periodico diciembre 2011

MásLibros. Año 2, Número 11, diciembre 2011 • 1

Año 2, Número 11, diciembre 2011 • ISSN: 2216-1554 • Consejo de Redacción: Panamericana Editorial Ltda. Diseño y diagramación: Marca Registrada D.G. • Relaciones públicas de MásLibros: Jaidyth Perdomo Impresión: Panamericana Formas e Impresos S. A. • Calle 12 N° 34 - 30, tel.: 364 9000 • www.panamericanaeditorial.com

¿Dónde están los caníbales, las sirenas y los tesoros?Por FeliPe Muñoz JaraMillo

Hacia los 80 años de Fernando BoteroPor Juan Gustavo Cobo borda

El 19 de abril de 2012 Fernando Botero cumplirá 80 años. Como abrebocas para tal celebración se ha inaugurado el 27 de octubre de 2011 en la galería Malborough de Nueva York una nueva exposición titulada Via Crucis: The Passion of Christ. A ella seguirá, el 22 de marzo de 2012 la gran retrospectiva en el Museo del Palacio de Bellas Artes de México. La conformarán 183 cuadros al óleo, dibujos, acuarelas y esculturas.

La vocación artística de Fernando Botero se afir-mó y consolidó cuando viajó a Italia y al trabajar en Flo-rencia recibió el impacto decisivo del arte de los siglos XIII y XIV. En su libro Un viaje en el arte. El enigma de la luz el escritor holandes Cees Noteboom escribió:

“No hay ciudad más propicia a la meditación acerca del tiempo que Florencia, pues en ella lo pere-cedero y el tiempo pasado se han tornado tan sólidos y visibles, que, en una sublime paradoja, evocan perma-nentemente la eternidad”

Ese diálogo entre la forma rotunda implan-tada en el espacio y el hálito de poesía que la cir-cunda y la proyecta con su atmósfera que tiene tanto de regocijo infantil como impasibilidad de escultura muestran lo bien que asimiló las leccio-nes de artistas como Piero della Francesca y Mas-sacio. Pero este volumen contenido en el límite y esas miradas impasibles en su frialdad incluso bizca, no dejan de sugerir guiños cómplices al es-pectador. No es extraño que varios cuadros mane-jen la desproporción de una casa de muñecas para

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CONTENIDOHacia los 80 años de Fernando Botero ..........................1¿Dónde están los caníbales? ...........................................1¡Enigmas apasionantes, diversión garantizada! ..........2El Capitán Emilio Salgari ...............................................2Una vida excepcional Jack London ...............................3Una aventura de película ................................................4Bandas sonoras inolvidables ..........................................4Aventuras a la griega .......................................................5Todo un mundo para exploradores ................................5¡No te gustaría ser! ..........................................................5Para pequeños lectores ...................................................6¡Difícil y peligroso! ..........................................................6Viaje con la imaginación .................................................6Novedades noviembre .....................................................7El silencio de un poeta ....................................................8

Me informaron sobre un grupo de huéspedes ilustres que visitarían la ciudad durante un breve periodo de tiempo. Mi labor consistía en recogerlos, montarlos en mi camioneta y llevarlos a dar un paseo por la ciudad, mos-trarles nuestras costumbres y logros, puesto que dichos hombres provenían de lugares y tiempos muy lejanos al nuestro.

El encuentro no se dio en el aeropuer-to, como cualquiera habría supuesto, sino en la puerta de una pequeña biblioteca pública cercana al centro de la capital. En total, la comitiva constaba de cinco integrantes: dos franceses, dos ingleses y un norteamericano. Todos muy elegantes y cultos; sus maneras eran tan sutiles que me hacían sentir como la persona más tosca e impetuosa.

Los invité a ingresar al vehículo, a lo que obedecieron todos menos uno, el señor Dumas. “Hace mucho calor”, me dijo, “pre-fiero esperar afuera de la carroza mientras traen los caballos”. Le expliqué que los ca-ballos ya estaban en el interior de la carroza y no había necesidad de atarlos o desatarlos

en cada oportunidad. Mis palabras no con-tribuyeron mucho a persuadirlo de ocupar su puesto, por el contrario, lo alarmaron aún más. Al final accedió a regañadientes, mo-tivado por su compatriota, el señor Verne, quien estaba ansioso de experimentar el mo-vimiento de aquella maravilla mecánica en la que se encontraban.

El señor Stevenson, sirviendo como vocero del grupo, me confesó que se les ha-bía concedido un permiso especial de 24 horas para visitar el siglo XXI en busca de experiencias que pudieran servir para nue-vas obras literarias, ya que los cinco eran prolíficos escritores. “Venimos en busca de aventuras”, concluyó.

Por un momento sentí temor de defrau-darlos, pues juzgaba que en 24 horas podían ocurrir pocas cosas dignas de ser considera-das una aventura. En la rutina e inercia del día anterior, lo único relevante de contar ha-bía sido un pinchazo en medio de la lluvia, una moneda de doscientos en el pasillo de la oficina y una paloma extraviada que ingresó al banco generando gran conmoción durante cinco minutos.

“Podría llevarnos a la Luna” dijo el señor Verne “después de todo, este es el siglo XXI”.

El legado de mis huéspedes se conserva en la misma biblioteca donde los dejé al terminar el día, donde aguardan con paciencia cada vez que me deje invitar a ir en busca de aventuras.

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2 • Panamericana Editorial. Año 2, Número 11, diciembre 2011

¡Enigmas apasionantes, diversión garantizada!Increíblemente entretenidos, los libros de las series Los tres detectives presentan casos misteriosos que son resueltos por un grupo de jóvenes del común, temerarios y apasionados por encontrar la verdad.

Los tres detectives tiene su origen en “The Three Investigators”, una serie americana de novelas juveniles creada por Robert Arthur, escritor y guionista de Alfred Hitchock, publicada por pri-mera vez en los años 60. A partir de 1993, la edi-torial alemana Kosmos adquirió los derechos de la serie y comenzó a desarrollar y publicar nue-vos títulos de autores alemanes bajo el nombre “Die Drei ???”. En febrero de 2008, Panamerica-na Editorial comenzó la edición en español para Latinoamérica de varios títulos de la serie alemana.

Estos libros se desarrollan en torno a tres detectives de 13 años, Justus Jonas, Peter Shaw y Bob Andrews, quienes viven en la ciudad ficti-cia de Rocky Beach, en Estados Unidos. Cada li-bro presenta una historia diferente en la que los tres detectives deben resolver un nuevo misterio. En el proceso investigativo los chicos van acumu-lando pistas y con frecuencia deben afrontar peli-gros antes de resolver cada caso. Bajo la premisa de que “las explicaciones simples y racionales son

por lo general las acertadas”, los tres detectives resuelven los

misterios con relativamente pocos recursos: algo más que

un teléfono, bici-cletas y acceso a una biblioteca.

La serie ha tenido tanta aco-

gida por los jóve-nes a nivel mundial que sus creadores decidieron hacer dos

nuevas series deriva-das de esta: Los tres

pequeños detectives y Las tres detectives. Su éxi-to también ha sido arrollador. Los tres pequeños detectives maneja el mismo concepto y los mis-mos personajes de la serie juvenil, pero en esta los protagonistas tienen 10 años. Las historias, desti-nadas a un público más joven, son más sencillas y más cortas que las de la serie original, pero igual de divertidas y bien elaboradas.

Por su parte, la serie Las tres detectives busca acercarse a las adolescentes. Presenta las historias de tres niñas: Kim, una joven que sueña con escribir novelas policíacas; Franziska, acos-tumbrada a disfrutar del tiempo con su familia, su gallina y su yegua Tinka, y Marie, quien rara-mente tiene tiempo libre entre el grupo de teatro y sus clases de canto, baile y aeróbicos. Un buen día, a Kim se le ocurre algo: para tener ideas para sus historias ¡fundará un club de detectives!, tal vez algún día sea tan famoso como el de Los tres detectives, los personajes de sus libros favoritos. Así, la serie relata las aventuras de tres ingeniosas adolescentes que, en el desarrollo de las activida-des típicas de las niñas de su edad, se enfrentan a todo tipo de misterios.

En estas vacaciones, las series Los tres de-tectives brindan a grandes y chicos el mejor en-tretenimiento, junto a estos divertidos personajes.

El Capitán Emilio SalgariLa obra de Emilio Salgari es, para muchos, la puerta de entrada al mundo de la literatura, mundo don-de es imposible dar paso atrás y donde nunca se olvida lo placen-tero y original. A pesar del tiempo (y quizá de otras lecturas) quienes han leido a Salgari siempre dejan un espacio para recordar las selvas, los mares, las aventuras y los perso-najes surgidos de estas obras, ade-más porque esos personajes y esos lugares están enmarcados en situa-ciones donde prevalece la justicia, el honor y la lealtad. Efectivamente, en las historias de aventuras todo es mejor si el vencedor lleva consigo o representa los más nobles ideales de justicia. De un hombre que quiso

ser marino pero que no culminó sus estudios y que muy poco contacto tuvo con el mar y la aventura sur-gieron más de 80 novelas e innume-rables relatos cortos que se han ido perdiendo en el tiempo pero que no por ello dejan de representar la au-téntica imaginación.

Hijo de suicida, Emilio Sal-gari decidió acabar con su vida a los 49 años (ejemplo que también seguirían dos de sus hijos) posi-blemente aquejado por una vida atormentada al lado de su esposa y por una producción literaria inmen-sa que representó, en lo económico, ganancias para los editores y en lo personal un gigantesto mundo pa-ralelo del cual no pudo salir airoso.

Aquí el inicio de su obra Los tigres de Mompracem:

“En la noche del 20 de di-ciembre de 1849 un violentísimo huracán azotaba a Mompracem, isla salvaje de siniestra fama, gua-rida de temibles piratas situada en el mar de la Malasia, a pocos cen-tenares de kilómetros de las costas occidentales de Borneo.

Empujadas por un viento irresistible, corrían por el cielo ne-gras masas de nubes que de cuan-do en cuando dejaban caer furiosos aguaceros, y el bramido de las olas se confundía con el ensordecedor ruido de los truenos”.


uNa vIDa ExCEpCIONaL

Jack LondonLa aventura entró en la vida de Jack London en el momento de su naci-miento, y la incertidum-bre lo acompañó desde la más temprana edad. Tal vez la combinación de ingredientes inusua-les: un padre astrólogo (aunque London no lo supo hasta su madurez), una madre espiritista y neurótica, una educación autodidac-ta en la biblioteca pública de San Francisco, que puso en sus manos montañas de libros; sus periodos de vagabundo y contrabandista —que lo llevaron a la cárcel en varias oca-siones— o su trabajo como pescador y marinero en barcos que zarpaban hacia el Japón, todo antes de cum-plir los 17 años, fueron materia pri-ma para la producción de esta mente extraordinaria. Por ese entonces co-menzó su carrera literaria al descri-bir con absoluta exactitud e impacto

en el lector, el paso de un tifón en altamar mientras trabajó a bordo del Sophie Sutherland.

A los 21 años se marchó a Alaska, al igual que miles de estadouni-denses, para escapar de la recesión económica. Las duras condiciones de vida, el frío extremo, el hambre, el escorbuto, el peligro y

la constante cercanía de la muerte inspiraron la que, a menudo, ha sido catalogada como su mejor historia corta: Encender una hoguera.

No solo las vivencias de sus viajes fueron dibujadas en sus rela-tos: también fue militante comunis-ta y agitador político; las ideas de Nietzsche y la contradicción indivi-dualidad-colectividad, están presen-tes en su obra. Su éxito fue enorme y lo alcanzó en muy poco tiempo. Sus novelas fueron llevadas al cine y tra-ducidas a numerosas lenguas.

Sin embargo, la aventura de su propia vida, al igual que la ma-yoría de sus relatos, tampoco tuvo un final feliz, y su muerte —envuel-ta en el misterio, pues se rumoran un suicidio e incluso una inexplica-ble desaparición, contradice el prin-cipio de la lucha por la vida y la

supervivencia del más fuerte, que estuvo presente en la mayoría de sus historias. No hay certezas, pero los rumores y la especulación deriva-dos de sus escritos envuelven en el misterio una muerte que podría con-siderarse apenas digna de una vida excepcional.

“Todo regalo verdadero es recíproco. El que da no se priva de lo que da. Dar y recibir son lo mismo”.

Jorge Luis Borges


Bandas sonoras inolvidablesLas imágenes en movimiento son solo una parte de la creación de mundos fantásticos en la Gran Pantalla (y en la chica también) el sonido que acompaña cada una de las acciones relatadas les da fuerza y ayudan a que el espectador se involucre tanto en la trama que hasta salte del susto cuando el héroe es amenazado.

Técnicamente conocida como banda sonora, se entiende como el audio completo de una película y el resultado de la edición de diferentes pistas de sonido, ya sean diálogos, sonidos, música o el acompañamien-to paralelo. Normalmente el término alude solamente a la música de una película o a la comercialización de los temas musicales de una obra. Desde un punto de vista musical, se entiende como banda sonora aquella músi-ca tanto vocal como instrumental compuesta expresa-mente para una película, cumpliendo con la función de potenciar aquellas emociones que las imágenes por sí solas no son capaces de expresar.

Máslibros hizo una selección especial para des-cargar en cualquier mp3 y sentir cómo la música se apodera de nuestra imaginación.

LIsTa DE REpRODuCCIóN paRa sENTIRsE avENTuRERO

1. John Williams – Superman (Superman). 2. John Williams – Indiana Jones (Indiana Jones). 3. John Williams – La Guerra de las Galaxias (La Guerra de las

Galaxias Saga). 4. John Williams – La Marcha Imperial (La Guerra de las Galaxias:

El Imperio Contraataca). 5. John Barry – James Bond (James Bond). 6. Lalo Schifrin – Misión Imposible (Misión Imposible). 7. Ennio Morricone – El bueno, el malo y el feo (El bueno, el malo y el

feo). 8. Richard Strauss – Así Habló Zaratustra (2001 Odisea del Espacio). 9. Dick Dale And His Del-Tones – Misirlou (Pulp Fiction).10. John Williams – Tiburón (Tiburón).

LIsTa DE REpRODuCCIóN paRa sENTIRsE uN héROE saTIsfEChO

1. Bill Conti – Gonna Fly Now (Rocky I ). 2. Simon & Garfunkel – Mrs. Robinson (El Graduado). 3. Mikis Theodorakis – Zorba el Griego (Zorba el Griego). 4. Elvis Presley – Jailhouse Rock (El blues de la Prisión). 5. Steppenwolf – Born to be Wild ( Easy Rider). 6. Bob Segar – Old Time Rock N' Roll (Negocios riesgosos). 7. Varios – Hakuna Matata (El Rey León). 8. La Violetera (versión instrumental para la película Luces de la

ciudad). 9. Judy Garland – Over the Rainbow (El Mago de OZ). 10. Julie Andrews – Do, Re, Mi (La Novicia Rebelde).

Una aventura de película con cine de aventuraOtra forma de contar grandes historias sobre viajes, tesoros perdidos, gran-des enigmas o intrépidas hazañas es por medio de imágenes en movimiento. Ya sea en el cine, a través de la televisión o por medio de otros dispositivos digitales disponibles para entretenernos. Las películas hacen parte de nues-tra vida y nos permiten experimentar, por media hora o más, el riesgo y la adrenalina como si fuéramos los propios protagonistas.

El cine de aventuras refleja un mundo heroico en el que suele predomi-nar la acción y los valores caballerescos. Fue inventado en Italia como medio de exaltación de su pasado histórico, para posteriormente ser usado en Rusia como medio de propaganda de su periodo revolucionario. Títulos como Rai-ders of the Lost Ark, primera entrega de la saga sobre Indiana Jones, dieron

gran auge al género en la década de 1980, que ha tenido sus altibajos de in-terés a lo largo de la historia.

Actualmente las franquicias de Piratas del Caribe y Matrix han re-vivido el género gracias a los avances tecnológicos en el procesamiento de imágenes que permitieron el diseño de escenas que antes se consideraban imposibles. Así fue posible pasar a la pantalla con mayor esplendor algunos libros de aventuras como Harry Potter, El señor de los Anillos y las Crónicas de Narnia.

En esta temporada de vacaciones MásLibros presenta una selección de 40 películas de aventura para ver y en algunos casos leer:

CLásICOs DE DOMINgO EN La TaRDEIndiana Jones (Saga).2001 Odisea del Espacio.La Guerra de las Galaxias (Saga). Los Siete Samuráis.Aguirre la cólera de Dios.

Franquicia 007.Regreso al Futuro I.Historia Sin Fin.El Último Mohincano.El Planeta de los Simios.

Dentro del Laberinto.Ben Hur.Espartaco.Lawrence de Arabia.La Reina de África.

Doctor Zhivago.Los Goonies.Tras el Corazón Verde.20 000 Leguas de Viaje Submarino.

paRa vER EN paNTaLLa gIgaNTEPiratas del Caribe (Saga).


Si de aventuras se trata nada se compara con los antiguos griegos. Hermanos que matan a sus hermanos, padres que matan a sus hijos, dioses vengativos, grandes guerras, invencibles bestias, increíbles criaturas, muchas historias de amor, de desamor y viajes; muchos viajes. A pesar de tener pocos medios de transporte desarrollados para la época, esto nunca fue impedimento para crear maravillosos relatos sobre inmensos recorridos que aún hoy captan nuestra atención. Una prueba más de que el mejor viaje es un buen libro.

Las aventuras de Perseo: Perseo adora a su mamá y no va a permitir que la obliguen a casar-se, por eso, va a hacer hasta lo imposible por sal-varla. Se embarca en un viaje maravilloso lleno de bestias marinas, medusas y dioses. Incluso llega hasta el mundo de los muertos ¿Podrá Perseo evi-tar que su mamá se case?

El caballo de Troya: Inicia con el viaje de las tropas espartanas hacia Troya para empezar una guerra que durará mas de diez años causada por el amor de la “mujer más hermosa del mundo” ¿Quién será el ganador?

Los viajes de Odiseo: Después de participar en la guerra de Troya Odiseo quiere volver a casa, pero sus desobedientes compañeros lo meten en lío con nada más ni nada menos que el mismísimo dios de los mares, Posidón, quien jura jamás de-jarlo en paz. ¿Podrá Odiseo volver a casa?

Los doce trabajos de Heracles: Heracles cometió un terrible error y para reparar el daño cometido debe hacer todo lo que le pida el rey Eristei de Micenas. Doce arduas tareas tendrá que realizar Heracles para ser perdonado ¿Podrá ter-minarlas todas? Animales increíbles, grandes via-jes y muchas, muchas peleas.

Teseo y el Minotauro: Teseo desea liberar a los atenienses del gran peso de ser comida de Mi-notauro (una criatura mitad hombre, mitad toro) Pero ¿por qué existe el Minotauro? Aventura de amores y desamores, gente que es comida y un solo héroe. Teseo.

Jasón y los argonautas: Jasón desea más que nada matar a su tío Pelias ya que él mató a su padre. En una muy astuta jugada Pelias termina enviando a Jasón en busca del vellocino de oro (la lana de una cabra alada ¡y de oro!) acompañado de 50 amigos saldrá de Yolco hacia Cólquide, en el otro extremo del mundo. ¿Cuántas aventuras ten-drá en un viaje tan largo?

TODO uN MuNDO paRa

Exploradores, astrónomos y piratasLa lectura es una pasión contagiosa, por eso para gozar de este tiempo de descanso, en familia, te ofrecemos una variedad de libros para que niños y adultos disfruten de sus aventuras con los hé-roes y villanos. Libros que te proporcionarán un buen rato, sin reflexionar mucho y sin importar el sitio donde te encuentres.

La serie El mundo de los… transporta a los lectores a diversas historias y aventuras; de tal forma que podrás verte, inicialmente, desen-marañando misterios de los planetas, estrellas y galaxias; o atravesando África, como buen explo-rador, hasta visualizar de cerca las hazañas de los crueles piratas.

¡No te gustaría ser! La vida de los aventureros que descubrieron nue-vos territorios, levantaron maravillosas obras de ingeniería o nos contaron acerca de civilizaciones asombrosas pudo ser muy excitante pero, con se-guridad, también la pasaron muy mal en algunos momentos.

El adivino maya, por ejemplo, fue considera-do un hombre sagrado alrededor del año 710 a. C., pero su vida no era nada fácil y entre sus obliga-ciones estaba el sangriento trabajo de hacer sacri-ficios humanos a los dioses.

Tampoco un trabajador de la Gran Mura-lla China podría decir que la pasó bien. Dejó a la humanidad una colosal obra que ha permanecido

casi intacta durante miles de años, pero apenas podía subsistir con sus ingresos y por las agota-doras jornadas de trabajo, muchos de ellos mu-rieron, teniendo por sepultura la muralla misma.

A finales del siglo XVI, Isabel I de Inglaterra quiso extender su territorio al nuevo mundo des-cubierto por Cristóbal Colón. Muchos hombres emprendieron la aventura, pero nada fue como se les había prometido. Durante el viaje, algunos naufragaron; los que lograron llegar no encontra-ron qué comer, fueron recibidos por tribus enfu-recidas y ¿estás seguro de que te hubiera gustado ser uno de ellos?

El mundo de la astronomíaCarole Stott Más allá de nuestro planeta, existen mun-dos congelados, cometas e incluso enormes agujeros negros. El universo cuenta su pro-pia historia a través de la astronomía, así como los fascinantes inventos y descubri-mientos hechos por los astrónomos a través de los siglos. Únete a ellos en sus viajes y sorpréndete con las primeras observacio-nes de las civilizaciones antiguas hasta nuestros intentos por medir y conocer el universo.

El mundo de los exploradores Philip WilkinsonSigue las huellas de los más famosos ex-ploradores del mundo. El libro está lleno de sorprendentes aventuras y desesperados intentos por sobrevivir en los más salvajes lugares del planeta: como pasear en came-llo, atravesar el Sahara o sumergirse en las profundidades del océano para conocer los restos del Titanic.

El mundo de los piratas Philip Steele Al recorrer las páginas de este libro cono-cerás la verdadera historia de la piratería. Vive las hazañas de los piratas, desde los crueles bucaneros del Caribe hasta los bár-baros corsarios hambrientos de poder que navegaban en el mar Mediterráneo.

Aventuras a la griega


gRaNDEs avENTuRas

Para pequeños lectoresSeguro que a muchos de nosotros nos gusta tener en las vacaciones un libro para leer en aquellos momentos que descansamos de las otras actividades de la rutina diaria y hoy encontramos temas tan diversos como entretenidos que pueden ser una alternati-va interesante para refugiarnos en él y vivir apasionantes aventuras.

Los libros de aventuras enfatizan en su argumento los viajes, el misterio y el riesgo. Una característica recurrente es la acción presente hasta dominar los escena-rios, básica para el desarrollo de la trama. El liderazgo del héroe o la heroína, el sabor autobiográfico del lector, que se identifica con los hechos relatados y con los perso-najes y la sencillez del vocabulario, hacen que estos libros sean una grata compañía para los jóvenes lectores. Los hechos pueden ser o no ser basados en la vida real.

En cada uno de los títulos: El Papá Noel que les tenía miedo a los niños, El pri-mer viaje de Zip, El pueblo de papel, La balada de los juguetes, La vecina de la casa encantada, Una semana loca, loca y ¡Mi vecina es una bruja! pondrán en juego la cu-riosidad de los lectores.

Viaje con la imaginaciónEl género de aventuras comprende todo el ciclo de haza-ñas que distingue el tradicional itinerario mítico, desde las gestas de la antigua caballería hasta la búsqueda de teso-ros, pasando por todas aquellas peripecias que populari-zaron las historietas o cómics con títulos como El zorro, El capitán Trueno, y la aparición de un gran número de personajes arquetípicos (mosqueteros, piratas, explorado-res, pioneros, paladines, descubridores, etc.). Sin embargo hay miles y miles de personajes que dentro de cada his-toria trazan un mundo mágico y que se erigen en figuras sin nada más que sus historias. Ara por ejemplo es una guacamaya que tiene como característica básica distinguir los colores y pintar; los niños que una mañana emprenden un viaje buscando “la casa del sol” se enfrentan a una dura realidad; Angustias, la señora que vive de noche, no deja dormir a nadie y teme a la soledad; el misterioso Juan del gallinero que busca reemplazar al contador de historias y finalmente el turista que se ve explotado en la visita a unas ruinas arqueológicas, por comerciantes inescrupulosos.

¡Difícil y peligroso!Atrévete a aventurarte en algunos de los grandes retos de la historia de la humani-dad, afrontados por intrépidos personajes. En Aventuras en el aire encuentra a varios valientes que arriesgaron sus vidas en la aviación, con miras a llegar a donde nadie había llegado jamás; en Exploración extrema conoce a diferentes exploradores que se adentraron en lo desconocido para descubrir nuevas tierras; y en Fugas desespe-radas diviértete con algunos escapes famosos de osados personajes en su intento por recobrar su libertad.

Con un transfondo histórico, estos divertidos libros de aventura y peligro ¡te encantarán!


Novedades

argemiro cazapájaros Celso RománEsta es la historia de Argemiro, un niño que vi-vía en el campo y solía ser un terrible cazador de pajaritos, hasta que un día se despertó conver-tido en... ya lo verán ustedes cuando entren en la magia de este relato que nos invita a amar la Naturaleza.

El cogetobillosRose Impey “Cada noche, cuando me meto en la cama, intento esconderme de la espeluznante mano que pue-de aparecer en cualquier momento y agarrarme del tobillo para arrastrarme hacia abajo, abajo, abajo, hasta el viscoso pantano en el que vive el cogetobillos...”.

Una niña piensa en un monstruo imagina-rio mientras trata de dormir, a pesar de su temor pronto descubrirá cómo enfrentarse a ese ser misterioso.

Camarón que se duerme... Samarys PoloSi alguna vez quieres enviar un saludo al ca-maroncito, lo puedes escribir con tu dedo en la arena. Hazlo donde lo puedan alcanzar las olas. Cuando veas que se ha borrado, dondequiera que él se encuentre, tu mensaje le habrá llegado.

El vampiro voladorRose Impey“En el cuarto de invitados del abuelo hay una pe-queña puerta escondida en una esquina. Cuando mamá era pequeña, su hermano siempre le con-taba que era la puerta de la guarida del coco. Le decía que estaba llena de fantasmas y demonios y vampiros esperando a escaparse de allí para atra-parla cuando se hiciera de noche...”.

Y de ese cuarto oscuro sale una cometa con forma de vampiro que pareciera querer volar en medio de la noche… pero un niño sabrá qué hacer para dominarla.

El barco de medianocheRose Impey“A veces, cuando duermo en el cuarto de mi her-mana, jugamos a que su cama es un gran barco que se agita en el mar en medio de una tormen-ta. Yo vigilo por si aparecen ballenas asesinas y monstruos marinos o incluso viscosas y escurri-dizas serpientes de mar...”.

¿Qué hacer para jugar con una hermana do-minante y mandona? Afortunadamente muy cerca está mamá para ayudar a controlar las aventuras en un imaginario barco de medianoche.

un gorila y las cosas que me gustanAtsuko Morozumi Un simpático gorila pasea por los sitios más in-sospechados mientras cuenta de uno a diez. Be-llas ilustraciones sobre un gorila feliz.

hijas del MuntuMaría Mercedes Jaramillo y Lucía Ortiz Las autoras reunieron en este libro las historias de vida de mujeres afrodescendientes desde Mé-xico hasta Argentina. Mujeres que se destacaron en la cultura y en la política, e integraron su he-rencia cultural y sus conocimientos al trabajo, con innegables aportes al continente.

La interpretación de los sueños de la a a la ZPamela J. BallUn interesante recuento de la interpretación moderna y el análisis de los sueños, según las teorías de Sigmund Freud, Carl Jung, G. William Domhoff, y otros. La autora habla sobre los tras-tornos del sueño, los sueños premonitorios y, fi-nalmente interpreta los más recurrentes –de la A a la Z–, con su significado espiritual, psicológico, cotidiano y específico –si el soñador es un hom-bre o una mujer.

Minimanga manos y piesYishan LiPara todos los amantes del dibujo manga, es im-portante que sus trabajos sean muy precisos y cercanos a la realidad. Este libro les ayudará a mejorar su técnica al dibujar las manos y los pies de sus personajes.

La mano y el pie, fuentes de sanaciónFriedrich ButzbachEste libro presenta una combinación de renova-das técnicas de reflexología con los procedimien-tos clásicos. Una herramienta importante para mantener la salud y el bienestar.

Bebés despiertosSimone Cave y Caroline FertlemanEs esencial que los padres se preocupen por el bienestar de sus bebés. Este libro le presenta 100 ideas lúdicas que, con seguridad, contribuirán a un mejor desarrollo de sus hijos.

Mi primera bibliotecaEsta magnífica colección de libros les permitirá a los más pequeños familiarizarse con los núme-ros o con los animales. Con grandes y coloridas ilustraciones, cada caja cautivará la atención de los primeros lectores, quienes podrán descubrir el mundo de los libros de una manera entretenida.


El silencio de un poeta

A veces se conoce a los padres a través de los hijos. Así ocurrió con Tomás Segovia. Primero Francisco durante un viaje por Estados Unidos, y luego a Tomás, su padre, en Madrid. Eso fue por los años en que vivía en una calle estrecha parale-la a Carranza, cuyo nombre se olvida ahora, en el barrio de Malasaña, muy cerca de donde se dice que estuvo el muro que pintó Goya en 1814, sobre los fusilamientos del 3 de mayo de 1908. Después Tomás, con la práctica de abrir su casa todos los jueves a los amigos —con la condición de que lle-varan lo que querían beber y comer esa noche— se fue a vivir a un piso muy cerca de la calle del Pintor Rosales, frente al Parque del Oeste.

Pero mientras vivió en Malasaña cualquiera lo podía encontrar entre las diez de la mañana y la una en el café Comercial de la Glorieta Bilbao, en donde confluyen las calles Carranza y Sagas-ta y las cruza la calle de Fuencarral. El café Co-mercial fue fundado el 21 de marzo de 1887 y es uno de los lugares más típicos de esa época que se conoció como la Restauración. Allí se sentaba To-más, siempre en la misma mesa, a escribir poesía y disfrutar de un café en compañía de los amigos o con quienes se atrevían a acercarse para pedirle un autógrafo. Nunca le gustaron las editoriales y en varias ocasiones practicó la autoedición arte-sanal con algunos de sus títulos.

Ahora, cuando se siente el vacío de su voz y su pluma inerme, hay que releer su poesía:

El día que tú vengas

El día que tú vengas

sé que vendrás tan libre que ni el lazo

que con tu propia libertad te ata

ni la necesidad de comprenderte

ni el horror de mentir y ni yo mismo

ni nada trabará a tu amor las alas.

Vendrás entera y simple

sin nada que decir ni que callar

libre como un mendigo.

Tomás segovia (1927-2011)

Reconocí que, en efecto, habíamos visitado la Luna en una oportunidad… cuarenta años atrás y que desde entonces no hemos vuelto. “Nada como un viaje en barco para despertar la imaginación”, afir-mó el señor Melville. Le aclaré que desde la inven-ción del avión los barcos solo se utilizaban para el comercio, a excepción de los cruceros en donde lo único que se hacía era subir de peso y dorar la piel con baños de sol.

Propuse a mis huéspedes llevarlos a una sala de cine donde podrían acceder a innumera-bles aventuras o enseñarles a manejar mi compu-tador portátil y navegar por Internet. Se opusieron rotundamente, alegando que preferían vivir di-chas aventuras en carne propia, y no a través de los zapatos de otros.

Me encontraba en una incómoda posición, enfrentado a la realidad de nuestro tiempo, en el que hemos de conformarnos con observar las ha-zañas y experiencias ajenas sin intentar exaltar las propias. Preferí excusarme con todos y declarar mi realidad completamente carente de aventuras. Mas el señor Dickens me interpeló, asegurando que lo que buscaba podía estar justo enfrente de mis narices y no en la lejanía del horizonte que la tecnología parecía estar prometiendo.

Los pequeños sucesos que yo había subes-timado eran pistas cuyo seguimiento podía llevar a mayores hallazgos. Debía ejercitar la constan-cia y mi imaginación, esta última, una cualidad que los cinco invitados coincidían en señalar casi atrofiada en los habitantes del siglo XXI.

El día transcurrió mejor de lo que creí, ha-ciendo múltiples paradas en lugares de la ciudad, icónicos y anónimos por igual. A todos, sin ex-cepción, les producía un enorme vértigo la velo-cidad del automóvil y habrían preferido caminar, si las distancias lo hubieran permitido. Los auto-res llenaron libretas enteras con apuntes, guarda-ron sensaciones, imágenes y recuerdos de nuestro siglo. Contrario a lo que yo creía, no mostraron demasiada nostalgia al descubrir que el mundo se había ‘domesticado’ mucho un siglo y medio después. Los mares infestados de piratas y teso-ros habían desaparecido, la ciencia había deve-lado muchos misterios de la Tierra y el espacio que antaño habían generado conjeturas y relatos increíbles.

Fui yo el que sintió el efecto silencioso y profundo de la nostalgia, al pensar en todos esos discursos perdidos, esas historias empolvadas de un pasado misterioso que hemos olvidado poco a poco. Por fortuna, el legado de mis huéspedes se conserva en la misma biblioteca donde los dejé al terminar el día, y en muchas otras bibliotecas, estanterías, rincones y bolsillos donde aguardan con paciencia cada vez que me deje invitar a ir en busca de aventuras.

aludir al padre que sale a traba-jar y a la mujer y a los hijos que se quedan, en el hogar. Pero es también su color, festivo e im-previsto, el que hace posible esa acertada solución, trabajada en bodegones, naturalezas muer-tas, paisajes, corridas y análi-sis pictóricos de los personajes que representarían una Améri-ca Latina de dictadores, juntas militares y primeras damas, tan grotescas como pueblerinas.

Jorge Luis Borges en una charla con Esteban Peicovih lo dijo:

hacia los 80 años de fernando Botero Viene de la pág. 1

¿Dónde están los caníbales, las sirenas y los tesoros? Viene de la pág. 1

“Qué cosa han hecho los pintores sino repetir, a lo largo de los siglos, la virgen con el Niño, la pasión y la Crucifixión”.

Esto tiene una gran ventaja: quien mira ya sabe de qué se trata y puede in-teresarse más en las varia-ciones personales de cada autor. Por ello Botero colo-cará su crucifixión en el me-dio de Central Park y podrá poner alrededor suyo, no centuriones romanos sino inconfundibles policías co-lombianos. Un tema clásico es ahora otro tema boteria-no. En el libro de Juan Gus-tavo Cobo Borda: Fernando Botero. La plenitud de la for-ma (publicado por Paname-ricana Editorial, 2006) se ha documentado la trayectoria de este colombiano siempre fiel a su país, en lo universal de su arte.

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periodico diciembre 2011

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