la relijion en los pueblos primitivos: el culto de la piedra. cañas pinochet, 1902

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  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    1/75

    Tome

    XII

     1902

    3.4me

    Livraison

    i

    I

    ACTES

    DE LA

    SOCIETE

    SCIEN1

    1FÎOUE

    DU

    CHILI

     ACTAS

    DE LA SOCIEDAD CIENTÍFICA

    DE

    CHILE

    DOUZIÈME ANNÉE

    PROCÉS-VEKUAUX

    DES

    SÉANCES

    GENÉRALES ET

    ANNEXES

     Feuilles

    D

    E

    NOTES

    ET MEMOIRES

     Feuilles

    177—250

    SANTIAGO

    IMPRENTA CERVANTES

    CALLE DE LA

    HANDERA,

    50

    Diciembre île

    1902

    >

    0

    ».

    -o-

    -^

    -* >

    O

    Les

    Actes

    paraissent par

    livraisons

    bimestrielles

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    2/75

    LA

    RELIJION

    EN

    LOS

     

    PUEBLOS

    PRIMITIVOS;

    EL

    CULTO DE LA PIEDRA EN CHILE

    I

    CÓMO SE

    HALLABA

    DIFUNDIDO

    POR

    EL GLOBO

     Conferencias

    dadas

    en la Sociedad

    Científica

    de

    Chile)

    POR

    ALEJANDRO

    CAÑAS PINOCHET

    discurso

    preliminar

    Señores:

    El

    presente

    trabajo

    tiene

    por

    objeto

    secundario arro

    jar

    una mirada

    sobre el

    espíritu

    o

    pensamiento

    relijioso

    de los

    pueblos primitivos

    i

    por

    primordial,

    esbosar

    una

    pajina

    de la historia

    de nuestros

    antepasados,

    que

    has

    ta

    hoi

    ha

    permanecido velada por

    la

    oscura noche

    de

    los

    siglos

    transcurridos.

    En estos

    tiempos

    últimos,

    el hombre

    apenas

    habia

    dejado

    su cuna

    i

    apenas

    habia

    dado

    unos cuantos

    pasos

    en

    el

    camino

    que

    habia

    de

    conducirle

    a

    su

    desarrollo

    futuro;

    i, como

    todos los seres

    racionales,

    buscando

    adap

    taciones

    que

    satisficiesen sus necesidades

    i

    objetos

    de

    que

    servirse,

    halló

    a

    su

    paso

    la

    piedra,

    e

    hizo

    de

    ella

    sus

    útiles

    domésticos,

    los instrumentos

    que

    semejasen

    las

    voces aun inarmónicas

    de

    la

    Naturaleza,

    los

    que

    habian

    de

    ayudarle

    en

    la

    ruda tarea de

    procurarse

    los alimentos

    por

    medio de

    la

    caza

    i

    la

    pesca,

    sus

    armas

    para

    defen-

    Tomo xii

    13

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    3/75

    i78

    derse

    i

    agredir

    sus

    adornos

    personales

    todo

    lo

    que

    le

    fuese

    útil

    en

    una

    palabra.

    La

    razon

    de

    que

    estaba

    dotado

    aunque

    inculta en

    absoluto

    le

    inspiraba

    abstracciones mentales

    i

    estas

    abs

    tracciones

    le

    condujeron

    a

    imajinar

    un

    sér

    a

    quien

    debia

    o

    de

    quien

    derivase

    su

    oríjen:

    inventó

    un Dios

    i

    fué

    tambien

    personificado

    en la

    piedra.

    La Piedra-Dios nació

    en

    los

    primeros

    dias

    de

    la

    hu

    manidad i subsiste

    aun en

    algunos

    pueblos

    como

    objeto

    de

    culto

    a

    pesar

    del transcurso

    de

    los

    siglos

    i

    de

    las

    transformaciones

    que

    la

    civilizacion ha

    operado

    en el

    es

    píritu

    humano.

    La historia

    i

    la

    jeolojía

    han

    llamado

    al

    larguísimo

    período

    en

    que

    la

    piedra

    fué el

    primer

    factor social

    la

    Edad

    de

    Piedra.

    Es sobre

    estos

    tiempos que

    hemos estudiado durante

    largos

    años

    de

    viajes

    por

    todo

    el

    pais

    que

    venimos

    a

    hacer una

    investigacion

    i

    a evocar el

    espíritu

    o

    pensa

    miento

    relijioso

    del

    pueblo que

    lo

    habitara.

    Por felicidad

    para

    nuestro

    propósito

    no

    nos han

    faltado

    documentos

    que

    nos

    hablasen con elocuencia de

    aquella

    remotísima

    época

    documentos

    que

    han

    traspasado

    los

    siglos

    i de

    los

    cuales

    nos

    hemos

    aprovechado;

    ellos serán

    utilizados

    un

    dia

    tambien

    por

    la

    historia

    cuando

    tornan

    do

    su

    vista a

    aquella

    época

    oscura

    trate

    de

    describir

    la

    sociedad

    que

    en tan

    remotas

    edades

    pobló

    estas co

    marcas.

    Los

    documentos

    cuya

    existencia

    certificamos

    son las

    propias piedras

    las

    piedras

    sagradas que

    se

    hallan des

    parramadas por

    gran

    parte

    del

    pais

    i

    contra

    las

    cuales

    si la

    mano

    destructora

    del

    tiempo

    nada

    ha

    podido

    hasta

    hoi

    la del

    hombre ha comenzado

    por

    hacer

    desaparecer.

    ¿

    Procediendo

    en

    el órden

    espuesto

    trataremos sobre

    el

    estado

    relijioso

    de

    los

    pueblos primitivos

    en

    primer

    lugar

    para

    llegar

    por

    fin

    al

    objeto

    principal

    de

    este

    estudio.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    4/75

    LA

    RELIJION

    EN LOS

    PUERLOS PRIMITIVOS

    '79

    I

    EL

    SENTIMIENTO

    RELIJIOSO

    EN

    LOS

    PUEBLOS

    PRIMITIVOS

    En

    el

    estado actual de las

    investigaciones

    practicadas

    por

    los

    viajeros,

    por

    los

    misioneros

    que

    han

    pasado

    su

    vida entre

    las razas

    primitivas,

    subsiste

    aun la

    anarquía

    en

    las

    apreciaciones

    sobre

    el

    culto

    de

    los

    pueblos que

    no

    han alcanzado

    las

    ventajas

    de la

    civilizacion.

    Miéntras

    unos

    informan

    que

    hai

    muchas colectividades

    salvajes

    que

    carecen

    de todo culto

    i

    hasta

    de

    las mas

    débiles

    ma

    nifestaciones de una

    relijion

    positiva,

    otros sostienen

    que

    el

    sentimiento

    relijioso

    i sus

    manifestaciones esternas

    se

    hallan vivos, latentes

    i

    muchas

    veces

    tanjibles

    en el pen

    samiento

    de

    todos

    estos

    pueblos.

    Pueblos

    hai

    innumerables

    que

    carecen

    de

    ministros

    depositarios

    del

    culto,

    de

    templos

    donde

    éste se

    practi

    ca,

    de ceremonias establecidas en los

    ritos

    o

    prácticas

    relijiosas; pero

    si

    es

    cierto

    que

    están

    privados

    de

    estas

    manifestaciones esternas

    de

    la

    adoracion

    a

    las

    divinida

    des

    concebidas

    o

    imajinadas

    por

    ellos,

    no

    es esto

    una

    prueba

    de

    la

    ausencia

    ni

    del

    pensamiento

    ni del

    senti

    miento

    relijioso.

    Los

    templos,

    los

    ministros,

    los ritos

    i

    los

    símbolos de

    las

    relijiones,

    de

    los

    pueblos

    que

    han

    alcanzado

    o

    han

    llegado

    a un alto

    grado

    de

    cultura,

    son

    creaciones

    que

    responden

    a

    necesidades sentidas por

    la

    civilizacion

    re

    lativa

    de

    las

    colectividades

    en

    donde

    se

    hallan;

    los

    sal

    vajes

    tienen

    por templos

    a

    la

    naturaleza

    que

    los rodea

    (

    I

    ),

    (i)

    Hablando

    Ratzel de la

    relijion

    de los

    polinesios

    en

    su

    magnífica

    obra

    Las Razas

    humanas, tomo

    I,

    páj. 560,

    dice

    a este

    respecto

    lo

    si

    guiente:

    11

    Los

    lugares sagrados

    son de

    muchas

    clases

    debiendo,

    empe

    ro,

    tenerse

    en

    cuenta,

    que

    cuando

    se

    habla

    de

    templos

    no

    siempre

    se

    ha

    de entender

    que

    son

    edificios,

    pues

    dada

    la

    omnianimacion

    de

    mundo

    con

    espíritus tutelares

    i

    otros, toda la naturaleza

    puede

    ser

    considerada

    como

    templo.

    Sin necesidad

    de

    templos

    ofrécense

    sacrifi

    cios delante

    de

    los árboles,

    en

    la

    orilla del mar

    i en

    los

    bordts

    de los

    volcanes .

    E. Renan

    en sus Esludios de

    Historia

    relijiosa, páj.

    34,

    escribió:

    »Ei

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    5/75

    i8o

    ALEJANDRO

    CAÑAS

    PINOCHET

    por

    ministros

    a

    los

    que

    consideran

    depositarios

    de la

    ciencia de

    la

    adivinacion

    de

    la medicina

    de

    la

    hechice

    ría

    i

    de todo

    ese

    conjunto

    de

    prácticas

    i

    creencias de

    que

    son

    intérpretes

    los

    que

    han

    descollado

    entre ellos

    por

    la

    intelijencia

    por

    la

    fuerza

    por

    el

    valor o

    por

    la

    audacia;

    sus

    ritos

    i sus

    símbolos

    son las

    ceremonias

    que

    en

    la

    adivinacion

    en

    la

    hechicería

    i

    en

    las

    demas

    artes

    em

    plean

    No

    hai

    pues

    razon

    para exijir

    como

    pruebas

    de

    la

    posesion

    de

    un sentimiento

    relijioso

    i de

    practicar

    las

    operaciones

    del

    culto

    a

    los

    pueblos

    que

    han

    subido

    ape

    nas

    un

    paso

    en

    los

    peldaños

    de la

    civilizacion

    los

    múlti

    ples

    resortes de

    que

    se

    valen

    los

    pueblos

    cultos

    para

    hacer

    las

    manifestaciones

    de sus

    creencias elaboradas

    en

    el

    transcurso

    de

    muchos siglos

    i

    dictadas como reglas

    por

    la

    parte

    docente en las

    sociedades avanzadas

    Los

    pueblos

    salvajes

    sienten

    i

    piensan

    con

    su

    sentir

    i

    pensar propios

    influidos

    por

    el

    medio

    que

    los

    rodea;

    sus

    actos

    los

    determina

    su

    manera

    de

    ser i

    las

    necesidades

    que

    a

    ellos

    los

    impulsan

    i

    sus

    manifestaciones esternas

    están

    en

    consonancia con

    los

    dictados

    de su

    mente

    Estas

    son la

    regla

    el móvil

    que

    determinan

    todas

    sus

    acciones

    Acaso

    influye

    en

    los

    juicios

    errados

    que

    sobre

    el sen

    timiento

    relijioso

    de

    los

    salvajes

    se

    emiten la

    circuns

    tancia de no concebir la idea de

    Dios

    como

    la

    concibe

    el

    hombre

    civilizado

    que

    en

    contacto con

    ellos los

    juzgan

    »E1

    hombre dice

    un

    grave

    i

    sesudo autor

    al

    salir

    de

    las

    manos

    de la

    naturaleza

    ha

    sido dotado

    de

    una

    inteli

    jencia

    mui débil

    para

    llegar

    de

    un

    salto

    a un

    conoci

    miento neto i

    preciso

    de la divinidad;

    mucho ménos

    habria

    podido comprender

    los

    dogmas

    místicos

    de

    las

    altar

    sobre

    el

    cual

    los

    patriarcas

    sacrificaban en

    honor

    de

    Jehová

    no

    era

    materialmente

    mas

    que

    un monton de

    piedras

    i

    sin

    embargo

    con

    siderado

    en

    su

    significacion relijiosa

    como

    símbolo del Dios abstracto

    i sin

    forma de la raza semítica

    aquel

    monton de

    piedras

    valia tanto

    como

    un

    templo

    de Grecia»

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    6/75

    LA

    RELIJION

    EN

    LOS

    PUEBLOS

    PRIMITIVOS

    181

    relijiones

    superiores, porque

    el

    dogma

    es

    la

    obra

    de

    la

    ciencia,

    de la

    razon,

    que

    esplica

    su

    resultado

      i).

    El

    salvaje tiene

    sus

    divinidades propias

    en la

    medida

    de su

    intelijencia;

    por

    eso ha

    imajinado

    un

    dios

    en

    la

    piedra,

    en el

    árbol,

    en el

    mar,

    en el

    rio,

    en

    el

    monte,

    en

    sus

    fetiques,

    en

    los cuales

    va

    envuelta

    acaso una

    idea

    superior,

    una idea

    abstracta,

    del

    que

    el

    objeto,

    la

    piedra

    i el

    fetique

    es

    solo

    la

    forma

    o

    representacion

    esterna.

    Interesante

    es,

    pues,

    hacer

    una

    investigacion,

    escrutar

    dentro

    de

    las

    opiniones

    emitidas

    el

    pensamiento

    relijioso

    de

    los

    salvajes,

    i

    hacer ver

    la

    desemejanza

    de las

    opinio

    nes

    que

    sobre

    esta

    materia

    aun

    existe.

    Abramos

    a

    Joly,

    que

    nos ha

    dado

    su

    hermoso libro

    Vhomme

    avant

    les

    metaux,

    i

    alli

    encontraremos

    las

    afir

    maciones

    de

    Livingstone,

    Samuel

    Baker, Monnat,

    Dal-

    ton,

    de

    Lichstenstein.

    Estos

    viajeros

    nos

    aseguran

    que

    hai en

    el

    interior

    del

    Africa,

    de

    América

    i

    en

    otras

    par

    tes,

    poblaciones

    enteras

    que

    carecen de

    toda idea de la

    divinidad,

    de

    templos

    i

    de

    toda

    relijion;

    que

    no

    tienen

    ni

    conciben

    el

    menor

    presentimiento

    de una

    vida futura

    ni

    ninguna

    nocion

    de

    moral.

    El doctor Monnat

    dice,

    hablando

    de

    los

    mincopies

    o

    habicantes

    de las

    islas Andaman: »Se cubren

    de

    lodo

    i

    se

    tatuan,

    pero

    no

    llevan vestido

    alguno.

    Parecen

    en

    efecto

    desprovistos

    de

    todo sentimiento

    de

    pudor

    i mu

    chas de sus

    costumbres

    semejan

    a

    las

    de

    los brutos. No

    tienen

    ni

    idea de un Ser

    Supremo,

    ni

    relijion,

    ni

    creen

    cia en una -vida

    fuiura...n

    Otro

    viajero

    moderno,

    Samuel

    Baker,

    afirma

    que

    el

    negro

    del

    Africa central

    carece

    de la mas

    lijera

    nocion

    -

    del

    Ser

    Supremo,

    causa

    primera

    del

    Universo,

    i

    su

    in

    telijencia

    se

    niega

    o

    no

    alcanza

    a

    concebirlo.

    El

    senti

    miento

    de

    la

    adoracion

    le es

    desconocido.

    No

    posee

    ninguna

    idea

    o

    representacion

    de una

    divinidad

    cualquie

    ra.

    Para

    él

    la

    inmortalidad

    es

    puramente

    jenealójica;

    la

    supervivencia

    del

    ser

    individual

    no

    tiene

    lugar

    mas

    que

    para

    los

    niños. Si

    ejecuta

    algunos

    actos

    supersticiosos,

      i)

    N. Joly,

    L homme avant

    les

    metaux,

    cap.

    VII.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    7/75

    i8«

    si

    inmola

    algunos

    pájaros,

    es

    para

    buscar en sus

    movi

    mientos

    convulsivos

    los

    pronósticos

    relativos

    a

    los inte

    reses

    vulgares

    de

    la vida,

    aunque

    ninguna

    idea

    relijiosa

    vaya

    adherida a

    estas

    prácticas, que

    la

    imajinacion

    de un

    hechicero

    ha

    inventado

    i

    que

    una

    obsecada

    tradicion ha

    mantenido.n

    Livingstone

    afirma

    que

    entre los bechua-

    nas

    i

    demas

    pueblos

    del

    Africa

    central,

    existe

    ausencia

    absoluta

    de

    cultos,

    de ídolos

    i

    de

    toda

    idea

    relijiosa.

    Mas recientemente

    aun,

    sir

    Messenger

    Bradley

    habla

    de

    una

    tribu australiana

    que

    vive sobre

    los

    bordes

    o ri

    veras

    de

    un

    lago,

    en

    una comarca situada

    por

    los

    35o

    lat.

    S.

    i

    139o

    39

    de

    long.

    E.

    i

    cuya

    lengua

    es

    monosilá

    bica,  consistente

    en

    gritos

    mas o

    ménos

    comparables

    a

    los

    de

    los

    animales;

    no tiene

    supersticion

    alguna,

    ni

    la

    mas

    remota idea

    de una

    vida futura.

    En

    fin,

    la Comision Científica de

    Méjico

    nos

    ha

    dicho

    que

    los

    indios

    de

    los

    alrededores

    de

    Santiago,

    cuyos

    ca

    racteres

    físicos

    recuerdan

    los

    de

    los chinos

    i

    mogoles,

    carecian

    de

    toda

    idea

    relijiosa

    ántes

    del

    arribo

    a

    ese

    pais

    de los

    conquistadores.

     Muchos escritores

    que

    son

    autoridad

    en la

    materia,

    ha

    dicho

    John

    Lubbock,

    consideran

    que ningun

    pueblo

    está

    desprovisto

    de

    relijion.

    A

    pesar

    de

    esto

    semejante

    afirmacion

    no se

    acuerda con los testimonios de

    nume

    rosos observadores

    dignos

    de fé.

    Marinos,

    comerciantes

    i

    filósofos,

    misioneros católicos

    i

    protestantes,

    en los

    tiempos

    pasados

    como

    en los

    actuales

    tiempos,

    en

    todas

    las

    partes del

    globo,

    concluye

    Lubbock,

    están de

    acuer

    do

    para

    constatar

    que

    hai

    pueblos

    privados

    de toda

    es

    pecie

    de

    relijion.

    11Aun

    hai

    que agregar

    a

    las

    respetables

    opiniones

    anotadas la

    del

    profesor

    Brocea

    quien

    en

    un es

    crito

    que

    rebosa

    de

    buen sentido

    i

    de

    buena fé científi

    ca, une

    su

    opinion

    con

    la de

    muchos de

    los miembros

    mas

    distinguidos

    de la

    Sociedad

    de

    antropolójica

    de

    Parts,

    espresándose

    asi:

     Es

    para

    fuera

    de duda

    que

    existe,

    en las

    razas

    inferiores,

    pueblos

    sin

    culto,

    sin

    dogmas,

    sin

    ideas

    metafísicas,

    sin creencias

    colectivas,

    i,

    por

    consi

    guiente,

    sin

    relijion

    (l).n

    Agreguemos

    todavia

    a

    lasopi-

    (1)

    N.

    Joly, obra i

    capítulo

    citado.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    8/75

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    9/75

    184

    ALEJANDRO

    CAÑAS P1NOCHET

    nosotros

    que

    todas

    las

    naciones,

    aun

    las

    mas

    salvajes,

    han

    tenido

    alguna

    (i)

    D Orbigny,

    agreda

    Quatrefages,

    en su

    precioso

    libro

    titulado L

     

    Espece

    humaine,

    desenvuelve

    este

    pensamien

    to,

    dando

    detalles

    sobre los

    dogmas

    aceptados

    entre to

    das

    las

    razas americanas

    de

    Sud-América,

    manifestando

    sus

    creencias

    en

    una

    vida

    futura,

    atestiguadas por

    las

    ceremonias fúnebres

    (2).

    El

    autor

    citado,

    Quatrefages,

    nos

    advierte

    de

    que

    to

    dos

    los errores

    de

    concepto

    en

    que

    han

    incurrido

    algunos

    viajeros

    al

    juzgar

    de

    la

    manera

    de

    ser

    relijioso

    de

    algu

    nos

    pueblos

    primitivos

    han

    sido

    el

    resultado de incom

    pletas

    observaciones:

    así

    nos

    cita a

    Wallis,

    quien,

    des

    pues

    de un

    mes

    de

    intimidad con

    los

    tahitianos,

    declaró

    que

    estos

    insulares carecian

    de

    todo culto, mientras

    tanto

    el

    hecho

    es

    que

    ellos mezclan

    el

    culto hasta

    con

    los

    mas

    insignificantes

    actos

    de su

    vida

    doméstica

    o

    pri

    vada

    (3).

    Ratzel

    nos trascribe

    el

    juicio

    del

    misionero

    Tindall,

    que

    habia

    vivido

    largo

    tiempo

    entre los

    hotentotes

    na-

    maquias,

    de

    los

    que

    escribió

    que

     en

    punto

    a

    relijion,

    el

    espíritu

    de

    este

    pueblo parece

    una

    pájina

    en

    blancon,

    lo

    cual

    ha de

    interpretarse

    en el

    sentido de

    que

    no

    tenian

    la

    menor

    idea

    de

    cosas

    relijiosas,

    no

    siendo

    sufi

    ciente

    para

    este

    misionero

    el

    hecho

    de

    que

     su

    idioma

    contenga

    espresiones para

    las

    ideas

    Dios,

    espíritus

    i

    aun

    diablon

    (4)

    i

    Quatrefages,

    insistiendo

    en

    los

    errores

    que

    hemos enunciado

    i

    cómo

    estos

    van cediendo

    su

    lugar

    a

    una

    justa apreciacion

    del

    sentimiento

    relijioso

    de

    los

    pueblos

    considerados

    como

    ateos,

    dice:

     

    Poco

    a

    poco

    la

    luz

    se

    hace

    i es

    así

    como sucesivamente los

    australianos,

    los

    melanesios,

    los

    bosquimanos,

    los

    hotentotes,

    los

    (1)

    Citado

    por

    De Quatrefages en

    Vespece

    humaine,

    cap.

    XXXV,

    P¿j-

    353-

    (2)

    Citado

    por

    De Quatrefages

    en

    L espece

    humaine,

    cap.

    XXXV,

    páj

    353-

    (3)

    Citado

    por

    De

    Quatrefages

    en

    L espece

    humaine,

    cap.

    XXXV,

    Paj-

    353-

    (4)

    Ratzel,

    Las Rasas

    humanas,

    tomo

    I,

    páj.

    21.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    10/75

    LA

    RELIJION

    EN

    LOS

    PUEBLOS PRIMITIVOS

    cafres,

    los bechuanas

    han

    debido

    ser

    eliminados

    del

    mero de

    los

    pueblos

    ateos

    i

    ser reconocidos como reli-

    jiosos

    (i).

    II

    Esta luz va

    proyectándose

    tambien sobre el estado

    mental

    relijioso

    de otras

    razas, a

    las cuales se

    juzgaba

    sin

    ideas morales

    que

    fuesen

    consecuencia

    del

    senti-

    timiento

    que inspiran

    las

    creencias

    en

    alguna relijion.

    Hoi

    dia

    se

    conoce

    la

    teogomía

    de

    nuestros

    araucanos,

    que

    han

    desmentido

    las

    afirmaciones

    de

    cuantos

    con

    lijereza

    los

    habian

    juzgado

    bajo

    este

    respecto

    como

    incapaces

    de

    concebir,

    por

    su

    ignorancia

    o

    barbarie,

    p

    de

    alimentar

    ningun

    pensamiento

    concordante

    con el

    sentimiento

    re

    lijioso;

    i aun

    todavia

    de

    los indios

    de la

    Tierra

    del

    Fue

    go,

    colocados

    acaso

    sin mucha

    razon,

    en

    la

    escala

    mas

    baja de cuantas razas pueblan

    la

    tierra.

    Hace

    cerca

    de

    25

    años

    que

    el

    reverendo

    Mr.

    Bridges,

    de la

    Mision

    evanjélica que

    en el

    sur

    de esta

    isla,

    en

    Ushuwaia,

    desde

    hace

    mas de

    30

    se

    halla

    establecida

    propagando

    las

    creencias

    relijiosas

    i

    los

    dones

    de la ci

    vilizacion entre

    aquellos

    salvajes, que

    decia

    en

    una

    con

    ferencia,

    respecto

    de

    estos

    indios:  No reconocen

    un

    Creador,

    ni

    tienen

    idea

    del

    futuro,

    ni

    esperan

    nada

    des

    pues

    de

    la

    muerte.

    11

    Agrega,

    sin

    embargo,

    como

    que

    ellos entrevieran

    un mas

    allá

    despues

    de la

    muerte

    i

    que

    hai

    una

    mansion

    hasta

    adonde

    las

    almas

    vuelan,

    que

    tienen

    en

    su

    lengua

    una

    palabra

    para

    espresarla

    muerte:

    Cagalulo,

    cuyo

    significado

    es volar i

    subir,

    lo

    cual,

    agre

    ga

    el

    misionero,

    pareceria

    encerrar la idea

    de un

    estado

    espiritual

    posterior

    (2).

    Un

    misionero

    italiano,

    de la

    Mision salesiana

    de la

    isla

    de

    Dawson,

    acaba

    de

    publicar

    un

    Pequeño

    Diccionario

    de la

    lengua

    ona,

    i en esta

    paciente

    recopilacion

    nos su

    ministra

    una idea

    sobre

    el

    pensamiento relijioso

    de esta

    raza,

    que

    es

    una de las tres

    que

    viven

    en la

    Tierra

    del

    Fuego.

    (1)

    De Quatrefagks,

    L espece

    humaine,

    cap.

    XXXV,

    páj.

    350.

    (2)

    Conferencia

    de

    Mr.

    Bridger

    dada

    en

    1884

    en

    la

    Sociedad

    Jeo-

    gráfíca

    Arjentina.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    11/75

    ALEJANDRO

    CAÑAS PINOCHET

    Este misionero

    ha

    entrevisto

    en

    los

    fueguinos,

    no ideas

    claras

    i

    definidas

    de

    un

    sentimiento

    relijioso,

    sino

    jérme-

    nes de

    ideas, vagas, indeterminadas, informes,

    en

    estado

    de

    crisálida,

    de

    futuro desarrollo.

    A

    la

    Divinidad

    la

    conciben ellos como

    una

    idea

    nebu

    losa

    pero

    suprema,

    a

    que

    han

    dado forma llamándola

    Joiuen

    o

    Dios,

    de

    quien

    nada

    dicen,

    porque

    sienten

    sin

    duda sin

    poder espresar

    las ideas

    que

    en su inculta mente

    se

    anidan.

    aquf

    como

    se

    espresa

    el

    misionero:

     De la Divinidad tienen una

    idea

    mas

    que

    vaga,

    os

    curísima;

    si

    es

    que

    con

    tal

    nombre

    se

    quiere

    llamar

    el

    Kain-Sort,

    una

    especie

    de

    espantajo

    colorado

    i

    chis

    peante fuego

    delos

    ojos, que

    se les

    aparece, segun dicen,

    saliendo

    de las

    aguas.

    Del

    Jowe n,

    que

    dicen

    Dios,

    no

    saben

    decir nada

    completamente,

    aunque

    muchas

    veces

    se lo

    preguntásemos

    (i).m

    Se

    ha

    avanzado

    un

    paso

    en

    el

    terreno de establecer

    la

    verdad

    al

    respecto

    del

    estado

    mental

    relijioso

    de los

    fue

    guinos.

    En

    aquellas

    mentes

    oscuras,

    en

    las

    que

    nadie

    habia

    penetrado,

    va

    vislumbrándose cierta claridad

    que

    induce

    a la

    creencia

    de

    que

    en el fondo

    hai

    ideas,

    si con

    fusas

    al

    parecer,

    que

    podrán

    ser claras así

    que

    esos seres

    casi

    embrutecidos,

    hayan adquirido

    la facilidad o

    posibi

    lidad

    de

    revelarse.

    Falta

    aun

    que

    consignar

    la mas

    importante

    de las

    opi

    niones,

    las

    de

    un

    hombre eminente por

    su

    saber, que

    ha

    estudiado el

    pasado

    i

    el

    presente

    de

    la

    humanidad,

    que

    ha ido

    hasta

    la

    cuna

    de esta,

    que

    ha

    interrogado

    las

    len

    guas primitivas para

    deducir

    de

    ellas

    el

    pensamiento

    re

    lijioso

    de

    los

    pueblos que

    las

    hablaron

    i

    que

    ha

    consig

    nado

    el

    resultado

    de sus

    investigaciones

    en un

    precioso

    libro

    intitulado

    Oríjen

    i

    Desarrollo

    de

    la

    Relijion;

    refié-

    rome

    al

    eminente orientalista Federico

    Max

    Müller,

    (i)

    Pequeño

    Diccionario

    del idioma

    Fueguino-Ona,

    escrito

    segun

    nuestras

    noticias

    por

    el

    Padre

    de

    la Mision

    salesiana, reverendo

    N.

    Beauvoir.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    12/75

    LA

    RELIJION

    EN

    LOS

    PUEBLOS

    PRIMITIVOS

    187

    muerto

    hace

    poco,

    sentida

    intensamente

    en

    el

    mundo

    sabio

    su

    desaparicion,

    acaso

    irreparable.

    En

    una

    pajina

    de esta obra,

    Müller

    escribió lo si

    guiente:

     En

    los

    tiempos

    en

    que

    escribia

    De Brosses

     

    i

    )

    la

    cosa

    que

    parecia

    sorprendente

    era

    que

    el

    negro

    poseyera

    algo

    que

    pudiera

    llamarse moralidad

    o

    relijion.

    Hemos

    aprendido

    a

    juzgar

    de

    esto,

    gracias especialmente

    a

    los

    trabajos

    de

    los misioneros

    que

     han

    pasado

    su

    vida

    en

    medio

    de los

    salvajes, que

    han

    aprendido

    su

    lengua,

    ga

    nado su confianza

    i

    que,

    a

    pesar

    de

    gran

    número de

    prejuicios,

    han

    hecho

    plena justicia

    a

    los buenos

    aspec

    tos de su

    carácter. Podemos

    decir,

    sin

    riesgo

    de

    equivo

    carnos,

    que,

    a

    despecho

    de

    todas

    las

    investigaciones,

    no

    se

    ha

    encontrado

    en

    parte alguna sér humano que

    no

    esté

    en

    posesion

    de

    algo que

    le

    sirva

    de

    relijion,

    o,

    va

    liéndonos

    de la

    espresion

    mas

    jeneral, que

    no crea en

    algo

    mas

    allá de lo

    que

    puede

    ver con sus

    ojos.

    »No

    pudiendo

    entrar en

    el

    detalle

    de

    los

    diversos

    tes

    timonios

    que prueban

    este

    hecho,

    se me

    permitirá

    citar

    las

    conclusiones

    a

    que,

    en este

    punto,

    ha

    llegado

    otro

    mitólogo,

    M.

    Tiele,

    tanto

    mas,

    cuanto

    que

    en

    varias

    cuestiones

    sus

    opiniones

    difieren

    mucho

    de

    las mias.

     El

    acerto

    de

    que

    hai

    naciones

    o

    tribus sin

    relijion

    se

    apoya

    en

    una

    observacion inexacta o

    en

    una confusion

    de

    ideas.

    Todavia no

    se ha encontrado nacion o

    tribu des

    provista

    de la creencia

    en

    seres

    superiores,

    i los

    viajeros

    que han afirmado

    su

    existencia han sido

    mas

    tarde refu

    tados.

    Así,

    pues,

    es

    lejltimo

    el

    acerto de

    que,

    en el sen

    tido

    mas

    jeneral

    de

    la

    palabra,

    la

    relijion

    es un

    fenómeno

    universal de

    la

    humanidad.

    n

     2)

    A

    lo

    que

    podemos

    añadir

    el

    siguiente pensamiento

    de

    V.

    de Straus:  La falta

    completa

    de

    relijion,

    el

    verda

    dero

    ateismo,

    es

    siempre

    resultado de

    una

    civilizacion

     

    1

    )

    Uno

    de los

    hombres

    mas

    notables del

    siglo

    de Voltaire, de

    quien

    era

    corresponsal.

    Escribió

    diversas obras, entre las cuales

    figuran

    su

    Teoría

    del

    Fetiquismo

    i la

    Del culto

    de los dioses

    /etiques

    o

    paralelo

    de

    la

    antigua

    relijion

    del

    Ejipto

    con

    la

    relijion

    actual

    de

    la

    Nigricia.

     2)

    Obra

    citada, leccion tercera,

    páj.

    83.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    13/75

    i88

    ALEJANDRO

    CAÑAS

    PINOCHET

    elevada

    que

    va minándose i

    materializándose,

    nunca

    consecuencia

    de una ruda cultura

    primitiva:

    en esta se

    encuentra, aun

    en el

    estado

    de

    mayor

    depravacion,

    la

    necesidad

    relijiosa que corresponde

    a una

    facultad

    reli-

    jiosa, por

    incompleta

    i

    confusa

    que

    esta

    sea.

    n

     i)

    Lo

    espuesto

    anteriormente son los factores con

    que

    ha

    de

    resolverse

    el

    problema

    de

    si

    ha

    habido

    i si hai

    pueblos

    que

    han

    carecido

    o

    carecen

    de

    relijion;

    i

    contra

    balanceadas

    las

    opiniones

    emitidas,

    nos

    parece

    que

    la

    verdad resalta del

    lado

    en

    donde

    están

    los

    que

    afirman

    que

    todos los

    pueblos

    han

    tenido desde

    su

    orfjen

    una

    relijion.

    II

    ¿FUÉ

    EL

    FETIQUISMO

    LA

    RELIJION

    PRIMITIVA?

    Establecido

    lo

    anterior,

    llega

    el caso de

    averiguar

    cuál

    de

    todas

    las

    formas

    de

    relijion

    es la mas

    baja

    i

    que puede

    considerarse

    como el

    principio

    de toda

    relijion.

    Max Müller trae

    en su libro sobre

    este

    punto

    las si

    guientes

    líneas:

     Consúltense

    las

    obras escritas en

    los

    últimos cien años sobre la

    historia

    de la

    relijion,

    i

    se en

    contrará

    por

    lo ménos

    un

    punto

    en

    el cual están

    todos

    en

    sorprendente

    acuerdo,

    cual es

    que

    la

    forma

    mas

    baja

    de la

    relijion

    es el

    fetiquismo;

    que

    bajando

    mas,

    ya

    no

    hai nada

    que

    se

    pueda

    designar

    con tal

    nombre,

    i

    que.

    por consiguiente,

    se

    puede considerar

    el

    fetiquismo como

    el

    principio

    mismo

    de

    la

    relijion.

    n

     2)

    Max

    Müller,

    que

    disiente de esta

    opinion,

    agrega:

     Siempre que

    encuentro tan

    sorprendente

    acuerdo,

    se

    mejante

    unidad

    en la

    idea i

    hasta en la

    espresion,

    sos

    pecho

    algun

    misterio i

    pienso

    que

    hai

    que

    remontar

    hasta la

    fuente

    i

    ver

    en

    qué

    circunstancias

    i

    con

    qué

    fin

    se ha

    producido

    la

    teoría

    que

    se ha

    impuesto

    universal-

    mente

    con tanta facilidad.

    »

     1)

    Citado

    por

    Ratzel, Las Razas

    humanas,

    tomo I,

    páj.

    21.

     2)

    M.

    Müller.

    Orijen

    i desarrollo

    de la

    Relijion,

    leccion

    segunda,

    páj.

    61.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    14/75

    LA

    RELIJION

    ICN LOS

    PUEBLOS

    PRIMITIVOS

    189

    No

    acepta

    Max Müller

    la

    prioridad

    del

    fetiquismo,

    <

    orno

    han

    pretendido,

    sin

    probarlo,

    todo cuantos

    se

    han

    ocupado

    ántes

    de él en

    buscar

    los

    rastros

    que

    en el

    espí

    ritu

    humano

    han

    trazado

    las

    relijiones;

    niega,

    por

    el

    con

    trario,

    esa

    prioridad,

    que corresponde

    a

    otra forma

    del

    culto;

    i

    resumiendo

    su

    pensamiento despues

    de

    discutir

    tan

    importante punto,

    escribe:

     sostengo

    que

    en

    Africa,

    como

    en

    cualquiera

    otra

    parte,

    el

    fetiquismo

    es

    una

    corrupcion

    de

    la

    relijion;

    t

    Y

    mas

    adelante,

    al

    terminar su libro volviendo su vista

    al

    hácia

    atras,

    dice:

     Arrojemos

    una

    última mirada

    sobre

    el

    camino

    reco

    rrido,

    camino

    que

    han

    seguido

    hace

    millares

    de

    años

    nuestros

    antepasados

    arios,

    establecidos

    en las

    riberas

    de

    los

    Siete

    Rios,

    en

    viaje

    de

    investigacion

    de lo infi

    nito, de

    lo invisible,

    de

    lo divino.

     No

    partieron,

    como

    se

    ha

    imajinado,

    del

    culto

    de

    los

    fetiques.

    El

    fetiquismo

    no

    hai

    que

    buscarlo

    en

    el

    princi

    pio,

    viene

    mas tarde.

    En

    los

    documentos del

    pensa

    miento

    relijioso

    en la

    India

    no se

    encuentra

    la menor

    huella

    de

    fetiquismo;

    es

    mas,

    digo

    que

    no habia

    sitio

    para

    él

    como

    no

    lo

    hai

    para

    el

    lias ántes

    del

    granito,

    ni

    siquiera

    en el

    graniton

     i).

    No

    se

    ha encontrado solo Max Müller

    en la

    cuestion

    de

    orljen

    de

    las

    relijiones

    al

    negar

    la

    preexistencia

    del

    fetiquismo.

     Mr. Amadée

    Thierry

    hace

    notar

    en su

    Historia

    de

    la

    Francia

    que

    los

    celtas debieron

    tener

    dos

    relijiones

    diferentes,

    una

    que

    recordaba

    el

    politeis

    mo

    griego

    i

    se

    derivaba

    de los

    fenómenos naturales;

    la

    otra fundada sobre

    el

    panteismo,

    presentaba

    la

    mas

    asombrosa conformidad con las creencias del

    Oriente,

    que

    es el

    druidismo,

    pero

    esta

    relijion,

    por

    mas

    espiri

    tualista

    que

    fuese, alterada

    por

    la

    ignorancia,

    no

    pudo

    sofocar

    el

    culto

    preexistente

    de la

    naturaleza esterior

    i

    debió con

    el

    tiempo

    confundirse

    con él en un

    fetiquismo

    grosero,

    que

    todavia

    se hallaba en

    vigor

    en

    el

    siglo

    VI

    de

    nuestra

    eran

     2).

    En

    Francia,

    como

    se

    ve,

    el

    fetiquismo

     1)

    Muller,

    obra

    citada,

    pájs.

    338

    i

    339.

     2)

    Brunet

    des Bains, Historia

    de la

    Arquitectura,

    páj.

    57.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    15/75

    190

    fué

    posterior

    a

    otra

    relijion

    espiritualista

    del

    pueblo

    celta

    i

    ello concuerda

    con

    las

    opiniones

    de

    Müller.

    Pero

    ¿qué

    era lo

    que

    De

    Brosses llamaba

    fetique? El

    mismo nos lo va a decir:  Estos

    fetiques

    divinos no son

    otra cosa

    que

    el

    primer

    objeto

    material

    que

    place

    a

    cada

    nacion o

    a

    cada

    particular

    elejir

    i

    hacer

    consagrar

    en ce

    remonia

    por

    sus

    sacerdotes;

    es un

    árbol,

    una

    montaña,

    el

    mar,

    un

    pedazo

    de

    madera,

    una

    cola

    de

    leon,

    una

    piedra,

    una

    concha,

    sal,

    un

    pez,

    una

    planta,

    una

    flor,

    un

    animal de cierta

    especie,

    vaca,

    cabra, elefante, carnero,

    en

    fin,

    todo

    lo

    que

    se

    pueda imajinar

    semejante

    a

    esto.

    Estos

    son

    otros tantos

    dioses,

    cosas

    sagradas

    i tambien

    talismanes

    para

    los

    negros que

    les tributan

    un

    culto

    exacto

    i

    respetuoso,

    dirijiéndoles

    sus

    votos,

    ofreciéndo

    les

    sacrificios, paseándolos

    en

    procesion,

    si de

    ello

    son

    susceptibles

    o

    llevándolos sobre si con

    grandes

    muestras

    de

    veneracion

    i

    consultándoles

    en todas

    las ocasiones

    graves.

    Hai en cada

    pais, agrega,

    el

    fetique

    jeneral

    de

    la

    nacion,

    teniendo

    ademas

    cada

    particular

    el

    suyo que

    es

    el

    propio

    i

    pénate.

    Cada

    ciudad

    está

    bajo

    la

    proteccion

    de su

    propio

    fetique,

    al

    que

    se adorna

    a

    costa del

    público

    i

    se le invoca

    para

    el bien

    comun,

    n

     1)

    III

    EL CULTO

    DE LA

    PIEDRA;

    CÓMO

    ESTABA

    ESTENDIDO

    POR

    EL

    MUNDO

    Entre

    los

    objetos

    que,

    segun

    De

    Brosses,

    han

    alcan

    zado

    los

    honores de

    fetiques

    i

    de

    recibir

    la

    adoracion

    consiguiente

    a

    la

    divinidad,

    sr.

    ha

    encontrado,

    como

    se

    ha

    visto,

    la

    piedra.

    La

    piedra,

    ha sido

    despues

    del

    sol,

    el

    cielo

    i la

    luna,

    el

    producto

    de la Naturaleza

    que

    acaso ha

    recibido mas

    esplícitas

    manifestaciones

    i

    por

    mas

    considerable número

    de

    adeptos.

    El culto de

    la

    piedra

    lo hemos

    encontrado estendido

     1)

    M.

    Müller,

    Orijen i

    desarrollo

    de

    la

    Relijion,

    |

    áj=.

    69

    i

    70.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    16/75

    LA

    RELIJICN

    EN

    LOS

    PUEBLOS PRIMITIVOS

    191

    por

    el

    viejo

    mundo

    en América

    i

    en

    muchas islas

    de

    la

    Oceanía

    que

    ninguna

    relacion habian mantenido

    con

    los

    pueblos

    de

    los continentes.

    Veamos

    cómo

    tan

    estraño culto estaba difundido

    por

    el

    globo

    Lubbock

    en su

    importante

    libro titulado Los

    oríjc

    nes

    de

    la

    civilizacion

    nos dice

    a

    este

    propósito

    lo si

    guiente:

    Hermes

    o

    Termes

    o

    Mercurio era adorado

    por

    los

    griegos

    i

    romanos

    en

    forma

    de

    piedras

    derechas. El

    culto

    a

    Termes

    procedia

    de la

    costumbre

    de

    marcar

    los

    límites

    o término

    de

    las

    propiedades

    por

    medio

    de

    pie

    dras de

    la

    forma

    espresada.

    Los

    bárbaros rendian tambien

    culto a

    las

    piedras.

    Cerca del lago

    Baikal

    hai

    una roca

    sagrada que

    se

    mira como morada

    predilecta

    de

    un

    espíritu

    maléfico

    i

    era

    mui temida

    consiguientemente

    por

    los

    naturales.

    En

    la

    India

    domina

    el

    culto

    de las

    piedras

    sobre

    todo

    en

    las

    tribus

    aboríjenes.

    Los

    asagas

    de

    Maisur

    adoran

    un

    dios llamado Bhu

    ma Devan

    representado

    por

    una

    piedra

    informe.

    Dos

    rudas

    castas

    de esclavos de

    Tulava

    en la

    India

    meridional los bakadara

    i

    los

    betadara

    adoran una di

    vinidad benéfica

    llamada

    Bina

    representada

    por

    una

    piedra que

    guardan

    todas

    las

    cosas.

    El dios

    de cada

    aldea

    kond

    se

    representa por

    tres

    piedras.

    Los

    sontals

    del Indostan central

    adoran una

    famosa

    colina llamada

    Marang

    Born.

    En

    tiempos

    de

    sequía

    van

    a la

    cima

    de este

    monte

    sagrado

    i ofrecen sacrificios a

    una

    ancha

    piedra plana

    tocando

    los

    tambores

    i

    supli

    cando

    a

    su

    dios

    que

    les

    envie

    la

    lluvia.

    Los

    árabes

    hasta el

    tiempo

    de

    M

    ahorna adoraban una

    piedra

    negra;

    los

    beni

    zequif

    la roca llamada El

    Lat;

    los

    fenicios

    una

    divinidad

    representada por

    una

    piedra

    in

    forme.

    El dios

    Heliogábalo

    era

    simplemente

    una

    piedra

    de

    figura

    cónica.

    En

    Tespias

    habia

    una

    piedra

    que

    era

    mirada como

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    17/75

    192

    una

    divinidad

    i

    los beocios adoraban

    a

    Hércules

    bajo

    la

    misma

    forma.

    En

    Irlanda

    en el

    siglo

    V

    el

    rei

    Laogario

    adoraba

    un

    pilar

    de

    piedra

    que

    fué

    derribado

    por

    San Patricio.

    Los

    irlandeses adoraban otra

    piedra

    en

    Clogher

    bajo

    el

    nombre

    de

    Kermand

    kelstach.

    En

    el

    Jura

    habia

    una

    piedra

    sagrada

    a

    cuyo

    alrede

    dor

    solia dar vueltas

    el

    pueblo

    en la

    direccion

    del

    sol.

    En

    algunas

    de

    las

    Hébridas el

    pueblo

    atribuia

    poder

    oraculoso

    a

    una

    gran

    piedra

    negra.

    Hasta

    fines

    del

    siglo

    XVIII

    en

    ciertos distritos

    mon

    tañosos de

    Noruega

    solian conservar

    los

    aldeanos

    pie

    dras

    de

    forma

    redonda

    que

    veneraban como

    sus

    paganos

    antecesores adoraban

    sus

    ídolos.

    Caillié

    vió

    cerca

    de

    la aldea

    de

    N pal

    una

    piedra

    negra

    sagrada sobre

    la cual

    todo pasajero dejaba como ofren

    da un hilo

    de

    la tela con

    que

    se

    cubria.

    Bruce

    indica

    que

    los abisinios

    paganos

    adoran

    un

    ár

    bol

    i

    de

    igual

    suerte

    una

    piedra.

    Los

    tahilianos creen

    que

    uno de sus

    dioses

    Tepapa

    ha

    sido

    una

    roca.

    En

    las

    islas

    Fiyi

    se

    ven

    cerca de

    Viena

    toscas

    piedras

    sagradas

    a las

    cuales

    se hace

    a

    veces ofrendas

    de

    ali

    mentos.

    Otra

    piedra

    hai

    sobre

    un

    arrecife

    cerca de

    Na-

    loa

    que

    los

    naturales llaman tama i

    una tercera cerca

    de

    Thocova

    en

    Titi

    Lebu

    llamada

    Lovekaveka.

    que

    se

    considera

    como

    la

    morada

    de

    una

    diosa

    a

    quien

    se

    pro

    vee de

    alimento.

    La residencia

    de

    O Rewan

    es

    una

    pie

    dra

    grande que

    como

    la

    de

    Naloa

    tiene dos

    mujeres

    que

    son

    otras tantas

    piedras

    grandes

    procedente

    la una

    de

    Yandua

    i

    la

    otra

    de

    Yasawa.

    En

    las

    costas meridionales

    de

    Vanua

    Levu

    se ve

    una

    piedra

    grande

    que

    ha caido sobre otra

    mas

    pequeña;

    di

    cen

    que

    representan

    los dioses

    de

    dos

    ciudades

    de esa

    costa combatiendo uno contra

    otro;

    i

    las

    ciudades

    ha

    ciendo

    suyos

    los

    agravios

    respectivos

    vienen luchando

    lardos

    años

    ha.

    En

    los

    grupos

    de

    Apamama

    i

    Tarava

    en

    Micronesia

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    18/75

    LA

    RELIJION

    EN

    LOS

    PUEltLOS PRIMITIVOS

     93

    se adora

    al dios Tabueriki

    bajo

    la forma

    de

    una

    piedra

    plana de

    coral, de estructura irregular.

    i

    Los naturales

    de

    Tanna

    veneran

    piedras,

    i

    la

    princi

    pal

    divinidad

    de Tokelau

    se

    suponen

    que

    ha

    tomado

    cuerpo

    en

    una

    piedra.

    Los

    indíjenas

    de Sumatra

    i

    los

    del

    estrecho de

    Torres

    tenian

    así

    mismo

    piedras

    sa

    gradas.

    Prescott

    dice

    que

    un

    indio dacota

    recoje

    toda

    piedra

    redonda,

    de

    cualquiera especie

    que

    sea,

    i

    la

    pinta;

    luego

    va

    a

    unas

    cuantas

    varas

    de

    su

    vivienda,

    arranca

    la hierba

    en

    un

    diámetro como

    de

    uno

    a dos

    pies;

    coloca allí

    su

    piedra

    o su

    dios

    como

    él

    dice;

    le hace

    una

    ofrenda

    de

    tabaco

    i

    de

    plumas,

    i le

    suplica

    que

    lo

    libre

    de

    cierto

    pe

    ligro

    soñado

    o

    imajinado

    por

    él

    probablemente.

    Los monitaris

    ántes

    de

    acometer

    una

    gran empresa

    solian hacer ofrendas a

    una

    piedra sagrada

    llamada Mih-

    Choppuish,

    i

    entre los natches

    de

    la Luisiana

    una

    piedra

    cónica.

    En

    la

    América

    Meridional,

    los

    peruanos,

    segun

    Gar-

    cilaso de

    la

    Vega, guardaban

    piedras

    en sus casas

    tra

    tándolas

    como

    dioses

    i

    ofreciéndoles sacrificios de carne

    i

    sangre

    humanas

      i).

    Ratzel dice

    que

    acaso

    pueden

    considerarse como ido

    los

    las dieziocho

    piedras largas

    i

    cubiertas de

    corteza

    que

    Flinders encontró

    en la

    isla Pellew

    del

    golfo

    Car-

    pentaria.

    Del

    mismo autor tomamos

    las

    noticias siguientes:

    Las

    rocas de la

    isla

    de

    Pascua

    tan

    fantásticamente

    quebradas

    i

    rajadas

    dan

    oríjen

    a

    toda clase

    de

    leyendas.

    En Hawai

    los

    mares

    poblados

    de

    arrecifes son

    tenidos

    como

    campos

    de

    batallas

    de

    los

    dioses luchadores

    que,

    sorprendidos

    por

    el

    dia,

    hubieron

    de

    soltar

    los

    peñascos

    Así

    mismo la luz del dia

    que

    salió

    demasiado

    pronto,

    obligó

    a los dioses

    creadores de

    las

    islas a

    dejar

    sin

    concluir

    su

    obra

    en las

    peñas.

    De

    esta

    suerte fueron

    creadas

    las

    Marquesas

    durante

    la

    noche

    por

    los dioses

      i)

    Lubboqk, Los

    orljenes

    de

    la

    civilizacion,

    cap.

    VI,

    pájs.

    262 i

    si

    guientes.

    TOMO

    XII

    M

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    19/75

    194

    ALEJANDRO

    CAÑAS PINOCHET

    nocturnos,

    quienes

    al

    ver

    despuntar

    la

    aurora,

    hubieron

    de

    dejar incompleto

    su

    trabajo

    en

    aquellas estériles ro

    cas.

    Sorprendidos

    poreldia,

    viéronse tambien

    obligados

    los

    espíritus

    de

    Ulitea

    a

    dejar

    caer

    en Taloo la

    montaña

    que

    allí

    se ve i

    que

    habian

    robado

    en

    otra

    isla.

    A estas

    leyendas

    de

    piedras

    i

    peñascos aportó

    nuevos

    elementos

    el

    olvido

    de

    los

    autores de

    las

    numerosas

    es-

    tátuas

    de

    piedra

    de la

    isla

    de

    Pascua

    i

    de

    otros islotes

    que

    han sido

    atribuidas

    a

    los

    dioses.

    En

    las

    islas

    hawayanas

    existe

    un

    verdadero culto de

    las

    piedras.

    Los

    pescadores

    de

    Linai

    adoraban

    las

    pie

    dras

    verticales

    i en

    Hawai no

    podian

    tallarse ídolos sino

    de

    determinadas

    rocas. De estos

    paises

    son tambien

    las

    piedras

    de

    lluvia

    que

    se

    ponen

    al

    fuego

    cuando llueve

    mucho

    i

    se

    riegan

    en

    tiempos

    de

    sequía.

    El

    Tui Tokelau

    o

    rei

    de Tokelau adorado como

    Dios,

    está

    representado

    por

    una

    piedra

    envuelta

    en

    un

    pedazo

    de

    tela.

    En

    Méjico

    era

    mui

    comun

    el

    culto

    a

    los

    ídolos

    de

    pie

    dra. Las

    destrales,

    las

    puntas

    de lanzas i los

    cuchillos,

    denominados

    allí

    cuñas

    de

    trueno,

    nacieron

    al

    golpe

    del

    rayo

    contra

    la

    tierra

    i

    cuya

    veneracion

    está

    estrechamente

    relacionada

    con los

    mitos

    de

    la

    creacion

    del

    hombre

     i .

    Segun

    Max

    Müller,

    ateniéndose a

    los

    datos

    suminis

    trados

    por

    Matthews,

    los hidatsas

    del Missouris

    adoraban

    los

    guijarrales

    i

    los

    peñascos

    aislados,

    las

    colinas,

    los

    ce

    rros,

    etc., todo

    lo

    que

    no

    ha sido hecho por mano del

    hombre.

    Pausanias,

    agrega

    el

    mismo

    autor,

    nos enseña

    que

    las

    imájenes

    de

    los

    dioses en los

    antiguos tiempos

    de la

    Gre

    cia

    eran

    piedras

    brutas,

    de las

    cuales

    algunas

    se

    conser

    vaban

    en su

    tiempo

     dos

    siglos

    ántes de

    nuestra

    era .

    Nos habla

    de

    treinta

    piedras

    cuadradas

     ¿hermes?

    que

    se

    encontraron

    en

    Feres

    cerca de

    la

    estatua de

    Hermes

    i

    que

    el

    pueblo

    adoraba

    dando

    a

    cada una

    el

    nombre

    de

    Dios.

    Los

    tespienses,

    que

    adoraban

    a Eros

    como

    el

    primero

     i

    Ratzel,

    f^as

    razas

    humanas,

    tomo

    I,

    pájs.

    539

    i

    siguientes.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    20/75

    LA

    RELIJION

    EN

    LOS

    PUEBLOS PRIMITIVOS

    195

    de

    los

    dioses,

    tenian

    una

    imájen

    de

    él,

    urja

    piedra

    bruta.

    Así

    era

    tambien

    la

    estátua

    de

    Heracles

    en

    Hyetos,

    »se-

    gun

    la

    moda

    antiguan, agrega

    el

    mismo

    historiador.

    En

    Orchómenes

    describe

    un

    templo

    de

    las

    Gracias

    en

    que

    eran adoradas

    bajo

    la

    forma

    de

    piedras

    brutas caidas

    del

    cielo

    en

    tiempos

    de Eteocles.

    En

    Roma

    para

    ser afortunados

    en las

    espediciones

    militares,

    se

    invocaba

    a

    piedras que

    se

    decia

    habian cai

    do

    del cielo

     

    i

     .

    Por

    fin,

    leemos

    en

    Renan

    lo

    siguiente

    sobre

    el

    culto

    de

    la

    piedra:

    11

    En

    el

    antiguo

    culto hebreo

    se

    encuentra

    mas de un

    dato

    sobre

    la

    relijion

    fenicia:

    en la

    época patriarcal

    se

    ve

    a

    los

    abrahamidas

    aceptar

    como

    sagrados

    los

    lugares

    i los

    objetos

    que

    los

    cananeos

    tomaban como tales,

    árboles,

    montañas,

    fuentes,

    betyles

    o

    beth

    el,

    nombre

    con

    que

    se

    designaban

    las

    piedras

    sagradas,

    a las

    que

    se

    atribuia

    vir

    tudes

    divinas

     2 .

    En

    escursion

    prolija

    i

    acaso

    fatigosa para

    cuantos

    fijen

    su

    mirada

    en el

    cuadro

    descrito,

    hemos

    llegado

    a mani

    festar la

    forma

    en

    que,

    por

    el

    mundo,

    ha

    estado

    es

    tendido

    el

    culto

    de

    la

    piedra,

    i

    como

    todo

    cuanto

    se

    ligue

    al

    sentimiento

    se

    adhiere

    con fuerza

    en

    ocasiones inven

    cibles,

    así

    este

    fetiquismo

    subsistió durante

    largos siglos

    propagado

    como

    se

    hallaba e

    incrementado,

    si

    se me

    permite

    la

    espresion,

    en el

    pensamiento relijioso

    de las

    sociedades

    primitivas,

    como

    la

    ünica

    relijion

    verdadera.

    El culto

    de la

    piedra

    subsistió

    con

    mucho ardor

    en

    Europa

    muchos

    siglos

    despues

    de

    implantado

    el

    cristia

    nismo,

    i

    para

    eliminarlo

    sin

    conseguirlo,

    delas manifes

    taciones

    públicas

    al

    ménos,

    menester

    fué el esfuerzo

    simultáneo

    de las

    dos

    potestades

    que

    en

    la Edad Media

    obraban con

    mayor

    eficacia:

    el

    poder

    civil

    i el

    poder

    de

    ja

    Iglesia.

     1

    Oríjenes i

    desarrollo

    de la

    Relijion,

    Leccion

    segunda, páj.

    102

    i

    103.

     z

    Estudios

    de

    historia

    relijiosa,

    rap.

    II,

    páj.

    71,

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    21/75

    196

    ALEJANDRO

    CAÑAS PINOCHFT

    En Francia

    la

    Iglesia

    celebró

    cuatro

    concilios:

    el de

    Arles

    en

    452;

    el

    de

    Tours,

    en 567; el de

    Nantes,

    en el

    siglo

    VII,

    i

    el de

    Leptine,

    en

    743,

    en

    los cuales

    se

    con

    denó

    el

    culto de

    la

    piedra

    i

    se

    fulminaron

    penas espiri

    tuales

    rigurosas

    contra cuantos

    continuasen

    en esta

    práctica.

    La

    capitular

    de

    Aquisgran

    i varios

    Sínodos

    celebra

    dos

    en

    Alemania

    llegaron

    a

    la

    misma

    prohibicion.

    En

    Inglaterra

    el

    arzobispo

    de

    Cantorbery,

    Teodorico,

    en el

    siglo

    VII,

    condenó

    el

    mismo

    culto.

    I

    como

    prueba

    de

    que

    el

    culto

    de la

    piedra

    habia

    echado

    profundas

    raices

    en

    todas

    las

    capas

    sociales

    del

    pueblo

    ingles,

    están

    la

    capitulacion

    del

    rei

    Edgardo

    en

    el

    siglo

    X

    i las

    pragmáticas

    de

    Canuto

    I

    un

    siglo

    des

    pues,

    contra

    estas manifestaciones

    paganas

     1 .

    La subsistencia

    de este

    culto irracional manifiesta

    el

    poder

    de

    adherencia

    que adquieren

    las

    ideas

    cuando

    se

    han

    practicado

    durante

    largo

    tiempo,

    máxime

    si esas

    ideas

    son

    espresion

    del

    sentimiento

    relijioso,

    que

    lleva

    envueltos intereses

    del

    presente

    i

    de

    un

    futuro

    o

    mas

    allá

    desconocido.

    Si

    contra

    esta conviccion

    popular

    la accion del cristia

    nismo,

    la de

    una

    propaganda

    contraria,

    las de una

    pena

    lidad

    rigurosa

    nada

    pudieron,

    qué

    mucho

    que

    subsista

    todavia

    en

    muchas

    partes

    hasta

    hoi,

    que

    se

    contrapone

    solo

    la

    accion débil

    de una

    civilizacion

    mal

    dirijida

    i

    por

    esto de casi

    nulos resultados.

    En Chile

    el culto

    de

    la

    piedra

    ha

    existido

    i

    existe

    aun

    entre

    los descendientes

    de

    nuestros

    aboríjenes;

    i,

    circuns

    tancia

    particular,

    por

    la

    supervivencia

    de

    las

    creencias

    relijiosas

    que

    superviven

    en las masas

    populares,

    ese

    culto

    lo

    practican

    tambien

    aquellos que

    por

    contacto

    con

    la

    civilizacion

    araucana,

    no

    se han

    visto

    libres

    de

    su

    na

    tural

    influencia.

     1

    Lubrok,

    Los

    oríjenes

    de la civilizacion,

    páj.

    202

    i

    siguientes;

    Bkunet

    des

    Baines,

    Historia

    de

    la

    Arquitectura,

    páj.

    57.

    »

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    22/75

    LA

    RELIJION

    EN LOS

    PUEBLOS PRIMITIVOS

    197

    Vamos

    a

    citar

    algunos

    casos

    perfectamente

    compro

    bados, en

    confirmacion

    de

    nuestros asertos.

    En

    la costa del

    departamento

    de

    Arauco,

    en

    la

    sub-

    delegacion

    de Yani

    i

    en

    un

    sitio

    próximo

    a

    la

    caleta hoi

    llamada

    Yanes,

    sobre

    el camino

    que

    conduce

    a

    este

    sur-

    jidero,

    se levanta una

    piedra

    llamada

    Güpalcura

     piedra

    encantada

    de

    figura

    informe

    i

    de

    color

    oscuro,

    de

    altura

    de un

    metro setenta

    i

    cinco centímetros sobre

    el

    nivel

    del

    suelo

    en

    que

    yace.

    A

    esta

    piedra,

    que

    al

    decir

    de los

    supersticiosos campesinos

    de esos

    lugares,

    proyecta

    luz

    en

    las

    noches

    oscuras i

    llora cubriéndose

    de

    lágrimas

    en

    las

    prolongadas

    sequías que

    han

    de

    arruinar los

    campos

    i

    los

    sembrados,

    se le

    hacian

    i

    todavia

    se le hacen

    obla

    ciones

    por

    los

    pasajeros,

    consistentes

    en

    flores

    del

    campo,

    i

    cuando

    de éstas no

    halla

    a

    la mano, matas de

    hier

    bas o

    ramas

    de los

    árboles

    mas

    próximos,

    que

    asi

    la

    pie

    dra vela

    porque

    las lluvias

    caigan

    cada i

    cuando

    las se

    menteras

    tengan

    necesidad de

    ellas.

    Esta costumbre

    es

    clara manifestacion

    de la

    supervi

    vencia

    del

    culto

    que

    se ha

    rendido

    a

    la

    piedra,

    que

    no

    ha

    desaparecido

    i

    que

    está aun

    adherido

    al

    sentimiento

    de la masa

    de

    la

    poblacion campestre.

    En

    el

    boquete

    de la

    Cordillera de los Andes

    por

    Cura

    Cautin

    i

    Lonquimay,

    se

    halla entre

    este

    sitio

    i

    Malalca-

    huellu,

    del

    lado

    Norte

    de la via, una

    enorme

    piedra

    pi

    zarrosa,

    que

    se

    avanza

    al

    camino,

    que

    casi lo

    intercepta

    i

    que

    permite

    seguirlo

    por

    una

    parte

    desgastada

    por

    el

    tráfico.

    Esta

    piedra

    tiene muchas

    escavaciones,

    en

    forma

    tu

    bular

    algunas

    i

    otras

    de

    irregular

    faccion.

    Llámanla los indios

    Retricura

    i

    dicen

    de

    ella estos

    i

    la

    jente

    sencilla

    que

    por

    allí

    trafica,

    que

    esta

    piedra

    es mi

    lagrosa

    i

    que

    está

    oculto dentro de

    su masa Dios,

    a

    quien

    llaman

    Padre

    Retricura.

    Los

    que viajan

    por

    ese

    boquete,

    que

    son

    los

    que

    van

    i

    vienen

    de

    la

    Arjentina,

    dejan

    al

    Dios

    Retricura

    sus

    ofrendas

    dentro

    de los

    hoyos,

    consistentes

    éstas

    en

    di

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    23/75

    J

    98

    ALEJANDRO

    CAÑAS PINOCHET

    I

    ñero,

    cigarros,

    pan,

    carne,

    etc.,

    i si nada de esto llevase

    el

    transeúnte,

    le

    dejará

    como único tributo

    una

    ramita

    tierna

    de

    algun árbol inmediato, pero siempre algo.

    Es

    persuacion

    jeneral

    entre

    los

    indios,

    los arrieros

    i

    demas iente

    ignorante

    que quien

    pasase

    por

    frente

    a la

    piedra

    sin

    dejarle

    una

    ofrenda,

    tendria

    viaje

    desgra

    ciado,

    se le

    manquearia

    o

    empantanaria

    su

    caballo

    o

    le

    sobrevendrian

    desgracias personales.

    De las

    ofrendas suelen

    apoderarse,

    en

    especial

    del

    dinero

    o

    comestibles,

    los

    indios a

    título de

    préstamo,

    que

    devuelven

    relijiosamente

    o

    aquellos

    que

    no

    creen

    en las

    condiciones

    milagrosas

    del

    peñasco.

    Si

    el

    préstamo

    no fuese

    devuelto,

    aseguran

    los indios

    que

    caeria una nevazon

    bajo

    la cual todo

    pereceria

     1 .

    Del culto

    rendido a la

    piedra

    de Retricura

    pasaremos

    a

    esponer

    el

    que

    se

    tributa

    a

    otra

    piedra,

    de

    quien

    hasta

    ahora

    nadie ha dado

    noticia,

    acaso

    porque

    es

    ménos

    co

    nocida

    que

    la

    de

    Malalcahuellu

    por

    cuyo

    sitio hai

    un

    tráfico

    cada dia mas crecido.

    Quien

    va

    por

    el

    territorio

    de Mulchen

    siguiendo

    el

    camino

    que

    conduce

    al

    boquete

    de

    Callaqui,

    de

    paso

    para

    la

    Arjentina,

    se

    encuentra

    en el

    corazon

    de la

    cor

    dillera

    con

    el rio

    Agrio, para

    llegar

    en

    seguida

    a

    la

    la

    guna

    Agria,

    en donde el

    rio

    desagua.

    Hácia el

    Norte de

    esta

    laguna

    i

    sobre

    una meseta

    que

    el

    camino

    atraviesa,

    se

    halla

    la

    piedra

    Curalhue

     Piedra

    de

    Animas

    o del

    Diablo

    que

    tiene,

    como

    la

    de

    Malalcahuellu,

    muchas

    escavaciones

    tubulares hecha

    por

    mano de hombre. Su

    contestura

    física

    es de

    granito.

    El

    plano

    sobre

    la

    cual

    reposa

    es

    horizontal

    i

    la

    piedra

    se

    eleva

    sobre

    este

    nivel

    un

    metro,

    teniendo no ménos

    de

    dos

    de diámetro.

    Los

    indios

    dicen

    que

    esta

    piedra

    tiene

    su

    calcu,

    que

    es,

    segun

    ellos,

    un

    espíritu

    invisible,

    capaz

    de

    hacer

    bien

     1

    Los señores

    don Rodolfo Lenz

    i don

    Tomas

    Guevara

    han

    hecho

    mencion

    de la

    piedra

    de Retricura en sus

    importantes

    estudios

    sobre

    la

    raza

    i la

    lengua

    araucanas.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    24/75

    LA

    RELIJION

    EN

    LOS

    PUEBLOS PRIMITIVOS

    I99

    i

    mal

    que

    nosotros hemos traducido

    impropiamente

    por

    brujo.

    Cuantos

    viajan

    por

    el

    boquete

    indios arrieros chile

    nos

    o

    arjentinos

    i

    demas

    jente

    sencilla

    pagan

    tributo a

    esta

    piedra

    de

    adoracion

    primero

    en

    especies

    en

    se

    guida.

    Consiste

    el

    primero

    rendido

    por

    solo

    los

    indios

    en

    dar vueltas alrededor

    de

    la

    piedra

    en

    uno

    i

    otro

    sentido

    pronunciando palabras

    suplicatorias

    o

    peticiones

    para

    que

    la

    piedra

    les

    procure

    un

    viaje

    feliz.

    Viene

    en

    seguida

    lo

    que

    los indios llaman

    el

    mari-

    mari

    o el

    depósito

    en

    los

    hoyos

    de

    las

    ofrendas

    que

    con

    sisten

    en

    carne

    pan

    harina

    dinero

    cigarros

    etc.

    i

    si

    el

    viajero

    no tuviese

    de

    estas

    especies

    debe

    depositar

    en

    las

    escavaciones

    un

    pedazo

    de

    cuero

    de su

    montura.

    La falta

    de

    tributo hace

    el

    viaje desgraciado

    pues

    la

    piedra

    se

    enoja

    i

    el

    caku

    que

    la

    custodia no

    proteje

    al

    viajero

    mezquino.

    Estas

    prácticas

    del culto

    de las

    piedras

    en

    Chile

    ofre

    cen

    coincidencias

    mui

    especiales

    con las

    del

    culto rendido

    en

    otras

    partes

    i

    que

    hemos descrito

    mas

    arriba.

    Así hemos

    visto

    que

    en

    las

    montañas

    del

    Jura

    en

    Francia

    el

    pueblo

    daba vueltas alrededor

    de sus

    piedras

    sagradas

    en

    ciertos

    dias del

    año;

    que

    los

    viajeros

    ofre

    cian

    a

    las

    mismas

    piedras

    en

    la

    aldea

    de

    N pal

    un

    hilo

    de

    la

    tela

    de

    sus

    vestidos;

    que

    los

    habitantes

    de Fiti-Lebu

    depositaban

    en

    la

    piedra

    Lovekaveka

    morada

    de

    una

    diosa toda clase

    de

    alimentos

    i

    que

    los indios dacotas

    hacian

    iguales

    ofrendas a

    las

    piedras

    redondas

    o

    sus

    dioses

    en

    tabaco i

    plumas.

    En

    Chiloé

    del culto de

    la

    piedra quedan

    claras mani

    festaciones

    en

    la

    supervivencia

    de

    prácticas

    por

    demas

    orijinales

    en las

    costumbres

    reüjiosas

    de

    algunos

    isleños.

    En

    la costa

    occidental

    de la

    isla

    grande

    de

    Chiloé

    desagua

    un

    rio

    de escaso

    caudal

    en

    el

    verano

    conocido

    con

    el

    nombre de

    Chepu.

    En

    el

    lecho

    de

    este

    rio suele

    encontrarse

    por

    los

    que

    las

    buscan con interes

    unas

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    25/75

    200

    ALEJANDRO

    CAÑAS

    PINOCHET

    piedras

    de

    forma

    ovoides,

    que

    se

    hallan

    pareadas, por

    que

    son

    varon

    i

    hembra,

    distinguiéndose

    el

    sexo

    por

    el

    tamaño respectivo, pues

    el de

    mayor desarrollo

    es el

    macho.

    Se las denomina

    copucas

    o

    cupucas.

    Estas

    piedras,

    que

    al

    decir

    de los

    isleños

    se

    ocultan

    en

    las

    mayores

    profundidades

    del

    rio

    nombrado,

    se

    encuen

    tran en

    algunas

    islas

    del

    archipiélago

    del

    grupo

    que

    for

    man el

    departamento

    de

    Quinchao,

    en

    poder

    solo

    de las

    personas

    de mas

    considerable

    fortuna,

    porque

    ellas tie

    nen

    la

    virtud

    de

    atraer

    las

    riquezas para

    quien

    las

    posee.

    I

    quien

    las

    tiene

    hace misterio

    de

    poseerlas

    o

    por

    te

    mor

    de

    ser

    robado

    de

    ellas

    o

    porque pudieran

    perder

    la virtud

    singular

    que

    Ies es

    característica.

    Para hacer fructíferas

    las

    sementeras

    o

    los

    papales,

    se

    les

    ofrece

    en

    holocausto sacrificio de flores del sembrado,

    quemándolas

    sobre ellas ántes de la salida

    del

    sol

    i

    con

    ignorancia

    del dueño

    del

    papal,

    pues

    de no

    observarse

    con

    rigor

    estas

    condiciones,

    la

    ofrenda

    careceria

    de todo

    alcance,

    pues

    no

    seria

    gratulatoria

    a

    ellas

      i).

    Al

    decir

    de

    algunos,

    las

    copucas

    carecen

    de

    toda

    vir

    tud

    sino

    están

    compuestas,

    es

    decir

    si

    carecen

    de

    cierto

    carácter

    que

    en

    virtud

    de

    ciertas ceremonias

    les

    impri

    men

    algunos

    hábiles

    o

    curiosos,

    nombre con

    que

    en

    el

    Archipiélago

    son

    conocidos los

    brujos

    o

    hechiceros

    que

    tan

    numerosos

    son

    allí,

    segun

    lo

    asegura aquellas

    senci-

      i)

    En

    las islas orientales del departamento de

    Quinchao

    se

    prac

    tica

    una ceremonia

    llamada

    El

    encanto,

    en la

    cual intervienen las

    pie

    dras

    copucas,

    que por

    ser mui

    orijinal

    la

    consignamos

    a

    continuacion:

    Los encantadores son ciertos hombres

    i

    mujeres

    viejos

    que preparan

    el

    encanto

    para que produzca

    abundantes frutos -la

    sementera de

    papas,

    i

    proceden

    así:

    Reunen mariscos

    i en

    especial

    caracoles,

    en

    cantidad de

    12

    pares;

    recojen

    12

    pares

    de

    palitos

    o leña

    que

    bota

    el

    mar;

    12

    pali

    tos de

    los caminos; 12

    de

    las

    cuatro

    esquinas

    i

    del centro del

    cercado

    que

    va a ser

    sembrado;

    12

    pares

    de flores

    de

    los

    campos

    i 12

    pares

    de

    las mismas de árboles frutales. La leña

    i

    los

    palitos

    se

    queman

    para

    quemar

    con

    ellos los mariscos

    i las

    flores,

    i

    una

    vez

    reducido todo

    a

    cenizas,

    se

    agrega

    a éstas

    polvo

    de

    las

    copucas

    i

    de

    millaunllin,

    que

    Fon otras

    piedras

    »

    virtuosas.»

    La

    mezcla

    de estas cenizas se

    polvorea

    por

    los encantadores sobre las

    papas

    destinadas a la

    siembra i

    esto

    las

    vuelve

    estremadamente fructíferas.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

    26/75

    LA

    RELIJI0N

    EN

    LOS

    PÜEBLOS PRIMITIVOS

    261

    llas

    jentes.

    Esta

    afirmacion

    se

    halla

    contradicha

    al

    pare

    cer

    por opinion

    mas

    jeneralizada,

    de

    que

    estas

    piedras

    poseen

    de

    por

    sí su

    poder

    i

    virtudes, sin

    que

    para

    ello

    sea

    menester

    sujestion

    o accion

    estraña.

    Como

    dioses lares o

    tutelares,

    las

    copucas gozan

    de

    las

    mayores

    consideraciones

    en

    las

    familias

    que

    han

    al

    canzado

    a

    la felicidad de

    poseerlas:

    se las mantiene

    a

    salvo

    de

    toda

    profanacion,

    de

    toda

    irreverencia

    o desa

    cato,

    guardadas

    en

    el

    mas

    abrigado,

    oculto

    i

    decente

    re

    trete.

    Nadie

    las ve ni las toca,

    sino en los momentos

    preci

    sos

    o cuando su

    poder

    virtuoso o

    _sobrenatural

    les sea

    impetrado.

    Tenemos en

    las

    piedras

    copucas

    de

    Chiloé

    las mismas

    de

    que habla Garcilaso de

    la

    Vega

    que eran adoradas

    por

    los

    peruanos

    i

    a las

    que

    les ofrecian sacrificios de

    sangre

    i

    carne

    humanas,

    que

    las

    guardaban

    en

    sus casas

    i

    las trataban

    como

    dioses

     i .

    No

    es estraña

    esta

    semejanza

    del culto

    de

    estos dos

    pueblos;

    el

    ser limítrofes debia

    establecer

    relaciones de

    ideas entre

    ellos,

    aceptar

    sus

    prácticas, algo

    de

    su

    lengua

    que

    en

    muchas

    palabras

    se confunden, sus

    creencias re-

    lijiosas,

    su culto

    i

    sus

    dioses.

    ¿No

    será

    dato

    de

    antiguas

    relaciones entre el

    pue

    blo

    aymara

    i

    el

    araucano,

    de una union

    primitiva

    dees-

    tas

    razas,

    el

    que

    se

    confundan

    en el sentimiento

    relijioso,

    el mas difícil

    de

    inspirar,

    el

    que

    mas se

    adhiere

    al

    hombre

    i

    que abandona solo despues

    de

    luchas de siglos por

    sus

    tituirlas

    por

    otras

    mas

    elevadas?

    No

    es esta cuestion del

    momento,

    que

    acaso un dia

    sea

    tratada,

    cuando reunidos todos los factores

    que

    la

    ilustren

    se

    pueda

    entrar en todas las consideraciones

    que

    ella

    ofrece.

    Hasta

    aquí

    todo cuanto concierne a

    las

    manifestacio

    nes

    del culto actual de la

    piedra

    o sea la

    comprobacion

    de

     t

    Esto

    nos hace

    recordar

    tambien de

    las

    piedras

    brontoütas

    que

    como

    los

    dakotas, los

    peruanos

    las

    adoraban tambien como

    hijas

    del

    dios

    del

    trueno:

    Ratzel.

    Las

    rasas

    humanas,

    tomo

    II,

    cap.

    VIII,

    pá-

    jiña

    93.

  • 8/18/2019 La Relijion en Los Pueblos Primitivos: el Culto de La Piedra. Cañas Pinochet, 1902

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    ALEJANDRO

    CAÑAS PINOCHET

    la

    supervivencia

    de esta

    antiquísima práctica relijiosa

    en

    nuestro

    pais;

    en las

    siguientes

    líneas

    probaremos

    que

    este

    culto

    se

    hallaba antiguamente estendido por casi

    todo

    el

    territorio,

    valiéndonos

    para

    ello

    de

    las

    pruebas

    tanjibles