obras corporales

Gua de estudio y reflexin para los educadores

Obras de Misericordia Corporales Dar de comer al hambriento Dar de beber al sediento Vestir al desnudoDar albergue al forastero Visitar y cuidar a los enfermos Visitar a los presosEnterrar a los muertos

Todo lo que hicieron por uno de estos hermanos y hermanas mos ms humildes, porm mismo lo hicieron. (Mateo 25:40)

Introduccin: El Antiguo Testamento (Isaas 58: 6 - 10) y el Nuevo Testamento (Mateo 23: 34 - 40) sonlos orgenes bblicos de las Obras de Misericordia Corporales. Estas acciones caritativas por el biencomn y el bienestar bsico de los hombres reflejan las enseanzas de la Iglesia en la Justicia SocialCatlica. El Papa Juan Pablo II nos recuerda en su encclica, Rico en misericordia: Jesucristo haenseado que el hombre no slo recibe y experimenta la misericordia de Dios, sino que est llamado ausar misericordia con los dems: 'Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarn miseri-cordia'.

El Espritu Santo inspira nuestro cometido en las Obras de Misericordia Corporales y ese cometidodefine nuestra relacin con Dios. Como sus manos en la tierra, los fieles no slo son llamados a cuidarde los menos afortunados si no tambin a respetar y cuidar de los bienes de la creacin divina, hechospara toda la raza humana. Todos y cada uno de los das, misioneros en todo el mundo viven las Obrasde Misericordia Corporales a travs de sus propios actos compasivos en respuesta a los miembros mspobres, abandonados, vulnerables y olvidados de la sociedad mundial. (Ve serie de vdeo: Tras el horizonte:www.maryknollmall.org)

Obras de Misericordia Corporales en la msica: Cualquier cosa que hagas al ms pequeo de mis her-manos y hermanas me la haces a m es el estribillo de un bonito himno, escrito y registrado por WillardJabusch. Cada estrofa concluye con Ahora entra en la casa de mi padre, una invitacin que se extiendea todos los que dan respuestas cristianas a los pobres y necesitados.

Referencias seleccionadas:Clamor por Justicia: Dando Expresin a la Enseanza Social Catlica (Clamor for Justice: Bringing

Catholic Social Teaching to Life) Primera edicin bilinge, NETWORK Education Program, 2002.Corporal Works of Mercy, The HarperCollins Encyclopedia of Catholicism, HarperCollins

Publishers, Inc., 1995.Corporal Works of Mercy Series, U.S. Catholic, published by the Claretians: www.uscatholic.org/1998/CWMDonders, J.G. Ed., John Paul II: The Encyclicals in Everyday Language, Orbis Books, 1996.Earth and Faith: A Book of Reflection for Action, Interfaith Partnership for the Environment, United

Nations Environment Program, 2000.Henriot, P.J., SJ; DeBerri, E.P., SJ; and Schultheis, M.J., SJ, Catholic Social Teaching: Our Best Kept Secret,

3rd Ed. (revised and enlarged), Orbis Books, 1992.Tras el horizonte, Serie de vdeo de los Misioneros de Maryknoll, Maryknoll Productions, 1999-2001.The New American Bible, Catholic Bible Press, Division of Thomas Nelson Publishers, 1987.Rico en misericordia (Dives in Misericordia), Encclica de Juan Pablo II, 1980.Works of Mercy, Catechism of the Catholic Church, Second Edition, United States Catholic

Conference, Inc., 1997.Dios habla hoy, La Biblia, Versin Popular Segunda Edicin, Sociedad Bblica Americana, 1979.La santa sede www.vatican.va

Diseo de pster: Roberta Savage

Maryknoll Productions, PO Box 308, Maryknoll. NY 105451-800-227-8523www.maryknollmall.org

Gua de reflexin y estudio para educadoresObras de Misericordia Corporales

Dar de comer al hambrientoPues tuve hambre, y ustedes me dieron de comer. (Mateo 25:38)

En un momento o en otro, todo el mundo ha estado hambriento, pero las razones varan desde unadieta hasta la profunda pobreza. Mucha de la poblacin mundial no tiene ni recursos para cultivarsu propia comida ni dinero para comprarla: ms de mil millones de personas viven con un dlar omenos al da. La mayora de las naciones en desarrollo son incapaces de comprar la comida adecuadapara sus pueblos porque su dinero sirve para saldar las deudas que se deben a las instituciones ban-carias mundiales. Peores causas de hambre en el mundo son los grandes desastres tanto por manodel hombre como por causas naturales. Pero hoy los catlicos afrontan el desafo porque nuestra fedemanda que nos impliquemos creativamente en compartir la comida que soporta la vida. No haynecesidad humana ms bsica (Mensaje pastoral de los Obispos de EE.UU. de 1986. Justicia econmica para todos)

Hechos globales para discusin en clase o en grupo:

Las enfermedades relacionadas con el hambre reclaman 24,000 vidas al da. (The Hunger Site: www.thehungersite.com)

Casi 800 millones de personas de los 840 millones de desnutridos del mundo viven en pases en desarrollo, incluyendo 150 millones de nios de 5 aos de edad o menores de esta edad. (Bread for the World Institute, Datos sobre el hambre y la pobreza: www.centerforhunger.org)

En el mbito domstico de EE.UU., ms de 33 millones de personas, incluyendo 13 millones de nios, experimentan el hambre o corren el riesgo de experimentarla. (2002 Household Security in the U.S., USDA: www.usda.org)

La gente sobrealimentada de los pases ricos equivale al nmero de gente hambrienta o desnutrida del mundo. (World Watch Institute: www.worldwatch.org)

El hambre es sntoma de pobreza y desigualdad, y no por escasez de comida, porque el mundo produce suficiente comida como para que cada ser humano lleve una dieta de 3,000 a 4,000 cal/da. (Ve el vdeo: The Global Banquet: Politics of Food: www.maryknollmall.org)

Como manos de Dios en la tierra, podemos ayudar a aliviar el hambre.Aqu hay algunas sugerencias:

Aprende ms sobre las causas de la expansin del hambre en el mundo Aboga por los hambrientos y apoya las polticas que cubran sus necesidades tanto en su pas como

en el extranjero.

S solidario con las parroquias de hermanas que suplen comida nutritiva a los habitantes de zonas deprimidas.

Organiza actividades en tu escuela o parroquia, que provean comida a la gente sin hogar, anciana yenferma.

Ofrcete voluntario en tus ratos libres para cocinar o repartir comida entre los necesitados de tu comunidad.

Apoya a los grupos de fieles sin nimo de lucro que esponsorizan comedores y ayuda humanitaria para los pobres

Nunca malgastes comida: muchos millones de hambrientos podran alimentarse con la comida malgastada en los EE.UU.

Comparte tus comidas con aquellos que hayas olvidado, o no puedan comprar la suya propiaDiseo de pster: Roberta Savage



Dar de beber al sedientoTuve sed, y me dieron de beber (Mateo 25:35)

El agua es vital para la sustentacin de la vida y de los ecosistemas de la tierra. A pesar de que elacceso al agua potable es uno de los derechos bsicos del hombre, no todo el mundo sabe lo que essaciar su sed con un trago de agua clara, limpia y fresca. Muchas fuentes de agua en reas de EE.UU.se han polucionado; afortunadamente, contamos con una legislacin gubernamental que refuerzalas obligaciones de limpiarla. En algunas de las regiones ms deprimidas del mundo, la mayora delas fuentes de agua estn contaminadas y albergan un alto riesgo de contraer enfermedades.Refirindonos a temas ecolgicos y medioambientales desde una perspectiva basada en la fe, losObispos estadounidenses pusieron en marcha en 1993 el Programa de Justicia Medioambiental. Estellama a una mayor conciencia y responsabilidad sobre las desproporcionadas cargas medioambien-tales soportadas por la salud de pobres y nios. (U.S. Conference of Catholic Bishops, Social Development andWorld Peace: www.usccb.org)

Hechos globales para discusin en clase o en grupo: En todo el mundo, 2,300 millones de personas sufren dolencias relacionadas con el agua; agua

sucia y falta de saneamientos mata a 12 millones cada ao, la mayora en pases en vas de desar-rollo. (Johns Hopkins School of Public Health, Pollution and the Environment: www.jhuccp.org)

Sobre el 20% de la poblacin mundial no tiene acceso a agua potable, el 50% no lo tiene a los saneamientos adecuados. (UNEP, Global Environmental Outlook 2000: www.un.org)

Todos los seres vivos sufren el impacto tanto del agua contaminada como de su uso para beber,tareas domsticas, ocio, pesca y comercio. (U.S. Environmental Protection Agency: www.epa.gov)

Con el ritmo actual de consumo de agua, la ONU estima que en 2025 2 de cada 3 personas vivirn en condiciones de falta de agua. (UNEP, Global Environmental Outlook 2000: www.un.org)

Como manos de Dios en la tierra, podemos ayudar a aliviar la contaminacin del agua. Aqu hayalgunas sugerencias: Aprende ms sobre la importancia de los ecosistemas, la calidad del agua y la proteccin de las

fuentes. Comprende las causas bsicas de la contaminacin: industrias contaminantes, desastres naturales

y causados por el hombre, lluvia cida, falta de saneamientos y de tratamientos potabilizadores. Conserva el agua, no malgastes gratuitamente este recurso sostn de vida. Aboga por proyectos de desarrollo sostenido que provean de agua potable tanto en tu pas como

en el extranjero, especialmente en pases en vas de desarrollo. Apoya la legislacin domstica e internacional destinada a proteger el medio. Apoya proyectos de recuperacin del agua y organizaciones que trabajan para frenar las amenazas

medio ambientales. Adhirete a programas de reciclaje domsticos diseados para reducir el gasto medioambiental. Comprende que la creacin de Dios incluye el medio ambiente. (Ve el vdeo: A Universe Drama in Three

Acts: www.maryknollmall.org)




Vestir al desnudoMe falt ropa, y ustedes me la dieron (Mateo 25:36)

Los jvenes hermanos conocen bien las bendiciones de las prendas de segunda mano. Incluso si no esexactamente de su talla, al menos tienen ropa y zapatos. Incontables nios y adultos en el mundocaminan descalzos y tienen poco con qu cubrirse, exceptuando los donativos de ropa til. Tampocotienen prendas domsticas como toallas, manteles o sbanas. Para ellos los bienes de segunda manoson bendiciones.

La enseanza social catlica tambin considera desnudos a aquellos despojados de dignidad humanay podery herramientas necesarias para trabajar. (The HarperCollins Encyclopedia of Catholicism) El derechode los seres humanos a la dignidad, el poder de controlar sus propias vidas, e incluso de trabajar, sonlegados por Dios. Nuestra responsabilidad moral es preservar y proteger esos dones.

Como manos de Dios en la tierra, podemos ayudar a vestir y aliviar al necesitado. Aqu hay algunassugerencias: Apoya y dona a colectas realizadas por escuelas, parroquias y otras organizaciones caritativas que recogen ropa y mantelera para las necesidades locales. Organiza programas para proveer de toallas y sbanas a hospitales que tengan falta de estos obje

tos esenciales en reas deprimidas, particularmente en pases en vas de desarrollo Acta en solidaridad con las parroquias de hermanos en zonas devastadas por tornados, inunda

ciones, terremotos y huracanes, dejando a sus habitantes prcticamente sin nada. (Ve el vdeo: Mano-con-Mano: Stories of Solidarity: www.maryknollmall.org)

Ayuda a los vecinos que han perdido sus posesiones en fuegos, inundaciones u otras circunstancias.

Anima a aquellos cuya dignidad se haya vuelto frgil debido a la prdida de su empleo. Sugireles un nuevo aprendizaje de otro oficio, o aydales a encontrar trabajo si estas en posicin de ello.

S caritativo, pero recuerda siempre que al dar, lo ms importante es mantener el sentido de dignidad de la persona; nadie debera sentirse nunca como un objeto de caridad




Dar albergue al forasteroAnduve como forastero, y me dieron alojamiento. (Mateo 25:35)

Una visin familiar en muchas ciudades del mundo son las crecientes cantidades de hombres,mujeres e incluso nios sin hogar durmiendo en portales, estaciones de tren y bajo puentes. Lascausas de ello son muchas y variadas: la falta de un hogar de precio razonable; refugios temporalessuperpoblados; desempleo y subempleo; rotura de familias; discapacidad fsica y mental; y, enmayor escala, quemas y desastres naturales que desplazan familias y comunidades enteras.

A pesar de los abundantes recursos para ayudar a los sin hogar, an aproximadamente 2 millonesde gente de la calle en los EE.UU. Adems de ayudar en nuestra localidad, tenemos la respons-abilidad moral de que nuestra ayuda llegue a gente convertida en "sin techo" por desastres y con-flictos en pases golpeados por la pobreza.

Ten claro que los sin hogar no son slo la gente de la calle, si no tambin los emigrantes, refugia-dos, hurfanos y nios en adopcin... Para los que recibir refugio significa adquirir un sentido depertenencia. (The HarperCollins Encyclopedia of Catholicism)

Como manos de Dios en la tierra, podemos ayudar a los sin hogar. Aqu hay algunas sugerencias: Entender la necesidad de albergues para ellos sin techos y discapacitados de tu comunidad. Hacer donaciones a las organizaciones religiosas y seglares sin nimo de lucro que cuidan de

estas personas. Apoyar los programas nacionales e internacionales de ayuda en desastres. Hacer voluntariado en organizaciones que construyen viviendas asequibles para los pobres Aboga por la legislacin que provee de hogar a los discapacitados y golpeados por la pobreza. Ofrece tu amor y tu hogar a un hurfano, o considera poder convertirte en padre adoptivo Provee un hogar temporal a trabajadores inmigrantes o refugiados que huyan de la opresin. Da la bienvenida a los que lleguen a tu escuela o comunidad; aydales a sentirse como en casa. Organiza un lugar en tu parroquia para dar refugio y mantener a una familia local necesitada. Recuerda, darle a alguien un sentido de pertenencia es consumar un derecho humano bsico.




Visitar y cuidar a los enfermosEstuve enfermo, y me visitaron (Mateo 25:36)

Cuando servimos a los pobres y enfermos servimos a Jess Sta. Rosa de Lima

La mayora de nosotros hemos sufrido lo nuestro con enfermedades y heridas. Afortunadamente, nosrecobramos totalmente con el apoyo de la familia, amigos y vecinos. Pero en casi todas las comu-nidades, los hay menos afortunados que quedan aislados por la enfermedad, los heridos a una edadavanzada. Piensa en los mucho que significara para ellos que les abriramos los brazos y les prestse-mos ayuda. De hecho, suplir de compaerismo y cuidar el hogar de los enfermos, ancianos y desfa-vorecidos, y sus necesidades de los discapacitados fsicos y mentales son los principales caminos paraservir a los enfermos. (The HarperCollins Encyclopedia of Catholicism)

Los pases ricos tienen todo tipo de facilidades y medicinas para tratar toda clase de dolencias, ascomo avanzados sistemas de investigacin dedicados a erradicar enfermedades. Pero imagina vivir enun rea remota y empobrecida de un pas en vas de desarrollo con severas limitaciones en la sanidad.Atravesar el mundo para alcanzar a esa gente desvalida de lugares devastados por la pobreza y la enfer-medad ejemplifica la justicia social catlica de la mejor manera posible. Piensa en lo que tu caridadpodra hacer en lugares como el frica Sub-sahariana, donde el contagio del SIDA afecta a toda unageneracin. (Ve el vdeo: Coming to Say Goodbye: Stories of AIDS in Africa: www.maryknollmall.org)

Como manos de Dios en la tierra, podemos ayudar a los enfermos. Aqu hay algunas sugerencias: Visita regularmente a los familiares y amigos enfermos confinados en residencias Ofrcete voluntario para llevar a pacientes a tratamientos y citas con el mdico Convirtete en un voluntario en un hospital, trayendo libros y revistas a los pacientes y leyendo a

los nios hospitalizados Si un compaero de clase est enfermo o en el hospital, organiza un proyecto o tarjeta espero que

te mejores pronto Sintate con tus familiares confinados en casa para que los que les cuidan tengan algo de tiempo

para ellos Reza por los enfermos y los ancianos, ofrece consuelo y s un oyente compasivo Contribuye con dinero y vveres, si son necesarios, con las organizaciones sin nimo de lucro dedi

cadas a cuidar de los enfermos terminales en tu ciudad Apoya misiones al extranjero que se encarguen de proveer la atencin mdica bsica en pases en

vas de desarrollo




Visitar a los presosEstuve en la crcel, y vinieron a verme. (Mateo 25:36)

Te quedas encerrado en casa estas palabras muy familiares, como respuesta a alguna infraccin quecometimos de nios. Muchos de nosotros recordamos an el sentimiento de cautiverio cuando nosconfinaban en nuestras habitaciones, incluso por un corto espacio de tiempo. Considera, pues, lo quees pasar un tiempo en prisin.

Podramos decir de criminales justamente convictos tiene lo que se merecen una temporada enprisin para pagar su deuda con la sociedad aislados de las comodidades del hogar, la familia y losamigos. Buscamos justicia y no venganza, dndonos cuenta de que hasta los criminales ms vilestienen derecho a un trato humano. Odiamos el pecado, pero no al pecador, ya que Jess nos ensetanto a perdonar como a amar a nuestros enemigos.

A lo largo del mundo mucha gente est presa por poco ms que sus convicciones polticas y reli-giosas. Tambin hay quien est atrapado en las redes de la violencia domstica e incluso del racismo.Las medidas para liberar a los presos polticos y religiosos e intervenir en casos de violencia doms-tica constituyen este trabajo de misericordia (The HarperCollins Encyclopedia of Catholicism)

Como manos de Dios en la tierra, podemos ayudar a los presos. Aqu hay algunas sugerencias: Presntate voluntario para las misiones en prisiones locales. Muchas de las cuales son llevadas porcomunidades basadas en la fe. Apoya programas de estudios y aprendizaje de un oficio para la rehabilitacin y la recuperacin

de los internos como miembros tiles de la sociedad. Reza por las familias de los internos, porque tambin estn sufriendo. Apoya los programas parroquiales que dan regalos a los prisioneros y a sus hijos en Navidad. Anima a las vctimas del crimen y la violencia domstica a buscar consuelo pastoral, secular o

profesional. Cuidado con el racismo; practica la inclusin, no la exclusin. Aprende ms sobre la lucha de aquellos injustamente encarcelados por sus creencias polticas y

religiosas, as como la manera de abogar por su liberacin. S consciente de que todos somos miembros de la raza humana iguales a los ojos de Dios.




Enterrar a los muertosEn la muerte Dios llama al hombre hacia S. Catecismo de la Iglesia Catlica (#1011)

Ni siquiera la muerte nos puede robar nuestra dignidad fundamental como sereshumanos Meditacin sobre el cuerpo, la cremacin, y ritos de un entierro catlico, 1998, Obispos Catlicos de EE.UU.

Los cuerpos de los difuntos deben ser tratados con respeto y caridad en la fe y la esperanza de laresurreccin. Enterrar a los muertos es una obra de misericordia corporal, que honra a los hijos deDios, templos del Espritu Santo. Catecismo de la Iglesia Catlica (#2300)

Para gente que padezca largos sufrimientos, la perspectiva de la muerte puede ser un bienvenido aliv-io y ms fcilmente aceptados por los supervivientes que muertes trgicas y repentinas. En amboscasos los cristianos creen que el acto de enterrar a los muertos tiene implicaciones mucho msamplias. Abarca la compasin y apoyo para los supervivientes, les ayuda a asumir mejor su prdida yles anima a seguir viviendo. Cualquiera que ha perdido alguna vez a alguien querido sabe de primeramano la profundidad del dolor y la angustia asociada con esa prdida, ya sea de una esposa, padre,hijo, hermano, otro miembro de la familia, un compaero de clase o un amigo querido (a vecesincluso una mascota) Los jvenes que sufren una prdida deben afrontar unas circunstancias partic-ularmente difciles.

Como manos de Dios en la tierra, podemos ayudar a aliviar el sufrimiento de los moribundos yconfortar a los sobrevivientes. Aqu hay algunas sugerencias: Ofrece compaa, s un buen oyente, ten compasin, confrtales con amabilidad y reza por ellos. Ofrece rezos diarios por la gracia de un final feliz para los enfermos terminales, y por la paz de su

familia y amigos. Urge a aquellos que tengan una especial dificultad en asumirla a buscar consejo pastoral o

profesional. Apoya organizaciones religiosas y seglares dedicadas al cuidado de enfermos terminales y a aquel

los que consuelan la pena. Asiste a funerales y vigilias; tu presencia puede significar mucho para los sobrevivientes. Manda tarjetas de Misa apropiadas para los muertos y alimento espiritual para los vivos. Incluso

una simple nota con tus pensamientos y plegarias pueden tener un efecto curativo en aquellos quelloran una prdida.



obras corporales

Documents