n especial 2020 - ncnorma.cu

“LA CALIDAD ES EL RESPETO AL PUEBLO”

No ESPECIAL

2020

ISSN: 4583 - 345KL

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Importancia de las normas de Seguridad y Salud en el trabajo para enfrentar la COVID-19

15

Aplicación del marco regulatorio en el proceso de atención para enfrentar la COVID-19

29

La percepción del riesgo y la normalización frente a la COVID-195

EN ESTE NÚMERO...

SUMA

RIO Número 1 / enero - abril 2020

NORMALIZACIÓN

PUBLICACIÓN CUATRIMESTRAL ELABORADA POR EL CENTRO DE GESTIÓN Y DESARROLLO DE LA CALIDAD QUE ESTIMULA A LA FORMACIÓN DE UNA CULTURA EN EL CAMPO DE LA NORMALIZACIÓN, LA METROLOGÍA Y LA CALIDAD. LOS AUTORES SON LOS ÚNICOS RESPONSABLES DE LOS CRITERIOS POR ELLOS EMITIDOS.

SE AUTORIZA LA REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL DE LOS ARTÍCULOS Y FOTOGRAFÍAS AQUÍ PUBLICADOS, SIEMPRE QUE SE CITE LA FUENTE.

ESTÁ INSCRITA COMO PUBLICACIÓN PERIÓDICA EN EL REGISTRO NACIONAL DE PUBLICACIONES SERIADAS DE LA REPÚBLICA DE CUBA.

DEPENDENCIAS DE LA ONNPÁG 31

ARTÍCULOSLa percepción del riesgo y la normalización frente a la COVID-19

PÁG 5

COVID-19 y la inocuidad de los alimentosPÁG 11

Importancia de las normas de Seguridad y Salud en el trabajo para enfrentar la COVID-19PÁG 15

COVID-19. Importancia de gestionar los riesgos en los laboratorios clínicoscon enfoques normativosPÁG 20

COVID-19, el incidente perturbador según la ISO 22301PÁG 24

EDITORIALNC, en la lucha contra la COVID-19

PÁG 3

INFORMACIÓNInformación a disposición de la comunidad

PÁG 27

Aplicación del marco regulatorio en el proceso de atención para enfrentar la COVID-19PÁG 29

Directora Editorial: MSc. Nuria Dávila Fer-

nández / Edición y Corrección: Ing. Caridad

V. Hernández de la Torre / Periodista: Ledys

Camacho Casado / Traducción: Jesús Bran

Suárez / Diseño y Diagramación: Dis. Edgar

Luy Pérez / Consejo Editorial: Nancy Fernán-

dez Rodríguez, Nuria Dávila Fernández, René

Fernández Infante, Nelson Villalobos Hevia,

Alejandra Hernández Leonard, Ysabel Reyes

Ponce, Dayanis Matos Beatón, Caridad V.

Hernández de la Torre. / Fotografías: Dpto. de

Información y Comunicación, CGDC, Archi-

vos de la revista / Redacción y Administra-

ción: Reina No. 412, Entre Gervasio y Escobar,

Habana 2 / ISSN: 2223-179x / Permiso: No.

81217 / Reproducción: Soporte electrónico y

digital. / e-mail: [email protected] / Te-

léfono: (53) 7862-1347 / Internet: http://www.

ncnorma.cu

Número Especial - 2020

EDITO

RIAL

Dra.C. Nancy Fernández Rodríguez,

Directora General de NC

La Oficina Nacional de Normalización, órgano rector de

la Normalización, Metrología y Calidad de la República

de Cuba, líder en el campo de la Normalización, se ha

puesto a disposición de las entidades del Estado para contribuir

a la solución de la crisis generada por la presencia en el país del

Coronavirus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad COVID-19,

con el objetivo de contribuir a elevar en la sociedad la percep-

ción del riesgo y conocimientos sobre buenas prácticas higiénico

sanitarias.

Contamos con un grupo de normas cubanas que se han puesto

a disposición de todos, que están relacionadas con la gestión de

los riesgos y de cómo se pueden gestionar los mismos con segu-

ridad, no solo con su intuición y con directivas, sino con buenas

prácticas reconocidas internacionalmente, normas que se

relacionan con dispositivos y equipos médicos, limpieza y desin-

fección y otro grupo sobre los requisitos higiénico-sanitarios que

deben cumplir los alimentos, que tienen que ver con los lácteos,

los cárnicos, la dulcería y repostería.

Se proyectó una estrategia de comunicación y se comenzó a

publicar una serie de conferencias dirigidas al enfrentamiento

a la pandemia. Se han ido publicando a través de los canales de

las Tics, materiales y conferencias virtuales breves, así como las

publicaciones de la organización, con un lenguaje accesible para

toda la población. Se comenzó con las temáticas relacionadas con

la percepción del riesgo, la inocuidad alimentaria y la seguridad

y salud en el trabajo sobre prácticas seguras en los puestos labo-

rales.

Lo que corresponde es cumplir con las normas, conocerlas ca-

da vez mejor y aplicarlas, para materializar nuestro aporte para

reducir los riesgos ante la COVID-19 y todos los efectos que aso-

lan al mundo y a nuestro país.

En esta edición especial de la revista Normalización, nos

unimos a los esfuerzos de los profesionales de las normas y de

personas que realizan tareas vinculadas a la Normalización,

compartiendo parte de nuestras experiencias en la difusión del

papel de las normas e influenciar en las personas sobre los bene-

ficios de su aplicación para el bienestar de la sociedad en general.

NC, en la lucha contra la COVID-19

INFORMACIÓN DISPONIBLE AL PÚBICO

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5 / Normalización Número Especial - 2020 ir al SUMARIO


La temática de la percepción y gestión de los riesgos, alcanza

hoy una vigencia de gran interés. Como es conocido a nivel

global, la humanidad está afectada por la pandemia de la CO-

VID-19. Cada uno de nosotros ha de conocer cómo evaluar los riesgos

asociados a esta enfermedad, las buenas prácticas que debemos asu-

mir y cómo están abordadas las mismas en las normas y legislaciones

vigentes.

El pensamiento basado en el riesgo, ha estado presente desde hace

muchos años como una herramienta vital para la prevención de si-

tuaciones no deseadas, en nuestros días la Norma Internacional ISO

31000:2018. Gestión del riesgo. Directrices, se divulga en función de

facilitar la evaluación del riesgo, extendiendo su aplicación a cual-

quier actividad o sector y de esa forma incentivar la incorporación de

estas directrices, técnicas y herramientas en la práctica cotidiana, así

como la Organización Mundial de la Salud (OMS), aborda el concepto

de riesgo, fundamentalmente los que generan daños en la salud de los

seres humanos.

La NC-ISO 31000:2018, se complementa con otra norma interna-

cional que establece técnicas y herramientas útiles en la evaluación

de los riesgos (identificación, análisis y valoración), se trata de la

NC-ISO/IEC 31010:2015 Gestión del riesgo. Técnicas de apreciación

del riesgo, que en función de los resultados obtenidos, determina la

significación de los riesgos y permite establecer prioridades de trata-

miento, una vez conocida su severidad, probabilidad de ocurrencia y

otros factores.

Existen otras normas que abordan el riesgo relacionadas con la sa-

lud de los seres humanos como:

• NC-ISO 22000:2018 Sistemas de gestión de la inocuidad de los

alimentos. Requisitos para cualquier organización en la cadena ali-

mentaria

• NC-ISO 45001:2018 Sistemas de gestión de la seguridad y salud en

el trabajo. Requisitos con orientación para su uso.

• NC-ISO 14001:2015 Sistemas de gestión ambiental. Requisitos con

orientación para su uso.

Se pueden mencionar además, relacionadas con la salud:

• NC-ISO 13485:2018 Equipos Médicos. Sistemas de gestión de la

calidad. Requisitos para fines reglamentarios.

• NC-ISO 14971:2012 Equipos médicos. Aplicación de la gestión de

riesgos a los equipos médicos.

Otras, que sin ser del propio sector de la salud, han de tenerse en

cuenta para afrontar situaciones de salud, son las referidas a: la tec-

nología de la información; seguridad y continuidad de los negocios;

seguridad para la cadena de suministro, entre otras. Por ser estas de

gran interés, explicamos brevemente:

ARTÍ

CULO

1

6 / Normalización ARTÍCULOS Número Especial - 2020 ir al SUMARIO

• ISO/IEC 27005 Tecnología de la información. Técnicas de segu-

ridad. Gestión de los riesgos de seguridad de la información, que

establece las directrices para la gestión del riesgo en la seguridad de

la información. Apoya los conceptos generales especificados en la

norma ISO/IEC 27001 y está diseñada para ayudar a la aplicación sa-

tisfactoria de la seguridad de la información basada en un enfoque de

gestión de riesgos.

• ISO 22301:2019 Seguridad y resiliencia. Sistemas de gestión de

la continuidad del negocio. Requisitos. Establece los requisitos para

implementar y mantener un sistema de gestión que desarrolle una

continuidad de negocio que corresponda con el tipo de impacto que

la organización puede o no asumir después de una interrupción.

• NC-ISO 28000:2010 Especificación para los sistemas de gestión

de la seguridad para la cadena de suministro. Aborda los riesgos en el

apartado 4.3 Evaluación y planificación de los riesgos de la seguridad.

En la actualidad la COVID-19 castiga a la humanidad alcanzando

connotación mundial. En cualquiera de los casos antes mencionados,

tenemos que adoptar las medidas de prevención necesarias.Para que

exista un riesgo tiene que existir una fuente, en este caso el virus

SARS-CoV-2, elemento que por sí solo o en combinación con otros, tie-

ne el potencial de generar la fuente del riesgo y luego necesita de un

evento (la ocurrencia o cambio de un conjunto particular de circuns-

tancias), representado por la contaminación de las personas, teniendo

como vehículo el roce de las mismas, manipulación incorrecta de los

alimentos u otros, dando lugar a la infestación y la propagación hasta

que llegue a alcanzar magnitudes de tipo pandemia, ocasionando la

afectación de la salud mundial.

La posibilidad de que esto suceda, depende de la existencia y cumpli-

miento de la percepción del ser humano sobre el riesgo y los controles

que seamos capaces de identificar, el apego a las buenas practicas que

la normalización internacional nos propone, midiendo o evaluando

el riesgo que las normativas indican, fundamentalmente con base en

la consecuencia o severidad que produce y a la probabilidad de que

este ocurra. Una vez que las enfermedades se presentan, es habitual

identificar riesgos de todo tipo para su control y analizar las posibili-

dades de ocurrencia, o sea, hablar de la percepción del riesgo antes y

durante su tratamiento.

La técnicas y herramientas para la evaluación de los riesgos de la

salud del ser humano, aparecen entre algunas de las que se estable-

cen en la NC-ISO/IEC 31010:2015, aunque existen otras en la amplia

bibliografía por especialidades, que pueden utilizarse en cualquiera

de las prácticas asociadas a la salud y el control de los tratamientos en

una amplia gama de actividades, sean preventivas o correctivas, en

operaciones, instrucciones, procesos, funciones, productos, servicios

y activos.

Son varias las opciones de tratamiento que podemos aplicar a un

riesgo, pero para ello es necesario partir de su análisis, de su evalua-

ción y así convenientemente determinar cuáles serían las opciones

de tratamiento más adecuadas y pertinentes para evitar el riesgo o

en su lugar mitigar el efecto negativo de éste sobre los objetivos y

metas organizacionales, del ser humano y fundamentalmente de la

salud. Para buscar la mejor opción el ser humano puede disponer de

las buenas prácticas a partir de la normalización.

Su aplicación en una técnica de las existentes, llamada “Número de

Prioridad del Riesgo” (Risk Priority Number), puede ser utilizada en

la valoración de las instrucciones de un tratamiento médico y está re-

lacionada con la posibilidad de ocurrencia de los riesgos, la severidad

de sus consecuencias y la posibilidad de su detección con la antela-

ción necesaria. La determinación del Número de Prioridad del Riesgo

(NPR), es una herramienta muy útil para evitar o mitigar los riesgos y

las prioridades a considerar en el tratamiento médico.



Para esto, asignamos un valor a la Severidad (S), a la Ocurrencia (P)

y al nivel de Detección (D). El resultado será:

NPR = S x P x D

A cada uno de estos factores se les da una puntuación que es un

criterio dado por expertos, pudiéndose obtener los siguientes resul-

tados:

En una tabla de incidencias como ejemplo, se muestra:

Se observa cómo los riesgos 1 y 2, asociados al riesgo identificado y

sus impactos, son Intolerables (RI), mientras los riesgos 3 y 4 resultan

tolerables (RT). De aquí surgen las opciones de tratamiento del riesgo

con un nivel de prioridad.

Hay ocasiones, como el caso de la COVID-19, donde no es posible

evitar el riesgo por ser factores originados por la naturaleza, tampo-

co ha sido posible eliminar la fuente de riesgo, al no contar con una

vacuna por ser un nuevo virus.

Entonces, ¿Qué opciones podemos asumir? ¿Qué nos indica la nor-

malización para contrarrestar esta realidad?

Podemos modificar la probabilidad de ocurrencia de aquellos ries-

gos que se derivan de esta pandemia, si somos capaces de establecer

controles, si empleamos los recursos necesarios y aplicamos las bue-

nas prácticas existentes recomendadas por las normas.

Situación peligrosa(Riesgo identificado)

Daño asociado

P D S NPR Riesgo

Con respecto al equipo y sus accesorios

Mala limpieza o desinfección del equipo.

Contaminación microbia-na del paciente.

2 2 2 8 RI

Limpieza de la cabeza del bebé con alcohol de uso hospitalario cerca de llama,

chispa o fuente de calor.

Incendio, explosión, que-maduras o muerte.

1 3 3 9 RI

Mala sujeción de la Unidad de Re-gistro y Estímulo, del Organizador

Personal PDA o de cualquier insumo o accesorio.

Daño al equipo o al pa-ciente.

1 3 2 6 RT

Conexión incorrecta de los electro-dos en el equipo.

Mal diagnóstico 2 2 1 4 RT



Es una buena práctica someter los riesgos a controles, saber si

existen, si se aplican y si están dirigidos a eliminar las causas que lo

producen y finalmente, valorar la eficacia del control en cada caso.

Algunos ejemplos que nos permiten interpretar las mejores op-

ciones de tratamiento de los riesgos identificados, en situaciones

relacionadas con la COVID-19 en nuestro país son:

a. Para el riesgo de no contar con suficientes equipamientos de

ventilación para casos críticos de salud, se propuso la opción de con-

tratar proveedores de servicios de mantenimiento y reparación de

equipos para reforzar los actualmente existentes, mitigando el efecto

de la no existencia de medios. En Cuba mediante el encadenamiento

productivo, también se logró mitigar este riesgo, con la reparación de

equipos fuera de servicio.

b. Para el riesgo de las medidas de protección y aislamiento por

indisciplina de la población, las medidas de control son, entre otras:

intensificar la promoción en los medios masivos de comunicación,

reforzar la aplicación de las medidas disciplinarias en los casos nece-

sarios e incrementar la exigencia de su cumplimiento por las fuerzas

del orden público y otras organizaciones sociales.

Analizando la eficacia de los controles sobre los riesgos analizados,

aun cuando se controle la pandemia, deberán continuar ante posibles

casos de rebrote, mutaciones del virus o aparición de otras enferme-

dades asociadas.

Seamos más eficientes adoptando las buenas prácticas que la

normalización nos ofrece, no solo para abordar los riesgos para la

prevención y sus opciones de tratamiento, sino también para darnos

fórmulas eficaces para resistir y mantener lo logrado.

Revisemos lo que nos plantea la resiliencia organizacional presen-

tada en la norma ISO 22316:2017 Seguridad y Resiliencia. Resiliencia

Organizacional. Principios y atributos, que nos permite visualizar



un horizonte para emprender buenas prácticas para adaptarnos en

un entorno cambiante, para lograr una estabilidad a mediano y largo

plazo, el desarrollo y crecimiento necesarios para enfrentar los desa-

fíos de los riesgos a los que se somete la humanidad y para situarse en

una mejor posición frente a los desafíos que se planteen. La mayoría

ya forman parte de nuestro presente, tales como: el cambio climáti-

co, las crisis económicas, las tendencias de consumo y las pandemias,

entre otras contingencias que pueden afectar negativamente al ser

humano y sobre todo su supervivencia.

Reflexionemos todos y pongamos a la normalización como una he-

rramienta útil e indispensable en el desarrollo de la humanidad.


DEPARTAMENTO DE INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN

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COVID-19 y la inocuidad de los alimentos

La actual pandemia de la COVID-19 plantea retos excepcionales

y sin precedentes a las Autoridades Nacionales Reguladoras

(ANR), responsables de los Sistemas Nacionales de Control de

la inocuidad de los alimentos.

En el mundo y en nuestro país, gran parte del personal de estas au-

toridades, ha trabajado desde su domicilio, por lo que en función de

la situación nacional se le ha dado prioridad a determinadas activi-

dades, como la inspección de empresas alimentarias de alto riesgo, la

certificación de las exportaciones, el control de las importaciones, la

gestión de las incidencias relacionadas con los alimentos y la investi-

gación de las demandas sobre alimentos. Asimismo, las ANR vigilan

la evolución de la pandemia de la COVID-19, ajustan sus programas

de trabajo en consecuencia y mantienen los servicios esenciales para

salvaguardar la integridad del Sistema de inocuidad de los alimentos.

En estos tiempos es imprescindible un enfoque basado en los ries-

gos, por lo que la organización de los programas de inspección de la

inocuidad de los alimentos, se debe fundamentar en una evaluación

de los riesgos que permita clasificar las empresas, para determinar la

frecuencia de las inspecciones.

A los efectos el perfil de riesgo de cada empresa alimentaria, debe

basarse en sus características y su tamaño (teniendo en cuenta el ti-

po de alimentos que manipula, elabora y distribuye); los métodos de

elaboración (alimentos cocinados, productos listos para el consumo);

la escala de su actividad y los posibles grupos de riesgo entre los con-

sumidores.

Para determinar el riesgo de cada empresa, se deben tener en cuen-

ta los antecedentes de observancia o incumplimiento de la legislación

alimentaria, la probabilidad de que apliquen su sistema de gestión

de la inocuidad de los alimentos y los registros de las auditorías rea-

lizadas. Este enfoque basado en los riesgos, permite determinar las

ARTÍ

CULO

2


empresas alimentarias de alto riesgo que se deben someter a inspec-

ción. Con ese fin, puede ser necesario suspender temporalmente las

inspecciones de las empresas de riesgo bajo a medio mientras dure la

pandemia.

Instalaciones como los mataderos, es importante inspeccionarlos

para comprobar su salubridad, lo cual debe incluir la supervisión

de los controles previos y posteriores al sacrificio; sus inspectores

de alimentos deberán utilizar un

equipo de protección individual y

ser conscientes de la importancia

de la separación física, el lavado

de las manos, la higienización y

la desinfección, sobre todo si se

modifican las condiciones de pro-

ducción, como podría ocurrir si se

incrementa la velocidad de las lí-

neas de producción.

Otro tipo de empresas donde es

necesario reforzar las inspeccio-

nes, son las que dependen en gran

medida de ingredientes impor-

tados. Con la reducción abrupta

del transporte internacional, las

cadenas de suministro de estas

empresas se han ralentizado o in-

terrumpido, lo que pudiera traer

consigo problemas de inocuidad, requiriéndose una intensificación

de los controles y las inspecciones. Por otro lado, las empresas ali-

mentarias pueden verse obligadas a buscar nuevos proveedores sin

respetar todos los pasos del programa de autorización de proveedores,

lo cual puede afectar a la integridad de los productos alimenticios.

Algunas entidades alimentarias pueden aumentar su producción

para responder al incremento de la demanda y para ello necesitarán

de la contratación de personal sin experiencia en la producción de

alimentos, esto puede conllevar a que los técnicos y especialistas en-

cargados de la inocuidad de los alimentos deban asegurar que dicho

personal esté debidamente capacitado y supervisado.

Resulta necesario que el personal reciba cursos sobre los principios

básicos de higiene y las Cinco claves de inocuidad de los alimentos,

que son:

(1) mantenga la limpieza;

(2) separe alimentos crudos y cocinados;

(3) cocine completamente;

(4) mantenga los alimentos a temperaturas seguras;

(5) use agua y materias primas seguras.

Las ANR proporcionan a modo de comunicación, que la COVID-19

es una enfermedad respiratoria que se transmite principalmente a

través del contacto de persona a persona y por el contacto directo

con las gotículas respiratorias que se producen cuando una persona

infectada tose o estornuda. No existen pruebas, hasta la fecha, de que

los virus que causan enfermedades respiratorias se transmitan por

medio de los alimentos o de su envase. Los coronavirus no pueden

multiplicarse en los alimentos, sino que necesitan un huésped huma-

no o animal para reproducirse. Es sumamente improbable que una

persona pueda contraer la COVID-19 a través de los alimentos o de

sus envases.

La aplicación de principios sólidos de saneamiento ambiental, hi-

giene personal y prácticas establecidas de higiene de los alimentos

reducirá la probabilidad de que los microorganismos nocivos amena-



cen la inocuidad del suministro de alimentos, independientemente

de que estos procedan de la agricultura intensiva y de pequeños pro-

ductores.

Cuba como miembro del Codex Alimentarius, ha adoptado e im-

plementado normas de documentos elaborados en este organismo, de

buenas prácticas internacionales para garantizar la higiene de los ali-

mentos, la manipulación de carnes y otros alimentos, así como para

controlar los virus en los alimentos.

Los textos del Codex de alcance internacional, centrados en el ries-

go y basados en el conocimiento científico, constituyen el punto de

referencia para la inocuidad de los alimentos en el comercio mundial.

Proporcionan un marco para los principios amplios de gestión de la

inocuidad de los alimentos en un entorno comercial transparente y

regulado y reducen los riesgos para quienes operan, en el cada vez

más complejo sistema de comercio internacional, al tiempo que ga-

rantizan la protección de la salud de los consumidores y mucho más

en estos tiempos tan complicados con la pandemia.

En cuanto a la transportación, almace-

namiento y conservación se deben utilizar

cestas, cajas, canastas, vasijas, cubos, o

carros limpios. Se debe evitar la contamina-

ción cruzada. Mantener la cadena de frío. No

exponer los alimentos a la zona de tempera-

tura peligrosa (entre 5 oC - 65 oC). Mantener

los alimentos perecederos (leche, pescados,

carnes y mariscos) refrigerados o congela-

dos.


Conservar los alimentos no perecederos

cubiertos en recipientes cerrados, a la tem-

peratura y humedad adecuada. Ubicar los

productos separados del suelo, de los techos

y las paredes, evitando el abarrotamiento

almacenados en sacos u otros recipientes.

Se debe respetar que el primer producto en

entrar, debe ser el primero en salir.

Los alimentos deben mantenerse en

áreas separadas de los recipientes que con-

tengan sustancias tóxicas o venenosas,

ordenados en lugares limpios y estanterías.

Las áreas de almacenamiento y los me-

dios de transportación deben estar limpios

y desinfectados, se debe evitar el acce-

so de animales domésticos y tener un buen

control de plagas


En las áreas de los centros de elaboración

de alimentos, se prohíbe la presencia de ani-

males domésticos o de objetos en desuso y

potencialmente peligrosos. El lugar de tra-

bajo debe estar organizado. Los alimentos se

deben preparar en locales destinados exclusi-

vamente a tal fin. Los materiales de limpieza

(escobas, cubos, paños, etc.), deben estar

lejos de la zona de trabajo.

Los alimentos expuestos a la venta deben

estar cubiertos y protegidos contra la conta-

minación.

Los manipuladores de alimentos se so-

meterán a exámenes médicos preempleo

y periódicos o después de contraer una en-

fermedad. Informarán a la dirección sobre

síntomas o enfermedades que padezcan que

puedan transmitirse por medio de los alimen-

tos y no tendrán acceso los manipuladores

enfermos a ninguna área de elaboración.




La norma NC-ISO 45001:2018 Sistemas de gestión de la segu-

ridad y salud en el trabajo. Requisitos con orientación para

su uso, tiene como objetivo ayudar a las organizaciones a

demostrar su compromiso con la seguridad y salud en el lugar de tra-

bajo, al mismo tiempo refuerza su imagen ante los clientes y ante los

propios trabajadores. Para lograrlo es fundamental crear un entorno

de trabajo seguro, minimizar los riesgos y proporcionar buenas con-

diciones de trabajo.

Hoy nos encontramos ante uno de esos riesgos, la enfermedad in-

fecciosa causada por el coronavirus SARS-CoV-2, que pone en riesgo

la salud de todos y que es una amenaza para las organizaciones, que

son responsables de la seguridad y salud en el trabajo (SST) de sus tra-

bajadores y de la de otras personas que puedan verse afectadas por

sus actividades. Esta responsabilidad incluye la promoción y protec-

ción de su salud física y mental.

El sistema de gestión de la seguridad y la salud en el trabajo (SGSST),

permite gestionar los riesgos a los que se enfrentan las organizaciones

en este momento de la COVID-19 y crear conciencia de la importan-

cia de contar con servicios eficaces de salud y seguridad en el trabajo.

Los protocolos de seguridad y salud en el trabajo, son lineamien-

tos institucionales que buscan cuidar a los trabajadores y gestionar

los peligros de una organización

en la búsqueda de minimizar el

impacto sobre el bienestar y la

vida.

Estos peligros no solamente

se enfocan en la salud física, si-

no también en la salud mental

dentro del ejercicio laboral, es

por eso que la organización de-

ber tener en consideración la

responsabilidad social y la cons-

tante verificación del orden en

el lugar de trabajo; la magnitud

de los riesgos (en cuanto a probabilidad y severidad) del persona que

está expuesto al virus SARS-CoV-2 en los casos de: la salud, aeropuer-

tos, gastronomía, tránsito, trabajo en las instalaciones del cliente,

entre otros.

La gestión de la seguridad y salud en el trabajo esta relacionada

con ayudar a otros, trabajar por el bienestar de los demás, estar en

contacto con otras personas, dirigir equipos, proponer ideas innova-

ARTÍ

CULO

3


doras y muchas más acciones que permiten proteger y velar por el

bienestar en el trabajo.

Frente a la pandemia de la COVID-19, muchas personas han cam-

biado a las modalidades de teletrabajo y trabajo a distancia, para

sustituir el trabajo en las oficinas por hacerlo desde la casa. Esto im-

plica que las organizaciones tienen la obligación de mantener las

medidas de seguridad y salud en el trabajo bajo estas modalidades

y para los trabajadores que por sus actividades no pueden ajustarse

a estas formas de trabajo, procurando el cuidado de cada uno de sus

trabajadores.

En estos momentos las organizaciones deberán contemplar un

conjunto de acciones en un plan de contingencia para esta situación.

1. Disposición y adaptación a cambio: Tanto las organizaciones

como los trabajadores comprenden el riesgo que significa estar en la

calle y compartir espacios púbicos, por lo que es necesario minimi-

zar el contacto con otras personas y es mejor estar en casa. Según la

actividad de cada organización, la recomendación es en la medida de

lo posible, sustituir el trabajo de la oficina por las modalidades del

teletrabajo y trabajo a distancia, así como estar pendientes de los tra-

bajadores.

2. Espacio de trabajo: Se deben hacer sugerencias claras y precisas

a los trabajadores para que puedan mantener un espacio apropia-

do de trabajo. Se tienen en cuenta recomendaciones de ergonomía,

ubicación de los medios de trabajo y un espacio de trabajo adecuado,

conversar con los miembros de la familia para acordar los horarios de

trabajo y de uso de espacios.

3. Limpieza de los elementos de trabajo: Como medida de preven-

ción y armonía, es necesario que el espacio de trabajo y su entorno

estén lo más limpios posible, incluyendo todos los elementos que

se empleen para trabajar: mouse, teclado, entre otros. Se recomien-

da además mantenerlos desinfectados para evitar cualquier posible

riesgo de trasmisión del virus.

4. Salud visual: Debido a la contingencia, se deben hacer las obser-

vaciones necesarias para que se trabaje en un entorno bien iluminado,

tener los descansos visuales recomendados y limpiar y desinfectar

correctamente los espejuelos si son necesarios para e trabajo.

5. Pausas saludables: Se debe mantener el hábito de realizar pau-

sas activas, con ejercicios prácticos que permitan una mejor salud

motriz, es decir, que exista relajación o reactivación de los músculos

principales del cuerpo. Estas recomendaciones pueden hacerse llegar

con instructivos para que los trabajadores las puedan hacer en sus

casas.

6. Riesgos eléctricos: Es necesario revisar que la toma eléctrica en

la que se han conectado los medios de trabajo este en buenas con-

diciones, también evitar conectar demasiadas fuentes a una toma,

porque se puede generar sobrecarga y un posible corte circuito.

7. Protección y prevención: Es necesario que el lavado constante

de manos con agua y jabón, sea durante 50 segundos cada vez; que se

evite el contacto de las manos con la cara, en especial ojos, nariz y bo-



ca; que si estornuda o tose se haga en pañuelos desechables y se boten

de inmediato, además recordar que si alguna persona sale a comprar

comida o por alguna otra razón estrictamente necesaria, al llegar a

casa coloque la ropa a lavar y se bañe inmediatamente.

Si bien la norma NC-ISO 45001:2018 de seguridad y salud en el tra-

bajo es mucho más amplia, estas son algunas de las medidas que se

están tomando frente a la situación de la COVID-19 y que buscan que

los trabajadores tengan las herramientas y las recomendaciones so-

bre como llevar el trabajo acabo de la mejor manera posible.

Las organizaciones que disponen de la norma NC-ISO 45001, rea-

lizan una identificación del peligro, evalúan los riesgos y toman las

medidas de control necesarias para que no se materialicen.

La identificación de peligros debe tener como propósito determi-

nar de manera proactiva, todas las fuentes, situaciones o actos (o

combinaciones de ellos), que puedan surgir de las actividades de la

organización y que sean potencialmente dañinos en términos de le-

siones o deterioro de la salud de las personas, impactos ambientales o

al patrimonio, considerando los distintos tipos de peligros en el lugar

de trabajo, incluyendo físicos, químicos, biológicos, mecánicos, psico-

fisiológicos y psicosociales.

Los procesos de identificación de peligros deben aplicarse tanto a

las actividades y situaciones rutinarias, como a las no rutinarias (por

ejemplo: periódicas, ocasionales o de emergencia).

Las organizaciones deben establecer, implementar y mantener

procesos para la eliminación de los peligros y la reducción de los ries-

gos para la SST utilizando la siguiente jerarquía de los controles:

• Eliminación: modificar un diseño para eliminar el peligro, por

ejemplo, introducir dispositivos de elevación mecánica para eliminar

el peligro de la manipulación manual.

• Sustitución: sustituir un material menos peligroso o reducir la

energía del sistema (por ejemplo: reducir la fuerza, amperaje, presión,

temperatura u otra).

• Controles de ingeniería: instalar sistemas de ventilación, pro-

tecciones de máquinas, engranajes, insonorización u otro.

• Señalización, advertencias, y/o controles administrativos:

señales de seguridad, marcado de área peligrosa, señales foto lumi-

niscentes, marcas para caminos peatonales, sirenas/luces de alarma,

alarmas, procedimientos de seguridad, inspección de equipos, con-

troles de acceso, sistemas seguros de trabajo, permisos de trabajo y

etiquetado, entre otros.

• Equipos de protección personal (EPP): gafas de seguridad, pro-

tectores auditivos, pantallas faciales, arneses y eslingas de seguridad,

respiradores y guantes.

La NC 1039:2014 Equipos de

Protección Personal de los tra-

bajadores. Requisitos generales y

clasificación, establece los requi-

sitos generales, la clasificación

y el marcado de los equipos de

protección personal (EPP) de los

trabajadores, así como la infor-

mación que deben suministrar

los proveedores de estos medios.

El EPP es el dispositivo o medio

que requiere utilizar individualmente un trabajador, para proteger-

se contra uno o varios riesgos que puedan amenazar su seguridad y

su salud, así como los componentes, partes, piezas o accesorios inter-



cambiables, que son indispensables para su funcionamiento correcto.

Comprende la ropa y calzado, que cumplen la función protectora de

los riesgos existentes durante el trabajo.

Se considera igualmente parte integrante de un EPP, cualquier

sistema de conexión o dispositivo exterior complementario, incluso

cuando este sistema de conexión, no vaya a llevarlo o a tenerlo a su

disposición permanente el trabajador durante el tiempo que dure la

exposición al riesgo o riesgos.

Los EPP protegerán de modo efectivo al trabajador, sin que a su

vez constituyan fuentes de otros riesgos para el mismo. Brindarán

la suficiente comodidad en su uso y tendrán en cuenta los requisitos

ergonómicos e higiénicos.

La selección de los EPP necesarios en cada puesto o área de traba-

jo, se realizará teniendo en cuenta los peligros concretos existentes,

determinados a partir del levantamiento de riesgos realizado por las

entidades.

Los EPP se utilizarán en aquellos casos, en que la seguridad del

trabajador no pueda lograrse por otras vías, o como recurso comple-

mentario de las medidas, cuando las mismas sólo puedan garantizar

su protección de manera parcial. Antes de acudir a los EPP se proce-

derá de modo preferente, a lograr condiciones de trabajo seguras y

saludables a través de:

• El diseño seguro del puesto o el equipo de trabajo.

• La adecuada organización del proceso de trabajo.

• Soluciones técnicas y constructivas apropiadas.

• El empleo de los Equipos de Protección Colectiva.

Sin lugar a dudas, la COVID-19 marca la necesidad de tener una

actitud preventiva en nuestro día a día. A los profesionales de la

prevención de riesgos laborales, técnicos y/o consultores, nos ha

permitido tomar las medidas necesarias para afrontar el panorama

cambiante y dinámico que nos rodea.

La seguridad y salud en el trabajo es una rama del conocimiento

profesional, que permite estar atento de las regulaciones nacionales

e internacionales, para que las personas de una organización estén

protegidas por controles para garantizar su salud en todo momento.

Asimismo, se cuida de su seguridad frente a accidentes, enfermeda-

des laborales o eventos de peligro y se llevan a cabo protocolos de

gestión frente a todo tipo de riesgo laboral.


Instituto Nacional de Investigaciones en Metrología

SERVICIOSVerificaciónAforo de tanques horizontalesMedicionesCalibraciónCursosCalibración [email protected] / http://inimet.cubaindustria.cu

CURSOSProfesores con un alto nivel de especialización

INVESTIGACIÓN


COVID-19. Importancia de gestionar los riesgos en los laboratorios clínicoscon enfoques normativos

La pandemia que vive el mundo en estos tiempos ha creado

desafíos sin precedentes para las comunidades, los trabajado-

res de la salud, los profesionales de los laboratorios clínicos y

de investigaciones, en función de controlar la propagación del SARS-

CoV-2, agente causante de la enfermedad conocida como COVID-19.

A pesar de la naturaleza de este virus y los nuevos conocimientos

con que se cuenta en los últimos meses, existen numerosas prácticas

y reglas del buen hacer, establecidas en normas internacionales que

permiten gestionar los riesgos presentes en estos laboratorios. El co-

nocimiento y empleo de buenas prácticas, asegura que exista claridad

sobre el manejo seguro de las muestras, evaluando el riesgo especifi-

co de las áreas, el personal y los sitios donde estas se analizarán, para

lograr resultados analíticos confiables y oportunos que satisfagan las

necesidades de todos los pacientes y del personal clínico responsable

de su asistencia, ya sea en términos de su evolución, tratamiento, re-

cuperación y alta médica y epidemiológica.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha referido que la

calidad de un laboratorio se puede definir mediante la exactitud, fia-

bilidad y puntualidad de los resultados analíticos que este informa.

Estos resultados deben ser lo más exactos posible; por lo que todos los

aspectos asociados con las operaciones analíticas deben ser fiables y

la comunicación de los resultados también debe ser puntual, para ser

útil en el contexto clínico o de la salud pública.

Los laboratorios clínicos deben seguir estrictas prácticas de biose-

guridad ante cualquier ensayo, considerando desde la obtención y

ARTÍ

CULO

4


manipulación de las muestras clínicas de pacientes, hasta el desecho

de las mismas; su procesamiento debe asumirse por personal com-

petente, con equipamiento adecuado y empleando procedimientos

técnicos y de seguridad aprobados.

La OMS, en el contexto de la COVID-19, ha emitido sistemática-

mente guías con orientaciones y recomendaciones a los laboratorios

y partes interesadas que participan en las pruebas de laboratorio,

asimismo cada país cuenta con

sus propias directrices nacio-

nales. Sin embargo, resulta

oportuno actualizar a la comuni-

dad científica y a la que asume la

asistencia médica, que también

existen normas internaciona-

les, reconocidas en el campo de

los laboratorios clínicos, cuya

implementación contribuye a

la obtención de resultados con-

fiables y seguros de manera

sistemática, que se asocian a su

vez con diagnósticos y resulta-

dos clínicos correctos.

Estas normas reflejan el conocimiento de aspectos tan disímiles

como las condiciones que deben poseer los laboratorios. Estas condi-

ciones en su concepto más amplio, abarcan tanto la propia realización

de los ensayos para analizar los diferentes tipos de muestras, como la

sólida gestión de riesgos aplicables en las diferentes fases del servi-

cio de ensayo que se presta en estos laboratorios, lo que conlleva la

defensa contra los errores y resultados falsos. Todo esto debe estar

acompañado de la adecuada implementación de un sistema de ges-

tión de bioriesgos.

A continuación, se enuncian algunas de las normas internaciona-

les aplicables al campo de los laboratorios clínicos:

La norma ISO 15189:2012 Laboratorios clínicos. Requisitos para

la calidad y la competencia, especifica los requisitos relativos a la

calidad y la competencia de los laboratorios clínicos. Estos requisi-

tos consideran aspectos relacionados con las solicitudes de análisis,

la preparación e identificación del paciente, la toma de muestras, el

transporte, el almacenamiento,

el procesamiento y el análisis

de las muestras clínicas, junto

con la subsiguiente interpreta-

ción, comunicación del informe

de laboratorio y asesoramiento,

además de las consideraciones

de seguridad y ética en el trabajo

del laboratorio clínico.

La norma ISO 22367:2020 La-

boratorios clínicos. Aplicación

de la gestión de riesgos a los la-

boratorios clínicos, especifica un

proceso para identificar y ges-

tionar los riesgos a los pacientes,

trabajadores del laboratorio y proveedores de servicios, que están

asociados con ensayos de laboratorios clínicos. Este proceso incluye

la identificación, estimación, evaluación, control y monitoreo de los

riesgos, a partir de un proceso sistemático, planificado y dirigido a

apoyar la integración de gestión de riesgos dentro de la rutina de la

organización, operación y gestión del laboratorio clínico.

Este documento abarca requisitos aplicables a todos los aspectos de

los ensayos y servicios de un laboratorio clínico, incluyendo aquellos

de la fase pre-analítica, analítica y pos-analítica, así como la trans-

misión segura de los resultados de los ensayos a los registros médicos

COVID-19. Importancia de gestionar los riesgos en los laboratorios clínicos con enfoques normativos


electrónicos y otros procesos de gestión, descritos en la ISO 15189.

Para todo esto se requiere revisar sistemáticamente los procesos de

trabajo, realizar la evaluación del impacto de las fallas potenciales en

los resultados de los ensayos, accionar sobre la modificación de los

procesos para reducir o eliminar los riesgos identificados y garanti-

zar la documentación de las decisiones y acciones tomadas.

La ISO 22367 ha sido recientemente actualizada y alineada con

otras normas internacionales como la ISO 14971:2019 Dispositivos

médicos. Aplicación de la gestión de riesgos a los dispositivos mé-

dicos, proporcionando una guía efectiva para este sector. Adopta

iguales conceptos, principios y marco de trabajo para gestionar los

riesgos, lo que permite que los laboratorios clínicos confíen en el uso

de los dispositivos médicos in vitro, para llevar a cabo sus objetivos,

de manera que la gestión de los riesgos viene a ser una responsabili-

dad compartida entre todas las partes involucradas.

La gestión de riesgos en los laboratorios clínicos, a su vez tiene

mucha relación con la gestión de la seguridad, en lo que se refie-

re a prácticas de trabajo seguras en los laboratorios clínicos. La ISO

15190:2020 Laboratorios clínicos. Requisitos para la seguridad, espe-

cífica requisitos para establecer un ambiente de trabajo seguro en un

laboratorio clínico. Esta norma prevé el análisis a partir de requisitos

establecidos para la identificación de peligros y evaluación de riesgos,

abarcando los peligros químicos (químicos tóxicos, materiales corro-

sivos, desechos químicos), los peligros físicos (gases comprimidos,

calidad del aire, riesgos eléctricos, radiaciones, temperatura, hume-

dad), las prácticas de trabajo seguras para el personal, los equipos de

protección del personal y la disposición de desechos, entre otros.

La ISO/TS 20658:2017 Laboratorios clínicos. Requisitos para la to-

ma, transporte, recepción y manipulación de muestras, especifica los

requisitos y recomendaciones de buenas prácticas para la toma, trans-

porte, recepción y manipulación de muestras destinadas a análisis en

laboratorios clínicos, es decir, cubre todas las actividades relacionadas

fundamentalmente con los procesos pre-analíticos y que también in-

volucran la preparación e identificación de los pacientes. Sobre estos

requisitos cada laboratorio determinará sus niveles de acercamiento

a las buenas prácticas descritas y establecerá prioridades basadas en

las necesidades de los pacientes, recursos disponibles, así como en lo

dispuesto en regulaciones locales, regionales y nacionales.

Finalmente mencionamos la que constituye la primera norma in-

ternacional para un sistema de gestión de bioriesgos, la ISO 35001:2019

Gestión de bioriesgos para laboratorios y otras organizaciones rela-

cionadas, que centra su atención en la gestión de riesgos biológicos

y ayuda a que las organizaciones sigan mejorando el desempeño y

cumplan con los requisitos legales, así como con su política de gestión

de riesgos biológicos. Esta norma define un proceso para identificar,

evaluar, controlar y monitorear riesgos asociados con materiales bio-

lógicos peligrosos y complementa otras normas internacionales para

laboratorios. El sistema de gestión de bioriesgos se basa en el acer-



camiento al sistema de gestión de la organización y se soporta en el

concepto de la mejora continua a través del ciclo iterativo de plani-

ficar, hacer, verificar y actuar para mejorar los procesos y lograr sus

metas.

Es bueno destacar que, si bien existe un conjunto de normas regio-

nales o nacionales que ayudan a las organizaciones a administrar sus

riesgos y cumplir con los requisitos reglamentarios, la ISO 35001 es

la primera en armonizarlos, ofreciendo el buen hacer y las mejores

prácticas reconocidas a escala internacional para este tema, con lo

cual se puede proteger la infraestructura global de salud en medio de

un mundo que requiere cada vez de mayor integración.

Se puede concluir, que para obtener resultados confiables en los

laboratorios clínicos, se deben gestionar diferentes aspectos que van

más allá del propio análisis de muestras en un momento determinado.

Además de una adecuada toma de muestras y condiciones de trans-

portación, debe existir un aseguramiento correcto de las condiciones

materiales y humanas en el laboratorio. Deben también atenderse

las garantías en la calidad de las pruebas y ensayos que se realizan,

empleando controles sistemáticos de calidad tanto internos como ex-

ternos, el desarrollo y mantenimiento de competencias del personal

que ejecuta y participa en el aseguramiento de los ensayos, gestio-

nando de manera integral todos los riesgos que puedan presentarse.



COVID-19, el incidente perturbador según la ISO 22301

La ISO 22301 Sistemas de gestión de continuidad del negocio.

Requisitos, es una normativa creada por el ISO/TC 292/GT 2

Continuidad y resiliencia organizacional, que forma parte de

la familia de normas de continuidad del negocio, al igual que la ISO

22317 Directrices para la evaluación del impacto en el negocio e ISO

22318 Directrices para la continuidad de la cadena de suministros y

otras en elaboración.

Esta norma especifica los requisitos para planificar, establecer, im-

plementar, operar, hacer seguimiento, revisar, mantener y mejorar

continuamente un sistema de gestión documentado para: protegerse,

reducir la probabilidad de que ocurra, prepararse, responder y recu-

perarse de incidentes perturbadores cuando surjan. Aplica a todas

las organizaciones independientemente de su tamaño y naturaleza.

La norma sigue la estructura de alto nivel de la ISO, en tanto se es-

tablecerá durante su implementación:

• Comprensión del contexto de la organización

• Comprensión de las necesidades de las partes interesadas

• Identificación de riesgos y oportunidades

• Enfatizar en el liderazgo

• Enlazar a la dirección estratégica de la organización

• Integrarse a los procesos empresariales

• Planificar para tener en cuenta riesgos y oportunidades, estable-

ciendo políticas y objetivos

• Seguir el ciclo Planificar, Hacer, Verificar, Actuar

La Continuidad del negocio, es la capacidad de una organización

para continuar entregando sus productos o prestando sus servi-

cios a niveles aceptables, luego de un incidente perturbador (ISO

22300:2018).

Con la aplicación de controles y medidas para gestionar los riesgos

generales, a los que esté expuesta la continuidad del negocio de una

organización, se puede evaluar el impacto, con el objetivo de mitigar

los efectos que la puedan afectar de manera directa.

ARTÍ

CULO

5


La gestión de continuidad del negocio, es el proceso de implementar

y mantener la continuidad del negocio y preparar a la organización

para enfrentar incidentes perturbadores, que de otra manera podrían

impedirle cumplir con sus obligaciones.

Un sistema de gestión de la continuidad del negocio, se caracteriza

por la identificación proactiva de los efectos de la interrupción, ya

que identifica aquellos procesos y productos/servicios que son cru-

ciales para la existencia de la organización y establece las respuestas

que serán necesarias, en caso de que un incidente de gran alcance se

produzca.

Permite a las organizaciones controlar, evaluar y mejorar de mane-

ra estable su continuidad de negocio y además:

• Tener la capacidad de resistir los efectos de un incidente (resilen-

cia), así como prevenir o evitar los posibles escenarios originados por

una situación de crisis.

• Gestionar la interrupción de sus actividades minimizando las

consecuencias económicas, de imagen o de responsabilidad civil de-

rivadas de la misma.

• Adquirir una mayor flexibilidad ante la interrupción de sus acti-

vidades.

• Reducir los costes asociados a la interrupción.

• Evitar penalizaciones por incumplimiento de contratos como

proveedor de productos o servicios.

• Disponer de una metodología estructurada para reanudar sus ac-

tividades después de una interrupción.

• Aumentar su prestigio ante clientes y partes interesadas.

• Posibilidad de ventajas económicas a la hora de contratar seguros

empresariales.



El evento o incidente perturbador, puede ser repentino y como

ejemplos podemos citar: terremoto, huracán, inundación, problemas

de TI, ciberataques, terrorismo, calidad del producto y pueden ser

graduales como: nuevas leyes y regulaciones, enfermedades huma-

nas y pandemias.

La PANDEMIA que azota al planeta, provocada por el Coronavi-

rus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad COVID-19, ha afectado

sensiblemente la estabilidad de las organizaciones, constituyendo un

incidente perturbador gradual, ante el cual no todos los países y or-

ganizaciones han podido gestionar de manera eficaz estrategias que

minimicen los efectos indeseados. Estas estrategias deberán conside-

rar los cambios, sus consecuencias potenciales, disponiendo recursos

y asignando o reasignando responsabilidades y autoridades.

El país ha establecido estrategias a partir de la afectación por la CO-

VID-19, medidas que buscan minimizar el impacto de esta enfermedad

desde el punto de vista social, humano y productivo, que impactan en

la sociedad y en la economía, orientando a las organizaciones esta-

blecer las propias. Aun cuando Cuba no ha adoptado ninguna norma

de esta familia de continuidad y resilencia organizacional, es usada

como un marco de gestión para avanzar sobre estos temas.

Se afirma que aquellas organizaciones que abracen la implementa-

ción de sistemas de gestión para garantizar la seguridad del personal,

la infraestructura, la producción y los servicios, obtendrán los be-

neficios que reporta la ISO 22301. Imprescindible es contar para su

éxito, con una actuación oportuna y con los análisis de directivos y

decisorios ante riesgos internos o externos, que impacten en el desa-

rrollo de sus actividades y como en esta ocasión, involucrados todos

en una experiencia inminente.


27 / Normalización

INFO

RMAC

IÓN

Número Especial - 2020 ir al SUMARIO

Información a disposición de la comunidad

La Oficina Nacional de Normalización (ONN) durante

el período de crisis, ha puesto a disposición libre de cos-

to, más de 40 documentos normativos asociados, entre

otros temas: gestión de riesgo, salud y seguridad del tra-

bajo, inocuidad de los alimentos y buenas prácticas de

higiene para diferentes actividades, que pueden ser usa-

dos también para dar respuesta a los requerimientos de

los protocolos establecidos por el Gobierno.

Pueden consultarlas de manera gratuita en las páginas

web: www.ncnorma.cu y www.cgdc.cu las siguientes

Normas Cubanas:

1. NC-ISO 10993-1:2013. Evaluación biológica de equi-

pos médicos. Parte 1: Evaluación y ensayos mediante

un proceso de gestión del riesgo.

2. NC-ISO TR 15499:2016. Evaluación biológica de equi-

pos médicos. Guía para la realización de la evaluación

biológica dentro de un proceso de gestión de riesgos.

3. NC-ISO 31000:2018. Gestión del riesgo. Directrices.

4. NC-ISO/TR 31004:2016. Gestión del riesgo. Orien-

tación para la implementación de la Norma NC-ISO

31000.

5. NC-ISO/IEC 31010:2015. Gestión del riesgo. Técnicas

de apreciación del riesgo

6. NC 1134:2016. Gestión del riesgo biológico en los la-

boratorios. (En-CWA 15793:2011, Mod.)

7. NC 1135:2016. Gestión del riesgo biológico en el labo-

ratorio. Guía para la aplicación de la NC 1134: 2016

(EN-CWA 16393:2012, Mod.)

8. NC-ISO 14971:2012. Equipos médicos. Aplicación de

la gestión de riesgos a los equipos médicos.

9. NC 650:2015. Principios y directrices para la aplica-

ción de la evaluación de los riesgos microbiológicos.

10. NC 651:2008. Principios y directrices para la aplica-

ción de la gestión de riesgos microbiológicos.

11. NC-ISO 10555-1:2016. Catéteres intravasculares es-

tériles de un solo uso. Parte 1: Requisitos generales.

12. NC-ISO 9187-1:2019. Equipo de inyección para uso

médico. Parte 1: Ampolletas para inyectables.

13. NC-ISO 9187-2:2019. Equipo de inyección para uso

médico. Parte 2: Ampolletas de un punto de corte

(OPC).

INFORMACIÓN28 / Normalización Número Especial - 2020 ir al SUMARIO

14. NC-EN 556-1:2007. Esterilización de equipos y

dispositivos médicos. Requisitos de los equipos y dis-

positivos médicos para ser designados “estéril”. Parte

1: Requisitos de los equipos y dispositivos médicos es-

terilizados en su estado final.

15. NC-EN 556-2:2007. Esterilización de equipos y

dispositivos médicos. Requisitos de los equipos y dis-

positivos médicos para ser designados “estéril”. Parte

2: Requisitos de los equipos y dispositivos médicos

procesados asépticamente.

16. NC 573:2007. Seguridad biológica. Principios y vo-

cabulario.

17. NC 1201-1:2017. Seguridad biológica. Gabinetes de

seguridad biológica. Parte 1: Principios generales.

18. NC 963:2013. Colectores de sangre arterial. Requisi-

tos.

19. NC 20-13:1985. Materiales de curación. Piezas, bas-

tones y rollos de gasa. Especificaciones de calidad.

20. NC 553:2007. Limpiadores, detergentes y desinfec-

tantes. Requisitos sanitarios generales.

21. NC 571:2018. Distribución, exposición y venta de

los alimentos. Requisitos sanitarios generales.

22. NC 585:2017. Contaminantes microbiológicos en

alimentos. Requisitos sanitarios.

23. NC 586:2008. Cereales y granos. Requisitos sanita-

rios generales.

24. NC 587:2019. Carne y productos cárnicos. Requisi-

tos sanitarios generales.

25. NC 633:2019. Productos de repostería, confitería y

panificación. Requisitos sanitarios generales.

26. NC 635:2019. Bebidas. Requisitos sanitarios genera-

les.

27. NC 827:2017. Agua potable. Requisitos sanitarios.

28. NC 932:2012. Productos lácteos. Requisitos sanita-

rios generales.

29. NC 983:2013. Hortalizas de hoja verde frescas. Re-

quisitos sanitarios.

30. NC 1001:2019. Alimentos para diabéticos. Requisi-

tos sanitarios y nutricionales generales.

31. NC 492:2014. Almacenamiento de alimentos. Re-

quisitos sanitarios generales.

32. NC 143:2010. Código de prácticas. Principios gene-

rales de higiene de los alimentos.

33. NC-ISO 13528:2017 Métodos estadísticos utilizados

en los ensayos de aptitud por comparación entre

laboratorios (ISO 13528:2015, IDT).

34. Guía para la limpieza y desinfección de manos y su-

perficies.

35. Especificación UNE 0064-1 Mascarillas higiénicas

no reutilizables. Requisitos de materiales, diseño,

confección, marcado y uso. Parte 1: Para uso en adul-

tos.

36. ISO/TS 22330 Security and resilience. Business con-

tinuity management systems. Guidelines for people

aspects of business continuity.

37. ISO 22301 Security and resilience. Business continui-

ty management systems. Guidance on the use of ISO

22301.

38. NC 488:2009 Limpieza y desinfección en la cadena

alimentaria. Procedimientos generales.

39. NC 1253:2018 Productos químicos inorgánicos. Le-

jía de cloro. Especificaciones.

40. NC-ISO 23640:2018 Dispositivos médicos para diag-

nóstico in vitro. Evaluación de la estabilidad de los

reactivos para diagnóstico in vitro (ISO 23640:2011,

IDT).

41. NC ISO-IEC 17043:2011 evaluación de la conformi-

dad. Requisitos generales para los ensayos de aptitud

[ISO/IEC 17043:2010 (Traducción certificada), IDT]

29 / Normalización

INFO

RMAC

IÓN

Número Especial - 2020 ir al SUMARIO

Aplicación del marco regulatorio en el proceso de atención para enfrentar la COVID-19

La Oficina Nacional de Normalización (NC), ór-

gano rector de la Normalización, Metrología

y Calidad de la República de Cuba, ha puesto a

disposición de forma libre y gratuita en las páginas web

de NC y el Centro de Gestión y Desarrollo de la Calidad

(CGDC), las normas que abordan la gestión de los riesgos

y cómo gestionarlos con seguridad, con buenas prácticas

reconocidas internacionalmente, que se relacionan con:

dispositivos y equipos médicos, limpieza y desinfección;

INFORMACIÓN30 / Normalización Número Especial - 2020 ir al SUMARIO

las medidas higiénico-sanitarias que se deben tener en

cuenta en: los centros laborales, con las que trabaja la

autoridad sanitaria y los inspectores de salud; para ga-

rantizar que se cumplan los requisitos de manipulación,

elaboración y almacenamiento de alimentos para evitar

afectación a las personas, así como a los establecimientos

que elaboran alimentos y a los que distribuyen; al comer-

cio en general; a los lugares de vigilancia epidemiológica

y aislamiento por la epidemia; de manera que contribuya

a la salud de las personas y no generen focos de infección

o enfermedades transmisibles con la COVID-19.

Nuestro equipo de trabajo se ha enfrascado en la pu-

blicación de documentos técnicos, informaciones y la

transmisión de conferencias virtuales, con un lenguaje

accesible para toda la población, en temas relacionados

con la percepción del riesgo, la inocuidad alimentaria, así

como la seguridad y salud en el trabajo sobre prácticas

seguras en los puestos laborales.

Es importante que se puedan leer, estudiar y acceder a

las normas, para conocer, entender, familiarizarnos e im-

plementarlas de una manera rápida, porque seguramente

van a contribuir al esfuerzo de la autoridad sanitaria co-

mo gestor mayor del riesgo en el país.

Lo que nos toca es contribuir a elevar en la sociedad

la percepción del riesgo y conocimientos sobre buenas

prácticas, para que sea nuestro aporte a la reducción de

los riesgos ante la COVID-19 y todos los efectos de esta

epidemia que asola al mundo y a nuestro país.

requisitos higiénico-sanitarios que deben cumplir los

alimentos (lácteos, cárnicos, dulcería y repostería) entre

otras.

Muchas personas están involucradas en la cadena de

distribución, en los esfuerzos por acercar los productos a

los adultos mayores y personas vulnerables para que no

salgan de casa, convirtiendo restaurantes y cafeterías en

lugares para elaborar alimentos para llevar y esto exige

buenas prácticas para evitar transmisión de enfermeda-

des a través de esta cadena.

Dentro del alcance de las actividades regulatorias de

NC, están los servicios de verificación y calibración de

equipos de medición al sector de la salud, fundamental-

mente a laboratorios, que requieren mediciones precisas

y objetivas; a la industria farmacéutica, a la alimentaria

y al comercio.

Una tarea importante es la inspección estatal, para

vigilar la base normativa y su aplicación, en particular

DEPE

NDEN

CIAS

DE LA

ONN Número Especial - 2020

OFICINA NACIONAL DE NORMALIZACIÓN (ONN, SEDE CENTRAL) CITMADirectora: Dra.C. Hortensia Nancy Fernández Rodríguez Secretario: Julio C. HurtadoDirección: Calle E # 261 entre 11 y 13, Vedado, CP 10400.Teléfonos: 5-2855622(D) 7830- 0879 7830-0891 Pizarra: 7830-0825 Ext:111Correos:[email protected] [email protected]

CENTRO DE GESTIÓN Y DESARROLLO DE LA CALIDAD (CGDC) Directora: MSc. Nuria Dávila Fernández.Dirección: Reina No. 412 e/ Gervasio y Escobar, Centro Habana, La Habana.Teléfonos: 5-27993387862-47017861-2561Correos: [email protected]

INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES EN METROLOGÍA (INIMET) Director: MSc. Nelson Julian Villalobos Hevia.Dirección: Consulado No. 206 e/ Animas y Trocadero. Centro Habana.Teléfonos: 5-27965887862-0536Correos: [email protected]@inimet.cu

DIRECCIÓN DE NORMALIZACIÓNDirector: René Fernandez Infante.Teléfonos:5 279 7202(D) 78300732 Pizarra: 7830-0825 Ext:103Correos:[email protected]

DIRECCIÓN DE METROLOGÍADirector: Fernando Arruza RodríguezTeléfonos: 5 2797204(D) 78300796Pizarra: 7830-0825 Ext:102Correos: [email protected]

DIRECCIÓN DE CERTIFICACIÓNDirectora: Miriam Estrada TorresTeléfonos: 52797201(D) 78300588Pizarra: 7830-0825 Ext:106Correos: [email protected]

DIRECCIÓN DE ECONOMÍADirector economico: Carlos Isaac Pino.Dirección: Calle: 9 No. 453 Apto 102 e/ E y F Vedado.Teléfonos: 5-2797203(D) 7835 6282Correos: [email protected]

OTN PINAR DEL RÍODirector: Ing. Pedro Serrano Urra.Dirección: Ave. Comandante Pinares No. 12 e/ Martí y Céspedes. Pinar del Río.Teléfonos: 5-2851007(D)(48) 77-4759Recepc.75-3588Correos: [email protected]

OTN ARTEMISA - MAYABEQUEDirector PSR: Lic. Alberto Crespo Elejalde.Dirección: Calle 12 e/ 3. y 5.Playa no. 314.Teléfonos: 5- 2797737(D) 7212-55847202-14397203-8094Correos: [email protected]@otnph.cu

UTN ISLA DE LA JUVENTUDDirectora: Lic.Jeanys Betancourt VeraDirección: Calle 38 s/n e/ 21 y 40, Rep. Nazareno, Nueva Gerona.Teléfonos: 5-2110790(D) (46) 32-1730Recepc. 32-3157Correos: [email protected]

DEPE

NDEN

CIAS

DE LA

ONN Número Especial - 2020

OTN LA HABANADirectora: Lic. Laydis Sánchez CamposDirección: Calle 4 No. 307e/ 13 y 15, Vedado.Teléfonos: 5- 2630349 (D) 7833-7670Pizarra. 7830-9470Correos: [email protected]

OTN MATANZASDirectora: Ing. Maria Elena Vázquez Erice.Dirección: Calle Río No. 28210 e/ Jove-llanos y Ayuntamiento, Matanzas.Teléfonos: 5- 2868425(D)(45)- 24-2840Pizarra 24-2050Correos: [email protected] [email protected]

OTN VILLA CLARADirectora: MSc. Sonia T. Hernández Méndez.Dirección: Carretera Central y Circunva-lación, Banda Placetas, Santa Clara.Teléfonos: 5-2795450(D) (42) 20-101620-4314Pizarra: 20-6665Correos: [email protected]

UTN CIENFUEGOSDirectora: Lic. Ana del Rosario Varela Haro.Dirección: Calle 41 No. 5604 e/ 56 y 58 Cienfuegos.Teléfonos: 5- 2850504(D)(43) 51-1085Recepc. 51-3424Correos: [email protected]

UTN SANCTI SPIRITUSDirector: Lic. Humberto Perera Díaz.Dirección: Amp. Antolínb García s/n e/ F.E. Roche y A. Cast. Sancti Spiritus.Teléfonos: (D) (41) 32-4218 Pizarra: 32-4846Correos: [email protected]

OTN CAMAGUEYDirectora: MSc. Lídice Reyes Ojeda.Dirección: Carretera Circunvalación Norte y 6 Vías. Camaguey.Teléfonos: 5-2793453 (D) (32) 25-4021Pizarra: 26-2733Correos: [email protected]@otn.camaguey.cu

UTN CIEGO DE ÁVILADirectora: Lic. Nancy Reyes Madrigal.Dirección: Pasaje Hicacos No. 252 esq. A Soto. Ciego de Ávila.Teléfonos:5-2122828(D) (33) 20-200020-2040 Recepc. 22-4698Correos:[email protected]

OTN HOLGUÍNDirector: Ing. José Andrés Zaldívar Chacón.Dirección: Carretera Valle Mayabe (Fren-te al Politécnico de la Salud) Holguín.Teléfonos: 5- 2857697(D) (24) 48-0321Pizarra: 48-1202 Correos: [email protected]

UTN LAS TUNASDirector: Ing. José Luis Silva VarelaDirección: Ramón Díaz No. 9 e/ Aurora y A. Santamaría. Las Tunas.Teléfonos: (D) (31)-37-1155Correos: [email protected]

NOTA: LAS UTN SON UNIDADES SUBORDINADAS A LAS OTN Y TODAS EN GENERAL SON DEPEN-DENCIAS DE LA SEDE CENTRAL

UTN GRANMADirector: Ing. Enílver Arévalo Espinosa.Dirección: José A. Saco No. 56 e/ Céspe-des y General García, Granma.Teléfonos: (D) (23) 42-3370 Recepc. 42-1924Correos: [email protected]

OTN STGO. DE CUBADirectora: Ing. Eloina Rodríguez Castillo.Dirección: Vitiry s/n e/ Taino y Padre las Casas, Rep. Vista Alegre. Stgo de Cuba.Teléfonos: 5-2850299(D) (22) 64-2314Pizarra: 64-2008Correos: [email protected]

UTN GUANTÁNAMODirectora: Ing. Niurka Kindelán Lescaille.Dirección: Moncada s/n e/ 1. y 2. norte Guantánamo.Teléfonos: 5-2128630(D) (21) 32-7569Pizarra: 32-7636Correos:

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Número Especial - 2020

Si desea publicar en la revista Normalización, órgano ofi-cial de la Oficina Nacional de Normalización, sobre temas vinculados a la actividad de normalización, calidad y me-trología, se aceptarán artículos que comprendan trabajos de desarrollo de investigación científica, de reflexión so-bre temáticas originales asociadas a la investigación, de revisión que sistematizan resultados de investigación, o trabajos cortos que presenten avances o resultados pre-liminares de investigación y aplicación, así como reportes o estudios de caso; reflexiones no derivadas de investi-gación; entrevistas; réplicas; reseñas de autores y libros relacionados con la normalización, la metrología y la cali-dad.

La revista está inscrita en el Registro de Publicaciones Seriadas de la República de Cuba.

El ISSN de la revista electrónica Normalización es:

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