la microsociología en el deporte

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La microsociología en el deporte mayo 20 2014 Ortega Ortiz Oliver Octavio Socioanálisis de la Institución Penal Facultad de Estudios Superiores Acatlán El fútbol como generador de interacción

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LA MICROSOCIOLOGÍA EN EL DEPORTE

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  • La microsociologa en el deporte

    mayo 20

    2014Ortega Ortiz Oliver Octavio Socioanlisis de la Institucin Penal Facultad de Estudios Superiores Acatln

    El ftbol como generador de interaccin

  • Introduccin

    Todo cuanto s con mayor

    certeza sobre la moral y

    las obligaciones de los

    hombres, se lo debo al ftbol.

    Albert Camus

    Mucha gente piensa

    que el ftbol es un juego

    a vida o muerte,

    pero es mucho ms

    importante que eso.

    William Shankly

    Miles de aficionados se dan cita en un estadio de ftbol para apoyar a su

    equipo, desde Argentina, en donde el arraigo nacional futbolstico es

    incomparable, pasando por Brasil, cuna del ftbol, sin dejar a un lado a Mxico,

    pas mundialista en dos ocasiones y bi-campen mundial en fuerzas menores,

    Inglaterra, pas dnde naci el futbol moderno, hasta Espaa, en donde la crisis

    que vive parece no importar mucho cuando de compra y venta de jugadores se

    trata. Sin duda el ftbol se mueve de continente a continente, mueve masas y

    genera identidad nacional, pero la cuestin no es esta, se han preguntado Por

    qu al ir a un estadio, a pesar de estar rodeado de miles de extraos, siempre

    encontramos a alguien que est dispuesto a platicar y tomar una cerveza contigo?

    Qu es lo que mueve a ambos para hacer esto? Al parecer estas dos preguntas

    pueden ser hasta cierto punto mediocres si se piensa que el punto central de ir a

    ver un partido es justamente eso y no la microsocializacin con la persona de

  • atrs, de frente o de un costado, es precisamente de esto ltimo de lo que tratar

    este breve ensayo, apoyado con la teora de Erving Goffman.

    Desarrollo

    En las obras de Goffman existe

    una trama conceptual coherente y de una gran riqueza

    analtica para comprender el orden de la interaccin;

    Goffman toma como punto de referencia los planos de la

    expresividad del individuo y encuentra dos tipos de actividad

    significante: la expresin que da y la que emana de l.[1]

    (Lpez, 7)

    Con lo primero Goffman se refiere a los smbolos verbales emitidos por el

    sujeto para transmitir una informacin, lo que se llama sentido limitado de la

    comunicacin. Este quizs es sin duda parte primordial en el interactuar de un

    hincha [2] con otro; desde llevar los mismos colores pintados en la cara, llevar el

    escudo del equipo embarrado en una mejilla, la misma playera, hasta un tatuaje

    en el antebrazo.

    Ahora bien, dentro de la segunda actividad significante, nos encontramos

    con una amplia gama de acciones (incluso gestuales) que los dems pueden

    entender y adoptar para que la misma interaccin se lleve a cabo. He aqu

    diversas cuestiones que al parecer son cotidianas, y en efecto lo son; cantar el

    1 LPEZ Lara, lvaro F., Reyes Ramos Mara Eugenia, Erving Goffman: microinteraccin y

    espacio social, Universidad Autnoma Metropolitana, Unidad Xochimilco, 19/05/14,

    http://148.206.107.15/biblioteca_digital/articulos/12-538-7672cal.pdf, pg. 7

    2 El trmino hincha refiere a aquel individuo partidario y entusiasta, especialmente de algn

    equipo de ftbol o de otro deporte, aunque, no se limita a esto ltimo, ya que el objeto de su

    afeccin puede responder a cualquier otro mbito no necesariamente tiene que ser el ftbol, la

    msica y la poltica, por ejemplo. suelen despertar grandes pasiones en la gente.

    Desde Definicion ABC: http://www.definicionabc.com/general/hincha.php#ixzz32AmzvPug,

    19/05/14

  • himno de tu equipo hasta llegar a las lgrimas, ondear la bandera durante todo el

    partido, gritar el nombre del mejor jugador, hacer gestos de dolor y sufrimiento

    cuando tu equipo la est pasando mal, o en su defecto plasmar una sonrisa

    cuando cae un gol a favor.

    Continuando con el anlisis, para Goffman

    El modelo de interaccin se basa en que al estar dos

    personas en copresencia, una y otra tratan de obtener

    informacin o manejar la que ya poseen.[3] (Lpez, 7)

    Tomando como referencia esto, podemos asimilar que al estar rodeado de

    aficionados con la misma playera (ya que es lo que ms resalta a primera vista)

    evidentemente existe un apoyo por el mismo club, pero esto no quiere decir

    mucho, porque hasta cierto punto es obvio, es por eso que desde ah nace esta

    microinteraccin, quiz desde una pregunta como puede ser Desde hace cunto

    eres aficionado del club? O Cmo crees que quedar el marcador? Esto en

    relacin a la informacin que ya poseen con el simple hecho de observar, pero

    tambin (un poco) con el hecho de querer obtener ms informacin. Claro que

    toda pregunta conlleva una cierta dosis de peligro, por eso para Goffman debe

    existir una buena conducta para evitar conflictos entre los interactuantes; aqu

    podra caber una pregunta hacia un hincha rival.

    Es difcil encontrar un lineamiento a seguir para poder llevar a cabo esta

    primera fase de la interaccin, cosa que es criticada en Goffman y que no

    comparto. La vida resultara obsoleta si estuvieran estipuladas las maneras de

    reaccionar ante algn cuestionamiento, una mirada, o sea cual quiera la primera

    manera de comenzar la interaccin; respecto a esto Goffman dice lo siguiente

    Dado que en la interaccin cara a cara hay una influencia

    recproca de un individuo sobre las acciones del otro cuando

    se encuentran en presencia fsica inmediata, es importante

    3 LPEZ, op. Cit, pg. 7

  • apuntar que dicha influencia se da por medio de una

    actuacin (performance).[4] (Lpez, 8)

    En este punto, el hincha cumple con el papel de actor de acuerdo a la

    situacin que se le presente, ya que si existiera algo ya estructurado dentro de la

    pltica entre aficionados, el sentido de la interaccin se perdera por completo, es

    decir que probablemente las respuestas seran las mismas una y otra vez, y quiz

    si fueran distintas por el hecho de que ninguna persona es igual, toda interaccin

    llegara a un punto de igualdad, como ver diez novelas mexicanas y saber que

    todas terminarn igual. Tomemos como ejemplo una pltica entre un hincha de

    River y uno de Boca, o entre hinchas rivales de cualquier derby o clsico en el

    mundo; en pocas palabras si no existiera la posibilidad de improvisar en el

    momento en el cual se lleva a cabo la interaccin, sera evidente que la misma

    acabara en una trifulca o pleito entre ambos, aunque existe la posibilidad (y muy

    alta) que bajo cualquier termino acabe as; aunque el punto no es ese, la cuestin

    recae en la importancia de no tener algo estipulado.

    En cuanto a lo que Goffman denomina como fachada, es decir

    En toda accin social hay una fachada (front) que es la

    parte del individuo que funciona regularmente de un modo

    general y prefijado, a fin de definir la situacin respecto de

    aquellos que observan dicha actuacin. La fachada,

    entonces, es la dotacin expresiva de tipo corriente empleada

    intencional o inconscientemente por el individuo durante su

    actuacin.[5] (Lpez, 9)

    Nos encontramos con algo que sin duda es vital para la interaccin. Dentro

    del mbito futbolstico, y para ser ms preciso, dentro la aficin del mismo,

    podemos corroborar que la fachada es un mtodo muy utilizado por el hincha.

    4 Ibidem, pg. 8

    5 Ibidem, pg. 9

  • Desde la playera retro, el tpico sombrero de buffn, en general todo el outfit,

    aunque evidentemente esto no implica que sea un verdadero aficionado, por eso

    el mote de fachada.

    Ahora bien, dentro de la ya tan mencionada fachada, nos dice Goffman

    La fachada est formada por el medio, que se relaciona

    con el lugar, mobiliario, equipo, decorado, que proporcionan

    el escenario y la utilera para el flujo de actuacin humana.[6]

    (Lpez, 9)

    Sin duda alguna el medio dentro de este anlisis recae en el estadio, ms

    de la mitad de los aficionados lleva consigo algo caracterstico del equipo seguidor

    (como se ha estado mencionando a lo largo del texto). La cuestin en este punto

    es el no encajar dentro de todos ellos; claro que puedes ir a un estadio sin tener

    que llevar puestos los colores de tu club, sin embargo la mayora de la gente lo

    hace para sentirse identificado tanto con el mismo club y los aficionados, aunque

    sea con lo pequeo (pero significativo) que puede ser una bufanda.

    Continuando con otro elemento de la fachada nos encontramos con la

    apariencia

    estmulos que funcionan en el momento de advertirnos

    acerca del estatus social actuante y, por ltimo los modales,

    aquellos estmulos que funcionan en el momento de

    advertirnos acerca del rol de interaccin que el actuante

    esperar desempear en la situacin que se avecina. [7]

    (Lpez, 9)

    Tanto la apariencia como los modales se pueden ver claramente reflejados

    en el momento en que se comienza a dar la interaccin. Por ejemplo el estatus

    6 Idem

    7 Idem

  • social que posee un hincha por pertenecer a la barra de algn club de jerarqua, o

    en su defecto a un club que no tiene tanta trascendencia. Es evidente que el

    hincha de mayor jerarqua debe comportarse de manera tal que no haga sentir

    en una posicin inferior al hincha rival, por ende debe mantener sus modales

    acorde a la situacin. En contraparte si tu posicin es relativamente inferior a la del

    hincha rival, tus modales deben comportarse de una manera en la que se

    demuestre respeto y conciencia de dicha posicin. (Todo esto puede y tiende a

    cambiar con la euforia y el momento de cada partido)

    Continuando, Goffman seala que mientras exista una equivalencia entre

    medio, modales y apariencia, se puede dar lo que l llama el tipo ideal de

    interaccin; pero es evidente que esta no puede ser llevada a cabo (y menos si

    hablamos de la interaccin entre personas aficionadas al ftbol) debido a que

    somos seres impulsivos, todo puede cambiar de un momento a otro. En el mbito

    del ftbol, una patada, una tarjeta, un gol, una ria, hace que el pblico cambie su

    forma de ser en un abrir y cerrar de ojos, afectando por ende su comportamiento

    con y para los dems, ocasionando con esto (segn la perspectiva de Goffman)

    una ruptura del tipo ideal de interaccin.

    Como se mencion anteriormente, las actuaciones no solo las llevan a cabo

    individuos, es decir, existen grupos de personas que realizan una rutina ya

    estipulada, a este grupo Goffman lo denomina equipo de actuacin

    La cooperacin dramtica del equipo de actuacin est

    dirigida a montar una representacin para un auditorio

    presente o no. Los miembros del equipo tienen una importante

    relacin mutua: a) porque cualquiera de ellos tiene el poder

    de traicionar o desbaratar la representacin mediante un

    comportamiento inadecuado; b) la definicin de la situacin

  • es ante un auditorio y difcilmente podrn preservar esa

    impresin entre s.[8] (Lpez, 9)

    Un claro ejemplo de los denominados equipos de actuacin lo

    encontramos en las llamadas porras o barras, en las cuales coexisten un

    centenar de personas con un nico motivo, apoyar a su equipo, ya sea si este va

    perdiendo o ganando. Dentro de este tipo de equipo de actuacin es fcil perder la

    cabeza ante cualquier situacin y debido a diversas circunstancias, como estar

    ebrio, por ejemplo. La persona que ya no tiene el control sobre s misma,

    difcilmente podr mantener un orden dentro de las gradas, ante cualquier

    provocacin, este tipo de personas generarn conflictos, para y con su misma

    porra.

    Ahora bien, Goffman acu un concepto de regin

    como todo lugar limitado, hasta cierto punto, por barreras

    antepuestas a la percepcin. Las regiones varan,

    naturalmente, segn el grado de limitacin y de acuerdo con

    los medios de comunicacin en los cuales aparecen dichas

    barreras. [9] (Lpez, 10)

    El claro ejemplo de esta situacin sin duda es el estadio en donde se lleva a

    cabo el juego. El foco de atencin es el partido que se est disputando, el cual

    (segn dice Goffman) se divide en dos tipos de regin: la regin interior, en

    donde se encuentra justamente el terreno de juego (cancha) y los jugadores; y la

    regin superior, en donde se llevan a cabo las actuaciones antes mencionadas,

    es decir, las tribunas.

    Hasta ahora se ha tratado de identificar donde y como es que se lleva a

    cabo la interaccin dentro del ftbol, para ser ms especfico, dentro de un partido

    del mismo. Nos hemos percatado que existe algo ms all que el mero encuentro

    8 Idem

    9 Ibidem, pg. 10

  • deportivo, las situaciones que se han generado a lo largo del tiempo fuera de las

    canchas siempre han tenido un porque; es difcil comprender la manera de

    reaccionar del hincha rival o amigo, ahora sabemos que todo lo que existe a su

    alrededor conlleva de manera positiva o negativa a la interaccin, primero de una

    persona con otra, y posteriormente de una con los dems.

    Se puede hablar de una especie de ritual que es llevado a cabo por cada

    persona para poder llevar a cabo la interaccin, al respecto Goffman dice

    Ms que de un suceso extraordinario, el ritual es parte

    constitutiva de la vida diaria del ser humano: la urdimbre de la

    vida cotidiana est conformada por ritualizaciones que

    ordenan nuestros actos y gestos corporales, los rituales

    aparecen como cultura encarnada, cuya expresin es el

    dominio del gesto, de la manifestacin de las emociones y la

    capacidad para presentar actuaciones convincentes de

    otros.[10] (Lpez, 10)

    En efecto, al referirnos a la cultura que conlleva al ftbol ms all del

    deporte mismo, se habla sin duda de rituales, los cuales si bien no son

    manifestados de la misma manera que cada fin de semana, siempre son llevados

    a cabo, aunque a una menor escala.

    Hablamos de preparacin tanto fsica como mental por parte del aficionado,

    da con da se piensa en el fin de semana y en el ir a apoyar a su equipo, aunque

    esto dure solamente noventa minutos. Si bien se puede entender este tipo de

    rituales como actividades de ocio, como lo menciona Ramn Llopis Goig [11],

    jams perdern esa cierta dosis de ritualizacin dentro de la sociedad.

    10 Idem

    11 Profesor Titular de Sociologa de la Universidad de Valencia. Ha sido Investigador Visitante

    en la Universidad de Leicester (Reino Unido) y en el Instituto Universitario Europeo de

    Florencia (Italia). Antes de su incorporacin a la universidad ha ocupado puestos de

  • Resulta difcil argumentar de ese modo si se reconoce la

    actual importancia de algunas prcticas de ocio, que

    liberadas de su aspecto utilitarista, pueden ser consideradas

    como reserva de rituales. Actividades en las que se genera una

    participacin colectiva e intensidad emocional y que

    provocan inquebrantables sentimientos de adhesin, como el

    ftbol, las carreras populares o los conciertos musicales, por

    citar algunos ejemplos, ofrecen vlvulas de escape para las

    rgidas exigencias de la vida cotidiana, abren campos de

    integracin y ofrecen a nuestro imaginario un escape para sus

    simbolizaciones. [12] (Lloig, 4)

    Sin duda, y como se mencion anteriormente, los rituales futbolsticos

    hasta cierto punto pueden ser menospreciados o tomados meramente como ocio;

    la realidad est en que dichos rituales son parte de la vida cotidiana del individuo,

    del hincha, como una manera de poder pertenecer a ese gran mundo

    mercadotcnico que es el ftbol.

    responsabilidad tcnica y directiva en diversas compaas multinacionales de alimentacin e

    investigacin de mercados. Ha publicado numerosos artculos en revistas nacionales e

    internacionales y es autor de libros como Correr con cabeza (con David Llopis, Alto

    Rendimiento, 2008), Groove Armada (con John M. Williams, Londres, Mainstream, 2006) y

    Grupos de Discusin (Madrid, Esic, 2004). Es coautor del libro Ideal democrtico y bienestar

    personal (Madrid, CIS, 2011), escrito con M. Garca Ferrando y dedicado al anlisis de la

    Encuesta Nacional de Hbitos Deportivos de 2010 que ambos han dirigido para el Consejo

    Superior de Deportes del Gobierno de Espaa.

    Desde: VNIVERSITAT DE VALNCIA, Facultat de Psicologia,

    http://www.uv.es/masteripsico/equipo/rllopis.html, 19/05/14

    12 LLOPIS Goig, Ramn, El ftbol como ritual festivo. Un anlisis referido a la sociedad

    espaola, Vniversitat de Valncia, 19/05/14,

    http://institucional.us.es/revistas/anduli/6/art_7.pdf, pg.4

  • Conclusiones

    Inmiscuirnos en un tema como lo es el ftbol ms all del deporte mismo,

    es meternos en temas bastante amplios, este mismo se pude observar desde

    diversas perspectivas como la mercadotcnica, la econmica, la simblica, entre

    muchas otras.

    Como se trat de plasmar a lo largo de este breve ensayo, nos percatamos

    de la importancia que poseen las interacciones fuera del terreno de juego, es

    decir, en las gradas.

    Si bien se habla de este tema en los medios de comunicacin, (en cualquier

    transmisin televisiva se hace referencia a las gradas, a las porras para ser ms

    especfico) no se analiza a fondo, aclarando que este ensayo tampoco lo hace, la

    idea de hacerlo sobre este tema es que en un futuro pueda ser tomado como base

    para un anlisis ms exhaustivo.

    A grandes rasgos podemos identificar la importancia de la aficin, no solo

    con el sentido de pertenencia hacia su club, sino con sus semejantes. Las plticas

    que se dan durante cada juego entre aficionados rivales o amigos no son tomadas

    en cuenta (al menos as lo pienso) para poder analizar ese arraigo de la aficin

    para con su equipo.

    En realidad no sabemos hasta qu punto dichas interacciones influyen en el

    comportamiento de las porras en los estadios de ftbol, lo que si sabemos y con

    seguridad es que siempre han existido, desde mucho antes de la creacin del

    ftbol moderno en Inglaterra, y que si bien para muchas personas es cuestin

    aparte, es decir, que lo importante es el marcador, no queda duda que en un

    futuro estas interacciones rebasarn al mismo deporte que hoy en da se ha

    convertido en un simple negocio, por ende la aficin ser uno de los pocos

    simbolismos de identificacin de cualquier club en el mundo, recordando todas las

    ancdotas y gente que se conoci en un estadio de ftbol.

  • Bibligrafa

    1.- LPEZ Lara, lvaro F., Reyes Ramos Mara Eugenia, Erving Goffman:

    microinteraccin y espacio social, Universidad Autnoma Metropolitana, Unidad

    Xochimilco, 19/05/14, http://148.206.107.15/biblioteca_digital/articulos/12-538-

    7672cal.pdf

    2.- Definicin

    ABC: http://www.definicionabc.com/general/hincha.php#ixzz32AmzvPug, 19/05/14

    3.- VNIVERSITAT DE VALNCIA, Facultat de Psicologia,

    http://www.uv.es/masteripsico/equipo/rllopis.html, 19/05/14

    4.- LLOPIS Goig, Ramn, El ftbol como ritual festivo. Un anlisis referido a la

    sociedad espaola, Vniversitat de Valncia, 19/05/14,

    http://institucional.us.es/revistas/anduli/6/art_7.pdf,

    5.- Josehp, Issac (1998), Erving Goffman y la microsociologa, Gedisa, Barcelona