiado: “Fotografía Zaragozana / Coso 35”



Interesante advertir una vez más, la utilización de un fondo pintado, reproduciendo la escenografía de un jardín y fuente manando agua, como recurso habitual en estos primeros gabinetes fotográficos, con la finalidad de conceder una mayor sensación de profundidad al retrato.


45 Ana Ascaso de Moncasi, pintora y cantante lírica aficionada, Socia de Mérito de la Real Academia de Nobles y BB.AA. de San Luis.






Además, participó en los recitales y exposiciones artísticas celebradas en el Liceo Artístico y Literario de Zaragoza. A partir de esta fotografía y de la de su marido, Francisco Moncasi, el pintor Bernardino Montañés pintó sus respectivos retratos al óleo.


46 Francisco Moncasi, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Zaragoza






Uno de los escasos retratos fotográficos conocidos de los responsables políticos de la ciudad en tiempos de Isabel II, junto con el de quien fuera alcalde, Jaime Muntadas Campeny, también presente en la actual muestra. A pesar de la coincidencia onomástica, no tiene relación con la popular y conflictiva calle zaragozana, dedicada a la memoria de José Moncasi Sangenis.


47 Paulino Savirón Esteban(Alustante, Guadalajara, 1827 – Zaragoza, 1890), arqueólogo conservador del Museo de Zaragoza y del Museo Arqueológico Nacional



Al dorso, etiqueta: “Hortet / Fotógrafo / Moscas 65”



Uno de los personajes clave en la consolidación de la Arqueología como disciplina científica en España. Primer conservador del Museo de Zaragoza (1866-1869), autor en colaboración de su primer catálogo impreso (1867) y uno de los primeros conservadores del Museo Arqueológico Nacional (1869-1890), Savirón formó parte de diferentes comisiones provinciales de monumentos y fue corresponsal de las Academias de Bellas Artes de San Fernando y de la Historia en Madrid. Además, durante sus inicios profesionales en Zaragoza, ejerció como profesor de Dibujo, Composición y Colorido en la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza (1849-1869).


48 Paulino Savirón Esteban(Alustante, Guadalajara, 1827 – Zaragoza, 1890), arqueólogo conservador del Museo de Zaragoza y del Museo Arqueológico Nacional



Al dorso, sello húmedo: “Hortet / Fotógrafo / Zaragoza”




49 El pintor Eustasio de Medina y Peñas (¿? - Zaragoza, 1880), profesor y director de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza

Fotógrafo: Fotografía Franco-Hispana, Zaragoza, ca. 1860


Al dorso, litografiado: “Franco-Hispana / Fotografía de Cámara de SS.MM. / Sitios, 2, 3º / Zaragoza”



Profesor de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza desde 1851 y vocal de la Junta de Restauración de la Aljafería, fue miembro de las Academias de Bellas Artes de San Luis, de Barcelona y corresponsal de la madrileña de San Fernando.


50 El pintor y erudito Bernardino Montañés Pérez (Zaragoza, 1825 – 1893), profesor y director de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza, miembro de la Comisión de Monumentos y conservador del Museo de Zaragoza



Al dorso, etiqueta: “Hortet / Fotógrafo / Moscas 65”



Una de las personalidades artísticas más relevantes de la Zaragoza de la segunda mitad del siglo XIX, autor y director del proyecto de decoración de la cúpula mayor del Pilar y de una importante galería de retratos de la sociedad zaragozana del ochocientos. Fue compañero y amigo del también pintor Mariano Pescador y Escárate, en cuyo álbum de fotografías se conserva este retrato fotográfico.


51 El pintor Vicente Arbiol y Rodríguez(Madrid, 1812 – Zaragoza, 1876),profesor de la Escuela de Bellas Artes de Zaragoza

Fotógrafo: L. Gordon, 1863


Al frente, litografiado: “L. Gordón / Oviedo”

Inscripción manuscrita en el anverso: “1863 / + en Jul. De 1876”



Pintor, litógrafo e ilustrador, fue secretario de la Academia de Bellas Artes de Oviedo, miembro de la Comisión de Monumentos de la misma ciudad y académico de las de San Fernando en Madrid y de San Luis en Zaragoza.


52 El pintor Pablo Gonzalvo Pérez(Zaragoza, 1828 – Madrid, 1896),profesor de Perspectiva en la Escuela Superior de Bellas Artes de Madrid.

Fotógrafo: Eusebio Juliá, Madrid, ca. 1860


Al dorso, litografiado: “E. Juliá / Fotógrafo / Príncipe, 37 / Madrid”



Pintor especializado en vistas urbanas y perspectivas arquitectónicas, fue uno de los pintores aragoneses que más altos galardones cosechó en los certámenes nacionales de Bellas Artes: hasta tres primeras medallas en los de 1860, 1862 y 1864, entre otros galardones menores. E igualmente cosechó sonados éxitos en su participación en las exposiciones internacionales de Londres, París, Viena, Filadelfia, etc. A su muerte dejó inconcluso un Tratado de Perspectiva, todavía inédito.


53 El pintor, erudito y restaurador Vicente Poleró Toledo (Cádiz, 1824 – Madrid, 1899)

Fotógrafo: Jean Laurent, ca. 1865


Al dorso, litografiado: “J. Laurent / Fotógrafo de S.M. la Reina / y de sus AA.RR. los Infantes de España / 39, Carrera de S. Gerónimo / Madrid”



Discípulo de la Escuela Superior de Bellas Artes de Madrid y pintor especializado en paisajes y perspectivas, orientó su carrera hacia la restauración y conservación de obras pictóricas. Fue nombrado restaurador del Real Museo de Pintura y Escultura que dirigía José de Madrazo y publicó su obra pionera en el género Arte de la restauración. Observaciones relativas a la restauración de cuadros (1853) y un Tratado de la Pintura en general (1886), entre otras obras. En sus memorias inéditas, según publicó Francisco Alcántara, dio noticia de un enigmático pintor zaragozano pensionado en Italia, José Ramos Zappetti, quien según Poleró, llegó a inventar la fotografía algunos años antes que Daguerre.


54 El pintor Federico de Madrazo y Küntz(Roma, 1815 – Madrid, 1894),profesor de la Escuela Superior de Bellas Artes de Madrid y director del Museo del Prado



Al dorso, litografiado: “J. Laurent / Fotógrafo de S.M. la Reina / 39, Carrera de S. Gerónimo / Madrid”



El más notable e influyente pintor de la era isabelina, dictador del gusto en el género del retrato y miembro de una importante saga de artistas. Fue maestro, compañero en labores docentes y amigo del pintor zaragozano Bernardino Montañés, uno de los pocos artistas a los que cita con agradecimiento en sus memorias.


55 Cecilia de Madrazo Garreta (1846 - 1932),hija del pintor Federico de Madrazo y esposa del también pintor Mariano Fortuny

Fotógrafo: Léopold Ernest Mayer y Pierre-Louis Pierson, París, ca. 1860


Al dorso, litografiado: “Mayer & Pierson, Photographes de S.M. L’Empereur / Boulevart des Capucines, 3 / Paris”



Curiosos retratos de las hermanas Cecilia e Isabel de Madrazo, en el estudio parisino de Mayer & Pierson, testimonio de la complicidad existente entre ambas, que posan una tras otra con la misma indumentaria, seguramente confeccionada por alguno de los afamados modistos de París.


56 Isabel de Madrazo Garreta (1845 - 1906),hija del pintor Federico de Madrazo Küntz

Fotógrafo: Léopold Ernest Mayer y Pierre-Louis Pierson, ca. 1860






57 El pintor Carlos de Haes(Bruselas, 1829 – Madrid, 1898),catedrático de Paisaje de la Escuela Superior de BB.AA. de San Fernando en Madrid




Colección Pieter C. de Haes, Eindhoven (Holanda)

Retratos de frente y de espaldas, del célebre paisajista Carlos de Haes, tomados en el gabinete zaragozano de Mariano Júdez. Ambos, pintor y fotógrafo, debieron conocerse y trabar amistad en sus respectivas visitas al Monasterio de Piedra, en torno a 1866, acogidos por la generosa hospitalidad del matrimonio Muntadas.


58 El pintor Carlos de Haes(Bruselas, 1829 – Madrid, 1898),catedrático de Paisaje de la Escuela Superior de BB.AA. de San Fernando en Madrid




Colección Pieter C. de Haes, Eindhoven (Holanda)


59 El pintor Ramón García Hernández, discípulo del zaragozano Bernardino Montañés en la Escuela Superior de Bellas Artes de Madrid

Fotógrafo: A. Alonso Martínez y hermano, Madrid, ca. 1870


Al dorso, litografiado: “Madrid / A. Alonso Martínez y hermano / Puerta del Sol, 14 3º”

Inscripción manuscrita sobre la página del álbum: “D. Ramón García (1875) Hernández”




60 Los niños Rafael (fotomontaje), “Conchita” y Ricardo, hijos del pintor Ramón García Hernández

Fotógrafo: Gonzalo Langa, ca. 1870


Al dorso, litografiado: “G. Langa / Fotógrafo / Madrid / Fuencarral, 2”

Inscripción manuscrita, en el anverso: “Rafaelita, 18 meses / Conchita 6 y ½ años / Ricardito 4 años y 7 meses”



Debido a la todavía escasa fotosensibilidad del colodión húmedo, era preciso que los retratados permanecieran absolutamente inmóviles durante los segundos de posado. Para salvar esa dificultad añadida en el caso de los niños, no es infrecuente que para componer la fotografía definitiva sea necesario recurrir a utilizar varias fotografías distintas y realizar un fotomontaje artesanal con ellas. Adviértase en este caso el recorte silueteado del rostro del niño “Rafaelito” a la izquierda de la imagen.


61 El pintor Benito Soriano Murillo(Palma de Mallorca, 1827 – Madrid, 1891),subdirector del Museo Nacional de la Trinidad y Director General de Bellas Artes



Al dorso, litografiado: “Photographie de / J. Laurent / Cª de S. Gerónimo, 39”



Simpática pose en ademán de saludo, del pintor Benito Soriano Murillo, que fue compañero de pensionado en Italia del pintor zaragozano Bernardino Montañés, en cuyo álbum reposa este retrato fotográfico. Fue nombrado Académico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y Caballero de la Orden de Carlos III.


62 El arquitecto Gerónimo de la Gándara(Ceceñas, Cantabria, 1825 – Madrid, 1879), catedrático de la Escuela Especial de Arquitectura de Madrid

Fotógrafo: Pedro Martínez de Hebert, Madrid, ca. 1860


Al dorso, litografiado: “M. de Hebert / Retratista de la Real Cámara de SS.MM. y AA. RR. /

Caballero de Gracia, 30 y 32 / Galería de Cristales”

Inscripción manuscrita sobre la página del álbum: “Gerónimo de la Gándara. Arquitecto. Madrid,

falleció en 1879”



Número uno de su promoción en la Escuela Especial de Arquitectura de Madrid y compañero de pensionado en Italia del pintor zaragozano Bernardino Montañés, en cuyo álbum se conserva este retrato. Entre otras obras, De la Gándara fue autor del Pabellón español en la Exposición Universal de París en 1867, y de los teatros de la Zarzuela en Madrid, y los de Lope de Vega y Calderón en Valladolid.


63 Juan Antonio Atienza y García(Alcázar de San Juan, Ciudad Real ¿? – Zaragoza, 1880), arquitecto provincial

Fotógrafo: Enrique Beltrán Aznárez ca. 1885 (reproducción de una fotografía anterior de Hortet, ca. 1865)


Al dorso, litografiado: “Estudio fotográfico de / Enrique Beltrán / Sucesor de Hortet / Méndez Núñez, 14 / Zaragoza”


Académico de la Real de Nobles y Bellas Artes de San Luis y miembro de la Comisión Provincial de Monumentos Históricos de Zaragoza. Proyectó junto al arquitecto José de Yarza Miñana la cúpula mayor de la basílica del Pilar, que fue erigida entre 1866 y 1869. A partir de la fotografía original, el pintor Bernardino Montañés pintó su retrato al óleo en 1865.


64 Pilar del Cerro Pérez (Zaragoza, 1846 - 1890), señora del arquitecto Juan Antonio Atienza






En el retrato fotográfico Pilar del Cerro luce las joyas adquiridas por su marido en una de las subastas efectuadas para la financiación de las nuevas obras de la basílica del Pilar. Fue retratada al óleo en 1869 por el pintor Bernardino Montañés, tal vez, tomando como referencia esta misma fotografía.

94Escritores, historiadores y eruditos

65 Gerónimo Borao y Clemente(Zaragoza, 1821 – 1878), erudito, escritor y político






Único retrato fotográfico conocido de Gerónimo Borao y Clemente, que fue además rector de la Universidad Literaria de Zaragoza. Sin lugar a dudas, uno de los personajes más relevantes de la cultura y las letras aragonesas durante el siglo XIX. Fundador del Liceo Artístico y Literario local y colaborador en la revista romántica La Aurora. Fue autor del Diccionario de voces aragonesas (1859) y de los dramas históricos Las hijas del Cid (1842) y Los Fueros de la Unión (1862), entre otras obras. El retrato fue realizado en el gabinete del Coso nº 35 cuando Borao contaba alrededor de cuarenta y tres años de edad.

95 Escritores, historiadores y eruditos

66 Retrato pictórico de Cipriano Muñoz y Manzano (La Habana, 1862 – Biarritz, 1933), Conde de la Viñaza, Senador por las provincias de Matanzas (Cuba) y Huesca, lingüista e historiador del arte y la literatura

Fotógrafo: Mariano Pescador Saldaña, ca. 1885


Reverso litografiado: “M. Pescador / Fotógrafo / Independencia, 30 / Zaragoza”

Legado del pintor Bernardino Montañés


De familia nobiliaria aragonesa, fue embajador español en Rusia, Italia y ante el Vaticano y Diputado entre 1891 y 1893. Autor entre otras obras del ensayo biográfico: Goya, su tiempo, su vida, sus obras (1887). En la biblioteca del pintor Bernardino Montañés, que facilitó al Conde de la Viñaza la consulta de su colección de dibujos de Goya, se encontraba un ejemplar dedicado por el autor y en sus guardas, se hallaba el retrato fotográfico realizado por el gabinete zaragozano de Mariano Pescador.


67 Juan Federico Muntadas Jornet(Barcelona, 1826 - 1912),doctor en Filosofía y Letras, escritor, político y propietario del Monasterio de Piedra.



Anverso, litografiado: “Mº Júdez Fotógº / Álbum / Coso, 33 / Zaragoza”

Colección Muntadas Prim, Monasterio de Piedra, Zaragoza.

Principal artífice de la difusión de las bellezas naturales del río Piedra a través de escritos como El Monasterio de Piedra. Su historia y descripción (1871) y, sobre todo, acogiendo sucesivamente en la hospedería del monasterio a un selecto grupo de artistas, escritores y otras relevantes personalidades de su tiempo. Hombre de letras, fue autor de unos Ensayos poéticos (1848), del drama Deudas pagadas (1856) y de la novela Vida y hechos de Gil Pérez de Marchamalo (1866), crítica mordaz, en la mejor tradición de la novela picaresca hispana, de la vida pública y política en tiempos de Isabel II.


68 Juan Federico Muntadas Jornet(Barcelona, 1826 - 1912),doctor en Filosofía y Letras, escritor, político y propietario del Monasterio de Piedra



Anverso, litografiado: “Mº Júdez Fotógº / Álbum / Coso, 33 / Zaragoza”

Colección Muntadas Prim, Monasterio de Piedra, Zaragoza


69 Carmen Muntadas Mariñosa(Zaragoza, 1842 - 1910),esposa de Juan Federico Muntadas



Reverso, litografiado: “MJ / Coso 33 / Medalla de cobre / Exposición 1868 / Zaragoza”


El talle poco ceñido por su amplia indumentaria, induce a pensar que en el momento de la fotografía Carmen Muntadas estaba embarazada de su tercer hijo, de nombre Ramón. Carmen Muntadas fue la perfecta cómplice de Juan Federico Muntadas en la empresa de acoger generosamente en su residencia del Montasterio de Piedra a ilustres personalidades de las artes, las letras y la política españolas de su tiempo.


70 Pilar Muntadas Muntadas (Zaragoza, 1864 - 1919), hija de Juan Federico Muntadas y Carmen Muntadas Mariñosa, en su carrito de paseo

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1864


Reverso litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 35 frente a la Fuente / Zaragoza”


Inusual retrato de exterior, realizado por el fotógrafo Mariano Júdez, de la niña Pilar Muntadas en su carrito de mimbre y tres ruedas, en lo que parece el entorno del Monasterio de Piedra. Durante su edad adulta, Pilar Muntadas fundó y dirigió una Escuela de Magisterio para mujeres en el propio Monasterio de Piedra.


71 Jaime Muntadas Campeny (Igualada, Barcelona, 1802 – Nuévalos, Zaragoza, 1899), alcalde de Zaragoza entre 1856 y 1858, y sus hijos, Jaime y Carmen Muntadas Mariñosa, futura esposa de Juan Federico Muntadas


Albúmina sobre papel, formato irregular, 13,5 x 9,4 cms.

Gabinete del Coso, núms. 18 y 19, Zaragoza.


La fotografía más antigua conocida de entre las realizadas por el gabinete de Mariano Júdez y Ortiz. Su formato y factura artesanales, fuera de los estándares establecidos, y las fisonomías juveniles de los hermanos retratados inducen a pensar que este retrato fue realizado por el fotógrafo zaragozano con anterioridad a su primer viaje a París documentado (1860).


72 Jaime Muntadas Campeny, Juan Federico Muntadas Jornet, su esposa Carmen Muntadas Mariñosa y sus hijos, Pilar, Carlos y Ramón



Reverso, litografiado: “Casa fundada en 1856 / Fotografía de Coyne / Sucesor de Júdez / Coso 33 / Zaragoza”


Retrato de grupo de la familia Muntadas, tomado en el gabinete zaragozano de Anselmo Coyne, sucesor de Júdez. El numeroso grupo familiar, integrado por seis miembros, obligó a Coyne a utilizar una composición escenográfica horizontal, algo abigarrada en su primer término.


73 Juan Federico Muntadas Jornet, su esposa Carmen Muntadas Mariñosa y su hija Pilar, en el Monasterio de Piedra

Fotógrafo desconocido, ca. 1880



Excelente retrato de exterior, tomado en el jardín interior de la residencia familiar de los Muntadas en el Monasterio de Piedra, pleno de naturalidad y complicidad con el fotógrafo.


74 El actor cómico alemán Wilhelm Knaack (Rostock, 1829 – Viena, 1894) en el papel de “Caesar” en la obra Monsieur Herkules (1863) de Georg Belly

Fotógrafo: Hermann Klee, Viena, ca. 1863


Reverso, litografiado: “Wilhelm Knaack als Caesar (Monsieur Herkules) / Nach der natur photogr. von Hermann Klee (…)”


Simpática “carte de visite” del actor alemán, caracterizado y en pose cómica, que formaba parte de la colección de Juan Federico de Muntadas, quien durante sus viajes a Centro Europa pudo asistir a alguna de sus representaciones o, incluso, conocerlo personalmente.

104Compositores e intérpretes musicales

75 Domingo Olleta y Mombiela(Zaragoza, 1819 – 1895),compositor, presbítero y maestro de Capilla de la Seo



Reverso litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 33 frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”



A partir de esta fotografía, el pintor zaragozano Bernardino Montañés realizó su retrato al óleo (1868), conservado en la actualidad en la Real Academia de Nobles y Bellas Artes de San Luis. Sus composiciones musicales abarcan solamente un periodo de veinte años, puesto que un ataque de hemiplejia, sufrido en 1861, le impidió seguir componiendo. El fotógrafo Mariano Júdez tuvo el tacto de ocultar visualmente los efectos de la cruel enfermedad, dejando fuera de cuadro las manos del compositor

105 Compositores e intérpretes musicales

76 Santiago Masarnau (Madrid, 1805 - 1882), compositor y fundador de las Conferencias de San Vicente de Paúl en España



Reverso litografiado: “P.M. Hebert / Miniaturista y Fotógrafo / Calle del Prado, 10, 3º / Madrid”

Inscripción manuscrita al dorso de la enmarcación original: “Falleció el 14 de diciembre de 1882 a la edad de 78 años”

Legado del pintor Bernardino Montañés


En palabras del pintor Bernardino Montañés: “El Sr. Masarnau era además un compositor de música muy distinguido y había publicado en París un sinnúmero de obras muy aplaudidas, especialmente en el género religioso, pues era compañero de estudios, amigo y colaborador de Rosini, Bellini, Donizetti, Chopin, Liszt, Meyerbeer, Mendelsshon y otros celebérrimos autores”. Santiago Masarnau fue el responsable de la introducción de las Conferencias de San Vicente de Paúl en España, junto al catedrático y escritor bilbilitano Vicente de la Fuente, al profesor de francés Anselmo Ouradou y al académico Pedro de Madrazo.

106Compositores e intérpretes musicales

77 Adelina Patti (Madrid, 1843 – Brecock, 1919), cantante lírica, considerada la soprano más importante de su tiempo

Fotógrafo: Léopold Ernest Mayer y Pierre-Louis Pierson, París, ca. 1860



Etiqueta al dorso: “Librería de A. Durán / Madrid / Cª de S. Gerónimo, 2”



Hija de tenor y soprano italianos, su madre Catherina Chiesa hubo de interrumpir su interpretación de Norma en Madrid, para dar a luz a Adelina. Prototipo de la prima donna y diva de la ópera, no tuvo rival en su tiempo por la perfección de su técnica vocal, el favor del público y la siempre acertada elección de su repertorio. Se afirma que la Patti ha pasado a la historia, no solo como la mejor cantante de su tiempo, sino como la mejor pagada hasta nuestros días.

107 “Baile de trajes”

78 Manuel Falcó y d’Adda(Milán, 1828 – Aranjuez, 1892),duque de Fernán Núñez

Fotógrafo: André Adolphe Disdéri, ca. 1860


Reverso litografiado: “Disdéri & Cie. / Photographes de S.M. L’Empereur / 8, Boulevart des Italiens / Paris”



Hijo de los marqueses de Castel-Rodrigo, caballero del Toisón de Oro, de la Maestranza de Valencia y de las órdenes de Calatrava y Carlos III. En su palacio madrileño de Cervellón, durante la segunda mitad del siglo XIX, los lunes de Carnaval se organizaban los célebres “bailes de trajes” que congregaban a la flor y la nata de la aristocracia española.

108“Baile de trajes”

79 María Pilar Osorio y Gutiérrez de los Ríos, duquesa de Fernán Núñez y sus hijos María Rosario, Manuel e Isabel.

Fotógrafo: André Adolphe Disdéri, ca. 1860


Reverso litografiado: “Disdéri & Cie. / Photographes de S.M. L’Empereur / 8, Boulevart des Italiens / Paris”



En su palacio madrileño de Cervellón tuvieron lugar los célebres “bailes de trajes”, durante la segunda mitad del siglo XIX.


80 La condesa Scláfani, caracterizada como la “Dueña Dª Rodríguez”, personaje del Quijote

Fotógrafo: A. Alonso Martínez, Madrid, 1862


Reverso litografiado: “Madrid / A. Alonso Martínez y hermano / Puerta del Sol, 14 3º”



El baile de trajes, celebrado en 1862 en el palacio de los Duques de Fernán Núñez, se dedicó temáticamente al tiempo y personajes de la universal novela de Cervantes.


81 La condesa Scláfani, caracterizada “Regente de Navarra” en la corte de los Reyes Católicos






Al año siguiente, en 1863, el baile de trajes de los Duques de Fernán Núñez, todo un acontecimiento social entre la aristocracia española de mediados del siglo XIX, los participantes debían ambientar su vestuario al tiempo y Corte de los Reyes Católicos, Isabel y Fernando.


82 Caballero medieval, con armadura y yelmo






Personaje desconocido, oculto bajo el yelmo, caracterizado como caballero con armadura, para el baile de trajes dedicado al tiempo y personajes del Quijote.


83 Caballero medieval, con armadura







84 Leonor Lezcano como “paisana de las provincias vascongadas”

Fotógrafo: A. Alonso Martínez, Madrid, 1863Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso litografiado: “Madrid / A. Alonso Martínez y hermano / Puerta del Sol, 14 3º”Inscripción manuscrita al dorso: “Leonor Lezcano / Paisana de las Provincias vascongadas”Álbum de los Condes de SobradielColección particular, Zaragoza

Caracterización para asistir al baile de los Duques de Fernán Núñez en Madrid.


85 Caballero medieval, con armadura






Caballero andante, no identificado, asistente al baile de trajes de los Duques de Fernán Núñez, dedicado al tiempo y personajes del Quijote.


86 Leonor Lezcano como brigante o bandolera italiana con trabuco al hombro

Fotógrafo: A. Alonso Martínez, Madrid, ca. 1864





Caracterización como bandolera italiana, de la joven Leonor Lezcano, seguramente en un baile temático dedicado o en relación con Italia, celebrado en el palacio de los Duques de Fernán Núñez.


87 Espadachín del siglo XVII



Reverso litografiado: “M. de Hebert / Retratista de la Real Cámara / Caballero de Gracia 30 y 32 / Galería de Cristales”



Personaje desconocido, caracterizado con traje de época para asistir al baile de trajes, celebrado en el palacio de los Duques de Fernán Núñez.

117 Arte de la tauromaquia

88 El matador Antonio Sánchez “El Tato”(Sevilla, 1831 - 1895),antes de su grave cogida de 1869

Fotógrafo: Leandro, Pamplona, ca. 1860


Anverso, litografiado: “Leandro Fotogº”


Colección Paz y Pilar Zoppetti de la Pardina

Valeroso torero sevillano, que el 7 de junio de 1869, compartiendo cartel con Lagartijo y Frascuelo, al entrar a matar al toro Peregrino, sufrió una grave cornada en la pierna derecha que, a causa de la gangrena, hubieron de amputarle. Sin embargo, dos años más tarde, ayudado de una prótesis ortopédica reapareció en las plazas de Badajoz, Valencia y Sevilla. Sus mermadas facultades y el desasosiego que provocaba en los espectadores, le aconsejó retirarse definitivamente a su pesar. Esta gesta temeraria, sin embargo, ha dejado huella en la memoria colectiva a través de la conocida expresión “más valor que el Tato”.

118Arte de la tauromaquia

89 El picador Bruno Azaña (+ Madrid, 1868) con la vara de picar al hombro



Reverso litografiado: “J. Laurent / Fotógrafo / 39 Carrera de S. Gerónimo / Madrid / 27 Rue de Richelieu, a Paris”


Picador duro y de voluntad, muy conocido especialmente en la plaza de Madrid. A decir del crítico Sánchez Neira, su falta de vista hacía que más de una vez marrase o picase bajo, contra su intención, lo cual le incomodaba en extremo y procuraba enmendar su yerro.

119 Arte de la tauromaquia

90 Mosaico compuesto por los toreros españoles más célebres de su tiempo

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz reproduce o comercializa a partir de un original de Jean Laurent, 1864-1868.Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 33 frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”Colección particular, Zaragoza

Fotomontaje piramidal compuesto por las figuras del toreo a mediados del siglo XIX. A pesar de su deficiente estado de conservación, se trata de un testimonio imprescindible que pone de manifiesto las relaciones comerciales establecidas entre el fotógrafo zaragozano Mariano Júdez y el francés Jean Laurent, autor de la composición. Aunque resulta difícil su identificación a partir de esta copia deteriorada, sabemos que en el retrato figuran los matadores Cúchares, Cayetano Sanz, el Salmanquino, el Tato, el Gordito y José Antonio Suárez; los picadores Bruno Azaña, el Naranjero, Juan Uceta, Antonio Pinto, el Esterero, Castañitas, Miguel Alanís y Lorenzo Sánchez; los banderilleros Domingo Vázquez, Villaviciosa, el Cabo, Culebra, Ureña y el Lillo; y finalmente, el puntillero la Pulga. El Museo Municipal de Madrid conserva una copia en óptimo estado de conservación.

120Arte de la tauromaquia

91 El matador Felipe García Benavente(Getafe, Madrid, 1850 - 1893)



Anverso, litografiado: “M. García / Sitios, 2 / Zaragoza”

Colección Eduardo Laborda Gil, Zaragoza

Torero algo basto y bravucón, pero estoqueador certero, a decir de los críticos. Las crónicas taurinas calificaban de filipinas sus estocadas, pues en más de una ocasión, al tropezar en hueso, el ímpetu con que acometía provocaba que el estoque se partiera en dos mitades. Es digno de consideración el hecho de que sea este el único retrato taurino que conocemos realizado por el gabinete zaragozano de Marcelino García. La coincidencia del primer apellido del torero y del fotógrafo, García, invita a pensar que tal vez existiese cierta relación de familiaridad entre ambos.

121 Retratos varios

92 Jinete a caballo, retrato de exterior



Reverso litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 33 frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”

Colección Mario Fernández Albarés, Madrid

Posible retrato del joven Ignacio de Inza Dezo, que fue retratado por el pintor Bernardino Montañés. Lo verdaderamente reseñable en esta imagen es la versatilidad que demuestra el fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz, quien no solo realizaba retratos en el confortable interior de su gabinete sino que, cuando la ocasión lo precisaba, era capaz de trasladar su cámara al aire libre y realizar este tipo de retratos.

122Retratos varios

93 Gaudencio Zoppetti Bussi(Artò, Italia – Zaragoza, 1931),jefe de cocina y propietario del Hotel Europa de Zaragoza y cuñado del fotógrafo Joaquín Júdez Luis



Reverso litografiado: “Hortet / Fotógrafo de SS.MM. / Méndez Núñez, 14, Zaragoza / Premios Comisión de Monumentos Artísticos / Exp. Aragonesa y Ateneo Zaragozano”


Colección Paz y Pilar Zoppetti de la Pardina

Formado en las cocinas del Palacio Real de Madrid, fue el cocinero jefe o chef del establecimiento hostelero más lujoso de la ciudad de su tiempo, el Hotel Europa. Dicho establecimiento disponía, nada menos que, de sesenta y cuatro habitaciones, café, restaurante y sala de lectura.

123 Retratos varios

94 Isidora Júdez Luis (+ Zaragoza, 1927), señora de Zoppetti, hermana del fotógrafo Joaquín Júdez Luis y sobrina del también fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz

Fotógrafo: Manuel Hortet y Molada, ca. 1875Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Al dorso, litografiado: “Hortet / Fotógrafo de SS.MM. / Méndez Núñez, 14 / Comisión de Monumentos Artísticos / Exp. Aragonesa y Ateneo Zaragozano”Álbum de Hilarión Júdez y OrtizColección Paz y Pilar Zoppetti de la Pardina, Zaragoza

TIPOS ARAGONESES Y FORÁNEOS

Estereografoscopio RoswellCharles John Roswell, Londres, ca. 1864

Cartoscopio convertible en estereoscopio.Colección Boisset-Ibáñez, Zaragoza

127 Tipos aragoneses y foráneos

95 “Aragonés y su mujer”




Inscripción manuscrita a tinta, al dorso: “Aragonés y su mujer”

Colección Boisset-Ibáñez, Zaragoza.

128Tipos aragoneses y foráneos

96 “Paysan Aragonais” / Paisano Aragonés




Inscripción manuscrita a tinta, al dorso: “Paysan aragonais”



97 “Aragonesa”




Inscripción manuscrita a tinta, al dorso: “Aragonesa”



98 “Aragonés con la capa”




Inscripción manuscrita a tinta, al dorso: “Aragonés con la capa”



99 “Aragoneses”




Inscripción manuscrita a lápiz, al dorso: “Aragoneses”


A pesar de que la cronología establecida lo desmiente, sin embargo, no es posible pasar por alto el gran parecido físico de la mujer aragonesa de la fotografía de Júdez con la heroína de los Sitios Manuela Sancho (1783 – 1863), de la que se conoce algún retrato fotográfico.


100 “Aragonés de la montaña” / Altoaragonés




Inscripción manuscrita perdida, al dorso: “Aragonés … la… M…”


A partir de una de las fotografías perteneciente a esta misma sesión fotográfica, realizada en el gabinete de Mariano Júdez, el también fotógrafo Lucas Escolá Arimany editó, décadas más tarde, una de sus populares tarjetas postales de tipos del país.


101 Tipo aragonés, envuelto en manta






102 “Aragonés”




Inscripción manuscrita a tinta, al dorso: “Aragonés”



103 “Gallegos”

Fotógrafo: Comercializado por Mariano Júdez y Ortiz, 1864 - 1868, a partir de un original del fotógrafo Jean Laurent.



Inscripción manuscrita a lápiz, al dorso: “Gallegos”


Una muestra más de la relación comercial establecida entre el gabinete zaragozano de Júdez y el madrileño de Jean Laurent, son estos tipos gallegos de estudio, que llevan la firma del gabinete zaragozano de Júdez.


104 Zampognaro o gaitero napolitano

Fotógrafo desconocido, Roma, ca. 1867


Inscripción manuscrita a lápiz, al frente: “Piferaro Napolitano”



“Carte de visite” adquirida por el pintor zaragozano Bernardino Montañés durante su segundo viaje a Roma, en 1867. Los mismos modelos que posaban en la Academia Gigi, con sus indumentarias populares, para Montañés y sus compañeros de promoción, pasan a ocupar también su protagonismo en las fotografías comerciales.


105 Marinero italiano

Fotógrafo Joseph Spithöver (atribuida), Roma, ca. 1867




El modelo, que en la imagen está caracterizado como marinero italiano, posó ante el pintor zaragozano Bernardino Montañés para el personaje de Sansón, en su pintura de historia sagrada, Sansón fatigado después de derrotar a los filisteos (Roma, 1851). La fotografía fue adquirida por el pintor zaragozano durante su segundo viaje a Roma, en 1867.

vistas de zaragoza

Cámara estereoscópicaFrancia, ca. 1865

Placas al colodión húmedo, formato 8 x 16 cms.Objetivo: Extra Rapide nº 00 / Serie AColección Boisset-Ibáñez, Zaragoza.

141 Vistas de Zaragoza

106 Torre de La Seo sin chapitel


Albúmina sobre papel, fuera de formato estándar: 18 x 13 cms.

Sello húmedo en el reverso: “Júdez Fotógrafo / Zaragoza”

Álbum de Andrés Martín e Ipás


Un rayo incendió y arruinó el chapitel de la torre campanil de La Seo en 1850, matando además al campanero. Desde entonces y hasta enero de 1861, no se colocaron los andamiajes que permitirían colocar el nuevo chapitel fundido en los talleres Julio Goybet y Cía. de Zaragoza. Estos datos permiten datar esta fotografía y las siguientes siete fotografías de formato grande, encartadas en el álbum de Andrés Martín e Ipás, en torno a 1860. Es decir, nos encontramos ante la serie de fotografías más antiguas conservadas de la ciudad de Zaragoza, coetáneas de las realizadas por el británico Charles Clifford.

142Vistas de Zaragoza

107 Alero y galería de arcos del segundo piso del patio del Palacio Zaporta


Albúmina sobre papel, fuera de formato estándar: 23 x 17,5 cms.




Detalle de la decoración tallada en el alero de madera y en la galería de arcos del segundo piso del conocido Patio de la Infanta, en el interior del Palacio Zaporta.


108 Monumento a Ramón de Pignatelli






Vista de la llamada Glorieta de Pignatelli, actual Plaza de Aragón y del monumento a Ramón de Pignatelli, obra del escultor Antonio José Palao, que fue inaugurado el 24 de junio de 1859. El monumento fue construido en conmemoración del 150 aniversario de la construcción del Canal Imperial de Aragón. Al fondo, tras los árboles que circundaban la glorieta, se entrevé la torre campanil de la iglesia de Santa Engracia.


109 Fachada del Palacio de la Diputación Provincial de Zaragoza en la plaza de la Constitución





Colección Mariano Martín Casalderrey, Zaragoza.

Vista de la fachada del palacio de la Diputación Provincial, tras la reforma proyectada en 1857 por el arquitecto Pedro Martínez Sangrós. El reloj que remata la fachada, flanqueado por las alegorías del Día y la Noche, así como el escudo de armas de la provincia que lo culmina, obra del escultor Antonio José Palao, fueron concluidos en 1858.


110 Fachada principal del Palacio de la Aljafería, Zaragoza






Excepcional imagen de la fachada principal del castillo-palacio de la Aljafería con el aspecto que quedó tras la reforma emprendida en 1772, en tiempos de Carlos III. La fotografía de Júdez muestra una imagen inédita del exterior de la Aljafería, con anterioridad a la incorporación de los cuatro torreones neogóticos, que se construyeron a partir de 1864 y de los que todavía se conservan los dos de la fachada posterior. Tras la fachada sobresalen la torre campanil de la capilla de San Martín y el torreón del Trovador, casi irreconocible con su cubierta a cuatro aguas.


111 Convento de las Fecetas, Zaragoza






Vista posterior del convento de la orden de las Carmelitas Descalzas de Santa Teresa, que fundó el notario Diego Fecet en 1623, para acoger a las hijas de los cargos públicos de Aragón que deseasen profesar. Rodeado de maizales y campos labrados, en los muros exteriores de la iglesia se pueden apreciar los impactos que la metralla de las tropas francesas dejó durante Los Sitios de 1808-1809.


112 Almenara de Nuestra Señora del Pilar y paso del Canal Imperial sobre el río Huerva


Albúmina sobre papel, fuera de formato estándar: 17 x 23 cms.




Vista del paso del Canal por encima del río Huerva y de la Almenara del Pilar, por la que se desagua al río el agua sobrante del Canal. La imagen de Júdez reproduce con bastante fidelidad la lámina dibujada y litografiada por Blanchard, con el título “La Almenara Pilar y paso del Canal sobre el río Huerva” para la obra Paseo Pintoresco por el Canal Imperial de Zaragoza (Madrid, 1833).


113 Vista de Zaragoza desde la margen izquierda del Ebro



Reverso litografiado: “Fotografía por Júdez”



La torre campanil de La Seo, andamiada, después de que un rayo incendiase y arruinase su chapitel (1850), permite establecer con precisión la cronología de la fotografía, puesto que la torre permaneció andamiada y todavía sin el nuevo chapitel, entre enero y marzo de 1861.


114 Basílica del Pilar, vista desde la margen izquierda del Ebro






Perteneciente a una misma serie, en una suerte de panorámica virtual de vistas tomadas desde la margen izquierda del Ebro, la imagen nos muestra una visión inédita de la Basílica del Pilar, todavía sin su cúpula mayor y con tan solo una de sus torres erigidas, a falta del remate.


115 Vista de Zaragoza, desde la margen izquierda del Ebro y en dirección aguas arriba del río






Como se aprecia en la imagen, el fotógrafo se encaramó a la azotea de una de las viviendas del Arrabal, en la margen izquierda del Ebro, para culminar su serie de vistas panorámicas de la ciudad, en dirección al nacimiento del río. En la difusa silueta de la ciudad se identifica con claridad la torre de San Juan de los Panetes.


116 Torre campanario y cúpulas de la basílica del Pilar asomando entre los tejados de la ciudad



Inscripción manuscrita a lápiz, en el reverso: “Nª Señora del Pilar / Ntre. Dame del Pilar / 1 - 9”

Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza

Inusual perspectiva sobre el mosaico de tejados y techumbres de la Zaragoza histórica en dirección hacia la basílica del Pilar, tomada algunos años antes de la apertura de la Calle Alfonso I, que se realizará en tiempos del alcalde Candalija (1867) y que provocó el derribo de gran parte de estos inmuebles. Y también antes de la construcción de la Cúpula mayor de la basílica del Pilar (1866-1869).







Vista del Ebro a su paso bajo el Puente de Piedra. Los hitos urbanos que permiten precisar la cronología de la imagen son la Puerta del Ángel (1860 – 1867) y el inicio del andamiaje de la cúpula mayor del Pilar (1866), proyectada por el arquitecto José de Yarza y culminada por Juan Antonio Atienza.



Fotógrafo: Santos Álvarez, ca. 1866, a partir de un original de Mariano Júdez y Ortiz.


Reverso litografiado: “Sociedad Fotográfica de Zaragoza / Precios reducidos / Coso 35 último piso”


La fotografía original de Júdez, fue también comercializada en el gabinete contiguo del Coso, nº 35, por Santos Álvarez, regente del establecimiento denominado “Sociedad Fotográfica de Zaragoza”.


119 La Lonja y la puerta del Ángel




Inscripción manuscrita, al dorso: “Puerta del Ángel y casa Ayuntamiento / 2 – 10”


Versiones horizontal y vertical de la misma imagen de la desaparecida Puerta del Ángel, que fue erigida por el arquitecto Miguel Jeliner y Germá con motivo de la visita de Isabel II a la ciudad, en 1860. Esta puerta pretendía recordar la antigua puerta medieval de la ciudad, que había sido destruida durante los Sitios (1808-1809). El grupo escultórico del Ángel Custodio, que cobija bajo sus alas una alegoría del río Ebro y un león, parece claramente un fotomontaje realizado por Júdez a partir de una fotografía del dibujo del proyecto.


120 La Lonja y la puerta del Ángel







121 Torre Nueva

Fotógrafo: Santos Álvarez, ca. 1864 a partir de un original de Mariano Júdez y Ortiz




Soberbia imagen de la Torre Nueva emergiendo de entre los tejados de la ciudad. Erigida en 1520 y con una excepcional altura de setenta metros, se constituyó desde su construcción en uno de los referentes iconográficos de la ciudad para los viajeros y visitantes foráneos. Su característica inclinación sirvió como argumento para su injustificada y vergonzante demolición, efectuada por orden municipal en 1892.


122 Torre Nueva



Inscripción manuscrita, al dorso: “Torre nueva / 4 - 12”

Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza

Seguramente, con la intención de potenciar la verticalidad de la Torre Nueva, el fotógrafo Mariano Júdez y Ortiz, en esta toma, ubicó su cámara desde una de las pocas perspectivas en las que no es posible apreciar la inclinación característica de la torre.


123 Torre Nueva





La excelente conservación tonal de esta fotografía, por la que no parecen haber pasado estos ciento cincuenta años, nos permite hacernos una idea de lo que fueron las gradaciones tonales y el contraste originales de aquellas fotografías a la albúmina tomadas por Júdez y el resto de pioneros de la fotografía zaragozana del siglo XIX.


124 Calle del Coso






Perspectiva sobre el llamado Coso Alto, tomada desde la Plaza de la Constitución, actual Plaza de España. En la acera de la izquierda se adivina el Palacio de Sástago, que cobrará mayor protagonismo en la siguiente fotografía. En primer término, se adivina un grupo de baturros en corro, en lo que podría ser una rondalla.


125 Palacio de Sástago, calle del Coso






Vista en primer término del Palacio de Sástago en el llamado Coso Alto. En el siglo XVI, la calle del Coso era la más bella y espaciosa de la ciudad por lo que fue elegida por Don Artal de Alagón, III conde de Sástago y virrey de Aragón, para construir en ella su casa solariega. Desde 1843, Joaquín Mª Fernández de Córdoba, último conde de Sástago, arrendó parte del palacio al Casino Principal de Zaragoza.


126 Calle del Coso y Plaza de la Constitución






Vista de la calle del Coso en dirección a la Plaza de la Constitución, que quedaría a la derecha de la imagen. Aunque a nuestros ojos resulta prácticamente imperceptible, la mancha oscura que queda en el centro de la calzada, no es sino un rebaño de pavos junto a su vendedor. Durante el siglo XIX y primera mitad del siglo XX, los vendedores de pavos procedentes de pueblos cercanos, se acercaban hasta el centro de la ciudad para ofrecer su producto en la cercanía de las fechas navideñas, por lo que podemos conjeturar que la fotografía pudo ser realizada en las Navidades de 1860-1861.


127 Fuente de la Princesa o de Neptuno en la plaza de la Constitución






Ambas imágenes proceden de una única toma realizada mediante una cámara estereoscópica de doble objetivo. Con este procedimiento, el fotógrafo Mariano Júdez, como Laurent y otros muchos, a partir de una placa única podían comercializar hasta tres imágenes: dos ligeramente diferentes en formato “carte de visite” y una tercera, como tarjeta estereoscópica.


128 Fuente de la Princesa o de Neptuno en la plaza de la Constitución





Vista de la Fuente de la Princesa, tomada en picado desde el mismo estudio de Mariano Júdez, ubicado en el Coso nº 35. La fuente conocida también como de Neptuno, obra del escultor Tomás LLovet, fue instalada con motivo de la coronación de Isabel II, en 1833 y permaneció en su céntrico emplazamiento hasta 1902, en que cedió su sitio preeminente en la plaza de la Constitución, actual plaza de España, al Monumento a los mártires de la religión y de la patria. En la actualidad, sobrevive a duras penas al vandalismo en el Parque Grande.


129 Paseo de la Independencia

Fotógrafo: Santos Álvarez, ca. 1866, a partir de un original de Mariano Júdez y Ortiz.




Formatos horizontal y vertical a partir del mismo negativo, con la perspectiva del Paseo de la Independencia, nombre con el que se conocerá, a partir de 1860, al espacio urbano que hasta entonces había sido llamado Salón de Santa Engracia.



Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1864 - 1866Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 35 / frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”Colección Boisset-Ibáñez, Zaragoza


131 Plaza de la Constitución, vista desde el Coso

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1861Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso litografiado: “Fotografía por Júdez”Álbum de Andrés Martín e IpásColección Mariano Martín Casalderrey, Zaragoza

Perspectiva algo inusual de la Plaza de la Constitución, actual Plaza de España, en cuyo centro se ubicaba la Fuente de la Princesa, desde 1833. Al fondo, la fachada de la entonces llamada Fonda Europa (actual edificio del Banco de España), con elementos de andamiajes con motivo de una de sus diversas reformas que tuvieron lugar entre 1859 y 1861, para su progresivo acondicionamiento como hotel.



Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, ca. 1861Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso litografiado: “Fotografía por Júdez”Álbum de Andrés Martín e IpásColección Mariano Martín Casalderrey, Zaragoza.

Perspectiva del Paseo de la Independencia, tomada desde el estudio de Mariano Júdez, ubicado en la azotea del edificio del Coso nº 35. Cierra la perspectiva, al fondo, la silueta prácticamente imperceptible de lo que fue la segunda Puerta de Santa Engracia, obra del arquitecto Tiburcio del Caso, que permaneció en pie entre 1830 y 1866, año en que fue substituida por la tercera y última puerta, obra de Mariano López.


133 Fachada de la iglesia de Santa Engracia

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1864-1868Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso litografiado: “Mº Júdez / Fotógrafo / Coso, 33 / frente a la Fuente / último piso / Zaragoza”Colección Boisset-Ibáñez, Zaragoza

Vista de los restos de la iglesia de Santa Engracia, una de las joyas del renacimiento aragonés, arruinada durante los Sitios (1808-1809), antes de su reconstrucción que tendrá lugar entre 1891 y 1899. A la izquierda de la imagen se aprecia una garita de guardia y unos soldados, que custodian los restos del templo. Se trata de dos copias fotográficas con diferente grado de conservación, una original de Mariano Júdez y la otra, comercializada por el gabinete de Santos Álvarez, denominado Sociedad Fotográfica de Zaragoza.


134 Fachada de la iglesia de Santa Engracia

Fotógrafo: Santos Álvarez, ca. 1866, a partir de un original de Mariano Júdez y Ortiz.Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso litografiado: “Sociedad Fotográfica de Zaragoza / Precios reducidos / Coso 35 último piso”Colección Boisset-Ibáñez, Zaragoza


135 Monumento a Ramón de Pignatelli


Vista del monumento a Ramón de Pignatelli, obra del escultor Antonio José Palao, que fue inaugurado el 24 de junio de 1859. El monumento fue construido en conmemoración del 150 aniversario de la construcción del Canal Imperial de Aragón. Al fondo se entrevé la segunda puerta de Santa Engracia, obra de Tiburcio del Caso, que permaneció en pie entre 1830 y 1866.


136 Puerta del Duque de la Victoria


Puerta del Duque de la Victoria, erigida en honor del general Baldomero Espartero, y costeada a sus expensas por Juan Bruil, que se abrió al público el 5 de octubre de 1861 y que permaneció en pie hasta 1919. Esta puerta en hierro, fundida en Inglaterra e instalada bajo la dirección del arquitecto José de Yarza Miñana, sustituía a la primera puerta hecha de ladrillo, que fue erigida en 1856 y que se vino abajo, poco tiempo después, por la precipitación con la que fue construida.


137 Puente de San José sobre el Huerva e iglesia de San Miguel de los Navarros


Vista a pie de río del llamado puente de San José, construido en piedra sillar, en 1855. Al fondo de la imagen, la silueta del ábside y torre campanil de la iglesia de San Miguel de los Navarros.


138 Vista del río Huerva a su paso bajo el puente de San José


Vista del río Huerva en su recorrido desde el puente de San José, junto a la iglesia de San Miguel de los Navarros, cuya silueta se recorta a la derecha de la imagen, en dirección hacia el Ebro.


139 Cuartel de Hernán Cortés


Vista del desaparecido cuartel de Hernán Cortés, que entonces quedaba situado extramuros, al sur de la Puerta del Carmen. Se trata de un antiguo convento de la orden de los Capuchinos, que fue remodelado a mediados del siglo XIX con función de cuartel de infantería. En la imagen todavía se pueden apreciar los olivos y huertas que rodeaban el antiguo convento.


140 Fachada de la iglesia de San Fernando en Torrero

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, ca. 1861Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Inscripción manuscrita, al dorso: “Iglesia Torrero/6- 14”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista de la iglesia neoclásica construida bajo la dirección de Tiburcio del Caso en 1799, destinada a servir de parroquia a las familias que trabajaron en la construcción del Canal Imperial de Aragón. El fotógrafo Mariano Júdez, como en el caso de la fotografía de la Almenara del Pilar, parece inspirarse en litografías de Blanchard para la obra Paseo pintoresco por el Canal Imperial de Aragón (1833), en cuya obra dedica dos vistas sucesivas a la iglesia de Torrero.


141 Antiguo Puente de América sobre el Canal Imperial, en Torrero


Vista fotográfica que reproduce la composición y punto de vista de la litografía que Blanchard dedicó al antiguo Puente de América en su obra Paseo pintoresco por el Canal Imperial de Aragón (1833). El puente, así llamado por haber sido construido por el Regimiento de infantería América en 1815, permaneció en pie hasta 1903, en que fue substituido por el actual modernista en hierro, obra del arquitecto Ricardo Magdalena.


142 Almenara de Nuestra Señora del Pilar y paso del Canal Imperial sobre el río Huerva


Versión “carte de visite” de la imagen del paso del Canal por encima del río Huerva y de la Almenara del Pilar, por la que se desagua al río el caudal sobrante del Canal. La imagen de Júdez reproduce con bastante fidelidad la lámina dibujada y litografiada por Blanchard, con el título “La Almenara Pilar y paso del Canal sobre el río Huerva” en su obra Paseo Pintoresco por el Canal Imperial de Aragón (Madrid, 1833).


143 Puente de Santa Engracia sobre el río Huerva


Vista del río Huerva a su paso bajo el puente denominado de Santa Engracia, construido en piedra sillar en 1855. La perspectiva tomada por la cámara de Júdez le sitúa al sur del puente, extramuros de la ciudad. Se trataría de la única imagen fotográfica que hemos podido conocer hasta la fecha del puente de Santa Engracia, en su estado original, antes de las obras de cubrimiento del Huerva.


144 Vista del río Huerva, tomada desde el puente de Santa Engracia


Vista de la ribera del Huerva, tomada desde el mismo pretil del puente de Santa Engracia y en dirección hacia su desembocadura en el Ebro, al Norte. A la izquierda quedaría, oculta por los árboles la Glorieta de Pignatelli y en el horizonte se recorta la torre campanil de la Iglesia de San Miguel de los Navarros.


145 Vista de la basílica del Pilar, desde la margen izquierda del Ebro

Fotógrafo: Mariano Júdez y Ortiz, 1869Albúmina sobre papel, formato “carte de visite”Reverso, litografiado: “Gabinete Fotográfico / Mº Júdez / medalla de cobre / Exposición Aragonesa de 1868 / Zaragoza / Coso 33 último piso”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista de la basílica del Pilar y su reflejo espejeante sobre el río Ebro. En la imagen podemos apreciar la cúpula mayor del Pilar, prácticamente concluida a falta, tan solo, del cupulín de remate, lo que nos permite establecer con precisión su cronología en torno a 1869.


146 Vista de la Calle Alfonso I

Fotógrafo: Anselmo María Coyne Barreras, ca. 1874


Etiqueta adherida en el anverso de la tarjeta: “Zaragoza / Vista de la calle de D. Alfonso I / Coyne, Coso, 33”

Reverso, litografiado: “MJ / medalla de cobre / Exposición Aragonesa de 1868 / Coso 33 / Zaragoza”

Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista de la calle Alfonso I, en dirección hacia la basílica del Pilar. La apertura de la Calle Alfonso I tuvo lugar en 1867, bajo mandato del alcalde Antonio Candalija. A la izquierda de la fotografía se adivina el letrero comercial de la “Sombrerería Lamarque”. La fotografía fue comercializada por Anselmo Mª Coyne, pero reutilizó una de las llamadas “tarjetas álbum” o “cabinet card”, litografiadas con el distintivo de Mariano Júdez y Ortiz, por lo que la atribución definitiva de su autoría queda puesta en cuestión.


147 Puerta de Nuestra Señora del Carmen

Fotógrafo: Jean Laurent y Cía., Madrid, 1874 - 1877Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyenda sobre el papel albuminado: “Zaragoza._1749. Puerta de Ntra. Sª del Carmen/ J. Laurent y Cía. / Es propiedad Déposé”Litografiado sobre la tarjeta: “J. Laurent et Cie. / 39 Carrera Sn. Gerónimo, Madrid / Photographes / 90, Rue de Richelieau París”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista de la puerta de Nuestra Señora del Carmen, erigida por el arquitecto Agustín Sanz en 1795 y que muestra los efectos de los impactos de metralla a que fue sometida durante los Sitios (1808-1809). El Archivo Ruiz Vernacci del Instituto del Patrimonio Cultural de España custodia el negativo estereoscópico original a partir del cual se generó la presente copia a la albúmina.


148 Palacio de la Audiencia y el Coso

Fotógrafo: Jean Laurent y Cía., Madrid, 1874 - 1877Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyenda sobre el papel albuminado: “Zaragoza._1670. Palacio de la Audiencia y el Coso / J. Laurent y Cía. / Es propiedad Déposé”Litografiado sobre la tarjeta: “J. Laurent et Cie. / 39 Carrera Sn. Gerónimo, Madrid / Photographes / 7, Rue Drouot, París”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza

Vista del palacio renacentista de los condes de Morata y su característico portal de los Gigantes, sede de la Audiencia Provincial. La calzada adoquinada guía nuestra mirada a través de la amplia calle del Coso, en dirección hacia la plaza de la Constitución.


149 Torreón de la Zuda

Fotógrafo: Jean Laurent y Cía., Madrid, 1874 - 1877Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyenda sobre el papel albuminado: “Zaragoza._1726. Torreón de la calle de Antonio Pérez. / J. Laurent y Cía. / Es propiedad Déposé”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista del torreón de la Zuda, que fue la torre del homenaje del alcázar y residencia de los gobernadores musulmanes hasta la conquista de Zaragoza por Alfonso I el Batallador en 1118. La imagen recoge el estado original del torreón, antes de la restauración efectuada por el arquitecto Francisco Íñiguez Almech entre 1946 y 1952. El Archivo Ruiz Vernacci del Instituto del Patrimonio Cultural de España custodia el negativo estereoscópico original a partir del cual se generó la presente copia a la albúmina.


150 Iglesia de Santa María Magdalena

Fotógrafo: Jean Laurent y Cía., Madrid, 1874 - 1877Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyenda sobre el papel albuminado: “Zaragoza._1676. Iglesia de la Magdalena / J. Laurent y Cía. / Es propiedad Déposé”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista de la fachada de la iglesia gótico mudéjar de la Magdalena, con su esbelta torre, cuyo último cuerpo de campanas y remate en aguja desaparecieron tras la restauración efectuada por Francisco Íñiguez Almech en 1970. A la derecha de la imagen se entrevé la fachada de la desaparecida Universidad Literaria. El Archivo Ruiz Vernacci del Instituto del Patrimonio Cultural de España custodia el negativo estereoscópico original a partir del cual se generó la presente copia a la albúmina.


151 Capilla de Nuestra Señora del Pilar

Fotógrafo: Jean Laurent y Cía., Madrid, 1874 - 1877Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyenda sobre el papel albuminado: “Zaragoza._1698. Capilla de Ntra. Sª del Pilar / J. Laurent y Cía. / Es propiedad Déposé”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista en todo su esplendor de la Santa Capilla, construida por el arquitecto Ventura Rodríguez a mediados del siglo XVIII. Joya de la arquitectura barroca española, en cuyo interior se aloja el pilar sobre el que, según la tradición, se apareció la Virgen en carne mortal y sobre el que descansa su imagen. En el interior de la capilla, se advierte la presencia de feligreses en oración.


152 “Muralla antigua con trazas del famoso Sitio de Zaragoza”

Fotógrafo: Jean Laurent y Cía., Madrid, 1874 - 1877Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyenda sobre el papel albuminado: “Zaragoza._1728. Muralla antigua con trazas del famoso Sitio de Zaragoza / J. Laurent y Cía. / Es propiedad Déposé”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Vista de la muralla romana con huellas de los impactos de metralla sufridos durante los Sitios (1808-1809), en la que se encastraron, desde el siglo XIV, las dependencias del convento del Santo Sepulcro, cuya torre campanil se alza en el centro de la imagen.


153 Detalle del interior del oratorio de la Aljafería

Fotógrafo: Jean Laurent y Cía., Madrid, 1874 - 1877Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyenda sobre el papel albuminado: “Zaragoza._1745. Aljafería. Vista interior de la mezquita / J. Laurent y Cía. / Es propiedad Déposé”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Detalle de los arcos mixtilíneos del interior del oratorio de la Aljafería. El Archivo Ruiz Vernacci del Instituto del Patrimonio Cultural de España custodia el negativo estereoscópico original a partir del cual se generó la presente copia a la albúmina.


154 Fotomontaje de vistas de la basílica de Nuestra Señora del Pilar

Fotógrafo: Manuel Hortet y Molada, Zaragoza, 1880Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Leyendas litografiadas: “Hortet / Fotógrafo / Méndez Núñez, 14 / Zaragoza” / “Recuerdo a la Peregrinación de Nª Sª del Pilar de Zaragoza” [y otras varias]Colección particular, Zaragoza.

Mosaico compuesto por vistas exteriores e interiores de la basílica del Pilar, imágenes, pinturas y estampas devocionales, comercializado por el gabinete zaragozano de Hortet en conmemoración de la primera peregrinación mariana, el año 1880. La tarjeta de formato “cabinet card”, se compone de un total de catorce imágenes diferentes.

190Álbum de vistas de Zaragoza de Gregorio Sabaté

Junto al presente ejemplar, compuesto por un total de veinte

vistas de Zaragoza, confeccionado de forma artesanal por el

fotógrafo Gregorio Sabaté Férriz (Villanueva de Gállego, 1827

- Zaragoza, 1891) en torno a 1878, el Archivo Municipal de

Zaragoza conserva otro ejemplar del mismo álbum, aunque

en ese caso compuesto únicamente por diez de las vistas aquí

expuestas.

En el álbum de Sabaté se intercalan fotografías realizadas a lo

largo de su dilatada trayectoria como fotógrafo, puesto que

aparecen la mayor parte de los hitos urbanos y monumentales

que constituyeron, durante la segunda mitad del siglo XIX, la

renovación de la fisonomía de la ciudad: el Monumento a Pig-

natelli (1859), el Palacio de la Diputación Provincial (1858), la

apertura de la calle Alfonso I (1867), el teatro Pignatelli (1878),

etc. Pero, sobre todo, el monumento más representado en el ál-

bum y cuya lectura resulta clave a la hora de establecer una da-

tación cronológica es la Torre Nueva, que vemos representada

en tres tomas fotográficas consecutivas cronológicamente. En

la primera de ellas, luciendo su airoso chapitel bulboso (antes

de 1878), en la segunda con su chapitel andamiado y preparado

para su desmontaje (en un intento infructuoso por otorgar ma-

yor estabilidad a la sentenciada torre, en 1878) y, en la tercera,

con su nuevo y austero chapitel, después de 1878.

191 Álbum de vistas de Zaragoza de Gregorio Sabaté

155 Cubiertas del álbum de vistas de Zaragoza de Sabaté [anverso de la cubierta]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Cuero repujado con letras incisas doradas: “Vistas / de / Zaragoza / por / Sabaté”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


156 Fuente de la Princesa o de Neptuno y Paseo de la Independencia [anverso de la cubierta]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


157 Iglesia de Nuestra Señora de la Magdalena [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “La Magdalena”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


158 Palacio de los condes de Morata, Audiencia Provincial [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “audiencia”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


159 Catedral de La Seo [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Yglesia del aseo”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


160 Teatro Pignatelli [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Gran teatro de Pignatelli”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.

Fotografía a partir de una estampa o grabado.


161 Vista de la Lonja, desde la plaza de La Seo [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Casa Lonja”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


162 Fachada de la iglesia de San Cayetano [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Yglesia de San Cayetano”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


163 Palacio de la Diputación Provincial, plaza de la Constitución [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Diputación”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


164 Torre Nueva con chapitel [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, antes de 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Torre nueva con chapitel”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


165 Trascoro de La Seo [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Interior del Coro del aseo”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


166 Torre Nueva con chapitel andamiado [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Torre nueva con andamio”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


167 Calle Alfonso I [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Calle de Alfonso”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


168 Fachada de la iglesia de Santa Engracia [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Sta. Engracia”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


169 Iglesia de San Pablo [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Sn. Pablo”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


170 Iglesia de San Miguel de los Navarros [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Sn. Miguel”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


171 Calle del Coso y palacio de la Audiencia [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Calle del Coso”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


172 Torre Nueva sin chapitel [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Torre nueva sin chapitel”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


173 Monumento a Pignatelli [anverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Estatua de Pignatelli”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


174 Altar mayor de la basílica del Pilar [reverso]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Altar mayor del pilar”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


175 Basílica del Pilar [interior de la contracubierta]

Fotógrafo: Gregorio Sabaté Férriz, ca. 1878Albúmina sobre papel, formato “Tarjeta Álbum” o “cabinet card”Inscripción manuscrita, al pie: “Iglesia del Pilar”Colección Antonio Arguas Perdiguer, Zaragoza.


apéndice documental

Cartoscopio Exposición Universal de París, 1889

Formato “carte de visite”Colección Boisset-Ibáñez, Zaragoza


Acta de constitución de la Sociedad Industrial “Mariano Pescador y compañía”, integrada por los hermanos

Mariano y Ventura Pescador Saldaña, para la explotación de un Gabinete Fotográfico ubicado en el Paseo de la

Independencia nº 30 de Zaragoza.

Archivo de Protocolos Notariales, Zaragoza.

Protocolo de Escrituras y Actos públicos testificados por el Licenciado en Jurisprudencia, D. Basilio Campos y Vidal, Notario de Número y Caja de la Ciudad de Zaragoza.

Año 1882, Tomo I, Folio 388, nº 79.

Número setenta y nueve

En la ciudad de Zaragoza a tres de Mayo del año mil ochocientos ochenta y dos. Ante mí, el Licenciado en Jurisprudencia D. Basilio Campos y Vidal, Notario del Ilustre Colegio del territorio de esta Capital, en ella domiciliado, presentes los infrascritos testigos instrumentales sin excepción para serlo, comparecen:

De una parte D. Ventura Pescador y Saldaña, Comisario de Guerra de Segunda Clase, con destino en el Distrito militar de Navarra, casado, su edad treinta y nueve años, vecino de esta Ciudad, aduciendo su cédula personal expedida en Zaragoza el día cuatro de Agosto último al número quinientos ochenta ordinal.

Y de la otra D. Mariano Pescador y Saldaña, casado, fotógrafo, su edad treinta y siete años, también de este vecindario, pro-visto de la competente cédula personal que le fue librada en esta capital a cuatro de Febrero del corriente año, con el número veinte y un mil setecientos ochenta y nueve de orden. Dichos Sres., hermanos, de cuyo conocimiento, recíprocas circunstan-cias individuales referidas y plena capacidad legal para obligarse válidamente, yo el Notario autorizante doy fe, intervienen en la suscripción de esta escritura cada cual por su propia personalidad jurídica y de máxima conformidad dicen:

Que tienen convenido formar entre sí cierta Sociedad industrial en comandita dedicada a la explotación de un gabinete fotográfico que acaban de abrir al público en la casa número treinta de la Calle de la Independencia de esta Ciudad, propia de los Sres. Puig y Sánchez y a fin de hacer constar de un modo auténtico las condiciones por qué ha de regirse esta em-presa tanto relativamente al capital, como al trabajo y así en cuanto a los derechos como respecto a las obligaciones de los interesados, los Sres. relatantes con espontaneidad y cerciorados de sus mutuas acciones, otorgan esta solemne y pública escritura de constitución articulada en los pactos siguientes:

Primero. Se declara establecida entre los hermanos relatantes D. Ventura y D. Mariano Pescador y Saldaña la indicada Sociedad Industrial en comandita domiciliada en Zaragoza, bajo la razón de “Mariano Pescador y compañía”.

Nº 1

Zaragoza1882, 3 de mayo


Segundo. El exclusivo objeto de la Sociedad es la explotación en todos los órdenes que permite el arte fotográfico del mencionado gabinete situado hoy en la citada casa número treinta de la Calle de la Independencia o donde quiera que venideramente y por el tiempo de la subsistencia de la Sociedad les convenga establecerlo.

Tercero. La duración del compromiso social se pacta en seis años continuos que a partir del día primero de este año, fina-lizará en treinta y uno de Diciembre de mil ochocientos ochenta y siete.

Cuarto. El compareciente D. Ventura Pescador y Saldaña es socio comanditario o propia y meramente capitalista, ha-biendo aportado ya a la caja social por una sola vez y sin que por concepto alguno pueda ni deba exigírsele otra cantidad alguna, la suma de diez mil pesetas que el D. Mariano confiesa por su parte quedan ingresadas para atender a los gastos en parte hechos y hacederos en otra parte de instalación, compra de mobiliario, materiales, productos químicos, y cuanto exijan las necesidades de la explotación como también para trabajos, pago de contribuciones, alquileres y demás.

Quinto. El dictante D. Mariano Pescador es socio puramente industrial, viniendo consiguientemente obligado a llevar la dirección superior y ejecución material de los trabajos fotográficos hasta entregarlos al público, debiendo ayudarse, cuando los beneficios que se obtengan lo permitan o la necesidad lo requiera, de los auxiliares indispensables retribuidos del fondo social. Estará también a su cargo y responsabilidad el mismo gabinete con cuanto contenga, la adquisición de los materiales, sustancias e instrumentos, la caja social y el pago de cuantos gastos se ocasionen de todo lo cual llevará la debida documentación.

Sexto. La firma social con la razón mencionada en el pacto primero estará a cargo del socio industrial, y los libros y demás concerniente a la contabilidad al del socio capitalista cuando se encontrare en Zaragoza y en sus ausencias o enfermedades al de su consocio industrial pudiendo no obstante el socio capitalista delegar sus atribuciones y personalidad para la inter-vención y examen de las operaciones de entrada y salida de caudales, libros y asientos de gastos y productos que ofrezca el gabinete y cuidar los trabajos, en un sujeto de su particular confianza, que había de ser aceptado por el socio industrial.

Séptimo. A la disolución de la Sociedad por la terminación del plazo prefijado sin prorrogarse de nuevo, o a su conclusión por otra cualquier causa, el socio capitalista o los suyos deberán retirar con toda preferencia las diez mil pesetas aportadas, si lo hubiese en dinero y no habiéndolo o hasta donde no alcanzaran, en efectos del gabinete, distribuyendo todo lo restante así de fondos como de mobiliario, máquinas, material, objetos de arte, productos, sustancias y cuanto pertenezca a la Sociedad, por iguales partes entre los dos Sres. otorgantes o sus recíprocos derecho habientes.

Octavo. Las utilidades si las hubiere en el decurso de esta Sociedad, después de cubiertas todas las obligaciones y gastos, se dividirán por iguales partes y trimestralmente entre ambos socios o los suyos.

Noveno. Al fallecimiento de cualquiera de los dos socios otorgantes podrá disolverse la Sociedad si el sobreviviente de ambos o los derechos habientes del finado lo exigiesen atemperándose a lo prescrito en la estipulación séptima, más si se acordare la continuación por haber sobrevenido la muerte del socio capitalista, la Sociedad continuará bajo las mismas condiciones aquí establecidas, y si por el contrario el primero a morir fuera el socio industrial, la viuda de éste deberá poner a sus expensas a un profesor fotógrafo acreditado que se encargue de los trabajos y demás funciones que desem-peñaba su esposo difunto.


Décimo. Aún cuando las circunstancias personales y vínculos de consanguinidad de los dos Sres. otorgantes son prenda cumplida de que no han de suscitarse entre ellos cuestiones, diferencias o dudas por razón del presente contrato, eso no obstante, para en el factible caso de que aconteciera lo contrario y en su firme decisión de no acudir en caso alguno por razón de este instrumento a los tribunales de justicia de fuero, ni grado alguno, otorgan unánimes los comparecientes su invariable sumisión al fallo de dos amigables componedores nombrados directa y epistolarmente sin intervención judicial, ni notarial, uno por cada parte y de tercero en caso de discordia de designación de los mismos amigables componedores, prefijando a aquellos el término de doce días y de seis al dirimidor, para que oyendo a las partes interesadas por escrito o en voz, exequo et bono y según su leal saber y entender mediante acta privada que redactarán y firmarán por si, pronun-cien su laudo del que no podrán alzarse los interesados, pues desde este momento, le atribuyen el carácter de sentencia firme, obligándose en derecho a estar y pasar por lo sentenciado.

Bajo las anteriores estipulaciones formalizan las partes contratantes esta escritura, a cuya validez y subsistencia se obligan mutua y recíprocamente de la manera más solemne con sujeción a las leyes.

Para complemento y en descargo de mi deber, declaro yo el Notario y así lo hago constar haber advertido a los compa-recientes su obligación de presentar la primordial copia auténtica de esta escritura en testimonio pertinente de la misma, para el efecto de su inscripción en el Registro Público y general de comercio de esta provincia, existente en la sección de Fomento de las oficinas del Gobierno civil de la misma, dentro de los quince días inmediatamente siguientes al de hoy, con arreglo a los artículos veinte y cinco y veinte y seis del Código de Comercio y bajo las penas establecidas en los artículos veinte y ocho y treinta de dicho Código. Así mismo, quedaron enterados del deber que les incumbe de exhibir el referido primordial traslado fehaciente de este contrato en la oficina de liquidación de impuestos sobre bienes inmuebles y dere-chos reales de la Provincia de Zaragoza, dentro de los treinta días más próximos siguientes al de esta fecha para la práctica de la del derecho gradual que devenga el Estado y deberá satisfacerse en la administración económica de la Capital, en los diez y seis días subsiguientes al de dicha presentación bajo las penas que establecen la legislación del ramo vigente a todo lo cual repusieron los hermanos otorgantes quedar enterados y sometidos.

Así lo dicen los hermanos comparecientes concurriendo como testigos D. José Tapia y Bardavio y D. Antonio Gaspar y del Campo, ambos vecinos de Zaragoza, leí íntegramente a todos este instrumento después de advertidos del derecho que la ley les atribuye para hacerlo por sí a que expresamente renuncian.

Consta del raspado = u= que dejo salvado con aprobación expresa de los dos Señores otorgantes, los cuales y los citados testigos instrumentales firman todos cuatro conmigo al sobredicho Notario público autorizante que de cuanto antecede doy fe.

[Firmado y rubricado:] Ventura Pescador / Mariano Pescador / José Tapia / Antonio Gaspar / Lcdo. Basilio Campos y Vidal.

[Nota:] Libré primera copia el día de su otorgamiento, a instancia de los comparecientes, en un pliego de papel de clase tercera, número 6219, con dos más de la duodécima, números 587.986 y 587.987, de lo que doy fe. [Fdo.:] Campos


Certificado de defunción del fotógrafo Bernardino Pardo y Cerdá

Registro Civil de Zaragoza, Año 1890, Tomo 51, nº 111.

En la ciudad de Zaragoza a las diez y cuarto de la mañana del día veinticuatro de Febrero de mil ochocientos noventa ante D. Francisco Roncales Brased Juez Municipal y D. Pablo Ramírez Tejero Secretario, compareció D. Tomás Linares Alquézar, natural de La Zayda, termino municipal del mismo provincia de Zaragoza, mayor de edad, casado copista, domiciliado en esta Ciudad calle del Rosario, número doce, manifestando que

D. Bernardino Pardo y Cerdá, natural de Tarragona, provincia de idem, de cincuenta y cuatro años de edad, casado, fotógrafo, domiciliado en esta Ciudad, calle de Escuelas Pías número seis, falleció a las seis de la mañana de ayer, en su referido domicilio, a consecuencia de Cáncer píloro, de lo cual daba parte como encargado.

En vista de esta manifestación y de la certificación facultativa presentada, el Sr. Juez municipal dispuso que se exten-diese la presente acta de inscripción, consignándose en ella además de lo expuesto por el declarante, en virtud de las noticias que se han podido adquirir, las circunstancias siguientes:

Que el referido finado estaba casado en el acto de su fallecimiento en segundas nupcias con Dª Victoria Lardiés, natural de Calatayud, provincia de Zaragoza, mayor de edad y domiciliada en el del finado; habiendo dejado de este matrimonio un hijo llamado Alfredo, na-tural de esta Ciudad, de doce años de edad, soltero y domiciliado con su madre.

Que estuvo casado en primeras nupcias con Dª Dolores Gil, natural de Almonacid de la Sierra, provincia de Zaragoza, habiendo dejado de este matrimonio cuatro hijos llamados, David, Enrique, Antonia, Manuel, todos solteros, naturales el segundo de Olot, provincia de Gerona, los restantes de Zaragoza y domiciliados el primero en Madrid y los demás en el del finado.

Que era hijo legítimo de Domingo Pardo y Barnarda Cerdá, naturales de Villota del Duque y Tarragona, ambos ya difuntos.

Que se ignora si otorgó testamento.

Y que a su cadáver se habrá de dar sepultura en el cementerio de Torrero de esta Ciudad.

Fueron testigos presenciales D. Manuel Giménez Giménez, natural de Velilla de Ebro, término municipal del mismo, pro-vincia de Zaragoza, mayor de edad, casado, empleado domiciliado en esta ciudad Armas número catorce y D. Manuel Esteban Gómez, natural de Híjar, término municipal de la misma, provincia de Teruel, mayor de edad, casado, empleado domici-liado en Zaragoza, calle Mayor número cincuenta y dos.

Leída íntegramente esta acta, e invitadas las personas que deben suscribirla a que la leyeran por sí mismas, si así lo creían conveniente, a lo que renunciaron, se estampó en ella el sello del Juzgado municipal y la firmaron el Sr. Juez, el declarante y los testigos; de que certifico.

[Fdo.:] Fco. Roncales / Tomás Linares / M. Esteban / Manuel Giménez

Nº 2

Zaragoza1890, 24 de febrero


Certificado de defunción del fotógrafo Gregorio Sabaté Férriz

Registro Civil de Zaragoza, Año 1891, Tomo 128, Fol. 118, nº 2187.

En la ciudad de Zaragoza a las nueve de la mañana del día diez y seis de Noviembre de mil ochocientos noventa y uno ante D. Joaquín Rodrigo Bériz Juez Municipal y D. Benito G. de Azcárate Secretario, compareció D. Vicente Sanz, natural de Luceni, termino municipal del mismo provincia de Zaragoza, mayor de edad, soltero carpintero, domiciliado en esta Ciudad calle de Urrea, número veintiséis, manifestando que

D. Gregorio Sabaté y Férriz, natural de Villanueva de Gállego en esta Provincia de sesenta y cuatro años de edad, casado, fotógrafo, domi-ciliado en esta ciudad c/ Morería dieciocho falleció a las cinco de la tarde de ayer en su domicilio a consecuencia de “Pulmonía catarral” de lo cual daba parte como encargado.

En vista de esta manifestación y de la certificación facultativa presentada, el Sr. Juez municipal dispuso que se extendiese la presente acta de inscripción, consignándose en ella además de lo expuesto por el declarante, en virtud de las noticias que se han podido adquirir, las circunstancias siguientes:

Que el referido finado se hallaba casado en el acto del fallecimiento con Dª Vicenta Espinosa, natural de Madrid, habiendo dejado de este matrimonio seis hijos llamados Pilar, Carmen, Petra, Elisa, María y Vicente. Que era hijo legítimo de Pedro y de Elena, naturales de Vilella Alto y de Villanueva de Gállego, provincia de Tarragona y Zaragoza, respectivamente, difuntos.

Y que a su cadáver se habrá de dar sepultura en el cementerio de Torrero.

Fueron testigos presenciales D. Saturio Carnicer, natural de Cariñena, término municipal del mismo, provincia de Zaragoza, mayor de edad, casado, domiciliado en esta ciudad Hospital sesenta y seis y D. Cirilo Roca, natural de Barbastro, término muni-cipal de la misma, provincia de Huesca, mayor de edad, soltero, domiciliado en esta ciudad, Refugio once.

Leída íntegramente esta acta, e invitadas las personas que deben suscribirla a que la leyeran por sí mismas, si así lo creían conveniente, a lo que renunciaron, se estampó en ella el sello del Juzgado municipal y la firmaron el Sr. Juez, el declarante y los testigos; de que certifico

[Fdo.:] Rodrigo / Vicente Sanz / Saturio Carnicer / Cirilo Roca / Benito G. de Azcárate.

Nº 3

Zaragoza1891, 16 de noviembre


Certificado de defunción del fotógrafo Anselmo María Coyne Barreras


En la ciudad de Zaragoza a las nueve y media de la mañana del día tres de Enero de mil ochocientos noventa y seis ante D. Ma-nuel Sierra y Marco Juez Municipal y D. Benito G. de Azcárate Secretario, compareció D. Mariano Herranz, natural de Barcelona, termino municipal del mismo provincia de la misma, mayor de edad, casado carpintero, domiciliado en esta Ciudad Agustina de Aragón, número cuarenta y ocho, manifestando que

Anselmo Mª Coyne y Barreras, natural de Pamplona, de sesenta y siete años, casado, domiciliado en esta Ciudad, Plaza de la Constitución cua-tro, falleció a las doce de la noche del día uno en su domicilio a consecuencia de “Hemorragia cerebral” de lo cual daba parte como encargado

En vista de esta manifestación y de la certificación facultativa presentada, el Sr. Juez municipal dispuso que se extendiese la presente acta de inscripción, consignándose en ella además de lo expuesto por el declarante, en virtud de las noticias que se han podido adquirir, las circunstancias siguientes:

Que el referido finado se hallaba casado en el acto del fallecimiento con Ana Lapetra, natural del Pamplona, de cuyo matrimonio deja tres hijos llamados, Josefa, Antonio e Ignacio.

Que era hijo legítimo de Urbano y de Manuela, naturales de Tolosa (Francia) y Pamplona, respectivamente, ya difuntos.

Y que a su cadáver se habrá de dar sepultura en el cementerio de Torrero.

Fueron testigos presenciales D. Manuel Santos, natural de Murillo, término municipal del mismo, provincia de Logroño, mayor de edad, casado, domiciliado en esta ciudad Zuda siete y D. Enrique Tovar, natural de La Almunia, término municipal de la misma, provincia de Huesca, mayor de edad, casado, domiciliado en esta ciudad, Miguel de Ara doce.

Leída íntegramente esta acta, e invitadas las personas que deben suscribirla a que la leyeran por sí mismas, si así lo creían conveniente, a lo que renunciaron, se estampó en ella el sello del Juzgado municipal y la firmaron el Sr. Juez, el declarante y los testigos; de que certifico.

[Fdo.:] Manuel Sierra / Mariano Herranz / Enrique Tovar / Manuel Santos / Benito G. de Azcárate

Nº 4

Zaragoza1896, 3 de enero


Certificado de defunción del fotógrafo Joaquín Júdez Luis


En Zaragoza, provincia de su nombre, a las quince y treinta minutos del día seis de Noviembre de mil novecientos veintidós ante D. Emilio Belío Pallarés Juez Municipal suplente y D. José Iranzo Tobar Secretario se procede a inscribir la defunción de D. Joaquín Júdez Luis, de sesenta y tres años, natural de Zaragoza, provincia de idem hijo de Hilario y de Dª Cayetana domiciliado en esta Ciudad calle de las Danzas, número diez piso 4º de profesión industrial y de estado

Casado con Prima Gavilanes, natural de Zamora, de cincuenta y ocho años de edad. Que deja tres hijos llamados Prima, Josefa y Cesar, de treinta y cuatro, veintinueve y de veintidós años de edad respectivamente.

Falleció en su domicilio el día seis del actual a las once y treinta minutos a consecuencia de Uremia, según resulta de la certifica-ción facultativa y reconocimiento practicado, y su cadáver habrá de recibir sepultura en el Cementerio de Torrero de esta Ciudad.

Esta inscripción se practica en virtud de manifestación personal de Don Cayetano Laborada Lara, mayor de edad, funerario, domicilia-do Ossau, 4, como encargado. Consignándose además, habiéndola presenciado como testigos D. Juan Ramón Albero y D. Adolfo Colás Díez, mayores de edad y vecinos de esta Ciudad.

Leída este acta, se sella con el del Juzgado y la firman el Sr. Juez, los testigos y el manifestante de que certifico

[Fdo.:] E. Belío / Cayetano Laborda / Juan Ramón / Adolfo Colás / José Iranzo

Nº 5

Zaragoza1922, 6 de noviembre

Agradecimientos

El comisario de la exposición y el personal responsable de la obra cultural de Cajalón desean ma-nifestar su agradecimiento a todas aquellas personas que han colaborado desinteresadamente en la exposición, tanto en la fase previa de documentación, como en la cesión de sus materiales fotográficos de colección:

Arguas Perdiguer, AntonioBaras Escolá, CarmenBoisset, FranciscoFernández Albarés, MarioGamarra, PilarGarcía Guatas, ManuelHaes, Pieter C. de Hernández Latas, Mª del CarmenIbáñez, StellaJúdez Pastor, Francisco Javier Laborda Gil, EduardoMartín Casalderrey, MarianoMesa Bandrés, Luis Alfonso Muntadas Prim Aud’hui, CarlosMuntadas Lozano, FernandoZoppetti de la Pardina, Paz y Pilar

Iranzo Muñío, Mª TeresaGenerelo Lanaspa, Juan JoséArchivo Histórico Provincial de Zaragoza

Nájera Colino, PurificaciónArchivo-Biblioteca del Museo Municipal de Madrid

Teixidor Cadenas, CarlosArchivo Ruiz VernacciInstituto del Patrimonio Cultural de España

Utrera Gómez, ReyesFondo fotográfico del Archivo General de PalacioPatrimonio Nacional

Personal del Registro Civil de ZaragozaPersonal del Archivo Municipal de ZaragozaPersonal del Archivo de Protocolos Notariales de ZaragozaPersonal del Archivo del Cementerio de Torrero de ZaragozaPersonal de la biblioteca del Photomuseum, Zarautz

Libro editado con motivo de la exposición:PRIMEROS TIEMPOS DE LA FOTOGRAFÍA EN ZARAGOZAFormatos “Carte de Visite” y “Cabinet Card”

Exposición:CAJALÓNCoso, 29. Zaragoza

Producción, exposición y edición:CAJALÓN

Obra Cultural:Jana Catalán

Comisario:José Antonio Hernández Latas

Textos:José Antonio Hernández Latas

Fotografías:© Propiedad particular de los coleccionistas

Coordinación de la edición:Eduardo Capapé

Preimpresión y Maquetación:

Marian Latorre Abete

Impresión:

Gráficas Jalón

Montaje exposición:

Robert

Depóstico legal: Z-2252-2010

ISBN: 978-84-92903-03-0

Entidad colaboradora:

Este libro se terminó de imprimir

el 4 de junio de 2010

primeros tiempos de la fotografÍa en zaragoza

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