Los orígenes de la educación preescolar.

- La historiografía de la educación es muy extensa, muchos historiadores han

realizado investigaciones para poder entender la formación de la educación en el

México presente, este es el caso de la educación preescolar llamada en sus inicios

como escuela de párvulos o también denominadas como maternalales, la

investigación de los orígenes de la educción preescolar involucra tanto a niños

pequeños, como a mujeres que desempeñaron un papel importante en este ramo de

la educación.

Los primeros antecedentes que tenemos de la educación preescolar o de párvulos se

remontan en los años de 1880, en donde el ayuntamiento de la Ciudad de México aprobó la

apertura de una escuela de párvulos para niños de 3 a 6 años de ambos sexos en beneficio

para ayudar a la clase obrera. La finalidad en un principio de estos párvulos no era

mantener una orientación educativa, sino fungían más bien como una especie de asilo, fue

abierta al público el 4 de enero de 1881.

Es a partir de 1883 cuando inician las primeras escuelas dedicadas a los párvulos. Estas

primeras escuelas fungieron como jardines de niños, y la orientación educativa con que se

formaron fue bajo la corriente pedagógica del eminente pedagogo alemán Federico Fröbel,

estas postulaciones pedagógicas de Fröbel, las retomo de su maestro Juan E. Pestalozzi.

Esta pedagogía extranjera postulaba que la unidad del hombre se encuentra asociada con la

naturaleza, a cuyas leyes el individuo esta sujeto, tratando de de suscitar en el niño una

actividad voluntaria, como medio principal de su instrucción y formación. Estas tendencias

pedagógicas fueron traídas a México por el maestro Enrique Laubscher, educador alemán

quien fue alumno de Fröbel, al igual que su maestro se intereso por una educación que

tuviera en armonía con el interés del niño, por la observación de la naturaleza, por el

estudio y enseñanza de las matemáticas y por el conocimiento de las lenguas.1 De esta

manera tenemos idea que la primera escuela de párvulos con los métodos pedagógicos

fueron fundadas en el estado de Veracruz así el estado se convirtió en precursora de la

educación preescolar, esta iniciativas fueron realizadas por el maestro Laubscher, la

1 González Prieto, Alejandro. Enrique C. Rébsamen y la educación nacional. Universidad Veracruzana. Xalapa, Ver. 1997. Pág. 21.

primera escuela de párvulos o Kindergarten fue fundada en el Puerto de Alvarado, Veracruz

en los años de 1881. Con la misma visión en los años de 1883 se crean otras tres escuelas

de párvulos entre las más importantes fue la que se crea de manera anexa en la Escuela

Modelo, en la ciudad de Orizaba. Posteriormente la de Xalapa y Coatepec. Todas fundadas

por Laubscher.2 No solo el estado de Veracruz se encontraba preocupado por la educación

preescolar. En el estado de San Luis Potosí existía una gran preocupación por la

educación, y no sólo por la elemental, sino también por la de los párvulos y en

1881, había en dicha identidad 4 escuelas para niños menores de 7 años. 3

Otro ilustre pedagogo que se preocupo por atender a los niños fue Manuel Cervantes Imaz.

En el Distrito Federal el maestro mexicano se preocupó por atender a los niños de

preescolar, por medio de una educación adecuada a sus necesidades. Fue así como fundó, a

principios de 1884, una escuela similar a la de Veracruz.4  Algunos datos arrojan la certeza

de que los inicios de la educación preescolar tienen su origen como germen en la Escuela

Real creada en 1872 por Enrique Laubscher en la ciudad de Santiago Tuxtla. 5 Pero lo que

no hay duda es que Veracruz fue iniciadora de esta magna obra educativa, tanto la escuela

de Manuel Cervantes como la de Laubscher tuvieron una efímera vida, sin embargo

influyeron de manera positiva en el medio educativo. Tanto en Alvarado como la escuela

de párvulos fundada en la Escuela Modelo de Orizaba, fueron efímeras debido a que tuvo

poca aceptación entre los padres quienes se resistían a enviar a sus hijos tan pequeños a la

escuela. En 1886 se crea en la Ciudad de México un Jardín de Niños Oficial en donde se

encontraba dirigida pedagógicamente por el maestro Enrique Laubscher, y que se

encontraba bajo la dirección de la profesora Mateana Murguía. El 15 de mayo de 1887 se

anuncia que se abrirá el kínder o jardín de niños “El Porvenir de Orizaba” dirigido por la

Srita. Úrsula Toro, en donde igual se encontraba participando Laubscher. Dicha institución

se organizo en seguir el método del inmortal Federico Fröbel y cuyo lema fue siempre “El

Juego es el trabajo del Niño” sin embargo este jardín fundado con tales elevados propósitos

2 Hermida Ruíz J. Ángel. Historia de la Educación en el Estado de Veracruz. Normal veracruzana. Xalapa, Ver. 1980. Pág. 295. 3 Bazant Milanda. Historia de la Educación en el Porfiriato. Fondo de Cultura Económica. México. 1980. Pág. 39 4 Meneses Morales Ernesto. Tendencias educativas oficiales en México, 1821 -1911. Editorial Porrúa. Segunda edición. México. 1998. Pág. 660. 5 Hermida Ruíz J. Ángel. Historia de la Educación en el Estado de Veracruz. Normal veracruzana. Xalapa, Ver. 1980. Pág. 296.

se enfrenta al fracaso, por el desconocimiento de cómo llevar estos establecimientos.6 Los

testimonios presentados aquí nos hablan de que Enrique Laubscher estableció “el germen

del jardín de niños” aplicó los dones y ocupaciones froebelianas en dichos establecimientos

educativos, enseñó canciones infantiles, utilizo el juego como medio para el aprendizaje.

La dictadura Porfirista.

El 28 de noviembre de 1876, Díaz fue electo presidente y con ello dió principio a una nueva

política. Después de la guerra de reforma, la mayoría de la población en México, sin duda

ansiaba la paz, de allí la búsqueda de un gobierno capáz y fuerte de garantizar después de

cincuenta años de guerras continuas, un sistema político que ejerciera una fuerza, que

lograra la construcción del Estado Mexicano. Algunos grupos vieron en Porfirio Díaz la

imagen de un sólido hombre que podía concluir con la inestabilidad, preservar la unidad

nacional, pero sobre todo, que pudiera mantener la trayectoria del desarrollo en una sola

dirección.

Por lo que se refiere, el gobierno de Díaz, construyó un estilo personal que comenzó

a perfilarse desde el primer instante de su mandato, ésta característica fundamental, nos

dice: Georgette José Valenzuela: “fue el considerar por un lado, que en relación con sus

enemigos y amigos pasados o presentes, no tenía ni odios, ni amores, sino únicamente

intereses”.7 Con el triunfo del Plan de Tuxtepec, el General Porfirio Díaz, logró obtener la

presidencia y por el contrario el consenso y la legitimidad frente al resto de sus

antagonistas. Díaz lo conquistó, ampliando y fortaleciendo una red clientelar por medio de

una estrategia conciliadora, la cuál incorporaba a las facciones opositoras, bajo una sola ála,

es así como integra a los Juaristas, Lerditas, Iglesitas y hasta imperialistas, como miembros

6 Hermida Ruíz J. Ángel. Historia de la Educación en el Estado de Veracruz. Normal veracruzana. Xalapa, Ver. 1980. Pág. 298.7 Georgette José Valenzuela. “Gran historia de México ilustrada” En AAVV, Ascenso y consolidación de Porfirio Díaz. Tomo VIII .México 2002. Pág. 84

de su gabinete o en algún cargo de elección popular. Asimismo contó con el apoyo de los

grupos regionales, que se adhirieron a éste afianzamiento, que permitió un progreso en el

régimen porfirista. Los caciques, líderes regionales que fueron desplazados por Benito

Juárez y Sebastián Lerdo de Tejada, constituyeron la nueva confederación que buscaba la

“consolidación y el equilibrio”.

Uno de los problemas centrales que enfrentó Porfirio Díaz en su gobierno, se debió

a una heterogeneidad con respecto a su cultura y su lengua, que presentaba la población a lo

largo y ancho del territorio nacional. Poco después de afianzarse el régimen Porfirista, se

expandió la idea, que la solución a los males que presentaba el país, consistía en el

desarrollo de la instrucción, donde el gobierno buscó la necesidad de un cambio a la

realidad, que se estaba presentando; y optó entonces que la única manera de lograr la unión

de gente tan disímil, era a través de la educación.

La instrucción era la vía y la manera de fortalecer la unidad, así es como en el

Porfiriato se comienzan a consolidar los grandes ideales educativos, como la uniformidad

de los planes de estudio y el laicismo. La instrucción pública se volvió una tarea nacional

que se orientó principalmente al futuro, es el porvenir de la humanidad y tal objetivo sólo

se conforma a través de la educación; es por ello, que la instrucción es un factor primordial.

En una de sus declaraciones Porfirio Díaz afirmaba:

“Es importante que todos los ciudadanos de una república reciban

idéntica educación, para que sus métodos e ideales puedan organizarse y

se intensifique así la unidad nacional. Cuando los hombres leen y piensan

lo mismo, están inclinados a obrar del mismo modo”. 8

8 Milanda Bazant. (Coordinadora). Ideales, Valores y tradiciones. Ensayo sobre historia de la educación en México. Zinacantepec, Estado de México: El Colegio de Mexiquense. 2000. P. 131

Al iniciarse la vida Independiente, existían en el país alrededor de 30 000 alfabetos

de un total de 4 800 000 adultos, es decir, que el porcentaje de analfabetos era de 99.38%

contra un 0.6 de alfabetizados.9 Para cumplir el objetivo de instruir al pueblo, el estado

debía de ser la institución que ordenara la educación, por ello en el Porfiriato la educación

local se dejó bajo la tutela de los ayuntamientos y los gobiernos estatales; pero al mismo

tiempo el gobierno federal pretendía dirigir y controlar la educación elemental en todo el

país.10 Por tal motivo, Díaz mantuvo una relación con los gobernadores y jefes políticos, la

cual pretendía que no se descuidara la educación. Fue en el Porfiriato cuando se realizaron

los proyectos referente a la creación de las escuelas normales, ya que con el presidente

Benito Juárez y Sebastián Lerdo de Tejada sólo se planeó, pero no fue posible llevarlo a la

práctica con buenos resultados. La autora señala algo muy importante, ya que es en el

Porfiriato en donde a la mujer se le da acceso a la educación y al trabajo. 11Es por esta razón

que se fundan Escuelas Secundarias de Niñas y Normales para Profesoras en todo el

territorio nacional. La creación de las normales fue obra de Joaquín Baranda. Sin embargo

la sola idea de educar a la mujer creo una polémica. Para tener una idea más específica de

la polémica que se generó para la época con respecto de darle educación a la mujer, se

mencionan las opiniones que tenían los personajes más sobresalientes, sobre el tema. En la

República Restaurada, en cuanto a la educación, el positivismo influyó en México, con la

figura de Gabino Barreda, que en 1867, argumentaba a favor de la mujer. Él opinaba que

también se debía instruir a la mujer igual que al hombre. Ignacio Manuel Altamirano en

1869, afirmaba que la educación de la mujer estaba “bastante descuidada”. Antonio Díaz

Covarrubias decía que había una escuela de mujeres por cuatro de hombres, y que deberían

existir en número similar y además, la instrucción primaria debería de ser igual para niñas y

niños, pero la profesional no. Diversos pensadores de la época tenían la opinión de que la

mujer debido a sus cualidades, era la persona más indicada para el magisterio. De igual

forma otra mayoría de los teóricos de la época, estaban en contra de que se le diera a la

9 UNESCO, Estudio acerca de la educación fundamental en México. (trabajo que presentó el comité de México). México, Secretaria de Educación Pública, 1947.10

Zoraida Vázquez, Josefina, et al. La educación en la historia de México. El colegio de México, Centro de Estudios Históricos, México. 2005. P. 7211 Jiménez Alarcón, Concepción Et al. Historia de la Escuela Nacional de Maestros. Vol. I. 1887-1940 México, SEP, 1979. 217

mujer acceso a la educación. Andrés Molina Enríquez opinaba que “la sociedad se

perjudica con el trabajo de las mujeres”. Francisco Bulnes señalaba que “esas mujeres

reformistas son las generadoras de grandes males en contra de la sociedad, y son más

peligrosas aún que los anarquistas”. Diversas fuentes impresas publicaban: “Las mujeres

que hablan de feminismo no son buenas, y quieren llamarse en vez de malas, adelantadas y

liberales, que es el nombre que suena mejor”.12 Después de estas tendencias educativas o

postulaciones es a partir de 1887 cuando se crea en la Ciudad de México la Escuela Normal

para Profesoras. Con la finalidad de instruir a las maestras con la pedagogía del momento,

dentro de la institución y de acuerdo a la época la idea de orden y disciplina consistía en

actitudes de sumisión, docilidad, obediencia y silencio. Esto lo llevaban acabo bajo la

supervisión de las prefectas y celadoras, por ejemplo se les prohibía platicar con los

varones. La vida cotidiana dentro de la Escuela Normal para Profesoras, fue siempre de

tranquilidad y de disciplina, pero hubo algunos acontecimientos que alteraron este

ambiente, dentro de la institución un grupo de señoritas se rebelaron contra una de las

prefectas, y fueron a varios periódicos para comunicar sobre el problema. Esto provocó que

la directora Rafaela Suárez pidiera al Secretario de Justicia e Instrucción Pública, la

expulsión de las señoritas involucradas en el asunto, porque de acuerdo a la época las

mujeres eran educadas para obedecer y callar. El 13 de diciembre de 1891 se anexa a la

Escuela Normal para Profesoras, la Escuela de Párvulos que venía funcionando en la

Escuela Normal para Profesores desde 1887. Este cambio se debió a que se tenía la opinión

de que la mujer era la única que podía y debía atender la necesidad de instrucción en esta

etapa del ser humano, por sus características: cálida, maternal, sensible etc.Debido a la

petición de algunos profesores, de que era muy importante establecer la educación

preescolar en nuestro país, se obtuvo la idea de integrar la asignatura Elementos de

educación preescolar, en la Escuela Normal para Profesoras, y la práctica de esta materia

se llevaría en la Escuela de Párvulos Anexa.

12 GALVÁN, Luz Elena, La educación superior de la mujer en México: 1876 – 1940. México. CIESAS, 1985.

95 p., (Cuadernos de la Casa Chata 109), p.14-15.

Las profesoras Guadalupe Tello y Leonor López Orellana sugirieron a las

autoridades que la Escuela Normal para Profesoras, tuviera la materia de educación

preescolar. La Escuela de Párvulos de la Normal era dirigida por la profesora Matiana

Munguía de Aveleyra. “En 1902 el secretario de Justicia e Instrucción Pública, Justino

Fernández, comisionó a Rosaura Zapata y Elena Zapata, para que fueran a San Francisco,

Nueva York y Boston, con el objetivo de observar la organización y el funcionamiento de

las escuelas de párvulos”.13

Justo Sierra, comisionó a la profesora Estefanía Castañeda Núñez de Cáceres, quien

era especialista en educación preescolar y contaba con estudios en Estados Unidos, un

proyecto de organización de la Escuela de Párvulos, el cual fue realizado y presentado el 10

de marzo de 1903.14 Esto provocó la necesidad de formar educadoras con las técnicas

Froebelianas, que estaban consideradas como las mejores. En 1903 ya con el cargo de

directoras Estefanía Castañeda y Rosaura Zapata, organizaron los primeros kindergarten en

el D. F. Debido a que en la Escuela Normal para Profesoras no había una ubicación para las

maestras de la Escuela de Párvulos Anexa, ya que el plan de estudios era igual para impartir

clases en primaria y para la de párvulos. Ante esta situación el subsecretario de Justicia e

Instrucción Pública Justo Sierra creó enero de 1904 los Jardines de niños, la fundación de

los primeros tuvieron por nombre “Federico Froebel” y “Enrique Pestalozzi”. Al aumentar

este tipo de instituciones correspondientes a la educación pre-escolar, se necesitó

supervisarlas, y se realizó por medio de inspectores a través del decreto de mayo de 1908.

Por lo tanto la Secretaría de Instrucción Pública creó la carrera de Educadora de Párvulos

en la Escuela Normal para Profesoras el 25 de octubre de 1909, lo único que se requería

para ingresar es que las interesadas tuvieran concluida la instrucción primaria. La opinión

pública a través de la prensa fue favorable, para la aceptación de estas escuelas. Se basaban

en la teoría froebeliana, es decir, educar al niño de acuerdo con su naturaleza física, moral e

intelectual, utilizando las experiencias que adquiría el niño en el hogar, en la comunidad y

en la naturaleza. El material, mobiliario, libros de consulta y todo lo que se necesitaba, se

compró en EUA, pero era muy caro y México tenía muchas carencias. Lo que trajo como

consecuencia, que se hicieran gastos innecesarios, sólo por estar a la última moda y por

13 Meneses Morales Ernesto. Tendencias educativas oficiales en México, 1821 -1911. Editorial Porrúa. Segunda edición. México. 1998. Pág. 660.14 Zapata, Rosaura. La educación Preescolar en México. (2ª Ed.) México. S.E.P. México 1971. Pp. 67-90

lujos. Justo Sierra dictó en septiembre de 1905 la reglamentación para el examen de

profesora de párvulos, consistía en las siguientes pruebas:

A) Teórica: desarrollar, por escrito, un tema relativo al

carácter, medios y fines del kindergarten.

B) Práctica: realizar algunas actividades, como narrar un

cuento o bien tocar una canción.

C) Pedagógica: impartir una lección a un grupo de párvulos

sobre los dones de Fröbel.15

Justo Sierra dictó en septiembre de 1905 la reglamentación para el examen de

profesora de párvulos, consistía en las siguientes pruebas: La profesora Berta Von Glümer,

en septiembre de 1907 por indicación de Justo Sierra, fue a cursar en la Normal Froebel de

Nueva York, a estudiar la organización de la escuela de educadoras y todo lo relacionado a

la formación de profesoras de párvulos. Y aprendió “la organización y funcionamiento de

las escuelas normales en donde se formaban estas docentes. Se graduó con "Mención de

Honor" por haber obtenido las más altas calificaciones en los dos años que duró la carrera.

Al regresar a México en 1910 presentó un plan de educación para profesoras de

kindergarten, Berta Von Glumer impartió clases como maestra de las practicantes de las

escuelas de párvulos, en la Escuela Normal para Maestras. Hasta ese momento la formación

de las maestras que atendían a los niños menores de 6 años había sido impartida por

Estefanía Castañeda y Rosaura Zapata. Sin embargo, existía la necesidad de crear la carrera

de maestras de párvulos con una orientación y preparación específica para ese nivel

escolar. Fue entonces cuando la maestra Berta Von Glumer presentó un plan de estudios

específico para la formación de las profesoras de párvulos el cual fue aceptado por

las autoridades correspondientes”.16 En 1907 se les cambia de nombre a las escuelas de

15 Meneses Morales Ernesto. Tendencias educativas oficiales en México, 1821 -1911. Editorial Porrúa. Segunda edición. México. 1998. Pág. 661.16 GALVAN, Luz Elena Diccionario de historia de la educación en México México, CONACYT – CIESAS, 2004. CD – ROM.

párvulos para llamarlas kindergarten, posteriormente se les denominó jardín de niños o

jardín de la infancia. En 1910 en la Escuela Normal para Profesoras surge un curso para

enseñar en los jardines de niños, y en ese mismo año se crea el plan de estudios para la

carrera de educadoras, por parte de la Secretaría de Instrucción Pública y Bellas Artes,

quien designó a la profesora Juvencia Ramírez viuda de Chávez como directora. Para

motivar a las profesoras a estudiar la carrera de educadoras, se les otorgaban viajes al

extranjero para una mejor preparación.17 Por ejemplo la profesora Rosaura Zapata, primero

fue a EUA y luego a París, para estudiar el sistema Froebel, pues es el que se utilizaba en

los kindergarten. También obtuvo los programas de todas las materias, conoció el método

utilizado y su objetivo era el de contar con la información necesaria para la creación de las

escuelas. “Posteriormente se trasladó a Inglaterra, en donde asistió a escuelas especiales

para niños cuyo desarrollo mental era tardío, y a escuelas al aire libre para niños

anémicos”... Lo que proponía era una escuela que únicamente se dedicara a preparar a las

maestras en la instrucción de niños pequeños, antes del ingreso de éstos a la escuela

primaria”.18 En 1913 el gobierno decide que a los jardines de niños también tuvieran acceso

los de clase baja, ya que sólo las clases alta y media acudían a ellos. Los jardines de niños

serían mixtos, y recibirían a pequeños de tres a seis años, a los cuales se les enseñaría: A)

Observación y amor a la naturaleza, B) Juegos, C) Marchas, rondas y ejercicios rítmicos,

D) Cuentos y observación de estampas, E) Trabajos en la arena y F) Cuidado de los

animales.19“Cabe señalar que las profesoras Estefanía Castañeda, Rosaura Zapata y Berta

von Glumer, compusieron melodías, escribieron literatura infantil como cuentos y rimas,

así como cantos y juegos propios del jardín de niños, ya que anteriormente, se reproducía

literatura y música extranjera. Existe un interesante acervo y repertorio que se produjo en

esa época”. En 1917 la profesora Josefina Ramos del Río impartió la mayoría de las

materias del curso de Educadoras, anexo a la Escuela Normal para Profesoras, porque no

había presupuesto para pagarles a los profesores de las asignaturas. Y es en 1921 cuando

José Vasconcelos y Francisco César Morales rector y director general de la universidad

respectivamente, reincorporaron a las educadoras al sector de educación. Para ese mismo 17 GALVAN, Luz Elena Diccionario de historia de la educación en México México, CONACYT – CIESAS, 2004. CD – ROM.18 GALVAN, Luz Elena Diccionario de historia de la educación en México México, CONACYT – CIESAS, 2004. CD – ROM.19 GALVAN, Luz Elena Diccionario de historia de la educación en México México, CONACYT – CIESAS, 2004. CD – ROM.

año se realizó el Primer Congreso del Niño, en donde se abordó la problemática de que los

niños más necesitados no acudían a los planteles. Para el 12 de noviembre y el 10 de

diciembre de 1908, se clasificó a cuatro tipos de profesores: A) Educadora (conocimientos

teóricos – prácticos de kindergarten ) B) Profesoras de primaria (preparación científica –

humanista, y físico – artística) para enseñar conocimientos de las primarias superiores en

forma más extensa, y brindar conocimientos pedagógicos y preparar a normalistas para

educar. C) Profesoras de normal (estudios superiores) D) Sub-maestros, para atraer

personas con habilidades para enseñar, pero no se podían graduar como normalistas, es

decir para los que quisieran trabajar en las escuelas pero sin seguir la carrera normalista.

Jardín de Niños. Art. 3º de 1857

Las educadoras o maestras de escuela de párvulo se ajustaron a las leyes del artículo

tercero constitucional de 1857 es el que reglamentó el ejercicio de las profesiones, con

respecto a la libertad de enseñanza y la libertad de trabajo, existían muchas confusiones, es

decir, la libertad profesional era para trabajar sin título, pero se deducía que éste era

necesario para garantizar la confiabilidad. Por eso “La enseñanza es libre, mientras que la

profesión, la ley determinaría que profesiones necesitaban título para su ejercicio, y con qué

requisitos se deberían expedir que, como se interpretó entonces, coartaba la libertad

individual”. 20 Lo anterior estaba en el papel, pero en la práctica, no siempre se llevó a cabo,

ya que se exigía el título a los profesionistas, pero había personas que trabajaban sin título

en el país. Con esto se deduce que no era funcional la reglamentación, ya que no se apegaba

a la realidad es decir el Gobierno Federal tenía una gran demanda de maestros, y él los

quería titulados, pero los que eran titulados no estaban dispuestos a trabajar en el magisterio

por un sueldo muy bajo y jornadas de trabajo no reconocidas socialmente. Y los no

titulados ofrecían sus servicios aceptando las condiciones antes señaladas

De 1879 a 1901 hubo diversos proyectos sobre el tema del artículo tercero

constitucional, con respecto a los títulos profesionales. Por ejemplo se proponía que se

exigieran a algunas profesiones, menos a los maestros de escuelas particulares y sí a los de

20 Arce Garza, Francisco et al., Historia de las profesiones en México, México. Colegio de México, 1982, 406 p. p.136.

las oficiales. Para 1880 se realizó una lista de las profesiones que requerían del documento

y allí se incluía al profesor de enseñanza, y para obtenerlo se pedía como mínimo la edad

de veintiún años y ser honrado. El 7 de noviembre de 1881 se declaró libre el ejercicio de

las profesiones científicas, no la de los maestros. En 1889 y 1890 se pedía que se exigiera el

título a los maestros de enseñanza primaria, en el contexto de los Congresos de Instrucción.

Pero esto era muy difícil, si no es que imposible ya que el hecho de contratar sólo a

profesores titulados, provocaría que el número de profesores sería muy bajo, además el

sueldo era muy poco y casi siempre se les pagaba con algún tiempo de retraso.Justo Sierra

propuso que el Gobierno Federal y el Estatal empezaran a fomentar los estudios normales,

para que de esta forma las escuelas públicas contaran con profesores normalistas, que eran

necesarios para la ciencia y la sociedad. Pero la teoría con la práctica no coincidían, es

decir, existía el grave problema que representaba el sueldo muy bajo y, por lo tanto, los

profesores calificados no se conformarían con ganar muy poco. En la práctica de las

profesiones siempre se tenía una idea muy liberal, es decir, no necesariamente el que tenía

título era el que más sabía, pero, esto evitaría a los embusteros y charlatanes. A todo esto se

integraba otro inconveniente, que aparece muy seguido en las cartas con peticiones que le

enviaban al presidente Díaz, era el pago de impuestos, los profesionistas contaran con título

o sin él, pagaban impuestos al gobierno. Si el profesionista no demostraba el pago de su

contribución, no podía ejercer su profesión.21 Los sueldos de los maestros eran bajos,

variaban de $ 6 a $ 80 mensuales, pero cuando se creó la Escuela Normal de Profesores en

el D. F. se acordó que los profesores ganarían $1,200 mensuales, lo mismo que las escuelas

profesionales, pero la realidad fue otra, ya que los expedientes del Archivo Histórico de la

SEP muestran que pasaban meses sin que los profesores cobraran su sueldo. Lo que trajo

como consecuencia que la profesión no fuera muy atractiva, ya que la mayoría de los

profesores renunciaba.

Sueldo de algunos maestros en el Estado de Veracruz de 1910 – 1919.

21 Milada Bazant, La República Restaurada y el Porfiriato. Pp. 127 – 222.

Nombre del maestro Nombre de la escuela donde presenta su servicio Sueldo mensual que se le asigna

Año

22Manuel López Limón Maestro sin título

Escuela de Varones de la congregación de las mesas del Cantón de Acayucan

$16.00 1910

23Francisca O. Vda. de Alcérreca

Como inspectora de la Escuela de Niñas de la ciudad de Orizaba

$100 1912

24Maestra Esther Calderón Carlos A. Carrillo

Xalapa, Ver.

$ 30.00 1913

25Audirac Alejandro Pensión por 30 años de servicio $ 70. 00 1913

26Eleazar Pérez Villaescusa Como maestro de inglés en la Escuela Cantonal Enríquez

Xalapa, Ver

$ 25.00 1913

27Josefa Vanegas Berrones

Como inspectora de labores manuales de las Escuelas Municipales de niñas. Miguel R. Gutiérrez, Justo Sierray Miguel Hidalgo $ 40. 00 1914

28Lara Jacinto Inspector de Instrucción Pública en el Estado Para visitar periódicamente el colegio

$ 200.00 1913

22 Archivo Histórico de la Dirección General de Educación en el Estado de Veracruz. Año 1910, Letra L, Expediente Número 0056. Foja 0000027.23 AHDGEEV. Año 1912, Letra O, Expediente Número 0077. Foja 0000004.24 AHDGEEV. Año 1913, Letra C, Expediente Número 0086. Foja 0000001.25 AHDGEEV. Año 1913, Letra A, Expediente Número 0083. Foja 0000002.26 AHDGEEV. Año 1913, Letra P, Expediente Número 0094. Foja 0000008.27 AHDGEEV. Año 1913, Letra V, Expediente Número 0097. Foja 0000002.28 AHDGEEV. Año 1913, Letra L, Expediente Número 0092. Foja 0000003.

preparatorio y la Escuela Normal Veracruzana

29Fidencio Jiménez Ayudante de la Escuela Vicente Guerrero, Coatepec, Ver.

$90.00 1915

30 María Marín Normalista titulada, Directora de la Escuela de Niñas de Tierra Blanca

$150. 00 1915

31 Amparo Malpica Vega Directora de la escuela Mixta “Miguel Hidalgo”

Xalapa, Ver.

$ 100.00 1918

32Antonio Hernández Jefe del departamento interino de la Dirección General de Educación el Estado

$300.00 1919

El Programa del Partido Liberal en 1906.

29 AHDGEEV. Año 1914, Letra J, Expediente Número 0110. Foja 0000004.30 AHDGEEV.Año 1914, Letra M, Expediente Número 0113. Foja 0000006.31 AHDGEEV. Año 1914, Letra M, Expediente Número 0112. Foja 0000007.32 AHDGEEV. Año 1919, Letra H, Expediente Número 0493. Foja 0000169.

El programa del Partido Liberal Mexicano fue publicado el 1 de julio de 1906 por la

Junta Organizadora en San Luis, Misuri, a través del periódico Regeneración que en esa

ocasión tuvo un tiraje de 250,000 ejemplares, también se reprodujo en medio millón de

pliegos que fueron distribuidos en México, Europa, Estados Unidos y algunos países de

Sudamérica. Este Programa agrupó a decenas de organizaciones liberales, principalmente

de obreros, en contra la dictadura de Porfirio Díaz. En una de las clausulas del Programa

del Partido Liberal Recogía la desigualdad económica y social que el maestro vivía en los

tiempos del Porfiriato. El Partido Liberal Mexicano, en su programa, proponía hacer

reformas en los aspectos políticos, económicos-sociales. En el educativo, planteaba la

necesidad de popularizar la educación y que el Estado debería asumir la organización y

dirección de la instrucción, proponía de igual forma que la educación fuera laica en todo el

país, de igual forma el otorgar mejores sueldos a los maestros, enseñar artes y oficios en

las escuelas, pugnaban en la prohibición de una educación religiosa y que era preciso

impartir una educación elemental; para lograr el desarrollo del país dentro de un marco de

libertad y justicia social.

Por mucho tiempo, la noble profesión del magisterio ha sido de las

más despreciadas, y esto solamente porque es de las peor pagadas. Nadie

desconoce el mérito de esta profesión, nadie deja de designada con los tan

honrosos epítetos; pero, al mismo tiempo, nadie respeta la verdad ni guarda

atención á los pobres maestros que, por lo mezquino de sus sueldos, tienen

que vivir en lamentables condiciones de inferioridad social. El porvenir que

se ofrece á la juventud que abraza el magisterio, la compensación que se

brinda á los que llamamos abnegados apóstoles de la enseñanza, no es otra

cosa que una mal disfrazada miseria. Esto es injusto. Debe pagarse á los

maestros buenos sueldos como lo merece su labor; debe dignificarse el

profesorado, procurando á sus miembros el medio de vivir decentemente. 33

33 Programa del Partido Liberal Mexicano publicado en el periódico Regeneración, editado por los hermanos Flores Magón, 1 de julio de 1906.

Un factor determinante del descontento del los maestros en contra de la dictadura

del General Porfirio Díaz, se debía al precario salario que percibían como instructores de la

niñez, si bien el estado asignó a los maestros la tarea de “... cambiar la faz de la República,

modificar el estado intelectual de nuestro pueblo, trasformar el modo de ser de nuestra

personalidad e impulsar vigorosamente en el sendero del progreso a nuestra patria.”34 El

estado menospreció al maestro, tanto económicamente y social; esta situación se presentaba

en todo el país, con algunas variantes. Podemos observar que una de las demandas más

frecuentes que solicitaba el maestro, era el aumento del salario, la desigualdad social dentro

del campo laboral, que fue otro factor que algunos maestros sufrían, debido a que los

maestros de ciudad percibían un mayor sueldo a diferencia de los maestros rurales. En su

manifiesto de 1906, Ricardo Flores Magón, comenta que la noble profesión del magisterio,

ha sido una de las más despreciadas y de las peor pagadas, ya que con su sueldo sólo se

puede vivir en condiciones muy inferiores a las de resto de los profesionistas. 35 Manifiesta

de igual forma, que nadie desconoce el mérito de esta profesión, pero que al mismo tiempo

nadie respeta la verdad ni guarda la atención a los pobres maestros que, por lo mezquino de

sus sueldos, tienen que vivir en lamentable condición de inferioridad social y que la

compensación que se les brinda a los apóstoles de la enseñanza, no es otra cosa que un mal

disfrazado de miseria, era injusto pagar al maestro su noble profesión con una mezquindad,

que se debía pagar a los maestros, un buen sueldo como lo merece su labor; bebiéndose

dignificar y procurando que sus miembros tengan los medios en el cual puedan vivir

decentemente. Tal como se ha señalado previamente, uno de los factores explícitos del

disgusto magisterial contra la dictadura, fue el de los emolumentos que los maestros venían

recibiendo, cierto prejuicios económicos se venía presentando en todo el país, pero lo que

hay que observar es que el régimen porfirista, desconoció las necesidades del profesorado e

ignoró el papel que jugó el maestro en la unidad nacional que sirvió de base a la estructura

de poder en donde se sostenía el General Porfirio Díaz.

34 El escolar Mexicano, 13 de junio de 1889. Pág.635 Constantino Blancas, Cinosura. Presencia de la Escuela Nacional de Maestro en la Historia de México. México, D.F 1971. Pág. 60.

Educación y Revolución 1910 -1920

En 1910 nuevos aires sociales se avecinaban para el país un movimiento

revolucionario que trasformaría las arcaicas estructuras económicas-sociales del país que

pondrían en una encrucijada al sistema oligárquico de ese momento, estallaría un

movimiento revolucionario presagiado por los acontecimientos que en 1905, 1906 y 1907

ocurrieron en el Estado, que vaticinaba años anteriores Sebastián Lerdo de Tejada al decir:

Yo Profetizo para México{...} la más y grande y poderosa de las revoluciones, no

revoluciones de partidos, estériles y gastadas, sino revoluciones social. Nadie podrá

evitarlas.

El movimiento Revolucionario del 20 de Noviembre de 1910, no sólo tiene que

ver con la prolongada dictadura de Porfirio Díaz, o por el despojo de las tierras, la

ilegalidad, las violaciones, la entrada masiva de capital extranjero, el deterioró de la

condición de vida, del monopolio político, económico y administrativo de un sólo grupo,

ostentaría. Éstos fueron algunos de los catalizadores que más tarde fraguarían a la

Revolución Mexicana, a todo esto se le sumarían las huelgas, protestas obreras,

espontáneos levantamientos de campesinos e indígenas, el crecimiento de la oposición a la

dictadura de las clase burguesa y de la capas medias, perfilarían que entre los años de 1900

a 1910 se erguiría tres facciones de oposición para el régimen Porfirista, la organización del

Partido Liberal Mexicano, los partidarios de Bernardo Reyes y los seguidores del partido

Antirreeleccionistas, los que configurían el derrumbe de Don Porfirio Díaz, el hombre de

hierro.36

La sublevación contra el régimen de Díaz había sido convocada por Francisco I.

Madero en el Plan de San Luis Potosí, para el 20 de Noviembre de 1910. Los principales

grupos Revolucionarios, tenían un fin en común, derrocar a Porfirio Díaz, de igual forma

existía muchas contradicciones, unas pugnaban por una Revolución social en la cuál se

promovía una Revolución violenta y anticapitalista, mientras otra reflejaba la lucha de

Libertad de los burgueses en la cuál aspiraban a una democracia y ostentar los cargos

negados por el viejo régimen. Dos facciones, unas dirigida por los hacendados y otra

36 Maldonado Gallardo Alejo. Et al. Revoluciones latinoamericanas del siglo XX. Síntesis Histórica y análisis historiográfico. Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. México. Pág. 41

dirigida por los líderes campesinos que anhelaban la promesa de la devolución de la tierra

que el Plan de San Luis había retomado del PLM. “Ha escrito Hernández Padilla – Había

dos Revoluciones una representada por los burgueses, que se disputaban el poder y querían

garantizar sus intereses de clases; y otra popular enfocada a destruir la propiedad privada,

con ella al Estado y las clases sociales. De acuerdo con las instrucciones lanzadas por

Madero en su manifiesto de San Luis Potosí, acerca de lanzarse a las armas el 20 de

Noviembre de 1910, pocos y pequeños grupos fueron los que lo llevaron a cabo dentro del

estado de Veracruz, así como en la totalidad de la republica. 37 La Revolución Mexicana no

tuvo un carácter homogéneo, sino que consistió en una serie de revoluciones y conflictos

internos, protagonizados por distintos jefes políticos y militares. Tras la caída del régimen

de Díaz, en la sucesiva lucha de fuerzas que tomaron el poder, poco se hizo en cuanto a

políticas educativas. Tanto Madero como Huerta mantuvieron la estructura política,

administrativa y organizacional del Estado, y por lo tanto, no impusieron un modelo de

país. En ese trance, la educación quedo sin un rumbo fijo. La Revolución Mexicana había

heredado del porfiriato a un número extremadamente alto de analfabetas, resultado de las

políticas educativas del gobierno de Díaz y de sus antecesores con respecto de la

instrucción pública. Los gobiernos de la Revolución se encargaron de llevar a cabo

campañas para educar a obreros y a campesinos como un medio para transformar la

estructura social del país, promover el desarrollo nacional y formar una clase trabajadora

que sirviera de sostén al proyecto modernizador mexicano, todo lo cual tomó años y un

gran esfuerzo para ser hecho realidad.

Una Educación Bajo Principios Revolucionarios en Veracruz

37 Pasquel Leonardo. La revolución en el estado de Veracruz. tomo I. Instituto Nacional de Estudios

Históricos de la Revolución Mexicana. México. 1971. Pág. 163

Una vez que fue establecida el gobierno constitucionalista en el estado de Veracruz,

el 28 de mayo de 1914, los primeros decretos comenzaron hacer expedidos con el fin de dar

respuesta a las principales necesidades sociales. Para concretar mucho de los cambios

planteados por el gobierno, había varios obstáculos tales como la crisis económica y los

constantes ataques de rebeldes que afectaron la tranquilidad del estado durante 1914-

1920.38 Por muchos años, algunos planteles educativos fueron clausurados, ya hubiera sido

por la crisis económica o por los ataques de revolucionarios. Considerando el General

Cándido Aguilar, gobernador y comandante militar del estado libre y soberano de

Veracruz-Llave, que la causa fundamental del movimiento revolucionario, fue sin duda, la

falta de educación, que se mantuvo con el deliberado propósito de sostener el régimen

dictatorial, que conservó sumida en la ignorancia a la gran masa popular mexicana, y que

por ello en este estado de obscurantismo, no podía conocer sus derechos y sólo estaba

sujeta a la carga de pesadas obligaciones; consideraba que el primer deber de la revolución,

era satisfacer las necesidades entre las que la educación merecía la preferencia, y los

primeros pasos del gobierno constitucionalista del gobierno de Veracruz, se encaminaban

en el sentido de llenar tales necesidades, poniendo al servicio del pueblo, lo que la justicia y

el progreso nacional, demandaba de la revolución. Discurriendo que la educación del

pueblo es la base sobre la cuál descansa el bienestar social, en las distintas órdenes de la

actividad humana, a cargo del gobierno en ese momento por Cándido Aguilar, requería una

ley de instrucción apropiada, hechas de acuerdo con las modernas teorías pedagógicas que

en su momento se requerían.39 Para ese instante la necesidad de reformar la Escuela de

Laubscher, Rébsamen y Carlos A. Carrillo, eran necesarios nuevas corrientes pedagógicas,

ya que el nuevo sistema revolucionario lo requería. Atento el Gobernado Cándido Aguilar a

tales requerimientos y con el apoyo del Primer Jefe Constitucionalista Venustiano

Carranza, se dispuso la realización de un Congreso Pedagógico Veracruzano, con sede en la

ciudad de Veracruz del 15 de febrero al 9 de marzo de 1915, para posteriormente

reanudarse en Xalapa, en el salón de Actos de la Escuela Normal Veracruzana del 1 de

38 Romero Ana Laura. Los maestros en la lucha escolar Estado de Veracruz. 1914- 1920. editorial UV, México 1990. Pág. 114.39 Zilli Bernardi Juan. Reseña histórica de la educación pública en el Estado de Veracruz. II tomo. Dirección General de educación popular. Gobierno del Estado de Veracruz. México. 1975 p. 168-169.

Junio a la última semana de Agosto. En dicho congreso se debatieron todo los temas y

problemas de la educación: Enseñanza Primaria, Normal Secundaria, Agrícola, Comercial,

de Artes y Oficios, Profesional y de otras clases. El fruto de este Congreso fue la Ley de

Educación Popular, promulgada el 4 de octubre de 1915. Entre sus aspectos fundamentales

destacan: reintegrar a la escuela y al maestro, desechando la expresión “instrucción

pública” por el de “Educación Popular”; poner a cargo la educación en las manos del

Estado y de los Municipios, ordenando que la educación de ese momento fuera laica en los

establecimientos oficiales y gratuita. Se consideró dentro de la educación popular a las

escuelas de párvulo, primarias, secundarias y normal; tratando que la educación cubriera las

siguientes finalidades: Física, Intelectual, Moral, Estética y Social.

Esa misma Ley desliga a la educación secundaria de los estudios preparatorios,

fijando para ella fines precisos. Estas inspiraciones fueron dadas por el Dr. Enrique Herrera

Moreno. Esa misma ley instituye como un órgano responsable de la Educación, al Consejo

de Educación Popular y la Dirección de Educación Primaria, que desde ese momento

iniciaron sus funciones.

La Educación a partir de 1915 recibió el apoyo político del General Cándido

Aguilar, aunque el gobierno entregó la educación a los municipios la responsabilidad de la

educación, siguió respalda por el Estado, debido que los municipios carecían de medios

para sostener a los maestros y las escuelas. La creación del Consejo de Educación Popular y

la Dirección de Educación Primaria, fueron órganos que se encargarían del proyecto

educativo del Estado en un ámbito administrativo. A este Congreso asistieron como

delegados: médicos, abogados, ingenieros y profesores, todos connotados personajes

relacionados en una u otra forma con la educación, entre los que mencionamos, por el

carácter de este trabajo, a las Srita. Profesora Estefanía Castañeda, quien había emprendido

un movimiento de reforma en los jardines de Niños existentes en aquella época, a fin de

que adoptaran el sistema europeo y poner en práctica la técnica froebeliana. Como

resultado de este evento de trascendental importancia, surge la ley de Educación Popular,

misma que en su artículo 114, contempla el establecimiento de un curso especial de

jardineras o profesores de párvulos, con miras a multiplicar los Jardines de Niños… “Uno

por cada cinco mil habitantes o fracción que pase de 3 mil, queda a cargo del Estado la

obligación de ensanchar el número de escuelas froebelianas, hasta llegar la proporción de

una por cada escuela primaria. Esas iniciativas de expandir la educación preescolar en los

años de 1982 aun era un sueño, a pesar del amplio apoyo del gobierno federal brindo a la

educación preescolar en esos años en el Estado de Veracruz existían alrededor de 794

Jardín de Niños oficiales, lo que significaba que existía un preescolar por cada 6599

habitantes, y uno por cada 8 escuelas primarias.40 En el mismo artículo 114, se mencionaba

el establecimiento de un Jardín de Niños anexo a la Normal, que sirviera de laboratorio de

observación y práctica a las alumnas jardineras. Las cuales deberían de tener como

antecedentes académico para ingresar al curso, tres años de la carrera de profesoras de

instrucción primaria. Y para iniciar el cumplimiento de la ley de educación, en su parte

relativa, el Gral. Cándido Aguilar dirige un oficio a la señorita profesora Rosaura Zapata,

educadora de reconocido prestigio nacional en la que le decía: “considerando este Gobierno

a mi cargo, de grandísima importancia la educación de párvulos, no tanto porque es la base

para el mejor aprovechamiento de la enseñanza primaria, sino porque dicha educación ya es

indispensable”. El 12 de mayo de 1915 quedo instituido el nuevo plantel educativo, bajo la

dirección de la Srita. Zapata secundada por María Pacheco, Adela de la Fuente y Luz

García. Este jardín de niños fue llamado “Número 1” porque fue el primero que se

estableció bajo la Ley de Educación Pública. En 1918 siendo gobernador provisional de

Veracruz el Gral Heriberto Jara, realiza una invitación a la Profra. Bertha Von Glumer, para

que se trasladara a la ciudad de Xalapa, para hacerse cargo de un curso para las educadoras. 41 El curso se impartió en la Escuela Normal, el curso de educadoras de párvulos inicio

actividades el día 4 de febrero de 1919, con dos alumnas únicamente, la señorita Virginia

Aguilar y Esperanza Osorio, quienes posteriormente se convirtieron eficaces colaboradoras

de la maestra Glumer. A estos cursos se unieron otras señoritas, pero el número de

estudiantes siempre fue reducido la razón fue que tenían que estudiar simultáneamente la

carrera de profesoras de Educación Primaria y la educación de Párvulos, lo que implicaba

doble esfuerzo y muchas oras de exhaustivo trabajo intelectual. El horario de actividades

era vespertino, de lunes a sábados, el plan de estudios abarcaba dos años y comprendía las

siguientes materias. Filosofía de Fröbel I y II- Literatura de Kindergarten I y II-

40 Hermida Ruíz J. Ángel. Historia de la Educación en el Estado de Veracruz. Normal veracruzana. Xalapa, Ver. 1980. Pág. 308.41 Hermida Ruíz J. Ángel. Historia de la Educación en el Estado de Veracruz. Normal veracruzana. Xalapa, Ver. 1980. Pág. 310.

Ocupaciones I y II- Dones I y II- Canto y Juegos I y II- Educación Musical I y II. El

problema del crecimiento y proliferación de los preescolares se debió a las limitaciones del

erario público, en 1923 la profesora Osorio Esperanza funda en la ciudad de Coatepec, el

Jardín de Niños Carlos A. Carrillo.

La promulgación de la constitución de 1917 y el artículo 3º y el 123º

A finales de 1916, los revolucionarios se reunieron en Querétaro para reformar la Constitución de 1857. Finalmente decidieron redactar una nueva, pues las circunstancias de México en ese momento eran muy diferentes a las que había en tiempos de Juárez, cuando se hizo la de 1857. La facción constitucionalista que fue la vencedora se reunió para redactar la constitución sin embargo esta era muy heterogénea, ya que sus integrantes por lo que se puede observar eran de diversos orígenes sociales, lo que reflejaba en ellos una diversidad ideológica y política Así, la Constitución de 1917 fue el resultado de la complejidad y heterogeneidad del grupo constitucionalista. Por primera vez, los radicales Jacobinos como eran llamados los delegados del Congreso Constituyentes que estaban a favor de un cambio socioeconómico sustancial, ganaron una gran batalla al implantar los siguientes artículos: el artículos 3º reformaría la educación del pueblo, que dice: “La enseñanza es libre; pero será laica la que se dé en los establecimientos oficiales de educación, lo mismo que la enseñanza primaria, elemental y superior que se imparta en los establecimientos particulares. Ninguna corporación religiosa, ni ministro de algún culto podrá establecer o dirigir escuelas de instrucción primaria. Las escuelas primarias particulares sólo podrán establecerse sujetándose a la vigilancia oficial. En los establecimientos oficiales se impartirá gratuitamente la enseñanza primaria.” La mayor parte de los que integraron el congreso eran maestros por este sentido el artículo 3º mantenía una esencia radical y bajo postulados pedagógicos liberales, las escuelas de párvulos de igual forma quedaron sujetas al artículo 3º. Por otro lado la vinculación del artículo 123 – con la educación queda vincula por lo siguiente forma en primer lugar, se expiden leyes sobre el trabajo, fundadas en las necesidades de cada región, sin contravenir las bases siguientes, las cuales regirán el trabajo de los obreros, jornaleros, empleados, domésticos y artesanos, y de una manera general, todo contrato de trabajo:

 

De esta manera los trabajadores de la educación quedan sujetos a las garantías del

artículo 123, a realizar trabajos de una duración de ocho horas, gozar de un día de descanso,

la igualdad de salarios entre los hombres y las mujeres, cosa que en un principio existía una

desigualdad social y económica, así dicho artículo trataba de regular la desigualdad de esta

manera el artículo 123º, postulan el código de derecho obrero. Por otro lado en la fracción

XII del artículo 123º obligaba a todas las negociaciones industriales, mineras, agrícolas o de

cualquier otro trabajo, los patrones estaban obligados establecer escuelas, en su fracción

VIII, los patrones deberán establecer y sostener dichas escuelas. 42 En Veracruz

encontramos algunos decretos de la educación rural en 1915. Discurría que los propietarios

de las zonas rurales debían ayudar en mejor la condición, de vida de los niños a través de la

educación, y muy diplomáticamente mencionaba Cándido Aguilar, que en tal forma que no

se perjudicaran demasiado sus intereses, pero siendo también en una obligación en

contribuir a la cultura de las clases proletarias que les rodean y que contribuyen al aumento

de los respectivos capitales que estos gozaban, se había tenido a bien expedir a favor de

estos el siguiente decreto:

Artículo 1 Todas las fincas rurales del estado de Veracruz cualquiera condición que sean y cuya población escolar, excedan de 30 niños deben tener una escuela primaria rural.

Artículo 2 Los propietarios encargados de dicha fincas están en la obligación de construir por su cuenta el edificio escolar (...) y el tipo especial aprobado por el consejo superior de educación.

Art. 3 Una vez terminada la escuela, el propietario pasará al gobierno la cuenta de gastos que importen la construcción del edificio y el gobierno satisfará ese importe pasando el plantel hacer propiedad del municipio respectivo.

Art.4 El municipio dotará a estas escuelas del personal docente, mobiliario y útiles que sean necesarios

Art.5 Estas escuelas son oficiales y por lo mismo estarán sujetas a las prescripciones de la ley en sus capítulos respectivos.

Art.6 Los propietarios, encargados, o usufructuarios de las fincas que no cumplan con lo dispuesto en los artículos primeros y segundo de este decreto, serán obligados por las autoridades respectivas, haciendo uso de las facultades que le concede la ley.

Art. 7 Se concede un plazo improrrogable de dos meses (…) desde la publicación de este decreto, plazo dentro del cual del los propietarios procederán a

42 Francisco Larroyo. Historia comparada de la educción en México. México. 1956. Pag. 354

la construcción de los locales de las escuelas respectivas, poniéndose siempre de acuerdo con las autoridades escolares y los inspectores de zona.

H. Veracruz a 12 de enero de 1916C. Aguilar

Al Sr. General de Gobierno Manuel García Jurado.43

El proyecto de José Vasconcelos

La escuela Rural

Maestros Rurales

Entre 1921 y 1923 la educación en manos de José Vasconcelos adquirió un sentido

nacionalista y culturalizaste. Propuso la lucha contra el alfabetismo, las escuelas Rurales o

casa del pueblo, la difusión de la lectura, el impulso a las artes, con todos estos elementos

dio forma al nuevo programa educativo para el país. Nuestro personaje con esas

dependencias pretendía, trasformar las masas marginadas en grupo de individuos

productivos y creadores, así la población se integraría en una unidad nacional libre y

democrática. rte y oficio. En modernos institutos técnicos antes de crear una Universidad,

así pretendía Para Vasconcelos la educación consistía en modelar a los hombres para una

función social de tal manera que la educación, no sólo era culturalizar a los pueblos, sino

consistía en prepararlos para desarrollar una función dentro de la sociedad; con esa idea

pugno por la trasformación de nuestras antiguas escuelas de a que la SEP formara

mecánicos, técnicos industriales de todos los géneros y todo tipo de trabajadores que

aplicaran la ciencia en la industria. La educación para Vasconcelos no era solo para el

habitante de las ciudades, sino también la enseñanza en el campo también era su

preocupación; él pensaba que el indígena no debía de ser exterminado ni recluirlo en

reservaciones, sino debía de ser integrado al desarrollo social. Pues pensaba que el

campesino no era un ser falto de inteligencia o infrahumano, según el tres instituciones

serian las encargadas de la educación campesina. La escuela rural se encargaría de llevar

las primeras letras al medio rural, la escuela comunitaria se encargaría de llevar la

organización tanto social, cultural y económica a la regiones. Mientras que las misiones

43 Blanco Ojeda Félix. (2011) La Participación de los Maestros Veracruzanos en la Revolución Mexicana de 1910 -1917. Tesis de Licenciatura. México. Universidad Veracruzana. Pág. 199

culturales buscarían el mejoramiento profesional de los maestros rurales. De esta manera la

escuela rural tenía como objetivo primordial el capacitar a los campesinos (niño o adultos)

para mejorar sus condiciones de vida mediante la exploración racional del suelo y de las

pequeñas industrias conexas y a la vez que alfabetizarlo. Utilizar la experimentación, de

igual forma a los alumnos se les enseño el uso del idioma castellano. La educación rural en

su sentido educativo comprendió grados de enseñanza desde lo mas modesto hasta lo mas

elevado, de igual forma la educación en las escuelas rurales fueron mixtas44

El proyecto educativo de José Vasconcelos, primer Secretario de Educación (1921-

1924) impulsó la escuela rural en México que surge por iniciativa del Departamento de

Cultura Indígena con la idea de enviar a maestros misioneros que debían recorrer el país

para localizar a las comunidades que requerían atención. Posteriormente se optó por

preparar maestros monitores, es decir, jóvenes de las mismas comunidades para que se

desempeñaran como profesores bajo la orientación de maestros. Estas escuelas se

empezaron a llamar Casas del Pueblo, en las que un maestro atendía todos los grados,

posteriormente conocidas como escuelas rurales. Se les llamó así tratando de reflejar la

estrecha relación de la escuela con la comunidad. La escuela rural mexicana se puede

definir como lo escuela del pueblo, ya que surge como una demanda de la población

mayoritaria del país. Los maestros que participaron en esta obra fueron muchos; sin

embargo, sin disminuir el mérito de ninguno, se puede mencionar además de Vasconcelos,

a Rafael Ramírez Castañeda, Moisés Sáenz Garza y Narciso Bassols García. La escuela

rural mexicana realizó una obra eminentemente social, al ofrecer a niños, jóvenes y adultos

una preparación con elementos curriculares; promovió además actividades prácticas como

técnicas de cultivo, crianza de animales domésticos, prácticas de higiene, se convirtió en el

centro de divulgación ideológica. Las comunidades impulsadas por la escuela rural

alcanzaron un mejor desarrollo porque se promovió la fundación de nuevos centros de

población, se ampliaron las áreas de las casas habitación y de los centros de higiene, se

realizaron campañas de salud e higiene, se instruyó sobre técnicas de conservación de

alimentos, se propició la participación de la comunidad en festivales y deportes.

44 Francisco Larroyo. Historia comparada de la educción en México. México. 1956. Pág. 308

Las funciones de los maestros rurales era el siguiente la mayoría de los maestros

permanecía el mayor tiempo en su comunidad; de día y de noche sin escatimar esfuerzo, de

igual forma su influencia en la región era de un líder natural: líder moral, líder de opinión,

líder político y líder en todos los sentidos. En la escuela independientemente de sus labores

educativas: era de igual forma maestro de danza, de educación física, teatro, responsable de

desayunos escolares preparación y presentación de desfiles. Los maestros rurales dentro de

las comunidades campesinas se convirtió en un Asesor de los campesinos ejidatarios en

todos los asuntos y problemas relacionados con su tierra: créditos, ventas, problemas de

cultivo, siniestros. El maestro rural gestiona apoyos para las comunidades como el

gestionar agua ya que no existía un sistema- y luz eléctrica, construcción de escuelas y

salones ejidales entre otros muchos. El maestro rural convivía día con día con los habitantes

de la comunidad: dialogando, disfrutando de los festejos de familia, haciendo deporte con

los jóvenes, apadrinando en las ceremonias religiosas, atestiguando también y dando fe o

constancia a los asuntos legales de las personas que así se lo solicitaban: bautizos, bodas,

así como asuntos concernientes a las asambleas ejidales. En los asuntos políticos,

principalmente en campañas durante las elecciones (votaciones) tenía una gran

participación, sabiendo que educación y política van de la mano en el sentido social como

lo percibía el maestro. “A pesar que existía una ley en la cual en los años de 1920, las

acciones políticas de los profesores se vieron frenadas por la política del gobierno federal y

del gobierno estatal. A través de una circular que el gobierno expidió se impedía al profesor

participar en las acciones políticas debido a que este era un empleado del sistema. Así, las

acciones de los maestros de aquellos que habían participado en una forma directa o

indirecta en la revolución, muy pronto se vieron frenadas, cabe señalar que el gobierno

implementó esa frase popular que dice: “zapatero a su zapato”. Los inspectores escolares,

cuidaron que los maestros no participaran en aspiraciones políticas, ya que de lo contrario

de no ajustarse a las normas, serían cesados de sus puestos”.45 Los maestros rurales aun

mantenían esta participación política en las comunidades, cosa que quizá el maestro de

ciudad no mantenía. En las zonas rurales el maestro realizaban actividades de ingeniería

civil y como topógrafos: trazo de calles, medición de terrenos, cálculo de perímetro y

superficies, acompañaba a los fieles, fuera del horario de clase a sus asuntos religiosos;

45 Blanco Ojeda Félix. (2011) La Participación de los Maestros Veracruzanos en la Revolución Mexicana de 1910 -1917. Tesis de Licenciatura. México. Universidad Veracruzana. Pág. 210

mañanitas, peregrinaciones, día de muertos y conmemoraciones (ferias relacionadas con su

Santo Patrono), en materia de salud cooperaban en la vacunación; a brindar los primeros

auxilios dentro y fuera de la escuela y, lo que es más, en lo relacionado con ginecología

había maestras que se preparaban para asesorar a las mujeres embarazadas y en la mayoría

de las veces ejercía la labor de partera; para ello contaba con el permiso correspondiente

por parte de las autoridades de salud; como era el caso de la profesora Ester Romo Reyes;

que en toda la región de Tepezalá y con sede en San Antonio; atendió a quienes así lo

necesitaban. Guía y asesor de autoridades civiles, educativas y de los encargados de la

Defensa Rural; integración a jóvenes a los deportes y actividades artísticas, pláticas

informales que de mucho servían cuando se contabas historias de los mayores para ejemplo

de los hijos y nietos y donde la maestra(o) tomaba participación dando sus comentarios y

puntos de vista. Afortunadamente todavía existe gran número maestros que con su ética

profesional todavía se entregan con la misma voluntad y sólo por vocación aunque el

salario no vaya acorde a lo que realmente trabaja.  Esto es el desempeño del maestro y la

maestra rural. Todo lo anterior contribuía a mantener ocupada de alguna manera a la

mayoría de la población escolar y a la propia comunidad realizando labores las mujeres;

principalmente como bordado, tejido, deshilado, pequeñas industrias. Los hombres en el

beisbol, voleibol, danza regional. Hablar de temas de sexualidad entonces era un tabú, más

independientemente de ello la educación del tema se hacía en forma sutil, indirecta y

enfocada al mejor comportamiento y a la responsabilidad en el caso.

El artículo 3º socialista.

Con base a la modificación del Art. 3º Constitucional en 1934, se dio una

orientación socialista a la educación. Esta debía inculcar a los deberes de la solidaridad

humana y los derechos laborales. La enseñanza utilitaria y colectiva debía de preparar a los

alumnos para la producción y fomentar el amor al trabajo como deber social. Al mismo

tiempo se dio el fortalecimiento de la cultura de la salud y del vigor físico, así como

expresión artística y cultural de corte nacionalista. Con esta modificación se hicieron

explicitas las facultades de la secretaría para aplicar la ley obligada a los empresarios a

establecer “Escuelas Artículo 123º” para los hijos de trabajadores en empresas industriales

o rurales. La reforma del articulo se puede destacar tres puntos principales que son el 1-

Carácter socialista de la educación. 2- la eliminación total de la injerencia del clero en la

educación. 3- la hegemonía buscada del Estado con la educación primaria, secundaria y

normal. El debate acerca de la escuela laica y la propaganda a favor de una orientación

precisa y definida de la tarea educativa del Estado, termino por cristalizar en un cuerpo de

doctrina y en un proyecto de reforma del Art. 3º constitucional. “En un discurso a lo

trabajadores del D.F. –manifestaba el General Lázaro Cárdenas que su proyecto de

educación socialista contemplaba desde el preescolar hasta la educación superior.

También hizo énfasis en la axiología y la metodología de la Escuela Socialista basada en

criterios estrictamente científicos y racionalistas”.46

La educación de párvulos en Veracruz en 1937.

En los años de 1937 en los albores de la educación socialista se abre una segunda

etapa en la preparación de las maestras educadoras en Veracruz. De nuevo se contempla la

carrera como una especialización. Ingresarían a ellas las alumnas del 5º año de la normal.

Para cursar durante dos años, las dos carreras profesionales en forma simultánea.

Posteriormente se modifico el reglamento interior de la normal y las futuras educadoras

ingresaban al instituto cuando cursaban el 6º año para proseguir sus estudios después de

graduarse como profesoras de primaria.

El plan de estudio era similar al vigente veinte años atrás, y la distribución de

tiempo se adaptaba a las horas libres que hubiese en el horario de la Normal Primaria. El

primer grupo de alumnas lo formaron 18 alumnas normalistas y 4 profesoras de primaria

46 Francisco Larroyo. Historia comparada de la educción en México. México. 1956. Pág. 383.

ya tituladas, que deseaban ser educadoras. También se creo un grupo de párvulos al que se

le llamó Federico Fröbel anexo a la normal, para establecer el binomio teoría- practica. Este

grupo se trasformo con el correr de los años, en un jardín de niños de organización

completa y se cambio el nombre por el de Bertha Von Glumer. La primera directora del

instituto de educadoras fue la señorita Ángela Rechy quien años después entregó la

dirección a la profesora Graciela Rivera del Pozos, ameritada maestra que condujo

acertadamente la institución durante 21 años y que abrigó siempre el deseo de convertir la

carrera en un pos-grado, anhelo que no vio realizado por diversos factores de orden legal.

Durante su gestión como directora se fundaron: el laboratorio y taller de materiales y

auxiliares didácticos y el jardín de niños experimental, como anexo al propio instituto. Al

comparar los planes de estudio vigente hasta 1951, encontramos que estaban inmersos en la

filosofía froebeliana y que había permanecido estacionaria, sin variar casi en las ideas

predominantes sobre la conducción de los grupos preescolares. A partir de 52, se reforma el

plan de estudios y queda estructurado en la forma siguiente.

Primer año Segundo Año

Psicología infantil

Literatura Infantil

Material Didáctico

Educación Musical

Canto y Juego

Técnica de enseñanza en los Jardines de Niños.

Organización y Administración de los Jardines de Niños

Actividad Periescolares

Artes Plásticas

Ritmo y Danza

Juguetería

Educación Musical

Práctica Escolar

La preparación académica de las educadoras Veracruzanas era, en cierta forma,

superior a las egresadas de otras normales, porque tenían que estudiar las dos carreras

pedagógicas, pero en su pensamiento se manifestaba predominante la formación de

profesoras de primaria.47

Fotos

47 J. Hermida Ruiz. Historia de la educación en el Estado de Veracruz. Edición Normal Veracruzana. Xalapa, Ver. México. 1987. Paginas 315-316-317.