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........ Informe de la Investigaci6n 31 Los problemas vinculados con el genero y la participacion de las mujeres en la agricultura de riego: EI caso de dos canales privados de riego en Carchi, Ecuador Elena P. Bastidas Instituto Internacional del Manejo del Agua POBox 2075, Colombo, Sri Lanka

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Informe de la Investigaci6n 31

Los problemas vinculados con el genero y la participacion de las mujeres en la agricultura de riego: EI caso de dos canales privados de riego en Carchi, Ecuador

Elena P. Bastidas

Instituto Internacional del Manejo del Agua POBox 2075, Colombo, Sri Lanka

La autora: Elena P. Bastidas es una estudiante de doctorado en el Departamento de Econom(a de los Alimentos y los Recursos de la Universidad de Florida, Gainesville, Florida.

EI Instituto Internacional del Manejo del Agua (lWMI) expresa su agradecimiento por el

apoyo econ6mico prestado a este estudio por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Ministerio Federal para la Cooperaci6n y el Desarrollo Econ6mico (BMZ), Alemania. La autora desea agradecer la colaboraci6n dellng. Jorge Sotomayor y ellng.

Ramiro Mera; el Dr. Carlos Garces y el Dr. Wim Kloezen del IWMI; la Ora. Susan Poats e Ivette Vallejo de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO); el Dr. Oswaldo Paladines. el Ing. Fabian Castillo y Antonio Ibarra del Consorcio para el

Desarrollo Sostenible de la Ecoregi6n Andina (CONDESAN).

Bastidas, E. P. 2000. Los problemas vinculados con el genero y la participaci6n de las mujeres en la agricultura de riego: EI caso de dos canales privados de riego en Carchi, Ecuador. Informe de la Investigaci6n 31. Mexico, D.F., Mexico: Instituto Internacional

del Manejo del Agua.

lias mujeres en el riego I genero I agricultura de riego I estudios de casos I canales de riego I asociaciones de usuarios del agua I manejo participativo I America Latina I Ecuador I

ISBN 92-9090-420-2

ISSN 1026-0862

© IWMI. 2000. Todos los derechos reservados.

EI autor es el unico responsable del contenido de est a publicaci6n.

Traductores: Nora A. de Allende y Carlos Garces-Restrepo.

r

Indice

Resumen v

Introducci6n 1

Las mujeres, el genero y el riego 1

Las mujeres y el riego en America Latina 2

La zona del estudio 3

EI riego en la zona 3

Las asociaciones de usuarios del agua 4

Dos canales 5

La asignaci6n del agua 6

Metodologfa 6

Los usuarios y los usos 8

La divisi6n del trabajo segun el genero 11

La participaci6n de las mujeres en la agricultura de riego 13

La composici6n y la etapa vital de la familia 15

Los antecedentes de las mujeres: Urbanos 0 rurales 19

La participaci6n de las mujeres en las asociaciones de usuarios del agua 19

Conclusiones 21

Anexo 23

Bibliograffa 25

iii

Resumen

En los ultimos decenios, los resultados de las investigaciones han hecho comprender a los gobiernos y a las organizaciones internacionales y locales la importancia de la funcion desempefiada por las mujeres en el manejo del agua. Sin em­bargo, todavfa se carece de investigaciones sobre las funciones y las tareas de las mujeres en la agricultura de riego, en especial en America Latina. AI considerar a las mujeres como un grupo heterogeneo entre los distintos grupos de usuarios del agua, este informe trata de determinar los factores que influyen en la participacion de las mujeres mestizas en la agricultura de riego en dos canales privados de la provincia de Carchi, Ecua­dor. Despues de una introduccion a la zona del estudio, se describe a los usuarios, sus necesidades y los distintos usos del agua de los

dos sistemas de riego. Tambien se define el grado de participacion de las mujeres en la agricultura de riego. Por ultimo, se identifican los factores que limitan la participacion de las mujeres en la agricultura de riego y en las asociaciones de usuarios del agua. Se emplea una tipologfa basada en la "etapa vital" de la familia y la composicion de esta para explicar la participacion de las mujeres en la agricultura de riego. Se analizan la relacion

de los usuarios del agua con el recurso y los antecedentes rurales 0 urbanos de las mujeres en los distintos tipos de familias. La participacion de las mujeres en la agricultura fue mayor en las familias cuya cabeza era una mujer. En las famillas donde la pareja tenia hijos pequenos, la participacion de las mujeres en la agricultura estaba limitada por las obligaciones familiares. En aquellos casos en que una pareja de edad vivfa sola, las mujeres eran demasiado viejas 0 estaban enfermas y no pod fan participar como solfan hacerlo antes en las actividades agrfcolas. Por ultimo, en las familias donde la pareja no tenIa hijos pequefios, las mujeres prefer(an dedicarse a otras actividades que les permiHan controlar sus ingresos. Tambiem se descubrio que era mas probable que participaran en actividades agrfcolas las mujeres con antecedentes rura:es, en

comparacion con las que ten ian antecedentes urbanos. EI estudio indica que solo mediante un examen minucioso de la dinamica intrafamiliar y los antecedentes urbanos 0 rurales que afectan a las mujeres en cada uno de los distintos tipos de familias se podra explicar en forma apropiada la participacion de las mujeres en la agricultura de riego.

v

Los problemas vinculados con el genero y la participaci6n de las mujeres en la agricultura de riego: EI caso de dos canales privados de riego en Carchi, Ecuador

Elena P 8astidas

Introducci6n

Las mujeres, el genero yeJ riego

EI reconocimiento de la importancia de las

mujeres en la producci6n de alimentos y el

suministro de agua para uso domestico ha

aumentado en los ultimos decenios (Roda 1991;

Davidson 1993; Cleaver y Jobes 1996). Se ha

estimado que las mujeres son responsables de

mas de la mitad de los alimentos producidos en

los parses en desarrollo. Los resultados de las

investigaciones tambiE'm han hecho comprender a

los gobiernos y a las organizaciones

internacionales y locales la importancia de la

funci6n desempenada por las mujeres en el

manejo del agua (Davis 1996; Johnson y

Krogman 1993). No obstante, todavfa se carecen

de investigaciones sobre las tareas y funciones

especfficas de las mujeres en la agricultura de

riego, en especial en America Latina.

La mayorra de los datos concernientes a

experiencias en el desarrollo del riego provienen

de parses africanos 0 asiaticos. Uno de los

supuestos frecuentes acerca de los agricultores

y, por 10 tanto, de quienes riegan, es que son

predominantemente varones, 10 cual lIeva al

supuesto de que los recursos y el trabajo de las

familias campesinas son de hecho controlados

por los varones y asignados a estos. Las

investigaciones en los sistemas africanos

(Carney 1988; Jones 1986; Zwarteveen y

Neupane 1997) y asiaticos (Hart 1992;

Zwarteveen 1996) se han concentrado en

verificar este supuesto, el cual ha orientado las

polfticas, la planificaci6n y el diseno del riego.

Esos estudios tambien han demostrado que no

tener en cuenta los problemas del genero influye

en forma negativa en la productividad agricola de

los cultivos irrigados y que la falta de acceso

independiente a la tierra y el agua y del control

de estas por parte de las mujeres amenazan la

seguridad alimentaria familiar. Si bien estos

estudios proporcionan informaci6n y ejemplos

valiosos, no podemos esperar que las

recomendaciones y las ensenanzas aprendidas

de ellos sean directamente aplicables en el

contexte latinoamericano.

Este informe pretende determinar los

facto res que influyen en la participaci6n de las

mujeres mestizas en la agricultura de riego en

dos canales de la provincia de Carchi, Ecuador.

Para este prop6sito, se considera a las mujeres

como un grupo heterogeneo entre los distintos

grupos de usuarios del agua. Como grupo

heterogeneo, su participaci6n en la agricultura de

riego y sus necesidades y responsabilidades son

diversas, en la medida en que influyen en elias

distintas variables sociales. Se emplea una

tipologfa basada en la "etapa vital" y la

"composici6n" de la familia para explicar la

participaci6n de las mujeres en la agricultura de

riego. Tambien se analizan los antecedentes

(rurales 0 urbanos) de las mujeres en los distintos

tipos de familias.

Los objetivos de este informe son, en primer

termino, definir a los usuarios, sus necesidades

con respecto al recurso y los distintos usos del

agua en dos sistemas de riego, Garrapatal y EI

Tambo, situados en la provincia de Carchi,

Ecuador; en segundo lugar, determinar el grado de

participaci6n de las mujeres en la agricultura de

riego y en la toma de decisiones, y, por ultimo,

identificar los factores que limitan la participaci6n

de las mujeres en la agricultura de riego y en las

asociaciones de usuarios del agua.

Las mujeres y e/ riego en America Latina

Los sistemas agrrcolas latinoamericanos fueron

primeramente clasificados por Boserup (1970)

como "sistemas agrrcolas masculinos", en

contraste con los paises africanos, donde se

estima que las mujeres agricultoras producen

hasta el 80% de las cosechas. EI argumento

subyacente en esta clasificaci6n era que, en los

sistemas caracterizados por la agricultura

asentada, por 10 general los hombres realizan mas

tareas que las mujeres. Deere y Le6n De Leal

(1982), quienes analizaron estudios de las

regiones andinas de America del Sur relacionados

con las mujeres y sus actividades productivas,

pusieron mas tarde en tela de juicio esa

clasificaci6n. En su estudio, estos investigadores

concluyeron que el termino "sistema agricola

familiar" serra mas apropiado que "sistema

agricola masculino", Encontraron que las mujeres

de hecho sf participan en las actividades

agrfcolas, aun cuando los hombres efectUan la

mayor parte del trabajo en el campo.

Segun Brydom y Chant (1989), las creencias

que usualmente surgen sobre la base de la

religi6n y otros aspectos culturales son

fundamentales para determinar las funciones de

los varones y las mujeres en la sociedad. En

America Latina, el predominio y la influencia de

los valores coloniales hispanicos y la Iglesia

Cat61ica han configurado las funciones

masculinas y femeninas en las comunidades

mestizas, limitando a las mujeres ai ambito

domestico 0 reproductivo (Brydom y Chant 1989).

A pesar de esto, las investigaciones realizadas

en Ecuador y Peru muestran que la participaci6n

de las mujeres en la producci6n agricola y las

actividades de riego es mayor de 10 que

generalmente se supone.

Un estlJdio efectuado por Villalobos et al.

(1993) en la comunidad de Camiraya Molino en

Puno, Peru, revela que, en la mayorfa de los

casos, las mujeres estan mas involucradas que

los hombres en el manejo y empleo del agua

para prop6sitos de riego. Las mujeres participan

tanto como los hombres, incluso en el

mantenimiento, la limpieza y ia construcci6n de

los sistemas de riego. Una de las razones de

esto se atribuy6 al aumento de la emigracion de

los hombres a las ciudades, quienes dejaron a

las mujeres a cargo de las actividades de

producci6n. EI mismo estudio mostr6 que, si bien

era elevada la participaci6n femenina en las

actividades agr(colas y de riego, la participaci6n

de las mujeres en las reuniones de las

asociaciones de usuarios del agua era escasa.

Jacome y Krol (1994) encontraron resultados

similares en las comunidades mestizas de

Guano, Ecuador. A causa de la diffcil situaci6n

econ6mica, los hombres emigran a las ciudades

cercanas para trabajar como choferes 0 albaniles

con el fin de complementar los ingresos

familiares. S610 los ancianos y los agricultores

que tienen suficiente tierra se quedan para

realizar tareas agricolas. En ambos estudios, los

autores encontraron que la participaci6n de las

mujeres en la agricultura de riego variaba de

2

acuerdo con la emigraci6n de los hombres. Segun

Lynch (1991), la participaci6n femenina en la

construcci6n y el mantenimiento de los sistemas

de riego es muy variada en los Andes. Esta

investigadora encontr6 que en Cajamarca, Peru,

La zona del estud io

La zona del estudio es parte del area de

utilizaci6n del agua del rfo EI Angel, que forma

parte del sistema hidrol6gico del rio Mira, una de

las cuencas mas grandes de Ecuador. La zona

esta situada en la parte septentrional del pafs, en

la provincia de Carchi, cerca del Ifmite con

Colombia (vease el Anexo). Su ubicaci6n

estrategica tiene un impacto directo en la

agricultura, la explotaci6n forestal y los centros de

consumo de Ecuador y Colombia. La subcuenca

del rio EI Angel comienza en el alto paramo1 de

la Reserva Ecol6gica EI Angel. Desde este punto,

numerosas corrientes forman el rio EI Angel y 11

canales de riego diferentes, que proporcionan

agua para la agricultura. Estos canales de riego

son manejados por asociaciones de usuarios

particulares del agua (Nunez 1997).

Estos canales y el rfo EI Angel cruzan tres

zonas agroecol6gicas distintas en su trayectoria

hacia el rfo Mira. En la zona superior (2,400

metros sobre el nivel del mar), la producci6n se

caracteriza por la crfa de ganado y el cultivo de

granos basicos (trigo y cebada) y la papa (Vallejo

1997; Arce et al. 1996). La zona media (2,000­

2,400 metros sobre el nivel del mar) es mas

calida y mas seca y la mayor parte de la

producci6n agricola depende del riego. EI malz, el

trigo y la cebada son los cereaJes cultivados con

las mujeres trabajaban s610 por period os breves

en pequenas tareas, mientras que en Puno, Peru,

constitufan mas de la mitad de algunas cuadriflas

de trabajadores.

mas frecuencia y, junto con los cultivos

hortfcolas, en especial los frijoles, y los huertos

de arboles frutales (principalmente el aguacate),

tienden a predominar sobre la crfa de ganado. En

la parte inferior (1,700-2,000 metros sobre el nivel

del mar), la can a de azucar y los cultivos

hortfcolas son los principales productos agrfcolas

(Vallejo 1997).

La agricultura constituye el sector mas

importante en la economfa de Ecuador. Aporta

aproximadamente el 17% del PIB total y hasta el

40% del empleo total de la fuerza de trabajo

ecuatoriana. La agricultura de riego abarca el 27%

de la superficie cultivada total. EI 80% de estas

tierras irrigadas corresponden a sistemas de riego

manejados por asociaciones privadas de usuarios

del agua, situados principalmente en los Andes

(Whitaker 1990).

EI riego en la zona

La mayorfa de los canales privados en esta zona as( como los otros sistemas de riego encontrados

en las tierras altas ecuatorianas tienen una larga

historia. Segun Le Goulven, Ruf y Ribadeneira

(1989), los sistemas de riego en las zonas

andinas eran conocidos desde mucho antes de la

'Se da este nombre a las regiones inh6spitas y trias situadas a gran altitud en las zonas tropicales de America del Sur.

3

lIegada de los esparioles (1530) y tal vez antes de la lIegada de los Incas desde Peru

(aproximadamente en 1470). La mayorfa de las redes existentes fueron construidas entre los

siglos XVII Y XVIII, cuando los ricos terratenientes pod fan hacer que los trabajadores indfgenas cavaran y mantuvieran canales que eran periodicamente destruidos por el mal

tiempo, los desbordamientos y los terremotos. En los siglos XIX Y XX, en especial en la

zona de Carchi, la tierra fue dividida

gradualmente a causa de los movimientos sociales, con 10 cual se produjeron cambios en el uso del agua. Por una parte, las haciendas mas

grandes se dividieron entre los descendientes, 10 cual origino problemas en el reparto del agua que fUeron reueltos mediante la construccion de

nuevos canales; por otra parte, los

huasipungueros2 reclamaron sus derechos de agua, justificados por su crucial participacion en

la construccion y mantenimiento del sistema de riego (Le Goulven, Ruf y Ribadeneira 1989).

Si bien el proceso de division y distribucion

de la tierra ya se habra iniciado en Carchi, la Reforma Agraria de 1960-1970 fortalecio este movimiento. En 1966, se creo el Instituto

Nacional de Recursos Hfdricos (INERHI). Su proposito principal era resolver los conflictos que surgfan Pensamos entre los propietarios y los

usuarios de las redes de riego. La autoridad del instituto se reforzo cuando se nacionalizaron los

recursos hfdricos en 1972. EI INERHI era la institucion responsable de controlar y otorgar las concesiones de agua. En consecuencia, los usuarios del agua tenfan que declarar sus

anteriores derechos de agua para que fueran

legalizados (Whitaker 1990). En 1994, como resultado de las polrticas de modemizacion en el

pars, las responsabilidades del INERHI fueron

asumidas por las Corporaciones para el Desarrollo Regional,una de las cuales es la Corporacion

Regional para la Sierra Norte (CORSINOR). que esta a cargo de manejar los recursos hfdricos en las tierras altas del norte (Sotomayor y Garces 1996).

Las asociaciones de usuarios del agua

La construccion, mantenimiento y manejo de los

sistemas privados de riego y las superficies regadas son responsabilidad de los usuarios y sus asociaciones. lIamadas Juntas de Aguas,

formadas por grupos de agricultores a quienes se les han otorgado derechos legales para usar el agua de los canales privados. La mesa directiva

de cada junta esta formada por un presidente, un vicepresidente, un tesorero y un secretario que

son elegidos cada ario. Las asociaciones tienen

reuniones peri6dicas durante el ario para planear el mantenimiento y el manejo de los canales y resolver los conflictos entre los usuarios u otros

tipos de problemas vinculados con el sistema de riego. Cuando el agua del mismo canal riega varias areas distantes, los agricultores se

organizan en subjuntas para realizar mejor el mantenimiento y manejo. Los presidentes de las subjuntas forman la junta de la asociacion de

usuarios del agua para el canal principal. EI trabajo de mantenimiento de los sistemas

de riego es un reto a causa de la infraestructura

de los canales. Las instalaciones antiguas consisten en sinuosos canales de terraplen cavados en las pendientes de las montarias, que

a menudo desaparecen en largos tUneles y tienen caudales de alrededor de 500 I/s. Las tomas de agua son rusticas (se desvfa el agua con piedras)

y, por consiguiente, inestables. A todo 10 largo del

2Los huasipungueros son campesinos que trabajaban en las grandes haciendas. EI patr6n daba al huasipunguero y su familia una parcela de dos 0 tres hectareas (a veces mas) para que se mantuvieran. A cambio. el huasipunguero tenia que trabajar cuatro 0 cinco dlas de la semana en la hacienda. En ciertos casos, podlan usar una yunta de bueyes para arar sus parcelas y reciblan turnos de agua durante los fines de semana.

4

Cuadro 1.

Caracteristicas de algunos de los sistemas de riego, incluidos los canales Garrapatal y EI Tambo.

Caracteristicas San El Galera Cunquer Huaquer Garrapatal Vtte. Higueron

Vicente Tambo Banos

Altitud de la toma del 3,700 3,200 1,670 3,220 2,860 2,665 1,580 1,590 agua (m sobre el

nivel del mar)

Longitud del canal (km) 47.90 26.10 3.20 57.20 30.36 10.77 1.23 1.56

Tamano medio de las 5.8 2.8 parcelas (ha)

Superficie regada (ha) 350 416 150 497

No. de areas regadas 7 8 4 2 6

curso, los canales se cruzan entre sf y se enredan. En general, se aplican tecnicas de riego

por gravedad, adecuadas para la topografla de la

zona (Le Goulven, Ruf y Ribadeneira 1989).

Dos canales

Entre los 11 sistemas de riego, se seleccionaron

dos canales privados, Garrapatal y EI Tambo, para estudiarlos en detalle. La seleccion de esos

canales se baso en la infraestructura, los patrones

agrfcolas y la estructura de organizacion de los dos sistemas. En el Cuadro 1 se sintetizan las caracterfsticas de algunos de los sistemas.

EI canal Garrapatal tom a agua del rio EI Angel a una altitud de 2,665 metros sobre el nivel del mar (en un sitio que corresponde a la zona

superior de la subcuenca) y durante su curso distribuye agua a ocho areas distintas de riego en la zona media de la subcuenca (La Cocha,

Grandeza Nacional, San Nicolas, La Providencia, Loma Seca, San Marcos, Playa Rica y Uyama). Los usuarios de estas areas de riego estan

organizados en 11 subjuntas cuyos presidentes

forman la asociacion de usuarios del agua del canal principal.

La toma de agua para el canal EI Tambo esta

situada a una altitud de 3,200 metros sobre el

nivel del mar. En su curso, el canal cruza la zona media pero entrega la mayor parte del agua a

zonas de riego localizadas en la parte inferior de

la subcuenca (San Pablo de la Cangahua, San Francisco, Torrealba, Potrero Grande y EI Tambito). La mayorra de los usuarios que se

benefician con este canal viven en la comunidad de EI Tambito y, en contraste con el canal

Garrapatal, la organizacion se centra alrededor de una sola asociacion de usuarios del agua.

Se ha estandarizado la produccion media de

cultivos en EI Tambo (1.15 t/ha) y Garrapatal (1 V ha) tomando a los frijoles como cultivo basico (Cuadro 2). EI valor bruto estandarizado de la produccion por hectarea en EI Tambo es mas alto

que en Garrapatal ya que en EI Tambo el anfs es uno de los cultivos principales y tienE! un precio de venta mejor que el de los frijoles. EI Tambo

tambien tiene un mejor valor bruto de produccion

por m 3 de agua(Molden et al. 1998) ya que la cantidad de agua suministrada a la zona es

inferior que en Garrapatal (Sotomayor et al. 1997). EI Cuadro 3 muestra los patrones de

produccion para los cultivos de verano e invierno. En ambos sistemas, el cultivo principal son los

5

Cuadro 2.

Indlcadores del desempeno de los canales el Tambo y Garrapatal.

Indicadores del rI"c"m.~"i'i,... E1Tambo

Producci6n frijoles (tJha) 1 1.15 Valor bruto estandarizado de la producci6n por 1,292 1,508 cielo ($lha)*

Valor bruto estandarizado de la producci6n por 0.16 0.32 unidad de suministrada

• EI lipo de cambia media en 1996 lue de US$1 = 3.210 sucres

Fuente: Sotomayor et at 1997.

frijoles. En Garrapatal, los frijoles y el marz abarcan aproximadamente el 74% de la

superficie cuItivada, mientras que en El Tambo

corresponden a los frijoles y el an(z el 79% de la

superficie cultivada.

La aSignacion del agua

En ambos canales, as( como en la mayor(a de

los otros sistemas de riego de la zona, se asigna y distribuye el agua conforme a las

concesiones del agua y los calendarios de

rotaci6n, que fueron establecidos cuando se formaron por primera vez las asociaciones durante los arios 70. En ese perfodo, las

Metodologfa

Se reunieron los datos para este estudio durante dos visitas a los campos en verano Ounio-agosto de 1996 y mayo-agosto de 1997). Con el fin de lograr los objetivos propuestos, se emple6 una combinaci6n de metodos cualitativos y cuantitativos para recolectar informaci6n. Durante

la primera visita, se usaron hechos hist6ricos,

concesiones y los turnos eran aprobados por la

Oficina del Agua del Ministerio de Agricultura y supervisados par los tecnicos del anterior

INERHI. EI criterio empleado para establecer el tumo del agua se basa en la disponibilidad del agua (concesiones) para cada ramal, el tiempo y

la supericie irrigada. En algunos casos, los agricultores reciben 12 horas de agua por hectarea cada 15 dfas, mientras que en otras

zonas el tumo de agua representa de seis a siete horas por hectarea una vez por semana. En cualquier caso, los tumos del agua se basan

en concesiones te6ricas que rara vez concuerdan con la cantidad real de agua

entregada. Se ilustra esto en detalle en

Sotomayor et al. 1997).

grupos focales y el analisis de los generos

(Feldstein y Poats 1993) en forma participativa para obtener informaci6n cualitativa. Tambien se

recurri6 a la elaboraci6n de mapas y el analisis de los interesados para identificar a los distintos usuarios de los sistemas y sus necesidades

primarias.

6

Cuadra 3.

EI patron de los cultivos en los sistemas de riego Garrapatal y EI Tambo, verano de 1996 e invierno de 1996 -1997.

Verano 1996' Inviemo de 1996·1997b

Cultivo Garrapatal El Tambo Garrapatal El Tambo

ha % ha % ha % ha %

Frijoles 183 39 162 47 209 40 308 63

Maiz 157 34 41 12 186 35 18 4

Anis 0 0 93 27 11 2 105 21

Tomate 34 7 0 0 37 7 0 0

Trigo 11 2 12 4 11 2 8 2

Cebolla 0 0 4 1 30 6 20 4

Otros 81 18 32 9 43 8 29 6

Total 466 100 }44 100 527 100 488 100

a EI cicio de verano, seco, duro 11 semanas. b el cicio de invierno, hurnedo, dur6 15 sernanas

Fuente: Sotornayor et al. 1997

En la segunda visita, se utilizaron las entrevistas domiciliarias, los estudios de casos y

los grupos focales para obtener informacion cuantitativa. Las entrevistas domiciliarias se basaron en una muestra aleatoria tomada de los

registros de las dos asociaciones de usuarios del

agua. Para esta parte del estudio, se tuvo en cuenta a las familias de agricultores varones 0

mujeres que pose ian por 10 menos una parcela reg ada. En el caso de Garrapatal, se tomaron tres submuestras correspondientes a agricultores

ubicados en el inicio, la mitad y la cola del canal. En el caso de EI Tambo, se tomo una submuestra correspondiente a la principal area de riego. Se

efectuaron 60 entrevistas, 15 en cada submuestra. Una vez completadas las entrevistas, se usaron los grupos focales para esclarecer y

convalidar la informacion obtenida en las

entrevistas. Sobre la base de est a informacion, se identificaron cuatro tipos de familias segun la

"etapa vital" y la "composicion" de la familia. Se realizaron estudios de casos para conseguir informacion detail ada sobre los distintos tipos de

familias. Para los propositos de este estudio, se define

a una "familia" como una unidad residencial donde

los miembros com parten funciones y actividades domesticas, un grupo de personas que "comen de

la misma olla" 0 "com parten la misma mesa" (Brydom y Chant 1989). Los individuos que no estan ffsicamente presentes pero contribuyen a

sostener la familia tambian son considerados

miembros de asta. Si bien el hecho de ser miembro de una familia implica por 10 menos un

grado mlnimo de interaccion con los otros integrantes de la unidad, no se puede suponer que esa interaccion signifique igualdad y ni siquiera

cooperacion entre los individuos. Segun Kabeer (1985), es comun encontrar disparidades significativas en cuanto a los aportes, los beneficios y las actividades de los diversos miembros de la familia, en los cuales influyen variables tales como la edad y el sexo.

EI termino "etapa vital" se puede definir como el tamano y la composicion generales de una

familia. EI concepto de distintas etapas vitales de familias individuales no debe implicar que el desarrollo de la familia siga un patron predeterminado; es decir, si bien muchas familias

tienen semejanzas, no todas las familias originaran etapas vitales identicas (Murray 1987; Kabeer 1985).

7

Cuadro 4.

Usos y usuarios del agua en los canales Garrapatal y EI Tambo.

Relacion con el recurso Usos Usuarios Usuarios directos Riego Propietarios de parcelas (hombres

y mujeres) Aparceros (predominantemente

varones)

Arrendatarios (hombres y mujeres) Trabajadores asalariados (hombres y mujeres)

Usuarios indirectos Lavar la ropa Mujeres Bafiarse Hombres, mujeres y nifios

Consumo domestico (para beber, Mujeres, hombres y nifios lirnpiar, etc).

Dar de beber a los animales Principalmente mujeres y nifios

Los usuarios y los usos

En esta secci6n se presenta un anal isis de c6mo la relaci6n entre el usuario y el recurso determina

quien tiene el control del agua de los canales de riego y quien tiene mas probabilidades de tener

acceso a elia. Mediante la elaboraci6n de mapas en colaboraci6n, se localizaron los puntos a 10 largo de los canales donde se utilizaba el agua.

Se agrup6 a las personas en dos categorfas amplias segun su relaci6n con el recurso: (1) los usuarios directos, que utilizan el agua para la

producci6n de cultivos (riego), y (2) los usuarios indirectos, que emplean el agua para actividades distintas del riego (Cuadro 4).3

Los usuarios directos

Este grupo inciuye a agricultores (tanto hombres como mujeres) a quienes se les han otorgado derechos y concesiones legales para emplear el agua de los canales para el riego. Como se

mencion6 anteriormente, la tierra en la zona del

estudio habfa sido propiedad de unas cuantas familias, en forma de grandes haciendas. A causa

de la presi6n de los movimientos sociales y de las Reformas Agrarias de los arios 60 y 70, parte de la tierra fue dividida y vend ida a grupos de

agricultores, mientras que otras partes fueron entregadas a los campesinos (huasipungueros) a cambio de su trabajo. Antes de la ley de aguas

de 1972,4 los derechos de tierras y aguas se

3CO~0.estos canales fueron construidos como sistemas de riego, los terminos directo e indirecto reflejan si el agua se eri"lplea para ese proposItO 0 para otro uso.

'La ley de ~guas de 1972 establece que los derechos de agua se otorgan al propietario de la tierra que simple mente presenta el corre.spondlente tft~lo de propiedad. Las concesiones para el uso del agua se asignan proporcionalmente a la cantidad de tierras poseldas por el agncultor.

8

adquirran en forma independiente, 10 cual permitio a algunos agricultores de la zona superior de la cuenca (donde predomina la

agricultura de temporal) comprar tierras5 sin adquirir concesiones de agua. En la misma

forma, algunos agricultores de los valles inferiores compraron derechos de agua sin tener que comprar mas tierras de las que ya poseran.

En un grupo focal, uno de los agricultores de la zona superior expreso la opinion de sus companeros campesinos:

Pensamos que los derechos y las concesiones de agua tienen que ser redistribuidos. Cuando se dividi6 la tierra,

nuestros antepasados no lucharon para

obtener agua para el riego porque no la necesitaban. Con las lIuvias, ten ian agua suficiente para la agricultura. Ahora el clima ha cambia do, ya no podemos predecir cuando 1I0vera. La agricultura se vuelve un negocio mas arriesgado cada

ano. No es justo que los agricultores de los valles de abajo usen toda el agua de

los canales.

Recientememte, los cambios en los patrones climaticos y la poblacion han comenzado a

generar conflictos entre las comunidades de la zona superior (que han sentido ultimamente la

necesidad del riego) y las comunidades de los valles inferiores (que siempre se han beneficiado con ese recurso). Los agricultores de la zona

superior quieren beneficiarse con el agua de los canales. No obstante, los agricultores que ya tienen concesiones de agua indicaron que la can tid ad de agua no es suficiente para la produccion de los cultivos, especialmente

durante la temporada seca Gunio, julio y agosto) y se quejaron de que en esos perrodos aumentan los robos del agua. Es comun encontrar que se desvra el agua a campos de agricultores que no tienen concesiones de agua. Otro problema es

que los agricultores que viven a 10 largo de los canales no dejan la distancia establecida (4 m) entre los canales y sus parcelas. De esta forma,

usan la filtracion del suelo cerca de los canales para regar sus cultivos y, por consiguiente, se danan las paredes de los canales.

Los usuarios directos pueden a su vez ser clasificados como propietarios de parcelas, aparceros, arrendatarios y trabajadores asalariados. Estas categorras no son

mutuamente excluyentes; los miembros de la familia pueden ser incluidos en una 0 en todas

esas categorras segun sus medios de ganarse el sustento.

Los propietarios de parcelas. Esta categorra

incluye a los huasipungueros 0 sus descendientes (agricultores que original mente

compraron tierras a los propietarios de las haciendas) y a agricultores que vinieron de otros lugares y compraron tierras en anos posteriores.

Los agricultores de este grupo forman la asociacion de usuarios del agua y tienen las responsabilidades de la construccion, el mantenimiento y el manejo de los sistemas de

riego. Algunos de los agricultores mas ricos de

este grupo se han mudado con sus familias a las ciudades. Estos agricultores arriendan sus tierras

o com parten las actividades agrrcola con aparceros. Por 10 general, visitan sus propiedades los fines de semana. Como toda la

familia vive en la ciudad, las mujeres no participan en la agricultura; los hombres manejan las actividades agrrcolas.

'En el caso de los huasipungueros, se entregaba la tierra sin los derechos de agua.

9

Los aparceros y los arrendatarios. Los agricultores

que no tienen tierras suficientes para prop6sitos

agricolas pero cuentan con los recursos

necesarios, practican la aparcerfa 0 el

arrendamiento. En el caso de los aparceros, hay

varios tipos de acuerdos segun las situaciones

especfficas. En general, el propietario pone la

tierra, paga por la preparaci6n de asta y se hace

cargo de la mitad del costo del control de las

plagas. A cambio, el aparcero pone la mano de

obra, paga la mitad del costo del control de las

plagas y paga todos los otros insumos

necesarios. Cada uno obtiene la mitad del

producto de la cosecha. Los arreglos sobre el

pago de las tarifas del agua y el costo del

mantenimiento de los canales varfan segun el

tiempo por el cual se arrienda la tierra. Si la

aparcerfa es para un solo cicio de cultivo, por 10 comun el propietario se hace cargo del costo.

Cuando la aparcerfa es por varios ciclos, el costo

se divide entre el propietario y el arrendatario.

Los trabajadores asalariados. Para los agricultores

que no tienen ni la tierra ni recursos suficientes,

el trabajo asalariado representa una forma

importante de ganar su sustento. Los hombres y

las mujeres son contratados para trabajar en los

campos. Segun el propietario de una hacienda, se

prefiere a las mujeres durante la siembra y la

cosecha porque hacen un mejor trabajo en esas

actividades. Mientras que a los hombres se les

paga 2.50 d61ares estadounidenses por dia de

trabajo, las mujeres reciben 2.00 d6lares. Esta

diferencia en los salarios, es, segun los

agricultores, porque el trabajo que realizan las

mujeres no es tan pesado como el que hacen los

hombres.

Si bien esta percepci6n comun se puede

impugnar facilmente, se la usa para justificar el

salario mas bajo pagado a las mujeres. Las

mujeres aceptan esta desigualdad debido a las

pautas culturales, las cuales definen las funciones

de los generos en la cultura mestiza.

Los usuarios indirectos

EI segundo grupo incluye a usuarios legales y

tambian a las personas que viven a 10 largo de

los canales. Las personas utilizan el agua del

canal para consumo domestico,6 para bafiarse y

lavar la ropa porque no tienen acceso al agua

entubada 0 los sistemas de abastecimiento de

agua no funcionan apropiadamente. Una mujer

usuaria explica:

Esta es la tercera vez en esta

semana que he venido al canal para lIevar

agua a la casa. A pesar de que tenemos

las instalaciones para el agua entubada,

el sistema nunca funciona. Algunos dicen

que es porque los tanques que

almacenan el agua estan siendo

reparados, pero esto sucede todo el

tiempo ... as{ que nos vemos ob/igados a usar esta agua para todo. Tambien vengo

a lavar la ropa aqufy a veces mis hijos

vienen conmigo para bafiarse en el

canal ...

La mala caUdad del agua es uno de los

principales problemas que afrontan los usuarios.

En la zona, por 10 general se vierten los

desechos en los canales y rios, a pesar de que

todos conocen los usos del agua de los canales.

En el caso del rfo EI Angel, se vierten en ella

mayorfa de los desechos de la poblaci6n de EI

Angel (6,000 habitantes), incluyendo los

desechos del hospital. Con respecto a esta

situaci6n, uno de los usuarios comenta:

=

,,

,\

'La ley de aguas de 1972 legalmente protege el empleo del agua para esos prop6sitos.

10

Sabemos que los desechos de las

distintas comunidades son descargados

en el canal. Hasta hemos encontrado en el

animales muertos. Sabemos que el agua

esta contaminada, pero lque podemos

hacer? No podemos hervir el agua antes

de usarla porque se consume demasiada lena 0 gas.

Los ninos son los mas afectados por esta

situaci6n. Segun las enfermeras q~e trabajan en el dispensario local, es alta la incidencia de

enfermedades causadas por parasitos. Atribuyen

este problema a las deficientes condiciones sanitarias y la mala calidad del agua. La

necesidad de agua limpia es fundamental para las mujeres ya que es su responsabilidad proporcionar el agua para la familia y los ninos.

\

Las municipalidades y los gobiernos locales

tienen la responsabilidad de proporcionar agua limpia a las comunidades y pueblos. No obstante, en realidad los gobiernos locales toman medidas

para resolver el problema 5610 cuando existe un grupo bien organizado de personas que ejercen una presi6n polftica. Como las peticiones

respaldadas por organizaciones tienen mas probabilidades de ser escuchadas por las autoridades locales, las asociaciones de usuarios

del agua son fundamentales para resolver los

problemas de este tipo. En un caso, una subjunta del canal Garrapatal, constituida por un grupo de

42 agricultores, persuadi6 a la junta de la asociaci6n de usuarios del agua que cabildeara por ellos ante las autoridades municipales para

obtener agua entubada.

La division del trabajo segun el g{mero

En las necesidades, tareas y responsabilidades

de los grupos descritos antes influyen no s610 las relaciones de los usuarios con el recurso sino tambien los factores culturales determinantes.

Conforme al Marco de las Funciones Triples

presentado por Moser (1989), las funciones masculinas y femeninas se clasifican como productivas, reproductivas y de manejo

comunitario, si bien no siempre son claros los Irmites entre el ambito productivo y el reproductivo.

Las func;ones productivas

Se refieren a las actividades que gene ran ingresos. Las actividades vinculadas con la

agricultura de autoconsumo tambiE'm se incluyen en esta categorfa. Si bien la agricultura de autoconsumo es en esencia producci6n para el

consumo familiar, presenta similitudes con las actividades agr(colas que generan ingresos y, cuando hay excedentes, se convierte en

producci6n para el comercio 0 el trueque por otros productos agrfcolas 0 recursos como la mano de obra.

Las funciones reproductivas

Abarcan las actividades domesticas cotidianas (relacionadas con la procreaci6n y la crianza de los hijos) como cocinar, limpiar, lavar, etc.

Tambien incluyen la transformaci6n de bienes y servicios para el consumo y el bienestar de la familia.

Las funciones de manejo comunitario

Cubren el aspecto colectivo de la producci6n, la organizaci6n de la comunidad y el suministro de

artfculos de consumo colectivo. En el Cuadro 5 se presenta una descripci6n de 10 que comunmente se lIaman actividades, tareas y responsabilidades masculinas y femeninas, segun

las define la cultura mestiza. Se hace hincapie en las funciones productivas y reproductivas. EI cuadro muestra la divisi6n del trabajo basad a en

el genero segun la cultura mestiza, la cual no necesariamente representa 10 que las personas hacen en realidad, sino la norma en la zona (10

que las personas deberfan hacer). La mayorfa de

I

11

Cuadro 5.

Division del trabajo segun el genero.·

Actividades agricolas

Cria de animales pequenos

Cria de Ganado

Actividades reproductivas

Actividades Mujeres Hombres Ambos Preparacion de la tierra .I

Arar .I

Sembrar .I

Desyerbar a mane .I

Desyerbar con la azada .I

Fertilizar .I

Aporcar .I

Fumigar .I

Cosechar Regar .I

Almacenar .I

Trillar .I

Alimentarlos .I

Recoger forraje .I

Darles_:;t~.

Ordefiar .I

Darleagua .I

Alimentarlo .I

Recoger forraje .I

Pastoreasc.:.c.•... _ ....... . .I

Preparar los alimentos .I

Cocinar .I

Buscar agua .I

Limpiar .I

Lavar .I

Cuidar la huerta .I

Cuidar a los ninos .I

'Se elaboro este cuadra sobre la base de la informacion obtenida en cuatra reuniones de grupos locales; presenta la division

del trabajo segun las pautas culturales mestizas. Tambien refleja los resultados de las entrevistas domiciliarias, donde se les

pregunto a las personas acerca de la division del trabajo en la zona.

las personas (el 90% de los hombres y el 70% de las mujeres en las entrevistas domiciliarias), cuando se les pregunt6 ace rca de la divisi6n general del trabajo en la zona, diferenciaron las tareas sobre la base de la fuerza ffsica necesaria para realizarlas. Se consideraban tareas masculinas aquellas que requieren mas fuerza

ffsica, mientras que las tareas femeninas tfpicas eran las que exigen menos fuerza ffsica.

Los hombres hacen la mayor parte del trabajo en el campo, mientras que las mujeres ayudan en

actividades como sembrar, desyerbar (cuando se hace a mano), cosechar, seleccionar la semilla, trillar y almacenar el producto. A veces las mujeres cocinan en el campo para los miembros de la familia y los jornaleros. Esto se hace comunmente en las epocas de la siembra y la cosecha. EI cuidado de los animales

pequenos, como cuys, gallinas y cerdos, es responsabilidad de las mujeres. Esos animales generalmente se crfan para el consumo domestico. Las mujeres tienen el control sobre

12

-

ellos y pueden decidir venderlos cuando se necesita dinero. Los hombres y las mujeres son

igualmente responsables del cuidado del ganado: ambos contribuyen a alimentar, dar de beber y pastorear las vacas, pero las mujeres son generalmente quienes se encargan de

ordenarlas. Cuando hay leche suficiente, las mujeres venden parte de la produccion y controlan el dinero. Las actividades reproductivas son principalmente

responsabilidades de la mujer.7

Para comparar la descripcion de las

funciones de los hombres y las mujeres basada en las normas culturales 0 prescritas con 10 que las personas realmente hacen, se selecciono a un grupo de 21 mujeres. Se encontro que las funciones de los generos tienden a ser mas

complementarias. Se pregunto explfcitamente a las mujeres del grupo acerca de su participacion en las actividades en el campo, que son

consideradas actividades predominantemente

masculinas. Los resultados mostraron que casi la mitad de las mujeres (47%) empleaban

tambien la azada cuando trabajaban en los campos, el 41 % regaban y el 23% aplicaban plaguicidas. Se obtuvo informacion similar en las

entrevistas domiciliarias cuando se les pidio a las mujeres que describieran sus actividades en un dfa Upico. La mayorfa de elias se

consideraban "ayudantes" cuando se referfan a

las actividades agrfcolas productivas y no reconocfan su participacion en el campo a menos que se les preguntara en forma explfcita.

La siguiente respuesta de una de las mujeres ilustra esto:

Me despierto en la manana, preparo el

desayuno, alisto a los nlnos para la

escuela, limpio la casa y cocino el

almuerzo. Cuando esta listo el almuerzo,

tengo que ir al campo donde estan

trabajando mi esposo y mi hijo. Allf

comemos y les ayudo. A veces regresamos

juntos, otras veces tengo que volver a casa

antes para hacer las tareas domesticas y

cuidar a los nifios. Cuando no es tiempo de

cosecha, hago 10 que se necesita, a veces

trabajo con la azada ya veces ayudo a regar, desyerbar, ... Si mi hija mayor esta en

la casa, me quedo en la parcela desde las

11 de la manana a las 4 de la tarde.

La participacion de las mujeres en la agricultura de riego

La participacion de las mujeres en la agricultura de riego se midio en dos formas: en primer lugar,

por el grado de participacion de las mujeres en la produccion agrfcola y, en segundo, por su contribucion en la toma de decisiones

concernientes a los beneficios derivados de la produccion de cultivos. Durante las entrevistas domiciliarias, se pregunto a las mujeres

explfcitamente ace rca de su participacion en las

actividades de cultivo en los campos. Las respuestas fueron clasificadas en tres categorfas (Figura 1):

'Las lunciones de los gimeros no varian mucho en los dos sistemas de riego a causa de los palrones diferentes de cullivo. A diferencia de 10 que sucede en los sistemas alricanos, donde las mujeres eslan a cargo principalmente de los cultivos alimentarios mienlras que los hombres se ocupan de los cullivos comerciales, en esla zona las funciones de los hombres y las mujeres se complementan mas y la division del Irabajo en lerminos de cultivos comerciales 0 alimenlarios no liene tanta importancia.

13

. _02L...

FIGURA 1.

Participaci6n de las mujeres en las actividades en e! campo y en la toma de decisiones.

Participaci6n en las actividades en el campo

Semi­participaci6n

60%

Ninguna partic/pacion

Este grupo esta constituido por mujeres que no trabajan en los campos. Casi el 20% de las mujeres de la muestra entraban en esta categorfa. Participan indirectamente en las actividades de

produccion, por ejemplo preparando alimentos para los trabajadores asalariados.

Semiparticipacion

En este grupo encontramos a las mujeres que

participan en las actividades en el campo principalmente durante los perfodos de mas trabajo, cuando escasea la mane de obra y se

requiere la ayuda adicional de todos los miembros de la familia (por ejemplo, en la siembra y la cosecha). EI 60% de las mujeres pertenecfan a

este grupo.

Partic/pac/on total

Las mujeres de este grupo participan en las actividades en el campo casi todos los dras. EI

20% de las mujeres de la muestra mencionaron que trabajaban en los campos despues de terminar las tareas domesticas.

Participaci6n en la toma de decisiones

Siempre 60%

La participaci6n de las mujeres en la toma de decisiones incluye aquelJas decisiones

concernientes a los beneficios obtenidos con la agricultura de riego: la cantidad de la cosecha que se vendera, la cantidad que se asignara al

consumo familiar, las formas en que se gastara el dinero, etc. Las respuestas de las mujeres en relaci6n con esta participacion tambien se

clasificaron en tres grupos (Figura 1):

• Nunca son consultadas. EI 14% de las mujeres seiialaron que nunca eran consultadas por sus esposos en las decisiones acerca de los beneficios agrfcolas. Sus esposos controlaban la produccion agrrcola y los beneficios derivados de ella.

• A veces son consultadas. Las mujeres de

este grupo indicaron que en ciertos casos eran consultadas por sus esposos. EI 26% de las mujeres de la muestra pertenecfan a este

grupo.

14

• Siempre son consultadas. Mas de la mitad (60%) de las mujeres del grupo sefialaron que

compartran la toma de decisiones con sus esposos.

Se encontr6 que existra una relaci6n positiva entre la participaci6n de las mujeres en las actividades agrfcola y su intervenci6n en la toma

de decisiones. Las mujeres que participan mas en las actividades agrfcolas tienden a tener mas influencia en la toma de decisiones. La prueba de

chi cuadrada mostr6 que las diferencias entre los

grupos eran estadfsticamente significativas (p = 0.004) (Figura 2).

FIGURA2.

Participacion de las mujeres en la tom a de decisiones clasificada segun su participacion en las actividades en los campos.

~ e.... 100VI (I) c:: • Nunca0 'iii '0 80 lU A veces (I) "0 0 Siempre (I) "0 til 60 E .8 .!l! 40 c:: CD

:gc:: 20

til Q.

'0 .~ 0 a. Ninguna Aveces Siempre

Participaci6n en las actividades de cultivo

La composici6n y la etapa vital de la familia

Los facto res que influfan en la participaci6n de las

mujeres en las actividades agrfcolas variaban

segun cuatro tipos diferentes de familias. Las familias fueron caracterizadas en terminos de su etapa vital y su composici6n.8

Tipo 1: Familias de parejas j6venes con hijos menores de 14 afios9

Tipo 2: Parejas maduras con hijos de 14 0 mas

alios de edad Tipo 3: Familias de parejas de edad avanzada

Tipo 4: Familias cuya cabeza era una mujer.

En el Cuadra 6 se sintetizan las

caracterfsticas de los distintos tipos de familias.

Tipo 1: Familias de parejas j6venes con hijos menores de 14anos

La mayorfa de las familias de la muestra

correspondfan a este grupo (40%). La edad de los

hombres variaba entre los 31 y 63 alios y la de las mujeres, entre los 22 y los 57, con promedios de 47 y 41 respectivamente. Esta categorfa

incluye a las parejas j6venes con nifios pequenos y a las familias en las que parejas maduras todavfa tienen hijos menores de 14 anos. EI

numero de miembros de la familia variaba entre 3

y 10; el 59% de los casos tenfan 6 0 mas miembros.

"Entre las 60 familias entrevistadas, se encontraron tres casos en los que el jefe varon era viudo y no se habra vueIto a casar. En estos casos, una integrante femenina de la familia habra asumido las tareas y responsabilidades hogarefias.

gEl criterio para seleccionar los 14 afios de edad con el lin de dilerenciar los dos grupos lue la disponibilidad de mano de obra. Aproximadamente a los 14 anos, los ninos trabajan como adullos en los campos.

15

Cuadro 6.

Caracteristicas de los cuatro tipos de familias

de familia

Caracteristicas Todas las Tipo 1 Tipo2 Tipo 3 Tipo 4 familias

Edad media del esposolla esposa 57/52 47/41 60/57 70/65 -/54

Cantidad media de miembros de la familia 3.8 6 4 2.6 2.5

Cantidad media de hectareas 3.46 2.77 4.75 3.35· 3

100 40 27 23 10

·Sin incluir a los dos agricultores que ten ian mas de 9 hectareas, la cantidad media de hectareas baja a 1.9 ha.

Las mujeres de este grupo dedican la mayor parte del tiempo a actividades reproductivas. como cuidar a los nin~s, cocinar, limpiar, lavar la

ropa, y tambien a algunas actividades prc·ductivas, como la crfa de ani males pequerios. Esto limita las oportunidades de las mujeres de

trabajar lejos de la casa. En general, la parcela agrIcola y la casa no estan en el mismo lugar, 10 cual hace diffcil para las mujeres participar en

actividades en el campo. En el 70% de los casos, las mujeres incluidas en esta categorfa participan en actividades agrfcolas principal mente durante

los per(odos de mas trabajo, cuando escasea la mana de obra y sus esposos necesitan mas ayuda en los campos, como sucede en la siembra

y la cosecha (Figura 3). En el 9% de los casos, cuando las mujeres participan en forma total en las actividades en los campos, un miembro

femenino de la familia (Ia hija mayor 0 la abuela) ayuda en las tareas del hogar y las actividades reproductivas. En cuanto a la toma de decisiones

agrfcolas, s610 el 13% de las mujeres no son

consultadas nunca. Algunas de las mujeres (41%) en este tipo de

familia se dedican a actividades distintas de la agricultura como una forma de ganarse el sustento. Hay trabajos que pueden hacer

intercalados entre las tareas domesticas, como tejer, co:ser 0 atender una pequena tienda. Entre

las actividades mencionadas, la mas popular es la

costura. Los comerciantes de Otavalo hacen

pedidos a las mujeres para que tejan sueteres bajo contrato. Otavalo es una pequeria ciudad

donde se venden a los turistas artesanias de los

Andes. EI comerciante proporciona la lana y otros materiales necesarios y recoge los sueteres terminados cada 15 dtas. Pagan 3.75 d61ares

estadounidenses por cada sueter terminado. Estas actividades dan a las mujeres la oportunidad de ganar dinero adicional. Las

mujeres tienen el control de ese dinero asf como del dinero obtenido mediante la venta de animales pequenos.

Tipo 2: Parejas con nifios de 140 mas anos de edad

Las fami/ias incluidas en esta categorfa son parejas maduras con hijos de mas de 13 arios de edad. La edad media de los hombres es de 60 anos y la de las mujeres, 57 anos. Una cuarta parte de las familias de la muestra correspond fan

a esta categorfa. La cantidad de miembros de la

familia varia entre 3 y 8. EI 82% de las familias tienen 5 0 menos miembros.

En el 12% de las familias del estudio,

encontramos el caso en que una hija del jefe de la familia era madre soltera y vivta con sus padres. La mayorfa de esos casos correspondfan

a esta categorfa (57%). La diferencia entre este grupo y las familias del tipo 4 es que las mad res solteras j6venes de este grupo no son cabezas

16

....

FIGURA3.

Participaci6n de las mujeres en las actividades en el campo segun el tipo de familia.

Tipo 1

Semi­Participaci6n

70%

N =23

Tipo3

Semi­

Participaci6n

de familia, todavia son miembros de la familia de

los padres. En este grupo, encontramos el porcentaje mas alto de mujeres que no participan en las actividades enef campo (27%) (Figura 3).

EI 67% ayudan en forma parcial y s610 el 7% tienen una participaci6n total. Las mujeres tienen la oportunidad de dedicarse a otras actividades para ganar dinero ya que sus hijos varones por 10 general ayudan en las actividades de producci6n

de cultivos. EI 63% de las mujeres realizan actividades como el trabajo asalariado, tejer,

manejar una pequefia tienda, coser, trabajar como maestras, etc. En cuanto a fas decisiones concernientes a las actividades agricolas, una tercera parte de las mujeres de este grupo no son consultadas por sus esposos, 10 cual representa el porcentaje mas alto entre los cuatro grupos.

Tipo2

Semi­Participaci6n

66%

N =15

Ninguna 0%

Tipo 3: Famillas de parejas de edadavanzada

EI 23% de la muestra corresponde a este tipo de familias. Son familias donde las parejas ya no

tienen la responsabilidad de criar hijos. En el 57% de estas familias, la pareja de edad vive sola. EI resto, vive con un hijo 0 una hija, que ayudan a

mantener a la pareja, y/o nietos que ayudan en las tareas domesticas. Las edades de las parejas varran entre los 62 y los 84 afios para los

hombres, con un promedio de 70 arios, y entre 55

y 80 afios para las mujeres, con un promedio de 65 afios.

La mayorra de las parejas de este grupo (86%) se autodefinen como personas de edad que estan viviendo sus ultimos afios y sufren

enfermedades y, por 10 tanto, ya no pueden trabajar tan duro en el campo como solran

hacerlo. La cantidad de tierra que poseen estas

17

parejas fluctua entre 1 y 3 hectareas. lo Mientras que los agricultores de todos los otros tipos de

familias producen principalmente para el mercado, en este grupo se hace hincapie en el consumo domestico. Los agricultores de este grupo a veces

reciben ayuda de parientes en forma de dinero en efectivo 0 productos basicos. Cuando se necesita dinero, los hombres y las mujeres se emplean

como trabajadores asalariados siempre que no esten enfermos. EI 44% de los hombres y el 14% de las mujeres sefialaron que ocasionalmente se empleaban como trabajadores asalariados.

Este grupo esta constituido en su mayorfa por los antiguos huasipungueros. La participacion de

las mujeres en las actividades en el campo es relativamente alta (Figura 3). La principal razon para que las mujeres no participen en las

actividades agrfcolas es que son demasiado viejas 0 estan enfermas. Todas las mujeres en este grupo sefialaron que com parten las

decisiones con sus esposos.

Tipo 4: Familias cuya cabeza es una mujer

Este grupo incluye a las familias en las que el varon jefe de la familia no esta 0 ha muerto. Las

mujeres tienen hijos que estan divorciados 0

separados. EI 10% de la muestra corresponde a este tipo de familia. La edad de las mujeres

cabezas de las familias varfa entre los 37 y los

64 afios, con un promedio de 54. EI numero de miembros de las familias fluctua entre 3 y 5. En

cinco de los seis casos, las familias estaban en una etapa vital madura; la mayorfa de los hijos habfan emigrado 0 formado sus propias familias.

Las mujeres de este grupo pasan la mayor parte del tiempo realizando y manejando actividades agricolas (Figura 3), adem as de las activldades reproductivas. Si bien las mujeres

como cabezas de las familias toman todas las decisiones concernientes al manejo agricola, se encontro que en ningun caso las mujeres se

dedicaban a la agricultura solas. Buscaban un aparcero, que era un pariente 0 un agricultor de la comunidad, para realizar las tareas agrfcolas. Esta situacion obliga a las mujeres a compartir las decisiones concernientes a la produccion

agrfcola con el aparcero. Esas decisiones incluyen que y como cultivar, as! como cuando y

donde vender el producto. Los acuerdos de

aparcerfa v!irfan en cada situacion, pero, en general, la mujer proporciona la tierra, el dinero para comprar insumos y parte del trabajo (propio y

de la familia), mientras que el aparcero aporta el trabajo y tambien parte del dinero para insumos.

Una de las principales razones que impiden que las mujeres se dediquen a la produccion de cultivos es la dificultad que afrontan para controlar todos los aspectos de la produccion agrfcola.

Segun las mujeres agricultoras de este grupo, hay ciertas tareas que requieren la presencia de un hombre. Si bien las mujeres podian contratar

mano de obra, decfan que no podfan confiar en que los trabajadores asalariados cuidaran sus intereses en la misma forma que 10 haria un aparcero. Una de las mujeres explico:

Si me toca el turno del agua ef! la

noche y estoy trabajando sola,

simplemente pierdo el agua. Es peligroso

para nosotras salif en medio de la noche a regar, Dios sabe 10 que podr{a suceder. Los

trabajadores asalariados no trabajan de

noche as{ que tengo que buscar un

aparcero. Los hombres pueden regar de

noche yasegurarse de que nadie robe el

agua ... Ademas, cuando el canal necesita

reparaciones, los agricultores tienen la

obligacion de reparar los danos. Nosotras

no hacemos estfJ tipo de trabajo as{ que

tenemos que contratar a trabajadores. EI problema con los trabajadores asalariados

es que, si no esta presente el dueno, no

hacen un buen trabajo.

"'Dos de los agricultores de este grupo tenfan mas de 9 hectareas.

18

En contraste con los estudios mencionados

en la primera parte de este documento (Villalobos

et al. 1993; Jacome y Krol 1994), las mujeres

aquf se rehusan a efectuar el mantenimiento de

los canales. Esto probablemente obedezca a que

todavfa pueden contratar a varones para que

hagan el trabajo, ya que la emigracion masculina no es muy notable.

Los antecedentes de las mujeres: Urbanos 0 rurales

Los antecedentes de las mujeres -ya sean

urbanos 0 rurales- son una variable importante en

su participacion en las actividades en el campo.

Fue mas probable que participaran las mujeres

que se hab(an criado y habfan vivido en pequenas

fincas. Una de las mujeres entrevistadas senal6:

Todos tenemos que ayudar en la

agricultura, los hombres y las mujeres.

Hay mucho trabajo y los dos vamos al

campo: mientras el prepara las camas de

siembra con la azada, yo arranco las

malezas con las manos ... Se necesitan

dos personas para regar y tambien Ie

ayudo en eso. Yo siempre he ayudado en

el campo, incluso antes de casarme.

Por el contrario, era menos probable que

participaran en las actividades en el campo las

mujeres que habfan tenido una experiencia urbana

previa, que se habfan criado 0 habfan ido a la

escuela en una ciudad, 0 que habfan trabajado en

una zona urbana. Estas mujeres consideraban que

la agricultura era tarea de hombres y preferfan

hacer otra cosa para ganar dinero y contratar a

trabajadores para que ayudaran a sus esposos en

el campo.

EI 22% de los casos correspond fan a mujeres

que habfan tenido experiencias urbanas previas.

Ninguna de las mujeres de este grupo participaba

por completo en las actividades en el campo: el 46% de elias no trabajaba en el campo y el 54%

solo ayudaban. La prueba de chi cuadrada mostro

que las diferencias entre los grupos eran

estadfsticamente significativas (p =0.015)

(Figura 4).

La parlicipacion de las mujeres en las asociaciones de usuarios del agua

Como se menciono antes, muchos de los

problemas relacionados con el riego son resueltos

directamente por los agricultores en sus casas 0

en el trabajo. Esto obedece en parte a una debil

organizacion, que ha forzado a los agricultores

tanto varones como mujeres a encontrar form as

informales de resolver sus problemas. Segun los

estatutos de las asociaciones de Garrapatal y EI

Tambo, los miembros deben reunirse cada dos

meses para discutir los problemas, tomar

decisiones y cobrar las tarifas del agua, y una

vez al ano para elegir a los nuevos miembros de

la junta. Esto rara vez se cumple. En EI Tambo,

FIGURA4.

Participaci6n de las mujeres en las actividades en el campo segun sus antecedentes urbanos 0 rurales.

80,---------------------------~

• Rurales

60

Z 40

20

o Ninguna Ayudan Total

Participaci6n en las actividades en el campo

19

los agricultores se reunen menos de dos veces al

ana y los miembros de una junta permanecieron

en sus cargos por casi ocho anos consecutivos

(1989-1996). Parece que 10 unico que lIeva a los

agricultores a las reuniones es el hecho de que

dejen de funcionar los sistemas de riego y se

requiera una accion urgente. Los problemas que

exigfan medidas por parte de la organizacion eran

en muchos casos tratados por los miembros de la

junta que, segun la mayorfa de los agricultores,

eran personas en quienes se podfa confiar. En

Garrapatal, como la asociacion incluye 11

subjuntas, los agricultores se ven obligados a

reunirse con mas frecuencia. En algunas

subjuntas los agricultores se reunen cada mes. La

junta general ff comunmente se reune dos veces

al ana para organizar la limpieza del canal

principal. La subjunta correspondiente trata los

problemas que surgen en los distintos mOdulos de

riego.

Es escasa la participacion general de los

miembros varones y mujeres en las reuniones de

la asociacion. Cuando estas reuniones son muy

importantes y es imperativo que asista un

integrante de la familia, generalmente el que

asiste es un varon. Solo el 9% de las mujeres de

la muestra mencionaron que asisUan a las

reuniones muy importantes de la asociacion

(Cuadro 7). No hay una regia que impida a las

mujeres asistir a las reuniones y participar en

elias. EI esposo 0 la esposa 0 ambos juntos

pueden asistir y representar sus intereses en las

reuniones. Sin embargo, se considera que asistir

a las reuniones y discutir los asuntos son

actividades masculinas. Las barreras culturales

que tienen las mujeres cuando estan con los

hombres inhiben su participacion. Una de las

mujeres menciono sus razones para no participar:

Las reuniones son los viernes en la

noche. A esa hora, despues de cocinar

para mi esposo y los niflos todavIa tengo

muchas cosas que hacer en la casa ... No

hay raz6n para que los dos asistamos a las

reuniones. Aun cuando yo vaya a las

reuniones es 5610 para olr 10 que tienen que

decir los hombres. Ellos son quienes

hablan y discuten. Ellos saben que decir y

c6mo decirlo.

Los motivos mas frecuentemente

mencionados para que las mujeres de la muestra

no participaran en las reuniones de la asociacion

son:

• Las mujeres no tienen tiempo.

• A los esposos no les gusta que sus esposas

salgan de noche.

• Las mujeres no tienen experiencia (por

ejemplo, en manejar las reuniones, hablar en

publico).

• No es necesario que el esposo y la esposa

asistan los dos a la reu nion.

Aquf es importante subrayar que, si bien la

participacion de las mujeres en la reuniones de la

asociacion de usuarios del agua es escasa (el

60% no participan), en el grupo de familias cuya

cabeza es una mujer el 67% de las mujeres sf

participa en las reuniones importantes. En

contraste, 93% de las mujeres de las familias del

tipo 2, con hijos de mas edad, nunca asisten a

"La junta general es el 6rgano principal de las asociaciones de usuarios del agua. Como son varias las comunidades que sa benefician del mismo canal. hay varias juntas que representan a los distintos grupos de usuarios y los presidentes de elias forman la junta general 0 junta principal de la asociaci6n de usuarios del agua.

20

Cuadro 7.

Participaci6n de las mujeres en las reuniones importantes de la asociaci6n de usuarios del agua.

Participacion en las reuniones de 4 Toda la %la AUA % % % muestra

47 93 69 0 60

Solo cuando no puede ir el esposo 53

o un varon integrante de la familia

0

esas reuniones. En estas familias, si el esposo

no puede asistir, el hijo var6n mayor es quien participa.

Segun algunas personas (tanto hombres como

mujeres), las mujeres se pueden desempenar mejor que los hombres en un cargo de la junta cuando tienen mas educaci6n. En 5 de las 11

subjuntas del canal Garrapatal, las mujeres

Conclusiones

EI informe indica que, mediante un examen cuidadoso de los antecedentes urbanos/rurales de

las mujeres y de los problemas que afrontan en los distintos tipos de familias, se puede conocer

mejor c6mo estan configuradas segun el genero

las distintas funciones y responsabiJidades dentro de la familia. Tambien contribuye a explicar las variaciones en la divisi6n del trabajo segun el

genero y c6mo esto afecta la participaci6n de las mujeref en las actividades agrfcolas, la tom a de decisiones y las organizaciones de usuarios del

agua. Se encontr6 que la participaci6n de las mujeres en la agricultura es mayor en las familias

cuya cabeza es una mujer, las cuales constituyen

alrededor del 10% de las familias en la zona del

7 23 33 32

0 8 67 9

ocupaban cargos de liderazgo, dos como

presidentas de las subjuntas y tres como secretarias. En el caso de EI Tambo, el nuevo

tesorero era una mujer. En todos estos casos,

las mujeres tenian mas educaci6n que el promedio de los agricultores; todas elias habfan terminado la escuela secundaria y tres eran

maestras.

estudio. Si bien la falta de participaci6n de las mujeres en la agricultura es similar en los otros tipos de familias (22% en el tipo 1, 27% en el

tipo 2 y 23% en el tipo 3), las razones para no

participar variaron mucho. En las familias donde la pareja aun tenia hijos pequenos, las

participaci6n de las mujeres en la agricultura era limitada por las otras obligaciones familiares. En las familias de parejas de edad, las mujeres eran

demasiado viejas 0 estaban enfermas y no pod ian participar como solian hacerlo antes en las actividades agrfcolas. Por ultimo, en las

familias maduras donde la pareja no tenIa hijos

pequenos, las mujeres preferfan realizar otras tareas que les permitran controlar sus propios

ingresos.

21

En terminos de la heterogeneidad de los usos y los usuarios del agua, el estudio muestra como

en el control de los' recursos hfdricos y el acceso a ellos influyen factores tales como la tenencia de la tierra, la ubicacion, el genero y las relaciones

de trabajo. Si bien es escasa la participacion de las mujeres en las asociaciones de usuarios del agua y la cultura desempefia un papel importante

en su poder de toma de decisiones, las mujeres que ten fan una educacion superior al promedio

ocupaban posiciones de liderazgo en las

organizaciones. Ademas, las mujeres trataban de resolver sus problemas relacionados con el riego de manera informal cuando tenfan mas poder de

decision. En consecuencia, se reconoce la

importancia de analizar los generos en la produccion agricola a traves de distintas etapas

vitales para conocer mejor los factores que influyen en el riego.

Este estudio se concentro en las

comunidades mestizas de las zonas inferior y media del rio EI Angel, donde la etnicidad no es una variable importante para la diferenciacion.

Para tener un conocimiento mayor de los usuarios en toda la region, las investigaciones futuras deben considerar la etnicidad como una variable

para la diferenciacion (vease Vallejo 1997) ya que las comunidades de la zona superior tienen influencia indfgena and ina, mientras que en la

zona inferior predominan las comunidades negras.

22

-

ANEXO

Ubicaci6n geografica de la zona del estudio en Carchi, Ecuador.

• QUITO

COLOMBIA

o 40 80 I ! !

KILOMETROS

23

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