malos arbitrajes
TRANSCRIPT
ACERCA DE LOS MALOS ARBITRAJES
Podemos llegar a coincidir en que lamentablemente hay arbitrajes decididamente malos, por
muchas y diversas cuestiones como los son goles mal anulados, posiciones adelantadas no cobradas,
faltas violentas sin tarjeta, penales no sancionados, etc.; cuestiones éstas que exasperan los ánimos
de jugadores, técnicos, dirigentes y sobre todo de los familiares e hinchas que acompañan a los
equipos.
Este tipo de situaciones, siempre generan sospecha sobre la honestidad o moralidad de los
encargados de impartir justicia en los campos de juego. Los más extremos piensan inmediatamente
en sobornos, los menos hacen hincapié en la falta de aptitud o capacidad de los hombres de negro.
Ante todo, hay que tener en cuenta que un referee se puede equivocar. Los árbitros llevan ese
nombre porque toman decisiones arbitrarias y en esa toma de decisiones se pueden equivocar como
cualquier ser humano y eso es indiscutible. Ahora bien, hay que establecer márgenes de error
razonables y que esos errores no sean definitivos en el desarrollo del juego y hasta del resultado. Para
ello nuestra institución cuenta con un tribunal de árbitros que aparte de realizar las designaciones
correspondientes a cada fecha, debe velar por el normal comportamiento de nuestro plantel de
árbitros (ascienden a más de cuarenta en el listado). Aún cuando las críticas sobre los árbitros se
multiplican, este tribunal y quienes los conducen entienden que el nivel es relativamente bueno
(repito que no se trata del 100% de los casos), sin embargo se ha llegado, en casos graves, a expulsar
árbitros de nuestra institución.
Hay un factor determinante que hay que tener en claro a la hora de valorar a los árbitros y es
que hoy en día existe una gran demanda de los mismos por el fuerte crecimiento del fútbol amateur
en todas sus categorías incluso en fútbol femenino, lo que dificulta en demasía poder contar con un
plantel de árbitros que cumpla con todas nuestras expectativas.
Otro punto a tener en cuenta es tener en claro que existen casos en donde la intencionalidad
del árbitro con su sanción ante cierta incidencia del juego, se pone en duda únicamente cuando los
resultados son adversos.
Hace dos semanas en ocasión en que mi equipo jugaba en San Lorenzo, uno de nuestros
defensores tuvo un “desacierto” en un despeje la pelota pego en la mano de un delantero rival y este
convirtió un gol con el que finalmente perdimos uno a cero. Primera impresión el árbitro “nos tiró a
cag… es un HdP, pidamos que no nos dirija más”. Ahora veamos el contexto: Estábamos programados
a las 15:00, eran las 15:10 y eran seis jugadores, no teníamos la planilla de juego, no llegaba el que
tenía las camisetas del equipo y nos habíamos olvidado la pelota. A las 15:15 el árbitro llama por
última vez y entramos con nueve jugadores a la cancha, incluido el que suscribe que por una
operación en la rodilla no juega más al fútbol, obviamente de arquero. Cuando se jugaban 20 o 25
minutos del primer tiempo tiran una pelota larga que se perdía por línea de fondo, de esas que hay
que cubrir con el cuerpo y terminan en saque de meta. Pero tenemos un marcador de punta que
siempre hace lo imposible para colaborar con la delantera rival y en lugar de dejarla salir o despejar al
lateral, se dio vuelta para despejarla y en ese movimiento le erró a la pelota y casi se fracturó los dos
tobillos, esta pego entre el estomago y la mano del delantero, que rápido de mente me la colgó
mientras yo retrocedía tapando pozos y reclamando por una mano “clara”.
Esa tarde fuimos un desastre antes y durante el partido pero es más fácil tratar de disimular a
gritos, nuestros errores deportivos y organizativos cuestionando o culpando de todo ello a la
actuación del árbitro del partido.
Otro tema que está relacionado pasa por el poco respeto que muestran los jugadores hacia los
árbitros. Y tal vez en muchos casos los mismos árbitros contribuyan para que no se los respete, con
sus acciones complacientes y de un diálogo exagerado a veces con los jugadores. Sobre este punto
deben tener en claro que todos aquellos jugadores que agredan física o verbalmente a los árbitros
serán severamente sancionados.
En definitiva tratamos de mejorar la calidad de los arbitrajes a través de sanciones en algunos
casos y de formación en otros, para el bien de ustedes y de nuestra institución