Porque las cosas que arreglamos al besarnos las rompemos con palabras.

¿Tu tienes a alguien así en tu vida? Si, ya sabes, me refiero a esas personas que tienen la capacidad de calmarte cuando nadie lo consigue, esas personas que de manera inconsciente te dan todo lo que son y que de forma automática siempre te están cuidando. A veces esas personas entran en tu vida sin que te des cuenta y sin que sepas cuanto tiempo se quedaran contigo, pero eso no importa porque existen esos momentos de complicidad y esos pequeños detalles que si fueran de otra persona no cobrarían el mismo valor. Lo cierto es que merece la pena tener de esas personas en tu vida, lo cierto es que merece la pena tenerte en mi vida.

A veces buscas tanto la perfección, buscas que todo salga bien, planeas todo hasta el más insignificante de los detalles y cuando crees que está todo solucionado llega algo completamente nuevo que, sin tu quererlo, trastoca tus planes, te cambia todo por completo y entonces dudas, si, esa ambigüedad que no soportamos los seres humanos, pero que es algo que no puedes controlar por más que hayas querido tener todo completamente atado.Ni ahogando mis penas en el más caliente alcohol hasta quemarme el esófago; ni durmiendo más de doce horas al día para no acordarme de ningún sueño; ni estudiando hasta acabar llenando toda mi capacidad mental; ni tirando a la basura todos los recuerdos, esos que ya se quedaron escasos y desgastados de tanto pensarlos; ni borrando todas las canciones para no escuchar como todas me intentan decir que quererte no ha sido ninguna pérdida de tiempo; ni sabiendo que el amor algún día me haría tanto daño que doliera... pude parar el golpe.Después de todo, solo sé que no sé nada; que mi mente creó una atmósfera tan adecuada al principio que paso el tiempo como si fueran años, almacenando cada recuerdo meticulosamente para que no se perdiera nada de camino, y en poco tiempo todo pasó tan sumamente rápido que sin darme cuenta me vi aquí, sola, tirada en el suelo, pasando las pocas fotos que teníamos juntos y dándome cuenta de que pocas veces había echado tanto de menos a alguien y menos, teniéndolo a escasos 50 metros de mi.En estos momentos me doy cuenta que soy peor que el filósofo más retorcido, que las palabras para hablar de ti fluyen hasta mis dedos, y que este maldito teclado no deja de sonar golpeado por ellos; y mi mente, sin descanso, no puede parar de idear finales pese a que el final quedase escrito hace ya bastante tiempo.Puede que esto solo sean palabras para ti, pero me ayudan a intentar entenderte, a comprender como la esencia de algo tan bello como según cuentan es el amor puede hacer tanto daño que la piel sangre por dentro, las lágrimas ahoguen los sesos y la cordura acabe volviendo loca a la razón de tanto quererte.

Te sigo echando de menos, es lo único claro que tengo desde que te conocí y te marchastes por una temporada demasiada larga.

Sé que no necesito escuchar canciones de amor para acordarme de ti, o una simple melodía sonando en mi cabeza porque todas y cada una de las canciones del universo me van a recordar siempre a ti.No, no te atrevas a preguntarme porque me marcastes tanto, porque ni yo misma lo sé; quizás por ser un poco más niña que ahora o porque me gusta sufrir, no lo tengo del todo claro, pero lo poco que tú pusistes de tu parte fue lo necesario para que me quedase

atontada viendote a lo lejos del pasillo.Sé que siempre acabaría cayendo con que tu solo me hicieras un gesto con la mano; sé que perdería la cabeza si te acercaras y sé que me volvería completamente loca con uno de tus besos.Desearía irme, muy muy lejos de aquí, tanto que los mapas no pudieran ni guiarme, tanto que no me acordase de tu nombre, tanto que no te viera nunca más, ya que creo que la única solución que puede acabar con esta adicción es la de huir, porque mirar para otro lado cuando alguien se estrella en la carretera, nunca fue lo mío.

Y con todo esto, hay días en los que digo ¡se acabó! pero al verte doblar esa puta esquina de siempre ya no puedo borrarte de mi cabeza,ya no paro de pensar en ti, ya no veo otra cosa que no seas tú, ya no tengo ganas de nada si no es de ti pero; cuando yo ya no esté aquí ya no habrá marcha atrás, ya ninguno podremos retroceder y volver a empezar como hacíamos siempre porque tú habrás sido un estúpido necio que no habrá hecho nada por lo que mereciera la pena quedarse.

Prometo no recordarte solo por tus manos que me hacían temblar; tus ojos que me hacían imaginarme como sería tocar las nubes; ni tampoco te recordare por la forma de abrazarme, ni como me acariciabas por las noches; no será por tu risa, la cual contagiabas a todo el mundo y que me hacía mirarte como una tonta mientras eras la persona más feliz del universo; prometo no recordarte por nuestras largas conversaciones con ningún tema concreto, solo buscando excusas absurdas para alargar la hora de tener que volver a casa; esta claro que no te recordare por la noches sin dormir esperando que me llamaras y, puedes estar tranquilo que no te recordaré por todos los días que nos hemos echado de menos mutuamente y no hicimos nada para ponerle remedio.Sinceramente nunca creí ser este tipo de personas, me reía de todo el mundo que sentía esta necesidad, me parecía patético depender de alguien e incluso´, en alguna ocasión, me hicieron sentir vergüenza ajena.Ahora toda esa gente tendría que hacer una larga fila a las puertas de mi casa para reirse de uno en uno de mi, ahora tendría que pedirles perdón, por haberles intentado hacerles creer que este puto sentimiento no existía, que todo era cuestión de marketing, que todo era una patraña que no tenía ni pies ni cabeza, que era una de las mayores mentiras del mundo; pero aquí la única engañada he sido yo.Ahora bien, quiero que sepas una útima cosa, no te voy a recordar por nada de lo que he dicho antes porque solo quiero recordarte como la persona que más he querido nunca, como aquel chico que aun sin hablarme hacia que todos los días tuviera un motivo para levantarme, aquel personaje que conocía desde hace tanto tiempo y que pasó tan inadvertido para mi que cuando al fin reaccioné ya era demasiado tarde, serás el mejor de mis sueños, serás el motivo por el que sentí algo que nunca ví posible, algo que creí inaccesible para mí

Y sí, me pueden las ganas, los besos, los labios, el lunar de tu frente, no sé. La forma en la que me miras, en la que me tocas o el ruidito que producen tus labios cuando me das un beso. Tus comentarios indecentes, la forma de interrumpir, de ponerme nerviosa, la tontería que tienes encima, el que te estoy ganando, tus mensajes, la forma maligna de la que te ríes de mi o tus manos alrededor de mi cintura, no sé. Solo sé que me sé esa película de principio a final, que tengo pensado gastarte la próxima vez que estemos

frente a frente, tengo pensado dejarte marca, más honda que las anteriores veces. Mira, escucha, que te echo de menos, no te imaginas cuánto. Te quiero, te quiero, te quiero y millones de veces te quiero. Muy por encima del cielo, a miles de millones de años luz..