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NNuueevvaa VViiddaa Número 5, Otoño 2013

PPeerrtteenneecceerr

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……EEddiittoorriiaall……

Ya entramos en el segundo año de publicación de la revista “Nueva Vida”. ¡Qué rápido pasa el

tiempo! Espero que en este número disfrutes de la lectura y te sientas desafiado a comprometerte más con el Señor. Acuérdate que también te puedes involucrar en la confección de la revista si quieres.

El tema central es el de “Pertenecer”, tanto a nivel informal como también formalmente, pues en este trimestre vamos a abordar el tema de concretar la membresía de nuestra iglesia en general. Es un tema que puede parecer complicado pero, como con casi cualquier cosa, todo depende del enfoque que se le da. Los métodos y aspectos que tenemos para organizarnos, todos los cuales son imperfectos y temporales, siempre deben intentar incluir a la gente, no excluirla.

Otra cosa que nos conviene pensar, como miembros de esta comunidad de creyentes, es cómo hacemos sentir a los que nos visitan. A veces actuamos de forma un poco elitista, justificando nuestras maneras porque “estamos en casa”. Nunca olvidemos que estamos aquí por la gracia de Dios, y ojalá muchos más encuentren ese mismo camino, que no es nuestro sino de Jesús. Según dicen los sociólogos, la gente tiene un fuerte sentido de pertenencia y eso les ayuda a creer. Nosotros solemos hacer que las cosas sucedan al revés. ¡Qué el Señor aumente el amor que hay en nuestro corazón hacia los demás!

Una última cosa: Nunca olvides que formas parte de una obra mayor, que es imposible ver y entender del todo porque estás demasiado cerca para tener perspectiva, y porque, sencillamente, no estás tú al mando. A mí me ayuda pensar en un artesano haciendo un tapiz. Cuando está trabajando, sólo se ve la perfección de la obra en su cabeza, e incluso en la superficie de trabajo se ven nudos, cabos sueltos, mezclas raras de colores. Pero cuando se le da vuelta al tapiz se ve un diseño perfectamente coordinado que siempre era el propósito de la obra. El Artesano de esta obra es el Señor. Confía en Él y déjate incluir en lo que Él quiere hacer entre nosotros. Un fuerte abrazo.

2… Editorial 3… Y tú… ¿Asistes o

perteneces? 6… 10 x 10 7… Membresía 8… Álbum de Fotos 10… Entrevista a Nelly

Cabrera Herrera 13… Ministerio en

Prisiones 15… Anuncios

Jefe de edición: Felipe Enrique

Redacción, edición y traducción:

Lourdes Jiménez Pilar Roldán

Consuelo Villar Diseño:

Ana Enrique Ester Vicente

Créditos

Contenidos

Pastor

Felipe

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En Abril del 2000 se hizo una encuesta sobre la Iglesia en Canadá. Se plantearon dos preguntas; (1) ¿Crees

en Dios? y (2) Aparte de eventos sociales como bodas, funerales o bautismos, ¿cuántas veces has asistido a un servicio religioso en los últimos 12 meses? Más adelante se les pidió a estas personas que calificaran cómo se sentían acerca de estas dos afirmaciones: (1) No creo necesario asistir a una iglesia para ser un buen cristiano y (2) Mis creencias privadas sobre el cristianismo son más importantes que lo que se pueda enseñar en cualquier iglesia.

Y aquí están algunos de los resultados: Mientras que 84% cree en Dios sólo el 20% asiste semanalmente a una iglesia. Desde la 2ª guerra mundial la asistencia a las iglesias se ha desplomado mientras que la creencia en Dios se ha mantenido estable. Ocho de cada diez personas están de acuerdo con el enunciado “pienso que no es necesario asistir a la iglesia para ser un buen cristiano.” Siete de cada diez están de acuerdo en que “Mis creencias privadas sobre el cristianismo son más relevantes para mí que cualquiera de las enseñanzas que pueda recibir en una Iglesia”. Y aquí está la gran incógnita, el 77% de estos encuestados se identifican con una iglesia cristiana. La pregunta que me vino a la mente después de leer estos resultados fue: ¿Por qué hay este gran abismo entre creencia y pertenencia?

Creo que hay varias razones para esto y que estas razones responden a conceptos equivocados sobre la asistencia a una iglesia. Antes que nada, algunas personas consideran el asistir a una iglesia como un deber. La iglesia es sólo otra obligación como es el pagar sus impuestos, visitar a sus suegros, ir al médico, al dentista etc. Estas personas van a la iglesia bajo coacción o quizá como un acto de cortesía hacia su pareja o padres. Ahora bien, esto no está mal en sí, sólo que es un error.

En segundo lugar, algunas personas ven la asistencia a la iglesia como un evento. Hoy vamos a la iglesia. Algo así como ir al cine o ir al circo. Es un evento, no algo importante en el día a día. A veces esos eventos son bautizos, bodas o funerales. Una vez escuché a alguien referirse a estos eventos como incubar, emparejar y despachar. Algo así como el tipo que comentó. “Predicador, la primera vez que fui a la iglesia echaron agua sobre mí, y la segunda vez me tiraron arroz.” El predicador lo pensó un segundo y respondió, “Sí, me imagino que la próxima vez que vengas te echaremos tierra encima.” Para algunos la iglesia es cosa de los domingos como es cosa de los sábados el cortar el césped.

La realidad es que la Biblia no enseña que el asistir a la iglesia sea una obligación ni que sea un evento. De hecho durante los primeros 300 años de su existencia el asistir a la iglesia era socialmente y religiosamente inaceptable. ¡Te podías convertir en comida para los leones! Pero cuando el Nuevo Testamento buscaba una metáfora para describir la iglesia de Cristo, una y otra vez se imponía la palabra “familia”. Necesitas entender que la iglesia no es un lugar al que vas, sino una familia a la que perteneces. Me gustaría echar un vistazo brevemente a cinco beneficios de pertenecer a una familia versus sólo asistir a una iglesia.

El primer beneficio es que nos ayuda a enfocarnos en Dios. ¿Te distraes con facilidad? Yo sí. Es fácil desenfocarnos. Aunque soy cristiano hace muchos años todavía puedo vivir mi jornada sin siquiera pensar en Dios. Dios sabe que tenemos una tendencia a perder nuestro foco y por eso nos ha insertado en una familia.

Siempre que nos enfoquemos en Dios y expresemos nuestro amor a Dios estamos adorando. Mateo 20:2 “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el primer y gran mandamiento.” ¿Por qué es tan importante este mandamiento? ¿Por qué es tan importante que Dios sea la prioridad en nuestras vidas?

Y tú…

¿Asistes o Perteneces?

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Porque para eso hemos sido creados. Hemos sido creados para amar a Dios. Dios nos conoce y nos ama. Dios nos creó y quiere que lo conozcamos y lo amemos. Uno de los beneficios de la adoración es que nos permite tener una mejor perspectiva – una mejor perspectiva sobre nuestros problemas, una mejor perspectiva sobre la vida porque nos ayuda a enfocarnos en la grandeza de Dios.

¿Es posible adorar a Dios sin pertenecer a una Iglesia? Por supuesto que sí, pero hay poder en adorar en grupo. Hay una energía diferente cuando estamos adorando juntos como la familia de Dios. Nos podemos bendecir y animar mutuamente. Nos podemos desafiar y tomar consciencia al discutir nuestra relación con Dios y lo que Él está haciendo en nuestras vidas. Nunca se pensó que hiciéramos esto nosotros solos. Necesitamos a la familia de Dios para mantenernos enfocados en Dios. Una segunda ventaja de pertenecer a una familia de iglesia es que nos ayuda a afrontar los problemas de la vida. Todo el mundo está de acuerdo en que la vida es dura. O tienes un problema ahora mismo, o acabas de salir de uno, o te estás preparando para entrar en uno. Porque la vida es sencillamente una sucesión de problemas. Como resultado de esto nos desanimamos, nos cansamos, nos frustramos, nos fatigamos, nos agotamos.

Dios nunca tuvo en mente que fuéramos por la vida en solitario. Él quiere que tengamos una familia de iglesia como apoyo. Sacamos fuerzas los unos de los otros. Esto se llama confraternizar. Aquí es donde nos apoyamos los unos a los otros. Es realmente como esa ilustración que todo pastor usa sobre la hoguera. Si has conseguido hacer una hoguera con muchísimos carbones encendidos, todos ellos se ayudan a mantenerse calientes. Si sacas un trozo de carbón de la hoguera y lo dejas aparte, se enfriará inmediatamente. Pierde su calor y se apagará. Si vuelves a poner ese carbón en la hoguera, inmediatamente se calienta. Si no tenemos contacto con otros cristianos, con otros creyentes de una manera consistente, nuestro corazón se enfriará

Cuando nos convertimos a Cristo pasamos a pertenecer a la familia de Dios y por ende toda la familia de Dios se convierte en nuestros hermanos y hermanas en el Señor. Un cristiano sin la familia de iglesia es un huérfano. No tienen el apoyo ni el fundamento que necesitará para llegar a la meta. Rom. 12:5: “Así nosotros siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros”. Si tú eres seguidor de Cristo, no sólo perteneces a Dios. Perteneces a cada uno de los demás cristianos. Yo te pertenezco y tú me perteneces. Dios dice, quiero que os ayudéis los unos a los otros, que os apoyéis mutuamente, que os animéis los unos a los otros. El siguiente beneficio de pertenecer a una familia de iglesia es nos ayuda a fortalecernos en la fe. “Fortalecer” significa “consolidar, desarrollar, reforzar”. Desayunamos cereales que han sido reforzados con vitaminas. Significa que se les ha añadido algo que les da más fuerza.

Eso es lo que hace una familia de iglesia. Nos ayuda a clarificar nuestros valores. Nos ayuda a marcar nuestras prioridades. Nos ayuda a aclararnos sobre “qué es lo que realmente creo”. Una familia de iglesia nos ayuda a desarrollar nuestro carácter, nuestras convicciones, nuestra integridad. Si no tenemos una familia de iglesia, ¿dónde vamos a desarrollar estas cualidades. Hebreos 6:1: “Dejando los rudimentos de la doctrina de Cristo, vayamos ya a la perfección”. Probablemente como Pastor, la pregunta que más se me hace es “¿Cómo sé cuál es la voluntad de Dios para mi vida?” Lo que Dios quiere es que crezcamos, que maduremos. ¿Se puede ser mayor de edad y espiritualmente inmaduro?, por supuesto. ¿Cómo crecemos espiritualmente?, adentrándonos en la Biblia y poniéndola en práctica. Primero tenemos que acogerla en nuestra mente, después en nuestro corazón, y por último en nuestros actos, actitudes, en toda nuestra vida. La tenemos que vivir. La familia de Dios nos ayuda en este proceso. El cuarto beneficio de pertenecer a la familia de la iglesia es: nos ayuda a encontrar nuestro ministerio. Esto puede que sorprenda a algunos, pero no estamos aquí sólo para ocupar espacio. Dios espera que le

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devolvamos algo. Nos dio ciertas habilidades, talentos, dones, herencia, que Él espera que usemos para ayudar a otras personas. Siempre que usemos nuestros talentos o usemos nuestros conocimientos para ayudar a alguien, llamamos a eso ministerio. Un cristiano que no “ministra” (que no sirve), es una contradicción. Fuimos hechos para ministrar (servir). Un día estaremos ante Dios y Él nos va a preguntar, ¿cuál era tu ministerio? ¿Qué hiciste en la tierra para devolver lo que se te dio? ¿Cuál fue tu contribución? Es la misión de la iglesia el ayudarte a descubrir y desarrollar tu ministerio.

Efesios 2:10: “Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas”. La Biblia dice aquí que somos hechura u obra maestra de Dios. La palabra griega para “hechura” es “poiema””. La palabra “poema” sale de ella. A los ojos de Dios somos una obra de arte. No hay nadie más como tú. Dios te creó. La Biblia dice que Él te diseñó. Da igual las circunstancias de tu nacimiento. Él sabía quiénes serían las dos personas que tendrían la mezcla correcta de genes para formarte a ti. Tenía un propósito para ti en esta tierra, para un ministerio. Entonces dijo “Quiero que tu vida tenga sentido”.

1ª Cor. 12:27 dice “Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en particular.” Hablo con tanta gente que se siente inútil. Se sienten insignificantes. Sienten que “mi vida no tiene sentido”. Unos de los secretos de la auto estima es descubrir lo que Dios ha querido que seas y serlo. Encuentra tu ministerio y vívelo, ponlo en práctica. Entonces podrás decir, “Para esto estoy aquí”. Entonces verás lo que vales. Como cristiano fuiste creado para servir. Si te consideras un creyente, el ministerio no es opcional. El último beneficio de pertenecer a una familia de iglesia es que nos ayuda a realizar nuestra misión en la vida. Esto es algo distinto a nuestro ministerio. Hay una finalidad grandiosa para nuestras vidas. Estamos en la tierra por una razón. Dios escogió la fecha de nuestro nacimiento, el sitio donde nacimos y exactamente cómo naceríamos. No teníamos control sobre nada de eso porque nos estaba creando para una misión. En el momento en que nos confiamos a Jesucristo, Dios activa nuestra misión en la vida.

Pablo dice en 1ª Cor. 9:16: “Cuando anuncio el Evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no anunciase el Evangelio!” Parte de tu misión en la vida es anunciar a la gente las buenas nuevas. Alguien nos lo dijo a nosotros y nosotros tenemos que pasarlo a otros. Rom. 10:14 dice, Esto tiene sentido. No hay mayor logro que guiar a alguien a Cristo, guiarlo a Jesús. Somos creyentes porque alguien se tomó la molestia de anunciárnoslo. ¿Quién nos ha importado lo suficiente para anunciarle las Buenas Nuevas sobre Cristo y que todos nuestros pecados pueden ser perdonados? La Biblia dice que somos embajadores de Cristo. Tendríamos que estar divulgando las Buenas Nuevas de Salvación a todos con quienes nos encontramos. Kevin Martineau (Pastor del Port Hardy Baptist Church, Northern Vancouver Island, British Columbia.) Se puede leer más de este pastor en su blog: http://kevinmartineau.ca. Este artículo ha sido traducido y usado

con el permiso del autor.

SSiigguuee OORRAANNDDOO,, AAPPOOYYAANNDDOO yy PPRROOMMOOCCIIOONNAANNDDOO

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EEssttee pprrooyyeeccttoo eess ppaarrttee ddee nnuueessttrraa vviissiióónn

yy ddee nnuueessttrroo ccoorraazzóónn……

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1. ¿Cuál es tu versículo preferido de la Biblia y por qué? Filipenses 1:6: “Estoy seguro de que Dios, el que comenzó a hacer su buena obra en ustedes, la irá llevando a buen fin hasta el día en que Jesucristo regrese.” Me gusta porque aún viendo los defectos que habían en mí, y el mucho trabajo que aún tiene, tengo la promesa que Dios completará su obra. 2. ¿Cuál es tu logro más grande de la vida? Mi matrimonio, haberme casado con una guapa mexicana. 3. ¿Estás leyendo algún libro ahora mismo? ¿Cuál? “Corazón para Dios” de Luis Palau. 4. ¿Cuál es el lugar del mundo más bonito dónde has estado? ¡Ufff, qué difícil!, es que tengo varios, los más en la República Mexicana, Cuba…y cómo no, desde luego mi Santander. 5. ¿Quién ha sido la inspiración más grande de tu vida? Raymundo Pollnow, ya que fue un hombre que marcó mi vida por su testimonio tan íntegro, su relación con Dios, su amor a la obra y porque ha sido un visionario.

6. ¿Tienes algún sueño todavía sin cumplir? No uno, sino varios, primero ser un hombre de testimonio que Dios use en la iglesia en donde estoy (Maliaño), pueda ser apoyo en ella y luego uno de mis mayores sueños es algún día abrir Nueva Vida en México con una casa para niños y jóvenes. Aunque para este último necesito que Dios también lo ponga en el corazón de mi esposa. 7. ¿Cuál es tu momento preferido de la semana? Todos los días, cuando tomo el café con mi esposa. 8. ¿Qué cambiarás de ti mismo? Mi pronto, mi orgullo. Cambiaría el reaccionar por el accionar. 9. ¿Si fueras un animal, cuál serías y por qué? León, porque me gusta su presencia, su gallardía, su fortaleza. 10. ¿Cuál es la canción que mejor describe tu forma de ser? Creo que soy tan raro, pero raro que no hay una, pero sí que hay una que me gusta mucho y no porque me describa, sino porque habla de mi mayor deseo: “Cara a cara” de Marcos Vidal.

Nombre: Dimas Julián Odriozola Ganzo Nació en: el barrio de San Simón en Santander Reside en: Muriedas aquí en Cantabria Trabaja como: estoy de baja, una baja larga. Estado civil: casado Sigo a Jesús: desde hace 22 años

10 x 10 En esta sección intentamos

acercarnos a algún hermano de la iglesia

haciéndole 10 preguntas sencillas.

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El sentimiento real de pertenencia es fundamental para sentirse seguros. Áreas de la vida como

la familia, la sociedad, la cultura o la Iglesia como comunidad de vida y fe, no sólo nos ayudan en el sentimiento de formar parte, sino en la dependencia sana de recibir y dar.

Nuestro mundo busca la libertad y la independencia como valores absolutos olvidando en muchos casos la necesidad de formar parte de. Si bien la libertad no es negociable, la libertad de elegir pertenecer no es menos necesaria para realizarse como persona.

Pertenecer a la comunidad cristiana y a mi iglesia local me hace ser en toda manera más acorde con las enseñanzas del Nuevo Testamento de ser un cuerpo que se ayuda mutuamente.

Con esto en mente vamos a lanzar la membresía formal de nuestra Iglesia Nueva Vida a lo largo de este trimestre. Vas a escuchar más sobre esto en tu congregación. En todo momento el deseo de mi corazón es que, lejos de ser una medida de exclusión, este esfuerzo nos fortalezca y nos ayude a ser mejores miembros del cuerpo de Cristo.

Abajo hemos incluido una parte del documento que se va a distribuir en breve para explicarlo un poco más. Tenlo en oración ante el Señor y piensa en ocupar tu lugar en el reino. Un abrazo fuerte, el pastor Julio

La Membresía

Membresía 1. Qué es: es la identificación de un cristiano con una iglesia local particular que conlleva una serie de compromisos o deberes por parte de la iglesia y del miembro. No ser miembro de ninguna congregación en particular es no cumplir con tu responsabilidad al cuerpo de Cristo. La membresía trae tanto el estar cuidado como el compromiso. Trae bendiciones y oportunidades. 2. Por qué es importante: -Es importante porque vivimos en un momento de especial desapego al compromiso serio. -Es importante para la persona porque al identificarse con la congregación acepta que está de acuerdo con lo que se cree y enseña allí y se responsabiliza reconociendo la importancia de su testimonio. -Es importante porque es esencial en todo el proceso de sumisión y autoridad (Hebreos 13:17) y de la misma forma permite que el liderazgo de la iglesia sepa por quién es responsable. -Es importante por razones prácticas de organización para saber con quién se cuenta para servir y quien tiene derecho de voz y voto en las asambleas de la iglesia. 3. Cómo se es miembro: Para ser miembro hay que… -Ser salvo -Estar bautizado -Estar dispuesto a entrar en el “Pacto de Membresía” con la Iglesia. 4. Toda solicitud de membresía es personal y quedará a la consideración de los pastores de la iglesia. Se puede dar de baja como miembro en cualquier momento, notificándolo a la iglesia. 5. Adjunto al Pacto está una copia de la Doctrina Fundamental de la Iglesia y la Visión de la misma puesto que un punto importante es la aceptación e identificación con ellas.

Pastor Julio García Celorio

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Los

bautismos…

Campamento

de niños…

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…y de

jóvenes…

…hasta el verano

que viene…

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Sabemos que eres originaria de Cuba, ¿qué te

hizo venir a España? El amor…A diferencia de la mayoría de los cubanos que emigran a otro país buscando una mejor vida, el motor principal que me impulsó a tomar esa difícil decisión fue el amor. Mantenía una relación con un chico cuya familia materna era originaria de España. Su madre frecuentaba a menudo Madrid por asuntos laborales y familiares, un buen día llegó a Cuba y nos dijo: Voy a hacer todo lo posible porque podáis iros a vivir a España, sois muy jóvenes y tenéis que plantearos un mejor futuro. Y así hizo, arregló todos los papeles para que su hijo pudiera venirse a vivir aquí, y yo me quedé terminando mis estudios de Psicología en la Universidad de la Habana, ya que me quedaban dos años para finalizarlos. Presenté mi trabajo final de carrera en el mes de junio de 1996, y el 1º de agosto del mismo año ya estaba en España, conociendo su bella capital, y disfrutando de la compañía de aquel entonces, el gran amor de mi vida. Todo lo viví como uno de los momentos más controvertidos de mi vida, porque por un lado deseaba conocer otros mundos, mejorar mi calidad de vida, y estar al lado de mi chico, pero por otro abandonaba a mi gran familia, mis adorados amigos, y por encima de todo, a mi maravillosa madre, los cuales no sabía en qué momento podía volverlos a ver. Y aquí empezaron las controversias de una emigrante… ¿Cómo fue que te decides por ser psicóloga? La motivación, la guía, y el conocimiento de la Psicología lo adquirí a través de mi madre que también es Psicóloga. Desde pequeñita,

participaba en las terapias grupales que hacía con los niños que atendía, y de vez en cuando, hasta en alguna consulta entraba porque no tenía con quien dejarme. “Ha pasado a la historia de nuestras vidas la anécdota de que un día, no había forma de colocarme con nadie para poder dar su consulta, le dijo al paciente -un padre con su hijo pequeño-, que si no le importaba que yo estuviera jugando tranquilita en el despacho, que no molestaría, y que como era tan pequeñita no me enteraba de nada. El señor accedió sin problemas y empezó la terapia. El papá llevaba a su hijo pequeño por fobias a las cucarachas, y después de llevar mucho rato escuchando la intervención de mi madre para ayudar a esta familia, y un poco confusa con la situación me levanté y le dije “¡Pero mami, cómo vas a ayudar a este niño si eres la primera que le tienes pánico a las cucarachas, hasta encima de las mesas te subes cuando las ves”…Del resto de la historia no recuerdo más nada, sólo puedo decir que nunca más volví a entrar a una consulta. ¿Cómo fue que iniciaste tu relación con Nueva Vida? Pues resulta que unos tres o cuatro años antes de conocer a Nueva Vida, me enviaron del Colegio Oficial de Psicólogos la invitación un curso gratuito sobre Violencia de Género. En aquel entonces yo conocía muy poquito del tema, pero como lo vi vinculado al área de pareja, -que es un área que me gusta mucho-, decidí apuntarme. Y creo que fue una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida, porque recibimos una formación muy buena, por parte de los mejores profesionales especializados en el tema en Cantabria, y con una formación práctica fabulosa, razón por la

Entrevista a

NNeellllyy CCaabbrreerraa HHeerrrreerraa Psicóloga de nuestra Asociación “Nueva Vida.”

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cual me presenté a una selección de candidatos que años más tarde realizó Nueva Vida, para desarrollar un programa de Violencia de Género en el Centro Penitenciario del Dueso. La psicóloga que dirigía el programa, realizó unas cuantas entrevistas para seleccionar quién impartiría con ella dicho programa, y después de varios contactos, y con la aceptación y confirmación del presidente de la Asociación de mi candidatura, fui yo la seleccionada y empecé a trabajar en la ONG con una de las mejores profesionales que he conocido en mi vida, de la cual aprendí muchísimo, y con un colectivo de trabajadores muy competentes, pero por encima de todo, con mucha entrega y corazón. ¿El hecho de que la ONG tenga fundamento cristiano ha representado para ti algún problema tanto a nivel personal como en tu trabajo? En lo absoluto, todo lo contrario. Yo he sido una de las generaciones que por nacer en el país que nací, no tuve la oportunidad de saber y conocer sobre la religión. Aunque fui bautizada a escondidas, ya que mi padre era militante del partido comunista, y corría serios problemas si se enteraban en su trabajo o en el barrio donde vivíamos, que su hija entraba en una iglesia. Siempre he visto en casa de mis abuelos un altar y de pequeña vigilaba a mi abuelo qué hacía cuando se ponía delante de él, ya que para mí las velitas, flores, y demás cosas que ponía a su virgen, era algo que me llamaba muchísimo la atención, pero como siempre se escondía, y nadie hablaba de aquello, yo tampoco lo hacía. Lo que gané de esa experiencia es que al ser humano hay que dejarlo elegir, no imponerle, porque entonces jamás tendrá la posibilidad de aprender y de saber verdaderamente qué es lo que quiere y lo que no. Es por esta razón que mi hijo estudia desde los dos añitos en un colegio religioso, para que tenga la libertad de elegir sus propias creencias. Y el fundamento cristiano desde un punto de vista profesional, sobre todo con el sector que ahora mismo llevo años trabajando, es decir, los reclusos, en muchos casos ha sido un aliado para los tratamientos y para la rehabilitación.

Siempre comento que una de las cosas que más valoro de esta asociación religiosa, es la capacidad de respeto a los que mantienen fundamentos distintos a los suyos, y por otro lado, lo objetivo que podemos ser con el ciudadano que asistimos, ya que podemos recibir explicaciones de los hechos existentes bajo distintos puntos de vistas. Así se hace el camino… Cuéntanos acerca de tu labor en la ONG Como ya he contado, colaboro con la Asociación desde el año 2008, en la asistencia y tratamiento de hombres que han ejercido violencia a su pareja en el Centro Penitenciario del Dueso ahora mismo, aunque también he desarrollado programas en el Centro de Inserción Social José Hierro, relacionados también con la Violencia de Género y la Violencia Doméstica. Hace unos meses he empezado a asistir a la Casa de Acogida de Renedo, a petición del Presidente de la Asociación el cual considero una de las personas más altruistas que he conocido, para prestar de forma voluntaria un servicio de atención psicológica individualizada, consistente en apoyo y orientación para los reclusos que se encuentran en tercer grado en el CIS, pero que salen a través de la ONG a desarrollar actividades. Colaborando con este equipo maravilloso que tiene unos valores espirituales y un gran sentimiento humanitario, elementos importantísimos para poder llevar a cabo este tipo de trabajos, me siento realmente valorada, apreciada y muy querida. ¿Qué te ha motivado a trabajar con reclusos? La verdad que la motivación ha sido la del reto y la inquietud por conocer cómo siente, piensa y hace el ser humano en situaciones tan difíciles como es la prisión, qué es lo que lleva a las personas a tocar fondo de esta manera, y sobre todo, a los hombres cuyo delito es haber agredido a la persona a la que supuestamente, los unía el amor.

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¿Recuerdas algún caso que haya representando un reto para ti? Cada participante de los programas es un reto, pero creo que me llega mucho, le dedico mucho tiempo, y me enfada bastante ver a gente muy joven, haciendo uso de la violencia en todas sus expresiones con su pareja, por no ser capaces de solicitar la ayuda necesaria para afrontar sus problemas. Yo pienso que la gente joven hoy en día cuenta con tantos recursos, que me duele mucho que no hagan uso de estos. No es que entienda mejor a la gente de mediana edad o mayor, lo único que sus patrones responden mayormente a una educación más desigual, pero los jóvenes de hoy en día, tienen tanta información, tanta educación, que yo creo que cuentan perfectamente con las armas para poder ir, hasta contra sus propios aprendizajes si estos no funcionan. Cuéntanos algún caso que te haya dejado un buen sabor de boca Pues la verdad que no pudiera definir un solo caso, sí te digo que cuando empieza alguno el programa con mucha resistencia, retándome en conocimientos, desafiando el posible aprendizaje que pueda sacar del programa, incluso hasta con su poquito de agresividad por la situación en la que se encuentran, se me activa una necesidad imperiosa e incansable de ayudar a provocar un cambio. Y cuando veo que avanza la terapia, y todo ese escudo se va debilitando, incluso, en ocasiones demandamos más tiempo de terapia para seguir confrontando, entonces el sabor de boca es muy agradable, se los aseguro. ¿Cómo concilias tu vida laboral con la familiar? Como todos los padres y madres que trabajan en la calle y tienen que educar en la casa.

Tengo una pareja maravillosa con la cual comparto mi vida hace más de 14 años, y de cuya relación ha nacido mi más preciada joya que tiene hoy 8 añitos. Ambos son estupendos, y gracias al apoyo de los dos, he podido salir adelante y dar continuidad a todo lo que me he propuesto en la vida. Somos el complemento perfecto, porque mi marido es la razón, la objetividad y el hacer, y mi hijo constituye el motivo por el que todo esto tiene un sentido para mí. Por otra parte cuento con una familia encantadora, donde de cada abismo salimos todos juntos, sin dejar a nadie atrás, algo muy importante para la salud de una persona. Y me gustaría hacer mención a una gran amiga que he conocido hace unos pocos años, mamá del mejor amigo de mi hijo, que gracias a su apoyo incondicional en el cuidado y dedicación que le ha prestado a mi hijo, me ha permitido que pueda decir sí a muchos proyectos, que sin ella, hubiese tenido que decir no. Por supuesto que también vivo con algunas espinitas, que muchas veces me hacen llorar, pero esas las callamos, ya las contaré algún día como parte del pasado, para que duelan menos. ¿Qué proyecto o qué actividad te gustaría llevar a cabo profesionalmente hablando? Ahora mismo estoy encantada con lo que hago, porque no sólo colaboro con la ONG sino que también trabajo en una Clínica Sanitaria con un colectivo compuesto por médicos, enfermeros, podólogos, geriatras, con los cuales desarrollo otro tipo de proyectos que complementan mi actividad laboral. Entre todos trabajamos por la salud física y mental del ciudadano hace muchos años, obteniendo igualmente muchos logros. Un deseo de Nelly… Poder tener mucha salud para ayudar a crecer a mi hijo, y que junto a los valores religiosos que aprende en su colegio, la educación que le proporcionamos tanto su papá como yo, como sus profesores y demás familiares, pueda ser un hombre feliz. Entrevistada por: Lourdes Jiménez Ramos

Nelly Cabrera Herrera

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Nueva Vida ha preguntado a Ionut Perse, voluntario en Prisiones y miembro de la iglesia de Torrelavega que nos conteste a esta pregunta.

¿Por qué entro a la cárcel como voluntario?

A esta pregunta se le podría dar más de una respuesta. Por ejemplo, para cumplir con la palabra

que dice: “estuve en la cárcel y vinisteis a mí.” Mateo 25:36. También encontramos en el evangelio de Marcos (16:15) que Jesús dice: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” Éstas serían dos respuestas, y además muy “santas”, a la pregunta, pero creo que hay algo más que sólo el deseo de cumplir.

Me acuerdo cuando entré por primera vez. Fui con un grupo de la iglesia a comunicar con un chico en una cabina, como si fuera una cabina telefónica, separados por un cristal. Le visitamos aproximadamente durante un año y finalmente conseguimos permiso para acceder dentro de la cárcel dónde podría asistir al culto.

Allí se cambiaron muchas cosas dentro de mi corazón cuando vi el deseo sincero de algunos de los chicos que asistían al culto de acercarse al Señor y entregar sus vidas a Él. Esto me dio un impulso muy grande para seguir haciendo lo que habíamos empezado. Otro momento muy grande y positivo en todo este inicio fue cuando Cristian, el chico al que habíamos visitado durante el año, tomó la decisión de bautizarse. Esta decisión es típica de lo que más me motiva a entrar en la cárcel, pues he visto que el Señor cambia las vidas de los que de verdad entregan su corazón a Él, no siendo importantes para Dios las circunstancias ni el lugar donde uno se encuentra. Él no hace acepción de personas.

Cada vez que entro allí, viendo que las enormes puertas de la cárcel se abren, para mí es un milagro de Dios. Estar allí, poder cantar y compartir la Palabra de Dios con los chicos es una maravilla, y un favor muy grande que el Señor nos hace, porque la bendición y el aliento que Dios nos da en cada reunión allí no es sólo para los chicos sino también para nosotros. No pocas han sido las veces que hemos salido de la cárcel más animados de cómo habíamos entrado porque Su presencia estaba allí.

Personalmente, es de mucha bendición poder formar parte del grupo de las iglesias de Nueva Vida que entramos cada semana para llevar la Palabra de Dios a personas que quizás nunca lo hayan oído o hayan pasado de largo cuando alguien les ha hablado del Señor. Es emocionante y un privilegio poder llevar la esperanza del amor de Dios a unas personas para las que la esperanza casi ya no existe.

Por último, quiero agradecer a todos los que oran o de alguna otra manera apoyan esta obra y ministerio y animaros a que lo sigáis haciendo, porque el campo es grande y la recompensa que Dios da es más grande todavía, es la vida eterna. Un fuerte abrazo para todos. Ionut Perse

Ministerio en Prisiones

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A propósito… Aunque no podemos poner fotos de las actividades llevadas a cabo en prisión, hay que hacer una reseña de la Campaña en Prisiones que se celebró en Junio tanto en preventivos como en penados en Santoña. Gracias a Dios por todos los internos que asistieron y fueron tocados por Él. También hubo barbacoa muy rica y un buenísimo ambiente en los dos días de campaña. Gracias por vuestras oraciones…

¿y tú, cómo puedes colaborar más con el ministerio en Prisiones? De varias maneras: Evidentemente con tus oraciones, tanto por los presos como por los voluntarios. Siendo voluntario tanto en los centros penitenciarios como en las casas de acogida. (Habla con los

responsables si sientes que es algo que podrías hacer.) Regalando una Biblia o alguna prenda de ropa. “Apadrinando” a algún interno/a, a través del equipo de voluntarios, interesándote por él/ella,

escribiéndole, orando específicamente por sus necesidades.

Repasando una revista que hacíamos en la iglesia hace años, he encontrado algún escrito que otro que me parece interesante reeditar. Así que poco a poco, según nos permite el espacio, iré poniendo algún texto bajo el título “Algo del pasado…”

Epigrama (Pastor Jesús Calvo Piñar, Marzo 1995)

Mis sentimientos, Señor, reproducen una imagen tuya, a la cual, cuando estoy en momentos álgidos, me agarro fuertemente. Pero cuando mis sentimientos no están arriba, no pueden reproducir esa imagen; es cuando no te siento. Cuando no puedo tocarte en la oscuridad, más solo me siento.

Mis sentimientos moldean tu imagen, A la cual me puedo agarrar, pero Quiero aprender a tocarte sin tener que palpar Quiero aprender a sentirte sin tener que escuchar Lo que dicen de ti los demás. Quiero aprender a amarte, sin tener que imaginarte ¡Quiero aprender a caminar sabiendo que siempre estás! Quiero aprender a amarte más y más. Aún con poco sentir, sé que tú estás.

Mis sentimientos me hacen imaginarte. Cuando no estoy en este punto emocional tan alto, no te veo, no te siento, palpo el aire en la oscuridad. ¡Pero yo sé que tú vives, que me creaste, que me conocerás, que sabes de dónde vengo y a dónde voy a llegar, bajo tu voluntad!

Yo sé que Tú estás. Mis sentimientos te moldean a ti, Señor. Cuando no los tengo, quiero saber que… Siempre, siempre, Tú estás.

Algo del pasado…

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ANUNCIOS

Octubre 1: Comienzo de Curso “Escuela Bíblica Nueva Vida.” 5-7: Retiro de jóvenes en La Canal 30: Celebración del Día de la Reforma 31-2: Retiro de Iglesia en Isla

Noviembre 15-17: Retiro Pastores y Obreros de FIAPE en Madrid

Este verano falleció la hermana Liliana de la iglesia de Santander. Estamos tristes pero nos alegramos de saber que está con el Señor. Este poema me llena de paz cuando pienso en el paso que todos tendremos que dar algún día, si el Señor no viene antes.

¿Qué es el morir?

Un barco alzando la vela, zarpa y comienza su viaje.

Yo, de pie en la orilla, veo como se

aleja hasta que desaparece sobre el horizonte.

Alguien a mi lado exclama: “¡ya se fue!”

Pero yo me pregunto: ¿adónde se ha

ido? Se ha ido de mi campo de visión, nada más. Sigue igual de grande que

cuando yo lo veía. La falta de visión, la reducción del tamaño, se encuentran

en mí, no en el barco mismo.

Y al mismo instante en que aquella persona dice: “¡Ya se fue!”, hay otros que le ven venir y otra voz exclama

con alegría: “¡Por allá llega!”

Y eso es morir. (El Obispo Brent)

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Estemos orando siempre por las casas de acogida, por los enfermos y demás necesitados. Orando siempre con acción de gracias…

Colabora con la Operación Kilo y Litro… “Tuve hambre y me disteis de comer.”

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Iglesia Evangélica “Nueva Vida” Cantabria

Visión y misión

Evangelización

Discipulado

Compasión

“No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto

para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo

que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé”. Juan 15:16

La extensión del reino de Dios, presentando de una forma comprensible el

Evangelio del Señor Jesús a las personas, para que puedan tomar una decisión por

Él y ser discípulos de un modo integral y comprometido, siendo ayudados por el

poder de Dios y viviendo la compasión hacia los más necesitados implicándose

socialmente.

NNuueessttrraass IIgglleessiiaass eenn CCaannttaabbrriiaa

Cabezón de la Sal Urb. La Brañona, 22 Tel: 942 705014

Colindres C/. Ramón Pelayo, 10 Tel.: 622 318995

Maliaño Avda. Parayas, 6 Tel.: 942 262683

El Refugio C/. Madrid, 12b Santander Tel.: 601 084826

Santander Ur. Nuevo Parque, 23-24 Tel.: 942 324297

Torrelavega C/. Raimundo Cicero Arteche, 1 Tel.: 942 898081

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