LA OBRA DE ARTE TRIMESTRAL

Sin título (Madrid, 2001) (CHEMA MADOZ) Fotografía en Blanco y negro. Nº Catálogo 38. 60 x 50 cm. Ed.: 15

El Autor

Entre los años 1980 y 1983 cursa Historia del Arte en la Universidad Complutense de Madrid que simultanea con los estudios de fotografía en el Centro de Enseñanza de la Imagen. La Real Sociedad Fotográfica de Madrid expone la primera muestra individual del autor en el año 1985. En 1988 la Sala Minerva del Círculo de Bellas Artes (Madrid) inaugura su programación de fotografía con una exposición de sus trabajos. En 1991 recibe el Premio Kodak. El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía le dedica la exposición individual "Objetos 1990 - 1999", que se configura como la primera muestra retrospectiva que este museo dedica a un fotógrafo español en vida. En el 2000 el fotógrafo madrileño recibe el Premio Nacional de Fotografía. Descripción de la Obra. Fotografía en blanco y negro. Los objetos se montaron para la ocasión, se colocaron en un decorado neutro y se fotografió la composición, con luz natural, utilizando una cámara réflex clásica (Hasselblad). El negativo fue positivado en el laboratorio pasando así la imagen al papel. Por tanto la obra puede ser reproducida más veces. Podemos ver en la imagen una escuadra y un cartabón colocados en una maqueta de un barco, simulando que son las velas que se despliegan sobre el mástil. Los objetos son de madera y de tonos oscuros, destacando así mejor sobre el fondo claro. Todo ello se apoya sobre una base de madera. Análisis de la obra Esta fotografía es una más de las magistrales “metáforas visuales” de Chema Madoz. Su capacidad para ver nuevos significados en los objetos cotidianos no deja de sorprendernos. Aquí nos aparecen dos elementos, la escuadra y el cartabón que utilizamos en el dibujo técnico, convertidos como por arte de magia en las velas de un barco. No se trata de descubrir ningún enigma. Los objetos están expuestos a nuestra contemplación sin máscaras. Simplemente se trata de maravillarnos ante la idea del artista y del posible significado oculto de las cosas fuera de su contexto. Madoz individualiza, desordena, confronta y manipula los objetos creando una poética visual propia. Estas obras solo han sido creadas para fotografiarlas, después serán desarmadas. Madoz es un coleccionista incansable de objetos y su percepción no descansa, posando su vista aquí y allá. Dejando volar su imaginación para que la idea surja desde lo más hondo de su mente.

Chema MADOZ (José María Rodríguez Madoz) Madrid, 1958

Aparte de todo esto su técnica es perfecta: milimétrica exactitud, simetría en los encuadres, limpio y delicado uso de la luz,… Su fin último es emocionar a nuestra inteligencia y, al contemplar algunas de sus obras, estamos tentados a reprocharnos a nosotros mismos el no haber sido capaces de haberlo visto hasta que Madoz nos lo ha mostrado.

OTRAS OBRAS DEL ARTISTA