lorena coloma bello
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PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DE CHILE
FACULTAD DE AGRONOMÍA E INGENIERÍA FORESTAL
DIRECCIÓN DE INVESTIGACIÓN Y POSTGRADO
MAGISTER EN FISIOLOGÍA Y PRODUCCIÓN VEGETAL
EFECTO DEL ÁCIDO GIBERÉLICO SOBRE LA COLORACIÓN DE LA
CÁSCARA DE LIMA TAHITÍ EN JAYANCA, PERÚ
Tesis presentada como requisito para optar al grado de
Magister en Fisiología y Producción Vegetal
por:
Lorena Coloma Bello
Comité de Tesis
Profesor Guía: Johanna Mártiz
Profesor Informante: Claudia Bonomelli
Noviembre 2021
Santiago - Chile
Agradecimientos
A la empresa Agrícola BGS, por permitirme desarrollar esta tesis en sus campos y
por estar dispuesta siempre a colaborar con la investigación científica.
A mi profesora guía, Johanna Mártiz, por su apoyo y orientación en el desarrollo de
esta investigación y por las oportunidades brindadas para incrementar mi
conocimiento sobre la fruticultura.
A mi profesora informante, Claudia Bonomelli, por su contribución en la realización
de este estudio y por impulsarme a tomar decisiones con pensamiento crítico.
A mi padre, por su constante ayuda y motivación para seguir creciendo
profesionalmente.
A Lili y todas las chicas de fenología, por haber hecho posible la elaboración de esta
tesis. Y a mi Equipo BGS, por el apoyo moral a lo largo de toda esta etapa.
Al Perú.
1
ÍNDICE
Introducción ........................................................................................................................ 3
Descripción general ....................................................................................................... 3
Características comerciales ........................................................................................ 3
Maduración del fruto ..................................................................................................... 4
Efectos del ácido giberélico ........................................................................................ 5
Post-cosecha de la lima ................................................................................................ 7
Desordenes fisiológicos ............................................................................................... 8
Hipótesis .......................................................................................................................... 8
Objetivos .......................................................................................................................... 8
Materiales y Métodos ........................................................................................................ 9
Ubicación ......................................................................................................................... 9
Tratamientos.................................................................................................................. 10
Evaluaciones ................................................................................................................. 11
Resultados ......................................................................................................................... 14
Producción total y distribución de calibres ........................................................... 15
Color de cáscara........................................................................................................... 17
Cantidad de jugo .......................................................................................................... 19
Control de mancha amarilla ....................................................................................... 20
Crecimiento de fruto .................................................................................................... 21
Incidencia de oleocelosis ........................................................................................... 24
Discusiones ....................................................................................................................... 26
Producción total y distribución de calibres ........................................................... 26
Color de cáscara........................................................................................................... 26
Cantidad de jugo .......................................................................................................... 28
Control de mancha amarilla ....................................................................................... 29
Crecimiento de fruto .................................................................................................... 29
Incidencia de oleocelosis ........................................................................................... 30
Conclusiones .................................................................................................................... 31
Resumen ............................................................................................................................ 33
Referencias ........................................................................................................................ 34
Anexos ................................................................................................................................ 40
2
Efecto del ácido giberélico sobre la coloración de la cáscara de lima Tahití en
Jayanca, Perú
Lorena Coloma Bello
Pontificia Universidad Católica de Chile
Abstract
Lorena Coloma Bello. Efecto del ácido giberélico sobre la coloración de la
cáscara de lima Tahití en Jayanca, Perú. Tesis, Magister en Fisiología y Producción
Vegetal, Facultad de Agronomía e Ingeniería Forestal, Pontificia Universidad Católica
de Chile. Santiago, Chile. 43 pp.
The Tahiti lime is a crop with high productive potential on the north coast of Peru.
However, its commercial value is often reduced by the change in color of the fruits
when they reach commercial sizes. This research was developed in Jayanca,
Lambayeque, with the aim of evaluating the influence of pre-harvest applications of
gibberellic acid to maintain the green color of the fruit peel and its commercial value.
The application of gibberellic acid at a dose of 30 ppm made 5 weeks prior to harvest
helped to maintain the color of the fruit and accelerated its growth, but negatively
affected other aspects of quality, reducing the content of juice and increasing the
incidence of oleocellosis.
Keywords: lime, gibberellic acid, peel, juice, oleocellosis.
3
Introducción
Descripción general
La lima Tahití (Citrus latifolia), también conocida como lima Persa, es una lima ácida
originaria del continente asiático y pertenece a la división Magnoliophyta, clase
Magnoliopsida, orden Sapindales, familia Rutaceae (Rivera-Cabrera et al., 2010). Su
fruto, así como el de todos los cítricos, es un tipo de baya llamado hesperidio
(Fidelibus, 2002) cuya cáscara se compone de dos capas distintas conocidas como
flavedo y albedo (Fidelibus et al., 2002). El flavedo es la porción externa de color de
la cáscara: consiste en una epidermis cubierta por cutículas y células de paredes
gruesas intercaladas con glándulas de aceite (Fidelibus et al., 2002), que recibe ese
nombre por el contenido de flavonoides en él (Rivera-Cabrera et al., 2010). El albedo
es la porción interna blanca de la cáscara: consiste en varias capas de células de
paredes delgadas con espacios de aire entre ellas (Fidelibus et al., 2002). La capa
más externa de la fruta es la epidermis, que está formada por una capa de células
que recubren toda la superficie de la fruta; las paredes celulares externas de esta
capa están muy cutinadas y parcialmente cubiertas con una sustancia cerosa
(Rivera-Cabrera et al., 2010). La parte comestible de la fruta está integrada por
segmentos de carpelo dentro de los cuales hay muchas vesículas de jugo (Ting y
Attaway, 1971; Rivera-Cabrera et al., 2010). El número de carpelos varía en las frutas
de lima ácida que frecuentemente presentan alrededor de 8-11 segmentos o lóculos
(Loussert, 1992; Rivera-Cabrera et al., 2010).
La lima Tahití produce tanto frutas independientes como frutas en racimo; las frutas
producidas en racimos son más pequeñas y suelen presentar un área sombreada de
color amarillo que limita su calidad de exportación, mientras que las frutas
individuales son más grandes y con un color verde homogéneo en toda su superficie.
Las limas injertadas sobre Citrus volkameriana producen principalmente frutas en
racimos, por lo que se recomienda realizar raleos de frutos (Rivera-Cabrera et al.,
2010).
Características comerciales
La lima Tahití tiene frutos partenocárpicos muy jugosos, obovados, de gran tamaño,
sin semillas, de corteza delgada y superficie lisa. El uso de la lima es como acidulante
en la preparación de bebidas, ya que es más aromáticas en sabor y aroma que otras
frutas cítricas, especialmente cuando se usa en la etapa verde (Rivera-Cabrera et al.,
2010). Los principales mercados importadores de esta variedad son Estados Unidos
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y Europa, principalmente Países Bajos, Reino Unido, Alemania y Francia; y los
principales países productores son México, Brasil, Colombia, Vietnam, Guatemala y
Perú (CBI, 2018; Romero, 2019).
El índice de calidad más importante para la comercialización de la lima Tahití es el
color verde oscuro de la cáscara, el cual debe mantenerse en toda la cadena de
suministro de postcosecha para obtener buenos precios en el mercado internacional
(Zhang y Zhou, 2019; Raddatz-Mota et al., 2019). Otros índices de calidad que se
consideran importantes son el tamaño, la forma, la firmeza, el contenido de jugo y la
ausencia de defectos visibles (Rivera-Cabrera et al., 2010).
Maduración del fruto
El crecimiento de los frutos de los cítricos sigue un patrón sigmoidal de tres etapas:
en la primera fase ocurre una división celular que resulta en un crecimiento lento, en
la segunda fase ocurre un aumento de tamaño por expansión celular y acumulación
de agua que resulta en un crecimiento rápido, y en la tercera fase el crecimiento se
detiene y ocurre la maduración de las frutas. Como parte de la maduración en la fase
III las frutas atraviesan un cambio de color característico, proceso que es de particular
importancia económica ya que el color externo de los cítricos es un parámetro de
calidad determinante en el mercado de productos frescos (Alós et al., 2006). El
proceso conocido como quiebre de color en la cáscara de los frutos de los cítricos
implica la conversión de cloroplastos en cromoplastos (Erickson, 1968; Fidelibus,
2002), lo cual implica la degradación de la clorofila y la acumulación de carotenoides
(Alós et al., 2006).
La vía de degradación de la clorofila en las plantas superiores inicialmente implica la
conversión de clorofila b (Chl b) a clorofila a (Chl a) por la clorofila b reductasa,
codificada por el locus cítrico de COLOR NO AMARILLO (NYC). Luego, la Chl a es
catabolizada por dos enzimas, CLH y PPH. A continuación, una sustancia quelante
de metales elimina el Mg y una enzima oxigenasa (PAO) lo convierte en catabolito
rojo de clorofila (RCC), el cual se reduce a pFCC, un intermedio incoloro, por acción
de la reductasa RCCR. Finalmente, pFCC es modificado y almacenado en la vacuola
como NCC, un catabolito incoloro de clorofila no fluorescente (Belyaeva y Litvin,
2009; Hörtensteiner y Kräutler, 2011; Yin et al., 2016).
La fisiología de este proceso parece estar modulada, entre otras cosas, por los
azúcares presentes en la cáscara (Goldschmidt y Koch, 1996; Fidelibus et al., 2008).
Además de los azúcares, el cambio de color está influenciado por condiciones
5
ambientales (como la temperatura), la disponibilidad de nutrientes (como el
nitrógeno) y hormonas (como el etileno y la giberelina) (Iglesias et al., 2001; Alós et
al., 2006). A pesar de no ser frutos climatéricos, el etileno tiene un efecto en la
regulación de la maduración de la fruta y el cambio de color de la cáscara (Porat et
al., 2001) ya que la biosíntesis de etileno durante la fase III del desarrollo del fruto
actúa aumentando la actividad de la enzima clorofilasa (Trebitsh et al., 1993; Porat
et al., 2001).
Efectos del ácido giberélico
El ácido giberélico tiene como principales efectos fisiológicos la elongación y división
celular, la elongación de tallos, brotes y entrenudos, la regulación del inicio de
floración, la cuaja y crecimiento del fruto y la germinación de la semilla (Taiz y Zeiger,
2006). En plantas perennes, se ha notado que el ácido giberélico promueve el
crecimiento vegetativo a expensas del desarrollo reproductivo (Boss y Thomas 2002;
Muñoz-Fambuena et al., 2012). En cítricos, se ha identificado más de 20 giberelinas
diferentes, sin embargo, muchas carecen de actividad biológica o son intermedios en
la ruta de compuestos biológicamente activos (Fidelibus et al., 2002). En varios
cítricos es común, desde hace muchos años, utilizar el ácido giberélico para retrasar
la senescencia y pérdida de clorofila de los frutos para prolongar la temporada de
cosecha (Greenberg et al., 1986; Coggins et al., 1992; El-Otmani et al., 1990; García-
Luis et al., 1992; Greenberg et al., 1992; McDonald et al., 1997; Porat et al., 2001).
La eficacia de la aplicación de ácido giberélico con respecto a la senescencia de la
cáscara está relacionada con la edad fisiológica de la fruta y la cantidad de tiempo
entre la aplicación y la cosecha (Greenberg et al., 1992; Fidelibus et al., 2002). Las
giberelinas tienen efectos duraderos sobre el color de la cáscara y, en muchos casos,
la fruta verde no es deseable en la cosecha, por lo que se debe considerar la fecha
probable de cosecha antes de la aplicación (Coggins et al., 1965; Coggins, 1981;
Fidelibus et al., 2002). La eficacia está determinada también por el volumen de
pulverización y la dosis de ácido giberélico (Mcdonald et al., 1997; Garmendia et al.,
2019).
Otro factor determinante del efecto de la aplicación de ácido giberélico es el momento
de ésta. Cuando las aplicaciones son realizadas en la etapa de floración y cuajado,
mejoran la cuaja y el crecimiento de frutos partenocárpicos (Soost y Burnett, 1961;
Tadeo et al., 2008) ya que la capacidad de demanda de los frutos depende, en parte,
del estímulo hormonal, siendo las giberelinas las más importantes en la estimulación
6
de cuajado de frutos partenocárpicos (Gravina, 2014). Variedades de cítricos
partenocárpicos con poca cuaja y tasas altas de absición generalmente contienen
niveles bajos de giberelinas en comparación con los frutos con semillas (Talon et al.,
1992; Tadeo et al., 2008).
Cuando se aplica ácido giberélico para retrasar la maduración de la cáscara, también
puede reducir o retrasar la floración de la siguiente campaña; un efecto que puede
ser útil o indeseable, según las circunstancias (Fidelibus et al., 2002).
Las aplicaciones de giberelina tienen una respuesta máxima en el retraso del
desverdizado cuando se realizan durante el intervalo entre el inicio de la degradación
de la clorofila y el inicio de la acumulación de carotenoides; las aplicaciones
anteriores o posteriores resultan en respuestas menores al tratamiento (García-Luis
et al., 1992). En un ensayo realizado por Alós et al. (2006) se analizó el efecto de
aplicaciones de nitrógeno y giberelina en el flavedo: en comparación con las frutas
control, el flavedo de las frutas tratadas con nitrógeno y giberelina contenía niveles
más altos de clorofilas y tenía un perfil de carotenoides típico de tejidos verdes. Estos
cambios en los niveles de pigmentos explican el retraso en los cambios de color y
sugieren que los dos compuestos retrasan tanto el recambio de clorofila como el flujo
diferencial a través de la ruta de los carotenoides (Alós et al., 2006).
Una de las principales explicaciones fisiológicas del efecto desacelerador de la
pérdida de color verde de la cáscara del ácido giberélico es la regulación de los
azúcares solubles en el flavedo; los niveles de fructosa y glucosa están inversamente
relacionados con el color verde de la cáscara (Fidelibus et al., 2008). El ácido
giberélico mantiene la coloración verde por más tiempo ya que, por un lado, retrasa
la acumulación de azúcares de hexosas, y, por otro lado, reprime la respuesta de
etileno estimulada por altos niveles de sacarosa (Fidelibus et al., 2002).
Además de ralentizar la pérdida de color verde de la piel, los tratamientos con ácido
giberélico ralentizan también la disminución de la resistencia de la cáscara (Coggins,
1969; Davies, 1986; Fidelibus, 2002). La estructura de la cutícula, la epidermis y las
células del flavedo contribuyen directamente en la resistencia a la punción de la
cáscara de los cítricos (Coggins y Lewis, 1965; Fidelibus et al., 2002). En fruta tratada
con ácido giberélico, las células de las cáscaras son más numerosas y están más
juntas (Coggins y Hield, 1968; Fidelibus et al., 2002) pudiendo ser descritas como
más compactas en comparación con las cáscaras no tratadas (Fidelibus et al., 2002).
Una mayor firmeza de la cáscara también se relaciona con la concentración de los
7
polisacáridos de las paredes celulares (Fidelibus et al., 2002). Frutas tratadas con
ácido giberélico, al tener altos niveles de esta hormona que interfiere con la acción
del etileno, presentan una supresión de la expresión de genes relacionados con la
degradación de la pared celular, resultando en cáscaras más resistentes (Nagar,
1994; Fidelibus et al., 2002).
Las aplicaciones de ácido giberélico, si bien no interfieren con la calidad interna de
la fruta, pueden aumentar indirectamente el rendimiento de jugo (Fidelibus et al.,
2002). Por un lado, es posible que, al mejorar la integridad de la fruta, la extracción
de jugo pueda realizarse de manera más eficiente y aumente así el rendimiento de
éste (Albrigo y Carter, 1977; Davies et al., 1997; Fidelibus, 2002). Por otro lado, ha
sido reportado que el uso de ácido giberélico puede reducir el grosor de la cáscara,
aumentando la proporción de pulpa en la fruta, resultando en un aumento de
rendimiento de jugo (Fidelibus et al., 2002).
Post-cosecha de la lima
Después de haber sido cosechada la fruta, la temperatura de almacenamiento es un
factor determinante para la tasa de deterioro especialmente en cítricos (Kader, 1992;
Porat et al., 2001). En términos generales, temperaturas alrededor de los 30°C
aumentan la degradación de la clorofila, mientras temperaturas alrededor de los 25°C
son óptimas para la biosíntesis de carotenoides; por lo tanto, temperaturas bajas de
almacenamiento retrasan el deterioro de la piel y la pérdida de clorofila, y
temperaturas altas de almacenamiento aumentan el desverdizado (Porat et al.,
2001).
En los cítricos en los cuales se desea conservar la coloración verde hasta su
comercialización, se pueden aplicar tratamientos con ácido giberélico post-cosecha,
sumergiendo la fruta unos segundos en él. Este tratamiento ayuda a retener
significativamente el color verde de la fruta y no tiene ningún efecto sobre las
características internas de calidad de la fruta, como el contenido de sólidos solubles
totales y contenido de ácido, ni sobre la vida de anaquel de la fruta (Porat et al.,
2001).
Las limas Tahití tienen una vida útil de post-cosecha reducida (El-Otmani, 2006;
Bassan et al., 2013), por lo que la cosecha se realiza tan pronto alcanzan la madurez
(Bassan et al., 2013). Si permanecen más tiempo en el árbol, estos frutos entran en
la etapa de senescencia, iniciando el proceso de degradación de la clorofila y el
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aumento del consumo de carbohidratos (Gayet y Salvo Filho, 2003; Bassan et al.,
2013).
Desordenes fisiológicos
Los principales desórdenes fisiológicos que aparecen durante la exportación de la
lima Tahití son el daño por frío, la oleocelosis y la descomposición del extremo estilar.
El área del fruto con presencia de cada uno de estos daños puede afectar la
aceptabilidad del consumidor provocando pérdidas comerciales. El daño por frío se
expresa como punteaduras o depresiones marrones en el flavedo; la oleocelosis se
expresa como manchas marrones de forma irregular con un ligero hundimiento de
los tejidos y es ocasionada por la acción de aceites citotóxicos sobre la cáscara
cuando la fruta sufre daños mecánicos por mala manipulación desde la cosecha en
adelante (Rivera-Cabrera et al., 2010); y la descomposición del extremo estilar es la
pudrición del tejido debido a la ruptura de las vesículas de jugo (Bassan et al., 2013).
La lima Tahití es un cultivo de alto interés agronómico y comercial en la zona costera
norte del Perú. Se logra obtener una alta productividad en los campos con una calidad
interna de fruto muy buena, sin embargo, a partir de los 50 mm los frutos cambian de
coloración hacia un verde muy claro rápidamente, disminuyendo su valor comercial
en el mercado externo. Por esta razón, se evaluó la influencia de la aplicación de
ácido giberélico pre cosecha para mantener la coloración verde de la fruta y que no
se reduzca su valor comercial.
Hipótesis
Dado que el ácido giberélico interviene en el proceso fisiológico del quiebre de color
en cítricos, la aplicación foliar de esta hormona en la etapa III de maduración en lima
Tahití permite mantener la coloración verde de la cáscara del fruto hasta su madurez
comercial, obteniendo mejores rendimientos exportables y mayores retornos
económicos.
Objetivos
Evaluar la influencia de la aplicación de ácido giberélico en pre cosecha sobre el
cambio de coloración de la cáscara de lima Tahití bajo condiciones de la localidad de
Jayanca, Lambayeque, Perú.
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Evaluar la influencia de la aplicación de ácido giberélico en pre cosecha en lima Tahití
sobre el crecimiento y calibre final de los frutos, el porcentaje de jugo y la incidencia
de oleocelosis y de sombreado.
Materiales y Métodos
Ubicación
Los ensayos se llevaron a cabo en el fundo “El Regocijo” (6°19’21.340” Sur –
79°46’31.031” Oeste) ubicado en el distrito de Jayanca, región Lambayeque, en la
costa norte del Perú. Utilizando datos obtenidos de la estación meteorológica del
campo, esta localidad se puede caracterizar por tener un clima que varía entre los
36°C de temperatura máxima en época de verano, 10°C de temperatura mínima en
época de invierno, y una temperatura promedio anual de 23°C. La humedad relativa
promedio anual es de 77%, oscilando entre 40% y 100%.
La plantación de limas se encuentra ubicada entre dos ríos, otorgando ciertas
propiedades al suelo: textura franco arenosa, profundidad de suelo mayor a 2 metros,
pH de 7.89 y C.I.C. de 10.33. El agua de riego es extraída de un pozo y enviada
directamente al campo. Esta agua presenta una conductividad eléctrica de 1.897
dS/m y un pH de 7.5. El agua utilizada para las aplicaciones foliares es extraída de
un reservorio donde convergen distintos pozos y presenta una conductividad eléctrica
de 1.33 dS/m y un pH de 7.64.
Se designó un área de 4.55 hectáreas de lima Tahití (C. latifolia) injertada sobre limón
Volkameriano (C. volkameriana), de 3 años y 6 meses, para la realización del estudio.
El campo tiene una orientación de instalación NE - SO y un distanciamiento de 7 m
entre hileras y 4 m entre plantas. La plantación es llevada con un manejo tradicional
y recibe 13000 m3/ha de agua por campaña (de abril a marzo). La fertilización de la
plantación se ajusta mensualmente de acuerdo a los resultados obtenidos mediante
análisis nutricionales foliares y de frutos. En términos generales, el campo recibe
anualmente, por hectárea, alrededor de 235 unidades de N, 30 unidades de P2O5,
240 unidades de K2O, 60 unidades de CaO, 40 unidades de MgO, 100 unidades de
ZnO, 6 unidades de B, 1.5 unidades de Cu, 6 unidades de Fe y 6 unidades de Mn.
Tanto el agua como la fertilización se entregan mediante sistema de fertirriego por
goteo, donde cada hilera cuenta con 2 mangueras de tipo hidrogol, con un
distanciamiento de 35 cm entre goteros y un caudal de 1.3 l/h.
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Tratamientos
Se realizaron 5 tratamientos con 5 repeticiones cada uno. Cada repetición abarcó 15
árboles y se utilizaron 2 árboles por repetición como unidad de muestreo. La
selección de hileras y cantidad de árboles para cada tratamiento se hizo de manera
completamente aleatoria. Los tratamientos fueron T0, testigo; T1, aplicación de ácido
giberélico a una dosis de 20 ppm, 15 días antes de cosecha; T2, aplicación de ácido
giberélico a una dosis de 30 ppm, 15 días antes de cosecha; T3, aplicación de ácido
giberélico a una dosis de 20 ppm, 10 días antes de cosecha; y T4, aplicación de ácido
giberélico a una dosis de 30 ppm, 10 días antes de cosecha. Todas las aplicaciones
fueron hechas con pitón de doble boquilla (Fig. 1), empleando un mojamiento de 2500
l/ha y un pH de la solución de 5.7. En todos los casos se utilizó el producto Biofruit
como fuente de ácido giberélico a las distintas dosis mencionadas, 0.02% de ácido
fosfórico como producto acidificante para la solución, y una dosis de 0.03% de
Kompat como producto surfactante (fichas técnicas en anexos 1, 2 y 3
respectivamente).
Figura 1. Aplicación foliar de ácido giberélico a lima Tahití con pitón de doble
boquilla.
Se llevaron a cabo dos cosechas de todos los tratamientos. En ambos casos se
cosecharon todos los frutos con diámetro mayor o igual a 50 mm (Fig. 2) de 2 árboles
ubicados en la zona central de cada unidad experimental (Tabla 1).
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Figura 2. Calibrador de frutos para cosecha de limas de diámetro igual o superior a
50 mm.
La cosecha se hizo realizando el corte con tijeras y colocando los frutos directamente
en jabas plásticas previamente codificadas.
Tabla 1. Fechas de aplicación, dosis y fechas de cosecha de cada tratamiento de
ácido giberélico ensayado en lima Tahití en la localidad de Jayanca, Lambayeque.
Tratamiento Días
Antes de Cosecha
Dosis Fecha de
Aplicación Primera Cosecha
Segunda Cosecha
T0 - - - 11/02/20 05/03/20
T1 15 20 ppm 27/01/20 11/02/20 05/03/20
T2 15 30 ppm 28/01/20 11/02/20 05/03/20
T3 10 20 ppm 01/02/20 12/02/20 06/03/20
T4 10 30 ppm 02/02/20 12/02/20 06/03/20
Hubo una diferencia de 23 días entre la primera y segunda cosecha. Los días
transcurridos desde la aplicación hasta la primera cosecha y hasta la segunda
cosecha permitieron analizar el efecto del ácido giberélico en el tiempo.
Evaluaciones
Terminada la cosecha cada día, se llevó a reposar la fruta bajo sombra hasta el día
siguiente para ser clasificada y evaluada. La clasificación por color se diferenció en
verde oscuro, verde claro y verde amarillo, considerando si el 50% a más del fruto
presentaba cada tonalidad (Fig. 3). Para realizar el análisis estadístico del color, se
calculó un índice en base a un promedio ponderado de los siguientes valores
asignados: verde oscuro = 0, verde claro = 1, verde amarillo = 2. La clasificación por
mancha amarilla o sombreado se diferenció en ausente (sin mancha), leve (se puede
esconder con un dedo), moderada (sólo afecta una cara del fruto) y severa (es visible
desde todos los ángulos) (Fig. 4). Para realizar el análisis estadístico de la mancha
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amarilla, se calculó un índice en base a un promedio ponderado de los siguientes
valores asignados: ausente = 0, leve = 1, moderada = 2, severa = 3. La clasificación
por calibre se hizo midiendo el diámetro ecuatorial de cada fruto con un vernier,
siendo de calibre 54 la fruta entre 50 y 53 mm, calibre 48 la fruta entre 53 y 55 mm,
calibre 42 la fruta entre 55 y 60 mm, y calibre 36 la fruta de 60 mm a más (Fig. 5). La
evaluación del contenido de jugo se calculó en porcentaje en base al peso fresco de
la fruta y el peso de jugo obtenido después de exprimirla.
Figura 3. Clasificación de frutos de lima Tahití por color.
Figura 4. Clasificación de frutos de lima Tahití por sombreado o mancha amarilla.
Figura 5. Clasificación de frutos de lima Tahití por diámetro ecuatorial.
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Para la evaluación de la incidencia de oleocelosis (Fig. 6 y Fig. 7) se hicieron
cosechas diferenciadas con dos metodologías, con guantes y sin guantes de hilo.
Luego se llevó la fruta a una cámara de refrigeración a 8°C por una semana para
lograr observar una mayor expresión del daño sobre la cáscara. Después de ser
retirada de la cámara, la fruta fue clasificada como con presencia de oleocelosis, o
sin oleocelosis (la totalidad del fruto libre de daño) tomando en consideración también
la clasificación previa de cosecha con guantes y cosecha sin guantes. Para realizar
el análisis estadístico de la incidencia de oleocelosis, se calculó un índice en base a
un promedio ponderado de los siguientes valores asignados: sin oleocelosis = 0, con
oleocelosis = 1. Todas las cosechas para evaluación de oleocelosis se realizaron a
partir de las 10 a.m., con una humedad relativa de entre 59% y 63% (datos obtenidos
de estación meteorológica del fundo).
Figura 6. Lima Tahití con oleocelosis. Figura 7. Lima Tahití sin oleocelosis.
Para la evaluación de crecimiento de frutos se marcaron 2 árboles por unidad
experimental. En cada árbol se marcaron 10 frutos de diámetros entre 10 y 20 mm,
10 frutos de diámetros entre 20 y 30 mm, 10 frutos de diámetros entre 30 y 40 mm y
10 frutos de diámetros entre 40 y 50 mm. La medición de frutos se realizó
semanalmente con vernier (Fig. 8).
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Figura 8. Medición semanal de diámetro ecuatorial de frutos con vernier.
Diseño experimental y análisis de datos
El diseño experimental fue completamente al azar, con 5 tratamientos y 5
repeticiones cada uno, dando un total de 25 unidades experimentales. Cada unidad
experimental abarcó 15 árboles, utilizando 2 árboles por repetición como unidad de
muestreo. Los datos fueron sometidos a análisis de varianza en el programa
estadístico Infostat, utilizando la prueba LSD Fisher con un nivel de confianza del
90%. Se aplicó una transformación angular para el análisis del porcentaje de jugo.
Resultados
La lima Tahití es una variedad precoz, con un corto ciclo de producción de 24
semanas, o 6 meses, desde la floración hasta la cosecha en Jayanca, Lambayeque,
Perú.
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Tabla 2. Duración en semanas de cada etapa fenológica del cultivo de lima Tahití en
Jayanca, Lambayeque, y estimación de fases de crecimiento características de los
frutos de cítricos.
Etapa Fenológica Semanas Fase
Floración 2 -
Cuajado 2 I
Crecimiento de frutos de 10 - 20 mm 4 II
Crecimiento de frutos de 20 - 30 mm 4 II
Crecimiento de frutos de 30 - 40 mm 5 II
Crecimiento de frutos de 40 - 50 mm 7 II - III
Total 24
El periodo de floración y cuajado se extiende por aproximadamente 1 mes, y es
donde ocurre la mayor parte de la caída fisiológica. El periodo de crecimiento de fruto
se extiende por 5 meses, hasta llegar al diámetro de cosecha de 50 mm. La etapa de
maduración fisiológica no suele apreciarse dado que los frutos se cosechan
anticipadamente.
Producción total y distribución de calibres
No existe diferencia significativa en la producción total (kg/planta) de lima con los
distintos tratamientos, pero se observa una tendencia general a una disminución en
la producción con los tratamientos de ácido giberélico en comparación con el testigo
(Fig. 9). La tendencia mencionada se acentúa en el T2, indicando que una aplicación
de ácido giberélico más temprana, y con mayor dosis, tiene un mayor efecto sobre la
reducción en la producción que los demás tratamientos. Se observa también que los
distintos tratamientos no cambian la distribución de calibres al momento de la
cosecha comercial (de 50 mm a más), ya que la proporción de cada grupo se
mantiene similar en todos los tratamientos (Fig. 9).
16
Figura 9. Producción total de lima Tahití y distribución de calibres por árbol con
distintos tratamientos de ácido giberélico. Letras distintas indican diferencia
significativa entre los tratamientos (p<0,1).
a
a
aa
a
0
10
20
30
40
50
60
70
80
T0 T1 T2 T3 T4
Pro
du
cció
n (
kg/p
lan
ta)
Tratamientos
60 mm +
55 - 60 mm
53 - 55 mm
50 - 53 mm
50 - 53 mm 53 - 55 mm 55 - 60 mm 60 mm +
T0 77% 14% 8% 1%
T1 72% 15% 12% 1%
T2 75% 13% 11% 1%
T3 62% 25% 11% 1%
T4 70% 17% 11% 2%
0%
20%
40%
60%
80%
100%
Dis
trib
uci
ón
de
Cal
ibre
s
A
17
Figura 10. (A) Distribución de calibres obtenidos en la primera cosecha de frutos de
lima Tahití con distintos tratamientos de ácido giberélico. (B) Distribución de calibres
obtenidos en la segunda cosecha de frutos de lima Tahití con distintos tratamientos
de ácido giberélico.
En la primera cosecha (Fig. 10 A), se nota una ligera mejora en la distribución de
calibres de los frutos con T3. La principal diferencia se encuentra en un mayor
porcentaje de frutos pertenecientes al calibre 48, que comprende los frutos de
diámetro entre 53 y 55 mm, lo cual podría traducirse en una mayor ganancia
comercial, aunque muy leve. En la segunda cosecha (Fig. 10 B), no se observa
alguna diferencia significativa en la distribución de calibres con los distintos
tratamientos: el efecto de la aplicación de ácido giberélico sobre la distribución de
calibres disminuye con el tiempo transcurrido.
Color de cáscara
No existe diferencia estadística significativa en la coloración general de la cáscara de
lima Tahití con ninguno de los tratamientos (Fig. 11). Sin embargo, destaca la
tendencia a un color de cáscara más oscuro con T2, tanto en la primera como en la
segunda cosecha. Es decir, una aplicación más temprana y a mayor dosis retrasa
más el cambio de color en esta variedad. En general, en la segunda cosecha, el
índice de color es ligeramente menor en la fruta tratada con ácido giberélico.
50 - 53 mm 53 - 55 mm 55 - 60 mm 60 mm +
T0 84% 11% 6% 1%
T1 85% 6% 6% 0%
T2 91% 13% 5% 1%
T3 76% 14% 5% 0%
T4 77% 10% 4% 0%
0%
20%
40%
60%
80%
100%
Dis
trib
uci
ón
de
Cal
ibre
s
B
18
Figura 11. (A) Efecto del ácido giberélico sobre la coloración de la cáscara de lima
Tahití en la primera cosecha. (B) Efecto del ácido giberélico sobre la coloración de la
lima Tahití en la segunda cosecha. Letras distintas indican diferencia significativa
entre los tratamientos (p<0,1).
También se analizó por separado el efecto del ácido giberélico sobre la coloración en
frutos de diámetro de 53 a 55 mm (Fig. 12) por ser el calibre más deseado
comercialmente. En la primera cosecha, no existe diferencia significativa entre los
tratamientos. En la segunda cosecha, T0 es estadísticamente diferente de T2 y T4,
pero T2 y T4 son estadísticamente iguales; T1 y T3 son estadísticamente iguales y,
a su vez, son iguales a T0 y a T4. En la segunda cosecha, el tratamiento T2, de mayor
dosis y aplicación más temprana, es el que más ayudó a la conservación de la
coloración oscura en la cáscara de los frutos, revalidando que el efecto del ácido
giberélico sobre la coloración de la fruta se hace más evidente cuando pasa un mayor
tiempo desde la aplicación del producto hasta la cosecha. El segundo mejor resultado
se obtuvo con el tratamiento T4, que, en conjunto con T2, indican un mayor efecto
en el color con dosis más altas de ácido giberélico. Tanto en la primera como en la
segunda cosecha, el testigo tuvo el mayor índice de color en comparación a los
demás tratamientos, lo cual se traduce en un menor valor comercial de los frutos no
tratados con ácido giberélico.
a aa
a a
0.00
0.40
0.80
1.20
1.60
2.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Co
lor
Tratamientos
A
aa a
a a
0.00
0.40
0.80
1.20
1.60
2.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Co
lor
Tratamientos
B
19
Figura 12. (A) Efecto del ácido giberélico sobre la coloración de la cáscara de lima
Tahití en la primera cosecha de frutos de 53 a 55 mm de diámetro ecuatorial. (B)
Efecto del ácido giberélico sobre la coloración de la lima Tahití en la segunda cosecha
de frutos de 53 a 55 mm de diámetro ecuatorial. Letras distintas indican diferencia
significativa entre los tratamientos (p<0,1).
Cantidad de jugo
En la Tabla 3 se muestra que, en la primera cosecha, T0 y T1 son estadísticamente
iguales entre ellos, pero diferentes de T3 y T4, mientras que T2 es estadísticamente
igual a T1, T3 y T4, pero diferente de T0. Los frutos que recibieron los tratamientos
T2, T3 y T4 produjeron menos jugo. En la segunda cosecha, no hubo diferencia
estadística significativa entre los tratamientos.
En general, el porcentaje de jugo es mayor en la segunda cosecha, con una
diferencia de entre 2% y 3%, mostrando una tendencia a que las aplicaciones de
ácido giberélico en frutos de lima Tahití hacen que estos desarrollen un menor
contenido de jugo, indicando un retraso en la maduración de los frutos. La aplicación
de ácido giberélico a una menor dosis y a un mayor intervalo previo a la cosecha
(T1), no afectan de manera significativa la maduración y consecuente producción de
jugo en los frutos.
a a a a a
0.00
0.40
0.80
1.20
1.60
2.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Co
lor
Tratamientos
A
a abc
ab bc
0.00
0.40
0.80
1.20
1.60
2.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Co
lor
Tratamientos
B
20
Tabla 3. Cantidad de jugo extraído de frutos de lima Tahití en dos cosechas
consecutivas con diferentes tratamientos de ácido giberélico. Letras distintas indican
diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
Tratamiento
Primera Cosecha Segunda Cosecha
Peso Jugo (kg)
% Jugo Peso Jugo
(kg) % Jugo
T0 0.64 a 39% a 0.66 a 41% a
T1 0.66 a 39% ab 0.6 b 39% a
T2 0.58 b 36% bc 0.59 b 39% a
T3 0.59 b 36% c 0.59 b 39% a
T4 0.56 b 36% c 0.58 b 39% a
Letras distintas indican diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
Control de mancha amarilla
En la primera cosecha, T0, T1, T2 y T3 son estadísticamente iguales, y T4 es distinto
de T1, T2 y T3, pero estadísticamente igual a T0. Los tratamientos T1, T2 y T3
redujeron significativamente la incidencia de mancha amarilla en los frutos. En la
segunda cosecha, no existe diferencia estadística significativa entre los distintos
tratamientos: el efecto del ácido giberélico sobre la incidencia de mancha amarilla en
la cáscara se pierde en el tiempo. En ambas cosechas, el índice de mancha amarilla
fue alto en todos los tratamientos; a pesar de haber diferencias estadísticas entre
algunos de ellos, el valor del índice muestra que ninguno de los tratamientos es
eficiente para reducir este defecto.
Figura 13. (A) Efecto del ácido giberélico sobre la incidencia de mancha amarilla en
frutos de lima Tahití en la primera cosecha. (B) Efecto del ácido giberélico sobre la
abb b b
a
0.00
0.50
1.00
1.50
2.00
2.50
3.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Man
cha
Am
arill
a
Tratamientos
A
aa
a a a
0.00
0.50
1.00
1.50
2.00
2.50
3.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Man
cha
Am
arill
a
Tratamientos
B
21
incidencia de mancha amarilla en frutos de lima Tahití en la segunda cosecha. Letras
distintas indican diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
Crecimiento de fruto
A lo largo de todo el periodo de evaluación de crecimiento de frutos del grupo de
diámetro inicial entre 10 y 20 mm (Fig. 14), T0 fue siempre estadísticamente diferente
y menor que los tratamientos T1, T2, T3 y T4. Conforme los frutos pasan los 25 mm
de diámetro, la diferencia estadística entre los distintos tratamientos se reduce. En la
última fecha de evaluación de crecimiento, T1, T2 y T3 son iguales entre ellos y T1,
T3 y T4 también son iguales entre ellos, pero todos estadísticamente diferentes y
mayores que T0, demostrando que aplicar ácido giberélico a frutos entre 10 y 20 mm
de diámetro incrementa su crecimiento.
Figura 14. Efecto de distintos tratamientos de ácido giberélico sobre el tamaño de
frutos de lima Tahití de diámetro inicial de 10 a 20 mm evaluados semanalmente. Se
analizó la diferencia entre los distintos tratamientos en cada fecha evaluada. Letras
distintas indican diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
Durante todo el periodo de evaluación de crecimiento de frutos del grupo de diámetro
inicial entre 20 y 30 mm (Fig. 15), T0 fue siempre estadísticamente diferente y menor
d
c
c
d
c
a
a
ab
b
ab
b
b
b
c
b
ab
b
b
bc
ab
c
b
a
a
a
0
5
10
15
20
25
30
35
27-ene 03-feb 10-feb 17-feb 24-feb 02-mar
Diá
me
tro
de
Fru
to (
mm
)
Fecha de Evaluación
T0
T1
T2
T3
T4
22
que los tratamientos T1, T2, T3 y T4. Conforme los frutos pasan los 30 mm de
diámetro, deja de haber diferencias estadísticas significativas entre los tratamientos
con ácido giberélico, pero en todos los casos se muestra que las aplicaciones de
ácido giberélico incrementan el tamaño de la fruta en comparación con el testigo.
Figura 15. Efecto de distintos tratamientos de ácido giberélico sobre el tamaño de
frutos de lima Tahití de diámetro inicial de 20 a 30 mm evaluados semanalmente. Se
analizó la diferencia entre los distintos tratamientos en cada fecha evaluada. Letras
distintas indican diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
En el grupo de frutos de diámetro inicial entre 30 y 40 mm (Fig. 16), después de que
los frutos pasan los 35 mm de diámetro, no existe diferencia estadística significativa
entre T0, T1, T2, T3 y T4. La aplicación de ácido giberélico en cualquier dosis y
momento después de los 35 mm, no tiene un efecto significativo sobre su crecimiento.
d
c
b
b
b
a
a
a
a
a
ab
b
a
a
a
c
b
a
a
a
bc
b
a
a
a
0
5
10
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20
25
30
35
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27-ene 03-feb 10-feb 17-feb 24-feb 02-mar
Diá
me
tro
de
Fru
to (
mm
)
Fecha de Evaluación
T0
T1
T2
T3
T4
23
Figura 16. Efecto de distintos tratamientos de ácido giberélico sobre el tamaño de
frutos de lima Tahití de diámetro inicial de 30 a 40 mm evaluados semanalmente. Se
analizó la diferencia entre los distintos tratamientos en cada fecha evaluada. Letras
distintas indican diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
En el grupo de frutos de diámetro inicial de 40 a 50 mm (Fig. 17), después de que los
frutos pasan los 45 mm de diámetro, T1, T2, T3 y T4 son estadísticamente iguales
entre ellos, pero diferentes de T0. Sin embargo, la diferencia es muy ligera,
confirmando la tendencia de que, si bien todos los tratamientos con ácido giberélico
incrementan el crecimiento de los frutos, la diferencia es cada vez menos notoria
conforme avanza el tamaño del diámetro inicial en los grupos.
bca
aa
a
aa
aa
a
aba
aa
a
bc
aa
aa
c
aa
aa
0
5
10
15
20
25
30
35
40
45
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27-ene 03-feb 10-feb 17-feb 24-feb 02-mar
Diá
me
tro
de
Fru
to (
mm
)
Fecha de Evaluación
T0
T1
T2
T3
T4
24
Figura 17. Efecto de distintos tratamientos de ácido giberélico sobre el tamaño de
frutos de lima Tahití de diámetro inicial de 40 a 50 mm evaluados semanalmente. Se
analizó la diferencia entre los distintos tratamientos en cada fecha evaluada. Letras
distintas indican diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
Incidencia de oleocelosis
La incidencia de oleocelosis resultante de los distintos tratamientos ensayados en
combinación con distintas metodologías de cosecha se muestra en la Figura 18.
bca c
b b
aa
aba a
aba
ba a
ca
aba a
aa
aa a
0
5
10
15
20
25
30
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27-ene 03-feb 10-feb 17-feb 24-feb 02-mar
Diá
me
tro
de
Fru
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mm
)
Fecha de Evaluación
T0
T1
T2
T3
T4
bb
ab
aa
0.00
0.20
0.40
0.60
0.80
1.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Ole
oce
losi
s
Tratamientos
A
aa a
aa
0.00
0.20
0.40
0.60
0.80
1.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Ole
oce
losi
s
Tratamientos
B
25
Figura 18. (A) Incidencia de oleocelosis en la primera cosecha con guantes de frutos
de lima Tahití con distintos tratamientos de ácido giberélico. (B) Incidencia de
oleocelosis en la primera cosecha sin guantes de frutos de lima Tahití con distintos
tratamientos de ácido giberélico. (C) Incidencia de oleocelosis en la segunda cosecha
con guantes de frutos de lima Tahití con distintos tratamientos de ácido giberélico.
(D) Incidencia de oleocelosis en la segunda cosecha sin guantes de frutos de lima
Tahití con distintos tratamientos de ácido giberélico. Letras distintas indican
diferencia significativa entre los tratamientos (p<0,1).
En la primera cosecha, con guantes, T0, T1 y T2 son estadísticamente iguales, y T2,
T3 y T4 son estadísticamente iguales, pero existen diferencias significativas entre T0
y T1 con T3 y T4. No existen diferencias significativas entre T2 y los demás
tratamientos. Hay una clara tendencia al incremento en el índice de oleocelosis
cuando las aplicaciones de ácido giberélico se hacen más cerca a la fecha de
cosecha, en cualquiera de las dosis. También se aprecia que aplicaciones con mayor
dosis de ácido giberélico tienden a incrementar la presencia de oleocelosis,
independientemente de la fecha en la que se realicen.
En la primera cosecha, sin guantes, no hay diferencias estadísticas significativas
entre los tratamientos, pero se observa la misma tendencia que al aplicar ácido
giberélico en mayores dosis y más cerca a cosecha, la incidencia de oleocelosis en
la fruta es mayor. En todos los tratamientos, el índice de oleocelosis en la primera
cosecha sin guantes es menor que en la primera cosecha con guantes: esta
tendencia sugiere que es preferible cosechar la lima Tahití sin guantes.
En la segunda cosecha, con guantes, T0, T1, T2 y T4 son estadísticamente iguales,
pero diferentes de T3. En este gráfico se ve que los valores del índice de oleocelosis
bb
b
a
b
0.00
0.20
0.40
0.60
0.80
1.00
T0 T1 T2 T3 T4
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ice
de
Ole
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losi
s
Tratamientos
C
a
aa a a
0.00
0.20
0.40
0.60
0.80
1.00
T0 T1 T2 T3 T4
Índ
ice
de
Ole
oce
losi
s
Tratamientos
D
26
son más bajos que en la primera cosecha con guantes, resaltando que, a mayor
tiempo transcurrido desde la aplicación de ácido giberélico, el efecto se hace menor
y la incidencia de oleocelosis disminuye.
En la segunda cosecha, sin guantes, no hay diferencias significativas entre los
tratamientos, pero se mantiene una leve tendencia a una mayor presencia de
oleocelosis en todos los tratamientos en comparación con el testigo. En este gráfico
también se aprecia la disminución general del efecto del ácido giberélico sobre el
índice de oleocelosis en el tiempo. Asimismo, la diferencia entre los índices de
oleocelosis con y sin guantes en la segunda cosecha es menos notable que en la
primera cosecha.
Discusiones
Producción total y distribución de calibres
Dado que el ácido giberélico tiene como uno de sus principales efectos fisiológicos
la división y elongación celular (Taiz y Zeiger, 2006), se esperaba encontrar un
resultado favorable en el rendimiento de los árboles tratados, debido a un aumento
en el calibre de los frutos. Sin embargo, la producción total por cada árbol no se vio
afectada significativamente por las aplicaciones ácido giberélico, y mostró, por el
contrario, una tendencia a la disminución en la producción total. Los tratamientos con
ácido giberélico tampoco tuvieron mayor impacto en la distribución total de calibres,
aunque se puede apreciar una ligera mejoría en la primera cosecha con T3, la cual
se pierde al llegar a la segunda cosecha. Tomando en cuenta que la cosecha de lima
Tahití se basa principalmente en el tamaño del fruto (de 50 mm en adelante), es
posible que no se vea reflejada la totalidad del efecto de los tratamientos sobre la
producción y los calibres potenciales de fruto, en el caso de que estos hubieran
continuado desarrollándose hasta llegar a la madurez fisiológica.
Color de cáscara
Los resultados obtenidos al analizar el color de la piel en los diferentes calibres de
lima no muestran diferencias estadísticamente significativas en la primera o segunda
cosecha con ningún tratamiento en comparación con el testigo, pero sí permiten ver
una clara tendencia a obtener una cáscara más oscura con tratamientos de GA3,
especialmente con T2, lo cual implica que una aplicación más temprana y a mayor
dosis retrasa más el cambio de color en esta variedad.
27
Se ha probado que el ácido giberélico disminuye la actividad de la proteína clorofilasa
inducida por el etileno, contrarrestando la degradación de la clorofila (Goldschmidt et
al., 1977; García-Luis et al., 1986; Trebitsh et al., 1993; Romaso, 2009).
Considerando que los cítricos producen bajos niveles de etileno, el nivel de
giberelinas podría repercutir de forma importante en la regulación de la maduración
y senescencia de los frutos (Romaso, 2009). Adicionalmente, los tratamientos con
ácido giberélico mantienen la firmeza de la piel durante más tiempo en un estado
juvenil en distintas especies y cultivares de cítricos (Coggins et al., 1960; Goldschmidt
y Eilati, 1970; Kuraoka et al., 1977; Agustí et al., 1982; García-Luis et al., 1986;
Romaso, 2009).
Adicionalmente, se analizó por separado el efecto del ácido giberélico sobre la
coloración en frutos de diámetro de 53 a 55 mm por ser el calibre más deseado
comercialmente. En la segunda cosecha de este grupo de frutos se obtuvo una
mejora sustancial con T2, revalidando que aplicaciones más tempranas y con dosis
elevadas ayudan a conservar la coloración oscura en la cáscara de frutos de lima
Tahití.
La eficacia de la aplicación de giberelina con respecto a la senescencia de la cáscara
está relacionada con la edad fisiológica de la fruta y la cantidad de tiempo entre la
aplicación y la cosecha (Greenberg et al., 1992; Fidelibus et al., 2002). Las
aplicaciones de giberelina tienen una respuesta máxima en el retraso del
desverdizado cuando se realizan durante el intervalo entre el inicio de la degradación
de la clorofila y el inicio de la acumulación de carotenoides; las aplicaciones
anteriores o posteriores resultan en respuestas menores al tratamiento (García-Luis
et al., 1992). Romaso (2009) encontró un aumento de la concentración de GA1 y GA4
en el flavedo previo al inicio de la toma de color, que disminuyó durante las semanas
siguientes junto con el cambio de color, comprobando que los cambios en la
coloración de los frutos están regulados hormonalmente durante el periodo
comprendido entre el final de la fase II de crecimiento del fruto y el inicio de la fase
III. Para el caso de la lima Tahití cultivada en la localidad de Jayanca, Lambayeque,
se puede calcular con los resultados del presente estudio, que la transición entre la
fase II y fase III de crecimiento del fruto, donde inicia el cambio de color en la cáscara,
sucede entre 5 y 6 semanas antes que los frutos lleguen a los 50 mm, que es cuando
se cosechan, y es en ese momento, donde la aplicación de ácido giberélico tiene el
mayor efecto en la conservación de la coloración verde oscura en la cáscara.
Además, se ha detectado alta actividad de tipo giberelina en frutos pequeños, hasta
28
14 semanas después de la caída de pétalos (Gravina, 2014). Este dato concuerda
con lo encontrado en los ensayos, ya que las menores diferencias obtenidas con
tratamientos más cercanos a la cosecha, sugieren que el momento del inicio de
quiebre de color ocurrió alrededor de las 15 semanas después del cuajado de frutos.
Cantidad de jugo
Está establecido que, aunque la maduración externa e interna de los cítricos
generalmente coinciden, durante la fase III de desarrollo del fruto, ocurren cambios
estructurales y fisiológicos en la pulpa y en la piel mayormente independientes entre
ellos (Gravina, 2014), pudiendo analizarse como órganos separados en esta etapa
(Tadeo et al., 2008). Generalmente, se señala que los procesos relacionados con la
maduración de la piel responden a tratamientos exógenos de etileno como promotor
de la maduración y senescencia, y de giberelinas y citoquininas como
antisenescentes; mientras que los procesos de la pulpa no responden a las
aplicaciones exógenas de estas sustancias, y ello permite controlar las alteraciones
de la corteza sin afectar la maduración interna de los frutos (Kuraoka et al., 1977;
Agustí et al., 1988; Romaso, 2009). Sin embargo, los resultados obtenidos en el
presente estudio muestran lo contrario, obteniendo como resultado de los
tratamientos con ácido giberélico una disminución significativa en el contenido de
jugo de los frutos, revelando que el ácido giberélico tiene un efecto retardador en la
maduración interna de la lima Tahití.
Según Fidelibus et al. (2002), las aplicaciones exógenas de GA3 podrían aumentar
indirectamente el rendimiento de jugo como resultado de una mejor integridad de la
fruta que facilitara su extracción. Los mismos autores explican que en fruta tratada
con este regulador de crecimiento, las células son más numerosas y están más
juntas, pudiendo ser descritas como más compactas en comparación con las células
de frutos no tratados. Raddatz-Morat et al. (2019), en cambio, explican que un mayor
grosor de cáscara hace que el fruto contenga menos jugo. Las vesículas de jugo son
como sacos al interior de los lóculos, formados por una epidermis resistente, que
engloba grandes células, muy vacuoladas, que contienen el zumo (Agustí, 2003). En
este sentido, se puede inferir que las células de las vesículas de jugo se vieron
afectadas por la aplicación de ácido giberélico, haciéndose más resistentes y
dificultando la extracción de jugo de los frutos tratados. Además, la actividad
antisenescente del ácido giberélico puede haber interferido con el desarrollo normal
de la etapa de maduración del fruto, la cual se caracteriza, regularmente, por un
incremento del jugo (Gravina, 2014). La cantidad de jugo en los frutos de la segunda
29
cosecha fue mayor que en los de la primera, mostrando que el efecto del ácido
giberélico disminuye con el tiempo y los frutos pueden retomar su proceso de
maduración algunas semanas después de la aplicación.
Control de mancha amarilla
Los tratamientos con ácido giberélico no demostraron ser eficientes para reducir la
incidencia de mancha amarilla o sombreado generado por el contacto entre frutos
producidos en racimo. Si bien algunos tratamientos redujeron la intensidad de la
mancha amarilla en comparación con el testigo, todos mantuvieron un valor de índice
elevado que denota una incidencia de moderada a severa de este defecto. Estos
resultados, comparados con los obtenidos en la evaluación de color de cáscara,
permiten deducir que el sombreado amarillo no es un defecto ocasionado por una
maduración dispareja en el fruto y, por lo tanto, no puede ser evitado con la aplicación
de reguladores de crecimiento, sino que debe ser prevenido, tal como lo indican
Rivera-Cabrera et al. (2010), mediante la labor cultural de raleo de frutos en condición
de racimo.
Crecimiento de fruto
Las aplicaciones de ácido giberélico tuvieron un efecto notable sobre el crecimiento
de los frutos de lima Tahití, especialmente en frutos pequeños. Las mediciones de
tamaño de frutos se iniciaron con un mínimo de 10 mm de diámetro ecuatorial puesto
que dentro del grupo de los frutos de tamaño entre recién cuajados y 10 mm de
diámetro, hay mucha absición. La fase I de crecimiento de los frutos abarca desde la
antesis hasta el final de la caída fisiológica de los frutos, y se caracteriza por un rápido
crecimiento del fruto provocado por la división celular (Agustí, 2003). Por otro lado,
las mediciones se continuaron únicamente hasta que el fruto llegó a los 50 mm de
diámetro, ya que en ese momento se debe cosechar, aunque no se haya terminado
de desarrollar la etapa de maduración fisiológica de la lima. La fase III se caracteriza
por una reducida tasa de crecimiento y comprende todos los cambios asociados a la
maduración (Agustí, 2003). Como consecuencia de estas dos condicionales, se
obtuvieron resultados de crecimiento de frutos principalmente durante la fase II, la
cual se prolonga desde el final de la caída fisiológica del fruto hasta poco antes de
su cambio de color (Agustí, 2003).
La duración de la fase II, explica Agustí (2003), es variable, pudiendo extenderse de
2 a 3 meses en variedades precoces, como es el caso de la lima Tahití. Alós et al.
(2006) precisan que el crecimiento del fruto durante la fase II se debe
30
mayoritariamente a la elongación celular, la cual está regulada principalmente por las
giberelinas endógenas. Los reguladores de crecimiento no naturales del tipo
hormonal, como el ácido giberélico, pueden desarrollar efectos semejantes a las
hormonas endógenas, o respuestas más intensas en algunos casos, cuando son
reconocidos por receptores específicos de las hormonas naturales (Jordán y
Casaretto, 2006). Así, los efectos de las aplicaciones exógenas de ácido giberélico
son mayores cuando se realizan en etapas donde los receptores de giberelinas están
naturalmente activos.
Tanto en el grupo de frutos de diámetro inicial entre 10 y 20 mm como el de 20 a 30
mm, todos los tratamientos con ácido giberélico tuvieron un mayor crecimiento de
fruto en comparación con el testigo. En el grupo de frutos de diámetro inicial entre 30
y 40 mm, no hubo diferencia significativa entre los tratamientos con ácido giberélico
y el testigo después de que los frutos pasaran los 35 mm de diámetro. Finalmente,
se vuelve a apreciar una pequeña diferencia entre los frutos tratados con ácido
giberélico y los frutos testigo. En síntesis, el ácido giberélico es un tratamiento
eficiente para mejorar el crecimiento de los frutos de lima Tahití, pero su efecto tiende
a disminuir en frutos de diámetro de 35 mm o superiores. En Jayanca, Lambayeque,
los frutos demoran aproximadamente 13 semanas desde que cuajan hasta llegar al
diámetro comercial, coincidiendo con las 14 semanas de alta actividad de giberelina
mencionadas por Gravina (2014), donde los receptores naturales de la hormona
están activos permitiendo un fuerte efecto de las aplicaciones exógenas.
Al contrastar los resultados favorables de las aplicaciones sobre el crecimiento de
fruto con una mantención de la curva de calibres al momento de cosecha, se puede
deducir una reducción del tiempo a cosecha gracias al efecto del ácido giberélico, la
cual puede ser beneficiosa comercialmente.
Incidencia de oleocelosis
La oleocelosis se desarrolla en todo tipo de cítricos, pero especialmente en limas
ácidas, limones y naranjas (Knight et al., 2002), y es uno de los principales
parámetros que define la aptitud comercial de la lima Tahití ya que, al momento de
empacar la fruta, ésta es descartada de la calidad exportable. La oleocelosis, explican
Rivera-Cabrera et al. (2010), es generada por la acción de aceites citotóxicos que
caen sobre la cáscara cuando la fruta sufre daños mecánicos por mala manipulación
desde la cosecha en adelante.
31
Los resultados muestran una clara tendencia al incremento en el índice de
oleocelosis en fruta tratada con ácido giberélico. El efecto de las aplicaciones sobre
la incidencia de oleocelosis en frutos cosechados es mayor conforme aumenta la
dosis del producto y también la cercanía a la fecha de cosecha. En la segunda
cosecha, realizada 3 semanas después de la primera, la incidencia de oleocelosis
disminuyó de manera generalizada, mostrando que el efecto del ácido giberélico
sobre la incidencia de oleocelosis se reduce con el tiempo. Fidelibus et al. (2002)
describen que en fruta tratada con GA3, las células de las cáscaras son más
numerosas y están más juntas pudiendo ser descritas como más compactas en
comparación con las cáscaras no tratadas; Raddatz-Mota et al. (2020) sostienen que
una cáscara más gruesa hace que el fruto sea más susceptible a desarrollar
trastornos fisiológicos; y Montero et al. (2012) explican que la oleocelosis depende
principalmente de la organización de los tejidos de la piel de los cítricos, siendo que
una mayor proximidad entre las glándulas sebáceas impulsa la ruptura simultánea de
un mayor número de glándulas, lo que conduce a una mayor cantidad de aceite
filtrado a los tejidos circundantes. Entonces, la mayor compactación entre las células
de la cáscara de los frutos tratados con ácido giberélico hace que sean más
propensas a sufrir daños por cualquier presión aplicada durante la cosecha, ya sea
por sujetar el fruto a cosechar o por soportar el peso de otros frutos en la misma jaba.
Por lo tanto, las aplicaciones de ácido giberélico deberían realizarse con un mayor
intervalo de tiempo a cosecha.
Al utilizar guantes de hilo para realizar la cosecha, se obtuvo una diferencia
considerable al cosechar con guantes la primera vez, donde todos los tratamientos
presentaron mayor oleocelosis, dejando como resolución que la cosecha de lima
Tahití se debe realizar sin guantes. Es posible que, al utilizar guantes de hilo para
cosechar, haya sido necesario sujetar con mayor fuerza la fruta para evitar que se
resbale de las manos, o haya generado una pérdida de sensibilidad en los
cosechadores, que finalmente se tradujo en una mayor incidencia de oleocelosis.
Conclusiones
Aplicaciones de al menos 37 días previos a cosecha con dosis de 30 ppm de ácido
giberélico, ayudan a mantener la tonalidad verde oscura de la cáscara de la lima
Tahití. Las diferencias en el efecto del ácido giberélico sobre la coloración de la
cáscara en los diferentes momentos de aplicación y cosecha sugieren que
32
aplicaciones anteriores a las 5 semanas previas a cosecha podrían tener un mayor
efecto en la conservación del color de los frutos.
El ácido giberélico, aplicado dentro de las 5 semanas previas a cosecha, bajo
condiciones características de Jayanca, Lambayeque, afecta de manera negativa la
calidad interna de la lima Tahití, reduciendo el contenido de jugo de los frutos, así
como la calidad externa de los mismos, incrementando la susceptibilidad de la
cáscara a presentar daños por oleocelosis.
La velocidad de crecimiento de los frutos incrementa con aplicaciones de ácido
giberélico desde los 10 mm hasta los 35 mm.
Las aplicaciones de ácido giberélico en lima Tahití no tienen efecto sobre la
producción total, la distribución de calibres, ni la incidencia de mancha amarilla.
33
Resumen
La lima Tahití es un cultivo con gran potencial productivo en la costa norte del Perú.
Sin embargo, su valor comercial muchas veces se ve reducido por el cambio de
coloración de los frutos cuando éstos llegan a tamaños comerciales. La presente
investigación se desarrolló en la localidad de Jayanca, región de Lambayeque, con
el objetivo de evaluar la influencia de la aplicación de ácido giberélico pre cosecha
para mantener la coloración verde de cáscara de la fruta y no reducir su valor
comercial. Las aplicaciones de ácido giberélico a dosis de 30 ppm realizadas 5
semanas previas a cosecha ayudaron a mantener la coloración de la fruta y
aceleraron su crecimiento, pero afectaron negativamente otros aspectos de calidad
reduciendo el contenido de jugo e incrementando la incidencia de oleocelosis.
Palabras clave: lima, ácido giberélico, cáscara, jugo, oleocelosis.
34
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Anexos
Anexo 1. Ficha técnica de Biofruit.
41
Anexo 2. Ficha técnica de Ácido Fosfórico.
42
Anexo 3. Ficha técnica de Kompat.
43