marco palacios - parábola liberalismo (parte 2)

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  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    1/173

    EL DES)ENCUENTRO DE LOS

    COLOMBIANOS CON

    EL

    LIBERALISMO

     

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    2/173

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

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    La carrera liberal en el

    mundo

    hispánico

    n la

    superficie

    de

    poco más

    de

    un metro cuadrado del lienzo

    de José María Espinosa, La batalla de

    Boyacá

    el visitante del

    Museo Quinta de Bolívar de Bogotá podrá hallar una repre-

    sentación del suceso

    en

    el nuevo lenguaje de la nacionalidad:

    prodigio de la libertad, partera del heroísmo

    moderno

    2

    • n el

    primer plano y a la izquierda de la pintura aparece una casa pa-

    jiza y a la derecha

    una

    de teja de barro. ntre las dos yacen los

    cadáveres de

    un

    patriota y

    un

    realista.

    n

    el centro, enmarcados

    por

    los cerros

    de

    la

    cordillera y bajo

    un

    cielo de verano, entre-

    chocan fragorosamente los dos ejércitos. Las columnas de

    humo

    de las armas, empujadas por los vientos de agosto, ascienden obli-

    cuamente

    hasta fundirse en el

    plomo blanquecino de

    las nubes

    ligeras. Salvo por unos lanceros, llaneros de torsos desnudos , las

    formaciones armadas se distinguen por sus

    pendones

    y bande-

    ras. Aunque la batalla está por resolverse, el espectador presien-

    te la victoria de los patriotas

    que

    ocupan unos dos tercios del

    campo y empujan el enemigo hacia las cañadas.

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

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    MARCO PALACIOS

    14

     

    quinta estrofa del

    Himno

    Nacional escrita por Rafael

    Núñez

    más de medio siglo después de las guerras de Independencia:

    De Boyad en los campos

    el genio

    de

    la Gloria

    con cada espiga

    un

    héroe

    invicto coronó.

    Soldados sin coraza

    ganaron la victoria;

    su varonil aliento

    de

    escudo les sirvió.

    En este ensayo acotamos los contextos sociales y las concep-

    ciones fonnales y aludimos los códigos expresivos en que se pro-

    cesan los cambios que auspician o restringen la legitimidad del

    poder

    político y una legalidad liberal congruente con ésta.

    Precisar

    cómo

    y cuándo surge

    el

    ideal de la modernidad libe-

    ral en Hispanoamérica es

    un

    asunto que ha quedado envuelto

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

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    EL DES)ENCUENTRO DE LOS

    COLOM BI NOS CON EL

    L I B E R L I S M O

    147

    En

    ambos lados del Atlélntico,

    aunque

    de

    modo más intenso

    en la Nueva España, Cuba Centroamérica que en Suramé-

    rica, la Constitución de Cádiz (1812) fue considerada como uno

    de los aportes verdaderamente creativos de la nueva era política.

    Escribiendo sobre ésta para el New Daily Tribune

    de

    Londres,

    Marx seI'íaló, sin embargo, aspectos que serían tópico interpre-

    tativo del liberalismo espaílol e hispanoamericano: su debilidad

    congénita. La verdad es escribió

    Marx

    que la Constitución

    es

    una reproducción de los antiguos fueros, pero leídos a la luz

    de

    la Revolución Francesa

    y

    adaptados a las necesidades de

    la

    sociedad moderna .. Pueden sei'íalarse en la Constitución de

    1812

    inconfundibles síntomas

    de

    un compromiso

    concluido

    en-

    tre las ideas liberales del siglo

    XVIII

    las oscuras tradiciones

    teocráticas. Lejos de ser una copia servil de la Constitución fran-

    cesa

    de

    1791, fue un producto genuino original, surgido

    de

    la

    vida intelectual española, regenerador de las antiguas tradicio-

    nes populares, introductor

    de

    las medidas reformistas enérgica-

    mente pedidas por los más celebres autores y estadistas del siglo

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

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    M RCO P L CIOS

    8

    intentos monarquistas,

    como

    los

    de

    Agustín

    de

    Hmbide

    en

    l\lé-

    xico o Juan José Flores en

    Ecuador

    la fórmula

    republicana

    tampoco trajo estabilidad.

    El siglo

    XIX

    hispanoamericano registra

    una

    lucha sin cuartel

    entre las fuerzas de ]a

    modernidad

    y las

    de

    la antimodernidad.

    Los historiadores Bushnell y Macaulay sostienen que hacia

    1880 el orden liberal se había establecido más o menos en Amé-

    rica Latjna, de suerte que sus creadores tenían buenas razones

    para estar satisfechos

    de

    su obra,,7. Ésta sería una conclusión

    optimista desde

    un punto

    de

    llegada.

    En

    el

    punto

    de

    partida

    había pocas razones para el optimismo. Según }ol1n Lynch

    aunque la Independencia fue una gran

    tormenta

    que destruyó

    los lazos que

    ataban

    Hispanoamérica con España y

    el

    armazón

    del gobierno colonial, dejó intactos los cimientos de la sociedad

    1 .

    1 8

    ca

    011la .

    Tales cimientos habían empezado a agrietarse con la Ilustra-

    ción

    y

    sus

    demandas

    de reformar los principios corporativos de

    legalidad, y su posh¡]ado

    de un

    ethos individualista, fundamen-

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

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    EL D ES ENCU ENT RO DE

    LOS

    COLOMBIANOS CON EL LIBERALISMO

    149

    invención

    de

    sí mismos

    como

    sujetos del

    poder

    soberano. Se-

    mejante hallazgo tardó algo así como medio siglo en ser plena-

    mente asimilado. Expuesto en el lenguaje del liberalismo y el

    constitucionalismo, expresó los ideales de una sociedad seilorial

    aunque

    aburguesada,

    cuyas elites han estado abocadas desde

    entonces a resolver un viejo problema: la igualdad básica del

    pueblo de

    ciudadanos.

    Hacia el gobierno moderno

    La ciencia de gobierno de los Austria se basó

    en

    la casuística,

    peculiar método de procurar justicia para mantener los

    pueblos

    en paz acentuemos el plural: pueblos o repúblicas), provenien-

    te del derecho medieval castellano y que busca una solución

    justa para

    cada

    situación

    concreta,

    o sea, la voluntad firme y

    constante

    de

    dar

    a cada uno lo suyo , dentro de

    un

    orden que

    no presupone injusta la desigualdad estamentat. Esto es posi-

    ble porque el

    derecho

    positivo asume la noción medular

    de

    jus-

    ticia distributiva que, al parecer, está firmemente interiorizada

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    8/173

    M RCO P L CIOS

    que delimitaron una esfera propia del rey, fundamento de

    la

    ar

    monía social .

    A diferencia de la noción de buen gobierno que guió las pri

    meras generaciones de conquistadores y encomenderos, la con

    cepción moderna, que a partir del siglo XVII adquirió un sello

    más inglés y francés, puso el énfasis en la central ización del po

    der:

    el fortalecimiento efectivo de las potestades regias contra

    los señores feudales, las ciudades-estados libres, y la Iglesia de

    Roma; la creciente racionalización jurídico-administrativa, ) el

    ejercicio de

    la

    soberanía estalal en cabeza del rey

    se

    apoyaría en

    una base económica mercantilista . Estos elementos cardinales

    de la modernidad política germinaron

    en el

    siglo XVI y madura

    ron plenamente en el XVIII.

    n

    Los

    grandes conflictos socioeconómicos de nuestra histo-

    ria,

    Tndalecio Liévano Aguirre, la

    voz

    más poderosa de

    la

    histo

    riografía colombiana en las décadas de 1940 é 1960, insistió en

    que la explicación de la dicotomía Austria (o Jlabsburgo como

    él

    prefirió llamarla)

    y

    Borbona no

    se

    agotaba estableciendo un

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    EL DES)ENCUENTRO

    DE

    LOS

    C O L O M B I N O S

    C O N

    EL LIB E R L ISM O

    5

     

    La

    inmensidad

    geográfica del Imperio Espaiiol, de

    un

    lado,

    y la modesta escala de la riqueza mineral del

    Nuevo

    Reino de

    Granada

    del otro, enmaraí'iaban

    la

    cadena de institucionalidad

    de legada. Los delegatarios locales (desde los oidores de las au

    diencias y los presidentes, luego los virreyes, y de ahí hacia aba

    jo) arbitran y aprovechan los poderes discrecionales legales

    obedezco pero no

    cumplo)

    para

    suplantar

    la autoridad regia.

    Podemos rastrear esta impostura en la crónica de la Conquis-

    ta y descubrimiento

    del

    Nuevo Reino de Granada ... de Juan Ro

    dríguez Freile,

    (1636-1638).

    Más que

    una

    crónica oficial

    como

    las de Juan de Castellanos

    (1589)

    o Fray Pedro Simón

    (1526), El

    Camero de Bogotá, como se le conoció cuando el manuscrito,

    que anduvo

    rodando

    un poco más de dos siglos, fue

    publicado

    por

    primera vez

    en

    1859

    por

    Felipe Pérez, se leyó como una na

    rrativa

    ambigua

    e inconexa

    de

    la trayectoria de los mandamases

    espaíloles: conquistadores, encomenderos funcionarios. La crí

    tica ac tual le encuentra más atributos'4. Elaborando una lectura

    política sobre éstos últimos, podemos proponer que

    El Camero

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

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    MARCO

    PALACIOS

    15

    2

    llar Eldorado prodigioso.

    l

    Camero

    narra

    cómo

    esas oligar

    quías primigenias se resguardaron en las ciudades)' desde allí

    establecieron métodos y formas de

    sustraerse legalmente

    al

    go

    bierno del rey;

    cómo

    tergiversaron los principios del derecho y

    cómo causaron los primeros cien años de calamidad al reino .

    Otros historiadores emplean los

    nombres

    de las dos dinastías

    que dominaron el Estado español en América para designar Es

    tados que, a causa de su baja centralización, deben ser pasivos

    frente a la sociedad aunque preservan la estabilidad del

    orden

    político tradicional. Pero este orden es tradicional precisamente

    porque reconoce la desigualdad intrínseca entre estamentos,

    en

    contraposición a los Estados modernos que se establecen sobre

    la centralización política, que impl ica cierta hOlllogenización

    de los sujetos del Estado, así el proceso desestabilice l

    orden

    político y sus campos simbólicos y expresivos y a la postre,

    no

    se

    obtengan los frutos prometidos de la modernidad,6.

    Las cenLralizaciones adoptaron en Inglaterra y Francia dife

    rentes formas institucionales. Segün l camino seguido, serían

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    11/173

    EL

    DES)ENCUENTRO DE LOS

    COLOM BI NOS

    CON

    EL LIB E R L ISM O

    153

    Una

    de

    las interpretaciones más conocidas de esta faceta del

    alumbram iento de la modernidad

    se

    la

    debemos

    a Max Weber.

    Consideremos

    por un

    momento este par

    de

    definiciones:

    En

    todas partes el desarrollo del Estado

    moderno

    comienza cuando

    el príncipe inicia la expropiación

    de

    los titulares

    privados

    de po

    der administrativo que junto a

    él

    existen: los propietarios, en

    nombre propio,

    de

    medios de administración

    y

    de guerra, de re

    cursos financieros y de bienes

    de

    cualquier género política

    mente utilizable. Este proceso ofrece una analogía total

    con

    el

    desarrollo

    de

    la empresa capitalista

    mediante

    la paulatina ex

    propiación

    de

    todos los propietarios independientes '7. El Esta

    do [moderno] es aquella comunidad humana que, dentro de un

    determinado

    territorio, reclama con éxito para sí

    el

    monopolio

    de

    la violencia física legítima,,'8.

    No

    todos los estados modernos pasaron

    por

    este troquel, ni se

    definieron en torno a la disposición óptima de las cualidades

    weberianas. El ejemplo más notable son los Estados Unidos. El

    diseño constitucional que le dieron los padres fundadores deri

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

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    MARCO

    PALACIOS

    154

    poder, ausencia

    que

    no

    tuvo aparentes cOl1secuencias

    en

    la mar-

    Chél de

    la

    modernidad estadounidense debido a que

    las

    colonias

    británicas de América no padecieron el feudalismo. Además, ha-

    bían conservado los principios de la Constit1.1ción inglesa no

    escrita del siglo XVI, entre éstos el de autogobierno local

    20

    En

    consecuencia,

    el federalismo de los Estados Unidos provendría

    de la preservación de "las antiguas libertades inglesas".

    Desde esta perspectiva, y si

    guiendo

    a Tocqueville, HUllting-

    ton propone que "la sociedad

    Americana

    nació moderna", esto

    es,

    como una

    sociedad civil constituida. Por consiguiente,

    m.1l1-

    ca fue necesario erigir un gobierno lo suficientemente fuerte

    como para garantizar

    la modernidad.

    Una organización política

    antigua es

    compatible

    con la sociedad

    moderna

    pero no es com-

    patible

    con

    la modernización de

    una

    sociedad tradicional"".

    A

    medida que

    la

    naciente

    República norteamericana

    y

    la

    Revolución Francesa desencadenaban conAictos instituciona-

    les inéditos que exigían explicaciones y soluciones originales y

    audaces, se hizo más evidente la tensión entre la libertad indivi-

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    13/173

    EL DES ENCUENT RO DE LOS

    COLOMBI NOS

    CON

    EL

    LIB E R LIS M O

    155

    Locke

    y

    Cal

    vino hasta los principios constitucionales

    de

    repre-

    sentación popular expuestos a lo largo de los siglos

    XVII

    )' XVIII

    que

    cristalizarán

    en

    el gran modelo de

    Madison, Hamilton )

    Jay

    recogido

    en El Federalista,

    y de Sieyes y

    Constant en

    los traba-

    jos de la Convención francesa

      .

    Pero la viabilidad de la nación

    moderna

    no dependía tan

    sólo de las formas constitucionales de gobierno. Éstas

    dependían

    del grado

    de madurez alcanzado

    por la sociedad civil organiza-

    da que, a su vez, ya no podía explicarse mediante un referente

    externo a ella (Dios, la ley divina, el pacto del rey

    con

    sus vasa-

    llos) sino mediante las leyes objetivas de la mercantilización de

    la tierra , el capital

    y

    la fuerza de trabajo, así como por los efectos

    de

    los grandes descubrimientos geográficos y científicos

    de

    los

    siglos XVlI y XVIII.

    ¿Qué

    debemos

    entender

    cuando

    se afirma

    que

    los Estados

    Unidos nacieron modernos ? ¿Que no eran una sociedad feu-

    dal? En este caso el argumento implícito llevaría a

    concluir

    que

    las instituciones esclavistas son

    m

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    14/173

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    15/173

    EL

    OES)ENCUENTRO DE

    LOS

    COLOM BI NOS

    CON

    EL LIB E R L ISM O

    157

    individuo

    en

    una

    terrible soledad.

    De

    otro lado el desencanta-

    miento del mundo condujo a la

    creciente

    burocratización del

    Estado con la probabilidad de concluir en 1 que ahora cono-

    cemos

    como

    la trama kafkiana.

    Sin olvidar que

    en

    la Iberoamérica del siglo XIX con el l ibe-

    ralismo surgieron los actuales nacionalismos y

    dentro

    de cada

    nación se acentuaron los localismos subrayemos

    que

    el entrela-

    zamiento

    de la civilización

    y

    cultura españolas

    con

    las cultmas

    y civilizaciones precolombinas produjo un sistema destinado a

    tramitar la

    modernidad

    por caminos irreductibles al paradigma

    del norte europeo capitalista protestante e individualista.

    En el ámbito

    hispanoamericano

    el desencantamiento del

    mundo sólo afectó algunos sedores de las elites gobernantes y

    no pudo exorcizar el equívoco barroco. Por otra parte desde el

    presente constatamos la supervivencia de culturas mestizas o

    híbridas como ahora se dice

    en

    1

    religioso y 10 social; de tra-

    diciones

    comunales

    reinventadas; de un

    cambiante

    aunque

    acendrado catolicismo popular; de sincretismos afroamericanos

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    16/173

    MARCO

    PALACIOS

    15

    8

    misión catequística y evangel izadora

    apelando

    a imágenes capa

    ces

    de

    atraer y cautivar; de producir evocaciones y emociones

    mediante técnicas y formas

    de representación

    de

    un

    mundo

    ple

    tórico, fragmentado, abigarrado, y por su misma complejidad

    inalcanzable por la mera razón'6. Además

    de

    la arquitectura y

    las artes plásticas, este proyecto se plasmó en una espectacular y

    elaborada coreografía de la liturgia: las misas, las procesiones,

    los novenarios, los triduos, los sacramentos. Se instauró

    una

    ritualidad dramatizada más aún por la música cor

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    17/173

    EL

    ( OE S) E N C UE N TR O

    DE

    LOS

    COLOMBIANOS CON EL LIBERALISMO

    159

    paña, este sistema cristalizó

    en

    una pecul iar

    concepc

    ión cul

    tural,

    el

    barroco, en que iban entreverados mística y carnalidad;

    ascetismo y codicia; rectitud y venalidad; superstición y refina

    miento intelectual. Sus efectos

    en el

    enrevesamiento

    para

    em

    plear el término de Picón-Salas- del imaginario político y de los

    códigos de valores de las oligarquías criollas de Hispanoaméri

    ca, así

    como

    de las poblaciones hispanizadas, habrían de pro

    longarse hasta fines del

    XVIII.

    La locución barroquismo político o barroco de Estado se re

    fiere a los valores fundamentales y concepciones de goberna

    ción de los Austria

    en el

    período de la decadencia política,

    es

    decir, en el siglo que va de la muerte de Felipe

    J

    1598) a la de

    Carlos

    II 1700)

    Y la consiguiente guerra de sucesión que termi

    en

    el ascenso de

    la

    dinastía borbona

     

    .

    Los jesuitas llevaron el barroco desde los confines del Para

    guay de los guaraníes, encuadrados, según se dice, en un Estado

    teocrático, hasta las elites confucianas del Imperio

    ele

    la Paz

    Celestiaf

    9

    .

    Como

    estética, teología y mito unificador de la

    polis

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    18/173

    M RCO P L CIOS

    60

    siglo

    y

    med

    io,

    y

    una

    de

    las empresas más eficaces y coherentes

    del catolicismo reformado

    ortodoxo de Trento, hasta que hubo

    de

    terminar

    chocando

    con las corrientes de la Ilustración católi-

    ca, en las que,

    paradójicamente,

    sobresalieron eminentes figu-

    ras de jesuitas de la

    Hispanoamérica

    de la segunda mitad del

    XVIII, Sería ingenuo suponer que se trató de

    un

    movimiento

    eurocéntrico de exportación

    cu

    ltural.

    De

    China o Paraguay los

    jesuitas recogieron elementos que, una vez importados a la civi-

    lización europea,

    enriquecieron l

    barroco'o y, procesados más

    adelante

    con

    los cánones del

    humanismo

    del siglo de las luces,

    replantearon el tema

    renancentista

    del exotismo oriental.

    En el contexto de estas especulaciones,

    añadamos

    que la

    función del barroquismo político debió transformarse en Hispa-

    noamérica una vez que las nuevas clases dirigentes, descendien-

    tes

    de

    españoles, fueron

    plenamente

    conscientes de ser nativas

    o criollas, es decir,

    europeos

    de nuevo tipo, El barroquismo de

    Indias alude, entonces, al laberinto

    que

    sale ele la evangeliza-

    ción (la

    lengua

    la

    cruz)

    l corporativismo Austria (la espada y

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    19/173

    EL DES)ENCUENTRO

    DE

    LOS

    COLOM BI NOS

    CON

    EL LIB E R L ISM O

    6

    01

    igarquías criollas

    se

    arroparon

    en

    la ortodoxia bajo la custodia

    de los tribunales de

    la Inquisición que, además, desde

    1631

    pro

    hibieron la circulación de las obras de entretenimiento. Pero

    ya

    empezaba a manifestarse la tensión entre el modelo ideológico

    imperial en sus diversos grados

    de

    amalgamiento político-reli

    gioso y la expresión de una conciencia americana que, imper

    ceptiblemente tendía a subvertir la ortodoxia. Interesa destacar

    que más tarde los criollos, amparados en este criollismo, em-

    plearon el barroco contra el programa reformista ilustrado

    y

    en

    el cnlcial período abierto por la invasión napoleónica a Es

    paña en

    1808,

    no vacilaron en apelar a la Ilustración yallibera-

    lismo contra l barroco.

    No se trató de una manipulación calculada cínica. Las con

    diciones económicas, así como las redes sociales a través de las

    cuales debieron ser procesados los programas de la ilustración

    el liberalismo, estaban enraizadas en las formas políticas híbri

    das

    de

    las instituciones políticas ; en las entreveradas repúblicas

    barrocas, cristalizaciones de las identidades particularistas reco

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    20/173

    MARCO PALACIOS

    162

    formación estatal colombiana, ¿cómo habría de erigirse y ope

    rar la sociedad civil políticamente organizada que exigen los

    cánones de la Ilustración, y la sociedad civil ciudadana e indivi

    dualista

    que inmediatamente después demanda la civilización

    liberal?

    El arte de usar la ley y la costumbre) para quebrantarla que

    dó adosado al mosaico institucional y cultural, en toda su rique

    za socioespacial. Para superarlo, poco pudieron los esporádicos

    embates de la tibia Ilustración española, ni los posteriores es-

    fuerzos republicanos.

    De

    la primera quedan, por ejemplo, los

    episodios de pompa ritual y mala fe sustancial para enfrentar a

    los comuneros, o el arte de

    incumplir un

    solemne juramento.

    Las Capitulaciones presentadas por el

    Capitán General

    , Co-

    mandante

    de las ciudades, villas, parroquias y pueblos por co

    munidades que

    componen

    la mayor parte de este reino Juan

    Francisco Berbeo, en el Campamento de guerra en territorio

    de Zipaquirá el 5 de junio de

    1781,

    negociadas con premura en

    la casa cural de la Catedral de esa ciudad por el arzobispo Caba

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    21/173

    EL

    (

    D E S E N C U E N T R O DE LOS

    C O L O M B I N O S C O N EL L IBERAL l S MO

    3

    les y del discurso teológico-político, cristalizó

    en una

    tabla

    de

    valores y prejuicios que no consiguió ser destruida del todo

    por

    el republicanismo de la Independencia. Prescribía el lugar de

    cada cual

    en

    una comunidad según ehlia (entendida como un

    grupo

    unido por raza y cultura),

    ocupación

    y rango.

    Al igual que la mayoría de reinos del Imperio Español en

    América, la Nueva Granada escindida en las dos repúblicas

    aristotélicas, la de españoles y la de indios, fue ficticia. En la se

    gunda mitad

    del siglo XVIlI los mestizos

    ya eran la

    mayoría de

    la

    población,

    como

    enseñó Jaime Jaramillo Uribe

    H

    .

    El

    fundamen-

    to de la separación en dos repúblicas era la etnicidad que sobre

    determinaba

    en el sentido de Althusser, el sistema clasificatorio

    según ocupación y rango, erigido en el siglo XVI en la fórmula

    de nobles, o sea la descendencia de los conquistadores y gran

    des

    encomenderos

    y plebeyos, fórmula

    que

    fue ampliándose

    hasta abarcar los rangos bajos: los artesanos urbanos, los

    campe-

    sinos (incluidos los indígenas de

    comunidades

    o los propietarios

    individuales) y los esclavos de la minería, las plantaciones y ha

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    22/173

    MARCO

    PALACIOS

    6

    4

    La historiografía colonial,

    como

    queda

    claro

    en

    la espléndi

    da síntesis

    de

    Anthony McFarlane, describe una estructura COIlS-

    tituida sobre una pluralidad

    de

    jerarquías sociales coexistentes;

    sobre

    el entrecruce

    de realidades raciales, estamentales, de gé

    nero, religiosas y ocupacionales; sobre una abigarrada variedad

    y heterogeneidad de derechos subjetivos; sobre la

    segmentación

    jurisdiccional que no siempre correspondía a las regiones geo

    históricas y que era, por tanto, una fuente de conRictol.

    Un análisis desde la economía política da algunas pistas y

    muestra

    cómo

    la sociedad precapitalista experimentó las lransi

    ciones institucionales

    al

    capitalismo rentista advertidas en el

    período borbón, sin cejar en su antifiscalismo en lo político y en

    su carácter

    de

    sociedad de frontera en lo sociocultural. Tampo

    co cesó

    de

    proyectar

    un

    imaginario que

    en una

    primera i11spec

    ción aparece bipolar: noble-plebeyo, rico-pobre, blanco-super

    blanco, blanco-indio, blanco-negro, indio-negro, culto-rústico.

    Un

    examen

    más detenido en el punto de inflexión

    de

    la Ilustra

    ción a

    la Independencia

    revela

    una

    abigarrada laxonomía de la

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    23/173

    EL OES ENCUENT RO DE LOS

    COLOM BI NOS

    CON EL LIBER LISMO

    5

    ros,

    comerciantes

    y

    latifundistas criollos.

    Desde

    el siglo

    XVII,

    és

    tos últimos venían ennobleciéndose mediante la compra de al

    gún título, cargo o prebenda , y en el siglo siguiente era evidente

    que se habían apoderado

    de

    los cabildos municipales.

    La base estaba conformada

    por

    la

    plebe,

    especie

    de

    estado

    llano que al decir del Abate Sieyes en su panfleto anónimo de

    789 no era nada , aunque debía serlo todo .

    En

    los peldaños

    superiores del estado llano

    que

    , según el mismo Sieyes era

    una

    nación completa ,

    figuraban

    pequeños

    y medianos propietarios

    dedicados

    al

    comercio, el transporte , la

    minería

    y la agricultura,

    y

    en los inferiores

    quedaban

    los pobres, fuesen blancos, mesti

    zos o mulatos. De esta nación

    quedaban

    marginados los indios y

    los esclavos, es decir la fuente principal de la fuerza de trabajo

    subordinada.

    El territorio

    ordenaba

    a la

    par que

    segregaba.

    Cuenta

    aparte

    de las múltiples jurisdicciones (eclesiásticas, mercantiles, admi

    nistrativas, militares) hasta fines del siglo

    XIX,

    y en algunas zonas

    hasta bien

    entrado

    el siglo xx, la actual Colombia, como unidad

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    24/173

    M RCO

    P L CIOS

    166

    La distinción más obvia se había establecido

    en

    el siglo

    XVI

    entre la Cordillera Oriental, con sus nichos demográficos rura

    les de base campesina indígena, y el occidente minero,

    con

    su

    base laboral esclava, negra y mulata. Pero

    ya en l

    siglo

    XVl1I,

    ciudades y villas aparecían cercadas por un

    hinterland

    de bolso

    nes mrales mestizos, subalternos en

    lo político y lo administrati

    vo.

    Allí la interacción entre diversas capas sociales era

    tenue

    y

    esporádica. Se trataba

    de

    núcleos poco expuestos a sufrir las

    exacciones y recibir servicios de la administración pública. Con

    excepción de las tribus desconocidas

    de

    la amazonia y la orino

    quia

    y

    según Sharp,

    de

    los asentamientos de mulatos libres y de

    cimarrones del

    Chocó

    ni siquiera las sociedades más rurales y

    fronterizas quedaban

    al

    margen del sistema urbano 7.

    La distTibución de la población presentaba un abigarrado

    cuadro de gradaciones y combinaciones entre las familias

    que

    integraban el esquema corporativo de los europeos, incluidos

    los criollos, y las mayorías que conforman el orden estamental y

    sociorracial del qlle querían escapar los mestizos, quienes

    ya

    su

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    25/173

    EL DES)ENCUENTRO

    DE

    LOS

    COLOMB

    IANOS

    CON EL LIBERALISMO

    16

    7

    lleva a la narrativa

    de

    Fustel de

    Coulanges

    sobre la formación

    estatal en la antigüedad romana.

    Descontando

    el fundamento religioso del vínculo c1ientelar

    romano

    J9

    , el c1ientelismo neogranadino también aparece como

    el hilo conductor de una vida pública municipal cada vez más

    densa, como el precursor de

    una

    esfera política específica que

    contiene los

    gérmenes

    de la subversión del orden aristocrático

    del patriciado

    en cuanto

    empieza a desafiar el principio heredi

    tario de transmisión de la función pública, su virtud y honores

    inherentes, originado

    en

    el reino de

    la

    encomienda.

    Deberíamos investigar la psicología básica

    de

    los nobles

    y

    precisar qué sentido tuvo la aparente apatía del patriciado crio

    llo de Santa Fe

    en

    el

    manejo

    de los asuntos municipales, como

    parece desprenderse de sus actuaciones

    en

    el cabildo de la ciu

    dad

    en

    el siglo )(\'111

    4

    ° 

    Se abre, entonces, la brecha que se am

    pliará en el siglo XIX, entre administración y política. Se pone

    como ejemplo la rosca santafereña alrededor de Jorge Miguel

    Lozano de Peralta,

    el

    marqués de San Jorge, más interesada en

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    26/173

    M RCO P L CIOS

    68

    mento

    tan disímil

    como

    el visitador

    Gutiérrez

    de

    Piñeres y el

    arzobispo Caballero y Góngcira, hubieron de considerar que la

    rosca

    encerraba

    peligros para la

    autoridad

    de la Corona.

    Según

    se sabe,

    en

    la fase de ascenso del

    movimiento

    comunero del

    Socorro, la rosca fue el enemigo solapado y eficaz de la moder

    nización imperial-+'.

    Desde la perspectiva de una

    pretendida

    revolución

    en

    el go

    bierno, para usar la expresión de Brading sobre el México

    borbónico, subrayemos la fragilidad de la administración virrei

    nal neogranadina, desconectada

    de

    las provincias y municipios .

    En modo alguno puede compararse con aquellas burocracias

    agrarias modernizantes que Skocpol

    parece enconlrar

    en Fran

    cia, Rusia y

    China

    en vísperas de sus respectivas revoluciones

    4l

    .

    Como

    orden

    estatal, el Nuevo Reino distaba de controlar

    aparatos militares

    y

    administrativos

    en

    las localidades.

    Nunca

    dominó a las clases terratenientes provinciales que, a su turno,

    tuviesen el dominio de las poblaciones y el campesinado. Los

    trabajos de

    Kuethe

    y

    Marchena Fernández

    sobre el ejército

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    27/173

    EL DES )ENCUENTRO DE LOS

    COLOMBI NOS

    CON

    EL LIBERALISMO

    9

    lIoso

    En suma

    la oligarquía local consiguió

    permear

    la institu

    ción militar, y no al revés+ .

    La posesión de la tierra fue el activo más seguro,

    aunque

    de

    ninguna manera el único ni mucho menos el más rentable,

    para

    permanecer

    en

    la

    nobleza. En las provincias de Antioquia

    y Santander, donde el latifundio fue débil, el elemento criollo

    estuvo más bien marginado de la política, lo que a la postre fue

    una ventaja: menos restricciones por el lado de las discrimina

    ciones sociales

    que

    sus pares de Santa Fe,

    Cartagena

    o Popayán.

    Con

    el desarrollo mercantil se hace manifiesta la fluidez y la

    movilidad de los linajes, y a través de éstos, de los individuos.

    Ante esta movilidad social y

    geográfica intraoligárquica,

    que

    pone en cuestión la rigidez estamental,

    parece

    más decisiva la

    permanencia de las formas de dominio social sobre los grupos

    subalternos

    4;.

    Más aún las rivalidades entre las clases y los clanes dominan

    tes, su competencia localista por

    las

    preeminencias y el poder, y

    la movilización social que acompañó las guerras civiles de inde-

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    28/173

    M RCO

    P L CIOS

    17°

    pendencia

    y

    que

    ya

    venía anunciándose

    en

    los movimientos

    de

    protesta popular a 10 largo del siglo

    XVIlI,

    matizan este

    cuadro

    de

    monopolio

    sociopolítico en la asignación de r e c u r s ~ ~

    Conflictos ideológicos en la república de los letrados

    Un muestrario más o menos

    completo

    de la jerarquía socio-

    rracial sólo podía encontrarse en Santa Fe, Cartagena o Popa-

    yán. En estas ciudades medraban los grupos letrados que, a

    través

    de

    tertulias, sociedades académicas

    y

    prensa,

    empezaban

    a descubrir sus posibilidades

    de

    formar opinión pública

    47.

    Pero

    entre más se desciende en la escala de la jerarquía urbana (ciu-

    dades, villas, pueblos mestizos, pueblos

    de

    indios, corregimien-

    tos), más a sus

    anchas

    funciona la sociabilidad tradicional.

    Aspecto cardinal de las nuevas sociabilidades de la minoría

    letrada después de

    1770

    fue la aceptación

    de

    los modelos racio-

    nalistas en boga. Las ciencias mecánicas o aplicadas (las natura-

    les) o las ciencias morales (el derecho y la economía política)

    habrían de fortalecer

    el

    reino y

    fomentar el

    mejoramiento de la

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    29/173

    EL DES )ENCUENT

    RO DE LOS

    C O L O M B I N O S

    CON

    EL LIBERALISMO

    1

    sociedad. Éste fue

    el

    espíritu progresista

    de

    lo práctico o,

    como

    lo llama Safford, el ideal

    de

    lo práctico , que exigía replantear

    las instituciones de alta cultura,

    en

    particular las universidades.

    Aquí debemos subrayar la diferencia del Nuevo Reino con los

    dos grandes virreinatos americanos, teniendo presente el carác

    ter limitado y oficial de la Ilustración española

    en

    el concierto

    de la Europa occidental.

    En Santa Fe

    de

    Bogotá no se organizaron universidades pú

    blicas como las reales y pontificias

    de

    México y Lima, fundadas

    en

    el

    siglo

    XVI

    y autorizadas a adaptar las fórmulas autonómicas,

    corporativas y curriculares acordadas tres siglos atrás para Sala

    manca. Las universidades

    de

    México y Lima, emancipadas

    de

    la tutela de las órdenes religiosas y celosas

    de

    su

    autonomía

    cor

    porativa, aunque regidas por el clero secular, detentaron el

    monopolio

    institucional de los símbolos y rituales del saber. Ci

    mentaron 1 que se ha dado en

    llamar una cultura

    política cor

    tesana y formalista, legal ista y centralizadora4

    8

    .

    Por el contrario, en la capital del Nuevo Reino surgieron dos

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    30/173

    MARCO PALACIOS

    7

    2

    el Colegio-Seminario

    de

    San Bartolomé. Sin embargo, gana

    rían prestigio, influencia

    el

    ientelas

    por

    su maestría del latín

    de las disputaciones, y por lo que en vísperas de los movimien

    tos de independencia era una bien articulada red de colegios

    en

    las capitales

    de

    provincia.

    Si

    bien

    los colegios cumplieron los objeti\'os del trasplante

    ideológico imperial espai'íol y fueron el medio de reproducción

    de las elites, formando abogados, administradores, teólogos

    y

    futuros catedráticos

    -los

    sacerdotes se educaban en los novicia

    dos

    y

    seminarios, más abiertos a los mestizos

    y

    demás

    castas-,

    los de la capital generaron, cada uno, la subcultura propia de su

    congregación asumieron la solapada inquina

    que

    se profesa

    ban entre sí.

    Remín Silva subraya la naturaleza dual del Colegio-Semina

    rio

    de

    San Bartolomé'oy abre

    un

    contrapunteo

    con

    el del Rosa

    rio orientado hacia la burocracia civil .

    Deberíamos

    preguIltar

    si el espíritu de cuerpo que se inculcaba a bartolinas

    y

    rosaristas

    no se tTadujo en mayor predisposición de los letrados a la pug

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    31/173

    EL VES )ENCUENTRO VE LOS

    COLOMBf NOS

    CON L

    LIBERALISMO

    173

    enseñanza andaba

    atrás

    que

    la europea,,;2.

    Sobre

    rígidos patro-

    nes disciplinarios se enseñaban

    la

    obra de Santo Tomás y Vito-

    ria, Aristóteles y

    Suárez, la

    de este

    último

    autor

    prohibida

    junto

    con las teorías de Mariana sobre el tiranicidio, a raíz de la expul-

    sión de los jesuitas del Imperio Español en 1767 3.

    La parábola

    de

    los jesuitas, de abanderados de la fe y del

    Im-

    perio a teólogos revolucionarios y organizadores subversivos

    pone de presente las fisuras irreparables en l modelo ideológi-

    co

    imperial

    hispánico

    durante

    la transición

    de la Contrarre-

    forma

    a la Ilustración.

    En

    la

    segunda

    mitad

    del siglo

    XVIII

    los

    hijos de San Ignacio de Loyola

    quedaron

    colocados contra la

    Ilustración

    católica 4

    Elementos

    de

    esta última fueron, de

    acuerdo

    con Mario Góngora, Filosofía

    ecléctica,

    la difusión y

    aplicación

    de la

    nueva ciencia, una

    cultura religiosa

    no barroca

    inclinada

    al

    moralismo

    y al

    fundamentalismo,

    un

    galicanismo

    antipapista, una renovada creencia en la ley natural. 's

    En el

    vaCÍo

    dejado

    por la expulsión

    de los jesuitas, las refor-

    mas universitarias

    adelantadas

    en España por l laicista Campo-

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    32/173

    MARCO PALACIOS

    174

    universidad pública y modernizar los planes

    de

    esbJdios, inclui-

    dos los

    de

    derecho que, como subraya Víctor Manuel Uribe,6,

    aún no habían incorporado el nuevo derecho

    público

    regalista.

    Este ciclo se cierra en Santa Fe en

    1779

    57

    y,

    en

    un plano impe-

    rial más amplio, en 1793, cuando]a

    Corona

    temió la difusión

    de

    los métodos violentos de la Revolución Francesa.

    En

    estos períodos se exacerbaban los recelos y sospechas en-

    tre las autoridades virreinales y los criollos que, al parecer, no

    habían cesado del todo desde la insurrección comunera

    de

    178l.

    No

    obstante, el tópico requiere ser calificado.

    En

    la

    Relación

    de

    Francisco Gil y Lemos fechada

    en

    julio de

    1789,

    apenas ocho

    ai''Íos después del movimiento

    comunero

    más que la actitud es-

    perada del mandón borbónico encontramos prudencia barroca,

    como

    se lee

    en

    este texto tomado de la transcripción de

    Germán

    Colmenares, Refiriéndose a los criollos

    de

    la Nueva

    Granada

    apuntó el virrey:

    Y he hallado que es una gente dócil, con

    una

    mediocridad

    de fortuna que apenas da más de lo necesario para subsistir, sin

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    33/173

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    34/173

    M RCO

    P L CIOS

    17

    6

    chados

    de

    subversivos. Los derechos proclamados

    en

    La

    Decla-

    ración eran, en esencia, los derechos naturales reconocidos en

    todo el orbe civilizado desde los tiempos de los romanos y de

    Santo Tomás, y de los teólogos

    de

    Salamanca, y que,

    como

    ta

    les, venían siendo clivulgados por funcionarios, publicistas y

    60

    prensa espaiioles .

    El

    núcleo

    de

    una

    opinión pública en Santa Fe debió

    de

    ser

    modesto,

    al

    menos

    si

    lo comparamos

    con

    las densas y extensas

    redes de lectores

    de

    la ciudad de México tendidas a lo largo del

    siglo de las luces

     

    De

    todos modos

    se

    ha

    subrayado que

    no

    exis

    tió correlación alguna entre el desarrollo de la prensa hispanoa

    mericana y el grado de radicalización política

    durante

    la

    Independencia como

    lo demuestran las conservadoras ciuda

    des de México y Lima, por

    un

    lado

    y,

    por

    el

    otro, la radical

    Cara-

    cas

    que no

    tuvo periódicos.

    Así,

    cuando

    en

    1797

    se

    develó la

    conjura de la Guaira, o sea la publicación de los

    Derechos

    del

    hombre y del ciudadano con

    varias

    máximas republicanas y tm

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    35/173

    EL DES

     

    ENCUENTRO DE

    LOS

    COLOMBIANOS CON

    EL LIBERALISMO

    177

    discurso

    preliminar

    dirigido

    a

    los

    americanos

    (atribuido

    al

    grana

    dino Pedro FermÍn de Vargas), vemos que el documento tradu

    cido es l jacobino de 1793 y que las máximas y el discurso son

    revolucionarios y

    republicanot

    Secularización

    y

    rebelión

    La Ilustración resquebrajó, aunque no pudo demoler, los

    fundamentos

    de

    la cultura política tradicional. Pero en cualquier

    caso, hay síntomas de cambio, si

    no

    de mentalidad, al menos de

    actitudes. Esto se advierte en la fuerza real y simbólica que ad

    quirió

    la

    rebelión

    de

    1781 y, a partir de

    1808,

    en la velocidad

    con

    que

    se

    propagó el vocabulario propio del constitucionalismo

    moderno.

    La historiografía

    colombiana

    se ha detenido en dos aspectos

    que ayudan a definir la gran transformación sociopolítica del

    Nuevo Reino

    de Granada:

    Primero, en los modestos avances de la secularización en la

    república

    de

    los letrados, preocupados por el desarrollo de las

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    36/173

    M RCO P L CIOS

    ción

    pende

    uno

    de

    los debates más duraderos

    de

    la historiogra

    fía colombiana: si fue o no fue precursora de la Independencia.

    Dejando de lado este asunto hay que aceptar, corno lo demues

    tra la historiografía más reciente, que el

    movimiento comunero

    consiguió forjar una inédita

    aunque

    frágil alianza de clases,

    estamentos y etnias contra el fiscalismo absolutista, que desbor

    los acostumbrados marcos locales y provinciales.

    De

    acuerdo

    con

    John L. Phelan

    obedezco

    pero

    no

    cumplo

    fue la fórmula de la gobernación americana ba jo los Austria, los

    Borbones tratarían de

    imponer

    la ciega obediencia inspirélda

    en

    el modelo de Luis XIV 6,, encarnada en funcionarios como

    Juan Francisco

    Cutiérrez

    de Pií'íeres. Su visita fue el catal izador

    de la insurrección. Lo novedoso del experimento comunero su

    magnitud y la geografía de su movil ización contribuirían a rede

    finir las nociones tradicionales

    de

    autor idad legítima

    yobedien-

    cia política.

    Este movimiento de ¡Viva el Rey ¡Muera el mal gobiemo

    canal izó sus agravios y reclamos marchando

    en

    son de guerra a

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    37/173

    EL DES ENCUENT RO DE LOS

    COLOMBI NOS CON EL LIBER LISMO

    179

    tante en

    estas tierras americanas del Estado centralizado, cuya

    aparición

    impugnaba.

    Irónicamente al

    aceptar

    la intermedia

    ción bon fide del arzobispo Caballero y Góngora el movimien

    to encontró su perdición. Pero lo que nos interesa destacar es

    que los comuneros anticiparon el camino hacia la igualdad ciu

    dadana

    basada

    en

    el

    sentimiento

    nacional,

    como

    se

    entendería

    una

    generación después. Pusieron

    temporalmente en

    jaque

    va

    lores e instituciones centrales del virreinato,

    y

    años más tarde

    reaparecerían en la memoria de las elites independentistas

    como

    los verdaderos precursores

    de

    la

    lucha

    contra el agravio

    notorio de poner a los peninsulares por encima de los ameri

    canos.

    En el conflicto,

    que

    los dirigentes comuneros

    mantuvieron

    dentro

    de los moldes ideológicos de

    la

    monarquía católica tradi

    cional,

    ajeno

    a las nociones y lenguajes

    de

    la época de las luces,

    fueron politizadas relaciones sociales y asuntos fiscales que pa

    reCÍan impolitizables. En aquel entonces, ciudadano era uno de

    los términos favoritos de los ilustrados españoles. Se refería

    al

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    38/173

    MARCO PALACIOS

    18

    Para

    acentuar

    lo novedoso

    de

    la situación recordemos

    que

    en la Guerra

    de

    Sucesión española de

    1700

    a 1714 aparecieron

    ingredientes de la época

    que

    estamos considerando: la crisis di

    nástica entre los Austria y los Barbones resuelta a favor de los

    segundos mediante la invasión militar extranjera

    al

    suelo es

    pañol

    y

    ante unos

    espaiioles impasibles. Es decir

    que

    no

    hubo

    ningún

    indicio

    de

    que la guerra de la sucesión dinástica se trans

    formara en crisis

    de

    legitimidad monárquica. Pero a comienzos

    del siglo

    XIX

    le llegó la hora a la

    monarquía

    absoluta. Ésta

    como

    enseñara Sabine

    había barrido a sangre

    y

    fuego el constitu

    cionalismo feudal base de la civilización medieval ; ahora le co

    rrespondía ser barrida por el

    nacionalismo

    moderno

    también

    a

    66

    sangre y fuego .

    De

    un

    motor

    de

    esta modernidad la técnica aplicada a la

    producción

    es

    decir la potencia expansiva del capitalismo in

    dustrial no se sabía en el Nuevo Reino por su rugido sino por

    referencias librescas. Aquí persistían las inercias de las repúbli

    cas letradas  propias de un

    orden

    social jerarquizado

    en

    el que el

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    39/173

    Independencia

    69

    EL DE S ) E NCUE NT R O

    DE

    LOS

    COLOMBIANOS CON

    EL L I B E R A L l S M O

    8

    La Independencia no fue una rebelión popular tradicional

    como el movimiento de los comuneros. Por el contrario, desen

    cadenó una

    serie de guerras civiles guiadas por las prácticas

    liberales y jacobinas de las elites criollas en pos de erigir el Esta

    do nacional.

    En

    este contexto el vocablo jacobino describe me

    nos

    un

    radicalismo antifeudal y antiseñorial

    que

    la suplantación

    del pueblo soberano por elites organizadas política y militar

    mente.

    El movimiento independentista

    comenzó

    con las agitacio

    nes de las capitales de provincia y se fue desarrollando

    pari

    passu

    con el arribo de las noticias confusas y trasnochadas del

    levantamiento

    contra Godoy en Aranjuez (marzo de

    1808).

    En

    los dos meses siguientes ocurrieron la invasión francesa de la

    península

    y la captura

    de

    la dividida familia real espafiola

    en

    Francia,

    en

    esa operación zarzuelera

    en

    que Napoleón obligó a

    Carlos IV

    y a

    Fernando VII

    a abdicar a su favor, y traspasó los de

    rechos a su

    hermano

    José. El incidente no selló el destino de la

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    40/173

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    41/173

    EL DES )ENCUENT RO DE LOS

    COLOMBI NOS CON EL LIBERALISMO

    3

    contró eco

    y

    apoyo muy eficaz

    en

    el municipio.

    Sin

    el desarrollo

    que por

    entonces

    había adquirido esa entidad, la revolución ha

    bía fracasado seguramente

    en

    todas partes»

    74.

    Con

    todo, este municipalismo ofrecía un

    método

    potencial

    para la integración nacional.

    Así,

    por ejemplo mientras más ca

    bildos pedían junta, el virrey y la Audiencia sólo veían sedición

    en

    los petitorios. La confrontación hizo evidente una especie de

    diarquía

    entre

    el gobierno local, dominado por los criollos y

    la

    frágil burocracia virreinal, de la que estaban excluidos.

    Los criollos tomaron bandos

    entre quienes

    acataban las deci

    siones de la Junta y la Regencia españolas

    y

    aquellos que consi

    deraban a los americanos en pie de igualdad con los peninsulares,

    es decir, portadores de la misma titularidad del

    derecho

    de es

    tablecer sus propias juntas. El colapso de la Junta

    Central

    en

    Cádiz

    y el establecimiento de la Regencia encargada

    de

    organi

    zar el trabajo de las Cortes 18

    1

    0-

    1812

    ), cuyos diputados ya habían

    sido elegidos, dio l triunfo a los segundos a través del

    mo

    vimiento de cabildos de

    1810:

    Caracas, abril; Cartagena mayo;

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    42/173

    MARCO PALACIOS

    4

    guridad

    de

    los criollos

    demostrándoles

    cuán

    irrelevante

    era

    si

    España se guiaba por principios del liberalismo gaditano o

    por

    las prácticas del despotismo que

    unos

    años méís tarde, en

    1814

    reintroduciría el ahora deseado

    Fernando

    VII .

    U

    objetivo su-

    premo

    estaba en

    romper

    el vínculo español. Pero esos primeros

    sucesos del

    republicanismo

    moderno

    también

    hubieron

    de

    ha-

    cerles ver la intensidad y amplitud del descrédito entre las

    capas

    populares

    de

    los principios de jerarquía obediencia derivados

    del

    tronco

    del

    gobierno

    monárquico

    como

    lo había demostra-

    do la agitación de las mujeres santafereñas del pueblo frente a la

    virreina, a quien hicieron encarcelar en los días posteriores

    al

    20

    de jul io

    de 1810.

    La retórica proamericana que por aquella

    época

    puso

    en

    boga el Consejo de Regencia, no hizo más que C1lentar senti-

    mientos nacionalistas

    en

    estas orillas del Atlántico. EntTe

    1810

    1812 se

    impugnó

    la legitimidad del

    poder

    constituyente de las

    Cortes

    españolas que actuaban

    en

    nombre de

    Fcrnando

    VII. A

    partir de la primera declaración neogranadina

    de

    independen-

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    43/173

    EL

    DES ENCUENT

    RO DE LOS

    COLOM BI NOS

    CON EL

    LIB E R L ISM O

    5

    principios

    mediante

    los cuales fuera posible explicar los cam

    bios de la situación internacional

    y, entonces,

    predecir cómo se

    redefiniría el

    orden.

    Vieron

    en

    el liberalismo la condición sin la

    cual sería imposible integrarse al nuevo sistema internacional.

    La

    Independencia

    aparecía entonces como un resultado

    de

    las

    transformaciones aparejadas por la marcha de los ejércitos na

    poleónicos por

    Europa.

    Estaban, acaso, ante el nuevo mlllldo

    forjado

    por

    un

    héroe

    universal que barría reyes) reyezuelos na

    cionales y protonacionales.

    La

    impugnación

    del principio

    de

    autoridad regia surgía

    en

    un contexto que, como

    en

    los casos de

    la

    Primera y

    la

    Segunda

    guerras mundiales, el reciente colapso del

    comunismo

    soviético

    yel fin de la guerra fría, equivalía a una crisis sistémica del orden

    internacional. En esta situación las coaliciones victoriosas atri

    buyen

    el origen

    de

    la crisis

    al

    énfasis

    que

    la coal ición derrotada

    hubiese dado a

    talo

    cual

    concepto

    de soberanía.

    En

    conse

    cuencia,

    erigen un orden posbél ico

    replanteando

    dicho con-

    7

     

    cepto

    .

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    44/173

    r.IAR C o PALAC I os

    186

    Según

    las noticias,

    apoleón, primero

    como

    dictador del

    Consulado} luego como emperador, invadía Europa llevando

    consigo los códigos civil

    y

    de

    procedimiento

    civil,

    arma

    centrali

    zadora contra el péHticularislllo legal medieval

    )

    contra las insti

    tuciones feudales; con la reforma administrativa

    que

    distinguía

    con

    más claridad

    que nunca

    antes

    entre una

    esfera pública

    que

    demolía

    la concepción patrimonialista del Estado, pues estaba

    jerarquizada)

    especializada, de empeñaba funciones específi

    cas

    y

    asignaba responsabilidades bien determinadas,

    y una

    esfe

    ra

    privada, el

    ámbito de

    los

    derechos

    subjetivos tutelados por el

    código civil.

    Llegaba también con

    un

    ejército de conscriptos, de ciudacla

    nos franceses que estaban revolucionanclo la práctica y la teoría

    de la guerra

    y

    que, por sobre tocio,

    eran

    el

    símbolo

    de

    la

    nación

    en

    armas, la idea

    romántica de

    las naciones

    como

    comunidades

    de destino, asiento natural de los Estados. Éste no era el temible

    igual itarisll10 jacobino sino la exal tación de indiviclual iSlllo

    burgués,

    pequeño-burgués y campesino;

    la expresión concen

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    45/173

    EL DES)ENCUENTRO DE

    LOS

    COLOMBIANOS CON EL

    LIBERALISMO

    7

    segundo muy difícil

    de

    llevar a la práctica. El volunlarismo

    constitucional isla que caracteriza este período germinal está

    troquelado por la

    ambigüedad

    sobre

    qué

    clase de ruprura debía

    producirse con la monarquía hispánica, ella misma en vías de

    tomar el camino liberal en la Conslitución gaditana de 1812.

    Superada la ambigüedad alrededor de la figura regia como

    puntal

    de

    la

    armonía

    social y estatal, se llegó a

    un punto de

    no

    retorno consagrándose lo que mucho más tarde el derecho in

    ternacional público llamaría el principio de

    autodeterminación

    de

    los pueblos.

    De

    este

    modo

    la soberanía,

    proclamada

    en

    las

    primeras constituciones, acogió los

    elementos

    de la definición

    aceptada por la Convención francesa que, a su rumo, había

    adoptaelo la ele

    Badina.

    La soberanía habría ele ser una, indivi

    sible, sagraela e imprescriptible,,   .

    El

    establecimiento

    ele

    los nuevos estados exigía

    hacer

    explí

    cito el concepto de soberanía que permanecía inalterado desde

    el siglo xvn

    80

    ,

    a pesar de los cambios operados tanto en las fun

    ciones como en las estructuras formales, materiales, sociales y

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    46/173

    MARCO PALACIOS

    188

    privado.

    Un príncipe dominaba

    un

    territorio

    con

    sus habitantes,

    conforme a la ley natural y a la ley positiva8,. Ahí descansa la

    presunción del

    derecho

    de los Reyes

    Católicos

    a las posesiones

    americanas en los términos de la bula de Alejandro VI (J493)' Lo

    cual no significaba que América fuese una heredad privada

    de

    los reyes, quedaba bajo su dominio y el

    de

    sus herederos, en su

    condición

    de soberanos obligados a privilegiar la evangeliza

    ción.

    Con la nación moderna aparece una oposición entre una

    noción de

    soberanía

    que pone

    énfasis

    en

    el

    imperium

    ell el

    pue-

    blo que forma la

    nación,

    y otra que acentlIa el dominium, el po

    der soberano de

    un

    príncipe sobre

    un

    territorio sin que importe

    el principio de nacionalidad de los habitantes

     

    En estc sentido,

    los criollos definieron los límites internacionales apl icando el

    principio del uti

    possidetis juris

    a los límites administrativos co

    loniales.

    De

    paso, desconocieron los derechos de las poblacio

    nes y comunidades indígenas que habitaban dichos territorios

    y

    quedaron

    prisioneros

    de

    la fórmula que había pretendido orga

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    47/173

    EL

    DES)ENCUENTRO DE

    LOS

    COLOMB

    I NOS

    CON EL

    LIBERALISMO

    8

    9

    tará

    como

    legítimos y antiguos propietarios, proporcionándoles

    el beneficio de la civilización

    y

    religión por medio del

    comercio

    y por medio de todas aquellas vías suaves que aconseja la razón y

    d

    · l d d 84

    Icta a

    can

    a cflstlana ...

    Se adoptó, pues,

    una

    noción tradicional de soberanía basada

    en

    el

    dominium

    con

    la esperanza

    de

    erigir la

    nación

    sobre

    un

    pétreo suelo republicano. Sólo entonces podría definirse un

    nuevo tipo de soberanía

    con

    fundamento en el ímperium o sea

    en

    el

    pueblo moderno

    de

    ciudadanos

    o la sociedad civil ciuda-

    dana.

    Pero, al igual que en Estados Unidos, la

    independencia de

    la

    Nueva

    Granada no fue

    una

    revolución. Por

    ende

    la centrali-

    zación

    estatal fue

    precaria

    s . Más

    aún en

    tierras neogranadinas

    el principio de

    legitimidad

    nació cojo y

    hubo

    de ensayar mule-

    tas de todas clases. El

    gobierno

    constitucional nació aparejado

    con la reconstitución

    de

    las prerrogativas regionalistas

    -feudales

    para H

    untington-

    que habían tomado fuerza en el reinado de

    Carlos II/; saltó a la palestra a raíz de la invasión napoleónica

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    48/173

    M RCO

    P L CIOS

    19°

    del imaginario político

    de

    la

    monarquía

    imperial. Esos años,

    más que la constitución del Estado

    republicano,

    marcan l tran

    sición definitiva hacia este acto fundacional , como podemos

    colegir de las actas

    de independencia

    del

    Cabildo

    Extraordina

    rio de Santa Fe del 20 de julio de 1810, de hlS de

    l

    Federación

    de las Provincias Unidas

    de

    la Nueva

    Granada

    (noviembre

    de

    1811 , de

    las numerosas constituciones provinciales que adapta

    ron aquella idea

    de

    soberanía a sus condiciones, o del

    centralis-

    mo de Cundinamarca. Antes que unificar, la soberanía nacional

    fue pretexto de división

    entre

    central istas

    y

    federal istas, prisio

    neros todos del localismo tradicional.

    Como apuntó Germán

    Colmenares,

    el principio

    de

    soberanía

    popular

    vino a radicarse

    en

    los pueblos, casi

    en

    el sentido de núcleos urbanos , de

    modo

    que se igualaron poblaciones de advenedizos

    con

    los

    cen-

    tros coloniales

    de

    aboleng0

    87

    .

    De

    acuerdo con

    José

    Manuel

    Res

    trepo, las provincias y cabildos que

    reclamaban

    prelaciones de

    soberanía estaban

    imbuidos

    de un egoísmo provincial sk que,

    quizás, pretendía expresar el

    cambio

    regional

    y

    social operado a

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    49/173

    EL

    OES)ENCUENTRO DE LOS

    C O L O M B I N O S CON EL

    LlBERALIS

    IHO

    J9

    J

    Lél

    constitución del nuevo Eslado es la historia de la

    lucha

    facciosa

    de

    patriciados

    y

    sus clientelas, efectivas

    y

    potenciales,

    en torno al restablecimiento de fueros prerrogativas definidos

    por

    razón de una legitimidad genealógica de sus familias, legiti

    midad de linaje territorial

    por

    antonomasia. Los federalistas

    de

    la década

    de 181

    planteaban

    la

    querella

    como

    hijos legítimos

    en el juicio sucesorio del aparato estatal espaiiol, como una

    empresa de parcelación del país

    89

    . En este sentido, el fede

    ralismo de

    la

    primera

    república

    debe

    distinguirse del

    modelo

    propuesto por los

    gólgotas y

    los

    radicales

    medio siglo después,

    inspirado

    en

    el espíritu tocquevilliano que, al

    aceptar

    al menos

    retóricamente la igualdad ciudadana, distinguía

    entre

    la fuerza

    positiva de la centralización política y la fuerza negativa ele la

    cenlralización administrativa

    Ciudadanos abstractos

    El nuevo Estado, inspirado

    en

    los principios de libertad y

    soberanía nacional , desconoció que la sustancia de

    la

    nación

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    50/173

    M RCO P L CIOS

    ferir

    que

    artificial

    en cuanto

    que

    el altar

    de

    los criollos ilustrados

    estaba atiborrado de los lugares comunes eurocénlTicos de l homme

    de lumíeres ingenua, porque las mayorías mestizas e hispalli

    zadas

    querían

    escapar del don nadie dieciochesco) alcanzar el

    recién anunciado status de ciudadanos colombianos. Los indí

    genas, al margen

    de

    estos procesos definidos, incubados

    y

    desa

    rrollados por iniciativa

    de

    los criollos, no sabían a ciencia cierta

    qué significaban los indigenizados emblemas republicanos pro

    pios del ceremonial de los primeros años de la Patria Boba. En-

    tonces,

    deberíamos preguntar

    si

    esta

    huida

    criolla

    al

    rcino

    de

    los

    símbolos

    no obedecía

    a una necesidad de diferir y disfrazar el

    conflicto planteado por el

    principio

    de igualdad democrática, o

    sea, que a la igualdad política sigue la igualdad social.

    Las generaciones

    de

    Narií ío, Ricaurte, Torres, Bolívar y San

    tander

    parecieron

    entender

    que

    l

    vocablo liberal,

    acuiiado

    en

    1812

    en las Cortes de Cádiz, se nutría de la veta de la filosoffa

    moral

    de

    Locke, elogiada por los enciclopedistas,

    aunque

    no

    descartaron del todo las tradiciones del pactislllo castcllano, ni

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    51/173

    EL

    DE S

    )E: NCUENTRO DE LOS

    C O L O M B I A N O S C O N

    EL L I B E R L I SMO

    193

    pos legislativos

    y,

    posteriormente,

    mediante

    la ampliación del

    sufragio directo.

    En

    la mayoría de los ciento ochenta y pico

    ai'íos transcurridos desde los gritos de independencia, dichos

    cuerpos

    han

    designado

    al

    presidente y a los altos tribunales del

    poder judicial. También desde los orígenes,

    -hasta

    la Constitu

    ción de

    1991

    que dio representación a los indígenas, abrió el

    campo

    representativo a las negritudes y creó

    una

    jurisdicción

    nacional para elegir senadores- estos

    cuerpos han

    tenido

    una

    base geográfica municipal y provincial

    que

    no siempre ha coin

    cidido con los criterios corrientes

    de

    1

    que

    debe

    ser la represen

    tación política

    en una

    república ll1oderna

    9

     ,

    y ahora se les acusa

    de

    ser nichos de clientelismo, nepotismo y corrupción. La re

    presentación popular era

    incompatible

    con cualquier forma de

    representación corporativa.

    Legitimadas

    en

    nombre

    del

    pueblo,

    las constituciones te

    nían sus orígenes en tradiciones estamentales, municipales y

    oligárquicas. El pueblo de ciudadanos casi nunca está presente:

    o bien aparece como proyecto, aspiración de un futuro demo

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    52/173

    MARCO PALACIOS

    94

    A este respecto son elocuentes los catecismos de la

    indepen-

    dencia, copia de Jos famosos catecismos de los padres jesuitas

    Gaspar Astete y Jerónimo

    de

    Ripalda que desde fines del siglo

    XVI

    yen la línea del Concilio

    de

    Trento habían popularizado los

    principios

    de

    la fe católica en el orbe hispánic0

    93

    . Verbigracia,

    el

    Catecismo

    Político arreglado

    a

    la

    Constitución

    de la

    República

    de Colombia

    de

    José Grau

    1821),

    definía la nación o república

    como la

    reunión de

    todos los colombianos y al colombiano

    como un

    Hombre libre, valiente, generoso y justo hasta con

    sus enemigos, terror del despotismo, flagelo de los tiranos, y

    amante y defensor

    de

    los derechos del hombre 'H;

    elocuencia

    en pueblos analfabetos y

    donde

    la catequesis republicana era

    precaria y esporádica.

    Del p eblo de ciudadanos emanaba

    la

    soberanía. El proble

    ma

    radicaba

    en cómo

    dejar

    por

    fuera del proceso conslituyente

    a las mayorías y,

    al

    mismo tiempo, crear legitimidad y construir

    el orden legal revolllcionario centrado en el individuo egoísta.

    Este tema fue planteado por Antonio

    Nariño

    en un opúsculo

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    53/173

    EL DES)ENCUENTRO DE LOS

    C O L O M B I N O S

    CON L LIB E R L ISM O

    J95

    de? ¿Bajo

    qué

    fórmulas? Esto es lo

    que,

    rigurosa y

    estrictamente

    arreglado, nadie sabrá responder. Un movimiento s

    imult

    áneo

    de

    todos los ciudadanos de una provincia, en un mismo tiempo,

    hacia un mismo punto y

    con

    un

    mismo

    objeto, es una cosa pu

    ramente abstracta y en el fondo imposible. El que hemos visto

    practicarse entre nosotros por la verdadera ley

    de

    la necesidad:

    apropiarse cierto número de

    hombres

    de luces y

    de

    crédito

    de

    una

    parte de la soberanía para

    dar

    los primeros pasos, y después

    restituirla al pueblo.,,95

    La anterior es, aclaremos,

    una

    noción de

    soberanía desgaja

    da

    del árbol

    de

    la libertad bien

    entendida

    que defendiera l

    Papel Periódico de Santa

    e

    de Bogotá, aquel hijo legítimo de

    esa ambigüedad

    que

    es la

    impronta

    distintiva

    de

    todo el proceso

    de transformación cultural después

    de

    1770 en el

    Nuevo

    Rei

    no,,96.

    En

    su crítica política registraba los horrores antirreligio

    sos y antimonárquicos del jacobinism0

    97

    • Recordemos que en

    1793

    Nariño

    había impreso e

    intentado

    difundir la declaración

    de

    la

    Convención

    francesa

    de

    1789. Al volver a publicarla

    en

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    54/173

    MARCO

    PALACIOS

    9

    6

    de principio a fin;

    no

    es, sin embargo, el jacobinismo

    en

    tanlo

    que ideología revolucionaria, sino

    como

    suplantación del pue

    blo y

    de

    los actores sociales por la elite criolla que se arma y con

    vierte lo militar en el principio

    de

    organización del poder. Ése

    es

    el

    bolivarismo que en estos tiempos azarosos vienen invocan

    do los guerrilleros

    de

    izquierda.

    Guerra a muerte

    En

    la época

    de

    la primera república o Patria Boba, amplios

    sectores criollos -esclavócratas

    de

    las provincias

    de

    Caracas,

    Cartagena y Popayán, terratenientes cacaoteros de la

    Costa

    ecuatoriana hubieran preferido la reforma fiscal, comercial y

    administrativa bajo la autoridad

    de

    la monarquía española y

    garantizada por la

    Corona

    británica, que la zozobra de

    una

    re

    volución política doméstica.

    Intuían que

    las castas, rurales y ur

    banas, arrastradas por

    un

    movimiento violento e inconlenible,

    bien podrían terminar cometiendo actos tan espeluznanles

    como los

    de

    la rebelión haitiana de 1791.

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    55/173

    EL

    DES)ENCUENTRO DE LOS

    COLOMBIANOS

    CON

    EL

    LIBERALISMO

    197

    El decreto de guerra a

    muerte que

    expidiera Bolívar

    en

    Venezuela el15 de

    junio

    de 1813

    lanzó

    al segundo

    plano

    las que

    rellas

    por el

    territorio 1bradas

    entre

    el ites municipales

    y

    co

    marcales contra el centralismo político, así como las

    luchas

    ideológicas entre ilustrados tradicional istas. Propuso que la

    enemistad fundamental

    era

    entre

    españoles

    y

    americanos: Es

    pai'íoles

    y

    canarios, contad con la

    muerte aun

    siendo indiferen

    tes, si no obráis

    activamente en

    obsequio de la libertad de la

    América. Americanos,

    contad

    con la vida aun

    cuando

    seáis cul

    pables. Calculada respuesta

    al

    terror desencadenado por

    Mon-

    teverde, que éste experimentaría poco después en carne propia

    en el asedio y toma de

    Puerto

    Cabello bajo el mando de Bolí

    var . Alrededor de la oposición americanos-espaíioles habrían

    de

    polarizarse los

    campos

    las pasiones en

    una

    nueva guerra sin

    reglas

    de

    honor entre

    los combatientes

    y

    en

    el trato a la pobla

    ción, hasta que se pactó su humanización

    en

    1820'0 .

    Subrayemos

    el contenido

    social de la guerra planteada por

    Bolívar, esto es, la superación de los horizontes de la Patria Boba

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    56/173

    M RCO

    P L CIOS

    9

    8

    La pacificación

    de

    Morillo se inscribió

    en

    esta lógica,

    aun-

    que

    éste pretendió reglamentaria mediante sus consejos de gue-

    rra que llevaron al cadalso a más de 3 miembros de las elites

    neogranadinas de la Patria Boba, y sus tribunales de secuestros

    que les arrebataron su patrimonio. La reconquista de Morillo

    en

    la Nueva

    Granada

    comenzó

    con

    la invasión de comarcas es-

    tratégicas de la provincia de Cartagena j  el asedio de lO6 días a

    su plaza fuerte. En estas operaciones contó con el apoyo de los

    realistas

    de

    Santa

    Marta

    . Simultáneamente confluyeron hacia

    Santa Fe otras columnas realistas, por el sur, el oriente

    yel Cho-

    có. En provincias plagadas de discordias localistas, ideológicas y

    armadas, fue fácil a los militares españoles jugar con el munici-

    palismo clientelar de los cabildos, llluchos de los cuales los reci-

    birían en

    1816

    con arcos de triunfo, lo que aisló y debilitó más

    las fuerzas rebeldes. A mediados

    de

    aquel

    año

    estaba práctica-

    mente

    restaurada la

    dominación

    española

    ,0 2

    Las victorias militares y el portento retórico de sus proclamas

    pusieron alas de

    cóndor

    al mito del genio de Bolívar. Los diri-

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    57/173

      L VES )ENCUENTRO DE LOS

    COLOM BI NOS CON

    EL

    LIB E R L ISM O

    199

    fija

    y eterna a la República 'o  mediante

    la

    Ley Fundamental de

    Colombia (Ango tura, 1819 y la Constitución de

    la

    República

    de Colombia (Cúcuta, 1821 conformada por la Nueva Granada

    lo.¡

    YVenezue a .

    Sobre el lineamiento general de Angostura, se constituye

    en Cúcuta la República bajo

    la

    forma de gobierno popular re

    presentativo , con un presidente a la cabeza

    'o

    ,. Bolívar, quien de

    {acto y de jure es el jefe del Estado y el amo del ejército, encarna

    la unidad de los pueblos con su Estado. Jefe de la administra

    ción y de las relaciones exteriores, el presidente, y no el Congre

    so

    ni

    el poder judicial, detentaría los poderes extraordinarios,

    emanados bien por delegación elel Congreso o mediante decla

    ratoria elel estado de excepción o estado de sitio (art. 128 , que

    serían desde entonces la regla de oro en la pródiga carrera del

    constitucionalismo de la actual Colombia.

    El

    territorio

    se

    divi

    dió siguiendo

    el

    modelo territorial de autoridad delegada de

    arriba hacia abajo: departamentos, provincias, cantones y parro

    quias, en un ejercicio pragmático que seguía muy de cerca

    las

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    58/173

    MARCO PALACIOS

    2

    documento

    de

    Cúcuta

    no logró

    imponer

    su proyecto de

    una

    presidencia fuerte, dentro de un lineamiento clásico liberal, ni

    la extraña figura de

    un

    órgano del poder moral, el Areópago'

      7

    .

    Después

    de 1819, los criollos neogranadinos se propusieron

    consolidar la victoria sobre Espaíia y circunscribir el poder míli

    tar. Es decir,

    cuadrar

    el círculo, aspiración

    que

    nacía de su te

    mor a los ejércitos populares, racional izada como civilismo,o8.

    Al

    hacer

    del antimilitarismo su

    bandera

    los criollos granadinos

    contribuyeron a frenar las tendencias cesaristas' ''9.

    Fue

    entonces

    más evidente la contraclicción entre el

    poder

    militar-continental consolidado

    en

    la guerra

    que

    dirigía Bolívar

    en un frente que iba de Venezuela al Perú el Alto Perú, y el

    poder protonacional granadino y venezolano en cabeza de San-

    107

    .

    Véase a este respecto A. M. Battista, El podcr moral:

    el

    modelo clásico de

    Bolívar

      , en

    S. Schipani et al.,

    Conslilucionalismo la tillo )' liberalismo

    Bogotá,

    1990, p,ígs

    37 68.

    108. Kuethe constata la continuidad de e te civilismo desde la misma reforma

    militar borbónica a la que

    faltó

    el enlace feliz entre la creciente institución mili

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    59/173

    EL DES)ENCUENTRO DE LOS

    COLOMBIANOS CON EL LIBERALISMO

    2 1

    tander

    y Páez, respectivamente,

    poder apuntalado en

    la rutina

    administrativa o. Ejemplo del primero fueron las conversacio

    nes secretas de Bolívar y San Martín

    en

    Guayaquil (1822). En

    aquellas célebres entrevistas, los derechos nacionales del pue

    blo peruano fueron definidos

    en

    función de las esferas de

    inAuencia que

    deberían

    establecerse

    entre

    el norte y el sur

    de

    Suramérica, pactadas por sí y ante sí

    por

    dos caudillos que

    actuaban

    como

    soberanos de antiguo régimen '.

    El poder santanderista, afianzado por las prolongadas ausen

    cias de Bolívar,

    no puede

    reducirse a la administración leguleya.

    Recordemos a Bertrand de Jouvenel: En política, la acción es

    finalmente administración l12. El control meticuloso de la admi

    nistración impulsó a Santander a convertirse en

    emblema

    de un

    espíritu anticaudillista,

    en

    el jefe de una facción distintiva, afín

    con

    una

    sensibilidad neogranadina que, casi

    con

    la misma in

    tensidad

    en

    todas sus provincias, estamentos y clases, resentía y

    resistía el mandonismo de los generales venezolanos que, para

    colmo de males, parecía abrir espacios sociales a las castas.

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    60/173

    MARCO PALACIOS

    202

    antiguo,

    y

    moveré el mundo.

    Para Bolivia, este

    punto

    es

    el

    Presi

    dente vitalicio 3.

    Con la derrota política de Bolívar en

    1830, su

    renuncia for

    mal

    al poder)

    su

    muerte en

    busca

    del

    exilio,) ' la derrota

    militar

    de

    Urdaneta en

    1831,

    terminó esta especie de diarql1ía (héroe

    oligarquías) que en la época virreinal se había expresado como

    cabildos criollos-burocracia española.

    La guerra había unificado el

    mando

    militar pero 110 c1lide-

    razgo político 4. Subyacía el síndrome

    de

    una autoridad central

    débil, patente

    en

    el ocaso del virreinato,

    que

    resurge

    con

    virulen

    cia

    al nacimiento

    de la

    Gran

    Colombia, fenómeno acentuado

    por una

    peculiar

    dialéctica

    de

    guerra

    y

    revolución

    (J81O-1830) s.

    La política en la naciente república podría entenderse mejor

    por las tensiones

    entre

    el

    poder de

    Bolívar, centralizador, even

    tualmente

    populista

    y

    respaldado

    por

    el ejército ( el

    pueblo

    está

    en el ejército , sol ía repelir Bolívar) y por

    un

    ideal izado poder

    moral que nunca encontTó cauces formales, de UIl lado,

    y,

    del

    otro, el

    poder de

    oligarquías localistas, federalistas, que legiti

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    61/173

    Edificio desocupado

    EL DES)ENCUENTRO DE LOS

    COLOM8lANOS CON EL LIBERALISMO

    2°3

    Como

    las iglesias)' catedrales mexicanas

    en el

    siglo

    XVII,

    el

    edificio bolivariano fue quedando vacío. El caso mexicano se

    explicó por la catástrofe demográfica; el de la república de Bolí

    var

    podemos

    atribuirlo a la flagrante inadecuación del docu

    mento

    de

    Cúcuta

    con

    la

    constitución política real.

    Además, el nuevo Estado no pudo desatender los cambios

    en el

    balance de poder

    internacional. Tuvo

    que

    dar prelación a

    la financiación del déficit fiscal y atender las obligaciones con

    los acreedores londinenses. A

    la

    sombra de la Santa Alianza

    ya

    la luz de la revolución liberal espai'iola

    encabezada

    por Riego

    1820), puede comprenderse

    mejor el breve experimento

    de

    la

    Gran Colombia,

    definida por

    Deas como una

    conveniencia

    diplomática y militar que dejó de existir en cuanto no fue nece-

    .

    sana

    Por otra parte, esta república era

    impensable

    sin ciudadanos.

    La violenta ruptura del nexo hispánico y el peligro

    de

    una inva

    sión española en gran escala reforzaban la necesidad de crearlos.

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    62/173

    MARCO PALACIOS

    2°4

    las instituciones, la

    1

    bertad se sostuvo, y su grandeza, su

    poder

    y

    su gloria se conservaron sin inengua; pero ellas decayeron in

    mediatamente que perdieron los ciudadanos sus antiguas virhl-

    d

    IIR

    es .

    La observación subraya las dificultades ele inculcar

    en la

    po

    blación las nociones republicanas

    ele

    autoridad

    y

    obeelicllcia"

    9

    .

    La posibilidad de que cristalizara un nuevo orden de lealtades

    grancolombianas presentaba varios problemas, relacionados con

    1

    que se

    llamaba

    el edificio social. La

    nación

    colombiana debía

    navegar contra la heterogeneidad social en países de gober

    nantes criollos y mayorías mestizas (la Nueva Granada), pardas

    (Venezuela), e indias (Ecuador); contra la tradición política

    localista, la dispersión demográfica, la precariedad

    de

    las comu

    nicaciones,

    el

    atraso

    de

    la

    economía y

    una gigantesca

    deuda

    ex

    terna

    que

    ponía el fisco

    en números

    rojos.

    Subrayemos que el

    nacimiento

    de la república estaba ligado

    al

    valor de la justicia, a la negación de

    la

    opresión espai'íola.

    Entonces

    ¿qué más sabio y filantrópico

    que decretar

    n libertad

  • 8/19/2019 Marco Palacios - Parábola Liberalismo (parte 2)

    63/173

    EL DES ENCUENT

    RO DE LOS

    COLOMBI NOS CON EL

    LIBER LISMO

    2°5

    libres,

    abandonan

    el servicio de sus amos,

    que quieren

    obligar-

    los a permanecer en él, como que aún no se les ha indemnizado

    de

    su valor. Aquellos huyen, estos los persiguen y se hace