PAVIMENTO TÉCNICO

Y

FALSO TECHO

Juan Pablo Paredes Paredes L.

Herlan Lapaca Arevillca

Alex Carballo Quiroz

Alba Prol Cabido

INDICE

1. PAVIMENTOS TECNICOS

1.1 Conceptos básicos sobre pavimentos

2. TIPOLOGIA

2.1.1 Exterior sobre pedestales

2.1.2 Interior sobre pedestales

2.1.3 Subestructura horizontal y pedestales

2.1.4 Directamente sobrestructura horizontal

3.1 COMPONENTES DEL SUELO TÉCNICO

3.1.2 Paneles o piezas cerámicas

3.1.3 Subestructura horizontal

3.1.4 Pedestales

4.1 ESPACIO TÉCNICO

4.1.2 Adaptabilidad

4.1.3 Instalaciones

4.1.4 Versatilidad

5.1 PROCESO CONSTRUCTIVO

6. FALSO TECHO

6.1 Tipología

6.1.1 Continuos o resgistrables

6.2 Múltiples prestaciones

6.3 Materiales para cada necesidad

6.4 Montaje de falsos techos

6.4.1 Montaje de falso techo de madera

6.4.2 Montaje de falso techo de yeso laminado

6.4.3 Montaje de aislantes en falsos techos

Pavimentos técnicos

1.1 Conceptos básicos sobre pavimentos:

El pavimento es una estructura dentro de cualquier habitáculo que consiste en una serie

de capas superpuestas de materiales procesados por encima del terreno natural o suelo.

Este tiene la finalidad de distribuir las cargas aplicadas por un vehículo o una persona a

la subrasante. La estructura del pavimento debe ser capaz de cumplir los siguientes

requisitos:

- Una adecuada resistencia a las cargas.

- Apropiados niveles de reflejo de luz, y un nivel bajo de ruido.

- El objetivo primordial de la estructura es transmitir las cargas de tal manera que no

sobrepase la capacidad portante de la subrasante.

2. Tipología

2.1.1. Exterior sobre pedestales

Los pavimentos técnicos sobre pedestales,

son aquellos que los paneles se apoyan sobre

pedestales o plots atornillados al forjado con

el fin de obtener bajo la superficie de tránsito

un espacio o hueco que permita albergar las

pendientes necesarias para la evacuación de

agua de lluvia. Por lo tanto los paneles se

dispondrán con junta abierta para el drenaje

del agua. Se utilizan fundamentalmente en

terrazas transitables o suelos de piscinas. Los pedestales o plots pueden ser metálicos o

de plástico, deben de permitir su ajuste en altura, normalmente a través del núcleo

central roscado, ha de tener la suficiente inercia para estabilizar el conjunto, forjado-

pedestal-bandeja, ante esfuerzos verticales y horizontales. La unión forjado-pedestal se

realiza a través del atornillado directo. Sin embargo la unión entre el pedestal y el panel

debe permitir cierto movimiento que absorba el diferencial de dilatación de ambos

materiales. Por este hecho y para evitar el tableteo de las piezas, se colocará poliuretano

para fijar la unión, dejando el resto de junta abierto para posibilitar el drenaje de agua.

2.1.2 Interior sobre pedestales

En los pavimentos técnicos sobre pedestales en interiores se utilizan los mismos mecanismos que

los comentados anteriormente para exteriores, pero en este caso los forjados que soportan

dichos pedestales son horizontales ya que no tienen la función de evacuar el agua de lluvia. En este caso la cámara dejada entre el pavimento y

el forjado permite el paso de gran cantidad de instalaciones, su constante ampliación,

modificación y una elevada accesibilidad para las eventuales reparaciones que puedan surgir. Estos pavimentos no permiten la junta abierta, como era el caso de los pavimentos para exterior, por lo que cada sistema prevé un tipo de junta que resuelva la

unión estanca entre las piezas y que mantenga la facilidad de desmontaje del conjunto.

2.1.3 Subestructura horizontal y pedestales

Los pavimentos interiores sobre subestructura

horizontal y pedestales , son aquellos en los que

sobre los pedestales se distribuye una retícula

de rastreles que aumenta la resistencia del

sistema, en ambas direcciones. También existen

los sistemas en los que solo se colocan los

rastreles en una dirección, similares a los

sistemas para exterior. De esta forma aumenta

la estabilidad del sistema, mejorando la facilidad de montaje, disminuyendo los tiempos

de ejecución y la correcta terminación. Estos sistemas resuelven de forma más eficaz la

junta requerida entre piezas, pudiendo estar ésta incluida en los propios rastreles o

siendo independiente a éstos.

2.1.4 Directamente subrestructura horizontal

Existen sistemas comercializados que se basan

en perfilaría horizontal apoyada directamente

sobre el suelo con nivelación rápida

elevándolo lo suficiente para el paso de las

instalaciones, normalmente solo eléctricas,

utilizando un mínimo espacio y respetando al

máximo la altura de la estancia donde se ubica.

Para estos sistemas se utilizan rastreles metálicos, colocados en una dirección y dejando

espacio entre los rastreles de una misma hilada para permitir el paso de las instalaciones

en ambas direcciones.

3.1 Componentes del suelo técnico

Los componentes básicos que forman un pavimento

técnico serán: la superficie horizontal, formada por

paneles o piezas cerámicas; los pedestales, que

elevan los paneles para crear el espacio vacío

necesario para el paso de las diferentes instalaciones

y opcionalmente, una estructura horizontal sobre los

pedestales, que permite una mayor rigidez y

estabilidad del sistema.

3.1.2 Paneles o piezas cerámicas

En el caso de pavimentos interiores los materiales más

utilizados son los aglomerados de madera y paneles de

sulfato cálcico. En el caso de exteriores se utilizarán

bases de resinas, áridos y armadura de acero.

Todos los paneles poseen una vez fabricados un

canteado perimetral de PVC tras el rectificado de todo

el espesor del panel, permitiendo así un perfecto

posicionamiento de los mismos sobre la estructura con

suma facilidad

3.1.3 Subestructura horizontal

En los suelos técnicos, se colocará subestructura

horizontal, según las exigencias de resistencia

requeridas.

3.1.4 Pedestales

Es el elemento encargado de dar al pavimento la altura

necesaria, para permitir el paso de instalaciones entre éste y el

forjado.

4.1 Espacio técnico

El espacio técnico es el que permite el paso de

instalaciones. Por lo tanto, este dependerá de

tipo de instalaciones para el que está proyectado,

sean estas eléctricas, de saneamiento y/o de aire

acondicionado. La altura varía entre 20mm y

600mm, en su producción estándar.

4.1.2 Adaptabilidad

Con los suelos técnicos se pueden conseguir

superficies planas sobre una base irregular,

gracias a que se puede regular la altura de los

pedestales que sirven de soporte a las piezas

horizontales.

4.1.3 Instalaciones

Los suelos sobre elevados, generan un espacio

entre el forjado y los paneles de altura variable

según las necesidades de cada proyecto,

permitiendo el paso de todo tipo de instalaciones,

sin importar el tamaño ni su recorrido, con la

ventaja de que todas las instalaciones quedan en el

propio espacio al que sirven, facilitando su

ampliación, reparación, modificación y

mantenimiento

4.1.4 Versatilidad

Gracias a la flexibilidad en el paso de

instalaciones, existe una gran capacidad de

conexión a las diferentes redes infraestructurales

del edificio, permitiendo una amplia versatilidad

de uso, personalizar y modificar el espacio de

forma rápida y sencilla, según sean las

necesidades.

5.1 Proceso constructivo:

5.1.2 Presentar los

perfiles en el perímetro,

dejando 10 mm de

distancia a los tabiques.

5.1.3 Presentar los

perfiles, en el interior de

la habitación,

ayudándonos de los

distanciadores, de 40, 50

o 60 cm, dependiendo

del tipo de aplicación,

oficinas, casas o etc.

5.1.4 Teniendo todos los

perfiles presentados en

el suelo, empezamos a

meter espárragos, en los

puntos extremos de los

perfiles y en el punto

intermedio.

5.1.5 Nivelamos,

gracias a un nivel

Laser, a falta de 10

mm los perfiles,

gracias al nivelador

con cabeza allen,

manual o para

taladro.

5.1.6 Hacemos un

taladro, en el interior

de los esparrago

allen que se

encuentran en los

puntos exteriores de

los perfiles.

5.1.7 Metemos un

taco en cada

esparrago que hemos

hecho un taladro, y

lo llevamos a su

agujero gracias al

empujador.

5.1.8 A continuación

cortamos el

esparrago, la parte

que sobresale del

sistema, con un

cuchillo y un

martillo, dando un

golpe seco.

5.1.9 Nivelamos, con

un nivel laser, ese

perfil a la altura

deseada, gracias al

sistema allen.

5.1.10 Vamos colocando

el resto de esparrago

allen, en sus

alojamientos, los

introducimos a falta de 10

mm que toquen el suelo,

cortamos los espárra34.

5.1.11 Bajamos esos

espárragos interiores

cortados hasta que besen

el suelo, y a continuación

hacemos taladros en los

interiores de esos

esparragos, y vamos

introduciendo los tacos gracias al empujador.

5.1.12 Se comprueba que

todos los perfiles están al

nivel deseado, con a un

nivel laser, y a

continuación se empieza

a remachar fuerte los

tacos , gracias al

remachador.

5.1.13 Es aconsejable

colocar un perfil, en los

pasos de puerta.

5.1.14 Empezar a colocar

el tablero de aglomerado

sobre los perfiles de,

pegando o taladrando.

5.1.15 Colocar un film de

cartón-papel, entre el

aglomerado y parquet

flotante.

Falso Techo

El falso techo es un elemento constructivo colocado a cierta distancia del forjado o techo

propiamente dicho. Este espacio comprendido, denominado plenum, es aprovechado para el

paso de instalaciones y demás elementos incorporados al mismo, tales como puntos de luz, de

climatización, detectores de humo, rociadores…

Por otra parte, el falso techo también cumple función decorativa, y además suele aportar

mejoras en el comportamiento térmico, acústico y/o resistencia al fuego del recinto. Es por ello

que hay una amplia gama de materiales (madera, escayola, aluminio, lana mineral, lana de roca,

viruta de madera, etc.), adaptándose a las necesidades requeridas.

Está formado por una estructura auxiliar a base de perfilería galvanizada lacada y las placas, con

los siguientes tipos de canto disponibles:

- Visto, board o borde cuadrado

- Escalonado de 24mm ó tegular

- Escalonado de 15mm ó microlook

- Enrasado

- Oculto

Podemos dividir los techos en dos grandes grupos: los falsos techos continuos y los falsos

techos registrables. Aunque son estos últimos los que suelen instalarse en mayor número de

construcciones, al ofrecer una sencilla manipulación de las instalaciones alojadas en el plenum

con solo desmontar una o varias placas.

Los falsos techos registrables, a diferencia de los continuos (Normalmente de “pladur”) nos

facilitan el acceso a instalaciones que necesiten un registro de actividad o de mantenimiento,

tales como aire acondicionado, telecomunicaciones, informática, etc. Por este motivo se utilizan

muy a menudo en oficinas, negocios, áreas comerciales o nuevos almacenes.

6.1 Tipología

6.1.1 Continuos o registrables

Los techos suspendidos pueden ser tanto

continuos como registrables, Las

principales diferencias entre ambos son

las siguientes:

Acabado estético. En el techo

suspendido continuo la perfilería queda

oculta y sin juntas aparentes, siendo su

aspecto final totalmente liso. El techo

registrable tiene la opción de perfilería

vista, semivista u oculta y las juntas

siempre son vistas. La diferencia

principal entre un techo continuo y uno

registrable reside en su apariencia. El

primero tiene una estructura oculta, sin juntas aparentes y habitualmente está compuesto por

placas de yeso. La imagen es continua, de ahí el nombre. Mientras que el registrable o

desmontable está formado por una estructura de perfiles metálicos vistos, sobre la que se

colocan placas de diversos tamaños y materiales, como yeso, metal o fibra mineral. El continuo

se instala con una estructura oculta similar a los sistemas de placa de yeso; y el registrable, con

un sistema de estructura vista o semivista a base de perfiles primarios y secundarios”

Ejecución y mantenimiento del sistema. Los falsos techos continuos se instalan con una

estructura metálica que quedará oculta detrás del material continuo, que normalmente va

atornillado a esta estructura, y se tratan las juntas para dar una sensación de continuidad. El

acceso al plénum solo se puede realizar a través de trampillas o abriendo una zona de placa para

su registro.

A diferencia de los continuos, el techo registrable permite el acceso a las instalaciones, puesto

que las bandas y las placas son fáciles de levantar. También son más fáciles de renovar, puesto

que las placas o bandas pueden desmontarse y reemplazarse. E incluso se les podría añadir

complementos acústicos para mejorar su rendimiento. La diferencia entre ambos radica en la

capacidad del techo registrable en ser desmontado o retirado sin necesidad de romper ningún

elemento del mismo, generalmente de forma sencilla.

Los techos continuos se encuentran fijados al forjado superior mediante una estructura que no

les permite ser practicables o desmontables. En caso de tener que acometer alguna reparación o

revisión de cualquier elemento que discurra por el plénum, deberemos romper el techo para

acceder a él si no hemos previsto la instalación de una trampilla de acceso en la zona de

actuación. Por el contrario, en un techo suspendido registrable, se podrá actuar desmontando

simplemente la placa de techo que nos interese para poder acceder. Así pues, este acceso por

encima del falso techo nos lo proporcionan los registrables, que nos dan la ventaja de poder

acceder, una vez terminada la obra, a los sistemas eléctricos, calefacción, aires acondicionados,

así como cualquier otra instalación que requiera de un mantenimiento posterior. No obstante, en

el caso del falso techo continuo existe la opción de incorporar trampillas y así poder acceder

fácilmente a las instalaciones.

Sistema de suspensión.

Dado que el techo suspendido

siempre consta de una perfilería

de soporte que va fijada al

elemento estructural, otra de las

diferencias entre los techos

continuos y los registrables son

los elementos de sujeción de uno

y otro. Los perfiles metálicos

utilizados para techo continuo

son diferentes a los de techo

registrable. Así pues, especifica

que la ejecución de un techo

registrable empieza suspendiendo bajo el forjado, mediante varilla lisa o roscada y el cuelgue

correspondiente, una cuadrícula de perfiles específicos para techo registrable, creando una

configuración de 600x600 mm o 1200x600 mm para la colocación de los paneles de techo

registrable. Deberá dejarse una distancia entre cuelgues igual o inferior a 1200 mm. El falso

techo continuo también se ejecuta suspendiendo bajo el forjado, mediante varilla lisa o roscada

y el cuelgue correspondiente, un entramado autoportante de perfiles metálicos para techos

continuos. Se deberá mantener una distancia entre cuelgues y perfiles según el peso que vaya a

suspenderse bajo la perfilería. Y el responsable de Pladur recuerda que la estructura metálica de

soporte de los falsos techos registrables se realizan con perfiles de 24 mm y 15 mm,

principalmente, usando losetas que pueden tener el borde recto o escalonado, también llamado

'tegular' o semioculto.

Prestaciones técnicas. El techo suspendido continuo

permite obtener gran resistencia al fuego y elevado

aislamiento térmico y acústico, gracias a la gran

variabilidad de opciones que presenta según

combinación de tipos y espesores de placas y tipo y

espesor de aislamiento. El techo registrable va

preferentemente indicado para conseguir mayor

prestación en absorción acústica -acondicionamiento

acústico- de un local, aunque también mejora el

aislamiento térmico y el aislamiento acústico.

Amplitud del plénum. “En el caso que haya problemas de espacio, el techo suspendido

continuo permite que haya un plénum mínimo de 16 mm. El techo suspendido registrable obliga

a descolgarse a mayor distancia.

Gama de techos. Los techos registrables presentan una amplia gama tanto decorativos de

escayola, metálicos o de madera, como absorbentes acústicos, que además de ser decorativos,

poseen un buen comportamiento acústico. Se

encuentran en este gama los de escayola,

metálicos y de madera los tres siempre

perforados y los de lana mineral y viruta de

madera. Los techos continuos están

constituidos por placas con acabados muy

similares, permitiendo éstas la aplicación de

revestimientos decorativos pinturas,

revestimientos, barnices, empapelados,

alicatados, etc. También existe la opción de

escoger techos continuos perforados VOGL,

con una amplia gama de perforaciones cuadradas, redondas o ranuradas, todas ellas pudiendo

estar dispuestas de forma lineal, aleatoria o en bloques. Un techo continuo habitualmente está

compuesto por una placa de yeso laminado que, una vez encintada, se pinta. En el caso de los

registrables, incorporan una perfilería metálica, la cual conserva una retícula para en ella colocar

el techo suspendido, que puede ser de múltiples materiales, como escayola, fibras minerales,

fibras vegetales, metálicos etc..

Tipos de registrables. Pueden ser vistos, que quedan

sobre la perfilería; tegulares o semiocultos, que quedan

descolgados en su perímetro de la perfilería; y ocultos

desmontables, que tienen la perfilería dentro del canto del

techo, por lo que la misma queda oculta. En cualquier

caso, sea vista u oculta la estructura de soporte del techo

suspendido registrable, los sistemas de sujeción siempre

son ocultos.

6.2 Múltiples prestaciones

Tanto si se trata de soluciones continuas como registrables, las ventajas de este tipo de techos

son muchas.

Ocultar instalaciones. Como ya hemos visto, la primera ventaja que ofrecen los techo

suspendido es la posibilidad de que las instalaciones de la obra queden ocultas, tales como

climatización, sistemas antiincendios, etc.

Facilidad de mantenimiento y manipulación. La principal prestación que nos ofrecen los

techos registrables es la posibilidad de acceso al plénum superior para posibles mantenimientos

o reparaciones que haya que realizar a posteriori. La facilidad de manipulación, máxime en los

techos registrables, permite la adopción de numerosos sistemas necesarios en las distintas

edificaciones, tales como luminarias, rejillas de ventilación, altavoces, etc. En el caso de los

techos suspendidos registrables, permiten un fácil acceso a las instalaciones que ocultan,

característica de vital importancia en edificaciones tales como hospitales, aeropuertos, etc., que

requieren un mantenimiento constante de las mismas.

Prestaciones térmicas y acústicas. Los techos suspendidos permiten la disposición de

diferentes capas de aislamiento acústico y térmico en el interior del plénum formado entre el

techo suspendido y el forjado superior, con lo que podemos mejorar las características acústicas

y térmicas de un espacio determinado. La combinación técnica de los distintos sistemas

resolverá las partes más sensibles de cualquier edificación, eliminando los puntos en los que se

evidencie una variación de la uniformidad de la construcción tradicional que minore la

resistencia térmica y la salubridad de los cerramientos. Los puentes térmicos integrados en los

cerramientos, los formados por uniones de los mismos y los encuentros de forjados con

fachadas o de tabiquería interior con las mismas encuentran perfecta solución con un adecuado

diseño de los sistemas constructivos. Las soluciones en cuanto a las prestaciones térmicas nos

las darán productos complementarios a los techos suspendidos, como pueden ser materiales

fabricados con lana de roca o de similares características.

Reacción al fuego. Las normativas actuales sobre edificación requieren que los edificios

cumplan con las nuevas normas Euroclases en cuanto a reacción al fuego en función de las áreas

de aplicación. La clasificación de las Euroclases está regulada por la norma EN13501-1:2007 y

va de la A1 a la F, siendo A1 el mejor rendimiento de reacción al fuego y F el peor. En el yeso

se le incorpora fibra de vidrio y la celulosa se sustituye por velos continuos, también de fibra de

vidrio, para mayor resistencia al fuego, o las placas GD, para protección al fuego y resistencia al

golpe por impactos. Ambos techos suspendidos presentan elevadas prestaciones tanto en fuego,

como acústica y térmica. Son productos incombustibles (A1) o muy poco combustibles (A2 o

B), imprescindible por ser techos que están en contacto con el interior del local.

Resistencia a la humedad. Los techos suspendidos son resistentes a la humedad, para evitar

que se degraden fácilmente según el uso o condiciones particulares del local. Los techos tienen

que afrontar condiciones de humedad cada vez más exigentes: programas de construcción a

corto plazo, lugares muy concurridos, estructuras abiertas al exterior, etc. Por eso, ya

encontramos productos adecuados para instalaciones en condiciones de humedad relativa de

hasta un 95%. Algunos de ellos incluso soportan condiciones extremas de hasta un 100% RH.

En lugares como los vestuarios se deben instalar techos suspendidos con características

antihumedad. El material escogido será determinante, un techo de madera o sus derivados no

será adecuado para ambientes de elevada humedad, ya que tenderá a hidratarse por la naturaleza

del material, implicando deformaciones por hinchazón y un deterioro rápido. Así, apunta que

para un techo destinado a ambientes muy húmedos, se partiría de un material con escaso

coeficiente de absorción de agua como acero galvanizado o aluminio, y se aplicaría un

tratamiento basado en la aplicación de una capa relativamente gruesa aproximadamente de 6

micras de resinas o pinturas epoxídicas termoendurecidas, de gran resistencia al óxido y la

corrosión. Además en el mercado encontramos placas tipo WA para resistencia en zonas

húmedas. Este tipo de placas están tratada con aceites siliconados y celulosas especiales para

disminuir su absorción de humedad, lo que las hace resistentes al agua. Pueden utilizarse en

zonas de humedad ambiental alta, como tabiques de cuartos de baño, vestuarios, duchas

colectivas en hospitales, hoteles y colegios; e incluso en obras situadas casi a la intemperie,

como aleros, porches, etc.

Control de la calidad del aire. Destaca las soluciones con capacidad para absorber y purificar

olores ambientales sin necesitar luz solar para desarrollar plenamente su eficacia, de forma que

humedades, aglomeraciones de personas, proximidades a cuartos húmedos y malos olores dejan

de ser una preocupación de diseño y uso de los edificios. Los techos suspendidos que favorecen

esta prestación, han sido ensayados según la norma ISO 14644-1 y tienen un nivel de eficiencia

de Clase ISO 3 techos suspendidos que permiten la limpieza a alta presión a Clase ISO 5 con

tratamiento específico tanto en placas como en perfilería.

Estética y planeidad. Los techos suspendidos realizan una función estética muy relevante, ya

que ocultan todas las instalaciones susceptibles de discurrir por el techo. Estéticamente, los

falsos techos buscan unas mejoras en las proporciones de las salas bajando la altura. Sin olvidar

el acabado de los productos, que también pueden buscar un aspecto más decorativo según las

necesidades del local. Con el techo continuo podremos crear un aspecto de techo totalmente

continuo sin ningún tipo de entrecalle, ni vistas de separaciones entre placas. Los tratamientos

de junta y los sistemas de techos suspendidos no registrables permiten obtener planeidades de

gran calidad.

6.3 Materiales para cada necesidad

Los techos suspendidos pueden ser realizados en una amplia variedad de materiales, lo que

condicionará tanto sus prestaciones específicas como el acabado estético conseguido. En la

actualidad, existen numerosos materiales en la fabricación de techos suspendidos. Son

habituales el acero, el aluminio, la madera y sus derivados, el cartón-yeso, las fibras minerales,

la escayola, plásticos y derivados, etc. Entre los techos suspendidos registrables, los materiales

más frecuentes por sus propiedades para este uso y su facilidad de fabricación son el acero, el

aluminio, los derivados de madera y las fibras minerales. En techos continuos, la placa de yeso

laminado sigue siendo el material con más presencia.

PYL. Sus propiedades térmicas y acústicas, su reducido coste económico y la existencia de una

amplia oferta de mano de obra cualificada para su instalación, como principales argumentos del

cartón-yeso, lo que hace que sea el material más empleado en techos continuos.

Escayola. Sigue siendo un material bastante empleado para techos continuos. Una buena

ejecución debería solventar problemas de planeidad o de posibles fisuras con el paso del tiempo.

Su principal inconveniente viene en caso de reforma o necesidad de mantenimiento, ya que no

se puede desmontar como otros sistemas de placas.

Yeso junto a otros materiales. La combinación de yeso y zeolita -una roca microporosa- para

limpiar y mejorar el ambiente en los espacios en los que se instala. Esta tecnología, con alto

índice de absorción acústica en función del tipo y número de sus perforaciones, mejora aún más

si cabe sus prestaciones con el acabado de yeso acústico. Estas soluciones están especialmente

indicadas para edificios de oficinas, colegios, viviendas, hospitales, restaurantes, auditorios,

etc., de modo que cada uso podrá conseguir un ambiente acogedor sin molestas reverberaciones.

Metálicos. Los techos metálicos de acero, aluminio, chapas galvanizadas o prelacadas, etc.

Aportan una gran durabilidad y resistencia a manipulaciones continuadas. Se trata de techos de

gran ligereza, facilidad de instalación y capacidad portante de distintos elementos, tales como

luminarias. A estas cualidades se añaden las capacidades fonoabsorbentes de algunos modelos

perforados, derivadas de la transmisión de las ondas acústicas a diferentes capas

fonoabsorbentes que encontramos en el dorso de estas placas de techo suspendido, pero los

techos metálicos son más resistentes, con mayor durabilidad y de fácil limpieza, así como

versátiles. Este material es idóneo para el sector de sanidad o de investigación biomédica,

puesto que sus salas precisan unas condiciones ambientales y de mantenimiento y limpieza

especiales. Por sus prestaciones acústicas, los techos suspendidos fabricados en metal también

son idóneos para oficinas y espacios de trabajo en general.

Madera y derivados. La madera es el elemento natural más atractivo para la decoración

interior. Se puede elegir una textura específica y un color idóneo para cada proyecto. Y la

mejora del rendimiento acústico de este material viene dado por las opciones de perforación

ofrecidas. Es la mejor opción para proyectos exclusivos y singulares, especialmente auditorios,

teatros o salas de conferencias. Los techos derivados de la madera aglomerados de viruta de

madera en diferentes densidades, como MDF, entre otros, aportan la elegancia y estética de los

acabados en madera, sin ser pesados y difíciles de fabricar como los de madera maciza. En la

actualidad, estos techos logran unos acabados sorprendentemente realistas en su imitación a

diferentes maderas como arce, haya, roble, cerezo, peral, wengué..., paliando los problemas

asociados al uso de madera maciza, tales como elevado peso y coste económico, y dotando a los

techos de un buen comportamiento acústico, de resistencia al fuego y la humedad, etc. Algunas

características muy buenas de los techos de madera, tales como absorción acústica, posibilidad

de resistencia a la humedad, posibilidad de resistencia al fuego, fácil limpieza, resistencia al

impacto, diversidad estética, calidez, armonía, etc. Por todo ello, estas soluciones son

especialmente apreciadas en espacios como auditorios, teatros, vestíbulos, bares, restaurantes,

salas de exposiciones, salas de reuniones, guarderías, terminales, cafeterías, salas de música, etc.

Fibras minerales. Los techos compuestos por fibras minerales son muy ligeros, con una

absorción acústica muy importante, gran facilidad de instalación y coste económico reducido.

En el mercado actual pueden encontrase diversos modelos muy avanzados en cuanto a la

composición de sus fibras y uso de materiales reciclables, que ofrecen al usuario grandes niveles

de acondicionamiento térmico y acústico. Por el contrario, suelen ser techos delicados a la

manipulación, poco resistentes al uso, golpes o envejecimiento y con poca capacidad portante

para sustentar luminarias y otros elementos pesados. Para disfrutar de un confort acústico

adecuado, se precisa un techo suspendido que absorba a la vez que atenúe el sonido, es decir,

que reduzca la reverberación del sonido en el interior de una sala absorción, y que al mismo

tiempo elimine la transmisión del sonido a la sala contigua atenuación. La fibra mineral es el

material idóneo para este tipo de espacios o situaciones. Ofrecen un rendimiento acústico

excelente con un coeficiente de absorción acústica ponderado de hasta 1,00 αw y una atenuación

acústica de hasta 43 dB. Las propiedades acústicas de las placas de techo en fibra mineral

variarán dependiendo del material, de la superficie y de la combinación de densidad, porosidad

y espesor. Es el material más versátil, que permite aplicaciones decorativas y mayor gama de

medidas. Además, presenta alta durabilidad y alto índice de reflexión de la luz.

6.4 MONTAJE DE FALSOS TECHOS

6.4.1 MONTAJE DE UN FALSO TECHO DE MADERA

Paso 1

Lo primero que tendremos que hacer es construir el

armazón de madera que soportará las lamas y que, en

nuestro caso, tiene la forma que veis en la foto. En todo

el perímetro de la habitación y a la altura deseada,

colocaremos unos listones que sujetaremos a la pared

con tacos y tirafondos. Después pondremos unos

travesaños en el centro, dejando una separación de unos

50 cm entre uno y otro. Para que no monten unas piezas

sobre otras haremos unas uniones a media madera.

Paso 2

Ahora vamos a hacer los rebajes en las piezas de madera

para poder unirlas a media madera. Con la sierra de calar

sin movimiento pendular y una hoja especial para cortes

rectos hacemos las cajas, que tendrán la anchura de la

pieza que va encajada.

Paso 3

También tendremos que hacer unos agujeros en los rastreles

que nos servirán para fijarlos a la pared: colocamos los listones

en la mesa, sobre un mártir para no dañar la madera, y

perforamos los orificios con el taladro y una broca para madera

del mismo diámetro que los tacos que vayamos a utilizar.

Paso 4

Con la ayuda de un tiralíneas o una regla bien

nivelada marcamos una línea en todo el perímetro

de la habitación, que nos servirá de referencia para

colocar los listones.

Paso 5

Presentamos los listones sobre la línea marcada y, a

través de los agujeros guía, perforamos otros

orificios en la pared. Realizaremos este trabajo con

el taladro atornillador en posición de percusión y

una broca para hormigón.

Paso 6

Introducimos los tirafondos con tacos de inserción rápida

con el martillo y tirafondeamos. Repetiremos la misma

operación hasta colocar las piezas en todo el perímetro

de la estancia.

Paso 7

A continuación, colocamos las piezas transversales, que en

nuestro caso son dos y van unidas con adhesivo y a media

madera. De la misma forma, colocamos el resto de los

rastreles.

Paso 8

Para reforzar la estructura colocamos unos tirantes, unas

piezas de madera que pondremos en las uniones al techo.

Estas piezas también las colocaremos con adhesivo de

montaje.

Paso 9

Una vez colocada la estructura o armazón de madera

podemos empezar a poner las lamas machihembradas.

Colocamos las grapas de inicio en la estructura de rastreles

y las fijamos con la grapadora y grapas.

Paso 10

Tomamos la medida de la primera lama, teniendo en

cuenta que deberemos dejar unos milímetros de holgura

en los extremos, ya que la madera tiene dilataciones. En

las tareas de corte utilizaremos la sierra de calar y una

hoja para madera. Repetiremos la misma operación con

el resto de las lamas.

Paso 11

Poco a poco, vamos colocando el resto de las lamas

machihembradas. Utilizaremos adhesivo de montaje y

grapas de continuación. El tamaño de la última lama que

coloquemos deberá adecuarse al hueco que nos quede.

Paso 12

Para terminar el trabajo vamos a colocar las molduras

decorativas con las que, además, disimularemos el hueco

de holgura que hemos dejado en los extremos de las

lamas. Cortamos las molduras a la medida que

necesitemos con una caja de ingletes en V y una sierra de

costilla.

Paso 13

Finalizamos poniendo las molduras en su posición con adhesivo

de montaje.

VIDEO TECHO DE MADERA

6.4.2 MONTAJE DE UN FALSO TECHO DE YESO LAMINADO CONTINUO

En este tema os vamos a enseñar a instalar un techo de yeso laminado en una habitación de la casa. Para realizar este trabajo emplearemos placas de yeso laminado, un material muy conocido a la hora de hacer tabiques, resistente y manejable. Para bajar el techo del recibidor de nuestra casa emplearemos placas de yeso de laminado, un material muy resistente, manejable y fácil de cortar.

Paso 1 Para colocar el techo de yeso laminado lo primero que tendremos que hacer es marcar su posición: tomaremos la medida desde el suelo; añadiremos 13 mm, que es el grosor de las placas de yeso y marcamos una línea en todo el perímetro de la habitación, con la ayuda de un nivel.Sobre la línea trazada colocaremos posteriormente un perfil metálico y las placas de yeso.

Paso 2 Marcamos los perfiles en L de chapa galvanizada a la medida que necesitemos para cubrir todo el perímetro y cortamos. Realizaremos esta tarea con una tijera para cortar chapa.

Paso 3 Presentamos los perfiles sobre la línea marcada en la pared y los sujetamos con unas tiras de cinta adhesiva. Marcamos los agujeros de fijación, comenzando desde uno de los ángulos, haremos el primero a 5 cm del ángulo, y los restantes a 50 cm de distancia unos de otros .Trabajaremos con el taladro en posición de percusión y una broca de widia de 6 mm de diámetro.

Paso 4 Una vez hechos los agujeros, introducimos los tacos con un martillo y fijamos los perfiles con unos tirafondos. En este caso pondremos el taladro en posición de atornillador y sustituiremos la broca por una punta para atornillar.

Paso 5 El siguiente paso consiste en colocar los perfiles de techo, perfiles de acero galvanizado, así que procederemos a dibujar una cuadrícula en el techo. Para colocar las piezas largas, hemos hecho la primera marca a 35 cm de la pared y, después, segmentos de 1 m. Para las piezas cortas marcaremos la primera línea a 40 cm de la pared y los segmentos restantes a 1m; de esta forma conseguiremos hacer el damero que necesitamos.

Paso 6 En los punto de intersección de las líneas haremos los agujeros para colocar los puntos de anclaje. Con el taladro y una broca de diámetro suficientemente grande como para que entren después los tacos, perforamos los orificios.

Paso 7 Después de hacer todos los agujeros vamos a colocar las varillas; las introduciremos en los orificios del techo hasta que se abran como un paraguas.

Paso 8 A continuación, ponemos las horquillas, que son las piezas de unión entre las varillas y los perfiles de techo. Cuando tengamos colocados todos los cuelgues comprobaremos que están a nivel con la ayuda de unas cuerdas, que colocaremos de lado a lado de la habitación. Para comprobar el nivel haremos coincidir las cuerdas con las muescas o ranuras de las horquillas.

Paso 9 Retiramos las cuerdas, ponemos los perfiles de techo y encajamos las horquillas. Repetiremos la misma operación con todos los perfiles.

Paso 10 De esta forma tan sencilla montaremos toda la estructura que sujetará las placas de yeso laminado.

Paso 11 Ahora vamos a colocar la primera placa de yeso laminado: marcamos sobre la pieza unas líneas a 40 cm de distancia que nos servirán de referencia para tirafondearla en el centro de los perfiles de techo. Presentamos la placa en su posición y con un brazo metálico como ayuda, la sujetamos.

Paso 12 Utilizaremos unos tornillos autorroscantes, que nos evitarán tener que hacer agujeros previos, y el taladro con una punta de embrague que nos servirá para dejar los tirafondos a ras de la placa. Para que la instalación sea más resistente, cuando coloquemos las placas de yeso laminado evitaremos que coincidan las juntas de unión de las piezas.

Paso 13 A la hora de cortar una placa a la medida que necesitemos nos ayudaremos de un perfil, a modo de regla o guía, y un cortante.

Paso 14 Después de realizar el corte damos vuelta a la pieza, hacemos presión en uno de los lados y levantamos el otro hasta que se rasgue por la línea de corte. Para soltar del todo la pieza volvemos a pasar el cortante.

Paso 15 Una vez colocadas las placas vamos a rellenar las juntas de unión con una pasta especial. Cogeremos pasta en una llana y la aplicaremos en las juntas con una espátula hasta igualar la superficie.

Paso 16 A continuación, ponemos la cinta encajando su eje central en las juntas de unión. Pasamos la espátula aplastando la cinta para que no queden arrugas y retiramos el producto sobrante.

Paso 17 Hemos aplicado una primera capa de pasta en las juntas, también hemos tapado las cabezas de los tornillos y hemos hecho lo mismo en todo el perímetro del techo. Cuando la pasta se haya secado, daremos otra mano en las juntas con la llana y una espátula ancha.

Paso 18

Terminaremos el trabajo dando una tercera mano de pasta por todo el techo. Cuando la pasta se haya secado colocaremos unas molduras decorativas de poliestireno extruido con adhesivo de montaje. Ya sólo nos quedará pintar el techo.

VIDEO: Techo de yeso laminado

6.4.3 MONTAJE DE AISLANTES TERMICOS Y ACUSTICOS EN FALSOS

TECHOS

Estos Aislantes pueden ser colocados tanto SOBRE la estructura del falso techo o BAJO frojado anclados mediante anclajes que los sujetan, consiguiendo asi un exelente aislamiento ante estos agentes. VIDEO: INSTALACION DE AISLANTE

6.5 WEBGRAFICA

https://es.wikipedia.org/

http://www.movinord.com/

http://www.ascer.es/

https://www.youtube.com/watch?v=xm7PObvRnsY

http://www.atefuer.es/falso-techo/

http://www.construmatica.com/construpedia/Falsos_Techos_Ac%C3%BAsticos#Tareas_Previa

s

http://www.promat-iberica.es/index.php?option=com_content&view=article&id=50&Itemid=67